La Profecía de Ajenjo (Thomas Horn, 2019)

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 49

1

i
ii
iii
iv
Original: The Wormwood Prophecy
Dr. Thomas Horn (USA: Charisma House, 2019)

Traducción, edición y publicación de The Ucli Press


Edición 2022.

La presente obra ha sido traducida a partir de un ejemplar de la


edición en pasta blanda con las licencias bíblicas de Lucas 11:33 y 1
Corintios 3:22-23, y sin otro afán que el de difundir lo mejor de la
inteligencia cristiana mundial en idioma español entre las juventudes
estudiantiles y profesionales de América Latina, para fomentar el
desarrollo de una fe cristiana inteligente, dada la urgencia de los
actuales tiempos y eventos finiseculares.

The Ucli Press invita a sus alumnos, amigos y simpatizantes a que


adquieran y lean las obras de Thomas Horn e inviten a otros a hacer lo
mismo.

Esta edición libre en español siempre se distribuirá gratuitamente a


quien solicite un ejemplar en formato digital PDF a:

[email protected]
[email protected]

iv
CONTENIDO

Nota del autor…………………………………...…………………...…..….vii


1 Bienvenidos a la tierra de las maravillas……………………..…….1
2 Con los ojos en los cielos…………………………………..…..………..21
3 Nuestro destino más allá de la Tierra……………………...………53
4 Ping-pong planetario…………………………………………………......91
5 Su nombre es Ajenjo………………………………..………………......115
6 Como lo fue en los días de los faraones
(la etimología de Ajenjo)………………………………...……………149
7 Narrativa del cataclismo ficticio……………………….……...…...213
Notas………………………………………………….……………………….235

v
vi
NOTA DEL AUTOR

Muchas personas en los medios de comunicación y la cultura


popular usan los términos asteroide, meteoroide, meteoro y
meteorito de manera indistinta, pero la NASA ha hecho una
distinción entre ellos, definiéndolos ligeramente diferente a
cada uno de ellos. Un asteroide es una formación de
sustancias rocosas, a menudo hechas de silicato, arcilla y
diversos metales, generalmente níquel-hierro.1 Los
meteoroides se crean cuando los asteroides chocan entre sí,
creando fragmentos más pequeños de cuerpos que antes
eran más grandes.2 Cuando estos restos desplazados
penetran la atmósfera de la Tierra y se vaporizan, crean lo
que muchos consideran estrellas fugaces, más
científicamente conocidas como meteoros.3 Cuando uno de
estos cuerpos no se disipa completamente en nuestra
atmósfera y entra en contacto con la superficie de la tierra,
se le llama meteorito.4
Los cometas, por otro lado, están compuestos de hielo y
polvo y, a medida que viajan alrededor del Sol, el calor
resultante vaporiza el hielo y el polvo, creando una coma o
cola.5

vii
Dado que, además de los trabajos técnicos y científicos,
estos términos se usan indistintamente (y para evitar el uso
redundante del mismo término), se supone que el lector
también puede aplicar estos términos de manera similar
tomando en cuenta el contexto en el que se aplican en este
libro. Por lo tanto, dentro de este trabajo, los términos
asteroide, meteoro y meteorito se referirán a una masa de
roca en órbita, sea que esté en el espacio o que ya haya
chocado con la Tierra en algún momento previo.

Si bien este libro no es de ficción, comienzo con la


narrativa siguiente, y a continuación termino este trabajo
regresando a la línea de la historia imaginaria. La razón por
la que he elegido esta metodología inusual es porque deseo
ilustrar lo más vívidamente posible lo que creo que está en
juego tras bambalinas, lo cual se hará obvio a medida que el
lector avance por la porción factual del manuscrito, a partir
del inicio del capítulo 2.
—THOMAS HORN

viii
Capítulo 1

BIENVENIDOS A LA TIERRA DE LAS


MARAVILLAS

PETE MCCUTCHEON se sintió decididamente mal vestido. A las


3:33 de esa tarde, dos hombres uniformados llamaron a su
modesta casa cerca de Marionville, Indiana, y lo empujaron a un
SUV negro, luego a un helicóptero y finalmente a un elegante
avión de la fuerza aérea, que transportó a su aturdido pasajero a
un aeropuerto ultrasecreto en lo alto de las montañas de
Colorado.
Después de pasar por una serie de puntos de control y
detectores de metales, McCutcheon siguió a sus silenciosos
captores hasta un ascensor y descendió siete pisos por debajo del
nivel del suelo. Un tercer hombre se reunió con ellos una vez que
dejaron el interior de acero inoxidable del ascensor, pero éste sí
sonrió.

1
“Buenas noches, mayor McCutcheon. Bienvenido a la Montaña
Cheyenne”.
“Ya estoy retirado, Capitán”, respondió Pete con una ceja
levantada. “Problemas cardiacos. Mi problema está arreglado,
pero ya no soy el hombre bien capaz que solía ser. Sólo escribo,
juego con mis nietos y doy alguna que otra charla de vez en
cuando”.
“Sí señor, estamos al tanto de eso”, le dijo el oficial mientras
pasaban por una serie de pasillos. “Quiero disculparme por
robárnoslo de su familia sin previo aviso. Uno de los miembros de
nuestro equipo se lo explicó todo a su esposa y suegros poco
después de que usted se fuera. Nos reuniremos aquí, señor”,
terminó de decirle mientras se acercaban a una puerta de metal
anodina flanqueada por un par de hombres corpulentos vestidos
con el uniforme azul de la fuerza aérea.
El más alto de los dos susurró, aparentemente a nadie, y luego
asintió con la cabeza. “Me dicen que ya están listos para usted,
capitán Andrews”.
“Por aquí”, dijo el educado Andrews a Pete. “Está a punto de
atravesar el espejo, señor. Mejor abróchese el cinturón”.

Diecisiete horas después, en la isla Jersey del canal de La Mancha,


Ben Brandeis, de quince años, miraba la pantalla de su
computadora. Sostenía medio sándwich de Marmite en una mano y
un vaso de plástico con una bebida gaseosa en la otra. Realmente
debería haber estado durmiendo, pero la alarma de su Programa
para la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI, por sus siglas
en inglés) lo había despertado media hora antes. Ben se colocó un
par de anteojos con montura metálica en la nariz y parpadeó para
aclarar su visión miope. El verano anterior, su padre había accedido
a trasladar la habitación del adolescente al ático, permitiendo a Ben
privacidad y un poco de silencio, por lo que estaba seguro de que
sus movimientos no habían perturbado el descanso merecido de su
trabajador padre. Bill Brandeis trabajaba como camionero para una

2
de las grandes compañías navieras francesas y pronto se tendría que
levantar, para hacer su primera carga del día.
Pero, ¿por qué había sonado la alarma SETI? Ben pasó una mano
pecosa por la espesa mata de su cabello castaño rojizo descuidado, y
sus ojos color avellana escudriñaron fila tras fila de gráficos y
números que tenían sentido para muy pocos de sus amigos. Con un
coeficiente intelectual de más de 175, Ben no tuvo problemas con el
trabajo en curso, pero incluso sus instructores súper calificados
encontraron la intensidad del adolescente difícil de comprender.
Al decidir que los números no podían ser correctos, Ben cambió
la entrada del monitor a una segunda computadora más potente y
abrió un programa de astronomía que había escrito la primavera
anterior como parte de una solicitud para entrar a Oxford. Dos
semanas más tarde había recibido una visita personal del Dr. Alan
Holmes, el presidente de astrofísica del Merton College, parte de
Oxford, y director del programa de cartografía celeste C-BASS.
Holmes le había ofrecido al muchacho un lugar en su laboratorio
personal, así como matrícula y pensión gratuita. La palabra genio
salpicó constantemente la conversación del delgado profesor, y Bill
Brandeis sonrió de orgullo cuando estrechó la mano plana del
visitante, explicando cómo su difunta esposa, la madre de Ben, se
habría sentido tan complacida de saber lo listo que había salido su
único hijo.
Ben había amado mucho a su madre y como tributo, después de su
muerte debido al cáncer, había nombrado a su propio programa de
seguimiento de objetos cercanos a la Tierra en su honor, NEO-Stella.
Pensando en ella, Benjamin sonrió levemente y cliqueó con un mouse
inalámbrico para abrir el complicado programa. Apareció una serie de
iconos de colores en el monitor de pantalla plana, dando enlaces a seis
conjuntos de telescopios para su visualización. Antes de reunirse con
Holmes, Ben había pirateado estas instalaciones subrepticiamente,
pero ahora podía usar un código de seguridad personal, que le ofrecía
al chico genio acceso a cualquiera de las estaciones dentro de la alianza
C-BASS. El intrincado código en el programa Stella entró a la matriz
masiva del Observatorio de Radio de Owens Valley en California, pero
al no encontrar nada inusual, Ben cambió al Observatorio de
Radioastronomía de Hartebeesthoek en Sudáfrica, ahora enfocado en

3
un púlsar recién descubierto dentro del Cúmulo del Trapecio de la
Nebulosa de Orión. Cuando la alarma del programa SETI en su
máquina más vieja se había encendido a las dos en punto de esa
mañana, Ben notó que estaba fijo en la gran constelación del cazador, y
el brillante adolescente tuvo el presentimiento de que cualquier cosa
que disparara la alerta estaba dentro del Trapecio.
A las 4:10 de esa mañana, a mediados de enero, el joven
Benjamin Brandeis descubriría por qué, y fue un impacto que
pronto afectaría a todos los gobiernos del mundo.

"Siéntese, mayor”, dijo una mujer de mediana edad con un traje


gris cuando McCutcheon entró en la habitación. El aire olía a
desinfectante de manos mezclado con un fuerte olor a flores, y
Pete notó ventiladores colocados cerca del techo de cada pared.
Un zumbido leve y grave llamó su atención, al igual que cuatro
cámaras de televisión de circuito cerrado, montadas en cada
esquina. La mujer se rió. —No se preocupe, mayor
McCutcheon, nada de esto se está grabando, al menos no en las
cámaras. Mi secretario, el teniente Evans, tiene memoria
eidética y está al tanto de todo lo que decimos. En un momento
comprenderá por qué no se registrará nada de esto. Aún no.”
Pete se sentó en una de las sillas de metal y vinilo frente a
Evans, un hombre de labios finos, rostro juvenil y orejas
salientes. Pete tenía el presentimiento de que la memoria
eidética tenía más que ver con un chip cerebral que cualquier
capacidad nativa de recordar con claridad. “¿Y usted es?” le
preguntó a la mujer.
Ella sonrió de nuevo, la curva lenta de su labio superior reveló
un pequeño hoyuelo en su mejilla izquierda. A pesar de las
cortesías, la mujer tenía una mirada fría, fría y lógica. “Dr. Gale

4
Stone”, respondió ella. “Trabajo con un equipo de científicos
cuyos nombres ya conoce. Mayor, es ...
“Ya no uso el rango militar, doctora Stone. Llámeme Pete, o
doctor McCutcheon, si lo prefiere. La mayoría de mis amigos
simplemente me llaman Mac.”
“Perdóneme”, dijo sin pestañear. “Entonces, Mac. Estoy
familiarizada con su trabajo en Caltech, pero más concretamente,
el libro reciente que escribió sobre profecía bíblica”. Chasqueó los
dedos y Evans le entregó un grueso texto de tapa dura en una
colorida sobrecubierta. Docenas de tiras de papel marcadas con
páginas. “Esto no es una lectura fácil”, dijo mientras abría el libro
en uno de los pasajes marcados. “En estos tiempos me pregunto
cómo logró que alguien se lo publicara. Dígame, Mac, ¿de verdad
cree que una estrella llamada Ajenjo algún día golpeará la tierra?
“¿Es por eso que estoy aquí?”, preguntó con irritación. “Mire,
doctora Stone, si está buscando burlarse de mis creencias,
entonces ha atrapado al hombre equivocado. No hago reparos en
mi postura sobre la escatología, ni como estudioso de la Biblia ni
como científico”.
“Sí, pero es esa base científica lo que más me interesa”,
interrumpió. “Mac, no le he traído al otro lado del país para
menospreciar sus creencias. Más bien, las respeto y aprecio. Está
especialmente calificado para brindar asesoramiento sobre un
asunto que amenaza no solo a los Estados Unidos sino al mundo
entero. ¿Interesado?”
El mayor retirado se tomó un momento para responder. El
guardia cerca de la puerta continuó murmurando en su sistema
de comunicación interna (que Mac supo más tarde que era una
radio bidireccional montada en uno de los molares traseros del
joven), y asintió de vez en cuando como si estuviera recibiendo
órdenes. El guardia nunca sonrió. Mac tuvo la inquietante
sensación arácnida de que no solo había atravesado el cristal, sino
que había caído por un agujero profundo. Si era así, entonces esta
mujer sería la Reina Blanca o la Reina Roja.
En silencio oró para no perder la calma.

5
“Doctora Stone, si ha leído mi expediente”, le dijo, “y es obvio
que lo ha hecho, entonces la respuesta es sí, siempre que esté de
acuerdo en contarme todo sobre esta supuesta amenaza. No me
gusta trabajar en la oscuridad. Si voy a ofrecer un consejo, necesito
una revelación completa. Si no puede hacer esa promesa, no perderé
más su tiempo. Como sabe, mis suegros están de visita y teníamos
planeadas varias actividades posteriores a la Navidad, incluida una
presentación en Indianápolis”.
“Muy bien”, dijo ella, empujando el libro hacia él, abierto en la
página 231. “Ajenjo. Eso es lo que viene. Y probablemente golpeará
nuestro planeta en menos de seiscientos días. Si quiere que su nueva
nieta cumpla siete años, lo necesitamos, Mac. Yo misma tengo dos
hijos, de diez y trece. Me gustaría verlos casados, verlos ir a la
universidad, tal vez tener sus propios hijos, pero si no podemos
encontrar una manera de evitar que esto se estrelle contra nosotros,
entonces la humanidad puede ir diciéndole adiós a su trasero
colectivo”.
El libro estaba abierto en el capítulo que había escrito llamado
“La espada de Orión”, donde discutía la posibilidad de la aparición
repentina de un near-Earth object, u Objeto Cercano a la Tierra (NEO,
por sus siglas en inglés) desde el interior de la Nebulosa de Orión.
“¿Y por qué yo?”, preguntó después de un suspiro. “Hay
muchos otros eruditos de la profecía con mejor reputación que la
mía. Me metí en esto hace apenas cinco años, después de retirarme
de la fuerza aérea”.
“Pero nadie con su conjunto único de habilidades, Mac”,
argumentó ella. “Tiene doctorados en astrofísica y matemáticas,
pero también terminó una segunda licenciatura en genética y casi
completó una tercera en teoría computacional. Usted es lo que
llamamos un erudito: una mente brillante con la capacidad de
conectar disciplinas dispares para resolver un problema. Es por eso
que las fuerzas armadas trabajaron tan duro para retenerlo, y es por
eso que lo necesitamos ahora. El propio presidente Hernández lo
pidió a usted, Mac. Él ya leyó su libro y cree en lo que usted dice.”
Peter McCutcheon pensó en su esposa, Amelia, y sus dos hijos,
ambos casados y con hijos pequeños: sus preciosos nietos.

6
Consideró la conclusión de su manuscrito más reciente, aún inédito,
donde escribió que las fluctuaciones en la Nebulosa de Orión
podrían indicar que el Ajenjo del Libro del Apocalipsis podría
surgir sin previo aviso desde el lugar de nacimiento de las estrellas.
Una sensación como de garras se deslizó por su estómago e irradió a
lo largo de su columna. Miró las cámaras cegadas. Un repentino
deseo de escapar se apoderó de su espíritu, pero una pequeña voz
susurró que tenía que hacer esto. Había sido diseñado para hacer
esto.
“Fuiste apartado desde antes de nacer”, susurró, “y llamado por
Mi gracia”.
Se tragó el miedo y la ansiedad, preguntándose si ella podía ver
que le temblaba la mano.
“Dígame qué quiere que haga”.

En Jersey, Benjamin Brandeis tomó notas furiosamente en un


cuaderno de espiral, codificado para que nadie más pudiera
discernir su significado. Sus manos bailaron a lo largo de las
páginas, formando una serie de letras y números sin sentido
basados en un cifrado profundamente encriptado que había
diseñado cuando solo tenía once años. Línea sobre línea consumía el
papel, interrumpido de vez en cuando por complicadas ecuaciones.
Cuando terminó los cálculos, Ben se quedó sin aliento por lo que
vio. “Eso no puede ser correcto”, dijo en voz alta, su corazón latía
con fuerza. “Ha cambiado de trayectoria. ¿Cómo pudo haber hecho
eso?”
Después de guardar el cuaderno en su mochila, Ben le envió un
mensaje de texto rápido a su padre. Si tomaba el ferry a Poole,
entonces Ben podría tomar un tren a Oxford y estar allí a las dos de
la tarde. Estaba seguro de que el Dr. Holmes estaría dispuesto a
recibirlo, pero si no, abordaría otro tren para Londres. No importa
qué, tenía que presentar estos hallazgos a Holmes en persona. Si

7
tenía razón, y Ben estaba seguro de que tenía razón, entonces el
mundo tenía menos de tres años antes de que algo masivo lo
golpeara. Un asesino de planetas. La vida tal como la conocían él y
sus amigos de la escuela estaba a punto de cambiar.

UNA SEMANA MÁS TARDE...


El mayor retirado Peter McCutcheon extendió una mano al joven de
cabello castaño rojizo. “Bienvenido al País de las Maravillas, Ben”, le
dijo a Brandeis.
El adolescente parpadeó. “¿Señor?”
Pete se rió. “Así es como llamamos a nuestro equipo. Los
nombres en clave militar rara vez usan algo que pueda delatarnos.
Estamos ansiosos por escuchar su informe. ¿Está el Dr. Holmes con
usted?”
—Abajo, señor. Al parecer, tuvo un contratiempo con su
cinturón. La hebilla de metal disparó la alarma. ¿Realmente va a
estar aquí el presidente?
“Más tarde, sí”, respondió Mac mientras conducía al chico genio
a la sala de reuniones de la Casa Blanca. “Estamos insonorizados
aquí. El cuerpo de prensa ha dicho que el presidente te felicita por el
descubrimiento de un nuevo cometa. Por supuesto, tú y yo sabemos
lo que realmente encontraste.”
—No estoy seguro de que nadie comprenda lo peligroso que es
esto, doctor McCutcheon. Ha cambiado de trayectoria dos veces
hasta hora.
“En realidad, tres veces”, respondió Mac. “Notamos una
aberración en su trayectoria esta mañana a las 5:13 (GMT). Está
pasando por un campo de asteroides, creemos. Lo golpean como
obstrucciones en un juego de pinball y rebota. Nuestra gente siente
que hay más del 39 por ciento de posibilidades de que ataque en
algún lugar del hemisferio norte.”
La mesa rectangular que dominaba la sala de conferencias tenía
una gran pantalla circular montada en la superficie. Veinte sillas
rodeaban la mesa, seis de ellas llenas de hombres y mujeres con trajes

8
oscuros y rostros aún más oscuros. En cuatro de las sillas había
hombres uniformados, todos con sienes grises, o con cabezas
completamente plateadas. Un tipo de aspecto juvenil vestido con un
traje más ligero parecía estar tomando notas en una bitácora de cuero,
y una mujer con cabello bicolor recogido en un chongo en espiral se
acercó a saludar a Pete y Ben.
“Hola, Ben”, dijo con una sonrisa agradable. “Soy la doctora Gale
Stone. Estamos encantados de que hayas aceptado unirte a nuestro
equipo.”
El joven Brandeis tragó saliva y el gesto hizo que la nuez de Adán
se balanceara a lo largo de una garganta larga. Extendió su mano
derecha en respuesta y sacudió la de ella. “Gracias”, se las arregló para
responder. “Nunca imaginé que estaría sentado dentro de la Casa
Blanca. Visité el Palacio de Buckingham una vez, en una excursión
escolar.”
“Leí acerca de eso”, respondió ella con sorprendente afabilidad.
“Vamos a sentarnos todos, ¿de acuerdo? Hay mucho que cubrir y muy
poco tiempo. Serviremos el almuerzo aquí, así que ponte cómodo, Ben.
Se sentó junto al hombre de la bitácora de cuero, y con
McCutcheon al otro lado. El hombre mayor le dio ánimos. “Sé que te
sientes fuera de tu medio, hijo", susurró mientras un sargento de la
fuerza aérea comenzaba a cerrar la puerta. “Todos somos amigos
aquí.”
Afuera, un hombre intercambió palabras con el guardia bien
afeitado, y un hombre cuarentón de impactante cabello rojo entró,
dominando instantáneamente la habitación.
“Siento llegar tarde”, dijo Holmes, una sonrisa se ensanchó en su
rostro brillante. “Sigo olvidándome de este maldito cinturón mío. La
hebilla está hecha de una aleación de metal poco común que siempre
afecta a estos detectores. Ben, veo que ya conociste a Pete McCutcheon.
Encantado de verte de nuevo, Mac. Yo digo, ¿alguien ya pidió té?
El profesor de Oxford ocupó una silla a la derecha de la doctora
Stone, y durante los siguientes cinco minutos la mesa siguió
llenándose de hombres y mujeres de todas las disciplinas. Una vez que
el equipo estuvo completo, la doctora Stone asintió al guardián de la
puerta. Eso es todo, sargento Williams. Le avisaremos cuando estemos
listos para tomar un refrigerio.”

9
El oficial asintió y se fue, cerrando la puerta desde fuera.
La pantalla circular que sobresalía de la mesa parpadeó y
apareció una serie de imágenes con las palabras “Wonderland
Strategic Group” superpuestas sobre el gráfico estilizado de un
objeto rayado que cruzaba las letras entre “Wonderland” y
“Strategic” como estrellándose. Ben Brandeis se estremeció al ver el
inquietantemente alegre logo, sorprendido de que a un diseñador le
hubieran pagado para que dibujara un emblema que representaba el
fin del mundo.
Como si leyera su mente, la doctora Stone ofreció una
explicación. “Como verán, señoras y señores, ahora tenemos un look
oficial para el programa Wonderland. Aunque pueda parecer alegre
proporcionar una marca a nuestra iniciativa, les aseguro que la
intención es la de distraer. Si alguien alguna vez descubre alguna de
nuestras páginas dentro de los sitios web anidados o en un foro
poblado por nuestros provocadores pagados, no encontrará nada
más que una serie de diapositivas y documentos engañosos. El
mundo no debe sospechar de lo que vamos a discutir. Si lo hiciera,
el pánico se apoderaría de los corazones de más de siete mil
millones de personas, y ese es un escenario que nunca debemos
permitir.”
Hizo una pausa de un momento para abrir un paquete grueso de
material impreso que coincidía con las carteras colocadas ante cada
uno de los miembros. “Si pasan a la página 10, comenzaremos con
un breve resumen de nuestra misión. Algunos de ustedes aún no
conocen a nuestros enlaces externos. El mayor Peter David
McCutcheon se jubiló hace seis años, pero reactivamos su comisión
y lo nombramos nuestro asesor científico oficial. La destreza
académica de Mac es legendaria, pero también es un experto en los
aspectos proféticos de Ajenjo que pueden ayudarnos a desentrañar e
incluso prevenir lo que nos está sucediendo.”
Un hombre de mediana edad vestido con un traje azul, sentado
cerca del extremo de la mesa, frunció el ceño y juntó las manos “¡Un
montón de tonterías!”

10
La respuesta de la doctora Stone amortizó el comentario del
hombre. “Secretario Gilmore, estoy muy familiarizada con su
opinión respecto a mi dedición de incluir al Mayor McCutcheon,
pero el presidente ha anulado sus objeciones, como usted sabe muy
bien. Ahora bien, nuestro otro invitado nos ha causado una
impresión favorable a todos. Benjamin Algernon Brandeis es un
genio de alto nivel con un dominio inigualable de la astrofísica y
una comprensión de las matemáticas que rivaliza con la de Einstein.
Nunca en todos mis años con la División Montaña Cheyenne había
conocido a un individuo tan talentoso. Sospecho que el mayor
McCutcheon lo describiría como uno de los ministros de Dios,
elegido para un tiempo como este. Ben, bienvenido al País de las
Maravillas.”
Brandeis sintió que un escalofrío recorría su cuerpo cuando
todos los ojos lo miraban. Algunos parecían receptivos, incluso
amables, pero la mayoría tenían un dejo de envidias y dudas. Podía
decir que la gente pensaba que estaba fuera de lugar, que era un
joven advenedizo, un intruso, poco más que un niño intentando
jugar con hombres mayores.
“Gracias, doctora Stone”, respondió, rezando para que su voz no
se quebrara. “El doctor Holmes es quien ha logrado muchos de los
avances en esto.”
El académico de Oxford no estuvo de acuerdo. “Ben es un tipo
humilde”, le dijo al grupo. “Nunca se me habría ocurrido hacer estos
cálculos por mi cuenta. De hecho, es el programa informático de
Benjamin el que C-BASS utiliza para realizar un seguimiento de
Ajenjo.”
“¿Ajenjo?” preguntó el adolescente. “¿Es así como lo llamas?”
McCutcheon respondió: “Así es como Dios lo describió. Significa
amargura. ¿Puedo?”, le preguntó a la doctora Stone.
Ella asintió. “Sí, por supuesto.”
Mac tomó un control remoto y continuó mientras se ponía de pie
para dirigirse a la reunión. “La mayoría de ustedes me conocen de mi
anterior paso por la Fuerza. Y durante la última semana, muchos de
ustedes han trabajado duro a mi lado mientras intentamos averiguar
qué le está sucediendo al NEO que llamamos Ajenjo. Pero para los
pocos de ustedes que se unen a nosotros por primera vez, y hablo del

11
secretario Gilmore y el senador Malone, en particular, permítanme
darles un breve resumen. En junio de 2004, un programa de escaneo
de objetos cercanos a la Tierra llamado NEON mapeó la ubicación de
una masa en la Nebulosa de Orión, designada como 2004 JU04. Este
objeto se comportó con normalidad hasta finales de 2015, cuando de
repente se iluminó. La espectrometría realizada en el JPL indicó que
JU04 podría ser una gigante roja, a pesar de su apariencia blanca, y en
respuesta la Agencia Espacial Europea (ESA) lanzó una sonda para
discernir su composición. Los primeros resultados llegaron hace unos
seis años y revelaron cifras que no tenían ningún sentido. En
respuesta, se formó un equipo conjunto de la ESA y la NASA para
rastrearlo, y se lanzó una segunda sonda para obtener nuevas
mediciones. Aproximadamente en ese momento, se publicó una
historia de portada en todos los medios habituales de que un conocido
magnate de la tecnología planeaba enviar pasajeros a Marte y utilizar
lanzamientos de la ESA y la NASA para allanar el camino para ese
esfuerzo.”
Casi todos en la sala sonrieron o rieron suavemente, porque todos
los conocedores de Washington conocían al “magnate” al que se
refería Mac. De hecho, ese mismo hombre habría estado en la mesa ese
día si no estuviera en China trabajando en un proyecto auxiliar: las
fases finales de una ciudad inteligente, destinada a proteger a la élite
de la ira de Ajenjo.
McCutcheon continuó. “Como dije, se pensó que el objeto estaba
destruido. Todo eso cambió hace tres años, cuando volvió a brillar. Me
saltaré la explicación de cómo finalmente desbloqueamos su
identidad, pero ahora creemos que Ajenjo, es decir, 2004 JU04, es un
asesino de planetas. Un asteroide del tamaño de África que va
acompañado de seis masas satélites. Estas lo orbitan como lunas en
miniatura, y este pequeño sistema choca con otros cuerpos
astronómicos en el camino, lo que provoca cambios en la trayectoria
general. Como lo verificará Ben Brandeis, la velocidad a la que viaja
este sistema lo pone actualmente en un sobrevuelo cercano con la
Tierra en menos de tres años. A partir de esta mañana, la probabilidad
de que el sistema Ajenjo nos golpee ha aumentado hasta el 69 por
ciento, dependiendo de a qué científico le pregunte, pero la conclusión
es la siguiente: tenemos que prepararnos para ello porque no hay
forma de que podamos mover este planeta para salir de su camino.”
12
De vuelta en Marionville, Amelia McCutcheon se hallaba en el
dispensario de su iglesia, haciendo un inventario de los alimentos y
el agua que el comité había recolectado durante una reciente
campaña comunitaria. Su mejor amiga y vecina, Katy Kuppler,
estaba de pie en una escalera de aluminio, contando cajas de bebida
de cereza. “Son seis docenas en total”, dijo mientras bajaba los
escalones de metal. La ama de casa de cuarenta y nueve años se
sacudió el polvo de las manos. “Tendremos que darle una buena
limpieza antes de que abramos al público la próxima semana”.
Amelia entró en el recuento de cajas de bebidas y cerró el grueso
libro de contabilidad. “Ingresaré esto en mi programa de
computadora más tarde, pero parece que el viaje fue un gran éxito.
Tú sabes, Mac nunca ha enfatizado convertirse en uno de esos
preparacionistas del fin del mundo, pero me llamó el viernes pasado
y me sugirió que empezáramos a almacenar productos no
perecederos en nuestro sótano. Él creyó que nuestra idea de una
despensa de alimentos era realmente buena. ¿Va a pasar Lisa
mañana para ayudar?”
“Lo dudo”, respondió Kuppler. “Sabes cómo está, Amelia. Ella
piensa que la gente necesita animarse por su cuenta. Lisa es
generalmente de buen corazón, pero se ha vuelto un poco extraña
con cualquiera que haya tenido mala suerte últimamente. No puedo
ni imaginarme por lo que ha pasado”.
“’El amor de muchos se enfriará’”, citó Amelia.
“¿Eh?”, preguntó su amiga mientras buscaba en un bolso de lona
un desinfectante para manos.
“Es un versículo en Mateo 24”, respondió Amelia. “Mac lo cita
todo el tiempo”.
Su amiga se rió y tiró del cierre de cuero del bolso. “Su esposo
cita muchas cosas, pero no puedo entender la mayoría de ellas.
Están muy por encima de mi capacidad de entender. El pastor
13
Gibbons dice que la mayoría de los libros de Pete se leen como si
fueran tesis doctorales”.
Amelia suspiró. Había escuchado esto de muchos de sus
amigos, pero las advertencias de Peter McCutcheon no podían ser
más claras, o eso pensaba. Amelia solo tenía la preparatoria, pero
ni siquiera eso le impedía entender las obras de Peter. Él utilizaba
frases específicas, a menudo científicas, en sus escritos, pero
siempre las dejó claras en los resúmenes de cada capítulo. Punto
por punto. Incluso había escrito guías para maestros para su uso
en las iglesias, pero la mayoría de los pastores ignoraron sus
advertencias de que los sellos de Apocalipsis se estaban abriendo
y que algo terrible estaba por suceder en el planeta.
Pensó en su conversación telefónica más reciente. Desde que
fue reactivado en la fuerza aérea, Mac había viajado de ida y
vuelta entre Colorado y Washington, deteniéndose en Indiana
una vez para empacar, pero hablaban todas las noches por
teléfono o chat de video. Al igual que con su anterior trabajo con
la Fuerza, Peter rara vez hablaba de su misión, pero a veces
ofrecía pistas que parecían teñidas de gran preocupación. Amelia
tuvo la intuición de que su esposo estaba tratando de decirle algo
importante y le había pedido a Dios que la ayudara con el
discernimiento, pero se había quedado vacía.
Hasta anoche.
Pete llamó a su hora habitual, las diez y cuarto, y compartieron
historias sobre las actividades del día. Amelia mencionó informes
de noticias sobre una sonda espacial y rumores sobre la represión
del gobierno en China y Sudáfrica. Como siempre, Pete la
tranquilizó asegurándole que Dios todavía seguía en el control.
Luego dijo algo que a Amelia le pareció extraño. Le preguntó a
Amelia si consideraría mudarse a Colorado Springs. Incluso
cuando estuvo asignado allí, Pete ni una sola vez sugirió que su
esposa dejara la casa de su infancia ni a sus padres. Sus hijos
habían crecido en Marionville y ahora sus nietos harían lo mismo.
Los padres de Amelia estaban envejeciendo y el reciente

14
diagnóstico de Alzheimer de su madre hizo que fuera difícil
pensar en mudarse. ¿Qué intentaba decirle Mac?
“Ciertamente estás muy lejos”, señaló Katy Kuppler, el
comentario hizo que los pensamientos de Amelia volvieran al
presente. “Espero no haberte molestado por lo que dije sobre los
libros de Pete. ¡Ya me conoces, siempre abro mi bocota y me mastico
enterita a mí misma!”
“No, no es eso”, respondió Amelia. “Supongo que estoy cansada.
No dormí tan bien anoche. Podría pasar por la residencia de
ancianos de camino al mercado y echar un vistazo a la Unidad de
Memoria. He servido como voluntaria allí con bastante frecuencia,
pero quiero averiguar los costos, ¿sabes? Para mamá.”
“Sí”, dijo Kuppler con un suspiro. “Mira, Amelia, lo siento
mucho. Debería guardar mis opiniones para mí. Ojalá mi cerebro
pudiera procesar las cosas que escribe Mac, pero aquí arriba es un
páramo”, agregó, señalando su cabeza. “¡Pregúntale a Ed! Me ha
estado diciendo desde que nos casamos que soy tan despistada que
no podría saber dónde encontrarme con él sin un HPS”.
“¿HPS? Querrás decir GPS, Global Position System, Sistema de
Posicionamiento Global.
Kuppler rió mientras caminaban hacia la puerta. “Husband
Position System, Sistema de Posicionamiento del Marido”, explicó.
“Vamos. Iré contigo al asilo de ancianos. Y luego pasaremos a los
helados. Yo invito.”

Pasaron varios meses y Wonderland Group se instaló en una rutina


de reuniones marcadas por paseos en helicóptero a una variedad de
lugares, la mayoría bajo tierra. Los miembros principales se
mantuvieron en contacto entre sí a través de una línea de
comunicación segura, pero incluso entonces sus conversaciones rara
vez usaban algo más que frases generales. Las palabras clave
proporcionadas a todos los miembros les permitieron transmitir
detalles rápidos sin comprometer su misión secreta. Ben Brandeis

15
les había enseñado sus propios cifrados, pero solo Mac y la Dra.
Stone los usaban. McCutcheon y él se habían acercado bastante en
ese período de seis meses, y el hombre mayor consideraba al genio
británico como un hijo adoptivo.
Fue a finales de noviembre cuando un recién llegado se unió a su
cónclave. Un tipo jocoso llamado Steve Campion, director de un
conglomerado de Silicon Valley, sembrado con fondos de In-Q-Tel.
Los tremendamente populares sitios de redes sociales de Campion
se habían beneficiado de un virus informático deshonesto que de
repente bloqueó todos los servidores de su mayor competidor unas
semanas antes de las elecciones de 2020. Ahora, como la opción
favorita para las interacciones en las redes sociales, ChampChat de
Campion ofrecía noticias, juegos y contenido transmitido a la mitad
de los usuarios de móviles del mundo. Como miembro de
Wonderland, los inversionistas de su gobierno le habían encargado
al empresario de treinta y tres años que usara la compañía de redes
sociales para moldear la opinión pública y controlar las filtraciones
sobre Ajenjo.
Algo en el multimillonario irritaba a McCutcheon, pero había
decidido creer en lo mejor de la gente. La Dra. Stone comenzó la
reunión ya estando todos y con su estilo seco y directo habitual.
“No necesito repetir mi advertencia de que nuestra agenda y
conversaciones siguen siendo de alto secreto”, comenzó diciendo la
asesora presidencial. “Sin embargo, hay un artículo de noticias
reciente que requiere nuestra atención inmediata. Me refiero, por
supuesto, al artículo malicioso de un tabloide británico poco
cooperativo sobre Ajenjo. Ahora, estoy perfectamente consciente de
que este nombre es bien conocido por los lectores bíblicos; por lo tanto,
no podemos concluir que necesariamente esté habiendo una filtración
definitiva en nuestro círculo íntimo, pero sería negligente si no hiciera
la pregunta. Digo esto solo porque el escritor supuso que nuestros
gobiernos están planeando evacuaciones en toda la ciudad, o alguien
le informó. No hace falta decir que, si me entero de que es esto último,
la persona responsable de la fuga perderá su lugar en la ciudad de
refugio”.
Alguien alzó una mano.
“¿Sí, señor Campion?”

16
“¿Ciudad de refugio? Es la primera vez que escucho esa frase en un
contexto oficial, pero he notado que es tendencia en mis sitios”.
“¿De Verdad? ¿Desde cuándo?”, preguntó ella.
“Comenzó hace unos días. Tengo un algoritmo de inteligencia
artificial que recopila todas las tendencias y hashtags pertinentes en
archivos discretos, y estos se me entregan cada mañana con mi café
con leche y canela. El lunes encontré un archivo marcado con el
encabezado #CiudadesdeRefugio. ¡Dígame que su gente no es la que
publica sobre esto!”
Ben Brandeis levantó una mano. “¿Puedo, señora?”
“Sí, por supuesto, Ben”.
Se levantó. Durante los seis meses anteriores, el joven se había
ganado el respeto de todos los miembros del grupo, incluso del
malhumorado secretario Gilmore, y todos se detuvieron para
escuchar.
“Solía pasar mucho tiempo en las redes sociales, pero
últimamente no he tenido suficiente tiempo en el día para pasar el
rato, ¿sabe? Pero trato de estar al tanto de lo que sucede en los sitios
populares entre mi grupo de edad. No se ofenda, Sr. Campion, pero
su sitio ya está perdiendo a muchos de mis amigos debido a todos
sus anuncios sobre política”.
“Hijo, no publicamos anuncios”, dijo Campion con orgullo.
“No los que etiquete como anuncios, no”, respondió el
adolescente sin dudarlo, “pero el resultado es el mismo. Sé más
sobre codificación de lo que ha olvidado, señor, y puedo reconocer
algoritmos y bots en segundos. Noté ese hashtag de refugio la
semana pasada en uno de los sitios de juegos, y ya está ganando
fuerza. Sé que todos se han esforzado mucho por mantener a raya a
lo que nos enfrentamos, pero ¿no se debería dar a la gente una
opción? ¿Tener la oportunidad de abastecer sus despensas o tal vez
hacer lo que el Mayor McCutcheon llama “ponerse a cuentas con
Dios”? ¿Quién sabe? Si los rebeldes de Oriente Medio y África
supieran de la llegada de un asesino de planetas, ¡podrían dejar de
luchar y tratar de encontrar la manera de ayudarse mutuamente!
¿Tenemos que seguir haciendo lo que siempre hemos hecho por
costumbre?”

17
Gilmore se aclaró la garganta y se rió con orgullo. “Típico de su
generación, joven. Cree que la paz está a la vuelta de la esquina, si
los viejos nebulosos nos apartáramos del camino, ¿no es cierto? Hijo,
no funciona así. Controlamos la historia, controlamos el acceso y
podemos controlar el resultado. Estas ciudades de refugio solo
albergan a un millón de personas cada una, y solo hay diez de ellas.
Diez millones de seres humanos. Punto. Eso es todo lo que podemos
salvar. Mejor que los tontos en el Medio Oriente sigan matándose
unos a otros y reduzcan la cuenta de aquellos que se enfrentarán a
este asesino de Ajenjo. El destino es el destino; es un hecho.”
Mac levantó la mano, enojado por la insensible actitud del
político. “¿Lo es, señor? Quiero decir, ¿es por eso que hemos estado
trabajando horas extras? ¿Rescatar a diez millones de personas?
Mire, la Biblia dice...”
“¡No empiece a citarme la Biblia de nuevo, Mayor!” gritó
Gilmore. “Yo también soy cristiano, pero no veo cómo su supuesta
escatología puede ayudarnos ahora. Si usted cree que la
intervención divina ya está saliendo de los cielos, le sugiero que
elimine su nombre de la lista de las ciudades de refugio y dependa
del rapto o de algún otro milagro para salvarse. Todas esas profecías
se cumplieron hace siglos. ¡No tienen lugar en una mesa de hombres
racionales!”
“Si es cristiano, señor, ¿por qué le teme a la Palabra de Dios?”,
McCutcheon respondió con paciencia. “Supongamos que el Señor
decide intervenir y salvar cien millones, ¿no querría usted eso?”
“Por supuesto que lo haría”, respondió el político con orgullo.
“¿Doscientos millones?", preguntó el mayor.
“Por supuesto. Incluso tres o cuatro o cinco veces más, pero eso
simplemente no va a suceder. Hay diez ciudades en diez países.
Diez millones de personas. Y necesitamos llenarlos con lo mejor de
lo mejor. Esa es la única razón por la que usted y Ben están en la
lista, si debe saberlo. Por supuesto, hemos agregado a sus familiares
inmediatas por cortesía, en agradecimiento por su participación. A
diferencia de su Dios ausente, nuestros gobiernos han
proporcionado refugios seguros”.

18
“¿Mi Dios?”, Mac repitió en estado de shock. “¿Por qué es él mi
Dios? Si usted se reconoce como cristiano, ¿no es también su Dios?”
El anciano político se aclaró la garganta, sus ojos furtivos
recorrieron la habitación. “Por supuesto que Él es mi Dios,
ciertamente. Simplemente trato de hacer un comentario sobre su
tipo radical de cristianismo. Es un caso atípico, mayor. Una
aberración de la corriente principal. Mire, dejemos esta discusión
para más tarde, ¿de acuerdo? Tenemos que dejar que la Dra. Stone
dirija la reunión. Esto no es la iglesia, ¿ok? Es una reunión seria de
hombres y mujeres sensatos”.
Mac no podía dejarlo pasar y se encontró perdiendo los estribos.
“¿Con eso implica usted que un cuerpo de cristianos carece de
sentido? Soy un creyente apasionado en Cristo, y me considero un
hombre muy racional y razonable. Si quiere enfrentarse cara a cara con
la filosofía o la ciencia, ¡me complacerá debatir con usted, señor
secretario!”
“Mire usted, aquí...”
“¡No, señor, es usted quien necesita mirar! Dudo seriamente que
haya leído alguno de mis libros, pero ¿ha leído realmente el Libro, la
Biblia? Si lo hubiera hecho, entonces sabría que lo que he estado
diciendo durante años es cierto. El mundo tal como lo conocemos está
a punto de cambiar. Si Ajenjo está en camino, como sospechamos,
entonces eso significa que todo el escenario de Apocalipsis está
comenzando. Tal vez ya haya comenzado, pero no importa qué,
Jesucristo regresará. Y eso significa que el hombre de pecado también
vendrá. De hecho, ¡puede que ya esté aquí!”
La Dra. Stone se levantó, con rostro impasible como de costumbre.
“Alabo su pasión, Mayor McCutcheon, pero no podemos abordar ese
argumento en esta reunión. Sugiero que usted y el buen secretario
hagan planes para intercambiar opiniones en privado. Por ahora,
permítanme asegurarles a todos que los gobiernos del mundo no han
estado inactivos. He traído conmigo esta tarde un documento
provisional que revela una nueva tecnología que en realidad puede
salvarnos a todos y eliminar la necesidad de ciudades de refugio.
Mañana discutiremos este dispositivo y cómo podría implementarse
en profundidad, pero lo explicaré brevemente por ahora. Cada uno
recibirá una copia de esta propuesta para lectura privada”.

19
“¿Dice que es una nueva tecnología?”, preguntó el general
Maximilian Jarvis, jefe de la OTAN. “¿Por qué no he oído hablar de
esto?”
“Nadie fuera del CERN ha oído hablar de él, general. No hasta
ahora. Como dije, mañana discutiremos los detalles precisos, pero el
dispositivo utiliza una propiedad de entrelazamiento recién
descubierta para disparar paquetes de tiempo en el camino de Ajenjo”.
McCutcheon se rió de verdad. “¿Paquetes de tiempo? ¿De qué
novela de ciencia ficción la gente del CERN tomó eso? Que yo sepa, tal
cosa ni siquiera es teóricamente posible, ¡y mucho menos práctico!”
La Dra. Holmes levantó una mano. “Mac, entiendo que le divierta,
y admito que tuve la misma reacción cuando Eric Lindor me llamó al
respecto, pero la ciencia tiene mérito. Pregúntele a Ben si no me cree.
La teoría se basa en sus ecuaciones”.
McCutcheon miró fijamente al adolescente. “¿Tus ecuaciones? Ben,
no me has dicho una palabra sobre esto. ¿Por qué?”
“No es porque esté tratando de mantenerlo en la oscuridad, señor”,
le dijo a su mentor estadounidense. “Es solo que mucho de lo que yo
teorizo es como ‘de otro mundo’, ¿sabe? Siempre tiene sentido para
mí, pero la mayoría de los matemáticos y físicos cuánticos de nuestro
equipo me dijeron que no puedo usar el entrelazamiento como una
constante. Pero eso no es cierto. Sí se puede. Y si lo hacemos, esto
puede hacer que el tiempo se revierta”.
McCutcheon suspiró. Había visto muchas de las complejas y
hermosas ecuaciones del adolescente, y aunque las consideraba
brillantes, el científico anciano las encontraba inquietantes. Si Ben tenía
razón, entonces el vínculo entre la materia oscura y el entrelazamiento
cuántico abrió un portal a una realidad sin ningún fundamento. Una
realidad que negaba la necesidad de cualquier Dios Creador.
Wonderland. Ahí es donde habían aterrizado todos. En un agujero
de conejo oscuro y profundo. A través de un espejo de quarks y
bosones e infinitas imposibilidades. El único rayo de esperanza en este
lugar tan oscuro fue hallado entre Génesis 1:1 y Apocalipsis 22:21. La
Palabra de Dios.
Mac agradeció a Dios por ponerlo en este lugar en este momento.
Isaías 42:23 entró en sus pensamientos: “¿Quién de ustedes escuchará
esto? ¿Quién escuchará y oirá cuando llegue el momento?”
“Quizás por eso estoy aquí”, pensó.
20
Capítulo 2

CON LOS OJOS PUESTOS


EN LOS CIELOS

DESPUÉS DE LEER LA ELABORADA historia del capítulo 1, el


lector podría lanzar un suspiro de alivio, pensando que no hay una
causa real para estar alarmados, dado que la narrativa es puramente
ficticia.
¿Pero lo es?
Intento compartir razones significativas de por qué he llegado a
creer que los hechos desclasificados pueden ser más extraños ―y
temibles― que lo que mi narrativa ficticia de apertura presenta. Esto
debería congelarte hasta los huesos.
Y sí, esto involucra lo que creo que es un encubrimiento del más
alto nivel por parte de las agencias espaciales estadounidenses,
incluida la NASA.
Incluso, creo que no estoy solo en mis hipótesis conspirativas.
En un reciente documento revisado por pares, “Un examen
empírico de WISE/NEOWISE Asteroid Analysis and Results”, el
físico Nathan Myhrvold ―ex jefe de estrategias y director de

21
tecnologías de Microsoft y verdadero polímata y científico en acción
que ha publicado investigación original sobre paleobiología,
climatología y astronomía, y quien ostenta más de 850 patentes
americanas dirigidas a su corporativo y sus afiliados (The Economist
una vez describió a Myhrvold como “el segundo cerebro de Bill
Gates” y puntualizó que durante muchos años ha estado en la “lista
de los 100 pensadores más grandes del mundo”1) ―refuta los datos
de la NASA sobre asteroides diciendo que sufren de “errores
sistemáticos e inconsistencias” con respecto a NEOs potencialmente
letales.2
Justo antes de comenzar a denunciar irregularidades, Myhrvold
continuó acusando a la NASA de informar mal deliberadamente
sobre el número de amenazas de objetos cercanos a la Tierra que
están siendo rastreados por su proyecto NEOWISE, acusando a
científicos de la agencia espacial de comportarse de manera
“extremadamente engañosa” y con deliberada “mala conducta
científica” en un encubrimiento de amenazas espaciales muy reales
y potencialmente inminentes.3
“Los gerentes de la NASA, que deberían haber estado
supervisando el proyecto, estaban más interesados en protegerla del
escrutinio”, escribe antes de agregar:

Los problemas a los que llamo de mala conducta en los


documentos de NEOWISE no fueron involuntarios. Parecen
haber sido elecciones deliberadas hechas repetidamente por el
equipo de NEOWISE durante un largo período de tiempo.
Estas acciones han causado que la comunidad astronómica
trabaje bajo la falsa creencia de que los resultados de
NEOWISE son más precisos (que tienen errores menores) de lo
que garantiza la evidencia.4

Myhrvold señaló:

Los resultados de NEOWISE se obtuvieron mediante la


aplicación de 10 métodos de modelado diferentes, muchos de
los cuales no se explican ni definen adecuadamente, a 12
combinaciones diferentes de datos de banda WISE. Más de la
22
mitad de los resultados de NEOWISE se basan en una sola
banda de datos. La mayor parte de los ajustes de curva de los
datos en los resultados de NEOWISE son de mala calidad, y
con frecuencia faltan la mayoría o todos los puntos de datos en
los que se basan. Se producen errores completos en alrededor
del 30 % de los resultados de una sola banda y, entre los
resultados derivados de las combinaciones de bandas
múltiples más comunes, alrededor del 43 % pierden todos los
puntos de datos en al menos una banda. El análisis de datos de
NEOWISE se basa en suposiciones que en muchos casos son
inconsistentes entre sí... Después de eliminar las coincidencias
exactas y agregar resultados adicionales de ROS [radar,
ocultamiento o nave espacial], descubrí que la precisión de las
estimaciones de diámetro para los resultados de NEOWISE
depende en gran medida de la elección de las bandas de datos
y de cuál de los 10 modelos se utilizó.
Muestro que los errores sistemáticos en las estimaciones
de diámetro son mucho más grandes que los descritos
anteriormente y oscilan entre -5% y +23%. Aparte, los
errores aleatorios oscilan entre el -15% y el +19 % cuando se
utilizan las cuatro bandas WISE, y entre el -39% y el +57 %
en los casos en los que se emplea solo la banda W2.5

En otras palabras, los hallazgos de Myhrvold sugieren que la base


de datos más grande del mundo (con más datos que todas las demás
fuentes combinadas) de información que detalla el diámetro, el albedo
y otras propiedades de aproximadamente 164,000 asteroides sufre de
información manipulada intencionalmente en el peor de los casos y
análisis inadecuado en el mejor, con el resultado neto de que el público
se mantiene en la oscuridad con respecto a... ¿qué?
Como se detalla más adelante en este libro, las preocupaciones
recientes expresadas por otros expertos concuerdan con las mías y las
de Myhrvold y se derivan de variaciones en la fórmula para pi, lo que
podría significar una diferencia en la trayectoria calculada de las
masas que se elevan en el espacio. Si un asteroide o meteoro en
cuestión se describe con frases como “pasar rozando” cuando se hace
referencia a su órbita cercana a la Tierra, pequeños errores de cálculo

23
podrían tener grandes consecuencias para nuestro planeta. Por
ejemplo, un matemático, Harry Lear, afirmó recientemente que la
fórmula utilizada para calcular la trayectoria de Apophis (un asteroide
masivo estudiado más adelante en este trabajo) por los científicos de la
NASA, usaron valor de pi= 3.141592654, cuando debió haber sido de
3.144605511…, con el número de la proporción áurea calculado como
1.618033989. Según Lear, este error de cálculo deja los números de la
agencia espacial “con un error de 901,434 km más cercano a la Tierra y
831,517 km a Apophis”, lo que Lear implica que podría enviar a
Apophis a estrellarse contra la Tierra en menos dentro de diez años, el
13 de abril de 2029.7 Lear envió una carta abierta al presidente Trump
y a los científicos del gobierno de los Estados Unidos, rogándoles que
revisaran los datos inmediatamente, a pesar de que termina su
mensaje con una advertencia ominosa que quizá ya no hay tiempo
para ello.
Más recientemente, el empleado de la NASA, Robert Frost, dijo
que lo mejor que podrían hacer los gobiernos, si los matemáticos y
científicos mencionados aquí tienen razón, que sería mejor decirle al
público que “busque refugio”, si es que resulta que un asteroide capaz
de destruir la vida en la Tierra (como el que muchos científicos creen
que acabó con los dinosaurios) es revelado por los astrónomos como si
se dirigiera hacia nosotros. (Más adelante explicaré por qué tal anuncio
no se hizo o no se haría antes de lo necesario incluso si la NASA
confirmó en privado que el riesgo es real, lo que, francamente, puede
que ya lo haya hecho).
En una entrevista con Frost en el periódico Express, los hechos
detrás de su recomendación de “refugiarnos” se explicaron así:

A pesar de las conversaciones sobre el uso de armas


nucleares para destruir asteroides o cohetes para apartarlos de
su camino a la Tierra, la NASA admite que, si un asteroide se
acerca demasiado, sería también demasiado tarde para salvar al
planeta. La NASA dijo en su sitio web: “Un asteroide en una
trayectoria de impacto con la Tierra no podría ser derribado en
los últimos minutos o incluso horas antes del impacto. Ningún
sistema de armas conocido podría detener la masa debido a la
velocidad a la que viaja, un promedio de 19 kilómetros por
segundo.”9
24
En su mayor parte, el público desconoce que el 70 por ciento de
tales amenazas espaciales (cientos de miles) no se detectan y
seguirán siendo indetectables por el momento, en parte debido a
que la NASA no aprueba el desarrollo de un telescopio espacial
completo (como uno llamada NEOCam, que mejoraría
enormemente las oportunidades de los astrónomos para detectar
NEOs potencialmente peligrosos). Incluso mientras escribo este
capítulo, la Agencia Espacial Europea y el Observatorio Europeo
Austral confirmaron que un asteroide de veinte a cincuenta metros,
el 2006 QV89, que tenía una posibilidad entre siete mil (una
evaluación de riesgo extraordinariamente grande) de impactar
contra la Tierra el 9 de septiembre de 2019, “no está en curso de
colisión este año”.10 Otro asteroide “mata-ciudades” que la NASA
“no vio venir” solo alcanzó a rozar nuestro planeta en julio de 2019.
Ese asteroide, llamado 2019 OK, viajaba a 15 millas por segundo y
se acercó más a la Tierra de lo que está cerca de nosotros nuestra
luna.11 Pero no todos los asteroides cambian a nuestro favor.
Mientras escribía este libro, llegó a mi escritorio un comunicado de
prensa de la Universidad de Hawaii, que describía un asteroide
entrante de aproximadamente cuatro metros de diámetro, que
según otro artículo es “aproximadamente del tamaño de un
automóvil pequeño”,12 que los astrónomos descubrieron cuando
entró en nuestra atmósfera el 22 de junio de 2019. Y quién puede
olvidar el asteroide de casi sesenta y cinco pies de ancho que viajaba
a casi 43,000 millas por hora y que explotó en la atmósfera sobre
Chelyabinsk, Rusia, en 2013. Nadie lo vio venir tampoco.
Pero los riesgos apocalípticos reales son mucho más serios que
los objetos del tamaño de un automóvil que viajan rápido.
Imagínese (justo como lo describo con más detalle más adelante
en este libro) que sale por la noche solo unos cuantos años en el futuro
y nota lo que parece una serpiente con cuernos, ardiente, de miles de
pies de ancho, sumergiéndose en nuestra atmósfera y en dirección
hacia la Tierra a una velocidad inimaginable. Este monstruo aterrador
parecería nadar a través del cielo, más allá de las estrellas, acercándose
cada vez más a la Tierra hasta que, al hacer contacto, se sumerge en el
océano, su forma masiva enviando una secuencia de tsunamis que
miden seiscientos pies de altura golpeando el terreno costero de las
25
regiones a lo largo de casi la mitad del planeta, infundiendo a la
atmósfera partículas chamuscadas de aerosol y vapores. El calor
abrasador resultante de la combinación de la humedad y el calor
extremo en la atmósfera de la Tierra se transforma posteriormente en
una serie de huracanes de alta velocidad, que miran letalmente hacia
el hemisferio del mundo aún no afectado. Demasiados escombros son
liberados como subproducto del impacto inicial y la consiguiente
devastación de modo que, durante aproximadamente una semana, la
oscuridad cubre el cielo en todo el mundo mientras todo el paisaje es
azotado por huracanes y otros fenómenos atmosféricos similares. Para
cuando las aguas finalmente se asientan, las tormentas amainan y el
cielo se aclara, pero la mayor parte de la vida en la Tierra está muerta.
Según el arqueólogo ambiental del Laboratorio Nacional de Los
Álamos, Bruce Masse, esto es precisamente lo que vieron los que
vivían en la Tierra en la época de Noé, y así fue como se produjo el
diluvio de esa época.13
¿Necesito recordarles lo que Jesús dijo a sus discípulos?: “Pero
como eran los días de Noé, así serán también en la venida del Hijo del
hombre” (Mat. 24:37).

¿ES APOPHIS EL “AJENJO” BÍBLICO?


Con eso en mente, considere cómo en junio de 2004 los
astrónomos del Observatorio Nacional de Kitt Peak detectaron un
asteroide considerable que se dirigía a la Tierra. Los esfuerzos
posteriores realizados en 2004 por un equipo de Siding Spring Survey
en Australia identificaron nuevamente el asteroide. Al año siguiente, el
equipo que descubrió el asteroide lo llamó Apophis (en honor al
antiguo espíritu egipcio del mal, la oscuridad y la destrucción, una
fuerza malévola que no se puede detener, según la leyenda).
Inmediatamente, la posibilidad de una colisión de tal cuerpo celeste
con nuestro planeta se convirtió en un foco de cálculo y preparación en
nombre de los esfuerzos preventivos por parte de expertos de todo el
mundo.
Según los informes, el enorme asteroide Apophis pasará
preocupantemente cerca de la Tierra el 13 de abril de 2029
(aproximadamente nueve años desde la publicación de este libro),

26
según el sitio web de la NASA.14 De hecho, la NASA admite que
Apophis en 2029 estará tan cerca de la Tierra que “pondrá en peligro a
algunos de nuestros satélites en órbita” e incluso será visible en el cielo
diurno.15
Asumiendo por el momento que Apophis es el Ajenjo bíblico (no
estoy certificando eso ni estableciendo fechas aquí) y que 2029
representaría un año en algún momento a la mitad del período de la
gran tribulación cuando comiencen los juicios de las trompetas,
entonces el lunes 13 de octubre de 2025 (13 de abril de 2029, menos tres
años y medio) sería la fecha aproximada de inicio de los temidos siete
años previstos en la Escritura (ver Mateo 24:21; Apocalipsis 7:14; y
Daniel 12:1).
Para los dispensacionalistas evangélicos (y algunos creyentes de
la profecía católica) este momento puede parecer una señal ominosa
de que pronto ocurriría el rapto de la iglesia (el evento escatológico en
el que todos los verdaderos cristianos que están vivos serán
transformados en cuerpos gloriosos en un instante y se unirán a la
resurrección de los creyentes muertos, subiendo con ellos al cielo).
Dependiendo de la posición particular de cada uno, esto colocaría la
última fecha posible para un rapto previo a la tribulación alrededor
del 13 de octubre de 2025 (aproximadamente seis años después de la
publicación de este libro), mientras que para los creyentes en el rapto
pre-ira esto equivaldría a un tiempo de salida de la Tierra justo antes
de 2029, y para los de posición post-tribulacional, un sería un
recogimiento/arrebatamiento en una fecha cercana al miércoles 13 de
octubre de 2032.
A pesar de lo expuesto en la profecía bíblica, es de esperar que
Apophis pase justo por debajo de la Tierra en unos pocos años a
partir de ahora,16 porque la alternativa realmente representa un
riesgo de proporciones bíblicas para la vida. Con una medida de 370
metros de ancho¹7 y un peso estimado de veinte millones de
toneladas métricas, Apophis viaja a 28,000 millas por hora,19 con
una masa alucinante y una velocidad de encuentro de inercia
potencial que la mayoría de la gente no puede ni intentar
comprender. Y aunque algunos expertos han declarado
públicamente que, a partir de este momento, no esperan que la
montaña celestial tenga un impacto directo con nuestro planeta, la

27
categorización actual de Apofis como un NEO u objeto cercano a la
Tierra20 ha provocado que los mismos expertos permanezcan
atentos a la órbita del cuerpo, ya que eso podría cambiar. De hecho,
se están discutiendo planes hipotéticos tras bambalinas para
intentar desviar el peligro porque los científicos ven este próximo
“evento celestial” no solo como una rara oportunidad para estudiar
y observar un monstruo celestial, sino también como la posibilidad
de que ellos, al igual que el resto del mundo pueden ser
espectadores de una colisión catastrófica contra este planeta en 2029.
Esto se debe a que, junto con la proximidad admitida de la órbita de
Apophis, existe el riesgo de que un evento imprevisto como el
descrito en la historia inicial de este libro pueda de alguna manera,
incluso espontáneamente, modificar el curso de este masivo
asteroide de veinte millones de toneladas, arrojándolo devastadora
y directamente hacia este mundo.21 Entonces, los ojos de toda la
humanidad definitivamente estarían puestos “en las potencias de os
cielos” (Lucas 21:25-26) muy pronto.
El escritor científico Greg Bear de CNN no solo está de acuerdo,
sino que elabora acerca de las consecuencias de la colisión de
Apophis con nuestro planeta en menos de una década a partir de
ahora, y admite: “Si golpeara la Tierra, el impacto desencadenaría
una explosión equivalente a más de mil millones de toneladas de
TNT [causando fácilmente] miles de millones de muertes, e incluso
meses, si no es que años, de perturbaciones climáticas”22 Teniendo
en cuenta las implicaciones de un asteroide de este tamaño, que se
prevé que orbite tan cerca de nuestro planeta, y teniendo en cuenta
las consecuencias potencialmente devastadoras de la colisión, más
expertos se han unido a los esfuerzos para evaluar qué suceso
podría hacer que el cuerpo masivo se desvíe de su curso en
dirección a la Tierra. Consideran cómo Apophis todavía tiene casi
una década para viajar entre otros asteroides, planetas, estrellas y
elementos adicionales en el espacio exterior que podrían entrar en
contacto con él, alterando potencialmente su camino como una bola
de billar desviada e interfiriendo con la trayectoria que los expertos
ahora trazan para el “juego final” masivo interestelar de la bola
ocho. Tal vez esta sea la causa de la extrema polaridad dual que

28
vemos entre los medios y los científicos, con noticias de un lado que
intentan saciar el miedo público y reuniones de
preparación/intervención que se llevan a cabo silenciosamente
entre miembros de la NASA, astrónomos expertos, científicos e
incluso los líderes políticos mundiales más influyentes.
Y luego están aquellos teólogos y estudiantes de profecía como
yo que ven posibilidades de otro factor en todo esto: el
cumplimiento ineludible de la profecía bíblica. Note las
descripciones particulares de las primeras cuatro trompetas del
Apocalipsis 8:6-12 y sus secuelas. Si le pidiera a un científico que le
explique lo que estos versos parecen representar, le diría que estos
detalles coinciden mucho con la secuencia de un asteroide binario
(dos asteroides que orbitan alrededor de un baricentro común —
siendo el baricentro el centro masivo alrededor del cual orbitan dos
o más cuerpos) acompañado de fragmentos más pequeños, o la
ruptura de un asteroide más grande en dos porciones principales
acompañadas de toneladas de escombros más pequeños a medida
que ingresan a la atmósfera de la Tierra seguidos de impactos.
Note lo que dicen estos versículos en su orden original exacto:

Y los siete ángeles que tenían las siete trompetas se


dispusieron a tocar. El primer ángel tocó la trompeta, y
siguieron granizo y fuego mezclado con sangre, y fueron
arrojados sobre la tierra; y se quemó la tercera parte de los árboles,
y se quemó toda la hierba verde.
(Apocalipsis 8:6-7, énfasis añadido).

Aparte de la correlación obvia con la séptima plaga del éxodo,


“granizo y fuego” arrojados sobre la Tierra, abrasando e
incendiando campos y bosques, coincide fácilmente con las
primeras porciones más pequeñas de un asteroide binario entrante o
escombros separados de un cuerpo espacial más grande al impactar
con nuestra atmósfera. Alternativamente, estos fragmentos de
meteoritos menores podrían ser escombros atrapados en la atracción
gravitatoria de un solo asteroide grande que ingresa a la atmósfera
de la Tierra antes que la roca colosal.

29
Ahora preste atención a lo que dicen los siguientes dos
versículos:

Y el segundo ángel tocó la trompeta, y como una gran


montaña ardiendo en fuego fue lanzada en el mar: y la
tercera parte del mar se convirtió en sangre; y murió la
tercera parte de las criaturas que estaban en el mar y tenían
vida; y la tercera parte de las naves fue destruida.
(Apocalipsis 8:8-9, énfasis añadido)

Inmediatamente después de la primera trompeta seguida de lo


que creo que son fragmentos más pequeños de materiales de
asteroides calentados al rojo vivo, surge la imagen de una gran
montaña en llamas (exactamente como yo o los antiguos
transmitiríamos ver un asteroide considerable a medida que pasa a
través de la atmósfera rumbo a este planeta) impactando en el mar,
matando a una tercera parte de la vida de ese océano y acabando
con los barcos debido al oleaje. Esta parece ser la primera de dos
partes más grandes de un asteroide masivo en desintegración... o la
primera parte de un objeto espacial binario.
Observe lo que sigue directamente a esto, cuando suena la
próxima trompeta:

Y el tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran


estrella, ardiendo como una lámpara, y cayó sobre la tercera
parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas; y el
nombre de la estrella es Ajenjo: y la tercera parte de las
aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a
causa de las aguas, porque se hicieron amargas.
(Apocalipsis 8:10-11, énfasis añadido)

La tercera trompeta detalla lo que suena como el segundo


fragmento de un asteroide gigantesco “ardiendo como si fuera una
lámpara” (nuevamente, exactamente como Juan de Patmos
probablemente habría explicado una sección de un asteroide masivo

30
ardiendo en dirección al planeta), que inmediatamente impacta en
otra parte de la Tierra, causando que los afluentes se contaminen,
incluidas las aguas que normalmente se purifican para beber, y
como resultado muchas personas mueren.
Finalmente, observe con qué termina esta descripción
secuencial:

Y el cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera


parte del sol, y la tercera parte de la luna, y la tercera parte
de las estrellas; así como la tercera parte de ellos se
oscureció, y el día no brilló en la tercera parte de él, y la
noche igualmente.
(Apocalipsis 8:12, énfasis añadido)

Nuestro científico hipotético, al leer estos versículos sucesivos


que terminan en el versículo 12, explicaría cómo, como resultado del
aterrador doble golpe de los componentes del asteroide que se
hunden en el océano y sobre la tierra, una secuencia de tsunamis de
cientos de metros de altura golpearía los territorios costeros de todo
el mundo, infundiendo la atmósfera con partículas de aerosol
quemantes, lo que provocaría un calor extremo en la atmósfera
terrestre y una cascada posterior de huracanes de alta energía por
todo el mundo. Combinado con los escombros voluminosos
arrojados al cielo por el impacto inicial y las reacciones de la
erupción volcánica, durante aproximadamente una semana la
oscuridad cubriría el cielo, oscureciendo gran parte de la luz de los
cuerpos celestes. De hecho, como detallamos anteriormente, eso es
exactamente lo que el arqueólogo ambiental del Laboratorio
Nacional de Los Álamos, Bruce Masse, dice que se desarrollaría y en
el mismo orden que se describe en el capítulo 8 de Apocalipsis.23
Por supuesto, este es solo un escenario que tiene sentido para
mí y para algunos científicos según las descripciones del Libro de
Apocalipsis. Otra posibilidad involucra un segundo cuerpo celeste,
oficialmente llamado 2018 LF16, que actualmente se abre camino a
través del espacio “en una trayectoria de riesgo que podría provocar
que colisione con la Tierra... [y] comprometido no con uno, sino con

31
la asombrosa cantidad de 62 trayectorias diferentes de impacto
potencial contra nuestro planeta.”24
La órbita de este asteroide ha sido monitoreada por el Laboratorio
de Propulsión a Chorro de la NASA, que ha calculado la trayectoria de
la masa en un esfuerzo por marcar su rumbo futuro. Los expertos
dicen que esta roca espacial, como Apophis, pasará con seguridad por
la Tierra, pero admiten que, con tantos puntos potenciales de colisión a
lo largo de la órbita del cuerpo, la probabilidad de impacto podría
aumentar considerablemente, si algo altera inesperadamente su curso.
Si el 2018 LF16 golpeara la tierra, el daño sería solo un poco
menos devastador que el de Apophis, ya que el 2018 LF16 es un poco
más pequeño. Sin embargo, con tan alta probabilidad (la primera de
las cuales sería muy pronto, el 8 de agosto de 2023), sigue siendo una
amenaza igualmente formidable a pesar de su masa más pequeña. El
asteroide está viajando por el espacio a aproximadamente 54,500
kilómetros por hora y se estima que tiene unos 213 metros de ancho,
“el doble de la altura de la Estatua de la Libertad en Nueva York y
cuatro veces más alta que la Columna de Nelson en Trafalgar
Square”,25 lo suficientemente grande para ser considerado un “asesino
del país” si chocara con la Tierra con una “colisión cataclísmica [que]
generaría el poder destructivo de una explosión nuclear de 57
megatones",26 creando una explosión contundente igual a la causada
por la Bomba del Zar en 1961. (La bomba de hidrógeno soviética RDS-
202, llamada Bomba del Zar por las naciones occidentales, fue el arma
nuclear más poderosa jamás detonada.) En comparación, esto significa
que la devastación de esa masa en cuestión sería 1,500 veces mayor
que las bombas de Hiroshima y Nagasaki combinadas, y 10 veces más
poderosas que todas las municiones gastadas durante la Segunda
Guerra Mundial.”27
En oposición a mi anterior escenario preferido con el científico
hipotético y la evaluación de las trompetas 1-4 del Apocalipsis 8 como
sucesión de eventos, ¿podría alternativamente 2018 LF16 suceder
cuando suene el segundo ángel (posiblemente en el año 2023) y “como
si fuera una gran montaña ardiendo en fuego” ser arrojado al mar seis
años después, en 2029, por la tercera trompeta y un segundo gran
asteroide llamado ajenjo? ¿Alguna de estas colisiones cercanas a la
fecha proporcionará el cumplimiento de la visión apocalíptica del
Libro de Apocalipsis? Un estudio mayor de la devastación predicha en
32
el último libro de la Biblia, que analizaremos más adelante, sin duda
describe un daño similar al especulado por los expertos que están
trabajando arduamente en este mismo momento para planificar una
crisis planetaria de este tipo.

Y LUEGO ESTÁN ESTOS


Si bien Apophis es, en mi opinión, el candidato más probable
para cumplir la profecía de Wormwood, los NEOS pasan rozando la
Tierra todo el tiempo.
Por ejemplo, la NASA informó que el 27 de marzo de 2019, el
NEO clasificado como asteroide 2019 EN era “más alto que la Gran
Pirámide de Giza [y] pasó disparado más allá de la Tierra...
[moviéndose] a una velocidad increíble de más de 54,700 k/hr.”
Este asteroide se descubrió recientemente, pero se estima que ya
tuvo siete aproximaciones cercanas a la Tierra, y se prevé que ocurra
otro pase el 6 de junio de 2035.29 Otro asteroide, denominado 2019
PP29, fue descubierto recientemente por científicos coreanos
utilizando el Korea Microlensing Telescope Network (KMTNet),
que afirma que el cuerpo de 160 metros tiene un pequeño porcentaje
de riesgo de colisión con nuestro planeta en 2063 o 2069.30
Por separado, la segunda ubicación de riesgo más alta en la
“Lista de riesgos” de la Agencia Espacial Europea para NEOS es el
1979 XB, un asteroide/planeta menor que actualmente viaja a más
de 90,000 kilómetros por hora en una trayectoria tan impredecible
que su potencial de colisión exacto aún debe calcularse con
precisión, pero que podría ocurrir en cualquier momento entre 2056
y 2113. Los expertos advierten que esta masa es vulnerable a la
variación orbital, lo que crea un mayor riesgo que la mayoría de los
NEOS, por lo que se ubica en el segundo lugar en la lista de
vigilancia de Europa.32
El 2010 RF12 es seguido tan de cerca que actualmente preside las
listas de la ESA. Moviéndose a través del espacio exterior a más de
44,000 kilómetros por hora, este asteroide más pequeño tiene un
tamaño de aproximadamente siete metros de ancho, y su impacto
potencial trae consigo ramificaciones ligeramente menos amenazantes
que las del evento de Chelyabinsk de 2013. Se prevé que las
33
probabilidades de colisión sean altas en esta ocasión, con trayectorias
que muestran que este cuerpo probablemente llegará cuarenta veces
más cerca de nuestro planeta de lo que viaja nuestra propia Luna. Está
previsto que el asteroide pase por la Tierra en abril de 2022, con fechas
de impacto calculadas que rondan el final de este siglo.11
El 2000 SG344 es un asteroide único en el sentido de que orbita el
sol muy cerca de nuestro planeta, moviéndose a lo largo de su órbita
cercana a la Tierra a más de 40,000 kilómetros por hora. Mientras
nuestro planeta orbita alrededor del sol en 365 días, esta masa
completa su ciclo en 353 días, aparentemente persiguiendo a nuestro
planeta por el espacio. Se estima que este cuerpo tiene entre treinta y
cuarenta metros de ancho, casi el doble del tamaño del meteorito que
causó el evento de Chelyabinsk y podría golpear la Tierra dentro de
los próximos cuarenta años.
A medida que aumenta la consciencia de estos NEOS, la gran
cantidad con el que parecen pasar a toda velocidad cerca de nuestro
mundo puede ser completamente asombroso. En un día en particular,
múltiples NEOS pasan rosando la Tierra, algunos muy cerca y otros
saludando a nuestro planeta a una distancia cómoda. Solo el 6 de abril
de 2019, se informó que ocho asteroides pasaron cerca de la Tierra, el
asteroide 2019 GUI más pequeño, con un diámetro de 9 a 20 metros,
pero que pasó más cerca de la Tierra que los otros ocho transeúntes de
ese mismo día, saludando a la Tierra a una distancia de 630 kilómetros
de distancia mientras viajaba. El mayor de los cuerpos cósmicos
visitantes en ese día en particular fue el asteroide 2017 QP17, estimado
en 305—750 metros de diámetro, que afortunadamente otorgó a
nuestro planeta un mayor espacio libre mientras orbitaba, pasando a
una distancia de 36,818,044 millas de la Tierra.25
Otra amenaza muy antigua y potencialmente volátil que se cierne
sobre el futuro de la Tierra es el asteroide Bennu (llamado así por una
antigua deidad egipcia vinculada con el Sol, la creación y el
renacimiento, y anteriormente conocido como 1999 RQ36), que se cree
que es uno de los primeros elementos que se formaron en nuestro
Sistema Solar. La masa milenaria, aunque se dice que tiene pocas
probabilidades de impacto, vuela en una trayectoria que tiene setenta
y ocho posibles puntos de impactos sobre nuestro planeta en varias
fechas entre el 25 de septiembre de 2175 y el año 2199, siendo la fecha
de colisión con el mayor potencial el 24 de septiembre de 2196. Si bien
34
la declaración oficial hecha por los expertos es que hay más del 99 por
ciento de posibilidades de que Bennu pase por la Tierra sin incidentes,
los rumores corren desenfrenados de un plan diseñado por la NASA
para utilizar medidas de mitigación de asteroides en el espacio
cósmico. cuerpo para aliviar las posibilidades de colisión. Si Bennu,
estimado en 1.650 pies de ancho (aproximadamente cien pies más
ancho que la altura del Empire State Building), es el objeto real de los
esfuerzos de mitigación realizados por la NASA aún no se ha revelado
oficialmente, pero el asteroide es actualmente el tema de la misión
OSIRIS-REX (orígenes, interpretación espectral, identificación de
recursos, seguridad , explorador de regolito). La mayoría de mis
lectores son plenamente conscientes de Osiris como el dios egipcio de
los muertos y gobernante del inframundo y su conexión con el Gran
Sello de los Estados Unidos y las profecías de su regreso en los últimos
días conectado con el espíritu que habitará el Anticristo. (Uno no
puede evitar preguntarse por qué las agencias espaciales
internacionales continúan nombrando NEOS en honor a los antiguos
dioses de la destrucción y qué mensaje pueden estar transmitiendo).
Obviamente, la NASA está lo suficientemente interesada en este
miembro celestial en particular como para buscar una muestra de su
constitución. La misión OSIRIS-REX se lanzó el 8 de septiembre de
2016 en busca de este objetivo y está programada para regresar con su
premio de 2,1 onzas en 202312. Las trayectorias calculadas mapean la
órbita de Bennu como un paso seguro de la Tierra en lugar de una
colisión. , pero la NASA afirma simultáneamente que la masa también
podría chocar con Venus o incluso podría potencialmente "quemarse
en el sol". por la seguridad de la Tierra. La NASA cita muchas causas
orientadas a la investigación para 177 384 311 kilómetros (para un
recuento total de viajes de 2 585 737 262 kilómetros a partir del 1 de
julio de 2019) a este asteroide específico para obtener información
cuando existían muchas opciones más cercanas y accesibles. Sin
embargo, la NASA también reconoce que la futura proximidad de
Bennu a la Tierra es "demasiado cercana para su comodidad",
afirmando que "nuestros descendientes pueden usar los datos de
OSIRIS-REX para determinar la mejor manera de desviar cualquier
asteroide amenazante que se encuentre".

35
45
¿CUMPLIMIENTO DE LA PROFECIA?
¿Podrían 2018 LF16, Apophis u otros objetos actualmente
clasificados como NEO ser precursores de profecías como las de Joel
2:31-32 o Apocalipsis? ¿Podría el asteroide Apophis o una masa
celestial similar realmente acercarse lo suficiente como para dañar a
nuestro planeta, o peor aún, llevar consigo el objeto de juicio que las
Escrituras denominan “Ajenjo”?
Muchos de nosotros vivimos con la suposición de que personas
altamente capacitadas están observando los cielos por nosotros y
creando planes defensivos, mientras que otros creen que la
posibilidad de que un meteorito devastador golpee durante nuestra
vida es tan baja que simplemente no le damos ninguna importancia.
Como mínimo, es seguro decir que para muchos que aprenden
sobre Apophis, 2018 LF16, Dídimo o incluso asteroides que ya han
colisionado con la Tierra, como el evento de Chelyabinsk, este es
probablemente el primer conocimiento real que han recibido en el
tema.
Y, sin embargo, estos poderosos cuerpos están volando por el
espacio a velocidades de hasta 25 kilómetros por segundo.24 Con
tantos miles de asteroides, cometas y meteoritos desplazándose en
órbita, puede ser abrumador incluso considerar las implicaciones.
El enorme alcance de este posible enigma orbital, por lo tanto,
puede relacionarse más con un lector no científico en un contexto
diferente y más familiar.
Por ejemplo, considere cómo en el tráfico de la hora pico en
cualquier gran área metropolitana, miles de personas se precipitan por
la interestatal, conduciendo a 70 por hora en la misma dirección.

46
Otros, como pueden, están entrando y saliendo de la autopista de
varios carriles en esta sinfonía bien orquestada. Todo va bien hasta que
el conductor de un camión de dieciocho ruedas intenta cambiar de
carril en un momento inoportuno o un conductor ebrio entra en la
corriente, conduciendo de forma errática. De repente, las leyes
inevitables de la física entran en juego para todos en el camino.
Los autos corren lado a lado; los frenos chirrían. ¡Cada acción
tiene en efecto una reacción igual y opuesta! El metal se dobla; las
bolsas de aire se despliegan cuando un vehículo se estrella contra otro,
destrozando el metal; y el automóvil de alguien, y tal vez los vehículos
de varias personas, nunca volverán a ser los mismos.
Magnificada en una progresión no lineal, la mayoría de los
lectores pueden extrapolar la gravedad de un accidente similar a altas
velocidades, pero ocurriendo muy por encima de nosotros en el
espacio. A diferencia del tráfico rodante de una carretera, un asteroide
puede causar daños graves con solo acercarse demasiado a la órbita de
la Tierra. Esos problemas muy reales y problemáticos se abordarán en
futuros capítulos de este libro.

EL SOBRENATURALISMO Y LOS AGENTES DEL CAOS


DEL FIN DE LOS TIEMPOS
Además de los detalles sobre Apophis, su nombre llama algo de
atención porque tal masa cósmica recibió su nombre del dios egipcio
del caos,75 irónicamente también conocido como la Gran Serpiente,
quien, como también era enemigo del dios sol Ra, vivía en la
oscuridad. La Enciclopedia de Historia Antigua dice que está “asociado
con terremotos, truenos, oscuridad, tormentas y muerte”.76
Considerando el nombre desde un punto irónico, uno podría
considerar la referencia a la Gran Serpiente que habita en la oscuridad
casi como si fuera una personificación de la maldad. Además, si
Apophis golpea la tierra, sin duda se produciría un caos del máximo
tipo imaginable.
Podría ser que las implicaciones expuestas en el párrafo anterior
contribuyeran a la razón misma por la que se eligió el nombre
Apophis, y podría insinuar que algunos en la NASA sospechan que de
hecho estamos en una trayectoria hacia aquel caos descrito en la Biblia.

47
________________
Este es el avance a la fecha del 16 de noviembre de 2023.
Gracias por llegar hasta aquí en esta interesante lectura. Las
siguientes secciones aún están siendo traducidas y formateadas para
su fácil lectura e impresión en formato digital PDF. Gracias por la
espera.

Si le interesa leer todo el libro, le invitamos a mantenerse más cerca


de nosotros para estar al día en los últimos avances tanto en este
proyecto como en otros de igual importancia, que están en plena
construcción. Le sugerimos contactarnos mediante WhatsApp: +52
7775177254, o bien mediante nuestros correos electrónicos:
[email protected]
[email protected]

Muchas bendiciones y hasta pronto.


The Ucli Press
El currículo de La Universidad Cristiana Libre
________________
Le invitamos a visitar nuestras bibliotecas virtuales en
scribd.com
academia.edu
(Busque: “The Ucli Press”)
________________
Catálogo de The Ucli Press:
https://drive.google.com/drive/folders/1OOoipS_w-
sQAXzj6T23pgZpxoKF3pv2A?usp=drive_link

48

También podría gustarte