De Ficción A Realidad Drones y Seguridad Ciudadana en América Latina
De Ficción A Realidad Drones y Seguridad Ciudadana en América Latina
De Ficción A Realidad Drones y Seguridad Ciudadana en América Latina
ISSN: 1909-7050
[email protected]
Escuela de Posgrados de la Fuerza
Aérea Colombiana
Colombia
CIENCIA Y PODER AÉREO | Revista Científica de la Escuela de Postgrados de la Fuerza Aérea Colombiana | 71
CIENCIA Y PODER AÉREO | Revista Científica de la Escuela de Postgrados de la Fuerza Aérea Colombiana | Vol. 10 | Enero - Diciembre de 2015
Resumen: el uso de los drones en América Latina está confrontado a dos di-
Para citar este artículo: lemas principales. Por un lado, no existe un marco normativo claro en mu-
Gomis, M y Falck, F. (2016). De ficción a realidad: drones
y seguridad ciudadana en América Latina. Ciencia y Poder
chos de los países. Por otro lado, las políticas públicas y los civiles hacen cada
Aéreo, 10 (1), 71-84. Doi: http://dx.doi.org/10.18667/cien- vez más uso de dicha herramienta, aumentando la necesidad de establecer
ciaypoderaereo.430 limitaciones y condiciones para el empleo de estos aparatos. El exitoso uso
de los drones en control y gestión de infraestructura o del territorio pone a
debate sus beneficios y peligros. En este artículo se revisa en primer lugar,
los contextos normativos latinoamericanos; segundo, se analizan los límites y
debates ligados a la posible utilización de drones en las políticas de seguridad
1
Artículo de revisión derivado del proyecto de investiga-
ción titulado “Drones y seguridad en América Latina”
urbana latinoamericana, especialmente confrontándolos con las cámaras de
realizado por Ferdinando Falck bajo la supervisión de vigilancia.
Miguel Gomis con el fin de entender la potencialidad
del uso de los drones para el refuerzo de la seguridad Palabras clave: ANT; América Latina; CCTV; drones; política pública; seguridad.
en Centroamérica, especialmente Honduras. Pontificia
Universidad Javeriana, Facultad de Ciencias Políticas y
Relaciones Internacionales, Bogotá, Colombia.
2
Artigo de revisão derivado do projeto de pesquisa in- Resumo: o uso de drones na América Latina está enfrentando dois grandes
titulado “Drones e segurança da América Latina” por dilemas. Por um lado, há um quadro regulamentar claro em muitos países;
Ferdinando Falck supervisionado por Miguel Gomis, a por outro, as políticas públicas e os civis usam cada vez mais esta ferramenta,
fim de compreender o potencial do uso de drones para o aumentando a necessidade de estabelecer limitações e condições para o uso
reforço da segurança na América Central, especialmente desses dispositivos. O sucesso no uso de drones em controle e gerenciamento
em Honduras. Pontificia Universidad Javeriana, Faculda- de infraestrutura ou de território, propicia um debate sobre seus benefícios
de de Ciência Política e Relações Internacionais, Bogotá, e perigos. Este artigo revisa em primeiro lugar os contextos regulatórios lati-
Colômbia.
no-americanos; em segundo lugar, os limites e debates relacionados com o
3
Review article derived from the research project entitled possível uso de drones em políticas de segurança urbana latino-americanas,
“Drones and security in Latin America” by Ferdinando especialmente comparando-os com câmeras de vigilância.
Falck supervised by Miguel Gomis in order to understand
the potential of the use of drones for strengthening secu- Palavras-chave: ANT; América Latina; CCTV; drones; políticas públicas; segu-
rity in Central America, especially in Honduras . Pontificia
rança.
Universidad Javeriana, Faculty of Political Science and
International Relations, Bogotá, Colombia.
4
Politólogo especializado en Iberoamérica por Scien-
ces-po, Doctorando en Gobierno y Administración
Abstract: The use of drones in Latin America is facing two main dilemmas.
Pública del IUIOG/UCM con Máster en Gobierno y
Administración Pública del IUIOG/UIMP y Máster en
On one hand, the confusing regulatory framework in many countries, on the
Finanzas y Estrategia de Sciences-po. Consultor en other hand, both public and civil policies increase the use of said tool, increas-
Gobernabilidad y Gestión Pública. Profesor de la Pon- ing the need to establish both limitations and conditions for the proper use of
tificia Universidad Javeriana. Bogotá, Colombia. Co- drones. The successful utilization of drones in both control and infrastructure
rreo electrónico: [email protected] or territory management puts in discussion the rewards and hazards which
arise from uncontrolled use of drones. This article elaborates a contextualiza-
5
Estudiante de Ciencia Política en la Pontificia Univer-
sidad Javeriana, Facultad de Ciencias Políticas y Rela-
tion of regulatory frameworks in Latin America to then, proceed to analyze
ciones Internacionales, Bogotá, Colombia. Asistente the limits and discussions linked to the hypothetical usage of drones in Latin
de investigación. Correo electrónico: ffalck@javeriana. American urban security politics, confronting them with surveillance cameras.
edu.co
Key Words: Drones; Latin America; Public Policy; Security; UAV.
Con el propósito de contestar a la pregunta central (Bustamante, 2002). En tercer lugar, se discuten las hipóte-
enunciada anteriormente, se defienden aquí dos hipótesis sis propuestas y se proponen unas conclusiones genera-
centrales. Primero, que el marco normativo es insuficiente les. Para finalizar se proponen tres principales recomenda-
en América Latina, lo cual facilita y aumenta el uso de di- ciones respecto al uso de los ANT en contexto urbano en
chos aparatos al tiempo que posterga los debates sobre las América Latina y su marco legal.
derivas de su uso. La limitación y regulación de los drones
no ha tenido el mismo lugar en las agendas de políticas
públicas latinoamericanas como en Estados Unidos o va- Marco teórico: entre incrementalismo
rios países de Europa (por ejemplo Francia, preocupada y difusión de la innovación
por el sobrevuelo de sus centrales nucleares). Segundo, la Las políticas públicas cuentan con varias fases tradiciona-
gran panoplia de usos exitosos de los drones en tareas ci- les (Parsons, 2007): agenda, toma de decisión, formulación,
viles como el control de infraestructura o inclusive gestión implementación y evaluación. En este trabajo se retienen
territorial por parte de los Estados no garantiza que los dro- las tres primeras debido a la novedad de la temática y a la
nes puedan ser una solución en las políticas de seguridad. baja regulación que existe en torno al tema de los drones.
Se trata de conocer lo que ya se ha hecho, de lo que se
Para el desarrollo de la investigación que tuvo como debate en la agenda de políticas y los usos que se dan con
resultado este artículo, se contempló el uso del enfoque respecto a los drones.
cualitativo, no experimental. (Sampiere, Collado y Baptis-
ta, 2010). Las herramientas de investigación buscaron re- En cuanto a la toma de decisión se refiere, hay que in-
colectar información de fuentes primarias y segundarias tegrar los enmarques (Scheufele y Tewksbury, 2007) éticos
entre las que se destacan: 1) entrevistas semiestructura- y legales existentes tanto en los países con una normativi-
das a funcionarios en Honduras y Colombia, vinculados dad como en los que no la hay. Para los primeros, se trata
con fuerzas del orden o entes regulatorios; 2) revisión de un debate sobre: a) si la legislación tiene en cuenta el
de los marcos legales de los países de América Latina; 3) debate ético; b) si es el caso, con cuáles fundamentos y
revisión de prensa entre 2013 y 2015; 4) documentación qué efectos. Para los segundos (donde no hay norma para
de administraciones implementadoras y organismos re- drones), el debate ético gira entorno a los límites entre lo
guladores; 5) revisión de la literatura académica del uso legal y lo moral: a) desde la acción del que dirige y controla
de los drones en América Latina, principalmente a través el dron; b) desde los derechos de todos los que pueden ser
de papers en publicaciones internacionales y regionales. observados desde el dron.
Por todo ello, se puede considerar que la presente inves-
tigación también adquiere un carácter exploratorio y des- En cuanto a la formulación de las normas sobre dro-
criptivo, especialmente al ofrecer una comparación de los nes, es interesante evaluar si se está ante políticas regula-
marcos legales relativos a drones. torias incrementalistas o no. Después de que Harold Las-
swell proclamara la aparición de la ciencia de las políticas
Con el fin de elaborar una exposición ordenada de los públicas (Farr et al., 2006), científicos sociales se volcaron
argumentos, este texto se divide en cuatro partes diferen- en uno de lo más espinosos problemas: la toma de decisio-
ciadas. En primer lugar se expone brevemente un marco nes. Charles Lindblom, economista de formación, publicó
teórico y conceptual destinado a encuadrar el debate y The Sciences of Muddling Though en 1959, introduciendo un
sustentar una perspectiva metodológica. Para ello, se parte nuevo sesgo e inauguró de paso un nuevo debate, a saber
de dos concepciones diferenciadas del cambio en las po- el que se establecerá de manera diacrónica entre raciona-
líticas públicas. Por un lado, la visión incrementalista (Lind- listas e incrementalistas. Esta irrupción en el panorama aca-
blom, 1991), desde la cual la progresión de las políticas se démico representó a fin de cuentas un aporte crítico con
explica por la perpetuación de la prueba y error. Por otro las tesis racionalistas, las cuales han sido constantemente
lado, se encuentra el enfoque teórico de los autores Berry matizadas, entre otros, por el premio Nobel Herbert Simon
y Berry (en Sabatier y Weible, 2014) que se sustenta en el (Pan, 2010, p. 287). Desde entonces, la temática de cómo y
análisis de la difusión de las políticas innovadoras. por qué ciertas políticas se formulan desde el continuismo
ha marcado la mayoría de las discusiones en políticas pú-
En segundo lugar, se ofrece una contextualización so- blicas; las de seguridad no escapan a dicha tendencia. La
bre la situación legal y normativa en los países latinoame- idea del incrementalismo sería que los decisores tienden
ricanos además de una revisión de sus usos prácticos y los a formular políticas desde el ensayo y error, ampliando de
debates conexos en las agendas públicas. Sumado a esto, manera progresiva la amplitud y alcance de las políticas
se hace referencia a la conexión que existe entre drones, (Lindblom, 1979). Sin embargo, la ruptura de esa tendencia
cámaras de seguridad y las mismas políticas de seguridad conservadora existe cuando se dan cambios inesperados.
En el caso de los drones las legislaciones han tendido Desde dichos mecanismos, Berry y Berry (Sabatier y
a asumir dos visiones: posiciones conservadoras o posicio- Weible, 2014, pp. 307-359) especifican que su perspectiva
nes innovadoras. Para la segunda opción, se podría analizar es compatible con tres modelos de difusión de la innova-
desde el marco teórico desarrollado por Frances S. Berry ción ya existentes (modelo de interacción nacional, mode-
y William D. Berry. Su modelo Diffusion of Innovation (DOI) lo de la difusión regional y modelo líder/rezagado). Ahora
parte de una constatación simple: no se puede entender el bien, más allá de esos modelos, los autores especifican que
proceso de las políticas si no se entiende cómo los gobier- en razón del papel jugado por los grupos de intereses y
nos adoptan nuevos programas (Sabatier y Weible, 2014, los medios es más que probable que las innovaciones se
pp. 307-359). La pista para entender la existencia de rup- vayan difundiendo. Las variables internas dependen pues
turas en el incrementalismo es que los gobiernos adoptan de muchos factores, tanto trayectoria histórica del gobier-
innovaciones. no como los medios disponibles o las motivaciones de los
actores involucrados. Además hay que integrar la dimen-
El concepto de innovación de Berry y Berry es amplio sión electoral, donde los candidatos inseguros tenderían a
(Sabatier y Weible, 2014, pp. 307-359), especificando los innovar más con políticas que gusten al electorado y evitar
autores que se diferencia la innovación de la invención en políticas que no gusten.
la medida en que la primera suele responder a la difusión
de nuevas técnicas a diferentes jurisdicciones nacionales. Teniendo en cuenta todo lo anteriormente expuesto
Es decir, en el DOI uno de los factores que revela la inno- sobre el marco teórico DOI se pueden esbozar los grandes
vación son las redes de relaciones intergubernamentales puntos por averiguar en cuanto a legislaciones de drones
y redes interadministrativas. Existen dos principales vías se refiere. En la fase 1 hay que verificar en qué casos se
explicativas a los nuevos programas de los gobiernos. En enmarcan las políticas (incrementalismo vs. DOI). Las tres
primer lugar, están los determinantes internos, es decir opciones serían: 1) incrementalismo (ampliando leyes ya
motivaciones jurídicas, económicas o políticas que llevan existentes); 2) determinantes internos; 3) difusión inter-gu-
una instancia a innovar. Este sería el terreno explicativo bernamental). Si se identifica que hay innovación, habría
más trabajado por los estudiosos del área. En segundo que analizar si se trata de alguna de las cinco opciones re-
lugar se encuentra la difusión, que es principalmente tenidas desde el DOI (aprendizaje, imitación, presión nor-
intergubernamental, imitando instancias de gobierno lo mativa, competencia y coerción). Para poder establecer un
que han hecho sus pares tanto a su mismo nivel como diagnóstico al respecto, en este trabajo se han hecho los
superiores o inferiores. siguientes pasos metodológicos: a) revisiones de prensa
por cada país con el fin de conocer el inicio y desarrollo del
Berry y Berry (Sabatier y Weible, 2014, pp. 307-359) debate público sobre drones; b) análisis longitudinal de las
enumeran cinco mecanismos de difusión identificados normas que han sido promulgadas o modificadas en cada
dentro de la realidad de la práctica política norteamerica- país para la regulación de los drones.
na. El primero sería el aprendizaje, que se da cuando en
una jurisdicción los decisores comunican información so- Esta fase 1 del estudio nos permitiría aportar algunas
bre la eficacia de políticas adoptadas anteriormente por claves de respuesta sobre las razones de las falencias o
gobiernos. El segundo mecanismo sería la imitación, la cual fortalezas de las legislaciones de los países de la región.
se da cuando un gobierno imita lo que hace otro por ra- Una vez aclarados estos puntos se podría pasar a reflexio-
zones de imagen, liderazgo o inclusive ideología. El tercer nar en la fase 2, es decir, cómo se relacionan los drones
mecanismo correspondería a la presión normativa, la cual con las políticas de seguridad (si los drones vienen a
supone que un gobierno implementa una política por- completar políticas o si han originado políticas nuevas o
que todos los gobiernos alrededor suyo lo están haciendo diferentes). Para esta segunda parte de la reflexión se ha
o por normas compartidas, con el fin de ajustarse a una hecho una revisión de las políticas públicas de seguridad
evolución general. La competencia, vista como el cuarto actuales de los países de la región para conocer sus en-
mecanismo, supone que los decisores implementan una foques, preferencias y elecciones tecnológicas (especial-
política para preservar ciertas ventajas económicas frente mente uso de cámaras y drones).
a otras jurisdicciones o para que otras no consigan venta-
jas sobre ellos. El quinto y último mecanismo enumerado
por los autores sería la coerción, la cual parte de la simple Debates y marcos normativos
dirección desde un gobierno superior quién sugiere o in- latinoamericanos
cluso obliga a uno jerárquicamente por debajo a adoptar En América Latina los drones suponen muchísimas venta-
una innovación. jas tanto para los gobiernos locales como para los ciuda-
danos, siendo determinante la capacidad de sustitución
que tienen estos frente a tecnologías anteriores (Balbridge, Se proponen dos clasificaciones tentativas de análi-
2015). Los debates que se han dado a lo largo de la región sis: en función del tipo y de la modalidad de uso. Se
muestran que la tecnología tiene diferentes facetas. En la pueden identificar tres principales categorías de usos: a)
Tabla 1 siguiente se puede ver una muestra de las fechas y innovadoras, donde los drones son usados para tareas en
temas de los debates abordados en la prensa sobre el uso las cuales la tecnología para visión aérea no era aplica-
de los drones. En esta lista se excluye de manera voluntaria da; b) sustitutorias, donde los drones reemplazan vuelos
las aplicaciones militares, las cuales han sido las que han tripulados, especialmente helicópteros; c) complemen-
impulsado la tecnología y cuya utilización tiene debates tarias, donde los drones complementan tanto otras tec-
éticos bien diferentes (como la legalidad de intervenciones nologías de visión aérea como tareas en suelo. Estas tres
en el extranjero). categorías de usos se dan en una diversidad temática que
se prepone ser resumida a cinco grandes modalidades de
Aunque es cierto que los usos civiles de drones más intervención tanto pública como privada: 1) monitoreo
conocidos son la fotografía por sus capacidad panorámica y supervisión, como por ejemplo en la gestión de obras
(Warren, 2014), se puede observar que hay una gran diver- o redes públicas, donde el objetivo no es esencialmente
sidad de aplicaciones (Bamburry, 2015). punitivo sino facilitador del manejo de los mismos; 2) con-
trol y vigilancia, como por ejemplo la observación de la
deforestación, la pesca o minería ilegal, la lucha contra el Como se puede observar a finales de 2015 son una mi-
contrabando en las fronteras, entre otros. En estos casos, noría en la región los países que han aprobado legislacio-
el objetivo primero es la lucha contra delitos; 3) recolec- nes específicamente destinadas al control de los drones.
ción de datos, especialmente para la toma de decisión, Es igualmente relevante especificar que en casi todos los
como la topografía o la arqueología. Uno de los usos más casos existen normas diferenciadas en función de la clasifi-
debatidos en los medios de Europa y Estados Unidos ha cación más común de los drones (pesos y alcance en km).
sido el del transporte. Sin embargo, éste es hasta ahora
anecdótico en razón de la baja capacidad de carga de los A este nivel uno de los precursores tanto regionales
drones no-militares. Eso no quita que ya haya evidencia como mundiales ha sido Chile quien incluye restricciones
de que el narcotráfico los está usando para pasar estupe- claras. Por un lado, todo individuo que desee operar con
facientes entre fronteras. drones debe portar una autorización emitida por la Direc-
ción General de Aeronáutica Civil de Chile (DGAC) además
La conclusión de la revisión de prensa sobre drones de una póliza de seguro que cubra el piloto, la aeronave y
arroja varias evidencias. Primero y la más evidente, es que terceros. La autorización puede ser revocada por la DGAC
América Latina está impulsando el uso de los drones en además de necesitar condiciones para el vuelo (buenas
una grandísima gama de tareas. Segundo, que la región condiciones meteorológicas, estar siempre en el campo
está innovando en algunas de sus utilizaciones por lo que de visión y control del operador). La normativa específica
América Latina está en la primera fila de los nuevos usos. igualmente que no se deben de violar los derechos, priva-
Tercero, no existen hasta el día de hoy evidencias estadísti- cidad e intimidad de los ciudadanos. Esta mención mues-
cas o estudios que hagan un balance de los resultados e tra que sí se entiende que hay límites al uso de los drones
impactos del uso de los drones. pero no quedan claros los límites y se sobre-entiende que
se aplican los conceptos y jurisprudencia chilena al respec-
Una vez descritas algunas de las particularidades sobre to.
los debates que se han dado en la región sobre los drones,
se pasa a revisar las legislaciones ya existentes en la región. Por su parte, Costa Rica ha llevado a cabo una reflexión
Lo cierto es que los países han elaborado sus propios mar- diferente, en la cual se propone prohibir ciertos usos co-
cos legales en espera de la regulación internacional que se merciales. Busca restringir o limitar (no en su totalidad) el
prevé para 2018. En la Tabla 2, se ofrece una revisión sintéti- uso de drones estableciendo zonas de vuelo, distancias en
ca de las mismas. relación a zonas sensibles (aeropuertos, no urbanos, lejos
de reuniones de personas al aire libre) y franjas horarias
(uso diurno). Cabe recalcar que la norma no tiene en cuen- de los Juegos Olímpicos (JJ.OO) de Río en 2016. A las preo-
ta ninguna regulación frente a la distancia que debe tener cupaciones clásicas se añade la de la lucha contra el trabajo
el controlador frente a la aeronave, ni contempla los deba- esclavizado que tanto fue criticado durante la construcción
tes éticos generados por el uso indebido de los aparatos. de las infraestructuras para el Mundial del fútbol de 2014.
En cuanto a Colombia se refiere, lleva ya aproximadamen-
Argentina, por su lado, presenta una circular diferente, te 6 años trabajando en un proyecto regulatorio bastante
puesto que ésta no emana de una entidad aeronáutica sino amplio que aspira a ser definitivo en 2018. No obstante, la
desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y más Circular que ya regula los drones establece los requisitos
concretamente la Dirección Nacional de Protección de Da- más comunes: necesidad de una identificación (operador
tos Personales. No se regula el uso de los drones per sé, sino y matrícula del aparato), obligatoriedad de una póliza de
el manejo de los datos que son recopilados o recolectados. seguro, distancias mínimas y áreas prohibidas para el so-
Se especifica que las personas que se vean involucradas en brevuelo, así como, la prohibición de cargas y aparatos de
una grabación tomada por un ANT, deben tener informa- más de 25kg.
ción que están siendo grabadas y ofrecer su consentimiento.
Esta normativa parte no tanto de los peligros físicos sino de Una vez revisados los debates relativos a los usos de
los debates éticos: el operador debe siempre, bajo esta nor- los drones sumado a las legislaciones latinoamericanas se
mativa, tomar extremas precauciones frente a la recolección pueden ofrecer cinco conclusiones. La primera es que mu-
de datos íntimos o de carácter sensible. chas de las legislaciones aprobadas son limitadas por tres
motivos principales: a) se espera que la legislación inter-
En el caso de México, la circular CO AV-23/10 R2, es- nacional de 2018 complete y homogeneice; b) los drones
tablece una serie de parámetros alineados con los demás tienen nuevos usos que superan los tiempos políticos, ha-
países que ya han implementado normativas para al uso biendo un ritmo de innovación elevado; c) no hay una cla-
de los drones. La circular se le aplica a todos los ANT que ra comprensión de las repercusiones del uso de los drones.
operen en México, así sean propiedad civil, comercial o del
Estado Mexicano. Hay pues una voluntad visible de enmar- La segunda conclusión es que no todas las legislacio-
car los usos inclusive que se podrían dar desde las políticas nes han integrado la dimensión ética (Gregory, 2011), dan-
públicas sub-nacionales y la circular es bastante general. do a entender que se aplican las condiciones estándares
Sin embargo, establece la prohibición de lanzar objetos de la protección de los datos y de la privacidad. La tercera
que puedan herir a otros, así como, la prohibición de so- conclusión es que existe un clima de opinión positiva y ap-
brevolar zonas no permitidas. Las limitaciones enumeradas ertura a esta nueva tecnología que se diferencia del debate
por la circular son pocas en comparación a las regulaciones de los usos militares vinculados al uso de los drones en las
de otros países y no trata de manera directa el debate ético. guerras de Irak, Afganistán, Paquistán o Yemen (Allinson,
2015). Paradójicamente si bien las normas buscan limitar
Además, de los países enumerados anteriormente, y fomentar la confianza en el uso de los drones, no esta-
existen otros dos países que están actualmente llevando a blecen límites claros a los usos por parte de las instancias
cabo la legislación sobre drones, a saber Colombia y Brasil. públicas. La cuarta conclusión es que las legislaciones no
De hecho Colombia ya ha emitido la primera Circular Re- prevén de manera clara las herramientas e instituciones
glamentaria (002) que pone los principios básicos para su que servirían para hacer efectivas las normativas (en breve,
regulación. Colombia y Brasil han tardado más que otros ¿quién y cómo aplica la legislación?).
países a pesar de haber sido de los primeros y más entu-
siastas usuarios de drones en América Latina. Se puede en- La quinta conclusión, casi todas las normativas se
contrar en la Tabla 3 una síntesis de los proyectos. derivan de una difusión de la innovación legislativa en
razón de procesos de imitación (entre países) así como
En Brasil el propósito de la legislación se relaciona di- fenómenos de aprendizaje (se mejoran las legislaciones de
rectamente con los desafíos de seguridad y organización otros países y desde la experiencia propia de las externali-
dades negativas) además de una cierta presión normativa ha buscado prevenir la delincuencia a través de la modifi-
(para responder a los condicionamientos desde fuera por cación de los patrones de comportamiento desde el mie-
conservar liderazgo). Los marcos legales estarían entonces do o preocupación por la observación (Lio, 2004; Ho, 2012).
en su mayoría en una lógica de innovación en su fase actu- El uso de CCTV es hoy muy amplio en países “occidentales”
al, con miras a ampliar lo ya hecho en unos años. como Suiza (Klauser, 2009) o Canadá (Lett, 2012).
Políticas de seguridad: cámaras vs drones A pesar de su gran difusión, existen continuos debates
Una vez ofrecido un panorama sobre el uso y regulación sobre su eficacia. Según un estudio elaborado entre otros
de los drones en la región latinoamericana, se puede pasar en Estados Unidos y el Reino Unido (Welsh y Farrington,
a brindar una reflexión sobre su inclusión en las políticas 2009), se demostró que este modelo es únicamente efec-
de seguridad. Este tema es especialmente interesante en tivo para un rango limitado de delitos. A este nivel, el
razón de las grandes expectativas que generan los drones CCTV serviría para reducir los robos y hurtos (con o sin vi-
frente a la ausencia de información sobre sus resultados e olencia) al existir un incentivo como lo es la observación
impactos a día de hoy. y obtención de material incriminatorio (Kohn, 2010). No
obstante, el CCTV no sería efectivo para algunos crímenes,
El evento central que modificó la perspectiva sobre especialmente los más violentos (Welsh, y O’Dell, 2010;
la seguridad es sin duda los atentados del 11 de septiem- Hemming y Hill, 2006).
bre 2001, los cuales supusieron una reconfiguración del
concepto tanto desde las herramientas, recursos como Aunque hay investigaciones que han comprobado la
dimensiones humanas relacionadas (Bustamante, 2002). existencia de un efecto del CCTV sobre el comportamiento
A partir de ese momento, la cuestión de la seguridad - como en una escuela, por ejemplo (Hope, 2009), y que
tendió a borrar las fronteras entre los fenómenos como la existen claras justificaciones etnográficas (Walby, 2005) o
delincuencia y el terrorismo, asimilando las condiciones y sociológicas (Lett, Hier, y Walby, 2010) que sustentan esta
razones a una respuesta similar ante fenómenos de con- evidencia, hay una multitud de factores por integrar para
trol social en términos de Foucault (Arriaga, 2008). A este entender su eficacia. Existen diferencias en los impactos
nivel, en los años 2000 la mayoría de las políticas de se- en razón de la diversidad en las prácticas culturales - espe-
guridad hacían particular énfasis en la policía y la calidad cialmente costumbres y preocupaciones (Monahan, 2011),
de vida de la ciudadanía (Briceño, 2009). No obstante, en o inclusive la arquitectura exterior (Goold, 2006) e interior
muchos países se han generado políticas diferenciadas (Hadyijanni, 2009). Estos factores son necesarios para pod-
en función de si se busca un concepto de seguridad ciu- er entender el uso de esta tecnología en América Latina,
dadana amplio, una prevención de la violencia y crimi- así como los debates sobre las tecnologías emparentadas
nalidad o si al contrario se busca un control y castigo de (como los drones).
dichos fenómenos. En la Tabla 4 se ofrece una síntesis de
las principales políticas o planes de seguridad implemen- En Latinoamérica, los modelos de CCTV han sido im-
tados en la región latinoamericana. plementados en grandes ciudades por medio de políticas
públicas. Para México y Centroamérica se hizo a través de
La Tabla anterior muestra que la seguridad es una te- la Iniciativa Mérida, también llamada Plan México en para-
mática omnipresente en la región y que es igualmente ha- lelismo al Plan Colombia que supuso una redefinición es-
bitual la cooperación internacional. Además, existen claras tratégica clara (Oehme, 2010). El propósito de dichas políti-
convergencias en los objetivos y los métodos aplicados. La cas ha sido la de luchar unidos contra la violencia, el crimen
gran mayoría de países ha implementado planes de desar- transnacional organizado y el lavado de activos. Dentro de
me, reestructuración y profesionalización de la policía, am- esta iniciativa (U.S Department of State, s.f ), se establece la
pliación de los efectivos y policialización de algunos cuer- cooperación económica por parte de Estados Unidos para
pos militares. En muchos casos el enfoque ha sido integral la adquisición de aparatos de vigilancia: drones, CCTV y
aunque con grandes problemas de complementariedad otras tecnologías de telecomunicaciones para luchar con-
con las políticas sociales destinadas a la prevención. tra estos tipos de crímenes (Turner, 2007).
Uno de los puntos en común a casi todas las políti- La expansión del uso del CCTV así como de los drones
cas ha sido que no se han usado de manera generaliza- lleva a una pregunta sencilla: ¿los drones sustituyen o
da los Circuitos Cerrados de Televisión (CCTV), en razón complementan las CCTV? ¿Los ANT sirven para las mismas
de sus altos costes y su bajo impacto aparente (Stedmon, finalidades? Hay que partir de una premisa: las cámaras
2011). Esta tecnología ha sido particularmente popular y son sistemas de disuasión que no son plenamente satis-
mediatizada en Inglaterra (Barnard-Willis, 2011), donde se factorios. Las capacidades de los drones son superiores al
de cámaras (aunque ya existan móviles, instaladas en car- hipótesis de que hay una postura legal contradictoria o in-
ros patrulla) aunque ambos deben de ser objeto de mon- completa de los países latinoamericanos.
itoreo. Hay cuatro diferencias claras que hacen a las dos
tecnologías complementarias y no competitivas. Existen tres razones de fondo por las cuales se da esta
situación. Por un lado, la trasposición del concepto de segu-
Las diferencias radican en: a) rapidez de despliegue de ridad ciudadana al ámbito normativo es extremadamente
drones; b) discreción de los ANT; c) uso temporal diferen- complejo (Carrión, 2002) puesto que hay una distancia entre
ciado; d) flexibilidad de los usos de los drones. El segundo la acción de las instituciones y la previsión o previsibilidad
es particularmente importante porque se puede suponer de la acción. Por otro lado, está la dificultad de establecer
que no existe de facto la modificación del comportamien- una relación efectiva entre las comunidades y la policía (Des-
to de los que son observados. Por ello mismo el factor de mond y Ungar, 2013), donde el equilibrio entre ambos acto-
disuasión y modificación del comportamiento solo existiría res es muy difícil de lograr en razón de desconfianzas. Estas
cuando los ciudadanos se saben vigilados por un dron. En el sólo pueden ser solucionadas a través de una modificación
caso de las cámaras hay mayor conciencia de que su simple de la relación de interdependencia (Gabaldón, 2007) entre
existencia genera más debate, como en el caso de las es- los actores como en el caso de las iniciativas de seguridad
cuelas (Taylor, 2010). Ahora bien, al no existir conocimiento humana en Argentina (Bonner, 2008).
exacto de cuándo se está siendo observado, puede que la
ciudadanía perciba que es observada continuamente. Esta Finalmente, el uso de los drones sigue estando estig-
opción sería solo realista si el ciudadano sabe de facto que matizado para muchos ciudadanos, los cuales lo asocian
es observado de manera regular por drones. directamente con el uso dado por Estados Unidos en su
intervencionismo militarizado (Wall y Monahan, 2011)
En este sentido, los ANT son una solución para eventos o las nuevas estrategias de seguridad globales (Richter y
pero no son una solución fija o que pueda ser constante en Webb, 2014). Regular de manera restrictiva los drones en
el tiempo. He aquí tal vez la principal diferencia: mientras la América Latina significaría dos cosas. Primero explicar a las
cámara trabaja en el largo plazo, el dron lo hace cuando es poblaciones qué se está haciendo y cómo, puede afectar
objeto de despliegue. Esto significa que el dron es usado a la eficacia de la herramienta (la opacidad facilita seguir
en un cálculo estratégico en un tiempo limitado, en el que actuando con un tiempo de adelanto). Segundo, cuanto
se valoran peligros particulares; la cámara es desplegada más se sepa más presiones habrán para regular, teniendo
de manera constante. Ahora bien, ambos tienen en común las normas restrictivas un coste de oportunidad muy alto
la delicadeza de su marco ético desde el punto de vista del para los posibles usos que aún no se dan pero podrían
uso de los datos. Sin embargo, los drones también tienen surgir, reduciendo el dinamismo que hay en las políticas
esa segunda diferencia: la capacidad de violar la privacidad, de seguridad en la región (Rodgers, 2013) y planteando el
es mayor al existir la posibilidad de la intencionalidad y fle- debate de la financiación cuyos esquemas ya han sido mo-
xibilidad del uso. Es decir, en el caso del dron el operador dificados en países como Colombia (Flores-Macías, 2013).
tiene una grandísima libertad de movimientos que no exis-
te con las cámaras. La experiencia tiende a confirmar estas La segunda hipótesis es que la gran panoplia de usos
cuatro diferencias. exitosos de los drones en ciertos sectores no garantiza que
puedan ser una solución en las políticas de seguridad. Ello
en razón de tres principales fenómenos. Primero, subsiste
Discusión de las hipótesis una clara paradoja: se está en una sociedad de la inmedia-
La primera hipótesis defendida aquí es que el marco nor- tez y de la observación, donde los ciudadanos ceden sus in-
mativo es insuficiente en América Latina, lo cual facilita y formaciones y datos de manera voluntaria a través de redes
aumenta el uso de dichos aparatos al tiempo que posterga sociales o inclusive programas de tele-realidad (Dubrofsky,
los debates sobre las derivas de su uso. Tras la exposición 2011). Además esa inmediatez es inclusive favorecida por
anterior se puede sintetizar: a) hay pocas legislaciones y las las nuevas tecnologías como los celulares, desde los cuales
existentes han sido aprobadas a posteriori del uso; b) las se sacan fotografías y vídeos (Timan y Oudshoorn, 2012)
normas no abarcan el espectro de temáticas pertinentes; modificando el concepto de vigilancia. Los drones perpe-
c) son muy permisivas; d) no tienen en cuenta las preo- túan una visión institucional de la seguridad mientras que
cupaciones éticas del uso de drones; e) no hay capacidad las nuevas tecnologías permiten una involucración de las
institucional para el control del uso (vuelos); d) no hay con- comunidades novedosa. Es decir, que la comparación en-
trol sobre la información obtenida en el sector privado y tre drones y CCTV es errónea; se trata de comparar el uso
no hay instancias de control de la información recopilada de los drones versus todas las posibles cámaras en manos
por las instituciones públicas. Se puede confirmar pues la de ciudadanos. Este fenómeno es claro por lo menos en Es-
Para terminar, se ofrecen tres recomendaciones Briceño, Y. M. (2009). Seguridad Ciudadana, Desempeño Policial y
concretas. La primea es que se ha de llevar a cabo un de- la Calidad de Vida en las Políticas Sociales. Revista Venezuela
bate público y experto sobre la dimensión ética del dron. de Economía y Ciencias Sociales, 37-47.
No hay que dar por supuesto que los ANT se insertan en Brooks, R. (2014). Drones and the International Rule of Law. Ethics
la misma discusión que las cámaras, puesto que esto se- and International Affairs, 83-103.
ría desconocer sus principales diferencias. Por ello, en el
Bustamante, F. (2002). Los Limites de la Seguridad . Nueva Sociedad,
caso de los drones, se debe hacer prueba de innovación y 94-98.
no simple incrementalismo. Segundo, las legislaciones no
pueden ser ni demasiado restrictivas ni demasiado permi- Capolupo, A., & Pindozzi, S. (2015). Photogrammetry for
sivas. Los ANT sólo serán útiles para políticas de seguridad Environmental Monitoring The Use of Drones and
si su uso se enmarca en un contexto de previsibilidad que Hydrological Models for Detection of Soil Contaminated by
deje espacio a la discreción. Tercero, los gobiernos han de Copper. Science of Total Environment, 298-306.
ser más transparentes en cuanto al uso de esta tecnología, Cargill, H. R. (2014). Reconnaissance Drones Their First Use in the
porque de no serlo estarían generando razones suplemen- Cold War. Air Power, 21-27.
tarias para un clima de escepticismo y desconfianza hacia
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