Romanos 1:1-3“Pablo, siervo de Jesucristo, llamado a ser apóstol, apartado para el

evangelio de Dios, que él había prometido antes por sus profetas en las santas
Escrituras. Acerca de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era del linaje de David
según la carne.”

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La palabra “evangelio” proviene del griego “euangelion”, que a su vez, proviene de la
composición de dos términos: “eu” (“εὐ”), bueno/a; y “angelion” (“αγγέλιον”), noticia,
mensaje, dando, por lo tanto, “la buena noticia”.

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Anécdota: Cuenta un Misionero, que justo antes de salir a cumplir con un compromiso
de predicación en África, un vecino le preguntó con cierto desprecio: “¿Por qué va a
África a llevar su religión? Ellos tienen sus propias religiones. ¿Por qué molestarlos
con la suya?”. Él le respondió que no iba a ninguna parte a predicar “religión” sino que
iba a predicar el mensaje del evangelio de Dios. De no ser así, No cruzaría la calle –y
mucho menos, el océano– para lograr que alguien se interesara en la religión. Pero estoy
dispuesto a ir a cualquier lugar del mundo a predicar el Evangelio de Dios.

Hay miles de religiones en el mundo, pero solo un evangelio. El evangelio no es una

iniciativa inteligente del hombre; El evangelio es exclusivo, es único, su origen y esencia
son divinos porque proviene de Dios. Pablo afirma que el evangelio no es según hombre,
no es de invención humana, sino que lo conoció y lo recibió por revelación de Jesucristo
*Gálatas 1:11-12*

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“Que él había prometido antes por sus profetas en las santas Escrituras.” Romanos 1:2
El evangelio no es algo nuevo, tampoco es una lista de reglas, es la promesa de salvación
hecha a los padres. Hechos 13:32. Y nosotros también os anunciamos el evangelio de
aquella promesa hecha a nuestros padres…
Promesa hecha a Adán *Génesis 3:15* Lo que significa que al primer hombre pecador
le brillo una luz de esperanza por la promesa de Dios. Promesa hecha a Abraham, “en
tu simiente serán benditas todas las naciones.” Génesis 12:3.

Era una promesa anunciada y conocida por los profetas, tanto que Pedro escribió:
1Pedro 1:10-12 Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros,
inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué
persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual
anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos.
A éstos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros, administraban las
cosas que ahora os son anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el
Espíritu Santo enviado del cielo.
El evangelio es la proclamación del cumplimiento de la promesa de salvación dada
por Dios, un mensaje no de condenación, porque el mundo ya estaba condenado
bajo el juicio de la ley de Dios.

Contrario es el evangelio a la predicación de Juan el Bautista, que era con fuego

consumidor, con el aventador en su mano y el hacha puesta a la raíz de los árboles, El
evangelio es buenas nuevas de salvación. Toda la esencia del mensaje de Jesús son
buenas noticias de Dios y nos revelan un Dios que nosotros como hombres jamás
hubiéramos podido Soñar, pues él supera toda expectativa, todo ensueño, toda
imaginación, ninguno hay como él, ni nada existe que pueda comparársele…

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“…acerca de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era del linaje de David según la
carne,” Romanos 1:3 Lucas 2:10-11 “Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí
os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo:
ñ La buena noticia, el
evangelio es… Cristo Jesús.
Jesucristo es el evangelio, por eso los discípulos todos los días, en el templo y por las
casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo. Hechos 5:42

 ¿
Palabra Fiel y digna de ser recibida por todos, ú
a los pecadores. 1 Timoteo 1:16.

Esta buena noticia es para todos especialmente para los que se consideran pecadores.
No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento. Lucas 5:32

Una parte de la doctrina que hemos aprendido de la Biblia es que el hombre por
naturaleza se encuentra perdido y en la ruina total. Nuestra miseria según lo dice la
palabra de Dios, era demasiado grande, de otra manera nunca hubiéramos necesitado
a "Dios como nuestro Salvador." Si ser librados del pecado lo hubiera podido HACER
algún otro ser, entonces no sería tan grave el pecado. Pero si el propio Dios tuvo que
abandonar su elevada habitación, y morar aquí para ser nuestro Salvador, entonces
nuestra ruina era terrible en extremo y no sólo por nuestra naturaleza, sino también
por nuestras prácticas. Era tan terrible nuestra enfermedad, que sólo Dios podía
curarnos y nadie más,
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Y “que
Cristo Jesús vino al mundo para Salvar a los pecadores”
  ¿
Hechos 13:38-39 “Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os
anuncia perdón de pecados, y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no
pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree.”

El Evangelio de Dios nos habla de su favor inmerecido y su misericordia.

No serían buenas noticias decir que Dios es justo; pues, en primer lugar, esas no son
noticias, sabemos que Dios es justo.

Que Dios castiga el pecado y premia la justicia no es ninguna noticia; y si fuera una
noticia, no sería una buena noticia, pues todos hemos pecado, y sobre la base de su
justicia todos debemos perecer.

Pero si es una noticia, y una buena notica, que el Juez de todo está preparado para
perdonar el pecado y para justificar al impío.
Esta sí es una buena noticia para nosotros los pecadores, que el Señor borrará nuestro
pecado, nos cubrirá con su justicia, y nos dará su favor, y no como premio por haber
hecho algo, sino solamente por gracia.

“Porque por gracia sois salvos, por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es
don de Dios.” ¿Cuál es la gracia, cual es el Don? La salvación; y el medio para recibirla
es la fe. Que buen anuncio, que gran noticia, perdón de pecados y justificación por fe.

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1Corintios 15:1-4 “Ahora, amados hermanos, permítanme recordarles la Buena
Noticia que ya les prediqué. En ese entonces, la recibieron con gusto y todavía
permanecen firmes en ella. Esa es la Buena Noticia que los salva si ustedes siguen
creyendo el mensaje que les prediqué, a menos que hayan creído algo que a principio
de cuentas nunca fue cierto. Yo les transmití a ustedes lo más importante y lo que se
me había transmitido a mí también. Cristo murió por nuestros pecados tal como dicen
las Escrituras. Fue enterrado y, al tercer día, fue levantado de los muertos, tal como
dicen las Escrituras.

La base del evangelio es la muerte, sepultura y resurrección de Cristo. Porque, aunque

el propósito de su manifestación ha sido la Salvación, esta debía ser efectuada bajo
ciertos lineamientos, ciertos parámetros establecidos por Dios; donde la pasión de
Cristo, su sufrimiento y el castigo de nuestra paz sobre él, satisface la justicia de Dios,
donde en su derramamiento de sangre el pecado es perdonado y donde la resurrección
certifica que el sacrifico para el perdón del pecado fue aceptado para nuestra
justificación Rom 4:25. Cristo fue recibido por Dios como ofrenda y sacrificio en olor
fragante. Efe 5:2.
Esto es tan cierto que El apóstol Pablo presenta seis consecuencias desastrosas en caso
de que la resurrección no sea una realidad.

1) La predicación de Cristo sería absurda.

Y si no resucitó, ó y vana es la fe que en Dios hemos
depositado. 1Corintios 15:14.

2) La fe en Cristo sería inútil.

Y si no resucitó, vana es nuestra predicación y que en Dios hemos
depositado. 1Corintios 15:14.

3) Todos los testigos y predicadores de la resurrección serían mentirosos.

Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él
resucitó a Cristo, al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan. Porque si
los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó; 1Corintios 15:15-16

4) Nadie sería redimido del pecado.

y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados. 1Corintios
15:17

5) Todos los creyentes que murieron en Cristo están perdidos.

Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron. 1Corintios 15:18

6) Los cristianos serían las personas más dignas de lástima en el universo.

Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración
de todos los hombres. 1Corintios 15:19.

No obstante, después de presentar estas consecuencias HIPOTETICAS sin la

resurrección de Cristo, introduce nuevamente la verdad del evangelio.

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