Estas son las 7 maravillas del mundo moderno
Estas son las 7 nuevas maravillas del mundo:
La ciudad de Petra, en Jordania
El Taj Mahal en India
El Machu Picchu en Perú
La pirámide de Chichén Itza en la península del Yucatan en México
El Coliseo de Roma
La Gran Muralla de China
La estatua del Cristo Redentor de Río de Janeiro en Brasil
Petra
Petra es la primera de las siete nuevas maravillas del Mundo Moderno. Esta
ciudad de Jordania, originalmente conocida como Raqmu, es famosa por su
arquitectura excavada en la roca además de por sus avanzado sistema de
conductos de agua. Petra, constituida posiblemente ya en el 312 a.C como la
capital de los nabateos árabes, es un símbolo de Jordania, además de uno de
los principales atractivos turísticos del país, más, desde que en 2007 fuese
elegida como una de las 7 maravillas del mundo moderno.
Taj Mahal
La ciudad de Agra, en el estado Uttar Pradesh de India acoge al segundo de
los monumentos designado como las 7 maravillas del mundo moderno
declarado también como bien Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Se
trata del Taj Mahal, una construcción funeraria levantada en el siglo XVII bajo
encargo del emperador Shah Jahan en honor a su esposa favorita, Mumtaz
Mahal. De hecho, la tumba es la pieza central de un complejo de 42 acres que
incluye una mezquita y una casa de huéspedes además de los jardines.
Machu Picchu
La tercera de la siete maravillas del mundo moderno data del siglo XV. Se trata
de la ciudad inca del Machu Picchu, en la región de Cusco, en Perú. Situada en
la cresta de una montaña a 2.430 metros sobre el nivel del mar, esta
construcción de estilo clásico Inca, que los arqueólogos relacionan con una
finca pensada para albergar al emperador inca Pachacuti, cuenta con tres
estructuras principales, el Inti Watana, el Templo del Sol y la Sala de las Tres
Ventanas, y varios edificios periféricos, de los que gran parte han sido
reconstruidos para dar una mejor idea a los turistas de cómo era la ciudadela
original.
Chichén Itzá
Chichén Itzá también se cuela entre las 7 nuevas maravillas del Mundo
Moderno. Se trata de uno de los principales sitios arqueológicos de la
península de Yucatán, en México que originalmente dio forma a una ciudad
maya de la época precolombina dominada por el templo de Kukulkán, también
conocido como “El Castillo”, nombre con el que lo bautizaron los
conquistadores españoles. Esta construcción sirvió como templo para el dios
Kukulkán y consiste en una pirámide con una serie de terrazas cuadradas con
escaleras que suben desde cada uno de los cuatro lados la misma hasta la
parte superior.
El Coliseo
La quinta de la siete maravillas del del Mundo Moderno está en Roma, la
capital de Italia. Se trata de su construcción más famosa y reconocible: el
anfiteatro Flavio o Coliseo. Esta edificación, la más grande jamás llevada a
cabo en su categoría, data del siglo I y actualmente es una de las más
representativas de la época del Imperio romano así como de la Antigüedad
clásica en su conjunto. Se estima que el Coliseo podría albergar entre 50.000 y
80.000 espectadores, que podían acudir hasta él para ver representaciones
públicas como simulacros de batallas navales o dramas basados en la
mitología clásica así como concursos de gladiaores.
La Gran Muralla china
No escapa de la lista la Gran Muralla China. Esta serie de fortificaciones de
piedra, ladrillo, madera y tierra apisonada que recorre las fronteras históricas
del norte de China construida entre el siglo V a. C y el XVI sirvió como
protección para el imperio chino en la histórica frontera del norte del país, en la
que fue recurrentemente atacado por nómadas de Mongolia y Manchuria.
Cristo Redentor
Por último, aunque no menos importante en la clasificación, es también una de
las 7 nuevas maravillas del Mundo Moderno la escultura del Cristo Redentor de
Río de Janeiro, en Brasil. Se trata de una estatua de 30 metros de altura y
diseño Art Decó que corona la montaña de Corcovado representando el cuerpo
de Jesús de Nazaret. Esta obra, inaugurada en 1931 fue fruto del trabajo de las
manos del escultor polaco-fracés Paul Landowski y el ingeniero brasileño
Heitor da Silva Costa, quienes también contaron con la colaboración del
francés Albert Caquot y del artista rumano Gheorge Leonida, siendo este último
responsable de la cara de Cristo.
