BREWER-CARÍAS. REFERENDO CONSULTIVO SOBRE ESEQUIBO. ERRADO, INCONSTITUCIONAL, INÚTIL, INCONVENIENTE, INOPORTUNO, IRRESPONSABLE, CONTRARIO A LOS INTERESES DEL PAÍS. Nov 2023
BREWER-CARÍAS. REFERENDO CONSULTIVO SOBRE ESEQUIBO. ERRADO, INCONSTITUCIONAL, INÚTIL, INCONVENIENTE, INOPORTUNO, IRRESPONSABLE, CONTRARIO A LOS INTERESES DEL PAÍS. Nov 2023
BREWER-CARÍAS. REFERENDO CONSULTIVO SOBRE ESEQUIBO. ERRADO, INCONSTITUCIONAL, INÚTIL, INCONVENIENTE, INOPORTUNO, IRRESPONSABLE, CONTRARIO A LOS INTERESES DEL PAÍS. Nov 2023
Allan R. Brewer-Carías
Profesor emérito, Universidad Central de Venezuela
Individuo de Número de la Academia de Ciencias Políticas y Sociales
*
Texto ampliado de la conferencia dictada en el Coloquio sobre La controversia del Esequibo y el
referendo consultivo, organizado por el Instituto de Derecho Público de la Universidad Central de
Venezuela y la Asociación Venezolana de Derecho Internacional (con la participación de Gustavo
Urdaneta, Sadio Garabini di Turno, Sergio Dahbar, Víctor Rodríguez Cedeño, y Héctor Faúndez),”
el cual tuvo lugar en Caracas, vía zoom, 9 de noviembre de 2023. Video disponible en:
https://bot.ly/3LS1wzb https://www.youtube.com/watch?v=VitQq5P8SBA
1
Así lo “explicó” el Gobierno en un folleto intitulado Defensa del Esequibo. Comisión Presidencial,
2023.
1
Este referendo consultivo y las preguntas que contiene, calificadas, con
razón, como “cinco preguntas largas y complejas, de naturaleza
eminentemente jurídica, formuladas de manera enmarañada, que siempre
nos remiten al Derecho Internacional, y que no se pueden responder
simplemente con un sí o un no,”2 se enmarcan dentro de una secuencia de
faltas graves que en nuestro criterio se han cometido en relación con esta
importante reclamación territorial, las cuales se remontan a las actuaciones
llevadas adelante por el entonces Presidente Hugo Chávez en 2004,
mediante las cuales, lejos de insistir en la reclamación del territorio del
Esequibo y defender los derechos e intereses de Venezuela, se han
realizado concesiones inadmisibles, como parte de una política exterior
que ha puesto más énfasis en la geopolítica, para así obtener, por ejemplo,
el control circunstancial de votos en algunos organismos internacionales
(OEA, ONU, CARICOM).
En ese mismo marco, la decisión de llevar a cabo ahora este referendo
consultivo, en nuestro criterio, es también una decisión errada, además de
ser inconstitucional, inútil, inconveniente, inoportuna, irresponsable y
contraria a los intereses del país.
I. PLANTEAR UN REFERENDO CONSULTIVO SOBRE LA
CUESTIÓN DEL ESEQUIBO ES UNA DECISIÓN ERRADA
En efecto, y con el propósito de analizar estas fallas, lo primero que
debe analizarse es la naturaleza del referendo consultivo, y determinar
para qué se establece como instrumento de participación política.
En el ámbito nacional, como lo indica el artículo 71 de la Constitución,
el referendo consultivo, como una consulta popular, se establece como un
mecanismo de participación política para que los ciudadanos puedan
expresar su opinión sobre las “materias de especial trascendencia
nacional” que se les sometan. Dicha consulta puede convocarse a
iniciativa del Presidente de la República en Consejo de Ministros; de la
Asamblea Nacional, mediante Acuerdo aprobado por el voto de la mayoría
de sus integrantes; o por iniciativa popular, a solicitud de un número no
menor del 10% de los electores inscritos en el registro civil y electoral.
En relación con la naturaleza y efectos de estas consultas populares, la
Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia en sentencia Nº 23
de 22 de enero de 2003 (Caso: Interpretación del artículo 71 de la
Constitución), indicó que se trata de “un mecanismo de democracia
participativa,” que “no tiene carácter vinculante,” no sólo porque
“consiste, únicamente, en una consulta a la población sobre su parecer en
2
Véase Héctor Faúndez Ledezma, “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en Cambio 16,
28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-preguntas-
irrelevantes/
2
determinadas materias consideradas de especial trascendencia,” sino
porque
“el ejercicio de la función pública se basa en la realización de
los postulados fijados en la Constitución y la Ley, máximas
expresiones de la soberanía nacional, por las personas elegidas a tal
fin conforme al ordenamiento jurídico, a quienes, en procura del
interés general, les corresponde asumir las decisiones políticas
trascendentales.”
En definitiva, la Sala Constitucional concluyó afirmando que:
“el resultado del referéndum consultivo previsto en el artículo
71 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela no
tiene carácter vinculante en términos jurídicos, respecto de las
autoridades legítima y legalmente constituidas, por ser éste un
mecanismo de democracia participativa cuya finalidad no es la toma
de decisiones por parte del electorado en materias de especial
trascendencia nacional, sino su participación en el dictamen
destinado a quienes han de decidir lo relacionado con tales materias3.
Es decir, un referendo consultivo es un mecanismo destinado solo a
conocer “el parecer” de la población en determinadas materias, es decir,
conocer “el sentir” o “la posición” del pueblo (el “feeling” en inglés)
respecto de determinados asuntos, sin que pueda convertirse en un
instrumento de gobierno, siendo errado pretender convertir las opiniones
o pareceres del pueblo, en “mandatos populares,” a través de la
manipulación de las preguntas incluidas en el mismo.
En el caso del referendo consultivo sobre el Esequibo así parece ser,
habiendo incluso sido la propia Sala Constitucional del Tribunal Supremo
la que dice haber identificado en las preguntas del mismo “las políticas de
acción con las que se pretende abordar un tema de protección y
preservación del territorio nacional en su integridad”4 que el pueblo
defina.
Allí está la experiencia del referendo de 2016 realizado en el Reino
Unido sobre la relación con la Unión Europea, donde los gobiernos
convirtieron un parecer del pueblo en un mandato de gobierno, con las
catastróficas consecuencias económicas y sociales que ha originado la
salida del Reino Unido de la Unión Europea. El pueblo inglés no tenía el
conocimiento económico, de política comercial internacional y técnico
para que el “parecer” que emitió fuera convertido por el gobierno en una
3
Véase en Revista de Derecho Público, Nº 93-96, Editorial Jurídica Venezolana, Caracas 2003.
4
Véase la sentencia No. 1469 de 31 de octubre de 2023, sobre la “constitucionalidad” del referendo
consultivo sobre el Esequibo, que se comenta más adelante en este estudio. Disponible en:
http://historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/octubre/329789-1469-311023-2023-23-1081.HTML 0
3
decisión suya en supuesta ejecución de un “mandato popular.” La
población no estaba preparada para poder discutir técnicamente, desde el
punto de vista económico, qué significaba para el Reino Unido salir de la
Unión Europea, que era y sigue siendo el logro histórico y político más
grande e importante que se ejecutó en Europa después de la Segunda
Guerra Mundial.
Planteando el tema en relación con el referendo consultivo sobre el
Territorio Esequibo y con las preguntas que contiene sobre la controversia
del mismo, lo primero que debemos preguntarnos es ¿cuántos venezolanos
tienen el conocimiento mínimo para poder dar una respuesta seria a
preguntas jurídicas y técnicas referidas al Laudo Arbitral de 1899, en
particular sobre la “línea” fronteriza que fijó, el contenido del Acuerdo de
Ginebra de 1966, la Corte Internacional de Justicia y sus competencias, y
por qué Venezuela está demandada allí por el Estado de Guyana.?
Se trata de una problemática que es estrictamente jurídica, ante la cual
el Gobierno no tiene nada que consultar ni conocer parecer alguno para
actuar. Por el contrario, tiene un mandato constitucional de defensa del
territorio nacional, el cual se define en el artículo 10 de la Constitución
como el que “correspondía a la Capitanía General de Venezuela antes de
la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las
modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados
de nulidad.”
Con base en ello, el Gobierno lo que tiene que hacer es gobernar; para
eso es gobierno, sin excusas, sin estar consultando a nadie para justificar
sus actuaciones. El gobierno tiene la obligación de actuar, defendiendo los
intereses de Venezuela donde están en discusión, que ahora es,
precisamente en el marco del Acuerdo de Ginebra, ante la Corte
Internacional de Justicia. Allí está el asunto desde 2018 por demanda de
Guyana contra Venezuela, y allí tiene el gobierno la obligación de actuar,
alegando y defendiendo los derechos e intereses de Venezuela,
demostrando que el Laudo Arbitral de 1899 está viciado de nulidad, pues
esa Corte es la que tiene a su cargo la decisión judicial de la controversia.
Y para ir allí a defender al país, el Gobierno no tiene que estar
preguntando a nadie qué hacer ni cómo hacerlo, como se pretende con el
errado referendo consultivo propuesto, el cual, además, como ha sido
observado acertadamente por especialistas en comunicación, está
concebido con preguntas mal estructuradas y unilaterales, redactadas
induciendo la respuesta, en temas especializados sobre una materia difícil,
en forma impositiva y amenazante, que no auguran un buen resultado del
mismo.5
5
Véase lo expuesto por Sergio Dahbar, en el Coloquio sobre La controversia del Esequibo y el
referendo consultivo,” organizado por el Instituto de Derecho Público de la Universidad Central de
4
II. EL REFERENDO CONSULTIVO PROPUESTO ES
INCONSTITUCIONAL
Pero es que, además, el referendo consultivo que se ha convocado es
inconstitucional precisamente por la forma cómo se han formulado las
preguntas y, específicamente, por las respuestas a las que pueden dar lugar,
que no podrían llegar a ser contrarias a lo que se dispone en la
Constitución.
En efecto, para que un referendo consultivo pueda ser convocado,
como todos los otros referendos previstos en la Constitución, tiene que
ajustarse a sus previsiones. Un referendo consultivo que, por ejemplo,
pregunte a la población su parecer sobre si está de acuerdo en rechazar
por todos los medios que el gobierno deje de ser democrático y se
convierta en monárquico, sin duda sería violatorio del artículo 5 de la
Constitución, que dispone que el gobierno de la República “es y será
siempre democrático.”
Como en todo referendo consultivo siempre se abre la posibilidad de
responder a las preguntas con respuestas “si” o “no,” la constitucionalidad
o inconstitucionalidad del mismo no solo puede resultar de las preguntas
formuladas sino también de las posibles respuestas. En el ejemplo
mencionado, lo que haría inconstitucional la pregunta sería la posibilidad
de que se pueda votar “no,” pues ante el texto pétreo del artículo 5 de la
Constitución, no podría permitirse que alguien votase por “no” rechazar
cualquier intento de convertir el gobierno democrático en una monarquía.
Esto es precisamente lo que ocurre con el referendo consultivo
convocado sobre la controversia de la Guyana Esequiba. El mismo no se
ajusta a la Constitución. Es decir, es inconstitucional por la formulación
de las preguntas y las respuestas que podrían tener lugar, y ello, a pesar
del pronunciamiento de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo
mediante sentencia No. 1469 de 31 de octubre de 2023 que declaró “la
constitucionalidad” de las preguntas del referendo.6
5
En efecto, debe mencionarse que la propuesta de referendo aprobada
por la Asamblea Nacional y que fue sometida al Consejo Nacional
Electoral, fue sometida por éste, motu proprio, a la Sala Constitucional del
Tribunal Supremo de Justicia para que se pronunciara sobre su
constitucionalidad, a pesar de que la Constitución no establece ninguna
competencia de la Sala Constitucional para ejercer el control abstracto de
constitucionalidad en forma previa sobre la realización de los referendos,
incluidos los consultivos. De hecho, en la Constitución y la Ley Orgánica
del Tribunal Supremo, solo se prevé el control previo de
constitucionalidad sobre las leyes aprobatorias de tratados internacionales
y sobre los decretos de estados de excepción,7 pero nada se establece en
materia de referéndum consultivos.
El Consejo Nacional Electoral, sin duda, debió haber tenido sus dudas
sobre la constitucionalidad del referendo consultivo propuesto y quizás
por ello se le ocurrió remitir el asunto a la Sala Constitucional, la cual,
emitió la sentencia antes mencionada declarando, como dice el “aviso” de
la sentencia, “la constitucionalidad de las preguntas con las que se
desarrollará el referendo consultivo en defensa de la Guayana Esequiba”
y que “ratifica constitucionalmente el contenido de las interrogantes.”
En la sentencia del 31 de octubre de 2023 publicada tardíamente el 11
de noviembre de 2023, cuyo texto además deberá publicarse en Gaceta
Oficial (la cual seguramente aparecerá semanas después pero con la
misma fecha antedatada del 31 de octubre), la Sala Constitucional, ante la
falta de norma expresa que le atribuyera competencia para decidir,
comenzó por declarar su propia competencia, simplemente expresando
que:
“tomando en cuenta que la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de
Justicia dotó a esta Sala Constitucional de la facultad para conocer de
los actos en ejecución directa e inmediata de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, dictados por cualquier otro
órgano estatal en ejercicio del Poder Público, cuando colidan con ésta;
es por lo que este órgano judicial, cúspide de la jurisdicción
constitucional, actuando como máxima y última intérprete del texto
constitucional, entiende que la petición a la que se circunscribe este
asunto inmiscuye un control innominado de la Constitución, por lo
que afirma su competencia funcional para conocer de la misma.”
A la sala se le olvidó que su competencia, como la de todos los órganos
del Estado, deriva exclusivamente del texto expreso de la Constitución o
de la ley, y que no existe norma alguna en el ordenamiento que se la
7
Véase sobre ello Allan R. Brewer-Carías, La Justicia Constitucional (Procesos y procedimientos
constitucionales), Instituto Mexicano de Derecho procesal Constitucional, Editorial Porrúa,
Mexico 20007, pp. 249 ss.
6
atribuya para conocer de la “constitucionalidad” de las preguntas de un
referendo en forma previa. La única manera en la cual la Sala podría
pronunciarse sería en un proceso constitucional si algún interesado
impugnara el referéndum por inconstitucionalidad conforme a lo que se
dispone en la Constitución y la ley.8
Pero sin importarle lo que establece la Constitución, la Sala pasó a
considerar la “constitucionalidad” del referendo consultivo y sus
preguntas, refiriéndose únicamente al hecho de que la Constitución habría
establecido un “modelo democrático electivo, participativo y
protagónico” para “superar” la “ilusión de participación que se creó
durante la vigencia de la Constitución de 1961,” haciendo creer al lector,
en una especie de “lección” sobre la democracia y sobre el derecho a la
participación (con referencias a la Grecia antigua, la Constitución de
Weimar, y una profusión de citas de autores españoles e italianos), que en
Venezuela existiría un “Estado de derecho,” basado en el funcionamiento
pleno de una “democracia representativa,” reforzada y profundizada
“únicamente con la participación y protagonismo permanente, ético y
responsable de la ciudadanía” (donde encajaría el referendo consultivo);
todo lo cual, como bien es sabido, no es cierto, pues la democracia en
Venezuela ha sido falseada desde hace ya demasiados años.9
Con base en estos argumentos la Sala pasó a analizar la
constitucionalidad de “las preguntas ideadas para su realización, para así
determinar si coliden con los presupuestos normativos, principios y
garantías que prevé la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela,” concluyendo que
“Resulta claro que el tema a ser tratado en este mecanismo de
participación ciudadana reviste una especial y transcendental
importancia, pues el espacio geográfico de la nación va a delimitar el
área de aplicación de la soberanía plena de la República, entendiéndose
que conforme a lo previsto en el artículo 13 de la Constitución, el
territorio no podrá ser jamás cedido, traspasado, arrendado, ni en forma
alguna enajenado, ni aun temporal o parcialmente, a Estados
extranjeros u otros sujetos de derecho internacional.
Siendo esto así, en el ejercicio apreciativo del texto
interrogativo supra transcrito, no se evidencian colisiones con los
presupuestos normativos contenidos en la Constitución o a los
8
Véase sobre ello Allan R. Brewer-Carías, La Justicia Constitucional (Procesos y procedimientos
constitucionales), Instituto Mexicano de Derecho procesal Constitucional, Editorial Porrúa,
México 20007, pp. 249 ss.
9
Véase Allan R. Brewer-Carías, Kakistocracia depredadora e inhabilitaciones políticas: El falso
Estado de Derecho en Venezuela, Colección Biblioteca Allan R. Brewer-Carías, Instituto de
Investigaciones Jurídicas de la Universidad Católica Andrés Bello, No 20, Editorial Jurídica
Venezolana, Caracas 2023,
7
principios o garantías que se desprenden de la misma, por lo que esta
Sala, actuando como la máxima garante del texto constitucional,
decreta la constitucionalidad de las preguntas con las que se
desarrollará el Referendo Consultivo en defensa de la Guayana
Esequiba, que se realizará el 3 de diciembre de 2023, y así se decide.”10
Como puede apreciarse, la Sala Constitucional no analizó lo que dijo
iba a analizar, que era la “constitucionalidad” de las preguntas del
referendo consultivo, quedándose en generalidades, con base en las cuales
terminó simplemente afirmando que las preguntas del referendo “son
constitucionales,” cuando lo que resulta de su texto es que lo que afirma
la Sala no es verdad. Las preguntas del referendo no son constitucionales;
el referéndum, en realidad, es inconstitucional.
Y es que, como se ha dicho, cuando se estudia la constitucionalidad o
inconstitucionalidad de un referéndum hay que analizar no sólo las
preguntas formuladas sino las respuestas, que tendrían que ser “sí” y “no”.
Ambas respuestas tienen que ser constitucionales, de manera que por más
que las preguntas sean direccionadas cualquiera de las respuestas que se
produzcan tienen que ser conforme a la Constitución.
Planteémonos el ejercicio con la primera pregunta que está dirigida a
que la respuesta sea positiva (si); ¿sería constitucional una respuesta
negativa (no)?
La primera pregunta del referendo consultivo propuesto es la siguiente:
“PRIMERA: ¿Está usted de acuerdo en rechazar por todos los
medios conforme al Derecho, la línea impuesta fraudulentamente
por el Laudo Arbitral de Paris de 1899, que pretende despojarnos de
nuestra Guayana Esequiba?”
A pesar que la formulación de la pregunta está dirigida a inducir una
respuesta “sí”, de rechazar la línea impuesta fraudulentamente por el
Laudo Arbitral de 1899, lo cierto es que en el supuesto que se produjera
un voto mayoritariamente negativo (“no”), esa respuesta sería
inconstitucional pues violaría el artículo 10 de la Constitución que
establece que el territorio de la República de Venezuela “es el que
correspondía a la Capitanía General de Venezuela antes de la
transformación política iniciada el 19 de abril de 1810 con las
modificaciones resultantes de tratados y laudos arbitrales no viciados de
nulidad.”
Es decir, la primera pregunta del referendo, además de ser direccionada
e inútil por responder a un sentimiento nacional que existe y no necesita
10
Véase Sentencia No. 1469 de 31 de octubre de 2023 Disponible en:
http://historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/octubre/329789-1469-311023-2023-23-1081.HTML
8
ser consultado para ser conocido, la sola posibilidad de que pueda haber
una respuesta “no” la hace inconstitucional, pues no es admisible que
pueda haber quien se pronuncie por no rechazar el despojo territorial pues
ello sería contrario al artículo 10 de la Constitución.11
Y es que tomando en cuenta dicha norma constitucional, y después de
que Venezuela viene afirmando oficialmente particularmente en los
últimos sesenta años que el Laudo Arbitral de 1899 es nulo y fraudulento,
no podría haber una respuesta a la pregunta que pueda significar no estar
de acuerdo en rechazar dicho Laudo. Por eso, el referéndum es
inconstitucional.
Esto se repite con la misma posibilidad de respuesta “no” en muchas
de las otras preguntas también supuestamente entubadas que se formulan
en el referendo propuesto. Por ello, ese referéndum es inconstitucional
desde el punto de vista de las respuestas que puedan generarse frente a
cada una de las preguntas.
III. EL REFERENDO CONSULTIVO PROPUESTO ES INÚTIL.
Un referendo consultivo, para ser efectivo, no solo tiene que tener
preguntas claras y coherentes, sino que tiene que tener una utilidad; tiene
que ser útil.
El referendo consultivo que se ha propuesto sobre el tema de la Guyana
Esequiba es esencialmente inútil, lo que resulta particularmente de la
Segunda Pregunta formulada, que es la siguiente:
“SEGUNDA: ¿Apoya usted el Acuerdo de Ginebra de 1966 como
el único instrumento jurídico válido para alcanzar una solución
práctica y satisfactoria para Venezuela y Guyana, en torno a la
controversia sobre el territorio de la Guayana Esequiba?”
Aparte de que para poder contestar seriamente esta pregunta los
electores habrían de tener algún conocimiento mínimo sobre qué es el
Acuerdo de Ginebra de 1966 (así como para responder la Pregunta
Primera hay que tener algún conocimiento mínimo sobre el Laudo Arbitral
de Paris de 1899), esta pregunta también es esencialmente inútil, pues en
el marco de la búsqueda de un arreglo práctico y satisfactorio de la
solución de la controversia entre Venezuela y Guyana, en el Acuerdo de
Ginebra de 1966 se regularon y detallaron los mecanismo para ello,
remitiendo a lo establecido en el artículo 33 de la Carta de las Naciones
Unidas. Y así, además de haberse previsto el mecanismo de los “buenos
oficios,” conforme al cual los buenos oficiantes actuaron por más de 30
años, al no lograrse el resultado querido de un arreglo práctico y
11
Por ello, Ramón Escobar León considera esta pregunta “es inútil, porque la Constitución declara
la integridad territorial de Venezuela.” Véase Ramón escobar león, La consulta sobre e esequibo,”
El nacional, 7 de noviembre de 2023
9
satisfactorio entre las partes, el Secretario General de Naciones Unidas
conforme al mismo texto del Acuerdo de Ginebra, optó por la solución
judicial de la controversia lo que llevó a Guyana a llevar el caso ante la
Corte Internacional de Justicia.12
Parecería, que al formular la Pregunta Segunda, a la Asamblea
Nacional se le olvidó que el Acuerdo de Ginebra estableció la posibilidad
de que la controversia de la Guayana Esequiba terminara ante la Corte
Internacional de Justicia, como incluso el gobierno de Venezuela lo
vislumbró al suscribir el Acuerdo en 1966.13
Es decir, el país está en juicio ante la Corte Internacional de Justicia
por virtud de lo previsto en el Acuerdo de Ginebra, siendo por lo demás
insólito, en este caso, que ello también se le haya olvidado a la propia Sala
Constitucional, cuando en la sentencia No. 1469 de 31 de octubre de 2923
(publicada el 11 de noviembre de 2023), haya expresado tajantemente que:
“El Acuerdo de Ginebra, por tanto, es el instrumento que las partes
suscribientes convinieron en adoptar con el fin implementar una
solución satisfactoria para alcanzar un arreglo práctico de la
controversia fronteriza entre Venezuela y el Reino Unido de Gran
Bretaña e Irlanda del Norte. Es evidente, por tanto, la naturaleza de la
ruta trazada por dicho Acuerdo, la cual se circunscribe al uso de
12
Como lo ha resumido Héctor Faúndez Ledesma: “El Acuerdo de Ginebra marcó la ruta para la
solución de esta controversia. Es el Acuerdo de Ginebra el que, para el evento en que las partes no
se pusieran de acuerdo en un medio de solución, le encomendó al secretario general de la ONU
que “escogiera” uno de los medios de solución pacífica de controversias indicados en el artículo
33 de la Carta de la ONU.” Entre esos medios de solución estaba el arreglo judicial, que fue el
escogido por el secretario general de la ONU. Es por el Acuerdo de Ginebra que este caso está en
la Corte Internacional de Justicia. Además, el arreglo judicial, que pondrá fin a esta controversia,
es el arreglo práctico y satisfactorio para Venezuela y Guyana.” En “El Esequibo, el Caricom y cinco
preguntas irrelevantes,” en Cambio 16, 28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-
esequibo-el-caricom-y-cinco-preguntas-irrelevantes/
13
Como lo ha recordado Héctor Faúndez Ledezma: “En 1965, durante las negociaciones en Londres,
previas a la firma del Acuerdo de Ginebra, Venezuela propuso el recurso a la Corte Internacional
de Justicia, el cual no fue aceptado por Inglaterra. Sin embargo, esta última convino en una
fórmula que no mencionara expresamente ese recurso, optando por una redacción que se refiere a
“los medios de solución pacífica previstos en el artículo 33 de la Carta de las Naciones Unidas”,
en el cual está expresamente previsto “el arreglo judicial. Este es un asunto que no pasó inadvertido
para nuestros negociadores y, de hecho, el entonces ministro de Relaciones Exteriores de
Venezuela, Ignacio Iribarren Borges, cuando presentó al Congreso Nacional el Acuerdo de Ginebra
para su ratificación, advirtió que este asunto podría terminar en la Corte Internacional de Justicia.”
En “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en Cambio 16, 28 octubre de 2023, disponible en:
https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-preguntas-irrelevantes/
10
mecanismos de concertación, con exclusión de aquellos estrictamente
judiciales.” 14
Esto es sencillamente falso y errado. El artículo 33 de la Carta de las
Naciones Unidas, al cual remite el Acuerdo de Ginebra, expresamente
enumera entre los medios de solución pacífica de controversias, el
“arreglo judicial,”15 que fue el que el Secretario General de la ONU
escogió conforme al mismo Acuerdo de Ginebra, luego de varias décadas
de fracaso en la utilización de los otros medios de solución de
controversias (como el de “buenos oficios”) que también enuncia.
En todo caso, ante esto, es decir, ante el hecho cierto que estamos en
el proceso judicial ante la Corte Internacional de Justicia en virtud del
propio Acuerdo de Ginebra, ¿qué utilidad tiene esta Segunda pregunta?
¿Qué utilidad tiene preguntarle al ciudadano si apoya la idea de que el
Acuerdo de Ginebra de 1966 es el único instrumento jurídico válido para
alcanzar una solución práctica y satisfactoria para Venezuela y Guyana, en
torno a la controversia sobre el territorio de la Guayana Esequiba cuando
precisamente por preverlo el Acuerdo de Ginebra, la Corte Internacional
de Justicia está conociendo de la controversia, sobre lo cual ha declarado
ya dos veces su propia competencia?
14
Sentencia No. 1469 de 31 de octubre de 2023 Disponible en:
http://historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/octubre/329789-1469-311023-2023-23-1081.HTML
15
El texto del Articulo IV del Acuerdo de Ginebra de 1966 es el siguiente: “(1) Si dentro de un plazo
de cuatro anos contados a partir de la fecha de este Acuerdo, la Comisión Mixta no hubiere llegado
a un acuerdo completo para la solución de la controversia, referirá al Gobierno de Venezuela y al
Gobierno de Guayana en su Informe final cualesquiera cuestiones pendientes. Dichos Gobiernos
escogerán sin demora uno de los medios de solución pacífica previstos en el Artículo 33 de la
Carta de las Naciones Unidas.. (2) Si dentro de los tres meses siguientes a la recepción del Informe
final el Gobierno de Venezuela y el Gobierno de Guyana no hubieren llegado a un acuerdo con
respecte a la elección de uno de los medios de solución previstos en el Articule 33 de la Carta de
las Naciones Unidas, referirán la decisión sobre los medios de solución a un órgano internacional
apropiado que ambos Gobiernos acuerden, o de no llegar a un acuerdo sobre este punto, al
Secretario General de las Naciones Unidas. Si los medios así escogidos no conducen a una solución
de la controversia, dicho órgano, o como puede ser el caso, el Secretario General de las Naciones
Unidas, escogerán otro de los medios estipulados en el Articule 33 de la Carta de las Naciones
Unidas, y así sucesiva- mente, hasta que la controversia haya sido resuelta, o hasta que todos los
medios de solución pacífica contemplados en dicho Articule hayan sido agotados.” Y el artículo
33.1 de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas dispone que “Las partes en una
controversia cuya continuación sea susceptible de poner en peligro el mantenimiento de la paz y la
seguridad internacionales tratarán de buscarle solución, ante todo, mediante la negociación, la
investigación, la mediación, la conciliación, el arbitraje, el arreglo judicial, el recurso a organismos
o acuerdos regionales u otros medios pacíficos de su elección.” Véase sobre esto Allan R. Brewer-
Carías, Derechos de Venezuela sobre el Territorio Esequibo, La Nulidad del Laudo Arbitral de
1899 y las falsedades en la Memoria de Guyana ante la Corte Internacional de Justicia, Academia
de Ciencias Políticas y Sociales, Editorial Jurídica Venezolana, Caracas 2023, pp. 95 ss.
11
Y es que estando el asunto ya sometido al conocimiento de la Corte
Internacional de Justicia en virtud del Acuerdo de Ginebra, no hay otra
solución ni arreglo práctico y satisfactorio posible, más allá del arreglo
judicial que Venezuela tiene que atender, defender y argumentar ante la
Corte Internacional de Justicia. Ya no hay otra vía que no sea la judicial,
lo que quizás explica la Declaración del 8 de noviembre de 2023 del
Parlamento de Guyana, a propuesta del Ministro de Asuntos Exteriores de
ese país, expresando el rechazo “a cualquier forma de diálogo con
Venezuela fuera del proceso ante la Corte Internacional de Justicia.”16
Es por tanto absolutamente inútil preguntar al pueblo si el Acuerdo de
Ginebra es o no el único instrumento jurídico válido para resolver la
controversia del Territorio Esequibo. Es evidente que lo es; en su marco
se agotaron los buenos oficios para solucionar el diferendo, y en su texto
se dispuso la fórmula del arreglo judicial que es en la cual estamos ahora,
y que el Gobierno tiene que atender sin preguntarle a nadie.
IV. EL REFERENDO CONSULTIVO ES CONTRARIO A LOS
INTERESES DEL PAÍS E INCONSTITUCIONAL
Como se ha dicho, en el marco del Acuerdo de Ginebra, por la remisión
que hicieron dos Secretarios Generales de las Naciones Unidas, después
de 30 años de fracaso de los buenos oficiantes, Venezuela fue demandada
por Guyana ante la Corte Internacional de Justicia en el año 2018.
Ante una demanda judicial, cualquier demanda judicial - y eso sí lo
sabe cualquier ciudadano sin ser abogado, por la experiencia de la vida, y
en este caso, por más que no sepa de Corte Internacional de Justicia o del
Acuerdo de Ginebra o del Laudo Arbitral de 1899 -; el demandado tiene
que acudir al tribunal a defenderse, porque si no lo hace será declarado
confeso y condenado; es lo que se llama la confesión ficta.
A nadie que esté demandado se le ocurre no ir al tribunal para conocer
los motivos de la demanda y defenderse, porque todo el mundo sabe que
la única forma de defenderse es presentándose ante el tribunal. En la
controversia de la Guayana Esequiba, Guyana demandó a Venezuela en
2018 ante la Corte Internacional de Justicia, con base en lo dispuesto en el
Acuerdo de Ginebra, y el gobierno tiene la responsabilidad de acudir ante
la Corte para defender ante la misma los derechos e intereses de
Venezuela. Venezuela no puede abandonar la defensa judicial de los
derechos e intereses del país ante la Corte Internacional de Justicia.
16
Véase el texto en la reseña: “Parlamento de Guyana ratificó soberanía del país sobre el territorio
en disputa con Venezuela”, EFE, 8 de noviembre de 2023. Disponible en:
https://www.elnacional.com/mundo/parlamento-de-guyana-ratifico-soberania-del-pais-sobre-
territorio-en-disputa-con-venezuela/
12
Por ello, la Pregunta Tercera del referendo consultivo propuesto es
igualmente inconstitucional, por ser contraria a los intereses del país, al
pretender preguntarle a la población si estaría de acuerdo en no reconocer
la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia. Es como preguntar si
se estaría de acuerdo con que el Gobierno deje de defender los derechos e
intereses de Venezuela y se retire del procedimiento ante la Corte
Internacional de Justicia al no reconocer su jurisdicción.
Pero ¿qué es esto? ¿cómo se va a preguntar esto a la población? Así
está redactada esta Pregunta Tercera:
“TERCERA: ¿Está usted de acuerdo con la posición histórica de
Venezuela de no reconocer la Jurisdicción de la Corte Internacional
de Justicia para resolver la controversia territorial sobre la Guayana
Esequiba?”
Ante esta pregunta, lo primero que debe observarse es que la
afirmación que contiene en relación con la existencia de una supuesta
“posición histórica de Venezuela de no reconocer la Jurisdicción de la
Corte Internacional,” es errada y falsa, pues como ya se dijo, la vía judicial
se previó desde el inicio de las negociaciones que llevaron al Acuerdo de
Ginebra.17
Pero lo que es realmente grave en torno a la pregunta es que con la
misma lo que aparentemente se pretende es convertir la opinión que estaría
contenida en una eventual respuesta positiva (“si”) a la misma, en un
“mandato popular” para justificar el retiro de Venezuela del procedimiento
judicial ante la Corte Internacional de Justicia y el abandono de la defensa
de los derechos e intereses del país ante la misma.
De entrada, eso fue lo que motivó a Guyana a solicitar ante la Corte
Internacional medidas provisionales contra el mencionado referendo, al
indicar en su solicitud ante la Corte Internacional que “todas las preguntas,
excepto la cuarta, se refieren a materias en disputa ante la Corte” (para. 3),
y que:
“El propósito de estas preguntas, que es obvio por su naturaleza y
oportunidad, y por la forma en que han sido redactadas, es obtener
respuestas que respalden la decisión de Venezuela de abandonar este
procedimiento, y recurrir en su lugar a medidas unilaterales para
"resolver" la controversia con Guyana mediante la anexión formal e
integración en Venezuela de todo el territorio en cuestión en este
17
Véase sobre esto Allan R. Brewer-Carías, Derechos de Venezuela sobre el Territorio Esequibo, La
Nulidad del Laudo Arbitral de 1899 y las falsedades en la Memoria de Guyana ante la Corte
Internacional de Justicia, Academia de Ciencias Políticas y Sociales, Editorial Jurídica
Venezolana, Caracas 2023, pp. 85 ss.
13
procedimiento. que comprende más de dos tercios de Guyana (para.
2).”18
De manera que lo que todo ciudadano tiene que preguntarse es cuál es
el propósito específico de esta Pregunta Tercera. ¿Se pretende con ella
dejar de defender los derechos e intereses del país ante la Corte
Internacional de Justicia?
Si Venezuela está demandada ante la Corte Internacional de Justicia;
si la Corte ya ha declarado formal y expresamente dos veces, a pesar de
algunas objeciones de Venezuela, su propia competencia para “determinar
la validez del Laudo Arbitral de 1899 y la cuestión conexa del arreglo de
la frontera terrestre entre Guyana y Venezuela,”19 y si Venezuela ya ha
comparecido en juicio, ha nombrado el Agente del Estado y sus abogados
y ha designado un Juez Ad Hoc,20 ¿cómo es que ahora busca excusarse en
un referendo para no reconocer dicha jurisdicción de la Corte
Internacional? 21
Como es bien sabido, la Corte Internacional de Justicia, como todo
tribunal internacional es juez de su propia competencia y ya la declaró en
este caso, por lo cual no solo la pregunta es ociosa, sino que es contraria a
los intereses del país, pues es insensato - en el sentido de falta de sentido
-, que Venezuela pretenda escaparse de la Corte Internacional de Justicia,
buscando una especie de justificación popular para retirarse del
procedimiento; es decir, para renunciar a defender los derechos e intereses
de Venezuela, que sí son históricos, para que sea condenada
ignominiosamente por un tribunal que no se va a detener en su curso
18
Véase Guyana’s request for Provisional Measures, 27 October 2023 ante la Corte Internacional de
Justicia. Disponible en https://www.icj-cij.org/sites/default/files/case-related/171/171-20231030-
wri-01-00-en.pdf
19
Véase la decisión de la Corte Internacional de Justicia sobre Observaciones preliminares de 6 de
abril de 2023, para 108.
20
Tal como Héctor Faúndez Ledezma lo ha resumido: “En este proceso, Venezuela designó un
juez ad hoc, nombró a su agente y a sus agentes alternos para que la representen ante la Corte,
interpuso una excepción preliminar de inadmisibilidad de la demanda, asistió a las audiencias para
conocer de dicha excepción preliminar, y participó en el procedimiento. Todo eso supone un
reconocimiento tácito de la competencia de la Corte, lo cual no va a cambiar con lo que piensen
los venezolanos sobre esta materia.” En “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en
Cambio 16, 28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-
preguntas-irrelevantes/
21
Por ello también ramón Escobar León considera “inútil” esta pregunta tercera, “porque ya la Corte
Internacional de Justicia declaró que tiene competencia para decidir la causa, basada en el Acuerdo
de Ginebra : y por el fracaso de los sucesivos oficiantes designados por el Secretario general de las
Naciones Unidas” Véase Ramón escobar león, La consulta sobre e esequibo,” El nacional, 7 de
noviembre de 2023
14
porque Venezuela no aparezca en el proceso. Por ello, Héctor Faúndez
Ledezma observa, ante esto que:
“Otra cosa es que, en medio de su ignorancia y desconcierto para
abordar este asunto, los que mandan quieran dejarle la cancha libre a
Guyana, renunciando a presentar nuestros argumentos y a que se
escuche nuestra voz.”22
Ya la Corte Internacional incluso lo ha advertido en sus decisiones, en
el sentido de que con o sin la presencia de Venezuela en el procedimiento,
la misma decidirá el caso cuando corresponda, porque ya declaró su
competencia. Como lo ha recordado Kenneth Ramírez, “la Corte
Internacional de Justicia ya advirtió claramente en su sentencia del 18 de
diciembre de 2020 [que] “La Corte destaca que la no participación de una
parte en el procedimiento en cualquier etapa del caso no puede, en ninguna
circunstancia, afectar la validez de su sentencia” (para 26).23
Por tanto, abandonar el procedimiento es abandonar la reclamación, es
abandonar la defensa de los derechos e intereses de Venezuela, es, en
definitiva, violar de nuevo el artículo 10 de la Constitución que define el
territorio nacional, y precisa que Venezuela no reconoce modificaciones
del territorio derivadas de Laudos arbitrales inválidos como lo es el Laudo
Arbitral de Paris de 1899.
Por lo demás, es una torpeza del gobierno, formular una pregunta en
la cual se pretenda desconocer o “no reconocer” la jurisdicción del
Tribunal que está conociendo de una demanda contra el país y ante el cual
hay que acudir a defenderse para no ser condenado por no ejercer su
defensa.
V. EL REFERENDO CONSULTIVO ES ERRADO,
INOPORTUNO E INCONVENIENTE A LOS INTERESES DEL
PAÍS
El referendo consultivo propuesto sobre la controversia del Esequibo,
además de lo antes expuesto, puede decirse que también es un referéndum
errado, inoportuno y de nuevo inconveniente a los intereses del país, como
se evidencia de la Cuarta Pregunta, formulada como sigue:
“CUARTA: ¿Está usted de acuerdo en oponerse, por todos los
medios conforme a Derecho, a la pretensión de Guyana de disponer
22
Véase en Héctor Faúndez Ledezma, “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en Cambio
16, 28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-preguntas-
irrelevantes/
23
Véase Kenneth Ramírez, “Referéndum sobre el Esequibo: un llamado a la prudencia,” Consejo
Venezolano de relaciones Internacionales, 4 de noviembre de 2023 Disponible en:
https://covri.com.ve/index.php/2023/11/05/referendum-sobre-el-esequibo-un-llamado-a-la-
prudencia-por-kenneth-ramirez/.i
15
unilateralmente de un mar pendiente por delimitar, de manera ilegal
y en violación del derecho internacional?”
De nuevo, esto no es materia de referendo ni de consulta popular
alguna. Es asunto de Gobierno. Si Venezuela ha considerado y considera
que Guyana ha estado y está disponiendo “unilateralmente de un mar
pendiente por delimitar, de manera ilegal y en violación del derecho
internacional,” existiendo como existe una controversia territorial con
Venezuela, que conforme a un acuerdo internacional suscrito entre ambos
países (Acuerdo de Ginebra) está bajo el conocimiento de la Corte
Internacional de Justicia, lo que tenía que haber hecho y debe hacer el
gobierno es actuar, sin estar consultando nada a nadie para ello. Actuar
internacionalmente, desde el punto de vista político, y actuar
judicialmente ante la Corte Internacional de Justicia, solicitando por
ejemplo medidas provisionales, precisamente para evitar que esos hechos
ocurran, es decir, que Guyana disponga “unilateralmente de un mar
pendiente por delimitar, de manera ilegal y en violación del derecho
internacional.” Ello debió haberlo hecho Venezuela desde el propio inicio
del proceso judicial ante la Corte Internacional de Justicia, pero a pesar de
todas las manifestaciones de expertos abogando para que ello se hiciese,
el Gobierno nunca planteó ante la Corte solicitud alguna de medidas
provisionales para oponerse.
Recordemos solo lo expresado por la Academia de Ciencias Políticas
y Sociales en declaración de 3 de octubre de 2023:
“1. Exhortar al gobierno nacional para que considere solicitar a la
Corte Internacional de Justicia la adopción de medidas provisionales
urgentes, para detener la explotación de los recursos naturales de la
zona en disputa y de su proyección marítima en el Océano Atlántico,
a fin de salvaguardar los derechos de las partes mientras no se resuelva
la controversia;
2. Instar al gobierno nacional, en todo caso, a afirmar y defender la
plena soberanía venezolana en las áreas marinas y submarinas de
proyección de nuestra fachada atlántica a partir de Punta Barima, que
están fuera de toda discusión ya que no son objeto de la reclamación y
que por tanto nos corresponden conforme al derecho internacional,
frente a las pretensiones de Guyana de apropiarse indebidamente de
dichas áreas.
3. Urgir a las autoridades nacionales a poner todo su empeño, sin
vacilaciones y sin pretextos, en la defensa de los derechos e intereses
de Venezuela en el proceso judicial que hoy cursa ante la Corte
16
Internacional de Justicia, a fin de que se enmiende la injusticia
histórica cometida con el Laudo del 3 de octubre de 1899.”24
Es por tanto errado e inoportuno que el Gobierno pretenda ahora
escudarse tras el pueblo por su falta de diligencia e interés en haber
permitido y aceptado por tanto tiempo, que Guyana desarrollara
libremente explotaciones de recursos naturales en toda la zona en
reclamación, siendo lo que Guyana también está ilegítimamente haciendo
en el mar no delimitado, solo una secuela de aquellas faltas graves
anteriores.
Estas faltas de gobierno, por cierto, se remontan al 14 de febrero de
2004, cuando el entonces Presidente Hugo Chávez visitó Georgetown,
sostuvo un encuentro amistoso con el Presidente de Guyana, Bharrat
Jagdeo, y declaró lo siguiente:.
“Yo me he comprometido con el presidente Jagdeo y con Guyana.
Primero que el gobierno venezolano no va a oponerse a ningún
proyecto en esta región que vaya en beneficio de sus habitantes;
beneficio directo como me decía el presidente, como es un proyecto de
agua, vías de comunicación, energía, proyectos agrícolas. Y segundo
durante el surgimiento de cualquier proyecto más sensible,
inmediatamente nos activamos ambos para conversarlo en la Comisión
Binacional de Alto Nivel y buscarle viabilidad.”25
Como lo precisó Sadio Garavini di Turno, con eso, Chávez:
24
Disponible en: https://www.acienpol.org.ve/wp-content/uploads/2023/10/Comunicado-academia-
Esequibo.pdf. En este mismo sentido, Héctor Faúndez Ledezma ha indicado que: “la forma de
defender –conforme a Derecho– los derechos de Venezuela en la proyección marítima del territorio
en disputa es pidiendo medidas provisionales a la Corte Internacional de Justicia, para que, a fin
de preservar los derechos de las partes mientras se decide esta controversia, se disponga el cese de
todas las operaciones de exploración y explotación de los recursos naturales que hay en la zona en
disputa y en su proyección marítima.Eso es lo que habría que hacer si –haciendo uso del Derecho
Internacional– realmente pretendiéramos oponernos a las medidas unilaterales de Guyana en una
zona de mar sin delimitar.” En “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en Cambio 16, 28
octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-preguntas-
irrelevantes/
25
Tomado de la reseña “Antes de saltar la talanquera, Hermann Escarrá denunció a Hugo Chávez
por sus relaciones con Guyana,” publicada en Morfema Press, Noviembre 10, 2023. La reseña
continúa con esta nota: “Tan solo unos días después de las declaraciones conjuntas de Chávez y
Jagdeo, Escarrá acudió con un recurso ante el Juzgado de Sustanciación de la Sala Constitucional
del Tribunal Supremo de Justicia para solicitar la nulidad de los actos del presidente socialista. En
concreto, el abogado condenaba la decisión de Chávez de no perturbar los proyectos e inversiones
del vecino país, pese a que se realizaran dentro del territorio Esequibo en disputa desde 1899. Según
el criterio de Escarrá, Chávez violaba con ello el principio de soberanía nacional plasmado en el
artículo 1 de la Carta Magna.” Disponible en: https://morfema.press/actualidad/antes-de-saltar-la-
talanquera-hermann-escarra-denuncio-a-hugo-chavez-por-sus-relaciones
17
“puso fin de un solo plumazo y, sin nada a cambio, a uno de los
pocos mecanismos de presión que tenía Venezuela. Durante 40
décadas, desde 1966 todos los gobiernos de la República civil
venezolana lo habían utilizado para presionar sobre Guyana al declarar
que se desconocían las inversiones de las transnacionales en el
Esequibo, evidentemente creaban una especie de inhibición de las
petroleras que también estaban interesadas en Venezuela, de meterse
pues en el Esequibo.”26
Ahora, recordando la propia Declaración de 2004 de Hugo Chavez,
Hector Faúndez Ledesma observó que:
“ahora, haciendo honor a ese compromiso, sus herederos políticos
no hacen uso de los recursos procesales que podrían poner fin a eso
que hoy se denuncia de la boca para afuera y que, en su momento,
Hugo Chávez permitió: las concesiones otorgadas por Guyana para
explorar y explotar los recursos naturales de la zona en reclamación y
de la proyección marítima de la misma.
Cuesta entender por qué, quienes tienen la representación del
Estado, no piden medidas provisionales; ¿porque no lo saben hacer?
¿O porque hay razones para que no lo quieran hacer?”27
En todo caso, sobre todo ello, y lo que ha ocurrido después,28 como lo
ha explicado el Consejo Superior de la Democracia Cristiana en
Comunicado de fecha 10 de noviembre de 2023:
“La historia por escribirse ya fijará las responsabilidades que por
omisión o acción correspondan a quienes han dirigido las relaciones
exteriores de Venezuela a partir de 1999, permitiendo que las
transnacionales petroleras ocupasen para su explotación partes de
nuestro territorio Esequibo; todo ello, para sumar, de la mano cubana,
los votos que el mundo angloparlante del Caribe le ha dado al régimen
de Hugo Chávez y a su sucesor, Nicolás Maduro, en la Organización
de Estados Americanos y la Organización de las Naciones Unidas.”29
26
Véase Sadio Garavini di Turno, “El referéndum consultivo no solo es inútil sino dañino para los
intereses de Venezuela, “en La Gran Aldea, 7 de noviembre de 1023. Disponible en:
https://lagranaldea.com/2023/11/07/sadio-garavini-el-referendum-consultivo-no-solo-es-inutil-
sino-danino-para-los-intereses-de-venezuela/Ldpaís
27
Véase en Héctor Faúndez Ledezma, en “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en
Cambio 16, 28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-
preguntas-irrelevantes/
28
Véase, sobre ello, lo expuesto por Luis Manuel Aguana, “¿Pudo Chávez entregar el Esequibo?”, 6
de noviembre de 2023, disponible en: https://es.linkedin.com/pulse/pudo-chávez-entregar-el-
esequibo-luis-manuel-aguana-i2w8e
29
Véase Consejo Superior de la democracia Cristiana, “ Declaración Acerca De Nuestra Guayana
Esequiba”, 10 de noviembre de 2023
18
Lo lamentable fue que a partir de entonces, la geopolítica desarrollada
por Chávez, de control de la Asamblea General de la OEA, a través del
control de los votos de los países del Caribe y el apoyo del Caricom
mediante la factura petrolera, pasó a ser más importante que la defensa de
los intereses de Venezuela. Todo ello, sin embargo, se reversó, y hoy ya
Venezuela no controla los votos de los países del Caribe con la chequera
petrolera; y hasta el Caricom30 y la OEA31 han formulado declaraciones
en respaldo de Guyana y en contra de Venezuela.
Pero la tragedia real en torno a todo esto es que luego que el Gobierno
abandonó la reclamación del Esequibo desde 2004, en vez de ir ahora ante
la Corte Internacional de Justicia a pedir medidas provisionales para
detener explotaciones ilegítimas de Guyana en la zona en reclamación y
las áreas marinas, errando en la oportunidad, quiere que el pueblo supla su
falta, y pasa a preguntarle si está de acuerdo con oponerse a las
explotaciones que Guyana está haciendo en el mar y en la zona en
reclamación.
Como se dijo, además de errado, querer escudarse ahora en un
referéndum consultivo y lanzarle al pueblo la responsabilidad que el
gobierno no supo asumir, es inoportuno.
30
Según reseña de EFE de 23 de octubre de 2023, la Comunidad del Caribe (Caricom) afirmó “que
el referéndum propuesto por Venezuela en diciembre no tiene validez,” preguntándose en el mismo
al pueblo, “entre otras cuestiones, si aprueba o no anexionarse la Guayana Esequiba, un territorio
de casi 160.000 kilómetros cuadrados en disputa con Guyana.” "Caricom toma nota de la decisión
de la Asamblea Nacional de Venezuela de llevar a cabo un referéndum popular para defender la
reclamación venezolana del Esequibo", recordando que "el derecho internacional prohíbe
estrictamente que el gobierno de un Estado se apodere, anexione o incorpore unilateralmente el
territorio de otro Estado"; e indicando que "Un voto afirmativo como el mencionado abre la puerta
a la posible violación de este principio fundamental del derecho internacional." Véase “Caricom
rechaza validez de referendo en Venezuela sobre territorio en disputa con Guyana,” en Swissinfo,
25 octubre 2023. Disponible en: https://www.swissinfo.ch/spa/venezuela-guyana_caricom-
rechaza-validez-de-referendo-en-venezuela-sobre-territorio-en-disputa-con-guyana/48926396
31
El Secretario general de la OEA, Luis Almagro, condenó el “uso indebido» de una convocatoria
de referendo hecha por la Asamblea Nacional venezolana electa en 2020 sobre el conflicto con
Guyana por el territorio Esequibo;” afirmó que el uso de esta figura, “es ilegal según el Acuerdo
de Ginebra de 1966,” y que “usos indebidos similares de este instrumento han servido de pretexto
en el pasado reciente para tratar de justificar las peores acciones entre Estados, incluido el crimen
de agresión.”. en la reseña “Almagro condena uso del referendo en Venezuela por conflicto del
Esequibo”, en Tal Cual, 23 de septiembre de 2023. Disponible en:
https://talcualdigital.com/almagro-condena-uso-del-referendo-en-venezuela-por-conflicto-del-
esequibo/
19
VI. EL REFERENDO CONSULTIVO ES INCONVENIENTE PARA
LOS INTERESES DEL PAÍS
Por último, el referéndum consultivo propuesto también es
inconveniente para los intereses internacionales de Venezuela, pues con la
formulación de las preguntas, particularmente la Pregunta Quinta, ahora
se acusa a Venezuela de disponerse a invadir un territorio en reclamación.
Dicha Pregunta Quinta en efecto indica lo siguiente:
“QUINTA: ¿Está usted de acuerdo con la creación del estado
Guayana Esequiba y se desarrolle un plan acelerado para la atención
integral a la población actual y futura de ese territorio que incluya entre
otros el otorgamiento de la ciudadanía y cédula de identidad venezolana,
conforme al Acuerdo de Ginebra y el Derecho Internacional,
incorporando en consecuencia dicho estado en el mapa del territorio
venezolano?”
¿Qué es esto? ¿Es esto responsable? ¿Puede un país libremente
“dibujar” los mapas de su territorio incluyendo territorios de otros Estados
o territorios en reclamación con otros Estados?
O como se lo pregunta Héctor Faúndez Ledesma:
“¿Se está sugiriendo que esta controversia se puede resolver con
una simple reforma constitucional? Esa sugerencia, ¿puede ser tomada
en serio? ¿Alguien cree que podría servir de precedente para resolver
otros problemas territoriales de Venezuela?”[,,,] ¿cuál sería el efecto
de crear un nuevo estado, con un territorio que está en poder de otra
nación? ¿A quién queremos engañar con esa fantasía? Lo sensato es
luchar para que, judicialmente, se determine que ese territorio es de
Venezuela, y no inventar artificios inútiles.”32
Desde hace sesenta años, y precisamente conforme al Acuerdo de
Ginebra de 1966 que reconoció que a pesar del Laudo Arbitral de 1899
entre Venezuela y el Reino Unido por su Colonia de Guiana, existía una
controversia sobre el territorio de Guayana Esequiba, Venezuela siempre
ha marcado en el mapa del país con dicho territorio como una “Zona en
Reclamación,” y nada la autoriza en el mundo del derecho internacional a
cambiar unilateralmente esa condición del territorio e incorporarlo en la
organización territorial del Estado como Estado Federal, con la
denominación de “Estado Guayana Esequiba.”
Esto, en el mundo internacional, puede entenderse como una amenaza
de anexión territorial anunciada por un país, como Venezuela que nunca
32
Véase en Héctor Faúndez Ledezma, en “El Esequibo, el Caricom y cinco preguntas irrelevantes,” en
Cambio 16, 28 octubre de 2023, disponible en: https://www.cambio16.com/el-esequibo-el-caricom-y-cinco-
preguntas-irrelevantes/
20
ha sido una nación guerrerista, nunca hemos declarado ni tenido la guerra
contra ningún país. Libramos todas las batallas históricas para liberar
territorios en las guerras de independencia, pero nunca nos hemos anexado
territorio, y menos, en reclamación.
Ello explica que Guiana ha acudido ante la Corte Internacional de
Justicia para solicitar medidas provisionales contra el proyectado
referendo consultivo, buscando:
“protección de sus derechos sobre el territorio que le fue
otorgado por el Laudo Arbitral de 1899, en espera de que la Corte
determine la validez del Laudo o, alternativamente, la Corte
resuelva la frontera terrestre entre Guyana y Venezuela. Los
derechos de Guyana sobre el territorio en disputa se ven
directamente amenazados por el referéndum planeado por
Venezuela y el cumplimiento anticipado de "la voluntad de su
pueblo" con respecto a su inevitable respuesta a la Quinta Pregunta,
que pide la incorporación de la "Guayana Esequiba" (Región
Esequibo de Guyana) a Venezuela. Los derechos de Guyana sobre
el territorio que le fue adjudicado por el Laudo Arbitral de 1899 son
claramente plausibles en la etapa procesal actual: cualquier otra
conclusión prejuzgaría el resultado de este caso sobre el fondo”
(para 9)33.
Por tanto, como lo expresamos al inicio, tenemos propuesta de
referendo consultivo errada, inconstitucional, inútil, inconveniente,
inoportuna, irresponsable, y contraria a los intereses del país tanto a nivel
nacional como internacional.
Es importante que esto lo entienda el venezolano, pues por ello es que
se le está invitando – forzando – a votar por parte del Gobierno.
En Venezuela, el voto es constitucional y conceptualmente libre; no es
obligatorio. El último caso de voto obligatorio en una consulta popular o
referendo que ocurrió en el país fue el 7 de diciembre de 1957, en el
famoso “plebiscito” que convocó el entonces Presidente Marcos Pérez
Jiménez para que el pueblo se pronunciara sobre si quería o no que siguiera
en ejercicio del poder. Fue la primera vez en mi vida que voté (acababa
de cumplir 18 años), y voté, por supuesto, por el “no”. Las cifras fueron
manipuladas por el Consejo Supremo Electoral, se anunció el triunfo del
“sí” y sin que hubiese pasado un mes siquiera, el 23 de enero de 1958,
como resultado precisamente del plebiscito, ya Pérez Jimenez huía del
país, iniciándose la revolución democrática.
33
La solicitud de Guyana de 27 de octubre de 2023 ante la Corte Internacional de Justicia está
disponible en: https://www.icj-cij.org/sites/default/files/case-related/171/171-20231030-wri-01-
00-en.pdf
21
Como entonces ocurrió, ahora también vendrán amenazas para
coaccionar el voto ciudadano, para convertirlo - de hecho - en obligatorio,
para forzar a los ciudadanos a torcer su voluntad. Habrá hasta algún
ignorante que amenazará con quitarle la nacionalidad a los venezolanos
que no voten o que se opongan a la realización del referendo.34
El temor desde los sectores oficialistas a que la ciudadanía reaccione,
es decir, a que participe efectivamente en política y manifieste su rechazo
mayoritario al gobierno como lo indican todas las encuestas, es sin duda
cierto, y radica en el hecho de que la participación o no en este referendo
podría resultar en otra especie de “plebiscito” sobre la permanencia de un
gobernante en el poder como ocurrió en 1957.
En todo caso, no hay que caer en la trampa del patrioterismo que
amenazará a quienes se opongan al referéndum incluso de traición a la
patria, cuando quienes escudan su inacción gubernamental en el referendo
son los que han incurrido en esa conducta promoviendo algo que es
contrario a los intereses del país,35 que viola lo que está en la Constitución;
y que, en definitiva, como lo observó Kenneth Ramírez, “no contribuye
en forma efectiva y sensata a nuestra reclamación del Esequibo.”36
O como lo observó Milos Alcaray:
“Con la propuesta inoportuna de esta consulta, unida a los
anteriores errores en la conducción de este proceso con Guyana, pone
en peligro la justa reivindicación venezolana sobre el Esequibo, ya que
34
El 11 de noviembre de 2023, al momento de escribir este texto, el Sr. Luis Ratti, quien se anunciaba
como diputado en su cuenta X (twitter) escribía: “Hoy anunciamos ante todos los medios de
comunicación que para el día de mañana estaremos solicitando al poder legislativo que
REVOQUEN la nacionalidad a quienes llamen a la abstención y estén contra del Referéndum
Consultivo.” Texto disponible en: https://twitter.com/rattipresident/status/1722351805147853108.
Sería de interés que alguno de sus colegas en la Asamblea Nacional le informe que el artículo 35
de la Constitución es claro y terminante en el sentido de que “Los venezolanos y venezolanas por
nacimiento no podrán ser privados o privadas de su nacionalidad. La nacionalidad venezolana por
naturalización solo podrá ser revocada mediante sentencia judicial, de acuerdo con la ley”, en
particular el artículo 48 de la Ley de nacionalidad y Ciudadanía de 2004, en el cual no se menciona
oponerse a la realización de referendos consultivos.
35
Como lo observó Sadio Garavini di Turno, “el referéndum consultivo no solo es inútil sino dañino
para los intereses del Venezuela,” en La Gran Aldea, 7 de noviembre de 1023. Disponible en:
https://lagranaldea.com/2023/11/07/sadio-garavini-el-referendum-consultivo-no-solo-es-inutil-
sino-danino-para-los-intereses-de-venezuela/Ldpaís
36
Véase Kenneth Ramírez, “Referéndum sobre el Esequibo: un llamado a la prudencia,” Consejo
Venezolano de relaciones Internacionales, 4 de noviembre de 2023 Disponible en:
https://covri.com.ve/index.php/2023/11/05/referendum-sobre-el-esequibo-un-llamado-a-la-
prudencia-por-kenneth-ramirez/.i
22
de seguir por esa vía, vamos a terminar perdiendo nuestro territorio
histórico y todos los esfuerzos por recuperarlo.”37
37
Véase Milos Alcaray, Preocupaciones sobre el referendo del Esequibo”, Los papeles del Crem, 27
de octubre de 2023
23