3.teoría Del Bien Jurídico. Claus Roxin
3.teoría Del Bien Jurídico. Claus Roxin
3.teoría Del Bien Jurídico. Claus Roxin
RoXnsi, "Taterschaft und Tatherrschaft", p413 y ss. (actualmente en la 8a. edición, 2006).
Más detalles al respecto, GRECO (nota 22, p. 322y ss.), quien evalúa la moderna investi- P 9. Esta idea básica ha sido impresa con negrita en el texto.
gación sobre la Ilustración. • Racnsi, en el manual (nota 12), § 2, n. marg. 6.
AMELUNG (nota 1), p. 39 y ss.; últimamente en (nota 8), p. 159 y ss. KAL4FA-GBANDI (nota 10), p. 263.
Más detalles y con refs. en mi manual sobre la parte general (nota 12), § 2, n. mar& 4 y 5. W1TIIG (nota 8), p. 239.
34 35
Sobre los nuevos desarrollos en el debate acerca del bien jurídico
Como es conocido, nuestro Tribunal Federal Constitucional (TFC) En la historia jurídica se puede deducir este entendimiento de bien
nunca ha reconocido que la violación de bienes jurídicos sería presupues- 1
jurídico a partir de la concepción del contrato social desarrollado por los
to de una penalización jurídicamente válida, aunque ha tenido muchas teóricos del Estado de la Ilustración, concepción según la cual los ciu-
oportunidades para hacerlo: en las sentencias sobre la constitucionalidad dadanos trasladan al Estado un poder punitivo solamente en la medida
de la punición de la homosexualidad entre adultos(36), de la posesión de en que sea necesario para garantizar una convivencia pacífica y libre que
hachís [cannabisj(37) y del incesto entre hermanos(38 proteja sus derechos humanos. Puesto que la Ley Fundamental, al igual
). Y las monografías
de LAGODNY(39) y APPEL(40), dedicadas a la relación entre Constitución que la mayoría de las Constituciones europeas, tiene estas bases históricas,
y ley penal, tampoco han podido descubrir una vinculación entre legisla- un entendimiento de bien jurídico basado constitucionalmente tiene que
ción penal y protección de bienes jurídicos. Cuando uno solo se centra en vincularse más con las conquistas de la teoría estatal de la Ilustración que
que una ley penal, al perseguir un objetivo capaz de ser fundamentado de con las concepciones penales de aquel tiempo, que no pueden manifestarse
en la forma de una época determinada.
cualquier forma, para ser compatible con la Constitución, deba ser idó-
neo, necesario y apropiado según el principio de proporcionalidad(41), no En lo expuesto no se trata de una opinión aislada que solo yo defien-
importará la presencia de una lesión de bienes jurídicos, en tanto se ignore do, sino de una concepción muy difundida en la literatura reciente que
su relevancia para la legitimidad de la finalidad perseguida. ya por ello debería ser incluida por el TFC en sus reflexiones. Así, p. ej.,
ScHÜNEmANN( 42) quiere encontrar la fundamentación de un principio de
Pero esta relevancia se vuelve visible cuando uno recuerda la tarea del
Derecho penal en el estado constitucional europeo moderno: debe garan- bien jurídico crítico de la legislación "en el pensamiento fundamental de
tizar, como ultima ratio y respetando todos los derechos fundamentales, limitar el Derecho penal a partir de la idea del contrato social", "tal como
se ha afirmado una y otra vez desde hace alrededor de 250 años y que en
la época actual.., debe desarrollar su máxima eficacia". En la misma línea
se está cuando W0HLERs(43) habla del interés de los miembros de la so-
TFC, tomo 6,p. 389 y ss.; tomo 36, p. 41y ss.
TFC, tomo 90, p. 145 y .ss. ciedad "en garantizar los presupuestos básicos necesarios para desarrollar
En NJW 2008, p. 1137 y ss.
LAGODNY, "Strafrecht vor den Schanken der Grundrechte", 1996.
(441) APPEL, "Verfassung und Strafe", 1998.
(41) SCHT)14EMANN
(nora 8), p. 137 y s.
Así según el "esquema evaluador" de LAGODNY (nota 8), p. 83.
WOPPLERS, GA 2002, p. 15 (16).
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37.
IV. ACERCA DEL PROBLEMA DE LA SUFICIENTE DETERMINACIÓN
su libertad individual", y HEFENDEM.(44) interpreta también los bienes
jurídicos para proteger las condiciones básicas del Estado como presu- Y CAPACIDAD DE RENDIMIENTO DE UN CONCEPTO DE BIEN
puesto para la autorrealización del particular en la sociedad moderna. JURÍDICO PERSONAL BASADO CONSTITUCIONALMENTE
STERNBERG-LLEBEN se manifiesta de manera especialmente decidida en el Una de las principales objeciones contra un concepto jurídico del tipo
sentido que yo persigo(45 ). Al Derecho penal le correspondería la tarea expuesto consiste en que sería demasiado indeterminado. Ya debido a ello
de "aportar su contribución para garantizar los presupuestos personales fracasaría el intento de hacer que la lesión de un bien jurídico constituya
de desarrollo: Derecho penal corno medio para proteger como última el presupuesto de una penalización, y de este modo ponga límites a la
ratio aquellas circunstancias que se manifiestan como presupuestos y potestad interventora del Derecho penal. Así, p. ej., STRATENWERTH(50)
condiciones personales de desarrollo". En consecuencia, él define "el enumera una serie de definiciones de bien jurídico que se pueden encontrar
bien jurídico penal" como "una circunstancia vulnerable, real... que en nuestros manuales y comentarios y, de esta discrepancia y falta de cla-
se manifiesta en la situación histórica como presupuesto y condición ridad abstracta, extrae la consecuencia de que sería "insoluble" la tarea de
personal de desarrollo". encontrar una definición aceptable del bien jurídico. También F1USCH(51)
Esto coincide ampliamente con mi propia definici6n(46), según la expresa que, frente a la "relatividad, extensión e imprecisión del concepto
cual por "bienes jurídicos" se deben "entender todas las circunstancias 'bien jurídico'(...) el balance de éxitos del tópico es más bien humilde".
u objetivos.., que son necesarios para el libre desarrollo del individuo, la Se puede decir que esta concepción es casi dominante, pese a lo cual
realización de sus derechos fundamentales y el funcionamiento de un sis- no es correcta. En lo que concierne a las definiciones de bien jurídico,
tema estatal construido sobre la base de este objetivo". Esto desemboca en debe pensarse que la mayoría de los autores no ha tenido la intención
un "concepto personal de bien jurídico", tal como ha sido desarrollado de formular un concepto de bien jurídico crítico de la legislación, sino
por MARx(47), HASSEmER( 45) y HOHMANN (49), según el cual solamente que parten de un "concepto metódico de bien jurídico"(52), según el
deben reconocerse bienes jurídicos de la generalidad en tanto, en última cual cualquier objetivo legal crearía un bien jurídico. A partir de este
instancia, sirvan a las condiciones de vida de los individuos. Y también punto de vista, ellos han tratado de encontrar lo que es común a todos
hay convergencia con la doctrina liberal de los daños sociales, tal como los tipos. Esto, naturalmente, tan solo podrá dar por resultado una
encontramos preconstruidos históricamente en BEcCARIA, HOMMEL, definición de amplitud ilimitada.
WILHELM VON HUMBOLDL y MILL. Y es que solamente allí donde sea
demostrable un daño real, podrán afectarse las condiciones de existencia Por el contrario, un concepto de bien jurídico tal como aquí se favorece
y desarrollo de las personas. aporta algo relevante(53): este concepto excluye el puro moralismo (p. ej.,
la punibilidad de la homosexualidad entre adultos, acciones sexuales entre
animales y conductas similares), porque con ello no se afectan las posibi-
HEFENDEHL, GA 2002, p. 21(25).
STERNBERG-LIEBEN (nota 8), p. 67. STEATE.NwERni, LH Lencimer, 1998, p. 378.
ROMN, manual sobre parte general (non 12), § 2, n. marg. 7. FMSCI5 (nota 8), p. 217.
.(52) Cfr. al respecto ver ya arriba en non 30.
MARX (non 1).
HASSEMER (nota 6), 2000, p. 160.y SS. (53) Aquí voy a tener que limitarme a una enumeración lacónica y remitir, pan los detalles, a
las exposiciones en mi manual sobre parte general (nota 12), § 2, n. marg. 13-50.
H0131~N, "Das Rechtsgut der Umweltdeate", 1991.
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Claus Roxin Sobre los nuevos desarrollos en el debate acerca del bien jurídico
Edades de desarrollo de nadie, al igual que un paternalismo duro (como jurídico personal deducido a partir de las tareas del Derecho penal. Pero
la punibilidad de la autolesión, de la posesión de drogas para el propio ya un esbozo como ese, contradice la afirmación frecuentemente oída de
consumo, art. 29 de la Ley de estupefacientes, o de la intervención en una boca de los escépticos del bien jurídico, de que el concepto de bien jurí-
autopuesta en peligro de otro que actúa autorresponsablemente: en todos dico tan solo encajaría en tipos en los cuales (como en el homicidio, el
esos casos falta la intervención en los bienes jurídicos de otros). La idea hurto o la estafa) de todos modos sería indiscutible la necesidad de pena,
de bienes jurídicos tampoco permite la pura protección de sentimientos, mientras que en los dificiles casos límite no aportaría resultados valiosos.
según la cual se conminaría con pena ya la provocación no deseada de Los ejemplos enumerados muestran, no obstante, que precisamente en
miradas (p. ej., la pornografía en el art. 184, párrafo 1, N° 6 StGB, o de hechos cuya necesidad de pena no es polémica, un concepto de bien
actos sexuales, en el art. 183a StGB). Tampoco son objeto del Derecho jurídico crítico de la legislación aporta bases argumentativas racionales,
penal las lesiones de tabúes (como ene! incesto entre hermanos, art. 173, mientras que la renuncia a este instrumento de reconocimiento lleva a la
párrafo 2, StGB, o en la negación de hechos históricos según el art. 130, arbitrariedad desorientadora.
párrafo 3 StGB). En ninguno de estos casos se daña a un tercero o a la Precisamente la jurisprudencia del Tribunal Constitucional Federal
generalidad. El que alguien pueda sentirse afectado desagradablemen- nos enseña esto cuando rechaza una conducta lesionadora de bienes ju-
te por tales conductas, no es suficiente para legitimar la punibilidad: rídicos como presupuesto de la punibilidad y, de esta manera, sostiene la
"No forma parte de los presupuestos de desarrollo de la persona el no punibilidad en tres casos especialmente polémicos en los cuales lo correcto
ser molestado en sus conceptos de valores morales personales. Tales hubiera sido negarla: en los casos ya mencionados de la homosexualidad
perturbaciones en el estado de ánimo, en nuestra sociedad desarrollada entre adultos (TFC, tomo 6, p. 389 y ss.), en la posesión de pequeñas
pluralísticamente(...) deben ser toleradas"(54).
cantidades de hachís (TFC, tomo 90, p. 145 y ss.) y en la punibilidad del
Tampoco son bienes jurídicos los objetos de protección de carácter sexo entre hermanos (en NJVV 2008, p. 1137 y ss.).
abstracto inaccesible como la "idoneidad para perturbar la paz pública" que
En el presente marco no es Posible analizar con detalle estos fallos. Pero
suele aparecer en numerosas disposiciones penales(55). Además, tampoco
esto tampoco es necesario porque la insostenibilidad de estas sentencias ha
penan lesiones a bienes jurídicos las leyes penales simbólicas que no impiden
sido expuesta hace mucho por numerosos comentaristas. Las relaciones
daños primarios, sino quieren manifestar un reconocimiento del legislador
sexuales entre hombres incluso han sido despenalizadas por el propio
de determinados valores u objetivos. Finalmente, los llamados bienes ju-
Estado, de manera que, en la actualidad, tiene que resultar incomprensible
rídicos aparentes también son inaptos para fundamentar las disposiciones
la tesis del TFC (tomo.6, p. 389) en el sentido de que atentarían "contra
penales. Estos son conceptos generales tales como la "salud pública" o la
las normas morales" y no podría "ser comprobado claramente que faltaría
"capacidad de rendimiento del ramo de los seguros" que solamente puede
todo interés estatal en penarlas". La resolución sobre el "hachís" ha sido
ser deducida y fundamentar la punibilidad a partir de la adición de cada
refutada, en sus fundamentos, por numerosos autores(56). Y la sentencia
una de las lesiones concretas de bienes jurídicos.
sobre el. incesto ha sido criticada, en su voto singular, por WINFRIED
Precedentemente solo había sido posible un listado veloz de las res- HASSEMER, el único catedrático penalista entre los miembros de la Sala,
tricciones a la punibilidad que se pueden obtener de un concepto de bien
E40 41.
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como bienes jurídicos a partir del momento en que el desarrollo técnico bación(69). Así, p. ej., el si la conducta prevista en el art. 161a StU.15, que
pena la perturbación de una ceremonia de sepelio, pueda ser vista como
e industrial posibilita que las personas puedan destruir las bases naturales
lesiva de bienes jurídicos, depende de si forma parte de los presupuestos
de la vida de la población a través de perjuicios ambientales.
de una libre y pacífica vida común en nuestra sociedad el que el individuo
Luego, la presencia de un bien jurídico depende de presupuestos pueda participar en ceremonias de sepelio de manera digna, de manera
cambiantes. Pero esto no cambia para nada el que la exigencia de una que estas deban poder ser protegidas contra afecciones perturbadoras
lesión de bienes jurídicos, en una situación histórica dada y en el marco mediante el Derecho penal.
de un ordenamiento constitucional acabado, pueda proporcionar pautas
concretas a la legislación penal. Se puede discutir mucho sobre esto, pero existen buenas razones para
ello, de manera que al reconocer correctamente un espacio legislativo discre-
VI. ¿EL CONCEPTO DE BIEN JURÍDICO CRÍTICO A LA LEGISLA- cional, la disposición penal del art. 167a StGB puede ser vista como com-
CIÓN TIENE SOLO RELEVANCIA POLÍTICO-CRIMINAL O TIENE
patible con el principio de protección de bienes jurídicos. Pero del mismo
modo tampoco puede criticarse que el legislador pueda dejar impune, p. ej.,
TAMBIÉN RELEVANCIA CONSTITUCIONAL?
la "perturbación de fiestas de cumpleaños". Precisamente en los tipos que
Por cierto que no debe desconocerse que el legislador tiene un penan las "conductas gravemente escandalosas", si bien serán importantes
gran espacio de discrecionalidad al momento de decidir la cuestión de si por política criminal(70). los argumentos relacionados con el bien jurídico
debería penarse determinada conducta. Esto no solamente rige para el en la discusión a favor o en contra de la punibilidad, no obstante solo raras
problema que nadie discute de si un bien jurídico debería ser protegido veces podrán fundamentar la inconstitucionalidad de una disposición.
por el Derecho penal o por otras regulaciones jurídicas o por medidas
sociopoliticas(67). Entonces, la resolución sobre el incesto tiene plena Entonces, los partidarios de un concepto de bien jurídico crítico de la
razón cuando enuncia(68) que el legislador sería "básicamente libre para legislación se dirigen en primera línea al legislador y elaboran postulados
decidir si determinado bien jurídico, cuya protección le parece esencial, político-criminales sin pretender que sus propuestas, que pueden diferir en
deba serlo precisamente con los medios del Derecho penal y de qué lo particular, tengan carácter vinculante constitucional en todos los casos.
forma eventualmente lo haría". Luego, rige lo siguiente: la doctrina de Esto lo han expresado con toda claridad los defensores de esta concep-
los bienes jurídicos no dice qué lesiones a bienes jurídicos deban ser
ción. Así, SCHÜNEmANN(71) habla de una "pauta normativa", STERNBERG-
prohibidas mediante el Derecho penal, sino qué conductas no deben ser
LIEBEN dice(72): "Si bien las premisas constitucionales han sido dadas
penadas por faltar una violación a bienes jurídicos. al Parlamento por la Constitución, estas(...) no son en amplios aspectos
También se tendrá que reconocer ampliamente al legislador un jurídicamente coercibles. Por ello, éstas son capaces... más bien de surtir
ámbito de discrecionalidad evaluadora al decidir la cuestión de si
una conducta tiene o no carácter lesivo de bienes jurídicos o deba ser
Por el contrario, FELNBERG, en el trabajo mencionado en la nota 14, pretende penar
descartada del ámbito de lo punible por constituir una mera perrur- también algunas perturbaciones en una cierta magnitud, al reconocer, además del "harrn
principie", un "offence principie".
Ofrece mucho material para la reflexión el trabajo de habilitación de HÓR/•TLE (nota 20).
CE al respecto, con más detalles, ROIIN, "Strafrecht. Allgemeiner Teil" (nota 12), § 2,
n. marg. 95 y ss. SCHIINEMANN (nota 8), p. 137.
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