Acuerdo de Extradición Con Países Andinos
Acuerdo de Extradición Con Países Andinos
Acuerdo de Extradición Con Países Andinos
Codificación 1202
Registro Oficial Suplemento 153 de 25-nov.-2005
Ultima modificación: 29-nov.-1912
Estado: Reformado
Dada por Decreto Legislativo No. 1, publicado en Registro Oficial 74 de 29 de Noviembre de 1912 .
TEXTO:
EL CONGRESO
DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR
Decreta:
Apruébase el Acuerdo sobre Extradición, signado en Caracas, el 18 de Julio de 1911, por los
Plenipotenciarios del Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia y Venezuela.
Acuerdo:
Los Infrascritos Plenipotenciarios de las Repúblicas del Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia y
Venezuela, previo el canje de sus respectivos Plenos Poderes, convienen en el siguiente.
Art. 1.-Los Estados contratantes convienen en entregarse mutuamente, de acuerdo con lo que se
estipula en este Acuerdo, los individuos que procesados o condenados por las autoridades judiciales
de uno cualquiera de los Estados contratantes, como autores, cómplices o encubridores de alguno o
algunos de los crímenes o delitos especificados en el artículo 2, dentro de la jurisdicción de una de
las Partes contratantes, busquen asilo o se encuentren dentro del territorio de una de ellas. Para que
la extradición se efectúe, es preciso que las pruebas de la infracción sean tales, que las leyes del
lugar en donde se encuentren el prófugo o enjuiciado, justificarían su detención o sometimiento a
juicio, si la comisión, tentativa o frustración del crimen o delito se hubiese verificado en el.
23. Crímenes y delitos contra las leyes de las Partes contratantes encaminadas a la supresión de la
esclavitud y del tráfico de esclavos.
24. Atentados contra la libertad individual y la inviolabilidad de domicilio, cometidos por particulares.
Art. 3.-Cuando el crimen o delito motivo de la extradición se ha cometido, o tentado o frustrado, fuera
del Estado que hace la demanda, podrá dársele curso a ésta, solo cuando la Legislación del Estado
requerido autorice el enjuiciamiento de tales infracciones, cuando se cometan fuera de su
jurisdicción.
Art. 4.-No se acordará la extradición de ningún prófugo criminal si el hecho por el cual se pide se
considera en el Estado requerido como delito político o hecho conexo con el y ninguna persona
entregada por cualquiera de los Estados contratantes al otro, será juzgada ni castigada por ningún
crimen o delito político, ni por ningún acto conexo con el, cometido antes de su extradición. Tampoco
se acordará la extradición si la persona contra quien obra la demanda, prueba que ésta se ha hecho
con el propósito de juzgarle o castigarle por un delito político o hecho conexo con el.
No se considerará delito político ni hecho conexo semejante, el atentado en cualquier forma y medio
contra la vida de la persona de un Jefe de Estado.
Si surgiere alguna cuestión sobre si un caso está comprendido en lo previsto en este artículo, será
definitiva la decisión de las autoridades del Estado al cual se haga la demanda o que haya concedido
la extradición.
Art. 6.-La solicitud de extradición deberá hacerse precisamente por la vía diplomática.
Art. 7.-Cuando la persona reclamada se hallare procesada o condenada por el Estado requerido, la
entrega, cuando a ésto procediere, no se efectuará sino cuando el reclamado sea absuelto o
indultado o haya cumplido con la condena o cuando de algún modo queda terminado el juicio.
La extradición de los prófugos en virtud de las estipulaciones del presente Tratado se verificará de
conformidad con las leyes de extradición del Estado al cual se haga la demanda.
En ningún caso tendrá efecto la extradición si el hecho similar no es punible por la Ley de la Nación
requerida.
Art. 9.-Se efectuará la detención provisional del prófugo, si se produce por la vía diplomática un
mandato de detención mandado por el Tribunal competente. Igualmente se verificará la detención
provisional, si media un aviso transmitido aún por telégrafo por la vía diplomática al Ministro de
Relaciones Exteriores del Estado requerido de que existe un mandato de detención. En casos de
urgencia, principalmente cuando se tema la fuga del reo, la detención provisional, solicitada
directamente por un funcionario judicial, puede ser acordada por una Autoridad de Policía o por un
Juez de Instrucción del lugar en donde se encuentre el prófugo.
Cesará la detención provisional, si dentro del término de la distancia no se hace en forma la solicitud
de extradición conforme a lo estipulado en el Artículo 8.
Art. 10.-No se ejecutará la pena de muerte a un reo sino cuando está permitida en el país que lo
entrega.
Art. 11.-El Extradido no podrá ser enjuiciado ni castigado en el Estado que lo reclama, sino por los
hechos mencionados en la solicitud de extradición, ni tampoco ser entregado a otra Nación a menos
que haya tenido en uno u otro caso la libertad de abandonar dicho Estado durante un mes después
de haber sido sentenciado, de haber sufrido la pena o de haber sido indultado. En todos estos casos
el extradido deberá ser advertido de las consecuencias a que lo expondría su permanencia en el
territorio de la Nación.
Art. 12.-Todos los objetos que constituyen el cuerpo del delito, los que provengan de el o hayan
servido para cometerlo, lo mismo que cualesquiera otros elementos de convicción que se hubieren
encontrado en poder del fugitivo, serán después de la decisión de la autoridad competente,
entregados al Estado reclamante, en cuando ello pueda practicarse y sea conforme con las leyes de
las respectivas Naciones.
Art. 13.-Cuando la persona reclamada lo es a la vez por varios Estados, la prevención determinará la
preferencia, a no ser que la Nación del asilo esté obligada por un Tratado anterior a dar la
preferencia de un modo distinto.
Art. 14.-Si el Estado requirente no hubiere dispuesto de la persona reclamada en el lapso de tres
meses, contados desde el día en que hubiere sido puesta a su disposición, será puesto en libertad el
preso, quien no podrá ser detenido nuevamente por el mismo motivo.
Art. 15.-Los gastos que ocasionen el arresto, la detención, el examen y la entrega de los prófugos,
en virtud de este Acuerdo serán de cuenta del Estado que pide la extradición; y la persona que haya
de ser entregada se conducirá al puerto del Estado requerido que indique el Gobierno que ha hecho
la solicitud o su Agente Diplomático, a cuyas expensas será embarcado.
Art. 16.-Si el acusado lo pidiere, el Tribunal Superior de Justicia de la Nación requerida, decidirá por
si o por no si el delito por el cual se pretende entregarlo, ha de ser considerado de carácter político o
conexo con delito político.
Art. 17.-La duración del presente Acuerdo será de cinco años que se contarán un mes después del
canje de sus ratificaciones y no tendrán efecto retroactivo. Pasado ese término, se entenderá
prorrogado hasta que uno de los Estados contratantes comunique a los otros su voluntad de hacerlo
cesar, un año después de la notificación.
Art. 18.-Fuera de las estipulaciones del presente Acuerdo, los Estados signatarios reconocen la
institución de asilo, conforme a los principios del Derecho Internacional.
Art. 19.-Cuando para la entrega de un reo cuya extradición hubiere sido acordada por una Nación a
favor de otra, fuese necesario atravesar el territorio de un Estado intermedio, el tránsito será
autorizado por éste, sin otro requisito que el de la exhibición por la vía diplomática del testimonio en
forma del Decreto de Extradición expedido por el Gobierno que lo otorgó.