La ronda campesina de Juningue recibió una concesión de 635 hectáreas para conservar la biodiversidad del Gran Mirador de Juningue, que alberga especies amenazadas como el mono tocón y es una fuente de agua para Moyobamba. La concesión protegerá las aves endémicas, plantas como el cedro colorado y la quebrada Juninguillo durante 40 años renovables.
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La ronda campesina de Juningue recibió una concesión de 635 hectáreas para conservar la biodiversidad del Gran Mirador de Juningue, que alberga especies amenazadas como el mono tocón y es una fuente de agua para Moyobamba. La concesión protegerá las aves endémicas, plantas como el cedro colorado y la quebrada Juninguillo durante 40 años renovables.
La ronda campesina de Juningue recibió una concesión de 635 hectáreas para conservar la biodiversidad del Gran Mirador de Juningue, que alberga especies amenazadas como el mono tocón y es una fuente de agua para Moyobamba. La concesión protegerá las aves endémicas, plantas como el cedro colorado y la quebrada Juninguillo durante 40 años renovables.
La ronda campesina de Juningue recibió una concesión de 635 hectáreas para conservar la biodiversidad del Gran Mirador de Juningue, que alberga especies amenazadas como el mono tocón y es una fuente de agua para Moyobamba. La concesión protegerá las aves endémicas, plantas como el cedro colorado y la quebrada Juninguillo durante 40 años renovables.
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San Martín: crean concesión de conservación que protegerá la
biodiversidad de Moyobamba El Gran Mirador de Juningue conserva especies consideradas bajo algún grado de amenaza, hermosos paisajes y los afluentes de la quebrada Juninguillo, fuente de agua para los más de 120 mil habitantes de Moyobamba.
Los cerros verdes del Gran Mirador de Juningue –área
nombrada así por la espectacular vista que da del Valle del Alto Mayo– ahora se encuentran protegidos bajo la modalidad de concesión para la conservación. Este es un sueño cumplido para la ronda campesina del caserío de Juningue porque ahora podrán resguardar de mejor manera la rica biodiversidad de esta zona.
El Gran Mirador de Juningue, concesión otorgada por 40
años renovables, abarca 635.46 hectáreas de bosques húmedos ubicados al margen izquierdo del río Mayo, a solo 40 minutos de Moyobamba.
Bosques de Juningue. Foto: Ampa
Estos bosques, ricos en biodiversidad, albergan especies de
aves endémicas como el saltarín pintado, un ave recientemente reportada en Perú, la tangara de vientre negro y la moscareta de mishana. También, aves migratorias como el zorzal de Swainson y la piranga escarlata. Y especies representativas como el gallito de las rocas. La presencia de estas y otras especies de aves dotan al lugar de un gran potencial para actividades como el avistamiento de aves.
La
concesión también alberga especies
endémicas de flora como el cedro colorado y la famosa uña de gato, además de otras que se encuentran bajo algún grado de amenaza, como el mono tocón de San Martín, una especie en peligro crítico de extinción.
Servicios Ecosistémicos: fuente agua potable
Uno de los principales objetivos que impulsaron esta iniciativa, fue proteger los afluentes de la quebrada Juninguillo, importante fuente de agua para la ciudad de Moyobamba. Por ello, los impulsores de esta concesión tienen previsto trabajar en alianza con la EPS Moyobamba, a fin de asegurar el control y vigilancia de las cabeceras de estos cursos de agua. Otro de los objetivos de conservación del Gran Mirador de Juningue es la umsha, una palmera representativa de la selva y elemento central en la celebración de la emblemática fiesta de San Juan. Por ello, con la conservación y manejo sostenible de la umsha se ayuda a mantener el vinculo entre naturaleza y cultura en la Amazonía.
Esta área es considerada un paraíso para quienes gustan del turismo de naturaleza, pues además de tener potencial para el avistamiento de aves, albergar paisajes y vistas maravillosas, también se encuentran en sus bosques imponentes caídas de agua.
¿Qué es una concesión para la
conservación? Las concesiones para la conservación son una modalidad de otorgamiento de derechos a personas naturales o jurídicas con el fin que se desarrollen proyectos relacionados a la conservación, principalmente aquellos relacionados a la investigación, educación, protección o al aseguramiento de los servicios que brinda el bosque.
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