Tema 2 Clínica de La Salud

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TEMA 2 - LA CONDUCTA DE SALUD Y ENFERMEDAD

1. CONDUCTA DE SALUD
CONDUCTA DE SALUD
Harris y Guten (1979) definieron la conducta de salud como “una conducta realizada por un individuo,
independientemente de su percepción de su estado de salud, con el fin de proteger, promover o mantener
su salud”. Ya sea intencional o no, la realización de una conducta de salud puede prevenir enfermedades y
también puede prevenir la progresión de una enfermedad una vez aparecida.

Según esta definición, la conducta de salud podría incluir la conducta de personas «con mala salud». Por
ejemplo, un individuo que ha padecido un ataque al corazón puede cambiar su dieta para ayudar a controlar
su enfermedad, igual que una persona sana puede cambiar su dieta para reducir su riesgo futuro de un
ataque al corazón.

Otras razones:
- Control peso
- Apariencia física
- Aumento relaciones sociales
- Placer

Matarazzo (1984) elaboró aún más las definiciones de la conducta de salud, distinguiendo entre lo que
denominaba «patógenos conductuales» e «inmunógenos conductuales».
 PATÓGENO CONDUCTUAL: práctica que se considera perjudicial para la salud; por ejemplo, fumar.
 INMUNÓGENO CONDUCTUAL: práctica considerada protectora de la salud; por ejemplo,ejercicio físico.

A pesar de estas distintas definiciones, la investigación sobre la conducta de salud ahora generalmente
adopta la perspectiva de que la conducta de salud es aquello que está relacionado con la situación de salud
de un individuo, independientemente de su salud actual o de sus motivaciones. Para poner a prueba estas
relaciones es necesario recurrir a estudios longitudinales, destacando en este sentido el estudio del
Condado de Alameda.

Al comparar las diferencias de diversas medidas de línea base entre las personas que han desarrollado una
enfermedad y las que siguen estando sanas, este estudio ha permitido identificar factores conductuales
clave relacionados con la buena salud y la longevidad. Estos factores han sido denominados «los siete de
Alameda»:

 Dormir 7-8 horas al día


 No fumar
 Consumir no más de 1-2 bebidas alcohólicas al día Los beneficios de realizar este tipo de
conductas fueron acumulativos: cuantas
 Hacer ejercicio físico de forma habitual más conductas realiza un individuo, más
 No picar entre comidas probabilidades tiene de vivir.
 Desayunar
 No tener un exceso de peso de más del 10%

CONDUCTAS DE RIESGO PARA LA SALUD


Desde la perspectiva de la psicología de la salud, la comprensión del hecho de que la conducta es
predictiva de la mortalidad sólo es parte de la historia. También necesitamos saber qué conducta se
relaciona con qué enfermedades. Si queremos evitar que las personas tengan conductas de riesgo,
también tenemos que comprender los factores psicológicos y sociales que contribuyen a que se realice una
conducta de riesgo o a que se evite una conducta preventiva.

Conductas relacionadas con elevados niveles de mortalidad en los países desarrollados:


- Enfermedades coronarias: tabaco, dieta rica en colesterol, falta de ejercicio físico.
- Cáncer: tabaco, alcohol, dieta, conducta sexual.
- Infarto cerebral: tabaco, dieta rica en colesterol, alcohol.
- Neumonía, gripe: tabaco, falta de vacunación.
- VIH/SIDA: prácticas sexuales no seguras/sin protección.
DIETA INADECUADA
Qué y cómo comemos, desempeña un papel importante en nuestra salud a largo plazo. Nuestra ingesta y
nuestra conducta dietética (por ejemplo, picotear, darse atracones) también pueden constituir un riesgo
indirecto de enfermedad mediante su efecto sobre el peso y la obesidad.

La dieta no solo implica qué y cómo comemos, sino también...


- Como lo cocinamos (papillote, horno, frito…)
- Cuando lo comemos (picoteo, atracones…)
- Con quien lo comemos (solo, acompañado…)

CONSUMO DE SUSTANCIAS
Ranking sustancias psicoactivas más utilizadas en el mundo:

1. Cafeína

2. Alcohol

3. Tabaco

CONDUCTA SEXUAL DE RIESGO


Aparte de los embarazos no deseados, las relaciones sexuales sin protección acarrean varios riesgos:
infecciones, como clamidias y VIH.
Algunos datos:
VIH 39 millones / VPH 90% personas mundo
3074 embarazos no deseados año 2020
8,96 por cada 1000 mujeres interrupciones embarazo

¿Qué son las ITS?


Son infecciones que se transmiten si tienes relaciones sexuales sin protección. Las más frecuentes son la
sífilis, la gonorrea, las chlamydias, las verrugas genitales, el herpes genital, la hepatitis B y el VIH.

Las prácticas sexuales no son


exclusivamente una conducta individual
sino una conducta que se produce en el
contexto de las relaciones entre dos
individuos. El sexo es fundamentalmente
una conducta «social» (aunque el
consumo de alcohol también se puede
considerar «social», el acto físico de
beber, en sí mismo, es individual). Como
tal, los investigadores que analizan las
prácticas sexuales y qué es lo que influye
sobre las mismas, y los educadores de la
salud que intentan promocionar prácticas
sexuales más seguras, como la
utilización de preservativos, tienen que
superar retos singulares.
EJERCICIO FÍSICO
El ejercicio físico se suele considerar como protector de la salud, reduciendo el riesgo de un individuo de
desarrollar problemas y enfermedades, tales como las cardiovasculares, cáncer y osteoporisis.

Se acepta por lo general que el ejercicio físico es un medio para reducir el riesgo personal de desarrollar
una amplia variedad de problemas de salud graves; además, está relacionado con una disminución
significativa de la mortalidad por todo tipo de causas tanto entre hombres como entre mujeres.

Una vez definida la relación entre conducta y consecuencias para la salud, es importante preguntarse
«cómo» actúa esta relación. En cuanto al ejercicio físico y la reducción del riesgo de enfermedades
cardiacas, parece que la realización regular de ejercicio físico fortalece el músculo del corazón y aumenta la
eficiencia cardiaca y respiratoria; también tiende a reducir la presión sanguínea y los individuos que hacen
ejercicio de forma regular tienen menos tendencia a acumular grasa corporal.

¿Qué consideramos ejercicio físico?


150-300 min. Actividad física aeróbica moderada o 75-150 min. Actividad física aeróbica intensa
(Caminar rápido, Bailar Jardineria... ) (Footing, bici, natación, deportes de equipo.. )

+
Actividades de fortalecimiento muscular que ejerciten todos
los grupos musculares principales 2 o + días a la semana

CHEQUEOS MÉDICOS
Hay dos objetivos generales para hacerse chequeos médicos:

1. PARA DETECTAR SEÑALES ASINTOMÁTICAS TEMPRANAS → TRATAMIENTO PRECOZ DE LAS ENFERMEDADES


Los chequeos realizados con el objetivo de detectar enfermedades se basan en un modelo biomédico que
considera que, al identificar anormalidades en las células o el funcionamiento orgánico, se pueden ofrecer
tratamientos antes de que aparezcan o avancen los síntomas de la enfermedad. Se trata fundamentalmente
de una prevención secundaria, en tanto en cuanto se ofrece una determinada prueba a los individuos
identificados como de riesgo moderado a elevado de desarrollar una enfermedad en función de factores
como su historial familiar o su edad.

Ejemplo: chequeos para la prevención del cáncer de mama (mamografías); cáncer cervical (citología);
chequeos y pruebas específicas durante el embarazo

2. PARA IDENTIFICAR LOS FACTORES DE RIESGO DE ENFERMEDAD → PERMITIR UN CAMBIO DE CONDUCTA


El segundo objetivo general de los chequeos, el de detectar factores de riesgo en aquellos individuos que se
cree que están sanos, parte del principio de la vulnerabilidad. Con esta forma de proceder se pretende
identificar el nivel de riesgo personal de un individuo de padecer enfermedades en el futuro (y, en el caso de
las pruebas genéticas, también el nivel de riesgo de sus descendientes) para poder asesorar e informar
sobre las formas de minimizar los futuros riesgos para la salud o, en su caso, para planificar más análisis y
tratamientos.

Ejemplo: chequeo de riesgos cardiovasculares (medición y monitorización del colesterol y de la presión


sanguínea); chequeo de los ojos para detectar diabetes, glaucoma o miopía; pruebas genéticas,...

VACUNACIÓN
La vacunación es la forma más antigua de inmunización, por la que se proporciona inmunidad a un individuo
introduciendo una pequeña cantidad de un antígeno en el cuerpo (ya sea por vía oral, intramuscular o
subcutánea), lo que desencadena el desarrollo de anticuerpos a ese antígeno específico.

Las vacunaciones contra enfermedades infecciosas son responsables de la erradicación de enfermedades


que en siglos anteriores habían provocado una morbilidad y mortalidad generalizadas (reducción importante
de la mortalidad y la morbilidad).
HIGIENE DEL SUEÑO
Los 10 mandamientos de la higiene del sueño para adultos, creados por la World Sleep Society
1. Establecer un horario regular para irse a dormir y despertarse.
2. Si tiene la costumbre de tomar siestas, no exceder los 45 minutos de sueño diurno.
3. Evitar la ingestión excesiva de alcohol 4 horas antes de acostarse, y no fumar.
4. Evitar la cafeína 6 horas antes de acostarse. Esto incluye café, té y muchos refrescos, así como
chocolate.
5. Evitar los alimentos pesados, picantes o azucarados 4 horas antes de acostarse. Un refrigerio ligero
antes de acostarse es aceptable.
6. Hacer ejercicio regularmente, pero no justo antes de acostarse.
7. Usar ropa de cama cómoda y acogedora.
8. Encontrar una configuración de temperatura de sueño cómoda y mantener la habitación bien
ventilada.
9. Bloquee todo el ruido que distrae y elimine la mayor cantidad de luz posible.
10. Reserve su cama para dormir y el sexo, evitando su uso para el trabajo o la recreación general.
2. MODELOS DE CONDUCTA SALUDABLE
Las primeras teorías de por qué cambiamos nuestra conducta se basaban en el supuesto simplista de que
INFORMACIÓN → CAMBIO DE ACTITUD → CAMBIO DE CONDUCTA

Se concluyó que estos supuestos eran muy ingenuos. El mero suministro de información, por ejemplo sobre
los beneficios de dejar de fumar o el valor de una dieta baja en colesterol, puede, o no, cambiar las actitudes
de una persona hacia esta conducta e, incluso si las actitudes se hacen más negativas, no es inevitable que
ello influya sobre el cambio de conducta. Aunque muchas campañas de educación de sanidad anteriores, y
a veces actuales, siguen partiendo de esta premisa simplista, se han propuesto varios modelos como
explicaciones de la conducta de salud y del cambio de conducta.

MODELO DE CREENCIAS SOBRE LA SALUD (MCS)


Este modelo propone que la probabilidad de que una persona realice determinada conducta de salud
depende de factores demográficos: por ejemplo, clase social, sexo, edad y una serie de creencias que
pueden surgir de determinada clave para la acción, interna o externa. Estas creencias incluyen las
percepciones de la amenaza y la evaluación de la conducta en cuestión, añadiéndose posteriormente las
claves para la acción y la motivación para la salud.

EJEMPLOS
 Percepción de la amenaza:
Creo que las enfermedades cardiovasculares son una enfermedad grave cuyo riesgo aumenta
cuando se tiene exceso de peso: gravedad percibida.
Creo que tengo exceso de peso: susceptibilidad percibida.

 Evaluación conductual:
Si pierdo peso mejorará mi estado de salud: beneficios percibidos (del cambio).
Cambiar mi tipo de alimentación y de preparación cuando también tenga que dar de comer a toda
una familia va a ser difícil y, posiblemente, más caro: barreras percibidas (al cambio).

 Claves para la acción (añadido en 1975; Becker y Maiman):


Ese programa de televisión que vi hace poco sobre los riesgos de la obesidad para la salud me ha
preocupado (externa).
Normalmente me quedo sin aliento en cuanto hago cualquier cosa, así que tal vez debería pensar
en serio en ponerme a dieta (interna).

 Motivación para la salud (añadido en 1977; Becker, Haefner y Maiman).


Para mí es importante mantenerme sano.

*El modelo de creencias sobre la salud (original, y las incorporaciones posteriores en cursiva).
TEORÍA ACCIÓN RAZONADA Y TEORÍA CONDUCTA PLANEADA
Aunque el MCS es predominantemente un modelo cognitivo de la conducta de salud derivada de la teoría
de la utilidad subjetiva esperada [es decir, los individuos son activos y generalmente toman decisiones de
forma racional, decisiones influidas por la utilidad percibida (utilidad para los individuos) de determinadas
acciones o conductas , la teoría de la acción razonada (TAR) y, posteriormente, la teoría de la conducta
planeada (TCP) se conocen como los modelos de cognición social]. Estos modelos suponen que la
conducta social está determinada por las creencias de una persona sobre la conducta en un contexto social
dado, y por sus percepciones y expectativas sociales y no simplemente por sus cogniciones o actitudes.

TEORÍA DE LA ACCIÓN RAZONADA


Este modelo supone que los individuos se comportan de forma orientada a metas y que se sopesan de
forma racional las consecuencias de sus acciones (expectativas de resultados) antes de tomar la decisión
sobre la realización de la conducta o no. El modelo intenta analizar y desarrollar los procesos psicológicos
implicados en la creación de una relación entre la actitud y la conducta al incorporar influencias sociales
más generales y la necesidad de creación de la intención.

Se cree que la conducta está determinada proximamente por la intención conductual, que a su vez está
influida por la actitud de individuo hacia la conducta-objeto (creencias sobre la expectativa de resultado) y la
percepción de la presión social respecto a la conducta (por ejemplo, los amigos y mis padres realmente
quieren que deje de fumar) (lo que se conoce como norma subjetiva).

El grado en que quieren cumplir o estar en línea con las preferencias o normas de los demás se conoce
como motivación para cumplir (me gustaría agradar a mis padres y amigos). El modelo afirma que la
importancia de las actitudes de una persona hacia la conducta es ponderada con respecto a las creencias
sobre la norma subjetiva, por lo que una persona que tiene una actitud negativa hacia el cambio de
conducta (no me gusta ponerme a régimen) puede desarrollar no obstante una intención positiva al cambio
cuando su norma subjetiva promueve la dieta y cuando quiere cumplir con las personas que le importan (por
ejemplo, todos mis amigos comen de forma más saludable que yo, me gustaría ser más como ellos).

La intención conductual se considera el determinante proximal de la conducta, y refleja tanto la motivación


del individuo para comportarse de determinada manera, como el esfuerzo que el individuo está preparado a
hacer para realizar esa conducta.

En la actualidad hay pocos estudios que utilicen este modelo (porque se ha ampliado y desarrollado con la
más potente teoría de la conducta planeada); sin embargo, la amplia gama de estudios que sí que utilizaban
la TAR confirmó la importancia de las actitudes y las normas subjetivas para explicar la intención, y de la
intención para predecir la conducta posterior.
TEORÍA DE LA CONDUCTA PLANEADA
Para mejorar la capacidad del modelo de abordar la conducta no volitiva, se amplió la TAR para incluir el
concepto del control conductual percibido, lo que pasó a conocerse como la teoría de la conducta planeada.

Se define el control conductual percibido como la creencia de una persona de que tiene el control sobre su
propia conducta en determinadas situaciones, incluso cuando afronta determinados obstáculos (por
ejemplo, creo que me resultará fácil no fumar incluso si voy al bar por la tarde). El modelo también proponía
que el control conductual percibido influiría directamente sobre la intención y, así, indirectamente sobre la
conducta.

También se consideraba que era posible que existiera una relación directa entre el control conductual
percibido y la conducta si las percepciones del control eran precisas, lo que significa que, si una persona
cree que tiene el control sobre su dieta, puede muy bien tener la intención de cambiarla y, posteriormente,
hacerlo, pero si la preparación de la alimentación está, de hecho, en manos de otra persona, el cambio de
conducta es menos probable incluso si se tiene una intención positiva).

Las propias creencias sobre el control conductual percibido están influidas por muchos factores, incluyendo
la conducta previa y los éxitos y fracasos anteriores respecto a la conducta en cuestión, y, así, el constructo
control conductual percibido es muy parecido al de autoeficacia. Por ejemplo, una persona que nunca ha
intentado dejar de fumar antes puede tener menores creencias sobre el control conductual percibido que
otra que ha tenido éxito dejando de fumar anteriormente y que, por tanto, puede creer que le resultará
relativamente fácil volver a hacerlo otra vez.

MODELOS POR ETAPAS O TRANSTEÓRICO DE LA SALUD


Los modelos por etapas, consideran que los individuos se encuentran en «etapas discretas ordenadas» y
cada una denota una mayor inclinación a cambiar el resultado que la etapa anterior.

Este modelo fue desarrollado por Prochaska y di Clemente (1984) para abordar el cambio conductual
intencional, y fue aplicado inicialmente al abandono del hábito de fumar aunque estos autores han analizado
ahora gran variedad de conductas en sus trabajos para validar la existencia de «etapas de cambio».
ETAPAS DEL CAMBIO
Las etapas del cambio propuestas por el modelo transteórico son fases de preparación motivacional y se
destacan a continuación, utilizando como ejemplo la conducta dietética:

Una persona que no está pensando realmente en someterse a un régimen dietético, ni


PRECONTEMPLACIÓN tiene la intención de cambiar la ingesta de alimentos en los próximos seis meses,
puede que no considere que tiene un problema de peso.
Por ejemplo, «creo que tengo que perder algo de peso, pero todavía no» refleja la
CONTEMPLACIÓN sensibilización sobre la necesidad de perder peso y de pensar en hacerlo.
Generalmente se evalúa como la planificación de cambiar en los próximos seis meses.
Una persona está dispuesta a cambiar y fijar metas como imponerse una fecha de inicio
PREPARACIÓN para el régimen (en los próximos tres meses). La etapa incluye pensamiento y acción, y
los individuos definen planes específicos sobre el cambio.
ACCIÓN Por ejemplo, una persona empieza a comer fruta en vez de galletas, cambio de la
conducta manifiesta.
MANTENIMIENTO Sigue con su cambio en la dieta, resiste la tentación.
Aunque las etapas anteriores son las cinco que más comúnmente se mencionan, también hay:
Cuando el cambio de conducta se ha mantenido durante un periodo adecuado para
TERMINACIÓN que la persona no sienta la tentación de recaer y crea en su total autoeficacia para
mantener el cambio.
di Clemente y Velicer (1997) reconocen que la recaída (cuando la persona regresa a su
RECAÍDA patrón de conducta anterior y vuelve a una etapa previa) es frecuente y se puede
producir en cualquier etapa. Por tanto, no se trata de un periodo adicional al final del
ciclo como alternativa a la terminación.

Los individuos no pasan necesariamente de forma paulatina de una etapa a otra. Por ejemplo, algunas
personas pueden volver atrás desde la preparación a la contemplación y permanecer ahí durante cierto
tiempo, incluso meses o años, antes de volver a la etapa de preparación y pasar con éxito a la acción.

Para otras, la acción puede fallar, puede que nunca logren el mantenimiento, y la recaída es común. Por
tanto, el modelo permite un «reciclaje» de una etapa a otra y, a veces, se conoce como un modelo «en
espiral». Generalmente se considera que las dos primeras etapas están definidas por la intención o la
motivación, la etapa de preparación combina criterios intencionales y conductuales (volición), mientras que
las etapas de acción y mantenimiento son puramente conductuales.

Para ayudar a comprender los factores que influyen sobre la progresión a través de las etapas, el modelo
destaca los procesos psicológicos que se considera que están en juego en las distintas etapas (siendo
algunos procesos importantes en más de una etapa). Estos procesos incluyen las actividades manifiestas o
encubiertas que realizan los individuos para ayudarles a progresar, buscando, por ejemplo, el apoyo social y
evitando situaciones que «eliciten» la conducta, así como procesos más «experienciales» por los que
pueden pasar los individuos, emocional y cognitivamente, como la reevaluación propia o el aumento de la
concienciación.

La percepción de las barreras y los beneficios, o «pros y contras» también se encontró que diferían entre las
distintas etapas; por ejemplo, un individuo en la etapa de contemplación se centrará probablemente tanto en
los beneficios como en las barreras del cambio, pero se dará más importancia a las barreras (por ejemplo,
«incluso si estoy más sano a largo plazo, lo más probable es que engorde si dejo de fumar»), mientras que
una persona que esté en la etapa de preparación se centrará probablemente más en los beneficios del
cambio (por ejemplo, «incluso si engordo a corto plazo, merecerá la pena empezar a sentirse mejor»). El
valor relativo entre los pros y contras se conoce como el de balance decisional.

GENERALIDADES EN LOS MODELOS


• Importancia de las expectativas para el cambio.
• Auto-eficacia como factor clave para el cambio.
• Importancia de las actitudes y creencias en salud.
• Normas sociales, amigos, familia, estructura social.
3. LA CONDUCTA DE ENFERMEDAD
La conducta de enfermedad es “el modo en que las personas perciben, evalúan e interpretan las
sensaciones que provienen de sus cuerpos (signos y síntomas)”.

Conductas tales como verbalizaciones de malestar, visitas al médico, toma de medicación,


permanencia en cama, confinamiento en el domicilio, baja laboral, etc. forman parte de la conducta
de enfermedad.

“Rol de enfermo” (sick role), un tipo de rol definido


por una serie de derechos y deberes que nuestra
sociedad occidental adjudica a los enfermos. Así,
estos tienen derecho a ser eximidos de las
responsabilidades sociales habituales y a no ser
considerados responsables de la situación que están
viviendo. De la misma manera, los enfermos están
obligados a considerar su estado como indeseable (y
por tanto, desear mejorar) y a buscar ayuda
profesional y cooperar con ella en el proceso de
curación” (Parsons, 1982)

CONDUCTA ANORMAL DE ENFERMEDAD


“La persistencia de un modo inapropiado o desadaptativo de percibir, evaluar y actuar en relación al estado
de salud de una persona, a pesar de que el médico (u otros agentes sociales adecuados) haya ofrecido una
explicación razonablemente lúcida de la naturaleza de la enfermedad y del curso apropiado del tratamiento
que debe ser seguido, con oportunidades para la discusión, negociación y clarificación con el paciente,
basándose para ello en la evaluación de los parámetros de funcionamiento del sujeto (biológico, psicológico
y social) y teniendo en cuenta la edad y bagaje educativo y sociocultural del individuo” (Pilowski, 1993)

TRASTORNOS RELACIONADOS CON LA CONDUCTA DE ENFERMEDAD


Trastorno de síntomas somáticos y trastornos relacionados:
 Trastorno de síntomas somáticos
 Trastorno de ansiedad por enfermedad
 Trastorno de conversión
 Trastorno facticio

PERCEPCIÓN DE LOS SÍNTOMAS


FACTORES PSICOLÓGICOS :
 Introspección: Observación que una persona hace de su propia conciencia o de sus estados de
ánimo para reflexionar sobre ellos.

 Autoconciencia: Separación que hace el hombre de sí mismo respecto al mundo objetivo, toma de
conciencia de su relación con el mundo, de su propio ser como persona, de su conducta, de sus
actos, pensamientos y sentimientos, de sus deseos e intereses.

 Interocepción: percepción del estado interno de nuestro organismo.

 Conciencia corporal: la suma de todas las sensaciones y sentimientos que conciernen al cuerpo.
MODELO SIMPLIFICADO DE LA PERCEPCIÓN DE LOS SÍNTOMAS :

Características de las señales corporales que aumentan la probabilidad de percibir un síntoma:


Los signos corporales son sensaciones físicas que pueden ser, o no, síntomas de una enfermedad. Se
pueden detectar e identificar los signos; por ejemplo, la presión arterial es un signo, mientras que los
síntomas son lo que se experimenta y, como tales, son mucho más subjetivos. Los síntomas suelen ser el
resultado de cambios fisiológicos con propiedades físicas (somáticas) pero el individuo sólo detectará
algunos. Los que reciben atención y se interpretan como síntomas serán probablemente:

 Dolorosos o perturbadores: si una señal corporal tiene consecuencias para una persona, por
ejemplo, si no se puede sentar con comodidad, si tiene problemas de visión o si ya no puede
realizar una actividad rutinaria, la persona estará más motivada para percibirlo como síntoma .

 Novedosos: se ha demostrado que las valoraciones subjetivas de la prevalencia influyen


significativamente (1) sobre la gravedad percibida de un síntoma, y (2) sobre si la persona buscará
atención médica. La percepción de un síntoma «novedoso» (ya sea para uno mismo o que se crea
que no ha sido experimentado por otros) tiene más probabilidades de ser considerado indicio de
algo raro y grave, mientras que la experimentación de un síntoma que se considera común lleva a
suponer que la gravedad es menor, por lo que la probabilidad de buscar información o atención
sanitaria es menor. Por ejemplo, el cansancio entre los estudiantes puede quedar normalizado e
interpretado como una señal de las noches pasadas estudiando o de fiesta.

 Persistentes: hay más probabilidades de que se perciba una señal corporal como un síntoma si
persiste más tiempo del que se considera normal o si continúa dicha señal a pesar de haberse
automedicado.

 Enfermedad crónica preexistente: tener una enfermedad crónica aumenta el número de otros
síntomas percibidos y referidos. Las enfermedades anteriores o actuales experimentadas tienen una
fuerte influencia sobre la somatización (es decir, sobre la atención a los estados corporales)
PERCEPCIÓN DE ENFERMEDAD
Las representaciones de la enfermedad surgen en cuanto la persona experimenta un síntoma o recibe una
etiqueta diagnóstica, ya que el individuo empieza a buscar en su memoria para intentar dotar de sentido la
situación actual, recuperando esquemas de enfermedades preexistentes que sirven de punto de
comparación.

Existen cinco temas consistentes en el contenido de las representaciones de la enfermedad.

1. IDENTIDAD: El síntoma forma parte de una enfermedad conocida.


Las variables que identifican la presencia o ausencia de enfermedad. Las enfermedades se identifican por
su etiqueta, señales y síntomas concretos. Por ejemplo, «Tengo temblores y me duelen las articulaciones:
creo que tengo la gripe».

2. CONSECUENCIAS: Efecto de la enfermedad sobre la vida


El efecto percibido de la enfermedad sobre la vida: impacto físico, emocional, social, económico o una
combinación de factores. Pueden ser a corto o a largo plazo. Por ejemplo, «Debido a mi enfermedad no voy
a poder ir al gimnasio hoy», o «Debido a mi enfermedad voy a tener que optar por la jubilación anticipada»

3. CAUSA: Creo que puede ser por la enfermedad


La(s) causa(s) percibida(s) de la enfermedad. Pueden ser biológicas (por ejemplo, gérmenes), emocionales
(por ejemplo, estrés, depresión), psicológicos (por ejemplo, actitud mental, personalidad), genéticos o
ambientales (por ejemplo, contaminación), o debido a la propia conducta del individuo (por ejemplo, exceso
de trabajo, fumar). Algunas de estas causas se pueden solapar, por ejemplo, estrés y tabaquismo, y otras
pueden solaparse con las atribuciones de las causas tras la aparición de la enfermedad.

4. TIEMPO: Agudo o crónico


El periodo de tiempo percibido del desarrollo y duración de la enfermedad. Puede ser agudo (o a corto
plazo, sin consecuencias a largo plazo), crónico (o a largo plazo), o episódico (o cíclico). Por ejemplo, «Creo
que mi resfriado sólo va a durar unos tres o cuatro días», «El dolor viene y se va».

5. CAPACIDAD DE CURACIÓN O CONTROL


Grado en que los individuos perciben que pueden controlar, tratar o limitar ellos mismos, u otros, la
progresión de su enfermedad. Por ejemplo, «si me tomo esta medicina, me ayudará a reducir los síntomas»
o «el médico podrá curarme».

INTERPRETACIÓN DE LOS SÍNTOMAS


Los síntomas son algo más que etiquetas para los diversos cambios que se pueden producir en el cuerpo;
no sólo derivan de las clasificaciones médicas de las enfermedades, sino que también pueden influir en la
forma en que pensamos, sentimos y nos comportamos. La cultura influirá sobre los significados que
adscriben los individuos a los síntomas, al igual que la experiencia previa, las creencias y las
representaciones de las enfermedades.

Lo que opinan los individuos sobre la salud depende tanto de su experiencia anterior con las enfermedades
como de su comprensión de los conocimientos médicos, ya fueran expertos o legos. Por tanto, los
individuos aprenden sobre la salud de la misma manera que sobre cualquier otra cosa: mediante la
experiencia, tanto personal como de los otros. Los individuos «caen enfermos en contra de un conjunto de
creencias sobre lo que constituye una buena y una mala salud»

Al percibir una sensación física como un «síntoma», ¿qué lleva a una persona a creer que está enferma?
 Experiencias previas
 Anormalidad o rareza de la sensaciones
 Expectativas de padecer o no las sensaciones (Ej. semana anterior a la menstruación, ejercicio
físico intenso…)
 Valoración de la amenaza en función de la parte del cuerpo a la que afectan las sensaciones
 Sexo, edad, personalidad…
 Estereotipos sobre las enfermedades (ej. Enfermedad cardiaca)
4. BÚSQUEDA DE AYUDA
 Ignorar los síntomas y esperar a que remitan;
 Buscar consejos de terceros;
 Automedicarse;
 Acudir a un profesional de la salud
El 70-90% de la población general tiene una condición médica diagnosticable y tratable de los que sólo
el 40% busca ayuda médica.

COMPORTAMIENTO DE DEMORA EN LA BÚSQUEDA DE AYUDA SANITARIA


El comportamiento de demora hace referencia a los retrasos de un individuo en buscar ayuda médica frente
a las demoras del propio sistema de atención sanitaria.

¿NECESITO ¿MERECE LA PENA


RECONOCIMIENTO ¿ESTOY ENFERMO? SÍ SÍ BÚSQUEDA
AYUDA TENIENDO EN SÍ
DE LOS SÍNTOMAS DE AYUDA
PROFESIONAL? CUENTA LOS
COSTES?

NO NO NO

DEMORA DE LA DEMORA DE LA DEMORA DE LA


VALORACIÓN ENFERMEDAD UTILIZACIÓN

Tiempo para Tiempo entre el Tiempo entre la


interpretar los reconocimiento de decisión de solicitar
síntomas como que uno está atención médica y la
indicio de enfermo y decidir recepción de la
enfermedad. buscar ayuda misma.
médica.

DEMORA TOTAL

La duración de cada periodo de demora variará probablemente en función de los distintos síntomas y
enfermedades siendo, por ejemplo, mayor la demora de valoración para síntomas personales embarazosos
como una hemorragia rectal, si bien es probable que la demora de la cita sea breve. Por tanto, resulta
evidente que la valoración es crucial para que progrese el proceso de búsqueda de ayuda, sobre todo
cuando los síntomas son potencialmente mortales.

FACTORES DEMOGRÁFICOS
INFLUENCIAS CULTURALES: las demoras en la búsqueda de ayuda médica profesional pueden ser
particularmente frecuentes entre los miembros de las culturas cuyas creencias sobre las causas de la
enfermedad no se «ajustan» a la visión biomédica de la enfermedad y del tratamiento (buscaran curas
relevantes para su cultura).

EDAD: Los jóvenes y los mayores utilizan los servicios sanitarios con más frecuencia que otros grupos de
edad. La aparición severa de síntomas agudos tiende a dar lugar a una búsqueda de atención médica más
rápida, sobre todo entre las personas de mediana edad, mientras que las personas mayores suelen acudir
al médico más rápido independientemente de la gravedad de los síntomas y a pesar del hecho de que
inicialmente se atribuyen comúnmente muchos síntomas al envejecimiento. En lo concerniente a la
búsqueda de ayuda médica para un niño sintomático, la decisión suele provenir de un progenitor o cuidador,
aunque esto cambia de alguna manera al final de la adolescencia.

SEXO: Las mujeres suelen utilizar los servicios sanitarios más que los hombres. Esto puede reflejar una
mayor atención prestada a los estados internos y a las señales corporales, la socialización por sexo o el
hecho de que las mujeres utilizan mejor sus redes de apoyo social y de expertos no profesionales las cuales
promueven el comportamiento de búsqueda de atención sanitaria.
RAZONES ECONÓMICAS: Para algunos, buscar refugio en el rol de enfermo tras un diagnóstico formal puede
constituir una opción atractiva si permite al individuo liberarse de sus responsabilidades y obligaciones
habituales. Sin embargo, algunas personas no quieren que se las declare enfermas por las repercusiones
sociales que esto podría tener (si estoy enfermo, ¿cómo puedo ir a esa fiesta? Si estoy enfermo, ¿quién se
va a ocupar de mis hijos?); las repercusiones profesionales (si me doy de baja voy a tener el doble de
trabajo cuando vuelva. Si estoy de baja, ¿se quedará otra persona con mi puesto de trabajo?); o por las
repercusiones económicas (no me puedo permitir el lujo de reducir mi sueldo y perder las horas extra
estando enfermo; no me puedo permitir el lujo de pagar las pruebas médicas o las medicinas).

TRAS LA PRIMERA CONSULTA


El 25% de los pacientes, tras la primera consulta tardan en seguir las prescripciones médicas, hacerse las
pruebas recomendadas o acudir a los profesionales a los que se ha derivado → Curiosidad satisfecha o
evitación.

Miedo a la evaluación y al tratamiento.

RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE
Satisfacción del paciente que se siente bien tratado (el paciente no sabe de medicina, sólo de buen o mal
trato). Sino, búsqueda de otras fuentes de curación.

Consecuencias:
• para la supervivencia del enfermo
• económicas en cuanto al gasto sanitario
• legales: litigios por prácticas inadecuadas

BASES EN LA RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE:

En la consulta participa tanto el paciente como el profesional sanitario. Ambos pueden contribuir al proceso
de comunicación y de toma de decisiones. Sin embargo, el carácter de la reunión implica que el profesional
sanitario suele tener más poder sobre el proceso de la consulta que el paciente. Este diferencial de poder
puede verse exacerbado por el comportamiento del paciente y sus expectativas sobre la consulta.

Todos los profesionales sanitarios tienen una responsabilidad significativa en la determinación del estilo y el
resultado de la consulta. Esto puede dar lugar a distintos enfoques, como el de «el médico sabe lo que es
mejor», el enfoque centrado en el profesional identificado por Byrne y Long (1976), o un enfoque más
centrado en el paciente defendido por autores como Pendleton (1983).

MODELO ACTIVO-PASIVO MODELO COOPERACIÓN MUTUA

Características del enfoque centrado en el profesional: Características del enfoque centrado en el paciente:

El profesional sanitario mantiene el control de la entrevista. El profesional identifica y tiene en cuenta las opiniones
del paciente así como las suyas propias.
Plantea preguntas para obtener información. Se trata de
preguntas directas, de respuesta cerrada (se permiten El profesional sanitario escucha de forma activa al
respuestas del tipo sí/no) y referidas a hechos médicos (u paciente y responde consecuentemente.
otros hechos relevantes).
La comunicación se caracteriza por la promoción por
El profesional sanitario toma la decisión y el paciente acepta parte del profesional de una participación activa y el
esta decisión de forma pasiva. intento de identificar las ideas que tiene el paciente sobre
qué es lo que va mal y cómo se puede tratar.

El paciente es un participante activo en el proceso.

Participación mutua de decisiones


A lo largo de la última década se ha ido produciendo un cambio paulatino del enfoque centrado en el
profesional al enfoque centrado en el paciente. Cada vez más se considera que tanto el profesional de la
salud como el paciente son colaboradores en las decisiones que hacen referencia a la atención sanitaria del
paciente.

PROBLEMAS DE COMUNICACIÓN
 Estructura sanitaria (1º generalista → especialista)
 Tiempo de espera
 Tipo de asistencia (publica, concertada, privada)
 Diferencias individuales
 Experiencia previa enfermedad
 Severidad enfermedad
 Ansiedad
 Síntoma vs causa
 Estereotipos
 Burnout: Falta de tiempo
 Uso de jerga técnica
 Autoridad
 Despersonalización del paciente
 Creencias sobre modelo clínico: biomédico o biopsicosocial
 Estereotipos
 Diferencias individuales

COMUNICAR MALAS NOTICIAS


Estrategia de Buckman o estrategia de las 6 etapas:
1. Hay que dar la noticia en persona, en privado, con el tiempo suficiente y sin interrupciones.
2. Hay que averiguar qué es lo que sabe el paciente sobre su diagnóstico.
3. Hay que averiguar qué es lo que quiere saber el paciente.
4. Hay que compartir la información : es necesario empezar con una «señal de advertencia»
y después transmitir una pequeña cantidad de información en un lenguaje sencillo a un
ritmo que pueda seguir el paciente.
5. Hay que reaccionar a los sentimientos del paciente, incluyendo reconocerlos y validar su
reacción emocional ante la noticia.
6. Hay que planificar y hacer un seguimiento : incluyendo planificar los siguientes pasos,
resumir lo que se ha dicho, identificar las fuentes de apoyo y concertar una cita de
seguimiento próxima.

ADHERENCIA Y COMPROMISO
El tratamiento eficaz de muchos problemas médicos suele requerir que la persona que padece una
enfermedad desempeñe un papel activo en cualquier programa de tratamiento. El requisito más frecuente
es que se tome la medicación prescrita en los momentos y cantidades suficientes para proporcionar una
dosis terapéutica. Puede que no sea una tarea fácil.
¿Te has tomado la medicación de la forma prescrita?
¿Has seguido la dieta?
¿Has realizado los ejercicios de rehabilitación?
50-70% olvido
¿Has hecho las tareas que te han mandado en terapia? 30-50% no adherencia intencional

MODELO COGNITIVO DE LEY (1988):


EVALUAR LA ADHERENCIA
Independientemente de lo que surja durante la consulta, los pacientes tienen que estar motivados y tienen
que recordar que deben tomar su medicación o seguir cualquier otra recomendación en su ajetreada vida
cotidiana. Cualquier intervención diseñada para maximizar el seguimiento del tratamiento han de tener en
cuenta estas cuestiones del contexto.

MEJORAR LA ADHERENCIA
Existen tres estrategias de la consulta que pueden aumentar los conocimientos sobre el problema y el
seguimiento de cualquier tratamiento recomendado:
1. Maximización de la satisfacción con el proceso de tratamiento.
- Toma decisiones activa
- Mismo profesional sanitario
- Modelo biopsicosocial
- Revisar fármacos/terapia
2. Maximización de la comprensión de la enfermedad y de su tratamiento.
- Fomentar participación activa en consulta
3. Maximización del recuerdo de la información proporcionada
- Información por escrito
- Auto-registros
- Horarios cómodos para la medicación
- Recordatorios
- Refuerzo uso de medicación
- Apoyo social

ENFERMEDAD CRÓNICA Y CALIDAD DE VIDA


¿QUÉ ES LA CALIDAD DE VIDA?
En términos generales, se puede definir la calidad de vida como la evaluación que hace un individuo de su
experiencia vital general en determinado momento (calidad de vida global), surgiendo el término «calidad de
vida relacionada con la salud» para hacer referencia a las evaluaciones de las experiencias vitales y cómo
se ven afectadas por la enfermedad, los accidentes o los tratamientos. Por tanto, la calidad de vida
relacionada con la salud tiene que ver con «niveles óptimos de funcionamiento mental, físico, social y del
papel desempeñado (por ejemplo, laboral, paternal, cuidador), incluyendo las relaciones, las percepciones
de la salud, la buena forma física, la satisfacción vital y el bienestar.
Evaluación calidad de vida: WHO-QOL: Evalúa 6 dominios, salud física (energía, dolor, sueño…), salud
psicológica (autoestima, memoria…), nivel de independencia, relaciones sociales, relaciones con el entorno
(seguridad, cuidado del hogar…), espiritualidad/creencias personales.

HOSPITALIZACIÓN
“De un lugar donde ir a morir, a un lugar donde podemos sanar”

Miedo al dolor
Miedo a la muerte
Desconcierto ante el entorno hospitalario
Fastidio por la restricción de libertades y trato infantil
Dependencia, indefensión, pasividad

HOSPITALIZACIÓN INFANTIL
ESPECIALMENTE TRAUMÁTICA
- Miedo al personal sanitario
- Separación padres Entre el 20-36% tienen reacciones adversas
- Dificultades jugar con otros niños

Esto genera:
• Ansiedad: lo más común. Ante la separación de los padres (los más pequeños), la oscuridad,
personal sanitario…

• Problemas comportamentales: comportamientos regresivos, dependientes, enuresis, miedo


extremo, rabietas…

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