Iluminacion de Una Persona
Iluminacion de Una Persona
Iluminacion de Una Persona
Por ejemplo el estar centrado en pensamientos negativos normalmente nos trae consigo problemas de
salud como estrés, ansiedad que posteriormente se ven reflejados en el desempeño de nuestro trabajo,
negocio, con la familia o en cualquiera de las actividades que realicemos.
Por el contrario, si nuestra mente trabaja en cosas positivas como nuestras metas, construir nuestra casa,
regalarle un viaje a nuestra pareja, terminar la escuela, tiene grandes beneficios.
Pero muchas veces nos perdemos en el camino y nos dejamos llevar por nuestro día a día olvidando
trabajar nuestra mentalidad y pensando que solo se trata de tener una mentalidad positiva y no es así.
Por eso te dejamos 4 puntos para que uses el poder de tu mente a tu favor y tengas una mejor mentalidad.
Descansa: se trata de tomarte un tiempo para darle un respiro a tu cuerpo y hacerlo bien,
desconectarte de todo y recordar que no todo son metas.
Aprende algo nuevo. Música, pintura, alguna actividad que represente un desafío y que le
permita a tu mente seguir expandiéndose.
Haz ejercicio: al hacer ejercicio liberas endorfinas, las hormonas de la felicidad y de los
pensamientos positivos.
Entrena tu mente: capacítate, estudia, fórmate, busca mantener tu mente ocupada en algo
que te deje un beneficio.
Tu mente te puede llevar hasta donde tú quieras, a través de un camino agradable o un camino difícil. Por
eso es importante que seas consciente de tus pensamientos y que te entreses para tener una mentalidad
positiva y lograr todo lo que te propongas.
Por lo tanto, la genética es el origen primario de nuestros límites. El ambiente en el que nos
movemos, nuestra familia, nuestros amigos y nuestra educación, son factores esenciales que hacen
aflorar muchos de los límites que nos autoimponemos sin pasarlos por ningún tipo de filtro
reflexivo. Todos estos factores influyen también en la manera en la que descubrimos nuestros
talentos y en cómo encontramos actividades que nos apasionen los potencien.
Por lo que se refiere a la educación, es importante destacar que, si observamos a los niños, veremos
que no tienen ninguna limitación en cuanto a intentar cualquier cosa que quieran hacer, porque se
creen capaces de hacer todo.
Así, gracias a la estaticidad del sistema educativo con el que contamos, lo que nos enseñan en los
colegios es otro de los factores que nos imponen los límites mentales que asumimos. «Todo niño es
un artista, porque todo niño cree ciegamente en su propio talento. La razón es que no tienen ningún
miedo a equivocarse. Hasta que el sistema les va enseñando poco a poco que el error existe y que
deben avergonzarse de él».
Los niños no tienen miedo a experimentar, a pensar de forma distinta, por eso es importante
recuperar esa creatividad y aprender o reaprender a pensar como un niño, a crear sin miedo, a no
ponernos límites y a hacer todo lo que nos apasione.
Los niños tienen una curiosidad innata por las cosas que les rodean, miran todo, lo tocan todo y lo
exploran todo.
Los niños no tienen miedo al error, ese miedo lo van aprendiendo poco a poco porque se nos va
inculcando que es algo malo. Es por ello tan importante que el miedo no nos paralice cuando
cometemos un error, sino todo lo contrario, que nos sirva de estímulo para aprender.
Un niño aprende a jugar con cualquier cosa, desde un simple cartón hasta un sofisticado móvil, no
cesan de explorarlo y de probarlo.
Mientras más límites mentales tengamos, peor será la imagen que obtengamos de nosotros mismo.
Ante la adversidad las personas tenemos dos opciones, intentar esquivarla o afrontarla.
Las situaciones adversas son el escenario que nos hace salir de nuestra zona de confort a otras
situaciones mucho más enriquecedoras.
«No hay nadie menos afortunado que el hombre a quien la adversidad olvida, pues no tiene
oportunidad de ponerse a prueba»
La única forma de eliminar nuestros límites mentales es cuestionándolos o más bien retándolos. Es
decir, tenemos que que buscar en la evidencia y no en nuestros supuestos límites pruebas reales y
contundentes de que lo que pensamos es verdad. Para conseguir cuestionar los límites que
pensamos que nos rodean es necesario preguntarnos qué sucedería si nos decidiéramos a
romperlos. Esta sencilla pregunta, con la correspondiente visualización de nosotros mismos
rompiendo nuestros límites, nos puede ayudar a salir del miedo que nos puede generar dar un paso
hacia lo desconocido.
Y, sobre todo, preguntarnos qué va a pasar si no hacemos nada. Recuerda, retar nuestros límites es
el primer paso para vencerlos.