Tema 55
Tema 55
Tema 55
ÍNDICE
1. INTRODUCCIÓN
3. EL CONOCIMIENTO DE LA REALIDAD
4. LA OBSERVACIÓN Y EXPLORACIÓN DEL MUNDO FÍSICO, NATURAL Y SOCIAL
5. GENÉSIS Y FORMACIÓN DE LOS PRINCIPALES CONCEPTOS
6. CONCLUSIÓN
7. FUENTES BIBLIOGRÁFICAS
7.1. BIBLIOGRAFÍA
7.2. LEGISLACIÓN
7.3. WEBGRAFÍA
1. INTRODUCCIÓN
La educación infantil se enmarca en un modelo educativo que se ajusta al ritmo de crecimiento,
desarrollo y aprendizaje de cada niño y niña y les inculca los valores para la vida. Por ello, los maestros y
maestras debemos guiar a nuestro alumnado en la adquisición de competencias que les permitan afrontar los
retos del siglo XXI, garantizando una educación inclusiva, equitativa y de calidad, como señala Coral
Elizondo (2022).
La finalidad de la educación infantil es contribuir al desarrollo físico, afectivo, social, cognitivo y
artístico del alumnado, así como la educación en valores cívicos para la convivencia, como se indica en la
Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo,
de Educación (LOMLOE).
El estudio de este tema es de gran relevancia, pues conocer el desarrollo cognitivo de los niños y niñas
es una herramienta clave en nuestra práctica educativa orientada a favorecer el desarrollo integral y armónico
del alumnado, tal y como se contempla en el Decreto 196/2022, de 3 de noviembre, por el que se establece
el currículo de la etapa de Educación Infantil en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Este tema está relacionado con todo el temario, pero especialmente con los temas 1, 2, 3, 4 y 18
dedicados al desarrollo infantil.
Comenzaremos el tema analizando las características generales del niño y la niña hasta los seis años, los
factores que intervienen en su desarrollo y las etapas más significativas. También, hablaremos sobre el
desarrollo infantil en el primer año y, por último, expondremos el papel de los adultos.
Acabamos esta introducción con la siguiente frase de Elsa Punset: “No podemos olvidar que los
primeros años de vida son una vida entera”.
2. DESARROLLO COGNITIVO HASTA LOS SEIS AÑOS
3. EL CONOCIMIENTO DE LA REALIDAD
El conocimiento de la realidad es consecuencia de las capacidades motoras y su desarrollo cognitivo. A
través de la manipulación y la experimentación el niño comprende el mundo que le rodea. Como anota
Francisco Mora (2013), el aprendizaje infantil se constituye en ese proceso de mirar, oír, tocar, sobre todo a
través del juego y el movimiento.
Según Piaget (1977), el niño va construyendo el conocimiento de la realidad a medida que va
interaccionando con los objetos del entorno y comparte sus experiencias con otras personas, gracias a la
aparición de la función simbólica y el lenguaje. Piaget, distingue tres tipos de conocimiento de la realidad:
Conocimiento físico: se refiere al mundo natural, social, a los objetos. Este razonamiento se basa en
la manipulación de los objetos que le rodean y que forman parte de su interacción con el medio.
Gracias a esta manipulación, consigue lograr un conocimiento abstracto de las cualidades: color,
forma, tamaño, peso.
Conocimiento lógico-matemático: este conocimiento es el resultado de la propia actuación y
relación del niño con objetos y, a partir de una reflexión, van construyendo las nociones de
clasificación, seriación y número.
Conocimiento social: la fuente de este conocimiento está en los otros (familia, amigos, maestros…)
y favorece la integración del niño en la sociedad en la que vive. A través de las interacciones con
otros aprende valores, normas y la cultura de la sociedad en la que vive.
Teniendo en cuenta esto, podemos afirmar que la observación y la exploración son dos procedimientos
básicos con los que cuenta el niño para el conocimiento del mundo.
Ambos procesos son fundamentales para que los niños y niñas descubran el mundo que les rodea. Desde
edades muy tempranas, los niños indagan sobre el entorno que les rodea, primero a través de la observación,
de sus actos y de la manipulación y, más adelante, como consecuencia de su independencia, los procesos de
experimentación y exploración se van enriqueciendo.
La importancia de la observación y exploración del entorno queda reflejada en el Decreto 196/2022, así
en el área “Descubrimiento y Exploración del Entorno” se recogen competencias específicas orientadas
al desarrollo del pensamiento y estrategias cognitivas a través del proceso de descubrimiento del entorno
junto con tres bloques de saberes básicos.
La observación en los niños es una tendencia espontánea, pero es asistemática debido a que está
limitada a las características de su pensamiento (sincretismo, centración y egocentrismo), por lo que la
escuela deberá compensar las limitaciones de esta observación sistematizándola y favoreciendo el desarrollo
de las capacidades sensoriales.
Mediante la exploración del entorno más próximo el niño aprende a situarse y orientarse en el espacio y
a localizar elementos respecto a sí mismo, a los demás y a los objetos. Aprende a discriminar las formas,
volúmenes geométricos, estimación de medidas. En relación con el mundo natural los niños descubren la
existencia de otros seres vivos (animales, plantas) con curiosidad. Por ejemplo, el centro de interés de una
unidad didáctica pueden ser las plantas, pues facilitan los procedimientos de observación, experimentación y
constatación de los cambios que se producen ellas durante las distintas estaciones climáticas, por los
cuidados que necesitan, porque algunos se transforman en productos necesarios par la vida humana y son
esenciales para la conservación del medio natural.
Respecto al conocimiento del mundo social, la escuela debe facilitar al niño el contacto con
organizaciones sociales, paisajes y situaciones que susciten su interés y deseo de experimentar, investigar y
conocer, potenciando el desarrollo de las capacidades que favorezcan su integración en la sociedad como
personas críticas, participativas, respetuosas y eficaces, con una actitud positiva hacia la cultura. El niño en
la escuela va adquiriendo hábitos que facilitan la convivencia: cuidado del material, responsabilidad en el
trabajo, respeto, colaboración, ayuda a los demás… Todo un conjunto de adquisiciones que le facilitará
querer sus tradiciones y sentirse querido.
Por tanto, el descubrimiento y conocimiento del medio es un proceso lento y continuo que necesita
asentarse en la experiencia del niño, por ello, en el centro se deberán establecer situaciones de aprendizaje
que partan de lo cotidiano, susciten su interés, se formulen preguntas, observen y analicen datos, planteen
soluciones y las comuniquen.
En este sentido, Jiménez y Molina (2008), concretan propuestas de acción para el aprendizaje por
observación y experimentación que la escuela puede ofrecer, destacando las siguientes:
Contacto cotidiano con los objetos, elementos naturales y espacios sociales.
Interacción entre iguales y con adultos.
Contacto con las técnicas, códigos y sistemas de la propia cultura.
Observación de hechos y fenómenos naturales.
Planificación, seguimiento y valoración de las propias experiencias.
Experimentación y análisis.
Entendemos por concepto una representación mental que nos permite realizar clasificaciones
categoriales en base a las experiencias de la interacción con nuestro entorno.
De modo que para trabajar los conceptos el maestro deberá tener en cuenta que el niño tenga un nivel
adecuado en la manipulación y observación de objetos concretos para luego introducir la representación de
las operaciones que están realizando a través de dibujos.
Por otro lado, cabe destacar que, aunque los conceptos sean distintos y que por motivos de exposición se
presentan por separado, siempre se van a trabajar de forma conjunta y global siguiendo el principio de
globalidad del aprendizaje de Decroly.
A continuación, comentaremos la formación de conceptos más importantes en el desarrollo del niño:
Objeto: se va adquiriendo por medio de la experiencia en el estadio sensoriomotor y se trata de
considerar a los objetos como entidades en sí mismas, separadas de la acción que se ejerce sobre
ellos. Según Piaget, a los 18-24 meses el niño es capaz de buscar objetos escondidos, lo que
denomina objeto permanente.
Espacio: el niño va a ir organizando y unificando el espacio en relación con el propio cuerpo.
Durante el estadio preoperacional la percepción del espacio está influida por su pensamiento
egocéntrico e intuitivo. A partir de los 3 años construye nociones como: dentro/fuera, delante/detrás,
alto/bajo.
Tiempo: está ligada a capacidades abstractas, por lo que hasta los 3 años van asimilando aspectos
secuenciales de tiempo apoyados en su experiencia y hacia los 4 años comprenden la duración de los
acontecimientos, pero tienen dificultades para relaciones aspectos de duración y sucesión. De ahí la
importancia de las rutinas en educación infantil, pues ayudan a los niños a anticipar los
acontecimientos, dándoles seguridad a sí mismos.
Causalidad: consiste en la atribución de estructuras operatorias a los objetos que el niño va
formando a partir de las relaciones de causa-efecto.
Número: esta adquisición se constituye en una parte de las situaciones cotidianas y manipulativas
que facilitan el aprendizaje de matemático. Fernández Bravo, defiende desarrollar la observación,
la intuición, la creatividad, el razonamiento y las emociones para la didáctica de las matemáticas en
esta etapa de infantil. Un ejemplo de esta metodología abierta sería el método ABN (aprendizaje
basado en los números), en la que los niños aprenden los números libremente sin aplicar una regla
determinada para su resolución final.
6. CONCLUSIÓN
A lo largo del tema, se ha podido evidenciar la importancia que tiene el conocimiento del desarrollo
cognitivo del niño hasta los 6 años a través del conocimiento de la realidad, así como la observación y
exploración del mundo físico, natural y social, incluyendo la génesis y formación de los principales
conceptos.
En todo caso, no podemos olvidar que la escuela del siglo XXI se debe adaptar a los nuevos retos de
la educación, en palabras de Bona (2015) “los maestros somos el ejemplo de los alumnos y alumnas, así
que debemos educar en empatía, sensibilidad, emociones y respeto. Además, hemos de potenciar la
curiosidad, imaginación y creatividad de cada niño y niña. Nuestro objetivo es perseguir una escuela
donde los niños aprendan felices y puedan desarrollar el sentido crítico, pues de estos niños depende el
futuro de crear una sociedad más justa, responsable y sostenible”.
Por último, me gustaría destacar nuestro papel como maestros y maestras, siguiendo las palabras de
Jesús Guillén: “La estrategia de mayor impacto en la educación es nuestro ejemplo”.
7. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
7.1. LEGISLACIÓN
Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de
mayo, de Educación.
Real Decreto 95/2022, de 1 de febrero, por el que se establece la ordenación y las enseñanzas
mínimas de la Educación Infantil.
Decreto n196/2022, de 3 de noviembre, por el que se establece el currículo de la etapa de Educación
Infantil en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Orden de 22 de septiembre de 2008, de la Conserjería de Educación, ciencia e investigación, por la
que se regulan para la Comunidad autónoma de la Región de Murcia, la implantación, desarrollo y
evaluación en el segundo ciclo de la Educación Infantil.
escuelaconcerebro.wordpress.com
www.programaneuroeduca.com
www.educaciontrespuntocero.com
www.educapeques.com
Finalmente, doy por concluida mi intervención agradeciéndoles su atención con las palabras de
Plutarco: “La mente no es una vasija por llenar sino un fuego por encender”. Muchas gracias.