Hora, Roy Terratenientes - Empresarios - Industriales
Hora, Roy Terratenientes - Empresarios - Industriales
Hora, Roy Terratenientes - Empresarios - Industriales
EMPRESARIOSINDUSTRIALES
TERRATENIENTES,
Y CRECIMIENTO
INDUSTRIALEN LAARGENTINA:
LOS ESTANCIEROSY EL DEBATE
SOBRE EL PROTECCIONISMO(1890-1914)*
ROY HORA**
politica (o, alternativamente,de medios eficaces para hacer sentir sus demandas).
Como consecuencia de esta debilidad, la politicaecon6mica en el periodo anteriora la
decada de 1930 habria resultado indiferenteo declaradamente hostil al desarrollo
manufacturero,salvo en aquellos casos en que este se vinculaba a la exportaci6n de
bienes de origenrural.Paraesta visi6n,el estado, controladoporlos grandes propietarios
territoriales,habriafavorecido aquellas politicas librecambistas que profundizabanla
vinculaci6n de la economia argentina con los paises industrializadosdel hemisferio
norte,por Ioque la protecci6na la industriahabriaencontradoescaso eco en las esferas
oficiales. Elestudio de las politicasarancelariasy de las actitudes frentea la protecciOn
aduanera ofreci6 un campo privilegiadopara el desarrollode estas hipOtesis.Asi, se
argument6 reiteradamenteque las pollticas arancelariastenlan por objeto principalel
financiamientodel estado y no la protecci6ndel sector industrial'.
En los atos setenta, una interpretaciOnalternativacomenzd a desafiar esta visi6n
"pesimista". Paraesta nuevalineaargumentalno habrianexistidomayorescontradicciones
entre expansi6n agraria y crecimiento industrial. Dentro de esta perspectiva, es
conveniente seralar la existencia de dos vertientesde interpretaciOn: una inspiradapor
la teoriadel bien primarioexportabley los desarrollosde la economia neocl~sica, y otra
tributariadel pensamiento marxista.La primeraha prestado escasa atenciOn a los
actores que protagonizaronel proceso de crecimiento industrial.Sus principales
contribucionesponen de manifiestolos efectos multiplicadoresdel proceso de expansion
agraria sobre el conjunto de la economia argentina, Ilamando la atencibn sobre la
correlaci6nentre el crecimientode las exportaciones y el desarrollode la industria.A
diferenciade la visiOndominanteen las decadas previas, los autores enrolados en esta
Ilnea interpretativaargumentaronque los limites del proceso de industrializacibnno
tuvieronsu origen en factores sociales o politicos, sino econsmicos: el
limitado b.sicamente
del mercado, la ausencia de fuentes de energia y minerales, etcetera2
tamaro
Es comprensible que los investigadores influidospor la teoria del bien primario
exportable y la economia neocl~sica no se interesaranen el estudio de los grupos em-
presarialesque impulsaronel desarrolloindustrialargentino.Este aspecto atrajola aten-
ciOnde la otra vertienteinterpretativaque se mostrOcriticade la visi6n "pesimista".Los
investigadores cuya inspiraci6nprovienedel marxismoarribarona la conclusion de que
la experiencia argentinailustrano tanto una oposicibn entre empresarios industrialesy
terratenientescomo la conformacidnde una Onicay poderosa clase empresaria que
SV~ase, por ejemplo, Aldo FERRER: La economia argentina. Las etapas de su desarrollo yproblemas actuales
(Buenos Aires, 1963); Guido DITELLA y Manuel ZYMELMAN: Las etapas del desarrollo econ6mico argentino (Buenos
Aires, 1967); Oscar CORNBLIT: "Inmigrantes y empresarios en la politica argentina", Desarrollo Econ6mico, 6:24
(1967); Roberto CORTES CONDE: "Problemas del crecimiento industrialargentino. 1880-1914", en Torcuato DITELLA y
Gino GERMANI: Argentina sociedad de masas (Buenos Aires, 1967); Roberto CORTISCONDE:"Elboom argentino:
Luna oportunidad desperdiciada?", Rivista Storica Italiana (1965), reproducido en Torcuato S. DI TELLAy Tulio
HALPERIN DONGHI (editores): Los fragmentos del poder (Buenos Aires, 1969); Carl E. SOLBERG: "Tariffsand Politics in
Argentina, 1916-1930", Hispanic American Historical Review, 53:2 (1973); Jos6 PANETTIERI: Aranceles y proteccidn
industrial, 1862-1930 (Buenos Aires, 1983).
2 V6anse los agudos e influyentes trabajos de Ezequiel GALLO:"AgrarianExpansion and IndustrialDevelopment
in Argentina (1880-1930)", en Raymond CARR(editor): Latin American Affairs. St Antony's Papers (Oxford, 1970)
(reproducido como "Laexpansi6n agraria y el desarrollo industrial en Argentina (1880-1930)", en Anuario IEHS, 13
(1998)) y Carlos F. DIAZALEJANDRFO: Essays on the Economic History of the Argentine Republic (New Haven, 1970).
Lucio GELLER ofreci6 un abordaje mbs convencional basado en la staple theory en su "Elcrecimiento industrial
argentino y la teoria del bien primarioexportable", El TrimestreEconbmico, 37 (octubre-diciembre 1970).
3 Milciades PEVA:Industria, burguesia industrialy liberacidn nacional (Buenos Aires, 1974); Jorge Federico
SABATO: La clase dominante en la Argentina moderna: Formaci6n y caracteristicas (Buenos Aires, 1988); Jorge
SCHVARZER ha ofrecido la visi6n m~s completa de esta perspectiva. V~anse sus Bunge y Born. Crecimiento y
diversificaci6n de un grupo econ6mico (Buenos Aires, 1989); Un modelo sin retorno (Buenos Aires, 1993); "Politica
industrial y entorno macroecon6mico. Apreciaciones sobre la politica arancelaria argentina a comienzos del siglo
XX",Boletln Techint, 275 (1993); La industria que supimos conseguir (Buenos Aires, 1996).
4 Una introducci6n a este debate en Juan Carlos KOROL e Hilda SABATO: "Incomplete Industrialization:an
Argentine Obsession", Latin American Research Review, 25:1 (1989). V6ase tambidn Fernando ROCCHI: "Enbusca
del empresariado perdido: los industriales argentinos y las tesis de Jorge Federico Sdbato", Entrepasados. Revista
de historia, V:10 (1995), y Maria In6s BARBERO: "Elproceso de industrializaci6n en la Argentina: viejas y nuevas
controversias", en Anuario IHES, 13 (1998).
6 Sobre la crisis de Baring, v6ase Alec FORD:"Argentinaand the Baring Crisis of 1890", Oxford Economic
Papers, VIII(1956); Roberto CORTfSCONDE:Dinero, deuda y crisis. Evolucidn fiscal y monetaria en la Argentina
(Buenos Aires, 1989); Henry FERNS:Britainand Argentina in the Nineteenth Century (Oxford, 1960); y The Baring
Crisis Revisited", Journal of LatinAmerican Studies, 24:2 (1992).
7 Jorge SCHVARZER: Empresarios del pasado, p. 37; FERNS: Britainand Argentina; Fernando ROCCHI: Building
a Nation, Building a Market: Industrial Growth and the Domestic Economy in Turn-of-the-centuryArgentina, tesis
doctoral in6dita, Universidad de California,Santa Barbara (1997); DORFMAN: Historia, p. 136.
8 Ezequiel GALLO: Pellegrini(Buenos Aires, 1997), pp. 36-9. Tambi6n Donna GuY:"Carlos Pellegrini and the
politics of early industrializationin Argentina, 1876-1906", Journal of LatinAmerican Studies, XI:1 (1979).
9 Warren DEAN:The Industrializationof Sao Paulo, 1880-1945 (Austin, 1969); DIAZALEJANDRO: Essays, p. 69;
GALLO: "AgrarianExpansion".
O10Eusebio E. GARCLA: "Censo de las Industrias nacionales", en Censo Nacional de 1914, Tomo VII(Buenos
Aires, 1917), p. 17.
1' Roberto CORT•SCONDE: La economia argentina en el largo plazo (siglos XIXy XX), (Buenos Aires, 1997),
pp. 230-1. Dimas HELGUERA brinda testimonio del avance de la industria en su La produccidn Argentina en 1892
(Buenos Aires, 1893).
12ROCCHI: Building, cap. 1.
13 The Review of the River Plate, (citado en adelante como RRP), 6 junio 1896, pp. 5-6.
14DIAZALEJANDRO: Essays, pp. 209-214; VictorBULMER-THOMAS: The Economic History of LatinAmerica since
Independence (Cambridge, 1994), pp. 130-149.
mayores rechazos de los voceros rurales,ya que consideraban que debia su existencia
a politicasproteccionistasque s61oservianparaerigirindustriasineficientes,dependientes
de la ayuda estatal. "Lasmuchas f~bricasfundadas en estos tltimos tiempos",sostenia
un artlculoaparecido en los Anales de la Sociedad RuralArgentinaen 1895, "llevanuna
vida precaria, a pesar de la protecci6n que han recibido en diversas formas ... esas
tentativas, en muchos casos loables, s61o han servido para distraer de ocupaciones
proficuas los esfuerzos y la actividad de hombres energicos"15.Se ha insistido
mas
demasiado en torno al problemadel caracter "artificial" de estas industrias,por lo que
conviene remarcarque para los empresarios rurales,el principalpunto de conflicto no
se referiaa la "ineficiencia"
de la industriaque competia con la producci6n extranjera.
Por sobre todas las cosas, a los estancieros les preocupaba que las tarifasaduaneras
que protegiana estas industriasconcitaranrepresaliascontralas exportaciones rurales.
En particular,temian que los paises extranjerosque comerciaban con la Argentina
reaccionaran a los obst~culos que encontraban sus exportaciones reduciendo sus
compras de bienes pampeanos.
Estos temores no resultaban infundados. Aun cuando los obstAculos a la libre
circulaci6n de mercancias eran entonces menos severos que despues de 1930, la
economia internacionalno carecia de barrerasal intercambio,que por otra parte se
encontraban en avance. En esos aios, adems, el principalmercado para las expor-
taciones argentinas no era Gran sino Europacontinental.La lana, el principal
Bretara
productode exportaci6nde la repiblica, iba dirigidafundamentalmentea los mercados
de Francia,Alemaniay B6lgica16.A diferenciade GranBretana,donde el compromiso
de las clases dominantescon el librecambioera firme,los paises continentales estaban
decididos a proteger sus sectores agricolas de la competencia extranjera17.Al mismo
tiempo, en los noventa se produjouna caida en el valor de las compras externas,
aros
producto de la crisis econ6mica general, pero que sin duda no pas6 inadvertida,y que
cre6 inquietudentre los principalessocios comerciales de la Argentina.Eneste contexto,
la amenaza de represalias comerciales pareci6 cercana. Las voces de alarma no se
hicieronesperar, y los terratenientescomenzaron a protestarcontra el proteccionismo.
En 1893, por ejemplo, poco antes de tratarsela ley de aduanas, la Liga Agraria,una
asociaci6n de grandes propietarios,elev6 una petici6nal Congreso Nacionalreclamando
la reducci6n de los aranceles aduaneros'8. Peticiones de este tipo no surtieronmayor
resultado, Io que Ilev6 a El EconomistaArgentinoa lamentarse de que "lasprovincias
ganaderas y agricultorasdel litoral,que son las que en ms grande escala concurrenal
aumento de la riquezay a la formaci6nde la renta, son las peor tratadas, desde algon
tiempo, por el Congreso"'19.Los temores de los ruralistasse volvieronmas acuciantes en
15V6ase por ejemplo, Melchor G. ROM:"Protecci6n bien entendida", Anales de la Sociedad Rual Argentina
(citado en adelante como ASRA) XXX:12, 1895, pp. 338-41.
16 Hilda SABATO:Agrarian Capitalism and the WorldMarket. Buenos Aires in the Pastoral Age, 1840-1890
(Albuquerque, 1990), pp. 194-200, y Francisco LATZINA: "El comercio argentino antario y hogatio", en Censo
Agropecuario Nacional. La ganaderia y la agricultura en 1908. Tomo Ill. Monografias (Buenos Aires, 1909), pp. 561-
610.
'7 Avner OFFER:
The First World War:An Agrarian Interpretation(Oxford, 1989), pp. 95-6.
18 Diario de Sesiones de la Cdmara de Diputados de la Nacidn (en adelante citado como DSCDN), 30
octubre 1894, pp. 362.
19 SPECTATOR: "Las provincias ganaderas y las leyes de aduana", El Economista Argentino (citado en
adelente como EEA), 11 noviembre de 1893, p. 3.
externos. Porsi todo esto fuerapoco, la Crisisdel Noventacontrajoel creditoy una gran
sequla, la mds severa en treintaaros, devast6 la campaia de Buenos Aires en 1893 y
189429. La evoluci6n de los precios de la tierraindica las dificultades del sector, asi
como el animo con que eran encaradas. Tras una decada de incrementosostenido, a
fines de los ochenta el precio de la tierrase vino abajo. De acuerdo a los calculos de
HerbertGibson, los precios de la tierraen la provinciade Buenos Aires cayeron mas del
sesenta porciento entre 1889 y 1891, y desde entonces permanecieronbajos por tres o
cuatroanros30.Muchos estancieros de peso enfrentarongrandes dificultades,y algunos
de ellos directamentefueron a la quiebra31.El sentimientode malestar se encontraba
generalizado. "Gentesque uno suponia muy rica",el ex presidente Juarez Celman era
informadopor uno de sus corresponsales a comienzos de los aros noventa, "estan
luchando para sostenerse un tiempo mas, con la esperanza de que aumente el valorde
las tierraso papeles, para liquidarsin tanto desastre"32
Eneste contextode crisis, la "inquietud
de los hacendados ante la amenaza del im-
puesto al tasajo"33,y de modo mas general sus temores frentea la posibilidadde repre-
salias comerciales dieron impulsoa una camparia librecambistaque encontr6 eco en
diversos medios de prensa. En 1894, El Campoy el Sportcomenz6 a alertarcontra los
peligros del proteccionismo,y WalkerStegman Ilam6insistentementea lanzaruna cam-
para para reducirlos aranceles aduaneros. "LaSociedad Rural", afirm6Stegman, "es la
Ilamadaa tomarla iniciativaen un movimientode esta naturaleza"'34. Un poco mas tarde,
el general Mitrey sus seguidores, alejados de la politicadel Acuerdo, se dedicaron a
agitar la bandera del librecambiocon mayorvehemencia. En 1896, el diarioLa Naci6n
dio a conocer un par de editorialesen las que convocaba a estancieros y agricultoresa
comenzar "unaactiva camparia politicacontrael actual regimen aduanero".Un partido
librecambista,afirmabaLaNaci6n,"debecongregar cuanto antes a los capitalistas de la
industriarural"35.Otros6rganos de prensa, como EEconomistaArgentinoyla Reviewof
the RiverPlate se sumarona esta camparia,y ofrecieronpuntos de vista similares36.En
sintesis, la decada de 1890 dio lugar a la constituci6n de un clima favorable para la
emergencia de una fuerza librecambistalideradapor productoresrurales.
29Noel H. SBARRA:
Historiadel alambradoen la Argentina(BuenosAires,1964),pp. 29-31.
3 Herbert GIBSON:
The History and Present State of the Sheep-Breeding Industry in the Argentine Republic
(BuenosAires, 1893),p. 96.
31EzequielGALLO: Lapampagringa(BuenosAires,1983),pp. 183-5.
32GregorioTorresa JuLrezCelman,en AgustinRVERA ASTENGO:JuarezCelman(BuenosAires,1944),pp. 557.
33DSCDN,9 noviembre1894,pp. 488.
34WalkerSTEGMAN: ElCampoy el Sport(enadelantecitadocomo
"Elproteccionismoy las industriasrurales",
ECS),21 agosto 1894, p. 2511. Tambi6n"Peligrosdel proteccionismo", ECS, 14 agosto 1894, p. 1485;"Lasaltas
tarifasy las industriasrurales",ECS,1Pdiciembre1894, p. 1883;"Losderechos de exportaci6n", ECS,8 diciembre
1894, p. 2907.
35LaNaci6n,5 agosto 1896,p. 5. TambienLaNacibn,27 julio1896,p. 3.
36Vease, porejemplo,JoaquinM.Ruiz:"LDeben los partidospoliticosdefinirsus ideales econ6micos?",EEA,
4 agosto 1894, pp. 2-3.
37 Sobre este punto me permito remitira mi The Landowners of the Argentine Pampas. A Social and Political
History, 1860-1945(Oxford, en prensa), capitulos IIy IIl.
38 Ezequiel GALLO: "AgrarianExpansion"; Ernesto LACLAU: "Modos de producci6n, sistemas econ6micos y
poblaci6n excedente. Aproximaci6n hist6rica a los casos argentino y chileno", Revista Latinoamericana de Sociologra,
5 (1969). V~ase tambin Alfredo PUCCIARELU: El capitalismo agrario pampeano, 1880-1930 (Buenos Aires, 1986).
39 DSCDN, 9 noviembre 1894, p. 491.
54 Felipe G. SENILLOSA: "Partidos econ6micos. Su formaci6n",en Boletin de la Liga Agraria, 11:15,31 marzo
1898, pp. 239-31.
55 SPECTATOR: "Las provincias ganaderas y las leyes de aduana", EEA, 11 noviembre 1893, p. 3. Tambi6n
JUNIUS:"Legislaci6n rentistica. Los politiqueros y la riqueza p6blica", EEA, 7 enero 1899, p. 1.
56 Citado en Carlos R. MELO: "Los partidos politicos argentinos", Historia Argentina contempordnea (1862-
1930), vol. II, (Buenos Aires, 1967), p. 97.
tarde, para 1903, 6stas hablan caido a s6lo el 6 por ciento65. Al mismo tiempo, los
nuevos bienes exportados (la carne en especial) se orientabancrecientemente no hacia
los mercados protegidos de Europa continental sino hacia la librecambista Gran
Bretafia.En 1905 el diputado proteccionistaVarelaOrtizpodia afirmarsin temor a ser
desautorizado que "laRepiblica Argentinapuede perfectamente bien desenvolver su
industriaganadera sin necesidad del mercado frances ... el mercado de Inglaterra..
absorbe con facilidad la mayor parte de nuestra producci6n"66.Como resultado de
estos cambios, a los que la expansion de la producciOn granifera contribuy6
decisivamente, para comienzos del siglo veinte las exportaciones argentinas se
convirtieron,juntocon las mexicanas, en las m~s diversificadasde AmericaLatina,tanto
por la variedad de bienes exportados como por su destino final67.En este contexto, la
amenaza de represalias comerciales se volvi6 menos peligrosa que a comienzos o a
mediados de la decada anterior,hasta prlcticamente desaparecer. La Uni6n Industrial
Argentina no perdi6 la oportunidad de seralarlo. Denunciando la falsedad de las
predicciones en torno de las represalias comerciales, en 1912 este vocero industrial
podia sostener confiadamente que "desde hace veinte afos viene agitandose
peri6dicamenteese fantasma,sin que en tantotiempose haya logradonunca cohonestar
el fundamentodel temorcon un sOlohecho concreto'8.
Desaparecida o atenuada la amenaza de represaliascomerciales, el efecto nega-
tivode la protecciOnaduanera sobre la economia de exportaci6nresultabamenos daii-
na de lo que algunos terratenientessostenian. Al afectar el precio de los productos de
consumo importadoso producidoslocalmente,la protecci6nactuaba como un impuesto
sobre el consumo. Por ello, su peso recaia con mayorfuerza sobre los miembros m~s
pobres de la sociedad argentina.Es cierto que el aumento del costo de los bienes de
consumo populardeterminadopor la tarifaaduanera incidiasobre los niveles salariales
ruralesy urbanos, y afectaba el precio de los productos de exportaci6n.Sin embargo,
para los empresarios las consecuencias nunca fuerongraves, pues el sector de expor-
taci6n no hacia un uso intensivodel factortrabajo.Al mismo tiempo, el sector ruralreci-
bia un tratamientopreferencial,ya que sus principalesinsumos importados(maquinaria
agricola, semillas, alambrey reproductoresde pedigree) estaban eximidos o pagaban
derechos muybajos69.Las exportacionesruralesno sufriangravamenes de magnitud,y
desde 1906 fueronliberadas de impuestos. Eldiputado Francisco Oliverno se equivo-
caba cuando afirmabaque un sistema tributariode estas caracteristicas"es un sistema
perfectamente calculado para hacer liviano,casi insensible, el tributoalas clases mas
poderosas"70o
Lo que es ms importante,el entusiasmo de los estancieros por el librecambio
siempre result6morigeradoporque sus voceros mas inteligentesadvertianbien que el
gobierno federal debia recaudar recursos, y que cualquieralternativaa los impuestos
sobre las importacionesera en definitivamas peligrosa. Es comprensible que las Ini-
cas alternativasreales a los gravamenes a las importaciones, los impuestos a las
mayoria, los grandes propietarios rurales pampeanos recibieron a Roca con mas
simpatlaen 1898 que en 1880. Para el cambio de siglo, las dificultadesque las clases
altas portefas hablan experimentadoen 1880 para adaptarse a la aparici6n de una
nueva y poderosa elite politicavenida del interiordel pais eran un recuerdo del pasado.
Roca ya no era visto como el hombreque habia derrotadoa Buenos Aires por la fuerza,
enviando a la muertea muchos hijosde la provincia.Mas bien, la opini6npredominante
entre las clases propietariasIo seialaba como el Conquistadordel Desierto y como el
hombreque habiacontribuidocomo nadie a traeruna decada de inusitadaprosperidad.
Despues de largos aros de inestabilidadpolitica,estos logros comenzaban a ser bien
apreciados. Como seralaba ElCampoy el Sport,la primeramitadde la decada de 1890
habla mostrado que todas las alternativasal dominioen solitariodel PAN, en lugar de
proporcionaruna mejorsoluci6n a los problemasde los terratenientes,habian ayudado
a hundirel pais en una crisis politicade gran hondura,que amenaz6 disolver los logros
de la decada anterior77.El EconomistaArgentinoofrecia una visi6n similar.Con mayor
pertinenciaque neutralidadseialaba que "lagran mayoriade la opini6nconservadora
del pais, cansad[a] de agitaciones y de promesas que nunca se realizan, tiene
necesariamente que mirarcon mejores ojos a los que han dado repetidas pruebas de
aptitudesgubernamentales"78. Elpleno reingresode los "opini6nconservadora"
terminos
y "clases conservadoras"en el vocabulariopoliticoargentinode las decadas finales del
siglo, una novedad de los tormentosos anos noventa, ofrece una prueba adicional de
este cambio en el clima de opini6n, que por cierto no era exclusivo de los circulos
terratenientes.Una garantiade orden interno,el Generaltambienacrecent6 sus apoyos
debido a la amenaza de un conflictointernacionalcon Chile.
Es necesario enfatizar que no se trataba s61o de que los propietarios rurales
habian cambiado su visi6n sobre el liderdel PAN. El propio Roca tambien se mostr6
dispuesto a ganarse el favor y el apoyo de este grupo social. A poco de acceder al
gobierno, el nuevo presidente impuls6 una reformade la Constituci6nque aument6 el
nOmerode ministeriosy otorg6 al Departamentode Agriculturarango ministerial.Emilio
Frersfue elegido para presidirlos destinos de la nueva repartici6n.Roca tambien invit6
a dos directivos de la Sociedad Rurala incorporarse a la lista de candidatos de
diputados nacionales de su partido. Este intentode ganarse el favor de los circulos
terratenientesfue ampliamentepublicitadopor la prensa roquista."Despertamosal fin
de nuestra larga siesta criolla,y nuestros estadistas, la prensa y el Congreso se ocupan
preferentementede cuestiones de vitalinteres",anunciaba Tribuna."Hombresj6venes,
miembros de las asociaciones rurales,conocedores y representantes de los intereses
ganaderos que es tiempo ya de tutelar"79,continuaba el vocero roquista, estaban
expresando las necesidades de este sector de la producci6nen la Camarade Diputados.
Finalmente,al inaugurarlas sesiones parlamentariasde 1899, Roca se comprometi6 a
no impulsarla politica proteccionista. Los argumentos esgrimidos para sostener esta
posturaseguramente sonaronbien en los oidos de los estancieros, pues coincidlan con
los que los voceros ruralistashabianestado sosteniendoen anteriores."Elmovimiento
aros
industrialen el mundo",afirmabaRoca:
77 ECS, 18 octubre 1898, p. 825.
78 EEA, 17 julio 1897, p. 1.
79 Tribuna,22 julio 1898, p. 1.
83 Victor BULMER-THOMAS: The Economic History of Latin America Since Independence (Cambridge,
"Industryin LatinAmerica before 1930",en L. BETHELL
1994), pp. 144-5; Colin LEWIS: (editor), Cambridge History,vol.
IV,p. 320.
84 BUIA,XI11:373,20 enero 1900, p. 2.
85 LIxKLETT: "Comercio Internacional",LPA,24 abril 1896, reproducido en LlXKLETT: Estudios, pp. 338-9.
86 LIXKLETT: Estudios (1897), p. 495.
87 lntereses econ6micos", LPA, 12enero 1899, reproducido en LlxKLETT: Estudios, p. 541-2.
88V6ase BUIA,junio 1900, XIV:378,pp. 1-19, ASRA,XXXV:5,31 mayo 1900, pp. 103-17; La Prensa, 19 mayo
1900, p. 5; RRP, 26 mayo 1900, p. 10.
d. Conclusiones
Durantelas iltimasdos decadas del siglo XIXla Argentinaasisti6 a la emergencia
de un sector industrialmodernode ciertas proporciones,y de politicasque, ademas de
atender problemas fiscales, estaban orientadas a favorecer su crecimiento. Estas
medidas, que tenianporinstrumentoprivilegiadola tarifaaduanera,no resultanasimilables
alas politicas proteccionistas que se volvieroncorrientes desde la decada de 1930
(que, amen de aranceles mas altos, incluyen tambien barreras paraarancelarias y
politicasde precios que transfierenrecursosentresectores), mas expresamente dirigidas
a impulsarel desarrollo industrial.De todas maneras, es preciso sefialar que en su
propiocontexto,estas tarifaseranpercibidascomo barrerasal intercambioque contribuian
a proteger determinadas actividades manufacturerasy agroindustriales.Este protec-
cionismo del cambio de siglo expresaba y era impulsado por una amplia red de
intereses politicos. En el atrasado interiordel pals, el mismo encontraba defensores
decididos entre las oligarquiasprovinciales,que aspiraban a proveer al gran mercado
litoralcon sus producciones regionales, vinculandose de este modo a los beneficios
que la economla de exportaci6nvolcaba sobre las areas mas pr6speras del pals. Estos
grupos estaban profundamenteimplantadosen la estructurade poder de la Repiblica
Oligarquica.Enlas provinciaspampeanas y litorales,en cambio, se hacia notarel poder
de los grupos sociales vinculados a la economia de exportaci6n. En esta regi6n se
encontrabanlos grupos propietariosmAsricos del pais, los grandes terratenientesde la
pampa. Estos coronaban un sector ruraldiversificado,que incluiaun gran nOmerode
RESUMEN
SUMMARY
REGISTROBIBLIOGRAFICO
HORA,Roy
Terratenientes,empresariosindustrialesy crecimientoindustrialen la Argentina:los estancieros y el
debate sobre el proteccionismo(1890-1914)".DESARROLLO ECONOMICO - REVISTA DE CIENCIAS
SOCIALES(Buenos Aires),vol. 40, N2 159, octubre-diciembre2000 (pp. 465-492).
Descriptores: <Historiasocial> <Historiaecon6mica> <Terratenientes><Empresarios><lndustriales>
<Estancieros><Proteccionismo><Crecimiento><Argentina>.