Colegio Bíblico

Campus Piedras Negras

Materia: Iglesia Saludable

“Tómele el pulso a su Iglesia”

Profesora: Hno. Daniel Llamas

Alumno: Juan David Escorcia Almazan

Fecha: 04-octubre-2023
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El autor llama signos vitales a los cinco compromisos claves y las cinco

funciones claves que toda iglesia debería implementar como base a la hora de

considerar comenzar a estructurar de forma correcta su funcionamiento.

Los cinco compromisos claves son:

1. Una visión clara e inspiradora: una de las cosas que muy a menudo suelen faltar

dentro de la Iglesia es la falta de dirección, es decir, saber dónde estamos y a donde

queremos ir, eso es un punto que no se debe seguir pasando por alto, sino que antes de

comenzar los planes debemos preguntarnos como es que nos vemos o mejor dicho hacia

qué dirección queremos ir. Como bien lo dice el autor una visión es la idea clara de un

futuro deseado, aunado a ello, se sugiere buscar un lema que pueda ayudar no solo a la

iglesia, sino a los lideres mismos a tener la idea más clara sobre su visión. Una visión

hará que el equipo y la iglesia completa se enfoquen en lo quiere llegar a ser, y aún pese

a las circunstancias, pese a los desafíos los ayudara a mantener un ánimo firme, y una fe

ambiciosa en el plan que se han trazado. Todo líder con una visión debería entender que

el fracaso es siempre una parte esencial del crecimiento, el fracaso dentro la visión sirve

para corregir aquellas cosas que representan una deficiencia dentro de esta. Ahora bien,

una visión nunca debe quedarse como un sueño, sino que se le debe poner nombre, pies

y cabeza, y más importante, iniciar con ella.

2. Un liderazgo movilizador: Un liderazgo sano, asegurará un vínculo sano entre los

lideres y aquellos a quien este lidera, el llamado a ser líder de la Iglesia, debe ser

siempre un tema vital dentro de todos aquellos quienes sirven dentro de esta, ya que un

líder siempre debe comprometerse a comparar su carácter personal con aquel que esta

descrito en 1ª Tesalonicenses 2:2-12 donde Pablo como debe ser un carácter de un buen

líder. Y a su vez todo líder, como sugiere el autor, debe tener una clara visión personal,

ya que esta refleja el cómo cada persona entiende su llamado personal de parte de Dios,
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y esta, siempre ayudara a que todo líder pueda entender cómo encaja su llamado con las

necesidades de la Iglesia. Todo líder debe ser capaz de influenciar a las personas, ya que

todo líder llegara hasta donde su influencia los lleve. Tomando como ejemplo el mejor

líder que se haya visto a lo largo de los tiempos, Jesús, mostrando ejemplo en poder

tener una visión clara, un equipo al que se le delego trabajo, y sobre todo una evidente y

profunda relación con el Padre.

3. Un cuerpo ministrante motivado: Dentro de los compromisos claves, poder ayudar a

desarrollar sus dones, esto claro está en sentido de poder servir a la congregación de

manera unida, es menester que todo líder enfocado en cumplir su misión pueda motivar

una ayuda genuina proveniente del cuerpo entero, entender que la mejor manera de

entregar un servicio efectivo, es funcionando en el sentido de equipo, y no buscar hacer

iglesia de forma individual. Es importante que el líder entienda que conocer los dones y

habilidades del pueblo y utilizarlos para la extensión de la misión, es parte del modelo

de Dios para su iglesia. Así como infundir en la congregación una actitud misional, una

actitud enfocada en la presencia del Reino de dios en nuestro medio, mientras que la

iglesia se enfoca en reflejar la actitud de Cristo, esa actitud que nos quita del centro y

hace a cada uno consiente de que a pesar de que la cultura diga que debemos velar por

nosotros, como iglesia buscamos velar por los demás.

4. Administración apropiada de los recursos: El trabajo de todo líder no se centra

solamente en la enseñanza o predicación, ya que como comúnmente se dice, el maestro

no avanza si el alumno o discípulo no aprende, y una de las labores del líder que nos

enseña el libro es poder ayudar a las personas dentro de la congregación a sr buenos

mayordomos de los bienes que el Señor nos ha dado, esa mentalidad sin duda ayudara a

que pueda llevarse a cabo una administración apropiada de los recursos que tenemos, no

solo como iglesia, sino también como personas, esto entendiendo que Dios es el creador
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del cielo y de la tierra y el y nadie más que él es el legítimo dueño del cosmos, y los

seres humanos solo somos los administradores de la creación; una de las cosas que

enseña el libro es poder entender que cuando dentro de la Iglesia se habla de recursos,

no es necesariamente solo dinero, sino que menciona tres T, tiempo, talento y tesoros de

la Iglesia, y como lideres los ministros deben ser los primeros en ser ejemplos de cómo

invertir de manera correcta el tiempo, y a su vez, ser sabios al identificar el tiempo del

que disponen los demás para que pueda hacer un uso correcto y provechoso del tiempo

en general. las finanzas nos son parte menos importante en este tema, sino que mientras

más claras sean estas, más probable será de que la gente esté más dispuesta a dar de lo

que tienen, mientras más trabajo se vean dentro del reino de Dios, mientras más claros

seamos, más seguridad habrá del trabajo.

5. Integración entrete texto y contexto: el último de los compromisos, es poder hacer

una sinergia entre el contexto cultural y el texto o la palabra de Dios, solo así la iglesia

podrá comunicar de manera correcta la palabra de Dios, de manera que las personas que

escuchen la palabra de Dios, puedan entender clara el mensaje que la iglesia está

comunicando. Una congregación saludable se nutre a sí misma porque lee y estudia

unida la escritura, la meta siempre debe ser permitir a la escritura que nos forme en

lugar de forzarla a que encaje en nuestros deseos, sin importar lo noble que estos puedan

ser. Aunado a ello, la iglesia puede comenzar a ser contracultura, comenzando a tener

nuestra propia cultura como iglesia, comenzar a tener relaciones saludables que puedan

apoyar a las personas dentro de la iglesia, mientras más tiempo pasemos como familia

en la fe, más desarrollaremos lo que el autor llama subcultura. De esa manera, podremos

implementar métodos para que la iglesia tenga un peso en la comunidad. Incluso el

autor tiene una cita de Keller que vale la pena destacar “Keller sugiere que la
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conceptualización es un proceso de tres pasos: Entrar en la cultura, desafiar a la cultura

y apelar a los oyentes. Estos pasos se entrecruzan, pero permanecen distintos.” 1

Luego de haber mencionado los compromisos claves que deben existir dentro de la

iglesia, lo que también el autor llama los primeros cinco signos vitales, el autor pasa a

abordar cinco funciones clave de una iglesia saludables.

Las cinco funciones claves son:

1. Un Testimonio convincente (La función evangelística): El trabajo principal de la

iglesia es anunciar las buenas nuevas de Jesucristo, no solo de palabra sino también de

obra, es invitar a la gente a formar parte de la obra de Dios, la iglesia debe entender que

dentro del trabajo principal es sembrar, pero dentro de la tarea, también es comprender

que uno planta, otro riega pero el crecimiento el pertenece completamente a Dios, esa

secuencia no es algo que solo haya sido vigente en el la Biblia, sino que es algo que está

vigente hasta nuestros días, no dejando de lado la expectativa de crecer, sino esperando

y confiando en lo que Dios puede hacer, necesitamos confiar que el Señor seguirá

llamando a sus elegidos y los añadirá a su rebaño, la iglesia es el instrumento que Dios

usa para encontrar a los perdidos, y una vez que son encontrados, darles discipulado a

los mismos. Y aunque muchas personas relacionan el evangelismo como si de vender

algún producto se tratara, debemos entender que como la Iglesia del Señor debemos

ofrecer algo más que solo un discurso de ventas, por ello dentro de esta misma idea

debe haber una claridad completa acerca de ¿A dónde queremos llegar con nuestro plan

de evangelismo? La respuesta a esta pregunta, nos ayudara a poder tener una meta, y

por ende un camino trazado. Es importante compartir con la iglesia entera la premisa de

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Koster Tim, Tómele el pulso a su Iglesia, Editorial red de multiplicación, E.U. 2014, pág. 100
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que “No nos quedamos sentados plácidamente esperando que Cristo vuelva y lo

resuelva todo. Tenemos una misión, propósito y significado.” 2

2. Discipulado integral: La iglesia es quien equipa a las personas para seguir a Cristo, le

ayuda para que vean claramente la voluntad de Dios en sus vidas. Tal como la primera

iglesia, debemos centrar toda nuestra enseñanza en Jesús. Toda iglesia que busque tener

ministerios saludables debe si o si, tener un énfasis importante en el discipulado, si bien

es importante buscar métodos para que las personas sean atraídas a la Iglesia una vez

que han depositado su confianza en ello, se deben buscar herramientas para que sean

discípulos genuinos de Cristo, para lograr esta meta, se deben implementar métodos

para que todos los interesados, tenga un fundamento solido en cuanto a su conocimiento

acerca de Cristo, no solo de palabra, sino que puedan experimentar en sus vidas, la obra

redentora de Cristo, un discipulado genuino, buscara mover a personas a una relación

solida con Cristo en base a la enseñanza completa. Esto sin duda llevará a las personas a

adquirir un compromiso con no solo la iglesia, sino con el Señor mismo, eso incluirá

sacrificios, planes y deseos de parte de cada creyente.

3. Servicio compasivo: Tal como en la iglesia primitiva, el servicio que la Iglesia ofrece

debe ser completo, en el sentido de que se debe velar por las necesidades que las

personas tengan, ese es el ejemplo que tenemos de la Iglesia primitiva, la cual, viendo

las necesidades que pudieran generarse dentro de los creyentes, no decían nada para sí

mismos, sino que era vendido para que pudiera ser compartido de manera unánime entre

las necesidades, así de manera similar los cristianos de la actualidad deben entender que

si bien las obra no tienen cupo para la salvación, no dejan de ser parte importante en la

vida del cristiano, como iglesia es imperativo poder tener compasión por las

necesidades que puedan existir dentro de la comunidad, fuera y dentro de la Iglesia,

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Koster Tim, Tómele el pulso a su Iglesia, Editorial red de multiplicación, E.U. 2014, pág.125
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como lo menciona el autor ese es el sentido de la iglesia, estamos llamados a ser parte

activa de la misión que Jesús dejo.

4. Una comunidad que cuida y ofrece bienvenida: si bien dentro de las deficiencias que

muchos se atreven a señalar acerca de la primera iglesia, también.es importante señalar

que existía dentro de ellos una hermandad que generaba interés unos por los otros, y es

un sentir que dentro de muchas iglesias e ha perdido, no es difícil encontrar iglesias en

las cuales no existe una hermandad que traspase las 4 paredes del edificio de reunión, y

un distintivo dentro de la iglesia del primer siglo es que ella entendía que la fortaleza

radicaba en la unida, ya que esto es un distintivo de una correcta relación primero con el

hijo y luego con el Padre. Esa unidad es mucho mayor a sentimiento de amor fraternal,

eso fue algo que la iglesia entendió de manera plena, y no dejo que una emoción

pasajera, sino que se dedico al compromiso profundo, y fue algo que llevaron consigo

en medio de los tiempos buenos y malos. Eso es a lo que dentro del ámbito cristiano se

conoce como Koinonia, que es compartir en unidad cristiana cosas en común, algo que

no debe olvidar un cristianos es el hecho de que al haber sido formados a la imagen y

semejanza de un Dios trino, nosotros también fuimos creados para habitar en

comunidad y de manera solitaria, dentro del Nuevo Testamento encontramos varios

pasajes que nos instan a amarnos los unos a los otros, pero definitivamente es otra área

donde la iglesia debe ser contracultura, ya que hoy en día muchas personas motivan a

vivir dentro de una cultura solitaria e individualista, que busca en base de ideologías e

inventos aislarnos del resto de las persona. Y esa tarea se suma a las muchas que ya

existen dentro de las tareas del líder, ya que un líder que busca una iglesia saludable

debe saber como motivar a las personas a vivir tiempos de Koinonia, y más importante

aún poder motivar a los nuevos creyentes a vivir de manera similar. La idea de la

comunión siempre resultara difícil, más cuando comprendemos que una iglesia esta
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conformada por personas con distintos sentires, pensamientos, trabajos, y formas de ser

diferente, esto si o si, causara que tarde o temprano existan conflictos, es por eso que

como iglesia debemos estar preparados para cuando los conflictos lleguen a nosotros, el

autor menciona una serie de pasos que pueden ayudar a resolver este tipo de situaciones,

por ejemplo, el primer paso es identificar el problema, y una vez identificado, debemos

seguir el modelo Bíblico que nos ofrece Mateo 18:15-17, en el que primero

conversamos con el responsable de tal conflicto, esperando el o ella o ellos puedan

escuchar y prestarse a solucionar de manera eficaz el problema, todo en busca de una

buena comunión como hijos de Dios, la cita final de esta sesión de libro debería poder

ser leída por cada iglesia “Hay muchas cosas que uno puede hacer solo… pero ser

cristiano no forma para de la lista… el amor al hermano es inseparable del amor a Dios”
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5. Adoración y Oración Dinámicas: una comunidad dinámica, obtiene enfoque y

vitalidad a través de su adoración y alabanza a Dios, esta enseñanza es también parte

importante de los aprendizajes a resaltar de la Iglesia del primer siglo que nos deben

servir como modelos a seguir, hoy en día existe un gran debate acerca de la verdadera

adoración, y es que al no encontrar un equilibrio muchas iglesias se han ido por el lado

de volverse completamente anti adoración, pero debemos entender que nada puede estar

más lejos de la realidad, y tal como lo dice el autor, debe existir un punto medio, pero

siempre centrado en la verdadera adoración a Dios.

El libro "Tómele el Pulso a su Iglesia" de Tim Koster es una obra que aborda de manera

detallada y profunda la salud espiritual y el crecimiento de una iglesia. A lo largo de sus

páginas, el autor ofrece una guía exhaustiva para evaluar y revitalizar la vida de la

comunidad eclesiástica. El tema general del libro se centra en la necesidad de

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Koster Tim, Tómele el pulso a su Iglesia, Editorial red de multiplicación, E.U. 2014, pág.189
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comprender y diagnosticar la salud espiritual de una iglesia para luego tomar las

medidas necesarias para su fortalecimiento y crecimiento. En este reporte de lectura,

exploraremos en detalle los aspectos clave que se destacan en la obra de Koster y cómo

estos elementos conforman el tema general del libro.

Uno de los pilares fundamentales del libro es la importancia de llevar a cabo un

diagnóstico preciso de la salud espiritual de una iglesia. Koster compara esta tarea con

la de un médico que toma el pulso de un paciente. Para él, es esencial que los líderes y

miembros de la iglesia tengan una comprensión clara de la vitalidad espiritual de su

congregación. Esto implica una evaluación integral que va más allá de las cifras de

asistencia a los servicios. Koster sugiere que la calidad de la adoración, la enseñanza, la

comunión y el compromiso de los miembros son elementos clave a tener en cuenta.

Otro punto esencial abordado en el libro es la necesidad de un liderazgo efectivo en la

iglesia. Koster argumenta que los líderes deben ser personas comprometidas con su fe,

que tengan una visión clara y la capacidad de guiar a la congregación hacia el

crecimiento espiritual. Además, enfatiza la importancia de la formación de nuevos

líderes dentro de la iglesia para garantizar una sucesión saludable y sostenible en el

liderazgo. También centra su atención en la importancia de involucrar activamente a los

miembros en el ministerio y el servicio de la iglesia. Koster defiende la idea de que una

iglesia saludable no depende exclusivamente de un puñado de líderes para llevar a cabo

todas las actividades. En cambio, promueve empoderar a los miembros para que utilicen

sus dones y talentos en beneficio de la comunidad. Esto crea un sentido de pertenencia y

compromiso más profundo entre los miembros.

Un elemento crucial para la salud espiritual de la iglesia, según Koster, es la

comunicación efectiva. Esto implica una comunicación clara de la visión, metas y

actividades de la congregación, así como una escucha activa a las preocupaciones y

necesidades de los miembros. Una comunicación abierta y honesta fomenta un ambiente

de confianza y permite a la iglesia ajustar su enfoque según las circunstancias

cambiantes.

Uno de los temas importantes que también se destaca en el libro es la importancia de

evaluar constantemente la efectividad de los ministerios y programas de la iglesia.

Koster sugiere que las iglesias deben estar dispuestas a adaptarse y cambiar en función

de las necesidades cambiantes de la comunidad y de sus miembros. La rigidez puede ser

perjudicial para el crecimiento y la vitalidad espiritual de la iglesia. La evaluación

continua permite identificar áreas de mejora y ajustar estrategias y enfoques para

alcanzar los objetivos espirituales de la congregación.

"Tómele el Pulso a su Iglesia" de Tim Koster aborda de manera integral y profunda la

salud espiritual y el crecimiento de una iglesia. A través del diagnóstico, el liderazgo

efectivo, la participación activa de los miembros, la comunicación efectiva y la

evaluación continua, los líderes de la iglesia pueden trabajar para fortalecer la

comunidad y fomentar el crecimiento espiritual. Estos principios son esenciales para

mantener una iglesia vibrante y relevante en un mundo en constante cambio. Al tomar el

pulso de la iglesia de manera regular y aplicar estos principios, las congregaciones

pueden prosperar y cumplir su misión de servir a Dios y a su comunidad. Así, "Tómele

el Pulso a su Iglesia" ofrece una guía valiosa para evaluar y mejorar la salud espiritual

de una iglesia, lo que, en última instancia, conduce a una congregación más fuerte y

comprometida en su servicio y adoración.

La comunicación es un tema recurrente en el libro de Koster. Destaca la importancia de

una comunicación clara y efectiva tanto dentro de la iglesia como con la comunidad

circundante. Una comunicación transparente con los miembros de la iglesia ayuda a

mantener a todos informados sobre las actividades, los cambios y las necesidades de la
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comunidad. Además, la comunicación hacia afuera de la iglesia es crucial para atraer a

nuevos miembros y para establecer relaciones sólidas con la comunidad.

Koster resalta la necesidad de fomentar la participación activa de los miembros en la

vida de la iglesia. Esto va más allá de simplemente asistir a los servicios dominicales.

Se trata de involucrarse en ministerios, grupos pequeños y actividades de servicio en la

comunidad. La participación activa no solo fortalece la comunidad de la iglesia, sino

que también permite que los dones y talentos de los miembros se utilicen de manera

efectiva para el avance del Reino de Dios.

Por último, el libro aborda la importancia de que la iglesia se adapte a los cambios

culturales y sociales. Koster advierte que las iglesias que se aferran demasiado a las

tradiciones sin considerar el contexto cultural actual pueden enfrentar desafíos en su

crecimiento y relevancia. Sin embargo, esto no significa comprometer la verdad bíblica,

sino encontrar formas creativas y contextualizadas de compartir el mensaje del

Evangelio en un mundo en constante cambio.