Día Del Respeto A La Diversidad Cultural
Día Del Respeto A La Diversidad Cultural
Día Del Respeto A La Diversidad Cultural
El 12 de octubre de 1942 los europeos llegaron por primera vez a América, eso dio lugar a la
fecha que hasta el 2010 se conoció como el “Día de la Raza”. Pero que en la actualidad se
conmemora como el Día del Respeto a la Diversidad Cultural.
En toda América la diversidad cultural es una riqueza conformada por las personas cuyos
antepasados nacieron, crecieron y se desarrollaron en diferentes lugares de todo el continente,
conformando sus propias culturas. Toda persona tiene una identidad, una lengua, derechos,
patrimonios e historias que pueden ser diferentes pero que deben ser conocidas y respetadas,
aunque no sea compartida.
Bajo la premisa de que todos somos iguales en la medida que somos diferentes, cada cultura
enriquece a todos. Por ello, el desafío es aprender a escuchar, a no discriminar, a aceptar la
diversidad y la libertad sin causar daño. El objetivo es promover desde distintos organismos una
reflexión permanente acerca de la historia y encaminar hacia el diálogo para una diversidad
cultural que haga hincapié en la promoción de los Derechos Humanos de los pueblos originarios,
dando la garantía del respeto a la libertad.
Una verdadera fecha para recordar, celebrar y trabajar para el bienestar de todas
las culturas. Se trata de una fecha que habilita actualmente profundas
reflexiones y debates, como también expresa las reivindicaciones de los pueblos
originarios del continente americano.
La realidad es que, al momento de la llegada de Cristóbal Colón, las tierras que hoy se llaman América
ya estaban pobladas por nativos que estaban organizados en diferentes grupos y que tenían su propia
cultura, su lengua, su religión, sus tradiciones y, en el caso de los que eran sedentarios, su territorio.
Existía también una historia para cada uno de estos pueblos que incluía batallas y conquistas, y, aunque
no todos habían desarrollado sistemas de escritura, todos tenían una lengua. Casi todas esas lenguas
fueron activa o pasivamente silenciadas y con ellas se acallaron las historias de los pueblos originarios y
sus formas de concebir y ver el mundo.
El cambio de nombre de la efeméride del 12 de octubre a “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”
tiene como objetivo hacer que tomemos conciencia de dos necesidades urgentes para mejorar el futuro
de América. Una de ellas es la de recuperar y reconstruir aquellas historias y visiones de mundo
silenciadas. No porque se las pueda hacer revivir una vez que sus pueblos han desaparecido, pero
tampoco para ponerlas en un museo, sino para que nos ofrezcan otras formas de ver el mundo y el
continente que podrían llegar a mejorar el rumbo de nuestra historia. La segunda necesidad es la de
mirar y ver a aquellas culturas de los pueblos originarios que, diezmados, desplazados e integrados en
mayor o menor medida a la cultura europea, siguen existiendo; con el fin de aprender a tenerlos en
cuenta no como elementos de “color local” sino con el respeto que merecen"
En una fecha tan particular, clave en la historia no sólo de nuestro país, sino de
toda la historia mundial, cabe reflexionar. ¿Qué entendemos por diversidad? ¿Y
por respeto?
Siguiendo a Silvia Duschatzky y Carlos Skliar: “La representación de los otros está
atravesada por una búsqueda permanente de eufemismos (mejores o peores) de
denominar la alteridad. Sin embargo, esas formas no son neutras ni opacas y
generan consecuencias en la vida cotidiana de esos otros” (3). En el artículo “La
diversidad bajo sospecha: Reflexiones sobre los discursos de la diversidad y sus
implicancias educativas”, Duschatzky y Skliar repasan distintas maneras de
entender, respetar o interactuar con aquellos que consideramos “otros”.
La primera perspectiva sostiene una mirada condenatoria sobre los otros que da
lugar a la eliminación y el control de lo diferente. Desde esta perspectiva se ve lo
distinto como una amenaza, como la condensación de aquello que se rechaza. Es
esta la mirada colonialista, una mirada de exterminio o conquista.
Desde una segunda perspectiva, los otros son vistos como “sujetos plenos de una
marca cultural”. El problema de esta perspectiva es considerar la identidad como
un elemento estable y único. Así, los otros aparecen “enmarcados en fotos,
pinturas, músicas, teatros, banderas, fiestas escolares” (9). Pero la verdad es que
la identidad es mixta, de múltiples identificaciones, móvil, variable. La reflexión
sobre lo diverso nos obliga a ir más allá del folklorismo y la mirada “purista”, para
entender las identidades en el marco de relaciones sociales y de poder.
El 12 de octubre rememora un encuentro que signó (y signa hasta hoy) una manera
de relacionarnos, el colonialismo. Que esta fecha sea una invitación a re-inventar
la manera de encontrarnos con lo diferente, una apuesta a una genuina relación
con lo “otro”.
Los invitamos a leer el artículo completo de Silvia Duschatzky y Carlos Skliar “La
diversidad bajo sospecha: Reflexiones sobre los discursos de la diversidad y sus
implicancias educativas”
en: http://www.porlainclusionmercosur.educ.ar/documentos/Ladiversidadbajososp
echa.pdf