Aditivos
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Aditivos
Lecitinas (E-322)
Este emulgente fue el primero que se usó de manera masiva en la industria de
bollería y pastelería. Su principal aplicación se encuentra en la formación y
estabilización de batidos. Si pretendemos reforzar la masa o alargar la vida útil
del pan podemos encontrar otros emulgentes con mejores propiedades.La
lecitina es un subproducto del procesado del aceite de soja que ha sido
purificado y blanqueado. El balance hidrófilo/hifrófobo está entre 9 y 10 por
lo que es capaz de formar emulsiones tanto de aceite en agua como de agua
en aceite, aunque ninguna será muy estable.
Edulcorantes
Muchos de los productos de bollería y pastelería se caracterizan por su
dulzor y la presencia en su composición de distintos azúcares. Estos
azúcares pueden incorporarse bien en las masas o bien en las distintas
coberturas o cremas utilizadas. Sin embargo la ingesta de azúcar
(sacarosa) puede representar algunos problemas nutricionales. Los
posibles problemas asociados al consumo de sacarosa son los
siguientes:
Gran aporte calórico. En esta caso hay que señalar que los hidratos de
carbono, entre los que se encuentra la sacarosa, aportan 4 cal/g. al igual
que las proteínas, aunque menos de la mitad del aporte calórico de las
grasas (9cal/g.)
Posibilidad de provocar caries dental. La sacarosa es metabolizada por
la flora bacteriana bucal y convertida en ácidos que reducen el pH
desmineralizando el esmalte de los dientes. Este problema puede
resolverse fácilmente con una adecuada salud dental, limpiezas y visitas
periódicas al odontólogo.
No pueden tomarla los enfermos diabéticos. El metabolismo de la
sacarosa requiera insulina, hormona que este tipo de enfermos no
sintetiza adecuadamente.
El consumo de sacarosa se ha relacionado con debilidades óseas en niños
pequeños, mayor incidencia de arteriosclerosis e infarto de miocardio, así
como úlcera de estómago. Todos estos problemas pueden solucionarse con
una dieta equilibrada, sin un sobreconsumo de sacarosa.Por tanto los
industriales se plantean la necesidad de elaborar productos similares a los
originales pero con un menor contenido en sacarosa, o sin ella. Estos
productos han tenido un gran auge en el mercado debido a una creciente
demanda de los consumidores. Si nos planteamos sustituir el azúcar de una
formulación previamente debemos conocer las funciones que el azúcar tiene,
tanto en el proceso como en el producto final:
La sacarosa proporciona sabor dulce y agradable al producto final.
La sacarosa constituye un substrato para las levaduras, y por tanto
ayuda a la producción de CO2, y al incremento del volumen de las masas
fermentadas. Este efecto carece de importancia en masas sin presencia
de levadura biológica.
La sacarosa, a través de su interacción con otros componentes de la
fórmula, juega un papel fundamental en la textura y volumen del
producto elaborado. La presencia de sacarosa, en la proporción
correcta, facilita la obtención de producto con una miga más suave y
tierna, a la vez que contribuye a la incorporación de aire en los batidos.
La sacarosa a través de la reacción de Maillard, entre azúcares y
aminoácidos, y de las
reacciones de caramelización de los azúcares, tiene una gran influencia
en el color y aroma del producto final.
La sacarosa reduce la actividad de agua en los productos y, por tanto,
aumenta la vida útil de los mismos.ç
Edulcorantes intensivos
Son productos que tienen un poder edulcorante muy superior al de la
sacarosa, entre 30 y 500 veces en la mayoría de los casos. Por tanto pueden
conseguir un efecto edulcorante similar al de la sacarosa con la adición de una
cantidad mucho menor. Estos productos se están usando ampliamente en la
elaboración de bebidas refrescantes, chicles o golosinas. Sin embargo en los
productos de pastelería y bollería no pueden sustituir a la sacarosa por sí solos,
ya que los productos obtenidos con ellos presentan una textura deficiente,
volumen escaso y diferencias en el sabor y el aroma importantes frente al
original.
Sacarina (E-954)
La sacarina tiene un poder edulcorante entre 300 y 500 veces superior a la
sacarosa y es estable en las condiciones de procesado de los productor de
bollería y pastelería, tanto a las temperaturas como a las condiciones de
humedad y pH. La sacarina no presenta problemas de solubilidad por lo que se
distribuye homogéneamente en los productos.La sacarina no es metabolizada
por el organismo humano, por lo que se expulsa a través de la orina y no aporta
ninguna caloría.El principal inconveniente de la sacarina es la presencia de un
ligero regusto amargo en los productos que la contienen. Este regusto es
detectado por un 25% de la población y constituye el motivo por el que la
sacarina esté siendo sustituida por otros edulcorantes con mejores
propiedades.
Ciclamato (E952)
El ciclamato no es metabolizado en el cuerpo humano y se elimina sin ningún
aporte calórico.El ciclamato tiene un poder edulcorante 30 veces superior al
de la sacarosa, que aumenta en pequeñas concentraciones, y un sabor muy
parecido al de la sacarosa, sin presencia de regusto final extraño. Su sabor es
muy similar al de la sacarosa aunque tarda un poco más en manifestarse en el
paladar. Por el contrario el sabor del ciclamato es más duradero que el de la
sacarosa, lo que puede suponer una ventaja en ciertas aplicaciones.El
ciclamato es estable en las condiciones de los procesos de bollería y pastelería
y no presenta problemas de solubilidad. Es un producto que presenta efectos
sinérgicos con la mayoría de los edulcorantes y puede potenciar determinados
sabores. Como ya se ha comentado es capaz de enmascarar el regusto amargo
de la sacarina.
Acesulfame-K (E-950)
El acesulfame-K es un edulcorante que presenta un sabor limpio, sin regustos
extraños, y que se percibe con rapidez, aunque también decae rápidamente.
Su poder edulcorante es de unas 200 veces el de la sacarosa. Al igual que el
ciclamato presente efectos sinérgicos con la mayoría de los edulcorantes y
tiene la capacidad de enmascarar ciertos regustos indeseables producidos por
otros edulcorantes.
El acesulfame-K no se metaboliza en el cuerpo humano y no aporta ninguna
caloría.Este edulcorante es estable en las condiciones de pH, temperatura y
humedad que se producen en los procesos de panadería y pastelería.
Aspartame (E-951)
Al contrario que otros edulcorantes, el aspartame se metaboliza en el tracto
intestinal produciendo ácido aspártico, fenilalanina y metanol. Las personas
que padecen la enfermedad conocida como fenilcetonuria son intolerantes a
la fenilalanina y, por tanto, deben evitar la ingesta de aspartame. Para el resto
de la población el consumo de aspartame no presenta ningún riesgo.El
aspartame presenta un poder edulcorante entre 180 y 220 veces superior al
de la sacarosa, con un sabor limpio, sin presencia de regustos extraños. Como
otros edulcorantes presenta efectos sinérgicos y potencia determinados
sabores, en especial los de frutas ácidas.El aspartame se descompone a
elevadas temperaturas, lo que constituye su principal inconveniente para su
utilización en procesos con horneado. Por tanto su uso en bollería y pastelería
debe reducirse a la elaboración de cremas y otros productos que no sufran
tratamientos térmicos severos. Existe un producto basado en aspartame
encapsulado resistente a las condiciones de horneado, sin embargo su precio
es elevado y suele ser preferible usar otro tipo de edulcorante.Como se ha
indicado estos cuatro son los edulcorantes más utilizados en la actualidad, sin
embargo existen otros como la taumatina, neohesperidina DC, sucralosa o
alitame que, aunque hoy en día no se suelen utilizar por razones de costo,
legislación o desconocimiento, pueden ser utilizados e un futuro.
Colorantes
Son aditivos cuyas funciones principales son restaurar el color perdido en los
procesos de elaboración o aportar colores atractivos y demandados en
determinados productos alimenticios.Éstos no deben utilizarse con el
propósito de disimular una alteración o para simular la presencia en el
producto de algún ingrediente de calidad.No cumplen una función tecnológica
ni nutricional en el producto, pero sí una función psicofisiológica, desde el
punto de vista de aceptación del producto por parte del consumidor.Existen
un gran número de posibles colorantes, pero sólo unos pocos están
autorizados para su
utilización en los alimentos ya que esta categoría de aditivos deben superar
periódicamente controles exhaustivos, respetando además limitaciones en el
uso.Se diferencian principalmente en colorantes naturales y colorantes
artificiales (obtenidos por síntesis química).
Colorantes naturales
Los colorantes naturales son todos de origen vegetal (salvo el rojo cochinilla).
Se caracterizan por no presentar límites en su utilización ya que se les
considera sustancias estables y seguras. Son muy utilizados en el sector de
panadería y pastelería, sobre todo en el ámbito industrial. Son muy utilizados
además como componentes de decoración (frutas confitadas, caramelos,
jaleas, jarabes, etc.)
Algunos de los colorantes más utilizados por el sector son:
Curcumina (E-100): Se extrae de los rizomas triturados del azafrán o
Curcuma lenca. Aporta color amarillo anaranjado y un sabor
ligeramente amargo. Es soluble en grasas, y se emplea frecuentemente
en productos horneados y en la fabricación de helados, por se estable a
distintas temperaturas.
Caramelo (E-150): Proviene de someter a determinados azúcares
alimentarios (dextrosa, fructosa, sacarosa) a la acción del calor. Esta
reacción puede verse favorecida al utilizar determinados ácidos
alimentarios y algunas sales. Aporta color pardo-negruzco a los
alimentos, es soluble en agua y en disoluciones de etanol. Se utilizar de
forma habitual en pastelería y en galletería. También se emplea de
forma frecuente en la coloración de bebidas.
Carotenoides (E-160): Son pigmentos naturales presentes de forma
habitual en frutos, semillas, hortalizas y también en algunos alimentos
de origen animal, como los huevos y el marisco. Principalmente se
sintetizan a partir de vegetales. Aportan colores que van del amarillo al
rojo, pasando por los anaranjados e incluso los pardos; esta gama tan
amplia, hace que sean utilizados en muchos productos de los elaborados
por el sector. Bioquímicamente son tetraterpenos y el organismo puede
sintetizarlos como vitamina A.