Ameneidades
Ameneidades
Ameneidades
valor de tu departamento
Las amenidades de un departamento son una extensión del mismo, un valor
agregado que contribuye a la comodidad de sus residentes y acaba
reflejándose de manera importante en el incremento del valor total del inmueble
y, por lo tanto, en la calidad de la inversión.
La razón es simple; disfrutar de lujos y comodidades sin salir de su propia zona
residencial implica potenciar el nivel de bienestar de quienes ahí habitan, por lo
que el costo aumenta también. La integración de amenidades a nuevos
proyectos residenciales obedece a nuevas necesidades de recreación y
relajación, espacios para disfrutar y alejarse por un momento del ajetreo de la
habitual rutina.
Pero antes de avanzar más en este asunto, comencemos por definir más
claramente qué es una amenidad en desarrollos inmobiliarios; podemos decir
que es todo aquel elemento que haga del espacio un entorno más grato,
placentero y, por supuesto, ameno. Éstas surgen de una necesidad real de
esparcimiento e integración social, tal y como lo informa El Reforma.
Por tal razón, un departamento con buenas amenidades incluidas es más
fácil de comercializar y prospectar para negocios futuros como rentas fijas o
vacacionales, es decir, tiene la capacidad de generar ingresos corrientes más
allá de sólo generar plusvalía por el hecho de ser un bien raíz, lo cual ya es una
cualidad bastante atractiva por sí misma. Un plan arquitectónico y de servicios
que sea más innovador, definitivamente, acabará aportando al valor del
inmueble y será un diferenciador a evaluar cuando se busque calcular la
rentabilidad de una inversión inmobiliaria.
Azoteas verdes
Salón de eventos
Servicio de niñeras
Gimnasio
WiFi en áreas comunes
Acceso controlado
Canchas deportivas
Consideraciones importantes
Decidir invertir en inmuebles con amenidades implica tener en cuenta ciertas
consideraciones importantes, por ejemplo, si estás pensando invertir para
alquilar, tendrás mayores posibilidades de tener una buena ocupación de la
propiedad, sobre todo si se trata de rentas vacacionales en algún punto
turístico y, por supuesto, esa amenidad extra incrementa el costo del hospedaje
por noche, aumentando las ganancia para el arrendatario.
Sin embargo, hay un punto que necesita especial atención, si no se saca
provecho de estos servicios extra, lejos de representar una ventaja se estaría
perdiendo dinero, más aún si no se les da el mantenimiento adecuado a las
amenidades y acaban por deteriorarse.
De acuerdo a Expansión, la cuota de mantenimiento anual oscila entre 3 y 5%
del valor del inmueble, su función principal es cuidar la plusvalía de las
instalaciones para que siempre vaya en aumento y no al contrario. Una buena
forma de garantizar un correcto mantenimiento si es que no es una propiedad
para vivienda o que se ocupe todo el año, es adquirir el inmueble en régimen
de condominio, donde haya algún tercero que pueda ocuparse de verificar su
correcto estado.
Otra ventaja de los condominios es que, normalmente, los desarrolladores
establecen un reglamento que facilita la convivencia entre los vecinos y
promueve el uso adecuado de servicios e instalaciones, lo que prolonga
considerablemente la vida útil de las amenidades, preservándolas como
una atracción importante en condominios residenciales.
En resumen, contar con amenidades bien cuidadas y diferenciadas, aporta de
forma positiva a la rentabilidad de un inmueble, aumenta su valor y lo convierte
en un espacio más placentero donde se pueda disfrutar sin salir del área
residencial, un extra bastante