Accidente Cerebrovascular
Accidente Cerebrovascular
Accidente Cerebrovascular
CEREBROVASCULAR
INTEGRANTES:
MARIANA ARACELI ENCINAS MONTECINOS
DOCTOR:
PEDRO HUMBERTO ALI ENCINAS
GESTIÓN:
2023
ACCIDENTE CEREBROVASCULAR
DEFINICIÓN
El ictus o accidente cerebrovascular (ACV) es una afección médica en la que el flujo
sanguíneo deficiente al cerebro produce muerte celular. Se consideran sinónimos infarto
cerebral, derrame cerebral o, menos frecuentemente, apoplejía o ataque cerebrovascular.
Según la Organización Mundial de la Salud los ACV son, junto a la enfermedad de las arterias
coronarias, las principales enfermedades cardiovasculares. El mismo organismo internacional
estima que en 2015 murieron 17,7 millones de personas a causa de las enfermedades
cardiovasculares. Del total de estas muertes, 6,7 millones corresponden a los ACV.
En la década de 1970, la Organización Mundial de la Salud definió el accidente
cerebrovascular como un «déficit neurológico de causa cerebrovascular que persiste más allá
de las primeras 24 horas o se ve interrumpido por la muerte antes de ese plazo”. Se suponía
que esta definición reflejaba la reversibilidad del daño tisular y, para ese fin, se estableció
arbitrariamente el límite en 24 horas. Este límite sirve para diferenciarlo del accidente
isquémico transitorio, un síndrome relacionado con síntomas de accidente cerebrovascular
que se resuelve por completo antes de ese plazo.
Un accidente cerebrovascular ocurre cuando se bloquea el flujo de sangre en las arterias que
nutren el cerebro, o cuando ocurre un sangrado en el cerebro mismo o en las membranas que
lo rodean. Las mujeres, los hispanos y los afroamericanos en los Estados Unidos tienen
mayor riesgo para el accidente cerebrovascular. Aprenda acerca del riesgo hoy.
ETIOLOGÍA
La principal causa es la presión arterial elevada, a la que sigue el sedentarismo (poca
movilidad corporal, en especial de las extremidades inferiores: la falta de caminatas que duren
al menos media hora al día), el alto consumo de radicales provenientes, entre otros, del
tabaco, frituras o grasas hidrogenadas, a lo que puede sumarse el consumo excesivo de
alcohol, de tabaco o de drogas, así como padecer problemas cardíacos, como la fibrilación
auricular u otras afecciones inicialmente no cardíacas ni vasculares, como diabetes o estrés;
cualquiera de estos factores, o más de uno al mismo tiempo, predisponen a sufrir un ictus.
La enfermedad celíaca puede provocar, si no se trata, este tipo de ataques, especialmente en
personas jóvenes y niños; no obstante, suele pasarse por alto, sin reconocer ni diagnosticar,
principalmente por cursar sin síntomas digestivos evidentes. Los retrasos en el diagnóstico
pueden hacer que los daños sean irreversibles.
PREVENCIÓN
Lo fundamental es controlar los factores de riesgo asociados: la hipertensión arterial,
la lipoproteína de baja densidad o LDL elevada (incluido el aumento de triglicéridos),
debido al consumo de aceites hidrogenados, la diabetes mellitus y la enfermedad celíaca.
Evitar el consumo de tabaco, de sustancias psicotrópicas o estupefacientes y de bebidas
alcohólicas.
Evitar el sedentarismo y practicar ejercicio físico; consumir una dieta rica
en verduras, frutas, proteínas, colesterol «bueno» y grasas polinsaturadas (ácido
eicosapentaenoico (EPA), ácido docosapentaenoico (DPA), ácido docosahexaenoico
(DHA)), consumir poca sal y evitar el consumo de cantidades elevadas de carbohidratos
(azúcares y harinas) y grasas saturadas.
Evitar la ansiedad y aún más el ángor (la angina de pecho), ya que, entre otros problemas
vasculares, aumenta la hipertensión arterial.
Evitar la depresión, ya que los estados anímicos depresivos tienden a espesar la sangre, y
la hacen más trombo génica.
Seguir las recomendaciones del médico de cabecera, quien tiene acceso a la información
pertinente relacionada con la salud de cada individuo.
Evitar el sobrepeso.
Evitar deportes de contacto o sobreesfuerzos.
Evitar el distrés o estrés negativo (especialmente si es crónico), que puede provocar que
la sangre se vuelva trombolítica (véase émbolo).
FACTORES DE RIESGO
Un accidente cerebrovascular ocurre cuando el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro se
detiene repentinamente. A veces se denomina un "ataque cerebral o derrame cerebral". Si se
interrumpe el flujo sanguíneo por más de unos cuantos segundos, el cerebro no puede
obtener nutrientes y oxígeno. Las células cerebrales pueden morir, causando daños
permanentes.
Los factores de riesgo son cosas que incrementan su probabilidad de padecer una
enfermedad o una afección. Este artículo trata acerca de los factores de riesgo para un
accidente cerebrovascular y las cosas que puede hacer para disminuir su riesgo.
MANIFESTACIONES CLINICAS
Las manifestaciones clínicas del accidente cerebrovascular (ACV) pueden
variar según el tipo de ACV (isquémico o hemorrágico) y la región del cerebro
afectada. Los síntomas comunes incluyen:
1. *ACV Isquémico: *
2. *ACV Hemorrágico: *
- Náuseas y vómitos.
- Pérdida de conocimiento.
TRATAMIENTO
FISIOTERAPÉUTICO
El tratamiento fisioterapéutico para el accidente cerebrovascular (ACV) se
centra en la rehabilitación y recuperación de las funciones afectadas. Puede
incluir terapia física, ocupacional y del habla, adaptadas a las necesidades
individuales del paciente. El objetivo es mejorar la movilidad, la fuerza
muscular, la coordinación y las habilidades de comunicación, así como
prevenir complicaciones secundarias como contracturas y atrofia muscular. El
plan de tratamiento variará según la gravedad del ACV y las áreas afectadas.
Es fundamental trabajar en colaboración con un equipo médico especializado
para diseñar un programa integral de rehabilitación.