Auto Supremo #348
Auto Supremo #348
Auto Supremo #348
El Auto Supremo Nº 348, emitido por la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, con fecha 13 de
octubre de 2010, resuelve recursos de casación interpuestos por Luís Sebastián Claure Acuña y Ernesto Tirso
Zannier Vargas contra el Auto de Vista Nº S-529/2005 de la Sala Civil Primera de la Corte Superior de Distrito
Judicial de La Paz. El caso involucra un proceso ordinario sobre nulidad de contrato por simulación, donde Claure
Acuña demanda a John Tito Cayo, Lucy Huanca de Tito y Ernesto Tirso Zannier Vargas. La sentencia de primera
instancia declaró probada la demanda, anulando el contrato de reconocimiento de obligación. Sin embargo, el
Auto de Vista anuló obrados hasta la admisión de la demanda, argumentando contradicciones en los
fundamentos. La Corte Suprema, al analizar los recursos de casación, determina que los recurrentes no
comprendieron la naturaleza del Auto de Vista anulatorio y declara improcedentes los recursos de casación en el
fondo. Además, anula el Auto de Vista y ordena que el Tribunal de alzada resuelva conforme al artículo 236 del
Código de Procedimiento Civil, imponiendo una multa a los vocales que suscribieron el Auto de Vista recurrido.
se presenta un Auto Supremo (Nº 348) emitido por la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia de Bolivia el 13
de octubre de 2010. El expediente (Nº 141-06-S) involucra a Luís Sebastián Claure Acuña y John Tito Cayo en un
proceso ordinario sobre nulidad de contrato por simulación. El Juez de Partido en lo Civil y Comercial de La Paz
emitió una sentencia declarando la nulidad del contrato de reconocimiento de obligación. En apelación, la Sala
Civil Primera anuló los procedimientos y ordenó la regularización del proceso, imponiendo una multa al juez de
primera instancia.
Ambos demandantes presentaron recursos de casación, alegando errores en la interpretación de leyes civiles y
procedimientos. La Corte Suprema determina que los recursos de casación en el fondo son improcedentes, ya
que el Auto de Vista anuló los procedimientos y no emitió una sentencia sobre el fondo del litigio. Se destaca que
los demandantes no comprendieron la naturaleza de la resolución de alzada. A pesar de la deficiencia en la
presentación de los recursos, la Corte Suprema ejerce su facultad de fiscalización y analiza la admisibilidad de la
demanda. Se concluye que el Tribunal de alzada erróneamente consideró una contradicción en la demanda, y se
anula el Auto de Vista, ordenando al Tribunal Ad quem resolver conforme al artículo 236 del Código de
Procedimiento Civil. Se impone una multa a los vocales que suscribieron el Auto de Vista por el error incurrido.
RATIO DECIDENDI
El Tribunal de alzada emitió el Auto de Vista recurrido anulando obrados hasta fojas 30 vuelta inclusive, es decir,
hasta la admisión de la demanda. Lo hizo considerando que la demanda resulta contradictoria, ya que el actor
demandó la nulidad del contrato por simulación, pero entre los fundamentos expuestos, mencionó que los
demandados simularon y actuaron con dolo y mala fe al firmar el contrato. El Tribunal de alzada consideró que
esto constituía una contradicción, ya que la simulación es causal de nulidad, mientras que el dolo y la mala fe son
causales de anulabilidad. La Sala Civil de la Corte Suprema, al analizar el caso, concluye que no hay contradicción
en la demanda, ya que el dolo alegado por el actor se refiere a la mala fe con la que, según él, actuaron los
demandados al simular el contrato. El Tribunal Supremo establece que el dolo argumentado por el actor no se
refiere al dolo previsto por el artículo 554-4) del Código Civil, que es una causal de anulabilidad, sino a la intención
de perjudicar al actor al simular el contrato.
En consecuencia, la Sala Civil de la Corte Suprema anula el Auto de Vista recurrido y ordena que el Tribunal Ad
quem resuelva la alzada con sujeción al artículo 236 del Código de Procedimiento Civil, sin someter a turno al
proceso.
PRECEDENTE
Auto de Vista Nº S-529/2005
DESCRIPTOR
RESTRICTOR
Se anuló el Auto de Vista y dispuso que el Tribunal Ad quem, sin someter a turno al proceso, resuelva la alzada
con sujeción al artículo 236 del Código de Procedimiento Civil. Se impuso una multa a los vocales que suscribieron
el Auto de Vista por el error incurrido.
FORMA DE RESOLUCIÓN
El Tribunal Supremo, al analizar los recursos de casación, determinó la improcedencia de los recursos de casación
en el fondo, anuló el Auto de Vista y ordenó que el Tribunal Ad quem resuelva la alzada con base en el artículo
236 del Código de Procedimiento Civil.