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OSCAR GOMEZ GONZALEZ

V.S
SAIDA ANITZEL SÁNCHEZ ROA

JUICIO: DE ORDEN FAMILIAR


MODIFICACIÓN DE CONVENIO
GUARDA Y CUSTODIA Y ALIMENTOS.
ESCRITO INICIAL DE DEMANDA.
PROCEDIMIENTO ESCRITO.

C. JUEZ DE LO CIVIL EN TURNO DE PRIMERA INSTANCIA DEL DISTRITO JUDICIAL DE


TLALNEPANTLA CON RESIDENCIA EN EL MUNICIPIO DE NICOLÁS ROMERO, ESTADO DE
MÉXICO.
P r e s e n t e.

OSCAR GOMEZ GONZALEZ, por mi propio derecho y actuando en nombre y


representación de mis hijas nombre Regina, Valentina Y Romina de apellidos López Monsalve,
señalando como domicilio para oír y recibir todo tipo de notificaciones, el correo institucional
[email protected], así como las listas y boletín judicial visible en el Juzgado y
autorizando en términos de lo previsto de los artículos 1.79, 1.93, 1.94 del Código de
Procedimientos Civiles para el Estado de México, a los Licenciados en Derecho, licenciados en
derecho CHRISTIAN MARTINEZ RUIZ, con número de cédula profesional 6730836, PAULUS ESAO
ESCAMILLA BOBADILLA, con número de cédula profesional 6096008, expedidas por la Secretaría
de Educación Pública, mediante la Dirección General de Profesiones; y señalando como domicilio
para oír y recibir todo tipo de notificaciones el correo electrónico Institucional,
[email protected], [email protected].,mx,que corresponden a los
profesionista mencionados, solicitando se les permita a éstos el uso y consulta del expediente a
través del Tribunal Electrónico, ya sea a través del correo mencionado o del que tenga a bien
autorizar este Tribunal, señalando como domicilio para oír y recibir notificaciones única y
exclusivamente las de carácter personal en Calle ____________ Estado de México; ante usted con
el debido respeto comparezco y expongo:

Que por medio del presente escrito y en la VÍA que prevén los artículos 1.213, 5.1, 5.2
fracción I, 5.3, 5.3 bis y relativos aplicables del Código de Procedimientos Civiles para Estado de
México; en relación con los diversos numerales 4.203, 4.204 fracción I, 4.205, 4.228 fracciones I, II
y relativos aplicables del Código Civil en vigor, vengo a demandar de la señora SAIDA ANITZEL
SÁNCHEZ ROA, EN LA VÍA Y FORMA MEDIANTE JUICIO AUTÓNOMO, quien puede ser
notificada y emplazada a juicio, en el domicilio ubicado en: _______ ESTADO DE MÉXICO, Previo
a señalar las prestaciones requeridas, solicitó que las normas relativas a los derechos humanos se
interpreten de conformidad con la Constitución y con los tratados internacionales en materia del
derecho de los menores y todo lo que favorezcan en todo tiempo a las personas y a la protección
más amplia.

En este sentido, al establecer la Carta Magna que, debe favorecerse la protección


más amplia de los derechos fundamentales de las personas, implica que todas las autoridades de
los Estados Unidos Mexicanos, dentro de las cuales evidentemente se encuentran las autoridades
administrativas, deberán ceñir su actuación a los derechos fundamentales establecidos en aquellos
Instrumentos Internacionales reconocidos por nuestro país e incorporados a nuestro sistema
jurídico a través de lo señalado en el artículo 133 Constitucional.

“PRINCIPIO PRO PERSONAE. EL CONTENIDO Y ALCANCE DE LOS DERECHOS


HUMANOS DEBEN ANALIZARSE A PARTIR DE AQUÉL. El segundo párrafo del artículo 1o.
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, exige que las normas relativas a los
derechos humanos se interpretarán de conformidad con la propia Constitución y con los tratados
internacionales de los que México es parte, de forma que favorezca ampliamente a las personas, lo
que se traduce en la obligación de analizar el contenido y alcance de tales derechos a partir del
principio pro personae que es un criterio hermenéutico que informa todo el Derecho Internacional de
los Derechos Humanos, en virtud del cual debe acudirse a la norma más amplia, o a la interpretación
más extensiva cuando se trata de reconocer derechos protegidos, e inversamente, a la norma o a la
interpretación más restringida cuando se trata de establecer restricciones permanentes al ejercicio de
los derechos o de su suspensión extraordinaria, es decir, dicho principio permite, por un lado, definir
la plataforma de interpretación de los derechos humanos y, por otro, otorga un sentido protector a
favor de la persona humana, pues ante la existencia de varias posibilidades de solución a un mismo
problema, obliga a optar por la que protege en términos más amplios. Esto implica acudir a la norma
jurídica que consagre el derecho más extenso y, por el contrario, al precepto legal más restrictivo si se
trata de conocer las limitaciones legítimas que pueden establecerse a su ejercicio. Por tanto, la
aplicación del principio pro personae en el análisis de los derechos humanos es un componente
esencial que debe utilizarse imperiosamente en el establecimiento e interpretación de normas
relacionadas con la protección de la persona, a efecto de lograr su adecuada protección y el desarrollo
de la jurisprudencia emitida en la materia, de manera que represente el estándar mínimo a partir del
cual deben entenderse las obligaciones estatales en este rubro.”

Amparo directo en revisión 2424/2011. **********. 18 de enero de 2012. Cinco votos. Ponente: José
Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Teresita del Niño Jesús Lúcia Segovia

“PRINCIPIO PRO PERSONA. CRITERIO DE SELECCIÓN DE LA NORMA DE DERECHO


FUNDAMENTAL APLICABLE.- De conformidad con el texto vigente del artículo 1o.
constitucional, modificado por el decreto de reforma constitucional publicado en el Diario Oficial de
la Federación el 10 de junio de 2011, en materia de derechos fundamentales, el ordenamiento jurídico
mexicano tiene dos fuentes primigenias: a) los derechos fundamentales reconocidos en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; y b) todos aquellos derechos humanos
establecidos en tratados internacionales de los que el Estado mexicano sea parte. Consecuentemente,
LAS NORMAS PROVENIENTES DE AMBAS FUENTES, SON NORMAS SUPREMAS DEL
ORDENAMIENTO JURÍDICO MEXICANO. Esto implica que los valores, principios y derechos
que ellas materializan deben permear en todo el orden jurídico, obligando a todas las autoridades a su
aplicación y, en aquellos casos en que sea procedente, a su interpretación. Ahora bien, en el supuesto
de que un mismo derecho fundamental esté reconocido en las dos fuentes supremas del ordenamiento
jurídico, a saber, la Constitución y los tratados internacionales, la elección de la norma que será
aplicable -en materia de derechos humanos-, atenderá a criterios de favorabilidad del individuo o lo
que se ha denominado principio pro persona, de conformidad con lo dispuesto en el segundo párrafo
del artículo 1o. constitucional. Según dicho criterio interpretativo, en caso de que exista una
diferencia entre el alcance o la protección reconocida en las normas de estas distintas fuentes, deberá
prevalecer aquella que represente una mayor protección para la persona o que implique una menor
restricción. En esta lógica, el catálogo de derechos fundamentales no se encuentra limitado a lo
prescrito en el Texto Constitucional, sino que también incluye a todos aquellos derechos que figuran
en los tratados internacionales ratificados por el Estado mexicano.”

Amparo directo 28/2010. Demos, Desarrollo de Medios, S.A. de C.V. 23 de noviembre de 2011.
Mayoría de cuatro votos. Disidente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González.

PRESTACIONES

A). - LA MODIFICACIÓN DEL CONVENIO, celebrado en el expediente número 396/2017,


radicado en el Juzgado Décimo Primero Civil del Distrito Judicial de Tlalnepantla, con Residencia
en Nicolas Romero, Estado de México; y debidamente aprobado mediante sentencia definitiva de
nueve de junio de dos mil diecisiete, PARA EFECTOS DE LA CANCELACION DE PENSION
ALIMENTICIA EN FAVOR DE MI HIJA DE NOMBRE MARIA FERNANDA GOMEZ SANCHEZ,
EL CAMBIO DE LA GUARDIA Y CUSTODIA DE MI HIJO DE INICIALES OEGS, Y
DESIGNACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA A CARGO DE SAIDA ANITZEL SANCHEZ ROA, EN
FAVOR DE NUESTRO MENOR HIJO; por lo que para lo aquí reclamado para la cancelación de la
pensión alimenticia de mi hija y la modificación de la guardia y custodia y designación de pensión
alimenticia a favor de nuestro menor hijo y a cargo de mi contraparte, este Juzgado podrá tomar
como premisa lo que a continuación se precisa y expone:

Registro digital: 2023888


Localización: [J];
11a. Época;
1a. Sala; Gaceta S.J.F.; Libro 8, Diciembre de 2021; Tomo II; Pág. 1139
Número de tesis: 1a./J. 28/2021 (11a.)
Rubro (título/subtitulo): ACCIÓN DE CANCELACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA. SU EJERCICIO PUEDE
FORMULARSE, INDISTINTAMENTE, EN UN PROCEDIMIENTO PRINCIPAL O EN UNO INCIDENTAL
(LEGISLACIONES DEL ESTADO DE MÉXICO Y VERACRUZ).Texto: Hechos: En dos asuntos se solicitó la
cancelación de una pensión alimenticia. Un Tribunal Colegiado determinó que la parte solicitante sólo podía promoverla a
través de un juicio principal, mientras que el otro tribunal estableció que podía ejercerse indistintamente en la vía
incidental o a través de un juicio autónomo.

Criterio jurídico: En las legislaciones del Estado de México (vigente hasta el primero de julio de dos mil dos) y de
Veracruz no existe norma alguna de carácter prohibitivo que impida al justiciable ejercer la acción de cancelación de
pensión alimenticia en un procedimiento incidental, por lo que el juzgador no debe impedir el ejercicio del derecho de
acción en la vía que el actor elija. Cuando el legislador no establece de manera expresa si el derecho que se pretende
deducir debe ejercerse en un procedimiento incidental o en uno principal, y además hay similitudes procesales, se debe
concluir que el actor tiene la potestad legal para elegir el tipo de procedimiento que desea seguir, y que, si ha elegido la
vía incidental, es atendiendo a la naturaleza abreviada de la misma y a que guarda relación con el juicio principal.
Justificación: La naturaleza del derecho que se pretende dilucidar es perfectamente oponible en la vía incidental, pues el
derecho a la cancelación de la pensión alimenticia está directa y estrechamente relacionado con la problemática principal
del juicio en que ésta se decretó, e incluso puede calificarse como accesoria de aquélla, en la medida que esa pretensión lo
que busca es precisamente evidenciar al juzgador que las circunstancias que prevalecían al momento en que se impuso la
obligación de proveer alimentos han cambiado y, por ende, la misma debe ser cancelada. Además, de acuerdo con las
legislaciones de Veracruz y del Estado de México (vigente hasta el primero de julio de dos mil dos), se observan las
mismas formalidades esenciales en la vía incidental y en la principal.

Precedentes: Contradicción de tesis 78/2020. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Séptimo Circuito, el Pleno en Materia Civil del Tercer Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Segundo Circuito. 26 de mayo de 2021. Cinco votos de las Ministras Norma Lucía Piña Hernández y Ana Margarita Ríos
Farjat, y los Ministros Juan Luis González Alcántara Carrancá, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena. Ponente: Ana Margarita Ríos Farjat. Secretaria: Irlanda Denisse Ávalos Núñez.
Tesis y/o criterios contendientes:
El emitido por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, al resolver el amparo en revisión
422/2019, en el que consideró que la cancelación de una pensión alimenticia debe demandarse indefectiblemente a través
de un juicio autónomo, y
El sustentado por el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Segundo Circuito, al resolver el amparo en revisión
110/99 y los amparos directos 3/2001 y 550/2001, en los que determinó que la cancelación de una pensión alimenticia
puede demandarse, indistintamente, en acción autónoma o a través de un incidente.
Nota: De la sentencia que recayó al amparo en revisión 110/99 y a los amparos en revisión y directos 3/2001, 176/2001,
541/2001 y 550/2001, resueltos por el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Segundo Circuito, derivó la tesis de
jurisprudencia II.3o.C. J/3, de rubro: "ALIMENTOS. LA CESACIÓN DE LA OBLIGACIÓN DE
PROPORCIONARLOS PUEDE INTENTARSE TANTO EN LA VÍA INCIDENTAL COMO EN LA ORDINARIA
(LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE MÉXICO).", publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Novena Época, Tomo XVI, octubre de 2002, página 1117, con número de registro digital: 185842.
Tesis de jurisprudencia 28/2021 (11a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de tres de
noviembre de dos mil veintiuno.
Esta tesis se publicó el viernes 03 de diciembre de 2021 a las 10:15 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por
ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 06 de diciembre de 2021, para los efectos previstos en el
punto noveno del Acuerdo General Plenario 1/2021.

1.- Las partes estipulamos en el convenio de referencia, que la guarda y custodia de nuestros
hijos de iniciales MFGS y OEGS, sería a favor de su progenitora, y que vivirían en el domicilio
ubicado en: Vialidad Adolfo López Mateos, sin Numero, C.P. 54425, Lote 3, Colonia
Guerrero, Municipio de Nicolas Romero, Estado de México.

2.- Las partes estipulamos en el convenio de referencia, que el progenitor vería y convivirá con mis
hijos, en los términos señalados en el apartado II RÉGIMEN DE VISITAS Y CONVIVENCIAS.

3.- Las partes estipulamos en el convenio de referencia, que el progenitor cubrirá una pensión
alimenticia en favor de mis hijos en los términos señalados en el apartado IV PENSIÓN
ALIMENTICIA, única y exclusivamente en favor de mis hijos; es decir una pensión definitiva en
favor de mis hijos equivalente al 30% (TREINTA POR CIENTO), que sería el 15% (QUINCE POR
CIENTO), para cada uno de mis hijos del total de mis prestaciones ordinarias, extraordinarias, por
medio de retención de la fuente de trabajo del enjuiciante.

4.- Convenio que cabal y oportunamente he cumplido el enjuiciante, y que ahora por cuanto hace
a mi hija de nombre MARIA FERNANDA GOMEZ SANCHEZ, y toda vez que, ya cuenta con la
edad de VEINTIDÓS AÑOS, y culminó sus estudios de nivel superior, no presenta incapacidad o
impedimento alguno, está incorporada a una fuente de trabajo y no tiene necesidad de recibir
alimentos, es que esa pensión alimenticia en favor de mi referida hija, deberá ser cancelada de
conformidad con lo previsto por los artículos 1.1, 1.2, 1.3, 1.7, 2.1, 4.126, 4.144 fracción I, del
Código Civil para el Estado de México.

5.- Convenio que cabal y oportunamente he cumplido el enjuiciante, pero ahora bien y por lo que
hace a mi hijo de iniciales OEGS, y quien actualmente cuenta con la edad de quince años, resulta
que mi hijo, tiene viviendo con el enjuiciante desde el mes de julio de dos mil diecinueve, esto en
razón a que mi contraparte desde la citada fecha, esta me hizo entrega de mi menor bajo el
argumento de que no contaba con el tiempo suficiente para procurar sus cuidados y protección y
que el enjuiciante me hiciera cargo de su cuidado y protección; Por lo que, dese el mes de julio de
dos mil diecinueve, mi hijo se encuentra bajo la guardia y custodia del enjuiciante y me hago
cargo de mi hijo, tanto en su cuidado, procuración y velar por su desarrollo integral, así como en
cubrir en su totalidad la manutención, sin que para tal efecto desde la cita fecha, mi contraparte
realice aportación alguna, ello a pesar de que esta realiza una actividad de trabajo, se dedica de
manera preponderante como manicuro, manicura o manicurista se ocupa del cuidado y
embellecimiento de las manos y en especial, el cuidado y pintura de las uñas, lo que le permite a
mi contraparte percibir un ingresos suficientes para aportar en la manutención de nuestro hijo.

De ahí que, por cuanto hace a mi hija de nombre MARIA FERNANDA GOMEZ SANCHEZ y al no
existir necesidad para que esta, reciba alimentos es que la pensión alimenticia debiera ser
cancelada, ya que mi hija ya no tiene la necesidad de recibirlos, (i) por su edad, (ii) que ya
concluyó sus estudios de nivel superior (iii) percibe ingresos de una fuente laboral, (iv) no tiene
incapacidad alguna o condición alguna que no le permitiera valerse por ella misma.

Por cuanto hace a los alimentos en favor de mi hijo, solicitó de este Juzgado que, la pensión a
cargo del enjuiciante, sea de igual manera cancelada al efecto de que el enjuiciante ya no quede
en calidad de deudor alimentista, que esa pensión alimenticia sea modificada, es decir el
enjuiciante ya no realice pago, transferencia o depósito en favor de la progenitora como quedó
estipulado en el citado convenio, y ahora dicha obligación recaiga en mi contraparte, al efecto de
que sea esta, la que aporte alimentos en favor de nuestro menor hijo, tomando como premisa su
capacidad económica.
El CAMBIO DE LA GUARDIA Y CUSTODIO DEFINITIVA, de mi menor hijo en favor del
enjuiciante, derivado del cambio de circunstancias y que mi hijo, vive con el enjuiciante, desde el
mes de julio de dos mil diecinueve.

Su señoría en caso de considerarlo necesario, pueda llevar a cabo la escucha o platica con el
menor para el efecto de observar y escuchar el discernimiento en su comprender el acto que
realiza, puesto que para que se dé el eficaz ejercicio de los derechos de la personalidad, basta
pues que el titular de los mismos tenga la «capacidad natural», que puede ser definida como la
capacidad de entendimiento y juicio necesario para comprender el alcance y consecuencias del
acto de que se trate y adoptar una decisión responsable, y al ser el interés superior del niño un
principio de rango constitucional implícito en la regulación de los derechos de los menores,
previstos en el artículo 4o. de la Constitución Federal; y que esta interpretación encuentra
respaldo en un argumento teleológico: En el dictamen de la reforma constitucional que dio lugar
al actual texto del artículo 4o., donde se reconoce expresamente que uno de los objetivos del
Órgano Reformador de la Constitución era adecuar el marco normativo interno a los compromisos
internacionales contraídos por nuestro país en materia de protección de los derechos de los
menores de edad.

Asimismo, se ha establecido que, en el ámbito jurisdiccional, el interés superior del menor de


edad es un principio orientador de la actividad interpretativa relacionada con cualquier norma
jurídica que tenga que aplicarse a un niño en un caso concreto o que pueda afectar los intereses
de algún menor.
Este principio ordena la realización de una interpretación sistemática que, para darle sentido a la
norma en cuestión, tome en cuenta los deberes de protección de los menores y los derechos
especiales de éstos, previstos en la Constitución, tratados internacionales y leyes de protección de
la niñez.

Cuando se trata de medidas legislativas o administrativas que afecten derechos de los menores de
edad, el interés superior del niño demanda de los órganos jurisdiccionales la realización de un
escrutinio mucho más estricto en relación con la necesidad y proporcionalidad de la medida en
cuestión.

Por lo que de conformidad con los artículos 1º, 4, 17 y 133 de nuestra carta magna, 8, 9 y 12 De
La Convención Internacional Sobre Los Derechos Del Niño, así como en lo estatuido por los
artículos 2, 3, 4, 5, 7, 8, 9, 11,12 ,19 y 21 apartado A. de la Ley para la Protección de los Derechos
de Niñas, Niños y Adolescentes y de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes, en relación con el artículo 4.205 Código Civil en vigor en el Estado de México, y
que mi hijo tiene libertad de decisión y con ello, este pueda continuar viviendo junto al
enjuiciante, es que en aras del interés superior del menor y a que mi hijo, lleva viviendo con el
enjuiciante ya más de dos años bajo los cuidados y protección del enjuiciante y que mi hijo me
han revelado su anhelo, deseo, voluntad y enorme interés de seguir viviendo junto al enjuiciante,
donde encuentra satisfacción, alegría, regocijo y esta en condiciones adecuadas para su desarrollo
integral, y al igual encuentra cariño, afecto, comprensión, solidaridad, valores y educación, entre
otros factores que le ha permitido estar confortable y en condiciones totalmente aptas para su
desarrollo integral.

Esto se traduce en el interés superior del menor, toda vez que, por el simple transcurso del
tiempo, y las cuestiones particulares aquí expuestas es que mi hijo, ha externado su voluntad y
desea continuar viviendo junto al enjuiciante, máxime que mi hijo, está plenamente filiado, así
como plenamente identificado con el enjuiciante en un entorno familiar y social.

Con la modificación que por esta vía se demanda, no se atenta, ni se afectaría de modo alguna, ni
directa o indirectamente el desarrollo integral de mi hijo, puesto que, sus necesidades de
formación, educación, costumbres, valores, alimentación y de forma general su desarrollo, está y
estaría totalmente cubiertas, máxime que, existe un enorme compromiso de vida que
compromete de forma inmediata el interés del suscrito enjuiciante, para que mi hijo, pueda
continuar viviendo junto a este, en el ambiente sano y adecuado que siempre le he brindado, que
el enjuiciante, siempre he permanecido y he estado presente en la corta edad de mi hijo, por lo
que, la modificación del convenio, no implica afectación alguna y mucho menos que mi hijo sea
apartado de manera abrupta de su progenitora, puesto que el cambio de circunstancias, no se
trata de modo alguno de apartarlo de su progenitora; simplemente es atender que mi hijo lleva
viviendo junto al enjuiciante más de dos años y es deseo y voluntad de mi hijo, el cual ha
expresado su enorme deseo de continuar viviendo junto al enjuiciante.

De lo expuesto en este capítulo y toda vez que, el progenitor ostentó la patria potestad y cuento
con habilidades parentales para proyectar cuidados y atenciones hacia mi hijo, solicitó de este H.
Juzgado, valore en conciencia lo mejor para este, puesto que resulta de explorado derecho y de
estudio psicológico que la figura paterna también juega un rol fundamental, principal y
primordialmente en la vida de mi hijo.

Es importante dejar patente que, este H. Juzgado, puede tomar como premisa mayor el Interés
Superior del Menor, tal y como lo ha expuesto el máximo tribunal del país, en el que detalló que a
los menores se les debe poner en el centro de la protección de la ley.

La Sala Primera de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que se puede
modificar la guardia y custodia de los hijos cuando uno de los padres impida que los menores de
edad convivan con el otro progenitor.

De acuerdo con una tesis presentada por el ministro Arturo Zaldívar respecto a un juicio ordinario
civil, se determinó que impedir que los menores de edad convivan con uno de los padres puede
generar daños emocionales difíciles de revertir; además, consideró que no había razón para
pensar que la interacción con dicho padre pudiera generar un daño al infante.
En un comunicado, la SCJN explicó que “al aplicar el interés superior de la infancia, se estableció
que se puede modificar la guardia y custodia cuando uno de los padres sistemáticamente impida
que sus hijos convivan con el otro progenitor”.

En otro caso, el máximo tribunal determinó que ser mujer no le da a la madre más derechos para
obtener la guarda y custodia de los hijos, toda vez que "el juzgador puede otorgarle la guarda y
custodia al padre si es lo que más conviene para los hijos".

Así, la Suprema Corte "se ha separado de las justificaciones que asumen que la mujer goza de
mayor aptitud para el cuidado familiar". Además, se dejó a un lado el criterio de que los menores
de 12 años debían permanecer al lado de su madre por ser la más capacitada, toda vez que estos
criterios se basan en estereotipos de género que violan el principio de igualdad".

Por ello, ahora el juez deberá examinar cada caso sin estereotipos de género y tomando en cuenta
siempre el interés superior del menor de edad como principio rector para determinar a cuál de los
dos progenitores corresponde la guarda y custodia.

LA CAMBIO DE LA OBLIGACIÓN DE LA PENSIÓN ALIMENTICIA, es que, por cuanto hace a


mi menor hijo de iniciales OEGS, y al efecto de que el enjuiciante, ya no quede en calidad de
deudor alimentista, del 15% (QUINCE POR CIENTO), se tome como premisa lo expuesto en la
presente demanda y sea ahora mi contraparte la que, proporcione alimentos en favor de nuestro
menor hijo, que sea equivalente al 15% (QUINCE POR CIENTO), de sus percepciones ordinarias y
extraordinarias.

De ahí que, la pensión alimenticia debe ser configurada al derecho-deber alimentario, que al ser
de orden público e interés social y como propósito fundamental la de proporcionar los medios
necesarios y suficientes para la manutención o subsistencia de mi hijo, esta debe ser de forma
proporcional, como factor determinante para establecer la obligación alimenticia, atendiendo la
situación y necesidad de los sujetos y la capacidad económica de las partes.

Luego, para fijar el monto de los alimentos deben considerarse primordialmente dichos factores,
sin que ello, implique desconocer algunos otros elementos que pueden ser significativos al
determinar la pensión, cuestión ésta a la que se ha referido la Primera Sala de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación en el criterio jurisprudencia que se transcribe a continuación:

ALIMENTOS. REQUISITOS QUE DEBEN OBSERVARSE PARA FIJAR EL


MONTO DE LA PENSIÓN POR ESE CONCEPTO (LEGISLACIONES DEL
DISTRITO FEDERAL Y DEL ESTADO DE CHIAPAS).De lo dispuesto en los
artículos 308, 309, 311 y 314 del Código Civil para el Distrito Federal y sus
correlativos 304, 305, 307 y 310 del Estado de Chiapas, se advierte que los
legisladores establecieron las bases para determinar el monto de la pensión
alimenticia, las cuales obedecen fundamentalmente a los principios de
proporcionalidad y equidad que debe revestir toda resolución judicial, sea ésta
provisional o definitiva, lo que significa que para fijar el monto de esta obligación
alimentaria debe atenderse al estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades
reales del deudor para cumplirla, pero, además, debe tomarse en consideración el
entorno social en que éstos se desenvuelven, sus costumbres y demás
particularidades que representa la familia a la que pertenecen, pues los alimentos
no sólo abarcan el poder cubrir las necesidades vitales o precarias del acreedor,
sino el solventarle una vida decorosa, sin lujos, pero suficiente para desenvolverse
en el status aludido; de ahí que no sea dable atender para tales efectos a un criterio
estrictamente matemático, bajo pena de violentar la garantía de debida
fundamentación y motivación consagrada en el artículo 16 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos y, eventualmente, hacer nugatorio este
derecho de orden público e interés social.

Elementos que comprenden


Los conceptos integrantes de los alimentos deben fijarse en atención a las necesidades del
acreedor alimentario y a las posibilidades del deudor.

Sin embargo, toda vez que ellos comprenden lo necesario para subsistir, es posible precisar que,
cuando menos, deben incluir los siguientes elementos:

Comida.
Vestido.
Habitación o vivienda.
Requerimientos en materia de salud.
Asistencia médica.
Además, según las características particulares del acreedor alimentario, los alimentos pueden
también comprender algunos otros conceptos, como, por ejemplo:
1.- Atención hospitalaria.
2.- Los elementos y gastos indispensables para lograr el descanso, la recreación y el esparcimiento
a que todo ser humano tiene derecho.
3.- Los gastos necesarios para la educación de los menores y para proporcionarles oficio,
profesión o arte adecuados a sus circunstancias personales.
Por tanto y toda vez que, es precisamente los Jueces especializados en dicha materia los
competentes para conocer y resolver todo lo relacionado a los alimentos, resultandos aplicables
en los juicios en que se ventilen cuestiones relacionadas con éstos las siguientes prevenciones:
a). - El Juez de lo familiar está facultado para intervenir de oficio, suplir los principios jurídicos y la
legislación aplicable y, por ende, variar la Litis para pronunciarse sobre prestaciones que no fueron
demandadas en el escrito inicial.
b). - El Juez puede decretar las medidas precautorias que estime pertinentes.
c). - Los Jueces y tribunales están obligados a suplir la deficiencia de las partes en sus
planteamientos de derecho, "atendiendo preferentemente a los intereses de los menores de edad
o mayores incapaces si los hubiere, a falta de éstos a los de la familia misma y, por último, a los
que asisten a los mayores capaces que la integran".
d). - No se requieren formalidades especiales para acudir ante el Juez de lo familiar.
e). - Es optativo para las partes acudir asesoradas, pero, en su caso, los asesores que señalen
deben ser licenciados en derecho con cédula profesional.
f). - Si una de las partes se encuentra asesorada y la otra no, deben solicitarse de inmediato los
servicios de un defensor de oficio.
g). - La orden definitiva de ministrar alimentos es un pronunciamiento que debe emitirse con base
en los elementos de prueba aportados por las partes en el juicio, y el juzgador no está obligado a
fijar como pensión alimenticia definitiva la misma que con anterioridad había señalado con el
carácter de provisional.
h). - Las bases para determinar el monto de la pensión alimenticia obedecen fundamentalmente a
los principios de proporcionalidad y equidad que debe revestir toda resolución judicial, sea ésta
provisional o definitiva. Luego, para fijar el monto de la obligación alimentaria debe atenderse al
estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades reales del deudor para cumplirla, así como
al entorno social en que éstos se desenvuelven, sus costumbres y demás particularidades que
representa la familia a la que pertenecen, ya que los alimentos no sólo abarcan el poder cubrir las
necesidades vitales o primarias del acreedor, sino el solventarlo una vida decorosa, sin lujos, pero
suficiente para desenvolverse en el estatus aludido.
i). - En aras de atender a los principios de proporcionalidad y equidad, así como al estado de
necesidad del acreedor alimentario y la posibilidad real del deudor para cumplir con su
obligación, el juzgador debe valorar los elementos probatorios aportados por las partes. Por
tanto, el solo parámetro aritmético que consiste en la operación de dividir el ingreso del deudor
entre el número de acreedores alimentistas no es suficiente, "en virtud de que así no se
consideran las necesidades particulares de estos últimos, circunstancias que rigen el prudente
arbitrio judicial que impera en esta materia, basado, precisamente, en el principio de la
posibilidad y proporcionalidad de los alimentos, pero en función de la necesidad particular que se
atribuye a cada acreedor".
j). - Si después de decretada la pensión alimenticia provisional, surgen nuevos acreedores
alimentarios y no se justifica que éstos tengan mayores necesidades que los ya beneficiados,
entonces rige el criterio de proporcionalidad y debe disminuirse el porcentaje del beneficiario que
recibe el ingreso superior y no el de quienes reciben menos cantidad por alimentos, para así
obtener un reparto equitativo.
k). - Si son varios los acreedores, uno de los elementos que es necesario tomar en consideración
para determinar la proporcionalidad de los alimentos es el número de aquéllos, pues cada uno
requiere de comida, vestido, habitación y asistencia en caso de enfermedad y educación.
El monto de la pensión sólo resulta correcto si se señala como tal la cantidad o porcentaje que
corresponda, tomando como base la totalidad de las percepciones que el deudor alimentario
perciba, disminuyendo deducciones de carácter legal no derivadas de obligaciones personales
impuestas al deudor alimentario como podrían ser, entre otros, el impuesto al ingreso por trabajo
realizado.

El elemento básico para la determinación de los alimentos lo constituyen los ingresos del deudor
alimentario, los que por lo regular se miden en atención a su salario, dentro del cual deben
considerarse, además de los pagos hechos en efectivo por cuota diaria, gratificaciones,
percepciones, habitación, primas, comisiones, prestaciones en especie, "las horas extras,
aguinaldo, prima vacacional, gasolina y demás remuneraciones que se entreguen al trabajador con
motivo del trabajo desempeñado, siempre y cuando constituyan un ingreso directo a su
patrimonio, independientemente de que sean ordinarias o extraordinarias", excluyéndose
únicamente las cantidades que reciba por concepto de viáticos y gastos de representación, pues si
bien éstos constituyen prestaciones extraordinarias, no son entregados al trabajador como
producto de su trabajo y, por ende, no pueden ser considerados como parte del salario.

Finalmente, es de destacar que en materia de alimentos no opera la figura de cosa juzgada, pues
"la fijación del monto de los alimentos siempre es susceptible de aumento o disminución,
conforme sea la posibilidad económica del deudor y la necesidad del acreedor".

De lo anterior, es que el suscrito progenitor, me encuentro ante la presencia de una desigualdad,


puesto que, los alimentos señalados en el convenio de referencia, resulta totalmente
desproporcionada, máxime que Paola Monsalve Flores, obtiene ingresos propios y bienes de su
propiedad.

Dicha reclamación aquí expuesta, no altera o atenta la supervivencia y estabilidad física, mental o
psicológica de mis hijas y mucho menos su sano desarrollo.

Se solicita la suplencia de la deficiencia de la queja, en cuanto a todo lo que beneficie a los


derechos de mis hijas y que este H. Juzgado, tenga a bien decretar en su momento la
modificación del actual convenio en los términos aquí expuestos, y en su caso determinar las
mejores condiciones en beneficio de mi hijo

Fundo mi proceder en los hechos y preceptos de derecho siguientes:

HECHOS

I.- Mediante proceso legal ante el Juzgado Décimo Primero Civil del Distrito Judicial de
Tlalnepantla con residencia en Nicolas Romero, Estado de México, bajo el número de expediente
396/2017, las partes disolvemos el vínculo matrimonial y señalamos lo referente a la guardia y
custodia, visitas y convivencias y pensión alimenticia.

II.-Durante la vigencia y permanencia del referido convenio, el enjuiciante siempre y en la medida


de mis posibilidades y obligación di cabal cumplimiento al mismo, sin embargo mi hija de nombre
MARIA FERNANDA GOMEZ SANCHEZ, ya cuenta con la edad de veintidós años, concluyó su
educación superior, no presenta impedimento o incapacidad alguna, y no requiere alimentos,
puesto que ya está incorporada a una fuente de trabajo y percibe ingresos por sí misma.

III- Resulta que en el mes de julio de dos mil diecinueve, mi contraparte me informo y me hizo
formal entrega de mi menor hijo, bajo la premisa que no contaba con el tiempo suficiente para su
cuidado y protección, y que requería que el enjuiciante, me hiciera cargo de los cuidados y
protección de nuestro menor hijo, por lo que desde la citada fecha, el enjuiciante, es quien lleva la
guardia y custodia de mi hijo, y me encargo de su desarrollo integral.

De ahí que, atendiendo al Interés Superior del Menor y que las condiciones han cambiado, que mi
hija, ya alcanzó la edad de veintidós años, concluyó sus estudios a nivel superior, no tiene
impedimento de ninguna naturaleza y ya está incorporada al mundo laboral y no necesita ni
requiere alimentos a cargo del enjuiciante, es que la pensión alimenticia de mi hija deberá ser
cancelada.
Y por cuanto hace a mi menor hijo, el cual ya cuenta con la edad de quince años, que lleva
viviendo junto al enjuiciante más de dos años, que este han externado su voluntad y enorme
deseo de querer continuar viviendo con el enjuiciante, ya que esto les genera mayor satisfacción,
seguridad y tranquilidad; aunado a ello, que el progenitor juego un rol primordial en la vida de mi
hijo, es que en atención al interés superior del menor, es que este Juzgado podrá atender las
circunstancias aquí expuestas y la voluntad de mi hijo, para resolver conforme a derecho la
modificación del citado convenio.

Lo expuesto en el presente capítulo, les consta a __________________ y con lo cual se acreditará lo


hasta aquí expuesto.

De lo anteriormente expuesto, y toda vez que, se encuentran en juego los derechos inherentes a
mi hijo, es que con fundamento en el artículo 4.96 del Código Civil, y 1° y 4° constitucional,
teniendo en cuenta el interés superior del menor, su salud, costumbres, hábitos y educación,
solicitó a esta resolutoria que, de oficio acuerde cualquier medida provisional que considere en
beneficio de mi hijo, para salvaguardar sus derechos y el interés superior del menor.

Aunado a lo anterior, resulta pertinente establecer que, El artículo 4º Constitucional, en la parte


medular establece:

“Los niños y niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud,
educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral. Los ascendientes, tutores y custodios
tienen el deber de preservar estos derechos, El Estado proveerá lo necesario para propiciar el
respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio pleno de sus derechos. El Estado otorgará
facilidades a los particulares para que coadyuven al cumplimiento de los derechos de la niñez.”

El artículo 3.1 de la Convención sobre los derechos del niño establece que:

En cualquier medida que tomen las autoridades estatales, deben tener en cuenta de forma
primordial el interés superior del menor.

En el ámbito interno, el legislador ordinario ha entendido que el interés superior del menor, es un
principio que está implícito en la regulación constitucional de los derechos de los niños, niñas y
adolescentes, este principio es reconocido expresamente en la legislación encargada de
desarrollar los derechos contemplados en el artículo 4º. Constitucional, de acuerdo con su
numeral 3º, el interés superior es uno de los principios rectores.

Lo hasta aquí expuesto, permite concluir que la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos y la Convención sobre los Derechos de los Niños, a cuya normatividad debe ajustarse
la autoridad jurisdiccional por disposición del artículo 133 de la Constitución Federal, reconoce el
derecho de los menores a la salud mental, ese derecho constituye una garantía individual de los
niños oponible al Estado, consistente en el deber de velar por la protección de la salud
psicológica de aquéllos, en cualquier acto que realice en ejercicio de su potestad jurisdiccional.

De acuerdo a lo establecido por el artículo 7 de la Ley para la Protección de los Derechos de


Niñas, Niños y Adolescentes corresponde a las autoridades o instancias Federales, del Distrito
Federal, Estatales y Municipales en al ámbito de sus atribuciones, la de asegurar a niñas, niños y
adolescentes la protección y el ejercicio de sus derechos y la toma de medidas necesarias para su
bienestar tomando en cuenta los derechos y deberes de sus madres, padres y demás
ascendientes, tutores y custodios u otras personas que sean responsables de los mismos.

De igual manera el artículo 11 de la citada ley refiere que:

“son obligaciones de madres, padres y de todas las personas que tengan a su cuidado niñas,
niños y adolescentes proporcionarles una vida digna, garantizarles la satisfacción de alimentación,
así como el pleno y armónico desarrollo de su personalidad en el seno de la familia, la escuela, la
sociedad y las instituciones de conformidad con el presente artículo. Para los efectos de este
precepto, la alimentación comprende esencialmente la satisfacción de las necesidades de comida,
habitación, educación, vestido, asistencia en caso de enfermedad y recreación.”

Válido es, en este apartado citar el contenido de los artículos 4.202 y 4.203 del Código Civil,
mismos que disponen:

“La patria potestad se ejerce sobre los hijos menores no emancipados y comprende la
representación legal y la protección integral de los menores en sus aspectos físico, moral y social,
su guarda y custodia, la administración de los bienes y el derecho de corrección.”

El artículo 4.205 del propio ordenamiento legal preceptúa:} “En caso de separación de quienes
ejerzan la patria potestad y no exista acuerdo sobre la custodia, el Juez resolverá,
teniendo siempre en cuenta los intereses del hijo. Quien no tenga la custodia le asiste el derecho
de visita.”

Ahora bien, tal y como lo han expuesto múltiples experticias sobre la materia, el tiempo opera un
progresivo proceso de individuación del menor, lo que conllevaba de manera necesaria e
insustituible la presencia de ambos progenitores. El menor necesita tanto de la presencia de la
madre como la de su padre, aunque de modo diferente y en función de la edad; ambos
progenitores deben hacer posible y propiciar la presencia efectiva de esas funciones simbólicas en
el proceso de maduración personal de los hijos.

Podemos decir que, tres son los aspectos fundamentales que crean responsabilidades para los
padres y derechos para hacerlas efectivas y correlativamente obligaciones y deberes para los hijos
que son:
1.- La guarda no es otra cosa que la simple tenencia material del menor que se otorga con fines
de educación que, es el gran deber que preside las relaciones entre padres e hijos

2.- La asistencia no se reduce a proporcionar los medios económicos para la subsistencia física,
sino sustraer a los hijos de todo peligro en su formación humana, física y espiritual.

3.- El deber de educación de los hijos implica el deber y derecho de ocuparse


de la formación física, espiritual y moral del menor, así como atender a la preparación para una
profesión o actividad determinada, que represente utilidad al menor y a la sociedad. Esta tarea
paternal incluye "la formación del carácter del espíritu y de los sentimientos" que tanto, han de
incidir sobre sus inclinaciones en la vida.

Todos estos deberes y obligaciones corresponden a ambos padres en igualdad de condiciones,


según lo preceptúa los artículos 4.17, 4.19, 4.51, 4.130 y 4.204 fracción del código sustantivo de la
materia.

Y es que, a través de la decisión de ambos progenitores, la suma y síntesis de los análisis de


conveniencia que cada uno realiza forzosamente ha de resultar más benéfico para mis hijas, que el
sólo criterio de uno de ellos.

De ahí, la característica del ejercicio de la patria potestad, y su disponibilidad que implica que
tanto la progenitora, tanto como el progenitor, siendo los padres no puedan modificar, disponer o
renunciar a la titularidad y ejercicio de la patria potestad, porque al traducirse en deberes, son de
orden público (artículo 4.226 del Código Civil). Es decir, no me encuentro impedido para ejercer la
patria potestad.

Planteado lo anterior y tomando como punto de partida la interpretación al artículo 4


Constitucional, que le otorga forma y consistencia al principio del interés superior de la infancia,
dirigido a lograr el desarrollo potencial y el bienestar físico, emocional y social del menor,
ponderando las circunstancias que garanticen el respeto a los derechos fundamentales del menor,
constituyendo ello el mayor beneficio que le puede resultar al menor, cuyos derechos se
involucran en el presente asunto.

Determinó, además, que las normas aplicables a los menores se entenderán dirigidas a
procurarles, primordialmente, los cuidados y la asistencia que requieren para lograr un crecimiento
y un desarrollo plenos, dentro de un ambiente de bienestar familiar y social, y que para atender a
ese principio, EL EJERCICIO DE LOS DERECHOS DE LOS ADULTOS NO PODRÁ, EN NINGÚN
MOMENTO, NI BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA, CONDICIONAR EL EJERCICIO DE LOS
DERECHOS DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES, Y SE ESTABLECIÓ COMO OBLIGACIÓN
PARA TODAS LAS AUTORIDADES INVOLUCRADAS, EN EL ÁMBITO DE SUS
ATRIBUCIONES, LA DE ASEGURAR A LOS MENORES LA PROTECCIÓN Y EL EJERCICIO DE
SUS DERECHOS Y LA TOMA DE LAS MEDIDAS NECESARIAS PARA SU BIENESTAR.

Para ello, se toman en cuenta los derechos y deberes de sus madres, padres y demás
ascendientes, u otras personas que sean responsables de ellos, así como el deber y obligación de
la comunidad y, en general, de todos los integrantes de la sociedad, de respeto y auxilio en el
ejercicio de sus derechos.

En base a lo anterior y con apoyo en lo establecido en el artículo 4º, Constitucional, en relación


con los artículos 9 y 12 de la convención sobre los derechos del niño, así como en lo estatuido por
los artículos 2, 3, 4, 5, 7, 8, 9, 11,12 ,19 y 21 apartado A. de la Ley para la Protección de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en relación con el artículo 4.205 Código Civil en vigor
del Estado de México, solicitó se modifique el citado convenio, al efecto de que quedar cancelada
la pensión alimenticia en favor de mi hija MARIA FERNANDA GOMEZ SANCHEZ, y por
cuanto hace a mi menor hijo, se decrete el cambio de la GUARDIA Y CUSTODIA Y SE LE
IMPONGA A MI CONTRAPARTE EL PAGO DE UNA PENSIÓN ALIMENTICIA EN FAVOR DE
MI MENOR HIJO.
Lo anterior con la finalidad de procurar la adecuada integridad física, emocional, mental y social
de mi hijo, en términos de lo que dispone el Artículo 4 Constitucional en relación con los diversos
numerales 3, 7, 9, 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada
por México el veintiuno de septiembre del año de mil novecientos ochenta y nueve, que
establecen el desarrollo integral, el respeto a la dignidad y derechos de la niñez, así como la
obligación de los estados para garantizar que los tribunales judiciales velen por el interés superior
del niño.
Robustece lo anterior, la jurisprudencia, del tenor literal dispone:

Novena Época
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL
SEGUNDO CIRCUITO.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: XVI, Octubre de 2002
Tesis: II.3o.C. J/4
Página: 1206
GUARDA Y CUSTODIA. DEBE DETERMINARSE CONSIDERANDO EL
INTERÉS SUPERIOR DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES
CONFORME A LA CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO.
El derecho a la guarda y custodia de una niña, niño y adolescente, implica
considerar no sólo las pruebas ofrecidas por las partes con las que pretendan
demostrar una adecuada capacidad para el cuidado del menor, sino que atendiendo
al beneficio directo de la infancia, el juzgador también debe considerar el interés
superior de la niña, niño y adolescente como presupuesto esencial para determinar
quién tiene derecho a la guarda y custodia. Ello, porque conforme a lo dispuesto
por el artículo 4o. constitucional que establece el desarrollo integral, el respeto a la
dignidad y derechos de la niñez, así como los artículos 3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20
y 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por México el
veintiuno de septiembre de mil novecientos ochenta y nueve, que establece que los
Estados garantizarán que los tribunales judiciales velen por el interés superior del
niño, los juicios en los que se vean involucrados derechos inherentes de las niñas,
niños y adolescentes, como el caso en que se demande la guarda y custodia, debe
tenerse como presupuesto esencial el interés superior del niño y darle intervención
al Ministerio Público, para que en su carácter de representante de la sociedad, vele
por los derechos de los infantes y adolescentes.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Amparo directo 170/2000. Adrián Escocia Martínez y otra. 1o. de marzo de 2001.
Unanimidad de votos. Ponente: Felipe Alfredo Fuentes Barrera. Secretaria:
Cristina García Cuautla.
Amparo directo 935/2000. Rosa María Reyes Galicia y otro. 17 de octubre de
2001. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís. Secretaria: Yolanda González
Medrano.
Amparo directo 980/2000. Gena Vega Esperilla. 26 de junio de 2001. Unanimidad
de votos. Ponente: Raúl Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 701/2001. Ignacio Alfaro Hernández. 29 de enero de 2002.
Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís. Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Amparo directo 367/2002. Carlos Octavio Juárez González. 9 de julio de 2002.
Unanimidad de votos. Ponente: José Fernando García Quiroz, secretario de tribunal
autorizado por el Pleno del Consejo de la Judicatura Federal para desempeñar las
funciones de Magistrado. Secretario: Jorge Luis Mejía Perea.

MEDIDAS PROVISIONALES

Solicito de este Juzgado y tomando en consideración lo expuesto en la presente demanda, pueda


decretar el cambio provisional, al efecto de que mi hijo, pueda continuar viviendo junto al
enjuiciante, lo anterior con la finalidad de procurar la adecuada integridad emocional, mental y
social de mi hijo, conforme lo dispone el Artículo 4 Constitucional en relación con los diversos
numerales 3, 7, 9, 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada
por México el veintiuno de septiembre del año de mil novecientos ochenta y nueve, que
establecen el desarrollo integral, el respeto a la dignidad y derechos de la niñez, así como la
obligación de los estados para garantizar que los tribunales judiciales velen por el interés superior
del niño.

PRUEBAS

1.- CONFESIONAL a cargo de SAID ANITZEL SÁNCHEZ ROA, quien deberá de comparecer
personalmente y no por conducto de su apoderado legal deberá de absolver el pliego de
posiciones que se exhibirá en la audiencia principal el día y hora que tenga bien señalar su Señoría
y que previa su calificación de legal se realicen, por tratarse de hechos personalísimos,
apercibiéndole que en caso de no comparecer sin justa causa se le tendrá por confesa de las que
resulten calificadas de legal, probanza que relaciono con los hechos de mi escrito inicial de
demanda y demás actuaciones judiciales que se desprenden en términos de ley.

Prueba que se ofrece con el objeto de acreditar todos y cada una de las manifestaciones vertidas
por el suscrito en los hechos que conforman el presente escrito inicial de demanda.
2.- LA DECLARACIÓN DE PARTE consiste en la facultad de interrogar oralmente a SAID
ANITZEL SÁNCHEZ ROA mismo que versará sobre los hechos y circunstancias que guarden
relación con el objeto de la controversia las preguntas que se formularán en forma interrogativa el
día y hora que su Señorita señale para el desahogo de la audiencia principal, prueba que relaciono
con todos y cada uno de los hechos de mi escrito inicial de demanda.

Prueba que se ofrece con el objeto de acreditar todos y cada una de las manifestaciones vertidas
por el suscrito en los hechos que conforman el presente escrito inicial de demanda.

3.- LAS TESTIMONIALES a cargo de _______________testigos que se relaciona con los hechos
expuestos en esta demanda; personas que me comprometo a presentarlos el día y hora que se
sirva señalar, para el desahogo de esta probanza, mismas que serán examinadas en los términos
del artículo 5.37 del Código de Procedimientos Civiles en vigor.
Prueba que se ofrece con el objeto de acreditar todos y cada una de las manifestaciones vertidas
por el suscrito en los hechos que conforman el presente escrito inicial de demanda.

4.- LAS DOCUMENTAL PÚBLICA, consistentes en:

A). - Actas de nacimiento de mis hijos

B). - Copia certificada del expediente número 396/2017, radicado en el Juzgado Décimo Primero
Civil del Distrito Judicial de Tlalnepantla con residencia en Nicolas Romero, Estado de México.

Documentos que relaciono con todos y cada uno de los hechos narrados en la presente demanda
y con los que se acrediten tales extremos.

5.- LA ESCUCHA DE MI MENOR HIJO, de iniciales OEGS , esto sin que implique
revictimización de este, pues dicha prueba se solicita atendiendo a los DERECHOS HUMANOS.
EL PROTOCOLO DE ACTUACIÓN PARA QUIENES IMPARTEN JUSTICIA EN CASOS QUE
AFECTEN A NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES, ELABORADO POR LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, ES VINCULANTE AL REFLEJAR LOS COMPROMISOS FIRMADOS
POR EL ESTADO MEXICANO EN AQUELLA MATERIA. Dicho instrumento se considera
vinculante, toda vez que refleja los compromisos firmados por el Estado Mexicano en materia de
derechos humanos, en relación con el trato que se debe dispensar a los menores que se enfrentan
a un proceso judicial de cualquier índole, por ello, cuando éstos tengan que testificar o declarar
ante un Juez o en un juicio en donde estén inmiscuidas su guarda y custodia, deberán aplicarse,
en lo conducente, las reglas contenidas en el capítulo lll en sus numerales del uno al siete del
protocolo en cita”.

DERECHO A LA IDENTIDAD DE LOS NIÑOS. Es un derecho de rango constitucional que deriva


del artículo 4 de la Constitución Federal, ya que el objetivo de la reforma a dicho precepto
consistió en reconocer como derechos constitucionales todos los derechos de los niños
establecidos en los diversos tratados internacionales que México ha suscrito. Así, al estar
reconocido el derecho a la identidad en los artículos 7° y 8° de la Convención sobre los Derechos
del Niño, es innegable su rango constitucional. Asimismo, de acuerdo a dichos preceptos y al
artículo 22 de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, el
derecho a la identidad está compuesto por el derecho a tener un nombre, una nacionalidad y una
filiación. En efecto, si bien la identidad se construye a través de múltiples factores psicológicos y
sociales, en términos de derechos, la imagen propia de la persona está determinada en buena
medida, por el conocimiento de sus orígenes y su filiación, así como por la identificación que tiene
en la sociedad a través de un nombre y una nacionalidad. De la determinación de dicha filiación,
se desprenden a su vez, diversos derechos del menor, como son los derechos alimentarios y
sucesorios.

DERECHO DE LOS MENORES DE EDAD A PARTICIPAR EN LOS PROCEDIMIENTOS


JURISDICCIONALES QUE AFECTEN SU ESFERA JURÍDICA. LINEAMIENTOS PARA SU
EJERCICIO. Las niñas y los niños, como titulares de derechos humanos, ejercen sus derechos
progresivamente, a medida que desarrollan un mayor nivel de autonomía, lo que se denomina
‘adquisición progresiva de la autonomía de los niños’, lo cual conlleva que actúen durante su
primera infancia por conducto de otras personas –idealmente, de sus familiares–. Así, el
derecho de las niñas y los niños a participar en procedimientos jurisdiccionales que puedan afectar
su esfera jurídica se ejerce, también, progresivamente, sin que su ejercicio dependa de una edad
que puede predeterminarse en una regla fija, incluso de índole legal, ni aplicarse en forma
generalizada a todos los menores de edad, sino que el grado de autonomía debe analizarse en
cada caso. Ahora bien, la participación de los niños en procedimientos jurisdiccionales reviste una
doble finalidad, pues, al reconocerlos como sujetos de derecho, logra el efectivo ejercicio de sus
derechos y, a la vez, se permite que el juzgador se allegue de todos los elementos que necesite
para forjar su convicción respecto de un determinado asunto, lo que resulta fundamental para
una debida tutela del interés superior de la infancia. En este sentido, los lineamientos que deben
observarse para la participación de niñas y niños dentro de cualquier procedimiento jurisdiccional
que pueda afectar su esfera jurídica son: (1) para la admisión de la prueba debe considerarse que:
(a) la edad biológica de los niños no es el criterio determinante para llegar a una decisión respecto
a su participación dentro de un procedimiento jurisdiccional, sino su madurez, es decir, su
capacidad de comprender el asunto sus consecuencias y de formarse un juicio o criterio propio;
(b) debe evitarse la práctica desconsiderada del ejercicio de este derecho; y, (c) debe evitarse
entrevistar a los niños en más ocasiones de las necesarias; (2) para preparar la entrevista en la que
participaran, se requiere que sean informados en un lenguaje accesible y amigable sobre el
procedimiento y su derecho a participar, y que se garantice que su participación es voluntaria; (3)
para el desahogo de la prueba, la declaración o testimonio del niño debe llevarse a cabo en una
diligencia seguida en forma de entrevista o conversación, la cual debe cumplir con los siguientes
requisitos:(a) es conveniente que previamente a la entrevista el juzgador se reúna con un
especialista en temas de niñez, ya sea psiquiatra o psicólogo, para aclarar los términos de lo que
se pretende conversar con el niño, para que a éste le resulte más sencillo de comprender y
continuar la conversación; (b) la entrevista debe desarrollarse, en la medida de lo posible, en
un lugar que no represente un ambiente hostil para los intereses del niño, esto es, donde pueda
sentirse respetado y seguro para expresar libremente sus opiniones; (c) además de estar presentes
el juzgador o funcionario que tome la decisión, durante la diligencia deben comparecer el
especialista en temas de niñez que se haya reunido con el juzgador y, siempre que el niño lo
solicite o se estime conveniente para proteger su superior interés, una persona de su confianza,
siempre que ello no genere un conflicto de intereses; (d) en la medida de lo posible, debe
registrarse la declaración o testimonio de las niñas y niños íntegramente, ya sea mediante la
transcripción de toda la diligencia o con los medios tecnológicos al alcance del juzgado o tribunal
que permitan el registro del audio; (4) los niños deben intervenir directamente en las entrevistas,
sin que ello implique que no puedan tener representación durante el juicio, la cual recaerá en
quienes legalmente estén llamados a ejercerla, salvo que se genere un conflicto de intereses, en
cuyo caso debe analizarse la necesidad de nombrar un tutor interino; y (5) debe consultarse a los
niños sobre la confidencialidad de sus declaraciones, aunque la decisión final sea del juzgador,
para evitarles algún conflicto que pueda afectar su salud mental o, en general, su bienestar.
Finalmente, es importante enfatizar que en cada una de estas medidas siempre debe tenerse en
cuenta el interés superior de la infancia por lo que no debe adoptarse alguna determinación que
implique perjuicio para los niños, más allá de los efectos normales inherentes a su participación
dentro del procedimiento jurisdiccional”.

Por tanto, no debe pasar por alto, que nuestra Constitución Política y la Ley General de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, prevé precisamente la protección de los menores, a lo
que esta representación social, debe procurar ante todo la seguridad jurídica del menor.

Prueba que se ofrece para que este H. Juzgado logre advertir con sus sentidos, el estado físico,
psicológico y emocional de nuestro menor hijo, así como la interacción que tiene con su
progenitor y su deseo de convivir mayor tiempo con su progenitor, lo que ayudará a ver la
necesidad de modificar el actual régimen de visitas y convivencias.

6.- PERICIAL EN MATERIA DE PSICOLOGÍA A LAS PARTES Y ASÍ COMO LA PRUEBA EN


PSICOLOGÍA INFANTIL QUE DEBERÁ PRACTICARSE A MI MENOR HIJO DE INICIALES
OEGS a cargo del perito que designe este H. Juzgado en los términos aplicables del Código de
Procedimientos Civiles para el Estado de México, perito que deberá de valorar a las partes, red
social de cuidado y entorno familiar, y a las menores involucradas.

A fin de realizar la evaluación psicología a las partes involucradas en este juicio, considerando las
variables individuales relativas, así como las relacionadas con la propia dinámica familiar a efecto
de recabar datos objetivos, es decir que la resolutora tenga la certeza legal de la personalidad de
las partes y estado psicológico, emocional y afectivo de las niñas, con base en las pruebas en
psicología "Test de RORSCHACH, TAMAI- Test Auto evaluativo Multifactorial de Adaptación
Infantil, Test MMPI – cuestionario de personalidad, Test de Cleaver, Dibujo de la figura
humana de GOODENO, y dibujo en la familia"

7.- PERICIAL EN MATERIA DE TRABAJO SOCIAL, a cargo del perito que designe el Tribunal
Superior de Justicia, de esta Ciudad en los términos de los términos aplicables del Código de
Procedimientos Civiles para el Estado de México; Estudio socioeconómico para ambas partes a fin
de saber sobre la capacidad económica de los hoy contendientes, realizando una investigación
descriptiva del ambiente familiar, social y económico de las partes, realizando visitas domiciliarias,
entrevista estructurada y abierta, investigación de hechos, recorrido del área, etc. Todo lo
necesario para que la perito pueda realizar su dictamen.

Probanza que deberá ser admitida, ello debido a que se encuentran en juego los derechos de tres
niñas y que en suplencia de la deficiencia de la queja solicito me sea admitida, por salvaguardar el
superior interés del menor.

8.-LA INSTRUMENTAL PÚBLICA DE ACTUACIONES consistente en todo lo que se derive del


presente expediente y que beneficie al interés de mis hijas, misma que se relaciona con todos los
hechos de mi escrito inicial de demanda.

9.- LA PRESUNCIONAL EN SU DOBLE ASPECTO LEGAL Y HUMANA. - Que se desprenda de


la presente Litis, así como por los razonamientos lógicos jurídicos que favorezcan a los intereses
de mi menor hijo al momento de resolver en definitiva por justicia y equidad.

Reservándome el derecho de ofertar mayor número de pruebas, en caso de ser necesarias, por
tratarse de cuestiones de orden e interés social, y del interés superior del menor, así como
pruebas supervinientes en caso de que se dé su existencia o tener conocimiento de la existencia
de mayor número de elementos de prueba.
DERECHO
Son aplicables en cuanto al fondo del asunto, los Artículos 4.205 párrafo segundo y demás
relativos y aplicables del Código Civil vigente en la entidad.

Norman el Procedimiento los Artículos 1.1, 1.2, 1.3, 1.4, 1.10 fracciones I y V; 1.28, 1.29, 1.30, 1.42
fracción XI; 1.213, 2.107, 2.108, 2.110, 2.111, 2.114, y demás relativos y aplicables del Código de
Procedimientos Civiles Vigente en la entidad.

Por lo anteriormente expuesto y fundado;


a Usted, C. Juez, atentamente pido:
PRIMERO. - Tener por mi propio derecho nombre y representación de mi hijo y
documentos que se acompañan en la vía y forma propuesta, admitiendo la misma.

SEGUNDO. - Tener por autorizado el domicilio señalado, así como los profesionistas
aludidos, para los efectos legales a que haya lugar.

TERCERO. - Acordar de conformidad la medida provisional que ha quedado precisada


para todos los efectos legales a que haya lugar.

CUARTO. - Se ordene para el cuidado y preservación de todos y cada uno de los


documentos fundatorios exhibidos por el suscrito su RESGUARDO EN LA CAJA FUERTE DE ESTE
H. JUZGADO.

QUINTO. - En su oportunidad, emplazar a juicio a la demandada, justo en el domicilio que


se indica a efecto de que dentro del término legal produzca su correspondiente contestación.

SEXTO. - En su oportunidad, pronunciar Sentencia Definitiva en la que se declare la


modificación de la pensión alimenticia de mi hija, así como el cambio de la guardia y custodia de
mi menor hijo.
PROTESTO LO NECESARIO
OSCAR GOMEZ GONZALEZ
Nicolas Romero, a 25 de Octubre de 2023.

ABOGADO PATRONO
LICENCIADO EN DERECHO CHRISTIAN MARTÍNEZ RUIZ
NÚMERO DE CEDULA PROFESIONAL
6730836

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