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Tipos
Aceites lubricantes
Aceites minerales.
Clasificación: Parafínicos. Son hidrocarburos saturados en los que los átomos de carbono
forman cadenas ramificadas que se encuentran en las fracciones del petróleo.
Aromáticos. Son hidrocarburos no saturados de los que se pueden formar derivados por
adición de otros átomos.
1.2 Aceites sintéticos. – Posee características las cuales van desde su viscosidad, lubricación,
estabilidad térmica, protección contra la corrosión y alto rendimiento.
Aceite sintético tiene propiedades similares a los aceites minerales, pero con algunas
diferencias clave. Tiene una amplia gama de viscosidades para adaptarse a diferentes
condiciones de temperatura y carga. Proporciona una lubricación superior, reduciendo la
fricción y el desgaste en el motor. Tiene una excelente estabilidad térmica, lo que significa que
puede resistir temperaturas extremas sin descomponerse. Ofrece una mayor protección
contra la corrosión y la oxidación, gracias a sus aditivos avanzados.
Además, el aceite sintético es conocido por su alto rendimiento en comparación con los
aceites minerales. Puede manejar condiciones de funcionamiento más exigentes y
proporcionar una mejor protección en motores de alto rendimiento. También puede ayudar a
mejorar la eficiencia del combustible y la vida útil del motor.
Sin embargo, el aceite sintético tiende a ser más costoso que los aceites minerales debido a su
proceso de fabricación y sus propiedades superiores
Clasificación:
Intervalos de mantenimiento
Estos intervalos pueden variar, pero en algunos casos van desde los 20.000 kilómetros hasta
los 30.000 kilómetros, dependiendo de las especificaciones del fabricante y las condiciones de
funcionamiento del vehículo. [4 – 5 -6 ]
Las propiedades y características de los aceites semisintéticos son una mezcla de aceites
minerales y sintéticos, lo que les confiere una combinación única de beneficios. Con una
amplia gama de viscosidades, estos aceites pueden adaptarse a diversas condiciones de
temperatura y carga. Además, ofrecen una excelente protección contra el desgaste al reducir
la fricción y minimizar el desgaste de las partes móviles del motor.
La estabilidad térmica de los aceites semisintéticos les permite resistir altas temperaturas sin
degradarse, lo que es esencial en motores que generan mucho calor. Además, estos aceites
están formulados con aditivos especiales que les confieren una mayor resistencia a la
oxidación, ayudando a prevenir la formación de depósitos y lodos en el motor.
Clasificación
una clasificación común para un aceite semisintético podría ser 10W-40. En este caso, el
número antes de la "W" indica la viscosidad del aceite a bajas temperaturas, mientras que el
número después de la "W" representa la viscosidad a altas temperaturas. Cuanto menor sea el
número, más fluido será el aceite a bajas temperaturas.
Intervalos de mantenimiento:
La recomendación general para los aceites semisinteticos es cambiarlos cada 8000 a 10 000 km
[7-8]
Lubricantes sólidos
se utilizan para reducir la fricción y el desgaste en diferentes aplicaciones. Los lubricantes
sólidos se presentan en forma de polvo o gránulos. Algunos ejemplos comunes son grafito,
disulfuro de molibdeno y bisulfuro de tungsteno. Se aplican en áreas de contacto para reducir
la fricción y el desgaste. Los lubricantes sólidos forman una capa protectora entre las
superficies en movimiento. Ayudan a prolongar la vida útil de los componentes y mejorar la
eficiencia de las máquinas. Son efectivos en altas temperaturas y ofrecen resistencia a la
presión. También tienen estabilidad química y resistencia al desgaste. Adhieren bien a las
superficies metálicas y aseguran una lubricación continua.
Clasificación
Los lubricantes sólidos no tienen una clasificación estándar específica. Algunos tipos comunes
son grafito, disulfuro de molibdeno (MoS2), bisulfuro de tungsteno (WS2) y PTFE
(politetrafluoroetileno). Estos lubricantes reducen la fricción y el desgaste. El grafito forma una
capa deslizante, el MoS2 ofrece lubricación en condiciones de alta carga y temperatura, el WS2
tiene resistencia a la presión y el PTFE tiene baja fricción
Intervalo de mantenimiento
Puede variar dependiendo de varios factores, como el tipo de lubricante sólido utilizado, las
condiciones de operación y las recomendaciones del fabricante. En general, los lubricantes
sólidos tienden a tener una vida útil más larga que los lubricantes líquidos, lo que significa que
el intervalo de cambio puede ser más prolongado.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que a medida que el lubricante sólido se desgasta
o se contamina, su eficacia puede disminuir, lo que puede afectar la lubricación adecuada de
las superficies en movimiento. [9-10]
Grasas lubricantes
Las grasas lubricantes son compuestos semifluidos que consisten en un aceite base (70% a
95%), un agente espesante o jabón (5% a 35%) y varios aditivos (0% a 10%). Estas grasas se
utilizan en vehículos para lubricar y reducir la fricción entre las superficies en movimiento, al
tiempo que retienen el aceite y complementan sus propiedades. Algunas propiedades
importantes de las grasas lubricantes incluyen su capacidad para lubricar y reducir la fricción,
su viscosidad adecuada para diferentes temperaturas, su resistencia a la oxidación y la
corrosión, su capacidad de sellado, su estabilidad mecánica y su resistencia al lavado por agua.
Son ampliamente utilizadas en vehículos para diversas aplicaciones, como rodamientos, juntas
universales, engranajes y componentes de suspensión.
Clasificación
Intervalo de mantenimiento
En general, las grasas lubricantes tienen una vida útil más prolongada que los aceites
lubricantes, lo que significa que los cambios son menos frecuentes. Se puede tene un cambio
de grasa cada 1-2 años o cada 10,000-20,000 horas de funcionamiento, según la aplicación y
las condiciones de trabajo. [11-12]
Sistemas de lubricación
Sistema de lubricación por cárter húmedo: Es el sistema más común en los motores de
automóviles. El aceite lubricante se almacena en el cárter o depósito de aceite debajo del
motor. Una bomba de aceite recoge el aceite y lo distribuye a través de conductos y galerías
para lubricar las partes móviles del motor, como las bielas, cigüeñal y árbol de levas.
Sistema de lubricación por cárter seco: Algunos vehículos de alto rendimiento utilizan este
sistema, donde el aceite lubricante se almacena en un depósito separado del motor. El aceite
se bombea desde el depósito hacia las partes móviles del motor mediante una bomba de
aceite. Este sistema permite un mejor control de la temperatura del aceite y reduce la
resistencia aerodinámica.
Sistema de lubricación por pulverización: Este sistema se utiliza en motores diésel grandes o en
motores industriales. El aceite lubricante se pulveriza directamente sobre las partes móviles
del motor mediante boquillas. La pulverización asegura una lubricación efectiva en condiciones
de alta carga y alta temperatura.
Sistema de lubricación por bomba de aceite eléctrica: Algunos vehículos híbridos o eléctricos
utilizan bombas de aceite eléctricas para proporcionar lubricación a los componentes del
motor. Estas bombas se activan según sea necesario y permiten un control más preciso del
flujo de aceite.
La lubricación a presión utiliza un sistema separado que suministra aceite lubricante a alta
presión a través de conductos y galerías hacia las partes móviles del motor. Esto garantiza una
distribución uniforme del lubricante y permite un control preciso de la cantidad y calidad del
aceite lubricante.
Tipos de carter
Cárter húmedo: El más común, contiene el aceite lubricante en el mismo cárter del motor.
Cárter semiseco: Combina partes sumergidas en aceite con conductos para la lubricación.
Tipos de bombas
Bomba de aceite: Genera presión para asegurar una adecuada lubricación del motor,
distribuyendo el aceite lubricante a las partes móviles del motor.
Bomba de frenos: Genera la presión hidráulica necesaria para activar el sistema de frenos,
transmitiendo la fuerza del pedal de freno a las ruedas y permitiendo detener el vehículo de
manera segura.
es responsable de transmitir la potencia generada por el motor hacia las ruedas para que el
vehículo pueda moverse. Este sistema transforma la energía térmica en energía mecánica para
generar el movimiento. El par motor, o la fuerza de giro del motor, se adapta a las necesidades
de conducción, que dependen de la velocidad, el tipo de carretera y la carga del vehículo.
Caja de cambios: Puede ser automática o manual y se encuentra entre el embrague y el eje
motriz. Permite modificar la velocidad de giro del motor mediante el cambio de marcha.
Diferencial: Compensa el movimiento giratorio entre los ejes de las ruedas, facilitando el
movimiento lineal al convertirlo de un eje longitudinal a uno transversal. En curvas, permite
que las ruedas exteriores giren más que las interiores.
Palieres: También conocidos como semiárboles de transmisión, son barras que giran en la
misma orientación que las ruedas motrices. Transmiten el movimiento del diferencial hacia las
ruedas. [16-17]
Enfriadores de aceite
Existen diferentes tipos de enfriadores de aceite, pero los más comunes son los enfriadores de
aceite de tipo radiador y los enfriadores de aceite de tipo intercambiador de calor.
Enfriadores de aceite de tipo radiador: Estos enfriadores son similares a los radiadores del
sistema de refrigeración del motor. Consisten en un conjunto de tubos y aletas que permiten
que el aceite circule a través de ellos. El calor transferido desde el aceite se disipa al entrar en
contacto con el flujo de aire externo generado por el movimiento del vehículo o mediante el
uso de un ventilador eléctrico. Este tipo de enfriador se encuentra comúnmente en vehículos
de alto rendimiento y en aplicaciones industriales.
El filtro de aceite tiene como tarea principal retener las partículas de suciedad blandas y duras
para que no circulen por el motor. Además, evita deterioros prematuros debido a que impide
que haya obstrucciones y, como consecuencia, tenga una pérdida de presión de aceite donde
el motor sufriría agarrotamientos y no trabajaría de manera adecuada.
Si el filtro no se encuentra en optimas condiciones para ejercer su tarea, no podrá retener las
impurezas y suciedades que se encuentran dentro del lubricante, lo que podría generar daños
dentro del motor. Por otro lado, tener un filtro en mal estado puede provocar una
disminución en el rendimiento del motor, consumo elevado de combustible y desgaste de
algunas piezas internas.
Por lo general, el filtro de aceite tiene una vida útil de 5.000 km. Aunque, lo más
aconsejable, es reemplazar el filtro cuando se realice el cambio de aceite habitual del vehículo,
esto para que no se filtren las partículas contaminantes que se encuentran dentro del nuevo
aceite.
TIIPOS DE FILTROS
Blindados o Monoblock
Por centrifugación
Por sedimentación
Control de la presión del aceite y control de la presión interior del motor
La presión generada en la mayoría de motores debe ser de unos 10 psi a 1000 revoluciones
(rpm), con un pico de 55 a 65 psi. La presión en el circuito se regula mediante una válvula de
descarga, que permite la apertura de un by-pass cuando la presión aumenta excesivamente.
El sensor de presión de aceite es quien manda la señal a esa luz de advertencia, para que en el
tablero te indique si el nivel de aceite es correcto o no, midiendo la presión del aceite en el
motor.
Una baja presión del aceite de motor puede causar daños graves en la maquinaria y las
diferentes piezas que lo componen. Cuando no hay suficiente nivel de aceite, las piezas se
desgastan más rápido porque no llega suficiente lubricación.
La presión alta del aceite puede desencadenar que algún elemento del sistema de lubricación
acabe
rompiéndose,
por lo que
esto
supondría un
alto coste
para nuestro
bolsillo. No
obstante, este
hecho
sucedería en
el peor de los
casos. [20]
También se generan vapores de aceite en el interior del motor, por el efecto blow-by
principalmente, que consiste en que parte de los gases resultantes de la combustión se fugan a
través de los segmentos y de las guías de válvula hacia el cárter y la culata, respectivamente.
Todos estos vapores al condensarse dentro del cárter se mezclan con el aceite y lo
contaminan, acelerando su descomposición y, por tanto, eliminando sus propiedades
lubricantes.
Esto da lugar a la necesidad continua de cambiar el aceite con mayor frecuencia, a la vez que
ocasiona una pérdida de rendimiento del motor debido a la sobrepresión que se da en el
interior del cárter.
Este sistema presenta la ventaja de que la ventilación del cárter se da de manera más rápida,
ya que los gases son aspirados por la propia admisión de los cilindros.
Ahora bien, estos gases contienen aceite, por lo que dispone de un filtro decantador que
separa la fase líquida de aceite de estos vapores retomándolo de nuevo al cárter, mientras que
la fase gaseosa continua hacia la entrada de los cilindros.
No obstante, parte del aceite contenido en los vapores no se decanta, y entra en la cámara de
combustión durante la admisión, lo cual resulta beneficioso porque la lubrica la zona alta del
cilindro.