Ideas para Sostenibilidad
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1 Objetivo del Proyecto
Los objetivos que se centran este trabajo son, el primero y fundamental, dar una visión
crítica al lector del mundo en el que vivimos hoy en día y como si seguimos bajo esta línea de
tendencia, habrá un momento que la insostenibilidad será tan grande que no podremos
mitigarla ni corregirla, teniendo graves consecuencias para todo el planeta.
Para evitar esto, hay que concienciar a la gente, que una de las soluciones más
acertadas es incorporar la Responsabilidad Social Corporativa a las empresas, y para ello, su
conocimiento, sus funciones y sus herramientas deben ser conocidas, extendidas y aplicadas
por la mayoría para tener en un futuro no lejano un mundo más sostenible y socialmente
mejor, tanto para las personas, como para el medio ambiente.
El mensaje que es preciso transmitir es, por tanto, que los temas de ética y de
responsabilidad social tienen un cierto carácter intangible, pero que pueden gestionarse. La
ética y responsabilidad social no pueden dejarse a la buena voluntad de las personas, pueden y
deben gestionarse para alcanzar un mundo sostenible.
Hay herramientas y procesos de gestión que permiten dotar a las empresas de medios
para asegurarse que los criterios sociales, medioambientales y éticos son considerados en las
decisiones diarias de sus empleados del mismo modo que lo son los aspectos económicos.
3 Sostenibilidad
En los centros de decisión se sigue defendiendo el crecimiento económico como la vía
para conseguir el desarrollo. El paradigma económico imperante equipara crecimiento
económico con desarrollo y pleno empleo, con lo que obliga a un crecimiento económico
constante y deja de lado otros factores importantes como pueden ser el social y el
medioambiental.
Los problemas ecológicos empiezan a ser patentes y son múltiples las voces que nos
hablan de ello y hasta que estos problemas son absolutamente visibles la sociedad no hace
frente a ello.
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De esta manera surge el concepto de sostenibilidad, como un cuestionamiento del
modelo económico en el que la economía es el centro y los sistemas ecológicos como el medio
ambiente y como los sistemas sociales están fuera de ese sistema económico que los utiliza en
su propio provecho.
El informe Brutland define la sostenibilidad como: “El desarrollo que permita satisfacer
las necesidades de las generaciones presentes, sin comprometer la capacidad de las
generaciones futuras para satisfacer las suyas”.
De esta mentalidad surgen otras iniciativas a través de las cuales se pretende articular
este importante cambio de rumbo en el modelo de crecimiento y de desarrollo. Por lo tanto, lo
que encontramos con este desarrollo sostenible es un cuestionamiento de los sistemas
económicos y de los sistemas predominantes en las sociedades occidentales, y la necesidad de
un cambio de paradigma hacia un sistema que realmente replantee nuestras bases éticas.
La RSE y su razón de ser pueden explicarse desde diferentes puntos de vista y sobre la
base de unos argumentos éticos, morales, económicos, de negocios y sociales. Desde una
aproximación desde los negocios suele ser concebida como una herramienta de gestión más al
servicio de la competitividad empresarial y de la creación de valor a largo plazo para los
propietarios de las firmas; es decir, como una cuestión de rentabilidad, como un instrumento
estratégico para lograr ventajas competitivas.
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5 Grupos de interés o stakeholders
Los grupos de interés o stakeholders son personas o grupos de personas que tienen
impacto en, o se ven afectados por las actividades, productos o servicios de una empresa (u
otra organización).
Los grupos de interés internos que son los que permiten que una empresa o institución
desarrolle sus actividades.
Los proveedores, que son los que proporcionan esa materia prima o ese tipo
de servicios que la empresa necesita para la realización de sus actividades.
Los empleados, las personas encargadas de utilizar esos recursos para proveer
a sus clientes de productos y servicios.
Pero los grupos de interés no pueden limitarse únicamente a los stakeholders internos,
sino a una escala más alejada, dentro de esta escala podemos encontrar agentes como pueden
ser los competidores, la sociedad en general, el medio ambiente, las administraciones públicas
o una infinidad de agentes diferentes.
La RSC es, ante todo, gestión: es una nueva concepción del modelo de empresa que
introduce nuevas fórmulas de administración, organización y actuación. Una de estas fórmulas
es el engagement, práctica cada vez más extendida que implica la involucración de los diversos
grupos de interés de la compañía en sus actividades en pro de un objetivo común: el beneficio
de todos.
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Colaboración: En un sentido amplio, participación e interacción entre la
empresa y sus grupos de interés con el objeto de asegurar que lo que se hace,
se hace en beneficio de todos.
Compromiso: Principalmente de la empresa para dar respuesta a través de su
actuación a las demandas de sus stakeholders.
La preparación: Una vez planificado, las empresas tienen que proporcionar un marco
adecuado para que se efectúe el diálogo, dotando los recursos necesarios para el resto del
proceso, tomando acciones que garanticen que los interlocutores poseen la base necesaria
para participar en el proceso e identificando y minimizando posibles riesgos que dificulten el
diálogo.
La implementación: En esta fase las empresas tienen que invitar a todos los
participantes de una forma adecuada, facilitar los materiales y documentación que
proporcione una visión completa de la compañía y del proceso. Las compañías tienen que
documentar debidamente el proceso y sus resultados, desarrollando un plan de acción en
respuesta a las inquietudes de los stakeholders y comunicando a los participantes tanto los
resultados del proceso como el plan de acción diseñado.
Actuación, revisión y mejora: En esta última etapa las empresas monitorean y evalúan
el proceso y sus resultados, sobre los que aprenden y mejoran, dan seguimiento a los planes
de actuación derivados del diálogo con sus grupos de interés y reportan públicamente los
resultados alcanzados.
Se revisa lo que se ha hecho con el objetivo de mejorar y continuar otra vez en una
nueva fase de planificación, preparación e implementación, cerrando la “rueda” en un proceso
sin fin.
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Ser capaces de atender estas demandas de la sociedad y el medio ambiente,
respondiendo en términos de creatividad e innovación (diseñando organizaciones más
eficientes energéticamente o fomentando la integración de la diversidad, la igualdad de
oportunidades y el desarrollo profesional de los empleados) no es una actuación exclusiva de
grandes empresas, sino que implica a todo tipo de organizaciones sin importar el sector, el
tamaño o la localización. La integración de RSE en la gestión de las organizaciones ha ido
consolidándose como un elemento indispensable.
Todo sistema de gestión está enfocado a la mejora continua. Las herramientas más
importantes de las que dispone la sociedad para garantizar este proceso son las siguientes:
7.1 SGE 21
Global Reporting Initiative (GRI) es una organización cuyo fin es impulsar la elaboración
de memorias de sostenibilidad en todo tipo de organizaciones. GRI produce un
completo Marco para la elaboración de Memorias de Sostenibilidad, cuyo uso está muy
extendido en todo el mundo.
El Marco, que incluye la Guía para la elaboración de Memorias, establece los principios
e indicadores que las organizaciones pueden utilizar para medir y dar a conocer su desempeño
económico, ambiental y social. GRI está comprometido con la mejora continua y el
incremento del uso de estas Guías, las cuales se encuentran a disposición del público de
manera gratuita.
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conceptos, términos y definiciones relacionados con la responsabilidad social;
los antecedentes, tendencias y características de la responsabilidad social;
principios y prácticas relacionadas con la responsabilidad social;
las materias fundamentales y asuntos de responsabilidad social;
integración, implementación y promoción de un comportamiento socialmente
responsable en toda la organización y, a través de sus políticas y prácticas,
dentro de su esfera de influencia;
identificación y compromiso con las partes interesadas, y
compromisos de desempeño comunicantes, y otra información relacionada
con la responsabilidad social.
7.4 AA1000
Aun así, esta versión de la norma de aseguramiento AA1000 representa sólo un paso
en el largo camino del aprendizaje. Las Guidance Notes y las actualizaciones de las normas se
enriquecerán con las interpretaciones que se obtengan de la práctica y con otras experiencias
relevantes que mejoren la credibilidad de los nuevos enfoques de responsabilidad
organizacional.
El punto más fuerte del informe, los ejemplos de buenas prácticas que pueden servir
de guía para otras empresas del sector y que dan una información relevante sobre los
beneficios de la RSC en Abertis.
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9 Conclusiones finales.
Finalmente indicar que en la Memoria del Trabajo fin de Máster se desarrollan los
apartados relativos a líneas futuras, valoración económica, bibliografía y anexos, que por falta
de espacio no se han incorporado en este resumen, centrándose éste en los aspectos más
importantes del mismo.
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ESCUELA DE INGENIERÍAS INDUSTRIALES
Índice de tablas
Tabla 1: Evolución cronológica de la RSE .................................................................................................................. 15
Tabla 2: Modelo económico versus modelos socioeconómico. Características principales. ..................................... 19
Tabla 3: Matriz de ayuda .......................................................................................................................................... 33
Tabla 4: Contenidos ISO 26000 ................................................................................................................................. 97
Tabla 5: Valoración por herramientas y estándares en el año 2010 a la empresa Abertis. .................................... 110
Tabla 6: Herramientas de sostenibilidad ................................................................................................................ 118
Tabla 7: Días efectivos anuales. .............................................................................................................................. 120
Tabla 8: Semanas efectivas anuales........................................................................................................................ 120
Tabla 9: Horas dedicadas en las diferentes partes del proyecto ............................................................................. 121
Introducción, objetivos y justificación.
Sin embargo, queda mucho por hacer para pasar de las palabras a los hechos, y para que la
sensibilización sobre estos temas se transforme, de verdad, en acciones concretas en las empresas.
El debate sobre la responsabilidad social se mueve, en efecto, entre dos ámbitos: el debate
conceptual y la fundamentación teórica, y la aplicación práctica. Pero es ésta la que verdad importa,
si lo que queremos es cambiar conductas.
El mensaje que es preciso transmitir es, por tanto, que los temas de ética y de
responsabilidad social tienen un cierto carácter intangible, pero que pueden gestionarse. La ética y
responsabilidad social no pueden dejarse a la buena voluntad de las personas, pueden y deben
gestionarse para alcanzar un mundo sostenible. Hay herramientas y procesos de gestión que
permiten dotar a las empresas de medios para asegurarse que los criterios sociales,
medioambientales y éticos son considerados en las decisiones diarias de sus empleados del mismo
modo que lo son los aspectos económicos.
Los objetivos que se centran este trabajo son, el primero y fundamental, dar una visión
crítica al lector del mundo en el que vivimos hoy en día y como si seguimos bajo esta línea de
tendencia, habrá un momento que la insostenibilidad será tan grande que no podremos mitigarla ni
corregirla, teniendo graves consecuencias para todo el planeta.
Para evitar esto, hay que concienciar a la gente, que una de las soluciones más acertadas es
incorporar la Responsabilidad Social Corporativa a las empresas, y para ello, su conocimiento, sus
funciones y sus herramientas deben ser conocidas, extendidas y aplicadas por la mayoría para tener
en un futuro no lejano un mundo más sostenible y socialmente mejor, tanto para las personas,
como para el medio ambiente.
Para alcanzar estos objetivos, lo que se desarrolla en este trabajo en una visión teórica de lo
que es la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa, siendo el diálogo activo o
engagement, la pieza fundamental en el proceso de relación entre la empresa y sus grupos de
interés.
Si los ejecutivos de las grandes empresas se mueven dentro de un sistema de incentivos que
favorece asumir riesgos con el fin de obtener beneficios superiores a los normales, a corto plazo, se
generan tales beneficios, pero, a largo plazo, el riesgo sistémico crece. Cuando el sistema se
tambalea se pone de manifiesto que la RSC no es irrelevante ni para la empresa ni para su entorno
social.
Toda la crisis económica que nos afecta hoy en día no ha sido un desastre natural, sino que
ha estado causado por determinados comportamientos irresponsables de directivos y legisladores.
Pero hoy en día, el sistema financiero no es el único que está en riesgo por la actuación
irresponsable de directivos que centran la gestión empresarial en el beneficio a corto y medio plazo.
En realidad todo el sistema económico se encuentra amenazado por la cultura del crecimiento
económico irrespetuoso con el medio natural.
Frente a las grandes declaraciones de los líderes mundiales a favor del “crecimiento
sostenible” está la realidad de los indicadores de contaminación, como el calentamiento global,
pérdida de suelos fértiles, degradación de calidad de las aguas, agotamiento de bancos de pesca,
reducción de masa forestal, etc.
Al igual que ha pasado con el sistema financiero recientemente, los responsables de tomar
las decisiones no parecen actuar bajo el lema de la precaución ante el alto riesgo sistémico de
seguir en la misma senda de insostenibilidad. La Naturaleza ya ha dado señales de que los riesgos
ambientales van a tener un creciente coste económico, por no hablar de los efectos que
provocarían catástrofes naturales que provocarán un clima más extremo: mayores inundaciones,
sequías, incendios y, sobre todo, efectos que no podemos ni controlar ni remediar porque ni
siquiera somos capaces de preverlos.
En este sentido la recesión originada en el sector financiero parece una parábola, a escala
reducida, de lo que puede ser una crisis ambiental, teniendo en cuenta que no es la primera crisis
financiera y contaban con instrumentos para afrontar esta crisis, mientras que en una crisis
ambiental no disponemos ninguna herramienta de ayuda para subsanarla.
En este contexto resulta muy apropiado que el Comité Nobel haya puesto sus focos en 2
economistas cuyo trabajo se ha centrado en promover la RSC, Elinor Ostrom y Oliver E. Williamson,
donde ambos defienden que el objetivo de maximizar beneficios está socialmente obsoleto y que
las empresas deben integrar objetivos de Responsabilidad Social. Defienden que la RSC sería una
forma de entender la empresa en la que los objetivos sociales se internalizan como parte de los
objetivos corporativos.
Espero que este trabajo contribuya a fomentar el conocimiento de la RSC así como sus
herramientas y formas de gestión para mejorar tanto la calidad de las relaciones dentro de la propia
empresa como la función social que cumplen.
2. Sostenibilidad
2.1. Antecedentes del desarrollo sostenible
En la actualidad cada vez mas foros asumen el desarrollo como una suma de aspectos
cualitativos y cuantitativos, sin embargo, en los centros de decisión se sigue defendiendo el
crecimiento económico como la vía para conseguir el desarrollo. Esta vinculación entre crecimiento
y desarrollo no es casual sino que es muy fuerte y viene provocado por un determinado desarrollo
histórico. La noción de crecimiento empieza a tomar fuerza en la década de los 30, con la crisis y las
medidas que se tomaron para salir de ella, en ese momento se asimilaron producción y consumo
con desarrollo, ignorando otras magnitudes que con el tiempo se han manifestado como muy
importantes.
Lo que se pone sobre la mesa es que la actividad humana está comenzando a dañar
seriamente los sistemas que sostienen la vida y como esta idea de crecimiento (la que está basada
en nuestra economía) en un uso creciente de materias primas y de energía, se basan en el
crecimiento en un fin como en sí mismo, y no tanto en alcanzar el bienestar que realmente es la
idea que encontramos debajo de la idea de desarrollo sostenible. Se comienza de esta manera
aparecer un cuestionamiento del modelo económico en el que la economía es el centro y los
sistemas ecológicos como el medio ambiente y como los sistemas sociales están fuera de ese
sistema económico que los utiliza en su propio provecho. Pasamos en esta década a una idea de
sostenibilidad en el que la economía es una parte de un sistema que está insertado dentro de las
propias sociedades y que está insertado en nuestro medio ambiente, que le sirve de base y de
sustento.
En este momento empiezan a surgir documentos muy importantes en torno a este nuevo
modelo de cuestionamiento al sistema que se estaba desarrollando y uno de los más importantes
que tenemos es el informe Brutland (1987, “Nuestro futuro común”). El informe le creó la comisión
mundial para el medio ambiente y desarrollo. Este documento es importante no sólo por el
planteamiento que realiza sobre el desarrollo sostenible sino además porque es un informe que
viene avalado por Naciones Unidas. Hasta ese momento se habían escrito informes de grupos
científicos, de grupos ecologistas, de grupos de presión… pero este informe es importante ya que
establece la definición de desarrollo sostenible que ha sido la más reproducida a lo largo de estos
años, ya que es una definición muy controvertida y genera muchos problemas por la amplitud de las
palabras que forman su definición.
En 1992 Rio de Janeiro acoge la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio
Ambiente y el Desarrollo (CNUMAD), también conocida como Rio 92 o Cumbre de la Tierra. En esta
conferencia destacan la firma de 3 acuerdos:
En 1997 se celebró en Nueva York la cumbre de Rio+5, que llevó a cabo una evaluación de la
respuesta de los países a los acuerdos firmados en la Cumbre de la Tierra. El objetivo era
determinar y reconocer los adelantos alcanzados y promover acuerdos similares en medidas
correctivas.
El Pacto Mundial se lanzó en 1999, Kofi Annan, Secretario General de las Naciones Unidas,
propuso este pacto en su discurso pronunciado ante el Foro Económico Mundial, pero la fase
operacional se inició en la Sede de Naciones Unidas el 26 de julio del año 2000. El Secretario
General invitó a los dirigentes empresariales a sumarse a una iniciativa internacional en cuyo marco
las empresas colaborarían con los organismos de Naciones Unidas, las organizaciones laborales y la
sociedad civil para promover principios sociales y ambientales de carácter universal. (En el Anexo 2
se recogen los diez Principios que se recogen en el Pacto Mundial).
degradación del medio ambiente había empeorado. Lo que el mundo deseaba era una cumbre de
acciones y resultados, lo que supuso esta cumbre los cimientos y abrió el camino para la acción.
En 2012 transcurrido 20 años desde que se celebrara la Cumbre de la Tierra, Rio+20 dio el
visto bueno para establecer un conjunto de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y lograr la
cooperación de todas las naciones, ricas y pobres, en la fijación de metas relacionadas con un
conjunto de retos en todo el mundo, desde el agua y el suelo, hasta los desperdicios alimenticios.
Existen otras iniciativas a través de las cuales se pretende articular este importante cambio
de rumbo en el modelo de crecimiento y de desarrollo. Por lo tanto, lo que encontramos con este
desarrollo sostenible es un cuestionamiento de los sistemas económicos y de los sistemas
predominantes en las sociedades occidentales, y la necesidad de un cambio de paradigma hacia un
sistema que realmente replantee nuestras bases éticas, de vida y de consumo, ante todo ello, la
empresa es uno de los protagonistas más relevantes para hacerlo efectivo y como la
Responsabilidad Social Corporativa es uno de los principales vehículos en esta ruta a la
Sostenibilidad.
Para avanzar en este camino, es necesario contar con la mejor estrategia del “desarrollo
sostenible” y las herramientas e instrumentos que lo posibilitan. Por lo tanto, es necesario tener en
cuenta que el desarrollo sostenible no se limita solamente al desarrollo económico, sino que,
además de abordar éste, incluye otras variables de la actuación humana como pueden ser sociales,
políticas, ambientales, culturales… en un proceso globalizador, hasta llegar a impregnar de forma
total el pensamiento, la opinión y el quehacer de la sociedad.
En el contexto de que el planeta es finito, y por lo tanto sus recursos, el cambio climático,
las diferentes vertientes de la biodiversidad, etc., en éste contexto ha emergido el concepto del
cambio global, que aúna diversos elementos que forman parte esencial del nuevo escenario en que
se mueve actualmente nuestro planeta; por eso, la idea de cambio global es indispensable para
comprender en toda su complejidad las interacciones que actualmente se dan en la Tierra, tanto
entre los seres humanos, como entre éstos y el resto del medio ambiente.
Relaciones norte-sur
Expansión demográfica
Desarrollo emergente
Incremento del uso de recursos y del impacto ambiental per cápita.
Migraciones masivas.
Globalización económica y cultural.
Brechas tecnológicas y formativas
Cambio climático.
Fragmentación y urbanización del territorio.
Deforestación y desertificación.
Pérdida de biodiversidad.
Sobrecarga y degradación de los ecosistemas terrestres, acuáticos y marinos.
Contaminación (atmosférica, química, acústica, lumínica…)
Residuos
Agotamiento de materias primas y recursos.
Crisis generalizadas y simultáneas: agua, alimentos y energía.
Muchos de estos apartados tienen siempre efectos negativos, y otros pueden ser
beneficiosos o perniciosos según el contexto y las circunstancias.
Cada uno de ellos supone de por sí un cúmulo de situaciones cambiantes o adversas, por lo
que la suma de todos, y especialmente el hecho de que estén ocurriendo simultáneamente y en
todo el planeta, confiere al cambio global un poder de transformación de la vida tanto humana
como no humana, como nunca antes había ocurrido.
Como tarea y horizonte común que es, la sostenibilidad ha de ser asumida por la sociedad
en pleno y en plenitud. Nada hay más globalizado que el futuro global de la Tierra, por lo que es
obligación ineludible de todos los sectores sociales incorporarse al camino de la sostenibilidad y
hacerlo suyo.
El desarrollo sostenible será la resultante de sumar tanto grandes como pequeñas acciones
sostenibles, realizadas por todos los componentes de la sociedad.
La sostenibilidad, es un nuevo paradigma que está llamado a sustituir a otros modelos cuya
vigencia y efectividad se está agotando.
Uno de los mayores y más profundos retos que tiene la sociedad ante sí es cambiar sus
referencias, de la forma más rápida, eficiente y menos traumáticamente posible.
El triple objetivo (triple bottom line) es un concepto que ha tenido y está teniendo una
rápida y extensa difusión, y con su aparente sencillez está cuestionando muchas ideas
preconcebidas y modificando muchas actitudes. El padre de este concepto es John Elkington (1997)
y en su definición establece que una empresa, para ser sostenible, tiene que marcarse un triple
objetivo:
Los orígenes de este concepto hay que buscarlos en el Informe Brundtland, cuando definió
lo que se entiende por desarrollo sostenible, y la conjunción de estos 3 objetivos puede aplicarse,
no sólo a todo tipo de empresas, sino también a cualquier tipo de organización.
En 1998, Elkington ya afirmaba que las empresas líderes comienzan a tener una visión más
amplia de contabilidad, auditoría y publicación de información, que comprende aspectos
financieros, ambientales, sociales o éticos.
Para lograr más y mejor futuro para todos, en un planeta lleno como el nuestro, es
necesario afrontar los viejos retos y problemas con nuevos planteamientos, y utilizar nuevas
herramientas. Herramientas diversas, imaginativas y eficientes, para colaborar con la Naturaleza, no
para expoliarla; para potenciar la convivencia, no la imposición; para superar actitudes de
depredación e insolidaridad que provocan situaciones insostenibles.
Para lograr los objetivos que pretende la sostenibilidad hay que sumar también la voluntad
del cambio y las actitudes éticas.
Huella ecológica
Es un indicador para medir la presión de los seres humanos sobre los ecosistemas.
La huella ecológica indica la superficie biológicamente productiva necesaria para generar los
cultivos, la carne, el pescado y la madera que consumen los habitantes de todo el mundo, así como
la superficie destinada a infraestructuras y la absorción de las emisiones de dióxido de carbono
procedentes de la quema de combustibles fósiles.
Mochila ecológica
La mochila ecológica pone de relieve la totalidad de los recursos que se necesitan, tanto en
los procesos productivos de todos los bienes como en la prestación de todos los servicios, ya que
muchos de dichos recursos permanecen encubiertos y hasta ahora no se valoran.
Es un viejo y conocido lema de aplicación universal, para disminuir la huella ecológica, que
puede aplicarse tanto a actitudes individuales como colectivas.
Principio de Precaución
Consumo responsable
Para actuar en coherencia con los valores que se asumen, la inversión socialmente
responsable es una excelente manera de hacer coincidir el fondo con la forma en las actitudes de
los agentes sociales.
Triple objetivo
Biomímesis
Imitar a la naturaleza a la hora de reconstruir los sistemas productivos humanos, con el fin
de hacerlos compatibles con la biosfera (Riechmann, 2006).
Ecoinnovación
Se trata de llevar a cabo los procesos de innovación, cualquiera que sea su naturaleza,
teniendo presente, además de la viabilidad económica, los restantes principios de sostenibilidad.
Ecodiseño
Supone realizar cualquier tipo de diseño atendiendo a los parámetros de sostenibilidad que
sean de aplicación al objeto o a la acción diseñada.
Ecoeficiencia
Ecoindicadores
Utilizados para evaluar situaciones y procesos que atañen directamente, de una u otra
forma, a distintos aspectos de la sostenibilidad.
Fiscalidad ambiental
Agricultura sostenible
El análisis ambiental debe incorporarse como componente del análisis integral de las
organizaciones.
Ecocertificaciones
Dan fe que determinados productos han sido producidos, o extraídos, de forma sostenible.
Los más comunes son las ecocertificaciones para productos agrícolas, ganaderos, forestales y
marinos.
Ecocondicionalidad
Ecoetiquetado
Proporciona información al consumidor para que éste pueda actuar de forma sostenible.
Ecoturismo
Pretende fomentar un turismo responsable que concilie los fines propios de esta actividad
con los principios de sostenibilidad.
Memorias de sostenibilidad
Son aquellas que, con transparencia y compromiso, dan información integrada de los
aspectos económicos (incluyendo los financieros, pero no sólo éstos) sociales y medioambientales
de la empresa.
Es una estrategia fomentada por la Unión Europea para minimizar el impacto ambiental de
todo el ciclo de vida de cualquier producto o servicio, desde la extracción de la materia prima, o el
diseño, hasta su desecho.
Mantener una relación abierta, fluida y transparente con sus grupos de interés, es la base
de la estrategia de sostenibilidad de la empresa.
Herramientas para ayudar a las empresas a cumplir mejor con los requisitos
medioambientales de la sostenibilidad. Existen varios estándares que pueden aplicarse; los más
conocidos son la Norma ISO 14001 y el Sistema Comunitario de Ecogestión y Auditoría (EMAS).
Para avanzar en el camino de la sostenibilidad es preciso innovar, tanto en los análisis y las
propuestas como en las herramientas a utilizar, para ir logrando soluciones duraderas, armoniosas,
satisfactorias, creativas y equitativas, en un contexto de solidaridad y respeto: solidaridad entre los
seres humanos y respeto de éstos hacia el resto de seres vivos y su entorno natural.
Otros autores encuentran sus orígenes en los años 20, cuando se empieza a hablar del
principio de caridad, la filantropía ya no como acción individual (del empresario o de los
propietarios de la empresa), sino como acción corporativa de la empresa como un todo. Más tarde,
el principio de caridad se complementó con el principio de administración que instaba a la empresa
a que mirara por el interés público en tanto que era responsable de la administración de recursos
públicos que afectaban a distintos miembros de la sociedad.
Etapa práctica: Definición de Propuesta del CSP (Corporate Social Performance) como
las responsabilidades de la forma de mediación de la RSE. Estudios empíricos sobre la
1970
empresa y se continúa con lo RSE: percepción de ejecutivos sobre RSE; medición de la
iniciado en lo anterior RSE en EEUU.
Del resultado agregado del comportamiento social de las empresas va a depender, en gran
medida, el proceso de la sociedad. Ahora bien, el comportamiento social de la empresa no está
disociado de la propia esencia social; ésta, lógicamente, fundamenta a aquél. Por tanto, el
comportamiento social es algo natural y consolidado cuando la empresa es consciente de su
antropología social.
A menudo podemos ver que la falta de una base sustancialista del comportamiento social
conlleva acciones sociales de empresas sustentadas en ideas mercantilistas y de propaganda.
Aunque los efectos de estas acciones pueden ser positivos, socialmente hablando, cabe pensar que
no perdurarán y que, por dicha circunstancia, no llegarán a alcanzar legitimidad social,
generalmente otorgada a comportamientos perseverantes en el tiempo.
La RSE y su razón de ser pueden explicarse desde diferentes puntos de vista y sobre la base
de unos argumentos éticos, morales, económicos, de negocios y sociales. Desde una aproximación
desde los negocios suele ser concebida como una herramienta de gestión más al servicio de la
competitividad empresarial y de la creación de valor a largo plazo para los propietarios de las
firmas; es decir, como una cuestión de rentabilidad, como un instrumento estratégico para lograr
ventajas competitivas.
Desde una reflexión de carácter puramente económico, tal y como señalan Rodríguez
(2006) y AECA (2007), la razón económica de la RSC se justifica por la necesidad de proteger los
contratos implícitos y fomentar las inversiones específicas que los diferentes grupos de interés
hacen en la empresa, desarrollar la innovación y el aprendizaje de la organización, compensar los
riesgos no diversificables asumidos por los stakeholders como los empleados o los proveedores,
interiorizar los efectos externos y, en definitiva, entender la empresa como espacio de cooperación
y legitimidad social.
Así pues, en el debate actual podríamos decir que se están defendiendo dos aproximaciones
diferentes al concepto de RSE y al modelo de empresa que hay implícito tras la RSE. Una teoría
stakeholder instrumental, filantrópica-estratégica y que busca el valor del accionista sin grandes
transformaciones que Rodríguez (2007) define como RSE estratégico-instrumental.
La otra visión es la que se denomina RSE avanzada, parte de una teoría stakeholder
normativa con argumentos éticos, sociales políticos y económicos y de un modelo pluralista.
del gobierno de la empresa y de la orientación de sus negocios. El resto de stakeholders son medios
e instrumentos para aportar mayor valor al accionista a largo plazo.
Figura 2: Diferentes tendencias de la RSC dependiendo del diálogo con sus stakeholders
Siguiendo a Kay (1996), la compañía se concibe como una institución social articulada
mediante un nexo de relaciones de confianza mantenidas a largo plazo. Ello supone que
administradores y gerentes deben preservar y aumentar el valor de los activos bajo su control, no
actuar meramente como agentes de los accionistas. Activos son no sólo los tangibles, sino también
las capacidades de los empleados, las expectativas de los clientes o proveedores, la reputación e
imagen de la empresa dentro de la sociedad, etc.; es decir, activos decisivos en el largo plazo.
La RSC bien entendida es una cuestión de negocio que persigue crear valor a largo plazo
para los inversores, consumidores y otros grupos de interés, mediante el aprovechamiento de
oportunidades de negocio y gestión integral de riesgos vinculados al nuevo entorno, económico,
social y medioambiental.
Los estudios dejan entrever, en su mayoría, la existencia de una relación positiva o neutra
entre la performance social y la financiera. Los mercados financieros son conscientes de ello y lo
premian. La gestión de activos con criterios de RSC se ha visto multiplicados por 4 en un breve
periodo de tiempo en toda Europa.
La RSC se concibe como una forma de gestión cuyo objetivo es hacer bien las cosas para
todos (accionistas, empleados, clientes, sociedad en general). Así pues, la gestión de dicha
responsabilidad social supone el crecimiento e integración en la gestión y en las operaciones de la
organización de las preocupaciones sociales, laborales, medioambientales y de respeto a los
derechos humanos, que generen políticas, estrategias y procedimientos que satisfagan dichas
preocupaciones y configuren sus relaciones con sus interlocutores.
La RSC exige ir más allá de la ley, pero supone asumir los tratados y convenios
internacionales sobre derechos humanos, derechos laborales y protección del medio ambiente con
especial atención a los emanados de la Organización Internacional del trabajo y sus convenios.
Tal y como recoge una informe de la consultora KMPG de 2005, que analiza las tendencias
en elaboración de informes y memorias de las grandes corporaciones del mundo, los 3 factores
económicos más importantes por los que las compañías se preocupan por la RSC eran: innovación y
aprendizaje, motivación de los empleados, y gestión y reducción de riesgos.
Respecto al alcance o contenido del concepto de RSC, los distintos estándares, directrices o
guías suelen distinguir 3 ámbitos: económico, social y ambiental y cómo éstos afectan a los distintos
grupos de interés, que son los interlocutores o agentes con los que las empresas mantienen
relaciones económicas o de otra índole.
También influyen las normas de comportamiento tomadas por otras empresas de la misma
industria y de otras de la misma zona o región. El proceso de benchmarking (comparación con la
referencia del mercado) implica la identificación de la posición de la empresa respecto a unos
parámetros que evalúan su actuación. Las empresas que estén en el nivel más bajo tienden a
mejorar, por lo que las normas para todo el sector también.
El proceso organizativo hace referencia al proceso por el que la alta dirección hace explícitas
sus expectativas a otros miembros de la organización y a los stakeholders. Las claves para ello se
encuentran en la formulación de la estrategia, y en la distribución de recursos y poder.
retribución sirven para asegurarse de que las expectativas de los gestores son entendidas y
seguidas. Los sistemas de retribución, monetarios o no, sirven como motivación para compartir las
expectativas de la alta dirección.
En cualquier caso, y dado que la RSE es un concepto relativo que varía con las
circunstancias, la determinación del contenido debe realizarla cada empresa, después de identificar
a los stakeholders, analizar sus demandas y estudiar la forma de responder a ellas.
EMPLEADOS:
Los salarios deben ser, por lo menos, iguales al mínimo interprofesional y suficiente
para sostener las necesidades básicas y proporcionar algún ingreso discrecional. Los
beneficios y salarios deben ser detallados clara y regularmente. La empresa
asegurará la seguridad de los trabajadores más allá de la jubilación y en caso de
enfermedad, estando al corriente de pago con la Seguridad Social o facilitando a sus
empleados la contratación de seguros y planes de pensiones privados. Se
promoverá la participación económica del trabajador en los resultados de la
empresa.
Se promoverá la responsabilidad y libertad de los empleados, la información sobre
los procesos empresariales, la autorrealización en el puesto de trabajo, el trabajo en
equipo, la participación de los trabajadores en las decisiones de la empresa. Se
evitará la burocracia, se promoverá la descentralización, el diseño de tareas y
organigramas con sentido.
Se garantizará en la medida de lo posible la seguridad del empleo. Pero, dado que el
entorno cambiante impide garantizar a largo plazo el nivel de empleo, la empresa
se comprometerá y desarrollará medidas para garantizar la aptitud de los
empleados, manteniendo y aumentando su empleabilidad con formación.
No se tomarán medidas de castigo contra los empleados que denuncien prácticas
de dudosa moralidad o legalidad, o que se opongan a llevarlas a cabo.
DE LA EMPRESA AL ACCIONISTA
COMPETENCIA
PROVEEDORES
MEDIO AMBIENTE
Cuestiones a las que también se ve sometida la entidad por parte de evaluadores externos,
como las gestoras de índices bursátiles de sostenibilidad o de fondos de inversión y de pensiones,
interesados en conocer estas cuestiones de cara a sus decisiones de inversión.
Estas preguntas y muchas más relacionadas con la RSE tienen su respuesta en el manual El
compromiso con los stakeholders, cuya versión en castellano hemos de agradecer a Telefónica y al
Instituto Noos.
1. Pensamiento estratégico:
2. Análisis y planificación:
Determinar los riesgos que amenazan la relación entre la compañía y los grupos de
interés.
Aprovechar oportunidades. Tratamiento de temas y aspectos que interesan a los
stakeholders, o que pueden interesarles en un futuro, y a que a día de hoy no se
atienden o están insuficientemente atendidos.
Tener precaución de no generar en ningún momento falsas expectativas.
Sentar las bases para la creación de capital relacional. Confiar más en las relaciones
en vez de en nosotros
4. Proceso de relación:
Numerosos estudios avalan que la RSE no tiene por qué estar reñida con la rentabilidad,
sino todo lo contrario, ya que gestionar de forma más responsable la empresa, sus recursos y los
riesgos a los que se enfrenta es sinónimo de excelencia y, por tanto, de mejor percepción por parte
de los mercados financieros y clientes.
La RSE bien entendida es una cuestión de negocio que persigue crear valor a largo plazo
para los inversores, consumidores y otros grupos de interés, mediante el aprovechamiento de
oportunidades de negocio y gestión integral de riesgos vinculados al nuevo entorno, económico,
social y medioambiental. Desde esa perspectiva, es una oportunidad para la generación de nuevos
ingresos a través de la innovación, la diferenciación o el diseño y distribución de productos a nuevos
clientes.
Los estudios realizados hasta la fecha dejan entrever, en su mayoría, la existencia de una
relación positiva o neutra entre comportamiento social y financiero. Los mercados financieros son
conscientes de ello y lo premian.
Uno de los documentos sobre el tema es el informe elaborado por la iniciativa financiera de
programa de Naciones Unidas por el medio ambiente y la consultora MERCER en 2007 titulado
Desmitificando el rendimiento de la inversión socialmente responsable. El informe hace un repaso
sobre veinte estudios que analizan esta relación. Diez de los estudios no sólo han demostrado que
la inversión en base a criterios sociales y medioambientales no tiene un rendimiento financiero
menor al de cualquiera otra inversión, sino que éste es superior. De los otros diez estudios, siete
demostraban una relación neutra entre comportamiento social y financiero, y tres concluían que
existía una relación negativa, aunque estos últimos estudios se basaron en una metodología
deficiente o inconsistente.
Otra revisión de la literatura sobre la relación entre performance social y financiera, algo
más antigua pero no menos válida, es la realizada por Griffin y Mahon en 1997 y publicada en la
revista Business and society con el título “el debate entre rendimiento social corporativo y
rendimiento financiero corporativo: 25 años de investigación incomparable”. En ella se vuelve a
incluir que la relación existente entre ambos rendimientos es de carácter positivo. Además, estos
autores hacen un repaso de la evolución que ha experimentado la metodología desde los primeros
estudios sobre el tema en los años setenta hasta los previos a la publicación de su obra en los años
noventa.
Para ello identificar a los grupos de interés es el primer paso. Posteriormente, las empresas
deben establecer una jerarquía entre ellos, a fin de determinar la relevancia de sus modos de
interacción. Esta práctica es parte integrante de las políticas de Responsabilidad Social de las
Empresas (RSE).
Los grupos de interés o stakeholders son personas o grupos de personas que tienen
impacto en, o se ven afectados por las actividades, productos o servicios de una empresa (u otra
organización).
Los grupos de interés abarcan una amplia variedad de actores, tales como:
Una vez que las organizaciones han tomado conciencia de los diversos públicos que
interactúan con ellas, es importante categorizarlos en función de las expectativas, problemas, zonas
geográficas, su impacto en la actividad de la empresa y viceversa.
Además, las relaciones con los grupos de interés pueden desempeñarse en muchas
maneras:
4.2.1. Introducción
Globalmente:
o Introducir prácticas de diálogo y comunicación transparente con todos los
grupos de interés.
o Identificar grupos de interés relevantes en base a un análisis de necesidades
comunes.
o Crear valor para todos.
o Compartir experiencia con los grupos de interés.
Localmente:
o Comprender mejor las expectativas y las preocupaciones de los diversos
grupos de interés, mientras que se concilian las expectativas y limitaciones
individuales de ambas partes.
o Clarificar el compromiso concreto y objetivos puntuales con respecto a cada
uno de los stakeholders.
o Apoyar la RSE de la empresa al tiempo que se fortalece el desarrollo de la
comunidad encaminado hacia un progreso continuo.
o Adaptar el proceso de diálogo a las necesidades de los diferentes entornos
de trabajo.
Tenemos lo que son inversores o accionistas, que son aquellos que proporcionan el
capital para que una empresa pueda desarrollar sus actividades.
Los proveedores, que son los que proporcionan esa materia prima o ese tipo de
servicios que la empresa necesita para la realización de sus actividades.
Los empleados, las personas encargadas de utilizar esos recursos para proveer a
sus clientes de productos y servicios.
Pero los grupos de interés no pueden limitarse únicamente a los stakeholders internos, sino
a una escala más alejada, dentro de esta escala podemos encontrar agentes como pueden ser los
competidores, la sociedad en general, el medio ambiente, las administraciones públicas o una
infinidad de agentes diferentes.
La lógica de las políticas de RSE es que una empresa que desee interactuar con sus grupos
de interés debe elegir los prioritarios y/o que tienen mayor impacto en el negocio. A menudo, el
primer paso consiste en identificar a todos ellos y, a continuación, establecer una jerarquía basada
en los riesgos, las categorías y las expectativas involucradas.
Hay diferentes formas de clasificación, cada organización elegirá la suya de manera más
conveniente:
GDF SUEZ vincula la gestión de sus stakeholders con los círculos concéntricos en los
que se estructura su actividad:
o El Grupo del primer círculo: los accionistas, filiales y empleados.
o El círculo de mercado: clientes, proveedores y competidores.
o El círculo más amplio de las personas (comunidad) y el medio ambiente
(planeta).
Todo el personal de GDF SUEZ, desde la alta dirección hasta los simples
trabajadores, tiene la obligación de no actuar de un modo que afecte negativamente a su
reputación o plantee dudas en cuanto a su ética.
Empleados.
Clientes
Asociaciones de clientes.
o Esfera pública:
Autoridades públicas.
Asociaciones sociales, medioambientales y ONG´s.
Medios de comunicación
o Esfera económica:
Accionistas
Comunidad financiera y agencias de calificación social y ambiental.
Distribuidores
o Esfera industrial y científica:
Organizaciones profesionales.
Una vez que se identifican las distintas categorías de los grupos de interés, se deben
priorizar siguiendo una serie de estrategias y procesos. Los distintos métodos son los siguientes:
Estos pueden comenzar con una denuncia o evolucionando a través de otras etapas como el
diálogo o engagement, y, en el mejor de los casos, pueden llegar a dar lugar a una asociación. En el
último caso, los socios se alían con una visión de coconstrucción.
Esta matriz puede ayudar a especificar el grado de integración de los diferentes grupos de
interés en el proceso de toma de decisiones:
Herramientas de
implantación
Mejorar la estructura del diálogo basado en los lugares de trabajo: a tal fin, en
2005 se puso en marcha un proceso involucrando a todos los grupos de interés
en torno a los principales centros industriales.
Mejorar la comprensión de las expectativas de los grupos de interés: se llevan a
cabo estudios regulares sobre las percepciones de estos grupos y su política de
responsabilidad social y ambiental.
Desarrolla una metodología de identificación de sus grupos de interés locales externos para
ayudar a los lugares de trabajo a comparar las percepciones de las expectativas de los grupos de
interés locales con sus expectativas reales.
El grupo.
Las expectativas.
Las herramientas de diálogo y gestión relativas a cada grupo.
Ejemplo de esta priorización se ha dado por ejemplo en la empresa Arcelor Mittal. Basada
en una distribución equilibrada de sus grupos de interés en círculos concéntricos que identifica:
El compromiso con los stakeholders requiere que las empresas especifiquen la naturaleza
de sus relaciones además de las acciones concretas tomadas para garantizar la realidad de los
compromisos.
Entre las iniciativas más significativas, los procesos y herramientas en el compromiso con los
grupos de interés más utilizados, y que también pueden servir como soporte para los reportes no
financieros, encontramos:
GRI: Una iniciativa multi-stakeholder que establece un marco común para el reporte
voluntario de las incidencias económicas, sociales y ambientales de la actividad de las
organizaciones.
En el indicador 4.16, busca enfoques adoptados para la inclusión de los grupos de interés,
incluidas la frecuencia de su participación por tipos y categorías de grupos de interés…
En el 4.17 trata de las principales preocupaciones y aspectos de interés que hayan surgido a
través de la participación de los grupos de interés y la forma en la que ha respondido la
organización a los mismos en la elaboración de la memoria.
SGE 21: Es la primera norma europea certificable que establece los requisitos que debe
cumplir una organización para integrar en su estrategia y gestión la Responsabilidad Social.
En el apartado 6.1.7 la SGE 21:2008 (entraremos en detalle más adelante) establece que las
organizaciones deben desarrollar un modelo documentado de relación con sus grupos de interés.
Este modelo incluye, criterios para identificar y clasificar a los stakeholders, una metodología para
detectar sus expectativas y el establecimiento y priorización de planes de acción y comunicación.
Una vez identificados, clasificados y jerarquizados los grupos de interés, es necesario saber
la importancia del diálogo de las empresas con sus stakeholders. Este diálogo significa un
compromiso tanto por los grupos de interés que toman parte en él, como por parte de la empresa.
Es un proceso a medio-largo plazo de comunicación, es decir, no son acciones puntuales sino que es
un proceso que tiene que seguir unos procedimientos y criterios, en el que ambas partes se
comprometen a escucharse mutuamente y adquieren compromisos que permiten que la empresa
ejerza esa responsabilidad social.
La RSC es, ante todo, gestión: es una nueva concepción del modelo de empresa que
introduce nuevas fórmulas de administración, organización y actuación. Una de estas fórmulas es el
engagement, práctica cada vez más extendida que implica la involucración de los diversos grupos de
interés de la compañía en sus actividades en pro de un objetivo común: el beneficio de todos.
El término anglosajón engagement suele traducirse al español como “diálogo activo con los
grupos de interés” pero también podría traducirse como “compromiso”. Ya que eso es, al fin y al
cabo, lo que viene a significar su aplicación por parte de una compañía: un compromiso de ésta con
sus grupos de interés.
Las características del engagement hacen que no sea una práctica aislada o puntual, sino un
proceso continuo y transversal a todas las actividades de la compañía que requiere una
coordinación y atención global.
El engagement genera confianza entre las compañías y sus grupos de interés, que al fin y al
cabo, es el activo más valorado, más difícil de crear y más fácil de perder. Por tanto, se muestra
como un ingrediente indispensable para el éxito social y económico de la compañía. Un adecuado
ejercicio de diálogo activo hace que la sociedad y el resto de grupos otorguen a la compañía su
“licencia para operar”, es decir, que sea percibida como legítima, que haya obtenido el derecho a
operar en la comunidad y la confianza de la gente afectada directa o indirectamente por la
actuación empresarial.
Las diferencias que existen entre los grupos en cuanto a su composición, demandas y
expectativas hacen que podamos identificar características particulares en el diálogo entre una
empresa y cada uno de estos grupos de interés.
Existen una serie de paneles que corresponden a las diversas expectativas y opciones
estratégicas de las partes. El rol de los paneles puede tomar diferentes formas y dar respuesta a un
tema específico o a todos los asuntos relacionados con la RSC de la organización. Los paneles
pueden abrir sus órganos de decisión a una mayor diversidad.
Los paneles se han convertido cada vez más en una herramienta que manifiesta el
compromiso empresarial con los grupos de interés con el fin de pasar de una posición defensiva a
una estrategia global que abarca tanto riesgos como oportunidades. De hecho, debido a su formato,
repetición e interactividad, los foros que expresen puntos de vistas diferentes o incluso divergentes
pueden facilitar el paso de una relación de confrontación directa a una relación de confianza.
La primera reunión de un grupo es una oportunidad para todos: los stakeholders pueden
comprobar si las intenciones de la empresa son verdaderas, mientras que la alta dirección pueden
darse cuenta de que no se trata de una pérdida de tiempo. Teniendo en cuenta que la reputación
está en juego en los 2 lados, los miembros del grupo aprenden a conocerse y a comprender que
ellos pueden hablar juntos sin desprestigiarse mutuamente. Tanto para la empresa, como para los
grupos de interés, los paneles ofrecen la oportunidad de acelerar la curva de aprendizaje mutuo y
fortalecer la capacidad para comprender e influir sobre la relación entre la estrategia corporativa y
las cuestiones sociales.
El buen gobierno corporativo: Las empresas están confiando cada vez más en los
paneles para dar respuesta a los asuntos sociales y ambientales estratégicos en su
modelo de negocio. Los paneles son una innovadora forma de diálogo con los
grupos de interés, que puede contribuir a reducir la brecha entre el compromiso
con los grupos de interés y el buen gobierno corporativo, al reunir a expertos
externos y a la alta dirección en el mismo sitio.
Una mayor exposición a potenciales ataques debido a que sus actividades están
bajo constante vigilancia; el diálogo nunca es garantía contra las campañas de
algunas ONG´s.
Riesgo de que los stakeholders realicen una comunicación colectiva en contra de la
empresa que sea más fuerte que las posiciones individuales.
Reunir a expertos puede identificar nuevos temas: riesgo de que los grupos de
interés descubran problemas de los cuales no tenían conocimiento previo.
Riesgo de que los puntos de vista de un grupo de interés se vuelvan dominantes o
incontrolables.
Riesgo de participar siempre con las mismas ONG´s.
Poner a todos los grupos de interés al mismo nivel a pesar de que no pueden tener
el mismo peso, mientras que los temas deben ser tratados jerárquicamente.
La norma parte de que antes de cualquier acción es necesario definir el objetivo perseguido,
su alcance y la identificación de los stakeholders que participarán. Una vez definido todo ello, se
inicia un proceso que consta de cuatro fases: planificación, preparación, implementación y una fase
final que incluye actuación, revisión y mejora.
Hasta hace muy poco el tratamiento de la RSC se ha limitado casi exclusivamente al ámbito
académico, siendo el concepto prácticamente desconocido de cara a la gran mayoría del público.
Pero el concepto va más allá, teniendo como objetivo fomentar de una manera práctica y a través
de una forma accesible y comprensible el conocimiento de la RSC en todos los sectores sociales que
tradicionalmente han permanecido ajenos a su significado.
Posteriormente las empresas tienen que proporcionar un marco adecuado para que se
efectúe el diálogo, dotando los recursos necesarios para el resto del proceso, tomando acciones
que garanticen que los interlocutores poseen la base necesaria para participar en el proceso e
identificando y minimizando posibles riesgos que dificulten el diálogo.
Detallando, en esta fase de planificación, lo que queremos es definir qué objetivos y alcance
va tener nuestro proceso de diálogo con los grupos de interés. Tenemos que identificar quienes son
nuestros stakeholders y también quienes van a representar a estos grupos. Dentro de esta
identificación tenemos que saber qué relación tienen con la empresa, cuales son las prioridades de
estos grupos de interés, qué demandas nos han hecho y una vez establecido todo esto, (objetivos,
alcance, grupos de interés), vamos a definir hasta que nivel queremos llevar nuestro diálogo con
nuestros stakeholders.
Estos niveles pueden ser desde una simple consulta, pasando por aspectos de negociación
que suele ocurrir con empleados, la involucración de algunos grupos de interés en actividades
puntuales, la colaboración entre la empresa y sus grupos de interés para llevar a cabo iniciativas
concretas y llegar incluso al empoderamiento, que es el nivel máximo en el que la empresa
integraría dentro de sus actividades operativas o de gestión a representantes de los grupos de
interés.
Después de todo esto, se tiene que diseñar el plan de engagement, este plan tiene que
incluir una serie de indicadores que nos permitan evaluar el proceso en sí mismo. Una vez hecho
esto, ya se tiene claro cómo se va a realizar el proceso de engagement y para qué queremos
realizarlo y podemos avanzar al siguiente punto del proceso.
LA PREPARACIÓN: Una vez planificado, las empresas tienen que proporcionar un marco
adecuado para que se efectúe el diálogo, dotando los recursos necesarios para el resto del proceso,
tomando acciones que garanticen que los interlocutores poseen la base necesaria para participar en
el proceso e identificando y minimizando posibles riesgos que dificulten el diálogo.
En esta fase se prepara las actividades en sí mismas que nos permitan llevar a cabo esos
diálogos. En primer lugar, se tiene que asegurar de que se dan unos recursos necesarios para que se
puedan realizar las actividades de engagement, estos recursos se refieren tanto a recursos humanos
como a recursos económicos para llevar el proceso en sí mismo pero también para permitir
implementar lo que nuestros grupos de interés nos pidan.
Dentro de la fase de preparación también hay que formar a las personas que van a
participar en estos procesos para que sepan cómo llevarlos a cabo, tengan la información completa
de la empresa y los aspectos que se van a evaluar y además identificar y minimizar posibles riesgos
que hagan que nuestros procesos de diálogo sean más difíciles o se atasquen en ciertos puntos.
Estas dificultades, cada empresa tendría que identificarlas en cada uno de sus procesos de
engagement analizando lo que son objetivos, lo que son grupos de interés participantes, recursos
que se pueden destinar al proceso y un ejemplo, podría ser la diferencia de posibles prioridades
entre grupos de interés.
LA IMPLEMENTACIÓN: En esta fase las empresas tienen que invitar a todos los participantes
de una forma adecuada, facilitar los materiales y documentación que proporcione una visión
completa de la compañía y del proceso. Las compañías tienen que documentar debidamente el
proceso y sus resultados, desarrollando un plan de acción en respuesta a las inquietudes de los
stakeholders y comunicando a los participantes tanto los resultados del proceso como el plan de
acción diseñado.
El primer paso que hay que hacer para esta implementación es convocar a los grupos de
interés, en ésta convocatoria se envía la información que necesitan para que sepan en qué consiste
el diálogo, quienes participan en este diálogo, qué resultados esperan obtener y qué acciones
concretas de diálogo se van a llevar a cabo.
Una vez realizada esta primera fase de implementación, se tiene que realizar actividades de
diálogo en concreto, que podrían ser a través de reuniones, envíos de encuestas, entrevistas
telefónicas, dinámicas grupales, etc. En esta fase de implementación es importante documentar
todo el proceso y los resultados que salgan de estas reuniones.
Con estos resultados la empresa tiene que hacer un plan de acción que tiene que trasladar
internamente para que se cumplan los compromisos que la empresa está adquiriendo con las
demandas de sus grupos de interés, de aquí la importancia de delimitar claramente hasta que límite
se quiere llegar con este proceso de diálogo, no se puede hacer, que los grupos de interés esperen
un cambio radical de la compañía cuando a lo mejor sólo se está en capacidad de cambiar una
política o una acción concreta.
Dentro también de esta fase de implementación hay que comunicar cuáles están siendo
todos los resultados del proceso de engagement y del plan de acción que se está llevando a cabo.
ACTUACIÓN, REVISIÓN Y MEJORA: En esta última etapa las empresas monitorean y evalúan
el proceso y sus resultados, sobre los que aprenden y mejoran, dan seguimiento a los planes de
actuación derivados del diálogo con sus grupos de interés y reportan públicamente los resultados
alcanzados.
Se revisa lo que se ha hecho con el objetivo de mejorar y continuar otra vez en una nueva
fase de planificación, preparación e implementación, cerrando la “rueda” en un proceso sin fin.
A falta de un marco de referencia que permita tangibilizar la RSC, la empresa determina sus
propios criterios y exige que estos sean verificados. Para ello puede utilizar una serie de
herramientas de gestión de los grupos de interés.
En términos generales, los grupos de interés deben medir o por lo menos evaluar tres
factores:
Importante recordar que como en toda relación, hay que tomarse tiempo para conocerse
unos a otros, y basar las alianzas en una asociación franca, clara y precisa, en la que se establezcan
tiempos determinados para alcanzar acuerdos. Hay que asegurar el apoyo de todos los
involucrados, incluyendo empleados y sus representantes, así como involucrar a los más altos
directivos de ambos lados.
Si bien las empresas y las ONG´s han conservado sus funciones por separado, han
desarrollado también las áreas también las áreas comunes de diálogo, permitiendo que de manera
conjunta puedan encontrar respuestas creativas a nuevos retos. Así pues está surgiendo una
verdadera asociación estratégica entre las empresas y las ONG´s.
El término "asociación estratégica" significa que se toman acciones conjuntas, donde los
objetivos compartidos de uno u otro pueden ser alcanzados, pero en el que cada una de las partes
conserva su propia identidad, valores e independencia. Estas alianzas estratégicas constituyen
ahora una verdadera alianza entre las organizaciones. Los intereses fundamentales de ambas partes
están íntimamente relacionados, e incluyen intercambios de información y experiencias, esfuerzos
conjuntos en la misma dirección, y la construcción de relaciones duraderas.
En las últimas décadas se han producido cambios sustanciales tanto en empresas como en
ONG´s. Las ONG´s están más organizadas, profesionalizadas y muchas abarcan un ámbito
internacional. También ha habido un espectacular aumento de su número, desde 20.000 en 1985 a
más de 50.000 en 2005, de las que más de una décima parte son internacionales. Durante el mismo
período, sus competencias y ámbito de influencia se han ampliado considerablemente. En este
sentido, las ONG´s son cada vez más flexibles, y están más interesadas en la búsqueda de soluciones
desde el mundo de los negocios.
Al mismo tiempo, las empresas han tenido que afrontar el hecho de que las limitaciones
productivas y de distribución de materiales, bienes y servicios se han ampliado y globalizado. Estos
dos factores han aumentado el número de desafíos económicos, sociales y ambientales. Como
resultado de ello las empresas han comenzado a percibir las oportunidades de colaborar con el
tercer sector en el desarrollo de un mejor entorno de trabajo en el cual actuar, ganar en
credibilidad y mejorar su reputación. A lo largo de los años cada uno de estos dos mundos ha
ganado en poder, así como en experiencia y sentido de la responsabilidad.
Tradicionalmente las ONG´s han abarcado los campos de la protección del medio ambiente,
ayuda al desarrollo, salud y educación, derechos humanos, lucha contra la pobreza y la corrupción,
protección de los consumidores, estrategias de la cadena de suministro, y así sucesivamente. Su
ámbito de influencia es tan amplio que es posible construir una alianza en cualquier tema
relacionado con la RSE:
Una profunda investigación sobre la relación entre las empresas y los grupos de interés ha
llevado a la conclusión de que las prácticas son de varios tipos y se dividen en varios grados de
relación:
La elección de socios es muy delicada y puede generar dudas cuando los asuntos son
importantes. La empresa deberá ajustar sus opciones basándose en los siguientes criterios:
Los pasos para establecer una alianza con éxito entre la ONG y la empresa:
Este esquema tiene por objetivo examinar cada uno de los pasos necesarios para establecer
una alianza ONG-empresa de manera exitosa. Se han definido siete pasos diferentes. El seguimiento
de estos pasos permitirá a la empresa y a la ONG entender e invertir adecuadamente en el proceso
de asociación y por tanto, asegurar el éxito y la viabilidad a largo plazo del proyecto.
PASO 2 Iniciar un diálogo sincero y fomentar un intercambio fluido: Este paso se refiere a la
comunicación entre la ONG y la empresa. Es un paso muy importante porque tiene que haber
diálogo y comunicación entre las dos partes a lo largo de todo el proceso de gestión de la alianza.
PASO 3 Identificar y seccionar el socio ideal: El tercer paso se refiere a las herramientas que
las ONG´s y las empresas utilizan para la identificación y selección del socio.
PASO 5 Definición del contenido de la alianza: Insiste en una precisa definición de los
contenidos de la alianza, es decir, una descripción detallada de todos los puntos que deben ser
discutidos y que deben parecer en el contrato de asociación.
En los últimos años, la cadena de suministro se ha convertido en una de las áreas más
expuesta a la vigilancia de los grupos de interés, sobre todo en la manera en la que se conciben los
productos y servicios, y los impactos sociales y medioambientales de su actividad. Como el principal
nexo entre la empresa y su entorno, el área de compras juega un papel central en la integración de
prácticas de desarrollo sostenible y RSE dentro y fuera de la organización. Las compañías, desde el
área de compras, deben gestionar las demandas cada vez más numerosas de los grupos de interés
que con frecuencia son contradictorias entre sí (clientes, empleados, proveedores, sindicatos,
accionistas, prescriptores, la sociedad civil...) y tratar de encontrar la manera de llegar a equilibrio
satisfactorio.
La teoría: tanto compra sostenible como consumo responsable hacen referencia a aquellas
estrategias de compra de bienes o servicios en las que se tienen en cuenta diversos aspectos
económicos, sociales y medioambientales en la cadena de suministro.
De esta manera la empresa fomenta que sus proveedores adopten unos valores comunes y
les invita a que inicien un proceso de mejora continua. Este proceso puede llevarse a cabo como
parte de un enfoque de compras global, o a través de objetivos específicos priorizando por medio
de análisis de riesgo en el producto, mercado o país.
Cada vez un mayor número de empresas están apostando por estrategias de compra
sostenible y por fomentar la integración del desarrollo sostenible en sus relaciones con los
proveedores y subcontratistas debido al creciente número de limitaciones y oportunidades externas
con las que se encuentran.
Hoy en día las empresas se perciben como parte de un ecosistema, más que como
entidades económicas aisladas. En su rol de compradores, las empresas tienen la responsabilidad
de intentar mejorar las relaciones con sus socios económicos, así como su desarrollo futuro.
Dado el gran número de situaciones posibles, no existe una única estrategia de compromiso
en RSE para proveedores y subcontratistas, cada empresa debe buscar la estrategia que más se
ajuste a sus necesidades. No obstante, existen diversos enfoques en función de la visión estratégica
que la compañía tenga en relación a sus proveedores, los riesgos específicos del sector, la cultura
corporativa o la madurez con la que afronten el proceso de compra responsable.
• Mejorar la calidad y/o la gestión del riesgo social: Estos enfoques están vinculados con la
internacionalización de la producción y la globalización en la cadena de suministro. Se desarrollaron
inicialmente en sectores industriales con un alto riesgo medioambiental, en la industria textil y
sectores de distribución masiva (riesgos sociales y de los derechos humanos). Actualmente tienden
a ser enfoques ampliamente asumidos por los principales grupos internacionales que generalmente
se encuentran altamente descentralizados y/o por aquellos que utilizan proveedores locales en
países emergentes.
Este enfoque requiere realizar un mapa previo de los proveedores con los que se trabaja
teniendo en cuenta diversos criterios: productos, mercados, países… Se trata de una herramienta
de desarrollo progresivo y debe adaptarse específicamente a las circunstancias particulares de cada
caso.
Bajo este enfoque el desarrollo sostenible tiende a convertirse en un criterio adicional para
la evaluación y selección de proveedores, adicionalmente a cuestiones tales como la calidad / coste
/ tiempo. Las obligaciones de los proveedores se incrementan. Se amplía la relación con los
proveedores a medida que se avanza en la integración de los criterios de compra responsable.
• El cambio de mentalidad de una cultura de gestión reactiva ante el riesgo a una cultura de
prevención del mismo.
Desde una perspectiva a largo plazo, las empresas deben actuar responsablemente en su
entorno asegurando que sus actividades contribuyan al desarrollo de la comunidad local. El
establecimiento de una compañía en un barrio, ciudad, polo industrial, región o país implica un
compromiso a favor de la comunidad local y su desarrollo.
Esta acción, usualmente llamada desarrollo comunitario, es una cuestión clave para las
compañías, tanto en términos de aceptación por parte de los grupos de interés locales como en
términos de crecimiento sostenible del área. Generalmente, se distingue por un lado, población y
representantes locales (ONG´s, asociaciones) y por otro, representantes electos y autoridades del
territorio y sus residentes.
• Licencia para operar – integración política, económica y social: Involucrar al entorno social
y favorecer el desarrollo local genera relaciones positivas y fomenta la comunicación entre
compañía y grupos de interés locales. También facilita la aceptación de las actividades por parte de
la población local y genera confianza entre los gobiernos locales, quienes en última instancia tienen
el poder de respaldar a la compañía en caso de dificultades, y de este modo se fomenta la
sostenibilidad en sus actividades a largo plazo.
• Identificar al agente idóneo para que inicie la consulta: la propia compañía, el alcalde, una
asociación civil,… Se debe dejar claro a priori el nivel de vinculación de los acuerdos alcanzados tras
la consulta. Independientemente del objetivo que se busque con la consulta el proceso debe estar
alineado con el plan de acción de desarrollo, relacionado con el diagnostico territorial…
• Especificar los objetivos de la consulta: Es preciso hacer la reflexión previa sobre si las
opiniones expresadas serán tomadas en cuenta o si simplemente serán usadas para medir
tendencias o expectativas. También es necesario establecer el nivel exacto de intervención de los
participantes: diálogo, consulta, decisión conjunta…
• Determinar los participantes: ¿es necesario implicar a toda la población? ¿Vale sólo con
representantes? ¿Los representantes deben ser de una o más categorías? ¿De acuerdo a que
criterio se seleccionan?
• Establecer una medición del retorno para el diálogo: Expectativa de retorno, elaboración
de un informe completo en el que se incluya una síntesis del debate, las distintas posiciones o
medidas correctivas (en su caso)
Indicadores
• HDI = Indicador de Desarrollo Humano (HDI según sus siglas en ingles, Human
Development Indicator). Este indicador se obtiene de teniendo en cuenta tres indicadores básicos
relacionados con la expectativa de vida, el índice de alfabetización y el nivel de ingresos. Se trata de
un indicador socioeconómico que otorga igual peso al bienestar económico y a dos de las mayores
dimensiones del desarrollo humano (salud y educación).
• Objetivos de Desarrollo del Milenio. Constituyen una serie de objetivos a alcanzar para el
año 2015 por los dirigentes de los Países Miembros de las Naciones Unidas:
Otras referencias:
• Principio Nº. 1 del Global Compact: evoca indirectamente la RSE en relación al entorno
social, estableciendo que las empresas deben promover y respetar la protección de los derechos
humanos proclamados internacionalmente en “su área de influencia”.
• Uno de los capítulos del Libro Verde de la UE dedicado a las “comunidades locales”
especifica que la RSE también cubre la integración de las compañías en su área local, ya sea dentro
de Europa o a nivel internacional. Las compañías deben hacer su contribución a la comunidad local
generando trabajo, salarios, servicios y ganancias.
• La SGE 21 establece una serie de requisitos en relación con el entorno social donde opera
la organización. Las medidas más relevantes son la necesidad de realizar una evaluación y
seguimiento de los impactos, tanto negativos como positivos, para establecer las medidas
oportunas para mejorar su contribución a la sociedad, o el establecimiento de un compromiso por
la transparencia en la actividad, facilitando cauces de comunicación y cooperación con los grupos
de interés.
• El marco de referencia usado por las agencias de evaluación “social” – La conducta de una
compañía en el territorio donde se establece es también clave en la evolución de su gestión de RSE
para agencias de evaluación no-financieras.
El diálogo con los empleados puede gestionarse en dos niveles: uno, de manera directa
(entrevistas individuales, encuestas de clima laboral, etc.), o de forma indirecta, a través de los
representantes laborales y sindicatos.
Hay una visión dual, con frecuencia las compañías consideran a los trabajadores como
grupo de interés, mientras que éstos se consideran a sí mismos como parte constituyente de la
empresa.
En el campo del diálogo social, además de los mecanismos directos de consulta como
pueden ser las encuestas de clima laboral, los sindicatos han llegado a ser reconocidos (al menos en
Europa) como interlocutores legítimos ante las compañías en cuestiones de RSE, Medio Ambiente y
sostenibilidad. En este sentido un importante número de compañías se han comprometido a iniciar
nuevas formas de diálogo tanto con los empleados como con sus representantes a nivel global y
europeo con el objetivo de formalizar su compromiso con la RSE.
- Miembros del Consejo Europeo del Trabajo (EWC, según sus siglas en ingles)
- Miembros del Cuerpo de Diálogo Mundial o Europeo
- Representantes de la Federación de Sindicatos Global o Europea
• Derechos Humanos
• Gestión de la diversidad
• Igualdad de oportunidades y no discriminación
• Conciliación de la vida personal, familiar y laboral
• Seguridad y salud laboral
• Descripción del puesto de trabajo
• Formación y fomento de la empleabilidad
• Seguimiento del clima laboral
• Reestructuración responsable
• Canal de resolución de conflictos
El término consumidor se refiere a una persona individual que compra o usa bienes o
servicios para satisfacer sus necesidades individuales. Veremos que los consumidores expresan sus
expectativas con relación a la compañía tanto directa como indirectamente.
Los consumidores deben diferenciarse de los compradores, siendo estos últimos aquellos
que efectivamente participan en el intercambio, esto es importante dado que su actividad está
generalmente regulada por ley y esto confiere un mayor poder de negociación que al consumidor.
Una nueva tipología de consumidores con mayor poder de información que se encuentra a
la vanguardia de estas preocupaciones Estas expectativas se articulan a través de los siguientes
temas:
Aún cuando las relaciones con los clientes tradicionalmente han sido reguladas por distintas
leyes y normativas (los requerimientos legales acerca de la información del producto cubren casi la
totalidad de bienes y servicios, desde bebidas alcohólicas a esquemas de ahorro), este compromiso
generalmente no ha alcanzado a los consumidores, por lo que constituye uno de los temas
principales para la RSE.
Para medir la efectividad del compromiso con los consumidores, se puede hacer referencia
a alguno de los indicadores propuestos por el GRI como observaremos más adelante:
responsabilidad social se ha visto espoleado por la situación actual que genera críticas al sistema
financiero y al diálogo trasparente entre las compañías, los accionistas y los inversores.
Sobre todo, los inversores buscan que les sea ratificada la calidad de su inversión. Más aun,
los accionistas tienen la percepción de no ser suficientemente valorados por las compañías que
cotizan en bolsa, especialmente en comparación con los inversores institucionales.
Los inversores demandan una mayor comunicación a los principales emisores de acciones,
exigiendo que ésta sea más directa, más transparente, más educativa y más reactiva.
Recomendaciones importantes:
La adopción de buenas prácticas de RSC es realizada por las empresas con distinta
intensidad ya que, en general, la adscripción a los diferentes códigos y estándares existentes para
definir y medir la RSC es voluntaria.
El proceso que permite determinar si una empresa es socialmente responsable pasa por 2
fases que, haciendo una paralelismo con las auditorías de calidad, podríamos denominar
normalización y certificación.
A finales de los años noventa, el inventario de la OCDE (1999) encontró 233 códigos de
conducta de los que los códigos de tercer nivel, emitidos por empresas individuales, representaban
el 84% del total del inventario y que son objeto de un escrutinio interno de la empresa más que de
un control externo.
Ante esta diversidad de normas, en el debate siguiente al lanzamiento en julio del 2001 por
parte de la Unión Europea del Libro Verde: Promover un marco europeo para el desarrollo de la
responsabilidad social de la empresa, se insistía en la necesidad de homogeneizar y reducir el
número de propuestas, sintetizándolas en una ISO de carácter universal.
Por su enfoque:
o Centrado en procesos
o Centrado en resultados
Modo de desarrollo:
o Unilateral
o Bilateral
o Multilateral
Alcance:
o Derechos humanos
o Derechos laborales.
o Medio ambiente
o Otros: conducta ética de empleados, corrupción, etc.
Enfoque stakeholder
o Empleados
o Inversores
o Consumidores
o Multistakeholder
Para algunos autores, los códigos de conducta son efectivos en cuanto sirven para orientar
decisiones, no tanto en sus efectos sobre la elección, sino en la justificación dada a la decisión. Así
pues, una forma de medir su efectividad y utilidad a través del grado en el que los empleados se
refieren a los valores del código a la hora de justificar sus decisiones o actuaciones. Los estudios
realizados no han llegado a evidencias concluyentes a este respecto. La mayoría de los estudios han
encontrado que los códigos no tienen mucho impacto en la toma de decisiones de los empleados,
aunque pueden haber servido para formar a los mismos en determinados cuestiones éticas.
En una segunda línea, se han empezado a utilizar códigos de buen gobierno corporativo,
inspirados en los criterios de control de los directivos y de sus retribuciones, vigentes desde hace
tiempo en Japón, y que sirvieron de inspiración al movimiento iniciado en Europa con el Informe
Cadbury (1992) y de la American Bar Association (1994) en los EEUU. En esta misma línea se
inscriben en España el Informe Olivencia, el Informe Aldama y el más reciente Código Unificado de
buen gobierno o Código Conthe.
Entre sus recomendaciones suelen destacar las que pretenden evitar la concentración de
todo el poder de la empresa en manos del primer ejecutivo, la revisión de su nombramiento al
menos cada 3 años, o la constitución de una serie de comités que supervisen los nombramientos,
los contratos y las remuneraciones de los directivos o las relaciones con los auditores.
También suelen sugerir que se aporte información completa sobre el conjunto de las
retribuciones de cada consejero, y una explicación clara de la política de las remuneraciones de la
empresa, la necesidad de integrar en los consejos de administración un número razonable de
consejeros independientes y que la dimensión de los consejos oscile entre 5 y 15 miembros. En
todo caso, el buen gobierno de las empresas hace necesario el desarrollo de códigos de conducta
específicos que autorregulen el comportamiento de los consejeros y eviten los conflictos de
intereses.
Este sistema de control de la cadena de valor se está extendiendo desde la industria del
juguete, a la de zapatos y ropa, petróleo, gas, minería, química incluso turismo. Las empresas los
prefieren a los sistemas de regulación tradicional ya que son compatibles con su estrategia de
negocio multinacional y global, subcontratando la producción. Los proveedores en países en vía de
desarrollo los ven como requisito previo para entrar en la cadena global de proveedores, ya que si
puesta en funcionamiento les facilitará el acceso al mercado, e incluso a veces, mejores precios.
Por último, en los códigos internos o códigos de tercer nivel, se observa que el contenido de
los mismos varía en cada empresa. Sin embargo, en general, los códigos suelen hacer referencia a
los siguientes asuntos: corrupción, pagos ilegales o ilícitos, financiación de partidos políticos,
conflictos de intereses, respecto a la ley vigente y respecto a los derechos humanos, tanto dentro
de la empresa como en la cadena de valor.
Hay muchos ejemplos de normas disponibles en estos momentos, las siguientes son los
estándares más conocidos y utilizados:
Sectoriales:
o Amnesty International Human Rights Principles for Companies (respeto a
los derechos humanos)
o FLA Charter Management (relaciones laborales)
o IFCTU Basic Code of Labour Practice (relaciones laborales)
o ISO 14000 (medio ambiente)
o SA 8000 (relaciones laborales)
Generales:
o Accountability 1000 (AA1000)
o CERES Orinciples
o Ethical Trading Initiative Base Code
o Global Reorting Initiative (GRI)
o Global Sullivan Principles
o United Nations Global Compact
SGE 21
GRI
ISO 26000
AA1000
Por otro lado, también existen agencias independientes de investigación que proporcionan
información al mercado (inversores, consumidores, gestoras de índices bursátiles, ONG, etc.) sobre
el comportamiento ético, social y medioambiental de las empresas. Estas agencias contrastan la
información proporcionada por la empresa, recurriendo a agentes terceros independientes (ONG,
asociados de derechos humanos, de defensa del medio ambiente, sindicatos, etc.). La cobertura
varía en cada caso, aunque normalmente disponen de información contrastada de las empresas que
componen los principales índices bursátiles en cada país.
Los índices de responsabilidad social sirven de referencia para buena parte de las
inversiones socialmente responsables. Estas inversiones no pretenden que las empresas descuiden
sus objetivos de riesgo y rentabilidad financiera, se conviertan en mártires y sacrifiquen su beneficio
para el beneficio de la humanidad, sino que se incorporen, como criterio en sus decisiones, el
conjunto de obligaciones y compromisos, legales y éticos, nacionales e internacionales, que se
derivan de los impactos que la actividad y operaciones de las organizaciones producen en el ámbito
social, laboral, medioambiental y de los derechos humanos. Esto es, que asuman sus
responsabilidades sociales.
Estos índices no pueden reflejar todos los valores morales de cada inversor particular o
grupo de inversores, aunque a la hora de definir los criterios de inclusión deberían tener en cuenta
las preocupaciones sociales y medioambientales más valoradas en ese momento por los inversores
a los que van dirigidos.
7. SGE 21
7.1. Introducción de Forética y la SGE 21
Forética es una asociación sin ánimo de lucro cuya finalidad es fomentar la cultura de
gestión ética y socialmente responsable en las organizaciones, que cuenta con más de 100
organizaciones y 70 socios personales. Ha desarrollado, con la ayuda de más de 100 expertos, un
código de conducta tipo y la Norma de Empresa SGE 21 como marco de actuación, que ha sido
reconocida como un referente europeo.
Como resultado de estas inquietudes se elaboró la Norma de Empresa SGE 21, en cuya
colaboración se contó con expertos representando a todos los grupos de interés, aprobándose la
primera versión en el año 2000.
7.2. Estructura
La norma está formada por 6 capítulos. Los 5 primeros explican los antecedentes y aspectos
generales del documento, mientras que el último capítulo desarrolla los requisitos certificables de la
norma, es decir, tanto la implantación como la auditoría del sistema de gestión.
Administraciones públicas. La norma exige más que lo legal, tratando de crear vías
de colaboración entre la administración y la empresa.
7.3. Características
La norma de empresa SGE 21 es un estándar consolidado. Cada vez es mayor el número de
organizaciones que están apostando por su metodología como forma de gestión de la
responsabilidad social. Desde su diseño y desarrollo, la SGE 21 fue creada como un instrumento
flexible y adaptable a las necesidades de las diferentes organizaciones. Esto se pone de manifiesto
en las distintas posibilidades y aplicaciones que presenta el sistema de gestión.
línea estratégica. Del mismo modo, genera los registros y sistematiza la información
necesaria, simplificando el proceso de elaboración de memorias de sostenibilidad.
7.4. Implantación:
7.4.1. Herramientas:
7.4.1.1. Liderazgo:
Por esta razón, la Alta dirección debe observar, bajo una mirada crítica, el cumplimiento de
la ley, considerando la ética; desarrollar una RSE, un código de conducta, conformar un comité de
gestión ética y RSE, delegar un responsable de la RSE y trazar unos objetivos e indicadores sobre el
cumplimiento de la empresa en el contexto de la ética y la responsabilidad empresarial.
Los principales artículos que contribuyen el liderazgo de una organización RSE son:
7.4.1.2. Gestión
El desarrollo experimentado en los últimos años en materia de RSE y los crecimientos retos
en materia ambiental llevan a las sociedades actuales a demandar mecanismos y herramientas que
les permitan asegurar una simbiosis entre gestión y valores de la organización.
Todo sistema de gestión está enfocado a la mejora continua. Las herramientas de las que
dispone la organización para garantizar este proceso son las siguientes:
7.4.1.3. Comunicación:
La organización informará, al menos cada dos años, sobre los aspectos ambientales
asociados a su actividad.
7.4.1.4. Diálogo
Para ello hay que establecer un modelo documentado de la relación que tiene la
organización con sus grupos de interés y se recomienda avanzar en las siguientes fases:
7.4.2.1. Comunidad:
7.4.2.2. Mercado:
La óptima relación que logre la organización con su entorno y las personas que forman
parte de su cadena de valor, podrá ser una ventaja competitiva que le permita un mayor
crecimiento financiero.
La gestión del capital humano es una de las más delicadas de la organización. Cada persona
debe tener confianza en su proceder ético y en el de sus compañeros de la organización.
La organización llevará a cabo una evaluación del clima laboral al menos cada tres años,
analizará los resultados y pondrá en marcha los mecanismos necesarios para su mejora continua.
La organización pondrá a disposición del empleado las vías adecuadas para dirigir sus
sugerencias, quejas o denuncias sobre aspectos relacionados con la Gestión Ética y Socialmente
Responsable de la organización. Se mantendrá un registro de las entradas y las medidas puestas en
marcha para su resolución así como de su eficacia.
La Alta Dirección establecerá una política pública de lucha contra la corrupción que
establecerá, entre otras:
7.5. Certificación
Forética atenderá las peticiones, sin impedir el acceso a la información a ningún solicitante.
Número de empleados.
Número de centros de trabajo y tipo.
Sector o actividad que desarrolla
Otros sistemas de Gestión implantados o certificados.
Una vez aprobada la oferta para la auditoría, se ha de definir el Plan de Auditoría en el que
se establecen, entre otros aspectos, las fechas de auditoría y el equipo auditor. Tanto la empresa
certificadora como la organización deben tener constancia de los datos de este plan.
El proceso de auditoría empieza con la revisión de documentos del Sistema de Gestión Ética
y Socialmente Responsable de la organización. Esta revisión será llevada a cabo en las oficinas de la
entidad certificadora por el auditor. Dependiendo de la amplitud y naturaleza de la documentación
y de acuerdo con el cliente o a petición del mismo se podrá realizar la revisión en sus instalaciones.
Los documentos de la organización se revisarán según todos los requisitos de la norma SGE
21 utilizando una lista de verificación de la documentación y teniendo en cuenta la legislación y
reglamentación aplicables.
Mientras dura el proceso de esta revisión, el auditor que lleva a cabo la revisión puede
preparar preguntas adicionales para realizar durante la auditoría “in situ”.
Esta fase comienza con una reunión de apertura en la está presente la dirección de la
organización y es presidida por el auditor jefe. En esta reunión se procederá al cierre de las No
Conformidades de la revisión de la documentación, si hubiera, después de estudiar los cambios
realizados a la documentación indicada en las acciones correctoras propuestas. Se confirmará el
programa de auditoría y el equipo auditor admitirá, siempre que sea posible, las modificaciones
propuestas por el cliente relativo a la indisponibilidad de personal o de las instalaciones.
Una vez finalizada la auditoría, y en el menor tiempo posible, el auditor jefe o miembro del
equipo crearán un informe de auditoría que recoja las observaciones, desviaciones y no
conformidades detectadas durante la auditoría.
Si las medidas correctoras son aprobadas por la certificadora, ésta enviará a Forética el
informe de auditoría junto con las medidas correctivas implantadas por la organización con sus
correspondientes evidencias.
El certificado tendrá una vigencia de 3 años desde la fecha de emisión del mismo. Antes que
concluya este periodo es necesario la realización de una auditoría de renovación con las mismas
características que la inicial. Tras esta auditoría se emite un nuevo certificado vigente para los 3
años siguientes.
Fácilmente integrable con otros sistemas de gestión. Permite la integración con los
sistemas de gestión de calidad, medio ambiente o prevención de riesgos laborales de la
organización.
El Marco, que incluye la Guía para la elaboración de Memorias, establece los principios e
indicadores que las organizaciones pueden utilizar para medir y dar a conocer su desempeño
económico, ambiental y social. GRI está comprometido con la mejora continua y el incremento del
uso de estas Guías, las cuales se encuentran a disposición del público de manera gratuita.
GRI es una organización sin ánimo de lucro con múltiples grupos de interés. Fue fundada
por CERES y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en el año 1997
en Estados Unidos. En el año 2002, GRI trasladó sus oficinas a Ámsterdam, donde actualmente se
encuentra su Secretaría. GRI cuenta con oficinas regionales ("Focal Points") en
Australia, Brasil, China, India y Estados Unidos, y además, cuenta con una red de más de 30.000
personas en todo el mundo.
GRI busca una economía global sostenible donde las organizaciones gestionen
responsablemente su desempeño e impactos económicos, ambientales y sociales, y elaboren
memorias de una forma transparente. Intentan hacer de la elaboración de memorias de
sostenibilidad una práctica habitual proporcionando orientación y respaldo a las organizaciones.
GRI fue fundada en Boston en 1997. Sus raíces se encuentran en las organizaciones sin fines
de lucro de Estados Unidos de la Coalición de Economías Ambientalmente Responsables (CERES ) y
el Instituto Tellus. El objetivo era crear un mecanismo de rendición de cuentas para garantizar que
las empresas estaban siguiendo los Principios CERES para la conducta ambiental responsable.
La primera versión de la Guía fue lanzado en 2000. Al año siguiente, con el asesoramiento
del Comité de Dirección, Ceres separó GRI como una institución independiente. La segunda
generación de directrices, conocido como G2, se dio a conocer en 2002 en la Cumbre Mundial sobre
el Desarrollo Sostenible en Johannesburgo. La absorción de la guía de GRI se vio impulsado por el
lanzamiento de la actual generación de Directrices G3 en el año 2006. Más de 3.000 expertos de
todo tipo de negocios, la sociedad civil y el trabajo han participado en el desarrollo del G3.
En marzo de 2011, GRI publicó las directrices G3.1 - actualización y terminación de G3, con
la orientación ampliando en el género de informes, la comunidad y el rendimiento en los derechos
humanos relacionados.
utilizados para describir la información relativa al impacto económico, ambiental y social (por
ejemplo, triple cuenta de resultados, informes de responsabilidad corporativa, etc.).
La aplicación de estos Principios y los Contenidos básicos determina los asuntos y los
Indicadores sobre los que se ha de informar. Asimismo se incluyen los Principios de equilibrio,
comparabilidad, precisión, periodicidad, fiabilidad y claridad, así como las comprobaciones que
pueden utilizarse para contribuir a que la información divulgada tenga la calidad deseada.
Este apartado concluye con una serie de indicaciones para que las organizaciones
informantes puedan definir el rango4 de entidades que deben estar representadas en la memoria
(también denominado “cobertura de la memoria”).
La parte 2 presenta los Contenidos básicos que han de incluirse en las memorias de
sostenibilidad. La Guía presenta la información que resulta relevante y material para la mayoría de
las organizaciones y grupos de interés, bajo tres tipos de Contenidos básicos:
• Enfoque de la dirección: información sobre el estilo de gestión a través del cual una
organización aborda aspectos específicos y describe el contexto que permite comprender su
comportamiento en un área concreta.
Esta sección describe los Principios y las Orientaciones para la elaboración de memorias, en
lo que respecta a la definición del contenido de la memoria, el establecimiento de la cobertura y la
garantía de calidad de la información divulgada.
Las Orientaciones describen las acciones que se pueden adoptar, o las opciones que la
organización informante puede tener en cuenta a la hora de decidir sobre la información a incluir
en la memoria; generalmente ayudan a interpretar y a determinar el uso del Marco de elaboración
de memorias del GRI. Las Orientaciones se proporcionan para definir el contenido y establecer la
cobertura de la memoria.
Los Principios para la elaboración de memorias describen los resultados que una memoria
debe conseguir y también proporcionan una orientación para la toma de decisiones clave durante el
proceso de elaboración de la memoria, tales como la selección de los temas e Indicadores a incluir y
cómo informar sobre ellos. Cada uno de los Principios consta de una definición, una descripción y
una serie de comprobaciones para que la organización pueda evaluar el uso que hace de los
mismos.
• Principios para determinar los asuntos e Indicadores sobre los que la organización
debería informar.
Los Principios se han agrupado para ayudar a clarificar su papel y su función, pero no se
impone una restricción rigurosa sobre su uso. Cada principio puede apoyar una amplia gama de
decisiones, y pueden ser útiles a la hora de considerar asuntos que van más allá de la definición del
contenido de la memoria o de garantizar la calidad de la información divulgada.
El enfoque que dirige la utilización del Marco del GRI para la elaboración de memorias de
sostenibilidad es el siguiente.
Se deben utilizar los principios para priorizar los asuntos seleccionados y decidir qué
asuntos se van a destacar.
Las comprobaciones enumeradas para cada Principio relevante deben ser utilizadas
para valorar qué asuntos e indicadores, del conjunto de asuntos e indicadores
relevantes, son materiales, y por tanto deben incluirse en la memoria.
Las organizaciones pueden informar sobre aspectos muy distintos. Los aspectos e
Indicadores relevantes son aquéllos que pueden considerarse importantes a la hora de reflejar los
impactos sociales, ambientales y económicos de la organización, o influencien las decisiones de los
grupos de interés y, por estas razones, merecerían potencialmente estar incluidos en la memoria.
Materialidad es el umbral a partir del cual los asuntos o indicadores pasan a ser lo
suficientemente importantes como para ser incluidos en la memoria. Aunque no todos los asuntos
materiales tienen la misma importancia, el hincapié que se hace sobre cada aspecto en la memoria
refleja la prioridad relativa de dichos aspectos e Indicadores materiales.
Con carácter general, las decisiones sobre la manera en la que presentar la información se
deberán basar en la importancia que esta tiene a la hora de valorar el desempeño de la
organización y su capacidad para ofrecer comparaciones apropiadas.
Comprobaciones:
A la hora de definir qué asuntos son materiales, se debe tener en cuenta lo siguiente:
Establecimiento de prioridades
Las expectativas e intereses razonables de los grupos de interés constituyen un punto clave
de referencia de cara a la multitud de decisiones sobre la preparación de una memoria, como son el
alcance, la cobertura, la aplicación de Indicadores y el enfoque de verificación. No obstante, no
todos los grupos de interés de la organización harán uso de la memoria. Esto representa un reto en
tanto en cuanto se debe buscar el equilibrio entre los intereses/expectativas específicas de aquellos
grupos de interés de los que cabe esperar sean usuarios de la memoria y otras, más amplias, que
representa la rendición de cuentas a todos los grupos de interés.
memoria y cuyas preocupaciones sean presentadas por terceros. Asimismo, podrían existir grupos
de interés que opten por no expresar su opinión sobre las memorias dado que confían más de otros
métodos de comunicación y de participación. Aún así, las expectativas e intereses razonables de
estos grupos de interés deberán tenerse en cuenta en el proceso de decisión acerca del contenido
de la memoria. Sin embargo, otras decisiones como el nivel de concreción exigido por los grupos de
interés, o las expectativas de los mismos en materia de claridad, podrían conllevar que se preste
mayor atención a los grupos de interés de los que se espere que utilicen la memoria. Es de gran
importancia que se documenten los procesos y enfoques adoptados a la hora de tomar estas
decisiones.
Comprobaciones:
Las organizaciones que operen en distintas localizaciones, con distintos tamaños y sectores
deberán considerar el mejor modo de adecuar el rendimiento de su organización al contexto más
amplio de la sostenibilidad. Para ello se debe distinguir entre asuntos o factores que produzcan
impactos globales (como el cambio climático) y aquéllos que posean impactos de ámbito regional o
local (como el desarrollo de la comunidad). Cuando se informa sobre asuntos que tienen impactos
locales positivos o negativos, es importante proporcionar información detallada sobre cómo afecta
la organización a las comunidades en distintos lugares. Igualmente, será necesario diferenciar entre
tendencias o patrones de impacto en el ámbito operativo y la contextualización del desempeño en
cada localización.
Comprobaciones:
Por “alcance” se entiende el rango de aspectos de sostenibilidad que cubre una memoria.
La suma de los aspectos e Indicadores debe ser suficiente para reflejar los impactos sociales,
ambientales y económicos importantes. Y también debe permitir que los grupos de interés puedan
valorar el desempeño de la organización. Para determinar si la información de la memoria es
suficiente, la organización deberá tener en cuenta tanto los resultados de los procesos de
participación de los grupos de interés, como las principales expectativas sociales que pueden no
haber aparecido directamente a través de los procesos de participación llevados a cabo con estos.
Por “cobertura” se entiende el conjunto de entidades (esto es, filiales, empresas conjuntas,
subcontratistas, etc.) cuyo desempeño se presenta en la memoria. Para establecer la cobertura de
la memoria, la organización debe considerar el conjunto de entidades sobre las que ejerce control
(al que se suele aludir como “cobertura organizativa /sociedades del grupo” y que suele guardar
relación con las definiciones empleadas en los informes financieros) y sobre las que ejerce
influencia (al que se suele aludir como “cobertura operativa”). A la hora de evaluar la influencia, la
organización deberá considerar su capacidad para influir en entidades upstream – aguas arriba del
proceso productivo- (es decir, en su cadena de suministro) y en entidades downstream –aguas
abajo- (esto es, distribuidores y usuarios de sus productos y servicios) en el ciclo económico. La
cobertura puede variar en función del aspecto específico o del tipo de información sobre el que se
informe.
Por “tiempo” se entiende la necesidad de que la información sea completa con respecto al
periodo especificado en la memoria. Siempre que sea factible, se presentarán las actividades,
eventos e impactos correspondientes al periodo sobre el que se informe. Esto incluye informar
sobre aquellas actividades que producen un impacto mínimo a corto plazo pero que tienen un
efecto acumulativo significativo y razonablemente previsible, que puede convertirse en inevitable o
irreversible a largo plazo (por ejemplo, contaminantes bioacumulativos o persistentes). Para
calcular los impactos futuros (tanto positivos como negativos), la organización informante debe
realizar estimaciones bien razonadas que reflejen el tamaño, la naturaleza y el alcance más
probable de dichos impactos. Aunque estas estimaciones están, inherentemente, sujetas a
incertidumbres, pueden proporcionar información útil para la toma de decisiones, siempre que se
expongan claramente las bases seleccionadas para realizar estimaciones y queden nítidamente
establecidas las limitaciones de las mismas.
Comprobaciones:
Esta sección contiene los Principios que guían las decisiones a la hora de asegurar la calidad
de la información, incluida su correcta presentación. Las decisiones relacionadas con los procesos
de preparación de la información de una memoria deben ser coherentes con estos principios. Todos
estos Principios son esenciales para conseguir una transparencia efectiva.
EQUILIBRIO: La memoria deberá reflejar los aspectos positivos y negativos del desempeño
de la organización para permitir una valoración razonable del desempeño general.
La presentación de los contenidos de la memoria deberá trazar una imagen no sesgada del
desempeño de la organización informante. La memoria deberá evitar las selecciones, omisiones y
formatos de presentación que, dentro de lo razonable, puedan ejercer una influencia indebida o
inadecuada sobre una decisión o un juicio por parte del lector de la memoria. La memoria debe
incluir los resultados, tanto favorables como desfavorables, así como los aspectos de importancia
que puedan influir sobre las decisiones de los grupos de interés en proporción a su materialidad.
Comprobaciones:
organizaciones requiere una cierta sensibilidad con respecto a determinados factores, tales como
las diferencias en el tamaño de la organización, influencias geográficas y otras consideraciones que
puedan afectar al desempeño relativo de una organización. En caso necesario, los encargados de la
elaboración de las memorias deberán proporcionar el contexto que ayude a los usuarios a
comprender los factores que puedan contribuir a estas diferencias en el desempeño entre
organizaciones.
Comprobaciones:
Comprobaciones:
Esto exige consistencia en la frecuencia de los informes y en los periodos sobre los que se
informa para poder garantizar la comparabilidad a lo largo del tiempo y la accesibilidad de la
memoria a los diferentes grupos de interés. Puede ser beneficioso para éstos que el momento de la
presentación de la memoria de sostenibilidad coincida con la presentación de los informes
financieros. La organización debe sopesar la necesidad de proporcionar información puntualmente
y la importancia de garantizar que la información sea fiable.
Comprobaciones:
La memoria presenta la información (ya sea por escrito o a través de otro medio) de forma
que resulte comprensible, accesible y utilizable por parte del conjunto de los grupos de interés de la
organización.
La información se deberá presentar de modo que sea comprensible para los grupos de
interés que tengan un conocimiento razonable de la organización y sus actividades. Los gráficos y
las tablas de datos consolidados pueden ser de utilidad para que la información de la memoria sea
accesible y comprensible. El nivel de agregación de la información también puede afectar a la
claridad de una memoria en el caso de que sea significativamente más o menos detallada de lo que
esperan los grupos de interés.
Comprobaciones:
Los grupos de interés deben tener la confianza de que la memoria podrá ser verificada,
comprobándose la veracidad de sus contenidos y la aplicación que se ha hecho de los Principios
para la elaboración de memorias. La información y los datos incluidos en la memoria deberán estar
respaldados por documentación y controles internos que puedan ser revisados por terceros
distintos a los autores de la memoria.
Comprobaciones:
• Control: poder para dirigir las políticas financieras y operativas de una empresa con el fin
de obtener beneficios de sus actividades.
que se encuentren bajo el control de una organización, pero puede que no sea así en el caso de un
negocio conjunto o de un proveedor.
Una memoria de sostenibilidad deberá incluir en su cobertura a todas las entidades que
generen impactos de sostenibilidad significativos (reales y potenciales) y/o a todas las entidades
sobre las que la organización informante ejerza un control o una influencia significativa, con
respecto a las políticas y prácticas operativas y financieras.
La memoria deberá incluir a todas las entidades que se encuentren dentro de su Cobertura.
En el proceso de elaboración de la memoria, una organización puede optar por no recabar
información sobre una entidad en particular o un grupo de entidades de la cobertura definido por
motivos de eficiencia, siempre y cuando dicha decisión no afecte sustancialmente al resultado final
de una información o de un Indicador (p. ej., Entidad D).
La cobertura de las informaciones descriptivas deberá incluir a las entidades sobre las que la
organización no ejerza control/influencia significativa, pero que guarden relación con los principales
retos de la organización debido a sus impactos significativos.
Esta sección especifica el contenido básico que debe figurar en una memoria de
sostenibilidad. Existen tres tipos distintos de información que están incluidos en este apartado:
8.4.2.1. Perfil
1. Estrategia y análisis
En este apartado hay que incorporar la declaración del máximo responsable de la toma de
decisiones de la organización (director general, presidente o puesto equivalente) sobre la relevancia
de la sostenibilidad para la organización y su estrategia.
Esta declaración debe presentar la estrategia y la visión global a corto plazo, a medio plazo
(3-5 años) y a largo plazo, en especial en lo referente a la gestión de los principales desafíos
asociados al desempeño económico, ambiental y social.
2. Perfil de la organización
2.5 Número de países en los que opera la organización y nombre de los países en los que
desarrolla actividades significativas o los que sean relevantes específicamente con respecto a los
aspectos de sostenibilidad tratados en la memoria.
2.7 Mercados servidos (incluyendo el desglose geográfico, los sectores que abastece y los
tipos de clientes/beneficiarios).
• Número de empleados
• Número de operaciones.
• Ventas netas (para organizaciones del sector privado) o ingresos
netos (para organizaciones del sector público)
3. Parámetros de la memoria
PERFIL DE LA MEMORIA
3.6 Cobertura de la memoria (p. ej. países, divisiones, filiales, instalaciones arrendadas,
negocios conjuntos, proveedores).
4. Gobierno.
Hay que realizar una descripción de procedimientos implantados para evitar conflictos de
intereses en el máximo órgano de gobierno, además de los procedimientos del máximo órgano de
gobierno para supervisar la identificación y gestión, por parte de la organización, del desempeño
económico, ambiental y social, incluidos riesgos y oportunidades relacionadas, así como la
adherencia o cumplimiento de los estándares acordados a nivel internacional, códigos de conducta
y principios.
Los Indicadores principales se han desarrollado mediante procesos participativos con los
grupos de interés desarrollados por GRI, que tienen como objetivo identificar los Indicadores
generalmente aplicables y asumidos como materiales para la mayoría de las organizaciones. Una
organización deberá informar sobre los Indicadores principales salvo si éstos no son considerados
materiales en base a los Principios de elaboración de memorias del GRI.
Los Indicadores adicionales representan prácticas o aspectos emergentes que pueden ser
materiales para algunas organizaciones, pero que pueden no serlo para otras. En caso de que
existan versiones finales de Suplementos sectoriales, los Indicadores deberán tratarse como
Indicadores principales
La organización puede estructurar las secciones del Enfoque de gestión de forma que
cubran todos los aspectos de una determinada categoría o bien agrupar sus respuestas sobre los
Aspectos de forma diferente. No obstante, la información debe abordar todos los Aspectos
asociados a cada categoría, con independencia del formato o del modo de agrupamiento.
Dimensión económica:
Dimensión ambiental
Dimensión social
La dimensión social de la sostenibilidad está relacionada con los impactos de las actividades
de una organización en los sistemas sociales en los que opera. Los Indicadores de desempeño social
del GRI identifican los principales aspectos del desempeño en relación con los aspectos laborales,
los derechos humanos, la sociedad y la responsabilidad sobre productos.
9. ISO 26000
9.1. Introducción a la ISO 26000
ISO – Organización Internacional de Estandarización. ISO cuenta con una membresía de 163
organismos nacionales de normalización de países grandes y pequeños, industrializados, en
desarrollo y en transición, en todas las regiones del mundo. ISO cuenta con un portafolio de más de
18.400 normas que proveen a las empresas, el gobierno y la sociedad de herramientas prácticas en
las tres dimensiones del desarrollo sostenible: económica, ambiental y social.
Las normas ISO hacen una contribución positiva al mundo en que vivimos. Ellas facilitan el
comercio, la difusión del conocimiento, la difusión de los avances innovadores en tecnología y
comparten prácticas de buena gestión y evaluación de conformidades.
Las normas ISO aportan soluciones y logran beneficios para casi todos los sectores de
actividad, incluida la agricultura, construcción, ingeniería mecánica, fabricación, distribución,
transporte, dispositivos médicos, información y tecnologías de comunicación, medio ambiente,
energía, gestión de la calidad, evaluación de conformidades y servicios.
ISO sólo desarrolla normas para las que exista una necesidad clara en el mercado. El trabajo
se lleva a cabo por expertos en el tema que vienen directamente de los sectores industrial, técnico y
de negocios, que han identificado la necesidad de la norma y que posteriormente la pondrán en
uso. Estos expertos pueden estar acompañados por otros con conocimientos relevantes, como
representantes de organismos gubernamentales, laboratorios de prueba, asociaciones de
consumidores y academia, y por organizaciones internacionales gubernamentales y no
gubernamentales.
Una Norma Internacional ISO representa un consenso mundial sobre el estado del arte en el
tema de esa norma.
ISO 26000:2010 tiene por objeto brindar a las organizaciones con orientación sobre la
responsabilidad social y se puede utilizar como parte de actividades de interés público. Sin
embargo, a los efectos del Acuerdo de Marrakech establece la Organización Mundial del Comercio
(OMC), no está destinada a ser interpretada como una "norma internacional", "guía" o
"recomendación", ni se pretende que sirva de base para cualquier la presunción o la constatación
de que una medida es compatible con las obligaciones de la OMC. Además, no tiene la intención de
proporcionar una base para acciones legales, quejas, defensas u otros derechos de cualquier
procedimiento internacional, nacional o de otro tipo, ni pretende ser citado como evidencia de la
evolución del derecho internacional consuetudinario.
No tiene la intención de evitar el desarrollo de normas nacionales que sean más específicas,
más exigentes, o de un tipo diferente, proporciona orientación sobre cómo las empresas y las
organizaciones pueden operar de una manera socialmente responsable. Esto significa que actúa de
manera ética y transparente que contribuya a la salud y el bienestar de la sociedad.
ISO 26000:2010 proporciona orientación en lugar de los requisitos, por lo que no se puede
certificar a diferencia de otras normas ISO conocidas. En su lugar, ayuda a clarificar lo que la
responsabilidad social es, ayuda a las empresas y organizaciones traducir los principios en acciones
y participaciones efectivas las mejores prácticas relacionadas con la responsabilidad social, a nivel
mundial. Está dirigido a todo tipo de organizaciones, independientemente de su actividad, tamaño
o ubicación.
El estándar fue lanzado en 2010, tras cinco años de negociaciones entre los muchos actores
diferentes en todo el mundo. Los representantes del gobierno, organizaciones no gubernamentales,
la industria, los grupos de consumidores y las organizaciones sindicales de todo el mundo han
participado en su desarrollo, lo que significa que representa un consenso internacional.
Primera norma internacional que abarca de manera conjunta las distintas dimensiones de la
responsabilidad social corporativa. Su contenido puede resumirse en la siguiente tabla:
Número del
Título del capítulo Descripción de los contenidos del capítulo
capítulo
Objeto y campo de Define el objeto y campo de aplicación de esta Norma Internacional e
Capítulo 1
aplicación identifica ciertas limitaciones y conclusiones.
Identifica y proporciona el significado de los términos clave
Términos y
Capítulo 2 que son de importancia fundamental para comprender la
definiciones
responsabilidad social y para el uso de esta Norma Internacional.
Describe los factores importantes y las condiciones que han
influido en el desarrollo de la responsabilidad social y que
continúan afectando su naturaleza y práctica. Además, describe
Comprender la
Capítulo 3 el propio concepto de responsabilidad social, lo que significa y
responsabilidad social
cómo se aplica a las organizaciones. El capítulo incluye orientación
para las pequeñas y medianas organizaciones sobre el uso de esta
Norma Internacional.
Principios de la
Capítulo 4 Introduce y explica los principios de la responsabilidad social.
responsabilidad social
Por primera vez en la ISO tanto el Grupo de trabajo como cada Subgrupo de trabajo creado
estuvo dirigido por representantes de países en desarrollo y países desarrollados en forma
equitativa, al igual que la región y por otro lado, la participación en el proceso de los diferentes
“stakeholders”.
Esta Guía define la Responsabilidad Social como: “La responsabilidad de una organización
ante los impactos que sus decisiones ocasionan en la sociedad y el medio ambiente, mediante un
comportamiento ético y transparente que:
Rendición de cuentas: Una organización debería rendir cuentas por sus impactos en
la sociedad, la economía y el medio ambiente.
Transparencia: Una organización debería ser transparente en sus decisiones y
actividades que impactan en la sociedad y en el medio ambiente.
Comportamiento ético: Una organización debería tener un comportamiento ético
basado en los valores de la honestidad, equidad e integridad.
Respeto a los intereses de las partes interesadas: Una organización debería
respetar, considerar y responder a los intereses de sus partes interesadas.
Respeto al principio de la legalidad: Una organización debería aceptar que el
respeto al principio de legalidad es obligatorio.
Respeto a la normativa internacional de comportamiento: Una organización debería
respetar la normativa internacional de comportamiento, a la vez que acatar el
principio de respeto al principio de legalidad.
Respeto a los derechos humanos: Una organización debería respetar los derechos
humanos y reconocer tanto su importancia como su universalidad.
1. Gobernanza de la organización: Es el factor más importante para hacer posible que una
organización se responsabilice de los impactos de sus decisiones y actividades, y para integrar la
Responsabilidad Social en toda la organización y sus relaciones.
3. Prácticas Laborales: Las prácticas laborales de una organización comprenden todas las
políticas y prácticas relacionadas con el trabajo que se realiza dentro, por o en nombre de la
organización, incluido el trabajo subcontratado.
5. Prácticas justas de operación: La conducta ética es una materia fundamental por parte
de la organización en sus transacciones con otras organizaciones.
Impulsar una toma de decisiones más fundamentada con base en una mejor
comprensión de las expectativas de la sociedad, las oportunidades asociadas a la
Responsabilidad Social (incluyendo una mejor gestión de los riesgos legales) y los
riesgos de no ser socialmente responsables.
Mejorar las prácticas de gestión del riesgo de la organización.
Aumentar la reputación de la organización y fomentar una mayor confianza pública.
Apoyar la licencia social de la organización para operar.
Generar innovación.
Mejorar la competitividad de la organización, incluyendo el acceso al
financiamiento y la posición de socio preferencial.
Mejorar la relación de la organización con sus partes interesadas, exponiendo a la
organización a nuevas perspectivas y al contacto con una variada gama de partes
interesadas.
Aumentar la lealtad, el involucramiento, la participación y la moral de los
empleados.
Mejorar la salud y la seguridad, tanto de sus trabajadores como de sus trabajadoras.
Aun así, esta versión de la norma de aseguramiento AA1000 representa sólo un paso en el
largo camino del aprendizaje. Las Guidance Notes y las actualizaciones de las normas se
enriquecerán con las interpretaciones que se obtengan de la práctica y con otras experiencias
relevantes que mejoren la credibilidad de los nuevos enfoques de responsabilidad organizacional.
Sugiere métodos: entrevistas cara a cara, de grupos, focus groups, talleres, seminarios,
reuniones públicas, cuestionarios y técnicas para mejorar el proceso de comprensión e
incorporación de las demandas de los stakeholders.
Establece principios similares a los del GRI sobre los que debe estar basada la gestión y
comunicación RSC (ver borrador Norma AENOR, marco AECA): inclusividad, totalidad, materialidad,
regularidad y oportunidad, aseguramiento de la calidad, comparabilidad, transparencia,
implantación y mejora continua.
Los principios que se describen seguidamente constituyen la base sobre la cual una
organización asegura su credibilidad en relación con el cumplimiento de su compromiso de
responsabilidad.
(b) Desempeño relacionado con la política. Se debe identificar los aspectos de los resultados
relacionados con posiciones respecto a la política acordada en la organización, sin considerar las
consecuencias financieras.
(c) Normas basadas en los pares. Podría haber aspectos relevantes del desempeño si los
pares de la compañía y sus competidores así lo consideran, aun cuando la propia organizaciónno
tuviese una política relacionada, o si pueden demostrar consecuencias financieras.
Por otro lado, debe formarse, sobre la base de la evidencia, una opinión respecto a la
relevancia de posibles omisiones o de falta de representatividad en el informe, y discutirla con la
organización informante, así como alentar la enmienda en caso de que fuera necesario. Si estas
omisiones y falta de representatividad no estuvieran incluidas, debería incluirlas en su declaración
de aseguramiento.
Estos elementos, que son relevantes para la organización informante o para las partes
interesadas, pueden extenderse más allá de lo que normalmente se consideran sus límites y se
relacionan con el principio de exhaustividad, en tanto que, a través de ellos, la organización
informante tiene la capacidad de influir en los resultados (por ejemplo, en los efectos del uso del
producto).
Por otro lado, el experto en aseguramiento debe identificar las deficiencias relevantes en la
comprensión que la propia organización informante tenga acerca de su desempeño y discutir, con
ella, aquellas que sean el resultado de una falta de exhaustividad. Asimismo, debe alentarla para
que las supere, pero, si esta no logra hacerlo, está obligado reflejar esas deficiencias en su reporte.
De no darse ninguna de las posibilidades descritas, está obligado a referirse a ellas en su declaración
de aseguramiento.
Sus opiniones deben basarse en la evidencia disponible y esta debe ser suministrada por la
organización informante. Además, esta debe proporcionar información sobre los puntos de vista de
las partes interesadas y de la industria, así como otras referencias.
Todos los datos del informe de RSC de Abertis se encuentran resumidos en el Anexo 4. (Para
la visualización íntegra de todo el informe se puede localizar en internet en la siguiente dirección
web: http://www.abertis.com/dyndata/sc_es.pdf ).
DATOS GENERALES
Autopistas
Aparcamientos
Parques logísticos
Infraestructuras de Telecomunicaciones
Aeropuertos
Servicios financieros
Servicios de gestión y administración tecnológica
Servicios de consultoría técnica
Servicios de ingeniería
Desarrollo de proyectos inmobiliarios
Alquiler de aviones
Transporte aéreo de mercancías
ABERTIS opera en 20 países que son: Estados Unidos, Puerto Rico, México, Jamaica,
Colombia, Bolivia, Chile, Argentina, Reino Unido, Irlanda, Andorra, España, Portugal, Suecia, Francia,
Italia, Sudáfrica, Croacia, Eslovaquia, Brasil.
ESTÁNDARES VOLUNTARIOS
Manual ejecutivo
En el siguiente gráfico (Figura 17) se puede observar la evolución de las diferentes valoraciones en
los años desde el 2006 hasta el 2010, en referente a la RSC, subdividido en las diferentes secciones:
Contenidos
Sistema de gestión
Gobierno corporativo
Total
En líneas generales, ABERTIS ha experimentado una leve mejora de los resultados con
respecto a los años anteriores, en especial debido a pequeño incremento en el eje de gobierno
corporativo. El hecho de que ABERTIS cuente con un Plan estratégico de RSC definido en 2003 y una
política de RSC definida en 2005, así como con un Comité de RSC que se completa con dos
plataformas externas, la fundación y las cátedras abertis, todo ello estructurado en el organigrama
del grupo, no significa que exista una mayor visibilidad de su desempeño de la RSC, ni tampoco una
mejora de la calidad de la información.
El punto más fuerte del informe, los ejemplos de buenas prácticas que pueden servir de
guía para otras empresas del sector y que dan una información relevante sobre los beneficios de la
RSC en Abertis.
Por otro lado, se observa una mejora en la presentación de impactos sobre la biodiversidad,
desglosado por áreas de negocio y describiendo las correspondientes acciones para su mitigación,
aunque siguen faltando objetivos cuantitativos para medir los resultados de estas acciones, y datos
que ayuden a establecer medidas de mejora si fuese necesario.
Se ha mantenido una estructura del informe clara, incluyendo en cada capítulo las líneas
estratégicas correspondientes y organizando la información en torno a política, aspectos generales,
resultados y ejemplos de las mejores prácticas. Los ejemplos pretenden constituir un reflejo de
cómo se materializan la política y los resultados corporativos en las diferentes unidades de negocio.
Sin embargo, no se ofrecen resultados cuantitativos de los impactos producidos por cada una de
estas prácticas, como los impactos de la contaminación acústica, visual y paisajística o los impactos
sobre las comunidades locales, imprescindible para su evaluación y para acometer acciones
correctivas o planes de mejora; por ello, no puede establecerse una clara relación con los objetivos
estratégicos de la organización, lo que provoca que, en muchos casos, acaben siendo ejemplos
anecdóticos, pero que pueden servir de ejemplo a otras empresas del mismo sector.
No se informa sobre la existencia de una estrategia y política fiscal, ni se aporta razón sobre
la presencia del grupo en paraísos fiscales, ni información y datos sobre las operaciones que se
realizaron por dichas empresas, ni los datos de ingresos, costes, beneficios, tasa fiscal efectiva que
Se echa en falta la relación del salario base de los hombres con respecto al de las mujeres. A
pesar de afirmar en el IRSC que “la política salarial de ABERTIS no discrimina entre géneros”, este
dato no aparece desglosado por géneros, por lo que finalmente desde un punto de vista de
rendición de cuentas se queda en un testimonio, sin evidencias que permitan evaluarlo . El único
dato que aparece desglosado es la relación entre salario inicial y salario mínimo, pero no está para
todos los países donde opera la organización. Tampoco se aportan datos de salario desglosado por
categoría profesional, simplemente se afirma genéricamente que “los salarios de ABERTIS se
establecen en base a categorías profesionales y al Programa de Dirección por Objetivos. La
retribución es información confidencial”.
Con respecto a la seguridad y salud de los trabajadores, ABERTIS informa que dispone de un
sistema de gestión de riesgos laborales implantado en un 90% de la cifra de negocio a través de la
certificación OHSAS 18001; sin embargo, no se aportan datos relativos al sistema de gestión de
seguridad y salud en el trabajo, ni se comparan los resultados obtenidos, en este ámbito de la salud
y seguridad en el trabajo, con los objetivos previamente fijados. En la misma línea, se afirma que el
91% de la plantilla está cubierto por las Comisiones de Seguridad y Salud, principales índices de
seguridad y salud de la organización, pero no se aportan datos por países referentes a accidentes,
muertes o bajas producidas. Sólo se realiza una comparativa entre el índice de incidencia, de
frecuencia y de gravedad, a través de los cuales observamos un ligero descenso en la incidencia,
pero un aumento en la frecuencia y la gravedad.
Se informa que se ha realizado una encuesta a los grupos de interés para determinar la
materialidad de la memoria. No se informa de quiénes han participado en la encuesta, ni se explica
su representatividad dentro de los grupos de interés. Además, se echa en falta la explicación del
proceso a través del cual las opiniones de las partes interesadas se incluyen en la elaboración de
indicadores, o de qué forma se responde a sus expectativas. La información sobre la identificación
de los grupos de interés es incompleta, no desglosándose por países y áreas de negocio, lo cual
puede cuestionar el resultado del análisis de materialidad. La participación de las partes interesadas
se sistematiza a través la encuesta anual y otros canales adicionales, lo que no implica que
intervengan en el diseño de objetivos y mejoras.
Se menciona que existe una base de datos formada por más de 200 indicadores de RS
estructurada en torno a diez grandes temáticas, en la que anualmente todas las unidades de
negocio y direcciones corporativas que forman parte del alcance del Plan Estratégico de RSC
reportan la información requerida. Además de estas aportaciones, se afirma que la base de datos
Una de las líneas estratégicas del grupo es fomentar y sistematizar canales de diálogo (para
más información ver el capítulo 5: diálogo activo o engagement). Se comprueba un mayor énfasis
en el desarrollo de canales internos para la comunicación del equipo humano (Intranet, revista del
grupo, corresponsales, etc.) que para la comunicación con las partes externas. El principal
mecanismo de comunicación y retroalimentación para las partes interesadas es la encuesta de
materialidad; aún así, no se detalla su grado de implantación, sino que simplemente se aporta el
porcentaje de participación de la misma, un 20% más elevada que el año anterior.
En conclusiones, se puede decir que Abertis tiene un gran propósito al hacer público parte
de su información, pero falta más objetividad en temas puntuales que coinciden principalmente en
aquellas actividades o negocios desarrollados principalmente en países en vías de desarrollo, y que
para mayor claridad para conocer la empresa, debería presentar en próximos informes.
En los centros de decisión se sigue defendiendo el crecimiento económico como la vía para
conseguir el desarrollo. El paradigma económico imperante equipara crecimiento económico con
desarrollo y pleno empleo, con lo que obliga a un crecimiento económico constante y deja de lado
otros factores importantes como pueden ser el social, el medioambiental, etc.).
Los problemas ecológicos empiezan a ser patentes y son múltiples las voces que nos hablan
de ello y hasta que estos problemas son absolutamente visibles y se observen como problemáticas
globales no se hace objeción a ello.
El informe Brutland define la sostenibilidad como: “El desarrollo que permita satisfacer las
necesidades de las generaciones presentes, sin comprometer la capacidad de las generaciones
futuras para satisfacer las suyas”.
De esta mentalidad surgen otras iniciativas a través de las cuales se pretende articular este
importante cambio de rumbo en el modelo de crecimiento y de desarrollo. Por lo tanto, lo que
encontramos con este desarrollo sostenible es un cuestionamiento de los sistemas económicos y de
los sistemas predominantes en las sociedades occidentales, y la necesidad de un cambio de
paradigma hacia un sistema que realmente replantee nuestras bases éticas.
Junto con la idea de sostenibilidad surge la RSC que trata en definitiva de concebir la empresa en
sociedad, de la que depende en sus relaciones económicas y sociales, por lo que cualquier
actuación en materia social y medioambiental no debe hacerse al margen de ésta, sino en
constante comunicación y diálogo con los agentes implicados con los que se relaciona la empresa,
llamados grupos de interés o stakeholders (personas o grupos de personas que tienen impacto en, o se
ven afectados por las actividades, productos o servicios de una empresa (u otra organización)).
Para la relación entre los grupos de interés y la empresa surge el término anglosajón engagement
que suele traducirse al español como “diálogo activo con los grupos de interés” pero también podría
traducirse como “compromiso”. Ya que eso es, al fin y al cabo, lo que viene a significar su aplicación
por parte de una compañía: un compromiso de ésta con sus grupos de interés.
Para que el engagement sea efectivo existen diferentes herramientas y normas para una gestión
adecuada de la RSC. Este estudio de RSC se basa en la identificación teórica de diferentes modelos y
herramientas de gestión de la RSC, que dependiendo la empresa y el sector en el que se encuentra,
la elección de uno u otro puede ser determinante en la gestión y en los objetivos de la empresa.
Mi conclusión más subjetiva, es que la mejor de todas las herramientas estudiadas es la GRI,
por una razón fundamental, y es que es la única con tipología práctica. Como se ha descrito en este
trabajo y con lo publicado recientemente en la GRI Conference 2013 celebrada en Ámsterdam del
22 al 24 de mayo del 2013 sobre la elaboración de informes de sostenibilidad con motivo del
lanzamiento de la nueva versión de su estándar de elaboración de informes, el G4.
Una de las novedades más sorprendentes del nuevo G4 resulta la omisión de la ISO 26000,
lo cual, aparte de ser visible en el propio documento donde hace referencia a los estándares o
documentos que han servido de ayuda, fue confirmado en la sesión Harmonization of sustainability
Frameworks en la cual intervinieron representantes de distintos organismos como GRI, Global
Compact, Greenpeace, ISO, etc.
Las conclusiones de este trabajo es que se pueden distinguir dos grupos de estándares,
normas y guías:
Para obtener un fin en concreto, hay muchos caminos para su realización, gracias a una
herramienta práctica me indica el cómo acercarme más o menos a mi objetivo, mientras que una
herramienta de gestión teórica me asegura que si sigo esa forma de gestión obtendré éxito pero no
me indica cómo realizarlo.
Una vez analizado teóricamente la RSC, en este trabajo se encuentra la base para la
creación de una propia gestión de la RSC destacando el diálogo activo y las relaciones con los grupos
de interés.
Aquí en este trabajo, se encuentran alguna de las herramientas que más se usan en la
actualidad, pero no son las únicas, hay muchas más que pueden ser estudiadas y comparadas para
optimizar la gestión de una empresa en concreto.
Se llevará una contabilidad por actividades, en la que se valorara los costes de cada
actividad realizada hasta la obtención del producto final. De esta forma, será posible analizar la
influencia de cada uno de los procesos que intervienen con relación al coste total del producto. Para
realizar el estudio, se procederá de la siguiente manera:
Cálculo de las horas efectivas anuales y de las tasas por hora de los salarios.
Horas dedicadas a cada una de las etapas del proyecto.
Todos estos valores quedan reflejados en la Tablas 7 (días efectivos) y Tabla 8 (semanas
efectivas).
Horas dedicadas
Parte 1 78
Parte 2 65
Parte 3 47
Parte 4 102
TOTAL 292
14. Bibliografía
Bibliografía escrita:
De la Cuesta, Marta/Saavedra, Irene/ Pardo, Eva / Candela, Asunción. Apuntes del curso ofrecido por
MIRIADAX La responsabilidad social corporativa Año 2013.
Melle, M.J.M. Rodríguez/ J.M. Sastre. AECA (2007) Gobierno de la empresa y responsabilidad social
corporativa.
Sánchez Báscones, María Isabel / García Vilchez, Emilio José / Pardo Almudí, Rafael. ANÁLISIS DE
HERRAMIENTAS DE SOSTENIBILIDAD Y RSC PARA SU APLICACIÓN A LA INDUSTRIA DE PROCESOS. Revista de
Estudios empresariales. Segunda época. Número 2 (2010) pag: 81-98
Vilanova, Marc / Lozano, Josep María / Dinarés, Marta. Cuaderno Forética Nº 6- Accountability.
Comunicación y reporte en el ámbito de la RSE.
Bibliografía digital
http://www.sostenibilidad-es.org
http://www.foretica.org/conocimiento-rse/estandares/sge-21?lang=es
https://www.globalreporting.org/information/Pages/default.aspx
http://www.iso.org/iso/home.htm
http://www.26k-estimation.com/html/guia_del_usuario_iso_26000.html#paso1
http://www.accountability21.net
http://www.sge21.foretica.es
15. Anexos
15.1. Anexo 1: Declaración de Rio sobre medio ambiente y
desarrollo
La conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo, habiéndose
reunido en Rio de Janeiro del 3 al 14 de Junio de 1992, reafirmando la Declaración de la
Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano, aprobada en Estocolmo el 16 de junio
de 1972, y tratando de basarse en ella, con el objetivo de establecer una alianza mundial nueva y
equitativa mediante la creación de nuevos niveles de cooperación entre los Estados, los sectores
claves de las sociedades y las personas, procurando alcanzar acuerdos internacionales en los que se
respeten los intereses de todos y se proteja la integridad ambiental y de desarrollo mundial,
reconociendo la naturaleza integral e independiente de la Tierra, nuestro hogar, proclama que
Principio 2: De conformidad con la Carta de Naciones Unidas y los principios del derecho
internacional, los Estados tienen el derecho sobreaño de aprovechar sus propios recursos según sus
propias políticas ambientales y de desarrollo, y la responsabilidad de velar por que las actividades
realizadas dentro de su jurisdicción o bajo su control no causen daños al medio ambiente de otros
estados o de zonas que estén fuera de los límites de la jurisdicción nacional
Principio 5: Todos los estados y todas las personas deberán cooperar en la tarea esencial de
erradicar la pobreza como requisito indispensable del desarrollo sostenible, a fin de reducir las
disparidades en los niveles de vida y responder mejor a las necesidades de la mayoría de los
pueblos del mundo.
Principio 7: Los estados deberán cooperar con espíritu de solidaridad mundial para
conservar, proteger y restablecer la salud y la integridad del ecosistema de la Tierra. En vista de que
han contribuido en distinta medida a la degradación del medio ambiente mundial, los estados
tienen responsabilidades comunes pero diferenciadas. Los países desarrollados reconocen la
responsabilidad que les cabe en la búsqueda internacional del desarrollo sostenible, en vista de las
presiones que sus sociedades ejercen en el medio ambiente mundial y de las tecnologías y los
recursos financieros de que disponen.
Principio 8: Para alcanzar el desarrollo sostenible y una mejora calidad de vida para todas
las personas, los estados deberían reducir y eliminar las modalidades de producción y consumo
insostenibles y fomentar políticas demográficas apropiadas.
Principio 10: El mejor modo de tratar las cuestiones ambientales es con la participación de
todos los ciudadanos interesados, en el nivel que corresponda. En el plano nacional, toda persona
deberá tener acceso adecuado a la información sobre medio ambiente de que dispongan las
autoridades públicas, incluida la información sobre los materiales y las actividades que encierran
peligro en sus comunidades, así como la oportunidad de participar en los procesos de adopción de
decisiones. Los estados deberán facilitar y fomentar la sensibilización y la participación de la
población poniendo la información a disposición de todos. Deberá proporcionarse acceso efectivo a
los procedimientos judiciales y administrativos, entre éstos el resarcimiento de daños y los recursos
pertinentes.
Principio 11: Los estados deberán promulgar leyes eficaces sobre el medio ambiente. Las
normas, los objetivos de ordenación y las prioridades ambientales deberían reflejar el contexto
ambiental y de desarrollo al que se aplican. Las normas aplicadas por algunos países pueden
resultar inadecuadas y representar un costo social y económico injustificado para otros países, en
particular los países en desarrollo.
Principio 14: Los estados deberían cooperar efectivamente para desalentar o evitar
reubicación y la transferencia a otros estados de cualesquiera actividades y sustancias que causen
degradación ambiental grave o se consideren nocivas para la salud humana.
Principio 15: Con el fin de proteger el medio ambiente, los estados deberán aplicar
ampliamente el criterio de precaución conforme a sus capacidades. Cuando haya peligro de daño
grave o irreversible, la falta de certeza científica absoluta no deberá utilizarse como razón para
postergar la adopción de medidas eficaces en función de los costos para impedir la degradación del
medio ambiente.
Principio 17: Deberá emprenderse una evaluación del impacto ambiental, en calidad de
instrumento nacional, respecto de cualquier actividad propuesta que probablemente haya de
producir un impacto negativo considerable en el medio ambiente y que esté sujeta a la decisión de
una autoridad nacional competente.
Principio 18: Los estados deberán notificar inmediatamente a otros estados de los desastres
naturales y otras situaciones de emergencia que puedan producir efectos nocivos en el medio
ambiente de esos estados. La comunidad internacional deberá hacer todo lo posible por ayudar a
los estados que resulten afectados.
Principio 20: Las mujeres desempeñan un papel fundamental en la ordenación del medio
ambiente y en el desarrollo. Es, por tanto, imprescindible contar con su plena participación para
lograr el desarrollo sostenible.
Principio 21: Debería movilizarse la creatividad, los ideales y el valor de los jóvenes del
mundo para forjar una alianza mundial orientada a lograr el desarrollo sostenible y asegurar un
mejor futuro para todos.
Principio 22: Las poblaciones indígenas y sus comunidades, así como otras comunidades
locales, desempeñan un papel fundamental en la ordenación del medio ambiente y en el desarrollo
debido a sus conocimientos y prácticas tradicionales. Los estados deberían reconocer y apoyar
debidamente su identidad, cultura e intereses y hacer posible su participación efectiva en el logro
del desarrollo sostenible.
Principio 23: Deben protegerse el medio ambiente y los recursos naturales de los pueblos
sometidos a opresión, dominación y ocupación.
Principio 24: La guerra es, por definición, enemiga del desarrollo sostenible. En
consecuencia, los estados deberán respetar las disposiciones de derecho internacional que
protegen al medio ambiente en épocas de conflicto armado, y cooperar en su ulterior desarrollo,
según sea necesario.
Principio 25: La paz, el desarrollo y la protección del medio ambiente son independientes e
inseparables.
Principio 26: Los estados deberán resolver pacíficamente todas sus controversias sobre el
medio ambiente por medios que corresponda con arreglo a la carta de las naciones unidas.
Principio 27: Los estados y las personas deberán cooperar de buena fe y con espíritu de
solidaridad en la aplicación de los principios consagrados en esta Declaración y en el ulterior
desarrollo del derecho internacional en la esfera del desarrollo sostenible.
Medio Ambiente: Las empresas deben apoyar los métodos preventivos con respecto a
problemas ambientales; Las empresas deben adoptar iniciativas para promover una mayor
responsabilidad ambiental y las empresas deben fomentar el desarrollo y la difusión de tecnologías
inofensivas para el medio ambiente.
Lucha contra la corrupción: Las empresas deben trabajar contra la corrupción en todas sus
formas, incluyendo la extorsión y el soborno.
16. Glosario
Acción positiva: Medida que tiene por objeto el desarrollo de políticas de igualdad de
oportunidades entre hombres y mujeres. Este concepto tiene como objetivo, asegurar una serie de
políticas que no discriminen a las mujeres. Las acciones positivas son aquellas destinadas a eliminar
las desigualdades de hecho de las que son objeto las mujeres.
BEN (bienestar económico neto): El BEN añade PIB el autoconsumo, el tiempo de ocio y la
economía sumergida y le resta los daños ambientales.
Business case: Argumentación económica a favor de la RSC, que atiende que la empresa
será responsable porque le interesa económicamente y sólo si le interesa económicamente.
Certificación: Proceso por el cual una institución autorizada evalúa y reconoce que un
producto/servicio, departamento, área u organización ha conseguido los requisitos
predeterminados por una norma o estándar.
Ciudadanía corporativa: La gestión de todas las relaciones entre una empresa y sus
comunidades de acogida a nivel local, nacional y mundial.
Coste medioambiental: Coste relacionado con el daño causado al medio ambiente como
con la protección del mismo.
Cuentas ambientales: Recogen información sobre los recursos naturales; de menor a mayor
complejidad pueden citarse 5 categorías: los sistemas indicadores, los indicadores agregados, las
cuentas de recursos naturales, las cuentas satélites y los sistemas de contabilidad integrada.
Ecoeficiencia: Uso eficiente de los recursos naturales. Su esencia: producir más con menos,
utilizar menos recursos naturales y menos energía en el proceso productivo, reducir los desechos y
la contaminación.
GRI o Global reporting iniciative: Norma voluntaria, consensuada entre un amplio número
de stakeholders, para orientar los informes de RSC de las empresas.
Grupos de interés: Personas físicas o jurídicas que tienen un interés en una decisión
determinada de la empresa. Cualquier individuo, o grupo interno o externo a la organización, que
afecta o puede ser afectado por las políticas, decisiones y acciones de la misma.
Medio ambiente: Entorno en el cual una organización opera, incluyendo el aire, agua, tierra,
recursos naturales, flora, fauna, los seres humanos y sus interrelaciones.
Protocolo de Kioto: Tratado internacional para reducir las emisiones de seis gases causantes
del efecto invernadero un 5,2% en el periodo 2008-2012 respecto a los niveles del año 1990.
Reputación corporativa: Opinión que provoca una empresa en los grupos de interés, basada
en las conductas de gestión en todos sus ámbitos de actuación.
RSC explícita: Definida por Matten y Moon (2005) como el conjunto de políticas
corporativas de carácter voluntario desarrolladas por la empresa, generalmente destinadas a
atender cuestiones identificadas por la misma o por sus grupos de interés como integrantes de su
responsabilidad social.
RSC implícit: Según Matten y Moon (2005) se relaciona con la existencia de instituciones de
carácter formal e informal, traducidas en valores, normas o reglas, a través de las cuales se
asignarían las responsabilidades a asumir por la empresa para atender los intereses de la sociedad.
Sistema de gestión ambiental (SGA): Conjunto de medios que permiten conocer el estado
de la organización y elaborar programas de mejora ambiental en la organización.