Lectura 11 - Pueblo y Territorios Indígenas
Lectura 11 - Pueblo y Territorios Indígenas
Lectura 11 - Pueblo y Territorios Indígenas
a la Luz del
Censo 2011
Créditos
Publicado por:
Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC)
Comité organizador:
Jorge Barquero Barquero. CCP-UCR*
Arodys Robles Soto. Centro Centroamericano de Población (CCP-UCR)*
Jacqueline Castillo Rivas. Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS)
Evelyn Gamboa Díaz. Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS)
Randall Chavarría Aguilar. INEC.*
Doris González Mosquera. INEC*
María Elena González Quesada. INEC*
Elizabeth Solano Salazar. INEC*
Greivin Barboza Retana. Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica (MIDEPLAN)
Miguel Gutiérrez Saxe. Programa Estado de la Nación (PEN)*
Natalia Morales Aguilar. PEN*
Jorge Vargas Cullel. PEN*
Gerald Mora Muñoz. Programa Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
317.286 Costa Rica a la Luz del Censo del 2011 / Instituto Nacional
C838-co de Estadística y Censos , editor. - -1 ed.-- San José, C.R.: INEC. 2014.
482 p.; 28 cm.
Contiene: Mapas, cuadros y gráficos estadísticos.
ISBN: 978-9968-683-91-3
Presentación
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), como ente rector de las estadísticas nacionales,
en aras de continuar suministrando estadísticas pertinentes, oportunas y de calidad, efectuó el 8 y 9 de
noviembre de 2012 el Simposio Costa Rica a la luz del Censo 2011, donde se presentaron 42 ponencias
que abarcaban una diversidad de temas de interés nacional.
Como resultado de ese esfuerzo por sacar el máximo provecho a la información censal, el INEC
presenta esta publicación donde se exponen algunas de las investigaciones presentadas en el Simposio
y con ello se coronan los esfuerzos de divulgación promovidos por el instituto para dar a conocer los
resultados del X Censo Nacional de Población y VI de Vivienda.
Las 22 investigaciones desarrolladas en esta publicación se organizaron en nueve ejes temáticos que
abarcan contenidos como: Pobreza y brechas, regionalización y segregación, demografía, educación,
empleo y movilidad territorial, migración y remesas, integración poblacional, vivienda y ambiente y
tecnologías de información y comunicación.
Las investigaciones logran explorar los resultados censales en sus diferentes dimensiones:
desagregación geográfica -país, provincia, cantón, distrito, poblados, áreas de influencia-; poblaciones
diversas -niñez, personas jóvenes, adultas mayores, en situación de pobreza, indígenas, migrantes, con
discapacidad, en edad escolar-; cobertura y acceso a diferentes servicios -seguridad social, educación,
agua, electricidad, servicio sanitario, tecnologías como teléfono, computadora, internet-.
Todas ellas arrojan luz para que grupos de usuarios como: Ministerios, instituciones autónomas y
semiautónomas, gobiernos locales o municipales, empresas, organismos internacionales, organismos
no gubernamentales, instituciones académicas, estudiantes, cámaras empresariales y la población en
general, conozcan las cifras de la Costa Rica actual y a la luz de ellos, se propongan las acciones y
cambios que el país requiere tanto en el ámbito público como privado.
Esta publicación no hubiera sido posible sin el imprescindible aporte de los investigadores, los miembros
del Comité Organizador y editores; a todos ellos nuestro agradecimiento por su compromiso.
Confiamos en que este documento sirva de insumo para que el análisis reflexivo del país continúe.
Se espera que investigadores y especialistas sigan usando la información censal durante muchos años
y aprovechen la facilidad de consultas por medio de los sistemas de la web www.inec.go.cr y sobre
todo, que se tomen acciones a partir de esta información para lograr el bienestar de la población y las
comunidades.
Contenido
Página
Presentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Contenido . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Pobreza y Brechas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Floribel Méndez & Odilia Bravo, Costa Rica, Mapas de Pobreza 2011 . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Natalia Morales & Rafael Segura, Índice de suficiencia material y de recursos corrientes . . 40
Regionalización y Segregación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63
Alex Brenes, Heriberto Ureña & Rogelio Palomo, Insumo para una propuesta de
regionalización de la estructura socioeconómica con base en la información del
Censo 2011 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65
Demografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
Luis Ángel López, Los patrones de nupcialidad costarricense . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95
Educación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107
Isabel Román & Dagoberto Murillo, Zonas de inclusión y exclusión educativa en
Costa Rica 2011 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 109
Juan Diego Trejos & María Inés Sáenz, Brechas distritales formación capital humano
básico 2000 - 2011 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 131
Antonella Mazzei, Caracterización de la población “Nini”: Ni estudia, ni trabaja . . . . . . . . . 162
Anabelle Ulate, Gabriel Madrigal & Esteban Jiménez, Conocimiento, destrezas y
creatividad: los beneficios de la concentración urbana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 175
Página
Pobreza y
Brechas
Floribel Méndez & Odilia Bravo
Costa Rica, Mapas de Pobreza 2011.
.
9
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Resumen
Los Mapas de Pobreza 2011, se elaboraron utilizando los métodos de Necesidades Básicas
Insatisfechas (NBI) y el de Línea de Pobreza (LP); con el primero se evidencia una mejora en el porcentaje
de hogares carenciados a nivel nacional del año 2000 (36,1%) al 2011 (24,6%); siendo la dimensión
de conocimiento la que más aporta en dicha mejora. A nivel tanto distrital como cantonal, si bien se da
una mejora en el porcentaje de incidencia, siguen existiendo brechas geográficas importantes.
Respecto al método de Línea de Pobreza, su aplicación da como resultado que el 21,67% de los
hogares del país son pobres; las provincias de San José y Heredia concentran los cantones con menor
incidencia de pobreza, siendo el Cantón de Montes de Oca el de menor porcentaje de hogares pobres
(6,35%); mientras tanto los cantones de mayor incidencia de pobreza, se ubican en provincias costeras
y cantones limítrofes, el cantón con mayor incidencia según este método es La Cruz con 57,31% de
hogares pobres.
Los métodos tienen diferencias conceptuales, pero para el 2011 clasifican con una alta coincidencia
cantones con porcentajes altos de pobreza, los cuales son lugares predominantemente rurales y de
baja densidad poblacional; y cantones con incidencia de pobreza baja, donde la población reside en
zonas urbanas y tiene mayor promedio de escolaridad, lo que los sitúa en una posición más accesible
para crecer.
I. Introducción
Los mapas de pobreza proporcionan información a nivel geográfico relevante para los hacedores de
políticas públicas, al permitir orientar y distribuir de mejor manera el gasto social, así como formular
nuevas políticas orientadas a la disminución de la pobreza.
Por lo anterior, el Instituto Nacional de Estadística y Censos, dispuso la elaboración de este instrumento
para facilitar y contribuir con el diseño, establecimiento y evaluación de las políticas sociales.
De acuerdo con Céspedes y Jiménez (1995) existen fundamentalmente dos procedimientos que son
los más utilizados para determinar cuándo las personas son pobres:
• Son pobres los hogares que no satisfacen al menos una de las necesidades básicas , tales como:
alimentación, vivienda, abrigo, servicio de agua, salud y educación (método de necesidades
básicas insatisfechas).
• Son pobres los hogares cuyos ingresos no alcanzan para cubrir el costo de una canasta
predeterminada de bienes y servicios (método del ingreso o línea de pobreza).
Ambos métodos tienen ventajas y limitaciones (anexo 1), pero pueden ser complementarios en
el análisis del fenómeno de la pobreza, por ello, para la construcción de los mapas de pobreza se
consideraron ambos métodos, enfocados de la siguiente manera:
a) La construcción de los mapas de carencias críticas del año 2011, a partir del método de
necesidades básicas insatisfechas y la comparación de sus resultados con los del Censo del año
2000.3
b) La elaboración para el año 2011 de los mapas de pobreza por cantón utilizando el método de la
línea de pobreza y el sistema POVMAP del Banco Mundial para la estimación del ingreso.4
c) Comparación a nivel cantonal de los resultados obtenidos por el método de línea de pobreza y de
necesidades básicas insatisfechas para el año 2011.5
3/ Para mantener la comparación entre los censos se utilizó la misma metodología empleada en el Censo 2000, con los
mismos criterios o umbrales de las necesidades.
4/ No se realiza la comparación con el año 2000; ya que para poder aplicar esta metodología para el Censo 2000 es necesario
realizar una revisión y análisis a la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples del año 2000 y por factor tiempo no fue
posible realizarla.
5/ No es el método mixto o integrado; que es el cruce de los métodos de LP y NBI, si no solo la comparación de resultados
de ambos métodos.
11
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
II. Metodología
1. Mapas de carencias críticas del año 2011 utilizando el método de necesidades básicas
insatisfechas
El método de NBI permite hacer una caracterización de la situación de los hogares en función de
parámetros que determinan la presencia de carencias en determinados ámbitos o dimensiones, lo cual
es muy útil en el diseño e implementación de políticas focalizadas que apunten a solventar determinadas
necesidades básicas.
La medición de este método requiere de la elección de características de los hogares que además de
representar alguna dimensión importante de la privación, también estén muy asociadas con la situación
de pobreza como para representar a las demás carencias que configuran tal situación. Cuando un
hogar presenta carencias en alguna de las dimensiones, este se considera con NBI. Por lo tanto, en
estricto rigor este método permite medir el número de hogares que no han satisfecho alguna necesidad
básica.
Para la construcción de los mapas de carencias críticas del año 2011; se utilizó como referencia la
misma metodología referida en el Documento “Costa Rica: Un mapa de carencias críticas para el año
2000”, elaborado por Floribel Méndez Fonseca y Juan Diego Trejos Solórzano. Además, se empleó el
siguiente esquema para la definición y medición de las dimensiones críticas:
Continuación de Esquema
Al definir las cuatro dimensiones y sus respectivos componentes, para que un hogar tenga carencia
en alguna dimensión debe cumplir con al menos uno de los criterios definidos en cada componente.
Después de que cada hogar ha sido analizado para cada una de las cuatro dimensiones, se calcula
el indicador de carencias críticas, el cual indica si un hogar tiene una, dos, tres o cuatro carencias.
Se debe señalar que las cuatro dimensiones tienen igual ponderación, lo que implica que dentro del
grupo de hogares con una carencia estarían los hogares con carencia de albergue, o con carencia de
vida saludable, o con carencia de conocimiento o con carencia de acceso a otros bienes y servicios;
ubicados en una misma posición.
Es importante indicar que el componente de consumo para el año 2011 incluyó para la variable
“perceptores”, aquellos miembros del hogar que se declararon ocupados, pensionados o rentistas y
adicionalmente aquellos que desarrollaron actividades ocasionales (“camarones”, “chambas”). Esta
última categoría introduce una pequeña diferencia con el Censo 2000 que no especificó esa situación
laboral.
2. Mapas de pobreza del año 2011 utilizando el método de línea de pobreza a nivel de cantón
El método de Línea de Pobreza consiste en comparar el valor de la línea de pobreza extrema, dado
por el valor per cápita de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), y el de la línea de pobreza6 con el
ingreso per cápita del hogar, lo que permite clasificar los hogares en tres grandes grupos7:
6/ Los valores de las líneas de pobreza extrema y total están dados por la metodología diseñada para la medición de la
pobreza. Ver documento: “Actualización metodológica para la medición del empleo y la pobreza”. Instituto Nacional de
Estadística y Censos. Noviembre 2010.
7/ Para esta investigación se efectuaron los análisis para los grupos de: Hogares pobres y Hogares no Pobres, en otro
documento se ampliará el análisis a los tres grupos indicados.
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Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
• Hogares con pobreza extrema: son aquellos hogares con un ingreso per cápita igual o inferior al
costo per cápita de la Canasta Básica Alimentaria (CBA).
• Hogares en pobreza no extrema: son aquellos hogares que tienen un ingreso per cápita igual o
inferior a la línea de pobreza, pero superior al costo per cápita de la CBA o línea de extrema pobreza.
• Hogares no pobres: son aquellos hogares con un ingreso per cápita que les permite cubrir sus
necesidades básicas alimentarias y no alimentarias, es decir, su ingreso per cápita es superior al
valor de la línea de pobreza.
Por tanto, para aplicar este método se requieren de dos variables básicas: el valor de la línea de
pobreza y el ingreso per cápita de los hogares. Como en el censo no se dispone de la variable ingreso,
para poder tener una estimación de este parámetro se utilizó el programa POVMAP8.
Este programa permite estimar los ingresos de los hogares a partir de la relación de los datos de
alguna encuesta que contenga información sobre los ingresos de las personas y de los hogares con
variables explicativas del ingreso presentes en el Censo.Como se explica a continuación:
• Lo primero es hacer una selección de variables que ayuden a explicar el ingreso del hogar pero se
restringe a las variables que estén presentes en ambas bases de datos, las cuales, son el Censo
2011 y la ENAHO 2011. En este sentido, se generaron 229 variables en temas como: educación,
población económicamente activa (PEA), servicios de la vivienda y tenencia de equipo, entre otras.
• Se realiza un análisis previo para seleccionar las variables que entran o no al modelo, aplicando el
criterio de que la media del censo esté ubicada en el intervalo de confianza de la Encuesta, dejando
de lado aquellas que no cumplen con el criterio.
• Adicionalmente, se incorporan variables exógenas que puedan coadyuvar a mejorar la estimación del
ingreso, al tomarlas del entorno, en este caso se usaron variables a nivel de distrito. Estas las calcula
el Ministerio de Planificación (MIDEPLAN) y el Ministerio de Educación Pública (MEP). Por ejemplo:
deserción en escuelas y colegios, estudiantes de primer grado bajos de peso, niños con bajo peso
al nacer, cobertura de agua potable en residencial, centro educativos de primaria unidocentes, entre
otras. Dado que estas variables no se disponen a nivel de hogar, a todos los hogares de un mismo
distrito se les asigna el dato del distrito.
• Como variable independiente del modelo se utilizó el logaritmo del ingreso per cápita neto (IPCN)9
de la ENAHO.
8/ Se basa en un procedimiento de estimación en áreas pequeñas elaborado por investigadores del Banco Mundial para
la construcción de mapas de bienestar con un alto nivel de detalle espacial (Lanjouw y Elber, 2002, 2003).http://econ.
worldbank.org
9/ El ingreso del hogar proviene principalmente del trabajo ya sea asalariado o autónomo (cuenta propia o patrono). Según
la ENAHO 2011 esos ingresos representan el 82% del total y el resto proviene de otras fuentes de ingreso como renta de la
propiedad o transferencias. El IPCN, es el ingreso per cápita del Hogar, el cual es el ingreso total del hogar entre el número
de miembros, excluyendo servicio doméstico y pensionistas que residen en la vivienda. Este ingreso es el que se utiliza
para la medición de pobreza en la Encuesta de Hogares.
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Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
• Posteriormente, se calcula una regresión, utilizando el método de Stepwise, para estimar el ingreso
del hogar. Este método incluye en el modelo las variables que tengan el mayor valor aceptable para el
criterio de selección o de entrada, es decir, selecciona aquel conjunto de predictores que optimizan
el ajuste del modelo y la proporción de varianza explicada de la variable dependiente (R cuadrado).
Se hace un análisis del modelo estimado, con el fin de detectar problemas de auto correlación entre
variables independientes, que la distribución de los datos se acerque a una distribución normal y
que no existan valores extremos o “Outliers” entre los ingresos estimados y los reales de la encuesta,
entre otros.
• La estimación de la regresión del punto anterior, se aplica luego a los datos del Censo, mediante
un proceso de simulación, en el cual se debe indicar: el número de repeticiones que se quiere se
replique el modelo, el valor de la línea de pobreza total a utilizar y el nivel de agregación geográfico.
En este estudio se utilizó el valor de la línea de pobreza para el país para el mes de junio del 201110
(84 006 colones per cápita) y la estimación a nivel geográfico se realizó a nivel de Región y Cantón11.
• Finalmente, se obtiene un archivo de resultados: por fila se genera un promedio de las simulaciones
para los indicadores seleccionados, en nuestro caso a nivel de cantón y en las columnas el número
de personas por debajo de la línea de pobreza (incidencia), la severidad, la brecha y el coeficiente
de gini, entre otros.
III. Resultados
A continuación se detallan los resultados obtenidos utilizando los métodos Necesidades Básicas
Insatisfechas (NBI) y Línea de Pobreza (LP) aplicados al Censo 201112, para la construcción de los
mapas de pobreza. Para una mejor apreciación y comprensión, este apartado se dividirá en cuatro
partes:
Para el análisis se trabajó con una base Censal de 1 236 981 hogares y 4 275 670 personas13.
10/ Se consideró este mes, ya que es el mes de referencia que utiliza la ENAHO para indagar sobre los ingresos.
11/ Es importante mencionar que existen cantones cuyos distritos están ubicados en regiones diferentes (Sarapiquí, San
Ramón, Grecia y Alajuela) para esos casos, para obtener el porcentaje de pobreza, se realizó un promedio ponderado y
es el dato que se presenta con el porcentaje de cada cantón
12/ Es importante aclarar que la cantidad de distritos del año 2000 fueron de 459 y para el 2011 esta cifra aumento a 472, ya
que se crearon trece distritos nuevos: Los Guido de Desamparados, Carara de Turrubares, Escobal de Atenas, Llanos
de Santa Lucía de Paraíso, La Isabel de Turrialba, Chirripó de Turrialba, El Roble de Puntarenas, Arancibia de Puntarenas,
Brunka de Buenos Aires, Telire de Talamanca, Palmitos de Naranjo, Katira de Guatuso y Rincón de Sabanilla de San Pablo
de Heredia.
13/ No se incluyen las viviendas colectivas, personas sin hogar y viviendas desocupadas; así como el servicio doméstico
dentro del hogar.
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Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Como se presenta en el gráfico 1, de las cuatro dimensiones definidas el orden de incidencia es:
carencia de albergue digno 9,3%14; carencia en conocimiento 8,3%, carencia en el acceso a otros
bienes y servicios 7,8% y por último la carencia a vida saludable 6,2%. En adelante las dimensiones se
denominarán: Albergue, Conocimiento, Consumo e Higiene, respectivamente.
Al analizar cada uno de los componentes, en la dimensión Albergue, se tiene que el componente
de calidad de la vivienda aporta 7,4%; es decir, hay 91 335 viviendas que tienen materiales en mal
estado en paredes, techo y piso; o las paredes y techos son de desecho y piso de tierra.
En el caso de la dimensión Consumo, ubicada en el tercer lugar, y sin componentes, el grupo con
mayor carencia, con 3,4%, es el de los hogares que no tienen perceptores regulares, con jefe mayor a
50 años, y con menos de secundaria en educación. Por último, en la dimensión Higiene, las viviendas
que consumen agua proveniente de pozo, río o lluvia, aportan 3,8%, equivalente a 47 180 viviendas.
Es importante indicar que el porcentaje de hogares carenciados (tiene una o más carencias) no
son necesariamente los mismos hogares que son pobres por el método de Línea de Pobreza, pero
son hogares con dificultades de acceso a pilares fundamentales del bienestar y su cuantificación y
caracterización es un complemento fundamental para el análisis más integral de la pobreza, y por
tanto para apoyar, mejorar y enfocar las políticas públicas del país.
Gráfico 1
Costa Rica: Distribución de las dimensiones de NBI
2011
Dimensión
Albergue 9,3
Conocimiento 8,3
Consumo 7,8
Higiene 6,2
0 2 4 6 8 10
Porcentaje de Incidencia
Fuente.
Fuente.Instituto
Área deNacional de Estadística
Estadísticas Continuas.y Instituto
Censos.Nacional
Área de Estadísticas Continuas.
de Estadística y Censos.
14/ Se interpreta como el porcentaje de hogares en el país que tiene mínimo una carencia acceso a albergue digno.
16
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuando se analiza por zona (Gráfico 2), se puede observar que la zona urbana sigue el mismo
comportamiento que el total del país: en primer lugar la dimensión de Albergue, seguida de Conocimiento,
Consumo y, por último, la dimensión Higiene.
En tanto en la zona rural el orden de la incidencia por dimensión es distinta: en el primer lugar se
ubica también la dimensión de Albergue pero en la segunda posición se encuentra la Higiene, seguida
por Conocimiento y por último Consumo.
Gráfico 2
Costa Rica: Distribución de las dimensiones NBI por zona
2011
Dimensión
7,2
Albergue
14,8
7,1
Conocimiento
11,6
6,5
Consumo
11,3
3,6
Higiene
13,4
0 5 10 15 20
Porcentaje de Incidencia
Urbano Rural
Fuente.
Fuente.Instituto
Área deNacional de Estadística
Estadísticas Continuas.yInstituto
Censos.Nacional
Área de Estadísticas Continuas.
de Estadística y Censos.
Al analizar los tipos de carencias en los hogares, tal como lo refleja el Cuadro 1, el porcentaje de
hogares con una o más carencias críticas según el Censo 2011 es de 24,6% lo que corresponde a 303
790 hogares y 1 171 092 personas.
En la zona urbana el 19,8% de los hogares tienen al menos una carencia, en tanto en la zona
rural es de 37,4%, lo anterior en términos de población equivale a 700 649 y 470 443 personas,
respectivamente.
Por su parte, los hogares con carencias críticas fueron divididos en cuatro grupos mutuamente
excluyentes; los que tenían una única dimensión se denominaron carencias leves, los cuales representan
el mayor porcentaje de incidencia con 18,8% y la principal carencia es Conocimiento con 5,6% de los
hogares; es decir, de cada 100 hogares 5 resultan carenciados, debido a que sus miembros en edades
de 7 a 17 años no asisten a la educación regular o asisten, pero con rezago de más de dos años.
El segundo grupo son los hogares con carencias moderadas, son los que presentan carencia en dos
dimensiones; representan 4,7%, y la combinación que se presenta con más frecuencia es albergue-
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Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
higiene con 1,5%. Los hogares con carencias graves es el tercer grupo y corresponde a los hogares
con carencias en tres dimensiones representa el 1%, siendo la combinación de las dimensiones de
Albergue-Higiene-Conocimiento la que más se presenta con 0,4%.
Por último, los hogares con carencias extremas, estos presentan carencia en las cuatro dimensiones
y representan el 0,1% del total de hogares.
Cuadro 1
Costa Rica: Distribución de Hogares por tipo de carencia crítica según zona
2011
Total 959 144 100 1 236 981 100 4 275 670 100
Sin Carencias 613 052 63,9 933 191 75,4 3 104 578 72,6
Con una o más carencias 346 092 36,1 303 790 24,6 1 171 092 27,4
Carencias leves 232 370 24,2 232 276 18,8 862 156 20,2
Carencias moderadas 83 036 8,7 57 670 4,7 237 571 5,6
Carencias graves 25 404 2,6 12 279 1,0 61 744 1,4
Carencias extremas 5 282 0,6 1 565 0,1 9 621 0,2
Urbana 580 470 100 905 727 100 3 110 206 100
Sin Carencias 426 525 73,5 725 956 80,2 2 409 557 77,5
Con una o más carencias 153 945 26,5 179 771 19,8 700 649 22,5
Carencias leves 116 528 20,1 144 827 16,0 545 296 17,5
Carencias moderadas 29 128 5 28 937 3,2 124 580 4,0
Carencias graves 7 132 1,2 5 404 0,6 27 312 0,9
Carencias extremas 1 157 0,2 603 0,1 3 461 0,1
Rural 378 674 100 331 254 100 1 165 464 100
Sin Carencias 186 527 49,3 207 235 62,6 695 021 59,6
Con una o más carencias 192 147 50,7 124 019 37,4 470 443 40,4
Carencias leves 115 842 30,6 87 449 26,4 316 860 27,2
Carencias moderadas 53 908 14,2 28 733 8,7 112 991 9,7
Carencias graves 18 272 4,8 6 875 2,1 34 432 3,0
Carencias extremas 4 125 1,1 962 0,3 6 160 0,5
Fuente.
Fuente. Instituto
Área de Nacional de Continuas.
Estadísticas EstadísticaInstituto
y Censos. Área de
Nacional de Estadísticas
Estadística y Continuas.
Censos.
Uno de los objetivos específicos de este estudio es identificar y caracterizar las áreas geográficas
con carencias críticas, por ello, se debe calcular la incidencia a nivel de distrito, entendiéndose como
el porcentaje de hogares con una o más carencias dentro del distrito.
Para el año 2011 el rango de variación de este porcentaje va de 5,7% a 90%, en el Cuadro 2 se
presentan los primeros 15 distritos con mayor porcentaje y los primeros 15 distritos con menor porcentaje
de carencias.
18
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Al analizar los distritos con mayor incidencia, se encuentra que todos son predominantemente rurales
y con muy baja densidad de población; por ejemplo, el distrito de Cureña se encuentra entre los 15
con mayor incidencia y posee la densidad más baja del país con 3 personas por km2. En tanto, los
distritos con menor incidencia son predominantemente urbanos y la densidad de población más baja
es del distrito de Sánchez de Curridabat con 1 223 personas por km2.
También se observa que de los 15 distritos con mayor incidencia 5 pertenecen al Cantón de Buenos
Aires: Boruca, Potrero Grande, Colinas, Chánguena y Pilas. En tanto, en los 15 distritos con menor
incidencia, tres de ellos pertenecen al Cantón de Montes de Oca: Sabanilla, Mercedes y San Pedro.
Buenos Aires tiene un total de 9 distritos y 4 el Cantón de Montes de Oca.
Cuadro 2
Costa Rica: Principales distritos con mayor y menor porcentaje de carencias críticas
2011
Distrito % Distrito %
Chirripó, Turrialba 90,0 San Juan, La Unión 5,7
Pilas, Buenos Aires 81,5 Sabanilla,Montes de Oca 6,0
Llanuras del Gaspar, Sarapiquí 74,2 Carmen, San José 6,2
Chánguena, Buenos Aires 74,1 Mercedes,Montes de Oca 6,5
Cureña,Sarapiquí 73,9 Anselmo Llorente, Tibás 6,7
Telire, Talamanca 73,8 San Pedro,Montes de Oca 6,8
Colinas,Buenos Aires 72,5 Sánchez, Curridabat 7,4
Potrero Grande, Buenos Aires 71,1 San Roque,Barva 7,6
Valle La Estrella, Limón 70,2 Rincón de Sabanilla, San Pablo 8,0
Santa Cruz, León Cortés 69,6 Gravilias, Desamparados 8,0
Boruca, Buenos Aires 64,3 Mercedes,Heredia 8,3
Río Nuevo,Pérez Zeledón 63,9 San JuanTibás 8,4
Sierpe,Osa 61,4 San Vicente,Moravia 8,6
Copey, Dota 61,3 San Francisco de Dos Ríos, San José 9,0
Limoncito, Coto Brus 60,3 San Vicente,Santo Domingo 9,0
Fuente.
Fuente.Instituto
Área deNacional de Estadística
Estadísticas Continuas.y Instituto
Censos.Nacional
Área de Estadísticas Continuas.
de Estadística y Censos.
Con el fin de representar en el mapa distrital los resultados obtenidos, se tomó el porcentaje de
hogares con una o más carencias críticas por distrito y se aplicó la técnica de Clúster15 para obtener
cinco grupos de distritos según porcentaje de incidencia.
Los grupos quedaron conformados de la siguiente forma: los distritos con muy alta incidencia aquellos
que tienen en promedio 75% de los hogares carenciados, con alta incidencia 54%, con incidencia
media-alta 42%, con incidencia media 29% y, por último, con baja incidencia 16%.
15/ La técnica de clúster es la de k-mean que consiste en hacer grupos definiendo medias como centroides y mediante la
realización de una serie de interacciones maximiza las distancias de cada observación a los centroides definidos y ubica
cada distrito en un estrato, en este caso de 1 a 5 ya que se definieron 5 grupos para trabajar; su aplicación se hace
mediante el paquete SPSS.
19
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Definidos los grupos se procedió a mapear el país a nivel de distrito (Mapa 1). Los distritos con
incidencia muy alta son los que se representan en color café oscuro, y como se puede observar,
se ubican principalmente en la zona sur del país; predominando cinco distritos de la Provincia de
Puntarenas (todos del cantón de Buenos Aires), dos de Limón, dos de Heredia, uno de Cartago y uno
de Limón.
En la frontera norte del país se puede observar que los distritos limítrofes (color anaranjado oscuro)
se encuentran ubicados en una situación de incidencia alta. También es importante destacar el
comportamiento de las costas del país: en la Pacifico Central predominan los distritos con incidencia
media (amarillo claro) y conforme se avanza al oeste y al este la incidencia aumenta a Incidencia Media
Alta (color anaranjado claro).
En el caso de la Costa Atlántica predomina la Incidencia Media Alta. También se puede ver que
conforme se va acercando al centro del país, que es básicamente la parte urbana de las provincias de
San José, Alajuela, Cartago y Heredia, la intensidad disminuye, ya que es la zona de menor carencia.
Es importante aclarar que el mapa está hecho según porcentaje de hogares con una o más carencias
dentro de cada distrito. El panorama cambia si se mapea el porcentaje de hogares carenciados en
cada distrito, con respecto al total de hogares con una o más carencias del total país, con esta segunda
opción se puede analizar en cuáles lugares del país está la mayor concentración absoluta de hogares
carenciados (anexo 2).
20
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 1. Costa Rica: Incidencia de las carencias críticas por distrito. 2011
(Porcentaje
Costade hogares con
Rica:Incidencia carencias
de las críticas)
carencias críticas por distrito. 2011
(Porcentaje de hogares con carencias críticas)
Distritos_Costa_Rica_NBI by Distrito_2011
Más del 55%
43% al 54%
30% al 42%
17% al 29%
Menos 16%
En el Gráfico 3, se muestra la comparación del porcentaje de incidencia para cada una de las cuatro
dimensiones del año 2000 al año 2011; la principal disminución ocurrió en la dimensión de conocimiento
(45,4%). Esta dimensión en el año 2000 se ubicaba en el primer lugar de incidencia. Lo anterior es
consecuencia de una disminución de aquellos hogares que en el 2000 estaban carenciados debido a
que sus miembros en edades de 7 a 17 años no estaban asistiendo a la educación regular o asistieron,
pero con rezago.
21
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
En segundo lugar se encuentra la dimensión de Higiene con una disminución del año 2000 al 2011
de 42,1%. En este caso, el componente de proveniencia de agua mediante pozo, río o lluvia para
el consumo del hogar es la que más aporta, ya que disminuyó 26% del 2000 al 2011; en tanto, la
eliminación de excretas por pozo, letrina, hueco o sin tenencia de servicio sanitario disminuyó 23,2%.
En el caso de la dimensión de consumo, se ubica en el tercer lugar con una disminución de 30%;
debido al aumento de perceptores por hogar, así como del nivel educación promedio de los perceptores,
en tanto la dependencia económica disminuyó, todo ello contribuye a que los hogares presenten
menos carencia en esta dimensión.
Respecto a la dimensión de albergue, disminuyó en menor medida 7,9%, el componente que más
contribuye es electricidad, ya que en valores absolutos en el año 2000 existían 30 992 hogares sin
electricidad para alumbrado, en tanto, en el 2011 esa cantidad se redujo a 13 816 hogares.
Gráfico 3
Costa Rica: Comparación de la distribución de las dimensiones
por NBI
2000 y 2011
Dimensión
15,2
Conocimiento
8,3
11,2
Consumo
7,8
10,7
Higiene
6,2
10,1
Albergue
9,3
0 5 10 15 20
Porcentaje de Incidencia
2.2 Análisis de los distritos con mayor y menor porcentaje de carencias críticas
Para observar cuánto mejora la situación de los distritos entre los dos últimos censos y en qué
lugares se concentra, en el cuadro 3 se presenta la comparación de los 15 distritos con mayor y menor
porcentaje de carencias críticas en cada año censal.
Así mismo, nueve de los quince distritos que se ubicaban en el año 2000 entre los 15 primeros
distritos con mayor porcentaje de carencias, se mantienen en el 2011, pero disminuyen el porcentaje
de hogares carenciados. Estos son Cureña de Sarapiquí, Llanuras de Gaspar de Sarapiquí, Pilas de
Buenos Aires, Sierpe de Osa, Colinas de Buenos Aires, Río Nuevo de Pérez Zeledón, Boruca de Buenos
Aires, Potrero Grande de Buenos Aires y Chángueña de Buenos Aires.
22
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Respecto a los distritos con menor porcentaje de carencias críticas 11 se mantienen entre los primeros
15: Sánchez de Curridabat, San Juan de Tres Ríos, San Francisco de Dos Ríos, San Pedro de Montes
de Oca, Anselmo Llorente de Tibás, Sabanilla de Montes de Oca, Carmen de San José, Gravilias de
Desamparados, San Vicente de Moravia y Mercedes de Heredia.
Al analizar los primeros lugares en el año 2000, tanto por mayor como por menor porcentaje de
carencias críticas en relación con el año 2011, se observa que el distrito de Chángueña de Buenos
Aires ocupaba el primer lugar con el mayor porcentaje de carencias críticas. Sin embargo, en el 2011
ocupa la cuarta posición, por debajo de los distritos de Chirrripó de Turrialba, Las Pilas de Buenos Aires
y Llanuras de Gaspar de Sarapiquí.
Adicionalmente, se puede apreciar las mejores absolutas en los porcentajes, por ejemplo, en que
el caso de los 15 distritos más carenciados, los porcentajes en el 2000 oscilaban entre 80,2 y 97,3%
mientras que en el 2011 el rango va de 60,3 a 90% lo que muestra una mejora importante. Igualmente,
en el caso de los distritos menos carenciados el rango se acorta al pasar de entre 7,8 y 14% a entre
5,7 y 9%.
Cuadro 3
Costa Rica: Principales distritos con mayor y menor porcentaje de carencias
críticas
2000 y 2011
2000 2011
Mayor porcentaje de
Mayor porcentaje de Menor porcentaje de Menor porcentaje de
carencias críticas carencias críticas carencias críticas
a/ carencias críticas
Continuación cuadro 3
2000 2011
Mayor porcentaje de
Mayor porcentaje de Menor porcentaje de Menor porcentaje de
carencias críticas carencias críticas carencias críticas
a/ carencias críticas
Potrero
Colinas, Carmen, San San Roque,
87,6 12,1 Grande, 71,1 7,6
Buenos Aires José Barva
Buenos Aires
Valle La Rincón de
Sabanillas, Gravilias,
86,2 12,2 Estrella, 70,2 Sabanilla, 8,0
Acosta Desamparados
Limón San Pablo
Gravilias,
Delicias, Mata Redonda, Santa Cruz,
86,1 12,6 69,6 Desampa- 8,0
Upala San José León Cortés
rados
San José
San Vicente, Boruca, Mercedes,H
(Pizote), 84,2 13 64,3 8,3
Moravia Buenos Aires eredia
Upala
Río Nuevo, Río
Zapote, San San
Pérez 82,8 13,6 Nuevo,Pérez 63,9 8,4
José JuanTibás
Zeledón Zeledón
San
Boruca,
82,6 Barva, Heredia 13,7 Sierpe,Osa 61,4 Vicente, 8,6
Buenos Aires
Moravia
San
Potrero San Antonio, Francisco
Grande, 82,4 Desampa- 13,9 Copey, Dota 61,3 de Dos 9,0
Buenos Aires rados Ríos, San
José
San
Caño Negro, Mercedes, Limoncito, Vicente,
82,2 14,0 60,3 9,0
Los Chiles Heredia Coto Brus Santo
Domingo
a/ Resulta interesante observar como en el año 2011 se encuentran dos distritos creados luego del
Censo 2000 y que se ubican entre los primeros 15 con mayor porcentaje de carencias, ellos son:
Telire y Chirripó.
Fuente. Área de Estadísticas
Instituto Nacional deContinuas.
EstadísticaInstituto Nacional
y Censos. Área de
de Estadística
Estadísticasy Censos.
Continuas.
24
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Al comparar los mapas de incidencia de carencias críticas por distrito, tal como lo muestran los mapas
2 y 3, se aprecia que en los 11 años trascurridos entre el Censo 2000 y el Censo 2011 se produce una
mejora; principalmente se aprecia cómo en el 2000 la frontera Norte y las costas, que se encontraban
en colores más fuertes, que son sinónimo de incidencia Alta y Muy Alta, disminuye su intensidad en
el 2011. Lo anterior no ocurre con la Frontera Sur, ya que los colores intensos siguen predominando en
los distritos ubicados en esta zona. También, se observa que la parte central del país se ha mantenido
con poco cambio.
Algunos distritos del año 2000 al 2011 presentaron mejoras y pasan a una menor incidencia de
carencias críticas ( 217 distritos); por ejemplo, el distrito de Acapulco de Puntarenas, en el 2000 tenía
incidencia alta y en el 2011 pasó a incidencia media; el distrito de Bahía Ballena de Osa se encontraba
en incidencia muy alta y pasó a incidencia media, los distritos de Savegre de Aguirre, Colorado de
Pococí y Bratsi de Talamanca se encontraban en incidencia muy alta y pasaron a incidencia media alta.
No obstante, hay distritos que aumentaron su incidencia (6 distritos), tal es el caso de los distritos de
Desamparaditos de Puriscal y San Francisco de Goicoechea, los cuales en el año 2000 presentaban
incidencia baja y en el 2011 se ubican en incidencia media. Por su parte, el distrito de Piedras Negras
de Mora pasó de incidencia media alta a incidencia alta; el distrito de Valle La Estrella de Limón se
ubicaba en incidencia alta y pasó a muy alta. Por último, el distrito de Vara Blanca de Heredia se
encontraba en incidencia media alta y pasó a incidencia alta (este distrito fue afectado por el terremoto
del año 2009).
16/ Con el fin de mantener la comparabilidad y observar la evolución en el tiempo, se utilizaron los mismos parámetros de
agrupación del año 2000 en el año 2011.
25
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Mapa 2. Costa Rica: Incidencia de las carencias críticas por distrito. 2000
(Porcentaje de hogares conCosta
carencias críticas)
Rica:Incidencia de las carencias críticas por distrito. 2000
( Porcentaje de hogares con carencias críticas)
theme1 by Distritos2000
Más del 64%
49% al 63%
34% al 48%
20% al 33%
Menos 19%
Mapa 3. Costa Rica: Incidencia de las carencias críticas por distrito. 2011
(Porcentaje de hogares con carencias críticas, considerando los centroides del 2000)
Costa Rica:Incidencia de las carencias críticas por distrito. 2011
(Porcentaje de hogares con carencias críticas, considerando los centroides del 2000)
3. Mapas de pobreza del año 2011 utilizando el método de línea de pobreza a nivel de cantón.
Este análisis se llevó a cabo para las seis regiones de planificación, por lo cual se trabajó con seis
bases de datos del Censo y seis bases de la Encuesta, cada una con su propio cuadro comparativo,
tanto de las variables internas como externas17, para analizar cuáles aportaban más al modelo.
Al obtener los resultados de la estimación de pobreza para cada región, se verificó la precisión de
la misma, tal como lo presenta el cuadro 4 los porcentajes de pobreza obtenidos no estaban dentro
de los rangos de los límites de confianza de la encuesta pero al obtener los limites inferior y superior
creados a partir de los datos generados por la estimación del POVMAP, estos se superponen a los de la
encuesta. Este resultado indica que en promedio, la estimación del modelo es estadísticamente similar
al obtenido directamente de los datos de la encuesta.
Respecto a la bondad de ajuste del modelo se utilizó el coeficiente de determinación ajustado (R2);
este coeficiente varía entre 0 y 1 siendo el mejor ajuste cuanto más se aproxime a 1. Como se observa
en el Cuadro 4, el R2 para cada Región se ajusta bien.
Cuadro 4
Costa Rica: Límites de confianza de la Incidencia de la pobreza por región estimada en el
Censo e intervalos de confianza de la ENAHO 2011
Límites de la Límites de la
incidencia Censo Coeficiente de ENAHO
Incidencia Incidencia
Región de pobreza determinación de pobreza
Censo Límite Límite R
2 ENAHO Límite Límite
inferior Superior inferior Superior
17/ Son aquellas variables que pueden ayudar a darle robustez al modelo y que no se encuentran ni en la ENAHO ni en el
Censo, se consideraron variables del Ministerio de Planificación utilizadas para el cálculo del Índice de Desarrollo Social
y del Ministerio de Educación Pública.
27
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Cuadro 5
Costa Rica: Principales Indicadores de la Incidencia de
la pobreza por región y total país estimada en el Censo 2011
Incidencia
Brecha de Severidad Índice de
Región de la
pobreza de Pobreza Gini
pobreza
Total País
21
21,67 22 10,43 5,25 49,72
Fuente. Área
Fuente. Instituto Nacional de Continuas.
de Estadísticas EstadísticaInstituto
y Censos. Área de
Nacional deEstadísticas
Estadística yContinuas.
Censos.
18/ También conocido como intensidad de la pobreza, muestra de manera relativa cuánto se aleja el ingreso promedio de
los hogares pobres respecto a la línea de pobreza, cuando el indicador crece se describe un incremento en la intensidad
de la pobreza, es decir un alejamiento del ingreso promedio de los hogares respecto a la Línea de Pobreza.
19/ Refleja la desigualdad de ingresos existente entre los hogares pobres, es análogo a la brecha de pobreza, sin embargo es
más sensible al cambio en el ingreso de los hogares con ingresos más bajos. Cuando el indicador aumenta se dice que
la pobreza es más severa.
20/ Mide el grado de concentración del ingreso, el cual varía entre cero y uno, entre más cercano de cero se encuentre
significa que hay una igualdad en la distribución del ingreso, mientras más cercano a uno hay una mayor desigualdad en
el ingreso.
21/ El porcentaje de pobreza del Total País es de 21,6% según la encuesta de hogares.
22/ Este porcentaje se calculó: Número de hogares pobres del país (se obtiene al unir los cantones de cada región con
su respectivo porcentaje de pobreza; entre el número de hogares utilizados en el modelo para la estimación según el
sistema POVMAP (1 235 835 hogares de 1 236 981 hogares).
28
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Es importante indicar que este método se aplicó a nivel de región, ya que es la desagregación
geográfica máxima que permite la ENAHO. Sin embargo, el modelo se puede bajar a nivel geográfico
de cantón y obtener datos más desagregados23 . Así por ejemplo, en el mapa 4 se puede observar que
lo cantones con mayores niveles de pobreza se encuentran en las fronteras, donde superan el 35% de
incidencia. Algunos de ellos son: Talamanca, Buenos Aires, Los Chiles, Upala, La Cruz y Guatuso. En
tanto, las costas del país mantienen una incidencia media y media alta.
También se puede observar que la parte urbana de las provincias de San José, Alajuela, Cartago y
Heredia presentan la menor incidencia.
23/ Una de las limitaciones de este sistema es la cantidad de observaciones contenidos en los niveles geográficos a utilizar;
es decir; si en un distrito existen menos de 1 000 observaciones no calcula la incidencia de pobreza, por lo anterior se
decidió estimar a Nivel de Región y dentro de las mismas los cantones.
29
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
En el Cuadro 6 se presentan los primeros 15 cantones con mayor incidencia y los 15 cantones con
menor incidencia de pobreza; se observa como en las provincias de San José y Heredia predominan
los cantones con menor incidencia, aproximadamente 50% de los cantones de cada provincia, siendo
Montes de Oca el de menor incidencia con 6,35%.
Mientras tanto, en los cantones con mayor incidencia de pobreza, predominan las provincias costeras
y los cantones limítrofes, el cantón que ocupa la primera posición es La Cruz donde el 57,31% de
los hogares es pobre, o sea, el ingreso per cápita de estos hogares es inferior al valor de la Línea de
Pobreza.
Cuadro 6
Costa Rica: Cantones con mayor y menor porcentaje de pobreza
2011
4. Comparación a nivel cantonal de los resultados obtenidos por el método de línea de pobreza y de
necesidades básicas insatisfechas para el año 2011.
Una de las limitaciones que presenta el sistema POVMAP, es la cantidad de observaciones contenidas
en las áreas geográficas a utilizar; es decir, si existen menos de 1 000 observaciones en el área
no calcula la incidencia de pobreza. Por ello, no fue posible realizar la estimación a nivel de distrito
para aplicar el método integrado o mixto. Sin embargo, se efectuó la comparación de los resultados
obtenidos con los métodos de Línea de Pobreza y de Necesidades Básicas Insatisfechas a nivel
cantonal y considerando la agrupación de los mismos según el nivel de incidencia (Muy Alta, Alta,
Media Alta, Alta y Baja).
La diferencia entre la estimación del NBI (24,56) y la LP (21,67) es de 2,89 puntos porcentuales
(p.p.), siendo la mayor diferencia de 18,14 puntos porcentuales en el cantón de Dota, en tanto la menor
diferencia es de 0,05 puntos porcentuales en el cantón de Cañas, en el anexo 4 se puede observar una
tabla comparativa para todos los cantones.
30
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Se puede observar cómo los cantones de Los Chiles, Upala, Guatuso, La Cruz, Buenos Aires, Coto
Brus y Talamanca son ubicados en los niveles de incidencia muy alta y alta, por ambos métodos. Esto
indica que son zonas donde se tienen carencias estructurales importantes; además de limitaciones
para disponer de un ingreso suficiente para cubrir las necesidades básicas.
31
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Mapa 5.Costa Rica: Incidencia de las carencias críticas por cantón 2011
(Porcentaje de hogares con carencias críticas)
Costa Rica. Incidencia de las carencias críticas por cantón 2011.
(Porcentaje de hogares con carencias críticas)
IV. Conclusión
• Método de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), Censo 2000 y 2011: Se evidencia una mejora
en el porcentaje de hogares carenciados del país entre el año 2000 (36,1%) y el 2011 (24,6%), con
una disminución de 11,5 puntos porcentuales. La dimensión Conocimiento es la que más aporta
a dicha mejora. Esta dimensión en el año 2000 se ubicaba en el primer lugar de incidencia. Por
su parte, para el año 2011 el segundo lugar lo ocupa la dimensión Higiene, seguida por la de
Consumo y, por último, Albergue.
• Método de Línea de Pobreza o Ingreso (LP) a nivel de Cantón, Censo 2011: Este método a nivel
nacional da un nivel de incidencia de pobreza del 21,67% de los hogares. Las provincias de San
José y Heredia concentran los cantones con menor incidencia de pobreza, y es el Cantón de Montes
de Oca el de menor porcentaje de hogares pobres (6,35%). Mientras tanto, los cantones con mayor
incidencia, se ubican en provincias costeras y cantones limítrofes. El cantón con mayor incidencia
según este método es La Cruz con 57,31% de hogares pobres.
Aunque hay diferencias entre los métodos para estimar la pobreza, ambos para el 2011 llevan a
clasificar con una alta coincidencia cantones con porcentajes altos. Estos presentan características
específicas como: ser lugares predominantemente rurales, de baja densidad poblacional, con porcentaje
de analfabetismo promedio del 4% y promedio de 6 años de escolaridad. Por otro lado, están los
cantones con menor incidencia de pobreza, donde la población reside en zonas predominantemente
urbanas, con porcentaje de analfabetismo que no llega al 1% y 10 años de escolaridad promedio, lo
que les proporciona mayores ventajas de desarrollo.
33
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
V. Anexos
Anexo 1
Cuadro comparativo:
Ventajas y limitaciones de los métodos de necesidades básicas
insatisfechas y Línea de Pobreza
Continua ...
34
Pobreza y Brechas Méndez & Bravo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 1
Método Ventajas Limitaciones
La medida no dice cuán pobres son los
pobres.
Mide la pobreza en forma
relativamente directa. Se cuestiona la confiabilidad del ingreso
como medida debido a los sesgos en el
proceso de recolección de información.
Fuente.
Fuente.Instituto
Área deNacional de Estadística
Estadísticas Continuas.y Instituto
Censos.Nacional
Área de Estadísticas Continuas.
de Estadística y Censos.
35
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
Anexo 2
Distritos_Costa_Rica_NBI by TotalDistritos
Más 0,88%
0,53% a 0,87%
0,29% al 0,52%
0,10% a 0,28%
Menos 0,09%
Anexo 3
Agrupación de Distritos por Porcentaje de Hogares con Carencias según Indicadores
Geográficos
Densidad 7,36 18,27 33,28 101,86 867,02 83,71
Número de distritos 11 37 99 186 139 472
Personas
Distribución de la población
0,8 2,0 6,3 11,0 7,3 27,4
con carencias
Hogares
Porcentaje con una o más
72,6 52,9 39,6 26,8 14,8 24,6
carencias
Anexo 4
Costa Rica. Incidencia de Pobreza y ubicación en conglomerados según método de
cálculo por cantón
2011
NBI POVMAP
Diferencia de Diferencia de
Cantón Conglome- Conglome- conglomerado
% Pobreza % Pobreza incidencia
rado rado
Continuación Anexo 4
NBI POVMAP
Diferencia de Diferencia de
Cantón Conglome- Conglome- conglomerado
% Pobreza % Pobreza incidencia
rado rado
Fuente.
Fuente. Instituto Nacional deContinuas.
Área de Estadísticas Estadística y Censos.
Instituto ÁreadedeEstadística
Nacional Estadísticas Continuas.
y Censos.
39
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Méndez & Bravo
1. Céspedes, V.H. y Jiménez, R. (1995). La pobreza en Costa Rica (p.18). Estudios 11, Academia de
Centroamérica.
2. Feres, J.C y Mancero, X. (2001). El método de necesidades básicas insatisfechas y sus aplicaciones
a América Latina (p.30). Estudios Estadísticos y Prospectivos. CEPAL.
3. Méndez, F. y Trejos, J.D. (2001). Costa Rica (pp.1-35). En: Un mapa de carencias Críticas para el
año 2000. San José.
VII. Bibliografía
2. Beccaria, Luis. La medición del ingreso para los estudios de pobreza en América Latina: aspectos
conceptuales y empíricos. N.F. Recuperado de: http://www.eclac.org/
3. Feres, Juan Carlos. La medición de la pobreza según método de ingreso: notas para discusión. 26
de abril 2012. Recuperado de: http://www.inei.go.pe
4. Instituto Nacional de Estadística de Perú. Mapa de pobreza provincial y distrital 2009. N.F.
Recuperado de: http://www.inei.gob.pe
Resumen
En esta ponencia se analiza la suficiencia de recursos de los hogares a partir de datos censales del
2000 y 2011. Para hacerlo se construye un índice con dos componentes, que a su vez se subdividen
en dos categorías: para aproximar las condiciones de tipo estructural, el primer componente evalúa
las condiciones habitacionales de los hogares; tomará en cuenta la durabilidad y el estado de los
materiales del piso, techo y paredes de la vivienda, así como la tenencia de servicios básicos (como
agua, saneamiento y electricidad). El segundo componente estima la suficiencia de recursos corrientes,
es decir, la capacidad que tiene el hogar para captar o generar ingresos.
Los resultados indican que en el 2011 el 47,8% de los hogares presentan algún tipo de insuficiencia:
el 25,8% tiene insuficiencia en las condiciones habitacionales, el 10,7% presenta insuficiencia de
recursos corrientes y el 11,3% posee insuficiencia convergente, es decir, condiciones insuficientes en
ambas dimensiones. En relación con el 2000, disminuye en 1,6 puntos porcentuales la proporción de
hogares con insuficiencia en las condiciones habitacionales, mientras que se incrementa en magnitud
similar los hogares con insuficiencia de recursos corrientes (1,7 puntos), así como los hogares con
insuficiencia convergente (1,1 puntos).
Los hogares rurales con insuficiencia convergente duplican a los urbanos (17,7% versus 8,9%), que
también son más afectados por insuficiencia en las condiciones habitacionales (31,2% versus 23,8%),
mientras que la insuficiencia de recursos corrientes es similar entre ambas zonas (9,9% urbana y 13,0%
rural).
Este índice constituye un instrumento valioso para el diseño y aplicación de políticas y programas
sociales, al identificar territorialmente los hogares con insuficiencia en sus condiciones habitacionales
o de recursos corrientes, o ambos.
I. Introducción
Los censos de población constituyen una fuente de información valiosa para el estudio de la pobreza
y el diseño de políticas públicas. Estos permiten la localización geográfica de los hogares y sus
características, así como otras variables que permiten estimar situaciones de privación de los hogares
y orientar mejor los programas sociales y la focalización del gasto público social.
En América Latina, la metodología tradicionalmente aplicada para aproximar la pobreza con datos
censales, ha sido la de “necesidades básicas insatisfechas” (NBI). Esta surgió en la década de los
setenta desde la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) con el objetivo de identificar
hogares y personas que no logran satisfacer un conjunto de necesidades consideradas indispensables,
según niveles de bienestar aceptados como universales.
A principios de la década del dos mil y en el marco del Programa Desarrollo de Nuevas Metodologías
para el estudio de la Pobreza con datos censales del Instituto Nacional de Estadística y Censos de
Argentina (INDEC) se desarrolló una metodología que aproxima la pobreza en ese país a partir de los
datos del Censo 2001 (INDEC, 2004). La investigación revisó dicha metodología y la adaptó al caso
costarricense.
El objetivo de esta ponencia es formular una medición alternativa para estimar los hogares que
presentan insuficiencias en las condiciones habitacionales y de recursos corrientes (captación de
ingresos) a partir de los datos censales del 2000 y 2011. En este sentido, los censos permiten una
confiable desagregación territorial y comparar los cambios en el tiempo.
Para hacerlo se construye un índice con dos componentes. El primero, evalúa las condiciones
habitacionales de los hogares; el segundo, estima la suficiencia de recursos corrientes, es decir, calcula
la capacidad que tiene el hogar para captar o generar ingresos.
II. Metodología
En esta sección se explica el desarrollo metodológico que la investigación siguió para elaborar el
“índice de suficiencia material y de recursos corrientes” a nivel de hogares3, a partir de la información
de los Censos de Población y Vivienda del 2000 y 2011, realizados por el INEC.
El índice incluye dos dimensiones. Para aproximar las condiciones de tipo estructural, el primer
componente evalúa las condiciones habitacionales de los hogares, se toma en cuenta la durabilidad y
el estado de los materiales del piso, techo y paredes de la vivienda, así como la tenencia de servicios
básicos (como agua, saneamiento y electricidad). El segundo componente estima la suficiencia de
recursos corrientes, es decir, la capacidad que tiene el hogar para captar ingresos en el caso de las
personas asalariadas, o bien, de generarlo en el caso de los patronos o trabajadores por cuenta propia.
3/ Se estima para los hogares particulares, entendidos como una persona sola o un grupo de personas con o sin vínculos
familiares, que son residentes habituales en una vivienda individual, que consumen y comparten un mismo presupuesto
para los gastos de alimentación (INEC, 2012).
42
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Los dos componentes se fundamentan en la capacidad de los hogares de obtener satisfactores básicos
para acceder a condiciones materiales de existencia típicas de una sociedad histórica determinada
(INDEC, 2004). Por un lado, existen recursos que demandan ser provistos de manera sostenida en el
tiempo, es decir, que su obtención requiere de ahorro e inversión por períodos prolongados y revertir
esta privación exige un gasto considerable al hogar, lo que aproxima una forma de pobreza más
estructural (Kaztman, 1989; Boltvinik, 1990).
Por otro lado, hay recursos cuya posesión se renueva o varía más frecuentemente, por lo que los
hogares con carencia de estos bienes y servicios no necesariamente están expuestos a una privación
permanente, sino que pueden ser adquiridos o recuperados con cambios moderados en sus ingresos
corrientes. Usualmente la insuficiencia de recursos corrientes se debe a un shock económico adverso
que por un tiempo deteriora las condiciones de vida de los integrantes del hogar (INDEC, 2004).
De esta manera se obtiene la clasificación de los hogares en cuatro categorías: aquellos que tienen
suficiencia de recursos en los dos ámbitos considerados y los grupos que presentan algún tipo de
insuficiencia: solo de recursos corrientes, solo habitacionales y la convergente, es decir, en ambos
(figura 1).
Insuficiencia Suficiencia
sólo de de recursos
Condiciones habitacionales
Suficiente
recursos
corrientes
Insuficiencia Insuficiencia
Insuficiente
convergente sólo de
condiciones
habitacionales
Insuficiente Suficiente
Recursos corrientes
Para aproximar las condiciones de suficiencia más estructural de los hogares se seleccionó la
vivienda, pues constituye un bien que se acumula en el largo plazo y que da cuenta de características
poco variantes en períodos cortos. Este componente evalúa las condiciones habitacionales de los
hogares y toma en cuenta la durabilidad, y el estado de los materiales del piso, techo y paredes de la
vivienda, así como la tenencia de servicios básicos (como agua, saneamiento y electricidad).
Para calcular este índice se utiliza el material predominante del piso, techo y paredes, así como de su
estado. Cada una de las variables se clasifica como suficiente, parcialmente insuficiente o insuficiente.
A pesar de que las variables del estado de los materiales son bastantes subjetivas, aproximan las
características de calidad de la vivienda que se pretende medir.
Se construyó una escala que mide la durabilidad de los materiales a partir de un puntaje que va de 1
a 3, en donde 1 equivale a la menor calidad (insuficiente) y 3 a la mayor (suficiente). El puntaje que se
asignó a cada categoría es el siguiente:
a.Piso: 3 a cerámica, mosaico, terrazo, cemento y madera; 2 a material natural y 1 a otro material o
piso de tierra.
b.Techo: 3 a zinc, fibrolit, ricalit o asbesto; 2 a material natural y 1 a material de desecho u otro.
c.Paredes: 3 a block, ladrillo, zócalo, madera, prefabricado o baldosas, fibrolit o ricalit; 2 a fibras
naturales y 1 a material de desecho.
Igualmente se construyó una escala para el estado de los materiales, en donde se asignó un 3 al
estado bueno (suficiente), 2 al estado regular (parcialmente insuficiente) y 1 al mal estado (insuficiente).
Se usa una ecuación multiplicativa, partiendo de la lógica de bienestar integral, es decir, el estado y
la calidad de una de las partes de la vivienda determina las condiciones habitacionales en su conjunto,
están interrelacionadas, por lo que no son independientes. Los valores que toma esta escala están
entre 1 y 729.
Una vez que se cuenta con la escala de condiciones habitacionales, se segmenta siguiendo un
análisis de conglomerados. Esta técnica consiste en determinar grupos de casos mediante el cálculo
de distancias o similitudes resultantes de los valores de variables determinadas. En este caso lo que se
pretende es formar grupos de viviendas claramente definidos en función de los puntajes de la escala.
44
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Los hogares también disponen de recursos corrientes constituidos por un flujo monetario de uno
o más de sus miembros -los ingresos del hogar- estos les permiten a las personas que conforman
esa familia adquirir los bienes y servicios necesarios para vivir. Cuando los ingresos no les permite
satisfacer las necesidades básicas de subsistencia, se dice que ese hogar está en condiciones de
pobreza.
Una limitante para analizar los recursos corrientes del hogar con base en los censos de población
es que estos no preguntan por los ingresos de las personas ni de los hogares. Por lo tanto, para
poder medir esta dimensión y su grado de suficiencia, se utilizó un indicador que aproxima el nivel de
ingresos del hogar, a partir de los años de educación formal de las personas y otras características de
los perceptores de ingresos.
El indicador propuesto construye una estratificación del nivel de suficiencia de ingresos, calculada
por medio de una aproximación indirecta. Se basa en el supuesto de que la educación de las personas
(los años de estudio aprobados en el sistema formal de enseñanza), asociada a otras características
individuales; tales como el sexo, la edad o la zona de residencia, permiten estimar de forma bastante
aproximada los ingresos que perciben en el mercado laboral.
Para estimar la condición de percepción de los individuos se construyó una matriz que diferencia
los ingresos de los perceptores según sus características4: sexo, edad, nivel de educación y tipo de
trabajador (asalariado o independiente). Se utilizaron como fuentes de información la Encuesta de
Propósitos Múltiples del 2000 y la Encuesta Nacional de Hogares del 2011.
También se calculó la edad a la cual un trabajador promedio alcanza los ingresos más altos de su
vida laboral5. Se estimaron los ingresos promedio de los ocupados por edades simples a partir de las
encuestas de hogares.
Además, se seleccionó una persona denominada “testigo” quien sirve de parámetro de comparación
con los individuos, para calcular la capacidad de percepción de ingresos del resto. Esta persona
cumple con las siguientes características: sexo masculino, de 47 años o más, que reside en zona
urbana y sin años de educación formal. Su capacidad de percepción es igual a 1.
En este sentido, el resto de los individuos se comparan con esta persona, estimando un coeficiente
para establecer las diferencias de sus ingresos. Cuando el coeficiente es menor que 1 significa que,
dadas las características del individuo, sus ingresos estimados son inferiores a los del testigo; cuando
es mayor que 1, sus ingresos son superiores. Se estimaron los coeficientes para los trabajadores
asalariados y los independientes, por separado, pero manteniendo las mismas características del
testigo, excepto su condición de trabajador.
4/ No se agregaron más características para evitar la pérdida de casos en alguna de las condiciones, es decir, para no tener
categorías en blanco. Se considera que las variables seleccionadas permiten aproximar adecuadamente los ingresos de
las personas.
5/ Para estimar los límites de edad se calculó el ingreso promedio de los ocupados por edades simples. Se modeló una
función cuadrática para encontrar el punto máximo de la curva (pues los ingresos por edad no se comportan como una
función lineal). Se calculó la primera derivada de la función cuadrática y se igualó a cero. Este punto corresponde a la edad
promedio en que una persona percibe sus mayores ingresos a lo largo de su vida laboral activa. A partir de esa edad los
rendimientos empiezan a ser decrecientes. Los resultados mostraron que esto sucede a los 47 años.
45
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Sin embargo, con base en este método, existen hogares en los cuales no se les está estimando su
capacidad de percepción: las personas no remuneradas y los pensionados. Para resolver el problema,
se procedió de la siguiente manera.
Se calculó el promedio de los “otros ingresos” según el sexo y se comparó con el ingreso del “testigo”
para las personas no remuneradas. Por otro lado, para las personas pensionadas que no están ocupadas
laboralmente se estimó el promedio de sus ingresos por pensión y también se comparó con el “testigo”.
Con el fin de construir la capacidad económica del hogar “capeco” se le asignó un coeficiente para
generar ingresos a todas las personas de 15 años o más. Además, se calcula un promedio por hogar,
controlado por el número de miembros6. Los hogares en situación de privación de recursos corrientes
son pobreza
aquellos7.cuyo
Estevalor de “capeco”
umbral estableceseque
encuentra por debajo
los hogares de un umbral,
no perciben establecido,
los ingresos con base
necesarios
en el valor de la línea de pobreza7. Este umbral establece que los hogares no perciben los ingresos
para adquirir
necesarios los bienes
para adquirir y servicios
los bienes considerados
y servicios básicos
considerados parapara
básicos su subsistencia.
su subsistencia.
!"# = ! !"#$!%
En donde: Ypc=ingreso per cápita del hogar y capeco=capacidad económica del hogar.
En donde: Ypc=ingreso per cápita del hogar y capeco=capacidad económica del
Se suprimió la constante pues no es necesario pronosticar los ingresos en hogares sin capacidad
hogar.
de generar ingresos (no existe este tipo de hogar). Se estimó una regresión univariada con errores
robustos. Se calcula para los hogares, según la zona de residencia (urbana o rural), pues la línea de
Setiene
pobreza suprimió la constante pues no es necesario pronosticar los ingresos en hogares
esa desagregación.
sin capacidad de generar ingresos (no existe este tipo de hogar). Se estimó una
Por último, se despeja la función y se estima el límite de la línea de pobreza, el cual que es equivalente
a losregresión
coeficientes de “capeco”.
univariada con Los hogares
errores cuya capacidad
robustos. Se calcula económica
para los está por debajo
hogares, segúndelaeste
zonalímite
se clasifican en situación de insuficiencia de recursos corrientes.
de residencia (urbana o rural), pues la línea de pobreza tiene esa desagregación.
Principales
resultados
6/ Se excluye a los pensionistas y servidores domésticos (y sus miembros) que residen en el hogar, pero que no son parte del
hogar.
Selacalcula
7/ Se utiliza el deestado
metodología de suficiencia
pobreza oficial de todos
en el país estimada los hogares
por el INEC. del
Se adoptan los país, con
límites de los de
la línea datos
pobreza
total, para la zona urbana y la rural, tal y como los calcula oficialmente el INEC.
de los Censos de Población del 2000 y 2011, resultados que se muestran en el cuadro
1. Además, en el 2011 el 47,8% de los hogares presenta algún tipo de insuficiencia:
46
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Se calcula el estado de suficiencia de todos los hogares del país, con los datos de los Censos de
Población del 2000 y 2011, resultados que se muestran en el cuadro 1. Además, en el 2011 el 47,8%
de los hogares presenta algún tipo de insuficiencia: el 25,8% tiene insuficiencia en las condiciones
habitacionales, equivalente a 318.862 hogares; el 10,7% presenta insuficiencia de recursos corrientes,
para 132.333 hogares; y el 11,3% posee insuficiencia convergente. Es decir, condiciones insuficientes
en ambas dimensiones, correspondientes a 139.411 hogares.
Cuadro 1
Hogares según condición de suficiencia
2000 y 2011
Distribución
Hogares
porcentual
Condición
2000 2011 2000 2011
En relación con las estimaciones obtenidas para el año 2000, la proporción de hogares con insuficiencia
en las condiciones habitacionales, disminuye en 1,6 puntos porcentuales (figura 2), mientras que se
incrementan en magnitud similar los hogares con insuficiencia de recursos corrientes (1,7 puntos), así
como los hogares con insuficiencia convergente (1,1 puntos). Estos resultados ponen en evidencia los
pocos avances en la última década en la reducción de las condiciones insuficientes entre los hogares;
en especial, las escazas oportunidades de muchas personas para mejorar la generación de ingresos
corrientes.
47
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Condiciones habitacionale
Suficiente
9,0% 53,4% 10,7% 52,3%
Insuficiente
Insuficiente
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
Por zona de residencia (gráfico 1), los hogares rurales con insuficiencia convergente duplican a
los urbanos (17,7% versus 8,9%), los cuales también son más afectados por insuficiencia en las
condiciones habitacionales (31,2% versus 23,8%), mientras que la insuficiencia de recursos corrientes
no muestra diferencias importantes entre zonas (9,9% urbana y 13,0% rural).
Gráfico 1
Hogares según condición de insuficiencia, por zona.
2000 y 2011
40%
30%
20%
10%
0%
Urbana Rural Urbana Rural Urbana Rural
Insuficiencia condiciones Insuficiencia de recursos Insuficiencia convergente
habitacionales corrientes
2000 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
48
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
La diferencia por zona en las incidencias muestra que la insuficiencia en las condiciones habitacionales
se redujo en la última década en una magnitud de 0,5 puntos porcentuales, mientras que la diferencia
aumentó en 0,6 puntos en la insuficiencia de recursos corrientes y se mantuvo casi igual en la
convergente.
La distribución de los hogares con insuficiencia en las condiciones habitacionales según cantones
muestra que las zonas fronterizas del norte y del sur del país, junto con algunos cantones costeros,
presentan los mayores porcentajes de hogares con estos problemas, como se observa en el mapa 1.
Por el contrario, los cantones de la región Central, principalmente de Heredia, y algunos de San José y
Cartago, cuentan con las mejores condiciones habitacionales8.
Mapa
Mapas1.
1. Hogares con insuficiencia
Hogares con insuficiencia en
en condiciones condiciones
habitacionales. habitacionales.
Censos 2000 y 2011 Censo 2000 y 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
8/ El cuadro A1 en el anexo muestra en detalle la distribución de los hogares por condición de suficiencia según cantón de
residencia para los Censos 2000 y 2011.
49
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Gráfico 2
Diez cantones con mayor insuficiencia habitacional en 2011, según su cambio
porcentual respecto al año 2000
Talamanca
Osa
Golfito
Aguirre
Matina
Corredores
Los Chiles
Desmejoran
Turrubares
La Cruz
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
Entre el 2000 y 2011 los mayores aumentos en el porcentaje de hogares con insuficiencia de recursos
corrientes se dieron en los cantones de Poás, Talamanca, Guatuso, Atenas y Turrialba. Entre los diez
cantones con mayor porcentaje de hogares con insuficiencia de recursos corrientes, destacan los
aumentos que se dieron en Nicoya, Santa Cruz, Bagaces y Hojancha. Por su parte, Dota y Nandayure
mejoraron en la década, aunque se mantienen entre los de mayor incidencia (gráfico 3).
50
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Fuente: Elaboración
Fuente: propia
Elaboración con datos
propia de los de
con datos Censos de Población
los Censos del INEC.del INEC.
de Población
51
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Gráfico 3
Diez cantones con mayor insuficiencia de recursos corrientes en 2011, según su
cambio porcentual respecto al año 2000
Dota
Mejoran
Nandayure
Carrillo
Tilarán
Pérez Zeledón
Guácimo
Desmejoran
Hojancha
Bagaces
Santa Cruz
Nicoya
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
La distribución de los hogares con insuficiencia convergente (insuficiencia en las dos dimensiones) se
presenta en el mapa 3 . Para el 2011 las mayores incidencias las registran los cantones de Los Chiles,
Matina, Upala, La Cruz, Buenos Aires, Sarapiquí y Talamanca. Nuevamente, las zonas fronterizas y
costeras poseen los mayores porcentajes de hogares con insuficiencia convergente; mientras que la
región Central exhibe los menores.
De ellos, los aumentos más altos en la insuficiencia convergente entre 2000 y 2011 se dieron en
Matina, Talamanca, Sarapiquí, Coto Brus y Nandayure. En el otro extremo, los cantones con las mejoras
más importantes fueron La Cruz, Upala y Los Chiles, cuyos porcentajes disminuyeron en más de 7
puntos porcentuales en ese período, aunque los tres se mantienen entre los cinco de mayor incidencia
en 2011 (gráfico 4).
52
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Es evidente la reducción de los cantones, cuyos porcentajes de hogares con insuficiencia convergente
era inferior al 10%, al pasar de 40 cantones en el 2000, a 31 en el 2011 (y que se ilustra con la disminución
de las zonas verdes en el mapa del 2011). Muchos de estos cantones pasaron a la siguiente categoría,
cuyos porcentajes de insuficiencia se ubican entre un 10% y un 15% (aumentaron de 18 a 25 cantones).
Gráfico 4
Diez cantones con mayor insuficiencia convergente en 2011, según su cambio
porcentual respecto al año 2000
La Cruz
Upala
Buenos aires
Guatuso
Nandayure
Coto Brus
Sarapiquí Desmejoran
Talamanca
Matina
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
Con el objetivo de obtener un perfil de los hogares con insuficiencia convergente, se estimaron
algunas características básicas según los censos 2000 y 2011, para el total del país y para los diez
cantones con los mayores porcentajes de insuficiencia9.
Del análisis realizado se destaca que los hogares con insuficiencia convergente se caracterizan
por tener más miembros por hogar y más adultos mayores que sus contrapartes. Además, la persona
jefa de hogar tiene baja escolaridad, pues ni siquiera logra completar la educación primaria. Tienen
mayor proporción de hogares en donde ninguno de sus miembros es asegurado, o menor acceso
adecuado a servicios como agua y eliminación de excretas (aunque ambos servicios muestran
progresos importantes en la última década). Adicionalmente, están en clara desventaja en el acceso a
las TIC, pues una proporción muy baja de esos hogares posee computadora o Internet en su vivienda.
A continuación, se detalla cada una de las características seleccionadas.
9/ Los cantones seleccionados son: Upala, Los Chiles, Sarapiquí, Nandayure, La Cruz, Buenos Aires, Coto Brus, Talamanca,
Matina y Guácimo. El detalle de los indicadores y sus resultados están disponibles en el cuadro A2 del anexo.
54
Pobreza y Brechas Morales & Segura Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El primer indicador seleccionado son los años de escolaridad promedio de la persona jefa del hogar.
Para el total del país, este aumentó en un año, al pasar de 7,3 a 8,3 años entre el 2000 y el 2011. Para
los hogares con insuficiencia convergente el aumento fue de apenas 0,8 puntos porcentuales y se
mantiene muy bajo, al pasar de 4,4 a 5,2 años en el mismo período. Es decir, en promedio los jefes
de estos hogares ni siquiera logran completar la educación primaria. Entre los hogares que residen en
los diez cantones con mayor insuficiencia, destaca el caso de Los Chiles, cuyos jefes en promedio en
el 2011 apenas alcanzan 3,4 años de educación. En ninguno de los cantones seleccionados la cifra
llega a los cinco años.
El tamaño promedio del hogar disminuyó de 3,9 a 3,4 entre el 2000 y el 2011. Para los hogares con
insuficiencia convergente, la disminución fue mayor, aunque en el 2011 apenas alcanzó la cifra del
2000. En siete de los diez cantones con mayor insuficiencia el promedio supera los 4 miembros por
hogar.
Otras condiciones con progresos notables en la última década es el acceso a servicios básicos
adecuados (agua, electricidad y eliminación de excretas), aumentos particularmente relevantes en los
hogares con insuficiencia convergente10. Por ejemplo, un adecuado sistema de eliminación de excretas
en estos hogares alcanza al 85,7% en el 2011, para un aumento de 20,6 puntos porcentuales respecto
al año 2000.
Entre los diez cantones con mayores porcentajes de insuficiencia convergente destacan las mejoras
en el acceso adecuado a los tres servicios básicos seleccionados en Upala, Los Chiles, La Cruz,
Buenos Aires, Coto Brus y Sarapiquí, aunque los restantes cuatro cantones también mostraron aumentos
importantes. Aun así, cantones como Los Chiles, Coto Brus y Matina mantienen un rezago significativo
respecto a las condiciones del resto de cantones y de los hogares con suficiencia de recursos.
10/ Los hogares con acceso a servicios básicos adecuados en las tres variables seleccionadas superan el 95% para el
promedio del país.
55
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Entre el 2000 y el 2011 se puede comparar el acceso a solamente dos artefactos: teléfono residencial
y computadora. En ambos casos es notable el avance que se dio en el acceso en los hogares con
insuficiencia convergente, aunque como se mencionó, aún se mantienen muy por debajo del resto
de hogares del país. Por ejemplo, la tenencia de computadora en la vivienda pasó del 1,4% de los
hogares con insuficiencia en el 2000 al 14% en el 2011, mientras que el teléfono residencial pasó del
20% al 33,5% en el mismo período. Destacan las mejoras que se dieron en los cantones de La Cruz y
Talamanca.
Los resultados obtenidos en los procesamientos de la información censal para estimar el índice de
suficiencia material y de recursos corrientes muestra que el 47,8% de los hogares del país presenta
algún tipo de insuficiencia en 2011, con mayor incidencia de la habitacional (25,8%), que la de recursos
corrientes (10,7%), un 11,3% de los hogares están afectados por ambas (insuficiencia convergente).
No se observan cambios importantes en la última década según los censos 2000 y 2011.
Un perfil básico de los hogares con insuficiencia convergente muestra que estos se caracterizan
por tener más miembros por hogar y más adultos mayores; la persona jefa de hogar posee baja
escolaridad, la cual ni siquiera logra completar en promedio la educación primaria. En estos hogares
también carecen de acceso a la seguridad social y a servicios como agua y eliminación de excretas
(aunque ambos servicios muestran notables progresos en la última década). Adicionalmente, están en
clara desventaja en el acceso a las TIC, pues una proporción muy baja posee computadora o Internet
en su vivienda.
Otro resultado importante del análisis realizado es la gran desigualdad en la distribución de las
oportunidades territoriales. Sistemáticamente, los residentes en ciertas zonas del país tienen desventajas
en casi todos los indicadores que se midan: los cantones fronterizos y costeros (del Norte y Sureste del
país) y las áreas rurales. Mientras que la región Central, comparativamente, resulta mejor en casi todo
el estudio, y se reconoce como una zona de gran concentración, tanto de las oportunidades como de
la población.
Las amplias brechas geográficas pueden explicarse por diversos factores, entre los cuales destacan
la población muy concentrada en el territorio, en la zona central del país; las distancias con respecto
a las zonas donde se toman las decisiones; problemas en la asignación de las políticas públicas y
privadas; el tipo de actividades productivas que se realizan en las regiones; así como la disposición y
el tipo de recursos naturales; entre otros.
Por último, es necesario diseñar políticas que generen fuentes de empleo y brindar programas
focalizados o de transferencias condicionadas para los cantones con alta proporción de hogares con
insuficiencia de recursos corrientes, de manera que puedan satisfacer sus necesidades inmediatas.
V. Anexos
Cuadro A1
a/
Hogares por condición de suficiencia de recursos , según cantón de residencia
2000 y 2011
101 San José 57,6 29,7 6,1 6,6 54,9 29,2 7,5 8,4
102 Escazú 62,1 25,2 7,2 5,5 63,9 22,1 8,9 5,0
103 Desamparados 59,9 26,4 7,2 6,6 56,8 26,3 8,5 8,4
104 Puriscal 50,6 23,9 13,3 12,3 51,7 24,5 12,4 11,4
105 Tarrazú 56,0 21,7 14,0 8,3 52,5 24,3 12,9 10,4
106 Aserrí 51,0 29,3 9,5 10,1 51,2 27,7 10,6 10,5
107 Mora 53,2 29,1 8,9 8,8 56,7 22,5 11,4 9,4
108 Goicoechea 63,7 24,4 6,8 5,1 59,7 25,5 7,5 7,3
109 Santa Ana 61,3 25,9 6,9 5,9 67,5 19,4 8,4 4,7
110 Alajuelita 48,5 34,1 7,9 9,5 47,9 31,3 8,9 11,8
111 Coronado 66,6 21,4 7,1 4,9 64,9 21,7 7,5 5,9
112 Acosta 45,6 32,4 9,9 12,1 47,7 27,3 12,8 12,2
113 Tibás 64,4 24,6 5,8 5,2 62,8 23,3 7,1 6,8
114 Moravia 71,3 18,8 6,4 3,5 70,2 17,5 7,9 4,4
115 Montes de Oca 71,1 18,3 7,5 3,0 68,2 17,0 10,8 4,1
116 Turrubares 36,2 34,6 14,5 14,8 33,0 38,5 10,9 17,6
117 Dota 56,8 20,2 15,5 7,5 59,1 18,0 14,1 8,9
118 Curridabat 65,6 22,4 6,7 5,3 65,0 20,5 8,3 6,2
119 Pérez Zeledón 43,8 27,6 14,3 14,3 47,0 24,0 15,7 13,3
120 León Cortés 44,6 30,8 13,5 11,1 44,2 29,4 12,9 13,6
201 Alajuela 59,6 25,7 8,1 6,7 58,5 23,6 9,8 8,2
202 San Ramón 52,8 26,3 10,5 10,3 53,6 23,9 12,5 10,1
203 Grecia 58,3 24,9 9,4 7,4 55,8 23,0 10,9 10,2
204 San Mateo 51,1 31,7 9,3 7,9 43,7 32,2 10,9 13,2
205 Atenas 64,6 20,5 9,5 5,4 59,8 19,0 13,8 7,4
206 Naranjo 51,8 26,8 11,0 10,4 52,2 24,0 13,1 10,8
207 Palmares 59,2 24,2 9,2 7,3 54,8 25,3 10,6 9,4
208 Poás 57,7 25,7 8,9 7,7 55,9 20,4 13,6 10,1
209 Orotina 51,8 27,7 11,1 9,5 48,2 26,7 11,2 13,9
210 San Carlos 42,8 30,2 11,5 15,5 47,8 26,2 12,4 13,5
211 Zarcero 60,7 23,9 9,4 5,9 60,8 21,0 11,8 6,4
212 Valverde Vega 49,8 29,1 11,7 9,5 50,9 25,0 12,1 12,0
213 Upala 23,8 34,8 9,9 31,5 29,3 35,6 11,8 23,4
214 Los Chiles 22,8 35,3 8,9 33,0 27,9 36,1 10,9 25,2
215 Guatuso 27,0 44,6 8,0 20,5 31,8 35,5 12,4 20,3
301 Cartago 63,9 20,4 9,6 6,1 62,1 19,1 11,3 7,5
302 Paraíso 61,3 21,3 11,2 6,2 56,1 20,6 13,9 9,5
Continua…
57
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
Continua Cuadro A1
Censo 2000 Censo 2011
Código Nombre
SUF ICH IRC IC SUF ICH IRC IC
303 La Unión 60,9 25,9 6,5 6,8 61,0 23,5 7,8 7,8
304 Jiménez 50,4 30,4 10,3 8,9 42,6 30,0 13,5 13,9
305 Turrialba 53,7 27,3 9,2 9,8 51,0 23,6 13,4 12,0
306 Alvarado 62,0 19,8 11,7 6,5 58,5 20,8 13,3 7,4
307 Oreamuno 63,1 20,0 10,5 6,5 62,2 17,2 13,6 6,9
308 El Guarco 60,5 21,5 10,5 7,5 61,4 19,3 11,2 8,0
401 Heredia 70,1 18,6 7,0 4,3 68,9 17,7 8,3 5,1
402 Barva 67,7 19,6 7,5 5,2 69,4 17,0 8,6 5,1
403 Santo Domingo 70,0 19,4 6,6 4,0 68,8 19,4 7,3 4,5
404 Santa Bárbara 62,4 22,2 9,0 6,3 65,0 18,5 10,8 5,7
405 San Rafael 63,6 23,7 7,0 5,7 65,1 20,2 8,3 6,4
406 San Isidro 65,5 20,9 8,7 4,9 67,3 19,8 8,1 4,8
407 Belén 69,5 18,7 8,2 3,5 72,9 15,1 8,3 3,7
408 Flores 70,6 17,0 8,4 4,0 73,0 14,2 9,2 3,6
409 San Pablo 68,7 20,0 7,1 4,2 73,5 14,6 7,9 4,0
410 Sarapiquí 33,6 35,8 10,2 20,5 31,6 34,4 12,2 21,8
501 Liberia 51,6 25,5 10,9 12,0 52,3 23,0 11,5 13,2
502 Nicoya 38,4 32,5 11,7 17,4 40,9 27,1 15,0 17,0
503 Santa Cruz 43,8 28,5 11,6 16,1 46,5 24,4 14,6 14,5
504 Bagaces 45,6 29,9 12,0 12,5 38,1 29,2 14,8 17,9
505 Carrillo 45,7 24,5 14,6 15,2 45,7 23,5 15,3 15,6
506 Cañas 41,4 34,6 9,1 14,9 41,5 31,0 12,6 14,9
507 Abangares 36,2 35,7 10,2 17,9 37,2 32,9 11,9 18,0
508 Tilarán 51,3 22,7 15,1 10,9 49,0 23,0 16,0 12,0
509 Nandayure 36,3 28,1 16,4 19,1 35,2 29,3 15,4 20,2
510 La Cruz 23,6 32,0 11,4 33,0 29,2 36,9 11,1 22,8
511 Hojancha 42,2 28,7 13,9 15,2 41,2 27,9 16,4 14,6
601 Puntarenas 45,8 30,2 10,3 13,7 39,4 32,8 11,2 16,6
602 Esparza 51,8 27,2 10,4 10,6 48,9 28,9 10,1 12,1
603 Buenos Aires 28,6 38,7 9,7 23,1 28,9 35,9 12,6 22,6
604 Montes de Oro 48,5 29,2 12,1 10,1 49,4 26,2 12,9 11,6
605 Osa 26,0 45,1 7,4 21,5 31,9 37,7 10,7 19,6
606 Aguirre 40,0 38,7 8,2 13,0 37,5 36,2 9,5 16,8
607 Golfito 30,1 39,7 9,2 21,1 33,3 35,7 11,3 19,8
608 Coto Brus 33,2 36,3 11,1 19,5 33,9 33,1 12,3 20,7
609 Parrita 39,5 32,3 10,5 17,7 37,9 32,5 13,2 16,4
610 Corredores 35,2 36,4 9,1 19,3 35,6 36,4 9,7 18,3
611 Garabito 47,4 29,3 12,4 11,0 49,3 27,0 11,3 12,4
701 Limón 43,6 31,3 10,1 14,9 39,2 31,1 11,4 18,3
702 Pococí 41,5 30,5 11,0 16,9 39,1 31,5 12,2 17,1
703 Siquirres 37,9 34,3 10,6 17,2 35,6 33,6 12,2 18,5
704 Talamanca 24,4 47,6 7,9 20,1 29,7 36,0 12,5 21,8
705 Matina 33,1 39,8 8,5 18,7 26,1 39,6 10,0 24,3
706 Guácimo 43,6 28,2 12,8 15,5 36,5 32,0 14,5 17,0
58
Cuadro A2
Pobreza y Brechas
Características seleccionadas de los hogares: total, con insuficiencia convergente y los que residen en los diez cantones
con mayor insuficiencia convergente
2000 y 2011
Años de estudio
promedio del jefe
de hogar
2000
Total 7,3 4,4 3,2 2,8 3,5 3,5 4,1 3,1 3,6 3,7 3,5 3,8
Jefatura masculina
7,3 4,3 3,2 2,8 3,5 3,4 4,1 3,1 3,6 3,7 3,4 3,8
Jefatura femenina 7,1 4,6 2,9 2,6 3,7 3,8 3,9 3,3 3,4 3,9 3,8 4,0
2011
Total 8,3 5,2 4,2 3,4 4,2 4,1 4,9 4,3 4,5 4,2 4,8 4,8
Jefatura masculina
8,3 5,0 4,1 3,2 3,9 3,9 4,8 4,2 4,3 4,1 4,6 4,6
Jefatura femenina 8,4 5,5 4,3 3,7 4,7 4,5 5,0 4,5 4,7 4,4 5,1 5,1
Tamaño del hogar
2000 3,9 4,4 5,1 5,3 4,8 4,6 3,9 5,5 5,2 4,7 5,1 4,7
2011 3,4 3,8 4,1 4,3 3,6 4,1 3,5 4,2 4,0 3,8 4,3 4,2
Continuación…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Cuadro A2
Hogares con al
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
menos un miembro
de 65 o más años
2000 17,2 18,3 21,5 16,0 17,3 12,1 24,8 18,3 19,2 18,7 16,3 13,6
2011 19,5 21,5 24,3 20,3 23,7 15,6 31,3 20,9 21,8 28,5 15,7 13,6
Hogares con
acceso a servicios
básicos adecuados
2000
Agua 89,4 76,5 52,4 35,6 61,4 35,2 54,4 64,5 51,4 73,3 40,9 60,6
Eliminación excretas 89,4 65,1 26,3 21,6 41,5 49,5 44,2 25,2 35,6 50,1 35,0 55,4
Electricidad 96,8 88,0 63,2 52,1 83,6 74,6 81,9 57,1 60,5 89,0 66,1 85,5
2011
Pobreza y Brechas
Agua 93,1 85,6 86,7 67,6 93,8 51,8 80,7 84,2 69,3 81,9 50,4 67,9
Eliminación excretas
95,6 85,7 69,6 53,3 78,1 81,1 80,5 64,5 71,2 76,0 62,3 79,0
Electricidad 98,9 96,1 89,0 83,8 93,9 94,3 97,5 88,2 84,3 92,9 79,7 94,6
Continuación…
Morales & Segura
59
60
Pobreza y Brechas
Continuación Cuadro A2
Diez cantones con mayor insuficiencia convergente
Morales & Segura
Promedio
Promedio hogares con
Características Los Sara- Nanda- La Buenos Coto Tala-
nacional insuficiencia Upala Matina Guácimo
convergente Chiles piquí yure Cruz Aires Brus manca
Hogares con
acceso a TIC's
2000
Teléfono residencial 54,3 19,9 3,5 2,2 7,1 5,6 4,0 6,1 5,2 7,2 5,6 4,8
Computadora 14,1 1,4 0,2 0,1 0,2 0,8 0,6 0,1 0,1 0,7 1,0 0,5
2011
Teléfono residencial 57,8 33,5 21,0 12,8 18,3 24,4 33,6 23,5 17,5 27,4 18,2 21,5
Teléfono celular 87,2 73,0 60,1 61,8 70,7 70,3 67,1 65,0 65,4 67,5 47,1 70,5
Computadora 46,0 14,0 5,9 3,6 7,3 7,3 10,6 5,3 8,0 9,8 5,9 5,8
Internet 33,5 6,7 1,5 1,7 1,6 3,1 3,4 2,2 2,8 4,0 2,7 2,1
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
61
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Pobreza y Brechas Morales & Segura
VI. Bibliografía
INDEC. 2004. Metodología de elaboración del Índice de Privación Material de los Hogares (IPMH). El
estudio de la pobreza según el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2001. Buenos Aires,
Argentina: Instituto Nacional de Estadística y Censos, Dirección Nacional de Estadísticas Sociales y de
Población, Dirección de Estadísticas Poblacionales, Área de Información Derivada.
INEC. 2012. Resultados generales del X Censo Nacional de Población y VI de Vivienda 2011. San
José, Costa Rica: INEC.
Regionalización
y Segregación
Alex Brenes, Heriberto Ureña & Rogelio Palomo
Insumo para una propuesta de regionalización de la
estructura socioeconómica con base en la información
del Censo 2011.
.
65
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Resumen
El estudio establece una propuesta inicial de zonificación del territorio nacional con base en la
información socioeconómica del Censo 2011. Esto con el fin de generar insumos para un posterior análisis
de la regionalización en Costa Rica. Se generó el Índice Sintético de Desigualdad Socioeconómica
(ISDS) como instrumento para aproximar el análisis de la desigualdad socioeconómica y su distribución
espacial. Se asignó a cada distrito una posición con respecto a la desigualdad y se agruparon en
cuartiles etiquetados en Alta, Media-Alta, Media-Baja y Baja desigualdad. Para el 2011, de los 472
distritos considerados 25,4% se ubican en la situación Media-Baja.
La autocorrelación espacial que incluyó el análisis de los desfases espaciales (promedios móviles) y
aglomeraciones identificadas por el I de Moran, evidenciaron que existen patrones espaciales distritales,
según las categorías establecidas. Además, se analiza la aglomeración de servicios presentes en los
distritos, y se forman seis grupos a partir del procedimiento K-medias, relativamente homogéneos,
con respecto a las variables de servicios seleccionados; estos grupos se definieron considerando la
clasificación de los niveles de lugares centrales establecidos por Helmut Nuhn.
El resultado muestra un incremento de centros funcionales de II Nivel en el Caribe Norte, Puerto Viejo
y Horquetas de Sarapiquí, Guápiles, La Rita y Cariari de Pococí, así como Puntarenas, el cual cede
jerarquía con respecto a Barranca.
La sobreposición de los mapas obtenidos generó una propuesta de zonificación socioeconómica que
incluye distritos con grados similares de desigualdad y los centros funcionales, se establecen 12 zonas
homogéneas socioeconómicas con al menos un centro funcional del II Nivel. El estudio sugiere que
con base en la información del Censo 2011 es necesario complementar el análisis en aspectos tales
como; población atraída según el tipo y la calidad de servicio, así como considerar otras dimensiones:
ambientales, competitivas, productivas e inversiones, entre otras, que ayuden a definir las regiones y
subregiones.
*/ Agradecemos a la Coordinadora María del Milagro Muñoz Bonilla y al equipo del Área de Planificación Regional. Olman
Ramírez, Edgar Gutiérrez, Gilbert Brenes, Sharon Kuhlmann, Greivin Barboza, Gerardo Ramírez, Lenin Collado, Diego
Vargas, Sara Víquez, Mario Robles, Grace Castillo, a los organizadores del Simposio y a los funcionarios del INEC en
especial a Randall Chavarría.
66
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
I. Introducción
Por esta razón, es fundamental definir los espacios territoriales en los cuales se puede desenvolver la
urgente articulación de la vida nacional, recordando la sentencia de que un espacio no racionalizado,
no definido o analizado económicamente y organizado es un espacio subutilizado1.
En este sentido, han proliferado las definiciones de tipos de región, ya sean funcionales, administrativas
o socioeconómicas; homogéneas, región plan y región polarizada. La región funcional es el área
donde se establecen relaciones estrechas, sociales y económicas, que pueden o no sobrepasar, por
su interdependencia, los límites cantonales, que presentan centros urbanos con cierto alcance o área
de influencia2.
Las instituciones del Estado, atendiendo a sus necesidades administrativas, han establecido sus
propias regionalizaciones funcionales; algunas de esas son las siguientes: el Ministerio de Cultura
que regionaliza con provincias (Decreto 25692-C de 1996), Ministerio de Educación que establece su
propia regionalización (Decreto 23490-MEP de 1994), Ministerio de Ambiente y Energía que divide el
territorio en nueve regiones de tipo forestal (Decreto 22840-MIRENEM, 1994) y regionaliza el Sistema de
Áreas de Conservación (SINAC), el Ministerio de Salud (Decreto 24036-S-PLAN 1995) y el Ministerio de
Agricultura y Ganadería (MAG), por citar algunas de las más importantes, de esta manera, el esquema
administrativo nacional se inclina a la coordinación sectorial.
Por su parte, MIDEPLAN adecuó la división política administrativa mediante el estudio de Nuhn en 1978
y estableció regiones socioeconómicas más o menos correspondientes a los grupos étnico históricos
del país (Decreto 16068-PLAN, 1985). Son esquemas espaciales que corresponden aproximadamente
a las vertientes hidrográficas y a las zonas climáticas. Se puede decir que son espacios con cierta
continuidad socioeconómica y características culturales propias, las cuales contienen una o varias
ciudades intermedias.
El objetivo del estudio es establecer una propuesta inicial de zonificación del territorio nacional con
base en la información socioeconómica del Censo 2011. Esto con el fin de brindar insumos para un
posterior análisis de la regionalización en Costa Rica, al estimar la estructura socioeconómica del
territorio nacional, mediante la información actualizada del Censo 2011; valorar los posibles cambios
en la estructura de los centros funcionales establecidos en la metodología desarrollada por Nuhn, y
contribuir en el proceso de revisión de indicadores socioeconómicos como insumo para la actualización
de las regiones de planificación en Costa Rica.
II. Metodología
La investigación se enfoca desde dos perspectivas de análisis, las cuales son complementarias para
responder a los objetivos del acápite anterior. La primera etapa se centra en la propuesta y elaboración
de un Índice Sintético de Desigualdad Socioeconómica (ISDS) con distribución distrital La segunda
etapa analiza una serie de servicios presentes en los distritos del país, con el fin de contrastarlos con
el comportamiento del ISDS y los resultados brindados en el estudio “La descentralización del territorio
en el sector servicios y su significado para el desarrollo del sistema de lugares centrales en Costa Rica
1970-1985” (Nuhn, 1989). A continuación, se desarrollan los métodos para cada una de las etapas.
Por consiguiente, se describen los siete indicadores implementados para la construcción del Índice,
el cual es una medida sencilla y sintética que permite diferenciar distritos, según disparidades de la
población. (Ver Anexo 1).
El Índice de Dependencia Demográfica nos indica la relación existente entre la población potencialmente
activa y la que no lo es. Es decir, como la parte central de la población (15 a 64 años) soporta a los dos
extremos (menores de 15 años y mayores de 65 años). Esta medida está estrechamente relacionada
con los cambios de carácter demográfico, médico y social y permite vislumbrar territorios donde la
demanda de estos grupos etarios puede ser mayor.
La Tasa de Mortalidad Infantil es la relación entre las defunciones de menores de un año ocurridas
durante el período 2000-2011 y los nacimientos por cada mil ocurridos en el mismo período; este hecho
demográfico en una población tiene una estrecha relación con su grado de desarrollo económico,
3/ PNUD. (2010). Informe Regional sobre Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe 2010. Actuar sobre el futuro:
romper la transmisión intergeneracional de la desigualdad. San José. Costa Rica
68
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
social y cultural. Tanto es así que esta tasa de mortalidad es justamente uno de los indicadores más
usados internacionalmente para definir el nivel de vida de una comunidad. (Behn, 1962).
El Porcentaje de Viviendas Individuales Ocupadas en Buen Estado son aquellas en que los materiales
de al menos dos de sus componentes -piso, paredes, techo- no presentan fisuras o deterioro4; desde
la aprobación de la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948, el derecho a una vivienda
adecuada se ha reconocido como uno de los componentes más importantes. Todos los gobiernos, sin
excepción, tienen algún tipo de responsabilidad en el asunto de la vivienda. (Naciones Unidas, 1948).
El Índice de Pertenencias (Artefactos) del Hogar estima el porcentaje de hogares que distritalmente
cuentan con alguno de los artefactos incluidos en la boleta del Censo 2011 y mediante el análisis de
componentes principales se identificaron los artefactos que aproximan la realidad económica de los
hogares en el distrito. El ingreso constituye uno de los factores que produce más desigualdad en las
sociedades, ya que este posibilita la adquisición de bienes y servicios valorados económicamente,
incluyendo los que se requieren para satisfacer las necesidades elementales de la vida. (Madrigal,
2000).
Por esta razón, se estandarizaron con la siguiente fórmula con el fin de eliminar los efectos de escala
entre los indicadores:
X max-X i
Z ij =
X max-X min
Donde:
Para la estimación del Índice Sintético de Desigualdad Socioeconómica se suman las variables
estandarizadas y se acota a un intervalo que oscile entre 0 y 100, donde los distritos con valores
cercanos a cero representan desigualdades socioeconómicas menores en tanto los distritos con valores
cercanos a 100 presentan características de desigualdad socioeconómicas altas.A continuación, se
presenta el método citado.
ISDSi= ∑ Zij
Donde:
Al presentar el ISDS una referencia territorial las observaciones o eventos generalmente no son
independientes. Es decir, dos eventos que se encuentren cerca uno del otro, tienden a registrar más
factores en común que dos eventos que se encuentran lejos uno del otro, a esto se le conoce como
autocorrelación espacial. El análisis espacial permite discernir el patrón espacial, cuantificarlo y así
encontrar asociaciones, ya que la localización espacial o ubicación geográfica puede ser una fuente
de variación importante.
Un ejemplo de análisis espacial fue el desarrollado en EEUU para investigar los factores asociados
a los niveles de pobreza infantil, con base en los datos del Censo Nacional de 1990. El resultado
cuantificó la autocorrelación al emplear el estadístico I de Moran y se determinó e identificó que existían
ciertas regiones con áreas (condados) que mostraron una agrupación significativa con respecto al nivel
de pobreza infantil. (Voss y otros, 2006)
Asimismo, se pretende someter al ISDS en esta línea de análisis para identificar si las seis regiones
establecidas en el Decreto 16068-PLAN mantienen su homogeneidad interna, con respecto a la
dimensión socioeconómica estimada por el Índice, ya que se supone que los distritos ubicados en
la región Chorotega tendrán más factores en común que los ubicados en la región Central o región
Brunca.
Por lo tanto, mediante el programa estadístico Cran-R se modelan las distancias como la medida para
identificar y cuantificar vecinos (distritos), esto generará una matriz de pesos o matriz de proximidad 8
W.Este estudio considera vecinos todos aquellos distritos que tienen un área con frontera en común 8
condecir, la suma
cualquier de todos
otro distrito (las los
islaspesos es igual
no tendrán al número
vecinos) de áreas
y se utilizan y seestandarizados
los pesos calcula de estapor fila
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(distrito), la decir,
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Una vez estimada la matriz de proximidad W, se aplica la técnica exploratoria de
Una vez estimada la matriz de proximidad W, se aplica la técnica exploratoria de
promedios
Una móviles
vez estimada (desfases
la matriz espaciales)
de proximidad W, que reducen
se aplica los valores
la técnica extremos
exploratoria que pueden
de promedios móviles
promedios móviles (desfases espaciales) que reducen los valores extremos que pueden
(desfases espaciales) que reducen los valores extremos que pueden resultar por variaciones aleatorias
resultar por variaciones aleatorias y con ellos se genera un mapa suavizado, con el fin
y con ellos se genera un mapa suavizado, con el fin de observar cierto patrón espacial que no son tan
resultar por variaciones aleatorias y con ellos se genera un mapa suavizado, con el fin
de observar
claros cierto
con los datos patrón yespacial
originales que como:
se aproxima no son tan claros con los datos originales y se
de observar cierto patrón espacial que no son tan claros con los datos originales y se
aproxima como:
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Así, con estos resultados se estima la autocorrelación espacial global, la cual
Así, con estos resultados se estima la autocorrelación espacial global, la cual
permite identificar, en general, tendencia a aglomeraciones cuando se trabaja con áreas
permite identificar, en general, tendencia a aglomeraciones cuando se trabaja con áreas
!!" !!"
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Así, ycon
Regionalización estos resultados
Segregación se estima
Brenes, Ureña & Palomola autocorrelaciónCosta espacial global,
Rica a la Luz della cual2011
Censo
Así, con estos resultados se estima la autocorrelación espacial global, la cual
permite identificar, en general, tendencia a aglomeraciones cuando se trabaja con áreas
permite identificar, en general, tendencia a aglomeraciones cuando se trabaja con áreas
agregadas. Por esta razón, se analizan inicialmente las correlaciones entre ISDS y los
agregadas. Por esta razón, se analizan inicialmente las correlaciones entre ISDS y los
Así, con estos
desfases resultados(promedio
espaciales se estima móvil
la autocorrelación espacial global, la cual
ISDS); complementariamente permiteelidentificar,
se calcula I de
desfasestendencia
en general, espaciales (promedio móvil
a aglomeraciones cuandoISDS); complementariamente
se trabaja con áreas agregadas. se calcula
Por estaelrazón,
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Moraninicialmente unocorrelaciones
de varios índices
entre de autocorrelación
ISDS y los desfases y cuya hipótesis
espaciales (promedionulamóvil
es queISDS);
Moran el cual es uno de varios índices de autocorrelación y cuya hipótesis nula es que
complementariamente se calcula el I de Moran el cual es uno de varios índices de autocorrelación y
no hay autocorrelación y como hipótesis alternativa de que hay aglomeración, su
cuyanohipótesis
hay autocorrelación
nula es que no hay y autocorrelación
como hipótesis alternativa
y como hipótesisde que hay
alternativa de aglomeración, su
que hay aglomeración,
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siguiente:
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Las medidas de autocorrelación global solo indican si hay tendencia a
Las medidas de autocorrelación global solo indican si hay tendencia a
aglomeraciones
Las y no identifica las solo
aglomeraciones
indican si hayindividuales, este tipo de medida se
medidas de autocorrelación
aglomeraciones y no identificaglobal
las aglomeraciones tendencia a aglomeraciones
individuales, y no identifica
este tipo de medida se
las conoce
aglomeraciones individuales, este tipo de medida se conoce en inglés como
en inglés como LISA (Local Indicators of Spacial Autocorrelation) y se estima LISA (Local Indicators
conoceAutocorrelation)
of Spacial en inglés como y seLISA (Local
estima Indicators
mediante un I deof Spacial
Moran Autocorrelation)
a nivel y se
local, las hipótesis son estima
iguales a
mediante
un análisis de un I de Moran
correlación global asunivel
y estimación las hipótesis
local, corresponde a: son iguales a un análisis de
mediante un I de Moran a nivel local, las hipótesis son iguales a un análisis de
correlación global y su estimación corresponde a:
correlación global y su estimación corresponde a:
!
!
!! = (!! − !) !!" (!! − !)
!! = (!! − !) !!" (!! − !)
!!!
!!!
La investigación se elaboró mediante una encuesta con la ayuda de los directores de escuelas en
todo el país y complementariamente con ayuda del OFIPLAN e IFAN se compilaron estadísticas sobre la
dotación de los centros con servicios seleccionados para definir la jerarquía de los lugares centrales5.
La realización de la propuesta metodológica desarrollada por Nuhn requiere mayor tiempo y recurso,
aunado al tipo de información de servicios, requerida para determinar el grado de influencia y su
calidad, lo cual limita su aplicación para este estudio. Por esta razón, se desarrolla una estimación
alternativa de los centros funcionales entendida como, el estudio de las estructuras territoriales de
abastecimiento a partir de la oferta de bienes y servicios. Esto va a permitir obtener una imagen de
la concentración de servicios y actividades por distrito con el objetivo de aproximar - inicialmente - la
distribución de centros funcionales en el país y determinar alguna similitud con los identificados en
1985.
5/ Nuhn, Helmut. (1989). La descentralización territorial en el sector de servicios y su significado para el desarrollo del sistema
de lugares centrales en Costa Rica 1970-1985. San José. Costa Rica.
71
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Se utilizaron dos bases de datos geoestadísticas, la primera fue el Atlas Digital de Costa Rica 2008,
desarrollada por la Escuela de Ingeniería Forestal del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) y por la
Vicerrectoría de Investigación y Extensión del ITCR (1998, 2001, 2005).El Atlas consta de varias capas
de información, cada una tiene su base de datos asociada a polígonos, que pueden estar a nivel de
distrito.
La segunda base fue la Cartografía Geoestadística Digital del Instituto Nacional de Estadística y
Censos (INEC), obtenida del Censo 2011, que surgió mediante imágenes de satélite, fotografías
aéreas; además de la verificación en campo con GPS, generando una serie de capas de información
geográfica. Este estudio utiliza la Capa de Referencias, la cual representa ubicaciones por medio de
un punto o polígono de lugares de interés, sean comercios, escuelas, centros de salud, iglesias, plazas,
parques, entre otros.
Hospitales (públicos y privados): esta variable representa cantidad de centros de salud de primer
nivel, hospitales públicos y privados, la información se tiene de la base de datos del Censo del 2011,
solo refiere nombre de la institución, ubicación por distrito para efectos de diferenciar lo público de lo
privado se agregó una columna y el equipo asignó esa condición.
Servicios privados de salud: esta variable se refiere a los servicios en salud privados, como clínicas
odontológicas, farmacias, clínicas de medicina general, además de clínicas veterinarias, con base
en los datos del Censo 2011 y de ella solo se refiere a nombre de la institución, ubicación por distrito.
Por su parte, información del Censo 2011 se refiere a polígonos identificados en los segmentos o en
recorridos, en ese sentido, no abarca todo el universo de estos servicios, por lo que se requerirá de
mayor trabajo de campo, por ejemplo, los datos de las municipalidades de patentes podrían ayudar
bastante.
Comercios: abarca una amplia gama de puestos dedicados al comercio, por ejemplo: pulperías,
Estas variables
bares, librerías, panaderías,fueron incluidas en
supermercados, un modelo de
abastecedores, Analysis para
Clusterferreterías,
bazares, entre formar
otros; esta
información brindada por el INEC se refiere a polígonos identificados en los segmentos
grupos o jerarquías de los centros funcionales. Se forman grupos de distritos mediante o en recorridos.
Además, se utilizó la población del distrito y el porcentaje de la población cuya ocupación está
el procedimiento
relacionada K-Medias,
con el comercio con la materiales
y servicios característica de minimizar
no productivos la variancia
de bienes (sector entre grupos
terciario).
y maximizarla entre ellos. Este procedimiento fue utilizado por Madrigal (2000) y lo
Estas variables fueron incluidas en un modelo de Cluster Analysis para formar grupos o jerarquías
dedescribe como
los centros un procedimiento
funcionales. iterativo
Se forman grupos en el que
de distritos cadaelobservación
mediante procedimientoj K-Medias,
es primero
con la
característica de minimizar la variancia entre grupos y maximizarla entre ellos. Este procedimiento fue
examinada
utilizado y luego(2000)
por Madrigal asignada a un “cluster”
y lo describe como un k,procedimiento
para el que laiterativo
distancia sea
en el queun mínimo.
cada El
observación
j esprocedimiento
primero examinada y luego
continúa asignada
hasta que aninguna
un “cluster” k, para el que
observación sea laasignada
distancia sea
a unun nuevo
mínimo. El
procedimiento continúa hasta que ninguna observación sea asignada a un nuevo “cluster” o hasta que
un “cluster” o hasta
número máximo que un número
de interacciones máximo
prefijado haya sido dealcanzado
interacciones
6
. prefijado haya sido
alcanzado.6
(x!" − x!" )!
Donde:
Donde:
xij : es la i-ésima variable para la j-ésima observación.
xij : es la i-ésima variable para la j-ésima observación.
xik : es la media de la i-ésima variable en el k-ésimo “cluster” después de la inclusión de
xik : es la media de la i-ésima variable en el k-ésimo “cluster” después de la inclusión de la j-ésima
la j-ésima observación.
observación.
El Índice Sintético de Desigualdad Socioeconómica (ISDS) es una medida compuesta que permite
resumir el comportamiento de siete indicadores relacionados con las disparidades socioeconómicas
en el país. La selección de estos indicadores se sustenta en una amplia revisión bibliográfica; además
de la disponibilidad de información del Censo 2011. En esta línea, el análisis mediante componentes
principales corrobora que estas variables respondían al constructo teórico de desigualdad
6/ Madrigal, Johnny. (2000) Estratificación de hogares y segmentos por niveles de ingreso en el Censo 2000. San José.
Costa Rica.
73
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Los resultados obtenidos indican que el promedio del ISDS es de 48,2 para el 2011, es decir, en
promedio los distritos registran un grado medio de desigualdad socioeconómica al ubicarse en una
escala de 0 a 100, donde 0 indica menores niveles de desigualdad y 100 representa mayores niveles
de desigualdad socioeconómica. El Cuadro 1 ordena los distritos en cuartiles, la mayor cantidad de
distritos se ubica en la situación media-baja de desigualdad socioeconómica (cuartil 2) dicha categoría
aglomera 38,5% de la población del país; se debe señalar que las categorías baja (cuartil 1) y alta
(cuartil 4) presentan el mismo número de distritos. No obstante, su diferencia radica en que el primer
grupo (desigualdad socioeconómica baja) agrupa 38,5% de la población y para el grupo con niveles
altos de desigualdad concentra 15,5% de la población costarricense.
Cuadro 1
Costa Rica: Clasificación de los distritos por medidas de
posición y población, según categorías del Índice Sintético de
Desigualdad Socioeconómica
2011
La clasificación de los distritos en cuanto a desigualdades socioeconómicas permite mostrar que los
distritos ubicados en las zonas fronterizas del Norte y del Este registran un alto grado de desigualdad
socioeconómica, caso contrario sucede en el Centro del país donde predominan los distritos con
grados de desigualdad bajos y medio-bajos, como lo señala el Mapa 1.
74
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 1. Costa Rica: Clasificación de los distritos según categorías del Índice Sintético de
Desigualdad Socioeconómica. 2011
Este comportamiento del ISDS en los distritos se puede representar en cada una de las regiones
de planificación, las cuales tienen un impacto preponderante en las políticas públicas y planificación
del país. El Gráfico 1 señala que la mayor concentración de distritos se ubica en la región Central
(274 distritos) y registra aproximadamente el 62,5% de la población costarricense. En esta región 115
distritos se ubican en la categoría de baja desigualdad socioeconómica con un total poblacional de
1.602.179 habitantes; Sánchez representa el distrito con menor desigualdad socioeconómica. Es
importante señalar que Chirripó forma parte de los distritos de esta región y presenta el mayor grado
de desigualdad socioeconómica y junto a 14 distritos más representan el 5,5% en esta categoría que
aglomera un total de 34.489 personas.
Regiones como la Huetar Atlántica, Huetar Norte y Brunca cuentan con los mayores porcentajes de
distritos con altos grados de desigualdad socioeconómica.Por ejemplo, la región Huetar Atlántica del
total de distritos (28 distritos) el 71,4% está en la categoría de alta desigualdad socioeconómica; es
decir, 20 distritos se encuentran en esta situación y acumulan un total de 213.201 personas; el distrito
Valle la Estrella, según el ISDS, muestra el mayor valor de desigualdad para esta región (78,5%).
La región Chorotega y Pacífico Central acumulan la mayor cantidad de distritos en las categorías
de desigualdad socioeconómica media-baja y media-alta. La primera registra 33 distritos con esta
75
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
característica lo que representa 55,9% del total de distritos de esta región y cuya cantidad de habitantes
es de 245.622. La Pacífico Central presenta 25 distritos con esta tendencia lo que equivale a 67,6% del
total de distritos de la región y los cuales cuentan con un total de 241.193 individuos. (Ver Anexo 3).
Gráfico 1. Costa Rica. Distribución de los distritos por región de planificación según Índice Sintético
de Desigualdad Socioeconómica. 2011
Luego de estimar los valores del ISDS para los diferentes distritos, se inicia con el análisis de
autocorrelación espacial, ya que la localización espacial o ubicación geográfica puede ser una fuente
de variación importante; por lo tanto, este tipo de herramienta permite identificar algún patrón espacial
y con ello cuantificarlo y discernir asociaciones entre factores y el patrón espacial.
Se deben especificar cuáles áreas (distritos) se consideran vecinas o colindantes para llevar a cabo
el análisis espacial, en este caso se definieron como vecinos las áreas con fronteras en común. La
estimación indica que hay 472 distritos que presentan vecinos, excluyendo la isla del Coco y la isla de
Chira; en promedio un distrito tiene 5,8 vecinos a su alrededor.
El Mapa 2 permite visualizar el patrón espacial del ISDS mediante la técnica exploratoria de promedios
móviles y cuyo comportamiento o patrón es similar a una espiral, la cual inicia en el centro del territorio
con distritos que muestran bajos grados de desigualdad socioeconómica y que alrededor de ellos se
ubican los distritos con valores medios y bajos de desigualdad. Al continuar la espiral se extienden
los distritos con un grado medio-alto de desigualdad socioeconómica para finalizar en los distritos
con resultados altos de desigualdad. Este procedimiento facilita observar la amplia mancha de baja
desigualdad que se presenta en ciertas zonas focales de la región Central y la marcada desigualdad
presente en la región Huetar Norte y Huetar Atlántica.
76
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 2. Costa Rica: Clasificación de los distritos según categorías basadas en el promedio móvil
espacial del índice de Desigualdad Socioeconómico.2011
La autocorrelación global se estima mediante el I de Moran que identifica si, con base en el valor
del ISDS, existe un patrón de aglomeración debido a que se trabaja con áreas agregadas. Es decir,
la autocorrelación global nos indica que hay tendencia a aglomeraciones en el territorio nacional con
base en el ISDS y mediante el I de Moran se concluye que hay aglomeración 0,72 (p=0.00.).
Se estima el Índice de Moran a Nivel Local con el fin de identificar las aglomeraciones individuales.
Por su parte, el Mapa 3 identifica los distritos en rojo que presentan aglomeraciones significativas y se
reafirma que los distritos en las regiones Huetar Norte, Huetar Atlántica y Brunca tienden a agruparse y
presentan valores con alto grado de desigualdad, en tanto, parte de la región Central y específicamente
en los distritos centrales las aglomeraciones resultan también significativas, pero éstas señalan la
presencia de bajos valores de desigualdad.
77
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Helmuth Nuhn (1973 y 1986) y Carolyn Hall (1969) trataron teóricamente la estructura espacial nacional
para el establecimiento de una jerarquía de lugares centrales y manejan el concepto general de que
las ciudades prestadoras de bienes y servicios soportan una determinada cantidad de población en su
área de influencia. Los tamaños y formas de ese “Hinterland” varían de acuerdo con climas, relieves,
costos de transporte y otras variables, y no conforman figuras regulares como aparecen en la teoría de
lugares centrales (Crhistaller, 1933), pues las ciudades y sus áreas de influencia no están inscritas en
un territorio isotrópico.
Finalmente, los subespacios de Costa Rica se crearon de acuerdo con la encuesta sobre bienes y
servicios elaborada por Nuhn y procesada en las computadoras de la Universidad de Hamburgo que
son espacios subregionales que giran alrededor de unos 22 centros principales con varias categorías.
78
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Sin embargo, la realización de la propuesta metodológica desarrollada por Nuhn requiere mayor
tiempo y recurso, aunado al tipo de información de servicios, requerida para determinar el grado de
influencia y su calidad, lo cual limita su aplicación para este estudio. Por esta razón, se desarrolla
una estimación alternativa que permita obtener una buena imagen de la concentración de servicios y
actividades por distrito con el objetivo de aproximar - inicialmente - la distribución de posibles centros
funcionales en el país y determinar alguna similitud con los identificados en 1986.
La información geoestadística suministrada, tanto por el Atlas Digital de Costa Rica 2008 elaborado
por el TEC, como por las capas de información recopiladas por el INEC, durante el proceso del Censo
2011, ha permitido realizar un recuento sobre servicios representativos, establecidos en los distritos, a
los cuales accede la población.
Se identificaron seis conglomerados mediante la técnica de Cluster Analysis, cuyo orden señala
que los distritos de Alajuela y Liberia muestran mayor aglomeración de servicios (Máximo Nivel). Por
otro lado, la región Central focaliza una gran parte de distritos de II Nivel y III Nivel, y se evidencia la
concentración de servicios por las características de la zona, el alto porcentaje de población y por las
demandas; tanto de las empresas como de los residentes y en donde el Estado ha contribuido en este
aglutinamiento debido a las políticas de expansión territorial.
El Mapa 4 muestra que los distritos en la zona de Sarapiquí y Pococí tienen una cantidad importante
de servicios, este desarrollo puede estar condicionado a una importante infraestructura vial como lo
es la Ruta 32 y, complementariamente, la apertura de la ruta conocida como “El Tapón de Chilamate”.
Las regiones Chorotega y Pacífico Central muestran distritos categorizados en IV Nivel y tienen la
característica de ubicarse cerca de las zonas costeras en donde se ha presentado un desarrollo
turístico importante en comercios, servicios bancarios, entre otros.
Las regiones Huetar Atlántica, Brunca y en especial la Huetar Norte presentan la mayor cantidad de
distritos en VI Nivel, es decir, con una baja aglomeración de servicios y que al compararlos con los
datos del ISDS resultan tener concordancia con los altos grados de desigualdad.
79
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Mapa 4. Costa Rica: Clasificación de los distritos según categorías de concentración de servicios.
2011
Helmut Nuhn en su estudio “La descentralización del territorio en el sector servicios y su significado
para el desarrollo del sistema de lugares centrales en Costa Rica 1970-1985” se propuso realizar un
análisis territorial funcional, el cual permitió visualizar los cambios de las relaciones espaciales de
abastecimiento y al mismo tiempo, mostrar una política de regionalización y de descentralización.
Para esto tomó en cuenta las estructuras territoriales de abastecimiento a partir de la demanda de
servicios y bienes estableció centros funcionales que se exponen con respecto a la aproximación
mediante esta metodología.
El Mapa 5 muestra un aumento importante de centros funcionales de II Nivel en el sector del Caribe,
los distritos del cantón de Pococí y la cabecera de Siquirres, según el análisis, tienen el mismo nivel
que Limón. Este último mantiene la misma categoría que en 1986. De esta manera, elementos como
la carretera 32 y la expansión de monocultivos como el banano y la piña podrían estar indicando una
proliferación de servicios para suplir a una población obrera agrícola, así como a la misma actividad.
80
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Un dato interesante es la pérdida de nivel y jerarquía del distrito primero de Puntarenas en relación
con Barranca, en este último, se ha estado dando una concentración mayor de los servicios evaluados,
la falta de espacio en el primero podría ser una respuesta al traslado de la infraestructura.
Otro dato relevante es que, a diferencia de la propuesta de Nuhn, existen tres centros funcionales
de Máximo Nivel para el 2011, San José y el distrito primero de Alajuela y Liberia, lo cual indica una
desconcentración de servicios de primer orden, excluidos antes de San José. No obstante, los sitúan
y ratifican como centros dinamizadores de la economía en sus espacios de influencia.
Fuente: MIDEPLAN con información del estudio de H.Nuhn 1986 y del Censo 2011 (INEC).
Los territorios funcionales que se proponen y se muestran en el Mapa 6 parten tanto de la concentración
de servicios (presencia de al menos un centro funcional de II Nivel), como de la distribución espacial
de los distritos; según la clasificación de categorías basadas en el promedio móvil espacial del Índice
Sintético de Desigualdad Socioeconómica (ISDS) y del criterio profesional del equipo investigador.
Se identificaron 12 territorios homogéneos, en algunos casos significó dividir las actuales regiones de
MIDEPLAN, como es el caso de la región Brunca, que dado los criterios mencionados arriba tienen dos
territorios. En la Zona 1 el Centro Funcional de II Nivel sería Buenos Aires y el otro centro importante sería
Neillyen el III Nivel, y la Zona 2 San Isidro de El General sería el centro funcional. Esto viene a ratificar
lo que hoy definen los residentes de este espacio del país como el Sur-Sur y el Sur, respectivamente.
Otro caso interesante es la división de la región Huetar Atlántica, en las Zonas 8 y 9.En la primera,
Guápiles y Horquetas son dos centros funcionales de II Nivel que dinamizan este territorio, aquí lo
81
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
importante es que se propone incorporar a distritos de Sarapiquí, que estaban en otra región y en la
Zona 9 el centro funcional es Limón.
En resumen, las actuales regiones de MIDEPLAN sufren cambios en sus límites, no solo por la
propuesta de zonas homogéneas (subdivisiones a lo interno de las mismas), sino porque hay una
redistribución de distritos o cantones en algunos casos y que en el Anexo 6 se organizan.
IV. Conclusiones
En conclusión, este estudio constituye un insumo para elaborar una regionalización del territorio con
la información detallada de la población atraída según el tipo de servicio de los centros funcionales,
con la cantidad de servicios ofrecidos en los centros principales y en sus áreas de influencia. Además
de investigar el marco institucional administrativo para agrupar sectores institucionales dispersos en el
territorio; investigar cualquier otro componente social, ambiental o económico productivo. Estos deben
definir los centros funcionales subregionales y sus áreas de influencia, heterogeneidad del territorio y
zonas funcionales homogéneas.
Metodológicamente, el estudio de Helmuth Nuhn y el este estudio no son comparables; sin embargo,
esta es una aproximación para establecer los centros funcionales y la situación socioeconómica del país
actualmente. Al comportarse el ISDS de manera heterogénea en el territorio y al interior de las actuales
regiones, brinda información para iniciar una propuesta de regionalización del territorio nacional. La
superposición del ISDS y los posibles centros funcionales permiten establecer sub espacios o territorios
con al menos un centro dinamizador de la economía y sus aspectos sociales (zonas homogéneas).
Los territorios establecidos en este estudio facilitarán la implementación de las políticas públicas
adaptadas a la heterogénea realidad nacional. Tener claramente establecido un sistema de centros
funcionales facilita la descentralización territorial, pues permite focalizar la inversión pública en
los lugares que experimentarán un impacto regional o un efecto multiplicador en el territorio de su
jurisdicción.
Asimismo, elaborar y poner en marcha una política de regionalización a partir de un sistema congruente
de centros funcionales y sus áreas de influencia no se presenta de manera gratuita, debido al nivel
de complejidad técnica que implica y aún más difícil coordinar en ella a los actores administrativos.
Además, este estudio es una simplificación a partir de algunas variables socioeconómicas que deja de
lado factores fundamentales para su establecimiento, entre los que se encuentra la experticia ausente
por la falta de continuidad en el largo plazo de la idea de planificación regional del territorio.
Por último, se identifica que la información georeferenciada establecida por las instituciones podría
mejorar y ser insumo para realizar análisis geoestadísticos, y por ende, lograr la existencia de sistemas
de información geográfica de datos. Por ejemplo, de locales de servicios: pulperías, farmacias, EBAIS,
clínicas, escuelas públicas, escuelas privadas, carnicerías, universidades, puestos de Guardia Civil,
salones de belleza, etc.
83
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
23
Anexos
Anexos
Anexo
Anexo 1.
1. Estimaciones
Descripción Ecuación Descripción Ecuación
(!!")
!(!)
(!!")
+ !! !"!
!!! = ∗ 100
!!! = (!"!!")
∗ 100 (!!")
!!
!!
donde,
donde,
(!!") !"! : titulados universitarios al
!(!) : población menor de 15 momento del Censo 2011.
Índice de años registrada al momento del Tasa de (!!")
Dependencia Titulados !! : población total de 20
Censo 2011.
Demográfica (!!") Universitarios años y más al momento del
!! : población mayor de 65 Censo 2011.
años registrada al momento del
Censo 2011.
!"!!"
!! : población entre 15 y
64 años registrada al momento
del Censo 2011.
!"!
Índice de !!! = ∗ 100
Pertenencias !"!
donde,
(Artefactos)
VPi : total de hogares con alguno de los artefactos incluidos en el Censo 2011.
del Hogar
TVPi : total de hogares al momento del Censo 2011.
84
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Anexo 2
Costa Rica: Correlaciones simples entre ISDS e indicadores
2011
Indicadores
Indicadores
1 2 3 4 5 6 7 ISDS
Índice de dependencia demográfica (1) 1
Tasa neta de participación (2) .706** 1
Tasa de analfabetismo (3) .750 .510**
** 1
Tasa de titulados universitarios (4) .666 .696 .558**
** ** 1
Tasa de mortalidad infantil (5) ,062 ,004 .119** ,022 1
Porcentaje de viviendas individuales ocupadas en 1
.753** .708** .649** .759** .093*
buen estado (6)
Índice de pertenencias (artefactos) del hogar (7) .776** .822** .668** .927** ,055 .866** 1
Índice Sintético de Desigualdad Socioeconómica
(ISDS) .856** .854** .744** .879** .172** .911** .965** 1
Huetar
Central 274 40,4 0,0 100,0 2 688 664 28 61,2 43,2 78,5 325 790
Atlántica
Baja 115 28,8 0,0 38,1 1 602 179 Baja 0 0,0 0,0 0,0 0,0
Media-Baja 95 44,1 38,3 48,9 818 428 Media-Baja 2 45,9 43,2 48,5 46 970
Media-Alta 49 52,7 49,1 58,7 233 571 Media-Alta 6 53,2 49,0 56,4 65 619
Alta 15 65,8 59,1 100,0 34 486 Alta 20 65,2 59,1 78,5 213 201
Brunca 38 62,1 43,5 80,5 327 035 Huetar Norte 36 63,3 38,0 92,4 327 293
Baja 0 0,0 0,0 0,0 0,0 Baja 1 38,0 38,0 38,0 42 060
Media-Baja 2 45,0 43,5 46,4 118 705 Media-Baja 1 42,8 42,8 42,8 15 383
Media-Alta 12 54,7 49,5 58,8 77 354 Media-Alta 11 54,4 50,4 58,2 116 710
Alta 24 67,2 58,9 80,5 130 976 Alta 23 69,5 59,9 92,4 153 140
Pacífico
Chorotega 59 56,3 37,7 79,4 326 953 37 54,4 37,9 74,0 305 977
Central
Baja 1 37,7 37,7 37,7 6 375 Baja 1 37,9 37,9 37,9 4 742
Media-Baja 10 45,3 40,5 48,9 118 062 Media-Baja 10 44,4 38,7 48,7 48 177
Regionalización y Segregación
Media-Alta 23 53,6 49,2 58,3 127 560 Media-Alta 15 54,7 49,3 58,6 193 016
Alta 25 64,0 59,0 79,4 74 956 Alta 11 64,8 59,1 74,0 60 042
Fuente: MIDEPLAN con información del Censo 2011 (INEC).
Brenes, Ureña & Palomo
85
86
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Anexo 4
Costa Rica: Distritos por zona homogénea
2011
Zona 1
60301 Buenos Aires 20402 Desmonte
60302 Volcán 20403 Jesús María
60303 Potrero Grande 20901 Orotina
60304 Boruca 20902 Mastate
60305 Pilas 20903 Hacienda Vieja
60306 Colinas 20904 Coyolar
60307 Chánguena 20905 Ceiba
60308 Biolley 60101 Puntarenas
60309 Brunka 60102 Pitahaya
60501 Puerto Cortés 60103 Chomes
60502 Palmar 60106 Manzanillo
60503 Sierpe 60107 Guacimal
60504 Bahía Ballena 60108 Barranca
60505 Piedras Blancas 60109 Monte Verde
60701 Golfito 60112 Chacarita
60702 Puerto Jiménez 60113 Chira
60703 Guaycará 60114 Acapulco
60704 Pavón 60115 Roble, El
60801 San Vito 60116 Arancibia
60802 Sabalito 60201 Espíritu Santo
60803 Agua Buena 60202 San Juan Grande
60804 Limoncito 60203 Macacona
60805 Pittier 60204 San Rafael
61001 Corredor 60205 San Jerónimo
61002 La Cuesta 60401 Miramar
61003 Canoas 60402 Unión
61004 Laurel 60403 San Isidro
Zona 2 Zona 4
11901 San Isidro de El General 60601 Quepos
11902 General 60602 Savegre
11903 Daniel Flores 60603 Naranjito
11904 Rivas 60901 Parrita
11905 San Pedro 61101 Jacó
11906 Platanares 61102 Tárcoles
11907 Pejibaye Continua…
11908 Cajón
11909 Barú
11910 Río Nuevo
11911 Páramo
Zona 3
11601 San Pablo
11602 San Pedro
11603 San Juan de Mata
11604 San Luis
11605 Carara
20401 San Mateo
87
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Continuación Anexo 4
Zona 5
50101 Liberia 50904 San Pablo
50102 Cañas Dulces 50905 Porvenir
50103 Mayorga 50906 Bejuco
50104 Nacascolo 51001 La Cruz
50105 Curubandé 51002 Santa Cecilia
50201 Nicoya 51003 Garita
50202 Mansión 51004 Santa Elena
50203 San Antonio 51101 Hojancha
50204 Quebrada Honda 51102 Monte Romo
50205 Sámara 51103 Puerto Carrillo
50206 Nosara 51104 Huacas
50207 Belén de Nosarita 60104 Lepanto
50301 Santa Cruz 60105 Paquera
50302 Bolsón 60111 Cóbano
50303 Veintisiete de Abril Zona 6
50304 Tempate 21006 Pital
50305 Cartagena 21011 Cutris
50306 Cuajiniquil 21013 Pocosol
50307 Diriá 21301 Upala
50308 Cabo Velas 21302 Aguas Claras
50309 Tamarindo 21303 San José (Pizote)
50401 Bagaces 21304 Bijagua
50402 Fortuna 21305 Delicias
50403 Mogote 21306 Dos Ríos
50404 Río Naranjo 21307 Yolillal
50501 Filadelfia 21401 Los Chiles
50502 Palmira 21402 Caño Negro
50503 Sardinal 21403 El Amparo
50504 Belén 21404 San Jorge
50601 Cañas 21501 San Rafael
50602 Palmira 21502 Buenavista
50603 San Miguel 21503 Cote
50604 Bebedero 21504 Katira
50605 Porozal 41001 Puerto Viejo
50701 Juntas 41004 Llanuras del Gaspar
50702 Sierra 41005 Cureña
50703 San Juan Zona 7
50704 Colorado 20114 Sarapiquí
50801 Tilarán 20213 Peñas Blancas
50802 Quebrada Grande 20306 Río Cuarto
50803 Tronadora 21001 Quesada
50804 Santa Rosa 21002 Florencia
50805 Líbano 21003 Buenavista
50806 Tierras Morenas 21004 Aguas Zarcas
50807 Arenal 21005 Venecia
50901 Carmona Continua…
50902 Santa Rita
50903 Zapotal
88
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 4
Zona 7 Zona 9
21007 Fortuna 70101 Limón
21008 Tigra 70102 Valle La Estrella
21009 Palmera 70103 Río Blanco
21010 Venado 70104 Matama
21012 Monterrey 70401 Bratsi
21101 Zarcero 70402 Sixaola
21102 Laguna 70403 Cahuita
21103 Tapezco 70404 Telire
21104 Guadalupe 70501 Matina
21105 Palmira 70502 Batán
21106 Zapote 70503 Carrandí
21107 Brisas Zona 10
Zona 8 10306 Frailes
30501 Turrialba 10308 San Cristóbal
30502 La Suiza 10309 Rosario
30503 Peralta 10401 Santiago
30504 Santa Cruz 10402 Mercedes Sur
30505 Santa Teresita 10403 Barbacoas
30506 Pavones 10404 Grifo Alto
30507 Tuis 10405 San Rafael
30508 Tayutic 10406 Candelaria
30509 Santa Rosa 10407 Desamparaditos
30510 Tres Equis 10408 San Antonio
30511 La Isabel 10409 Chires
30512 Chirripó 10501 San Marcos
41002 La Virgen 10502 San Lorenzo
41003 Horquetas 10503 San Carlos
70201 Guápiles 10603 Vuelta de Jorco
70202 Jiménez 10604 San Gabriel
70203 Rita 10605 Legua
70204 Roxana 10606 Monterrey
70205 Cariari 10702 Guayabo
70206 Colorado 10703 Tabarcia
70301 Siquirres 10704 Piedras Negras
70302 Pacuarito 10705 Picagres
70303 Florida 11201 San Ignacio
70304 Germania 11202 Guaitíl
70305 Cairo 11203 Palmichal
70306 Alegría 11204 Cangrejal
70601 Guácimo 11205 Sabanillas
70602 Mercedes 11701 Santa María
70603 Pocora 11702 Jardín
70604 Río Jiménez 11703 Copey
70605 Duacarí 12001 San Pablo
12002 San Andrés
Continua…
89
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Continuación Anexo 4
Zona 10 21201 Sarchí Norte
12003 Llano Bonito 21202 Sarchí Sur
12004 San Isidro 21203 Toro Amarillo
12005 Santa Cruz 21204 San Pedro
12006 San Antonio 21205 Rodríguez
30107 Corralillo Zona 12
Zona 11 10101 Carmen
20201 San Ramón 10102 Merced
20202 Santiago 10103 Hospital
20203 San Juan 10104 Catedral
20204 Piedades Norte 10105 Zapote
20205 Piedades Sur 10106 San Francisco de Dos Ríos
20206 San Rafael 10107 Uruca
20207 San Isidro 10108 Mata Redonda
20208 Ángeles 10109 Pavas
20209 Alfaro 10110 Hatillo
20210 Volio 10111 San Sebastián
20211 Concepción 10201 Escazú
20212 Zapotal 10202 San Antonio
20301 Grecia 10203 San Rafael
20302 San Isidro 10301 Desamparados
20303 San José 10302 San Miguel
20304 San Roque 10303 San Juan de Dios
20305 Tacares 10304 San Rafael Arriba
20307 Puente de Piedra 10305 San Antonio
20308 Bolívar 10307 Patarrá
20501 Atenas 10310 Damas
20502 Jesús 10311 San Rafael Abajo
20503 Mercedes 10312 Gravilias
20504 San Isidro 10313 Los Guido
20505 Concepción 10601 Aserrí
20506 San José 10602 Tarbaca
20507 Santa Eulalia 10607 Salitrillos
20508 Escobal 10701 Colón
20601 Naranjo 10801 Guadalupe
20602 San Miguel 10802 San Francisco
20603 San José 10803 Calle Blancos
20604 Cirrí Sur 10804 Mata de Plátano
20605 San Jerónimo 10805 Ipís
20606 San Juan 10806 Rancho Redondo
20607 Rosario 10807 Purral
20608 Palmitos 10901 Santa Ana
20701 Palmares 10902 Salitral
20702 Zaragoza 10903 Pozos
20703 Buenos Aires Continua…
20704 Santiago
20705 Candelaria
20706 Esquipulas
20707 Granja
90
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 4
Zona 12 30101 Oriental
10904 Uruca 30102 Occidental
10905 Piedades 30103 Carmen
10906 Brasil 30104 San Nicolás
11001 Alajuelita 30105 Aguacaliente (San Francisco)
11002 San Josecito 30106 Guadalupe (Arenilla)
11003 San Antonio 30108 Tierra Blanca
11004 Concepción 30109 Dulce Nombre
11005 San Felipe 30110 Llano Grande
11101 San Isidro 30111 Quebradilla
11102 San Rafael 30201 Paraíso
11103 Dulce Nombre de Jesús 30202 Santiago
11104 Patalillo 30203 Orosi
11105 Cascajal 30204 Cachí
11301 San Juan 30205 Llanos de Santa Lucía
11302 Cinco Esquinas 30301 Tres Ríos
11303 Anselmo Llorente 30302 San Diego
11304 León XIII 30303 San Juan
11305 Colima 30304 San Rafael
11401 San Vicente 30305 Concepción
11402 San Jerónimo 30306 Dulce Nombre
11403 La Trinidad 30307 San Ramón
11501 San Pedro 30308 Río Azul
11502 Sabanilla 30401 Juan Viñas
11503 Mercedes 30402 Tucurrique
11504 San Rafael 30403 Pejibaye
11801 Curridabat 30601 Pacayas
11802 Granadilla 30602 Cervantes
11803 Sánchez 30603 Capellades
11804 Tirrases 30701 San Rafael
20101 Alajuela 30702 Cot
20102 San José 30703 Potrero Cerrado
20103 Carrizal 30704 Cipreses
20104 San Antonio 30705 Santa Rosa
20105 Guácima 30801 Tejar
20106 San Isidro 30802 San Isidro
20107 Sabanilla 30803 Tobosi
20108 San Rafael 30804 Patio de Agua
20109 Río Segundo 40101 Heredia
20110 Desamparados 40102 Mercedes
20111 Turrúcares 40103 San Francisco
20112 Tambor 40104 Ulloa
20113 La Garita 40105 Vara Blanca
20801 San Pedro 40201 Barva
20802 San Juan 40202 San Pedro
20803 San Rafael 40203 San Pablo
20804 Carrillos Continua…
20805 Sabana Redonda
91
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo
Continuación Anexo 4
Zona 12
40204 San Roque
40205 Santa Lucía
40206 San José de la Montaña
40301 Santo Domingo
40302 San Vicente
40303 San Miguel
40304 Paracito
40305 Santo Tomás
40306 Santa Rosa
40307 Tures
40308 Pará
40401 Santa Bárbara
40402 San Pedro
40403 San Juan
40404 Jesús
40405 Santo Domingo
40406 Purabá
40501 San Rafael
40502 San Josecito
40503 Santiago
40504 Ángeles
40505 Concepción
40601 San Isidro
40602 San José
40603 Concepción
40604 San Francisco
40701 San Antonio
40702 Ribera
40703 Asunción
40801 San Joaquín
40802 Barrantes
40803 Llorente
40901 San Pablo
40902 Rincón de Sabanilla
92
Regionalización y Segregación Brenes, Ureña & Palomo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
V. Bibliografía
Conapo. (2011). Índice de marginación por entidad federativa y municipio 2010. Distrito Federal.
México.
Gómez. Pep. (2000). Desigualtats Socials a la Ciutat de Barcelona, 1996. Barcelona. España.
INEC. (2000). Índice de Rezago Social. San José. Costa Rica. Escuela de Estadística y PNUD. (2007
y 2011). “Atlas del Desarrollo Humano Cantonal de Costa Rica”. San José. Costa Rica.
Kühlmann, S. (2009). Estadísticas por Áreas. Escuela de Estadística. Universidad de Costa Rica. San
José, Costa Rica.
Madrigal, J. (2000) Estratificación de hogares y segmentos por niveles de ingreso en el Censo 2000.
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Voss, P.R.; Long, D.D.; Hammer, R.B.y Friedman, S. (2006). County child poverty rates in the US: a
spatial regression approach. Estados Unidos.
Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Demografía
Luis Ángel López
Los patrones de nupcialidad costarricense.
.
95
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Demografía López
Resumen
El objetivo general de este trabajo es analizar las tendencias del calendario nupcial costarricense
durante el período 1963-2011. Para el período 1963-2000 se utilizaron muestras de datos censales,
mientras que para el 2011 se utilizó la base de datos completa. La metodología consistió en la
estimación del indicador conocido como SMAM (Singulate Median Age of Marriage), que refiere a la
edad promedio de la primera unión.
Los datos se desagregaron en función del sexo y a nivel cantonal. La evidencia empírica generada
indica que la edad promedio de la unión para el total de la población costarricense pasó de 22.7 años
en 1963 a 25.7 años en 2011. Las mujeres han retrasado en mayor medida su calendario (de 19.9 a
24.2 años) en comparación con los hombres (de 25.1 a 27.2 años). Asimismo, desde el año 1963 se ha
acortado la diferencia de edad entre ambos sexos (de 5.2 en 1963 a 2.9 a la actualidad). Finalmente,
se identificaron importantes variaciones en los patrones de distribución geográfica del indicador. Las
zonas costeras y limítrofes tienden a presentar edades promedio menores a la unión en comparación
con los cantones agrupados en la meseta central del país.
I. Introducción
Asimismo, diversos estudios realizados, sobre todo en el ámbito de los países en desarrollo, muestran
que entre el 50% y el 75% de todos los primeros nacimientos ocurren durante los dos años posteriores a
la primera unión (Singh y Samara, 1996; Westoff et al., 1994). La maternidad a edades tempranas eleva
los riesgos sobre la salud y las probabilidades de truncar el desarrollo femenino en otras áreas, tales
como la educación formal, la capacitación laboral, experiencia profesional y el crecimiento personal.
Incluso, existe evidencia que sugiere que las uniones tempranas se relacionan a largo plazo con
altas probabilidades de divorcio y separación, lo cual aumenta los porcentajes de madres solteras
(Goldman, 1981; Singh y Wulf, 1990). Esto crea dificultades adicionales para estas mujeres, quienes
generalmente deben asumir la crianza de sus hijos, con la ayuda de sus antiguas parejas o sin ella.
De hecho, en las conferencias de El Cairo y Beijing se enfatizó sobre las consecuencias negativas de
casarse a edades tempranas.
1/ Demógrafo y Sociólogo. Investigador del Instituto de Investigaciones Sociales, Universidad de Costa Rica (IIS-
UCR). Correo: [email protected]
2/ En este documento, el término “unión” abarca tanto las uniones consensuales como los matrimonios legales.
96
Demografía López Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Aunque diversos organismos internacionales han recomendado programas y políticas para reducir
las uniones precoces; como por ejemplo, aumentar la edad mínima legal a la unión; en definitiva,
ninguna política implementada por el Estado ha mostrado ser verdaderamente eficaz. Por esta razón,
la mayoría de estudios relacionados con el tema concuerda en que el medio más eficiente a través del
cual el Estado puede influir sobre el calendario nupcial es fortaleciendo el estatus social de la mujer y
las condiciones de vida en general de la población.
Uno de los factores más importantes que suele asociarse con las condiciones de vida y el calendario
nupcial es la escolaridad. El nivel educativo no solo constituye el determinante más importante del
mayor o menor grado de éxito en las estructuras ocupacionales de las sociedades occidentales
contemporáneas (Bourdieu, 2005), sino que también influye sobre el comportamiento reproductivo de
las personas jóvenes de distintas formas: 1) como fuente de conocimiento; 2) como vehículo para el
desarrollo socioeconómico y; 3) mediante la transformación de actitudes (e.g. Castro y Juárez, 1995;
Heaton y Forste, 1998; Singh y Samara, 1996).
Asimismo, otros factores que suelen reconocerse como asociados al calendario de la nupcialidad son
el aumento de los niveles de urbanización y la participación femenina en los mercados laborales (Singh
y Samara, 1996). Chowdhury (1994) señala que la educación y el empleo constituyen alternativas al
matrimonio en sociedades no industrializadas. Cuando estas alternativas son más atractivas que la
opción de casarse, es probable que las mujeres retrasen su entrada al matrimonio.
Por otra parte, la urbanización provee una mayor exposición a los medios de comunicación masiva
y a valores que promueven el retraso del matrimonio o que ofrecen otras alternativas a la vida familiar.
Las mujeres urbanas tienden a estar menos comprometidas en las redes de parentesco u otras formas
de control social que limitan su comportamiento sexual (Singh y Samara, 1996).
En el caso latinoamericano, las investigaciones acerca de la nupcialidad son más bien escasas. La
desatención de estos hechos sociales no es de extrañar, sobre todo si se consideran las inquietudes que
guiaron gran parte del desarrollo de la demografía latinoamericana durante la segunda mitad del siglo
XX. Esta desatención se relaciona mucho más con el estudio de la fecundidad y su papel en las altas
tasas de crecimiento poblacional registradas durante las décadas de los cincuenta, sesenta y setenta.
En este contexto, la nupcialidad se confinaba al papel de determinante próximo o variable intermedia
de la fecundidad, de acuerdo con los enfoques teóricos predominantes en la época (Quilodrán, 2004).
Sin embargo, los intensos cambios económicos, políticos y sociales ocurridos durante el último
cuarto de siglo han modificado el papel de las mujeres en sociedad y, consecuentemente, las pautas
de formación familiar (Arriagada, 2002). Entre algunas de las transformaciones más significativas se
encuentran: la aceleración de los procesos de transición demográfica, las altas tasas de participación
femenina en los mercados de trabajo, y la incorporación masiva de las mujeres al sistema educativo
formal. Estos cambios han generando un renovado interés hacia el tema de la nupcialidad como tal,
más allá de su vínculo con la fecundidad.
El presente trabajo tiene como objetivo analizar las tendencias del calendario nupcial costarricense
durante el período 1963-2011. Específicamente, se procura 1) estimar la edad de entrada en primera
unión de la población costarricense para el período 1963-2011; 2) verificar la existencia de patrones
regionales asociados al calendario nupcial costarricense para el 2011 y 3) Identificar posibles diferencias
y similitudes entre el calendario nupcial de hombres y mujeres para el período 1963-2011.
97
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Demografía López
II. Metodología
Los datos utilizados en esta investigación proceden de las muestras de microdatos censales
costarricenses correspondientes a las rondas 1963, 1973, 1984, 2000. Se trata de muestras armonizadas
por el proyecto IPUMS-Internacional (Minnesota Population Center, 2011) puestas a disposición de la
comunidad científica a través de su página web3.
Para el año 2011 se utilizó la base de datos completa facilitada por el Instituto Nacional de Estadística
y Censos de Costa Rica (INEC). El período bajo estudio supone la consideración de dos contextos
distintos. El primero es el de inicios de la década de los sesenta, caracterizado por la preminencia del
modelo de proveedor masculino del hogar, altas tasas de fecundidad y amplias brechas de género
asociadas con los mercados laborales y en el sistema educativo (sobre todo a nivel superior).
Cuadro 1
Distribución de la población costarricense de
15 - 50 años de edad según ronda censal,
1963 - 2011 (sin ponderar)
A diferencia de las encuestas retrospectivas o los datos de panel, los censos no proporcionan
información acerca de la biografía marital de las personas. Los datos refieren únicamente a las
características de los hombres y mujeres al momento del censo. En términos de los estudios de
nupcialidad, esto significa que no disponemos de información acerca de la fecha y la edad que tenían
las personas cuando entraron en su primera unión. De esta forma, el estudio del calendario nupcial a
partir de la información censal implica la utilización de métodos indirectos.
En este sentido, el indicador más utilizado para calcular la edad de entrada en primera unión es la
edad media al matrimonio (conocido en inglés como “Singulate Median Age of Marriage”: SMAM); una
medida sintética de nupcialidad propuesta por Hajnal (1953). Esta se se obtiene a partir del cómputo
!"
15 + ( !!!" !! ) − (50!!" )
!"#" = ,
1 − !!"
En donde x
representa
EnSdonde la proporción
Sx representa de personas
la proporción de que nuncaque
personas ha estado
nunca en
ha unión
estadoa la
enedad
uniónx. De
hecho, el procedimiento puede considerarse como una forma de calcular el número promedio de años
a la en
vividos edad x. por
soltería De aquellas
hecho, personas
el procedimiento
por debajopuede considerarse
de los 50 años. como una forma de
calcular el número promedio de años vividos en soltería por aquellas personas por
III.debajo de los 50 años.
Resultados
Luego de la aplicación del procedimiento descrito en el apartado anterior, se obtuvieron los valores que
representan la edad promedio de entrada en primera unión, tanto a nivel nacional, como desagregados
en función del sexo. Con esta información se construyó en gráfico 1, donde se muestra la tendencia
histórica del calendario nupcial de hombres y mujeres desde 1963 hasta 2011.
Gráfico 1
Edad promedio de entrada en primera unión según sexo y año
Costa Rica 1963 - 2011
Edad
29
27
25
23
21
19
17
15
1963 1973 1984 2000 2011
Año
Fuente: Elaboración propia con base en muestras censales (1963-2000) y el Censo Nacional
de Población 2011.
99
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Demografía López
Tal y como puede apreciarse, para el total de la población costarricense se observa una tendencia
hacia la estabilidad del calendario durante los 20 años que comprenden el período 1963-1984. Dicha
tendencia hacia la estabilidad, que se sitúa alrededor de los 22 años de edad, ha sido bien documentada
para el caso de la región latinoamericana y, para el caso costarricense, concuerda con los valores
obtenidos en otras investigaciones (e.g. Esteve et al., 2013; Fussell y Palloni, 2004; Zavala de Cosío,
1995). Dicha tendencia, junto con la persistencia de un sistema dual de nupcialidad, caracterizado por
la coexistencia de las uniones formales e informales desde la era colonial, constituye uno de los rasgos
que ha distinguido a los regímenes de nupcialidad latinoamericanos a nivel mundial (Castro, 2001; De
Vos, 1998). Estos valores han ubicado históricamente a Costa Rica en una posición intermedia a nivel
latinoamericano, entre la edad que suelen presentar los países del Cono Sur (Argentina, Chile, Uruguay)
y el resto de países centroamericanos (López et al., 2011). Lamentablemente, el censo correspondiente
a la década de los noventa no se realizó, razón por la cual se ignora exactamente hasta cuando persistió
este patrón. Sin embargo, lo que sí puede asegurarse sobre la base de la información disponible, es
que entre las décadas de los años 90 y 2000 se inicia un significativo incremento de la edad a la unión,
el cual tiende a situar al total de la población costarricense en 25,7 años para el 2011. Asimismo, el
gráfico también muestra el típico patrón diferenciado de conducta por sexo, el cual se caracteriza por
el hecho de que los hombres poseen una edad de entrada en primera unión mayor en comparación
con las mujeres.
Cuadro 2
Edad media a la primera unión (SMAM) según ronda censal,
sexo y diferencia entre hombres y mujeres, 1963-2011
Total
Censo Hombres Mujeres Diferencia
Costa Rica
Las cifras referidas a los patrones de comportamiento diferencial por sexo pueden apreciarse con
mayor claridad en el cuadro 2. Durante el período de tiempo estudiado, los hombres han retrasado su
calendario nupcial en 2.1 años (de 25.1 a 27.2 años), mientras que el cambio ha sido más drástico en el
caso de las mujeres: 4.3 años (de 19.9 a 24.2 años). En el cuadro también se presentan las diferencias
entre la edad promedio de ambos sexos para cada uno de los años contemplados (última columna).
Así, se demuestra que existe una tendencia constante hacia la reducción de la brecha entre ambos
sexos. Mientras que para 1963 los hombres tendían a unirse 5.2 años más tarde que las mujeres, para
el 2011 esta diferencia se había reducido a 2.9 años.
A pesar de que la información presentada hasta ahora ofrece un valioso recurso para develar las
tendencias históricas del calendario nupcial costarricense, se sabe que los datos a nivel agregado por
lo general suelen invisibilizar dinámicas de comportamiento propias de los distintos grupos sociales
100
Demografía López Costa Rica a la Luz del Censo 2011
o regiones. El acceso a la base censal completa permitió estimar y georeferenciar los valores del
indicador SMAM a nivel cantonal (mapas 1, 2 y 3).
Mapa 1. Edad media de entrada a la primera unión (SMAM). Distribución geográfica a nivel
cantonal, Costa Rica, 2011
Fuente: Elaboración propia con base en el Censo 2011. Instituto Nacional de Estadística y Censos(INEC).
101
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Demografía López
Mapa 2. Edad media de entrada a la primera unión (SMAM) para las mujeres. Distribución
geográfica a nivel cantonal, Costa Rica, 2011
Fuente: Elaboración propia con base en el Censo 2011. Instituto Nacional de Estadística y Censos(INEC).
102
Demografía López Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 3. Edad media de entrada a la primera unión (SMAM) para los hombres. Distribución
geográfica a nivel cantonal, Costa Rica, 2011
De esta forma, en el mapa 1 se presentan los valores para el total de la población, asociados con
la edad promedio de entrada en primera unión para cada uno de los 81 cantones que conforman
el territorio nacional. A nivel general, se aprecia que los cantones que poseen las edades promedio
más bajas tienden a ubicarse en las zonas costeras del país (con una mayor uniformidad en la zona
Atlántica), y en las zonas fronterizas. Los cantones con tonalidades más oscuras, que representan una
edad a la unión más tardía, tienden a agruparse en la meseta central.
A nivel nacional, las edades varían entre los 22 años para el cantón de Osa, hasta los 30 años en
el cantón de Montes de Oca, situación que probablemente obedece a la alta densidad de población
universitaria que compone dicho cantón (el detalle de las estimaciones puede consultarse en el anexo de
este documento). Específicamente, entre los 10 cantones con un calendario más tardío se encuentran:
Montes de Oca (30.3), Curridabat (28.5), Santo Domingo (28.2), Belén (28.2), Escazú (28.1), Oreamuno
(27.9), Tibás (27.8), San Pablo (27.5), Moravia (27.5) y Goicoechea (27.4). Entre los que poseen un
calendario más temprano se ubican: Osa (22), Matina (22.3), Parrita (22.3), Corredores (22.4), Aguirre
(22.5), Sarapiquí (22.7), Golfito (22.9), Talamanca (23.1), Siquirres (23.2) y Santa Cruz (23.3).
Los mapas 2 y 3 muestran respectivamente los valores cantonales para mujeres y hombres por
separado. En términos generales, presentan un patrón de distribución territorial similar al anterior con
respecto a los cantones que poseen una edad de entrada en unión más tardía. Es decir, las mujeres y
103
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Demografía López
hombres pertenecientes a los cantones ubicados en la meseta central suelen unirse a edades mayores,
con la excepción de Hojancha (29.1) en el caso de los varones. En relación con los cantones que
poseen una edad más temprana a la unión, la situación prácticamente no varía con respecto al patrón
a nivel nacional para los hombres.
Sin embargo, para las mujeres se aprecian algunas diferencias específicas pues dentro los 10 cantones
con edades promedio más bajas destacan también Turrubares, Bagaces y Hojancha con alrededor de
21 años de edad. Vale la pena señalar que, por lo general, los cantones donde las mujeres suelen
unirse a edades más tempranas (20-21 años) también son aquellos donde se presentan las mayores
diferencias entre hombres y mujeres (ver anexo A1). Por ejemplo Hojancha (7,5 años), Bagaces (6,2
años), Turrubares (5.9 años) y Esparza (5.2 años).
IV. Conclusiones
El objetivo de este trabajo consistía en analizar las tendencias del calendario nupcial costarricense
durante el período 1963-2011. Este período se caracteriza por fuertes procesos de transformación
social, los cuales a su vez han modificado el papel de las mujeres en sociedad y las pautas de
formación familiar (e.g. aceleración de los procesos de transición demográfica, aumento de la
participación femenina en los mercados laborales y la incorporación masiva de las mujeres en los
sistemas educativos formales).
Las distintas teorías formuladas hasta la fecha relacionan estos procesos de modernización social con
importantes modificaciones en los patrones de formación de uniones (incluyendo la edad de entrada
en primera unión), como resultado del aumento en los niveles de autonomía personal y un mayor control
de las personas sobre su propia sexualidad.
Vista en perspectiva histórica, la evidencia empírica mostrada en este trabajo sugiere que los cambios
a nivel social tienen su correlato en el significativo aumento de la edad de entrada en primera unión de
hombres y mujeres durante este período. Las edades comprenden alrededor de 25 y 20 años en 1963
hasta los 27 y 24 años en 2011 respectivamente. Estos cambios han venido reflejándose con mayor
intensidad entre las décadas de los años 90 y 2000.
Es de esperar que la lenta aunque progresiva disminución de las brechas de género durante este
período, sobre todo en relación con los mercados laborales formales y el sistema educativo, haya
impactado con mayor intensidad los patrones femeninos de conducta. Esta situación explicaría en parte
el hecho de que sean las mujeres quienes hayan retrasado más su calendario nupcial en comparación
con los varones. Por otra parte, el acortamiento de las diferencias entre la edad a la unión de hombres y
mujeres, que disminuyó desde los 5 años en 1963 hasta prácticamente 3 años en 2011 podría también
estar reflejando en alguna medida un paulatino proceso de convergencia entre los roles que hombres
y mujeres vienen desempeñando en la esfera pública desde la década de los sesenta.
Sin embargo, los datos a nivel agregado ocultan importantes diferencias a nivel local. Situación
que obedece al hecho de que los procesos de modernización social en el caso costarricense, al
igual que sucede con el resto de América Latina, no han permeado por igual a los distintos estratos
sociales y regiones que componen el país. Las estimaciones realizadas a nivel cantonal demuestran
que los cantones donde las personas suelen unirse a edades más tempranas y donde existen mayores
diferencias de edad entre hombres y mujeres, son a su vez aquellos que se encuentran más alejados
de la meseta central y los polos de desarrollo económico (zonas costeras y limítrofes). Esto evidencia
104
Demografía López Costa Rica a la Luz del Censo 2011
una vez más la profunda asociación que existe entre las esferas de la producción y la reproducción
social, de la cual la dinámica de la nupcialidad constituye un factor esencial.
V. Anexo
Anexo 1
A1. Estimado de la edad de entrada en primera unión según cantón y
sexo. Costa Rica
2011
Continuación Anexo 1
VI. Bibliografía
Bourdieu, P. (2005). Capital Cultural, Escuela y Espacio Social (6º ed.). México, D.F.: Siglo XXI.
106
Demografía López Costa Rica a la Luz del Censo 2011
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Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Educación
Isabel Román & Dagoberto Murillo
Zonas de inclusión y exclusión educativa en Costa Rica
2011.
Antonella Mazzei
Caracterización de la población “Nini”: Ni estudia, ni
trabaja.
Resumen:
Este estudio realiza una aproximación al tema de distribución espacial de las desigualdades educativas,
trata de identificar y distinguir zonas geográficas con grados diversos de inclusión o exclusión, según
datos del Censo 2011 para Costa Rica. Se utilizan medidas de auto-correlación espacial como la I de
Moran y los indicadores locales de asociación espacial (LISA, Local Indicators of Spatial Association)
con el fin de analizar las relaciones espaciales existentes a nivel distrital para variables relevantes como
asistencia a la educación, logro educativo y clima educativo del hogar. Entre los principales hallazgos
encontrados destacan los siguientes:
• Persisten conglomerados de baja asistencia, pese a que más de un 77% de los distritos no presentan
una asociación espacial significativa con los distritos vecinos en esta variable.
• Hay una alta auto-correlación espacial positiva en la variable porcentaje de hogares con clima
educativo bajo (I Moran: 0,66), lo cual evidencia que esta variable no se distribuye aleatoriamente
en el espacio.
• Existe una correlación espacial negativa entre el logro de completar secundaria en la población
de 18 a 21 años y la incidencia de hogares con clima educativo alto. Distritos con bajo logro se
encuentran asociados espacialmente con distritos que tienen una alta incidencia de hogares con
clima educativo bajo.
Los hallazgos de este estudio son relevantes para la política educativa en la medida que plantean la
necesidad de avanzar en el diseño de estrategias de atención, diferenciadas a nivel local que permitan
priorizar y focalizar recursos hacia las zonas de mayor exclusión y mejorar en ellas la oferta y la calidad
de los servicios educativos.
1/ Master en Sociología del Programa de Maestría Centroamericana de Sociología de la Universidad de Costa Rica.
Investigadora del Programa Estado de la Nación. [email protected]
2/ Licenciado en Economía de la Universidad de Costa Rica. Investigador del Programa Estado de la Nación.
[email protected]
110
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
I. Introducción
Este estudio analiza la distribución espacial de las desigualdades educativas en Costa Rica,
identificando zonas de inclusión y exclusión educativa a lo interno del territorio, a la luz del Censo del
2011. Se utilizan medidas de auto-correlación espacial con el fin de analizar las relaciones espaciales
existentes, a nivel distrital para variables relevantes como: asistencia a la educación, logro y clima
educativo del hogar.
Se busca responder a las siguientes preguntas principales: ¿Existe o no auto correlación espacial
en la distribución espacial de hogares con clima educativo bajo? ¿Dónde se ubican las zonas más
segregadas? ¿Qué características presentan? ¿Existen conglomerados espaciales de bajo logro
educativo? Se calcula la I de Moran global y los indicadores locales de asociación espacial (LISA,
Local Indicators of Spatial Association), método que permite capturar el grado de asociación espacial y
la heterogeneidad que resulta del aporte de cada distrito al indicador global, lo cual permite identificar
distintos tipos de agrupamientos o conglomerados espaciales.
Se privilegia el abordaje del tema desde el enfoque territorial no solo para aprovechar las ventajas
que ofrece la disponibilidad de datos censales, sino también porque son pocos los estudios que a
nivel nacional han realizado aproximaciones espaciales en el tema de educación a excepción de
Trejos y Méndez (2004) o González (2004), utilizando precisamente la información censal del 2000. El
enfoque territorial permite, asimismo, reconocer el acceso a la educación como un proceso altamente
heterogéneo, debido a la existencia de una multiplicidad de situaciones y procesos sociales que tienen
lugar en distintos entornos físicos y geográficos del territorio nacional y que condicionan dicho acceso
y generan zonas de mayor acceso y otras en las que persisten rezagos importantes.
Además del enfoque territorial, la investigación privilegia también variables de análisis como “clima
educativo del hogar”, indicador formulado por la Comisión Económica de América Latina (CEPAL) en
1994 como referente del capital cultural de los hogares que de gran impacto en el desempeño y logro
educativo de los niños (as) y adolescentes . En América Latina, estudios recientes sobre desigualdades
educativas, los cuales consideran el clima educativo del hogar, han sido desarrollados por el Sistema
de Información de Tendencias educativas en América Latina (SITEAL-UNESCO), y ha sido definida
como el promedio de años de escolaridad alcanzado por los miembros de 18 años y más del hogar.
Esta variable es utilizada como diferencial de ingresos debido a su alto valor discriminante.
El aporte más relevante que realiza la presente investigación es identificar con claridad la localización
geográfica de lo que se denomina, por un lado, “Zonas inclusión” entendidas como espacios geográficos
con un bajo porcentaje de hogares con clima educativo bajo, rodeados homogéneamente de otros en
la misma condición (zonas bajo-bajo); con mejores oportunidades de acceso y logro. Por otro lado,
“Zonas de exclusión” en alusión a espacios geográficos con alto porcentaje de hogares con clima
educativo bajo, rodeados de otras áreas con un alto valor en esta variable y donde las oportunidades
de acceso y logro son menores. Estos resultados y otros diferenciales en materia de logro educativo,
son de particular importancia para el Estado costarricense, con el fin de promover estrategias de
111
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
atención, diferenciadas por zonas. Esto para estudiar los factores que inciden en la conformación de
brechas e impiden a los habitantes del país acceder de forma equitativa a una educación de calidad.
II. Metodología
Para este trabajo es importante entender el concepto de autocorrelación espacial, el cual de acuerdo
con Getis (2010) fue creado en la Universidad de Washington a finales de la década de los 50, por
Michael F. Dacey. El concepto de auto correlación espacial tiene como punto de partida la literatura
desarrollada sobre el principio de proximidad, el cual se sintetiza posteriormente, en la primera Ley de
Tobler, según la cual “todo está relacionado con todo lo demás, pero las cosas cercanas están más
relacionadas que las cosas distantes” (Tobler, 1970).
No será hasta 1969 con el trabajo de Cliff y Ord, que el concepto de autocorrelación espacial se
desarrolla en un marco estadístico. Ambos autores encuentran que “la presencia de una cualidad
en una región o país hace que su aparición en las unidades vecinas sea más probable” (Cliff y Ord,
1969). En esta línea una variable se encontrará espacialmente auto-correlacionada cuando los valores
observados en un territorio geográfico se relaciona con los valores observados en las unidades vecinas,
tal que se produce una contigüidad geográfica en la variable.
Además, Martori y otros (2008) señalan que el análisis de la autocorrelación espacial permite
comprobar el cumplimiento de la hipótesis de aleatoriedad en la distribución de una variable o si por
el contrario existe una asociación significativa de valores similares o no similares entre zonas vecinas.
No obstante, la existencia de autocorrelación espacial no implica necesariamente una relación de
causalidad. El coeficiente I de Morán
Una de las estadísticas más utilizadas para analizar la autocorrelación espacial es el coeficiente I de
Morán3, el cual ofrece una medida resumen de la intensidad de la autocorrelación de los agregaciones
geográficas consideradas. Este coeficiente varía en el intervalo de -1 a 1, cuando la autocorrelación es
positiva valores similares de una variable tienden a concentrarse en el espacio, caso contrario, existe
autocorrelación negativa cuando las unidades geográficas de observación tienden a estar rodeadas de
valores opuestos estadísticamente significativos (Góngora, 2007); lo que se denomina como dispersión.
Cuando el coeficiente es 0 la variable seleccionada para el análisis espacial se presenta en forma
aleatoria.
Adicional al coeficiente I de Moran, se utilizan los indicadores locales de asociación espacial (LISA,
por sus siglas en inglés). Estos permiten descomponer indicadores globales como la I de Moran, según
la contribución de cada observación individual (Anselin, 1995). La ventaja de este tipo de indicadores
radica en la posibilidad de identificar un conjunto de conglomerados espaciales que permitan identificar
zonas calientes (hot spot); entendidas como conglomerados con valores extremos de la variable (altos
y bajos), cuadrantes I y III de la figura 1. Es decir, permite abordar el tema de la heterogeneidad
espacial (Itzcovich, 2011)
3/ Es un coeficiente de correlación de Pearson cuya diferencia es que la asociación de valores en el conjunto de datos está
determinada por una matriz de contigüidad espacial. Existen otras medidas como la C de Geary.
112
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadrante Cuadrante I
IV Alto-Alto
Bajo -Alto (+ +)
(- +)
Cuadrante Cuadrante II
III Alto - Bajo
Bajo - Bajo (+ -)
(- -)
Fuente:
Fuente: Román
Román y Murillo,
y Murillo, 2013.
2013.
Las
Lasvariables
variablesanalizadas a nivel
analizadas espacial
a nivel son las son
espacial siguientes: asistencia, asistencia,
las siguientes: logro y climalogro y clima educativo del
educativo
hogar. Paradelelhogar. Para
cálculo deelestas
cálculovariables
de estas variables
se utilizóse información
utilizó información del censo
del censo 2000 y 2011 del INEC. En el
primer
2000 ycaso,
2011 se
del refiere a la
INEC. En el población
primer caso,de
se 6-11
refiereaños y de 12-17
a la población añosaños
de 6-11 queyasisten
de a la educación formal.
En12-17
segundo caso, variable logro alude al porcentaje de niños y niñas que
años que asisten a la educación formal. En segundo caso, variable logro alude al finalizaron la educación
primaria en el rango de edad de 13-16 años y los adolescentes que culminaron la secundaria en el
porcentaje de niños y niñas que finalizaron la educación primaria en el rango de edad
rango de edad de 18-21 años.
de 13-16 años y los adolescentes que culminaron la secundaria en el rango de edad de
Finalmente,
18-21 años. la variable lima educativo del hogar se define como los años de educación promedio
de los miembros de 18 años y más dentro del hogar, excluyendo los rentistas y el personal de servicio
doméstico.
Finalmente,Alapartir delima
variable esta variable
educativo dellos hogares
hogar se como
se define clasifican en de
los años tres tipos:
educación
promedio de los miembros de 18 años y más dentro del hogar, excluyendo los rentistas
y el personal de servicio doméstico. A partir de esta variable los hogares se clasifican
en tres tipos:
• Hogares con clima educativo bajo: aquellos en los que el promedio de
113
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
• Hogares con clima educativo bajo: aquellos en los que el promedio de escolaridad de los miembros
con 18 y más años residentes en el hogar es inferior o igual a seis años.
• Hogares con clima educativo medio: aquellos en los que el promedio de escolaridad de los miembros
con 18 y más años residentes en el hogar es de entre seis y doce años.
• Hogares con clima educativo alto: aquellos en los que el promedio de escolaridad de los miembros
con 18 y más años residentes en el hogar es superior a doce años.
III. Resultados
Gráfico 1 I de Moran global para la asistencia a la educación regular a nivel de distritos, según
grupos de edad.
Pese a que el coeficiente I de Morán global apunta a una baja autocorrelación espacial en las
variables de asistencia a la educación formal, los indicadores locales de asociación espacial (LISA)
permiten identificar conglomerados con distritos que tienen valores bajos en dichas variables. En el
mapa 1 se muestran la ubicación espacial de aquellos distritos que están dentro del conglomerado de
baja asistencia para el grupo de edad de 12 a 17 años; donde en promedio un 30% de los jóvenes en
esas edades no asisten a la educación regular.
115
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
Dentro de los distritos que forman parte tanto del conglomerado de baja asistencia para el grupo
de 6 a 11 como de 12 a 17 años están: San Carlos de Tarrazú; Monterrey y Pocosol de San Carlos; El
Amparo y San Jorge en los Chiles; San Rafael de Guatuso, Brunka de Buenos Aires, Valle la Estrella
de Limón, Colorado de Pococí, Telire de Talamanca y Matina del cantón de mismo nombre. Este hecho
demuestra la persistencia de “núcleos duros” con problemas de asistencia a la educación, tanto a
nivel de primaria como secundaria, para los cuales se requieren medidas por parte del Ministerio de
Educación que mejoren no solo la asistencia, sino la retención de estudiantes.
3.2. Clima educativo del hogar un factor clave que incide en la permanencia y el logro educativo
Para atender los desafíos pendientes en materia de cobertura, el país requiere profundizar en el
estudio de los factores que inciden en el acceso y permanencia de los estudiantes en el sistema
educativo, hasta que estos alcancen culminar la secundaria. Estudios internacionales muestran que
un 50% del logro educativo de los estudiantes se explica por factores asociados a variables claves
como clima educativo del hogar (CEPAL, 1994). Variable que también explica de forma importante la
desigualdad en el logro de primaria y secundaria en el país (Trejos, 2010).
En Costa Rica el porcentaje de hogares con clima educativo bajo, es decir, aquellos en los cuales
los años de escolaridad promedio de los miembros de 18 años y más es menor o igual a 6 años, pasó
116
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
de 45,0% en 2000 a un 33,2% en 2011. La población de 6 a 17 años que vive en hogares con estas
características educativas era 332.678, lo cual equivale a un 36,7% de la población en ese grupo
de edad. Esto evidencia la necesidad de que el sistema educativo responda como un nivelador de
oportunidades para estos niños y jóvenes, y no como un reproductor de desigualdades.
Aunque los niveles de inasistencia a la educación regular crecen a partir de los 12 años, lo hace
a ritmos distintos, según sea el clima educativo del hogar. Esta situación ha generado importantes
brechas entre aquellos niños y jóvenes que viven en hogares con clima educativo bajo y aquellos que
pertenecen a hogares con climas educativos altos, donde la diferencia asciende a más de 20 puntos
porcentuales cuando las edades se encuentran entre 15 y 17 años (Gráfico 2).
Gráfico 2
Inasistencia a la educación regular, por edades simples según clima
educativo del hogar. (Cifras relativas)
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17
Edad en años cumplidos
Los hogares, según clima educativo, muestran agrupaciones importantes en el territorio nacional. En
los años 2000 y 2011, se encuentra una alta correlación espacial positiva en la variable porcentaje de
hogares con clima educativo bajo4; el coeficiente I de Morán global fue 0,68 y 0,66 respectivamente, es
decir, se rechaza la hipótesis nula de que esta variable se distribuye aleatoriamente a través del territorio.
Por el contrario, se puede afirmar que los valores similares de dicha variable tienden a agruparse en el
espacio.
Por otro lado, un 22,2% se conglomeran como zonas bajo-bajo, en este caso, distritos con bajos
valores de la variable, rodeados de otros distritos con bajos porcentajes de hogares con clima educativo
4/ En el apartado de Anexo se incluye un mapa con el porcentaje de hogares con clima educativo bajo según distritos.
117
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
bajos. Los espacios en blanco, son aquellos donde no hay una asociación espacial significativa, y en
los cuales se presenta una mayor heterogeneidad en la distribución espacial de la variable.
Para Itzcovich (2011) aquellos espacios donde existe una mayor incidencia de hogares con clima
educativo bajo (la cual se articula con otros tipos de exclusiones sociales) y la distancia con respecto
a los otros conglomerados espaciales permite pensar en el conglomerado alto-alto como espacios de
segregación5 o exclusión; y en el conglomerado bajo-bajo como espacios de inclusión.
5/ Se entiende por segregación una distribución desigual de los grupos en el espacio en la cual determinados sectores,
homogéneamente concentrados, ven reducidas sus posibilidades de acceso a recursos (Itzcovich, 2011).
118
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Resulta claro que los espacios de inclusión educativa en 2011 representan una menor extensión
geográfica que los espacios de exclusión (Mapa 2), en estos últimos un 64% de los distritos están
distribuidos en las regiones Huetar Norte, Huetar Atlántica y Brunca. Cantones como Buenos Aires,
Guácimo, Guatuso, Los Chiles, Parrita6, Sarapiquí y Tarrazú están inmersos por completo en este
conglomerado. Además, hay una presencia importante de los cantones: Upala, León Cortés, Matina,
Siquirres y Coto Brus, donde más del 60% de los distritos se encuentran vinculados a estos espacios
de exclusión.
En el caso de las zonas de inclusión, están concentradas por completo en la Región Central del país,
e incluyen la totalidad de los distritos ubicados en cantones como: San José, Curridabat, Montes de
Oca, Tibás, Belén, Flores, San Pablo, San Rafael y Santo Domingo. Y más de un 80% de los distritos en
los casos de La Unión, Goicoechea, Barva, Santa Ana y Heredia.
El porcentaje de hogares con clima educativo bajo en las zonas de exclusión (55,5%) es 3 veces
mayor que el presente en las zonas de integración (18,6%) y 1,5 veces más que las zonas para las
cuales no hubo una asociación espacial estadísticamente significativa. En el primer grupo predomina
la población rural (66%) mientras que en el conglomerado bajo-bajo casi la totalidad de la población es
urbana (98,6%), este último concentra un 35% de la población del país.
Aunque la brecha existente en la variable asistencia, para los dos conglomerados espaciales
considerados, son relativamente pequeñas en el grupo de población de 6 a 17 años (menor a 5 puntos
porcentuales). Se muestra como en aquellas zonas con mayor acceso a recursos más de un 20% de los
jóvenes entre 12 y 17 años se encuentra fuera del sistema educativo, la situación es más desfavorable
para el conglomerado de exclusión. En el grupo de 18 a 24 años, las brechas de asistencia se amplían
considerablemente tal que el nivel de asistencia para las zonas de integración (37,3%) es 2,6 veces
mayor que presentes en las zonas de exclusión (14,6%).
Los resultados del análisis de tenencia de computadora y servicio de Internet en el hogar, según
conglomerados espaciales, refuerza la idea de que la población en espacios de exclusión tiene menos
acceso a recursos, los cuales podrían reforzar el proceso educativo. En el caso de la zonas de inclusión
educativa (conglomerado bajo-bajo en la incidencia de hogares con clima educativo bajo) se encuentra
que en promedio un 62% de los hogares tienen acceso a computadora, ya sea de escritorio o portátil y
más de la mitad cuentan con Internet. Esto contrasta con las zonas segregadas donde menos del 27%
de los hogares tiene computadora o acceso a Internet.
En el tema de logro se encuentra que el porcentaje de jóvenes entre los 13 y 16 años con primaria
completa, en zonas de inclusión es 8 puntos porcentuales mayor que en las zonas de exclusión. Sin
embargo, esta brecha se amplía a 29 puntos porcentuales cuando se considera al grupo de jóvenes
de 18 a 21 años con secundaria completa. Así las cosas, el logro en secundaria es 2 veces mayor en
el conglomerado bajo-bajo que en aquellos con mayor incidencia de hogares con clima educativo bajo.
No obstante, el hecho de que solo seis de cada diez jóvenes entre los 18 a 21 años tenga la secundaria
completa en las zonas de mayor inclusión educativa es un motivo de preocupación para el país y la
forma en cómo reducir las brechas con respecto a las zonas más rezagadas (logro secundaria 28%),
todo un desafío.
Gráfico 3
Asistencia y logro, en zonas de inclusión y exclusión por grupos de edad
2011
6 a 11 años
Asistencia
12 a 17 años
18 a 24 años
0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100%
Bajo-Bajo Alto-Alto
3.5. En conglomerado con mayor logro educativo: cuatro de cada diez jóvenes entre 18-21 años no
han terminado la secundaria.
Por otro lado, las zonas rosadas (Mapa 3) representan a los distritos que tienen mayores porcentajes
de logro y que se encuentran rodeados por otros con una baja incidencia de hogares con clima
educativo bajo. Un 98% de estos distritos pertenecen al conglomerado de inclusión educativa. En
este conglomerado el nivel de logro promedio en secundaria es de 61,6% y en él viven un 28,7% de la
población en ese grupo de edad.
7/ La I de Morán para la variable logro en secundaria en el grupo de 18 a 21 años es de 0,59 en 2011. (Ver A.2)
120
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
3.6. Brechas también persisten en contextos de una alta incidencia de hogares con clima educativo
bajo.
Para Itzcovich (2011) una forma de conocer la estabilidad de la variable Porcentaje de hogares con
clima educativo bajo, es analizar si existen diferencias entre los distritos que en presencia de una alta
incidencia de hogares con clima educativo bajo se conglomeran en el espacio y aquellos distritos que
no presentan una asociación espacial significativa8.
8/ Se consideran únicamente a las unidades espaciales que tienen un 60% o más de hogares con clima educativo bajo.
121
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
Cuadro 1
Diferencias en asistencia, logro y acceso a recursos
según conglomerados espaciales, en distritos con más
de un 60% de hogares con clima educativo bajo.
Se encuentra que los distritos que pertenecen al conglomerado de exclusión educativa presentan
indicadores de asistencia, logro y acceso a recursos menores que aquellos distritos que no presentan
relaciones espaciales significativas con las unidades geográficas vecinas. Es decir, estos resultados
apuntan a que en contextos de alta incidencia de clima educativa bajo los procesos de inclusión
educativa avanzan a un ritmo menor en las zonas de exclusión.
IV. Conclusión
Los resultados del análisis realizado permiten llegar a las siguientes conclusiones relevantes:
La información del Censo del 2011 permite constatar que en Costa Rica existe una alta correlación
espacial en hogares con clima educativo bajo (I de Moran: 0: 66), por lo que la incidencia de esta
variable no se distribuye de forma aleatoria en el territorio.
En materia de asistencia a educación esta muestra una menor auto-correlación espacial por darse
una distribución espacial más heterogénea a lo largo del territorio, aunque persisten zonas o “núcleos
duros” importantes de atender.
Además, el análisis realizado también permite identificar; por un lado, “Zonas de mayor inclusión
educativa” que se ubican en el centro del país y son mayoritariamente urbanas. Por otro lado, existen
“Zonas de mayor exclusión educativa” localizadas principalmente en las regiones Huetar Norte,
Atlántica y Brunca.
Las condiciones y las oportunidades varían entre y al interior de las zonas de inclusión y exclusión
educativa. En las primeras, existe una menor incidencia de hogares con clima educativo bajo (zonas
bajo-bajo) y hay mayores oportunidades de acceso y logro educativo. Por otro lado, en las zonas de
exclusión muestran menores oportunidades de acceso, logro y acceso a recursos de apoyo educativo.
Los hallazgos de este estudio son relevantes para la política educativa en la medida que plantean la
necesidad de avanzar en el diseño de estrategias de atención diferenciadas a nivel local. Esto permitiría
priorizar y focalizar recursos hacia las zonas de mayor exclusión y mejorar en ellas la oferta y la calidad
de los servicios educativos. De igual manera, los hallazgos confirman la necesidad de profundizar
hacia futuro en el estudio de factores que inciden en la conformación de brechas espaciales, que
impiden a los habitantes acceder de forma equitativa a una educación de calidad.
En conclusión, ante las desigualdades espaciales identificadas en este estudio, pueden generarse en
el país dos escenarios a futuro: dejar que sigan reproduciéndose las brechas o bien desarrollar políticas
públicas que permitan atender a los estudiantes provenientes de las zonas más desfavorecidas y
contribuir con ello a nivelar las oportunidades en materia de educación.
V. Anexos
A.1 Porcentaje de hogares con clima educativo bajo, según distritos. 2011
Conglomerados Espaciales
Índice de
Variable Año
Moran global
Alto-Alto Bajo-Bajo No significativa
A.3 Diagramas de dispersión del I de Moran en incidencia de hogares con clima educativo bajo.
Código
Cantón Distrito
distrito
Continua…
125
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
Continua…
126
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Código
Cantón Distrito
distrito
10306 Desamparados Frailes
10308 Desamparados San Cristóbal
10402 Puriscal Mercedes Sur
10409 Puriscal Chires
10501 Tarrazú San Marcos
10502 Tarrazú San Lorenzo
10503 Tarrazú San Carlos
10603 Aserrí Vuelta De Jorco
10605 Aserrí Legua
10606 Aserrí Monterrey
11204 Acosta Cangrejal
11205 Acosta Sabanillas
11605 Turrubares Carara
11904 Pérez Zeledón Rivas
11905 Pérez Zeledón San Pedro
11907 Pérez Zeledón Pejibaye
11908 Pérez Zeledón Cajón
11910 Pérez Zeledón Río Nuevo
12001 León Cortes San Pablo
12002 León Cortes San Andrés
12003 León Cortes Llano Bonito
12004 León Cortes San Isidro
Continua…
127
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Román & Murillo
A.6 Asociación espacial entre porcentaje de jóvenes con secundaria completa e incidencia de
hogares con clima educativa bajo. 2011
i De acuerdo con CEPAL el clima educacional de los hogares es el factor que ejerce un
mayor impacto en el desempeño educativo , pues explica alrededor del 50% de los logros
(CEPAL,1994).
Fuente: Román y Murillo con datos del Censo 2011, INEC.
130
Educación Román & Murillo Costa Rica a la Luz del Censo 2011
VI. Bibliografía
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Trejos J. D, 2010. Indicadores de equidad en la educación. Una propuesta para Costa Rica. Ponencia
preparada para el III Informe Estado de la Educación, San José, Programa Estado de la Nación.
131
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Resumen
Costa Rica ha sido exitosa en lograr el acceso casi universal a la educación primaria, pero muestra
un amplio rezago en el acceso a la educación media. Esta menor cobertura de la educación media se
debe, en parte, a problemas en el desempeño de los niños en la escuela. Estos factores se acrecientan
en la educación media, donde no solo el acceso, sino la retención y sobre todo el logro educativo son
limitados y con una amplia dispersión geográfica.
Como en la última década la educación básica obtuvo una alta prioridad en la asignación de recursos
públicos, es de esperar mejoras en la formación de capital humano a través de ella y consiguientemente,
una reducción en los diferenciales geográficos y una menor desigualdad de oportunidades.
Con una batería de indicadores sobre el acceso, la retención y el logro educativo a nivel de distrito,
se buscó determinar el grado de formación de capital humano básico alcanzado, estimar la magnitud
de las brechas distritales en el desempeño del sistema educativo básico y determinar si estas brechas
se han ido cerrando en la última década.
Los resultados encontrados, señalan mejoras significativas entre el año 2000 y el 2011, pese a que el
país se mantiene rezagado en relación con la región latinoamericana en su conjunto. Así las cosas, solo
la mitad de los jóvenes está logrando completar sus estudios secundarios, sin considerar la calidad de
la educación recibida.
Pese a que las mejoras se acompañan de una reducción de las brechas distritales, estas siguen siendo
amplias y los distritos más alejados del centro del país, más extensos, rurales, menos densamente
poblados y con un menor clima educativo en los hogares, son los que obtienen resultados más limitados
En este sentido, el logro de la igualdad de oportunidades es aún un objetivo lejano.
I. Introducción
Además, la educación constituye un derecho humano fundamental que adquiere cada vez más
importancia por su efecto en el mejoramiento de la calidad de vida, el logro de una mayor equidad en
la distribución de los recursos y la reducción de la pobreza (Turbay, 2000). Por ello, no es extraño que
su acceso universal sea uno de los objetivos de desarrollo del milenio aprobados por las Naciones
Unidas (PNUD, 2004).
1/ Economista, subdirector del Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas de la Universidad de Costa Rica (IICE)
y profesor de las escuelas de economía de la Universidad Nacional y la Universidad de Costa Rica. [email protected]
2/ Estadística, consultora independiente e investigadora asociada al IICE. [email protected]
132
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El país ha sido exitoso en lograr el acceso, casi universal a la educación primaria, pero muestra un
amplio rezago en el acceso a la educación media, con posibles sesgos de género. Este menor acceso
a la educación media se debe a un menor desempeño de los niños en la escuela, lo cual se traduce
en repetición, abandono y menor logro en concluir los estudios primarios. Estos factores se acrecientan
en la educación media, donde no solo el acceso sino la retención y sobre todo el logro educativo
son limitados y con una, posiblemente, amplia dispersión geográfica (Trejos, 2010). A pesar de ser la
educación secundaria el umbral mínimo necesario para dar igualdad de oportunidades a la población
infantil y garantizar la competitividad del país, se está ante una situación en que se está fallando en la
formación del capital humano, necesario en las nuevas generaciones y para el país.
Como en la última década, la educación básica obtuvo una alta prioridad en la asignación de recursos
públicos, es de esperar mejoras en la formación de capital humano a través de ella y consiguientemente
una reducción en los diferenciales geográficos.
Con una batería de indicadores sobre el acceso, la retención y el logro educativo a nivel de distrito,
se busca determinar el grado de formación de capital humano básico alcanzado, estimar la magnitud
de las brechas distritales en el desempeño del sistema educativo básico y determinar si estas brechas
se han ido cerrando en la última década. Esta batería de indicadores constituye una base de datos que
resulta útil por sí misma para los tomadores de decisiones de política.
La hipótesis de partida, que se corrobora en el trabajo, es que estas brechas educativas son
significativas, en contra de los distritos más alejados del centro del país, y aunque se han venido
reduciendo en el transcurso de la última década, los logros son aún insuficientes. Para llevar a cabo
este cometido, la investigación se estructura en tres secciones adicionales. Primero, se presenta el
enfoque metodológico aplicado. Seguidamente, se presentan y discuten los principales resultados
encontrados y, se concluye con una recopilación de los principales hallazgos.
II. Metodología
La formación inicial del capital humano está condicionada por la interacción entre múltiples factores.
Esto vale tanto para su cantidad, la cual depende básicamente de la cobertura y eficiencia del sistema
educacional, como para su calidad y efectividad, evaluadas a través del desempeño de las personas.
(Brunner, J.J. y Elacqua. G, 2003).
Para finales del siglo XIX, cuando Mauro Fernández buscó universalizar la educación primaria, y
durante la primera mitad del siglo XX, saber leer y escribir era, probablemente, el capital humano
necesario para desenvolverse en la sociedad rural del momento. Lograr una adecuada inserción en la
economía y permitir la competitividad del país en los productos agrícolas tradicionales de exportación.
Para buena parte de la segunda mitad del siglo XX, concluir la educación primaria aportaba el
capital humano básico que demandaba el país para su estrategia de industrialización sustitutiva de
importaciones y diversificación de la oferta agrícola exportable.
Por lo tanto, la presente investigación enfatiza en este elemento: ¿Cuál es el éxito que está obteniendo
el país en lograr que su población joven complete los estudios secundarios? Poner la atención en
este indicador no solo implica centrarse en la igualdad de oportunidades, como factor generador de
equidad, sino también pasar de un concepto del derecho a la educación formal, centrado en el acceso,
a uno más sustantivo centrado en el logro real. Este logro supone dotar a todos los jóvenes de las
capacidades mínimas para su desarrollo posterior, esto es, para una integración social y una inserción
productiva de calidad.
Centrarse en que la conclusión de la educación secundaria implica también pasar de los indicadores
de acceso tradicionales a un indicador de resultado que permite evaluar el desempeño del sistema
educativo básico en general. Para esto, el indicador a utilizar es la tasa de logro en completar la
secundaria, definido como el porcentaje de los jóvenes entre las edades de 20 a 24 años que lograron
completar al menos la secundaria, ya sea académica o técnica3.
Este indicador de resultado no está disponible entre los indicadores tradicionales que genera el
Ministerio de Educación Pública (MEP) a partir de los registros administrativos, aunque es posible una
aproximación a ello4, y su ausencia refleja el énfasis tradicional de los ministerios de educación en los
indicadores de insumos más que en los de resultados. Su cálculo y uso se ha extendido a partir de las
encuestas de hogares, particularmente en América Latina (ver por ejemplo CEPAL, 2008 y OREALC/
UNESCO, 2008)
El grupo de edad de referencia se ha escogido teniendo en cuenta el rezago que sufren los estudiantes
y su comparación internacional. Como indicador de resultado, refleja lo ocurrido durante la vida escolar
de los jóvenes, que resulta al menos de 11 años en los centros educativos, por los que sus cambios
son de más largo plazo. En este caso se estarán comparando los años 2000 con el 2011, por lo
que los estudiantes del 2011 corresponden mayoritariamente a una generación nueva que no había
ingresado al sistema educativo en el año 2000. Por lo tanto, se estarían comparando dos generaciones
de estudiantes.
La unidad de análisis
Se utiliza el distrito más que el hogar como unidad de análisis, aunque esto último también es posible.
Al usar una unidad geográfica, los indicadores reflejarán el promedio distrital y su agregación mostrará
los promedios simples de los valores distritales y no los promedios ponderados. Estos últimos pueden
diferir dependiendo de la concentración de las características en ciertos distritos de tamaño poblacional
específico, como se mostrará más adelante.
Al utilizar el distrito, se busca trabajar con la unidad geográfica administrativa más pequeña que tiene
el país, pues los promedios cantonales pueden ocultar diferencias internas significativas, aunque los
resultados por cantón estarán disponibles en la base de datos preparada para el trabajo. Sin embargo,
el uso del distrito introduce dos limitaciones. Por una parte, existen unos distritos muy pequeños en
términos de su población en edad de estudiar, lo que puede aumentar la variabilidad de los indicadores.
Por otra parte, la comparación intercensal conlleva trabajar con un número distinto de distritos.
3/ Los censos identifican el último año aprobado y no indagan si completó las pruebas de bachillerato. Aquí se consideran los
que señalan tener, al menos, aprobado el quinto año en secundaria académica o el sexto en secundaria técnica. Tampoco
es posible introducir ninguna consideración sobre calidad de la educación recibida.
4/ En los países de la OECD se utiliza un indicador de los graduados de secundaria en cada año como porcentaje de la
población de la edad en que deberían graduarse (18 años), con ello se obtiene una especie de tasa bruta de logro en
secundaria.
134
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Entre el año 2000 y el 2011 se crearon 13 distritos adicionales, segregando parte de los distritos
existentes como se resume en el cuadro A1 del anexo. Esta segregación puede modificar sensiblemente
el valor del indicador del distrito base de un censo a otro.
Las principales fuentes primarias son las bases de datos del IX Censo de Población 2000 y el X
Censo de Población 2011 del Instituto Nacional de Estadística y Censos. Como fuentes secundarias se
utilizan estimaciones para países de la región.
La identificación de las brechas regionales y sus cambios se realizó de tres formas. Primero, una
presentación gráfica con la totalidad de los distritos involucrados y ordenados de menor a mayor valor
del indicador en el 2011. Segundo, con una agregación de los distritos en cinco grupos distintos o
quintiles. Dentro de las múltiples posibilidades, se ha optado por ordenarlos de menor a mayor, según
el valor del indicador de logro en secundaria y agruparlos en cinco grupos, donde cada uno incluye
al 20% de la población en edad de cursar los estudios básicos (de 5 a 18 años) y no con respecto al
número de distritos.
Si los distritos con los valores del indicador más bajos, corresponden aquellos con menor población
en edad escolar, esto significa que el primer quintil o grupo incluye un mayor número de distritos. Los
quintiles se construyen según el valor del indicador del 2011 y el ordenamiento se mantiene para el año
2000, pues se trata de un pánel de distritos5.
En tercer lugar se utilizan una serie de indicadores resúmenes sobre la dispersión de los valores del
indicador por distrito. El coeficiente de variación indicará si las brechas se van cerrando, en tanto que
los valores extremos y su distancia mostrarán los desafíos pendientes.
Dentro de los factores que explicarían las diferencias en el logro de completar la educación secundaria,
estarán un conjunto de variables características de los distritos. Entre ellas están su extensión, la
densidad poblacional y el grado de ruralidad, que condicionan la oferta educativa. También existen
otras características asociadas con el clima educativo del hogar que afectan la demanda educativa y
las posibilidades de aprendizaje. Como el análisis es por distrito y no por hogar, este se aproxima con
los años promedio de educación de la población entre los 25 a 65 años y con el porcentaje de esta
población que ha completado al menos la educación secundaria6.
Existe un conjunto adicional de indicadores que ayudan a explicar el logro educativo y que se refieren
al desempeño del sistema educativo en los niveles previos. El acceso, la retención y el logro en los
niveles previos son condiciones necesarias, aunque no suficientes, para mejorar el logro en secundaria.
5/ Si se realiza el mismo ordenamiento para el 2000, con valores de ese año y se comparan ambas distribuciones, el 60% de
los distritos se mantiene el mismo quintil, un 31% mejora y el 9% restante, empeora. De estos últimos, solo en un distrito se
acompaña con un deterioro marginal en el valor del indicador de logro. De los 13 distritos nuevos, seis caen el quintil más
bajo y cinco en el quintil intermedio.
6/ Al momento de preparar la ponencia no se disponía de otros indicadores como los recursos económicos de los hogares,
aproximados por el grado de pobreza del distrito por insuficiencia de ingresos o algún índice de activos del hogar.
135
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Estos indicadores también permiten caracterizar al sistema educativo e identificar donde existen las
principales limitaciones para permitir la formación de capital humano básico. Los indicadores educativos
utilizados, su aproximación y limitaciones se discuten a continuación.
Tasa neta de matrícula: este indicador muestra el porcentaje de la población en edad oficial para
cursar un determinado nivel educativo, que efectivamente está matriculado en ese nivel. Refleja la
cobertura, a tiempo, del sistema educativo en cuanto al acceso, en contraposición de las tasas brutas.
Para su estimación a partir de los censos de población hay que realizar dos procedimientos. En
primer lugar, hay que separar al nivel educativo a que se asiste, pues el censo pregunta sin separarlo
el nivel básico (ver cuadro A2 del anexo donde se comparan las preguntas sobre educación incluidas
en ambos censos). Para hacerlo, se consideró la población a partir de los cinco años para preescolar
y se cruzó con el último año aprobado. Ello permite separar fácilmente los que asisten a primaria de
los de secundaria y dentro de estos, los que van la secundaria baja (tercer ciclo) y los que asisten a la
secundaria alta (ciclo diversificado).
El problema se ubica en los que no han aprobado ningún año y tienen la edad necesaria para asistir
a preescolar o a primer grado7. Para solucionarlo se separan a partir de los siguientes criterios: se
considera que asiste a preescolar (preparatoria), si tiene cinco años o si tiene seis años y no ha asistido
a preescolar previamente; se considera que asiste a primaria si tiene seis años y tiene como último año
aprobado el preescolar más todos los que asisten, sin haber aprobado grado alguno, y tienen siete o
más años.
El segundo aspecto por resolver, se refiere a las edades oficiales de cada nivel educativo. El problema
que surge aquí es que el censo capta la edad del 30 de mayo al 3 de junio para el 2011 y en años
cumplidos, en tanto que las edades de ingreso se definen a febrero. Por ejemplo, para matricularse en
primer grado de primaria se debe contar con por lo menos seis años y tres meses en febrero. Así, niños
que en mayo informan tener seis años, pudieron no tener los requisitos. Con base en estos elementos
y a través de la comparación de las tasas obtenidas con las estimadas por el MEP, se decidió usar los
siguientes rangos de edad: preescolar (de 5 y 6 años), primaria (de 7 a 12 años), secundaria baja (de
13 a 15 años) y secundaria superior (de 16 a 18 años)8. Obsérvese que para este último nivel se usan
tres años en lugar de dos para considerar la duración de la secundaria técnica. Es claro que ello puede
7/ El mismo problema se presenta para separar los que asisten a la educación parauniversitaria de la universitaria, aunque
este nivel postsecundario no es parte de la población en estudio.
8/ Pese a que la educación primaria se separa en dos ciclos de tres años cada uno, su alta cobertura y logro, hacen poco útil
su separación para este trabajo.
136
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
reducir la tasa en la secundaria alta y secundaria total, pero considerar solo dos años, como hace el
MEP, tiene el efecto inverso.
Dos observaciones adicionales son pertinentes. En primer lugar, por los rangos de edad utilizados,
pueden aparecer estudiantes que están asistiendo al nivel superior. En estos casos, no se consideran
en el numerador y se deducen del denominador. Sin embargo, tampoco se agregan al nivel siguiente,
fuera del rango de edad oficial, como hace el MEP, pues ello sobreestimaría las tasas netas. En segundo
lugar, las tasas netas se calculan sobre los que asisten a la educación regular sin incluir la educación
abierta, aunque sí la especial. La asistencia a la educación abierta se excluye por las dificultades de
asignar el nivel a que se asiste y porque no se midió en el censo del 2000.
Tasa de rezago escolar: ni los censos ni las encuestas a hogares, preguntan si los estudiantes están
repitiendo el curso, de manera que no es posible estimar tasas de repetición por nivel educativo (UIS/
UNESCO, 2004). En su lugar y como indicador de desempeño del sistema educativo, se usan las tasas
de rezago escolar. Este indicador muestra el atraso en el logro educativo en relación con la edad en
que se espera que lo logre y acumula los efectos de la entrada tardía al sistema educativo, la pérdida
de cursos con su consecuente repetición y la posible salida temporal del sistema. La consecuencia
es que los jóvenes pueden terminar la primaria a una edad que puede provocar la deserción por sus
posibilidades de inserción al mercado de trabajo.
Pese a que en la base del censo del 2011 viene creada una variable de rezago escolar, se decidió
ajustarla para hacerla coherente con el resto de los indicadores utilizados. Para estimar el rezago escolar,
primero se compara la educación potencial (edad menos siete años), con la educación efectiva (años
de educación aprobados), bajo el supuesto que se ingresa a la escuela a los siete años como edad
mínima. Luego, se considera que existe rezago, cuando la diferencia entre la educación potencial y la
real es mayor o igual a los dos años. Los indicadores utilizados se refieren al porcentaje de estudiantes
que muestran rezago escolar (asisten con rezago), y se calcula tanto para el nivel primario como para
el secundario, este último separando la secundaria baja de la alta, pues es en estos niveles donde se
acumulan estos problemas.
Tasa de deserción: al igual que la repetición, la deserción interanual es el otro indicador utilizado a
partir de registros administrativos para evaluar el desempeño del sistema educativo. Al igual que la
repetición, ni los censos ni las encuestas indagan sobre la asistencia el año anterior para poder estimar
las tasas de deserción interanual. Por ello, se sigue aquí una aproximación para estimar la deserción
acumulada. Para ello, se considera un grupo etario que ya debió haber superado la secundaria (de 20
a 24 años) y se indaga si no asiste y cuál fue el último año aprobado. A partir de ahí se construyen tres
tasas de deserción (como porcentaje de la población total del grupo etario): tasa de deserción inicial o
los excluidos (no aprobaron año alguno de educación); la tasa de deserción temprana (no completaron
la primaria) y la tasa de deserción tardía (no completaron la secundaria).
9/ Un logro más general, pero menos relevante para el concepto de formación de capital humano básico seguido en esta
ponencia, es la tasa de alfabetización. Si bien esta se calculó para la población de 15 a 24 años, no se utilizará en este
informe.
137
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Índice de paridad de género: todos los indicadores utilizados se han estimado por sexo y se pueden
consultar en la base de datos complementaria a esta ponencia. Con el fin de hacer más manejable
la información, las posibles diferencias por sexo se resumen en el índice de paridad de género que
consiste en la proporción del indicador referido a las mujeres sobre el indicador referido a los hombres.
Si su valor es de la unidad, significa igualdad entre sexos (paridad de género) y si supera la unidad,
implica que las mujeres obtienen una ventaja sobre los hombres (si el indicador está definido en sentido
positivo)10.
La meta en la formación de capital humano básico (FKHB) es que todos los jóvenes logren completar
la educación secundaria, idealmente de calidad, pero esto último es otro desafío que no se logra medir
a través de los censos. En tanto se aleje de esta meta, más se está fallando en la FKHB.
El gráfico 1 muestra los distritos ordenados, según el logro de completar la secundaria en el año 2011.
Según el censo del 2011, a nivel nacional el 49% de los jóvenes de 20 a 24 años, habían alcanzado al
menos este nivel de capital humano, aunque con una amplia dispersión distrital. El promedio distrital
simple ubica este indicador en un 45%, producto de que los distritos con menos población tienden
a tener un logro menor. Este indicador va de un 7% en el distrito con el valor más bajo (Chirripó de
Turrialba) al 94% en el distrito mejor ubicado (Sánchez de Curridabat).
10/ Este no sería el caso de las tasas de rezago y de deserción y su interpretación es la inversa.
138
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 1
Costa
Gráfico 1Rica: Tasa de logro en completar la secundaria por distrito
Costa Rica: Tasa de logro en completar la secundaria por distrito 2000 y 2011
2000 y 2011
100
80
60
40
20
0
1
13
25
37
49
61
73
85
97
109
121
133
145
157
169
181
193
205
217
229
241
253
265
277
289
301
313
325
337
349
361
373
385
397
409
421
433
445
457
469
-20
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Su comparación con el año 2000 permite apreciar mejoras significativas, aunque no uniformes y
los distritos de la parte intermedia de la distribución parecen lograr las mayores mejoras. El promedio
nacional del 2000, ubica este indicador en torno al 33% (ponderado), lo que implica una mejora de
16 puntos de porciento (o del 43%). Si se considera el promedio distrital simple, el valor del 2000
alcanza el 26% para una mejora de 19 puntos de porciento (74%). Solo en dos distritos se observa una
reducción del logro en este período, uno ubicado en la parte superior de la distribución que baja de
75,9% a 75% (Mercedes de Guácimo) y otro en la parte baja de la distribución (Guayabo de Colón).
El cuadro 1 presenta el resumen de los indicadores de dispersión y sus cambios entre los dos
censos. Muestra que la dispersión se reduce entre los censos en momentos que aumenta el valor
medio, de modo que el coeficiente de variación se reduce a cerca de la mitad de su valor inicial. Esto
reflejareducciones de las brechas distritales, pese a que el rango absoluto se amplía y el distrito con
mayor logro tiene un indicador que resulta 13 veces mayor al distrito peor ubicado.
139
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Cuadro 1
Costa Rica: Indicadores de dispersión de la tasa de logro de completar la
secundaria
Promedio distrital
Ponderado 1 33,4 49,2 15,8 47,3
Simple 25,9 45,1 19,2 74,1
Valor Mediano 22,5 44,3 21,8 96,8
Desviación estándar 17,2 15,5 -1,7 -9,9
Coeficiente de variación 66,5 34,4 -32,1 -48,2
Valores extremos
Máximo 76,0 93,8 17,8 23,4
Mínimo 0,0 7,3 7,3
Rango
Absoluto 76,0 86,5 10,5 13,8
Relativo 12,9
Índice paridad de género
Ponderado 1 1,13 1,20 0,06 5,5
Simple 1,25 1,29 0,06 2,8
En el año 2000, tres distritos mostraban que no tenían ningún graduado reciente de secundaria,
situación que ya no está presente en el 2011. El cuadro también permite destacar que las mujeres
tienen un mayor logro que los hombres; además, esta ventaja se ha acentuado en el período. Si la
información se agrega en los quintiles, según el valor del indicador de logro y agrupando los distritos
para que cada quintil albergue a una quinta parte de la población en edad escolar, es posible destacar
algunas características de los grupos de distritos (ver cuadro 2).
140
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 2
Costa Rica: Características de los distritos según el logro en completar la educación
secundaria por quintiles
2011
1
Total Quintiles de distritos
Indicador
País
Quintil 1 Quintil 2 Quintil 3 Quintil 4 Quintil 5
Distritos
Número 472 118 104 91 66 93
Distribución 100,0 25,0 22,0 19,3 14,0 19,7
% de distritos de cada quintil en la región central 57,8 28,0 47,1 62,6 77,3 89,2
Indicadores de contexto
2
Tamaño del distrito (Km ) 108,2 248,9 106,9 71,5 36,5 18,0
Población media por distrito 9 114 6 079 7376 9 368 13 533 11 522
Porcentaje población rural 47,7 75,3 59,3 47,8 29,0 12,7
2
Densidad poblacional (personas/Km ) 1 190 131 698 758 1 966 2 957
Porcentaje población en edad activa con
29,0 13,0 20,2 26,9 37,8 54,9
secundaria o más
Años Promedio educación de población en edad
8,0 6,1 7,2 7,9 9,1 10,9
activa
´
Porcentaje matricula educación básica en centro
8,3 1,8 3,3 5,4 10,0 23,9
privado
Del cuadro 2 se desprende que los distritos con menor desempeño son más extensos pero menos
poblados, lo que refleja una baja densidad poblacional y un alto porcentaje de ruralidad. Ello se traduce
en una oferta educativa que se encuentra más dispersa y con mayores costos de acceso (distancia) y,
posiblemente, de menor calidad.
Por el lado de las familias es claro también su menor clima educativo promedio, en estos distritos y la
menor presencia de la educación privada, la cual más que señales de diferencias en calidad, muestra
diferencias en los recursos económicos de sus pobladores.
Dentro de las características de los distritos, los indicadores del clima educativo de los hogares,
muestran una mayor correlación con la tasa de logro en completar la secundaria (ver cuadro A3 del
anexo). La información del cuadro 2 también corrobora que las mejoras mayores en el índice de logro
se dan en la parte central de la distribución y que la ventaja relativa de las mujeres se acentúa en los
distritos con menores resultados. La mayoría de los distritos con mejor logro están en la región central.
Limón y Puntarenas solo cuentan con un distrito cada uno en ese grupo, mientras que Guanacaste
aporta siete, la cual es la región que sigue con mejor desempeño. Esta distribución geográfica del
logro en completar la educación media se visualiza en el mapa 1.
141
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Mapa 1. Costa Rica: Distribución de los distritos por quintil de logro en completar la secundaria.
2011
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Gráfico 2
América Latina: porcentaje de la población de 20 a 24 años que
ha completado al menos la educación secundaria alrededor del 2004
Barbados
Islas Caimán
Bahamas
Chile
Aruba
Argentina (GBA)
Perú Q5
Colombia
Panamá
Venezuela Q4
Bolivia
Brasil
Ecuador (U)
Cuba Q3
República Dominicana
Paraguay
Costa Rica
México
Uruguay (U)
Belice Q2
El Salvador
Nicaragua
Guatemala
Honduras Q1
Surinan
0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
El distrito mejor ubicado en el 2011 (Sánchez) no alcanza el logro de Barbados y solo 23 distritos
(5% del total) obtienen un logro en el 2011 que supera al promedio nacional alcanzado por Chile a
mediados de la década pasada. Al otro extremo, una quinta parte de los distritos, que albergan a un
20% de la población en edad escolar, obtienen logros apenas similares a las medias nacionales de los
países de la región con mayor rezago en sus sistemas educativos.
El logro de completar la educación secundaria requiere de avances en las etapas previas del sistema
educativo, empezando por el acceso a este. A continuación, se repasan los alcances obtenidos en los
niveles previos.
143
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
El acceso y permanencia global al sistema educativo básico, lo refleja la esperanza de vida escolar. El
gráfico 3 muestra que ésta ha mejorado poco en su conjunto y la presencia de distritos con retrocesos
es más frecuente. Si se construye a partir de las tasas de asistencia de la población de 6 a 18 años,
la esperanza educativa se sitúa en torno a los 10,9 años en el 2011, apenas 0,4 años más que el valor
obtenido en el año 2000, para un máximo teórico de 13 años. Pese al poco avance, si se observa
una reducción de la dispersión, que es limitada pues el rango es de cuatro años y esta reducción se
sustenta en la mejora de los que tienen valores menores, esto es, se sube el piso (ver cuadro 3).
Gráfico 3
Costa Rica: Esperanza de vida escolar en primaria y secundaria
por distrito
2000 y 2011
15
10
0
1
17
33
49
65
81
97
113
129
145
161
177
193
209
225
241
257
273
289
305
321
337
353
369
385
401
417
433
449
465
-5
2011 2000 Variación en años
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
El cuadro 4 complementa esta información con la distribución de los distritos por quintiles de logro en
secundaria. Aunque el ordenamiento de los distritos por la esperanza de vida escolar no es igual a la
del logro existe una alta correlación (0,685), correlación que aumenta si la edad se extiende hasta los
24 años (ver cuadro A3 del anexo). La mejora de la esperanza de vida escolar entre el 2000 y el 2011
es mayor en los distritos con menor logro educativo, lo que explica la reducción de la dispersión o el
cierre de las brechas distritales. En este indicador, si bien las mujeres aparecen mejor posicionadas,
las diferencias son más reducidas en comparación con el índice de paridad de género que se observa
para el logro en secundaria y se reducen hacia el 2011. Al igual que este último, la ventaja de las
mujeres parece mayor en los distritos con peor desempeño, lo que implica que las brechas entre ellas
son menores
De la población de cinco y seis años, en el 2011 se encuentran cerca de 23 mil niños fuera del
sistema educativo, lo que representa alrededor de la mitad de los que estaban fuera en el año 2000.
Esto se traduce en una importante mejora en las tasas netas de matrícula, que pasan del 63% en el
2000 al 75% en el 2011 para una ganancia de 12 puntos de porciento (ponderadas). Los cambios son
muy significativos en muchos distritos, aunque la mejora no es ni uniforme ni general (ver gráfico 4).
144
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Pese a que se va cerrando la brecha al reducirse la dispersión distrital con aumento en el promedio,
siguen existiendo en el año 2011, tres distritos donde ningún niño asiste a este nivel (ver cuadro 3).
Corresponde a un nivel educativo donde las diferencias por sexo son mínimas y las mejoras intercensales
son claramente mayores en los distritos con menor logro educativo (ver cuadro 4). La correlación con
el logro en secundaria es ligeramente menor (0,571), pero significativa y esta aumenta al 0,66 cuando
se comparan las tasas netas de preescolar del 2000 con el logro en secundaria del 2011, esto muestra
que los efectos en el proceso educativo son de mediano plazo.
Gráfico 4
Costa Rica: Tasa neta de matrícula en preescolar por distrito
2000 y 2011
100
80
60
40
20
0
1
17
33
49
65
81
97
113
129
145
161
177
193
209
225
241
257
273
289
305
321
337
353
369
385
401
417
433
449
465
-20
-40
2011 2000 Cambio en pp
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
La educación primaria
La educación primaria muestra luces y sombras. Pese a que mejoran los indicadores de desempeño
y logro, se observa un deterioro en el acceso, de manera que en el 2011, cerca de 24 mil niños de 7
a 12 años estaban fuera de la escuela, mientras que diez años atrás este grupo era de 22 mil niños.
Si le agregamos el grupo anterior, se tiene que en el 2011, cerca de 47 mil niños de 5 a 12 años se
encontraban fuera del sistema educativo, propensos a sufrir en el futuro, una amplia exclusión social.
Ello se traduce en una ligera reducción, de la ya elevada, tasa neta de matrícula, que pasa del 95,4%
en el 2000 al 93,9% en el 2011 (ponderado). Este diferencial de alrededor de un punto de porciento se
mantiene aunque se agreguen los niños de seis años que están asistiendo a la escuela y se distancia
del 100% reportado por el MEP. Esta reducción va acompañada de un aumento de la dispersión, pues
aumentan las brechas (ver cuadro 3) y el deterioro se concentra en unos pocos distritos (ver gráfico
5). Reacomodados los distritos según el logro en secundaria, se observa que la reducción en la tasa
es mayor en los distritos con mayor logro, mientras que los diferenciales por sexo son prácticamente
inexistentes (ver cuadro 4). Al ser tan amplia la cobertura, la correlación con el logro en secundaria es
limitada, aunque su deterioro la afectará en el futuro.
Cuadro 3
Costa Rica: Indicadores de desigualdad distrital en la formación de capital humano hasta primaria
2000 y 2011
Esperanza educativa de 6 a
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continua…
Trejos & Sáenz
145
146
Educación
Trejos & Sáenz
Continuación Cuadro 3
2000 18,4 14,7 16,7 11,1 60,1 74,6 1,0 73,6 73,2 0,848
2011 8,7 7,2 7,0 6,5 74,7 45,1 0,6 44,6 80,8 0,849
Cambio absoluto (2011 -
-9,7 -7,5 -9,7 -4,6 14,6 -29,4 -0,5 -29,0 7,6 0,000
2000)
1/ Promedio nacional.
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
147
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Por la aproximación seguida, el rezago como indicador de retención, es menor en primaria, aunque
este muestra mejoras (reducciones) en el período bajo estudio. Como se puede observar en el cuadro
3, la tasa de rezago se reduce del 12% en el 2000 al 8% en el 2011 y esta reducción va acompañada de
un aumento del coeficiente de variación pues el promedio se reduce más que la desviación estándar y
pese a que las brechas se están reduciendo. En este caso, el índice de paridad de género es menor a
la unidad lo que significa que el indicador (negativo) de los hombres es mayor que el de las mujeres,
de modo que ellas continúan mostrando una clara ventaja en el desempeño educativo. La reducción
es bastante generalizada y uniforme entre los distritos, como se puede observar en el cuadro 4 y en el
gráfico 5. En este caso se presenta una correlación negativa con el logro en secundaria.
Gráfico 5
Costa Rica: Indicadores de acceso, retención y logro en primaria
por distrito (Los distritos están ordenados de menor a mejor
desempeño en cada indicador)
2000 y 2011
100
80
60
40
20
0
1
19
37
55
73
91
109
127
145
181
199
217
235
271
289
307
325
361
379
397
415
451
469
163
253
343
433
-20
-40
80
60
40
20
0
1
39
58
77
115
134
153
172
191
210
229
248
267
286
305
324
343
362
381
400
419
438
457
20
96
-20
-40
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
148
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 5
(2da parte)
50
0
1
20
39
58
77
96
115
191
229
248
267
305
381
419
438
457
134
153
172
210
286
324
343
362
400
-50
-100
2011 2000 Cambio en pp
80
60
40
20
0
1
20
39
58
77
96
115
191
229
248
267
305
381
419
438
457
134
153
172
210
286
324
343
362
400
-20
2011 2000 Cambio en pp
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
El otro indicador de retención es la tasa de deserción temprana, esto es, el porcentaje de población
que se salió del sistema sin completar la educación primaria, pero que logró aprobar por lo menos un
año. Este indicador se reduce (mejora) del 15% en el 2000 al 7% en el 2011 y pese a que aumenta el
coeficiente de variación, como el caso del rezago escolar, ello va acompañado de una reducción de las
brechas distritales (ver cuadro 3). En forma similar, la reducción es bastante uniforme (ver gráfico 5),
aunque tiende a favorecer en mayor medida a los distritos con menor logro en secundaria, las mujeres
mantienen un desempeño más favorable (ver cuadro 4).
149
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Cuadro 4
Costa Rica: Características medias de los distritos en el acceso, retención y logro en
educación preescolar y primaria por quintiles
1
Total Quintiles de distritos
Indicador
País Quintil 1 Quintil 2 Quintil 3 Quintil 4 Quintil 5
Educación en general
Esperanza educativa (de 6 a 18 años)
Año 2011 10,8 10,1 10,7 10,9 11,1 11,3
Año 2000 10,0 8,7 9,6 10,2 10,8 11,5
Variación en puntos de porciento 0,7 1,4 1,1 0,7 0,3 -0,2
Índice de paridad de género 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0
Educación preescolar
Tasa neta de matrícula
Año 2011 73,1 62,9 70,9 74,0 78,2 83,9
Año 2000 58,2 42,7 55,2 59,7 65,9 73,4
Variación en puntos de porciento 14,9 20,2 15,8 14,3 12,3 10,6
Índice de paridad de género 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0
Educación primaria
Tasa neta de matrícula
Año 2011 93,8 92,1 94,3 93,7 95,0 94,6
Año 2000 95,1 91,8 94,4 95,6 97,0 97,8
Variación en puntos de porciento -1,2 0,3 -0,1 -2,0 -2,0 -3,2
Índice de paridad de género 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0
Tasa de rezago
Año 2011 7,4 10,1 7,6 6,9 6,4 5,1
Año 2000 12,6 16,9 13,5 11,6 10,1 8,8
Variación en puntos de porciento -5,1 -6,9 -5,9 -4,7 -3,7 -3,7
Índice de paridad de género 0,9 0,8 0,9 0,9 0,9 0,9
El último indicador sobre la educación primaria es un indicador de resultado, esto es, la tasa de logro
en completar la primaria, estimada sobre la población de 15 a 19 años. La tasa de logro aumenta ocho
puntos de por ciento al pasar del 85% en el año 2000 al 94% once años más tarde, mostrando un alto
nivel de logro que se acompaña necesariamente con un cierre de las brechas distritales (ver cuadro
3). Este cierre se da por un mejoramiento mayor en los distritos más rezagados (ver gráfico 5) y, si
se ordenan por el logro en secundaria, las mayores ganancias se concentran en los quintiles menos
favorecidos.
En todo caso, para el 2011, hay distritos donde cerca de un 30 de su población infantil no logró
completar este nivel básico (ver cuadro 4) y como era de esperar, el logro en completar la primaria
muestra una alta correlación positiva con el logro en completar la secundaria (0,712). Al igual que
sucede con los indicadores de retención, en el caso del logro empiezan a surgir ventajas a favor de las
mujeres, cuando en el acceso se presenta una equidad de género.
La educación secundaria
Este nivel educativo muestra un fuerte avance relativo en cuanto al acceso, particularmente la
secundaria baja, pese a que se mantiene aún rezagado en el contexto latinoamericano en cuando a
resultados como ya se mostró (OREALC/UNESCO, 2008). La tasa neta de matrícula, de la secundaria en
su conjunto, pasó del 53% en el año 2000 al 64% en el 2011 (ponderado) y sin incluir las modalidades
de la educación abierta.
No obstante, en el 2011 se mantienen 106 mil jóvenes de 13 a 18 años fuera del sistema educativo,
magnitud que alcanzaba los 175 mil jóvenes once años atrás. Este avance en el acceso, si bien no es
generalizado (ver gráfico 6), si tiende a favorecer en mayor medida a los distritos que mostraban un
mayor rezago de modo que las brechas distritales se reducen (ver cuadro 5). Cuando se agregan los
distritos según el logro en secundaria, es claro cómo los distritos con menor logro son los que están
obteniendo una mejora relativa mayor (ver cuadro 6). Ello explica la alta correlación observada entre
estos indicadores de acceso y el de logro en secundaria (ver cuadro A3 del anexo).
151
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
Gráfico 6
Costa Rica: Indicadores de acceso, retención y logro de la
educación secundaria por distrito (Los distritos están ordenados
de menor a mejor desempeño en cada indicador)
100
80
60
40
20
0
1
20
39
58
77
96
115
191
229
248
267
305
381
419
438
457
134
153
172
210
286
324
343
362
400
-‐20
-‐40
2011
2000
Cambio
en
pp
100
50
0
1
39
58
77
115
134
153
172
191
210
229
248
267
286
305
324
343
362
381
400
419
438
457
20
96
-‐50
-‐100
2011
2000
Cambio
en
pp
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
152 Gráfico 6
Educación Trejos & Sáenz Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Costa Rica: Indicadores de acceso, retención y logro de la
educación secundaria por distrito (Los distritos están ordenados
de menor a mejor desempeño en cada indicador)
100
Tasa de logro en completar la secundaria baja (tercer ciclo)
80
100
60
80
40
60
20
40
0
1
20
39
58
77
96
115
191
229
248
267
305
381
419
438
457
134
153
172
210
286
324
343
362
400
20
-‐20
0
1
20
39
58
77
96
115
191
229
248
267
305
381
419
438
457
134
153
172
210
286
324
343
362
400
-‐40
-‐20
2011
2000
Cambio
en
pp
2011
2000
Cambio
en
pp
Tasa
100
de deserción tardía
100
50
80
60
0
40
1
39
58
77
115
134
153
172
191
210
229
248
267
286
305
324
343
362
381
400
419
438
457
20
96
20
-‐50
0
1
20
39
58
77
96
115
134
153
172
191
210
229
248
267
286
305
324
343
362
381
400
419
438
457
-‐20
-‐100
-‐40
2011
2011
2000
2000
Cambio
Cambio
en
pep
n
pp
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto
Nacional de Estadística y Censos.
En la educación secundaria, el índice de paridad de género refleja una situación favorable hacia las
mujeres y esa ventaja relativa aumenta en cuanto menor es el logro medio del distrito, aunque tiende a
reducirse entre los censos. Contrario a las diferencias observadas en las tasas netas de matrícula entre
la secundaria baja y la secundaria alta y a favor de la primera, cuando la atención se pone en el rezago
escolar, las tasas resultan similares en los dos niveles. Por ello, en los cuadros 5 y 6 se presenta solo el
resumen para la educación media en su conjunto.
La tasa de rezago se reduce del 31% al 23%, aunque la reducción no es generalizada (ver gráfico 6)
y ello se acompaña de una reducción de las brechas, pese al aumento en el coeficiente de variación
(cuadro 5). Cuando se ordenan por quintiles de logro, el primer quintil muestra la mayor mejora relativa,
pero el resto de los quintiles señalan una reducción similar. Por ello, la correlación encontrada con el
logro es menor, no llega al -0,5, e incluso deja de ser significativa en el año 2000. En este ámbito, las
mujeres siguen manteniendo su ventaja relativa, aunque sin diferencias claras entre quintiles.
Cuadro 5
Costa Rica: Indicadores de desigualdad distrital en la formación de capital humano en secundaria
2000 y 2011
Continua…
Trejos & Sáenz
153
154
Educación
Continuación Cuadro 5
Ponderado
Tasa de rezago en
secundaria total
(porcentaje)
2000 31,5 30,8 30,6 8,2 26,1 66,7 9,8 56,9 6,8 0,948
2011 21,6 22,9 20,7 7,5 34,8 60,2 1,9 58,3 31,1 0,906
Cambio absoluto (2011
-9,9 -7,9 -9,9 -0,7 8,7 -6,5 -7,8 1,3 24,3 -0,042
- 2000)
Tasa de deserción
tardía (porcentaje)
2000 66,3 58,6 69,3 17,5 26,4 100,0 18,2 81,8 5,5 0,923
2011 49,5 45,7 49,6 14,4 29,1 88,1 6,0 82,1 14,6 0,828
Cambio absoluto (2011
-16,9 -12,9 -19,7 -3,1 2,8 -11,9 -12,2 0,3 9,1 -0,095
- 2000)
El otro indicador de retención es la tasa de deserción tardía, la cual sí muestra una correlación
negativa mayor y creciente con el logro en secundaria (ver cuadro A3 del anexo). También se acompaña
de mejoras en el período bajo estudio, con cierres de brecha pero no del rango, y con ventaja creciente
de las mujeres. Las reducciones en la deserción aumentan al pasar de quintiles de mayor logro lo que
explica la alta correlación negativa. Finalmente, si la atención se pone en el indicador de resultado de
la secundaria baja (tercer ciclo), existen también mejoras entre ambos censos. En el año 2000 el 45%
de los jóvenes lograron completar este nivel y para el 2011 esta cifra sube al 63% (ponderado).
Cuadro 6
Costa Rica: Características medias de los distritos en el acceso, retención y logro en
educación secundaria por quintiles
1
Total Quintiles de distritos
Indicador
País Quintil 1 Quintil 2 Quintil 3 Quintil 4 Quintil 5
Indicadores de acceso
Tasa neta de matrícula secundaria baja
Año 2011 71,0 59,5 69,6 73,6 77,1 80,5
Año 2000 52,5 32,7 45,9 54,1 63,7 74,4
Variación en puntos de porciento 18,5 26,8 23,7 19,4 13,4 6,1
Índice de paridad de género 1,1 1,1 1,1 1,0 1,0 1,0
Indicadores de retención
Tasa de rezago
Año 2011 21,6 25,8 23,2 21,6 19,3 16,3
Año 2000 31,5 37,7 32,6 30,5 28,5 26,0
Variación en puntos de porciento -9,9 -11,8 -9,5 -9,0 -9,1 -9,7
Índice de paridad de género 0,9 0,9 0,9 0,8 0,9 0,9
Continuación Cuadro 6
1
Total Quintiles de distritos
Indicador
País Quintil 1 Quintil 2 Quintil 3 Quintil 4 Quintil 5
Indicadores de logro
Tasa de logro en completar secundaria baja
Año 2011 58,8 40,0 53,1 61,6 68,8 79,2
Año 2000 36,6 15,8 27,5 36,1 48,1 64,2
Variación en puntos de porciento 22,3 24,2 25,6 25,6 20,8 15,1
Índice de paridad de género 1,15 1,24 1,20 1,15 1,12 1,08
1/ Los distritos están ordenados de menor a mayor logro en secundaria en cinco grupos que contienen,
cada uno, el 20% de la población en edad de estudiar (de 5 a 18 años).
Fuente: Elaboración propia con base en los censos de población del Instituto Nacional de Estadística y
Censos.
Como se puede observar en el gráfico 6 y el cuadro 6, los mayores avances relativos se observan en
la parte media y baja de la distribución, con lo cual es claro el cierre de las brechas distritales, aunque
estas siguen siendo significativas (84 puntos de porciento entre distritos extremos). La ventaja relativa
de las mujeres es más evidente en este indicador de logro y se amplía en el tiempo. También la ventaja
tiende a ser mayor en los quintiles inferiores. Este indicador muestra la más elevada correlación con el
logro en secundaria completa como era de esperar.
Para un país que aspira a insertarse en la economía global con su capital humano como ventaja
competitiva, la formación de capital humano básico es una condición necesaria aunque insuficiente.
Esta formación de capital humano básico determina también las posibilidades de mejora social y
económica futura de su población infantil y, por este medio, de su familia. Por ello resulta importante
revisar los logros que está obteniendo en esta área.
Los resultados encontrados señalan mejoras significativas entre el año 2000 y el 2011, pese a que
el país se mantiene rezagado con respecto a la región latinoamericana en su conjunto y, en particular,
con los países con los que compite en el ámbito mundial. Solo la mitad de los jóvenes está logrando
completar sus estudios secundarios, sin considerar la calidad de la educación recibida. Pese a que las
mejoras se acompañan de una reducción de las brechas distritales, estas siguen siendo amplias y los
distritos más alejados del centro del país, más extensos y rurales y, por ende con una menor densidad
poblacional, son los que obtienen resultados más limitados.
No obstante, es el capital humano existente en los distritos y por ende, el clima educativo de los
hogares, lo que más se asocia con las diferencias en el logro entre los distritos y ello sugiere una
limitada movilidad en la esfera educativa.
La revisión de distintos indicadores sobre el desempeño del sistema educativo básico, evidencia su
alto papel explicativo en los resultados finales encontrados y muestra la necesidad de avanzar en todos
los frentes: acceso, retención y logro, si se quiere mejorar en la formación de capital humano básico.
Con la excepción de la cobertura en primaria, que muestra un peligroso aunque marginal deterioro y
un importante contingente de niños excluidos del sistema, todos los indicadores educativos analizados
tienden a reflejar mejoras entre los dos censos y reducciones en la brechas distritales, aunque estas
siguen siendo significativas.
157
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
V. Anexos
Cuadro A1
Distritos creados entre el año 2000 y 2011
Fecha Segregado
Provincia Cantón Distrito Área Área actual
creación de
Cuadro A2
Comparación de las preguntas censales utilizadas para la elaboración de los
indicadores
Asistencia
10. ¿Asiste ___a la preparatoria, escuela,
13. ¿Asiste (nombre) a….
colegio o universidad?
…guardería, maternal o
Sí ___1 No___2
prekinder?...................................... 1
...preparatoria o kinder, escuela o
colegio?............................................2
...educación abierta? (presenta
exámenes ante el MEP)…………….3
…parauniversitaria o
universitaria?.....................................4
…enseñanza espacial?....................5
…centro diurno para adultos (as)
mayores? ……………………...…….6
…No asiste….………………….……7
Tipo de institución a que asiste
14. ¿El centro al que asiste (nombre)
No existe la pregunta
es…………
…público……..1
Privado o semiprivado…..2
Último año aprobado
11. ¿Cuál es el último grado o año que 16. ¿Cuál es el último grado o año que
aprobó___ en la enseñanza regular? aprobó (nombre)?
Ningún grado……………….… 0 Ningún grado……………………… 60
Enseñanza especial……………….70
Preparatoria o Kinder ……….1 Kinder o preparatoria…….…..……80
Primaria ………………………....2 Primaria ………………….………….1
Secundaria académica …………3 Secundaria académica ……….……2
Secundaria técnica ... …………..4 Secundaria técnica ….. ……………3
Parauniversitaria…………………5 Parauniversitaria……...……….……4
Universitaria……………………...6 Universitaria……………….……..…5
Sabe leer o escribir
12. ¿Sabe leer y escribir? 15. ¿Sabe leer y escribir?
Sí …….1 No…………2 Sí …….1 No…………2
Fuente: Censos de Población, Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Cuadro A3
Costa Rica: Coeficientes de correlación distrital de los factores exlicativos con el logro de completar secundaria
2000 y 2011
2011 2000
Indicadores
Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
De contexto
2
Tamaño del distrito (Km ) -,445(**) -,411(**) -,459(**) -,393(**) -,381(**) -,397(**)
Porcentaje población rural -,616(**) -,608(**) -,594(**) -,720(**) -,706(**) -,718(**)
2
Densidad poblacional (personas/Km ) ,462(**) ,472(**) ,429(**) ,550(**) ,538(**) ,550(**)
Porcentaje población en edad activa con secundaria o más ,906(**) ,901(**) ,870(**) ,948(**) ,937(**) ,940(**)
Años Promedio educación de población en edad activa ,921(**) ,910(**) ,889(**) ,954(**) ,939(**) ,948(**)
Porcentaje matricula educación básica en centro privado ,751(**) ,768(**) ,698(**)
Educación en general
Esperanza educativa de 6 a 18 años (años en sistema) ,685(**) ,645(**) ,657(**) ,891(**) ,872(**) ,871(**)
Esperanza educativa de 6 a 24 años (años en sistema) ,855(**) ,830(**) ,839(**) ,946(**) ,936(**) ,930(**)
Población de 15 a 24 años alfabeta (porcentaje) ,524(**) ,449(**) ,479(**) ,620(**) ,637(**) ,510(**)
Educación preescolar
Población de 5 y 6 años que asiste (porcentaje) ,543(**) ,485(**) ,500(**) ,698(**) ,671(**) ,668(**)
Tasa neta de matrícula en preescolar (porcentaje) ,571(**) ,519(**) ,499(**) ,701(**) ,677(**) ,671(**)
Educación primaria
Población de 7 a 12 años que asiste (porcentaje) ,283(**) ,296(**) ,215(**) ,614(**) ,601(**) ,558(**)
Tasa neta de matrícula en primaria (porcentaje) ,264(**) ,278(**) ,202(**) ,612(**) ,600(**) ,553(**)
Tasa de rezago en primaria (porcentaje) -,498(**) -,443(**) -,447(**) -,489(**) -,494(**) -,424(**)
Tasa de deserción inicial o excluídos (porcentaje) -,565(**) -,529(**) -,477(**) -,520(**) -,497(**) -,454(**)
Tasa de deserción temprana (porcentaje) -,767(**) -,740(**) -,728(**) -,820(**) -,796(**) -,784(**)
Porcentaje población que completa primaria (15 a 19 años) ,712(**) ,663(**) ,650(**) ,752(**) ,736(**) ,716(**)
Educación
Continua…
Trejos & Sáenz
159
160
Educación
Trejos & Sáenz
Continuación Cuadro A3
2011 2000
Indicadores
Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres
Educación secundaria
Población de 13 a 15 años que asiste (porcentaje) ,673(**) ,611(**) ,616(**) ,825(**) ,786(**) ,810(**)
Población de 16 a 18 años que asiste (porcentaje) ,708(**) ,619(**) ,698(**) ,905(**) ,882(**) ,870(**)
Tasa neta de matrícula en secundaria baja (porcentaje) ,769(**) ,720(**) ,683(**) ,893(**) ,875(**) ,862(**)
Tasa neta de matrícula en secundaria alta (porcentaje) ,713(**) ,652(**) ,623(**) ,903(**) ,881(**) ,860(**)
Tasa neta de matícula en secundaria (porcentaje) ,743(**) ,689(**) ,717(**) ,903(**) ,893(**) ,876(**)
Tasa de rezago en secundaria baja (porcentaje) -,462(**) -,425(**) -,380(**) -,498(**) -,297(**) -,352(**)
Tasa de rezago en secundaria alta (porcentaje) -,401(**) -,346(**) -,358(**) -0,065 -0,063 -0,042
Tasa de rezago en secundaria total (porcentaje) -,478(**) -,444(**) -,421(**) -,467(**) -,409(**) -,395(**)
Tasa de deserción tardía (porcentaje) -,865(**) -,845(**) -,863(**) -,782(**) -,723(**) -,798(**)
Porcentaje población que completa secundaria baja (20 a 24
,971(**) ,959(**) ,962(**) ,981(**) ,976(**) ,974(**)
años)
** Correlación es significativa al nivel de 0,01 (2-colas).
Fuente: Elaboración de los autores con base en los censos de población del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
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Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Trejos & Sáenz
V. Referencias Bibliográficas
Brunner, J.J. y Elacqua, G. 2003. Informe capital humano en Chile. Santiago, Chile: Escuela de
Gobierno, Universidad Adolfo Ibáñez.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). 2008. Juventud y Cohesión Social en
Iberoamérica. Un modelo para armar. Santiago, Chile: Naciones Unidas.
Instituto de Estadística de la UNESCO (UIS/UNESCO). 2004. Guide to the analysis and use of
household survey and census education data. Montreal, Canadá: UNESCO - UIS.
Trejos, J. D.. 2010. Indicadores sobre equidad en la educación para Costa Rica. Ponencia preparada
para el Tercer Informe Estado de la Educación. Programa Estado de la Nación.
Turbay – Restrepo, Catalina. 2000. El derecho a la educación. Desde el marco de la protección integral
de los Derechos de la niñez y de la política educativa. Santafé de Bogotá, D. C., Colombia: Unicef -
Colombia y Fundación Antonio Restrepo Barco.
162
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Resumen
Esta investigación analiza a la población joven que ni estudia ni trabaja (nini), entendida como las
personas entre 12 y 24 años. La investigación evidencia los diferentes rostros que componen este
grupo de población y su ubicación geográfica. En Costa Rica, este fenómeno ha descendido en la
última década, con un total de 201.870 jóvenes en el 2011.
Los “ninis” constituyen un grupo heterogéneo a lo interno. Un primer subgrupo lo integran los
desempleados, cuya condición de inactividad puede ser temporal y es ajena a la voluntad de la
persona. El segundo grupo de la población “nini” lo componen los jóvenes que a pesar de no asistir
a la educación formal, asisten a formas de educación no regular; estos en su mayoría mantienen su
condición de hijo en el hogar. El tercer grupo corresponde a las mujeres con hijos y dedicadas a oficios
domésticos; este es el grupo más vulnerable, pues casi en su totalidad son mayores de edad con
niveles de escolaridad muy bajos (más del 80% no completó la secundaria) y poco más de la mitad ya
conforman su propio hogar. Al excluir a los subgrupos anteriores, las estimaciones muestran un núcleo
resultante compuesto por 89.694 jóvenes, que no registran particularidad dentro de su condición de
“nini”. Poco más de la mitad proviene de hogares con bajo clima educativo, el 62% son mujeres y su
incidencia es mayor en la zona rural, y en la región Huetar Atlántica.
I. Introducción
La siguiente investigación se propone como objetivo descubrir quiénes son los jóvenes que no
estudian ni trabajan y cómo están distribuidos geográficamente, a partir de la información que brinda
el Censo de Población 2011.
Aunque no es un fenómeno desconocido, este grupo de personas han sido denominadas recientemente
como “ni-ni” o “nini”, que hace alusión a “ni estudia ni trabaja”.
Según las estimaciones de la OIT, de los 106 millones de jóvenes que viven en América Latina, el 34%
solo se dedica a estudiar, en tanto que el 33% solo se dedica a trabajar. Por su parte, el 13% estudia
y trabaja a la vez, mientras que casi el 20% ni estudia ni trabaja (OIT, 2010). Las cifras de Costa Rica
no son las más preocupantes de la región: sin embargo, es una población que no debe descuidarse
debido a que involucra a jóvenes en edades clave para el desarrollo del país.
Los jóvenes que ni estudian ni trabajan constituyen un grupo doblemente excluido, pues no tienen
acceso al conocimiento ni a la posibilidad de generar un ingreso digno (Programa Estado de la Nación,
2011). A nivel centroamericano, Honduras y Guatemala tienen la mayor incidencia, en la cual los “nini”
representan a la mitad de los jóvenes de las zonas rurales, según el Cuarto Informe Estado de la Región
(2011).
Este grupo se caracteriza por ser más elevado en las zonas rurales y en condiciones de pobreza,
en hogares con bajo clima educativo. La incidencia es mayor en las mujeres -en parte por patrones
culturales2 -, y conforme aumenta la edad de los jóvenes.
Para esta investigación, se toman en cuenta los jóvenes con edades entre los 12 y 24 años. Los
resultados muestran que un 19,3% se encuentran en condición de “nini”. Dentro de ellos, se pueden
identificar distintas circunstancias de condición “nini”, mediante 4 subgrupos: desempleados, mujeres
con responsabilidades, jóvenes que asisten a educación no regular, y el núcleo “nini”. Este último es
el grupo más grande y sobre el que menos información se posee. No se tiene mayor explicación de
porqué se encuentran en esta condición.
A pesar de que la población “nini” parece haber disminuido en comparación con 10 años atrás, al 2011
un total de 201.870 jóvenes están excluidos del sistema educativo, lo cual aumenta su probabilidad
de seguir siendo marginados y tener dificultades para mejorar su situación socioeconómica. El
conocimiento a profundidad de los distintos rostros que poseen los “ninis” es un aporte para la toma de
decisiones y la creación de políticas públicas diferenciadas que ayuden a mitigar esta problemática.
II. Metodología
Se delimitó a la población “nini” como las personas que se encuentran entre los 12 y 24 años inclusive,
que no asisten a la educación formal y abierta, y que se encuentran inactivos respecto a la condición
laboral.
La definición de trabajo en esta ponencia se refiere a toda labor realizada por la cual se reciba algún
tipo de remuneración. Se trabajó únicamente con las personas que residen en viviendas individuales3.
Se identificaron las distintas particularidades que poseen los “ninis”, para estudiarlos en profundidad.
El estudio se basó en sus características de educación y en su condición laboral. Para esto se utilizaron
dos variables que el censo contiene: una de asistencia a educación y otra de actividad laboral reciente.
Esto permitió obtener distintos perfiles, los cuales se refieren al rasgo en educación o condición laboral
que los diferencia de los demás, y sus características básicas más relevantes.
Un indicador utilizado para perfilar a la población bajo estudio es el clima educativo del hogar, el
cual se estimó como la sumatoria de los años de escolaridad que tiene el jefe de hogar y su conyugue,
2/ Históricamente, en sociedades como la costarricense, los hombres han sido responsables de la vida pública y de
las decisiones, en tanto las mujeres han estado a cargo de la reproducción y el cuido de la familia. (confinadas casi
exclusivamente a la vida privada). Esta tradicional asignación se roles se sigue reproduciendo en muchos aspectos de
la sociedad actual. Por ejemplo, si una mujer no asiste a la educación, generalmente se dedica a los oficios domésticos
del propio hogar o al cuido de los niños y niñas, a diferencia de los hombres que no asumen estas tareas. Este tema se
desarrollará más adelante.
3/ La vivienda individual es el recinto separado e independiente que se destina a alojar uno o más hogares particulares. Tiene
acceso directo; o sea, para llegar a ella no se tiene que transitar por dentro de otra vivienda. También son consideradas
como tales, las habitaciones de hoteles o pensiones donde existan residentes habituales (INEC, 2013).
164
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
y luego se promediaron. Se distinguen tres tipos de hogares según clima educativo: bajo (promedio
inferior a 6 años), medio (promedio entre 6 y 12 años) y alto (promedio igual o superior a 12 años).
Según los datos del censo 2011, un total de 201.870 jóvenes son “nini”, que representan el 19,3%
de la población etaria entre 12 y 24 años. Para su análisis, se separaron en dos grupos de edad: entre
12 y 17 años, y entre 18 y 24 años; debido a la dinámica distinta que corresponde a cada una de esas
edades.
En el primer grupo, los “nini” representan el 13,3% de los adolescentes, en el segundo aumentan al
24,4%. Como es evidente, la condición de “nini” se acrecienta con la edad (gráfico 1), situación que
está relacionada con la pérdida de matrícula educativa conforme esta aumenta, y con otros factores
que intervienen en la interrupción de la enseñanza académica cuando llegan a edades adultas. En
este fenómeno las mujeres aumentan su peso relativo conforme aumenta la edad, en las mayores de
19 años la representación sobrepasa el 30%.
Gráfico 1
Porcentaje de jóvenes “nini” por edad, según sexo
2011
40
35
30
25
20
15
10
5
0
12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24
Edad
Hombres Mujeres
La incidencia de los “ninis” está asociada con la pobreza, la mayor ocurrencia se da en zonas rurales
y cantones costeros, los cuales típicamente han tenido mayores niveles de pobreza, menor desarrollo
y bajos niveles de educación. El 56% de los hogares presenta clima educativo bajo, mientras que solo
un 7% tiene un clima educativo alto.
Los cantones con mayor incidencia son Carrillo, Los Chiles, Matina, Guatuso y Talamanaca. Sin
embargo, la región Central concentra el 48% del total de personas en esta condición.
Para entender mejor las dinámicas de la población “nini”, se identificaron a través de sus características
de educación y condición laboral, distintos grupos los cuales poseen algún rasgo particular que hace
que sus circunstancias de “nini” sean muy diferentes a la de los demás. Se analizaron, además, algunas
características básicas y relevantes para cada grupo estableciendo un perfil para cada uno.
El primer grupo identificado son los desempleados. Su particularidad radica en que su condición de
“nini” es ajena a la voluntad de ellos, ya que los desempleados son las personas que están en busca
de trabajo. El grupo consta de 16.638 jóvenes y representan el 8,2% de la población “nini”.
Este grupo se concentra en las edades superiores, su perfil es mayoritariamente masculino y mantiene
su condición de hijos en el hogar (cuadro 1). Asimismo, corresponde a jóvenes que en su mayoría no
finalizaron sus estudios, y aunque están en busca de trabajo, por diferentes motivos el sistema los ha
excluido. Además, es una población en riesgo, ya que menos del 40% está asegurada.
Cuadro 1
Características básicas del grupo
“desempleados” pertenecientes a la
población “nini”
2011
Sexo
Masculino 69,9
Edad
De 12 a 17 años 13,4
De 18 a 24 años 86,6
Escolaridad
Secundaria incompleta o menos 70,4
Secundaria completa 22,0
Parauniversitaria o universitaria 7,6
Población asegurada 38,8
Lugar de nacimiento
Costa Rica 89,6
Otro país 10,4
Mapa 1. Costa Rica: incidencia del grupo de personas que no estudian ni trabajan que pertenecen
al perfil “Desempleados” como proporción del grupo etario de 12 a 24 años, según cantón. 2011
Dado que la pregunta que se realiza en el censo sobre condición de actividad tiene como referencia
la semana anterior, es de esperar que este grupo de “ninis” cambie su condición en el corto o mediano
plazo, conforme encuentre un empleo.
167
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Mazzei
Por su parte, el segundo grupo se llamó “mujeres con responsabilidades”, y agrupa a las jóvenes
que tienen al menos un hijo e indicaron dedicarse a los oficios domésticos de su hogar. Como se
mencionó en la metodología, la definición que se utiliza para “trabajo” es la que, por sus labores se
percibe remuneración económica; sin embargo, es evidente la recarga de tareas que estas mujeres
asumen y por esto se les ha tratado como un grupo especial.
En total son 46.4840 mujeres y representan el 23% de la población “nini”. Este grupo es especialmente
vulnerable; presenta los niveles más bajos de escolaridad, y la mayoría conforma su propio hogar.
En consecuencia, debido a la recarga de responsabilidades, su posible inserción en los estudios o
al mercado laboral puede presentar serias dificultades, o tener condiciones desfavorables que no
alcancen a cubrir sus necesidades, debido en parte a su poca preparación formal. (cuadro 2).
Cuadro 2
Características básicas del grupo “mujeres
con responsabilidades” perteneciente a la
población “nini”
2011
Edad
De 12 a 17 años 7,0
De 18 a 24 años 93,0
Escolaridad
Secundaria incompleta o menos 84,7
Secundaria completa 12,6
Parauniversitaria o universitaria 2,7
Población asegurada 69,0
Parentesco
Jefa o jefe 5,7
Esposo o compañero 62,7
Hijo(a) o hijastro(a) 21,4
Otro 10,2
Estado Conyugal
Unión libre o juntada 57,1
Casada 22,6
Soltera 17,4
Otro 2,9
Cantidad de hijos vivos
Un hijo 65,5
Dos hijos 28,2
Tres o más hijos 6,3
Lugar de nacimiento
Costa Rica 81,8
Otro país 18,2
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo
de Población.
168
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Para este grupo, la incidencia sobre los jóvenes de 12 a 24 años de la zona rural casi duplica el de la
urbana; y es el cantón de Los Chiles (donde hay mayor porcentaje de nicaragüenses) el que presenta
la mayor incidencia, lo que coincide con el alto porcentaje de mujeres nicaragüenses que conforman
el grupo (16,9%) (mapa 2).
Mapa 2. Costa Rica: incidencia del grupo de personas que no estudian ni trabajan que pertenecen
al perfil “Mujeres con responsabilidades” en el grupo etario de 12 a 24 años, según cantón. 2011
El tercer grupo está integrado por jóvenes que no asisten a formas de educación regular ni a educación
abierta; sin embargo, sí indican asistir a formas de educación “no regular” o “extraescolar”. La limitante
para este grupo denominado “asistentes a educación no regular”, y por la cual es catalogada como
“nini”, es que estas formas de educación tienen que ver con cursos libres, por los cuales no requieren
título de educación formal, y a la vez pueden no ser reconocidos por el mercado laboral.
Este conjunto contiene a 49.054 jóvenes y representa el 24,3% de los “ninis”, a lo interno son muy
heterogéneos. No muestran un patrón claro dentro de sus características principales y no se percibe una
diferencia significativa entre zonas (cuadro 3). Sin embargo, poseen algunas ventajas sobre los demás
grupos, por ejemplo, tienen un mayor peso los hogares con alto clima educativo y mayor cobertura de
población asegurada.
Cuadro 3
Características básicas del grupo
“Asistentes a educación no regular”
perteneciente a la población “nini”
2011
Sexo
Masculino 48,4
Edad
De 12 a 17 años 48,4
De 18 a 24 años 51,6
Escolaridad
Secundaria incompleta o menos 72,1
Secundaria completa 15,3
Parauniversitaria o universitaria 12,6
Población asegurada 73,0
Parentesco
Hijo(a) o hijastro(a) 76,3
Otros 23,7
Lugar de nacimiento
Costa Rica 91,6
Otro país 8,4
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo de
Población.
El último grupo, y de mayor relevancia, se denominó “núcleo nini”. Contiene a los jóvenes que ni
estudian ni trabajan, y que con base en las variables utilizadas para perfilar, no se encuentra ninguna
característica especial que justifique o explique su condición. Este conjunto es el que se acerca más a
la idea generalizada que se tiene sobre la persona “nini”, la cual no solo no estudia ni trabaja, sino que
tampoco le interesa incorporase a alguna de estas actividades.
Este grupo está conformado por 89.694 jóvenes y es el más grande de los conglomerados, representan
el 44,4% de la población de interés. El 48% reside en la región central; sin embargo, su incidencia es
mayor en la zona rural (mapa 3).
170
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 3. Costa Rica incidencia del grupo de personas que no estudian ni trabajan que pertenecen
al perfil “Núcleo nini” en el el grupo etario de 12 a 24 años, según cantón. 2011
Este núcleo se caracteriza por una mayor presencia de mujeres, y por su crecimiento conforme
aumenta la edad (cuadro 4).
Cuadro 4
Características básicas del “Núcleo nini”
2011
Sexo
Masculino 37,8
Edad
De 12 a 17 años 37,9
De 18 a 24 años 62,1
Escolaridad
Secundaria incompleta o menos 81,1
Secundaria completa 14,9
Parauniversitaria o universitaria 4,0
Parentesco
Esposo(a) o compañero(a) 14,8
Hijo(a) o hijastro(a) 66,6
Otro 18,6
Población asegurada 62,0
Estado Conyugal
Unión libre o juntado(a) 18,8
Casado(a) 6,4
Soltero(a) 73,7
Otro 1,1
Lugar de nacimiento
Costa Rica 87,9
Otro país 12,1
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo de
Población.
Evolución reciente
Dos limitantes son significativas en el análisis de la evolución de este grupo. La primera tiene que ver
con la realización del Censo de población cada 10 años, lo cual no permite ver el comportamiento en
medio período, aunque tiene la fortaleza de identificar cambios comparables en la década y permiten
mayor desagregación territorial.
La segunda limitante radica en que esta es una población móvil, en el sentido de que varía
constantemente, pues en cualquier momento un joven podría ingresar al sistema educativo o incorporarse
a la fuerza de trabajo. Por lo tanto, lo que se obtiene con la información censal es una fotografía del
momento. Aun así, es posible tener una visión general sobre la realidad, y darle seguimiento a los
rezagos y exclusiones que persisten en la sociedad, para los cuales el país y la política pública no han
sido capaces de reducir, o si por el contrario, se ha sido exitoso en la reducción de las brechas.
En Costa Rica la evolución del fenómeno “nini” disminuyó en la última década. Según los datos del
censo del 2000, este grupo representaba el 23,9% del total de jóvenes entre 12 y 24 años. Para el 2011,
la cifra baja a un 19,3%.
172
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Esta disminución es más notoria en el grupo de 12 a 17 años (pasa de 9,7% en el 2000, a 6,1%
en el 2011), lo cual corresponde en alguna medida al éxito de los programas contra la deserción (o
exclusión) del sistema educativo que se han aplicado años recientes. En los jóvenes de 18 a 24 pasa
de 14,1% a 13,3%; lo que demuestra la carencia en medidas y políticas o programas dirigidos a este
grupo etario.
La evolución para cada grupo, muestra disminución en todos, excepto en los asistentes a formas de
educación no regular. Estos mostraron un aumento de 2,3 puntos porcentuales (gráfico 2). Es relevante
indagar en los procesos, que de alguna forma parecen invitar a los jóvenes, sobre todo a los de mayor
edad, a realizar este tipo de estudio en vez de los mecanismos formales. Además, se cuenta con poca
información sobre la calidad y el tema de los cursos que llevan.
Gráfico 2
Evolución de la población “nini” según grupos
2011
14%
12% 3,3%
10%
8%
2,7%
6%
2,3%
4%
0,8%
2%
0%
Nucleo Nini Mujeres con Asistentes a formas de Desempleados
responsabilidades educación no regular
2000 2011
A nivel cantonal, no se observan cambios significativos en la última década. Los de mayor incidencia,
según el censo del 2000 se mantienen en el 2011. Sin embargo, los porcentajes sí se han reducido
significativamente. Por ejemplo, el cantón de Los Chiles, en el 2000 tenía una ocurrencia del 40%, cifra
que pasa al 29% en el 2011, pero se mantiene como los de mayor incidencia (mapa 4).
Mapa 4. Costa Rica: incidencia de la población “nini” en el grupo etario de 12 a 24 años, según
cantón. 2000 y 2011
IV. Conclusión
En Costa Rica, los jóvenes que ni estudian ni trabajan contabilizan poco más de 200.000 personas,
quienes se encuentran excluidas del sistema de educación formal, el cual les podría brindar las
herramientas necesarias para su desarrollo socioeconómico.
Los “ninis” son una población muy diversa, la cual está integrada por mujeres con hijos y dedicadas
al servicio doméstico; personas desempleadas; jóvenes adultos que buscan modos de educación no
formal; por último, este grupo también lo constituye un núcleo del cual es necesario recolectar mayor
información (que el censo no logra capturar), para entender mejor su contexto. Las particularidades de
estos grupos propician la pertenencia a la condición “nini” u obstaculizan su salida.
Parte de las dificultades que afrontan tiene que ver con los rezagos de la sociedad en áreas clave
para el desarrollo; por lo tanto, carencia o incapacidad de las políticas públicas para mitigarlos. Por
ejemplo, las elevadas tasas de desempleo que experimentan los jóvenes, sobre todo en la región
central del país; la permanencia de patrones culturales discriminatorios en el caso del papel de la mujer
dentro del hogar, y problemas de deserción y matrícula, entre otros.
174
Educación Mazzei Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Los “ninis” se caracterizan por tener bajos niveles de escolaridad, lo cual les reduce las probabilidades
de tener acceso a condiciones favorables en el mercado laboral una vez que logran incorporarse.
En conclusión, conocer las realidades y el contexto para cada rostro de las personas “ninis” permite
la elaboración de políticas públicas dirigidas a sus necesidades específicas. La toma de decisión
diferenciada para cada grupo “nini” permitiría potenciar una sociedad más equitativa en el futuro
cercano, y con un derecho inherente a los adolescentes y jóvenes del país, el derecho a la educación,
y posteriormente, a obtener ingresos suficientes que les permitan disfrutar de una vida digna.
V. Referencias bibliográficas
Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). 2013. Glosario, Recuperado de: http://www.inec.
go.cr.
Organización Internacional deI Trabajo. 2010. Trabajo Decente y Juventud en América Latina 2010.
Programa Regional de Empleo Juvenil en América Latina. Lima, OIT.
Resumen
Este trabajo mide la concentración relativa de las personas, según lugar de residencia, actividad
económica en la cual participan, y habilidades o destrezas, según la ocupación que desempeñan.
Además, muestra que la especialización de los distritos no es independiente de la concentración
urbana.
El trabajo clasifica la actividad industrial en alta, media y baja tecnología, los servicios según su
intensidad en conocimiento y utiliza una nueva categoría, la cual agrupa todas aquellas actividades
consideradas como creativas. Los resultados revelan que sí hay concentración e identifica su intensidad
y distribución espacial. Asimismo, mide los cambios con respecto al Censo del 2000.
Por otro lado, los ocupados se clasifican de acuerdo con sus habilidades o destrezas en cinco
categorías a saber; destrezas basadas en conocimiento, gerenciales, sociales, motoras y creativas.
Los resultados muestran que también existe especialización y que es posible identificar “distritos
gerenciales”, “distritos creativos”, y “distritos profesionales”.
I. Motivación
Es un hecho que existen diferencias en el ingreso per cápita entre las regiones de un mismo país,
inclusive en los países desarrollados como Estados Unidos y Europa. Más aún, en América Latina estas
diferencias regionales son mayores a las observadas entre países (Acemoglu y Dell, 2009).
Estas diferencias han originado preguntas de investigación relacionadas con el crecimiento económico
y la formación de ciudades. En el primer caso, Barro y Sala-i-Martin (1992:223) se preguntan si “…
existen fuerzas automáticas que a través del tiempo lleven a la convergencia en los niveles de ingreso
y producto per cápita…” entre los países o regiones. Estos autores encuentran que para el caso de
Estados Unidos la tasa de convergencia del ingreso per cápita entre economías de estados pobres y
ricos es del 2% anual.
*/ M.Sc. en Economía y profesora catedrática de la Escuela de Economía de la Universidad de Costa Rica y Directora del
Observatorio del Desarrollo de la misma universidad.
**/ Egresado en Economía de la Universidad de Costa Rica y asistente de investigación del Observatorio del Desarrollo.
***/ Egresado en Economía de la Universidad de Costa Rica y asistente de investigación del Observatorio del Desarrollo.
176
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Por su parte, Acemoglu y Dell (2009) critican las estimaciones de los autores anteriores porque se
basan en el modelo neoclásico de crecimiento económico de una economía cerrada cuando dentro
de un país sí existe libre movilidad del capital y el trabajo. Estos autores consideran que el capital
humano explica solo parcialmente las diferencias en el ingreso per cápita entre países y entre las
municipalidades, porque el resto se debe a lo que ellos definen como diferencias en la eficiencia
productiva, es decir, a la forma distinta en que interactúa el nivel tecnológico del país y la provisión de
bienes locales de una municipalidad.( Acemoglu y Dell, 2009).
Según Glaeser y Gottlieb (2009:984) estas diferencias regionales en el ingreso per cápita y en la
densidad poblacional son los hechos que originan la pregunta de la economía urbana de por qué
existen las ciudades.
Para Jacobs (1969) las ciudades son lugares que agregan nuevos trabajos a los ya existentes.
Esto hace que sus economías sean más complejas y diversas y se convierten en necesarias para
el desarrollo y la expansión económica incluyendo el desarrollo rural. Jacobs (1969) considera que
las ciudades son más productivas porque facilitan el flujo de ideas y promueven la innovación. La
importancia de las ciudades que se especializan en la generación de nuevas ideas fue posteriormente
subrayado por Lucas (1988), Glaeser et al. (1992) y Rauch (1993) estableciendo, además, una relación
estrecha con la alta calificación de los trabajadores en la medida que estas ciudades creativas facilitan
la interacción entre ellos.
Precisamente Lucas (1988:38) afirma que, “La mayoría de lo que sabemos lo aprendemos de otras
personas” y hace referencia a Jacobs (1969) para subrayar la importancia que tienen los grupos y las
interacciones entre las personas en la productividad individual. Esto se refleja, según Lucas, en que
las personas están dispuestas a pagar una renta más alta para vivir en ciudades creativas porque allí
el capital humano de los demás es la fuerza externa que explica el crecimiento económico.
De acuerdo con Johansson y Klaesson (2010:5) las actividades y ocupaciones creativas se desarrollan
en las aglomeraciones urbanas porque “los ambientes creativos se caracterizan por las externalidades
de comunicación donde las ideas novedosas generan ideas adicionales a través de la interacción”.
No obstante lo anterior, Glaeser y Gottlieb (2009:985) consideran que no hay consenso en cuanto a
la importancia relativa que tienen algunos de estos factores en explicar la fuente de las economías de
aglomeración, es decir, “de la reducción de costos de transporte de bienes, personas e ideas.” (Glaeser
y Gottlieb, 2009:1005). Para estos autores, el modelo de equilibrio espacial provee los fundamentos
para explicar por qué se observa la concentración urbana y cómo esta refleja la oferta de vivienda, los
servicios (amenities) del consumo o las ventajas de una mayor productividad. Estos factores pueden
actuar por separado o interactuando endógenamente entre ellos (Glaeser y Gottlieb, 2009:999).
177
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Este trabajo busca responder tres preguntas, a saber, si existe concentración en la actividad económica
según intensidad tecnológica de la actividad industrial e intensidad de conocimiento en el sector de
servicios, si los ocupados tienden a vivir cerca de las personas con destrezas similares generando
una especialización en los distritos residenciales y finalmente si ese proceso de concentración es
independiente de la concentración urbana.
Para responder las preguntas anteriores se utilizan conceptos como especialización de los cantones,
actividad económica según intensidad tecnológica, e intensidad de conocimiento. Asimismo, se
clasifican las ocupaciones según las destrezas desplegadas en la ocupación o trabajo que realizan las
personas. A continuación, se explica cada una de estas categorías y mediciones.
Sin embargo, con la utilización de proporciones para la medición del LQ, no se toman en cuenta las
diferencias en la población total de los cantones. Por esta razón, se optó por el cociente de localización
con aglomeración horizontal (HCLQ), el cual mide la diferencia entre el número de trabajadores en un
cantón y los trabajadores necesarios para que el LQ sea igual a uno en ese mismo cantón (Ratanawaraha
y Polenske, 2007).
Las mediciones se realizaron con base en dos características laborales de los trabajadores: la rama
de actividad en la que está empleado, y las destrezas inherentes a la ocupación que desempeña. En
relación con la primera categorización, esta se realizó con base en la rama de actividad registrada en
la pregunta 27 del Censo 2011, y la codificación según la Clasificación Industrial Internacional Uniforme
en su versión número 4 (CIIU Rev. 4) realizada por el INEC.
Con base en los códigos CIIU y las categorías establecidas por la Organización para la Cooperación
y el Desarrollo Económicos (OCDE, 2011), se clasificaron las actividades de manufactura en tecnología
alta, media-alta, media-baja y baja. Los servicios se dividieron en los servicios intensivos en conocimiento
y los menos intensivos en conocimiento, aplicando la clasificación realizada por Eurostat (2011). Este
procedimiento se repitió para el Censo del año 2000, con el fin de visualizar la evolución de los cantones.
Las ocupaciones se obtuvieron de la pregunta 24 del Censo 2011 y fueron codificadas por el INEC,
según la Clasificación de Ocupaciones de Costa Rica (COCR-2011). Esta se basa en la Clasificación
Internacional Uniforme de Ocupaciones versión 2008 (CIUO-08) de la Organización Internacional del
Trabajo (OIT). Las categorías fueron tomadas de Johansson y Klaesson (2010), y se clasificaron las
ocupaciones con base en las definiciones utilizadas en Bacolod, Blum y Strange (2008).
Además, se tomó en cuenta el ordenamiento de la CIUO-08, ya que esta agrupa las ocupaciones
que requieren destrezas similares. De esta manera, las ocupaciones se clasificaron según la destreza
178
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
primaria que demandan: las destrezas cognitivas, gerenciales, sociales y motoras. En el caso de las
ocupaciones, no es posible comparar con el año 2000 porque el desglose de las clasificaciones es
actualmente más específico.
Por último, se clasificaron las actividades y ocupaciones en creativas y no creativas. Las primeras se
clasificaron con base en el reporte de la Economía Creativa 2010 de las Naciones Unidas (ONU, 2010),
mientras que las segundas se clasificaron con base en el estudio de Trends Business Research para el
Departamento de Cultura, Medios y Deporte del Reino Unido (TBR, 2011).
Las mediciones de los índices se hicieron para el cantón y distrito de residencia, y para el cantón de
trabajo. Adicionalmente, se obtuvo el número de trabajadores que se desplazan de un cantón a otro
para trabajar según las categorías de actividad y ocupación.
Según Johansson y Klaesson (2010:5-6) “las regiones urbanas creativas se distinguen por albergar
a individuos o grupos de individuos que están creando y generando nuevas ideas, soluciones y
conocimiento, pero también a productores que llevan a cabo innovaciones, nuevas rutinas y nuevos
productos”. En este sentido, lo primero que interesa identificar es si la densidad laboral difiere entre
los cantones, si los años de escolaridad son significativamente diferentes y si ambas variables han
cambiado en el tiempo.
Lo segundo que interesa conocer es si la oferta de empleos también se concentra en los mismos
cantones y en qué actividades. Desafortunadamente, no es posible medir los cambios en el tiempo de
la densidad de empleos del cantón porque es la primera vez que el Censo de Población de Costa Rica
identifica el cantón donde se ubica el lugar de trabajo de la persona.
Lo tercero que interesa medir es la importancia relativa de la oferta de trabajos según el sector de
actividad. Por último, la importancia relativa de las destrezas que despliegan los trabajadores en sus
puestos de trabajo.
El Cuadro 1 presenta algunos datos sobre las categorías construidas a partir de las ramas de
actividad registradas en el Censo 2011. Las ramas de actividad corresponden a la actividad principal
a la que se dedican las empresas, y como tales, no distinguen las diferencias en los puestos o las
calificaciones entre los empleados de la empresa. Por lo anterior, este análisis aporta más información
sobre la ubicación de las empresas y la posible existencia de aglomeraciones, que sobre la calidad del
capital humano.
En primer lugar, se puede observar que los servicios, incluyendo los públicos, son la principal fuente
generadora de trabajo, pues constituyen casi un 68% del empleo total a nivel nacional. Los servicios
menos intensivos en conocimiento, que incluyen actividades comerciales, inmobiliarias, turísticas y
de servicios personales, son el componente más importante. En segundo lugar, están los servicios
intensivos en conocimiento. Estos últimos incluyen actividades de servicios profesionales, transporte,
servicios financieros, servicios de información, programación, investigación, educación, entre otros.
La diferencia en la escolaridad promedio de estas categorías es de 4 años, pues los ocupados en los
servicios intensivos en conocimiento tienen, en promedio, alguna formación post-secundaria, mientras
que en los menos intensivos este valor indica que los ocupados apenas terminan la educación general
básica. Esta brecha también se refleja en la tenencia de títulos universitarios, la cual es superior al 56%
de los ocupados en servicios intensivos, frente 15.93% para los menos intensivos en conocimiento.
179
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Cuadro 1
Características generales de las categorías de actividad
2011
Ocupados con
No. de Porcentaje del Escolaridad
Actividades título
ocupados empleo total promedio
universitario (%)
El empleo en manufactura alcanza 11,62% de los ocupados, y solo 1,36% de los empleos totales del
país son en alta tecnología. En esta categoría se incluye la fabricación de productos farmacéuticos,
informáticos, electrónicos, instrumentos y suministros médicos y odontológicos. Las diferencias en
escolaridad y tenencia de títulos son más pronunciadas entre los empleos de tecnologías altas y
aquellos que están en la industria de tecnologías más bajas. La brecha de la escolaridad promedio
entre la tecnología alta y media-alta, y entre la media-alta y media-baja, es cercana a 1,2 años de
estudio, mientras que entre la tecnología media-baja y la baja, es de solo 0,42 años. Esto se repite en
términos de los títulos universitarios, donde la brecha es de 9 puntos porcentuales en los dos primeros
casos, y de solo 3 puntos porcentuales en el tercer caso.
Cuadro 2
Características generales de las categorías de ocupación
2011
Ocupados con
Destrezas No. de Porcentaje del Escolaridad
título universitario
ocupacionales ocupados empleo total promedio
(%)
Las destrezas sociales, aquellas que demandan la interacción con otras personas y que incluyen
ocupaciones como las ventas, reflejan una mayor preparación formal de los ocupados que aquellos
con destrezas motoras. Cerca de un tercio de los trabajadores con destrezas sociales posee título
universitario, frente a un veinteavo de las motoras.
Las destrezas cognitivas requieren una alta inversión en capital humano, pues más del 80% posee
título universitario con una escolaridad promedio de 15 años que es más del doble de quienes utilizan
sus destrezas motoras para trabajar. Estos ocupados tienen habilidades matemáticas, de expresión,
lógicas o capacidad para sintetizar, analizar y computar. Solamente el 15,1% de los ocupados totales
del país despliega esas destrezas en sus ocupaciones.
El cuarto grupo está constituido por quienes tienen destrezas gerenciales, es decir, capacidad para
negociar, supervisar, administrar, planificar e influir en las personas. Este grupo solo representa el
1,47% de los ocupados, pero su nivel de escolaridad supera el promedio nacional y la mayoría posee
un título universitario. Por ejemplo, la brecha entre el porcentaje con título universitario y realiza labores
gerenciales y aquellos con destrezas sociales es de 32 puntos porcentuales.
Subcentros de empleo
En la economía urbana, una manifestación de las aglomeraciones son los “subcentros” de empleo, zonas
dentro de las ciudades que poseen una alta densidad de trabajadores. (Rutherford y van Nieuwkoop,
2011). En el caso de Costa Rica, las ciudades no corresponden con los límites administrativos entre
los cantones, por ejemplo, la Gran Área Metropolitana se extiende a lo largo de varios cantones. Esto
dificulta los cálculos de las economías de aglomeración, pues no se trabaja con el área más relevante
para realizar estas estimaciones. No obstante, se procedió a calcular la densidad del empleo para los
cantones, es decir, el número de trabajadores ocupados por hectárea, como una forma de aproximar
los sub-centros de empleo.
De acuerdo con las estimaciones del Cuadro 3, San José, como sede de la mayor parte del gobierno
central, es el cantón más denso en términos de empleos. También es el único que califica como alta
densidad (D>50) según los estándares establecidos para EEUU. Por su parte, Tibás tiene una densidad
181
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
de empleo media (25<D<50) según esta medida, mientras que Montes de Oca, Belén y Curridabat
son cantones con una densidad de empleo baja (12.5<D<25). Todos los demás cantones tienen una
densidad muy baja según esta métrica. Sin embargo, todos estos cantones concentran también la
mayoría de los empleos en las actividades más sofisticadas del país.
San José, además de tener una densidad alta de empleos también concentra el 23,5% de los ocupados
con título universitario. No obstante lo anterior, si se analiza la densidad de los empleos, según las
actividades económicas más complejas o creativas se observa que, en términos de ocupaciones de
alta tecnología, San José es superado por tres sub-centros de empleo, que en conjunto concentran el
58,5%; a saber, Belén, el cuarto cantón en densidad de empleos en el país, Heredia y Alajuela, con
una densidad muy baja en empleos en general.
Cuadro 3
Densidad del empleo según el cantón de trabajo y porcentaje del empleo total
según algunas actividades económicas
2011
El Cuadro 3 indica que San José sí concentra los empleos en servicios intensivos en conocimiento y
en actividades creativas. Dadas estas y las anteriores características, San José debería ser una ciudad
creativa, donde la gente está dispuesta a pagar rentas más altas para aprender de los demás en sus
interacciones con otros ocupados.
Desafortunadamente, el Censo del 2011 no recoge la variable de alquileres para poder corroborar
esta explicación. Sin embargo, como veremos más adelante, San José es un cantón expulsor neto
de ocupados, especialmente en servicios, lo cual podría indicar que más bien está perdiendo ese
potencial de ciudad creativa.
Por otro lado, los empleos intensivos en conocimiento se concentran principalmente en San José,
pero luego le siguen en orden de importancia, Heredia, Alajuela y Montes de Oca. Entre ellos se genera
el 39,3% de los empleos de servicios intensivos en conocimiento. Asimismo, San José genera un 26%
de las ocupaciones en actividades creativas del país, sin embargo, estas se concentran en cantones
como Heredia, Montes de Oca, Alajuela, Belén, Escazú y Santa Ana. Entre estos generan un 30,2%
adicional de las ocupaciones en actividades creativas del país.
Cuadro 4
Porcentaje del empleo total según la destreza primaria de las ocupaciones
2011
Con respecto a la distribución de las destrezas el Cuadro 4 también muestra que San José concentra
las ocupaciones en todas las categorías de destrezas laborales; sin embargo esta concentración es
menor en la categoría de destrezas motoras. De acuerdo con Jacobs (1969), Johansson y Klaesson
(2010) la aglomeración de empleos en ciudades creativas va generando ocupaciones nuevas con
destrezas más complejas y disminuyendo aquellas que requieren destrezas más sencillas o con menor
capital humano. Por lo tanto, si San José logra convertirse en una ciudad creativa es de esperar que la
proporción de empleos que requieren destrezas motoras sea aún menor.
III. Resultados
Los datos sobre la ubicación del trabajo de los ocupados sugieren que hay concentración geográfica
en la generación de empleos, tanto por actividad económica como por destreza de los ocupados.
Estos resultados plantean varias interrogantes. La primera se refiere a los mecanismos que explican
la aglomeración de las empresas. En este sentido, se intentó medir la existencia de economías de
aglomeración, pero la ausencia de un censo reciente de establecimientos hizo imposible tal estimación1.
En particular, la segunda pregunta intenta estimar, si las personas que trabajan en actividades
económicas específicas viven en distritos similares y si estos procesos están relacionados con la
densidad de la población económicamente activa y con los nodos de empleo.
En el Gráfico 1 se presentan las figuras que relacionan el índice de especialización por actividad
económica de los ocupados según lugar de residencia y el logaritmo de la densidad de la población
económicamente activa de los distritos. Este índice de especialización se define como el cociente de
localización con aglomeración horizontal (HCLQ) y mide la diferencia entre el número de trabajadores en
un cantón y los trabajadores necesarios para que la proporción cantonal de una categoría, comparada
con la proporción nacional de trabajadores en esa misma categoría (denominada LQ), sea igual a
uno en ese mismo cantón. Así por ejemplo, un valor del HCLQ superior a la unidad indica el número
de trabajadores adicionales que tiene el distrito a los requeridos para mantener la misma proporción a
nivel nacional.
Los resultados señalan que hay varios conglomerados de ocupados y en el caso de las actividades
de alta tecnología, sí están relacionados con la densidad ocupacional de los distritos. De acuerdo con
el Gráfico 1, los distritos con una mayor concentración de ocupados en alta tecnología son los distritos
de Heredia2, Ulloa, San Francisco y Mercedes, y los de Alajuela, tales como, Alajuela centro, San José,
San Antonio, Desamparados, San Rafael, Guácima. Por su parte, llama la atención que de la provincia
de Cartago solamente está El Tejar, pero como se verá más adelante en el año 2000 había más distritos
del cantón de Cartago con una alta concentración de ocupados en alta tecnología.
1/ Agradecemos al INEC el suministro de algunos datos del Directorio de Establecimientos pero desafortunadamente las
estimaciones de economías de aglomeración no fueron exitosas con esa información.
2/ Ulloa(40104), San Francisco (40103) y Mercedes (40102) y de Alajuela, a saber, Alajuela centro (20101), San José(20102),
San Antonio(20104), Desamparados(20110), San Rafael(20108), Guácima(20105), El Tejar (30801).
184
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 1
Relación entre el índice de especialización y la densidad de la población
económicamente activa por actividad industrial, según distrito de residencia
del ocupado
2011
40104 40103
20108 20102
2010420101
20105 20110 40102 30104 40103
30801 30105
2030730201 30801
20308 20304 30106
30304 201023030510109
30701
20301
40104
30302
0 70201
0 70301
50101
20607
7020511901
21001 70101
50101 11901
21001 70101
HCLQ
20108 20104
60108
20105 20102 10109
30105
60201 7010120108 10109 30802 60115 40103
60202 30104 10302 30801 40103
10107
50704 10308 20105 30205
20102
30308
40306 10807
0 11901
21001
0
50101 41001 50101 11501
7030170205
70101
Por otro lado, el Gráfico 2 muestra el nivel de concentración según el lugar de residencia de
los ocupados en servicios y en actividades creativas. Lo primero que destaca es que sí hay una
concentración de los ocupados en los servicios, independientemente de qué tan intensivos sean estos
en conocimiento, mientras que en actividades creativas el nivel de concentración es muy bajo.
Lo segundo es que los ocupados en servicios intensivos en conocimiento sí están relacionados con
el nivel de densidad ocupacional de los distritos, mientras que en los servicios menos intensivos en
conocimiento esa relación es más débil. Este resultado se explica por el desarrollo del turismo en
regiones costeras o fuera de la GAM. Finalmente, los ocupados en actividades creativas también se
concentran en distritos con una alta densidad ocupacional, aunque el nivel de concentración de estas
actividades es bajo.
3/ San Rafael (20108), San Antonio (20104), San José (20102),Guácima (20105), Pavas (10109), San Francisco de
Heredia(40103), San Isidro de Cartago (30802), Barranca (60108) y El Roble(60115).
185
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Gráfico 2
Relación entre el índice de especialización y la densidad de la población
económicamente activa para servicios y actividades creativas, según
distrito
2011
11801
10110 70101
10106
40102
11301
10801
40101
10105 50101
30303 10301
10111 21007 10111
40901 1150211104
10312 61101 10302 11005
10203 20101 10202 1010910301
10110
30501 11101 10109
10804 50503
60601 10103
70201 21001 10903 11004
10807
20102
0 0
21006
41001
70302
2101360301
2100721004 20108 41003 70502
70204
41001 70301 7030170205
70503
21006
70203 70102
70204
70205
70203
HCLQ
Actividades creativas
11501
11401
10203 11801
20706 10804 1180210109
11301 10301
10803
10106
11004
10103
10105 10311
10801
11303
0
70203 50101
7030170205 60108
70101
4/ Turrialba (30501), San Pedro de Montes de Oca (11501) y Sabanilla(11502), San Juan de La Unión (11301), San Vicente de
Moravia(11401), San Juan de Tibás(11301), Curridabat centro(11801), Guadalupe (10801) y Mata de Plátano (10804), San
Isidro(11101) y Patalillo (11104), Heredia centro(40101), Mercedes(40102) y San Pablo centro(40901) Zapote(10105), San
Francisco de Dos Ríos(10106), Hatillo (10110) y San Sebastián(10111), Gravilias (10312), Desamparados centro(10301) San
Rafael de Escazú (10203) .
186
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Finalmente, el Gráfico 2 muestra los distritos creativos, es decir aquellos que concentran a los
ocupados que trabajan en actividades relacionadas con los servicios de impresión, producción de
programas de televisión, películas y videos, edición de periódicos, fabricación de muebles, joyas,
instrumentos musicales, actividades de arquitectura, diseño, fotografía, artes, comunicación,
procesamiento de datos y portales web, entre otras. Estas personas se concentran en los distritos6
de Zapote, San Francisco de Dos Ríos, Hospital del cantón de San José, San Rafael de Escazú, San
Pedro de Montes de Oca, Granadilla y Curridabat centro, Mata de Plátano, Calle Blancos y Guadalupe
centro, Llorente y San Juan de Tibás y, finalmente, en el sur de la GAM en San Rafael Abajo y el centro
del cantón de Desamparados y Concepción de Alajuelita. El único distrito que destaca fuera de la GAM
es Esquipulas de Palmares.
Los resultados anteriores muestran que un aumento en la concentración de los ocupados podría
generar una mayor concentración de aquellos que trabajan en actividades de alta tecnología y
servicios intensivos de conocimiento. Ahora lo que interesa analizar es si existe una relación similar
con respecto a las destrezas de los ocupados. Es decir, ¿hasta qué punto las personas que tienen
destrezas similares viven en distritos similares y qué relación tiene con la densidad de la población
económicamente activa?.
El Gráfico 3 muestra que sí hay una relación positiva entre la densidad ocupacional y las destrezas
en conocimiento y las motoras. En el primer caso es una relación positiva y en el segundo caso es
negativa. Estos resultados son similares a los estimados para la región urbana de Suecia por Johansson
y Klaesson (2010).
Los distritos de conocimiento son, San Rafael de Escazú, Heredia, San Pablo, San Juan y Llorente
en Tibás, Guadalupe, Mata de Plátano, San Isidro de Coronado, San Pedro, Sabanilla, Curridabat,
Sánchez, San Juan de la Unión, Gravilias de Desamparados, Zapote, San Francisco de Dos Ríos. Sin
embargo, también hay algunos distritos fuera de la GAM como Santa Cruz, y en menor medida Turrialba
y Pérez Zeledón.
Los distritos gerenciales están distribuidos entre el este, oeste y norte de la GAM y algunos fuera de
la GAM como San Carlos, Cabo Velas de Santa Cruz, Turrialba, Limón y Cahuita. En el oeste los distritos
gerenciales son Mora, Pozos de Santa Ana y Santa Ana, San Rafael de Escazú, y Mata Redonda en San
José. En el este de la GAM están Zapote, Curridabat, Granadilla, Sánchez, San Pedro, San Juan de la
Unión. En el norte de la GAM, se concentran en Tibás, Moravia y Coronado.
5/ Limón (70101), Concepción (11004), San Felipe(11005), Pavas(10109), Hospital(10103), Hatillo(10110), San Sebastián(10111),
Jacó (61101), Quepos (60601), La Fortuna(21007), Ciudad Quesada (21001), Liberia centro (50101) y Sardinal(50503).
6/ Zapote (10105), San Francisco de Dos Ríos(10106), Hospital(10103), Granadilla(11802) y Curridabat centro(11801), Mata
de Plátano(10804), Calle Blancos (10803) y Guadalupe centro(10801), Llorente(11303) y San Juan(11301) de Tibás, San
Rafael Abajo(10311),Concepción(11004), Esquipulas(20706).
187
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Gráfico 3
Relación entre el índice de especialización y la densidad de la población
económicamente activa según las destrezas laborales, por distrito de
residencia de los ocupados
2011
11801
11501
11401
10106
40102
40901
10203 11502
30303
40101
20101
11301
30102 10801
10105
30101
11803 40104 11303
10312
30801 10203
10903 11801
11501
11401
11803
10108
10201
10901 30303
0 0 40703 11502
10109
10106
10313 10110
41001 70301
70203 11005
10313
70205
HCLQ
70205
10110 70203 70301
41001
21006
11401 41003
7050370204
70102
11301 10301
10111
2010140103
40102
11501
10105
10805
21001 11801 10801
10803
40101 11104
10106
10302 30303
10601 11101
10312
1130510311
0 0
70102 41003
2100670301
70503
41001 70204
70203 70205
10312 11104
40901 11502
11101
10111
20102
40104 10105
10801
10110
4010110301
30303
11301
40103
10203 2010110106
40102
11801
11501
11401
Los distritos con una concentración alta de destrezas creativas se ubican en la GAM y coinciden con
varios de los distritos anteriores. En San José, están los distritos de Zapote, San Francisco de Dos Ríos,
Mata Redonda y Pavas, San Rafael de Escazú, Pozos de Santa Ana y Alajuela centro en el oeste; San
Pedro y Sabanilla en Montes de Oca, Curridabat, Granadilla y Sánchez en Curridabat, San Juan de La
Unión, Oriental de Cartago y Tejar del Guarco en el este; Guadalupe de Goicoechea, San Vicente de
Moravia, San Juan de Tibás, Heredia, Mercedes y San Francisco de Heredia, San Pablo centro de San
Pablo, en el norte.
Los distritos de residentes especializados en destrezas motoras son aquellos con una menor densidad
de ocupados; sin embargo, aún quedan algunos en la GAM aunque la mayoría están fuera de la Región
Central.
Los nodos de empleo se definen como aquellos cantones que concentran una proporción de empleos
en actividades económicas específicas o en destrezas particulares mayor que el promedio nacional.
En esta investigación se escogieron aquellos cuyo índice de especialización resultó mayor que el
promedio nacional en dos o más deviaciones estándar.
188
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El Cuadro 5 muestra que hay nueve nodos industriales, pero hay diferencias de acuerdo con la
complejidad tecnológica de la actividad. Los tres nodos generadores de empleo en alta tecnología
son Alajuela, Heredia y Belén. Además, Alajuela es el cantón con una concentración muy diversa de
empleos industriales pues es un nodo de empleo en los cuatro tipos de industria.
Con respecto a los servicios intensivos en conocimiento, San José y Montes de Oca son los dos
nodos con el nivel de concentración más alto de empleos en el país. Sin embargo, en el caso de los
servicios menos intensivos en conocimiento, la concentración de empleos se da en Escazú y Heredia,
pero también fuera de la GAM en Pococí y Siquirres. Finalmente, los empleos en actividades creativas
se concentran en San José y Tibás.
El Cuadro 5 también muestra los cantones con un mayor nivel de concentración, según la residencia
de los ocupados y los nodos de demanda laboral. En la GAM estos coinciden con los nodos de empleo,
o son geográficamente próximos, es decir, la proximidad a la demanda de trabajo parece ser un criterio
importante de la residencia. Fuera de la GAM los nodos de residencia tienen un nivel de concentración
menor que los observados en la GAM.
189
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Cuadro 5
Nodos de residencia y de trabajo1/ para por categoría de actividad y ocupación
2011
Actividades
Alta tecnología Alajuela, Heredia Alajuela, Heredia, Belén
Alajuela, Grecia, San Carlos,
Alajuela, Grecia, Cartago,
Tecnología media-alta Cartago, La Unión, El Guarco,
La Unión, Heredia
Heredia
Desde el punto de vista de las destrezas laborales llama la atención que los dos nodos de empleos
gerenciales son San José y Escazú, y los nodos de residencia en destrezas gerenciales están divididos
en el este en Curridabat y Montes de Oca y en el oeste en Escazú y Santa Ana.
¿Cómo cambió con respecto al año 2000? Los resultados revelan que se intensificó la especialización
en alta tecnología, disminuyó el número de distritos especializados en baja tecnología y se amplió el
número de distritos especializados en servicios.
Los nodos de especialización también se obtuvieron en términos de las ramas de actividad que
emplean a los residentes de los distintos distritos. Las diferencias entre los nodos identificados con los
censos del 2000 y el 2011, señalan cambios importantes en los ocupados de estos distritos durante
este período.
Gráfico 4
Comparación del índice de especialización de la residencia de los ocupados
según actividad del ocupado por distrito
2011
40104 40103
20108 20102
2010420101
40104 40103
20101 20105 20110
30105 2010820110
20102
30801 30801
40102
30106 20109
30104
20607 2030710903 20104
40701
3070130103
0 70301
50101 21001
11901 3050160108 0 70201
70101 50101 11901
21001 70101
HCLQ
0 0
41001 50101
70502 7030170205 11501
70102 41001
41003
60301 50301
7020350201
50101 70101
70301
70205 70101
Los cambios en el número de distritos considerados como nodos en cada una de las categorías de
actividad sugieren una transición de la manufactura hacia los servicios en términos de la especialización.
Además, se ha dado una reducción de los nodos de tecnología alta y baja a favor de las tecnologías
medias. Los nodos de servicios menos intensivos en conocimiento son los que más han aumentado
en relación con el año 2000, y son, junto con la tecnología media-baja, los que exhiben una mayor
distribución geográfica.
La lista de los distritos también ha cambiado durante este período. Mientras que en el año 2000 había
varios distritos del cantón central de Cartago especializados en alta tecnología, para el 2011 Tejar del
Guarco es el único distrito especializado en la provincia de Cartago. Distritos de Santa Ana, Grecia y
Naranjo también salieron de la lista y dejaron exclusivamente a distritos de los cantones centrales de
Heredia y Alajuela.
La existencia de zonas francas con empresas de alta tecnología en estos cantones, podría explicar
la mayor concentración de los trabajadores en estos distritos.
En términos de tecnología media-baja, para el año 2000 destacan distritos de los cantones centrales
de San José, Alajuela y Cartago. Con el censo del 2011, se observa la aparición de otros nodos fuera
de la Gran Área Metropolitana (GAM), al incorporarse distritos de Esparza, Abangares y Limón. La
especialización en la categoría de tecnología baja ha tenido una marcada reducción y un movimiento
hacia el oeste de la GAM. La presencia de Barranca y El Roble de Puntarenas podría indicar un mayor
movimiento de las actividades de menor intensidad tecnológica hacia cantones fuera de la GAM.
Por otro lado, los ocupados en servicios intensivos en conocimiento se concentran hacia el este de
San José y algunas partes del norte y sur de la ciudad. Los distritos especializados se mantienen casi
en su totalidad entre el 2000 y el 2011, y se da una mayor expansión hacia al este, incluyendo San Juan
de La Unión y San Isidro de Coronado. El distrito central de Turrialba también se incorpora a la lista
como el único distrito fuera de la GAM especializado en servicios intensivos en conocimiento.
192
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 5
Comparación del índice de especialización de la residencia de los ocupados
según actividad del ocupado por distrito
2000 y 2011
11801
11801
10110 10110
10106 10106
40102
10109
1130110301 11301
10111
10801
40101 10801
40101
10105
20101 303031010510301
10111
10803
11502 40901 1150211104
40102
10312 10312
20101
10203 10203 11101 10109
10804
40901 30501
10804 40103
11305
0 0
70301
70203 70205 2100721004 20108
70204
41001 70301
21006
70203
70205
HCLQ
Servicios menos intensivos en conocimiento (2000) Servicios menos intensivos en conocimiento (2011)
70101 10110
10111
10109
10301
70101
10203 10103
11801 50101
21007 10111
10302 11501 61101 10302 11005
1140110311 10202 1010910301
10110
10601 10102
10807
10104 50503
60601 10103
70201 21001 10903 11004
10807
20102
0 0
21006
41001
70302
2101360301
41003 70502
70204 7030170205
70503
41003 70301 70102
70205 70204
70102
70203 70203
¿Hasta qué punto la migración urbana contribuyó a la conformación de esos nodos? El Gráfico 6
muestra diferencias importantes en el flujo neto de ocupados de acuerdo con las actividades económicas
que estos realizan y según algunos ejemplos de cantones.
Gráfico 6
Tasa de migración neta según actividad del ocupado para algunos cantones de Costa Rica
(Tasa por cada mil ocupados, 2011)
-0.08 -0.34
Alta tecnología -0.07 Alta tecnología -0.32
-0.08 0.02
Media-alta tecnología -0.07 Media-alta tecnología 0.06
-0.15 0.06
Media-baja tecnología -0.12 Media-baja tecnología 0.13
-0.46 -0.00
Baja tecnología -0.33 Baja tecnología 0.18
1.55 -1.33
Servicios intensivos 2.13 Servicios intensivos -0.87
0.48 -0.27
Servicios menos intensivos 1.71 Servicios menos intensivos 0.69
0.23 0.69
Alta tecnología 0.25 Alta tecnología 0.72
0.33 0.32
Media-alta tecnología 0.35 Media-alta tecnología 0.32
0.32 0.24
Media-baja tecnología 0.40 Media-baja tecnología 0.24
0.91 1.23
Baja tecnología 1.32 Baja tecnología 1.48
10.18 7.99
Servicios intensivos 11.11 Servicios intensivos 8.82
6.95 7.56
Servicios menos intensivos 9.39 Servicios menos intensivos 10.32
Flores Garabito
También es importante mencionar la migración de otros cantones que son nodos de empleo. San
José es un expulsor neto de ocupados desde cualquier actividad que se considere. Santa Ana, en
términos netos, atrae ocupados en todas las categorías. Belén atrae ocupados en servicios intensivos
en conocimiento y expulsa los ocupados en los otros servicios, pero también atrae ocupados con
destrezas cognitivas y gerenciales, y expulsa aquellos con destrezas motoras y sociales.
IV. Conclusiones
Las dos preguntas iniciales que buscaba responder este trabajo tienen una respuesta afirmativa. Por
un lado, los datos revelan una concentración en la actividad económica según intensidad tecnológica
de la actividad industrial e intensidad de conocimiento en el sector de servicios. Por otro lado,
los ocupados tienden a vivir cerca de las personas con destrezas similares, esto genera distritos
residenciales especializados en destrezas específicas.
La tercera pregunta tiene una respuesta negativa; es decir, ese proceso de concentración no es
independiente de la concentración urbana, excepto en el caso de los servicios menos intensivos
en conocimiento para los cuales la relación es más débil porque el desarrollo turístico ha generado
empleos en regiones costeras y fuera de la GAM donde la densidad ocupacional es menor.
Estos resultados son importantes en el tanto permiten reflexionar mejor sobre la motivación principal
de este trabajo, la cual es, la desigualdad en el ingreso per cápita entre los cantones. De acuerdo
con la revisión de la literatura, las diferencias en el ingreso per cápita se explican por diferencias en el
capital humano, pero también por la interacción del nivel tecnológico del país y la provisión de bienes
locales (Acemoglu y Dell, 2009).
Por ejemplo, los nodos de empleo en alta tecnología, identificados en este trabajo como Belén, Heredia
y Alajuela, generan nodos de distritos residenciales en alta tecnología, los cuales son geográficamente
próximos, como lo reflejan varios de los distritos de Alajuela y Heredia.
De la misma manera, los nodos de empleo en servicios intensivos en conocimiento, como San
José, Heredia, Montes de Oca también generan nodos de distritos residenciales cercanos en estas
actividades, distribuidos principalmente en el sur, este y norte de la GAM.
Las destrezas ocupacionales de las personas reflejan la complejidad de las interacciones laborales
y el nivel tecnológico de esas interacciones. Las estimaciones anteriores ponen de manifiesto que la
distribución espacial de esas destrezas no es homogénea y tampoco es independiente del nivel de
densidad ocupacional de los distritos. Por consiguiente, es de esperar que el ingreso per cápita de los
distritos varíe, de acuerdo con la distribución de las destrezas ocupacionales.
Los resultados del Censo del 2011 parecen indicar que este proceso además se refuerza a sí mismo
pues los cantones con una mayor migración neta en alta tecnología y servicios intensivos en conocimiento
están alrededor de los nodos de empleo en estas mismas actividades. Desafortunadamente, no es
posible medir los mecanismos que explican este proceso de concentración para relacionarlos con la
desigualdad del ingreso, porque no se cuenta con datos de salarios y alquileres a nivel de hogar.
No obstante lo anterior, San José tiene distritos que concentran ocupados en servicios intensivos en
conocimiento, como Pavas, Zapote, San Francisco de dos Ríos, Hatillo y San Sebastián o creativos
como los dos primeros o gerencial como Mata Redonda.
La pregunta es si esa concentración es suficiente para definir a San José como una ciudad creativa,
es decir, como aquella que provee los espacios y facilita la interacción entre las personas convirtiéndose
en un lugar generador de nuevas ideas, a tal punto que las personas buscan estar presentes en esos
espacios para aprender de los demás.
Los datos del Censo del 2011 también sugieren la existencia de otros nodos o sub-centros de empleo,
como por ejemplo Escazú, que al igual que San José es un nodo de empleo en destrezas gerenciales,
el cual se ve reforzado por Santa Ana como un nodo de residencia en destrezas gerenciales. Además,
constituye un cantón cuyo flujo neto de migración de ocupados es positivo y son geográficamente
cercanos a los nodos de empleo de alta tecnología e industria en Heredia y Alajuela.
No obstante lo anterior, el sistema de transporte actual no contribuye a acercar los nodos de trabajo
entre sí ni los nodos de residencia de los ocupados. La distancia en términos de tiempo de traslado
entre estos nodos no facilita ni promueve las economías de aglomeración definidas al inicio del artículo.
Actualmente, la distancia promedio entre nodos de empleo es de cuarenta y cinco minutos, pero si
esta se lograra reducir, rediseñando el sistema de transporte público, facilitaría la interacción entre
nodos de empleo y residencia geográficamente distantes. En este sentido, el ejemplo más claro es
Cartago el cual constituye un nodo de empleo en la industria de tecnología media alta y media baja,
pero se encuentra separada de los nodos de alta tecnología por más de cuarenta y cinco minutos.
Finalmente, los resultados llevan a reflexionar sobre la integración de la política educativa y la política
productiva. Los datos muestran que la demanda de trabajadores con un nivel alto de escolaridad está
concentrada en los servicios intensivos en conocimiento y en la industria de alta tecnología y en menor
medida en la de tecnología media alta. Estas actividades en conjunto generan el 29% de todos los
empleos del país. Por consiguiente, una política que promueva el aumento de la escolaridad debe ir
acompañada de una expansión de estos sectores productivos.
196
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
V. Anexos
Cuadro A-1
Clasificación de las actividades según código CIIU Rev. 4
1
Manufacturas
Tecnología alta 3030, 21, 26, 3250
Tecnología media-alta 27, 29, 20, 30 (excl. 3010, 3030), 28
Tecnología media-baja 301, 22, 19, 23, 24, 25, 33
Tecnología baja 31, 32(excl. 3250), 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18
2
Servicios
Servicios intensivos en 50, 51, 69, 70, 71, 73, 74, 78, 80, 59, 60, 61, 62, 63, 72, 64, 65, 66, 58,
conocimiento 75, 84, 85, 86, 87, 88, 90, 91, 92, 93
Servicios menos
intensivos en 45, 46, 47, 49, 52, 55, 56, 68, 77, 79, 81, 82, 95, 53, 94, 96, 97, 98, 99
conocimiento
3
Actividades creativas
1811, 1812, 1820, 3100, 3211, 3212, 3220, 3240, 5811, 5812, 5813,
5819, 5820, 5911, 5912, 5913, 5914, 5920, 6010, 6020, 6311, 6312,
Creativos
6391, 7110, 7310, 7410, 7420, 7722, 7740, 9000, 9101, 9102, 9103,
9321, 9329
Fuente: 1/ Clasificación original de OCDE (2011) en CIIU Rev. 3 convertida a los códigos de la Rev. 4.
2/ Clasificación original de Eurostat (2011) en NACE 2.0 convertida a códigos CIIU Rev. 4.
3/ Clasificación original de ONU (2010) en CPC 2.0 convertida a códigos CIIU Rev. 4.
197
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Educación Ulate, Madrigal & Jiménez
Cuadro A-2
Clasificación de las ocupaciones según destreza principal
211, 212, 213, 214, 215, 216, 221, 222, 223, 225, 226, 231, 232, 233, 234, 235,
Cognitivas 241, 251, 252, 261, 262, 263, 264, 265, 311, 312, 313, 314, 315, 321, 322, 323,
324, 325, 331, 431, 361, 371
Gerenciales 111, 112, 121, 122, 131, 132, 133, 134, 141, 142, 143, 517
242, 243, 332, 333, 334, 335, 341, 342, 343, 351, 411, 412, 421, 422, 511, 513,
Sociales
515, 516, 522, 531, 532
24, 352, 413, 432, 441, 512, 514, 521, 523, 524, 541, 611, 612, 613, 621, 622,
631, 632, 633, 634, 711, 712, 713, 721, 722, 723, 731, 732, 741, 742, 751, 752,
Motoras
753, 754, 811, 812, 813, 814, 815, 816, 817, 818, 821, 831, 832, 833, 834, 835,
911, 912, 921, 931, 932, 933, 941, 951, 952, 961, 962
Cuadro A-3
Índice HCLQ de las categorías de actividad según cantón de residencia
Servicios Servicios
Tecnolo- Tecnologí
Alta Baja intensivos en menos Actividades
Cantón gía media- a media-
tecnología tecnología conocimien- intensivos en creativas
alta baja
to conocimiento
Continua …
198
Educación Ulate, Madrigal & Jiménez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Servicios Servicios
Tecnolo- Tecnologí
Alta Baja intensivos en menos Actividades
Cantón gía media- a media-
tecnología tecnología conocimien- intensivos en creativas
alta baja
to conocimiento
Servicios Servicios
Tecnolo- Tecnologí
Alta Baja intensivos en menos Actividades
Cantón gía media- a media-
tecnología tecnología conocimien- intensivos en creativas
alta baja
to conocimiento
Cuadro A-4
Índice HCLQ de las destrezas ocupacionales según cantón de residencia
Continuación Cuadro A- 4
Cuadro A-5
Índice HCLQ de las categorías de actividad según cantón de trabajo
Servicios
Servicios
Alta Tecnología Tecnología Baja menos Actividades
Cantón intensivos en
tecnología media-alta media-baja tecnología intensivos en creativas
conocimiento
conocimiento
Continuación Cuadro A- 5
Servicios
Servicios
Alta Tecnología Tecnología Baja menos Actividades
Cantón intensivos en
tecnología media-alta media-baja tecnología intensivos en creativas
conocimiento
conocimiento
Cuadro A-6
Índice HCLQ de las destrezas ocupacionales según cantón de trabajo
Continuación Cuadro A- 6
VI. Bibliografía
Acemoglu, D. y Dell, M. (2009). Productivity Differences Between and Within Countries..NBER Working
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Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Empleo y
Movilidad
Territorial
Karla Menéses & Miguel Gutiérrez
Tipos de economía, heterogeneidad productiva y
ocupación en los Censos 2000 y 2011.
Resumen
La investigación analiza este cambio de estructura de los sectores productivos a partir de una
clasificación alternativa de las actividades económicas que ofrece mayor detalle del impacto que han
tenido estos cambios en el mercado laboral. Los resultados con el uso del censo buscan desagragar
territorialmente y precisar los hallazgos identificados con los datos de las Encuestas de Hogares,
los cuales apuntan la presencia de distintos tipos de economía con dinámicas propias y marcadas
desigualdades entre ellas.
Esto se traduce en una desventaja de las actividades tradicionales y para los trabajadores de
menor calificación. Además, el enfoque permite estimar la capacidad de esta tipología para medir
un desarrollo inclusivo de la actividad económica a lo interno del territorio nacional y de esta forma
sustentar la elaboración de políticas públicas.
La investigación con el Censo presenta Ponencia presentada en el Simposio Costa Rica a la luz del
Censo 2011. San José, INEC, Programa Estado de la Nación, Universidad de Costa Rica y CCSS.,
algunas limitaciones que dificultan profundizar en los hallazgos aún con una mayor depuración de la
base censal. Las principales limitaciones se originan en el alto porcentaje de personas ocupadas no
clasificadas a cinco dígitos en la rama de actividad. Además, el censo cuenta con una menor captación
de los ocupados en comparación con los registros de las encuestas de hogares. Ambas limitaciones
generan diferencias en los resultados, lo que acentúa el riesgo de una sobre o sub estimación de
algunas de los tipos identificados.
I. Introducción
El documento consta de tres secciones, además de la instrucción. La primera detalla los aspectos
metodológicos, fuentes de información y limitaciones en el tratamiento de los datos. En la segunda se
describen los resultados divididos en tres segmentos: el primero contiene antecedentes y la relación
entre producción y empleo; el segundo analiza las diferencias entre los tipos de economía, según
capacidad para generar empleo durante el periodo 2001-2011, perfil de la población ocupada y
alcance territorial. Finalmente, se presentan las conclusiones.
Los resultados de la presente investigación son complementarios de los hallazgos de los informes del
Estado de la Nación. Particularmente a partir del XV informe se emplea por primera vez la clasificación
de tipos de economía, a parir de una clasificación alternativa de las ramas de actividad (CIIU3). Estos
210
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
hallazgos fueron identificados a partir de los resultados de las encuestas de hogares, por lo que la
realización del Censo 2011 ofrece una oportunidad para precisarlos y desagregarlos.
Así las cosas, se confirma la consolidación de una estructura productiva con marcadas diferencias
en materia de productividad y desigualdades en el mercado de trabajo. El estilo de desarrollo seguido
por el país en los últimos veinte años, caracterizado por una activa integración internacional y políticas
públicas orientadas a la promoción de exportaciones y atracción de inversión extranjera directa (IED),
ha consolidado una tendencia que, cada vez con mayor profundidad, marca diferencias en los perfiles
de la población ocupada que se integra en las diversas actividades económicas. Adicionalmente, por
tratarse el tema con información censal es posible observar estos fenómenos en el territorio, con mayor
desagregación, aunque con algunas limitaciones que se consignan adelante.
II. Metodología
Esta investigación parte del análisis de la evolución del mercado laboral costarricense basada en
una propuesta alternativa de agrupación de las actividades productivas. Además, pretende identificar
las características de la inserción laboral en función de los cambios en la estructura productiva del
país, a partir de la consolidación del estilo de desarrollo impulsado en la década de los años ochenta.
La clasificación toma como fuente la Clasificación Industrial Internacional Uniforme (CIIU3).
Por otra parte, las labores que se han convertido en el motor de crecimiento y apoyo de política
pública, adquieren más dinamismo y se agrupan en la tipología de la “nueva economía”, tales como:
flores, piña, circuitos integrados, productos médicos, y servicios como los empresariales, financiaros,
turismo, entre otros. Finalmente, los servicios de apoyo consisten en actividades relacionadas con el
comercio, servicios profesionales, servicios especializados y del gobierno. Estas actividades apoyan
a ambos tipos de economía.
Estas tres grandes categorías se conforman a partir de 10 subgrupos (cuadro 1). De esta manera,
la formación de los subgrupos permite una mayor precisión de algunos sectores productivos que han
experimentado importantes transformaciones en el tipo de integración con la apertura comercial y los
cambios generados en el mercado local.
La agricultura es uno de los sectores transformados, en la cual coexisten actividades recientes que
se han dinamizado por ser parte del sector exportador (agro exportación, no tradicional), otras que
continuaron con el vínculo internacional desde años anteriores (agro exportación tradicional) y aquellas
que tienen como fuente principal de destino el mercado interno (economía agrícola para el mercado
interno).
Similar diferenciación se aplica para las ramas industriales, en ella se separan las actividades más
tradicionales (industria tradicional como textil, construcción, fabricación de papel, alimentos, bebidas,
entre otros.) de aquellas que surgieron o se fortalecieron con el establecimiento zonas francas, tales
como productos electrónicos, médicos, caucho, entre otros.
211
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
En el caso de los servicios, por la relevancia que han ido adquiriendo tanto en la producción como
en la generación de empleo, la clasificación se agrupa en 3 de los 10 subgrupos identificados. Los
de más reciente surgimiento y que se han ido sofisticando en las dos últimas décadas se agrupan en
la tipología de los “nuevos servicios”. Los otros dos subgrupos se diferencian en la especialización;
en uno se agrupan los servicios especializados y en el otro los que demandan un menor nivel de
especialización. El grupo de servicios especializados contiene los servicios profesionales como los
de medicina, arquitectura, ciencias sociales, leyes, entre otros. En los servicios no especializados se
incluye los servicios domésticos, lavandería, alquileres, entre otros.
Cuadro 1
Reclasificación de los sectores de la economía costarricense
Tipo de
Sector económico Sigla Ejemplos
economía
Según lo anterior, la “nueva economía” si bien responde en mucho a actividades relacionadas con
el mercado internacional como la exportación de bienes y servicios (zonas francas, turismo, sector
financiero, servicios empresariales), también incluye actividades que se han dinamizado en los últimos
años, como las relacionadas con el mercadeo, publicidad, informática, entre otras. En particular, para
el grupo de “zonas francas” no se incluyen a todas las actividades ahí realizadas, sino únicamente
a aquellas que tienen un peso importante en el dinamismo exportador y han surgido recientemente.
Los criterios adoptados para incluir las actividades en el grupo de zonas francas son los siguientes:
(Meneses, 2011):
212
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
• Que las exportaciones desde zonas francas sean mayores al 60% de las exportaciones totales
que realiza el país de ese producto. El punto de corte procura identificar las actividades que
inequívocamente emplean las zonas francas como principal fuente de producción, descartando
aquellas en las que el peso de la actividad exógena a estas zonas es todavía relevante. Para más
detalle sobre la metodología de clasificación ver Meneses, 2009 y Meneses, 2011.
Por otra parte, es importante mencionar algunas limitaciones que se presentaron para la elaboración
de este estudio. La primera se refiere al censo, el cual registró 312.786 personas menos en relación
con la población total estimada en las encuestas de hogares. La segunda es que el registro del total
de ocupados es menor a los registros obtenidos en las encuestas de hogares; para el caso del censo
del 2000,exisen 240.129 ocupados menos y 315.168 en el censo del 2011.
Finalmente, la tercera limitación consiste en que para el procesamiento y clasificación del censo del
2011 se excluyen al 15% de la población ocupada (259.599 personas), ya que no se lograron identificar
las actividades a cinco dígitos. Esta situación limita particularmente el análisis del sector agrícola; de
las 259.599 personas excluidas en este estudio una cuarta parte corresponde a la rama agrícola.
No obstante, las limitaciones antes indicadas no contradicen los hallazgos y antecedentes identificados
en investigaciones anteriores La limitación se presenta en la cuantificación de los cambios más no
en el sentido de ellos (tendencia). Es decir, de las 10 clasificaciones utilizadas, todas coinciden en
la tendencia cuando se comparan con los resultados entre los censos y las encuestas de hogares;
sin embargo, la magnitud de ellos presenta diferencias, las cuales son mayores para los sectores
relacionados con la agricultura (gráfico 1).
Para mejorar las estimaciones y precisar los resultados se recomienda principalmente recuperar los
valores perdidos, con el fin de reducir al máximo el porcentaje de personas que no cuentan con la
identificación de la rama a cinco dígitos. Además, trabajar con límites de confianza y no solo valores
centrales para resolver el problema en las diferencias de magnitudes que se registran entre ambas
fuentes de información.
213
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
Gráfico
1
Distribución
de
los
ocupados,
según
fuente
de
información
por
tipo
de
economía
2000,
2011
2001 2011
(b) Censos
16% Nueva
economía
14%
12%
10%
8%
6%
4%
2%
0%
EAMI EAT IT EANT IZF NS COM GOB OSNE OSE
2000 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de las encuestas de hogares y censos del INEC.
214
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
IV. Resultados
Los resultados de la presente investigación buscan complementar los hallazgos, identificados en las
encuestas de hogares. Estos hallazgos han sido ampliamente analizados en los informes del Estado
de la Nación, particularmente a partir del XV informe, donde se emplea por primera vez la metodología
aquí planteada.
Algunos de los resultados indicados en estos informes, confirman la consolidación de una estructura
productiva con marcadas diferencias en materia de productividad y desigualdades en el mercado
de trabajo. En este sentido, el estilo de desarrollo seguido por el país en los últimos veinte años,
caracterizado por una activa integración internacional y políticas públicas orientadas a la promoción
de exportaciones y atracción de inversión extranjera directa (IED), ha consolidado una tendencia, que
cada vez, con mayor profundidad, marca diferencias en los perfiles de la población ocupada, la cual
se integra en cada una de las actividades económicas.
Por tanto, la tendencia apunta hacia la creación de una “nueva economía”, cuyas actividades han
surgido con el apoyo de una activa participación de la política pública. Además, emplean la mano de
obra con mayor calificación, ofrecen los mejores salarios, pero tienen una reducida capacidad para
generar empleo. La “nueva economía” emplea aproximadamente al 20% de la población ocupada.
Por el contrario, existen otras actividades, menos dinámicas, con desarraigo de los sectores
exportadores, las cuales emplean a personal de baja calificación, pero con una alta capacidad para
generar trabajo (aproximadamente el 60% de los ocupados), en estas actividades se encuentran las
relacionadas con la “vieja economía” y los “servicios de apoyo” no especializados (Programa Estado
de la Nación, 2009, 2010 y 2011).
Esta tendencia acrecienta las desigualdades en el mercado de trabajo y produce una economía
dual, al restarle posibilidades a las personas de menor calificación y a las actividades desvinculadas
al comercio internacional.
En el primer caso, para determinar el aporte de las ramas al crecimiento del Producto interno Bruto,
se identifican tres grupos: a) Los de mayor dinamismo (comunicaciones, servicios empresariales,
sector financiero), b) Las actividades tradicionales (agro, construcción y comercio) y c) La industria
manufacturera, por ser un campo que alberga tanto a sectores dinámicos como a tradicionales, pero
de difícil desagregación para fines de este ejercicio.
Con esta agrupación se observa que para los años 2001-2011, los sectores dinámicos aportaron con
el 52% del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), pero con apenas el 15% del empleo, para el
caso de los sectores tradicionales el patrón anterior se invierte, su aporte al crecimiento es del 24% y
la generación de empleo es del 45%. Finalmente, en la industria el aporte ronda el 15% para ambos
casos.
En relación con las diferencias en materia de productividad, nuevamente los sectores dinámicos son
las más productivas y con una tendencias al aumento, mientras que los más tradicionales; además de
presentar los menores niveles de productividad, en algunos casos, están estancados (gráfico 2).
215
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
Gráfico 2.2
Aporte al empleo, y crecimiento y evolución del producto por persona
2001 - 2011
50%
40%
30%
20%
10%
0%
Sectorés dinámicos Sectores tradicionales Industria manufacturera
Crecimiento Crecimiento
Gráfico 2
Aporte al empleo, crecimiento y evolución del producto por persona
2001 - 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de las encuestas de hogares del INEC y cifras de cuentas
Evolución del producto por persona
nacionales del BCCR.
4
0
2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de las encuestas de hogares del INEC y cifras de cuentas
nacionales del BCCR.
216
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Esta tendencia no es única en Costa Rica, se replica en la mayoría de países de América Latina (Cepal,
2011), en donde los sectores que tienen mayor aporte al crecimiento son los de menor capacidad para
generar empleo. Por el contrario, los sectores de baja productividad son lo que más trabajo ofrecen,
pero su contribución al crecimiento es baja (gráfico 3).
Gráfico 3
Aporte al PIB y al empleo, según estratos de productividad de dieciocho países
de América Latina
2009
La tendencia
Fuente: CEPAL 2011.arriba
señalada, se complementa con el análisis que arrojan los datos censales;
además, permite profundizar en algunos aspectos relacionados con el alcance territorial, que tienen
las actividades económicas para generar oportunidades de empleo. A continuación, el documento se
centrará en complementar los hallazgos que ya se han venido trabajando en estudios anteriores.
El primer hallazgo tiene que ver con el cambio en la estructura de los ocupados, según los tipos
de economía. Los sectores dinámicos son los mayores contribuyentes al crecimiento económico,
pero tienen poca capacidad para generar empleo. Los sectores que concentran la mayor parte de la
población ocupada están en los “servicios de apoyo”, principalmente relacionados con el comercio y
los no especializados, y en la “vieja economía”.
El segundo hallazgo muestra que los empleos de la “nueva economía” son los de mayor calificación,
remuneración y garantías sociales. Finalmente, el tercer de los hallazgos consiste en el alcance territorial
en la creación de oportunidades laborales de cada tipo de economía.
“Nueva economía” con bajo impacto en empleo aunque con concentración de políticas
En esta sección se describen los resultados que arrojan los datos censales en relación con la estructura
de la población ocupada. Los hallazgos muestran que los “servicios de apoyo”, en su mayoría los no
especializados, y la “vieja economía” concentran la mayor parte de la población ocupada, mientras
que las actividades de la “nueva economía”, aunque tienen el mayor aporte al crecimiento del PIB, son
modestas en la capacidad para generar empleo.
Los logros alcanzados por el país en materia de apertura de mercados, se reflejan en el aporte que
tienen actualmente las exportaciones en el crecimiento económico y en el posicionamiento que ha
logrado Costa Rica para convertirse en un lugar atractivo para el IED. Estos logros se han consolidado
con el respaldo de una plataforma institucional fuerte que ha permitido el despliegue de acciones
coordinadas en respuesta a los objetivos planteados de llegar a más mercados, diversificar la estructura
productiva exportable y atraer IED de alto contenido tecnológico, así lo documentan ampliamente los
diferentes informes de las entidades responsables, COMEX, Procomer y Cinde.
Por su parte, el sector de agro exportación no tradicional mantiene la tendencia de todo el sector
(crece levemente). Por el contrario, las actividades relacionadas con la industria de la “nueva economía”
presentan una reducción en la generación de empleo. Estas tendencias como se documentó en el
apartado metodológico son iguales a las obtenidas con los registros de las encuestas, aunque difieren
en su magnitud. El comportamiento agregado de este tipo de economía es un aporte que no supera el
20% de la generación de empleo con un relativo estancamiento desde el 2002.
En cuanto a los sectores relacionados con la “vieja economía”, que además, se enmarcan en un
escenario de desgaste institucional y abandono de la política pública responsable de fomentar a
estos sectores productivos, tienen una tendencia generalizada de reducción en la participación del
empleo, aunque vale rescatar que su importancia como fuente de trabajo es similar a la generada por
la “nueva economía” (20%). Por ejemplo, la industria tradicional pasó de representar el 16% del empleo
total al 14%. Para el caso la agricultura para el mercado interno y la agro exportación tradicional, las
reducciones son mayores aunque por las limitaciones de clasificación a cinco dígitos que presenta
el censo del 2011 no es posible validar cuánto de la magnitud de la caía registrada responde al sub
registro o a la propia dinámica económica del sector (gráfico 1b y 4).
218
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 4
Participación de los ocupados, según tipos de economía
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
Vieja economía Nueva economía Servicios de apoyo
2000 2011
Finalmente, el mayor generador de empleo en el país y con una tendencia creciente es el de las
actividades de los “servicios de apoyo”, dentro de ellas destacan los servicios no especializados y las
actividades del comercio (60% de los ocupados en esta tipología), ramas que en su mayor parte están
formadas por personas de menor calificación e informalidad (Programa Estado de la Nación 2010,
2011).
El segundo hallazgo que pretende complementar esta investigación es el relacionado con la dualidad
que el estilo de desarrollo ha consolidado en el mercado de trabajo. La educación y el acceso a
herramientas de formación como manejo de idiomas y tecnologías de información que mejoran la
formación profesional de la población se muestran como un determinante sustancial para que los
trabajadores se empleen en trabajos de mayor remuneración y con mejores condiciones laborales.
Además, estos factores también determinan la posibilidad de movilidad entre los tipos de economía. En
la “nueva economía” se encuentran los ocupados con los mayores niveles de calificación, condiciones
laborales y remuneraciones”, por el contrario en la “vieja economía” y en la mayor parte de los “servicios
de apoyo” (excluyendo al gobierno y algunos servicios especializados) el patrón se invierte.
Según nivel de calificación, considerado como las personas que tienen secundaria completa o más,
los sectores que presentan el mayor porcentaje de ocupados con esta característica son dos grupos de
la tipología de los “servicios de apoyo” y dos de la “nueva economía”, estos grupos son los siguientes:
el gobierno (75,2%) y servicios especializados (63,6%) y los nuevos servicios (69,6%) e industria de
zonas francas (40,6%).
219
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
Por el contrario, en la “vieja economía” los mayores porcentajes se concentran en los ocupados de
baja calificación. Por ejemplo, en la agricultura tanto para el mercado interno como la de exportación
tradicional el porcentaje de personal calificado ronda el 10% y en la industria tradicional alcanza 26%.
La excepción de la “nueva economía” en materia de calificación es la agro exportación no tradicional,
donde el porcentaje no supera el 13%.
En términos generales, la “nueva economía” tiene una población ocupada calificada de 50%, en los
“servicios de apoyo” el porcentaje es del 49% y en la “vieja economía” el valor es del 21% (gráfico 5).
Gráfico 5
Perfil de calificación y acceso a TIC de los ocupados
2011
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
Personal Tenencia título Tenencia compu/internet
calificado
Fuente: Elaboración propia con datos del censo 2011 del INEC ación propia con datos del censo 2011
del INEC.
En el gráfico anterior también se hace evidente las ventajas de la “nueva economía” en algunas
herramientas que mejoran el perfil profesional de los ocupados. Por ejemplo, en el logro educativo
por medio de la tenencia de títulos y el acceso a Internet y a computadoras. Las mayores brechas se
encuentran en la tenencia de título, aunque, en términos generales, el porcentaje de la población que lo
obtiene es bajo. En la “nueva economía” y “servicios de apoyo” poco más del 30% ha logrado obtener
un título, en contraste con el 10% de los trabajadores de la “vieja economía”. El acceso a Internet y a
computadoras muestra un patrón similar en detrimento de las actividades más tradicionales, donde el
porcentaje ronda el 30% y para las otras dos tipologías, el valor es de poco más del 50%.
A las desigualdades encontradas entre los diferentes tipos de economía en los niveles de
calificación, tenencia de titulo y acceso a Internet, se le suman las brechas existentes en condiciones
de aseguramiento y remuneraciones. Los resultados mantienen la tendencia consolidando la presencia
de un mercado de trabajo dual con marcadas desigualdades. La “nueva economía” es la que tiene en
220
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
todas sus actividades niveles similares de ocupados asegurados y con los mayores porcentajes (91%)
en relación a los otros tipos de economía (87% en los servicios de apoyo y 76% en la vieja economía)
excluyendo al sector público (gráfico 5).
Gráfico 6
Porcentaje de ocupados asegurados por tipo de economía
Censo 2011
100%
90%
80%
70%
60%
50%
EAMI EAT IT EANT ZF NS COM GOB SNE SE
Vieja economía Nueva economía Servicios de apoyo
Fuente: Elaboración propia con datos del censo 2011 del INEC.
Finalmente, se utilizan los datos de ingresos obtenidos en las encuestas de hogares para completar
los hallazgos que confirman la segmentación del mercado de trabajo. Según Meneses (2012) “El ingreso
de los ocupados de la “nueva economía” es 1,5 veces el de los de la “vieja economía”, diferencia que
mantiene una tendencia creciente en la última década. Este patrón, a su vez se refleja en la distribución
de los ocupados por quintiles de ingreso; por ejemplo, los trabajadores ubicados en el quintil de menores
ingresos son el doble entre la “vieja” y “nueva” economía; en la primera, este grupo representó el 20,7%
de los ocupados en comparación al 10,8% de la segunda (datos para el 2011). Estas proporciones se
invierten en el último quintil (mayores ingresos) con 11,5% y 24,3% respectivamente”.
Uno de los principales aportes que ofrece el censo para el análisis utilizado en esta investigación, es
la identificación del alcance territorial que tiene cada tipo de economía en materia de generación de
empleo. Los hallazgos documentados en el XVIII informe Estado de la Nación muestran que la capacidad
para producir riqueza en el país está altamente concentrada en pocos cantones (10 cantones) que en
su mayoría son de la Región Central. El mismo patrón se observa cuando se analiza territorialmente el
perfil de calificación de la población y acceso al uso de tecnologías de la información, ambos están
concentrados en la región central mayoritariamente.
En relación con el empleo, varios patrones destacan con el procesamiento por tipo de economía
de los datos censales. Anteriormente, se indicó que la “vieja economía” ha perdido su participación
en la generación de empleo, aunque sigue teniendo importante de participación de una quinta parte
221
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
de los trabajadores del país. Además, presenta un amplio alcance territorial para generar empleo,
las actividades que forman parte de este tipo de economía están presentes en todas las regiones. La
reducción se observa principalmente en los sectores de la agro exportación tradicional en las regiones
Huetar Atlántica y Brunca (Mapa 1).
Una posible hipótesis para algunas de estas actividades consiste en su traslado a las ramas de agro
exportación no tradicional, ya que estas más bien han aumentado su alcance territorial dentro de la
“nueva economía” y los perfiles de calificación de los ocupados son similares entre todos los grupos
relacionados con el sector agrícola. Sin embargo, es una hipótesis que requiere de mayor investigación
empezando con la mejora en la captura de información de las actividades del sector agrícola por parte
de los censos, ya que como se indico en el apartado metodológico los resultados de este sector deben
ser tomados con cautela, ya que combinan un sub registro de información con los cambios económicos
sin poder separar entre ambos.
Mapa 1. Vieja economía: Distribución del número de ocupados por cantón. 2000 y 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
222
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Los cambios observados en las actividades de la “nueva economía”, muestran una alta concentración
en la región Central, pero con una expansión territorial en los cantones de las regiones Chorotega y
Huetar atlántica, explicada por el crecimiento de los “nuevos servicios” relacionados con el turismo
y por la ya mencionada expansión de la agro exportación no tradicional. Por su parte, la industria de
zonas francas no ha mostrado mayores cambios (Mapa 2).
Mapa 2. Nueva economía: Distribución del número de ocupados por cantón. 2000 y 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
223
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez
Las actividades que muestran mayores cambios y expansión en el territorio son la vinculadas a los
“servicios de apoyo”, principalmente los servicios no especializados (mapa 3).
Mapa 3. Servicios de apoyo: Distribución del número de ocupados por cantón. 2000 y 2011
Fuente: Elaboración propia con datos de los Censos de Población del INEC.
224
Empleo y Movilidad Territorial Menéses & Gutiérrez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
V. Conclusiones
Por otra parte, la “Vieja economía” y servicios de apoyo (comercio y servicios no especializados) son
grandes generadores de empleo, pero con trabajadores de baja calificación que limita su integración
a sectores dinámicos.
Además, existen marcadas diferencias del alcance territorial por tipo de economía:
En conclusión, es necesario mejorar la captura de información para las ramas de actividad económica.
Especialmente las vinculadas al sector agropecuario. Importante de destacar, no solo para comparar
con otras fuentes de información e incluso con el censo anterior, sino también para aportar insumos
de información valiosos para la toma de decisiones de política pública. Principalmente porque es un
sector que contiene mano de obra poco calificada y vulnerable.
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Resumen
Por primera vez en el censo del 2011 se consultó a las personas sobre la localización de sus trabajos.
Esto permitió crear matrices origen y destino para representar viajes entre el hogar y el trabajo, y
asociar distancias entre las distintas unidades espaciales (cantones).
Los principales generadores de viajes son San José (123208), Alajuela (105173), Desamparados
(87273), San Carlos (61747) y Cartago (58760). . Por otro lado, los principales destinos son San José
(254581), Alajuela (97493), Heredia (72121), San Carlos (60650) y Cartago (53907). Para el cálculo de
distancias se tomó como orígenes y destinos el distrito central de cada cantón, pues el censo solo tiene
información del cantón de trabajo, no del distrito.
Así las cosas, el modelo general para la GAM muestra que por cada año de estudio aumenta en un
5% la distancia de viaje. En cuanto al género, las mujeres viajan aproximadamente un 14% menos en
distancia que los hombres. Los esposos o esposas viajan un 12% menos que sus compañeros (as)
jefes de familia, los hijos un 6% menos y los otros miembros de la familia un 15% menos en distancia.
Con respecto al tipo de ocupación la diferencia es sustancial; los no profesionales viajan en promedio
34% menos distancia que los profesionales. Por categoría de ocupación los empleados viajan 116% más
que los patronos. Además, las ramas que presentaron mayores distancias de viaje son organizaciones
extraterritoriales, área financiera y de seguros, e información y comunicación, con 127%, 121% y 107%
más que los trabajadores en agricultura respectivamente.
I. Introducción
La interrogante sobre el lugar de trabajo de las personas censadas en junio del 2011 (INEC, 2012)
abrió unas enormes posibilidades de investigación en las interacciones entre transporte, uso del suelo
y actividades productivas en Costa Rica.
La pregunta tenía limitaciones, pues aunque incluía la posibilidad de contestar la opción “muy cerca
del hogar”, la siguiente categoría era “el propio cantón”. Esto limitó las oportunidades de investigar en
cantones muy grandes como San Carlos y Pérez Zeledón, aunque no perjudica, tanto en los cantones
de la Gran Área Metropolitana (GAM), especialmente si son pequeños.
La matriz de Origen-Destino generada a partir del censo muestra que los principales generadores de
viajes son San José, Alajuela, Desamparados, San Carlos y Cartago. Así como, los principales destinos
son San José, Alajuela, Heredia, San Carlos y Cartago. Además, el censo muestra que los principales
flujos intercantonales en términos de viajes al trabajo se dan en la GAM y son Desamparados-San José,
Goicoechea-San José y Heredia-San José.
Este trabajo explora la distancia del hogar al trabajo usando una gran diversidad de variables
independientes que nos pueden ayudar a entender la razón de estos viajes.
Las variables escogidas resultaron significativas, la mayoría con altísimos niveles de confiabilidad
y con signos esperables. A pesar de las limitaciones de los datos y de la metodología utilizada para
adaptarse a los mismos, el trabajo muestra distancias diferentes de viaje al lugar de trabajo, de acuerdo
con las características de las personas y su rol en el hogar y en el trabajo.
Este trabajo exploratorio permite probar de nuevo con una nueva fuente de datos y metodología el
alto grado de multinuclearidad urbana de la GAM dada la enorme proporción de personas que trabajan
en su propia área metropolitana.
El censo permite analizar y probar el impacto de muchas características de las personas y familias.
En este trabajo se exploraron variables como el sexo, la edad, la rama de actividad, el ser jefe de
familia, la ocupación, cargo laboral como explicaciones de distancias en el viaje al trabajo.
En este sentido se determinó que los jefes de familia y los profesionales viajan más. Los patronos y
los que tienen vehículos viajan menos, lo cual es un resultado sorprendente que requiere más análisis.
Por su parte, los agricultores, pesqueros y mineros viajan menos y los trabajadores que viajan más
están en actividades financieras de información y administrativas.
Más allá de los resultados de los modelos mostrados, es posible identificar algunos aspectos muy
importantes tales como:
• Porcentaje de la población que trabaja a la par de la vivienda es un 10% para Costa Rica y llega a
valores del 30% en algunos distritos rurales.
• Las mujeres se trasladan distancias menores al trabajo en parte porque trabajan más en la casa,
aunque una explicación en otros trabajos es porque tienen otras responsabilidades con los niños
ya sea en el hogar o cuando son escolares.
II. Metodología
Es importante destacar que este trabajo no pretende ser un modelo exhaustivo de generación de
viajes (Henher & Button, 2000; Ortuzar & Willumsen 2002), sino que busca explorar los determinantes de
227
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
Las matrices origen-destino (O-D) son el punto de partida del trabajo y proveen una forma condensada
de analizar los datos de viajes del hogar al trabajo, provenientes del Censo de Población y Vivienda
del 2011.
En este sentido, las matrices O-D estimadas a partir de los datos del censo son una aproximación
de las matrices reales, puesto que el censo en realidad no preguntó por el viaje del hogar al trabajo,
sino que recoge información del lugar de habitación de los trabajadores censados, así como el cantón
donde trabajan. Por tanto, es de esperar que en la gran mayoría de los casos, el lugar de habitación y
el lugar de trabajo correspondan a los puntos de origen y destino para los viajes al trabajo.
Otro elemento lo constituye la escala espacial de la información: la menor unidad a la que pueden
mapearse los datos es la de cantón. Por lo anterior, los viajes dentro de un cantón que se muestran
en la diagonal de la matriz, pueden representar algunos pocos metros o kilómetros para cantones
pequeños o hasta decenas de kilómetros para cantones grandes como Pérez Zeledón y San Carlos.
La matriz O-D para todo el país está comprendida de 6561 celdas (81 por 81 cantones), mientras
la matriz para la GAM contiene 961 celdas (31 por 31 cantones en la Gran Área Metropolitana, GAM).
Para el cálculo de distancias de viaje se tomó como orígenes y destinos el distrito central de cada
cantón, pues el censo solo tiene información del cantón de trabajo, no del distrito. Las distancias entre
cantones fueron calculadas como distancias recorridas sobre la red nacional, a partir del uso de análisis
de redes en Sistemas de Información Geográfica (SIG). Esto, por supuesto, es una aproximación de las
distancias reales recorridas, dado que se conocen con detalle los destinos, y se supone que todos los
usuarios viajan por la misma ruta para cada par de la matriz O-D. Otro resultado poco realista de esta
aproximación es que los trabajadores que laboran en el mismo cantón donde trabajan tienen tiempo
de viaje igual a cero.
Los paquetes de redes de muchos sistemas de información geográfica, incluyendo ArcGIS, utilizado
en este trabajo (ESRI, 2011), emplean la teoría de grafos para encontrar las distancias más cortas en la
red. ArcGIS en particular utiliza una variante del algoritmo de búsqueda de grafos Dijkstra (1959) para
encontrar la ruta más corta entre cada par de la matriz O-D.
Es claro que no todos los usuarios utilizan la misma ruta para viajar entre cualesquiera de dos
cantones en el país, ni que la ruta de menor distancia es en realidad la ruta óptima desde el punto
de vista del usuario. En general, la asignación de rutas en los modelos de demanda de transporte
depende de al menos 4 factores: tiempo de viaje, costo de viaje, comodidad y nivel de servicio (Dickey,
1983). Sin embargo, estás suposiciones son consideradas válidas para aproximar el problema, dada la
información disponible y son utilizadas rutinariamente para modelar la demanda de viajes.
228
Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Creación de mapas
La creación de los mapas O-D significó un reto en términos de representación de datos espaciales.
No solo los mapas constan de 81 puntos de origen-destino, sino también los flujos podrían ser
representados en 6480 líneas posibles. La matriz O-D tenía en realidad 4550 celdas diferentes de cero
lo que significa aún 4469 líneas de flujo. Ante este panorama, se decidió seleccionar un número de
pares de la matriz, ordenados por cantidad de viajes. Esto representará un alto porcentaje del total de
viajes, pero un bajo porcentaje de las líneas de flujo.
Afortunadamente, por la naturaleza de los datos, un gran porcentaje de los viajes se realizan en un
pequeño número de celdas de la matriz. Así para los datos de total de viajes al trabajo, el 90% de los
viajes se realiza en las 271 celdas más altas de la matriz; los viajes dentro del mismo cantón para los
81 cantones y 190 líneas de flujo.
De lo anterior se desprende que los mapas deben incorporar, tanto las líneas de flujo como los viajes
dentro del mismo cantón, representados por un punto localizado en la cabecera cantonal. Escalas de
colores y tamaño (para los círculos), y espesor (para las líneas) complementan la representación de la
cantidad de viajes para el mapa. Los códigos de color de la matriz y los mapas son coincidentes para
simplificar la interpretación de los datos.
Una vez que las distancias de viaje fueron obtenidas para cada par de la matriz O-D, la información
se unió a la base de datos del censo de trabajadores . Para ello se utilizaron los códigos de cantón
de origen y destino. Dadas las condiciones de flujos intercantonales bajos fuera de la GAM, se decidió
crear modelos para la GAM, en relación con las distancias al trabajo, para los trabajadores residentes
en un cantón diferente al de su destino laboral.
La variable dependiente del modelo es la distancia de viaje, para esto se empleó una transformación
logarítmica. Las variables independientes estudiadas fueron: edad de la persona, cantidad de hijos y
años de estudio, para el caso de variables continuas. Por otra parte, las variables categóricas incluidas
en el modelo son género (masculino es la base), parentesco (jefe (a) de familia es la base, esposo(a)
o compañero (a), hijo (a), y otros), tipo de ocupación (profesionales y no profesionales) categoría de
ocupación (patrono y empleado), tenencia de vehículo, tenencia de moto y rama de actividad. Además,
U un modelo convencional de regresión de mínimos cuadrados fue utilizado para la estimación de los
coeficientes.
III. Resultados
El censo reporta 1 674 275 trabajadores ocupados durante la semana previa al censo. De ellos,
965 353 habitan en cantones de la GAM, lo que equivale a un 57,7% de la fuerza laboral ocupada del
país. Además, los cantones de la GAM atraen 947 214 trabajadores de los cuales 907 751 provienen
de estos cantones, lo cual indica que un 95.8% de la demanda laboral de la GAM es suplida por
habitantes de la misma región.
El Mapa 1 muestra la distribución del lugar de trabajo por cantón para el total de trabajadores, según
el censo del 2011. Fuera de la GAM la mayoría de los cantones presentan más de tres cuartas partes
de trabajadores que habitan dentro del mismo cantón. El caso más extremo es Talamanca (93,42%). El
229
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
carácter rural de estas zonas aunado al gran tamaño de muchos de estos cantones puede explicar en
parte esta situación.
Como lo muestra el Cuadro 1, el cantón con menor porcentaje de trabajadores que habitan en el
mismo cantón es San Pablo con 26,4%. El mapa muestra además los más importantes cantones
“dormitorio” en la GAM:
• San José: Goicoechea, Coronado, Montes de Oca, Moravia, Curridabat, Alajuelita, Tibás y
Desamparados.
• Heredia: San Pablo, Santa Bárbara, Flores, Barva, San Rafael, San Isidro, y Santo Domingo.
• Cartago: La Unión.
Por el contrario, en el país, alrededor de un 10% de los trabajadores laboran en su vivienda o a la par
de esta. En la GAM, un 50% de los trabajadores laboran en un cantón diferente al que habitan, mientras
fuera de la GAM esta cifra disminuye a solo un 18%.
El Mapa 2, Porcentaje de trabajadores que laboran fuera de su cantón de residencia por distrito,
permite visualizar un mejor panorama del fenómeno de lugares dormitorio en la GAM. Claramente,
los distritos más cercanos al cantón central de San José, concentran un porcentaje importante de los
trabajadores que habitan fuera del cantón donde laboran.
230
Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 1. Distribución del lugar de trabajo por Cantón, Censo del 2011
.
de trabajo por Cantón, LA CRUZ
POCOCI
GUATUSO
LIBERIA
SAN CARLOS
BAGACES SARAPIQUI
TILARAN
Leyenda
CARRILLO
CANAS POCOCI
Lugar de Trabajo GRECIA
ABANGARES
Total ALFARO RUIZ VALVERDE VEGA GUACIMO
SIQUIRRES
SANTA CRUZ
POAS
31 000 NICOYA PUNTARENAS
MONTES DE ORO
SAN RAMON
ESPARZA GRECIA
en esta vivienda
MATINA
HOJANCHA
en este cantón SAN MATEO
NANDAYURE ATENAS
en otro cantón OROTINA ALVARADO
TURRIALBA
JIMENEZ
en varios cantones GARABITO
PURISCAL
TURRUBARES
en otro país PUNTARENAS LIMON
GARABITO
AGUIRRE TALAMANCA
PEREZ ZELEDON
SAN RAFAEL
ESCAZU OSA
LA UNION
SANTA ANA
GOLFITO
OREAMUNO
CURRIDABAT
CORREDORES
ALAJUELITA
DESAMPARADOS CARTAGO
MORA GOLFITO
GOLFITO
PARAISO
ASERRI
ACOSTA
EL GUARCO
Cuadro 1
Porcentaje de trabajadores por ubicación del trabajo, Censo del 2011
Continuación Cuadro 1
Continuación Cuadro 1
Mapa 2. Porcentaje de trabajadores que laboran fuera de su cantón de residencia por distrito
Así las cosas, sobresalen al sur los distritos del cantón de Alajuelita, así como los distritos del
lado norte del cantón de Desamparados. Al este todos los distritos de Curridabat, Montes de Oca y
Goicoechea funcionan también como dormitorios con porcentaje de trabajadores que laboran fueran
del cantón mayor al 50%. Del lado norte sobresalen los distritos de Tibás y Santo Domingo; además
de los distritos de los cantones al norte de Heredia, principalmente San Isidro, San Rafael y Barva. Es
importante notar que los distritos hacia el lado oeste de San José (Cantones de Escazú y Santa Ana,
principalmente), presentan porcentajes relativamente más bajos que no superan el 50%.
En cuanto al panorama fuera de la GAM, la gran mayoría de los distritos presentan un porcentaje
bajo de trabajadores que laboran fuera del cantón donde residen, con valores que en ningún caso
sobrepasan el 50%. Fuera de la GAM, el distrito de Mayorga (Cantón de Liberia) presenta el valor más
alto de trabajadores fuera del cantón, con un 48%. Otros distritos importantes en este aspecto, incluyen
Pocora y Mercedes de Guácimo, en la región Atlántica; Juan Viñas y Pejibaye de Jiménez, Espíritu
Santo, Macacona y San Juan Grande de Esparza, distritos del cantón de Naranjo, Belén de Carrillo y
Nacáscolo de Liberia, entre otros.
235
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
La matriz de Origen-Destino para todos los viajes al lugar de trabajo fue generada para el análisis.
El tamaño de la matriz total para el país presenta un reto en la interpretación y análisis de los datos.
Por tanto, se acompaña de un cuadro resumen con los pares de la matriz ordenados por cantidad de
trabajadores que agrupan la mitad de los trabajadores del país (Cuadro 2).
Además, se presentan algunos pares de la matriz que corresponden a porcentajes importantes de los
trabajadores. También, como complemento de la tabla, se incluye el mapa que representa los pares
de la matriz más altos, los cuales agrupan al 90% de los trabajadores.
Por otro lado, el Cuadro 3 muestra la matriz O-D para los cantones de la GAM. En este se puede
estimar la cantidad de viajes que tienen como destino las áreas metropolitanas de San José, Heredia,
Alajuela y Cartago. En el extremo superior, el 90,4% de los viajes que tienen como destino el Área
Metropolitana de Cartago se generan dentro de la misma área. En el otro extremo, el 65.3% de los
viajes, cuyo destino es el Área Metropolitana de Heredia, se generan dentro de los cantones de la
provincia que pertenecen a la GAM. En el medio se encuentran las Áreas metropolitanas de San José
y Alajuela, con un 77,5% y 76,0% respectivamente de los viajes de destino que se originan dentro de
la misma área metropolitana.
Lo anterior refleja el alto grado de multinuclearidad urbana de la GAM, dada la enorme proporción de
personas que trabajan en su propia zona metropolitana. Para efectos de este trabajo, se considera que
el área metropolitana de las cuatro cabeceras de provincia dentro de la GAM está compuesta por los
cantones dentro de la GAM de cada una de las provincias.
Los diez pares más altos corresponden a la diagonal de la matriz (trabajadores que viven y laboran
en el mismo cantón), los cuales se presentan en este orden: San José, Alajuela, San Carlos, Pérez
Zeledón, Pococí, Cartago, Desamparados, Puntarenas, Heredia y Limón. Por su parte, en el onceavo
puesto se encuentra el primer par fuera de la diagonal; trabajadores que viajan de Desamparados a
San José.
El resto de la matriz que agrupa al 50% de la población empleada corresponde a los primeros 34
pares y de estos solo los pares 27 Goicoechea-San José y 33 Heredia-San José se presentan fuera
de la diagonal. De los 4551 pares efectivos de la matriz (diferentes de cero), los primeros 271 pares
incluyen el 90% de los trabajadores. Por tal motivo, el mapa presenta estos primeros 271 pares en
forma gráfica.
236
Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 2
Origen-Destino y porcentaje acumulado de trabajadores Censo del 2011
DESTINO
% de
Sub Total origenes
Total
Mora
Poás
Tibás
Aserrí
GAM dentro de
Atenas
Escazú
Moravia
Alajuela
Alajuelita
San José
ORIGEN
Santa Ana
Curridabat
la GAM
Goicoechea
Desamparados
Montes de Oca
Vázquez de Coronado
San José 79459 6601 2253 158 84 2597 2724 622 218 1852 688 3672 2054 2853 41 16 105892 123208 85,9%
Escazú 6039 14271 171 10 56 219 1220 86 19 171 67 504 176 477 7 2 23495 26403 89,0%
Desamparados 24820 2131 36509 632 24 1409 1524 405 169 1273 518 2432 1951 1340 27 6 75170 87273 86,1%
Aserrí 6293 391 2002 9308 3 249 385 91 34 267 112 516 419 294 5 2 20371 22905 88,9%
Mora 2095 834 77 3 4958 50 1165 14 5 72 11 131 37 227 9 1 9689 10935 88,6%
Goicoechea 11909 1169 681 34 19 20309 633 65 961 1531 1595 2625 798 767 6 4 43106 49590 86,9%
Santa Ana 4016 1744 134 12 285 155 12781 18 13 187 29 305 106 547 8 4 20344 23040 88,3%
Alajuelita 10289 1786 810 58 36 636 657 9865 50 525 173 694 384 540 10 2 26515 30609 86,6%
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Vázquez de Coronado 6201 472 244 8 14 2060 319 36 10452 655 1143 1279 455 379 2 1 23720 27035 87,7%
Tibás 7675 779 331 20 24 843 472 56 109 11267 443 880 288 491 3 1 23682 28234 83,9%
Moravia 5959 502 235 8 10 1889 367 37 503 940 9524 1278 385 358 2 2 21999 25860 85,1%
Montes de Oca 5471 542 299 13 14 835 390 33 106 308 304 11021 791 311 11 4 20453 23727 86,2%
Curridabat 7092 721 666 33 10 706 468 46 72 442 230 2155 12088 346 21 1 25097 29671 84,6%
Alajuela 10597 1499 184 50 34 312 1986 64 44 373 138 726 220 68250 144 450 85071 105173 80,9%
Atenas 820 57 41 1 5 12 79 3 1 35 3 34 5 1110 6542 9 8757 9952 88,0%
Poás 575 52 22 1 1 16 63 1 0 72 6 44 13 2458 12 6198 9534 11258 84,7%
Cartago 7112 423 554 49 1 282 306 44 51 310 131 1203 1393 381 13 4 12257 58760 20,9%
Paraíso 1813 105 83 4 2 82 58 6 18 137 36 302 350 139 1 0 3136 21517 14,6%
La Unión 10287 737 1010 45 9 728 571 71 95 496 311 2900 2961 485 12 4 20722 43014 48,2%
Alvarado 193 8 5 1 0 8 2 0 2 9 2 26 50 6 0 0 312 5630 5,5%
Oreamuno 1575 109 57 1 1 62 67 8 9 80 38 265 321 88 0 0 2681 17955 14,9%
El Guarco 1376 88 123 0 3 66 60 6 8 69 33 265 263 118 0 0 2478 16702 14,8%
Heredia 10892 1211 263 10 17 445 929 47 73 780 224 939 308 2700 23 14 18875 55309 34,1%
Barva 2431 173 58 1 8 116 215 11 31 236 53 203 89 588 2 7 4222 17843 23,7%
Santo Domingo 3909 275 137 10 5 390 251 28 67 774 290 431 140 379 4 2 7092 17814 39,8%
Santa Bárbara 1798 138 78 0 3 45 118 7 10 119 27 80 52 1608 23 36 4142 15218 27,2%
San Rafael 2840 256 74 3 10 128 222 12 18 270 92 232 82 670 5 8 4922 19963 24,7%
San Isidro 1830 128 51 2 4 140 79 5 25 250 88 170 50 191 1 3 3017 9285 32,5%
Belén 1350 230 28 5 11 44 389 2 6 72 19 87 36 834 9 8 3130 9980 31,4%
Flores 1345 129 28 0 5 59 171 2 11 86 17 100 29 654 4 5 2645 9004 29,4%
San Pablo 2686 196 52 2 7 178 202 21 24 307 71 239 84 375 2 3 4449 12486 35,6%
Sub Total GAM 240747 37757 47260 10482 5663 35070 28873 11712 13204 23965 16416 35738 26378 89964 6949 6797 636975 965353 66,0%
Total (País) 254581 39166 48973 10772 6273 35526 30502 11825 13331 24509 16592 36634 26883 97493 7276 7358 667694 1674275 39,9%
% destinos dentro de
la GAM 94,6% 96,4% 96,5% 97,3% 90,3% 98,7% 94,7% 99,0% 99,0% 97,8% 98,9% 97,6% 98,1% 92,3% 95,5% 92,4% 95,4% 57,7%
DESTINO
% de
Sub Total origenes
Total
Belén
Barva
Flores
GAM dentro de
Paraíso
Heredia
Cartago
La Unión
Alvarado
El Guarco
San Isidro
San Pablo
Oreamuno
San Rafael
la GAM
Santa Bárbara
ORIGEN
Santo Domingo
San José 958 77 692 5 28 74 4944 209 634 48 70 52 2609 355 107 10862 123208 8,8%
Escazú 94 12 73 1 6 7 703 29 71 9 8 5 459 64 9 1550 26403 5,9%
Desamparados 777 45 621 1 27 117 2203 76 337 38 34 72 1146 170 35 5699 87273 6,5%
Aserrí 106 1 112 0 4 58 437 10 74 6 10 6 164 25 4 1017 22905 4,4%
Mora 14 2 10 0 1 4 173 5 21 1 6 0 195 18 1 451 10935 4,1%
Goicoechea 327 36 300 0 6 14 1631 32 314 18 34 29 663 96 48 3548 49590 7,2%
Empleo y Movilidad Territorial
Alajuela 121 17 62 0 2 18 5918 162 410 431 89 22 6417 940 57 14666 105173 13,9%
Atenas 16 2 1 0 0 0 189 8 7 4 2 5 141 21 0 396 9952 4,0%
Poás 5 1 3 0 0 1 306 5 15 15 7 2 239 44 1 644 11258 5,7%
Cartago 36785 818 1135 116 971 2346 672 24 109 26 8 15 352 34 11 43422 58760 73,9%
Paraíso 3445 11885 357 103 278 815 160 1 19 9 1 4 39 7 4 17127 21517 79,6%
Agüero, Pujol & Pérez
La Unión 1232 129 16407 4 65 201 735 44 155 25 22 17 347 53 16 19452 43014 45,2%
Alvarado 536 197 53 3871 213 89 10 0 5 0 0 0 6 4 0 4984 5630 88,5%
Oreamuno 3527 357 245 148 9037 644 165 4 33 3 1 7 88 12 3 14274 17955 79,5%
El Guarco 2908 195 230 10 231 9378 166 4 35 3 0 2 71 14 1 13248 16702 79,3%
Heredia 123 5 73 3 29 24 27627 501 812 308 448 150 2244 858 341 33546 55309 60,7%
Barva 44 2 30 0 1 3 3652 6592 249 268 300 53 704 352 112 12362 17843 69,3%
Santo Domingo 58 4 31 1 4 6 1271 62 7320 28 103 189 310 114 145 9646 17814 54,1%
Santa Bárbara 14 2 3 0 1 1 2181 357 129 5688 95 24 854 614 45 10008 15218 65,8%
San Rafael 65 1 20 0 2 2 3867 316 489 88 7433 177 703 240 287 13690 19963 68,6%
San Isidro 23 4 27 0 2 3 1062 52 459 14 92 3564 216 52 120 5690 9285 61,3%
Belén 19 1 9 0 0 1 991 14 37 15 10 8 5169 171 13 6458 9980 64,7%
Flores 18 1 13 0 4 1 1439 83 101 124 53 12 666 3351 28 5894 9004 65,5%
San Pablo 29 4 34 1 2 4 2308 114 660 34 220 109 372 125 3302 7318 12486 58,6%
Sub Total GAM 52440 13923 22135 4279 10985 13944 68848 8921 14011 7306 9183 4681 27012 8226 4882 270776 965353 28,0%
Total (País) 53907 14442 22474 4424 11066 14161 72121 9013 14377 7411 9307 4742 28655 8500 4920 279520 1674275 16,7%
% destinos dentro de la
GAM 97,3% 96,4% 98,5% 96,7% 99,3% 98,5% 95,5% 99,0% 97,5% 98,6% 98,7% 98,7% 94,3% 96,8% 99,2% 96,9% 57,7%
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo Nacional 2011, INEC.
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
239
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
En el Mapa 3 los pares en la diagonal se presentan como círculos, cuyo tamaño es proporcional a la
cantidad de trabajadores en la celda de la diagonal de la matriz. Por su parte, las líneas representan
con su color y espesor la cantidad de trabajadores que viajan entre los cantones. Todos los flujos
mayores a 10 000 trabajadores tienen como destino San José y en orden de importancia corresponden
a los siguientes orígenes: Desamparados, Goicoechea, Heredia, Alajuela, Alajuelita y la Unión.
En cuanto a los flujos mayores a 5000 trabajadores la mayoría también tiene como destino San José
y los orígenes en orden son Tibás, Cartago, Curridabat, Aserrí, Coronado, Escazú, Moravia y Montes
de Oca. Otros pares importantes en esta categoría son San José-Escazú, San José-Heredia, Alajuela-
Heredia y Alajuela-Belén.
Por el contrario, fuera de la GAM se producen algunos viajes interesantes aunque, obviamente, no en
el mismo orden de magnitud de los viajes en la GAM. La actividad de viajes de trabajo entre Nicoya
y Santa Cruz; Santa Cruz y Carrillo; Carrillo y Liberia; y Liberia y Carrillo en Guanacaste es de resaltar.
Otro flujo importante de trabajadores se da de Esparza y Montes de Oro a Puntarenas y de Orotina
a Garabito en el Pacífico Central. Además, son interesantes los flujos bidireccionales entre Pérez
Zeledón y Buenos Aires, y entre Golfito y Corredores.
Mapa 3. Respresentación Gráfica de la Matriz Origen-Destino para los viajes del hogar al trabajo
según el censo del 2011 (90% más alto de flujos)
.
Mapa 3. Representación Gráfica
de la Matriz Origen-Destino LA CRUZ
SAN CARLOS
BAGACES
TILARAN
Leyenda CARRILLO CANAS
SARAPIQUI
1376 - 7672
8275 - 15448
SANTA CRUZ ABANGARES
16407 - 27627 ALFARO RUIZ VALVERDE VEGA
NICOYA
33588 - 41517 SAN RAMON HEREDIA GUACIMO
PUNTARENAS NARANJO POAS SIQUIRRES
MONTES DE ORO GRECIA SANTA BARBARA
56335 - 79459
BARVA
Número de trabajadores PALMARES VAZQUEZ DE CORONADO
BELENSAN RAFAEL OREAMUNO
que se mueven HOJANCHA ESPARZA
ATENAS ALAJUELA HEREDIA MORAVIA
SAN MATEO ALVARADO
SAN JOSE
654 - 1409 SANTA ANA MATINA
LA UNION
NANDAYURE OROTINA ESCAZU
1432 - 2458 MORA
DESAMPARADOS
GARABITO TURRIALBA
PUNTARENAS JIMENEZ
2597 - 4016 CARTAGO
TURRUBARES ASERRI LIMON
4944 - 7675 PURISCAL ACOSTA EL GUARCO
LEON CORTES PARAISO
10287 - 24820 GARABITO
TALAMANCA
SANTA BARBARA BARVA
SAN RAFAEL SAN ISIDRO AGUIRRE PEREZ ZELEDON
FLORES
ALAJUELA SAN PABLO VAZQUEZ DE CORONADO
BUENOS AIRES
GOICOECHEA
TIBAS
COTO BRUS
MONTES DE OCA
SAN JOSE
CARTAGO
CORREDORES
ALAJUELITA GOLFITO
GOLFITO
MORA DESAMPARADOS
OREAMUNO
0 25 50 100
1:275 000
0 2.75 5.5 11 Kilómetros
Kilómetros
240
Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Por otro lado, en el Atlántico existe una relación muy interesante entre Pococí, Guácimo, Siquirres,
Matina y Limón, y entre Limón y Talamanca, como se muestra en el Mapa 3.
El modelo de distancia al trabajo, según variables socioeconómicas para la GAM, (Cuadro 4) muestra
resultados muy interesantes. Por tratarse de un modelo del logaritmo de la distancia, los coeficientes
representan la seudo-elasticidad de las variables con respecto a la variable dependiente.
En cuanto a las variables numéricas, el coeficiente de edad resultó negativo y los coeficientes
de cantidad de hijos y años de estudio positivos y altamente significativos los tres. Por ejemplo, por
cada año de edad se disminuye en 0,36% la distancia de viaje. Este resultado es consistente con
los resultados de Wilson (1976), Manaugh et al (2010) y Vance y Hedel (2007) que encontraron una
correlación negativa entre la edad de los trabajadores y la distancia de viaje al trabajo.
En el caso de nivel de educación, por cada año de estudio aumenta en un 5,3% la distancia de viaje.
El trabajo de Wilson (1976) encontró una correlación negativa entre estas dos variables.
Además, por cada hijo nacido aumenta en un 0,2% la distancia de viaje. En su estudio Wilson (1976)
encontró un coeficiente positivo para el número de hijos para centros metropolitanos mayores de 100
000 personas, lo cual es consistente con los resultados para la GAM. Por otro lado, Maat y Timmermans
(2009) encontraron una relación negativa entre la distancia de viaje y la existencia de niños pequeños
en el núcleo familiar. Vance y Hedel (2007) también encontraron una correlación negativa entre estas
variables.
En cuanto a género, las mujeres viajan aproximadamente un 14% menos en distancia que los hombres,
lo cual es consistente con estudios previos (Wilson, 1976; Manaugh et al, 2010 y Vance y Hedel, 2007).
Con respecto a los otros miembros de la familia, los esposos o esposas viajan un 12% menos que
sus compañeros (as) jefes de familia, los hijos viajan un 6% menos y los otros miembros de la familia
un 15% menos en distancia. Al respecto Maat y Timmermans (2009) encontraron que las parejas viajan
menos que los jefes de familia.
241
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
Cuadro 4
Modelo de distancia al trabajo, según variables socioeconómicas
Error
Coeficiente Estimado Valor t Pr(>|t|)
Estándar
Constante 1,3303 0,0717 18,56 < 2e-16
Edad -0,0036 0,0008 -4,76 2,0E-06
Números de Hijos 0,0024 0,0007 3,49 4,9E-04
Años de Estudio 0,0534 0,0025 21,27 < 2e-16
Sexo Femenino -0,1374 0,0203 -6,77 1,34E-11
Parentesco
Jefa o Jefe de Familia
Esposo(a) o compañero(a) -0,1164 0,0259 -4,50 6,9E-06
Hijo(a) -0,0587 0,0227 -2,59 9,6E-03
Otros -0,1466 0,0308 -4,76 2,0E-06
Tipo de ocupación
Profesional
No Profesional -0,3386 0,0240 -14,13 < 2e-16
Categoría de ocupación
Patrono
Empleado 1,1609 0,0207 56,12 < 2e-16
Rama de actividad
Agricultura, ganadería y pesca
Minas y Canteras -0,1562 0,3390 -0,46 6,4E-01
Industrias manufactureras 0,7177 0,0478 15,02 < 2e-16
Suministro Electricidad y Gas 0,9579 0,0842 11,38 < 2e-16
Suministro Agua, Gestión desechos 0,5485 0,1126 4,87 1,1E-06
Construcción 0,6039 0,0537 11,26 < 2e-16
Comercio, Reparación de Vehículos 0,7849 0,0463 16,94 < 2e-16
Transporte y Almacenamiento 0,6038 0,0552 10,93 < 2e-16
Alojamiento y Servicios de Comida 0,8270 0,0575 14,39 < 2e-16
Información y Comunicación 1,0762 0,0647 16,62 < 2e-16
Actividades financieras y Seguros 1,2157 0,0617 19,71 < 2e-16
Actividades Inmobiliarias 0,5748 0,1063 5,41 6,4E-08
Act. Profesionales, Científicas y Técnicas 0,6801 0,0614 11,07 < 2e-16
Act. administrativas y Servicios de apoyo 1,0057 0,0539 18,65 < 2e-16
Administración Pública y Defensa 0,9094 0,0593 15,35 < 2e-16
Enseñanza 0,5084 0,0557 9,13 < 2e-16
Atención de Salud y Asistencia Social 0,8792 0,0578 15,22 < 2e-16
Act. Artisticas, Entretenimiento y Recreativas 0,6422 0,0768 8,37 < 2e-16
Otros Servicios 0,5451 0,0640 8,51 < 2e-16
De los hogares empleadores -0,0803 0,0593 -1,35 1,8E-01
Organizaciones Extraterritoriales 1,2701 0,2381 5,34 9,6E-08
Con respecto a la ocupación, la diferencia es sustancial; los no profesionales viajan en promedio 33%
menos distancia que los profesionales. Otra variable de gran importancia en el modelo es la categoría
de ocupación. Los empleados viajan 116% más distancia que los patronos. Esto puede deberse a que
los dueños de empresas o trabajadores independientes tienden a localizar sus lugares de residencia y
trabajo a menores distancias que los empleados.
Además, todas las ocupaciones, con excepción de Minas, Canteras y empleadores de hogar presentan
coeficientes positivos y significativos, lo que indica que viajan mayor distancia que los trabajadores
agrícolas. Los trabajadores de industria viajan un 72% más, los de comercio un 78% más y los de
alojamiento y comidas un 83% más que los trabajadores agrícolas. Las diferencias más importantes se
dan con los trabajadores del área financiera, de seguros y los de organizaciones extraterritoriales que
viajan distancias más de un 120% mayor que las de trabajadores agrícolas.
Así las cosas, las distancias calculadas no reflejan las diferencias de distancias por modo, pues
mientras las distancias por transporte público son mayores a las distancias por vehículo privado, el
modelo asume la misma distancia sin importar el modo.
IV. Conclusiones
En la GAM, un 50% de los trabajadores laboran en un cantón diferente al que habitan, mientras
fuera de la GAM esta cifra disminuye a solo un 18%. Esto refleja mayor interdependencia y dinamismo
económico y social en la GAM comparado con lo que sucede fuera. Sin embargo, los datos también
muestran un alto grado de multinuclearidad urbana en la GAM dada la enorme proporción de personas
que trabajan en su propia área metropolitana.
Los principales cantones dormitorio en la GAM son Goicoechea, Vásquez de Coronado, Montes de
Oca, Moravia, Curridabat, Alajuelita, Tibás y Desamparados, en San José; San Pablo, Santa Bárbara,
Flores, Barva, San Rafael, San Isidro, y Santo Domingo, en Heredia y La Unión en Cartago.
Los principales flujos intercantonales en términos de viajes al lugar de trabajo ocurren en la GAM
y son Desamparados-San José, Goicoechea-San José y Heredia-San José. Además, un 95.8% de la
demanda laboral de la GAM es suplida por habitantes de la misma región. Como complemento, los
habitantes de la región metropolitana raramente trabajan fuera de ella.
Los principales generadores de viajes son San José, Alajuela, Desamparados, San Carlos y Cartago,
y los principales atractores son San José, Alajuela, Heredia, San Carlos y Cartago. Lo anterior refleja
el carácter dominante de San José como atractor de viajes de trabajo, seguido de las otras cabeceras
243
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Agüero, Pujol & Pérez
provinciales de la GAM (Alajuela, Heredia y Cartago). Además destaca San Carlos como un atractor
más importante que las otras cabeceras provinciales del país, inclusive con mayor atracción de viajes
que el cantón de Cartago.
Por su parte, la edad, el género, el tipo de ocupación, los años de estudio, la categoría de ocupación
y la rama de actividad son variables que explican la distancia de viaje al lugar de trabajo. Por ejemplo,
conforme aumenta la edad de las personas disminuye la distancia al trabajo; además, las mujeres
viajan un 13,7% menos que los hombres.
Por último, en cuanto al tipo de ocupación, los trabajadores profesionales están dispuestos a viajar
distancias un 33% mayor a sus trabajos que los no profesionales. En este caso, la categoría de
ocupación muestra que los empleados viajan un 116% más que los patronos. En cuanto al área de
ocupación, los trabajadores agrícolas son los que se desplazan menos. Por el contrario, los que se
desplazan más trabajan en el área financiera y seguros y en organizaciones extraterritoriales.
Como recomendación, para el próximo censo sería muy importante preguntar en qué distrito trabajan,
pues aunque podría inducir a errores en algunos casos, especialmente en la GAM, permitiría resultados
más precisos y aplicables para cantones grandes en todo el país.
V. Referencias
Dickey, J.W. (1983). Metropolitan Transportation Planning. Second Edition, McGraw-Hill, USA.
Dijkstra, E. W.(1959). A note on two problems in connexion with graphs. Numerische Mathematik. 1:
269–271.
ESRI (2011). ArcGIS Desktop: Release 10. Redlands, CA: Environmental Systems Research Institute.
Henher, D.A., & Button, K. (2000). Handbook of Transport Modelling. Pergamon, Oxford, UK.
McQuaid, R.W. (2009). A Model of the Travel to Work Limits of Parents. Research in Transportation
Economics 25 (1), 19-28.
Manaugh, K., Miranda-Moreno, L.F., El-Geneidy, A.M. (2010). The Effect of Neighbourhood
Characteristics, Accessibility, Home–Work Location, and Demographics on Commuting Distances.
Transportation: Planning, Policy, Research, Practice 37 (4), 627-646
Ortuzar, J., & Willumsen, L. (2002). Modelling Transport. Third edition, John Wiley & Sons.
Vance, C., Hedel, R. (2007). The Impact of Urban Form on Automobile Travel: Disentangling Causation
from Correlation. Transportation 34, 575-588.
Wilson, F.D. (1976). Journey to Work: Metropolitan-nonmetropolitan comparisons. Institute for research
on Poverty. University of Wisconsin-Madison.
Maat, K. Timmermans, H. (2009). A causal model relating urban form with daily travel distance through
activity/travel decisions. Transportation Planning and Technology 32 (2), 115-134
244
Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Resumen
En Latinoamérica distintos trabajos constatan una tendencia a la disminución del flujo de migraciones
internas rural-urbano y un aumento del flujo urbano-urbano. La literatura especializada señala al
crecimiento de los conglomerados urbanos y al cambio en el estilo de desarrollo, como los factores
determinantes de esta evolución en el patrón de la migración interna, asociado cada vez más al cambio
de residencia que a la búsqueda de empleo. Entre los factores de atracción y expulsión, aparecen
fuertemente los asociados a la oferta inmobiliaria, tal como el crecimiento del parque habitacional en
determinadas localidades.
Con el Censo del 2011, se observa que en general persiste el porcentaje de población que se moviliza
entre cantones (10.4%), así como el porcentaje de esos movimientos producidos entre cantones de
la GAM (46%). Sin embargo, se hallaron cambios, pues si bien los cantones rurales continúan sin
participar de forma importante en los movimientos migratorios, ahora la dirección de los flujos es del
centro a la periferia urbana, donde cantones como los ubicados en la parte alta de Heredia, resultan
ser más atractivos de población.
I. Introducción
El patrón no fue idéntico para las seis metrópolis analizadas, operó como factor de distinción la
cuantía demográfica de las ciudades, y de esta forma, las más pobladas (Río de Janeiro, São Paulo y
Santiago) tenían saldo neto negativo, mientras que las de menor tamaño demográfico, con la excepción
de San José, registraban saldo positivo.
No obstante, la observación de los datos permite identificar al menos cinco características en los
patrones migratorios de todos los países analizados: coexisten o coinciden ciudades dentro de la
misma metrópoli, como expulsoras y atractivas. Las ciudades más pobladas tienen más probabilidad
de ser expulsoras; una tendencia desconcentradora reduce el atractivo de las grandes ciudades
y aumenta el de ciudades intermedias. Además, se descarta la contraurbanización, es decir, los
desplazamientos hacia zonas rurales; y finalmente, en algunos países –como Costa Rica- se observa
un movimiento de “desconcentración concentrada”, es decir, de migración “cercana” entre ciudades
del mismo aglomerado metropolitano (Rodríguez, 2007: 05).
Los autores señalan que el mayor volumen de desplazamientos dentro de los países de la región
lo constituye la corriente interurbana, es decir, el traslado de una ciudad a otra. Por ejemplo, el caso
de México: entre 1995 y 2000, el 70% de los traslados entre municipios fueron de tipo urbano-urbano,
mientras la migración campo-ciudad alcanzó el 14%. (CELADE, 2006: 03).
En el pasado los desplazamientos hacia las grandes ciudades eran los más numerosos, pero hoy día
el mayor número de movimientos involucra a ciudades intermedias y a entramados de localidades no
metropolitanas. Las mismas áreas metropolitanas no se comprenden ya solo como ciudades enormes,
sino como conglomerados de localidades que pueden tener entre algunos cientos de miles y varios
millones de habitantes. (CELADE, 2006: 05).
Por otra parte, estos traslados dentro de las metrópolis se han polarizado: al histórico movimiento de
pobres hacia la periferia se suma el de familias acomodadas a zonas rurales próximas a las metrópolis,
desde las que se movilizan a diario para trabajar y estudiar en la gran ciudad.
Se considera que este nuevo patrón de la migración interna se relaciona estrechamente con las
desigualdades territoriales, pues lo que se ha observado es que las barriadas pobres de algunas de
las ciudades de la región, se localizan en los sectores de la periferia, precariamente conectados al
centro de la ciudad, con equipamiento deficiente y bajo jurisdicciones descentralizadas y con recursos
escasos. (CELADE, 2006: 08).
En relación con los posibles factores causales de esta dinámica, lo hallado señala que estas recientes
tendencias de migración interna están fomentadas por diferentes procesos de urbanización residencial,
como asentamientos informales, proyectos gubernamentales de vivienda y barrios exclusivos de
estratos altos. Esta forma de urbanización se caracteriza por ocupar el territorio de forma dispersa y
expansiva, configurando una gran periferia urbana de baja densidad (CELADE, 2006).
Esta extensión del uso del suelo residencial, se ha asociado con los procesos de reforma del Estado
y desregulación económica, a partir de los cuales, progresivamente se ha producido un crecimiento
urbano con una muy débil planificación y legislación , y un peso creciente de los actores privados,
muchos de ellos de capital extranjero, en la producción del entorno construido. De ahí la proliferación
de vivienda de interés social y el desarrollo de proyectos habitacionales del tipo condominio, barrio
cerrado y complejo de oficinas, cuya tendencia es hacia la provisión de infraestructura y servicios
urbanos otrora provistos por el Estado (Marín, 2006: 709).
Por otra parte, alguna literatura también da cuenta de la estabilización de la migración interna por
causa de un número importante de población no migrante. Esto se denomina efecto “asentamiento
residencial”, el cual afecta principalmente a zonas fuera de los aglomerados metropolitanos. Sin embargo,
por esta misma razón, está relacionado con una mayor cuantía de movimientos intrametropolitanos en
la migración interna total nacional.
Los principales hallazgos de un estudio sobre este tema en Chile, señalan un aumento del asentamiento
residencial entre los censos de 1992 y 2002 (75% a 79%), excepto en la Región Metropolitana, donde
el número de desplazamientos aumentó. También encontraron que los movimientos al interior de la
Región Metropolitana son más estables en su calidad, relacionándolo al hecho de que una mayor
proporción de desplazamientos, ocurrió entre hogares de mayor nivel educativo y socioeconómico.
246
Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Por otra parte, sus resultados muestran que las mujeres trabajadoras (jefas de hogar), migran menos
que las no trabajadoras, y que la edad es un factor que influye en el hecho de desplazarse, pero
asociado a otras variables relacionadas con el ciclo de vida familiar., Por ejemplo, la edad de 40 años,
constituye un punto de inflexión en tanto a partir de esta edad, la movilidad disminuye significativamente.
Finalmente, una de las conclusiones relevantes del estudio chileno, descrito anteriormente, es que el
envejecimiento y la propiedad de la vivienda, explican el asentamiento residencial.
En el caso específico de la migración interna de Costa Rica, a la luz de los resultados del Censo
del 2000, se determinó que la Provincia más expulsora fue Guanacaste, y la más atractora Heredia,
seguida por Cartago y Alajuela (Chacón y otras, 2003). A propósito de esos resultados, se resaltó la
importancia de las ciudades como atractoras de población y se lo atribuyó a la búsqueda de mejores
condiciones de vida que se encuentran en centros urbanos con redes de servicios y equipamiento
de salud y educación, a muy cortas distancias (Barquero, 2001). También se identificó la importante
pérdida de población de los distritos que componen el casco central de San José, y se lo atribuyó a la
progresiva reducción de la cantidad de hogares establecidos en la ciudad, por el éxodo de los hogares
nuevos (Rosero, 2002).
Por una parte, muestra la relevancia de la migración intrametropolitana en el contexto nacional: “si
bien solamente el 11% (359 599) de la población mayor de 5 años, migró internamente entre 1995 y
2000, el 45% de esta (163 569) lo hizo entre cantones de la misma GAM. (Molina, 2009: 07).
Por otra parte, explica que la dirección de los desplazamientos ocurre del centro hacia la periferia
urbana, y son s los centros urbanos más poblados e importantes en el sistema jerárquico de ciudades,
los mayores expulsores de población, mientras que la periferia urbana crece por inmigración. Asimismo,
señala que las áreas rurales casi no participan en la migración interna de la GAM, ya que tanto la salida
como la entrada de población son muy escasas. Además, debido a que los mayores flujos migratorios
se desplazan del centro al centro o a la periferia urbana inmediata, y no hacia las áreas rurales, se
descarta que estén ocurriendo procesos de contra urbanización. (Molina, 2009: 07).
Sobre los factores de atracción y expulsión presentes en los cantones, la autora señala que “es claro
que son los cantones más dinámicos económicamente, con mayor desarrollo y oferta inmobiliaria, y
laboral, más densamente poblados y que se ubican en los centros urbanos, los que debido a estas
características atraen y expulsan población. Por el contrario, los cantones de baja migración, se
caracterizan por un mercado inmobiliario y laboral menos activo, dada su vocación agrícola y su lento
crecimiento del parque habitacional”. (Molina, 2009: 08).
Con respecto a la relación entre la migración intrametropolitana y la extensión del suelo de uso
residencial, que en otras metrópolis se ha asociado con el papel del Estado en la gestión del territorio, el
panorama en Costa Rica apunta al desarrollo de estos mismos procesos en la Gran Área Metropolitana
(GAM).
Se ha determinado que la conformación de una amplia periferia urbana asociada con importantes
desplazamientos de población, inició en la segunda mitad de la década de los años 1980, gracias a
las políticas de vivienda de la época: unas directrices permitieron que la urbanización residencial se
desarrollara fuera del anillo de contención urbana de la GAM, en la zona especial de protección agrícola
247
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
En ese sentido, principalmente el sector financiero ha sido el agente económico que ha hecho posible
el crecimiento del sector vivienda, el sector privado en particular, financia principalmente a hogares de
altos ingresos y en viviendas de tipo apartamento. Esto es el resultado de un mercado inmobiliario que
se ha estructurado según los ingresos de los hogares y la oferta disponible, lo cual también ha dado
como resultado una construcción de viviendas segmentada entre cantones de altos, medios y bajos
ingresos (Proyecto PRUGAM, 2007: 203).
Sobre estos procesos y factores causales que determinan el giro el cambio significativo en los
patrones de la migración interna en Latinoamérica, se ha desarrollado un cuerpo teórico nuevo, que
explica la migración interna lejos del viejo paradigma de las teorías de la modernización.
Por su parte, la literatura especializada señala que el principio del fin de las teorías de la modernización
(Gino Germani) para explicar la migración interna, se ubica cuando el desarrollo de la región gira
hacia la exportación, pues la economía se desregula, las empresas se globalizan, el Estado pierde
espacio en el ámbito productivo, el sector servicios supera largamente al industrial, la urbanización se
expande y el contraste entre productividades territoriales se hace más difuso y menos estilizado. Así las
cosas, ya no hay dos polos claramente diferenciados, sino múltiples alternativas territoriales que tienen
potencialidades muy sensibles a procesos y decisiones de naturaleza exógena. (Rodríguez, 2009: 35).
Aunque los factores relacionados con la productividad aún tienen cierta validez en el caso de los
desplazamientos vinculados con el empleo y las remuneraciones, la búsqueda de un mejor ingreso
pierde cada vez más fuerza como el principal factor detrás de las migraciones internas. La búsqueda
de mejores condiciones de vida, el logro de objetivos residenciales y la consecución de mayores niveles
de educación o capacitación se convierten en factores cada vez más importantes para las decisiones
migratorias de los individuos.
Una evidencia de lo anterior lo constituye el gran atractivo para las clases medias, de las zonas
rurales cercanas a las grandes ciudades, así como para los adultos mayores jubilados, a los cuales ya
no les afecta el mercado laboral pues ya no trabajan, y se desplazan a estas zonas en búsqueda de
una mejor calidad de vida. (Rodríguez, 2009: 39).
Fenómenos como los anteriores, han sido estudiados desde el paradigma del ciclo urbano, que se
inserta dentro de las teorías clásicas de la migración de corte evolucionista, iniciadas por Zelinsky
(1971). Estos marcos teóricos, se desarrollan sobre la base de explicar la trayectoria de los sistemas de
localidades, distinguiendo en ella procesos y estadios como metropolización (conurbación progresiva
de pueblos dispersos para formar grandes conglomerados urbanos); suburbanización (urbanización
de las zonas limítrofes de la ciudad, de carácter agrícola o rural en transición); contraurbanización
(urbanización de zonas rurales ubicadas en las afueras del límite urbano, como resultado de migración
urbana-rural); reversión de la polarización (pérdida de importancia de las grandes ciudades en el
conjunto del sistema urbano); desconcentración y desconcentración concentrada (despoblamiento de
centros urbanos y poblamiento de ciudades intermedias y secundarias). Dentro de este proceso de
conformación y crecimiento de ciudades, se postula un ordenamiento por fases, y para cada fase se
sugieren sentidos, magnitudes y tipos de migración predominantes. (Rodríguez, 2009: 32).
Entre los autores más destacados en este paradigma evolucionista del crecimiento urbano y la
migración, se encuentra Peter Hall (1996), quien distingue seis etapas del proceso urbanizador: la
primera está marcada por la migración concentradora y la última caracterizada por el renacimiento
248
Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
rural. Por su parte, Berry (1980), asocia las etapas iniciales de la urbanización con el predominio de la
migración campo-ciudad y la migración desde la periferia de las ciudades hacia el centro, las etapas
intermedias con el paulatino incremento de la migración hacia la periferia de las ciudades, tanto desde
el campo, como desde otras ciudades y desde el centro de la misma ciudad, y las etapas finales como
un retorno al campo y a ciudades pequeñas. (Rodríguez, 2009: 33).
Finalmente, Geyer y Kontuly (1993), postulan una secuencia de concentración inicial en ciudades
que crecen rápido y tienden a alcanzar grandes envergaduras, Luego de este proceso, pasan a un
mayor nivel de atracción y dinamismo de ciudades intermedias, y continúan con la configuración de
áreas metropolitanas difusas, donde la atracción se centra en polos fuera de la ciudad, pero unidos
funcionalmente a ella, y terminan con la desconcentración y el amplio predominio de la migración
hacia ciudades intermedias o pequeñas. (Rodríguez, 2009: 33).
Por otra parte, dentro de las perspectivas bajo las cuales se estudia la nueva forma de migración
interna, se encuentran las que dan cuenta de las motivaciones para migrar en un contexto de migración
intraurbana, es decir, explicando el fenómeno como movilidad residencial. Esto se refiere a que los
cambios de localización del hogar a su vez están condicionados por la etapa del ciclo de vida del
hogar, y por el contexto económico y del mercado de la vivienda.
El estudio de la oferta residencial y la especificidad histórica y local del parque habitacional -la
perspectiva más adecuada para investigar el presente tema- se basa en estadísticas agregadas
de movimientos migratorios, con flujos territorializados de emigración e inmigración, situando las
migraciones en marcos contextuales del mercado de vivienda. (Módenes, 1998: 35).
II. Metodología
La base de datos la constituyen los censos nacionales de 2000 y 2011, de manera que permita el
análisis comparativo en el tiempo. De esta manera, hacer posible el análisis de los cambios de patrón
de la migración interna nacional y dentro de la GAM.
Las preguntas del censo con las cuales se construye la matriz (a modo de tabla de contingencia), son
la residencia actual o el cantón de empadronamiento (en la fila), y el cantón de residencia cinco años
antes (en las columnas). Se excluye a quienes no respondieron la pregunta por la residencia anterior, y
a todos los menores de 5 años de edad. (Rodríguez, 2009: 80).
Según esta delimitación la GAM está conformada por 31 cantones y 160 distritos, algunos cantones
no incluyen el total de sus distritos, pues se excluyen distritos rurales. Sin embargo, en este trabajo
se consideraron los 31 cantones que conforman la GAM con todos sus distritos integrantes, pues la
pregunta por la residencia hace cinco años tal cual se formula en el censo, se refiere a cantones.
249
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
Para obtener los patrones y flujos de migración interna en la GAM, se utilizó la metodología convencional
en los estudios de migración, la cual se basa en la matriz de migración para calcular las diferentes
tasas. (Rodríguez, 2009: 80).
A partir de la matriz de migración, se calculan las medidas de migración correspondientes, que dan
como resultado el patrón y los flujos de la migración, según los porcentajes y tasas obtenidos. Las
diferentes medidas de migración, se detallan a continuación (Rodríguez, 2009: 80-82):
PM= (M/PR)*100
PEi = (Ei/POi)*100
PIi = (Ii/PRi)*100
TIj= (Ij/5)/(PMj)*1000
• La tasa de emigración sigue la misma lógica, y solo cambia porque incluye a los emigrantes en el
numerador.
• La tasa de migración neta se obtiene como la diferencia entre la tasa de inmigración y la tasa de
emigración. Su signo puede ser positivo o negativo, y se interpreta como el cambio relativo en la
cuantía de la población como resultado del balance entre inmigrantes y emigrantes.
III. Resultados
De acuerdo con el l Censo del año 2000, se obtuvo a nivel nacional una movilidad intercantonal de
la población de un 11% del total de la población mayor de 5 años de edad. Sin embargo, un 45%
de dichos movimientos se dieron solamente entre cantones de la misma GAM. Para el año 2011, los
resultados censales muestran que el porcentaje de población migrante interna se redujo ligeramente,
pues alcanzó a un 10% de la población nacional con residencia habitual en el país, y el porcentaje de
esos movimientos en la GAM subió ligeramente a 46%, como se muestra en el Cuadro 1.
Cuadro 1
Magnitud de la movilidad interna Costa Rica y la Gran
Área Metropolitana (GAM)
2000 - 2011
2000 2011
Estos resultados nos señalan lo que parece ser una estabilización del patrón migratorio interno, a la
vez que muestra la relevancia del flujo urbano-urbano sobre el flujo rural-rural.
Pese a la estabilización de este patrón con respecto a los dos últimos censos, si se considera la
información desde el Censo de 1984, y se calculan las tasas y los saldos netos migratorios entre la
GAM y el Resto del país. En este sentido, los resultados evidencian que la inmigración a la GAM baja
de forma sostenida durante el período 1984-2011, a la vez que las tasas de emigración del Resto del
país con respecto a la GAM también bajan durante el período. Esto nos señala una tendencia sostenida
hacia la disminución de la migración de tipo rural-urbana, como puede observarse en el siguiente
Cuadro 2.
251
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
Cuadro 2
Costa Rica: Tasas de migración interna GAM y Resto del
país
1984 - 2000 - 2011
i e s i e s
1979-84 7,47 5,22 2,24 11,22 13,75 −2,53
1995-00 6,29 4,54 1,75 9,78 11,85 −2,08
2006-2011 5,18 5,88 −0,70 10,47 9,68 0,79
Fuente: Elaboración propia con base en los datos de Censos 1984, 2000
y 2011.
Asimismo, la observación de los saldos netos migratorios de la GAM y del Resto del país, muestran
que esta tendencia no solo continúa, sino que al final del período revierte totalmente la conocida
migración rural-urbana del pasado, por una posible migración urbana-rural o urbana-urbana fuera de
la GAM, pues en el 2011 el saldo neto migratorio de la GAM con respecto al Resto del país cambia su
signo a negativo, y el Resto del país cambia su signo a positivo.
En adelante habrá que seguir analizando este patrón a la luz de futuros censos, pero, por lo pronto,
este dato podría significar el inicio de una nueva tendencia hacia la contraurbanización.
Para el año 2000, el análisis de las tasas de migración de cada uno de los cantones de la GAM,
muestra claramente dos patrones: existe un área de cantones en la que ocurre gran movilidad de
población y un área en la que los desplazamientos tanto de entrada como de salida son muy escasos,
tal y como se puede observar en el Cuadro 3.
En resumen, se tiene que de un lado, en el área central y periférica de la GAM, encontramos un grupo
de 16 cantones, entre los que están San Rafael, Alajuelita, Flores y Curridabat, los cuales concentran
las mayores tasas tanto de emigración como de inmigración.
De otro lado, tenemos un grupo de 11 cantones que se ubican principalmente en zonas agrícolas de
Alajuela y Cartago, los cuales concentran las menores tasas tanto de emigración como de inmigración.
Existe también un restante grupo de 4 cantones, en los que la movilidad de la población se ubica entre
los dos extremos anteriores.
252
Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 3
Cantones de alta y baja movilidad Gran Área Metropolitana (GAM)
2000
Por una parte, este fenómeno de migración intrametropolitano se da entre los cantones que
corresponden a los principales centros urbanos en el sistema jerárquico de ciudades de la GAM. Por
ejemplo, Montes de Oca, Tibás, San José y Heredia, altamente expulsores y atractores de población,
aunque con bajo saldo neto migratorio y en algunos de signo negativo.
Por otra parte, Alajuelita, San Rafael, Flores y San Pablo, resultaron altamente expulsores y atractores
de población, aunque con alto saldo neto migratorio (ver mapa). Estos, en su mayoría se encuentran
en la periferia urbana, y corresponden a ciudades intermedias en el sistema jerárquico de ciudades
de la GAM.
Asimismo, en el área limítrofe de la GAM, en lo que anteriormente fue zona especial de protección,
se produjo la menor migración. Los cantones que corresponden principalmente a zonas agrícolas,
-a excepción de San José, el cual se encuentra en este grupo por su baja tasa de inmigración-, son
Paraíso, Alvarado, Poás y Aserrí, estos resultaron escasamente expulsores y atractores de población
Como se ilustra con el siguiente mapa, también para el 2000 hay un área limítrofe de la GAM, en lo
que anteriormente fuera zona especial de protección, en que se produjo la menor migración. Se trata
de cantones que corresponden principalmente a zonas agrícolas; por ejemplo, Paraíso, Alvarado, Poás
y Aserrí, los cuales resultaron escasamente expulsores y atractores de población
253
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
Al igual que se presenta en los patrones migratorios internos de otros países latinoamericanos, las
tasas de migración de los cantones de la GAM muestran que la dirección de los flujos migratorios son
del centro hacia la periferia urbana. Igualmente, son los centros urbanos más poblados e importantes
en el sistema jerárquico de ciudades, los más expulsores, mientras que la periferia urbana crece por
inmigración.
Entonces, como las áreas rurales casi no participan en la migración interna de la GAM, ya que tanto
la salida como la entrada de población es muy escasa, y debido a que los mayores flujos migratorios
se desplazan del centro a la periferia urbana - y no hacia estas áreas rurales-, no se puede afirmar que
se presente contraurbanización a lo interno de la GAM.
A continuación, se presentan los principales resultados y cambios, obtenidos con el Censo 2011, en
Cuadro 4 y el mapa siguiente:
Para el año 2011 encontramos un cambio en la dirección de los flujos de población interna, ya que
ahora son principalmente los cantones de la provincia de Heredia los que atraen más población, junto a
Mora y Santa Ana de la Provincia de San José, y como excepción en este grupo se encuentra el cantón
de La Unión.
254
Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 4
´
Cantones de mayor atracción y expulsión Gran Área
Metropolitana (GAM)
2011
Es claro que se consolidan ahora la dirección de los flujos centro-centro y centro-periferia, en la gran
mayoría de movimientos migratorios internos, a la vez que persiste la tendencia de la poca participación
de los cantones rurales en la movilidad en general.
Además, se observa como ahora los movimientos se dirigen más claramente hacia la periferia noroeste
de la GAM, y no hacia cualquier dirección de la periferia urbana.
Dichos movimientos se desplazan desde cantones urbanos consolidados, con un importante nivel
de saturación habitacional, hacia cantones con numerosos desarrollos habitacionales recientes.
255
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
IV. Conclusiones
Por esto, al hablar de patrones de migración interna en términos de patrón de migración rural-urbana,
migración urbana-urbana y migración urbana-rural, es necesario salvar la particularidad en el análisis.
de que aunque es un área metropolitana, incluye una parte rural.
Efectivamente, los resultados del último censo muestran lo que podría ser el inicio de un nuevo patrón
de migración interna: la contraurbanización, sin embargo, esto es válido solamente si se considera la
GAM y el Resto del país y no la GAM en su interior.
hacia una periferia inmediata, pero no hacia zonas rurales, con lo cual la contraurbanización a lo interno
de la GAM no es una realidad.
Según un estudio anterior, el cual exploró los factores asociados a la atracción y expulsión de
población, este patrón se debe principalmente a que las variables más influyentes en la migración
están relacionadas con el dinamismo económico y el mercado inmobiliario: “es claro que son los
cantones más dinámicos económicamente, con mayor desarrollo y oferta inmobiliaria y laboral, más
densamente poblados y que se ubican en los centros urbanos, los que debido a éstas características
atraen y expulsan población. Por el contrario, los cantones de baja migración, se caracterizan por un
mercado inmobiliario y laboral menos activo, dada su vocación agrícola y su lento crecimiento del
parque habitacional” (Molina, 2009).
Por otra parte, si se considera la migración interna entre la GAM y el Resto del país, en la última
década la metrópoli, pierde población frente al resto del territorio nacional, al mismo tiempo, pierde
preponderancia en el porcentaje de población nacional que alberga. Todo esto ocurre mientras el
porcentaje de población urbana a nivel nacional aumenta significativamente. Esto apunta a que las
centralidades urbanas de segundo y tercer orden fuera de la GAM, están experimentando un mayor
crecimiento, debido en parte a la migración interna.
De forma intuitiva puede observarse que algunas zonas del país están experimentando un crecimiento
acelerado, ligado a nuevos desarrollos urbanos, infraestructuras y a una fuerte oferta inmobiliaria; tal es
el caso de ciertas localidades de Guanacaste y de la zona de influencia de la recientemente construida
ruta 27.
Este tipo de crecimiento urbano atrae un tipo de inversión inmobiliaria, la cual suele orientar su oferta
hacia zonas rurales, dado el menor valor de los terrenos y el alto valor comercial de una propiedad
localizada lejos de las centralidades ya saturadas de la GAM.
Según el Censo de 2011, Guanacaste fue la provincia que presentó la mayor tasa de crecimiento
del país: 1,9%, y el cantón de Orotina se encuentra entre los diez que más crecieron, sin olvidar que
presenta una de las tasas de migración neta más elevadas de cantones fuera de la GAM (10,53 anual).
Estos resultados abren un camino para la exploración y el análisis en futuros censos, con miras a dar
seguimiento del patrón de migración interna nacional y sus cambios. Asimismo plantean la necesidad
de profundizar en el análisis de los factores de atracción y expulsión, asociados a estos patrones y sus
cambios en el tiempo.
257
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero
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Empleo y Movilidad Territorial Molina & Barquero Costa Rica a la Luz del Censo 2011
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Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Migración
y Remesas
Roger Bonilla & Carlos Sandoval
Aspectos sociodemográficos de la migración
nicaragüense en Costa Rica, según el Censo 2011.
Leila Rodríguez
La emigración de costarricenses al exterior: cifras,
características e importancia para el desarrollo del país.
261
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
Resumen
En primer lugar, se cuantifica el volumen migratorio, el cual estima la población inmigrante nicaragüense
en 290 mil, que significa un crecimiento anual del 2.1% con respecto al 2000. Esta cifra junto con los
resultados de censos anteriores muestra, contrario a la creencia popular, que la población nicaragüense
en Costa Rica ha llegado a un punto de estabilización.
En segundo lugar, se analiza la estructura poblacional por sexo y edad (pirámides poblacionales), que
muestra una población joven en edad de trabajo, con poca presencia de niños y de personas mayores.
En tercer lugar, se estudia la estructura del hogar (tipo de hogar, tenencia y tipo de la vivienda y jefatura
femenina), escolaridad, estado conyugal, tiempo de residencia en el territorio nacional, fecundidad,
medida a partir de la paridad media, composición de la fuerza laboral de la población económicamente
activa (PEA), categoría ocupacional, ocupación, aseguramiento y envío de remesas.
Esta investigación finaliza interrogándose qué retos plantea el panorama demográfico de la migración
internacional y particularmente nicaragüense a quienes tienen la responsabilidad de formular políticas
públicas. La información contenida serviría como base para el proceso de toma de decisiones en
materia migratoria.
I. Introducción
El presente capítulo analiza algunos de los principales rasgos de la migración nicaragüense a Costa
Rica, uno de los temas más recurrentes de discusión pública. A menudo, la hostilidad, cuando no la
xenofobia, es un rasgo común de las conversaciones, las noticias en los medios de comunicación e
incluso de las instituciones públicas. Es revelador que en la primera década del siglo XXI se hayan
aprobado dos leyes de migración, una en el año 2005 y la otra en el año 2009. Incluso, la Sala
Constitucional admitió parcialmente para su estudio una acción de inconstitucionalidad contra algunos
artículos de la Ley aprobada en el año 2009 (Sala Constitucional, 2012).
A menudo el tipo de imágenes y argumentos que circulan refieren al crecimiento del número de
nicaragüenses, la presión que estos ejercen sobre los recursos e instituciones públicas –especialmente
en el sector salud-, su escasa contribución a la economía y su presunta responsabilidad por la
inseguridad (Sandoval, 2002). En general, el debilitamiento del Estado Social de Derecho se le imputa
a la migración nicaragüense.
Este artículo contrasta algunas de estas imágenes y argumentos con los datos que surgen
especialmente de los Censos de Población realizados en los años 2000 y 2011. Entre los hallazgos más
sugerentes, este artículo evidencia, por ejemplo, que el aseguramiento directo de nicaragüenses, sea
por condición asalariado o cuenta propia, es mayor que el de costarricenses en estas dos condiciones.
Mientras tanto, el aseguramiento familiar es mayor entre costarricenses.
Por último, el presente artículo se interroga acerca de cuáles podrían ser los principales retos que
se le plantean al Estado costarricense, a partir de las conclusiones que se obtienen de la información
censal.
II. Metodología
Los datos en este estudio fueron tomados de los resultados del Censo de Población y Vivienda del
2011 y los cálculos fueron realizados con el programa STATA versión 8 (StataCorp, 2005).
Para la definición de nicaragüense se utilizó la pregunta cuatro del Censo, la cual indaga sobre el
lugar de residencia de la madre de la persona censada cuando esta nació. Para efectos del Censo, un
nicaragüense es una persona que, cuando nació, su madre residía en Nicaragua.
III. Resultados
Aspectos sociodemográficos
Cuantificación
El Cuadro 1 muestra el número de inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica por sexo y una
comparación con la población costarricense. Para el año 2011, el número total de inmigrantes fue de
aproximadamente 290 mil personas, 60 mil inmigrantes más que en el año 2000. El crecimiento de los
inmigrantes de un 2.1% anual.
263
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
La razón de masculinidad de los inmigrantes nicaragüenses es de 0.90, esto significa que existen
90 hombres por cada 100 mujeres. La razón de masculinidad con respecto al año 2000 bajó en 10
puntos porcentuales, lo que indica que la proporción de mujeres ha aumentado entre la población
nicaragüense.
Cuadro 1
Sexo Costa Rica
2000 y 2011
2000 2011
Sexo
Inmigrantes Inmigrantes
Costa Rica Costa Rica
nicaragüenses nicaragüenses
Evolución
El Gráfico 1 muestra el número de inmigrantes en Costa Rica por nacionalidad en el período 1920-
2011. La migración internacional ha estado presente en la historia de Costa Rica a lo largo del periodo
republicano. En el siglo XX, como lo expresa el Gráfico 1, fue más intensa en las primeras décadas,
sobre todo en lo que respecta a la llegada de nicaragüenses y europeos. La construcción del ferrocarril
al Atlántico y el inicio de la actividad bananera constituyeron procesos de atracción (Alvarenga, 2007).
Luego, en la mitad del siglo, tendió a estabilizarse. En las últimas décadas, se aprecia un incremento
de la migración de norteamericanos y nicaragüenses.
Durante la primera década del siglo XXI, la migración nicaragüense evidencia una tendencia hacia
la estabilización y un lento retroceso, sobre todo si se compara el periodo inter-censal 1984-2000 y
el 2000-2011, cuando el incremento pasó de 4.1% a 0,9% respectivamente. Como se detalla más
adelante, ello tiene implicaciones en la distribución etárea de la población costarricense en general y
debería ser una referencia para la formulación de políticas públicas en materia migratoria, siendo que
estas últimas no parecen registrar este proceso de estabilización y lento descenso (Conferencia de
Prensa, 2012).
264
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 1
Número de inmigrantes. Costa Rica, 1920-2011
6
Año
El Cuadro 2 muestra el año de llegada de los inmigrantes nicaragüenses a Costa Rica. El análisis del
año dede
Tiempo llegada que seenpresenta
residencia en el Cuadro 2 confirma la tesis de que la inmigración nicaragüense
Costa Rica
evidencia que un 40% llegó al país entre 1990 y el año 2009. Mientras tanto, la estimación para la
década 2010-2019 es de apenas 4.4%, es decir, el ciclo de una importante tendencia migratoria
Elnicaragüense
Cuadro 2 muestra
haciaelCosta
año de llegada
Rica de los
estaría inmigrantes
finalizando. Estenicaragüenses a Costa
cambio coincide con Rica.
un decrecimiento de
El análisis del año de llegada que se presenta en el Cuadro 2 confirma la tesis de queemigración,
la tasa de natalidad, un aumento de la esperanza de vida y un incremento de la la con lo
cual el panorama demográfico de Costa Rica tiende a modificarse de manera sustancial, aunque sus
inmigración nicaragüense
repercusiones aún no sonevidencia
objeto deque un 40%análisis.
suficiente llegó al país entre 1990 y el año 2009.
Mientras tanto, la estimación para la década 2010-2019 es de apenas 4.4%, es decir, el
En términos de políticas públicas, muy posiblemente el Estado costarricense requiera no concentrarse
ciclo de una importante
exclusivamente tendencia migratoria
en la inmigración nicaragüense
–dos legislaciones hacia
fueron Costa Rica
aprobadas en laestaría
década del 2000- e
interrogarse cuál podría ser una política de población que dé respuesta a este
finalizando. Este cambio coincide con un decrecimiento de la tasa de natalidad, un cambiante y complejo
panorama demográfico. Este reto enfrenta una importante resistencia, tanto en conversaciones
aumento de como
cotidianas la esperanza
en mediosde de
vida y un incremento
comunicación de mismas
y en las la emigración, con lo públicas,
dependencias cual el en las cuales
con alguna frecuencia parece institucionalizarse la hostilidad, inclusive más allá de los derechos
265
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
Cuadro 2
Año de llegada. Censo de
Costa Rica 2011
Año de llegada %
Distribución geográfica
Figura 2.Porcentaje
Mapa 1. Porcentajedede población
población nicaragüense.
nicaragüense. Costa
Costa RicaRica
2011.2011.
El gráfico 2 muestra las pirámides de población de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y
una comparación con la población costarricense para los años 2011 y 2000. Cada pirámide muestra la
distribución porcentual por grupos de edad de cinco años. La pirámide de inmigrantes nicaragüenses
tiene una mayor concentración en los grupos de edad económicamente productiva (15-49 años).
En términos porcentuales, hay poca presencia de población menor de 10 años, así como de población
adulta mayor. Con respecto al año 2000, ha habido una reducción muy importante de la población de 0
a 4 años, que se manifestará más cuando este segmento de población esté en edad productiva.
Gráfico 2
Pirámide de población costarricense y de inmigrantes nicaragüenses. Costa Rica, 2011
2000
Gráfico 3.1
Pirámide de población costarricense Figura 3.4
Pirámide de inmigrantes nicaragüenses. Costa Rica, 2000
Edades
Edades
85+
80-84
85+
75-79
80-84
70-74
75-79
65-69 70-74
60-64 65-69
55-59 60-64
50-54 55-59
45-49 50-54
40-44 45-49
35-39 40-44
30-34 35-39
25-29 30-34
20-24 25-29
15-19 20-24
10-14 15-19
5-9 10-14
0-4 5-9
0-4
8,0 6,0 4,0 2,0 0,0 2,0 4,0 6,0 8,0
8,0 6,0 4,0 2,0 0,0 2,0 4,0 6,0 8,0
Porcentaje
Porcentaje
Hombres Mujeres
Hombres Mujeres
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
Nivel de instrucción
El Cuadro 3 muestra el nivel de instrucción de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. El nivel de instrucción de costarricenses y nicaragüenses
residentes (independientemente de su condición migratoria) reporta una distribución similar en ambos
grupos, tal y como se consigna en el Cuadro 3. El porcentaje de nicaragüenses sin ninguna instrucción
es mayor que el de los costarricenses en esa condición (9.5% y 4% respectivamente). En primaria y
secundaria las cifras son semejantes.
268
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Por su parte, el mayor contraste se expresa en el porcentaje de población con estudios universitarios.
Ello indicaría un número importante de nicaragüenses que no finaliza la secundaria y, en consecuencia,
no puede ingresar a una universidad o aunque, la haya finalizado, no cuenta con posibilidades para
ingresar a la educación superior. Los datos del Censo no permiten identificar el peso de estas u otras
posibles explicaciones, pero sí sugieren la necesidad de futuras investigaciones a este respecto.
Cuadro 3
Nivel de instrucción. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3583220)
(n = 284076)
Nivel de instrucción % %
Ninguno 4,0 9,5
Primaria 46,5 48,9
Secundaria 31,9 35,1
Universidad 17,5 6,5
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
El Cuadro 4 muestra el nivel de instrucción de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica para los
años 2011 y 2000; además, una comparación con la población costarricense. El Cuadro 4 retoma el
tema del nivel de instrucción y compara los resultados de los censos realizados en los años 2000 y
2010. En general, tanto costarricenses como nicaragüenses mejoraron sus niveles de instrucción a lo
largo de la década. Por ejemplo, el porcentaje de nicaragüenses sin instrucción disminuyó en un 5.4
%. En ambos grupos, la población con estudios de secundaria aumentó; inclusive el aumento entre los
nicaragüenses fue mayor, alcanzando un 10.1% de incremento (6.9% entre los costarricenses). Por
su parte, los costarricenses con estudios universitarios aumentan en un 6% y los nicaragüenses en esa
condición apenas un 2%. Ello confirma lo dicho arriba en el sentido de una muy débil participación de
los nicaragüenses en la educación superior.
Cuadro 4
Nivel de instrucción. Censo de Costa Rica 2000 y 2011
2000 2011
Inmigrantes Inmigrantes
Costa Rica Costa Rica
nicaragüenses nicaragüenses
Nivel de
% % % %
instrucción
Ninguno 6,7 14,9 4,0 9,5
Primaria 56,7 55,7 46,5 48,9
Secundaria 25,0 24,9 31,9 35,1
Universidad 11,5 4,5 17,5 6,5
Total 100,0 100,0 100,0 100,0
Fuente: INEC, IX y X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2000 y 2011.
269
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
Estado civil
El Cuadro 5 muestra el estado civil de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una comparación
con la población costarricense. El estado civil es uno de los temas en que se evidencia mayor contraste
entre costarricenses y nicaragüenses. Por ejemplo, el porcentaje de uniones libres entre nicaragüenses
duplica el de costarricenses. En contraste, los costarricenses casados superan a los nicaragüenses
en la misma condición (34.3 y 24.1% respectivamente). De manera similar, los solteros costarricenses
superan a los solteros nicaragüenses en un 11.3%.
Si se compara la diferencia de uniones libres entre ambos grupos (un 24.5% más en nicaragüenses)
con la diferencia entre casados y solteros también entre ambos grupos (21.5% más en costarricenses)
se notará que tienden a ser similares. Es decir, los costarricenses que no viven en unión libre tienden
a estar casados o solteros. Mientras tanto, los porcentajes de separados y divorciados son similares
entre ambos grupos.
Uno de los factores que explican los contrastes entre costarricenses y nicaragüenses con respecto
al estado civil,, indica que la emigración forzada por motivos económicos, como es mayormente la
nicaragüense, tiende a establecer relaciones de pareja, con el fin de procurarse mejores condiciones
de vida. En este contexto, la prioridad sería la relación, más que la sanción institucional de esta en la
modalidad de matrimonio (10.2 menos entre nicaragüenses). Sin duda, se requiere más investigación al
respecto, pues se podría explorar hasta qué punto la migración internacional y la ausencia de recursos
materiales introduce cambios culturales en torno a las formas de constitución de parejas y familias.
Cuadro 5
Estado civil. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaragüenses
(n = 3106236)
(n = 271427)
Estado civil % %
Unión libre 14,6 39,1
Casado (a) 34,3 24,1
Separado (a) 3,3 4,0
Divorciado (a) 3,7 1,2
Viudo (a) 3,4 2,2
Soltero (a) 40,7 29,4
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población,
Costa Rica 2011.
Fecundidad
El gráfico 3 muestra la paridad media de las mujeres inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica, así
como una comparación con la población costarricense. La fecundidad se midió a partir de la paridad
media, también llamada descendencia final y se refiere al número de hijos que en promedio tuvieron
las mujeres a lo largo de su vida. Esta medida permite conocer los patrones de fecundidad en una
población. La Figura 4 muestra, por ejemplo, que la descendencia de las mujeres al final de su vida
reproductiva (45 años) es en promedio un poco más de dos hijos para las inmigrantes nicaragüenses
versus cerca de 1,5 hijos promedio para las costarricenses. A los 25 años, las mujeres inmigrantes
nicaragüenses en promedio han tenido un poco más de un hijo versus 0.5 hijos para las costarricenses.
nicaragüenses versus cerca de 1,5 hijos promedio para las costarricenses. A los 25
años, las mujeres inmigrantes nicaragüenses en promedio han tenido un poco más de
270 un hijo versus 0.5 hijos para las costarricenses.
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 3
Número promedio de hijos según edad. Costa Rica 2011
Edad
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011
Perfil
El del hogar
Cuadro 6 muestra la tipología de hogar de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. El hogar conyugal con hijos es el hogar predominante
entre los inmigrantes nicaragüenses (42,2%) seguido del hogar conyugal con hijos y familiares (18,8%)
y el monoparental y familiares (7,5%). Los hogares compuestos de los inmigrantes nicaragüenses
superan al de los costarricenses en todas sus categorías.
271
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
Cuadro 6
Tipo de hogar. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3915813)
(n = 287766)
Tipo de hogar % %
Nuclear
Conyugal sin hijos 6,0 6,4
Conyugal con hijos 49,1 42,2
Nuclear monoparental 11,9 7,1
Extenso
Conyugal sin hijos y fam. 1,4 2,3
Conyugal con hijos y fam. 13,7 18,8
Monoparental y fam. 8,4 7,5
Jefe y familiares 2,5 2,3
Compuesto
Nuclear y no familiares 1,5 3,6
Extenso y no familiares 1,2 3,7
Jefe, familiares y no fam. 0,3 0,7
Otros
Unipersonales 3,2 3,3
Hogares no familiares 0,5 1,2
Colectivos y sin vivienda 0,4 0,8
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
Tenencia de la vivienda
El Cuadro 7 muestra la tenencia de la vivienda de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. La escasez de recursos que se mencionó en el apartado
de Estado civil posiblemente se expresa de una manera más evidente en lo que se refiere a la tenencia
de vivienda. Un 34.3% más de los costarricenses tienen vivienda propia; mientras tanto un 27.4%
más de nicaragüenses alquilan vivienda, tal como se evidencia en el Cuadro 7. También son más los
nicaragüenses que viven en una casa prestada o en lo que suele llamarse “precario”. Este contraste sin
duda incide en las relaciones interpersonales, en las formas de construir pareja, en las posibilidades y
limitaciones para criar hijos, entre muchos otros aspectos.
Cuadro 7
Tenencia de la vivienda. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3900812)
(n = 285409)
Tenencia de la vivienda % %
Es propia 62,5 28,2
Es propia (pagando) 11,8 5,7
Alquilada 16,4 43,8
Prestada (por trabajo) 2,6 10,6
Prestada (otro motivo) 4,6 4,3
Precario 1,2 6,8
Otro 0,7 0,6
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
Tipo de vivienda
El Cuadro 8 muestra el tipo de vivienda de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. Las casas independientes son el tipo de viviendas
predominantes entre los inmigrantes (89%) aunque ese porcentaje es significativamente menos que
el de los costarricenses (94,8%). En segundo lugar, los edificios de apartamentos son los tipos de
vivienda más frecuentes (3.5%) y los tugurios (3.2%). En estas últimas dos categorías, los inmigrantes
superan a la población costarricense.
Cuadro 8
Tipo de vivienda. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3915813)
(n = 287766)
Tipo de vivienda % %
Casa independiente 94,83 88,92
En condominio 1,15 1,04
Edificio apartamentos 2,31 3,53
Apart. en condominio 0,34 0,30
Palenque o rancho 0,17 0,02
Cuarto en cuartería 0,13 1,84
Tugurio 0,57 3,19
Otro 0,13 0,35
Barraca 0,02 0,33
Albergue infantil 0,03 0,02
Asilo de ancianos 0,06 0,04
Cárcel 0,14 0,22
Pensión, convento 0,12 0,19
Sin vivienda 0,01 0,02
Total 100,00 100,00
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
273
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
Jefatura de hogar
Aunque la proporción de mujeres es mayor entre los inmigrantes nicaragüenses, la jefatura masculina
sigue siendo la predominante. Algunas preguntas para responder en futuras investigaciones sobre
la población inmigrante son: ¿Cuál es la composición de estos hogares? ¿Cuáles son los niveles de
ingreso de los hogares de jefaturas masculinas cuando se les compara con jefaturas femeninas?
Cuadro 9
Jefatura del hogar. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 1093095)
(n = 102573)
Aseguramiento
El Cuadro 10 muestra el tipo de aseguramiento de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. Los resultados acerca del aseguramiento son de los más
sorprendentes del Censo 2011. Los nicaragüenses reportan porcentajes mayores de aseguramiento
por ser asalariados y por cuenta propia, los cuales sumados alcanzan 37%; mientras tanto, en el caso
de los costarricenses, ambas categorías suman 31%.
Ahora bien, cuando se compara el aseguramiento familiar, el cual permite asegurar a parientes directos
(pareja, hijos o personas adultas mayores) de una persona asalariada, el porcentaje de nicaragüenses
incluido en esta modalidad es de apenas 22.8%, siendo que en el caso de los costarricenses es de
41.4%. Es decir, los nicaragüenses no emplean el aseguramiento familiar al cual la normativa de la Caja
Costarricense de Seguro Social les da derecho.
Al menos cuatro factores no necesariamente excluyentes podrían explicar esta tendencia. Uno de
estos factores podría ser el desconocimiento de los alcances del aseguramiento familiar, el cual a veces
se acompaña de la hostilidad de quienes prestan el servicio, aún y cuando se tenga los documentos al
día. Un segundo factor referiría al hecho de que siendo la población migrante mayormente joven, con
pocos requerimientos de atención en salud, el aseguramiento no sería una prioridad.
En tercer lugar, podría ser el caso de que haya integrantes del grupo familiar indocumentados, lo cual
casi que los deja fuera de la cobertura de la seguridad social. En cuarto lugar, especialmente cuando
quien está asegurado es varón, pueden darse casos que este no asegura al resto del grupo familiar,
pues no asume su responsabilidad de extender el derecho al acceso a servicios de salud al resto del
grupo familiar.
274
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Sean estos o no los factores principales, sin duda uno de los retos pendientes que surgen de
este análisis, es cotejar el monto cotizado por nicaragüenses con el costo estimado de atención de
nicaragüenses asegurados y no asegurados. Cifras reportadas por la Caja Costarricense del Seguro
Social para el año 2007 (Ávalos, 2008; Sandoval et al. 2012: 226; Bonilla, 2007), muestran que
dicho cotejo daba un saldo positivo para la institución, es decir, la cotización superaba la inversión.
Lamentablemente, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) no ha publicado datos más recientes
al respecto.
Cuadro 10
Tipo de aseguramiento. Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3915813)
(n = 287766)
Tipo aseguramiento % %
Asalariados 22,3 27,4
Cuenta propia 8,7 9,6
No contributivo 1,3 0,4
Pensionado CCSS 4,8 1,3
Asegurado familiar 41,4 22,8
Asegurado estado 7,9 3,0
Otros 0,7 0,6
Sin seguro 12,9 34,8
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
2000 2011
Inmigrantes Inmigrantes
Costa Rica Costa Rica
nicaragüenses nicaragüenses
Tipo aseguramiento % % % %
Asalariados 18,5 22,6 22,3 27,4
Cuenta propia 6,6 4,6 8,7 9,6
Pensionado CCSS 4,1 1,2 6,1 1,7
Asegurado familiar 44,8 24,1 41,4 22,8
Asegurado estado 8,7 7,1 7,9 3,0
Otros 0,7 0,7 0,7 0,6
Sin seguro 16,6 39,8 12,9 34,8
Total 100,0 100,0 100,0 100,0
Fuente: INEC, IX y X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2000 y 2011.
275
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
El Cuadro 12 muestra el porcentaje de inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica por sexo y años
2000 y 2011. Si se desagrega el aseguramiento de los y las nicaragüenses, los resultados muestran
también tendencias muy sugerentes. En general, el porcentaje de aseguramiento de los hombres
disminuye y el de las mujeres aumenta, como se aprecia en el Cuadro 12. Prácticamente en todas
las modalidades de aseguramiento, las mujeres muestran un aumento y en su conjunto reportan un
incremento de aseguramiento del 5.1%. Esta tendencia podría estar manifestando un aumento en la
incorporación de las mujeres nicaragüenses al trabajo remunerado; de hecho los incrementos por
condición de asalariadas y por cuenta propia son mayores que el aumento del aseguramiento familiar.
A su destacado papel en el trabajo reproductivo asociado a sus propias familias, se suma un importante
incremento en su trabajo productivo remunerado.
Cuadro 12
Inmigrantes nicaragüenses. Tipo de aseguramiento por sexo. Costa Rica 2000 y 2011
Aspectos socioeconómicos
Estatus laboral
El Cuadro 13 muestra el estatus laboral de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una
comparación con la población costarricense. Las tendencias de aseguramiento posiblemente
respondan al aumento de la proporción de nicaragüenses en la Población Económicamente Activa
(PEA). Como se aprecia en el Cuadro 13, el porcentaje de nicaragüenses en la PEA es mayor en un
8.2%. Esta diferencia se vuelve crucial en algunos sectores de la economía, tales como la agricultura
de exportación, tanto en el caso de productos tradicionales como el café o el banano, como en cuanto
a productos más recientes, tales como la piña, la naranja, el melón o la yuca, para mencionar algunos.
Lo mismo se puede decir de la industria de la construcción o el trabajo doméstico remunerado.
Inmigrantes
Costa Rica (n
nicaraguenses
= 3106236)
(n = 271427)
Estatus laboral % %
Económ. activo (PEA) 43,2 51,4
Inactivos 56,8 48,6
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
Ocupación
El Cuadro 14 muestra la ocupación de los inmigrantes nicaragüenses en Costa Rica y una comparación
con la población costarricense. La mayor presencia de nicaragüenses en la PEA se concentra, como
se aprecia en Cuadro 14, en ocupaciones pocas o no calificadas. Por ejemplo, el porcentaje de
nicaragüenses en ocupaciones no calificadas más que duplica el porcentaje de costarricenses en esa
condición. Como es esperable, los costarricenses predominan en ocupaciones intelectuales y técnicas.
Los datos confirman la tesis de que los nicaragüenses realizan las tareas menos remuneradas, pero
que al mismo tiempo son indispensables para la producción y reproducción de la vida.
A su vez, si se desagrega las ocupaciones no calificadas por sexo, se observa que el porcentaje de
mujeres nicaragüenses en esta categoría supera al porcentaje de mujeres costarricenses (43.1% y 33.5
respectivamente).
Cuadro 14
Ocupación. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 1468663)
(n = 156005)
Ocupación % %
Directivos 1,5 0,3
Profesion intelectuales 14,9 2,2
Técnicos 10,7 3,5
Administrativos 8,4 3,0
Ventas y servicios 20,0 20,0
Agricultura y pesca 4,8 2,7
Construcc y mecánicos 11,1 17,2
Operadores 9,3 4,9
No calificados 19,4 46,3
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
Categoría ocupacional
Cuadro 15
Categoría ocupacional. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 1468663)
(n = 156005)
Categoría Ocupacional % %
Patrono 6,5 3,8
Cuenta propia 20,8 17,2
Sector privado 51,1 63,3
Sector público 16,9 2,4
Empleada doméstica 3,7 12,6
Ayudante sin pago 1,1 0,7
Total 100,0 100,0
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población, Costa Rica 2011.
278
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Remesas
El Cuadro 16 muestra el porcentaje de personas que reciben y envían remesas entre los inmigrantes
nicaragüenses en Costa Rica y una comparación con la población costarricense. Por primera vez en
un censo de población se consulta sobre el tema de las remesas. Sorprende que el porcentaje de
nicaragüenses que envía remesas es relativamente bajo (24.4%), lo cual podría indicar cuán fuertes
pueden o no ser los vínculos con integrantes de sus familias en Nicaragua.
Asimismo, el Censo reporta que un 2.8% de la población costarricense recibe remesas. Este porcentaje
es similar al reportado por el Censo de los Estados Unidos del año 2010, en el que se registra un
2.76% de costarricenses, para un aumento de 84% respecto al censo realizado en el año 2000 (Ennis,
Ríos-Vargas, Merarys y Nora, 2011; véase también Caamaño, 2010). De la mayor importancia podría
ser el análisis de las repercusiones socioculturales que podría tener el hecho de que una sociedad
generalmente hostil hacia la inmigración empiece a reconocerse como expulsora de población.
Cuadro 16
Remesas. Censo de Costa Rica 2011
Inmigrantes
Costa Rica
nicaraguenses
(n = 3900812)
(n = 285409)
Remesas % %
Recibe remesas 2,8 4,2
Envía remesas 2,3 24,4
Fuente: INEC, X Censo Nacional de Población,Costa Rica
2011 .
279
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Bonilla & Sandoval
IV. Conclusión
Los censos de población tienen varias limitaciones para el estudio de migración, entre ellas: 1)
Subregistran la migración irregular; 2) No proveen información sobre el estatus migratorio del inmigrante;
3) Subregistran a residentes temporales; 4) Captan solo los números acumulados de inmigrantes, pero
no los flujos migratorios; el análisis de estos últimos permitiría el estudio de la migración como evento
y proceso (Hugo, 2003). Los censos de población, sin embargo, continúan siendo las fuentes más
confiables para el estudio de la migración (Barquero y Vargas, 2004).
La principal conclusión de este estudio es que se observa una estabilización y lento decrecimiento
de la inmigración nicaragüense. Esta tendencia se inserta en un decrecimiento de la población
costarricense sobre todo por el descenso de la tasa de fertilidad y el aumento de la esperanza de vida.
A ello se agrega la emigración de costarricenses, que ha aumentado en la última década. Se trata de
un cambio demográfico en curso, el cual tendrá implicaciones profundas en la sociedad costarricense.
En este contexto, se requieren políticas públicas de población y no exclusivamente de migración.
Las imágenes que representan a la migración nicaragüense como una “carga” no corresponden
con los hallazgos, por ejemplo, referidos a la PEA y a las tendencias de aseguramiento. Este artículo
confirma que tanto en términos demográficos como económicos, la sociedad costarricense y la
migración nicaragüense al país mantienen profundas relaciones de interdependencia.
El Censo solamente contabiliza a los residentes permanentes y deja por fuera a los habitantes
temporales y a los turistas. Por la obligatoriedad del Censo, todos los residentes habituales que vivían
en viviendas colectivas (hoteles, cárceles, conventos, etc.) fueron contabilizados.
Este artículo abre temas que requieren más investigación; por ejemplo el bajo porcentaje de
nicaragüenses con estudios universitarios, la poca utilización del seguro social familiar, el posible
agotamiento del bono demográfico proveniente de nicaragüenses y el bajo porcentaje de remesas.
Por último, pero no menos importante, las políticas públicas deben de considerar los cambios
demográficos que está experimentando el país. Ello implica considerar las afectaciones mutuas de
mediano y largo plazo del descenso de la tasa de natalidad, el aumento de la esperanza de vida,
estabilización de la migración nicaragüense y el incremento de la emigración de costarricenses.
V. Bibliografía
Ávalos, Ángela “Inmigrantes dejan de ser una carga para la CCSS” La Nación, Recuperado de http://
wvw.nacion.com/ln_ee/2008/octubre/10/pais1731155.html..
Barquero, J. y Vargas J. (2004). La migración internacional en Costa Rica: estado actual y consecuencias.
En: Herrera, Reinaldo y Grettel López (eds.), Evolución Demográfica de Costa Rica y su Impacto en los
Sistemas de Salud y de Pensiones. San José: Academia de Centroamérica, pp. 55-88.
280
Migración y Remesas Bonilla & Sandoval Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Bonilla, R. (2007) Seguro social y usos de servicios de salud entre personas nicaragüenses en
Costa Rica. En Carlos Sandoval (editor) El mito roto. Inmigración y emigración en Costa Rica. San José:
Editorial de la Universidad de Costa Rica.
Calderón Milán , M. J. y Hidalgo Vega Á. (s.f.) La segregación sectorial y ocupacional de los inmigrantes
en España: Identificación de los espacios laborales prioritarios por países de origen. En XVI Jornadas
de la Asociación de Economía de la Educación, Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, España.
Recuperado dehttp://www.congresos.ulpgc.es/aeet_aede/JEcoEducacion/index.php?Pagina=Sesion3
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Conferencia de Prensa (2012) La Ley de Migración en Costa Rica: A dos años de su entrada en
vigencia. Promesas, realidades y desafíos. San José: Instituto de Investigaciones Sociales, Universidad
de Costa Rica.
Ennis, S. R. Merarys Ríos-Vargas, Merarys and Albert, N. G. (2011) The Hispanic Population: 2010
Census Briefs. Recuperado de www. census.gov/prod/cen2010/ briefs/c2010br-04.pdf
Graeme, H. (2003). Circular Migration: Keeping Development Rolling?. En: Migration Information
Source.
Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) (2012) Respuesta a nota del 20 de noviembre 2012, respecto
su solicitud de ingreso del ingreso de personas migrantes en condición irregular a los servicios del INA,
SGT 1041-2012. San José.
Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (2012). Expediente: 11-011315-0007-CO -
Resolución Nº 2012005251. San José.
Sandoval, C, Brenes M. y Paniagua L. (2012). La dignidad vale mucho. Mujeres forjan derechos en
Costa Rica. San José: Editorial de la Universidad de Costa Rica.
Resumen
Este estudio presenta los resultados del Censo 2011, con respecto a la emigración de costarricenses
al extranjero y está basado en dos preguntas del Censo; así como otras fuentes complementarias
de datos. El estudio estima el número de emigrantes costarricenses, así como las características de
esta población y su perfil demográfico y económico en los Estados Unidos, principal país de destino.
Asimismo, el estudio recalca la importante y bidireccional relación entre migración internacional y
desarrollo nacional.
I. Introducción
Las teorías acerca de por qué las personas emigran internacionalmente pretenden medir y explicar
el fenómeno en distintos niveles (ver Massey et al 1998 y Massey 2003 para un resumen). Unas se han
enfocado en factores a nivel del individuo, como educación o nivel socioeconómico, que aumentan su
probabilidad de emigrar. Otras explican la emigración a nivel de hogar.
El hogar se define como una unidad de producción que se adapta a las incertidumbres salariales que
conllevan los cambios en las condiciones de mercado (Katz y Stark 1986, Mendola 2008). Bajo esta
perspectiva, uno o más miembros del hogar emigran para diversificar el riesgo asociado no sólo a las
1/ Antropóloga y Demógrafa, Departamento de Antropología, Universidad de Cincinnati, EE.UU.; investigadora afiliada al Centro
Centroamericano de Población, Universidad de Costa Rica; e investigadora afiliada al Observatorio de la Globalización,
Universidad EAN, Colombia.
282
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
incertidumbres salariales, sino también a los malos mercados locales de crédito y seguros (Stark y Katz
1986, Lucas 1987).
Otras teorías se enfocan no en el origen, sino en la perpetuación de las redes migratorias. Estas
establecen la importancia de las redes sociales como fuentes de conocimiento acerca del proceso
migratorio y de adaptación a una nueva localidad, así como su papel en minimizar el riesgo y mejorar
las condiciones de adaptación para nuevas olas de inmigrantes (Hagan 1998, Massey 1990, Menjívar
2000).
Recientemente estas y otras teorías se han incorporado para explicar las migraciones internacionales
como una consecuencia del desarrollo contemporáneo de la economía global. Bajo este esquema
se entiende por desarrollo a las las políticas y programas implementados después de la II Guerra
Mundial y que buscan la integración de los mercados de los países más pobres (Cohen y Dannhauser
2002). Los orígenes de las migraciones internacionales están entonces relacionados con cambios en
la estructura global de mercados (Castells 1989, Massey 2002, Morawska 1990, Portes y Walton 1981,
Sassen 1988), cuando áreas periféricas o aisladas son integradas al mercado global (Delgado-Wise
y Guarnizo 2007, Lewellen 2002). Es dentro de este contexto que los hogares buscan adaptarse a los
cambios económicos y diversificar sus ingresos por medio de la emigración para reducir el riesgo y la
incertidumbre. Es también dentro de este contexto que individuos con ciertas características son más
propensos a emigrar, y en el que se establecen redes sociales que perpetúan la migración.
Esta explicación sobre cómo el desarrollo promueve la emigración internacional sirve para contrarrestar
un mito acerca de las migraciones internacionales: son las personas más pobres del mundo quienes
emigran. Rara vez son los individuos más pobres quienes emigran, ya que para emigrar a otro país se
necesitan recursos económicos, tolerar riesgos físicos, emocionales y financieros, poseer de una red
social que facilite la salida, tránsito e incorporación, poseer la información correcta sobre el proceso,
y tener aspiraciones particulares que puedan ser cumplidas con la migración (DeJong 2000). Todos
estos factores se asocian a un aumento de nivel educativo y económico. Es decir, cuando el desarrollo
de un país conlleva a mayores niveles educativos y económicos, los individuos adquieren también las
condiciones perfectas para que se dé una emigración.
Por el contrario, tampoco son las personas de los países más pobres quienes constituyen los mayores
flujos migratorios del mundo. El modelo de desarrollo que se ha ido esparciendo globalmente involucra
la producción capitalista y la apertura e integración de mercados. Esta expansión de mercados
conlleva transformaciones económicas, políticas y sociales. La entrada de nuevos mercados y formas
de producción interrumpe y desorganiza las estructuras socioeconómicas presentes, y desplaza a
una población móvil que busca nuevas formas de sustento. En estas economías en transición, tanto
la producción agrícola rural como los mercados laborales urbanos se tornan volátiles. De esta forma,
la creciente inserción en el mercado global acelera la emigración. Por estas razones, el modelo de
desarrollo que adopte un gobierno puede tener consecuencias directas en el aumento de la emigración
poblacional de distintas zonas del país.
Primero, la emigración desencadena las remesas, en dinero o especie, que los inmigrantes envían
a sus familias en sus comunidades de origen. El fuerte interés de gobiernos, instituciones financieras
283
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
internacionales, y otros actores en las remesas radica en su potencial para el desarrollo económico
local. El potencial de las remesas es amplio. Si son invertidas en la agricultura, negocios, u otras
actividades productivas, pueden mejorar la situación económica de los hogares (Cohen 2005; Cohen
2010; Cohen y Rodríguez 2005a; Cohen y Rodríguez 2005b; Cohen y Rodríguez 2006; Orozco 2003),
aunque se debate si es más común que las remesas sean utilizadas en actividades de consumo que
más bien generan dependencia (Cohen 2001; Cohen y Rodríguez 2005b; Edelman y Haugerud 2005;
Newland 2003).
En la agricultura, las remesas han sido asociadas a la compra de tierras, y la adopción de nuevas
tecnologías (Konseiga, 2004; Mendola, 2008; Orozco, 2003). Para los miembros de hogar que no
emigran, las remesas pueden también proteger al hogar de la falta de seguros o crédito (Lucas 1987;
Orozco 2003; Stark 1991).
La emigración también desencadena las «remesas sociales» (Levitt 1998). Los emigrantes no solo
envían dinero o bienes materiales a sus familias, sino también(o al regresar, traen consigo) nuevas
normas, comportamientos, identidades, valores y redes sociales. Esto puede poco a poco alterar la
identidad cultural de un país e incrementa sus relaciones con los países hacia los cuales emigran las
personas.
El proceso de emigración también puede obligar a un país o una sociedad a redefinir el concepto
de ciudadanía, tanto legal como culturalmente. Según las características de la población emigrante y
de los gobiernos actuales, la población emigrante puede tener opiniones y afiliaciones políticas muy
distintas a la de la población que permanece en el país. En Costa Rica, inició a partir del 2009 el proceso
para permitir a los costarricenses el voto en elecciones presidenciales y referendos en consulados en
el extranjero (Tribunal Supremo de Elecciones).
II. Metodología
Para este análisis se cuenta con una muestra aleatoria del 10% del Censo 2011 (INEC). El análisis
de los datos del Censo se basa principalmente en la pregunta número 7, que contiene dos partes.
En un segmento se indica si alguna persona, quien formaba parte del hogar se encuentra viviendo
fuera del país. En el segundo segmento, se indica el número de personas que viven en el extranjero.
Esta segunda parte es contestada solamente por aquellos hogares que indicaron la presencia de, al
menos, un emigrante. La muestra total disponible representa una población total en el país de 4.279.720
personas, de las cuales 3.899.240 reportan haber nacido en Costa Rica, y 380.480 reportan haber
nacido en el extranjero.
Para este análisis, como el fenómeno de interés son los costarricenses, quienes residen en el
extranjero, se delimitó la muestra solamente a aquellos nacidos en Costa Rica. Esto tiene el sesgo
de que no capta a los costarricenses por naturalización que residen en el extranjero, pero dado a
que posiblemente muchos de ellos sean costarricenses naturalizados que regresaron a su país de
nacimiento, se trata de un fenómeno distinto al que interesa aquí. En todos los análisis, se delimitó la
muestra a solamente los jefes de hogar. Esto se realizó porque la encuesta sobre la emigración se
encuentra solamente a nivel de hogar y no de cada individuo.
El análisis del perfil de la comunidad costarricense en Estados Unidos se realizó utilizando datos de
la encuesta American Community Survey (ACS) del 2011, a la cual se tuvo acceso por medio del sitio
IPUMS (ver Ruggles et al 2010). Esta encuesta anual tradicionalmente recoge los mismos datos que el
censo de ese país. Se delimitó la muestra también a las personas que seleccionaron Costa Rica como
su país de nacimiento, captando en total a 86.052 individuos.
III. Resultados
Según datos del Censo 2011, el número aproximado de costarricenses residentes en el extranjero
es de 43.600. En el Censo, 33.650 hogares, o el 3,08% de todos los hogares costarricenses censados
reportan al menos un miembro del hogar que vive en el exterior. Se tomó la cifra de 43.600 emigrantes,
esto representa el 1,00% de la población nacida en el país. Esta cifra se considera baja, ya que en
comparación, aproximadamente el 23% de la población global reside en un país en el cual no nació.
El censo también pregunta por el número de miembros del hogar que reside en el extranjero. No
todos los censados contestaron esta pregunta, por lo cual si un hogar reporta al menos un emigrante,
pero no específica la cantidad, se cuenta en este estudio como un solo emigrante en el hogar. El cuadro
1 resume los resultados.
285
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Cuadro 1
Número de emigrantes por hogar
en Costa Rica
1 17 770 17 770
2 3 930 7 860
3 1 140 3 420
4 510 2 040
5 190 950
6 80 480
7 70 490
8 90 720
No indicaron 9 870 9 870
Total 33 650 43 600
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo
2011, INEC.
La segunda forma en que el número de emigrantes pueda estar subestimado es porque 9.870 hogares
indicaron tener algún miembro emigrante en su hogar, pero no especificaron el número total. Para este
análisis esos casos se midieron como el mínimo; es decir, una persona, cuando en realidad en estos
hogares puede haber más de un miembro residiendo en el extranjero.
Otros investigadores han intentado estimar el número de emigrantes costarricenses mediante otras
técnicas. El Banco Mundial (2010) calcula el número de emigrantes costarricenses en 125.300. Esta
estimación la realizan en conjunto con varias organizaciones y gobiernos según los datos que manejen.
Brenes (2011) utilizó datos de entradas y salidas de la Dirección General de Migración y Extranjería
para estimar la cifra de emigrantes costarricenses. Según sus cálculos el número de emigrantes
costarricenses es de 124.539. Ambas cifras son mayores a las que se obtienen del Censo.
Si bien hay diferentes estimaciones del número total de emigrantes costarricenses, todas las fuentes
están de acuerdo en cuanto a las regiones geográficas de origen de los emigrantes. Los datos que aquí
se presentan reflejan los hallazgos de otras investigaciones (Brenes 2011, Vargas 2004).
Los emigrantes costarricenses salen principalmente de tres zonas: la Gran Área Metropolitana (GAM),
el eje cafetalero de la zona sur, así como de las cabeceras de provincia. El cuadro 2 demuestra los
286
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
veinte cantones con el mayor de número de hogares que reportan al menos un miembro en el extranjero.
Estos veinte cantones contienen el 65% de todos los hogares con emigrantes.
Cuadro 2
Veinte cantones en Costa Rica con el
mayor número de hogares con emigrantes
Número de
Cantón Provincia
hogares
El mapa 1 demuestra la distribución y concentración de estos hogares por cantón. En el mapa, cada
punto representa diez hogares. Este mapa indica una concentración de estos hogares en la GAM y
sectores de la zona sur.
287
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Mapa
Mapa 1. Distribución cantonal de hogares No.Rica
en Costa 1 con algún miembro en el extranjero.
Distribución cantonal de hogares en Costa Rica
con algún miembro en el extranjero.
Nicaragua
Mar Caribe
Panamá
Océano Pacífico
El cuadro 3 demuestra los veinte cantones con el mayor número de individuos emigrantes. Esto refleja
el hecho de que en algunas zonas puede haber hogares de los cuales un mayor número de miembros
emigran. Sin embargo, de los veinte cantones, 19 permanecen en la lista, aunque en distinto orden.
Grecia sale de la lista, y aparece Siquirres.
Cuadro 3
Veinte cantones en Costa Rica con
el mayor número de personas
emigrantes
Número de
Cantón
emigrantes
El mapa 2 muestra el porcentaje de emigrantes para cada cantón. Estas cifras toman en cuenta
que la población de cada cantón difiere, por lo tanto, el número de emigrantes puede ser más visible
en cantones con menor población. El mapa resalta la importancia del fenómeno emigratorio para el
corredor cafetalero de la zona sur, seguido por sectores de la GAM y algunos otros cantones.
289
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Mapa No. 2:
Emigrantes
Mapa como
2. Emigrantes comoporcentaje
porcentaje dede la población
la población total cantonal
total cantonal de Costa Rica.
de Costa Rica.
Nicaragua
Mar Caribe
Simbología
0.62 - 2.0% Panamá
Océano Pacífico
2.0 - 3.0%
3.0 - 4.0%
4.0 - 6.0%
6.0 - 10.55%
´
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo 2011.
El cuadro 4 especifica los veinte cantones por el mayor porcentaje de personas emigrantes. De este
modo, salen de la lista cinco cabeceras de provincia: Alajuela, Limón, Heredia, Cartago, y Puntarenas,
así como La Unión, Desamparados, San Carlos, y Pococí, y entran varios cantones del corredor
cafetalero sur y de Heredia.
Cuadro 4
Veinte cantones en Costa Rica con el mayor
porcentaje de personas emigrantes
Porcentaje
Cantón Provincia población
emigrante
Finalmente, también se dispone de los datos a nivel distrital. De los 472 distritos censados, 55 contienen
el 50% de la población emigrante, y 130 contienen el 75%. El cuadro 5 demuestra los veinte distritos
con el mayor número de individuos emigrantes. De estos distritos, trece pertenecen a la provincia de
San José, tres a Limón, tres a Alajuela y uno a Heredia. Estos distritos contienen el 28% del total de los
emigrantes del país.
291
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Cuadro 5
Veinte distritos en Costa Rica con el mayor número de personas
emigrantes
Número
Distrito Cantón Provincia
Emigrantes
El mapa 3 demuestra la distribución y concentración de los emigrantes por distrito. En el mapa, cada
punto representa a diez individuos. De nuevo se observa una alta concentración de emigrantes en la
GAM, seguida por un sector de la zona sur.
292
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa No.3:
Distribución distrital de emigrantes en Costa Rica.
Mapa 3. Distribución distrital de emigrantes en Costa Rica.
Nicaragua
Mar Caribe
Panamá
Océano Pacífico
´
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo 2011.
Simbologia: Cada punto representa 10 emigrantes.
Considerando que la población total de cada distrito varía, el cuadro 6 indica los veinte distritos con
el mayor porcentaje de individuos emigrantes. De estos, catorce pertenecen a la provincia de San José,
cuatro a Puntarenas, y dos a Alajuela. Cabe resaltar aquí que Guanacaste es la provincia actualmente
menos afectada por el fenómeno emigratorio. De los veinte cantones y distritos con mayor número
y porcentaje de emigrantes, ninguno pertenece a Guanacaste. El cantón guanacasteco con mayor
número de emigrantes es Santa Cruz, que aparece en la posición #34, seguido de Nicoya en la posición
#35 (de un total de 81 cantones). Estos cantones contienen 350 y 340 emigrantes, respectivamente. El
cantón guanacasteco con el mayor porcentaje de emigrantes es Tilarán, que aparece en la posición
#47 y del cual menos del 1% de la población ha emigrado. En cuanto a los distritos guanacastecos,
Liberia aparece de primero (en la posición #46) con 240 emigrantes, y Puerto Carrillo es el distrito
guanacasteco con el mayor porcentaje de población emigrante (2,56%), apareciendo de #41 en la lista.
293
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Cuadro 6
Veinte distritos en Costa Rica con el mayor porcentaje de
personas emigrantes
Porcentaje
Distrito Cantón Provincia
emigrantes
Mapa No. 4:
Emigrantes como porcentaje de la población total distrital de Costa Rica.
Mapa 4. Emigrantes como porcentaje de la población total distrital de Costa Rica.
Nicaragua
Mar Caribe
Simbología
< 0.50%
0.50 - 1.00% Panamá
Océano Pacífico
1.00 - 2.00%
2.00 - 3.00%
3.00 - 4.83%
´
Fuente: Elaboración propia con datos del Censo 2011.
El formato de los datos del Censo 2011 no permite hacer una descripción de los individuos emigrantes.
Esto se debe a que no hay información a nivel de individuo acerca de la emigración, solamente se
encuentran los datos agregados a nivel de hogar. Sin embargo, se puede realizar una comparación
entre los hogares con emigrantes y sin ellos para dilucidar algunas características.
Cuadro 7
Tenencia de propiedad por tipo de hogar en
Costa Rica
Este cuadro señala que los hogares que reportan emigrantes tienden a adquirir una vivienda
más segura; esto es con mayores porcentajes de vivienda propia pagada, y menores porcentajes
de viviendas alquiladas, prestadas, o en precario. Urge resaltar que estos resultados demuestran
correlaciones, pero no deben tomarse como relaciones causales. Es decir, estos datos por sí solos no
permiten dilucidar la dirección de esa relación: es posible que los hogares con casa propia tengan más
estabilidad financiera y esto haya permitido la emigración de alguno de sus miembros, pero también es
posible que el tener a un familiar en el extranjero que envía remesas haya permitido pagar la vivienda
en su totalidad.
El cuadro 8 demuestra la posesión de bienes de lujo según el tipo de hogar. El cuadro indica el
porcentaje de hogares que poseen un televisor de plasma, televisión por cable o satélite, computadora
de escritorio o portátil, Internet, carro, y al menos un celular.
Cuadro 8
Posesión de bienes de lujo, según tipo de hogar
en Costa Rica
Los datos señalan que los hogares con emigrantes tienen un porcentaje mayor de posesión de todos
esos bienes que los hogares sin emigrantes, excepto teléfonos celulares. Aunque tampoco se puede
esclarecer la dirección de este dato ,el cuadro apoya la idea de que en general, no son las personas
de hogares más pobres quienes emigran.
El cuadro 9 indica el estado de la vivienda según tipo de hogar; es decir, si la vivienda se encuentra
en buen, regular, o mal estado. Los resultados de nuevo señalan que los hogares con emigrantes
reportan mejores condiciones, teniendo un mayor porcentaje de viviendas en buen estado que los
hogares sin emigrantes, y menores porcentajes de hogares en estado regular o malo.
Cuadro 9
Estado de vivienda según tipo de hogar en
Costa Rica
Finalmente, el cuadro 10 indica la actividad agropecuaria según tipo de hogar. Los resultados sugieren
que un mayor porcentaje de hogares con emigrantes participan en actividades agropecuarias, ya sea
por poseer fincas o parcelas agropecuarias, haber realizado cultivos en el último año, o poseer ganado,
cerdos, gallinas u otros animales.
Cuadro 10
Actividad agropecuaria según tipo de hogar en Costa Rica
Este resultado se puede deber a varias razones. Primero, los cantones de la región cafetalera sur
muestran los mayores números y porcentajes de personas emigrantes. Esto puede explicar por qué
los hogares con emigrantes reportan más actividad agropecuaria, ya que la mayoría de esta zona se
considera rural. Este resultado también se puede deber a la vulnerabilidad del sector agropecuario,
donde estos hogares tienen mayor necesidad de adaptarse a cambios repentinos en su sector
económico, y buscan diversificar sus ingresos por medio de la emigración.
Según datos del Banco Mundial, los costarricenses emigran principalmente a los Estados Unidos,
seguidos por Nicaragua, Panamá, Canadá, España, México, República Dominicana, Ecuador, Suecia
y Noruega (ver cuadro 11). Es probable que estas cifras incluyan costarricenses por naturalización
297
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
que han regresado a sus países de nacimiento. No obstante, es claro que el principal destino de los
costarricenses emigrantes son los Estados Unidos (Brenes 2011, Vargas 2004).
Por lo tanto, esta sección pretende esbozar un perfil de la población costarricense en Estados Unidos,
según datos del ACS 2011 de ese país. Dados los límites de espacio, y el enfoque principal de este
estudio, no se pretende realizar una investigación profunda sobre los costarricenses en EE.UU., sino
proveer algunos indicadores sobre esta población.
Cuadro 11
Principales destinos de los emigrantes
costarricenses
Número
País destino
costarricenses
Según datos del 2010 del Banco Mundial, hay 82.624 costarricenses residentes en Estados Unidos.
Según el ACS del 2011, esa cifra es de 86.052. De estos, 9.859 nacieron en Costa Rica de padres
estadounidenses. Esto puede indicar costarricenses naturalizados cuyos hijos nacieron en Costa Rica,
o en efecto estadounidenses por nacimiento que residieron en Costa Rica y tuvieron sus hijos ahí. Estas
personas se incluyeron en los análisis. De los costarricenses, 78.251 son adultos y 7.801 son menores
de edad.
Los costarricenses se concentran en cuatro estados: California (en donde residen el 19,57%), Florida
(16,83%), New Jersey (13,02%) y New York (9,39%). En total, estos estados suman el 60,81% de la
población costarricense. El cuadro 12 demuestra las diez principales áreas metropolitanas en las cuales
se concentra la población costarricense. Estas incluyen casi el 61% de los costarricenses en el país.
Otras ciudades con una destacada población costarricense incluyen Trenton, Monmouth y Atlantic City,
en el estado de New Jersey, Stamford (Connecticut), Orlando y West Palm Beach-Boca Raton (Florida),
Charlotte-Gastonia y Raleigh-Durham (Carolina del Norte), Houston y Austin (Texas), y Philadelphia y
Pittsburgh (Pennsylvania).
298
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 12
Diez áreas metropolitanas en EE.UU. con mayor población
costarricense
Numero
Área metropolitana Porcentaje
costarricenses
Por otra parte, la migración de costarricenses a Estados Unidos es relativamente reciente, pero no tan
reciente como otras, principalmente la de africanos (ver Rodríguez 2009). El gráfico 1 indica el número
de costarricenses que ingresaron por año. En realidad, ha habido temporadas de alta y baja migración
de costarricenses hacia EEUU.
Gráfico
Gráfico 1
1
Número
Número dede costarricenses
costarricenses enpor
en EE. UU EE.UU.
año depor año de ingreso
ingreso
Fuente:
Fuente: Elaboración
Elaboración propia
propia con datos del ACS,con
2011.datos del ACS, 2011.
299
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Algunas de las tasas más altas de naturalización las presentan los europeos (61%), asiáticos (59%)
y medio-orientales (59%). La tasa de naturalización de los africanos sub-saharianos es del 41%,
cercana a la de los costarricenses. La tasa de naturalización de los costarricenses es superior a la de
otros inmigrantes de la región: para los centroamericanos en general esta tasa es del 30%, y para los
mexicanos, quienes tienen la menor tasa de naturalización, es del 23%.
La tasa de naturalización de los costarricenses puede reflejar dos procesos: la intención de regresar
a vivir a Costa Rica, o la falta de elegibilidad para naturalizarse por llevar pocos años en el país, o no
contar con documentos o visas.
Cuadro 13
Adquisición de ciudadanía de los
inmigrantes costarricenses en
EE.UU.
(n=86.052)
Porcentaje
El cuadro 14 resume las características demográficas de los inmigrantes costarricenses. Esta evidencia
una población levemente más femenina que masculina, con un alto porcentaje de individuos casados,
y una edad promedio de 41 años. Esto sugiere que la inmigración de costarricenses se da en familia.
El censo de EEUU separa la identificación étnico-racial en dos partes: por separado mide si la persona
se identifica como hispana, y el grupo racial con el cual se identifica principalmente. La gran mayoría
de los costarricenses se identifican como hispanos y blancos, también un importante porcentaje se
identifican como negros. Si bien la emigración costarricense se concibe como un fenómeno “reciente”,
históricamente se dio una emigración amplia de afrocostarricenses, a partir de la década de 1940,
migración que ha sido poco documentada (Senior Angulo 2013).
300
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 14
Características demográficas de los inmigrantes costarricenses
en EE.UU.
( n=86.052)
Hombres 48,08%
Sexo
Mujeres 51,92%
Casados 55,62%
Estado civil Solteros 22,09%
Otro (viudos, divorciados) 21,29%
Blanco 68,85%
Identificación étnica Negro 5,77%
Otro 21,46%
El cuadro 15 resume las características educativas de los inmigrantes costarricenses. Estos datos
se tabularon solamente para los adultos mayores de 18 años. La gran mayoría de los costarricenses
hablan bien el inglés, lo cual implica una importante ventaja en el mercado laboral con respecto a
otros inmigrantes, en particular centroamericanos y mexicanos. Además, la mitad de los adultos ha
completado el colegio, y casi un cuarto de la población tiene estudios universitarios. Solo un 8% de los
costarricenses adultos estudian en EEUU, y de estos la mayor parte cursa sus estudios superiores. Es
decir, los costarricenses emigran a EEUU principalmente a trabajar.
Cuadro 15
Características educativas de los inmigrantes
costarricenses adultos en EE.UU.
(n=78.251)
Sí 8,80%
Estudia actualmente
No 91,20%
Colegio 0,84%
Nivel que estudia Universidad, pregrado 6,22%
Universidad, posgrado 1,75%
Fuente: Elaboración propia con datos del ACS, 2011.
301
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Migración y Remesas Rodríguez
Cuadro 16
Indicadores socioeconómicos de los inmigrantes costarricenses
adultos en EE.UU.
(n=78.251)
Rango $0-$399.000
Ingresos por salario
Media $23,00
Rango -$8.200-$291.000
Ingresos por negocio
Media $0
Rango -$4.000-$486.000
Total de ingresos personales
Media $25,00
Rango $-14.000-$979.000
Total de ingresos del hogar
Media $49,99
Empleado 64,93%
No empleado 7,13%
Estado laboral
No es parte de fuerza
27,94%
laboral
Asalariado 69,18%
Tipo de empleo
Por cuenta propia 11,73%
Fuente: Elaboración propia con datos del ACS, 2011.
Finalmente, los cuadros 17 y 18 indican las veinte principales ocupaciones de los costarricenses, así
como las veinte industrias en donde más consiguen empleo, respectivamente. La distinción se hace
porque el mismo empleo (por ejemplo conserje) se puede realizar en diversos sectores (restaurante,
hospital, escuela), y dentro de una misma industria (por ejemplo, jardinería) puede incluir varios empleos
(gerente, jardinero).
302
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 17 Cuadro 18
Veinte principales ocupaciones de los Veinte principales industrias que emplean a
inmigrantes costarricenses en EE.UU. los inmigrantes costarricenses en EE.UU.
(n=78.251) (n=78.251)
IV. Conclusiones
Por su parte, las provincias menos afectadas por el fenómeno emigratorio son Guanacaste y Cartago.
Por otra parte los datos del censo subestiman el fenómeno emigratorio, ya que no captan los hogares
de los cuales todos los miembros han emigrado. Según otras fuentes la cantidad de costarricenses que
residen en el extranjero es de unas 125.000 personas.
Otro dato relevante es que los hogares con emigrantes reflejan mejores indicadores económicos,
medidos como la tenencia propia de vivienda, posesión de bienes de lujo, y buena condición de estado
de la vivienda. Además, los hogares con emigrantes también tienen una mayor participación en el
sector agropecuario, lo cual puede ser explicado tanto por algunas de las regiones (rurales) de donde
provienen los emigrantes, pero también por la vulnerabilidad de este sector y necesidad de minimizar
el riesgo y diversificar los ingresos por medio de la emigración.
El principal país receptor de los emigrantes costarricenses son los Estados Unidos. Ahí, los
costarricenses se concentran en diversas áreas metropolitanas y Estados. Por sus características parece
tratarse de una migración principalmente familiar, que incluye personas de diversos antecedentes
socioeconómicos. No se trata de una migración uniforme en el tiempo, ya que hay años donde aumenta
y decae. Los costarricenses se encuentran bien posicionados en el mercado laboral: pocos van a
estudiar, sino más bien a trabajar, dominan el idioma inglés, la mayoría trabajan en el sector asalariado,
y tienen ingresos familiares que reflejan el promedio nacional.
V. Referencias bibliográficas
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304
Migración y Remesas Rodríguez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
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Integración
Poblacional
Eugenio Fuentes Características demográficas y
socioeconómicas de las poblaciones indígenas de
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Epsy Campbell
Afrodescendientes y Multiculturalismo en el Censo de
Costa Rica, 2011.
.
309
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
“Y ardieron sus palenques, se destruyeron sus sembrados y se revolcó la tierra en que dormían los
huesos de sus bravos guerreros (…) La Raza, vencida, al fin, remontó el río y fue a esconder su dolor
al corazón de las montañas. Y allí la fue a acosar la jauría, que logró regresar a muchos infelices por la
fuerza o con el cebo del aguardiente. ¡La Frutera necesitaba esclavos para sus nuevas plantaciones!”
Mamita Yunai, Calos Luis Fallas (2008, p. 91).
Resumen
Las poblaciones indígenas de Costa Rica, históricamente, han estado excluidas del desarrollo social,
económico, político y cultural del país. Actualmente los censos nacionales son una de las principales
fuentes, por la cual se obtiene información detallada sobre esta población. Desde una perspectiva de
derechos humanos y en concordancia con diferentes acuerdos y recomendaciones internacionales, el
Censo 2011 abordó nuevamente la autoidentificación indígena. Sin embargo, por primera vez consultó
la pertenencia a un pueblo indígena, sobre su idioma indígena fuera de los territorios, así como de
características propias de sus viviendas tradicionales. En este sentido, un hallazgo es la evidencia
de un inicio en la transición demográfica en algunos sectores de esta población, a pesar de que se
mantienen las condiciones desfavorables en salud, educación y empleo.
Lo anterior con la distinción de quienes dicen pertenecer a un pueblo y quienes no, estos últimos
constituyen el 25,0% de la población autoidentificada como indígena (2,4%), además de quienes no
son indígenas, lo cual permite observar brechas de diferentes tipos.
1/ Licenciado en Sociología del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) y docente de la Escuela de Sociología de la
Universidad de Costa Rica. [email protected].
Agradecimiento: A Elizabeth Solano Salazar, Olga Mora Prado, Sofía Mora Steiner, Karla Jinesta Campos, Gerardo
Fonseca Bolaños del INEC, así como a todas las organizaciones y personas consultadas por toda su colaboración en esta
investigación.
310
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
I. Introducción
Para el Censo 2000 fue manifiesta la necesidad de conocer la cantidad exacta y las características
de las personas indígenas, negras o “afrocostarricenses”2 y chinas, razón por la cual se le consultó a
la población de todo el país su autoidentificación a cualquiera de estas culturas (Solano, 2002).
Se realizaron diferentes pruebas de campo, con validación de la boleta censal en varios idiomas
indígenas, además el tema se contempló en la capacitación nacional y de los operativos especiales,
algunos de los cuales se realizaron en zonas indígenas de muy difícil acceso.
Luego de un periodo intercensal de once años se tiene información actualizada, universal, de calidad
y geográficamente desagregada. Por esta, razón el presente trabajo tiene como objetivo general
analizar las características demográficas, espaciales y socioeconómicas de las poblaciones indígenas
de Costa Rica, tanto dentro como fuera de los territorios. Asimismo, la visibilización estadística de estas
poblaciones es relevante dada la deuda histórica, por no haber generado procesos de inclusión social
para esta población, con un sentido fundamentalmente de interculturalidad.
2/ Se entrecomilla pues en su momento se consideró como el término adecuado, cuando actualmente se refiere a poblaciones
afrodescendientes.
311
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
II. Metodología
Dentro del desarrollo desigual que caracteriza a Costa Rica como país latinoamericano, existen
condiciones históricas y estructurales que han condicionado el relegamiento de ciertos grupos étnicos
al aislamiento geográfico, la discriminación, a la explotación3 y a la exclusión del desarrollo económico,
social, político y cultural (Hinkelammert, 1970; Cardoso y Faletto, 1973; Rodríguez, 1986; Del Popolo,
2008; Schkolnik y Del Popolo, 2005). Dicha exclusión puede ser también de carácter simbólico; por
ejemplo, en 2007 el Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO), realizó una encuesta donde
solamente un 23% de la población dijo conocer la existencia de pueblos indígenas en Costa Rica, sin
diferencias por edad, sexo ni nivel de instrucción (2007, p. 17).
Además, quienes dicen conocer de su existencia poseen una idea estereotipada sobre las personas
indígenas; por ejemplo, en cuanto a sus costumbres, sus valores y sus diferentes idiomas. Son
catalogadas como personas humildes, tímidas y con características físicas diferentes, entre otras
(Instituto de Estudios Sociales en Población, 2007, pp. 18 y 48), es decir, poseen un discurso constituido
desde “la otredad”.
Según los “Principios y recomendaciones para los Censos de Población y vivienda”, la información
que debe generar cada país depende de sus circunstancias y sus necesidades nacionales. Además,
debe estar enfocada en los “grupos minoritarios” identificados a partir de su conocimiento compartido,
de orígenes históricos y territoriales (Naciones Unidas, 2007b, pár. 2.160-2.161; 3.111-3113). Por tanto,
existe un consenso internacional de que la autoidentificación es el enfoque de derechos humanos
adecuado y pertinente para el abordaje de la temática étnica (Del Popolo, 2009, p. 22).
3/ En 1900 el obispo Thiel indicó como una de las razones de la disminución de la población indígena en la época colonial
el repartimiento de “indios de trabajo”, donde “En 1619 el Gobernador Alonso de Castillo y Guzmán sacó 400 indios de la
Talamanca. La tercera parte de ellos murió a la llegada a Cartago, los demás fueron distribuidos entre familias españolas”
(Thiel, 2011, p. 19).
Otro país 14. ¿El centro al que asiste (nombre) es…
312 … público? . . . 1 … privado o semiprivado? . . . 2
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
6. ¿En qué año llegó (nombre) a vivir a Costa Rica? SÓLO PARA PERSONAS DE 5 AÑOS O MÁS
Si no sabe el año pregunte
15. ¿(Nombre) sabe leer y escribir?
¿Llegó a vivir a Costa Rica… Sí . . . 1 No . . . 2
Figura
… antes1.deCenso
1980? 2011: Autoidentificación
1 … entre 1990 y 1999?a la étnia
3 indígena.
… entre 1980 y 1989? 2 … en el 2000 o luego? 4 16. ¿Cuál es el último grado o año que aprobó (nombre)?
Nivel
Ningún grado. . . 60
7. ¿(Nombre) se considera indígena? Enseñanza
especial . . . . . . . 70
Sí . . . 1 No . . . 2 Pase a 10 Kinder o Último año aprobado
preparatoria . . . 80
8. ¿A qué pueblo indígena pertenece (nombre)? Primaria . . . . . . . 1
1 2 3 4 5 6
Bribri. . . . . . . . . . . . 1 Maleku o Guatuso . . 6 Secundaria
Brunca o Boruca. . 2 académica . . . . . 2
Ngöbe o Guaymí. . . . 7 1 2 3 4 5
Cabécar. . . . . . . . . . 3 Teribe o Térraba. . . . 8 Secundaria
técnica . . . . . . . . 3 1 2 3 4 5 6
Chorotega. . . . . . . . 4 De otro país . . . . . . . 9
Huetar. . . . . . . . . . . 5 Ningún pueblo . . . . . 10 Parauniversitaria 4
1 2 3
9. ¿Habla (nombre) alguna lengua indígena? Universitaria . . . 5
1 2 3 4 5 6 7 8 9
Sí . . . 1 Pase a 11 17. ¿Tiene título en este nivel?
No . . . 2 Sí . . . 1 No . . . 2
Las pruebas piloto realizadas previamente al Censo 2011 incluyeron la traducción oral del cuestionario.
Incluso, los contenidos de la capacitación fueron contextualizados a la realidad social de las zonas
indígenas como en Chirripó de Turrialba, Telire de Talamanca y Punta Burica de Golfito4 (Instituto
Nacional de Estadística y Censos, 2011b). Durante el operativo participaron intérpretes y censistas
indígenas en el recabo de la información. Además de la participación de organizaciones para validar
los indicadores aquí presentes, según las recomendaciones sobre el tema (Naciones Unidas, 2007b,
pár. 2.163-2.167, 3.114-3.119, Del Popolo, 2009).
Para la elaboración de los indicadores del presente estudio, se utilizaron como parámetro las
publicaciones del propio Censo 2011, así como los Objetivos de Desarrollo del Milenio (Naciones Unidas,
2000) y el documento Sistema de indicadores sociodemográficos de poblaciones y pueblos indígenas
(Centro Latinoamericano de Demografía, Comisión Económica para América Latina y el Caribe y Fondo
Indígena, sf), además se crearon algunos de conformidad a lo solicitado por las organizaciones, donde
las variables como el territorio indígena se consideran importantes (Mapa 1).
4/ Se ejemplificaron aspectos como la cantidad de personas por vivienda y hogar. En las actividades didácticas las personas
capacitadas para censar también debían indicar, por ejemplo, la ocupación, la principal tarea, lo que produce el negocio, la
categoría ocupacional y el lugar de trabajo, para situaciones como la siguiente: “Ana es una joven de 16 años que durante
la semana previa al Censo en dos ocasiones no fue al colegio para ayudar a su papá que trabaja jalando madera utilizando
dos caballos, pero el papá no le paga a ella. Esto siempre lo realizan cerca de su vivienda” (INEC, 2011, p. 29).
313
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
NICARAGUA
GUATUSO
MAR CARIBE
BAJO
CHIRRIPÓ
KËKÖLDI
ZAPATÓN
TELIRE
TALAMANCA
CABÉCAR
UJARRÁS TALAMANCA
SALITRE BRIBRÍ
No para todos los territorios indígenas la información entre el Censo 2000 y 2011 es comparable,
porque: (1) hubo modificaciones en límites distritales que afectaron a algunos territorios particulares;
(2) se presentaron solamente cambios de límites de algunos territorios; (3) existen dos nuevos territorios
(China Kicha y Altos de San Antonio) (Mapa 1); (4) se tuvo una mejor cobertura censal, pues esta es
la primera vez que se cuenta con mapas detallados de las zonas más alejadas y un mayor trabajo
con personas de las comunidades; una campaña radiofónica en los idiomas bribri, cabécar, ngöbere
y maleku, y la participación de intérpretes o traductores pudo mejorar la cobertura y la calidad de la
información; (5) para el 2000 no se cuenta con información por pueblo e idioma fuera de los territorios.
Para el análisis de la información se crearon algunas variables, tanto para la autoidentificación étnica
como para las áreas geográficas, las cuales permiten visibilizar diferencias relevantes. La población
indígena se presenta como un todo, además de ser desagregada entre quienes pertenecen a algún
pueblo indígena (nacionales o extranjeros) y quienes dicen no tener pueblo. Además, se contempla al
resto de la población no indígena.
Por otra parte, se utilizó la variable de territorio indígena, la cual agrupa a todos los territorios del país,
y se creó la de periferia indígena, la cual corresponde a zonas restantes de un distrito, donde hay al
menos un territorio indígena. Los distritos que no tienen territorio indígena quedan en la categoría de
“resto del país”.
314
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Características demográficas
Según el Censo 2011, la población indígena que vive en Costa Rica es de 104.143 personas (2,4%),
de las cuales el 25,0% no se autoidentifican con ningún pueblo (nacional o no), lo cual corresponde
a 26.070 personas (Cuadro 1). Si se considera a la población indígena que tiene pueblo equivale al
1,8%. Del total de indígenas el 34,5% está ubicado en los 24 territorios, mientras que el 14,4% vive
en sus periferias y el 51,0% en el resto del país. La población total que se ubica en los 24 territorios
indígenas corresponde al 1,1% de toda Costa Rica (Cuadro 1), con una extensión que abarca el 6,7%
(3.456,6km2). En términos generales hay 14 personas por km2 en los territorios indígenas.
De las personas que tienen algún pueblo indígena el 45,6% vive en los territorios, mientras que el
16,8% lo hace en la periferia y un 37,6% está en el resto del país. Para las 26.070 personas que se
autoidentifican como indígenas, pero dicen no tener pueblo, el 91,4% vive en el resto del país y un 7,4%
en la periferia. Esto resulta solamente en un 1,2% dentro de los territorios indígenas (Cuadro 1).
En el Cuadro 2 se evidencia que los cabécares (76,7%) y los bribris (66,4%), permanecen más en los
territorios, a diferencia de los malekus (28,2%) y chorotegas (10,0%). Asimismo, quienes se concentran
en la periferia de los territorios son mayormente las personas del pueblo Ngöbe o Guaymí (34,3%),
Teribe o Térraba (31,1%) y del Chorotega (22,8%). Los pueblos que tienen más población en el resto del
país son el Chorotega (67,1%) y el Maleku o Guatuso (65,0%), lo cual se diferencia de los pueblos Bribri
(18,2%) y Cabécar (14,5%). En el caso de los ngöbes el 31,8% de esta población, nació en otro país.
Cuadro 1
Costa Rica. Autoidentificación con la etnia indígena según área geográfica
2011
Población indígena
Población no
Población Total
indígena
Total Con pueblo Sin pueblo
Costa Rica 4 301 712 104 143 78 073 26 070 4 197 569
Territorio indígena 48 500 35 943 35 630 313 12 557
Periferia indígena 228 104 15 044 13 122 1 922 213 060
Resto del país 4 025 108 53 156 29 321 23 835 3 971 952
Valores relativos
Cuadro 2
Costa Rica: Distribución de la población, según pueblo indígena 2011
En territorio En periferia
Pueblo Total Resto del país
indígena indígena
Nota: 1/ Más de la mitad son de origen nicaragüense, seguido por panameños, salvadoreños,
colombianos y de otros países.
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Si bien es cierto que el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (1989, Art.13-19)
contempla el derecho al acceso y a la tenencia de tierras o territorios, al igual que lo hace la Declaración
sobre los derechos de los pueblos indígenas (Naciones Unidas, 2007a, Art.25-29), la cuarta parte de
la población en territorios indígenas no son indígenas (25,9%). Son los territorios de Këköldi (70,3%),
Guatuso (65,0%), Abrojo Montezuma (59,2%), China Kicha (56,2%) y Nairi Awari (52,9%) los que poseen
los valores más elevados, lo cual ha aumentado en todos los territorios entre 2000 y 2011.
Cuadro 3
Costa Rica: Población total por autoidentificación a la etnia indígena según territorio
2011
Territorios % nacid.
indíg. cony. no
indígenas Con Sin extranj.
Total % Total (2000) Total % 1
pueblo pueblo indíg.
Total 48 500 100,0 35 943 35 630 313 18,4 12 557 25,9 25,4 3,2
Fuentes
Bribris 16 938 34,9 12 785 12 631 154 12,8 4 153 24,5 23,1 4,7
Salitre 1 807 3,7 1 588 1 573 15 8,4 219 12,1 13,9 0,5
Cabagra 3 188 6,6 2 363 2 349 14 28,5 825 25,9 25,2 0,4
Talamanca Bribrí 8 368 17,3 7 772 7 757 15 5,8 596 7,1 4,2 2,0
Këköldi 3 575 7,4 1 062 952 110 52,3 2 513 70,3 64,0 16,8
Bruncas o Borucas 4 317 8,9 2 593 2 560 33 48,8 1 724 39,9 32,5 1,0
Boruca 3 228 6,7 1 933 1 907 26 53,1 1 295 40,1 32,2 1,2
Curré 1 089 2,2 660 653 7 35,7 429 39,4 33,4 0,5
Cabécares 13 993 28,9 12 707 12 681 26 3,1 1 286 9,2 11,2 0,7
Chirripó 6 341 13,1 5 985 5 982 3 1,7 356 5,6 6,7 0,3
Ujarrás 1 321 2,7 1 119 1 118 1 17,0 202 15,3 17,2 0,7
Tayni 2 850 5,9 2 641 2 623 18 0,6 209 7,3 7,8 0,5
Talamanca Cabécar 1 435 3,0 1 408 1 406 2 2,5 27 1,9 1,2 0,8
Telire 545 1,1 533 533 0 0,0 12 2,2 1,1 0,2
Bajo Chirripó 923 1,9 752 750 2 2,4 171 18,5 17,5 0,7
Nairi Awari 473 1,0 223 223 0 1,1 250 52,9 60,0 5,5
China Kicha 105 0,2 46 46 0 - 59 56,2 48,4 7,6
Chorotega 1 685 3,5 1 085 1 084 1 12,8 600 35,6 27,2 1,1
Matambú 1 685 3,5 1 085 1 084 1 12,8 600 35,6 27,2 1,1
Huetares 2 417 5,0 1 354 1 343 11 40,5 1 063 44,0 35,9 3,6
Zapatón 452 0,9 355 354 1 88,4 97 21,5 19,7 0,9
Quitirrisí 1 965 4,1 999 989 10 22,3 966 49,2 39,8 4,2
Maleku o Guatuso 1 423 2,9 498 494 4 58,7 925 65,0 61,1 6,5
Guatuso 1 423 2,9 498 494 4 58,7 925 65,0 61,1 6,5
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continua Cuadro 3
Ngöbes o Guaymíes 5 643 11,6 3 654 3 644 10 6,1 1 989 35,2 39,2 7,5
Abrojo Montezuma 1 494 3,1 610 603 7 4,7 884 59,2 62,0 4,1
Osa 159 0,3 108 108 0 3,4 51 32,1 34,1 4,4
Conteburica 1 863 3,8 1 144 1 143 1 12,6 719 38,6 44,1 8,7
Coto Brus 1 785 3,7 1 612 1 611 1 0,3 173 9,7 13,2 9,4
Altos de San Antonio 342 0,7 180 179 1 - 162 47,4 36,8 7,3
Teribe o Térraba 2 084 4,3 1 267 1 193 74 56,4 817 39,2 28,0 1,2
Térraba 2 084 4,3 1 267 1 193 74 56,4 817 39,2 28,0 1,2
Al analizar las estructuras por sexo y edad de las poblaciones indígenas, es pertinente considerar las
causas de muerte y la mortalidad infantil en los diez distritos con mayor población indígena, debido a
que esta supera el 10% de su población5 (Cuadro 4). En estos distritos el porcentaje de muertes por
enfermedades infecciosas, parasitarias y otras se duplican en Chirripó, Sabalito y Potrero Grande, lo
cual se relaciona con factores ambientales; insectos, parásitos, carencia de agua potable y letrinas
(Ministerio de Salud, 2003, p. 30), también se aprecian diferencias importantes por malnutrición.
Además, se presentan diferencias muy marcadas en la tasa de mortalidad materna; por ejemplo en el
distrito de Cahuita la tasa es 5,5 veces mayor al valor nacional.
Cuadro 4
Porcentaje de las causas de muerte, tasa de mortalidad materna*/ y tasa de
mortalidad infantil**/en los diez distritos con mayor población indígena y que
representan el 10% o más de su población
2005 - 2011
% muertes por
enfermedades % muertes % resto de Tasa de Tasa de
infecciosas, por malnu- causas de mortalidad mortalidad
parasitarias y trición muerte materna infantil
/
otras***
5/ Este es un método indirecto, dado que las estadísticas vitales no recopilan información sobre autoidentificación étnica o
étnica-racial. Al incluirse población indígena y no indígena, es de esperar que en los territorios indígenas estos datos sean
mayores.
319
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
Por su parte, de los diez distritos considerados, Sabalito es el que tiene mayor mortalidad infantil
Gráfico 1
(18,1‰), seguido por Bratsi (16,0‰) y Telire (13,9‰).CostaLa Rica:
población
Distribuciónen
de lalos territorios
población por sexo yindígenas
grupos tiende
a ser más joven, especialmente en quienes tienen pueblo indígena. En este sentido, el 40,3% de la
quinquenales de edad 2011
población se encuentra entre los 0 y 14 años, por lo que posee una más elevada relación de dependencia
Grupos de edad
demográfica, y en menor medida en la periferia y el resto85del y + país. Sin embargo, la población originaria
80 a 84
siempre posee valores más elevados que la “no indígena”, 75 a 79independientemente de la zona geográfica
70 a 74
a la que se haga referencia, pero que varía prácticamente en 20 personas dependientes menos entre
65 a 69
60 a 64
cada zona (Anexo 1). 55 a 59
50 a 54
45 a 49
40 a 44
Al analizar las estructuras por sexo y edad, en términos relativos, las poblaciones indígenas con 35 a 39
30 a 34
pueblo y en territorios continúan en situación de rezago (Gráficos 1 y 2); no obstante, por primera 25 a 29
20 a 24
vez se tiene evidencia del inicio de la primera transición demográfica (Gráfico 2), la cual no ha sido 15 a 19
10 a 14
homogénea entre los territorios. Por un lado, los territorios bribris y los bruncas o borucas han tenido 5a9
0a4
un aporte importante en esta reducción, a diferencia de los-10territorios
-8 -6 cabécares,
-4 -2 0 2 en
4 los
6 cuales
8 10 no se
evidencia un cambio en esta materia. Porcentajes
Hombres Mujeres
Gráfico 1 Gráfico 2
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Costa
Gráfico 1Rica: Distribución de la población por sexo y Costa
Gráfico 2
Rica: Distribución de la población por sexo y
grupos quinquenales
Costa Rica: Distribución de lade edad por
población (2011)
sexo y grupos grupos
Costa Rica: quinquenales
Distribución de la de edadpor
población desexo
la ypoblación
grupos indígena
quinquenales de edad 2011
con pueblodeen
quinquenales territorio
edad indígena
de la población (2011)
indígena con pueblo en
Gráfico 3
territorio
Grupos de edad
Costa Rica: Distribución de la población por sexo y grupos quinquenales de
edad de la población indígena con pueblo en periferia indígena 2011
85 y + Grupos de edad
80 a 84
75 a 79 85 y +
80Grupos
a 84 de edad
70 a 74 75 a 79
65 a 69 70 a8574y +
60 a 64 6580 a 84
a 69
55 a 59 60 75 a 79
a 64
50 a 54 55 70 a 74
a 59
45 a 49 50 65 a 69
a 54
40 a 44 45 60 a 64
a 49
35 a 39 40 55 a 59
a 44
30 a 34 35 50 a 54
a 39
45
30 a 34a 49
25 a 29 40 a 44
25 35
a 29
a 39
20 a 24 20 30
a 24
15 a 19 a 34
15 25
a 19
a 29
10 a 14 10 20
a 14
a 24
5a9 515
aa 9 19
0a4 010
aa 4 14
5a9
-10 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10 0 a-10
4 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10
Porcentajes -10 -8 -6 Porcentajes
-2 -4 0 2 4 6 8 10
Hombres Mujeres
Hombres Mujeres Porcentajes
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.Mujeres
Hombres
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Gráfico 2
Gráfico
Costa Rica:3Distribución de la población por sexo y grupos
quinquenales de edad de la población indígena con pueblo en Gráfico 4
Costa Rica: Distribución de la población por sexo y
territorio
Gráfico 4
Costa Rica:
Costa Rica: Distribución
Distribución de la
de la población porpoblación
sexo y grupospor sexo y
grupos
Gráfico 3 quinquenales de edad de la población indígena
Costa Rica: Distribución de la población por sexo y grupos quinquenales de grupos quinquenales
quinquenales de edad de la población indígena
de edad de la población
con
Grupospueblo
de edad en periferia indígena (2011) resto del país 2011
edad de la población indígena con pueblo en periferia indígena 2011 con pueblo en el resto del país (2011)
85 y +
80 a 84
Gruposade79
75 edad
70 a 74 Grupos de edad
65 a 69
85 y
60 a 64 +
80 85 y +
55aaa84
75 59
79 80 a 84
50aa74
70 54 75 a 79
45aa69 49 70 a 74
65 65 a 69
40aa64
60 44
35aa59 39 60 a 64
55 55 a 59
30aa54
50 34
25aa49 29
50 a 54
45 45 a 49
20aa44
40 24 40 a 44
15aa39
35 19 35 a 39
30
10aa34 14 30 a 34
25 a5 29
a9 25 a 29
20 0aa 244 20 a 24
15 a 19 15 a 19
10 a 14 -10 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10 10 a 14
5a9 5a9
0a4 Porcentajes 0a4
Hombres Mujeres
-10 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10 -10 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Porcentajes Porcentajes
Hombres Mujeres
Hombres Mujeres
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012. Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Gráfico 4
Costa Rica: Distribución de la población por sexo y grupos
320
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
En Costa Rica el 24,8% de la población es menor de 15 años, mientras que en los indígenas en
territorio es el 40,2%. En la periferia indígena de la población considerada indígena y con pueblo,
tiene una estructura que refleja un avance en la transición demográfica (Gráfico 3), donde la población
menor de 15 años es de 30,3%, esto contrasta con quienes están en el resto del país, quienes tienden
a estar concentrados en las conocidas “edades productivas”, pues solamente el 18,8% tiene menos de
15 años (Gráfico 4 y Anexo 1).
En cuanto a los pueblos a nivel nacional los Bribri, Cabécar y Ngöbe o Guaymí tienen una mayor
población menor a 15 años (más de 34%), todo lo contrario a quienes son del pueblo Chorotega o
Huetar (menos de 17%), lo cual incide en la relación de dependencia demográfica (Anexo 2). En
el territorio Telire el 53,2% tiene de 0 a 14 años y en Chirripó es el 47,9%, en contraposición con los
territorios de Matambú, Zapatón y Quitirrisí, donde ese porcentaje supera por poco el 25% (Anexo 3),
un valor muy similar al nacional.
Fecundidad y mortalidad
Como parte del análisis de mortalidad, si bien es difícil obtener buenos resultados a través del censo
(Solano, 2002, p. 351)6, se tiene que del total de hijos(as) nacidos vivos de las mujeres entre 20 y 24
años de todo el país es de 16,9 por cada mil, mientras que en los territorios indígenas es de 21,6‰
(Anexo 1). Al analizarlo por pueblo los que tienen una mayor tasa son el Ngöbe o Guaymí, los de otro
país y el Cabécar (21,0‰; 26,6‰ y 25,0‰, respectivamente), esto se puede analizar diferencialmente
por territorio (Anexo 2). En Anexo 3 se observa que los territorios de Telire, Quitirrisí y Guatuso poseen
las tasas más altas.
Idiomas indígenas
Los pueblos Bribri, Cabécar y Ngöbe o Guaymí son quienes más hablan alguno de los idiomas,
independientemente del área geográfica en el que estén, en contraposición a lo que sucede con los
6/ “Se toman los hijos fallecidos de las mujeres de 20 a 24 años como aproximación de la mortalidad infantil al momento
censal, sin embargo, la escasez de datos en algunas de las poblaciones podrían provocar fluctuaciones importantes en el
indicador debido a la presencia de valores extremos y a posibles problemas o diferencias en la declaración” (Solano, 2002,
p. 351). Debe aclararse que la tasa de mortalidad infantil del país en 2011 fue de 9,1‰.
321
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
pueblos Huetar y Maleku (Anexo 2), que desde el Censo 2000 ya demostraban una práctica sumamente
baja (Solano, 2002).
En cuanto a los territorios se confirma que los del pueblo Ngöbe y los Cabécar son los que tienen
una mayor práctica de sus idiomas, algunos pueblos por encima del 70%, 80% e incluso el 90%,
siendo Nairi Awari y Chirripó los que destacan en esta materia (94,6 y 96,7%, respectivamente) (Anexo 3).
A nivel cantonal la población indígena con pueblo que entre el 50% y menos del 70% habla algún
idioma indígena se encuentra en Talamanca, Matina, Coto Brus, Guatuso, Tarrazú y León Cortés Castro,
además en tres cantones es más del 70%: Limón, Talamanca y Dota.
Características sociales
El porcentaje de la población residente en territorios indígenas y que tienen seguro social es 3,7
puntos porcentuales mayor al valor nacional. Sin embargo, en los territorios se destaca la cobertura del
seguro por el Estado (61,2%), donde las poblaciones con pueblo son las más beneficiadas (73,0%),
prácticamente 10 veces más de lo alcanzado por todo el país. En cuanto a la población indígena con
pueblo que reside en el resto del país, el 25,1% no tiene seguro social, 10,6 puntos porcentuales por
encima de toda Costa Rica (14,5%), lo cual refleja una clara vulnerabilidad de esta población (Anexo
1). El 33,5% de los indígenas de ngöbes no tienen seguro social, de los cuales el 50,2% nacieron en
Panamá (1.609 personas).
Los pueblos que cuentan con mayor cobertura de seguro por el Estado son el Teribe o Térraba, Bribri
y, especialmente, Cabécar (Anexo 2). En los territorios indígenas prevalece el seguro por el Estado,
donde hay 7 territorios en donde incluso más del 70% de la población está cubierta por este tipo de
seguro. Por el contrario, existen casos en que el porcentaje de la población sin seguro es muy alto, por
ejemplo, en Këköldi es el 27,5% y en Conteburica es el 47,8% (Anexo 3).
En cuanto a la discapacidad, la población indígena con pueblo en territorio tiene una menor incidencia
que en el país (8,8% y 10,5%, respectivamente) (Anexo 1). Las discapacidades más recurrentes son
las visuales y las motoras (caminar o subir gradas), en territorio, periferia o resto del país, por pueblo y
por territorio.
Al observar los datos por pueblo, el Huetar, quienes no tienen pueblo, y el Chorotega presentan una
mayor incidencia de personas con al menos una discapacidad (19,5%, 19,6% y 21,2% respectivamente)
(Anexo 2). En los territorios indígenas destaca el caso de Conteburica y Telire con menos del 4,5% de
la población con al menos una discapacidad, mientras que en Zapatón es el 30,3% (Anexo 3). En este
último territorio, el 8,6% de la población con discapacidad es adulta mayor.
En lo que respecta a las Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), como metodología indirecta de
medir pobreza, no se encuentra contextualiza para con la realidad y cosmovisión indígena, en la cual
la riqueza radica en el vínculo a la tierra, su cultura e idioma y a los conocimientos tradicionales.
No obstante, el método de NBI permite visibilizar, de forma concreta, condiciones de vulnerabilidad
social. Indistintamente del área geográfica, la población indígena con pueblo posee los indicadores
más desventajosos. Por ejemplo, la incidencia al menos de una carencia es mayor en los territorios
indígenas que en el resto de áreas (Anexo 1); especialmente, en los pueblos indígenas cabécares,
ngöbes y bribris (Anexo 2), así como en los territorios de dichos pueblos (Anexo 3), Hay cinco territorios
cabécares con más del 95% de su población con al menos una NBI, los más elevados de todo el país.
Esos territorios son Talamanca Cabécar, Tayni, Chirripó, Bajo Chirrió y Telire. La incidencia por pueblo
es menor en los pueblos Chorotega, Huetar y los que no tienen pueblo.
322
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Características educativas
El derecho internacional establece que la educación a la población indígena como un derecho que
debe ser contextualizado y que responda a sus necesidades. En este sentido la educación debería ser
bilingüe (Organización Internacional del Trabajo, 1989, Art.26-31; Naciones Unidas, 2007a, Art. 17)7.
No obstante, a pesar de que el MEP desde 1993 ha venido realizando esfuerzos para que en los
territorios indígenas se impartan lecciones de lengua y de cultura indígena (Decreto Ejecutivo 22072),
se han presentado problemas en la asignación de los maestros(as), se carece de material didáctico
y se presenta la dificultad didáctica de que en una misma aula una maestra o maestro puede tener
estudiantes con diferentes niveles de conocimiento del idioma indígena (Defensoría de los Habitantes,
2011, p. 177; Rojas, sf).
En materia educativa el rezago continúa siendo fuerte, dependiendo del pueblo y del territorio al
que se haga referencia. Mientras que en el país el 97,6% de la población de 10 años y más sabe leer
y escribir, en los territorios indígenas es del 89,6% y las personas indígenas con pueblo presentan
un indicador más bajo (87,6%) (Anexo 1). Los pueblos indígenas de otro país, el Ngöbe o Guaymí y
el Cabécar están por debajo del 90% de la población que sabe leer y escribir (Anexo 2), al analizar
este indicador por territorio los pueblos Tayni, Chirripó y Telire presentan los niveles más bajos (81,2%;
78,0% y 63,1%, respectivamente) (Anexo 4).
En cuanto a los años de escolaridad la población indígena en su territorio está tres años por debajo
del promedio nacional (5,3 años y 8,7 años, respectivamente), si bien es cierto el promedio de años
de los indígenas aumenta en la periferia y en el resto del país, siempre están por debajo del resto de la
población (Anexo 1). Los pueblos Bribri, Ngöbe y Cabécar presentan la menor escolaridad, por debajo
de 6,5 años. Si bien es cierto que dentro de la diversidad de territorios indígenas todos presentan
valores muy bajos, los valores más bajos se presentan en Guatuso, Këköldi y Quitirrisí, muy próximos
a los del país (6,6; 6,8 y 7,0 años respectivamente), mientras que los territorios Cabécar llegan a 4,2
años, donde el territorio Chirripó tiene sólo 3,7 y Telire 1,5 años (Anexo 4). La escolaridad promedio de
la población que habla algún idioma es aún menor (Anexos 1, 2 y 4).
A pesar de que el porcentaje de la población de 15 años y más con secundaria y más es baja en la
totalidad del país (57,8%), en los pueblos y territorios indígenas los datos son aún más desfavorables8
(Anexos 1 y 2). El panorama es más adverso al analizar los niveles de secundaria completa y más
en los territorios, lo cual plantea retos para la selección de docentes aspirantes originarios de las
comunidades. Esto evidencia que aún hay limitaciones idiomáticas, culturales y de acceso al sistema
7/ El artículo 76 de la Constitución Política de Costa Rica establece que “El español es el idioma oficial de la Nación. No
obstante, el Estado velará por el nacimiento y cultivo de las lenguas indígenas nacionales (Reforma constitucional 7878 del
27 de mayo de 1999).
8/ Nótese que en los Anexos 1, 2 y 4 la población indígena sin pueblo tiende a tener altos niveles de instrucción.
323
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
educativo universitario (Programa Estado de la Nación, 2011, p. 84-218).En los territorios indígenas es
menos frecuente que las personas de 12 a 24 años trabajen y asistan a la educación regular (1,3%), si
se compara con el valor nacional (5,2%), cuando esto más se da es en el caso de indígenas con pueblo
en el resto del país, el 3,1% (Anexo 1).
En Costa Rica el 23,6% de las personas de 7 a 17 años tienen al menos un año de rezago, pero en
los territorios indígenas es un 40,6%, con valores más altos en los indígenas con pueblo con el 43,8%
y, mayormente, en quienes hablan algún idioma (51,4%) (Anexo 1). Tanto en la periferia como en el
resto del país las poblaciones indígenas con pueblo tienen un nivel de rezago escolar mayor que las
del resto de la población. El rezago más alto en quienes hablan algún idioma indígena (Anexos 1, 2
y 3), con excepción de los pueblos y territorios donde el porcentaje de personas que hablan idioma
indígena es ya muy reducido (Anexos 1, 2 y 4). Debe notarse que la población indígena sin pueblo,
tiene condiciones muy favorables respecto a los que tienen pueblo.
En cada uno de los pueblos los niveles de rezago son altos, en el Ngöbe (44,7%) y en el Cabécar
(52,3%), a diferencia de los pueblos Huetar (19,7%) y Maleku (19,7%), quienes no tienen pueblo
indígena poseen un porcentaje próximo al nacional (27,4%) (Anexo 2). Además, existen territorios con
más de la mitad de la población tiene rezago, a saber: Nairi Awari (52,6%), Tayni (55,9%), Chirripó
(58,1%) y Telire (77,2%), los cuales son territorios indígenas del pueblo Cabécar (Anexo 4).
En cuanto a los centros de atención para personas menores de 5 años, este es un proceso incipiente,
pues en los territorios solamente el 5,2% de las personas de 0 a 4 años asiste a guardería, maternal
o prekinder (2,6 veces menor al valor de Costa Rica) (Anexo 1). Por pueblo, los chorotegas, los que
no tienen pueblo y los huetares son quienes más asisten a la guardería, maternal o prekinder (10,9%;
13,5% y 13,9%, respectivamente) (Anexo 2).
En cuanto al acceso a Internet de las personas de 5 años y más, la situación es muy adversa en todas
las áreas geográficas (Anexo 1, 2 y 4), en especial en los territorios indígenas, con porcentajes muy
altos en Këköldi, Boruca y Quitirrisí, pero muy bajos en Chirripó y Tayni (Anexo 4).
Características económicas
La tasa de ocupación en los territorios indígenas es mucho menor que las otras dos áreas geográficas
de interés y del promedio nacional (39,2), siendo más significativa en las personas indígenas con
pueblo (36,7), en la periferia indígena y en el resto del país. Sin embargo, siempre es menor al resto de
poblaciones (sin pueblo indígena y no indígena) (Anexo 1). Las personas de 15 años y más del pueblo
indígena Maleku, los “sin pueblo” y los de otro país, los que presentan mayores niveles en la tasa de
ocupación, muy similares al valor nacional (49,2; 50,0; 58,2; respectivamente), mientras los pueblos
con menores tasas de ocupación son el Ngöbe y el Cabécar (38,9 y 34,2 respectivamente) (Anexo 2).
En lo que respecta a territorios indígenas los que tienen una mayor tasa de ocupación son China Kicha
(50,7) y Telire (51,0), pero los que tienen una tasa muy baja son Zapatón (28,7), Conteburica (27,2),
Coto Brus (26,6) y Tayni (21,9) (Anexo 4).
En los territorios indígenas las personas empleadas mayores de 15 años y con seguro social directo
(asalariado y cuenta propia) son 2,3 veces menor que toda Costa Rica y suelen contar con seguros
indirectos, especialmente bajo la modalidad seguro por el Estado. Los pueblos, cuyos trabajadores no
tienen seguro social son mayormente los de otro país y el Ngöbe (32,2% y 38,3%, respectivamente).
En lo que respecta a territorios indígenas, la mayoría tienen un comportamiento similar al nacional en
lo que respecta a trabajadores(as) sin seguro directo, excepto en Nairi Awari (20,3%), China Kicha
(25,7%), Altos de San Antonio (29,3%), Këköldi (30,9%) y Conteburica (25,7%).
324
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El sector primario es el que prevalece a lo interno de los territorios indígenas (59,8%), en comparación
con el país que alcanza el 13,7%. En el resto del país las personas ocupadas en el sector primario
son el 12,4%, mientras que las personas indígenas se dedican en un 25,3% en ese sector (Anexo 1).
Por pueblo indígena quienes tienen bajos porcentajes de ocupación en este sector son los huetares
(20,2%), los chorotegas (19,5%) y quienes no tienen pueblo (17,4%), mientras que los niveles más
altos los tienen los bribris (51,9%), cabécares (69,3%) y los ngöbes (76,4%) (Anexo 2). En los territorios
indígenas con un porcentaje bajo dedicado a dicho sector son Quitirrisí (14,0%) y Matambú (36,4%),
mientras que donde predomina con mayor fuerza es en los territorios del pueblo Cabécar (78,6%),
especialmente en Talamanca Cabécar (85,5%) y Telire (96,9%) (Anexo 4).
Por territorio la situación habitacional presenta de forma más profunda algunos niveles de rezago,
especialmente en los ngöbes y los cabécares, muy distinto al presentado en los pueblos Huetar, Maleku
y Chorotega (Anexo 4).
Por primera vez el país cuenta con información específica y detallada de las viviendas tradicionales
indígenas y sus materiales de construcción. En total hay 1.198 viviendas de este tipo, donde viven 6.618
personas (el 6% de la población indígena), el 85,8% se concentra en territorios indígenas, el 7,3% en la
9/ Para profundizar en el tema de hogares productores a nivel agropecuario puede analizarse el documento INEC (2013).
10/ El 1,1% habita en viviendas colectivas (1.031) o no tienen vivienda (75). En las cárceles hay 631 personas indígenas, el
97,9% son hombres, el 61,8% tienen pueblo, de los cuales el 17,7% hablan algún idioma indígena. El 39,1% son de otro
pueblo, 20,3% no tiene pueblo indígena y el 11,9% son borucas y 8,4% chorotegas.
325
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Fuentes
periferia y el 6,8% en el resto del país. En los territorios el 92,1% se encuentra entre los pertenecientes
a los pueblos bribris y cabécares. Por otra parte, hay territorios donde no hay viviendas tradicionales
(Matambú, Zapatón, Quitirrisí y Guatuso) (Anexo 4). En ellas las condiciones de vida tienden a ser más
tradicionales, aunque el no tener acceso a agua potable y el no tener condiciones adecuadas de los
servicios sanitarios son condiciones que vulneran la salud11.
La autoidentificación étnica, para el tema indígena, es la forma más adecuada para recopilar
información en un Censo, junto a una campaña y capacitación contextualizadas, además de la
participación de censistas que permitan la traducción o interpretación de las respuestas facilitadas por
la persona informante, según todo lo contemplado en un proceso de consulta.
En los territorios indígenas está el 45,6% de la población originaria y en este se presentan las
condiciones de vida más adversas, al igual que en el caso de los pueblos Cábecar, Ngöbe o Guaymí
y Bribri. Quienes se autoidentificaron como indígenas “sin pueblo”, representan la cuarta parte de esta
población y poseen mejores condiciones de vida, en especial en el resto del país, donde está el 91,4%.
Los pueblos y territorios Cabécar, Ngöbe o Guaymí y Bribri presentan indicadores más adversos, a
diferencia de los pueblos Huetar, Maleku y Chorotega. Sin embargo, los últimos presentan datos que
dan cuenta de su aculturación indígena, por ejemplo, bajos porcentajes de población que habla algún
idioma autóctono, el dedicarse menormente al empleo agrícola y el no tener viviendas tradicionales
indígenas, entre otros. En lo referente a Necesidades Básicas Insatisfechas, existen marcadas brechas
de estas poblaciones respecto al resto de la población, en pleno reflejo de las condiciones históricas
de desigualdad y exclusión, en las que se fraguan el incumplimiento de derechos humanos.
En términos educativos las poblaciones indígenas presentan los indicadores más bajos respecto al
resto de la población, independientemente del área geográfica. Por ejemplo, en asistencia, alfabetismo,
nivel de instrucción y rezago escolar, lo cual es mayor en el caso de la población indígena que habla
algún idioma, excepto en los pueblos donde hablar el idioma no es lo predominante.
En las poblaciones indígenas más desprotegidas predominan las bajas tasas de ocupación, elevadas
relaciones de dependencia y altos porcentajes de población ocupada, sin seguro social directo
(asalariado o cuenta propia), en especial en las poblaciones indígenas en el resto del país. El no tener
acceso a agua potable o a conexiones del servicio sanitario que no les exponga a enfermedades,
vulnera la calidad de vida en términos de salud, donde la incidencia de muertes por enfermedades
infecciosas, parasitarias y otras presentan una mayor incidencia que en el resto del país, por lo que es
necesario el acceso a servicios de salud de calidad como derecho humano (Organización Internacional
del Trabajo, 1989; Naciones Unidas, 2007).
11/ Para profundizar en el tema de viviendas en territorios indígenas puede analizarse el documento Instituto Nacional de
Estadística y Censos (2013).
326
Integración Poblacional Fuentes Costa Rica a la Luz del Censo 2011
En las áreas de vivienda, salud, educación, cultura, planificación, justicia, infraestructura y distribución
de la riqueza se deben tomar acciones previamente consultadas, idealmente consensuadas y
fundamentalmente contextualizadas, que permitan la participación activa y el planteamiento de
posibles soluciones junto a las poblaciones indígenas, que respeten y valoren su cosmovisión, sus
deberes y derechos. Por ejemplo, existen deudas muy importantes en materia educativa, pues según
la Defensoría de los Habitantes (2011, p. 184) continúa sin cumplirse el artículo 27.1 del Convenio 169,
donde los pueblos indígenas deberían estar involucrados en el tipo de educación que reciben los niños
y las niñas, con el propósito de que responda a sus necesidades (Convention on the Rights of the Child,
2011, Pt.21).
El seguimiento y monitoreo sobre las poblaciones indígenas no debe ser abordado cada década en un
censo, sino que el tema podría incluirse en otras fuentes de información que permitan dar seguimiento
en el cumplimiento de los derechos humanos. También se recomienda, fundamentalmente, realizar
estudios cualitativos para analizar las razones por las cuales la cuarta parte de la población indígena
no dice pertenecer a ningún pueblo, lo cual será un insumo fundamental para próximos ejercicios
estadísticos.
Anexo 1
Costa Rica: Principales indicadores demográficos, sociales, educativos y económicos de la población indígena y no indígena por
área geográfica
2011
Rica
Total no Total no Total no
Con Sin Con Sin Con Sin
Total indíg. Total indíg. Total indíg.
pueb. pueb. pueb. pueb. pueb. pueb.
Total de la
100,0 1,1 74,1 73,5 0,6 25,9 5,3 6,6 5,8 0,8 93,4 93,6 1,3 0,7 0,6 98,7
población
De 0 a 14 años 24,8 37,6 40,2 40,3 24,6 30,3 28,3 28,8 30,5 17,7 28,3 24,5 15,8 18,8 12,2 24,6
De 15 a 64 años 67,9 57,5 55,6 55,5 65,2 62,9 65,2 63,1 61,9 70,8 65,4 68,2 72,1 71,2 73,1 68,2
De 65 años y
7,2 4,9 4,2 4,2 10,2 6,8 6,4 8,1 7,6 11,5 6,3 7,3 12,1 10,0 14,7 7,3
más
Dependencia
47,2 73,9 79,8 80,1 53,4 59,0 53,3 58,6 61,5 41,2 52,9 46,6 38,8 40,4 36,8 46,7
demográfica
Hijos por mujer
2,2 2,8 2,8 2,8 3,3 2,6 2,5 3,0 2,9 3,3 2,4 2,1 2,7 2,7 2,7 2,1
en edad fértil
Tasa hijos(as)
16,9 21,6 21,0 20,7 43,5 24,8 17,7 10,7 11,6 - 18,4 16,7 16,7 19,0 11,4 16,7
fallecidos
% de indíg.
habla idioma 60,0 60,0 60,0 60,4 14,1 - 26,7 26,7 29,5 7,1 - 11,5 11,5 16,8 4,9 -
indígena
% adolestes
26,3 27,9 28,3 28,3 23,1 26,4 27,0 31,2 30,9 34,2 26,7 26,2 28,1 31,0 23,3 26,2
madres
% mujeres
adolescentes en 4,3 12,7 14,4 14,4 15,4 6,9 6,8 9,6 9,7 9,2 6,6 4,1 8,7 11,3 4,2 4,0
unión
Integración Poblacional
Continua…
Fuentes
327
328
Continuación Anexo 1
Población
Integración Poblacional
85,5 89,2 92,2 92,2 83,4 80,9 85,8 83,5 83,3 85,2 86,0 85,4 79,6 74,9 85,4 85,5
asegurada
Asalariada 22,7 5,9 4,7 4,7 7,0 9,3 18,1 15,5 14,9 19,9 18,3 23,1 20,4 19,0 22,1 23,2
Cuenta
9,0 3,8 1,6 1,5 9,3 10,2 9,0 5,3 4,6 10,0 9,3 9,1 10,3 9,1 11,8 9,1
propia
Rég. no
Fuentes
1,2 1,3 1,2 1,2 3,8 1,6 1,5 1,8 1,7 2,8 1,5 1,2 2,2 2,1 2,3 1,2
contrib.
Pensionada 4,5 1,0 0,7 0,7 1,3 1,8 2,6 3,4 3,3 3,9 2,6 4,7 7,6 5,9 9,6 4,7
Familiar 39,8 15,5 10,9 10,8 22,4 28,8 40,4 32,3 32,7 29,8 41,0 40,1 28,3 26,0 31,2 40,2
Por el
7,4 61,2 72,7 73,0 38,0 28,3 13,6 24,6 25,5 18,1 12,8 6,4 9,8 11,6 7,6 6,4
Estado
Otras formas 0,8 0,5 0,4 0,4 1,6 0,8 0,6 0,6 0,6 0,8 0,6 0,8 1,0 1,2 0,7 0,8
No tiene
14,5 10,8 7,8 7,8 16,6 19,1 14,2 16,5 16,7 14,8 14,0 14,6 20,4 25,1 14,6 14,5
seguro soc.
% con al menos
una 10,5 9,9 8,9 8,8 17,9 13,0 12,2 14,4 13,4 20,8 12,0 10,4 18,2 17,1 19,5 10,3
discapacidad
% de población
27,7 75,0 80,1 80,1 75,1 60,6 40,9 57,3 58,7 47,9 39,7 26,3 36,6 43,7 27,9 26,2
con NBI
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 1
Indicadores
educativos
%
97,6 89,6 87,7 87,6 92,8 94,8 96,3 92,7 92,3 94,9 96,5 97,8 94,8 93,5 96,4 97,8
alfabetismo
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Escolaridad
8,7 5,7 5,3 5,3 5,3 6,5 7,6 6,6 6,6 6,6 7,7 8,8 7,7 7,4 8,1 8,8
promedio
Escolarid.
prom. de
pob. indig. 5,0 4,5 4,5 4,5 3,4 - 4,9 4,9 4,8 6,2 - 6,3 6,3 5,6 8,9 -
que habla
idiom.
% asist. a la
69,5 66,8 67,0 67,0 73,1 65,9 69,6 68,0 67,5 72,7 69,7 69,6 65,2 62,9 69,2 69,6
educ. regular
% asist.
educ. regular
38,3 59,3 59,3 59,5 15,8 - 25,6 25,6 27,7 6,7 - 13,3 13,3 18,6 6,0 -
y habla
idiom. indíg.
% asistencia
educación 6,8 5,2 5,0 4,9 8,8 6,2 5,6 4,8 4,7 5,4 5,6 6,9 6,7 5,9 8,0 6,9
abierta
% con
secundaria y 57,8 30,2 28,2 28,2 23,3 35,2 48,1 38,4 38,7 36,7 48,8 58,6 48,7 46,5 51,3 58,7
más
% con
secundaria
34,8 12,2 10,3 10,4 8,9 16,7 25,4 19,1 19,2 18,6 - 35,5 28,8 26,8 31,0 35,6
completa y
más
Integración Poblacional
Continua…
Fuentes
329
330
Continuación Anexo 1
% asiste
Integración Poblacional
educ. regular 5,2 1,3 1,3 1,3 1,3 1,3 2,9 1,4 1,3 2,3 3,0 5,4 4,1 3,1 5,5 5,4
y trabaja
% al menos
un año de 23,6 40,6 43,7 43,8 31,0 29,1 25,7 34,8 35,1 32,3 25,1 23,2 33,4 37,4 26,7 23,1
Fuentes
rezago esc.
% pob. indig.
que habla
51,3 51,4 51,4 51,4 30,8 - 45,7 45,7 45,8 41,2 - 55,5 55,5 60,1 28,5 -
idiom. indig.
y rezago
% uso de
56,3 15,9 12,6 12,6 20,8 28,0 38,8 23,0 22,5 28,9 39,9 58,1 41,2 32,3 56,3 58,3
Internet
Asit. guardería,
maternal o 13,7 5,2 4,9 5,0 - 6,0 8,6 5,5 5,1 11,6 8,8 14,2 9,9 8,1 14,1 14,3
prekinder
Característi-
cas
económicas
Tasa neta de
participa- 53,5 40,7 38,1 38,1 44,9 46,9 49,5 46,0 45,0 51,6 49,8 53,8 52,3 52,7 51,9 53,8
ción
Tasa de
51,7 39,2 36,7 36,7 41,1 45,2 47,9 44,7 43,8 50,1 48,2 52,0 50,4 50,7 50,1 52,0
ocupación
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 1
% pobl.
ocup. con
73,5 31,8 23,7 23,5 38,1 48,0 68,7 58,0 57,0 63,1 69,4 73,7 63,0 59,1 67,4 73,8
seguro
directo
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
% pobl.
ocup. sin 14,4 13,6 8,4 8,2 23,7 24,1 15,5 18,6 18,8 17,8 15,3 14,5 20,2 23,9 15,9 14,4
seguro
Tasa de
desempleo 3,4 3,6 3,6 3,6 8,5 3,5 3,2 2,8 2,8 3,1 3,2 3,4 3,7 3,8 3,6 3,4
abierto
% pobl. fuera
fuerza 46,5 59,3 61,9 61,9 55,1 53,1 50,5 54,0 55,0 48,4 50,2 46,2 47,7 47,3 48,1 46,2
trabajo
Relación
depend. 148,7 294,4 338,4 340,3 195,3 206,4 181,8 205,4 219,3 135,3 180,2 146,0 127,0 133,7 119,4 146,3
económ.
% pobl.
ocup. sector 13,7 59,8 65,0 65,2 50,5 49,3 34,7 46,5 47,7 40,4 34,0 12,4 20,7 25,3 15,4 12,2
primario
Porcentaje de
población
ocupada
De 12 a 14
1,6 3,8 4,0 4,0 - 3,4 1,9 1,6 1,3 3,8 1,9 1,5 3,5 3,3 3,8 1,5
años
De 15 a 17
7,4 10,6 10,4 10,4 7,1 11,2 7,9 8,6 8,0 14,3 7,9 7,3 10,5 11,8 8,5 7,2
años
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
Integración Poblacional
Total de
104 143 18 198 5 555 16 985 11 442 3 461 1 780 9 543 2 665 8 444 26 070
población
Fuentes
En territorio
34,5 66,4 45,5 76,7 10,0 39,4 28,2 39,5 38,8 2,2 1,2
indígena
En periferia
14,4 15,5 16,0 8,8 22,8 10,3 6,8 34,3 31,1 8,6 7,4
indígena
Resto del
51,0 18,2 38,5 14,5 67,1 50,3 65,0 26,2 30,2 89,1 91,4
país
De 0 a 14 años 26,1 34,5 23,5 42,1 15,3 16,5 20,6 45,1 24,7 17,6 12,8
De 15 a 64 años 65,1 60,9 67,6 54,3 69,2 69,9 71,6 52,8 65,2 75,1 72,8
De 65 años y
8,8 4,6 9,0 3,6 15,5 13,6 7,9 2,1 10,2 7,3 14,4
más
Dependencia
53,7 64,2 48,0 84,1 44,5 43,1 39,7 89,5 53,4 33,1 37,3
demográfica
Hijos por mujer
2,8 2,8 2,9 2,8 2,8 2,7 2,7 2,6 3,1 2,8 2,8
en edad fértil
Tasa hijos(as)
17,8 14,2 6,5 25,0 13,6 0,0 0,0 21,0 12,0 23,6 11,8
fallecidos
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 2
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
% de indíg.
habla idioma 30,4 45,1 5,9 74,2 1,6 1,6 24,8 67,7 6,6 22,5 5,2
indígena
% adolestes
28,7 29,0 16,9 27,2 36,6 32,6 25,9 33,0 23,9 35,8 24,3
madres
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
% mujeres
adolescentes en 11,7 11,5 5,3 16,9 2,6 3,0 8,2 18,6 3,6 18,2 4,9
unión
Población
84,5 92,6 89,3 91,1 86,0 91,0 86,2 66,5 88,9 61,9 85,4
asegurada
Asala-riada 14,3 9,0 15,3 4,9 19,1 19,5 16,3 7,0 13,2 20,3 21,8
Cuenta
6,6 2,9 6,8 1,8 8,3 8,9 9,2 1,1 6,3 10,7 11,6
propia
Rég. no
1,8 1,0 2,4 1,3 4,0 2,4 1,5 0,5 2,3 0,6 2,4
contrib.
Pensio-
4,6 1,6 4,0 0,9 8,9 8,4 3,1 0,4 3,1 2,9 9,1
nada
Familiar 22,9 18,0 23,5 12,5 27,8 27,4 26,0 22,4 23,2 20,3 31,0
Por el
33,7 59,8 36,7 69,5 17,0 22,7 29,3 34,4 40,5 5,1 8,7
Estado
Otras
0,7 0,4 0,5 0,3 0,8 1,7 0,8 0,6 0,3 2,0 0,7
formas
Continua…
Integración Poblacional
Fuentes
333
334
Continuación Anexo 2
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
No tiene
seguro 15,5 7,4 10,7 8,9 14,0 9,0 13,8 33,5 11,1 38,1 14,6
Integración Poblacional
social
% con al menos
una 14,4 9,7 17,9 8,3 21,2 19,5 17,4 5,9 18,9 14,8 19,6
discapacidad
Fuentes
% de población
54,6 66,1 49,0 88,1 30,6 30,2 39,8 84,4 62,6 51,7 29,9
con NBI
Indicadores
educativos
% alfabe-
92,3 92,6 96,2 82,3 96,9 93,9 96,1 86,5 94,7 89,8 96,3
tismo
Escola-
ridad 6,9 6,3 7,4 4,5 8,3 7,7 7,4 5,0 6,4 6,9 7,9
promedio
Escolari-
dad. prom.
de pob.
5,0 5,4 7,1 3,8 8,0 6,5 7,2 4,6 6,3 6,1 8,5
indig. que
habla
idiom.
% asist. a la
educ. 61,6 63,1 66,9 61,2 64,1 66,2 59,6 61,0 70,8 44,6 62,2
regular
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 2
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
% asist.
educ.
regular y 40,7 43,8 5,2 77,4 1,1 1,5 26,1 68,3 6,5 30,4 7,5
habla
idiom. indíg.
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
% asisten-
cia educa- 5,7 6,4 6,7 4,4 7,3 7,2 6,1 2,7 5,4 3,5 7,8
ción abierta
% con
secundaria 41,5 35,7 45,4 23,1 51,8 46,7 46,0 26,3 35,5 43,6 50,0
y más
% con
secundaria
22,3 15,0 24,2 7,8 32,0 28,1 24,0 8,0 15,0 25,6 29,9
comple-ta y
más
% asiste
educ.
2,4 2,0 3,2 1,0 3,1 4,1 2,7 0,6 1,8 2,4 5,2
regular y
trabaja
% al menos
un año de 39,0 37,8 30,7 52,3 19,7 19,2 35,5 44,7 27,1 47,3 27,4
rezago esc.
Continua…
Integración Poblacional
Fuentes
335
336
Continuación Anexo 2
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
% pob.
Integración Poblacional
indig. que
habla 51,3 45,1 37,7 57,1 20,0 40,0 36,4 47,8 22,2 61,7 29,7
idiom. indig.
y rezago
Fuentes
% uso de
23,4 19,4 39,1 7,5 43,3 41,4 31,6 7,6 31,0 30,4 52,9
Internet
Asit. guardería,
maternal o 6,5 6,7 6,8 4,4 10,9 13,9 7,6 3,9 4,1 5,1 13,5
prekinder
Características
económicas
Tasa neta
de partici- 47,5 45,8 47,4 36,1 45,4 48,8 50,7 39,9 45,9 60,2 51,8
pación
Tasa de
45,8 44,2 46,0 34,2 43,9 47,2 49,2 38,9 44,5 58,2 50,0
ocupación
% pobl.
ocup. con
53,5 36,5 55,0 27,7 61,8 62,5 57,6 35,3 49,8 56,3 66,8
seguro
directo
% pobl.
ocup. sin 17,3 9,2 13,6 10,6 15,9 12,1 15,8 38,3 15,2 32,2 16,1
seguro
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 2
Brunca
Maleku o Ngöbe o Teribe o De otro Ningún
Total Bribri o Cabécar Chorotega Huetar
Guatuso Guaymí Térraba país pueblo
Boruca
Tasa de
desempleo 3,6 3,4 2,9 5,3 3,4 3,4 2,9 2,5 3,0 3,4 3,6
abierto
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
% pobl.
fuera fuerza 52,5 54,2 52,6 63,9 54,6 51,2 49,3 60,1 54,1 39,8 48,2
trabajo
Relación
depend. 185,0 233,4 175,8 378,6 160,2 145,1 148,3 356,2 189,0 101,6 121,2
Económ.
% pobl.
ocup.
34,1 51,9 32,0 69,3 19,5 20,2 24,9 76,4 38,7 29,1 17,4
sector
primario
Porcentaje de
población
ocupada
De 12 a 14
3,4 3,1 2,7 5,8 0,7 0,0 1,2 2,9 0,7 3,2 3,7
años
De 15 a 17
10,2 11,5 11,0 9,6 4,0 6,6 10,6 10,1 12,4 18,6 9,0
años
Total 48 500 37,6 73,9 2,2 27,9 12,7 21,6 60,0 61,2 10,8 9,9 15,9 75,0
Fuentes
Bribris 16 938 36,7 70,4 2,2 28,5 12,4 11,1 54,7 60,7 9,8 9,0 19,6 67,4
Salitre 1 807 41,0 82,2 2,3 36,3 10,0 33,9 53,4 67,3 6,7 5,6 24,3 85,9
Cabagra 3 188 40,9 84,4 2,4 22,3 11,7 5,9 43,6 72,5 6,6 9,8 9,8 81,5
Talamanca Bribrí 8 368 35,4 66,6 2,2 30,4 13,9 12,0 60,8 74,6 4,2 8,3 18,5 64,0
Këköldi 3 575 33,8 62,6 2,1 24,7 10,0 6,0 36,3 14,2 27,5 11,5 31,4 53,4
Bruncas o Borucas 4 317 31,4 62,4 2,0 19,9 6,3 0,0 5,6 55,7 10,1 14,8 31,4 70,8
Boruca 3 228 31,4 61,9 2,0 19,1 4,1 0,0 5,9 54,4 9,5 14,9 37,1 69,4
Curré 1 089 31,5 63,8 2,0 23,0 14,8 0,0 4,4 59,7 11,8 14,6 13,4 75,0
Cabécares 13 993 44,8 91,9 2,4 27,7 17,7 29,2 87,6 75,2 7,9 6,8 7,2 94,9
Chirripó 6 341 47,9 100,7 2,4 23,2 16,5 25,7 96,7 80,7 6,7 4,8 5,1 97,2
Ujarrás 1 321 36,0 74,0 2,2 22,9 7,6 37,7 71,4 74,7 7,0 12,6 7,5 82,3
Tayni 2 850 47,5 99,7 2,6 33,9 25,2 32,9 86,7 64,6 10,0 6,9 5,8 95,5
Talamanca Cabécar 1 435 38,3 72,9 2,3 37,3 11,8 55,6 64,9 89,2 5,7 8,7 11,9 95,3
Telire 545 53,2 126,1 2,9 40,5 21,6 0,0 86,5 90,8 0,6 4,4 16,5 100,0
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Anexo 3
Bajo Chirripó 923 38,5 70,3 2,1 35,0 28,8 16,9 86,6 63,5 16,6 8,1 5,6 97,9
Nairi Awari 473 36,8 76,5 2,1 12,5 8,3 35,7 94,6 39,5 11,0 13,3 23,5 91,3
China Kicha 105 34,3 64,1 2,1 12,5 12,5 0,0 39,1 32,4 15,2 3,8 23,1 55,2
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Chorotega 1 685 25,4 56,0 1,7 25,6 0,0 23,3 0,4 52,7 8,1 15,4 23,2 34,6
Matambú 1 685 25,4 56,0 1,7 25,6 0,0 23,3 0,4 52,7 8,1 15,4 23,2 34,6
Huetares 2 417 25,1 50,6 1,7 35,4 2,0 44,1 0,7 31,7 6,3 17,0 34,6 34,6
Zapatón 452 25,2 57,5 1,8 46,4 3,6 0,0 0,8 67,0 2,4 30,3 60,5 29,0
Quitirrisí 1 965 25,1 49,1 1,7 32,8 1,7 51,7 0,7 23,6 7,2 14,0 29,1 35,9
Maleku o Guatuso 1 423 28,5 56,9 1,7 22,4 3,9 46,5 67,5 39,1 16,7 17,2 23,9 48,3
Guatuso 1 423 28,5 56,9 1,7 22,4 3,9 46,5 67,5 39,1 16,7 17,2 23,9 48,3
Ngöbes o Guaymíes 5 643 41,1 82,3 2,3 33,7 16,1 24,3 77,7 54,2 22,3 7,7 9,5 83,3
Abrojo Montezuma 1 494 36,6 74,5 2,2 55,1 9,2 0,0 86,4 58,1 11,3 9,3 14,4 77,9
Osa 159 32,1 54,4 2,3 5,9 0,0 0,0 87,0 60,4 6,3 15,7 8,7 89,3
Conteburica 1 863 39,1 73,9 2,1 21,6 19,4 28,6 67,3 23,1 47,8 4,2 13,4 86,8
Coto Brus 1 785 47,7 103,8 2,7 35,5 22,0 41,7 88,2 81,3 7,4 7,7 3,3 85,7
Altos de San Antonio 342 40,9 80,0 1,9 24,0 4,0 0,0 13,9 61,7 17,3 15,8 10,0 72,2
Teribe o Térraba 2 084 31,3 60,1 1,9 18,9 3,1 47,1 9,9 58,1 10,5 15,8 15,5 88,2
Térraba 2 084 31,3 60,1 1,9 18,9 3,1 47,1 9,9 58,1 10,5 15,8 15,5 88,2
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Integración Poblacional
Fuentes
339
340
Anexo 4
Costa Rica: Principales indicadores educativos, económicos y de vivienda por territorio indígena
2011
% % pob.
Esco. % viv.
asiste. % con indig.
prom. % % con % % ser.
educ. un que % % viv. % viv. % viv.
Territorios % Esco. pobl. asiste. secund. Tasa ocup. Depend. ocup. sanit.
reg. y año de habla cuent. buen con trad.
indígenas alfab. prom. habla educ. compl. ocup. sin económ. sect. hueco,
Integración Poblacional
Total 89,6 5,7 4,5 63,7 59,3 12,2 40,6 51,4 39,2 14,5 294,4 69,2 59,8 42,0 42,5 67,3 8,9
Bribris 92,1 6,2 5,3 64,9 47,5 14,3 36,3 45,0 44,1 13,5 247,7 71,9 59,7 46,7 43,4 70,7 6,5
Salitre 93,3 5,6 4,6 58,6 44,9 10,7 38,5 46,3 37,5 7,5 345,1 45,1 63,3 42,9 61,0 52,3 5,9
Cabagra 92,0 5,1 3,9 66,4 35,2 7,1 41,6 56,6 36,4 12,3 329,1 71,1 73,4 43,2 51,3 65,2 1,2
Talamanca Bribrí 90,8 6,4 5,7 65,3 54,2 15,2 35,1 41,4 45,2 6,2 236,1 81,6 64,6 53,8 48,2 66,1 11,6
Këköldi 94,7 6,8 5,0 65,6 28,0 19,4 32,3 51,3 51,0 30,9 190,2 55,4 40,8 36,1 20,5 91,4 0,5
Bruncas o
Borucas 95,1 6,3 6,5 65,8 5,8 14,1 33,9 32,4 42,0 15,8 236,2 78,1 59,9 39,2 22,8 89,0 0,8
Boruca 95,5 6,4 6,6 67,8 5,6 15,5 35,5 36,0 40,7 14,9 243,8 79,9 57,7 41,6 21,4 89,9 0,9
Curré 94,0 5,9 5,8 59,7 6,7 10,1 28,4 22,2 45,8 18,4 215,7 74,0 65,5 32,6 27,1 86,5 0,3
Cabécares 81,2 4,2 3,7 60,0 89,2 6,2 53,5 57,3 33,7 9,3 412,2 66,2 78,6 35,6 70,8 33,3 24,5
Chirripó 78,0 3,7 3,4 63,0 99,0 4,2 58,1 59,4 32,9 8,8 460,7 65,8 79,9 19,4 86,8 23,9 50,9
Ujarrás 85,9 5,1 4,5 65,9 70,4 8,9 39,2 40,9 33,0 12,9 344,8 69,8 80,3 60,2 22,8 54,4 1,8
Tayni 81,2 4,1 3,7 60,7 87,0 5,1 55,9 60,2 21,9 5,5 691,7 32,4 66,8 46,0 70,1 24,2 4,2
Talamanca
87,0 5,7 5,4 51,8 51,1 14,9 40,6 50,6 46,8 8,2 241,7 88,5 85,5 45,2 84,8 37,2 10,4
Cabécar
Telire 63,1 1,5 1,3 41,0 100,0 2,0 77,2 76,1 51,0 0,8 312,9 94,7 96,9 5,3 70,2 18,1 77,7
Bajo Chirripó 90,0 4,5 4,3 57,0 93,4 3,7 37,2 39,1 35,6 10,9 306,6 48,3 72,8 35,4 76,4 39,2 2,8
Nairi Awari 84,7 4,9 3,0 48,4 100,0 8,4 52,6 63,1 41,1 20,3 263,8 49,4 68,3 46,7 39,4 71,5 2,9
China Kicha 98,8 6,1 5,3 63,4 26,7 7,2 28,0 33,3 50,7 25,7 200,0 31,8 57,1 57,1 21,4 75,0 0,0
Continuación…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continua Anexo 4
% % pob.
Esco. % viv.
asiste. % con indig.
prom. % % con % % ser.
educ. un que % % viv. % viv. % viv.
Territorios % Esco. pobl. asiste. secund. Tasa ocup. Depend. ocup. sanit.
reg. y año de habla cuent. buen con trad.
indígenas alfab. prom. habla educ. compl. ocup. sin económ. sect. hueco,
habla rezago idiom. prop. estado elect indíg.
idioma regular y más seg. prim. pozo o
idiom. esc. indig. y
indig. letr.
indig. rezago
Chorotega 94,3 6,9 7,8 68,2 0,4 17,7 23,3 - 0,0 10,5 263,1 43,9 36,4 63,3 9,9 97,1 0,0
Matambú 94,3 6,9 7,8 68,2 0,4 17,7 23,3 - 35,6 10,5 263,1 43,9 36,4 63,3 9,9 97,1 0,0
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Huetares 93,9 6,7 7,3 66,3 0,8 17,3 19,4 0,0 42,9 6,2 193,0 54,6 19,5 55,3 8,0 98,4 0,0
Zapatón 86,4 5,6 6,0 67,2 1,0 15,7 12,4 0,0 28,7 1,0 334,6 76,8 57,7 57,1 7,5 98,5 0,0
Quitirrisí 95,7 7,0 7,7 66,1 0,8 17,7 21,2 0,0 46,1 6,9 172,5 41,7 14,0 54,9 8,1 98,4 0,0
Maleku o Guatuso 93,6 6,6 7,1 58,3 57,3 17,7 38,2 37,0 0,0 21,8 265,8 53,1 37,7 44,7 9,2 98,3 0,0
Guatuso 93,6 6,6 7,1 58,3 57,3 17,7 38,2 37,0 37,0 21,8 265,8 53,1 37,7 44,7 9,2 98,3 0,0
Ngöbes o
Guaymíes 90,3 5,6 4,9 67,0 78,6 11,7 37,9 43,8 32,0 23,4 412,5 69,0 59,0 27,8 49,7 62,3 3,9
Abrojo Montezuma 92,3 6,0 5,4 63,1 88,9 14,9 28,8 33,3 37,9 18,7 310,4 61,4 57,9 24,5 34,3 76,1 0,0
Osa 91,4 5,0 4,8 67,6 87,5 4,6 46,9 48,4 47,2 9,8 211,8 94,1 66,7 29,5 20,5 65,9 0,0
Conteburica 92,5 6,3 5,7 68,4 62,6 14,3 37,5 44,8 27,2 35,4 475,0 79,3 52,6 30,8 59,4 62,4 6,6
Coto Brus 85,1 4,3 4,1 67,9 90,8 5,8 45,2 46,2 26,6 15,7 591,9 68,2 69,8 23,2 60,1 49,2 4,6
Altos de San
93,3 6,1 5,7 68,6 11,8 12,9 24,7 25,0 49,0 29,3 228,8 52,9 51,5 44,8 34,5 59,8 4,6
Antonio
Teribe o Térraba 94,9 5,9 5,4 66,7 11,2 10,7 27,3 22,0 0,0 18,2 230,3 70,4 63,4 39,4 19,1 86,2 3,4
Térraba 94,9 5,9 5,4 66,7 11,2 10,7 27,3 22,0 42,9 18,2 230,3 70,4 63,4 39,4 19,1 86,2 3,4
Fuente: Elaboración propia a partir de INEC, 2012.
Integración Poblacional
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341
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344
Integración Poblacional Campbell Costa Rica a la Luz del Censo 2011
I. Introducción
Costa Rica es un país pluricultural y multiétnico, así lo confirmó el Censo Nacional de Población y
Vivienda de 2011, en el cual el 95% de la población se reconoce como perteneciente a algún grupo
étnico-racial. Personas indígenas, afrodescendientes, negras, mulatas, mestizas, chinas y blancas
forman parte de una Costa Rica que se reconoce a sí misma como diversa en este Siglo XXI.
Al igual que la mayoría de los países de la región en el contexto de la Ronda de Censos que inició
en 2010, Costa Rica optó por incorporar en su cuestionario censal preguntas relacionadas con la auto
identificación étnica y racial de las personas que viven en el país.
La incorporación de la pregunta sobre auto identificación étnica y racial, es producto del diálogo
generado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos –INEC- con las personas censadas. Tras
más de un año de reuniones de trabajo para generar acuerdos y definir los alcances de la pregunta
relacionada con la diversidad étnica y racial, en la cual participaron organizaciones sociales y
representantes de la Academia.
En este censo se incorporaron dos opciones de respuesta para la población afrodescendiente: negra
o afrocostarricense y mulata. Se entiende que las preguntas del Censo, relativas a la auto identificación
debe incorporar en las opciones de respuesta aquellas que sean las más comúnmente utilizadas por
las personas a las que se pretende contar.
Los censos permiten al país contar con información estadística actualizada sobre las características
sociales, demográficas y económicas de la población, así como las condiciones de las viviendas en
que habitan las personas del país. Este es un ejercicio que se realiza en promedio cada diez años y
es la base para la identificación de las muestras sobre las que se realizan otros estudios estadísticos
periódicos sobre la realidad de habitantes. Por esa razón, los censos deben ser en estricto sentido una
herramienta para tomar una fotografía de la realidad en un momento determinando.
Por lo tanto, se debe ajustar el lente (cuestionario) para permitir que la población en toda su diversidad
y con toda su realidad sea captada. En ese sentido se debe de utilizar un lenguaje llano, de fácil acceso
para toda la población y en el cual las opciones de respuesta sean entendidas por la población
encuestada sin necesidad de que el encuestador deba de hacer aclaraciones que infieran en posibles
respuestas.
1/ Epsy Campbell Barr, [email protected] Economista, Investigadora. Directora de la Asociación para el Desarrollo de las
Mujeres Negras Costarricenses (Centro de Mujeres Afro). Activista de los Derechos Humanos de las Mujeres y Pueblos
Afrodescendientes. Experta en temas de desarrollo social y equidad.
345
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Si bien, en muchos países los movimientos sociales afrodescendientes utilizan el método censal para
generar procesos de empoderamiento que contribuyan a que la población afro conteste de manera
asertiva sobre su identidad, las opciones que se presenten deben de responder a la realidad de la
población a la que se pretende censar. De modo que además de promover respuestas que incluyan
el moderno concepto de “Afrodescendiente”, también debe garantizarse que se incorporen en las
opciones las formas más comunes que las personas afro utilizan para autoidentificarse, sin cargarlas de
valoraciones históricas y peyorativas que pueden afectar negativamente el proceso de contabilización
de este importante grupo de la población.
En el proceso preparatorio del Censo 2011 se realizaron pruebas piloto sobre la pregunta de auto
identificación étnica-racial en el distrito de Patarrá y en el Cantón de Talamanca, donde se puso a
prueba, la pregunta propuesta por el Centro de Mujeres Afrocostarricenses. Del mismo modo, en el
Censo Experimental de Palmares 2010 se probó una pregunta cerrada dirigida específicamente a la
población afrocostarricense y dos preguntas dirigidas a la población indígena del país.
Los resultados finales indican que el 83,6% de la población costarricense se considera blanca/
mestiza, el 7,8% afrodescendiente (negra/afrodescendiente el 1,1% y mulata 6,7%), un 2,4% indígena,
un 0,2% china y un 5% o no respondió o no se considera perteneciente a ningún grupo étnico-racial.
El Censo 2000 incorporó una pregunta relativa a la pertenencia étnica y racial, con el objetivo de
“cuantificar a las minorías étnicas del país”. Por lo tanto, la pregunta estuvo dirigida a aquellas personas
que poseían una cultura diferente a la de la mayoría nacional que formaban parte de una etnia.
Quedan reflejadas en las opciones de respuesta de la pregunta sobre auto identificación racial, las
siguientes “minorías”: negras o afrocostarricenses; indígenas y chinas. El resto de la población que
expresamente no pertenecía a ninguno de estos grupos quedó en una mayoría denominada “otro(a)”.
El resultado del censo, altamente cuestionado por la población afrocostarricense y con un subregistro
reconocido por el mismo INEC, arrojó que un 1,9% de la población se consideró negra o afrocostarricense,
un 2% indígena y un 0,5% china; con lo que la auto-identificación étnica y racial de más de un 95%
quedó invisibilizada en la opción “otro”. Expertos consideran que preguntas dirigidas exclusivamente a
personas que forman parte de grupos históricamente discriminados aumentan el riesgo y la magnitud
del censo.
A partir de la experiencia y del análisis de los resultados del Censo 2000 y de la demanda de
las organizaciones afrocostarricenses, y de, acuerdos y compromisos internacionales relativos a la
necesidad de cuantificar a las poblaciones indígenas y afrodescendientes, el Instituto Nacional de
346
Integración Poblacional Campbell Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Para el Censo 2011 se avanzó en el proceso de recopilar datos sobre autoidentificación a toda la
población, tomando como referencia la experiencia del Censo 2000.
III. Metodología
Para la elaboración del Censo Nacional 2011 se realizó una serie de conversatorios a partir de
las temáticas identificadas previamente por las autoridades del INEC. En este sentido, además de
las recomendaciones internacionales que proponían la incorporación de preguntas relativas a la
pertenencia étnica-racial, el Centro de Mujeres Afrocostarricenses inició un diálogo formal con el
Instituto de Estadísticas desde el año 2008, para garantizar una mejora sustantiva de la pregunta con
respecto a la experiencia censal del Censo 2000.
Si bien, se incorporó una pregunta específica dirigida a la mayoría de la población, relacionada con
la pertenencia étnica-racial, también se incorporaron dos preguntas específicas dirigidas a los pueblos
indígenas, relacionadas con pertenencia a uno de los 8 pueblos reconocidos en el país y a su idioma.
El cuadro 1 muestra los alcances y las limitaciones de esta pregunta.
347
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Cuadro 1
Alcances y Limitaciones de la Pregunta
Se incorporan al menos dos Mientras que se separa las categorías negro(a) y mulato (a),
opciones para la población no se separan las categorías blanco(a) y mestizo(a);
Afrodescendiente. Se separa la colocándola como una sola opción.
categoría negro(a) y mulato (a).
Se incorpora solo una opción para la No se incorporaron opciones sobre el multilingüismo,
población mayoritaria. sabiendo que una parte de la población afro tiene como
lengua materna el creole- Limón English.
Pese a que en el mes de abril de 2010 el INEC accedió a realizar pruebas piloto, y donde se probó
un cuestionario que incluyó una propuesta de pregunta de auto identificación étnica/racial elaborada
por el Centro de Mujeres Afro2; la evaluación sobre la pertinencia de la pregunta, la comprensión sobre
esta y los resultados alcanzados fueron hechos exclusivamente por funcionarios del INEC, quienes sin
mayores argumentos desestimaron esta propuesta, reafirmando su perspectiva de “contar indígenas y
afrodescendientes”.
Para el mes de agosto de 2010 se realiza en Costa Rica un Censo Experimental en el Cantón de
Palmares, con el objetivo de probar toda la boleta censal. Para el caso de la pregunta relativa a la
población afrodescendiente, se optó por la opción de realizar una interrogante cerrada: “¿Se considera
usted, negro(a), mulato(a) o afrodescendientes? Las opciones de respuesta fueron Sí o No.
Pese a la resistencia sobre este tipo de pregunta; además, al considerar que este cantón del país
no da cuenta de la diversidad nacional, los resultados arrojados sorprendieron a los y las propias
funcionarias del INEC y organizaciones, pues el 8,5% de las más de 15 mil personas encuestadas
contestaron afirmativamente a la pregunta. La reacción del INEC ante este resultado fue considerar
2/ Se considera usted: indígena (especifique el pueblo al que pertenece); mulato(a); afrodescendiente; negro(a); mestizo(a);
blanco(a); otro(a) ¿Cual? Para efectos del análisis las tres categorías resaltadas se denominarán como afrodescediente.
348
Integración Poblacional Campbell Costa Rica a la Luz del Censo 2011
que existió un “sobre registro”, pues este resultado fue comparado con el resultado del censo 2000 (en
el cual el mismo instituto reconoció como subregistro), según el cual solo el 1,9% de la población se
consideró negro(a) o afrocostarricense.
Uno de los elementos centrales en el debate, fue que la pregunta debía de incorporar opciones
para toda la población o para la mayoría. Lo anterior se fundamenta en el reconocimiento del racismo
imperante, razón por la cual muchas personas pertenecientes a pueblos, grupos y comunidades
históricamente excluidas, tendrán razones de peso para ocultar su identidad en la categoría “otro (a)”
si solo aparecen opciones que buscan identificar a los llamados “grupos étnicos” como sucedió en la
experiencia costarricense del año 2000. Por otra parte, un objetivo estratégico de esta pregunta, es
hacer visible el multiculturalismo del país y contar con información fidedigna que permita identificar
brechas y diferencias socio-económicas a partir de la pertenencia étnica-racial.
Si bien, en los conversatorios hubo una resistencia a la incorporación de las categorías “blanco(a) y
mestizo(a)”; al aducir que se refería a categorías raciales y no étnicas, y que el compromiso internacional
del país estaba directamente relacionado con la incorporación de preguntas que dieran cuenta de la
realidad de los pueblos indígenas y afrodescendientes.
Como parte de este proceso el Grupo de Trabajo sobre Censos y Afrodescendientes de las Américas,
y del cual participan representantes del Centro de Mujeres Afrocostarricenses; envió un comunicado
a la Presidenta de la República de Costa Rica (Anexo 1), en la cual se informa sobre la mejor técnica
para elaborar preguntas sobre auto-identificación étnica-racial, esto dada la experiencia internacional.
Además se realiza una solicitud de manera directa para que se acoja la propuesta realizada por el
Centro de Mujeres Afrocostarricenses, en donde se incluían opciones para la mayoría de la población.
Finalmente, se acordó que la redacción de la pregunta debía de incluir la categoría “blanco(a)”, forma
en que comúnmente se reconoce una parte importante de la población costarricense, igualándola a
la categoría mestizo, acepción menos utilizada en el país. Salida salomónica para superar el debate
relacionado con la “blanquitud” real o ficticia de la población costarricense, que construyó históricamente
una identidad relacionada con la ascendencia española como prioritaria.
349
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Después de varias sesiones de diálogo, realizadas las pruebas piloto y concluido el Censo
Experimental Palmares 2010, y a solamente seis meses de realizarse el Censo Nacional 2011; el INEC
programó una sesión de trabajo para concertar la pregunta que se incorporaría en el formulario censal
relativa al multiculturalismo.
LaIV:
BLOQUE pregunta que se incorporó
CARACTERÍSTICAS en el censo fue la siguiente:
SOCIOECONÓMICAS
Nombre
14.
3/ Según el Diccionario de la Lengua¿ElEspañola. Vigésima
centro al que asiste Segunda Edición 2001.
(nombre) es…
censal se igualen las categorías blanco y mestizo, haciéndolas parecer como sinónimos, pues se alejan
del entendimiento común para la ciudadanía de ambos conceptos.
Usted debe de formular la pregunta a todas las personas residentes habituales del hogar, nacionales
y extranjeros, estén presentes o no. Por ningún motivo debe dejar de formular esta pregunta, siempre y
cuando no se hayan identificado como indígenas.
La respuesta será anotada utilizando el enfoque de auto-identificación étnica, por lo tanto usted debe
de respetar y asignar la respuesta brindada por la persona. Por ningún motivo asigne una respuesta
tomando como referencia la apariencia física de la persona (INEC, 2011).
Negro(a) o afrodescendiente: las personas que reconocen principalmente en su identidad las raíces
culturales de ascendencia africana y su diáspora.
Mulato(a): las personas que reconocen principalmente en su identidad las raíces culturales de
ascendencia africana y su diáspora a partir de uno de sus progenitores. (INEC, 2011).
Debido a las definiciones utilizadas, para efectos del presente estudio y del propio censo las categorías
Negro(a) o afrodescendiente y mulato (a), se suman en una única denominada afrodescendiente. Solo
en casos en los cuales se analiza a la propia comunidad afrodescendiente se utilizarán los datos
diferenciadamente entre ambas categorías de respuesta.
Sobre el orden de las opciones de respuesta la Comisión Económica para América Latina y el Centro
Latinoamericano y Caribeño de Demografía CEPAL/CELADE, advierte que debe de evitarse poner en
primer lugar las opciones negro(a) y blanco(a), ya que las cargas ideológicas de ambos conceptos
podrían determinar la opción de respuesta si se plantean de primero (Del Popolo, F.; 2008).
En resumen, el Censo 2011 avanza en la cuantificación del multiculturalismo en Costa Rica y permite
opciones de respuesta para la mayoría de la población más allá de las “minorías étnicas”. El cuadro 2
muestra las diferencias en esta materia en los Censos 2000 y 2011.
351
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Cuadro 2
Multiculturalismo en Costa Rica según censo 2000 y 2011
Opciones de respuesta limitadas a población china, Opciones de respuesta que incluyen a la población
afrocostarricense e indígena. blanca/mestiza.
95% de la población se adscribe a la categoría “otro Se conoce la auto- identificación étnica- racial del
(a)”. Se desconoce la auto- identificación etno-racial 95% de la población.
de la mayoría de la población.
Sub- registro reconocido para la población Aumento sustantivo de la población
Afrodescendiente, imposible de calcular. Afrodescendiente auto- identificada: 1,9% al 7,75%.
Fuente: Elaboración Propia, a partir de los Datos oficiales del IX Censo Nacional de Población y V de Vienda Costa Rica
2000 y Datos Oficiales del X Censo Nacional de Población y VI de Vivienda Costa Rica 2011.
Los conceptos utilizados comúnmente para la población afrodescendiente de Costa Rica y por la
misma población afro son los siguientes:
• Negros(as): Personas que se reconocen como descendientes de personas africanas, (la mayoría de
las cuales reconocen que poseen alguna o algunas características fenotípicas que así lo demuestran)
y reconocen en su identidad características de la ancestralidad africana y de su diáspora.
• Mulatos(as): Personas que se reconocen como descendientes de personas africanas, (la mayoría de
las cuales reconocen que poseen alguna o algunas características fenotípicas que así lo demuestran)
y reconocen en su identidad características de la ancestralidad africana y de su diáspora, a partir
de uno(a) de sus progenitores.
No obstante, los conceptos anteriores, las personas que se identifican como afrodescendientes, sean
negras, mulatas, afrocaribeñas o afrodescendientes, han construido sus identidades a través de una
combinación de factores históricos, culturales, familiares, fenotípicos, sociales y geográficos; en el
contexto de sociedades en las cuales han sido víctimas directas e indirectas del racismo. De forma
que, con las mismas condiciones históricas, familiares y similitudes fenotípicas, dos hermanas, hijas del
mismo padre y de la misma madre: una puede autodefinirse negra y la otra mulata como respuesta a la
síntesis que hayan podido construir cada una del contexto externo e interno en el que viven.
Igualmente, una misma persona afro en situaciones diferentes puede utilizar un concepto o el otro para
auto-identificarse. Debe tomarse en cuenta que uno de los mecanismos para enfrentar la discriminación
es que una parte de la población afrodescendiente reivindica fuertemente sus antepasados lejanos o
cercanos de piel blanca para sentirse más próxima al promedio nacional “blanco” con una cultura
oficial emblanquecida. Mientras, también existe una parte de la población afrodescendiente,
principalmente aquella que se auto define como negra y afrodescendiente producto de su formación;
del conocimiento de su propia historia y de la historia nacional; y que de su cultura reivindica su
identidad y su ancestralidad de una forma acertiva, desafiando a la sociedad que muchas veces las
niega o las minimiza. Por eso, no debe de extrañarse algunas diferencias en indicadores dentro de la
misma población afrodescendiente, ya que la mayoría de las veces estas construcciones identitarias
están relacionadas con accesos a información y procesos de concientización individuales y colectivos.
Costa Rica está dividida política y territorialmente en siete provincias y 81 cantones con una población
de 4 301 712, de las cuales 334 437 personas son afrodescendientes y se ubican en todo el país. En
términos absolutos, la provincia con mayor población afrodescendiente es la capital San José con 105
981, más que el doble de la provincia de Limón que ha sido reconocida en el país como la cuna de la
cultura afrocostarricense, en la que habitan 51 344 afrodescendientes.
353
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Gráfico 1
Multiculturalismo en Costa Rica según el Censo 2011
No
declarado
Ninguno
3%
2%
Fuente: Elaboración
Indígenas
Otro
1%
VI de Vivienda Costa
2%
China
0%
Afrodescendiente
8%
Blanca/
Mes+za,
84%
En este mismo sentido los cantones de Puntarenas: Garabito y Aguirre cuentan con un 16% y un 13,6%;
ocupando el tercero y cuarto lugar en cuanto a la cantidad relativa de personas afrodescendientes con
residencia permanente en estos cantones. Por su parte, los cantones de la provincia de San José: San
José y Alajuelita también poseen más de un 10% de población Afrodescendiente.
Fuente: Tomado de Lic. Eugenio Fuentes, Simposio “Costa Rica a la luz del Censo 2011”, noviembre 2011.
Instituto Nacional de Estadística y Censos INEC.
Si bien, este dato requiere de una investigación específica para explicarlo en toda su dimensión, lo
cierto es que una hipótesis razonable que puede justificarlo, encuentra sustento en la teoría sexo/raza/
género, que coloca a los hombres y a las mujeres en diferentes estratos sociales y de poder, de acuerdo
con su pertenencia étnica-racial y de género. Esta teoría explica cómo las mujeres afrodescendientes
enfrentan una discriminación agravada producto de su identidad de género y raza. Ellas viven en la
355
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Desde esta perspectiva teórica se explica que los hombres afrodescendientes encuentren ventajas
sociales y culturales de reconocer su identidad afro, ya que en algunos casos esta identidad les
coloca en una posición de poder y reconocimiento, no solo en relación con las mismas mujeres afro,
sino también con otras mujeres no afrodescendientes e inclusive hombres. Por el contrario, para las
mujeres afrodescendientes, su doble identidad de mujeres y afrodescendientes, las coloca en una
situación de desventaja relativa, por lo cual pueden sentirse inhibidas a reconocerse como mujeres
afrodescendientes.
Cuadro 3
Indicadores demográficos de la población afrodescendiente de Costa Rica y el resto de la
población
No
Indicador Costa Rica Afrodescendientes
Afrodescendientes
La población afrodescendiente sin seguro social constituye un 4,2% más que el promedio nacional y
un 4,6% mayor que la población no afrodescendiente. En términos absolutos de las 334 437 personas
que se auto identificaron como afrodescendientes, casi una quinta parte no cuenta con seguro social,
62 540 personas.
En un país donde la seguridad social ha sido una de las banderas más importantes, esta brecha es
sustantiva y denota una carga negativa en calidad de vida para las personas afrodescendientes. Por
otra parte, mientras que el promedio nacional de personas ocupadas sin seguro es de 14,5%, para la
población afrodescendiente es de 18,6%, más de 4 puntos por encima, lo que reafirma una brecha real
en seguridad social.
Cuadro 4
Indicadores Demograficos de la Población Afrodescendiente
Como se puede notar en el cuadro 4, si se analiza de forma desagregada los datos de la población
afrodescendiente, no existe diferencia sustantiva en cuanto a personas negras y mulatas con relación
al acceso a seguro social. Mientras que si analizamos la pirámide de población, hay una diferencia
importante en cuanto al porcentaje de población menor de 15 años.
La población afrodescendiente/negra está 5,6 puntos por debajo del promedio nacional, mientras
que en la población afro/mulata el promedio es idéntico al nacional. Lo mismo sucede con la población
igual o mayor a los 65 años. En este caso el promedio de la población afro identificada como negra es
2,5% por encima del promedio nacional.
Las desventajas de la población afro que arrojan los datos del Censo 2011, se hacen absolutamente
evidentes con el porcentaje de población con alguna “Necesidad Básica Insatisfecha” (NBI) ya que
promedio nacional es de 27,4% mientras que para la población afrodescendiente es el 34,1% una
diferencia negativa de 6,7 puntos porcentuales.
En Costa Rica 1 178 669 personas tienen al menos una necesidad básica insatisfecha, una realidad
que definitivamente cuestiona el resultado de una política social universal; de las cuales prácticamente
un 10%, 114 043 son afrodescendientes, aunque sean menos del 8% de la población. Así las cosas, ser
afrodescendiente en Costa Rica implica mayor riesgo de tener alguna necesidad básica insatisfecha.
357
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Este dato también demuestra que la sociedad costarricense en términos generales está enfrentando
una realidad de exclusión social, entendida como aquel porcentaje de población que no tiene todas
sus necesidades básicas satisfechas.
Más de una cuarta parte de la población nacional con alguna NBI, demuestra que los promedios
nacionales están disimulando realidades de decenas de miles de personas que enfrentan todos los
días la carencia y el no disfrute de los derechos consagrados en la Constitución.
Por otra parte, aunque el promedio nacional de población con discapacidad es igual al promedio
de la población afrodescendiente, llama la atención que para la población que se auto identificó
como afrodescendiente/negra, la diferencia es de casi tres puntos por encima del promedio nacional,
mientras que para aquella que se definió como afrodescendiente/mulata, los indicadores se comportan
igual al promedio nacional.
De igual forma, el porcentaje de madres adolescentes es mayor para las afrodescendientes que para
el resto de la población, mientras que la población afrodescendiente es de 5,6%, para el resto de la
población es de 4,2%.
La asistencia a la educación pública primaria y secundaria, en un país como Costa Rica, se relaciona
directamente, en su gran mayoría, con la situación socio-económica. Además, se encuentran diferencias
importantes para el promedio afrodescendiente: el promedio nacional de asistencia a la educación
regular pública es del 82,2% mientras para la población afrodescendiente es 5% mayor, 87,2%.
Debe subrayarse como se planteó anteriormente, que la construcción de la identidad, también pasa
por acceso a información, formación y procesos de concientización, que finalmente puede impactar los
indicadores basados en auto identificación (Cuadro 5).
358
Integración Poblacional Campbell Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 5
Indicadores Educativos de la Población Afrodescendiente
Total
Afrodescen-
Indicador Costa Rica Afrodescen- Mulato Otros
dientes
dientes
Uno de los indicadores que marcan claramente diferencias entre la población afrodescendiente total
y el promedio nacional es el rezago escolar, ya que para la población afrodescendiente total existe una
diferencia negativa de 4,5%. Este comportamiento se mantiene a lo interno de la población afro, se
acrecienta en la población afro/mulata y se hace un poquito menor para la población afro/negra.
Esta situación demuestra una brecha en educación que requiere ser abordada por una política
pública, reconociendo que la etnicidad afro es un factor que incide negativamente en el rezago escolar
para la población que se auto-define como afrodescendiente.
En relación con la propiedad de la vivienda también se identifican brechas negativas para la población
afrodescendiente. La población afro que vive en una casa alquilada es casi del 6% más que la población
que se auto identificó como blanca/mestiza, consecuentemente con esta realidad la población blanca
mestiza que vive en casa propia es casi un 6% más que la población afrodescendiente (Cuadro 6).
359
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Integración Poblacional Campbell
Es de destacar que el porcentaje de afrodescendientes que vive en precarios, duplica con el promedio
nacional. También existen tres puntos de diferencia a favor de la población blanca/mestiza en el acceso
a la Internet en la vivienda (Cuadro 7).
Cuadro 6
Vivienda: Tenencia de la vivienda por etnicidad
Fuente: Elaboración Propia a partir de los Datos oficiales del X Censo Nacional de Población y VI de Vivienda Costa Rica
2011.
Cuadro 7
Censos Nacionales de Población y Vivienda de
Costa Rica 2011
Vivienda: Provincia por tenencia Internet, según p10
autoidentificación étnica menos racial
0: NA 1: Si 2: No Total
Cuadro 8
Jefatura de Hogar por etnicidad
V. Conclusión
Censo 2011 avanza en términos del reconocimiento del multiculturalismo. Las personas en su
inmensa mayoría se consideran pertenecientes a un grupo étnico-racial. Además, si bien se avanza
en el reconocimiento estadístico por las personas afrodescendientes, se puede suponer que todavía
persiste el sub-registro del multiculturalismo y afrodescendientes, porque no se realizaron campañas
de sensibilización para la población general, ni capacitaciones específicas a los encuestadores.
Igual como hubo resistencia en el proceso de elaboración de la pregunta, se puede suponer alguna
resistencia de parte de quienes encuestaron.
Por otra parte, la población auto-identificada como china presenta mejores indicadores de bienestar
que el resto de la población.
Algunos indicadores demuestran que las brechas negativas para la población afrodescendiente
quedan subsumidas en los promedios nacionales e incluso regionales, aunque específicamente en la
seguridad social no se pueden identificar desventajas para la población afrodescendiente.
La asistencia a la educación pública primaria y secundaria, en un país como Costa Rica, se relaciona
directamente, en su gran mayoría, con la situación socio-económica. Aquí se encuentran diferencias
importantes para el promedio afrodescendiente: el promedio nacional de asistencia a la educación
regular pública es del 82,2%, mientras que para la población afrodescendiente es 5% mayor;
87,2%. También en este caso se presentan diferencias considerables dentro de la misma población
afrodescendiente, en la cual la población mulata es la que se encuentra mayormente insertada en la
educación pública regular.
El porcentaje de población afrodescendiente total con educación secundaria y más es menor que
el promedio nacional en más de un 5%: 57,8% promedio nacional contra un 53,5% población afro
total. Sin embargo, para la población que se autodefinió como afro/negra ese porcentaje es superior al
promedio nacional en un 5%, llegando al 63,5%.
Se encuentran brechas en el caso de las mujeres afrodescendientes con respecto al resto de mujeres
de la población. Particularmente, las mujeres afrodescendientes negras se encuentran por encima del
promedio nacional en cuanto a jefatura familiar.
La realidad nacional construida desde la lógica de la cultura blanca/mestiza como hegemónica, debe
pasar al reconocimiento de una realidad del multiculturalismo que se traslade en políticas públicas, las
cuales deben ser materializadas en políticas públicas para eliminar las brechas étnico-raciales que
existan.
Es imperativo incorporar preguntas sobre pertenencia étnica-racial en todas las fuentes de datos,
incluidas las encuestas de hogares, el censo agropecuario, de juventud y de usos múltiples para mirar
tendencias y profundizar en posibles brechas relacionadas con pertenencia étnica racial.
Por último, las brechas negativas para negro(a), afrodescendiente y mulato(a) con el resto de la
población coinciden en la mayoría de los casos, aunque haya diferencias entre ellas. Aunque se
plantearon como categorías distintas, negros(as), afrodescendientes, y mulatos(as), la tendencia socio-
económica en los indicadores es la misma, lo que confirma el planteamiento del sumario en una sola
categoría que en esta investigación se ha denominado “afrodescendientes”.
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Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Vivienda y
Ambiente
Sofía Mora
Hogares en asentamientos informales: ¿Quiénes son? y
¿cómo viven?.
Agustín Gómez
Estimación del Índice de Sostenibilidad Cantonal con
información censal.
Resumen
Los asentamientos informales son la realidad de miles de hogares en el país; sin embargo, la carencia
de información sobre sus características y condiciones de vida limita la aplicación eficaz de políticas,
programas y proyectos que busquen trabajar sobre este fenómeno.
Ante el panorama de los asentamientos informales, surgió la necesidad de buscar una mejor
aproximación al dato de viviendas y hogares en esta situación. Por tanto, el presente estudio brinda
una alternativa metodológica, que emplea la base de datos de asentamientos en precario del Ministerio
de Vivienda y Asentamientos Humanos (MIVAH), la cartografía digital del INEC y la base de datos
del Censo 2011; con el fin de obtener información específica para cada uno de los asentamientos
informales identificados.
El fin del estudio consiste en ser un insumo para que las instituciones y personas, dedicadas al
análisis de la situación y condiciones de vida de los hogares en asentamientos informales dirijan sus
acciones a quienes realmente lo necesitan.
I. Introducción
En Costa Rica, desde inicios del siglo pasado, el Estado se ha visto en la necesidad de dirigir acciones
y canalizar recursos orientados a la solución del problema de la vivienda. Este ha constituido uno de
los más graves problemas sociales del país desde inicios del siglo XX y desde entonces, se inician los
esfuerzos por atender y solucionar la situación habitacional.
Desde 1904 hay registros de las acciones gubernamentales para la solución de los problemas
de vivienda que aquejaban al país, con el Decreto Ejecutivo N° 1 denominado “Reglamento sobre
Chinchorros y Casas de Vecindad”, el cual buscaba las condiciones mínimas de salud, servicios e
higiene de las habitaciones.
Con el paso del tiempo, las leyes y políticas fueron evolucionando conforme la situación iba cambiando
y, con la Constitución Política de 1949, se promulga la obligación del Estado de proveer a la población
de escasos recursos económicos de una vivienda decente.
Sin embargo, para 1978 el déficit de vivienda era de 128 000 y había 99 000 habitaciones deficientes,
afectando al 65% de la población del país, quienes sufrían por la condición de sus viviendas o por la
falta de ella (Gutiérrez, 1991).
1/ Socióloga, Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) Correo electrónico: [email protected]; somost21@gmail.
com
366
Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
La difícil situación de vivienda en los años venideros obliga a la sociedad a manifestarse por medio
de demandas organizadas, las cuales provocan fuertes presiones sociales y políticas (Mora y Solano,
1993). Esa situación favoreció el surgimiento de los asentamientos informales (en precario), que aunque
algunos datan de la década de los setenta, es en los ochenta donde comienzan a proliferar, como la
solución que la misma sociedad busca ante el déficit habitacional del país.
Por tanto, ante las limitaciones en la información y las metodologías se propuso como objetivo general
de este estudio crear una alternativa metodológica que brinde un dato más aproximado a la realidad de
las viviendas, hogares y personas residentes en asentamientos informales, con el empleo de diferentes
instrumentos, como la base de datos de asentamientos informales del MIVAH, la cartografía digital del
INEC y su articulación con la base de datos del Censo 2011.
Los objetivos específicos de esta investigación fueron delimitar geográficamente a los asentamientos
informales del país, identificados por el Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos (MIVAH) y por
la Unidad de Cartografía del INEC; identificar nuevos asentamientos informales resultantes del Censo
2011, a partir de determinados parámetros técnicos y caracterizar a los asentamientos informales y a
su población, a partir de la creación de una variable en la base de datos del Censo 2011.
Con esta metodología, se lograron identificar 418 asentamientos informales, 360 definidos a través de
la cartografía del INEC y de la base de datos del MIVAH y 58 asentamientos que surgieron a través de
la variable de tenencia de la vivienda de la base de datos del Censo 2011.
El presente documento sistematiza el proceso realizado y los principales resultados obtenidos a nivel
país, como un insumo para la generación de programas, políticas y proyectos enfocados en el análisis
y solución del fenómeno de asentamientos informales en Costa Rica.
II. Metodología
(…) asentamientos que fueron producto de ocupaciones organizadas de terrenos baldíos del tejido
urbano, en su mayoría de propiedad estatal, cuyas condiciones físicas mejoraron con la posterior
construcción de redes de infraestructura básica y viviendas de interés social. (FLACSO, 2004: 15)
Los asentamientos informales, por su origen, se constituyen principalmente de viviendas cuya tenencia
es ilegal o en precario. Es decir, no cuentan con un título de la propiedad, inscrito ante las respectivas
autoridades, por esto suelen denominárseles también como “precarios”. Sin embargo, la conformación
de un asentamiento informal, como se mencionó anteriormente, puede mejorar con el paso del tiempo,
por lo cual se dan casos en que convivan viviendas con título de propiedad con viviendas sin título de
propiedad.
Asimismo, se suele relacionar a los asentamientos informales con las viviendas de tipo tugurio, sin
tomar en consideración la diferencia que existe entre ambos términos. Por un lado, el asentamiento
informal, entendido como precario, se define como el conjunto de viviendas agrupadas espacialmente
cuyo origen fue la toma ilegal de la tierra, es decir, se refiere a cuestiones de orden legal del terreno.
Por otra parte, el tugurio es una condición estructural de la vivienda, por lo que se considera un tipo
específico de vivienda la cual fue construida con materiales de desecho, no aptos para la convivencia
humana.
Esta diferencia es importante aclararla ya que, aunque en ciertos casos los asentamientos informales
cuentan con viviendas de tipo tugurio, pueden darse situaciones en las que un asentamiento no tenga
un solo tugurio; sin embargo, la tenencia de las viviendas no es legal. Asimismo, puede haber viviendas
de tipo tugurio, cuyos dueños sean efectivamente los propietarios de la tierra.
Por lo tanto, tomando como base la investigación de FLACSO (2004), para el presente estudio se ha
construido la siguiente definición de asentamiento informal: Asentamientos que se formaron producto
de las llamadas “tomas de tierra”, organizadas o no, los cuales, unos más que otros, con el tiempo ven
mejoradas ciertas condiciones, como la infraestructura de las viviendas y el acceso a servicios.
Consideraciones del análisis de los asentamientos informales a partir de los censos de población y
vivienda
Aunque desde el censo de 1963 se pregunta por la tenencia de la vivienda, es hasta el Censo 2000
cuando se incluyó por primera vez una categoría específica para analizar las viviendas “en precario”.
El Censo 2011 también incluyó una categoría para las viviendas en precario y así también lo han
hecho la Encuesta Nacional de Hogares y la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos. Sin embargo, si
se comparan los datos obtenidos en los censos y encuestas nacionales con la información del MIVAH
se observan amplias diferencias.
Por ejemplo, para el 2011 el MIVAH tiene registradas 34 100 viviendas en asentamientos en precario
(Compendio estadístico MIVAH 2011), mientras que el Censo 2011, en la categoría “en precario” sólo
cuantificó 16 019 viviendas, es decir, 18 081 viviendas menos que el MIVAH.
masivo, aplicable a todas las viviendas y personas residentes en el país, solo tiene la capacidad de
destinar una categoría en una variable que no permite la profundización en el tema.
Si bien es cierto, el censo visita todas las viviendas del país y consulta sobre su tenencia, se dan
diversas situaciones en el terreno que dificultan la real identificación de las viviendas en precario.
En primer lugar, la relación directa que hacen las personas del término precario con el de tugurio.
Esto pudo generar que los censistas e incluso las personas informantes se guiaran por la apariencia y
el estado físico de la vivienda y no por la legalidad de la propiedad.
Sin embargo, la aplicación de la tecnología en la cartografía utilizada el Censo 2011, que definió
Unidades Geoestadísticas Mínimas (UGM), nivel geográfico mínimo al cual se refieren todos los datos
del Censo 2011, ha permitido realizar la identificación y delimitación geográfica de los asentamientos
informales, sin tener que limitarse a la variable de tenencia de la vivienda y, por el contrario, obtener
una mayor riqueza del análisis.
Con el fin de delimitar geográficamente los asentamientos identificados por el MIVAH, se utilizó la
base de datos con los polígonos para cada asentamiento, la cual fue proporcionada por el MIVAH
a la Unidad de Cartografía del INEC. Esta base de datos contenía información de las coordenadas
de ubicación de cada asentamiento, recuperadas a través de ortofotos. Con dicha base de datos se
procedió a identificar las Unidades Geoestadísticas Mínimas (UGM) que intervenían en cada polígono
para que de esa manera se pudieran identificar en la base de datos del censo.
Las UGM resultantes se compararon con el registro de asentamientos que la Unidad de Cartografía
obtuvo producto de la actualización en campo de la cartografía del país. De esa manera, se hizo
una correlación, sobreponiendo las dos capas cartográficas (la de asentamientos MIVAH y la de
asentamientos cartografía), para analizar la concordancia entre las UGM.
Se consideraron asentamientos informales cuando las UGM de ambas capas concordaban y también,
cuando no lo hacían, esto porque se trataba de asentamientos que una u otra institución no tenía
registrados.
La Figura 1 muestra cómo se realizó la delimitación de las UGM para los asentamientos trazados
por el MIVAH. La línea de color verde representa el asentamiento según el MIVAH y las líneas azules,
representan las UGM que participan en dicho asentamiento. La numeración de las UGM permite ligarlas
con la base de datos del censo.
369
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Mora
Así también, se hizo una unificación de los nombres de cada asentamiento ya que, el MIVAH y
Cartografía en ocasiones definieron nombres distintos para el mismo asentamiento. Cuando se tuvo
un listado completo con las UGM que comprendían los asentamientos definidos por el MIVAH y los
de la Unidad de Cartografía, y con los nombres unificados, se procedió a realizar una comparación
con el último listado de asentamientos disponible del MIVAH, el cual se encuentra en el Compendio
Estadístico del año 2011 de dicha institución.
Al realizar esa comparación, se decidió eliminar del estudio a veinte asentamientos que, a pesar de
que estaban definidos en los polígonos del MIVAH, estos ya no figuraban en el último listado y además,
presentaban porcentajes muy bajos de viviendas “en precario”, según la base de datos del censo,
estos porcentajes rondaban entre 0,0% y 2,3%.
Finalmente, se eliminó un último asentamiento, que si bien sí estaba en el listado del MIVAH, según la
base de datos del censo, solo tiene una vivienda, por lo cual no se puede considerar un asentamiento,
ya que este es el objetivo del estudio y no las viviendas aisladas.
De esa manera, se identificaron 360 asentamientos informales, a partir de los datos proporcionados
por el MIVAH y la Unidad de Cartografía que contenían el 80,5% de las viviendas en precario, registradas
por el Censo 2011.
370
Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Los asentamientos informales definidos anteriormente contenían el 80,5% de las viviendas en precario
registradas por el Censo 2011. No obstante, había aún casi un 20% de viviendas en precario que no se
encontraban en ninguno de esos asentamientos.
Por tanto, se ubicaron las UGM en las cuales se encontraba ese 20% de viviendas y se identificó si
estas colindaban con alguno de los asentamientos anteriormente definidos, de ser así, se incluía la
UGM a dicho asentamiento.
Las UGM que no colindaban con algún asentamiento ya definido, se analizaron para identificar si se
trataba de un posible nuevo asentamiento. Para ello, se utilizó como criterio que la UGM tuviera 5 o más
viviendas y que contara con al menos un 25% de viviendas cuya tenencia fuera “en precario”.
Cuando se filtraron las UGM a partir de dichos criterios, se procedió a identificar aquellas que
colindaran unas con otras. Cuando dos o más UGM colindaban, todo el conjunto se consideró como
un solo asentamiento. Si una UGM quedaba aislada, pero cumplía con los criterios anteriormente
señalados, la misma se consideró un asentamiento.
Al seguir ese procedimiento se obtuvo un total de 58 posibles nuevos asentamientos, en los cuales al
menos el 25% de las viviendas están “en precario”.
Así también, el generar una variable para este tema en específico brinda la posibilidad de conocer
más sobre el mercado inmobiliario informal puesto que se obtiene información de los diferentes tipos
de tenencia dentro de un asentamiento; por ejemplo, viviendas propias, alquiladas, pagando a plazos,
etc. Esto no es posible si se analiza solo la categoría que brinda la boleta censal.
Además, al generarse una capa cartográfica se puede hacer uso de todas las ventajas que brinda
la cartografía digital como identificación de ríos, poblados cercanos, centros de salud, entre otros, que
permiten analizar mucho más a profundidad la realidad de estos asentamientos.
Finalmente, la variable Asentamiento Informal permite analizar las características de las viviendas por
asentamiento y no de manera general como sí se debe hacer si solo se cuenta con la categoría de “en
precario” de la variable de tenencia de la vivienda.
Sin embargo, al aplicar esta metodología hubo una limitación al identificar los asentamientos
informales del MIVAH. Esta se debe a que los polígonos trazados por dicha institución, en algunos
casos, no coincidieron completamente con la delimitación de las UGM. Por lo tanto, se tomaron en
consideración UGM que solo intervenían parcialmente en el asentamiento, ya que estas no se pueden
dividir. Ante esto, se debe aclarar que el dato final de viviendas en asentamientos informales puede
contener viviendas que no están dentro del asentamiento, pero que sí colindan con él.
371
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Mora
Además, otra limitación que se debe tomar en consideración es que la metodología aplicada no ha
sido validada en campo, por lo cual, los resultados podrían variar después de que se realice dicha
validación.
III. Resultados
¿Quiénes son?
El Cuadro 1 muestra algunos indicadores demográficos clave para el análisis de la estructura de esta
población específica. Uno de ellos es la distribución etaria en los asentamientos informales, donde la
población de 0 a 14 años representa el 30,3%, lo cual, si se compara con el valor nacional (24,8%)
demuestra que las personas en edades dependientes jóvenes tienen un peso mayor en estas zonas.
Por otra parte, el grupo de 15 a 64 años, en los asentamientos informales es el 65,2% de la población
mientras que de personas adultas mayores (65 años y más) es apenas el 4,5%. Al comparar esta
distribución con los indicadores nacionales, se podría decir que los asentamientos informales presentan
una estructura poblacional por edad, similar a la que el país tuvo en el año 20002, la cual es más joven.
2/ La estructura por edades del año 2000 fue: 31,9% de 0 a 4 años, 62,5% de 15 a 64 años y 5,4% de 65 años y más.
372
Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 1
Costa Rica: Indicadores demográficos y sociales por total de país y
asentamientos informales
2011
Asentamientos
Características demográficas Costa Rica
informales
El análisis de los datos sobre los tres principales grupos de edad, dan como resultado una relación
de dependencia demográfica de 53,4%, lo cual indica que hay 53 personas en edades dependientes
por cada 100 en edades productivas, siendo mayor que el indicador nacional (47,2%).
Otros indicadores que permiten el análisis de la vulnerabilidad social también aumentan cuando
se analizan a nivel de asentamientos informales. Por ejemplo, aunque el porcentaje de personas con
discapacidad sea similar al nacional, hay asentamientos que presentan más de un 30% de población
con al menos una discapacidad, tales como El Sitio en Los Chiles de Alajuela y Villa Bruselas en
el Cantón Central de Puntarenas. A esta situación debe sumársele el hecho de que la población
asegurada disminuye a un 79,2% en los asentamientos informales, mientras que el porcentaje nacional
es de 85,5%.
Por tanto, los indicadores demográficos y sociales generados a nivel de asentamiento, demuestran
que esta población se encuentra en desventaja y vulnerabilidad social, cuando se comparan con
los indicadores para el total del país. Esto demuestra la importancia de que los análisis tomen en
consideración a las diferentes subpoblaciones del país.
373
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Mora
Migración extranjera
Si se analiza por país, efectivamente Nicaragua aporta más población, (siendo el 93,5% de los
extranjeros que residen en asentamientos informales), seguido de Panamá, El Salvador y Colombia.
Mientras que, si se observan los datos por cada asentamiento, son solo tres los que cuentan con una
población mayoritariamente extranjera. Estos son Los Huevitos, con 62,3% de población extranjera,
Triángulo de Solidaridad con 61,0% y Línea del Tren-Proyecto Cristal con 53,6%.
Sin duda, la situación de la migración extranjera es un tema que merece ser analizado con mayor
profundidad, no solo sobre cuántos son, sino sobre sus condiciones de vida y del porqué vienen al país
a residir en un asentamiento informal. Sobre este tema ya se han realizado estudios importantes como el
“Diagnóstico de la inmigración nicaragüense en seis asentamientos informales del Área Metropolitana
de San José”, realizado por FLACSO y Fundación Promotora de la Vivienda (FUPROVI) en el año 2004.
Características educativas
La educación es una de las herramientas fundamentales para alcanzar condiciones de vida favorables,
por lo cual, la carencia de acceso a la educación se asocia con una mayor vulnerabilidad social.
Los datos analizados sobre la población que reside en asentamientos informales confirman que los
indicadores educativos son más negativos para dichas personas, si se comparan con los datos a nivel
nacional (Ver Cuadro 2).
Cuadro 2
Costa Rica: Indicadores de educación por total de país y asentamientos
informales
2011
Asentamientos
Indicadores de educación Costa Rica
informales
Frente a los datos sobre las características educativas, se puede concluir que la población en
asentamientos informales tiene menos acceso a la educación, lo cual aunado a otros indicadores
negativos como el porcentaje de adolescentes madres y de madres solteras, por ejemplo, son
características que colocan a esta población en una posición de vulnerabilidad social.
Otra parte fundamental del análisis de las condiciones de vida de las personas es el empleo, aspecto
en el cual, en términos generales, los asentamientos informales se encuentran en una situación similar
al resto del país.
No obstante, la tasa de desempleo abierto sí muestra condiciones más desfavorables para esta
población. Según los datos del Censo 2011, para Costa Rica es de 3,4% mientras que en asentamientos
informales aumenta a 4,9% de la población de 15 años y más (Ver Cuadro 3). En los demás indicadores
de empleo; por ejemplo, tasa neta de participación, tasa de ocupación y porcentaje de población fuera
de la fuerza de trabajo, los datos son bastante similares a los nacionales.
375
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Mora
Cuadro 3
Costa Rica: Indicadores de empleo por total de país y asentamientos
informales
2011
Asentamientos
Indicadores económicos Costa Rica
informales
Sin embargo, el tema del empleo en los asentamientos informales debe ser analizado con mayor
profundidad en estudios posteriores debido a que, si bien no están mostrando indicadores tan
desfavorables en este aspecto, se debe investigar por la calidad y la formalidad de esos empleos, así
como los tipos de ocupaciones y actividades económicas en las que se desempeñan.
¿Cómo viven?
Los hogares que residen en asentamientos informales tienen como característica principal el ser más
grandes que los hogares a nivel nacional. Esto lo indica el promedio de ocupantes por hogar el cual es
de 3,8 personas en los asentamientos informales, mientras que para el total del país es de 3,5 personas.
Además, el porcentaje de hogares extensos aumenta en 3,3 puntos porcentuales con respecto al
dato nacional, siendo de 22,7% en asentamientos informales y de 19,4% a nivel nacional. Los hogares
extensos se caracterizan por ser hogares donde, además del núcleo familiar (jefe(a), cónyuge e
hijos(as)), residen otros parientes tales como madre o padre, tíos(as), primos(as), etc.
376
Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 4
Costa Rica: Indicadores de hogar por total de país y asentamientos
informales
2011
Asentamientos
Indicadores de hogar Costa Rica
informales
Esta situación fue analizada por Barquero y Trejos (2004) donde, a partir de los datos de diferentes
Encuestas de Hogares y Propósitos Múltiples, demostraron que los hogares pobres y en condiciones
de vulnerabilidad en Costa Rica se caracterizan por ser de gran tamaño, lo que coincide con tipos de
hogares con más miembros como los extensos y los compuestos.
Como es de esperar, las condiciones de las viviendas en los asentamientos informales son más
desfavorables que las del resto del país. Los principales indicadores se muestran en el Cuadro 5.
A nivel nacional, según el Censo 2011, solo el 8,2% de las viviendas se encuentran en mal estado,
mientras que, en los asentamientos informales, ese dato aumenta al 18,0%. Por su parte, las viviendas
en buen estado apenas llegan al 42,3%, mientras que en el total del país es de 63,7%. El restante 39,6%
corresponde a viviendas en regular estado.
Esta información va de la mano con el porcentaje de viviendas de tipo tugurio, las cuales alcanzan
un 5,4%, mientras que a nivel nacional son apenas el 0,7% y con el porcentaje de viviendas en
hacinamiento3 el cual es el 13.4% (apenas 5,2% a nivel nacional).
Además, del total de viviendas individuales ocupadas en asentamientos informales, poco más de la
mitad (50,4%) fueron consideradas por el informante en el censo como propias totalmente pagadas,
18,0% están alquiladas y sólo el 18,2% fueron declaradas en precario. Estos datos podrían aclarar la
investigación del mercado inmobiliario informal que se gesta en estos asentamientos, puesto que, por
su ubicación geográfica, podría considerarse que la mayoría de las viviendas en asentamiento informal
se encuentran en estado de ilegalidad o precario, y no solo el porcentaje que se declara en el censo.
Cuadro 5
Costa Rica: Indicadores de vivienda por total de país y asentamientos informales
2011
Asentamientos
Indicadores de vivienda Costa Rica
informales
En lo que respecta al acceso a servicios, en general el acceso a agua por acueducto y a electricidad
tiene porcentajes muy similares al resto del país. Sin embargo, cuando se analizan los asentamientos
de forma individual se observa que en 23 asentamientos, menos del 10% de viviendas tienen acceso
a agua por acueducto de esos, 17 no cuentan del todo con este servicio. Además, 6 asentamientos
tienen menos del 30% de viviendas con electricidad.
El tipo de servicio sanitario es otro indicador que permite conocer las condiciones de salubridad
en que se encuentran las viviendas. En general, los asentamientos informales presentan porcentajes
más altos en los tipos de conexión menos recomendadas como lo son el servicio sanitario con salida
directa (5,5% en asentamientos, 0,9% nacional) y de pozo negro o letrina (5,0% en asentamientos,
3,0% nacional).
Por tanto, se observa que en términos generales, los principales problemas se dan en la calidad
de la vivienda, en su estado y en las condiciones de hacinamiento en que residen las personas. Sin
embargo, si se miran los datos específicos para cada asentamiento, los problemas en el acceso a
servicios básicos se tornan aún más graves, por lo cual es necesario realizar un análisis individual
sobre las características específicas de cada asentamiento.
El método de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) permite realizar una aproximación al dato de
hogares en pobreza sin utilizar la variable de ingreso, la cual no se indaga en los censos nacionales.
Bajo esta metodología se identifican cuatro tipos de carencias, carencia de albergue digno, de
acceso a una vida saludable, de acceso al conocimiento y de acceso a otros bienes y servicios. Se
considerarán hogares en pobreza aquellos que tengan al menos una de esas necesidades básicas
insatisfechas.
378
Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
A nivel nacional, el porcentaje de hogares con al menos una carencia es de 24,6%, mientras que,
en asentamientos informales, el porcentaje es de 43,3%, lo que quiere decir que casi la mitad de los
hogares que residen en estos asentamientos se encuentran en condiciones de pobreza.
La carencia que presenta mayor incidencia es el acceso a vivienda digna, la cual contempla al
26,4% de los hogares que residen en asentamientos informales, seguido de carencia de vida saludable
(13,2%), carencia de acceso a la educación (12,7%) y carencia de acceso a otros bienes y servicios
(11,1%) (Ver Cuadro 6).
Cuadro 6
Costa Rica: Indicadores de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) por total de país y
asentamientos informales
2011
Asentamientos
Indicadores NBI Costa Rica
informales
No obstante, destaca que más de la mitad de los hogares no presenta ninguna carencia, aunque,
generalmente se asocia el residir en un asentamiento informal con la condición de pobreza. Esto, no
siempre es así, ya que, como se ha resaltado anteriormente, la condición de asentamiento informal
corresponde a la legalidad del terreno en que se construyó la vivienda y no necesariamente a sus
condiciones de vida. Aunque, como lo han demostrado los datos, claramente sí hay mayores condiciones
de vulnerabilidad y más aún, si se analiza individualmente cada asentamiento.
379
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Mora
IV. Conclusiones
La información sobre las características de las personas que residen en asentamientos informales y
sus condiciones de vida es escasa en el país. Si bien el Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos
ha hecho esfuerzos importantes por tener una base de datos que contabilice cuántos asentamientos
hay en el país y ciertas características de estos, no ha sido posible tener datos sistematizados y
comparables sobre las personas ni los hogares que viven en ellos.
Con la metodología propuesta en este estudio, utilizando las ventajas que ofrece la cartografía digital,
los datos del Censo 2011 y el marco de asentamientos identificado por el MIVAH, se lograron identificar
418 asentamientos informales a nivel nacional y además, calcular diferentes indicadores demográficos,
sociales, económicos y de vivienda para cada uno de ellos.
Sin embargo, los indicadores presentados en este documento son solo una muestra de lo que se
puede generar a partir de esta metodología, puesto que, al haberse incluido una variable en la base de
datos censal, las posibilidades de análisis son sumamente amplias. Por tanto, el objetivo de presentar
los datos de manera descriptiva es brindar insumos para futuras investigaciones al respecto.
Los indicadores para la población que reside en asentamientos informales demuestran que son
hogares que se encuentran en condiciones de vulnerabilidad pues sus habitantes tienen menor acceso
a la educación, mayores porcentajes de madres solteras y adolescentes madres, así como indicadores
negativos en relación con la vivienda.
No obstante, los datos también demostraron la importancia de realizar análisis diferenciados para cada
asentamiento, pues presentan realidades distintas, donde los indicadores cambian considerablemente
de un asentamiento a otro.
Por tanto, es importante tomar en consideración que el concepto de asentamiento informal se refiere
a la legalidad de las propiedades que hay en esas áreas y no a aspectos físicos de las viviendas
o a características específicas de la población. Por ello, existen asentamientos que no presentan
características completamente negativas, como se podría esperar, sino que, por diferentes motivos,
como la antigüedad o la intervención de organizaciones, los hogares que residen ahí han visto mejoradas
sus condiciones de vida, pero aún viven en la informalidad.
V. Referencias bibliográficas
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Vivienda y Ambiente Mora Costa Rica a la Luz del Censo 2011
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Apuntes para la reflexión. En: Espacio Abierto, octubre-diciembre, año/vol. 9, número 004. Asociación
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Gutiérrez, J. et al. (1991). Políticas de Vivienda: conceptualización, análisis y perspectivas. Tesis para
optar por el título de Licenciados en Ciencias Políticas. Universidad de Costa Rica. San José.
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Metropolitana de San José. Editorial ALMA MATER. San José, Costa Rica.
Programa Estado de la Nación (2003) Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible. Aporte
Especial: Segregación Residencial Económica en el Gran Área Metropolitana de Costa Rica. CONARE.
Costa Rica.
381
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Resumen
Se crearon cuatro indicadores que ajustan la propuesta del índice de sostenibilidad impulsado por el
Observatorio del desarrollo, con base en la información censal y cartográfica del VI censo de vivienda
y población. Estos cuatro indicadores son los siguientes: Índice de Buenas Prácticas Ambientales,
Total de emisiones por tenencia de vehículo o moto, Años promedio de escolaridad de las viviendas y
Factura total mensual por consumo de electricidad,
Con dichas variables se estimó el índice de Sostenibilidad Ambiental con información censal a nivel
de Unidad Geoestadística Mínima, para luego ser agregado a nivel de distrito, cantón, provincia y país.
Con este fin, se realizó un análisis factorial exploratorio bajo el método de componentes principales,
Se realizó el proceso de agregación y validación de las dimensiones.
Con el fin de generar una clasificación del índice se procedió a realizar un análisis de conglomerado
k-medias. Además, para el método de cálculo del índice se propuso utilizar el promedio simple de las
variables.
Dentro de los principales resultados del ISAC se tiene que el Cantón de San Rafael de Heredia, ocupa
el primer lugar del índice, seguido por Santa Ana, en la provincia de San José y en los últimos lugares
se ubica, Upala en la provincia de Alajuela y la Cruz, en la provincia de Guanacaste.
I. Introducción
Conceptos como ‘marca verde país’, y las iniciativas del Instituto Costarricense del Turismo han calado
en el costarricense y en el ámbito internacional, al ubicar a Costa Rica en posiciones privilegiadas en
temas de esta índole. Un claro ejemplo es la medición del Environmental Performance Index2 en
su edición 2012, en donde coloca a Costa Rica en la posición 5, por debajo de países como Suiza,
Latvia, Noruega y Luxemburgo. Sin embargo, de la misma forma que pasa con las mediciones de
Desarrollo Humano, generadas por el PNUD, o el Índice de Competitividad3 creado por la WEF, los
ámbitos subnacionales o escalas pequeñas: provincias, cantones y distritos son difíciles de aproximar.
Ahora bien, con el fin de contrastar los valores internacionales para Costa Rica se tratan de medir 5
dimensiones para un total de 36 variables, en los cuales, ejes como Sistemas Ambientales, Reducción
de Tensiones Ambientales, Capacidad Social e Institucional, Reducción de la Vulnerabilidad Humana
y Responsabilidad Social e Institucional, tratan de ubicar a cada cantón con un valor de 0 a 1. (OdD,
2010)El interés de esta medición radica precisamente en corroborar si a lo interno del país Costa Rica
es tan sostenible en términos ambientales como a nivel nacional.
El concepto de sostenibilidad utilizado por el OdD fue, “...se entenderá por sostenibilidad ambiental,
la capacidad de mantener los recursos naturales a través del tiempo para la satisfacción de las
necesidades actuales y las futuras bajo el supuesto de que dichas necesidades van a ser muy
similares y van a requerir de los recursos naturales para su satisfacción”, (OdD, 2010) partiendo de
esta definición se operacionalizaron variables capaces de medir las condiciones propias del cantón
para luego generar una puntuación en una escala de 0 a 100.
El objetivo del Índice de Sosteniblidad Ambiental (ISAC-OdD) es medir tanto variables geomorfológicas
del cantón como variables de responsabilidad o capacidad institucional, pero carece de una medición
de presión por parte del ser humano dentro del área de estudio. El censo brinda mediante una serie
de preguntas específicas la capacidad de aproximar dichas presiones; que desde las viviendas los
habitantes de un cantón en específico pueden estar generando en su entorno. De ahí que el ajuste por
realizar al índice estará en función al ajuste de cuatro indicadores creados con información censal, el
primero orientado a la medición de buenas prácticas; el segundo trata de aproximar la cantidad de
emisiones por tenencia de vehículo o moto por trasladarse a su trabajo; el tercero está orientado a
medir el consumo eléctrico por tenencia de artefactos en la vivienda y, por último, los años promedio de
educación de los miembros de las viviendas ocupadas en los 81 cantones del país.
2/ http://epi.yale.edu/epi2012/rankings
3/ http://www.weforum.org/issues/global-competitiveness
383
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Tomando entonces el concepto propuesto por el OdD del término sostenibilidad, el mismo quedará
en función de cómo las buenas prácticas ambientales, el consumo de las viviendas, las emisiones
de contaminantes por tenencia de vehículo y moto, y la educación de los habitantes de las viviendas
ayudan o impactan en la medición de la Sostenibilidad del Cantón.
Además, puede ser utilizado como herramienta de insumo para el cálculo de los Índices de Fragilidad
Ambiental, producto necesario dentro de un Plan de Ordenamiento Territorial (MINAET, 2009).
El análisis de las condiciones de las viviendas, en Costa Rica, en cuanto al manejo de residuos, la
tenencia de vehículos o moto y las emisiones asociadas a estos, además de los años de escolaridad
de los miembros del hogar y un estimador del gasto de las viviendas, unido a un índice robusto como el
ISAC cantonal, no solo brindará una rápida mirada a la situación cantonal del país, sino que se podría
vincular directamente a una política tan específica de gobierno como lo es la C-Neutralidad del país en
el 2020 (Gobierno de Costa Rica CR Neutral, 2011).
II. Metodología
Las áreas de investigación del estudio lo conforman los 81 cantones de la República de Costa
Rica, para dicho trabajo se utilizó la información cartográfica construida por el Instituto Nacional de
Estadísticas y Censos elaborada para el VI Censo de Población y Vivienda en donde se trabajó con las
unidades geoestadísticas mínimas (INEC, 2010), para después agregar la información a nivel de distrito,
cantones y país. En la figura Nº1 se muestra el procedimiento general de cálculo del ISAC ajustado
como el sin ajustar. La descripción de cada uno de los procedimientos se describe a continuación.
ISAC- AJUSTADO
Procesamiento de la cartografía
Los archivos proporcionados están bajo la proyección CRTM-05 y el datum WGS84 debido a esto no
se tuvo que realizar ninguna re-proyección de información.
Para la creación de cada una de las variables fue necesario hacer una revisión exhaustiva de las
preguntas incluidas en el censo, tanto a nivel de vivienda como poblacional.
El primer paso realizado fue la selección de la unidad de análisis con la cual se va a trabajar. Se
decidió trabajar con las viviendas individuales ocupadas en cada uno de los segmentos censales,
esto quiere decir que se eliminó toda la información de vivienda a excepción de la variables de años
promedio de escolaridad, el resto de la información fue agregada a partir de las características de las
viviendas. El segundo paso fue la creación de cada uno de los índices, a continuación se detalla la
fórmula de cálculo.
Para la agregación de los datos se utilizó un procedimiento de agregado de variables, se tomó como
variable de control la llave UGM que está indicada tanto en la cartografía como en la información de
viviendas y población. El procedimiento de agregación depende de la fórmula de cálculo de cada
variable, es decir, mediante suma simple, promedio o una contabilización.
Para el cálculo del índice se realiza una recodificación de las siguientes variables,
1. V11_Proveniencia_agua
2. V13_Servicios Sanitarios
3. V14_Proveniencia de la electricidad
4. V15_Combustible para cocinar
5. V16_Eliminación de Basura
Cada una de estas cinco variables se codificó, tomando en cuenta las “buenas prácticas” que pueden
desarrollarse en un hogar, a saber:
Cada una de estas variables después se sumó con las variables identificadas en la sección P17. Esta
vivienda separa:
En conjunto con las variables antes mencionadas, se puede caracterizar si una vivienda individual
ocupada cumple con estas ocho características.
385
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Para el cálculo de este indicador se realizó una contabilización del apartado de tenencia de vehículo
y moto para realizar una estimación del total de toneladas emitidas por año de contaminantes (PM10;
PM2,5; GOT; GOR; SO2; Nox; CO; NH3) (Jorge Herrera, 2011) dichos datos fueron tomados del estudio
“Determinación de las emisiones de contaminantes del aire generados por fuentes móviles en carreteras
de Costa Rica”, elaborado por Jorge Herrera, Susana Rodríguez y José Félix.
Para el cálculo de este indicador se utilizó la pregunta p40 la cual contiene los años de escolaridad
de cada uno de los miembros del hogar, posterior a esto se agregó la información a las viviendas
correspondientes a cada UGM mediante un promedio simple y posteriormente a distritos y cantones.
Tomando como base la pregunta V18 Tenencia de artefactos, se procedió a realizar la creación de
siete variables, mediante variables ficticias “dummies”,
1. Equipo de sonido
2. Televisor LCD
3. Televisión Corriente
4. Sistema de agua caliente para toda la casa
5. Tanque de almacenamiento de agua
6. Computadora de escritorio
7. Computadora portátil
Una vez creada las nuevas variables se procede a calcular el costo por energía según la tabla
estipulada por el ICE en los rangos de primeros 200 kWh, de 201 a 300 kWh de 301 a 400 kWh, con
este proceso se tiene el primer paso de la metodología, una vez calculado dichos valores se procede
386
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
a imputar el valor del alumbrado público4 ; para el tercer paso se estima lo que es el monto total en
colones por el impuesto de ventas que incluye el monto calculado en el primer paso más el segundo,
para posteriormente realizar la sumatoria total de los costos. Con este valor de consumo estimado total
de las viviendas individuales ocupadas, se procede a realizar un promedio de la factura total mensual,
para agregar a UGM y posteriormente a distritos y cantones.
Una vez calculado todos los indicadores y normalizados se procedió a realizar un promedio simple
de cada uno de los indicadores para conformar el ISAC a nivel censal.
88
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4
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Con este
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UGM, distrito
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cantón, el
el último
último valor
valor
Con este índice tiene una desagregación a nivel de UGM, distrito y cantón, el último valor fue utilizado
fue utilizado
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utilizado para realizar
para del
realizar el ajuste del
del índice de
de Sostenibilidad Ambiental calculado por el
para el ajuste índiceelde
ajuste índice
Sostenibilidad Sostenibilidad
Ambiental Ambiental
calculado por calculado
el OdD más por para
el Censal, el
OdD
esto
OdD más
más el
se utilizó la Censal,
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Censal, esto
esto se
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utilizó la
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siguiente fórmula.
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!"#$_!"# + + !"#$_!"#$%
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!"#$ !"#$%&'( =
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2
Ambos
Ambos índices
índices calculados
calculados tienen
tienen una
una dirección
dirección de
de 0
0aa11 en
en donde
donde el
el valor
valor más
más cercano
cercano a
a
1
1 es
es el
el más
más alto.
alto.
Ambos índices calculados tienen una dirección de 0 a 1 en donde el valor más cercano a 1 es el más
alto.
El comportamiento de los cantones costeros al igual que los de la región Sur-Sur indica valores
relativamente altos en el índice lo cual es congruente con estudios que tratan sobre la biodiversidad
del país y las Áreas Silvestres Protegidas. En la región Pacífico Central también se cuentan con
valores relativamente altos, tal como Aguirre con la posición 4 en el índice o el caso de Garabito (23) y
Puntarenas (23).
Por otro lado, la región Chorotega, en su mayoría cuenta con cantones cuyos valores son relativamente
bajos en el ISAC, tales como Liberia, Nicoya, Cañas y Hojancha, los cuales se ubican en la posición
65 de la tabla.
Por su parte, en la región Atlántica del país se puede observar como el cantón de Talamanca (2)
posee un valor más alto que el resto de sus vecinos, ya que Limón se ubica en la posición 79, Siquirres
en la 71 y Matina en la 66.
Tal y como se aprecia en el mapa las diferencias a nivel cantonal son considerables versus el análisis
país que se pueda realizar, mientras el valor para Costa Rica en el índice es de .52 puntos a nivel
cantonal se pueden observar valores mucho más bajos que el promedio nacional, lo cual da indicios
claros de un deterioro en estos ámbitos.
Cuando se incluyó el ajuste realizado con información CENSAL, se observa lo siguiente, el índice
calculado para las 40212 unidades geoestadisticas mínimas (INEC, 2010) da un promedio de .50 con
una desviación estándar de .13 puntos, a nivel de cada subcomponente se tiene que el índice de
388
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
buenas prácticas tiene un valor de .64 con una desviación de .17; el indicador del total de emisiones
por tenencia de vehículo y moto es de .89 con una desviación de .19, el indicadores de años de
escolaridad promedio de los miembros de la vivienda individual ocupada tiene un valor de .29 con una
desviación de .16 y, por último, el indicador de Factura total mensual por consumo eléctrico es de .17
con una desviación de .16 puntos.
Como parte de los procedimientos, se realizó un análisis de correlación entre los componentes con
el propósito de verificar la direccionalidad de los indicadores seleccionados, como se muestra en el
Cuadro 1, las correlaciones de los cuatro índices tiene una direccionalidad positiva y una correlación
significativa al 0.05% lo cual indica que todas las variables van a la misma dirección.
Cuadro 1
Matriz de correlaciones de las variables utilizadas a nivel de Unidad Geoestadística
Mínimas
Años de
Índice de
Total de escolaridad
Sostenibilidad Índice de Factura total
Emisiones por promedio de los
Ambiental Buenas mensual por
tenencia de miembros de las
calculado con Prácticas consumo
vehículo y vivienda
información Ambientales eléctrico
moto individual
censal
ocupada
Índice de
Sostenibilidad
Ambiental 1
calculado con
información censal
Índice de Buenas
Prácticas 0.846** 1
Ambientales
Total de Emisiones
por tenencia de 0.698** 0.643** 1
vehículo y moto
Años de
escolaridad
promedio de los
0.768** 0.544** 0.206** 1
miembros de las
vivienda individual
ocupada
Factura total
mensual por 0.645** 0.291** 0.111** 0.587** 1
consumo eléctrico
** La correlación es significativa al nivel de 0.01 (bilateral)
Fuente: Observatorio del Desarrollo, 2013
.
389
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Gráfico 1
Sedimentación
Por lo que como parte de los procedimientos se optó por realizar un análisis factorial exploratorio,
con el fin de identificar las dimensiones que se podrían estar conformando con las variables, de este,
se concluye que existen dos factores que podrían componer el índice de sostenibilidad ambiental
calculado con información censal ambos explicando el 82% de la variabilidad de los datos, esto
lo corrobora el gráfico de sedimentación que se presenta en el ANEXO 3; los componentes que se
estarían formando serían Primer Componente: Buenas Prácticas Ambientales(.841) y Emisiones por
Tenencia de Vehículo y Moto (.930) y en Segundo Componente: Años promedio de escolaridad (.852) y
Factura total mensual por consumo eléctrico (.895)6. Como el propósito del análisis es confirmar tanto la
dirección de los indicadores como el porcentaje de varianza que podría estar explicando, se procedió
a realizar para esta primera etapa el cálculo del índice con un promedio simple, esto con el propósito
de ser más clara la forma de agregación de los valores de las UGMs a distritos, cantones y país.
Dentro de los principales resultados se tiene que el índice calculado con información censal tiene un
promedio de .504 para Costa Rica, para la provincia de San José un valor de .53, Alajuela .49; Cartago
.51, Heredia .54, Puntarenas .47, Guanacaste .46 y Limón . 47. Para el caso del ISAC-OdD se tiene
valores de .42 para Costa Rica, .42 para San José al igual que Alajuela, .41 para Cartago, .46 para
Heredia, .40 para Puntarenas, .44 Para Guanacaste y .42 para Limón, es interesante observar cómo a
pesar de la diferencia de 14 puntos entre la estimación de Heredia para el ISAC-Censo y el ISAC-OdD
la tendencia de las provincias es muy similar.
Cuadro 2
Matriz de componentes rotados
Componentes
Indices
1 2
Realizando el mismo análisis a nivel cantonal, es decir, agregando la información de las Unidades
Geoestadísticas Mínimas a sus correspondientes distritos y cantones, se presentan los siguientes
resultados.
El análisis da como resultado que los cuatro indicadores explican una sola dimensión con un 74% de
la variancia explicada. La matriz de componentes da unos valores de .746 para el Índice de Buenas
Prácticas Ambientales, -.851 para el Total de emisiones por tenencia de vehículo y moto, un .940 para
los años promedio de escolaridad de los miembros de la vivienda individual y un .903 para la Factura
total mensual por consumo eléctrico, después de realizar un análisis por componentes principales
y realizar una rotación VARIMAX. Con estos resultados que confirman la unidimensionalidad de las
variables seleccionadas así como la dirección de las mismas se procedió a calcular el índice para fines
prácticos utilizando un promedio simple7.
7/ Los resultados con el análisis factorial serán discusión de otro artículo en donde se enfocaran varias formas de agrupar la
información a nivel cantonal.
391
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Como se indica en el apartado metodológico el índice se creó en dos fases primero, a partir del
promedio simple. En el respectivo mapa , se presentan los resultados del índice, como se aprecia las
zonas más oscuras es donde se presentan los valores más altos en el índice como Escazú (1), Flores
(2), Curridabat (3), Montes de Oca (4) y San Isidro (5), los cuales ocupan los primeros cinco lugares en
el índice. Mientras Los Chiles (81), La Cruz (80), Guatuso (79), Buenos Aires (78), León Cortes (77)
se ubican en los últimos cinco lugares. Además, es interesante observar como la línea costera desde
Nicoya hasta Garabito presenta valores superiores al .5, mientras que en la zona sur-sur, los valores son
más bajos; caso similar pasa en la zona Atlántica donde el cantón de Limón es el que presenta un valor
más bajo comparado con el resto de cantones de la provincia, posterior a esto se realizó un ajuste de
este ISAC-CENSAL con el ISAC-OdD mediante un promedio simple de ambos índices.
Al realizar el ajuste se presentan los siguientes resultados: el cantón de San Rafael pasa al primer
lugar; Santa Ana, de segundo; Flores, tercero; Escazú cuarto y Belén quinto: En los últimos lugares,
aparecen, Upala, La Cruz, Liberia, León Cortes, Cañas y Coto Brus.
En el siguiente mapa, se puede apreciar el cambio, en donde el promedio país para el índice es .467
con un intervalo de confianza al 5% de .458 y .473 en donde la desviación típica es de .03 puntos. El
valor máximo de .59, el estadístico de Kolmogorov-Smirnov es significativo al 5% lo cual indica que el
indicador se distribuye bajo una distribución normal. En el caso de los valores extremos; San Rafael se
encuentra entre los primeros y Cañas, como el último valor dentro de la distribución del índice. A partir
de esta distribución se realizó un análisis de conglomerados, con el fin de clasificar en cuatro grupos8
a los cantones resultados.
Mapa
Anexo3.1.
Índice de Sostenibilidad
Mapas Ajustado
3. Índice de Sostenibilidad Ajustado
En el anexo 4 se presentan los principales resultados, los centros de los conglomerados están entre
los valores .56 para el primero (Alta), .46 para el segundo (Media), .43 para el tercero (Baja) y .49 para
el cuarto (Muy Baja). En este sentido, solo el primer conglomerado agrupa cuatro cantones, el segundo
treinta y tres, el tercero veinte siete el cuarto diecisiete cantones.
Cuadro 3
Centros de los conglomerados finales
Conglomerado
1 2 3 4
8/ Los grupos se pueden interpretar como cantones con Alta, Media, Baja y Muy Baja Sostenibilidad
393
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Como parte del análisis realizado se comparó los valores resultantes de los cantones con el Índice
de Competitividad Cantonal (OdD-UCR, 2012), el Índice de Desarrollo Humano Cantonal (UCR-PNUD,
2010) y el Índice de Gestión Municipal (CGR, 2012)9. Como se aprecia en el cuadro, el cantón de San
Rafael que es el primero en sostenibilidad ambiental, ocupa la posición 50 en competitividad, la 9 en
desarrollo humano y la 4 en Gestión Municipal.
Cuadro 4
Comparación de los 10 primeros y 10 últimos cantones según el ISAC, ICC, IDH e IDG
Índice de
Sostenibilidad
Índice de
Ambiental Índice de Índice de la
Código Desarrollo
Nombre calculado con Competitivid Gestión
del Humano
Cantón información ad Cantonal Municipal
Cantón Cantonal
censal y (2011) (2010)
(2009)
ajustado con el
ISAC-OdD
Poás 208 72 32 65 37
Matina 705 73 67 79 53
Goicoechea 108 74 14 41 3
Talamanca 704 75 75 80 77
Coto Brus 608 76 66 64 46
Ultimos 10
Cañas 506 77 55 48 41
León Cortés 120 78 80 72 61
Liberia 501 79 25 24 48
La Cruz 510 80 57 69 50
Upala 213 81 74 68 71
Fuente: Elaboración propia a partir del ISAC, IDH, IDG, ICC, 2012
9/ No se pudo incluir el índice de seguridad ciudadana porque no se contaba con una actualización de la información en su
momento.
394
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Por su parte, Santa Ana ocupa, el segundo lugar en el tema ambiental, número 12 en competitividad,
tres en Desarrollo Humano y el primer lugar en Gestión Municipal. Otro caso interesante a rescatar es
el de Belén quinto en sostenibilidad, primero en competitividad, cuarto en Desarrollo Humano y sexto
en Gestión Municipal. Por otro lado si se toma el cantón de Upala que es el último en sostenibilidad,
74 en competitividad, 68 en desarrollo humano y 71 en gestión municipal, y se compara con La Cruz
que es número 80 en sostenibilidad, 57 en competitividad, 69 en desarrollo humano y 50 en gestión
municipal se puede apreciar cómo sistemáticamente dichos cantones sí están en una última posición
en un indicador en el resto también lo está.
Si se analiza las correlaciones entre dichos indicadores se puede observar que las todas las
correlaciones son significativas (al 1%) y positivas en todas las variables, ISAC vs ICC = .515; ISAC
vs IDH = .609; ISAC vs IGM = .391; siendo la correlación más baja la última. Esta clara asociación
es un indicativo de que los índices tomados en cuenta comparten una misma dirección en cuanto al
comportamiento de los datos y tiene una relación moderada entre sí.
Cuadro 5
Matriz de correlaciones
Índice de
Índice de Sostenibilidad
Índice de Índice de Consumo
Desarrollo Ambiental
Competitivid Gestión eléctrico
Humano calculado con
ad Cantonal Municipal residencial
Cantonal información censal
2011 2010 per cápita
2009 y ajustado con el
ISAC-OdD
Índice de
Competitividad 1 ,586** ,540** ,651** ,515**
Cantonal 2011
Índice de
Desarrollo
,586** 1 ,334** ,883** ,609**
Humano
Cantonal 2009
Índice de
Gestión ,540** ,334** 1 ,444** ,391**
Municipal 2010
Consumo
eléctrico
,651** ,883** ,444** 1 ,682**
residencial per
cápita
Índice de
Sostenibilidad
Ambiental
calculado con
,515** ,609** ,391** ,682** 1
información
censal y
ajustado con el
ISAC-OdD
.
395
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
Tomando como base el análisis de conglomerados creado para el ISAC Ajustado se realizaron tres
gráficos de dispersión que se pueden visualizar en el anexo 5 gráfico 1, dichos gráficos muestran el
comportamiento del Índice con cada uno de los índices antes mencionados. El primer gráfico muestra
el comportamiento del IDH y del ISAC ajustado, se aprecia como San Rafael tiene el valor más alto en
el ISAC, pero es superado por Santa Ana, Montes de Oca y Santo Domingo; por ejemplo en el IDH; por
otro lado, se puede observar como Talamanca, Matina y Alajuelita tienen los valores más bajos. Otro
dato interesante es el comportamiento que tiene Palmares y Parrita al ubicarse en el promedio de los
dos índices.
El siguiente gráfico muestra el comportamiento del ISAC y del IGM, de nuevo es interesante observar
como San Rafael es superado en temas de gestión por Santa Ana, pero se ubica en una posición muy
similar con Escazú, Belén y San José. Por otro lado, el comportamiento de Upala, Talamanca, Guatuso,
Los Chiles, Abangares, Dota, Jiménez al estar en el cuadrante inferior en donde los valores de los
índices son más bajos brinda un escenario no muy positivo.
Por último, se presenta el comportamiento del ISAC y del ICC en donde San Rafael es superado con
creces por Belén, San José, Escazú, Flores y Santa Ana. Es interesante observar como León Cortes
ocupa el último lugar en del cuadrante, donde los valores son más bajos. En este caso Moravia y Santo
Domingo son los cantones más cercanos al promedio de los índices.
396
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 2
Dispersión de cantones según el IDH y el ISAC, según el estrato identificado del ISAC.
Gráfico 3
Dispersión de cantones según el IDG cantonal y el ISAC, según el estrato identificado del ISAC.
Gráfico 4
Dispersión de cantones según el ICC cantonal y el ISAC, según el estrato identificado del ISAC.
El ISAC Ajustado se creó a partir de cuatro variables, Índice de Buenas Prácticas Ambientales, Total
de Emisiones por tenencia de moto o carro, Años promedio de escolaridad de los miembros de la
vivienda individual ocupada, y la Factura total mensual por consumo eléctrico. A continuación se van
a presentar los resultados para cada una de estas dimensiones y el comportamiento de los 5 primeros
lugares y los últimos 5 lugares.
El valor global del índice es de .64 con una desviación estándar del .05, un valor máximo de .75 y
mínimo de .48; como se aprecia en el cuadro resumen al final del documento; el primer lugar lo ocupa
el cantón de Alfaro Ruíz, seguido por Escazú, Alvarado, San Isidro y Jiménez, en contraste los que
ocupan la última posición: La Cruz, Talamanca, Los Chiles, Buenos Aires y Upala. Como se aprecia en
el mapa, los valores más altos del mismo se encuentran en el centro del país. Es interesante apreciar
cómo cantones que históricamente se han considerado verdes por el alto porcentaje de áreas silvestres
protegidas, al tomar encuentra la práctica de las viviendas y cómo estas impactan el ambiente, la
situación tiende a cambiar un poco. A pesar de esto se observa como la zona alta de Alajuela y el Caribe
Norte presenta valores medios altos en el índice y como en contraste la zona norte de Guanacaste
presenta valores más bajos.
Mapa 4. Índice
Anexo de Buenas
1. Mapas Prácticas
4. Índice Ambientales
de Buenas Prácticas Ambientales
400
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El valor general del índice es .90, con una desviación estándar de .03, un valor máximo de .96 y un
valor mínimo de .77; como se aprecia en el anexo 2, cuadros 3, el primer lugar lo ocupa Belén, seguido
por Montes de Oca, San Pablo, Santo Domingo y Alajuela, en contraste los que tienen los valores más
bajos en el índice son Hojancha, Talamanca, Siquirres, Coto Brus y La Cruz. Como se aprecia en el
mapa , la mayor parte del país se encuentra entre los rangos de .91 a 1; razón por la cual se aprecia
una mancha negra en casi todo el territorio nacional.
El valor global del índice es de .29, con una desviación estándar de .09; un valor máximo de .56 y
un valor mínimo de .14. como se aprecia en el anexo 2 cuadros 3 el primer lugar lo ocupa Montes de
Oca, seguido por Curridabat, Escazú, Moravia y San Pablo, en contraste, los cantones que se ubican
en los últimos lugares son Los Chiles, Sarapiquí, Buenos Aires, Guatuso. Como se observa en el mapa
de esta sección, los cantones con mayores años promedio escolaridad están ubicados en el centro
del país y en la zona sur de Guanacaste, mientras que todos los cantones fronterizos tienen los valores
más bajos en el índice.
Anexo 1. Mapas 6. Años promedio de escolaridad de los miembros de la
Mapa 6. Años
vivienda promedio ocupada
individual de escolaridad de los miembros de la vivienda individual ocupada
402
Vivienda y Ambiente Gómez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El valor global del índice es de .17, con una desviación estándar de .09, con un valor máximo de .52
y un mínimo de .06, como se aprecia en el anexo 2 cuadros 3, el cantón que ocupa el primer lugar es
Flores, seguido por Escazú, Santa Ana, Curridabat y Belén, en las últimas posiciones se encuentra,
Guatuso, León Cortes, Upala, Corredores y Matina.
En el mapa correspondiente a este sección se aprecia como los cantones con una factura alta por
consumo eléctrico se ubican principalmente en todo el cantón de Heredia, seguido por Cartago y San
José, adicional a esto se puede apreciar como los cantones de Hojancha, Carrillo y Santa Cruz, en
donde en los últimos años se ha incrementado la construcción de viviendas.
Anexo
Mapa 7.1. Mapas
Factura 7. mensual
total Factura por
total mensual
consumo por consumo eléctrico
eléctrico
403
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
IV. Conclusiones
Del estudio se derivaron cuatro indicadores o índices totalmente novedosos (IBP, TE, AE, FC). Los
procedimientos seleccionados demostraron la posibilidad de crear un nuevo índice a partir de dichos
índices, y a su vez sirvió para realizar el ajuste al Índice de Sostenibilidad Ambiental, desarrollado por
el Observatorio del Desarrollo.
Dentro de los mapas generados y presentados existe toda una discusión pendiente sobre el porqué
cantones que están geográficamente contiguos tienden a ser tan diferentes o inclusive, a pesar de los
esfuerzos del gobierno central en reforzar las zonas fronterizas, estas siguen siendo las más vulnerables
y las ubicadas en las últimas posiciones.
El Índice de Sostenibilidad Ambiental creado por el Observatorio del Desarrollo es una herramienta
que trata de medir las capacidades del cantón para adaptarse a las necesidades actuales y futuras
de los habitantes y al mismo tiempo la vulnerabilidad del cantón hacia ciertas condiciones. Al ajustar
el mismo con las prácticas ambientales, consumo, emisiones y educación con información censal se
trata de complementar el constructo en aras de mejorar y optimizar la medición de la sostenibilidad.
El análisis y los resultados se pueden desagregar en varios niveles, se tiene valor nacional, el valor
provincial, el valor cantonal, distrital e inclusive el valor a nivel de unidad geoestadistica mínima el
alcance del mismo estará en las limitaciones propias del índice y de la escala, con esto se quiere decir
que la herramienta tiene que ser utilizada con cuidado en las escalas pequeñas.
Como se indica al inicio del artículo la importancia de estas mediciones radica en la oportunidad
de aproximar un constructo con el cual el país se ha estado ubicando en los primeros lugares a nivel
internacional, pero como se demostró anteriormente las realidades subnacionales tienden a ser muy
disímiles e inclusive hasta contradictorias con las percepciones creadas.
Limitaciones
• El indicador de Factura mensual por consumo eléctrico parte del supuesto de un tipo específico de
artículos y de consumo no toma en cuenta el año del bien, ni la cantidad de bienes que puede tener
una vivienda en un momento estimado, sino que sólo toma en cuenta la simple existencia del bien,
por lo que podría estar subestimado el consumo eléctrico.
• El indicador de buenas prácticas ambientales toma como parámetros algunas que pueden o ser o
no necesariamente ambientales; por ejemplo, el tema de separación de vidrio, papel y alimentos no
garantiza una disposición adecuada posterior a la separación. Al igual que el tema de tratamiento
adecuado de la basura, mediante el camión recolector, la simple acción de colocar los desechos
fuera de la casa no garantiza que sean llevados y tratados de la mejor forma.
• El indicador del total de emisiones por tenencia de vehículo y moto no contempla el modelo del
automóvil ni el año ni las condiciones de la motocicleta, sino que simplemente por el hecho de contar
con un vehículo o moto se registran emisiones promedios específicas a nivel nacional; además de
que no cuenta el transporte público, taxis, etc., lo cual podría estar subestimando su valor real.
Agradecimientos
Promedio de
Años de
Promedio Promedio
escolaridad
del Total de de Factura Índice de Índice de
Índice de promedio de Índice de Índice de
Emisiones total Competiti- Desarrollo
Buenas las Sostenibi- Gestión
Cantón Nombre por mensual vidad Humano
Prácticas miembros lidad Municipal
tenencia de por Cantonal Cantonal
Ambientales de la Ajustado 2010
vehículo y consumo 2011 2009
vivienda
moto eléctrico
individual
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
ocupada
101 San José 0,655 0,870 0,412 0,242 0,516 0,906 0,754 0,670
102 Escazú 0,751 0,862 0,482 0,491 0,545 0,658 0,904 0,675
103 Desamparados 0,694 0,875 0,333 0,203 0,446 0,396 0,686 0,563
104 Puriscal 0,681 0,919 0,290 0,169 0,496 0,203 0,806 0,063
105 Tarrazú 0,661 0,905 0,214 0,081 0,457 0,176 0,651 0,482
106 Aserrí 0,663 0,906 0,272 0,198 0,465 0,102 0,704 0,312
107 Mora 0,709 0,930 0,340 0,239 0,508 0,260 0,817 0,532
108 Goicoechea 0,663 0,871 0,384 0,188 0,433 0,451 0,763 0,675
109 Santa Ana 0,705 0,836 0,432 0,419 0,570 0,489 0,912 0,723
110 Alajuelita 0,643 0,882 0,269 0,185 0,438 0,220 0,584 0,415
111 Vázquez de Coronado 0,712 0,852 0,403 0,205 0,461 0,395 0,731 0,542
112 Acosta 0,594 0,901 0,209 0,100 0,468 0,133 0,760 0,123
113 Tibás 0,682 0,880 0,437 0,215 0,456 0,697 0,840 0,456
114 Moravia 0,704 0,850 0,477 0,265 0,488 0,463 0,895 0,610
115 Montes de Oca 0,690 0,823 0,567 0,312 0,495 0,760 0,946 0,613
116 Turrubares 0,618 0,931 0,196 0,094 0,439 0,308 0,810 0,318
117 Dota 0,675 0,906 0,229 0,097 0,455 0,329 0,757 0,055
118 Curridabat 0,725 0,869 0,501 0,370 0,503 0,690 0,830 0,552
119 Pérez Zeledón 0,664 0,921 0,235 0,096 0,465 0,169 0,734 0,572
120 León Cortés 0,584 0,893 0,191 0,067 0,410 0,017 0,679 0,340
201 Alajuela 0,667 0,834 0,332 0,235 0,474 0,500 0,730 0,606
202 San Ramón 0,677 0,909 0,292 0,114 0,484 0,297 0,734 0,555
Continua…
Vivienda y Ambiente
Gómez
405
406
Continuación Cuadro 6
Promedio de
Años de
Promedio Promedio
escolaridad
del Total de de Factura Índice de Índice de
Índice de promedio de Índice de Índice de
Emisiones total Competiti- Desarrollo
Buenas las Sostenibi- Gestión
Cantón Nombre por mensual vidad Humano
Prácticas miembros lidad Municipal
Vivienda y Ambiente
203 Grecia 0,666 0,862 0,287 0,141 0,441 0,374 0,763 0,549
204 San Mateo 0,643 0,900 0,283 0,135 0,460 0,296 0,848 0,344
205 Atenas 0,671 0,891 0,299 0,209 0,487 0,317 0,819 0,476
206 Naranjo 0,684 0,913 0,274 0,108 0,444 0,358 0,723 0,520
207 Palmares 0,657 0,890 0,334 0,175 0,503 0,385 0,757 0,317
208 Poás 0,688 0,871 0,266 0,108 0,434 0,324 0,707 0,460
209 Orotina 0,629 0,907 0,276 0,242 0,473 0,293 0,844 0,366
210 San Carlos 0,655 0,922 0,222 0,129 0,449 0,326 0,767 0,557
211 Alfaro Ruiz 0,756 0,890 0,256 0,128 0,456 0,557 0,742 0,339
212 Valverde Vega 0,695 0,918 0,268 0,104 0,463 0,425 0,741 0,523
213 Upala 0,559 0,942 0,190 0,073 0,403 0,097 0,700 0,093
214 Los Chiles 0,531 0,931 0,149 0,080 0,443 0,000 0,636 0,040
215 Guatuso 0,576 0,896 0,169 0,063 0,439 0,048 0,684 0,012
301 Cartago 0,632 0,863 0,341 0,259 0,476 0,446 0,801 0,470
302 Paraíso 0,629 0,893 0,276 0,197 0,461 0,280 0,732 0,469
303 La Unión 0,658 0,871 0,357 0,234 0,467 0,354 0,789 0,546
304 Jiménez 0,720 0,937 0,229 0,133 0,457 0,262 0,735 0,040
305 Turrialba 0,616 0,911 0,257 0,146 0,453 0,284 0,733 0,422
306 Alvarado 0,739 0,942 0,215 0,174 0,459 0,286 0,790 0,342
307 Oreamuno 0,648 0,905 0,298 0,301 0,453 0,192 0,834 0,358
308 El Guarco 0,631 0,872 0,305 0,249 0,471 0,316 0,832 0,314
401 Heredia 0,679 0,883 0,436 0,244 0,514 0,584 0,828 0,619
402 Barva 0,706 0,876 0,417 0,246 0,488 0,352 0,819 0,559
403 Santo Domingo 0,720 0,833 0,441 0,290 0,513 0,516 0,935 0,062
404 Santa Bárbara 0,666 0,836 0,326 0,295 0,468 0,311 0,798 0,356
Continua…
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Continuación Cuadro 6
Promedio de
Años de
Promedio Promedio
escolaridad
del Total de de Factura Índice de Índice de
Índice de promedio de Índice de Índice de
Emisiones total Competiti- Desarrollo
Buenas las Sostenibi- Gestión
Cantón Nombre por mensual vidad Humano
Prácticas miembros lidad Municipal
tenencia de por Cantonal Cantonal
Ambientales de la Ajustado 2010
vehículo y consumo 2011 2009
vivienda
moto eléctrico
individual
ocupada
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
405 San Rafael 0,718 0,846 0,393 0,294 0,592 0,258 0,865 0,671
406 San Isidro 0,721 0,886 0,403 0,294 0,506 0,297 0,864 0,617
407 Belén 0,694 0,774 0,430 0,352 0,530 1,000 0,905 0,665
408 Flores 0,688 0,847 0,454 0,528 0,558 0,537 0,880 0,542
409 San Pablo 0,685 0,831 0,477 0,283 0,481 0,414 0,875 0,484
410 Sarapiquí 0,595 0,932 0,166 0,149 0,463 0,053 0,644 0,501
501 Liberia 0,574 0,858 0,290 0,117 0,408 0,357 0,817 0,394
502 Nicoya 0,607 0,945 0,309 0,132 0,447 0,174 0,803 0,351
503 Santa Cruz 0,603 0,931 0,323 0,164 0,471 0,242 0,780 0,414
504 Bagaces 0,575 0,921 0,228 0,102 0,455 0,388 0,741 0,353
505 Carrillo 0,619 0,926 0,292 0,145 0,475 0,279 0,775 0,521
506 Cañas 0,568 0,895 0,249 0,117 0,415 0,218 0,746 0,431
507 Abangares 0,574 0,906 0,215 0,115 0,444 0,237 0,749 0,055
508 Tilarán 0,649 0,896 0,244 0,125 0,440 0,214 0,774 0,523
509 Nandayure 0,599 0,940 0,236 0,131 0,449 0,236 0,846 0,308
510 La Cruz 0,481 0,946 0,181 0,088 0,407 0,208 0,699 0,379
511 Hojancha 0,637 0,957 0,273 0,166 0,447 0,331 0,846 0,452
601 Puntarenas 0,634 0,925 0,253 0,084 0,475 0,285 0,788 0,471
602 Esparza 0,646 0,923 0,285 0,146 0,465 0,289 0,823 0,514
603 Buenos Aires 0,535 0,941 0,167 0,085 0,445 0,034 0,675 0,354
604 Montes de Oro 0,660 0,930 0,285 0,090 0,455 0,318 0,774 0,399
605 Osa 0,620 0,931 0,212 0,080 0,443 0,169 0,742 0,427
606 Aguirre 0,691 0,922 0,247 0,090 0,488 0,329 0,742 0,549
607 Golfito 0,616 0,907 0,220 0,094 0,442 0,158 0,772 0,227
608 Coto Brus 0,586 0,947 0,188 0,080 0,425 0,168 0,716 0,413
Continua…
Vivienda y Ambiente
Gómez
407
408
Vivienda y Ambiente
Continuación Cuadro 6
Gómez
Promedio de
Años de
Promedio Promedio
escolaridad
del Total de de Factura Índice de Índice de
Índice de promedio de Índice de Índice de
Emisiones total Competiti- Desarrollo
Buenas las Sostenibi- Gestión
Cantón Nombre por mensual vidad Humano
Prácticas miembros lidad Municipal
tenencia de por Cantonal Cantonal
Ambientales de la Ajustado 2010
vehículo y consumo 2011 2009
vivienda
moto eléctrico
individual
ocupada
609 Parrita 0,629 0,927 0,214 0,103 0,489 0,154 0,757 0,033
610 Corredores 0,623 0,904 0,228 0,074 0,436 0,122 0,774 0,349
611 Garabito 0,652 0,928 0,235 0,145 0,454 0,368 0,735 0,463
701 Limón 0,637 0,934 0,270 0,123 0,439 0,201 0,677 0,445
702 Pococí 0,653 0,916 0,209 0,126 0,444 0,204 0,662 0,266
703 Siquirres 0,667 0,948 0,206 0,112 0,484 0,129 0,724 0,060
704 Talamanca 0,528 0,953 0,193 0,100 0,427 0,096 0,587 0,048
705 Matina 0,619 0,943 0,181 0,074 0,434 0,165 0,592 0,358
706 Guácimo 0,667 0,935 0,195 0,104 0,471 0,093 0,702 0,383
.
Fuente: Observatorio del desarrollo 2012
Costa Rica a la Luz del Censo 2011
409
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Gómez
V. Bibliografía
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ciudades españolas (Proyecto MEDEA). Recuperado , de http://www.scielosp.org/: http://www.scielosp.
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fuentes móviles en carreteras de Costa Rica. Costa Rica: Tecnología en Marcha.
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UCR-PNUD. (2010). Atlas de Desarrollo Humano Cantonal. Costa Rica: Universidad de Costa Rica.
410
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Resumen
Este trabajo analiza la relación entre informalidad en la vivienda y el programa nacional de vivienda
social dentro de la Gran Área Metropolitana. En esta investigación se utiliza un concepto de informalidad
“ampliada” para efectos de comparar con otros países. Esta definición considera: a) Viviendas sin
acceso a infraestructura pública esencial (Luz eléctrica, agua potable, sin acceso a saneamiento), b)
Viviendas en mal estado (los materiales de paredes, pisos o techos son de desecho de otro material no
adecuado o el piso es de tierra), c) Viviendas ilegalmente ocupadas (concepto tradicional, Precario).
Se estima el efecto causal del desarrollo de proyectos de vivienda, financiados por el BANHVI, y se
utiliza un método de pareamiento (propensity score matching) que permite controlar la influencia de
otros factores determinantes de los niveles de informalidad: la cantidad de inmigrantes nicaragüenses,
los niveles de concentración espacial de la oferta de vivienda social y la estructura socioeconómica
existente en 2000. La evaluación se realiza utilizando distritos como unidades de análisis y modelos con
efectos aleatorios espaciales. Este método se aplica para conocer el efecto que tuvieron los proyectos
de vivienda en la disminución de la informalidad ampliada.
Se encontró que los distritos que concentran los proyectos de vivienda, presentan reducciones
estadísticamente significativas, atribuibles a los proyectos de vivienda. Estas reducciones se presentan
tanto en la informalidad ampliada en general, así como en las dimensiones de infraestructura pública y
el estado de las viviendas; pero no en la informalidad por tenencia (precarios). Dichas reducciones son
sustanciales, aunque no explican la mayoría de la reducción identificada en los niveles de informalidad
de la GAM.
1/ Director del Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible y de la Maestría Interdisciplinaria en Gestión
Ambiental y Ecoturismo; catedrático de la Escuela de Ingeniería Civil de la Universidad de Costa Rica. Lic. en Ing. Civil
(UCR, 1971), M.Sc. en Riesgo Sísmico (1973), MCP y Ph.D. en Planificación Urbana y Regional por la Universidad de
California en Berkeley (1991). Tiene amplia experiencia en investigaciones de estudios urbanos y regionales, planificación
ambiental y análisis socioeconómico. Correo electrónico: [email protected]; Tel./ Fax: (506) 2283 9427
2/ Investigador del Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible, Escuela de Ingeniería Civil, Universidad de
Costa Rica. Lic. en Ing. Civil (UCR, 2006), ha desarrollado investigaciones sobre los impactos ambientales de sistemas de
transportes y asentamientos humanos, centrados en energía y emisiones de carbono, así como en el uso de Sistemas de
Información Geográfica y econometría espacial. Correo electrónico: [email protected]; Tel./Fax.: (506) 2283 4815
3/ Investigador del Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible, Escuela de Ingeniería Civil y del Instituto
de Investigaciones en Ciencias Económicas, Universidad de Costa Rica. Lic. en Economía (UCR, 2007), ha desarrollado
investigaciones en análisis socioeconómico para planificación territorial, economía espacial y economía urbana. Correo
electrónico: [email protected]; Tel./Fax.: (506) 2283 4815
411
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
I. Introducción
Durante las últimas tres décadas, la sociedad costarricense ha dedicado una gran cantidad de
recursos para mejorar las viviendas de los sectores más pobres. Stein y Vance4 estimaban que cerca
del 20% del parque habitacional nacional de 2003, había recibido un subsidio del Estado. La tradición
de promover una vivienda propia de calidad mínima se remonta aún más atrás: aunque no garantizan
el derecho a la vivienda, las Garantías Sociales de la Constitución costarricense incluyen el mandato de
“auxiliar a los trabajadores en la construcción de casas baratas para los trabajadores urbanos y crear el
patrimonio familiar del trabajador campesino” (véase el artículo 53 de la antigua Constitución de 18715)
desde su aprobación en 1943.
La estructura institucional del sistema de vivienda fue definida en 1986, en una coyuntura de
grave crisis de la vivienda en la Gran Área Metropolitana (GAM). Desde entonces, ha mantenido
características (en particular, flexibilidad para orientar inversiones hacia proyectos específicos y un
presupuesto relativamente grande) que fueron ventajas evidentes para gestionar esta crisis (sobre la
crisis económica y su relación con el sector vivienda, véase entre otros: Rovira6, Valverde, Jean Pierre
y Araya7, Valverde y Molina8). Sin embargo, estas características, sumadas a la falta de planificación
urbana, así como a otras carencias del sistema, que en su momento fueron menos graves -en particular,
la total ausencia de consideraciones sobre el impacto del programa sobre el mercado inmobiliario o
de coordinación mínima con la política urbana nacional y local -se han convertido en obstáculos que le
impiden lidiar con los nuevos retos del sector vivienda.
En este contexto, es de gran interés evaluar cuál ha sido el impacto del sistema de provisión de
vivienda social durante la última década. ¿Se ha reducido la informalidad como respuesta ante el
subsidio de vivienda? Subsidiariamente, ¿cuán grave es hoy el problema de la informalidad en la
vivienda?
La hipótesis principal que orienta este trabajo es la siguiente: El sistema de vivienda social ha sido
efectivo, si bien no eficiente, en la reducción de la informalidad. Sin embargo, debe resaltarse que
el hecho posiblemente más notable de Costa Rica y de la GAM durante la última década, ha sido
una expansión económica muy importante, la cual ha estado concentrada en un sector relativamente
pequeño. Esto afecta de manera negativa la desigualdad en la distribución de la riqueza, pero
tampoco ha podido solucionar los problemas de la clase media y de bajos ingresos. Así, resulta
crucial controlar por las características socioeconómicas de la región para determinar correctamente
el impacto neto atribuible al programa de vivienda social sobrepotenciales reducciones de la
informalidad.
4/ Stein, A. & Vance, I. (2008). The role of housing finance in addressing the needs of the urban poor: lessons from Central
America. En: Environment and Urbanization, 20 (1), 13-30.
5/ Ley No. 24. (1943). Reforma a la Constitución Política de 1871. Asamblea Legislativa. Colección de leyes y decretos. A~no
1945, II Semestre, Tomo II, página 15.
6/ Rovira, J. (1985). Del desarrollo de Costa Rica y su crisis en el periodo de postguerra: 1948-1984. Anuario de Estudios
Centroamericanos, 11 (1), 23-42. Recuperado de: http://www.anuario.ucr.ac.cr/11-1-85/ROVIRA.pdf
7/ Valverde, J., Jean Pierre, B. & Araya, C. (1990). Crisis política y social en Costa Rica 1980 ¬1988: Tendencias y perspectivas.
Informe final de proyecto. Confederación Superior Universitaria Centroamericana y Universidad de Costa Rica, Instituto de
Investigaciones Sociales. San José, Costa Rica.
8/ Valverde, J. & Molina, E. (1993). Diez años de luchas urbanas en Costa Rica (1982-1992). Revista de Ciencias Sociales, 61,
7-16. Recuperado de: http://www.revistacienciassociales.ucr.ac.cr/diez-anos-de-luchas-urbanas-en-costa-rica¬1982-1992/
412
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
La estrategia metodológica seleccionada para probar la hipótesis aprovecha una característica del
sistema de vivienda -la enorme concentración espacial de los subsidios en unos pocos distritos9 10 -para
crear un grupo de tratamiento formado por los distritos que han recibido la mayor parte del subsidio.
Se construye luego un grupo de control con características similares (variables socioeconómicas
utilizadas) a los distritos del grupo de tratamiento y cuyo nivel de informalidad sirve como parámetro
de comparación.
Tanto los distritos del grupo de tratamiento como los del grupo de control han sido influidos en la
misma medida por otros factores (en particular, por el contexto económico). Los distritos de ambos
grupos son similares por construcción en las dimensiones que determinan la informalidad y, por ello,
también determinan parcialmente la política de vivienda.
Los factores utilizados fueron: tiempo de viaje estimado al centro de la ciudad, índice de influencia
política (votos del distrito para el candidato vencedor en las elecciones presidenciales), porcentaje
de nicaragüenses, cantidad de subsidios de vivienda recibidos en periodos anteriores, pendiente
promedio del distrito, porcentaje de viviendas de clase media y alta (viviendas con microondas en 2000
como proxy) y un efecto aleatorio espacialmente correlacionado.
La definición operativa del concepto de informalidad es compleja por las características y génesis
del fenómeno mismo. Smolka y Biderman11 han argumentado que la informalidad es consecuencia
de un problema de acceso a la vivienda, consistente con mercados inmobiliarios que en cualesquiera
otros sentidos funcionan bien. Caracterizan la informalidad como un problema de tres dimensiones,
que a menudo (aunque no necesariamente) se presentan simultáneamente: “actividades ilegales (falta
de derechos adecuados de tenencia), irregulares (falta de cumplimiento con las normas urbanas) o
clandestinas (no permitidas) que acceden y ocupan suelos urbanos, típicamente carentes de servicios
e infraestructura mínimos.”12 La medición de la informalidad en la vivienda ha estado fuertemente
ligada a la investigación de la pobreza (aunque es notorio que gran parte del problema radica en
fallas institucionales como limitadas redes de infraestructura pública o inconsistencias entre legalidad
y realidad de la tenencia del suelo). La definición de necesidad básica insatisfecha de albergue13, por
ejemplo, coincide en gran medida con dimensiones relevantes para la informalidad de vivienda.
9/ Monzón, J. (1993). Patrones de crecimiento del Gran Área Metropolitana: El caso de los proyectos de vivienda de interés
social. TFG de Licenciatura, Escuela de Ingeniería Civil, Universidad de Costa Rica, San José, Costa Rica.
10/ Pujol, R., Pérez, E. & Sánchez, L. (2009). Hacia un cambio en la oferta de vivienda en la GAM: una exploración desde
los grandes desafíos planteados por la demanda potencial de vivienda de la región. Ponencia presentada para el
Decimoquinto Informe Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible. Programa Estado de la Nación y Programa
de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible.
11/ Smolka, M. & Biderman, C. (2011). Vivienda informal: una perspectiva de economista sobre el planeamiento urbano
(Working Paper N.o WP11MS2SP). Lincoln Institute of Land Policy. Cambridge, MA.
12/ Ibid.
13/ Méndez, F. & Trejos, J. (2004). Costa Rica: Un mapa de carencias críticas para el año 2000. En L. Rosero (Ed.),
Costa Rica a la luz del Censo 2000 (pp. 205-233). San José, Costa Rica: Centro Centroamericano de Población de la
Universidad de Costa Rica, Instituto Nacional de Estadística y Censos y Proyecto Estado de la Nación.
413
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
En efecto, Méndez y Trejos14 clasifican como una necesidad básica insatisfecha (NBI) de albergue,
a todo hogar que ocupe una vivienda con, por lo menos, una de las siguientes características: (a)
hacinamiento (más de dos personas por dormitorio), (b) estado de paredes, techos y pisos de la vivienda
en mal estado, o construidos con materiales de desecho, (c) clasificadas como eventuales o tugurios,
(d) carentes de electricidad.
La NBI de albergue es similar a la definición adoptada por ONU HABITAT15 para detectar asentamientos
humanos subnormales (y nótese que en ambos casos existen dimensiones de ilegalidad individual –
por ejemplo: El estado de los elementos de la vivienda -pero también existe la ilegalidad colectiva,
notablemente en cuanto a infraestructura pública): una vivienda forma parte de un asentamiento
subnormal cuando no tiene acceso a (a) una cantidad suficiente de agua con un costo y esfuerzo
aceptables, (b) saneamiento o a un servicio sanitario apropiado, (c) área suficiente para la familia
(3 personas o menos por aposento, considerando todos los aposentos de la vivienda), (d) calidad
estructural y durabilidad mínimas de la vivienda, o (e) seguridad de tenencia (documentación legal que
prueba la propiedad, o protección de facto o percibida de expulsiones forzadas).
• Viviendas sin acceso a infraestructura pública esencial. Viviendas ocupadas que cumplen por
lo menos una de las siguientes tres condiciones: (a) “No hay luz eléctrica”, de acuerdo con las
pregunta V14 de los censos de 2000 y 2011; (b) sin acceso a agua potable -el agua proviene de
“río o quebrada” u “Otra fuente” según la pregunta V11 del censo de 2011; o de las opciones “un
río, quebrada o naciente” o “lluvia u otros” de la pregunta V11 del censo de 2000; (c) sin acceso a
saneamiento -sistemas distintos de alcantarillado sanitario o tanque séptico, en las preguntas V13
del censo de 2011 y V12 del censo de 2000. Nótese que se consideran viviendas con servicios
públicos incluso si se resuelve el acceso con elementos individuales y no colectivos (ej. pozos
para agua potable, tanques sépticos para saneamiento, paneles solares en electricidad), aunque
el censo no permite medir si estas soluciones son realizadas de manera legal o si son la alternativa
técnicamente más eficiente y efectiva.
• Viviendas en mal estado. Viviendas ocupadas que cumplen con una de las dos siguientes
condiciones: (a) materiales de paredes, pisos o techos son de desecho u “otros” o el piso es de
tierra (se clasifica como en mal estado si se cumple cualquiera de las anteriores opciones, de
acuerdo con las preguntas V04, V05 y V07 del censo de 2011 y las preguntas V03, V04 y V06 del
censo de 2000); (b) las paredes, techos y pisos están, los tres simultáneamente, en mal estado de
acuerdo con las preguntas V08 del censo de 2011 y V07 del censo de 2000 (esta condición más
restrictiva sigue la regla de Méndez y Trejos (2004); la decisión metodológica se debe a la mayor
incertidumbre de la variable, dado que es un censista no especializado en infraestructura, quien
juzga el estado de la vivienda).
• Viviendas ilegalmente ocupadas. Viviendas ocupadas en precario, de acuerdo con la pregunta V03
del censo de 2011 y la pregunta V02 del censo de 2000.
Pese a ser una dimensión conceptualmente relevante, se decidió no incluir el hacinamiento. Los
hogares costarricenses han sufrido una muy acelerada reducción en su tamaño17, lo cual a su vez
implica una muy rápida reducción de la cantidad de viviendas con hacinamiento en los periodos inter-
censales 1984-2000 y 2000-2011.
En el cuadro 1, se estima la cantidad total de viviendas informales y el aporte de cada uno de los tres
componentes que las definen (tenencia, acceso a infraestructura y estado de la vivienda). El primer
hecho relevante es el progreso logrado en el periodo intercensal. En términos porcentuales, tanto para
el país como para la GAM, la cantidad de viviendas informales se ha reducido sustancialmente (se
redujo casi cuatro puntos porcentuales, de 11,88 % a 8,06 % del total de viviendas ocupadas).
Más notable aún, pese a que el parque habitacional de la GAM creció en 123 mil viviendas y el de
Costa Rica en 277 mil viviendas (para el periodo 2000-2011), en términos absolutos las cantidades de
viviendas informales, en mal estado y sin acceso a infraestructura también se redujeron, tanto para la
GAM como para Costa Rica. En cuanto a tenencia, si bien es cierto hubo un aumento en la GAM (de
10.750 a 11.436 viviendas), también se registró una reducción nacional (para el periodo 2000-2011).
Cuadro 1
Cantidad de viviendas informales en la GAM y Costa Rica, 2000 y 2011
2000 2011
GAM Costa Rica GAM Costa Rica
Cantidad total de viviendas 495 166 935 289 618 761 1 211 964
Cantidad 58 845 192 166 49 889 139 899
Viviendas Informales
% 11,88 20,55 8,06 11,54
Cantidad 10 750 18 101 11 436 16 019
Viviendas en precario
% 2,17 1,94 1,83 1,32
Cantidad 43 842 106 674 34 189 73 245
Viviendas en mal estado
% 8,85 11,41 5,53 6,04
Viviendas sin acceso a Cantidad 23 515 129 689 16 117 81 227
infraestructura % 4,75 13,87 2,60 6,70
Los niveles de informalidad estimados para la GAM, en el contexto latinoamericano, son bajos. En
este sentido, la GAM presenta similitudes con Chile (véase el trabajo de Poduje19) -que hacia finales de
la década de 1990 estaba en vías de eliminar el déficit de vivienda en ese país. Al igual que Costa Rica,
mucho de este avance ocurrió a costa de la calidad de las ciudades. En el caso de Santiago, el programa
de vivienda introdujo una muy importante segregación social residencial, producto de la concentración
de la vivienda social en zonas de bajo valor del suelo (ambos fenómenos, segregación y desarrollo en
áreas de bajo valor del suelo, también están presentes en Costa Rica y, particularmente, en la GAM);
sobre segregación residencial en las principales ciudades chilenas, véase Sabatini, Cáceres y Cerda20.
Las cifras compiladas por Clichevsky21 22, si bien menos detalladas, claramente apoyan la tesis de
que la informalidad en la GAM es baja. Definiendo informalidad como un problema esencialmente de
tenencia, Clichevsky23 reportaba que en algunas de las principales ciudades brasileñas (Belo Horizonte,
Rio de Janeiro, Sao Paulo y Fortaleza), el porcentaje de informalidad rondaba el 20 %; para Sao Paulo,
esto significa más de 3 millones de viviendas. Los porcentajes eran mayores en Bogotá (24 %, 1.4
millones de viviendas), Quito (50 %, 750 mil viviendas), Lima (entre 37 y 40 %, más de 2.5 millones
de viviendas) y México DF (40 %, 7 millones de viviendas). En cambio, en Uruguay el porcentaje era
de apenas un 8% y, de acuerdo con Clichevsky24, en Santiago de Chile, un 1 %. En las principales
ciudades de Centroamérica, las estimaciones de informalidad (por tenencia) superaban el 35 %: 38 %
en Ciudad de Guatemala, 40 % en Tegucigalpa, 50 % en San Pedro de Sula25, 50 % en Managua y 20
% en toda el Área Metropolitana de Ciudad de Guatemala26.
18/ Galiani, S. & Schargrodsky, E. (2011). The Dynamics of Land Titling Regularization and Market Development (Working Paper
N.o 2011/88). UNU-WIDER. Helsinki, Finland. Recuperado de: http://www.wider.unu.edu/publications/working-papers/2011/
en GB/wp2011-088/
19/ Poduje, I. (2000). Vivienda Social en Chile. Un Producto en Serie sin Localización (Working Paper N.o LP00Z09). Lincoln
Institute of Land Policy. Cambridge, MA.
20/ Sabatini, F., Cáceres, G. & Cerda, J. (2001). Segregación residencial en las principales ciudades chilenas: tendencias de
las tres últimas décadas y posibles cursos de acción. eure (Santiago), 27 (82), 21-42.
21/ Clichevsky, N. (2003). Pobreza y acceso al suelo urbano. Algunos interrogantes sobre las políticas de regularización en
América Latina (Medio Ambiente y Desarrollo N.o 75). CEPAL. Santiago de Chile.
22/ Clichevsky, N. (2005). Regularización de la informalidad del suelo en América Latina y el Caribe Una evaluación sobre la
base de 13países y 71 programas (Serie Manuales No 50). CEPAL. Santiago de Chile.
23/ Clichevsky, N. (2003) op. cit.
Las regulaciones definidas en Costa Rica no incluyeron aspectos básicos de política urbana como
la calidad de la infraestructura o la localización de los nuevos desarrollos. Dados los fuertes incentivos
para reducir costos en estos proyectos, esto implicó la búsqueda de terrenos de bajo valor, y que por
serlo, estaban ubicados cada vez más lejos de los centros urbanos costarricenses.
El sistema de provisión de vivienda pública costarricense fue creado a finales de 1986 por medio de
la Ley No. 7052. Esta ley constituyó, en esencia, una reorganización de las finanzas públicas del sector
vivienda. El principal elemento que diferencia al nuevo sistema del anterior es la recapitalización de
los fondos que proveerán crédito subsidiado para vivienda - y un esquema administrativo más ágil, lo
cual hacía llegar los fondos a instituciones organizadas de la sociedad civil (los llamados comités de
vivienda, que durante la década de 1980 tuvieron gran influencia en el sector).
La Ley 7052 creó dos fondos y una nueva institución, el Banco Hipotecario de la Vivienda (BANHVI),
para administrarlos. El Fondo de Subsidios para la Vivienda (FOSUVI) y el Fondo Nacional de la
Vivienda (FONAVI). El FOSUVI proveerá préstamos subsidiados a las familias de menores ingresos,
permitiéndoles entrar al mercado inmobiliario. A cambio, la vivienda que estas personas compraban
debía permanecer en su propiedad por un periodo de tiempo determinado (actualmente 10 años).
El sistema garantizaba la existencia de viviendas para este segmento al realizar préstamos a los
desarrolladores inmobiliarios, a través del FONAVI, para la creación de proyectos habitacionales de
vivienda subsidiada. Así, el BANHVI era la fuente última del capital tanto de quienes construían las
viviendas como de quienes las compraban.
El BANHVI se concibió como una institución de segundo piso; los fondos llegaban a los beneficiarios
- hogares de bajos ingresos para la compra de una vivienda o desarrolladores inmobiliarios para la
urbanización de terrenos - a través de una red de instituciones financieras que incluye aún hoy a bancos
públicos y privados, fundaciones, cooperativas y mutuales de ahorro y préstamo. Con ligeros cambios
- por ejemplo, el préstamo subsidiado del FOSUVI se transformó a inicios de la década de 1990 en una
donación - este es el mismo sistema que actualmente funciona en Costa Rica. El análisis de oferta de
vivienda social se concentra en los proyectos financiados por el BANHVI a través del FONAVI.
El cuadro 2 resume las inversiones nacionales realizadas por el BANHVI en la década más reciente
(2000-2011). Como se muestra, el BANHVI creó dos veces más vivienda fuera de la GAM que en ella.
Dos factores contribuyen a este resultado: por una parte, los salarios urbanos (y en particular, de la
GAM) son en promedio más altos que en las zonas rurales. Como el criterio principal para la asignación
del subsidio es el ingreso familiar, no es sorprendente que la mayoría de recursos vayan a familias fuera
de la GAM.
27/ Stein, A. & Vance, I. (2008). The role of housing _nance in addressing the needs of the urban poor: lessons from Central
America. Environment and Urbanization, 20 (1), 13-30. TSE. (2012). Elecciones. Cómputo de Votos. Recuperado desde
fhttp://www.tse.go.cr/estadisticas elecciones.htmg
417
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
Cuadro 2
Proyectos de vivienda financiados por el BANHVI, 2000-2011
Inversión
Cantidad de Cantidad de (millones de colones)
Zona
Proyecto Viviendas
Viviendas Bono Comunal
El segundo factor que podría explicar esta brecha es el valor del suelo, mucho más bajo fuera de la
GAM que dentro de ella (excepto en localizaciones puntuales como ciertas playas). La importancia de
este factor es aún más evidente cuando se analizan las concentraciones de vivienda social dentro de
la GAM. En términos generales, estas se ubican en áreas donde hubo grandes invasiones en la década
de 1980o en zonas periféricas (que a mediados de 1986 eran periurbanas) de la región - precisamente
aquellas donde los valores del suelo son más bajos. Un claro ejemplo de este segundo grupo son los
proyectos construidos en San Felipe de Alajuelita, que cuando se construyeron estaban en una zona
rural periférica de bajo valor del sueloiii. Nótese que el bono de vivienda comunal sí se concentra en la
GAM: este tipo de financiamiento se ha dedicado principalmente a obras de infraestructura pública en
zonas marginales, las más grandes de las cuales forman parte de la región.
El mapa 1 muestra en gris, en el recuadro izquierdo, los distritos en los cuales se han construido
proyectos de vivienda financiados por el BANHVI, agrupados por la cantidad total de viviendas que
forman esos proyectos. El recuadro derecho muestra el estadístico Z del indicador LISA I de Moran
Local28; si Z, que presenta una distribución normal, es significativo, existe una aglomeración - varias
unidades cercanas con valores similares - de distritos (Z positivo) o el distrito es un valor extremo
atípico (Z negativo), es decir, es muy diferente de sus vecinos.
Tres de cuatro aglomeraciones encontradas corresponden con los principales focos de invasiones
de tierras de la década de 1980: Guararí en San Francisco de Heredia, Pavas y La Uruca en San José,
Purral en Goicoechea. De los valores atípicos, uno (Patarrá - Los Guido) originalmente fue parte de
estas invasiones. El otro, San Felipe de Alajuelita, fue una concentración de proyectos de vivienda en
la década de 1980, explicada porque el valor del suelo en ese distrito era muy bajo.
Se han identificado 16 distritos que concentraron el 78% de las viviendas construidas en proyectos
del BANHVI durante 2000-201129. Estos son: 10109 Pavas, 10110 Hatillo, 10307 Patarrá (incluyendo Los
Guido, que en 2000 formaba parte de Patarrá), 10805 Ipís, 10807 Purral, 11005 San Felipe de Alajuelita,
11104 Patalillo, 30105 Agua Caliente, 30201 Paraíso (incluyendo Llanos de Santa Lucía, que en 2000
formaba parte de Paraíso), 30203 Orosi, 30306 Dulce Nombre, 30701 San Rafael de Oreamuno, 30702
Cot, 40103 San Francisco de Heredia, 40205 Santa Lucía de Barva y 40803 Llorente de Flores. Este
grupo de distritos, en el marco metodológico de la evaluación, conforman el grupo de tratamiento: son
aquellas zonas donde el Estado está desarrollando la vivienda social en la región.
III. Metodología
El análisis de pareamiento a través de PSM consiste en construir un grupo de control, cuyos casos
presenten características similares al grupo de tratamiento que se investiga. Una vez hecho esto, se
compara la evolución de la variable dependiente del grupo de control con el grupo tratado; la diferencia
entre ellas se define como el efecto causal del tratamiento.
28/ Anselin, L. (1995). Local indicators of spatial association-LISA. En: Geographical Analysis, 27 (2), 93-115.
29/ BANHVI. (2012). Proyectos de vivienda. Recuperado desde fhttp://www.banhvi._.cr/proyectos/g
419
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
• Estimación del propensity score (PS). Se estima un modelo de regresión de variable dicotómica con
la variable dependiente igual a 1 para el grupo de tratamiento y 0 para cualesquiera otros casos de
la base de datos. Los determinantes en este modelo son también los determinantes de la variable
de impacto. A partir de este modelo, se predice para cada registro la probabilidad de ser tratado:
esta probabilidad es el PS.
• Proceso de pareamiento. Se utiliza un algoritmo - en este caso, el algoritmo propuesto por Sekhon30
- para asociar a cada registro del grupo de tratamiento por lo menos un registro del grupo de
control (en el presenta análisis, se han asignado dos registros de control por cada uno del grupo de
tratamiento). El algoritmo asigna a cada registro i del grupo de control, aquellos registros del grupo
de tratamiento que tienen un PS similar al correspondiente al registro i.
• Estimación del efecto causal (ATT). El impacto causado por el tratamiento - average treatment on the
treated, ATT - se evalúa, realizando una prueba de diferencia entre dos medias para las variables
de impacto (informalidad y sus tres dimensiones, en términos absolutos y porcentuales). Para la
estimación de la media del grupo de control, solo se utilizan los registros pareados.
A partir de estudios como Pujol, Pérez y Sánchez31 32 33 se han considerado otros determinantes como
la influencia de la política local, inmigrantes nicaragüenses, características físicas como la pendiente
- con el fin de descartar su importancia (la explicación de estas variables se muestra en los párrafos
siguientes).
30/ Sekhon, J. (2011). Multivariate and propensity score matching software with automated balance optimization: the matching
package for r. Journal of Statistical Software, 42 (7).Recuperado desde http://ideas.repec.org/a/jss/jstsof/42i07.html
31/ Pujol, R., E. Pérez y L. Sánchez. 2009. Hacia un cambio en la oferta de vivienda en la GAM: Una exploración desde los
grandes desafíos planteados por la demanda potencial de vivienda de la región. Ponencia para el XV Informe del Estado
de la Nación, julio
32/ Pujol, R. y E. Pérez. 2011. Impactos diferenciales de los procesos de urbanización en la región metropolitana de San
José, Costa Rica. Una evaluación espacial y temporal de los determinantes del crecimiento urbano, 1986-2010. San José:
Universidad de Costa Rica, ProDUS. Para el Lincoln Institute of Land Policy.
33/ Pujol R, Sánchez L y Pérez E. (2012). Growth patterns and concentration of urban activities in the Greater Metropolitan Area
of costa rica, 1993-2010. En la Revista Reflexiones Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Costa Rica. 2012.
Volumen 91, número 1. 2012. http://revistas.fcs.ucr.ac.cr/index.php/Reflexiones/article/view/89/76
420
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Tres trabajos previos (Monzón35 ; Pujol y col.36 37 ) iv estimaron ecuaciones de regresión para explicar
la localización de vivienda social costarricense. De ellos, pueden identificarse algunos determinantes
de gran importancia. Por un lado, la distancia con respecto a centralidades urbanas debería ser un
determinante clave en la localización de viviendas (según se sabe del modelo de Alonso-Mills-Muth y
desarrollos posterioresv). Por otro lado, la regularidad del relieve, medida a través de la pendiente de
cada distrito, es también un determinante físico relevante. En este sentido, cuanto más irregular, menos
apto para construcción y, consecuentemente, menor el valor del suelo.
Se ha actualizado el modelo propuesto en Pujol y col.38 , que buscaba modelar la cantidad de bonos de
vivienda (más relacionado con la oferta de viviendas en proyectos del BANHVI que modelos explorando
la informalidad misma). En este trabajo, modelos con un poder explicativo limitado (R2 ajustados
entre 0,25 y 0,30) y sin efectos espaciales, encontraron relaciones estadísticamente significativas y
consistentes con la teoría, para (a) la cantidad de inmigrantes nicaragüenses (signo negativo, pues un
alto porcentaje de ellos no residen legalmente en el país y, por ello, no son elegibles en general para el
subsidio a la vivienda) y (b) el porcentaje de votos obtenidos por el partido de gobierno en la elección
presidencial (positivo, reflejando clientelismo político) además de distancia de la cabecera municipal
al centro de San José.
Sin embargo, los dos principales determinantes del modelo fueron los niveles de ingresos,
cuantificados como el porcentaje de viviendas en el distrito que, en 2000, tenían un microondas (un
indicador indirecto de si la vivienda es de clase media; en 2000, el 45% de las viviendas ocupadas
reportaba tener un microondas de acuerdo con el censo de ese año); y la cantidad de vivienda social
construida en proyectos del BANHVI, en periodos anteriores.
34/ Solano, J. & Pujol, R. (2005). Análisis sobre la Localización Espacial de los Precarios en la Gran Área Metropolitana.
FUPROVI y Universidad de Costa Rica, Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible. San José, Costa Rica.
35/ Monzón, J. op. cit.
36/ Pujol, R., Pérez, E. & Sánchez, L. op. cit.
37/ Pujol, R., Pérez, E. & Sánchez, L. (2011a). La provisión de vivienda social en Costa Rica como política pública. Una
evaluación de sus dimensiones espaciales, 1994-2010. Ponencia presentada en las Jornadas Interdisciplinarias de
Investigación en Ciencias Sociales. 30 de agosto - 2 de septiembre.
38/ Íbid
421
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
Esta segunda variable podría interpretarse en varios sentidos: podría reflejar la capacidad de los
actores institucionales, que más fácilmente pueden trabajar en ciertas zonas de la ciudad; una dinámica
del mercado inmobiliario que tiende a concentrar a los pobres en zonas muy específicas de la ciudad39,
o simplemente la inercia histórica tanto de los asentamientos informales como del sistema de vivienda
y la localización de los más pobres, entre otras posibilidades. No se profundiza sobre el mecanismo
detrás de la variable, pues el objetivo central consiste en controlar sus efectos antes que construir una
teoría completa sobre la dinámica de la informalidad.
• Distancia al centro de la ciudad: Se estima el tiempo de viaje desde el centro de cada ciudad al
centro geométrico de cada distrito41
.
• Indicador de influencia política: medida como promedio del porcentaje de votos obtenido por
el partido de gobierno en las elecciones de 2002, 2006 y 2010, ponderado por la cantidad de
electores42.
• Porcentaje de extranjeros nicaragüenses por distrito de acuerdo con el censo del año 2000 (año
base)44.
39/ Pujol, R., Sánchez, L. & Pérez, E. (2011b). La segregación social como determinante del desarrollo urbano. Barrios cerrados
y autosegregación en las ciudades de San José y Heredia, Costa Rica. Revista de Ciencias Económicas, 29 (1), 445-477.
40/ Jiang, J. & Lahiri, P. (2006). Mixed model prediction and small area estimation. TEST, 15, 1-96. 10.1007/BF02595419.
Recuperado desde http://dx.doi.org/10.1007/BF02595419
41/ Pujol, R. & Pérez, E. (2012). Crecimiento urbano en la región metropolitana de San José, Costa Rica. Una evaluación
espacial y temporal de los determinantes del cambio de uso del suelo, 1986-2010 (Proyecto No B0534). Universidad de
Costa Rica, Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible. San José, Costa Rica.
42/ TSE. (2012). Elecciones. Cómputo de Votos. Recuperado desde fhttp://www.tse.go.cr/estadisticas elecciones.htmg
43/ BANHVI. (2012) Op.cit.
44/ CCP and INEC. (2012b). Censos Nacionales de Población y Vivienda de Costa Rica 2011. Descargado el 13 de octubre
de 2012. Recuperado desde fhttp://ccp.ucr.ac.cr/censos/index.php/censos c?censo=cr2011g
45/ ITCR. (2008). Atlas Costa Rica 2008. Disco compacto.
422
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
• Porcentaje de viviendas con microondas, según el censo de 2000, variable proxy que representa la
cantidad de viviendas de clase media o alta46.
• Términos aleatorios, uno de ellos correlacionado espacialmente. La estimación del término espacial
se realizó suponiendo que los distritos que comparten límites con una unidad, son sus vecinos.
Estos reciben un factor de 1. Otros distritos - los que no son vecinos – reciben un factor de 0.
Los vecinos fueron identificados utilizando el programa ArcGISTM10;0 a partir de 17 17 de
coberturas
geodatos distritales47. 17
El anexo incluye los dos modelos estimados: un modelo lineal fue especificado para explorar la
determinantes
importancia
(excepto
de distintos
el sobre
indicador de influencia política, informales
que introducía problemas
determinantes (excepto elfactores
indicador delainfluencia
cantidad total de viviendas
política, (según la definición de
que introducía problemas
ladeterminantes
subsección (excepto
graves de2.1)convergencia).
y un modeloel Logit,
indicador demismos
Enconambos
los influencia política,
determinantes
modelos, que introducía
(excepto
se especificaron problemas
el indicador de influencia
términos para
graves
política,de que
convergencia). En ambos
introducía problemas gravesmodelos, se especificaron
de convergencia). En ambostérminos
modelos, para
se especificaron
graves
términos
de convergencia).
representar (a) un efecto
para representar
En ambos
aleatorio,
(a) un v, nomodelos,
efecto aleatorio,
se especificaron
correlacionado (con distribución
v, no correlacionado
términos
normal)para
(con distribución y (b)
representar (a) un efecto aleatorio, v, no correlacionado (con distribución normal) y (b)normal) y (b)
unrepresentar
término, u, aleatorio
un término, (a) u, espacialmente
un efecto aleatorio,
aleatorio distribuido con una distribución
v, no correlacionado
espacialmente distribuido (con a priori
con distribución
una condicionalmente
(b) auto
normal)a y priori
distribución
un término,
regresivo: u, aleatorio espacialmente distribuido con una distribución a priori
uncondicionalmente
término, u, aleatorio espacialmente distribuido con una distribución a priori
auto regresivo:
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condicionalmente auto regresivo: ! ! !!" !! 1
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Donde !! controla la variación no modelada debido a conglomeración, j i indica que el
Donde
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vecinos del registro .
de los pesos de los vecinos del registro i . 45 45
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Se calculó, para ambos modelos,
Se calculó, para ambos modelos, ! = ! !!"(!) (2) donde
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Se calculó,
para ambos modelos, !" ! = (2) donde sd(u) la desviación
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! !!"(!) y sd(v), del término aleatorio
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aleatorio no aleatorio
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Los parámetros fueron estimados con econometría bayesiana y técnicas de Monte Carlo con cadenas
espacialmente
de Los parámetros
Markov. correlacionado.
Se utilizó fueron estimados
el programa WinBUGS con49econometría
. bayesiana y técnicas de Monte Carlo
Los parámetros fueron estimados con econometría bayesiana y técnicas de Monte Carlo
Los
con parámetros
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Se utilizóconeleconometría
programa WinBUGS bayesiana 46 y técnicas de Monte Carlo
.
con cadenas de Markov. Se utilizó el programa WinBUGS46. 46
con cadenas de Markov. Se utilizó el programa WinBUGS .
3.3. Especificación de la evaluación de causalidad
3.3. Especificación de la evaluación de causalidad
3.3. Especificación
La evolución de lahaevaluación
de la informalidad de causalidad
sido medida como la diferencia entre la cantidad de
La evolución de la informalidad ha sido medida como la diferencia entre la cantidad de
Laviviendas
evolucióninformales
de la informalidad
censadas ha en
sido2011
medida como latotal
y 2000, diferencia
y para entre la cantidad
cada una dede las
viviendas informales censadas en 2011 y 2000, total y para cada una de las
viviendas
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en la subsección 2000, total ylos para
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2012. Recuperadodefinidas
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desde fhttp://ccp.ucr.ac.cr/censos/index.php/censosprueba los
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47/ ITCR. op. cit.laestadística
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para 2000 y
tomando la cantidad promedio de viviendas informales entre los distritos para 2000 y
48/ Aguero-Valverde, J. & Jovanis, P. (2008). Analysis of road crash frequency with spatial models. Transportation Research
tomando
2011.2061,
Record,
la 55-63.
cantidad promedio de viviendas informales entre los distritos para 2000 y
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2011.
2011.
49/ Lunn, D., Se aplicó
Thomas, el algoritmo
A., Best, de pareamiento
N. & Spiegelhalter, propuesto
D. (2000). Winbugs - a bayesian por Sekhon
modelling
47
47
. Como
framework: PS,structure,
concepts, se
Se extensibility.
and aplicó el Statistics
algoritmo and de pareamiento
Computing, propuesto
10, 325-337. por Sekhon . Recuperado
10.1023/A:1008929526011. Como47 48 PS,desde
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= !el algoritmo de pareamiento propuesto por Sekhon . Como PS, se
! . !! + !! + !! según la recomendación de Sekhon . Esta métrica
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utilizó ! = !! . !! + !! + !! según la recomendación de Sekhon 48 . Esta 48 métrica
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particular,
tiene propiedades estadísticas mejores que la probabilidad misma; en particular, se
tiene propiedades
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lo cual facilita el proceso misma;de en particular, Para
pareamiento. se
Los parámetros fueron estimados con econometría bayesiana y técnicas de Monte Carlo
con cadenas de Markov. Se utilizó el programa WinBUGS46.
423
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez
3.3. Especificación de la evaluación de causalidad
La evolución de la informalidad ha sido medida como la diferencia entre la cantidad de
3.3. Especificación
viviendas de la evaluación
informales censadas en 2011de causalidad
y 2000, total y para cada una de las
dimensiones definidas
La evolución de en la subsección
la informalidad 2.1 medida
ha sido para todos
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de diferencias dimensiones
medias,definidas en la
subsección 2.1 para todos los distritos de la GAM. La significancia estadística se evaluó realizando una
tomando la cantidad
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medias, informales
tomando entre
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promedio para 2000
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informales entre los
distritos para 2000 y 2011.
2011.
47
Se
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Como PS, se
se utilizó
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utilizó la recomendación
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. Esta métrica tiene propiedades
estadísticas mejores
tiene propiedades que la probabilidad
estadísticas mejores que misma; en particular, se
la probabilidad asemejaen
misma; más a una distribución
particular, se normal, lo
tiene un valor de PS que resulta en s
cual facilita el proceso de pareamiento. Para conformar el grupo de control, se buscó del total de registros, fuera
asemeja más a una distribución normal, lo cual facilita el proceso de
del grupo de tratamiento, un registro para cada uno del grupo de tratamiento; pareamiento.
si más Para
de un registro tieneincluidos.
un
“empate"), todos ellos fueron
valor de PS que resulta en su asignación al grupo de control (existe un “empate”),
conformar el grupo de control, se buscó del total de registros, fuera del grupo de todos ellos fueron incluidos.
Se utilizó en este caso un factor de
tratamiento, un registro para cada uno del grupo de tratamiento; si más de un registro
Se utilizó en este caso un factor de ponderación: si n registros fueron unasignados
registro especifico
a un registrodel grupo de tratam
especifico
!
de de
del grupo de tratamiento, para estos n registros se utilizó el factor ponderación! = ! . . La construcció
ponderación La
IV. Resultados
El cuadro 3 muestra las estimaciones de los parámetros de los modelos que explican la informalidad
total y el grupo de tratamiento (pertenencia al grupo de distritos que concentran la abrumadora mayoría
de nuevas viviendas en proyectos financiados por el BANHVI). Dos parámetros son estadísticamente
significativos (distintos de 0): los correspondientes a viviendas construidas por el BANHVI en el periodo
1994-1999 y porcentaje de viviendas con microondas en 2000. Ambos muestran signos negativos,
indicando una relación negativa entre la cantidad de nuevas viviendas informales y el porcentaje de
viviendas de clase media (con microondas) así como la cantidad de viviendas construidas por el
BANHVI.
El modelo sugiere que la construcción de viviendas en proyectos del BANHVI reduce la informalidad,
la cual es de esperarse; pero también, que las zonas con mayor porcentaje de viviendas con clase
media mostraron mayores reducciones. El promedio del parámetro H, que cuantifica la proporción de
la variabilidad aleatoria espacialmente correlacionada, es igual a 0.38.
54/ R Core Team. (2012). R: a language and environment for statistical computing. ISBN
3-900051-07-0. R Foundation for Statistical Computing. Vienna, Austria. Recuperado desde http://www.R-project.org
Cuadro 3
Determinantes del diferencial de la cantidad de viviendas informales y del grupo de tratamiento
2000 - 2011
El cuadro 3 también muestra la estimación de parámetros para los determinantes del grupo de
tratamiento. El índice de influencia política no fue incluido porque introdujo problemas graves de
convergencia. De las cinco variables, solo una resultó estadísticamente significativa: la cantidad de
viviendas construidas por el BANHVI en 1994-1999. En este caso, el coeficiente fue positivo, lo cual
confirma la tendencia del sistema de crear vivienda social en los mismos distritos a lo largo del tiempo.
Nótese que el odds ratio (exp(b )) del promedio de este coeficiente indica un impacto muy leve de
lagviv
la variable sobre el total. Al igual que en el modelo lineal de la evolución de la informalidad, H =
promedio
0;39, también indica una importante proporción de los efectos aleatorios debidos a correlación espacial.
426
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
4.2. El impacto del programa de vivienda, las urbanizaciones financiadas por el BANHVI
Se resumen seguidamente los tres principales resultados del análisis causal realizado: su nivel
de significancia estadística, la magnitud del diferencial entre el grupo de tratamiento (distritos que
concentran los proyectos de vivienda social) y el grupo de control construido (ambos reportados en
el cuadro 4), y una evaluación de la mejoría potencial introducida por cada una de las variables del
modelo en la cuantificación del efecto causal (el cambio en el balance del PS como consecuencia de
cada factor).
Del cuadro 4 es evidente que los distritos donde se concentró la oferta de vivienda social mostraron
reducciones estadísticamente significativas en los niveles de informalidad. La diferencia entre la
reducción promedio de los grupos de tratamiento y control es significativa al 99% para la informalidad
y para las viviendas sin acceso a infraestructura, y a un 98% cuando se consideran solo viviendas en
mal estado. En cambio, esta diferencia no es significativa para informalidad de tenencia (reducción de
la cantidad de viviendas en precario).
Estos resultados son consistentes con las características del sistema, y en particular del tratamiento
que se evalúa (proyectos de vivienda social, que es un subsidio a la oferta). La construcción de
proyectos de vivienda implica tanto la creación de viviendas nuevas que vienen a sustituir viviendas en
mal estado, como la urbanización del suelo, la cual brinda acceso a servicios públicos a estas nuevas
viviendas.. Si se evaluara, por ejemplo, el bono comunal, sería de esperar que el impacto principal
fuera solo sobre la dimensión de infraestructura pues este tipo de intervención no resulta en nuevas
viviendas.
Similarmente, una evaluación de bonos de vivienda para construcción en lote propio (subsidio a la
demanda) se concentraría en el estado de las viviendas más que en otras dimensiones.
Cuadro 4
Efectos causales de los proyectos de vivienda construidos por el BANHVI sobre la informalidad
2000 - 2011
Fuente: Pujol, Pérez y Sánchez (2012) con datos del BANHVI (2012), CCP y INEC (2012a, 2012b), ITCR (2008), Pujol y
Pérez (2012), TSE (2012).
Las acciones de regularización del Estado costarricense se han centrado, desde hace más de veinte
años, en el estado de las viviendas (a través de subsidios a la oferta) y la expansión de infraestructura,
tanto por medio de proyectos de vivienda social como a través de la extensión de redes de agua
potable, alcantarillado y electricidad por parte de empresas públicas. Los resultados reflejan el relativo
éxito de la estrategia pero también sus limitaciones. Los problemas de informalidad por tenencia, que,
como se discutió en secciones anteriores, es un problema relativamente menor y muy localizado, los
asentamientos se han convertido en permanentes y empeoran lentamente.
La magnitud de la reducción también parece ser sustancial. En promedio, los 16 distritos del grupo
de tratamiento presentaron una reducción de la informalidad total de 226 viviendas; 156 viviendas en
la dimensión de infraestructura y 204 en la dimensión de estado de la vivienda. Esto significa que más
de la mitad de la reducción de la informalidad en estos distritos es atribuible a la intervención estatal, y
este porcentaje es aún mayor para infraestructura.
Ahora bien, debe tomarse en consideración que la reducción de la informalidad total en los distritos
del grupo de tratamiento solo representa 1 de cada 3 viviendas, con respecto al total de la GAM. El
programa sí ha tenido un impacto notable; pero es importante reconocer que la mayoría de la mejora
general en los niveles de informalidad, ha sido consecuencia del progreso general del país (y en
particular, de la GAM).
Los cuadros 5 y 6 resumen el análisis de balance, antes y después del proceso de pareamiento. El
valor promedio de cada variable del grupo de tratamiento es el mismo, para este análisis, pues fue
posible asociar, por lo menos, un registro al grupo de control por cada dato del grupo de tratamiento.
El valor promedio del grupo de control, antes del proceso de pareamiento, resulta de promediar los
145 distritos que no forman parte del grupo de tratamiento en tanto que el promedio después del
pareamiento, es el promedio de los 40 distritos seleccionados para el grupo de control. Adicionalmente,
428
Vivienda y Ambiente Pujol, Pérez & Sánchez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
el cuadro reporta el estadístico t de la diferencia entre los promedios de los grupos de tratamiento y
control, la razón entre las varianzas de estos dos grupos y el estadístico de Kolmogorov-Smirnov que
compara las distribuciones estadísticas de ambos grupos58.
Según el cuadro 5, es evidente que el balance ha mejorado para las tres principales variables
(vivienda social construida en periodos anteriores, porcentaje de viviendas con microondas y el efecto
aleatorio espacialmente correlacionado): la probabilidad del estadístico t (prueba de diferencia de dos
medias) se reduce en todos los casos, y el estadístico de Kolmogorov-Smirnov se reduce en dos de
tres (aumenta para porcentaje de viviendas con microondas, pero sin llegar a ser significativo a un 90%
de confianza; adicionalmente, para esta variable, la diferencia entre varianzas se reduce por el proceso
de tratamiento). Es particularmente notable la mejora en la variable vivienda social construida por el
BANHVI: la diferencia de promedios pasa de casi 200 viviendas a menos de 30. En cambio, aunque
sí mejora, la diferencia introducida por el término espacial es menos importante (pasa de 57 a 42; su
varianza también mejora).
Cuadro 5
Evaluación de balance de proceso de pareamiento. Variables vivienda social en proyectos del
BANHVI (1994-1999), porcentaje de viviendas con microondas (2000) y efecto aleatorio
espacialmente correlacionado
Promedio de registros de
217,94 217,94 0,6203 0,6203 -51,294 -51,294
grupo de tratamiento
Promedio de registros de 29,674 190,81 0,5763 0,6109 5,698 -8,7509
grupo de control
Prob. De prueba t (diferencia
0,0787 0,5202 0,2321 0,8553 0,405 0,6448
de medias)
Razón entre varianzas de
grupos de control y 8,1144 1,07 0,5713 0,7114 1,2718 0,8849
tratamiento
Estadístico de Kolmogorov-
0,2847 0,15 0,2014 0,25 0,2778 0,175
Smirnov
Prob. De estadístico de
Kolmogorov-Smirnov 0,004 0,199 0,521 0,115 0,170 0,500
(bootstrap)
Fuente: Pujol, Pérez y Sánchez (2012) con datos del BANHVI (2012), CCP; INEC (2012a) y ITCR (2008).
Otras variables son menos importantes (solo las tres variables del cuadro 5 resultan significativas
en los modelos estimados, véase el cuadro 3). El cuadro 6 las incluye: tiempo de viaje al centro de la
ciudad, pendiente promedio del distrito y porcentaje de inmigrantes nicaragüenses. Solo el porcentaje
de inmigrantes nicaragüenses mejora el balance, e incluso para esta variable hay un claro aumento
de la varianza en el grupo de control después del proceso de pareamiento (también aumentan las
varianzas de las otras dos variables: tiempo de viaje y pendiente promedio).
Cuadro 6
Evaluación de balance de proceso de pareamiento. Variables tiempo de viaje estimado al centro
de la ciudad, pendiente promedio del distrito y porcentaje de vivienda social construida en
proyectos del BANHVI
1994 - 1999
Tiempo de viaje
Porcentaj de inmigrantes
estimado a centro de Pendiente promedio
nicaragüenses (2000)
ciudad
Promedio de registros de
22,489 22,489 16,544 16,544 0,04047 0,0405
grupo de tratamiento
Promedio de registros de
20,808 23,517 16,567 15,847 0,0465 0,0337
grupo de control
Prob. De prueba t
0,6703 0,8313 0,9935 0,8069 0,5239 0,5873
(diferencia de medias)
Razón entre varianzas de
grupos de control y 1,1084 1,1547 1,0524 1,3104 0,908 1,527
tratamiento
Estadístico de
0,1319 0,25 0,1528 0,25 0,25 0,175
Kolmogorov-Smirnov
Prob. De estadístico de
Kolmogorov-Smirnov 0,929 0,125 0,821 0,132 0,298 0,475
(bootstrap)
Fuente: Pujol, Pérez y Sánchez (2012) con datos del CCP; INEC (2012a), ITCR (2008), Pujol y Pérez (2012).
V. Conclusión
La hipótesis ha sido apoyada por los resultados de la prueba empírica. Se han identificado como
cruciales para la explicación de los patrones espaciales de informalidad y oferta de vivienda social,
las viviendas sociales construidas en periodos anteriores y el porcentaje de viviendas ocupadas por
familias no pobres. Asimismo, se probó la existencia de un proceso espacial - modelado a través de
relaciones que suponen auto correlación por adyacencia - en ambas variables.
Resumen
Las discusiones sobre cambio climático, escasez del agua, pérdida acelerada de la biodiversidad se
han tornado prioritarias en el contexto internacional. Esto ha provocado que la contaminación y el uso
sostenido de recursos naturales sean temas prioritarios en la agenda de investigación. Sin embargo,
todavía persiste un modesto avance en la incorporación de estos elementos en las mediciones de
desarrollo.
Costa Rica es uno de los países líder en conservación, al proteger poco más de un cuarto de su
territorio. No obstante, también presenta importantes niveles de contaminación y deterioro de varios
recursos naturales.
El presente trabajo diseña y cuantifica indicadores de desempeño o desarrollo ambiental para los
hogares (IDA). Se elaboran cuatro indicadores compuestos: a) consumo de energía; b) uso del recurso
hídrico; c) manejo de desechos sólidos y d) nivel de educación de los habitantes. Cada uno de estos
indicadores está conformado por un subconjunto de variables. Los cuatro indicadores a su vez se
integran en el indicador de prácticas o desarrollo ambiental de los hogares (IDA), el cual a partir de la
información censal se calculó a nivel de distrito y cantón. En este capítulo se presentan los resultados
a nivel cantonal para el país en general y se ejemplifican diversos aspectos para tres cantones en
particular: Heredia, Guanacaste y Limón.
Al contrastar los resultados del IDA con el Indicador de Desarrollo Humano (IDH) se encuentran
importantes diferencias respecto a cuáles zonas aparecen como mayor desarrolladas a la luz del IDH;
pero que a la vez muestran niveles de desempeño ambiental modestos respecto al IDA.
Finalmente, se propone una reformulación o complementación del IDH con objeto de que se incorpore
en la medición del desarrollo humano el desempeño ambiental resultante de prácticas de consumo.
Los resultados encontrados para diversos cantones de Costa Rica evidencian que la sostenibilidad
en los hogares está altamente influenciada por estilos de consumo y que altos IDH pueden asociarse
con bajos IDA.
Agradecemos al personal del INEC que colaboró en la obtención de los datos requeridos para el desarrollo de este trabajo,
en especial al Lic. Randall Chavarría Aguilar, Área de Censos de Población y Vivienda, Marlene Sandoval Hernández, Área
de Servicios de Información y Divulgación Estadística, así como al Lic. Fabio Herrera de Estadísticas Ambientales del INEC
quien realizó valiosos comentarios y sugerencias.
431
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
I. Introducción
A pesar de los altos índices de deforestación que Costa Rica experimentó durante los años anteriores
a la década de los 70 y el uso excesivo de agroquímicos en ciertos cultivos, actualmente la comunidad
internacional le concede un reconocimiento por sus esfuerzos en la conservación de sus recursos
naturales. Costa Rica tiene bajo diferentes regímenes de conservación aproximadamente 25% de su
territorio terrestre, lo que le ha permitido estructurar un sistema de áreas de conservación ampliamente
reconocido. Susáreas protegidas son el principal factor productivo que sustenta y atrae una visitación
turística de poco más de 1.5 millones de visitantes al país cada año.
Costa Rica, impregnado por el espíritu de la Cumbre de Río (1992), durante la década de los
noventa,movilizó la legislación ambiental y promulgó un conglomerado de leyes, como la Ley
de Biodiversidad, la Ley Forestal y otras regulaciones que le permitieron ser vanguardista en el
establecimiento de políticas de conservación de los recursos naturales. Nace así el esquema de Pagos
por Servicios Ambientales (PSA), como una forma de reconocer -al menos parcialmente- los beneficios
sociales (externalidades positivas) generados por el sector forestal y el bosque primario. Actualmente,
existeuna cantidad importantes de personas físicas y jurídicas que reciben PSA en este país. Todo
parece indicar que ha transcurrido suficiente tiempo para determinar el impacto real de estas políticas
públicas.
Más recientemente, Costa Rica se ha embarcado en políticas energéticas que tienen como objetivo
alcanzar la meta de neutralidad neta de emisiones de carbono para el 2021 (año en que se celebra el
bicentenario de la creación de la República). Evidentemente, esta es una política que ondea una meta
muy ambiciosa que le ha ganado a Costa Rica, independiente de su factibilidad técnica y económica,
reconocimiento como país creativo en la búsqueda de políticas ambientales.
Como resultado de las políticas ambientales y las de carácter social, tales como la laboral; la educación
primaria y secundaria gratuita, así como universal; el acceso universal a su sistema de salud y otros,
actualmente este país es considerado como de ingreso medio. Las importantes tasas de crecimiento
de su inversión extranjera directa en los sectoresde tecnologías de información y comunicación,
farmacéutico, así como en el sector de servicios y otros proveen empleo a una población con niveles
de educación relativamente altos.
Sin embargo, a pesar de esos esfuerzos y logros en el manejo de algunos recursos naturales y nivel
de ingreso, el país continúa experimentando serios problemas en el campo ambiental. En particular,
Costa Rica experimenta serias deficiencias en el manejo de desechos sólidos y desechoslíquidos.
En el Gran Área Metropolitana (GAM) los botaderos o receptores de basura sólida han sido utilizados
más allá de su vida útil. En no pocas zonas rurales y alejadas de la GAM, o zonas predominantemente
rurales, los hogares descarganlos desechos sólidos en áreas que no son designadas como receptoras
de estos, con relevantes consecuencias negativas como contaminación de suelos, diversos impactos
sobre la vida silvestre, etc.
En lo que se refiere al tratamiento de aguas grises y negras, el país prácticamente sufre de una
deficiencia total, ya que la gran mayoría de los hogares en Costa Rica no están conectados a sistemas
de tratamiento de desechos líquidos. En la GAM, cuando los hogares cuentan con conexión a sistema
de alcantarillado, este no conduce las aguas negras a una laguna o sistema de tratamiento; sino que
432
Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela Costa Rica a la Luz del Censo 2011
las envía a ríos u otros cuerpos de agua, con las consecuencias negativas para el ambiente, la vida
silvestre e inclusive en la calidad de vida de aquellos habitantes que tienen que soportar malos olores
y otras externalidades negativas asociadas.
La “huella ecológica” es una de las medidasutilizadas para ejemplificar el deterioro delos recursos
naturales y de las deficiencias ambientales que deben superar la sociedad costarricense en materia
de desarrollo sostenible. En este caso “la medición (…) arrojó un balance negativo: en 2010 cada
habitante requirió un 13,4% más del territorio disponible para satisfacer su patrón de uso de los
recursos naturales. Se trata de la mayor brecha registrada desde que este indicador fue incorporado a
este Informe (2002)”(Programa Estado de la Nación. 2011). Dicho informe señala esa situación como
una de “patrones insostenibles de uso energético” (op cit.).
El impacto negativo de la falta de manejo sostenible de los desechos sólidos y líquidos, así como la
falta de políticas claras dirigidas hacia los hogares, tales como el reciclaje, le impone al país un costo
ambiental. Este costo no se refleja claramente en las estadísticas utilizadas a nivel de instituciones
internacionales o en los panfletos que promueven a Costa Rica como un ejemplo a nivel mundial de
sostenibilidad ambiental y paradisiaco destino turístico.
Este capítulo espera contribuir en la promoción de un diálogo más crítico sobre el anterior aspecto,
así como en la búsqueda de una fotografía más exacta de los logros y desafíos del país en materia
ambiental. Particularmente, focaliza sobre la in-completitud así como el diseño económico subyacente
de la medida del IDH, la cual no incluye un indicador de desempeño ambiental.
En las puertas de la segunda década del tercer milenio, en uno de los países aparentemente
vanguardistas ambientalmente hablando, las medidas de bienestar no pueden dejar de incorporar una
dimensión ambiental.
El principal argumento a favor del Índice de Desarrollo Humano (IDH) es que permite incluir una
mayor dimensión de factores en su determinación. La medición del desarrollo humano, como una
medida multidimensional propuesta por Mahbub, desde su aparición en el Reporte de Desarrollo
Humano del Programa de Naciones Unidas (PNUD, 1990), y que se consolidó con el aporte de Sen,
destronó al ingreso percápita como medida de desarrollo económico.
Hoy se acepta con relativa facilidad la conveniencia de disponer de un indicador más comprensivo de
bienestar humano y no solo de la dimensión económica. A pesar de esto, el IDH ha recibido críticas, tales
como la ausencia de la dimensión ambiental, también ha sido catalogado de redundante y de mostrar
alta correlación con el PIB percápita, así como porpresentar relevantes deficiencias metodológicas
a lo largo del tiempo asociadas a su medición, tales como variaciones en su forma de medición, la
subjetividad en la definición y uso de umbrales y agrupaciones, entre otros (Wolff et al. 2011).
deficiencias
metodológicas
a
lo
largo
del
tiempo
asociadas
a
su
medición,
tales
como
variaciones
en
su
forma
de
medición,
la
subjetividad
en
la
definición
y
uso
de
umbrales
y
agrupaciones,
entre
433
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
otros
(Wolff
et
al.
2011).
El
IDH
en
su
primera
aparición
se
presentó
en
su
forma
aditiva
(UNDP,
1990),
fue
masivamente
divulgado
y,
posteriormente,
revisado
por
Anand
y
Sen
(1997).
La
forma
genérica
postulada
por
El IDH en su primera aparición se presentó en su forma aditiva (UNDP, 1990), fue masivamente
divulgado y, posteriormente,
estos
autores
está
dada
por:
revisado por Anand y Sen (1997). La forma genérica postulada por estos
autores está dada por:
!
!! !!! + !! !!! + !! !!! !
! ! = (1)
!! + !! + !!
En esa ecuación los
son
ponderadores,
los
cuales
en
general
han
sido
supuestos
iguales
a
1
en
En
esa
ecuación
los
w wi son ponderadores, los cuales en general han sido supuestos iguales a 1 en
i
los diversos estimados de IDH. El resultado no es un promedio simple, como puede observarse, la
los
diversos
estimados
de
IDH.
El
resultado
no
es
un
promedio
simple,
como
puede
observarse,
la
ecuación simplificada citada por los autores como H.
ecuación
simplificada
citada
por
los
autores
como
H.
!
1 1 ! ! + 1 ! ! ! (2)
!
!= 3 ! + 3 3
5
Eligiendo
uun
Eligiendo n
vvalor
alor
de
de alpha
alpha mayor
mayor a
uno
a uno (Anand
(Anand y
Sen,
y 1Sen,
997).
1997).
Sin embargo, diferentes estimaciones suponen que se trata de un promedio aritmético, por lo que le
Sin
embargo,
asignan a alphaun diferentes
valor igualestimaciones
a uno. Esa suponen
que
se
tfue
simplificación rata
utilizada
de
un
promedio
ampliamentearitmético,
hastapel or
2011
lo
que
en diversos
reportes de IDH del PNUD. Sin embargo, adoptar esa especificación conlleva significados
le
asignan
a
alphaun
valor
igual
a
uno.
Esa
simplificación
fueutilizada
ampliamente
hasta
el
2011
económicos
y sociales, relevantes de discutir al momento de presentar los resultados. Esas implicaciones han sido
en
diversos
objeto de discusión reportes
de
IDH
aunque
y análisis, del
PNUD.
pocoSin
embargo,
referidos en el adoptar
contexto esa
nacional,
especificación
conlleva
cuando se
en particular
han presentadolos
significados
resultados
económicos
del IDH
y
sociales,
a nivel cantonal
relevantes
de
discutir
por interés
al
m omento
dede
lapOficina
resentar
del
los
PNUD en Costa Rica.
resultados.
Esas
implicaciones
Cuando el IDH se han
sido
objeto
utiliza como de
media discusión
y
análisis,
aritmética, seaunque
suponepoco
referidos
en
el
que
implícitamente contexto
las diferentes
dimensiones (en este caso, salud, educación y nivel de ingreso o capacidades como las denominó
nacional,
en
particular
cuando
se
han
presentadolos
resultados
del
IDH
a
nivel
cantonal
por
interés
Sen) tienen la misma relevancia (exponente y ponderador) o la misma prioridad como metas a nivel
de
la
No
social. Oficina
debería del
PNUD
haber en
duda
Costa
de
Rica.
que
el l nivel de ingreso condiciona las oportunidades y el acceso a
niveles de salud y de educación.
Cuando
el
IDH
se
utiliza
como
media
aritmética,
se
supone
implícitamente
que
las
diferentes
También, mayores niveles de acceso a educación permiten un mayor nivel de ingreso y una mayor
dimensiones
(en
este
caso,
salud,
educación
y
nivel
de
ingreso
o
capacidades
como
las
denominó
conciencia por un estilo de vida saludable. Pero, ¿cómo evalúa una sociedad estas dimensiones?
Sen)
tienen
la
misma
relevancia
(exponente
y
ponderador)
o
la
misma
prioridad
como
metas
a
¿Cuáles capacidades son más relevantes o prioritarias para la sociedad y por cuáles razones? Debe
sernivel
social.
No
debería
haber
duda
de
que
el
l
nivel
de
ingreso
condiciona
las
oportunidades
y
el
el IDH una medición de lo que la sociedad idealmente debería ponderar, por ejemplo, alguien
podría desear que la sociedad pondere esas dimensiones iguales. Sin embargo, la teoría económica
acceso
a
niveles
de
salud
y
de
educación.
demuestra que no necesariamente eso es así.
También,
mayores
niveles
de
acceso
a
educación
permiten
un
mayor
nivel
de
ingreso
y
una
mayor
Desde el punto de vista de la teoría económica, al cuantificar el IDH a través de un sencillo promedio
conciencia
por
un
estilo
de
vida
saludable.
Pero,
¿cómo
evalúa
una
sociedad
estas
dimensiones?
aritmético, implica que se está suponiendo la existencia de una sociedad con preferencias lineales
en¿Cuáles
esas tres dimensiones.
capacidades
Además,
son
más
relevantes
priorizan (gustan)
o
prioritarias
de
para
la
manera
sociedad
y
pidéntica
or
cuáles
entre estos
razones?
factores del
Debe
bienestar humano. Esas preferencias implicarían lo que en economía se denomina Solución de Esquina.
Esser
el
IDH
una
medición
de
lo
que
la
sociedad
idealmente
debería
ponderar,
por
ejemplo,
alguien
decir, implicaría una especialización en dedicar todos los recursos a una sola de esas dimensiones,
enpodría
vista de que son
desear
sustitutos
que
perfectos.
la
sociedad
pondere
Esto implica,
esas
en este iguales.
dimensiones
caso, una Sin
elasticidad
embargo,
de la
sustitución
teoría
igual
a 1/(alpha-1), la cual tiende a infinito (Anand y Sen, op cit.). La evidencia empírica no respalda este
económica
demuestra
que
no
necesariamente
eso
es
así.
supuesto.
Desde
el
punto
de
vista
de
la
teoría
económica,
al
cuantificar
el
IDH
a
través
de
un
sencillo
promedio
aritmético,
implica
que
se
está
suponiendo
la
existencia
de
una
sociedad
con
preferencias
lineales
en
esas
tres
dimensiones.
Además,
priorizan
(gustan)
de
manera
idéntica
434
La
observación
Vivienda y Ambiente apunta
Adamson,
a
que
las
sociedades
Castillo & Varela valoran
y
ponderan
de
Costa
forma
Rica
diferente
a la Luzesas
del Censo 2011
dimensiones,
y
que
lo
mismo
hacen
los
individuos.
Por
ejemplo,
Costa
Rica
cuenta
con
importantes
niveles
de
alfabetización
(96.1%)
(CINDE,
2012,
p.
1)
y
de
salud
(la
esperanza
de
vida
al
nacer
es
de
81,45
años
para
las
mujeres
y
de
76,51
años
para
los
hombres)
(INEC.
2012,
p.
3).
La observación apunta a que las sociedades valoran y ponderan de forma diferente esas dimensiones,
y que lo mismo hacen los individuos. Por ejemplo, Costa Rica cuenta con importantes niveles de
Pero
ha
mantenido
los
niveles
de
pobreza
relativamente
estables
(cerca
del
20%)
por
alfabetización (96.1%) (CINDE, 2012, p. 1) y de salud (la esperanza de vida al nacer es de 81,45 años
prácticamente
para las mujeresun
y cde
uarto
de
saños
76,51 iglo.
para los hombres) (INEC. 2012, p. 3). Pero ha mantenido los niveles
de pobreza relativamente estables (cerca del 20%) por prácticamente un cuarto de siglo.
Posterior
al
2010,
para
realizar
las
mediciones
del
IDH
se
utilizó
un
enfoque
multiplicativo,
de
la
Posterior
forma:
al 2010, para realizar las mediciones del IDH se utilizó un enfoque multiplicativo, de la forma:
!
! 1
!! = !! !! ! !! = ! = 1 (3)
! !
!!!
Esta
formulación
Esta formulaciónimplica
implica una
una sustitución
sustitución perfecta
entre
entre
perfecta niveles
nivelesconstantes
de
capacidades
constantes de capacidades (iso-‐ (iso-
capacidades). En este caso, las preferencias por capacidades presentan un nivel
capacidades).
En
este
caso,
las
preferencias
por
capacidades
presentan
un
nivel
de
sustituibilidad
de sustituibilidad
intermedio, entre el unitario correspondiente al IDH medido como un promedio simple, y el caso en que
nointermedio,
entre
el
unitario
correspondiente
al
IDH
medido
como
un
promedio
simple,
y
el
caso
existe sustituibilidad entre las capacidades (del tipo Leontief, es decir, I = min (P1, P2, P3)). Algún
grado de sustitución en capacidades tiene sentido económico, aunque también debe reconocerse que
en
que
no
existe
sustituibilidad
entre
las
capacidades
(del
tipo
Leontief,
es
decir,
I
=
min
(P1,
P2,
se requiere algún nivel mínimo de cada uno de ellos (Klugman, Rodríguez y Choi, 2010).
P3)).
Algún
grado
de
sustitución
en
capacidades
tiene
sentido
económico,
aunque
también
debe
Este trabajo presenta un indicador de desarrollo humano cantonal que incorpora la dimensión
reconocerse
que
se
requiere
algún
nivel
mínimo
de
cada
uno
de
ellos
(Klugman,
Rodríguez
y
Choi,
ambiental (IDA), y un análisis fundado en la estructura y marco conceptual de Anand y Sen. Este
2010).
aporte
contrasta, con otros enfoques, cuyo objetivo final es la búsqueda de correlaciones entre un sin
número de variables reflejadasen mapas o diversas ordenamientos que pretendenofrecer medidas de
Este
trabajo
presenta
un
indicador
de
desarrollo
humano
cantonal
que
incorpora
la
dimensión
bienestar o del desarrollo (cantonal, etc.), los cuales; sin embargo, no necesariamente disponen de un
marco teórico, ni un significado económico que los respalde.
ambiental
(IDA),
y
un
análisis
fundado
en
la
estructura
y
marco
conceptual
de
Anand
y
Sen.
Este
aporte
contrasta,
con
otros
enfoques,
cuyo
objetivo
final
es
la
búsqueda
de
correlaciones
entre
Además, este capítulo también muestra lo subjetivo que pueden resultar las diversas medidas
(especificación
un
sinnúmero
de de
la función)
variables
de IDH que
reflejadasen
se seleccione
mapas
o
diversas
yordenamientosque
lo sensible que este indicador puede ser a
pretendenofrecer
esas funciones, generando incluso importantes movimientos en el ordenamiento o ranking de los más
medidas
o menos de
bienestar
o
en
desarrollados, del
este
desarrollo
caso (de cantonal,
los cantones etc.),
los
ucotro
uales;
sin
egeográfico.
nivel mbargo,
no
necesariamente
disponen
de
un
marco
teórico,
ni
un
significadoeconómico
que
losrespalde.
Para los diseñadores de política es útil y necesario disponer de un estadístico relativo al nivel de
Además,
no
desarrollo
este
solo capítulo
también
sino
económico; muestra
que lo
subjetivo
la
incorpore que
pueden
resultar
dimensión las
diversas
de la calidad de medidas
vida humana. Sin
embargo, a la capacidad de ofrecer una respuesta a esa necesidad; le antecede
(especificación
de
la
función)
de
IDH
que
se
seleccione
y
lo
sensible
que
este
indicador
puede
ser
la comprensión del
sustento económico y social bajo, el cual se elabora, sus propiedades, limitaciones, y lo que está
aesas
funciones,
reflejando, en estegenerando
caso sobre incluso
importantes
movimientos
el comportamiento del bienestar en
el
que
ordenamiento
pretende o
cuantificar
ranking
de
a nivel de
sociedad,
los
más
o
como
menos
se señaló en elan
esección
desarrollados,
ste
caso
anterior. De otra
de
los
cantones
u
omanera,
tro
nivel
gla medición
eográfico.
no deja de ser más
que un conjunto de números sin significado, ordenados y que se suponen ciertos. Debe admitirse y
Para
los
diseñadores
de
política
es
útil
y
necesario
disponer
de
un
estadístico
relativo
al
nivel
de
aceptarse la subjetividad de la selección de una medida respecto a otra, en todo caso solo refleja en
el desarrollo
no
solo
económico;
sino
que
incorpore
la
dimensión
de
la
calidad
de
vida
humana.
Sin
fondo las prioridades sociales, las cuales son, en la práctica, subjetivas. Sin embargo, es menester
al menos exigir consistencia teórica.
embargo,
a
la
capacidad
de
ofrecer
una
respuesta
a
esa
necesidad;
le
antecede
la
comprensión
del
7
435
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
III. Metodología de construcción del Índice de Desarrollo Ambiental para los hogares
(IDA)
En este caso, se diseñó y estimó el IDA utilizando el l método y enfoque de Adamson e Iglesias
(2008) de indicadores simples y compuestos. El IDA está compuesto por cinco índices con base en la
información censal proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), los cuales
cubren cuatro grandes dimensiones, a saber:
• El manejo del recurso hídrico: incluye un índice de tecnología de manejo del agua en el hogar
(ICTA) y un índice de manejo de aguas residuales en el hogar (IMAR);
• El consumo de energía;
• Un índice del manejo de desechos sólidos (IMDS) del hogar y;
• Un índice del Ingreso, el cual utiliza como proxy el nivel de educación.
Índice de Tecnología de Manejo del Agua del hogar: el cual incorpora los siguientes índices
compuestos (las variables que incluyen cada uno de estos se indican en paréntesis).
• Índice de procedencia del agua (de acueducto; pozo o río, u otra procedencia).
• Índice de tenencia de sistema de agua caliente.
• Índice de tenencia de tanque de almacenamiento de agua caliente.
• Índice de tenencia de tubería internaen la vivienda.
• Índice de manejo de aguas residuales (alcantarillado sanitario; tanque séptico; sanitario de pozo,
directo a acequia, río, zanja o estero; hueco, pozo negro o letrina, no tiene servicio sanitario).
De esta manera, en el presente trabajo se brinda especial atención al manejo del agua en los
hogares, “en el tema de consumo de agua se percibe una escasa cultura de ahorro, y se ha señalado
la necesidad de incentivar entre la población el uso de tecnologías más eficientes, estrategia que ha
resultado exitosa en otros países; en algunas ciudades de México, por ejemplo, se redujo el consumo
en cerca de un 40%.” (Programa Estado de la Nación. 2011, p. 180).
Índice compuesto de demanda de energía, el cual incorpora los siguientes índices (las variables
que incluyen cada uno de estos se indican en paréntesis):
• Índice de cantidad demandada de energía (porcentaje de casas con dos dormitorios o menos;
porcentaje de viviendas con cuatro o menos ocupantes).
• Índice de combustible para cocinar (porcentaje de viviendas que utilizan electricidad para
cocinar).
• Índice de uso de automóviles (porcentaje de personas con carro disponible en su vivienda).
• Índice de uso de motocicleta (porcentaje de personas con moto disponible en su vivienda).
436
Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Diagrama 1. Dimensiones
Consumo de
Manejo del agua
energía
IDA
Índice compuesto de manejo de desechos sólidos, es un índice que incorpora a su vez dos índices
compuestos:
• Índice de separación de desechos (porcentaje de viviendas que separan plástico, vidrio y aluminio;
porcentaje de viviendas que separan restos de comida)
• Índice de eliminación de desechos sólidos (porcentaje de viviendas que eliminan sus desechos
sólidos por medio de un camión recolector).
Índice denivel de ingreso (usa como proxy nivel de población con al menos un año de educación
universitaria)
En primera instancia, se muestran los resultados del IDA (aditivo) con objeto de contrastarlo con la
medición de IDH aditiva cantonal ya existente en Costa Rica. Sin embargo, es relevante indicar que por
tratarse de los datos censales, el IDA no es una simple estimación, como se puede hacer a partir de
una encuesta, como la de hogares u otras. El IDA refleja la condición en cada una de esas dimensiones
de la población a nivel cantonal al momento de censo. Es decir, es la fotografía no una aproximación
a esa imagen que se pretende medir. Esto es sustantivo, en el tanto, el IDA muestra el desempeño
ambiental en esas dimensiones (energético, desechos sólidos, recurso hídrico, educativo como proxy
de ingreso) de los hogares a nivel cantonal. Por tanto, el IDA ofrece un ordenamiento que conviene
revisar y considerar para la toma de decisiones a nivel de la calidad y las políticas ambientales, tanto a
nivel nacional como municipal.
437
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
Los resultados del IDA (aditivo) a nivel cantonal para Costa Rica se presentan en el mapa 1.
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo
Fuente:
2011Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo 2011 (INEC, 2012).
(INEC, 2012).
Los resultados indican que los cantones con mayores niveles de desarrollo ambiental se encuentran
hacia el centro del país. Por otro lado, los de menor nivel, se presentan en zonas fronterizas, y costas.
Lo anterior sugiere que los cantones metropolitanos disponen de mayor infraestructura que, de
estar operando apropiadamente, les permitiría a estos hogares lograr mayores niveles de desarrollo
ambiental que los cantones costeros. Sin embargo, lo anterior no es una norma y la disponibilidad
de infraestructura requerida amerita una consideración relativa para la disposición apropiada de
residuos por parte de los hogares. Hasta este punto, no se muestra una diferencia marcada entre el IDA
(aditivo) que se propone y el IDH aditivo. Sin embargo, se encontrarondiferencias relevantes, y para
esto se presentarán a manera de ejemplo, resultados cantonales para la provincia de Heredia, Limón y
Guanacaste, con objeto de comparar tanto el IDH como e IDA (aditivo).
438
Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Mapa 2. Resultados
Mapa 2. Resultados de IDA/IDHdepor
IDA/IDH porProvincia
Cantón. Cantón. Provincia de Heredia
de Heredia
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo
2011 Elaborado
Fuente: (INEC, 2012).
por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo 2011 (INEC, 2012).
En el caso de la provincia de Heredia y para ciertos cantones, las diferencias entre el IDA (aditivo) y
el IDH tradicional son relevantes: por ejemplo, el cantón de Belén, muestra un IDA de 74% pero un IDH
de un 91%, mientras que el cantón de Santo Domingo muestra un IDA de 76% pero un IDH de 94%. En
general, y para el caso particular del IDH, los cantones de Heredia muestran IDH con niveles de hasta
94% (Santo Domingo), pero ningún cantón muestra un IDA por encima de 76%.
Aunque ambos índices no son substitutos perfectos entre sí, estas diferencias indican situaciones
que también están presentes en otras provincias: El IDA raramente alcanza niveles similares al IDH.
En el caso particular de Heredia, las razones de estas diferencias estriban principalmente que en el
caso del IDH (aditivo), en el caso de Belén, se encuentra que los hogares de ese cantón presentan un
relativamente bajo desempeño respecto al manejo del recurso hídrico así como también respecto a
la demanda energética. Esto explica, el porqué de los niveles relativamente bajos de los IDA en esos
cantones. Además, los IDA de Heredia son relativamente mayores a los de Guanacaste y Limón.
439
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo
2011 (INEC, 2012).
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo 2011 (INEC, 2012).
En esta provincia se ubican los cantones con los menores niveles de IDA e IDH, tales como Talamanca,
Limón y Matina. Estos bajos niveles de IDA en esos cantones se asocian con la limitada infraestructura
en la provisión de agua potable, un porcentaje muy bajo de las viviendas se abastece de agua a través
de un acueducto o posee una tubería a lo interno de la vivienda. Además, el manejo de las aguas
residuales es relativamente deficitario, como lo indica el bajo porcentaje de viviendas que las depositan
en tanque séptico. Los cantones de esta provincia también se ven afectados por el bajo nivel educativo
de sus habitantes, el porcentaje de la población con al menos un año de educación universitaria no
alcanza en ninguno de los cantones limonenses el 10%.
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo 2011 (INEC, 2012).
Fuente: Elaborado por los autores, con base en el IDA estimado a partir de información del censo
2011 (INEC, 2012).
En el caso de Guanacaste el IDA, a manera inversa del IDH, ubica a los cantones que se localizan
al interior de la provincia con mayores niveles de desempeño (Bagaces, Cañas y Tilarán), y los que se
ubican en la costa y frontera muestran el menor IDA.
El cuadro 1 presenta un breve resumen de los resultados del IDA especificado como una suma
(aditivo), como en la ecuación (2) con alpha y ponderadores iguales a uno; o como un promedio
geométrico (multiplicativo), como en la ecuación 3. Este estudio encontró que los cantones con mayores
niveles de desarrollo ambiental se encuentran hacia el centro del país. Por otro lado, los de menor nivel,
se presentan en zonas fronterizas y costas
Si se analizan el IDA (aditivo) y el IDH, se encuentran las diferencias ya explicadas. Por ejemplo, un
cantón como Escazú, ubicado por el IDH en quinto lugar, en el caso del IDA no aparece en las primeras
diez posiciones. En el IDA aparecen los cantones de Vázquez de Coronado y Alfaro Ruíz dentro de las
diez primeras posiciones. Por su parte, al comparar las últimas posiciones, el IDA no ubica a Alajuelita
en esa lista. Introduce a Nicoya, Puntarenas y la Cruz, pero no a León Cortes, Tarrazú y Pococí.
De manera interesante el IDA (multiplicativo) ubica a cantones como Escazú y Belén en las últimas
posiciones, inverso al IDH que los ubica en las primeras. De manera que en estos casos, esas primeras
441
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
posiciones en el IDH se asocian también a pobres desempeños ambientales de esos hogares. Debe
indicarse que si bien los datos soportan esas conclusiones, algunos de estos resultados que presentan
los hogares de esos cantones, se deben a factores o condicionantes exógenos, tales como a la
carencia de sistemas de acueductos o recolección de desechos sólidos. Sin embargo, en otros casos,
si se asocia a comportamientos endógenos, tales como los patrones de uso intensos de energía,
acumulaciones de agua potable, etc.
Cuadro 1
Comparativo del ordenamiento resultante del
IDH e IDA (aditivo y multiplicativo)
El cuadro 1 también evidencia lo apuntado al inicio de este capítulo. La elección de la forma funcional
y sus ponderadores son determinantes en la ubicación final, en este caso de los cantones. Por ejemplo,
al comparar el IDA en su forma aditiva con el IDA multiplicativo, se encuentra que cantones como
Curridabat, Mora y Atenas aparecen en la lista de los primeros cantones con mejor desempeño
ambiental. De igual forma, en la lista de los 10 cantones con menor desempeño ambiental aparece por
ejemplo Escazú.
442
Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela Costa Rica a la Luz del Censo 2011
El gráfico 1 muestra la correlación entre las diferentes medidas IDH e IDA (aditivo), la cual es del 60%,
así como IDH e IDA (multiplicativo) del 27%.
Grafico 1
IDA (Aditivo y multiplicativo) e IDH por cantón
1,00
0,90
0,80
0,70
0,60
0,50
0,40
0,30
0,20
0,10
0,00
Cantones ordenados alfabéticamente
V. Conclusiones y recomendaciones
El IDH no incluye una dimensión ambiental. Este trabajo ofrece una medida de desempeño ambiental
de los hogares, la cual incorpora los elementos: manejo del agua, manejo de desechos sólidos, energía
e ingreso (usando como proxy la educación). Los cantones con mayores niveles de desarrollo ambiental
por parte de sus hogares se encuentran hacia el centro del país.
Por otro lado, los de menor nivel, se presentan en zonas fronterizas y costas. Los resultados sugieren
que los cantones metropolitanos tienen acceso a un mayor nivel de infraestructura que potencialmente
debería permitir a estos hogares, evidencien de patrones de consumo sostenible mayores que los
cantones costeros. Sin embargo, es relevante considerar que si esas dotaciones de infraestructura
no operan sosteniblemente, anularán la inversión de hogar, por ejemplo en la disposición de aguas
residuales, y al final el comportamiento de este - a pesar de buscar sostenibilidad- es limitado en su
efecto por un déficit en la infraestructura pública coadyuvante en la prestación del servicio y de su
manejo.
Por ejemplo, la carencia de plantas de tratamiento de las aguas residuales de los hogares en áreas
metropolitanas. Nótese que en este caso, los hogares reflejan el comportamiento deseable: disponer
sus aguas residuales orgánicas al sistema de alcantarillado, lo que implica una inversión en obra
mecánica en los hogares, además del pago mensual de una tarifa por ese servicio público.
443
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
En estos casos, también conviene preguntarse por las razones de fondo que explican la inadecuada
gestión y carencia de inversión por parte de las instituciones prestadoras del servicio para cerrar
el ciclo del consumo sostenible del servicio que prestan, lo que a la postre atenta contra la misma
continuidad en la prestación de los servicios públicos asociados, como es el caso del agua potable.
Lo anterior refleja no solo un importante rezago de parte de esas instituciones prestatarias de los
servicios; sino también de la gestión reguladora los servicios públicos. Esta gestión en teoría permite
estimar e incorporar el componente ambiental en las tarifas, así como garantizar su re-inversión en
infraestructura (plantas de tratamiento de aguas, de desechos sólidos, entre otros). Esa reinversión
permitiría la sostenibilidad final del acervo natural del que depende (acuíferos, nacientes, etc.). A su
vez, evidencia que si dicha gestión se realizara de manera más efectiva, algunos patrones de consumo
sostenible reflejados en zonas urbanas tendrían un significativo impacto en la calidad ambiental
nacional.
Por otro lado, lanza un llamado de atención sobre los consumidores de soluciones habitacionales, en
particular los de mayor poder adquisitivo o ingreso. Los resultados encontrados revelan que ese grupo
muestra preferencias de consumo intensivas en energía, agua potable. Es decir, indica una relación
inversa entre los patrones de consumo sostenibles como estilo de vida y el nivel de ingreso. Lo anterior,
evidencia que a pesar de que esos estratos poblacionales de ingresos altos, en general, podrían estar
de acuerdo con objetivos de sostenibilidad, no están dispuestos a asumirlos y reflejarlos como estilos
de consumo propios.
Esto explica el porqué zonas rurales como Talamanca y otras, a pesar de disponer de amplias
dotaciones de recursos naturales como bosques primarios, biodiversidad, calidad de aire, recurso
sonoro natural, entre otros, no aparecen en los primeros lugares del IDA.
y calidades ambientales que están disfrutando o sufriendo) los hogares nacionales. Es poco viable
gestionar eficientemente lo que no se conoce porque no se mide ni se valora.
Los resultados muestran que varios cantones que el IDH ubica en las primeras posiciones de
desarrollo humano, en el caso del IDA aparecen incluso en las últimas posiciones, fundamentalmente,
debido a que ese aparente “desarrollo” humano está asociado a prácticas poco sostenibles en términos
ambientales.
Por otro lado, este trabajo demuestra que la elección funcional del indicador que se utilice influye
de manera relevante en la ubicación o posición relativa de los cantones, por lo que se recomienda al
menos estimar un par de especificaciones alternativas con objeto de lograr analizar qué tan sensibles
es el índice a la especificación.
Si bien es cierto el IDH destronó al ingreso percápita como medida, es relevante acompañar esa
medida con un indicador que contemple el nivel de desarrollo ambiental. De toda suerte, desde la
reunión de Río (1992) se aceptó que la sostenibilidad es un balance entre lo económico, lo social y lo
ambiental.
Este trabajo ofrece un indicador de desarrollo ambiental (IDA) y un análisis de lo relevante de recordar el
sustento económico e implicaciones prácticas del uso de diferentes especificaciones de las ecuaciones
utilizadas para medir desarrollo. Considerando que las capacidades no necesariamente son sustitutas
perfectas, es relevante re-estimar los IDH previos y sensibilizarlos para evaluar las posiciones relativas
respecto al IDH y el IDA.
En esta ocasión, conviene parafrasear a Don Pepe, y preguntarse ¿para qué, por qué y para quién
“desarrollo humano” sin calidad ambiental en los cantones? Más aún, es relevante reflexionar en lo
contradictorio de concebir un humano“desarrollado” sin recursos naturales.
VI. Bibliografía
Adamson, M., Iglesias, A. (2008). Guía metodológica para la construcción del SIGA. Documento
recuperado de la base de datos del International Development Research Center (IDRC): http://www.
idrc.ca/EN/Documents/manual-SIGA-spanish.pdf
Adamson, M., Masís, J. (2009). Informe Final para el Centro de Estudios Económicos y Ambientales
(CIESA)- Instituto Meteorológico Nacional (IMN)-Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones
(MINAET)- Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)-Global Environmental Facility
(GEF). Proyecto de mejoramiento de capacidades nacionales para la evaluación de la vulnerabilidad y
adaptación del sistema hídrico al cambio climático en Costa Rica.
445
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Vivienda y Ambiente Adamson, Castillo & Varela
Anand, S., Sen, A. (1997). Concepts of human development and poverty: A multidimensional
Perspective.BackgrounmdPaperfor Human DevelopmentReport. Nueva York: Programa de Naciones
Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Hendrik, Chong, Howard; Auffhammer, Maximilian. (2011). Classification, Detection and Consequences
of Data Error: Evidence from the Human Development Index. Economic Journal 121 (553).
Klugman, J., Rodríguez, F., Cho, H. (2011). The HDI 2010: New Controversies, Old Critiques. Human
Development Reports. En Research Paper 2011/01.UNDP.
Human Development Report. (1990). Oxford University Press. Published for the United Nation for
Development Program (UNDP). New York.
Programa Estado de la Nación. (2011). Capítulo 4: Armonía con la naturaleza. En: Décimo séptimo
Informe Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible. San José, Programa Estado de la Nación.
Costa Rica a la
Luz del Censo 2011
Tecnologías de
Información y
Comunicación
Olmer Núnez
Desigualdad en las oportunidades de acceso y uso
de tecnologías digitales en la población costarricense,
según el Censo 2011.
.
Jorge Campos & Juan Gabriel Alpízar
Acceso de los hogares a las tecnologías de la
información y la comunicación (TIC): Estudio comparativo
censos 2000 – 2011.
449
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
Resumen
Al aplicar los datos obtenidos del Censo de Población 2011 y la metodología propuesta por el Banco
Mundial, se construye un índice de desigualdad de oportunidades (Índice D) el cual permite valorar
cuáles de las circunstancias evaluadas presentan mayores condiciones de inequidad.
Los resultados muestran que los principales factores de desigualdad involucrados en la tenencia de
computadora e Internet se asocian a la tenencia de otros artefactos y a la ubicación geográfica de las
personas. Por otra parte, las principales desigualdades en relación con el uso de la computadora y
de la Internet se asocian a aspectos más propios de la persona como grado académico y ocupación.
Asimismo, se distingue como población de atención prioritaria para la eliminación de condiciones
adversas en el acceso y uso de estas herramientas tecnológicas a aquellas personas con grado
académico de primaria o menos, personas sin ocupación o que se dedican a labores de destreza
motora (agricultura, pesca, ocupaciones elementales, operarios, artesanos, operadores, entre otros),
además de las personas mayores de 35 años.
I. Introducción
Siguiendo los planteamientos formulados en las décadas de los 70 y 80 por autores como A. Sen, el
Banco Mundial “adopta una noción de equidad que está basada en la igualdad de oportunidades”
(Barros, Ferrerira, Molinas Vega, & Saavedra Chanduvi, 2009, pág. 48). Así mismo, toma como referencia
a Roemer (1998, como se citó en Barros et al., 2009) quien incluye el concepto de circunstancias
entendido como “factores que caen fuera del control de la persona”, los cuales inciden positiva o
negativamente en la disposición de esas oportunidades que contribuyen a la equidad.
1/ Estadístico e Investigador del Área de Investigación y Evaluación de la Fundación Omar Dengo. [email protected]
Agradecimientos: Al Comité organizador del Simposio por brindar apoyo e información de una manera oportuna. A
María Eugenia Bujanda por el importante apoyo en la producción de este informe y su revisión. A Magaly Zúñiga por sus
orientaciones conceptuales y revisiones. Al profesor Johnny Madrigal por sus orientaciones brindas en para la aplicación de
la Regresión Logística. A Marcela Ríos por su revisión y demás compañeros de la Unidad de Evaluación.
450
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Esta fuente también recomienda valorar cuatro niveles que contribuyen a la equidad en el acceso a
tecnologías digitales: (1) eliminación de condiciones adversas, (2) creación de condiciones favorables,
(3) creación de oportunidades y (4) desarrollo de capacidades en las personas para la apropiación de
las tecnologías digitales (Fundación Omar Dengo, 2006).
De acuerdo con los datos anteriores, el presente estudio pretende ofrecer insumos basados en
evidencia científica para avanzar en el primer nivel, y determinar la existencia de posibles condiciones
adversas o circunstancias (tal y como las define Roemer) que establecen inequidades en la tenencia y
uso de la computadora y de Internet por parte de la población.
En la época actual, disponer de una computadora e Internet y utilizarlas con propiedad, constituye
una ventaja para acceder a más y mejor información, a diversidad de servicios y de oportunidades, y
a herramientas que les permiten maximizar sus esfuerzos, comunicarse y divulgar información. Estas,
entre otras razones, convierten a las herramientas tecnológicas en una fuente de oportunidades de
desarrollo y crecimiento no solo de capital económico, sino también de capital cultural e intelectual. De
ahí el interés de explorar posibles condiciones de desigualdad de la población para la tenencia y uso
de estas herramientas.
Al buscar conceptos como división digital o brecha digital se encuentra una gran cantidad de
literatura que coincide con Hilbert (2011) en la cual hay variables y circunstancias que influyen en que
una persona utilice o no las tecnologías, tales como, el ingreso, el nivel educativo, el sexo, la edad, el
lugar de residencia, entre otros.
Los datos de estas variables están disponibles en la boleta censal 2011, así como también la tenencia
de Internet (pregunta 18 del Bloque II sobre las características de la vivienda), uso de la computadora
e Internet en los últimos 3 meses (pregunta 18 del Bloque IV sobre características socioeconómicas),
lo cual permite hacer la exploración del objeto de interés de este estudio (las desigualdades en la
tenencia y uso de computadora e Internet).
Como se verá en la sección metodológica, se toma como referencia la propuesta del Banco Mundial,
basada en el planteamiento de Barros, Molinas y Saveedra (2008) para la aproximación de las
desigualdades, para posteriormente valorar en cuáles circunstancias se estarían presentando mayores
condiciones de desventaja.
451
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
II. Metodología
Se toma como principal fuente de datos el X Censo de Población de Costa Rica, realizado en el año
2011 por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). Como parte de este proceso de análisis
de la información censal, el equipo organizador brindó a los investigadores una muestra aleatoria
equivalente al 10% de la población que contaba con un total de 427.972 registros.
Se tomó como unidad de análisis a todas aquellas personas que poseen 5 años o más (92,1% de la
base de datos), debido a que esta es la población expuesta al uso de estas herramientas (computadora
e Internet)2 , ya sea en sus propios hogares o café internet, lugar de trabajo, entre otros o, en caso de
estar cursando algún tipo de preparación académica, en centros educativos.
Una vez definida la población de estudio, se buscó aproximar las condiciones que esta población
posee de tenencia y uso de la computadora e Internet (variables explicadas) por medio de ciertas
variables explicativas. A partir de las orientaciones obtenidas de la literatura y la experiencia, se
definieron las siguientes variables dependientes y explicativas (ver Cuadro 1).
2/ En preescolar el Ministerio de Educación Pública define cuatro niveles: Maternal (recibe niños de 2 a 3 años), Interactivo
1 (recibe niños de 3 a 4 años), Interactivo 2 (recibe niños de 4 a 5 años) y Transición (recibe niños de 5 hasta 7 años). De
estos cuatro niveles en el sector público se atienden los niveles de Interactivo 2 y Transición; y durante el 2011 el Programa
Nacional de Informática Educativa del Ministerio de Educación Pública y la Fundación Omar Dengo benefició a un total de
43.121 estudiantes de esos niveles.
452
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 1
Costa Rica. Variables y escalamientos considerados para los modelos de
regresión logística
2011
Variables Escalamiento
Variables dependientes
Tenencia de computadora
Tenencia de Internet
0 = No y 1 = Sí
Uso de la computadora
Uso de Internet
Variables independientes o explicativas
Zona 0 = Rural y 1 = Urbano
Edad de la persona Continua
Sexo 0 = Mujer y 1 = Hombre
Estudia actualmente 0 = No y 1 = Sí
Años de escolaridad Continua
0 = Sin empleo
1 = Directores y Gerentes
2 = Profesionales científicos e intelectuales
3 = Técnicos profesionales de nivel medio
4 = Personal de apoyo administrativo
Ocupación 5 = Servicios y vendedores de comercios y mercados
6 = Agricult., agropecuarios, forestales y pesqueros
7 = Oficiales, operarios y artesanos y de otros oficios
8 = Operadores de instalaciones y ensambladores
9 = Ocupaciones elementales
10 = Estudiante
Residentes habituales Continua
Continua: se construyó un indicador que resumiera el estado de las
Estado de la vivienda paredes exteriores, techo y piso (pregunta 8 del Bloque II de la boleta
censal).
Continua: se agregaron los artefactos consultados en la pregunta 18 del
Tenencia de artefactos Bloque II de la boleta censal. Excluyendo la tenencia de computadora
(portátil y escritorio) y la tenencia de internet.
Fuente: Elaboración propia a partir de la información Censal 2011.
6
6
de la Internet en los hogares, así como también el hecho de haber utilizado estas 6
453
Costa
de la aInternet
Rica la Luz delen
herramientas.
los hogares,
Censo 2011 así como también el hecho
Tecnologías de haber
de Información utilizado estas Núñez
y Comunicación
de la Internet en los hogares, así como también el hecho de haber utilizado estas
herramientas.
de
La la Internet enpropuesta
metodología los hogares, porasíestoscomo también
autores para el el
hechocálculo de del
haber índice utilizado estas
D requiere
herramientas.
La metodología propuesta por estos autores para el cálculo del índice D requiere
herramientas.
los siguientes pasos:
La
losmetodología
Como se dijo en lapasos:
siguientes propuesta por
introducción, estosMolinas
Barros, autores para el cálculo
y Saavedra del índiceuna
(2008) proponen D requiere
metodología para
La
1. metodología
aproximar índice depropuesta
Alunconsiderar las variables
desigualdad pordeestos autores para
explicativas,
oportunidades el D),cálculo
mencionadas
(índice delanteriormente,
entendiendo índice D requiere
la oportunidad se como la
los
1. siguientes
posibilidad Al deconsiderar
disponerpasos: las variables explicativas, mencionadas anteriormente, se
los siguientes
requiere estimar pasos: un modelo de regresión logística para cada variableel hecho
de una computadora y de la Internet en los hogares, así como también
de haber
1. Al utilizado
considerar
requiere estas
estimar herramientas.
las un variables
modeloexplicativas,
de regresión mencionadas
logística para anteriormente,
cada variable se
1. Al considerar
dependiente, laslascuales variables
son lasexplicativas,
siguientes: mencionadas anteriormente, se
requiere
dependiente,
La metodología estimar
propuesta las cualesun estos
por modelo las de
sonautores regresión
siguientes: el cálculologística
del índice para cada los variable
•requiere
Tenencia estimar
de computadoraun modelo depara
(pregunta regresión logística
18 del Bloque
D requiere
II deparala boletacada siguientes
variable pasos:
censal)
dependiente, lascomputadora
cuales son las siguientes:
AlTenencia
considerarde
1.••dependiente,
Tenencia delasInternet
cuales (pregunta
variables son (pregunta
las siguientes:
explicativas,18 del
18 del Bloque
mencionadas
Bloque II de
II de la boleta
anteriormente,
la boleta censal)
censal) estimar un
se requiere
Tenencia
•• modelo
Tenencia de
decomputadora
de regresión Internet logística (pregunta
para cada
(pregunta 18 del 18Bloque
del Bloque
variable II de IIla
dependiente, de lalas
boleta boleta
cuales
censal) censal)
son las siguientes:
•• Tenencia
Uso de la de computadora
computadora (pregunta
(pregunta 18 18en del Bloque
el Bloque IV II de
de lala boleta
boleta censal)
censal)
•• Tenencia
Uso de lade Internet (pregunta
computadora (pregunta 18 del 18 18Bloque
en II de la
el Bloque IVde boleta
de censal)censal)
•• • Tenencia
Uso Tenencia de
de Internet deInternet
computadora (pregunta
(pregunta 18 en18
(preguntael del Bloque
Bloque del II de
Bloque
IV de la IIla
boleta lalaboleta
boleta boleta
censal)
censal) censal)
•• •Uso Uso de
de lala computadora
Internet (pregunta (pregunta
18 en18 18
el18 en
Bloque el Bloque
IV IV
IIdedelala de
boleta la boleta censal)
2. •Una Uso Tenencia
vezde definida
de Internet
computadorala ecuación
(pregunta
(pregunta del
de regresión,
Bloque
en elobtener
Bloque IV
para
boleta lacensal)
de cada censal)
boleta censal)
individuo de la
• •UsoUso de de la computadora
Internet (pregunta (pregunta
18 en el 18 en elIV
Bloque Bloque
de la IV de la censal)
boleta boleta censal)
2. •Una vez definida la ecuación de regresión, obtener para cada individuo de la
• Uso
población
Usodede Internet
deInternet
estudio (pregunta 1818enen el
las probabilidades
(pregunta el Bloque
Bloque IVpredicción
deIV delalaboleta
de boleta en censal)
cada una de las
censal)
2. Una vez definida
población de estudio la ecuación de regresión,de
las probabilidades obtener
predicción para cada en cadaindividuo
una de de las
la
2. Una vez definida
variables dependientes. la ecuación de regresión,
Es decir, estimar para obtener cadapara cada
persona individuo
la probabilidadde la
2. Una vez definida
población
variables de estudio
dependientes.la ecuación
las Es de regresión,
probabilidades
decir, estimarobtener
depara para cada
predicción
cada en individuo
persona cada una de dela población
la probabilidad las de
población
de que las
estudio deprobabilidades
disponga estudio y las probabilidades
utilicede la computadora
predicción endecada predicción
o unainternet,
de lasen variables
cada unadependientes.
considerando de las Es
variables
de que
decir, dependientes.
disponga
estimar para cada Es
y utilice decir,
persona estimar
la lacomputadora
probabilidad para cada
deocada
que persona
internet,
disponga la probabilidad
considerando
ylautilice las
la computadora o
variables
circunstancias dependientes.
del contexto, Es núcleo
decir, estimar
familiar,para e individuales. persona probabilidad
de internet, considerando
que disponga las circunstancias
y utilice núcleo la computadora del contexto, núcleo familiar,
o internet, considerando las e individuales.
circunstancias del contexto, familiar, e individuales.
3. de Conque estasdisponga
probabilidades y utilice estimarla computadora
el índice D cono lainternet, siguienteconsiderando
expresión: las
circunstancias
3.3.circunstancias
Con
Con estas del
estas probabilidades contexto,
probabilidades núcleo
estimar
estimar familiar,
elelíndice
!índice
e individuales.
De con
D con la siguiente
la siguiente expresión:
expresión:
del contexto, núcleo 1 familiar, individuales.
3. Con estas probabilidades estimar ! = 1elelíndice!
!! !!DD−con ! lalasiguiente expresión:
3. Con estas probabilidades estimar 2! índice con siguiente expresión:
!= ! !! !! − !
!!!
12! !
Donde: ! = 1 !!!!! !! − !
! =2! ! ! −!
Donde: 2!!!! ! !
• ! es la probabilidad promedio!!!de la población obtenida a partir de la
Donde:
Donde: es la probabilidad promedio de la población obtenida a partir de la
Donde:!•
regresión logística.
es la probabilidad
• !regresión logística. promedio de la población obtenida a partir de la
•• !!! es es
es la laprobabilidad
la probabilidad
probabilidad promedio
promedio
promedio dede lade la población
población
la población en elobtenida
obtenida dea lapartir
a partirj obtenida
grupo ade
regresión la
logística.
partir
regresión
!! es
• regresión logística.
es lalaprobabilidad
probabilidad promedio
promedio dede la población
la población en elen el grupo
grupo j obtenida
j obtenida a partirade partir
la regresión
de la regresión logística. logística.
• !de eslala probabilidad
logística.
regresión promedio de la población en el grupo j obtenida a partir
logística.
•• !!!! es eslala probabilidad
laproporción
proporción promedio de la población en el grupo en el jjgrupo
obtenida a partir
! es dede población
población queque se encuentra
se encuentra en el grupo para una j para una
circunstancia
• de !
de
la
esregresión
la proporción
la regresión
! particular
logística.de
logística.
departicular
las población
estudiadas. que se encuentra en el grupo j para una
circunstancia de las estudiadas.
! es la proporción
• !circunstancia particularde población
de las estudiadas.que se encuentra en el grupo j para una
LasLas
!! es la proporción
• circunstancias
circunstancias particulares
particulares
de población
(cuyos (cuyos que se
resultados
resultados
encuentra
se encuentran
se encuentran
en el grupo
en el en Cuadroel jCuadro
para una
4) en el 4) cual se
estudiaron circunstancia
Las circunstancias
las puntuaciones particular
particulares
obtenidas de las
(cuyosestudiadas.
resultados
D son: se encuentran en el Cuadro 4)
en el cual circunstancia
se estudiaron particular depor laselestudiadas.
las puntuaciones índice
obtenidas por el índice D son:
Las
en el circunstancias
cual se estudiaronparticulares
las (cuyos resultados
puntuaciones obtenidas sepor encuentran
el índice Den el Cuadro 4)
son:
Las circunstancias particulares (cuyos resultados se encuentran
• Provincia • Cantón • Distrito en el Cuadro 4)
en el
•elcual se estudiaron
Región las puntuaciones obtenidas por el índice D vivienda
son:
cual sedeestudiaron
• enProvincia
planificación • Zona •
las puntuaciones
• • Cantón
Tipo de
obtenidas por el•índice D son:
Distrito
• Tenencia de vivienda Fuente de electricidad • Estado de la vivienda
• Provincia
Región de planificación
• Hacinamiento • • Cantón
Zona
Artefactos Distrito
Tipo dedel
•• Tipología vivienda
hogar
• Región
• Provincia de planificación
• Parentesco • Zona
• • Cantón
Sexo • • Tipo de vivienda
DistritoEdad
• Grupos
• Provincia
• Etnia • • Cantón
Grado Académico • Distrito
• Región de planificación • Zona •• Ocupación
Tipo de vivienda
• Región de planificación • Zona • Tipo de vivienda
El resultado del índice D se expresa en términos porcentuales, donde el 0% indicaría que existe una
situación perfecta de igualdad de oportunidades en la circunstancia valorada. De esta forma, a partir
454
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
de este indicador es posible identificar en qué circunstancias estudiadas existen mayores condiciones
de desventaja en la distribución de oportunidades de tenencia y uso de la computadora y de la Internet.
El modelo de regresión logística es un método que permite “describir la relación entre una variable
respuesta (explicada o dependiente) de naturaleza dicotómica con una o más variables explicativas (o
independientes)” (Hosmer & Lemeshow, 2000). De esta forma, a partir de las variables definidas por la
literatura y que fueron mencionadas anteriormente, se trató de aproximar la respuesta en cada una de
las variables dependientes.
El análisis de regresión logística define probabilidades como regla de decisión para clasificar a la
unidad de estudio en una de las dos opciones de respuesta de la variable dependiente (por ejemplo:
tiene (1) o no (0) computadora); estas probabilidades son las utilizadas para el cálculo del índice D.
Para valorar el ajuste de las ecuaciones de regresión logística fue necesario hacer pruebas con varias
muestras aleatorias más pequeñas3 de la base de datos original. Los tamaños utilizados de estas
muestras fueron desde los 200 hasta 10.000 unidades de estudio. Los resultados de significancia y
ajuste mostraron cierta consistencia de muestra a muestra, y las variaciones presentadas se podrían
asociar a variaciones aleatorias. En términos generales, en las muestras se encontraron significativas
las variables explicativas mencionadas anteriormente.
III. Resultados
Como se dijo anteriormente, se empleó la técnica de regresión logística debido a que así lo requiere el
cálculo del índice D. Producto de esta aplicación, se observó que las variables que tienden a influenciar
con mayor peso la tenencia de computadora e Internet son el número de artefactos en el hogar
(excluyendo la computadora e Internet) y la ocupación de la persona; mientras que en la posibilidad de
utilizar dichas herramientas, los años de escolaridad y la ocupación adquieren mayor peso.
De acuerdo con los datos (ver Cuadro 2), por cada aumento de un artefacto en el hogar, la probabilidad
de disponer computadora o Internet se duplica. En relación con el uso de estas herramientas, la
tenencia de artefactos no influye tan fuertemente: por cada aumento en un artefacto, la probabilidad en
este caso aumenta en un 17% aproximadamente.
Con respecto a la ocupación, se obtiene que si una persona es gerente o director o bien realiza
labores científicas o intelectuales, se triplican las probabilidades de disponer de una computadora e
Internet, en comparación con una persona que no posee empleo. Estas probabilidades se duplican en
el caso de aquellas personas que realizan labores técnicas y profesionales de nivel medio4. En cuanto
3/ Al evaluar las pruebas de ajuste con una muestra de datos muy grande se tiende aumentar la probabilidad de cometer el
Error tipo II en las pruebas de hipótesis (aceptar la significancia de los parámetros cuando realmente no son significativos).
4/ Para ver detalles de estos grupos de ocupaciones, consultar la Clasificación de Ocupaciones de Costa Rica (COCR-2011)
del INEC
455
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
al uso, estos grupos ocupacionales tienen entre tres y hasta cinco veces más probabilidades de utilizar
la computadora o el Internet en comparación con aquellos que se encuentran desempleados.
Como parte de la variable ocupación principal, se agregó otra categoría que distinguiera a
estudiantes. Este “grupo ocupacional” tiene al menos un 93% más de probabilidad de disponer de
estas herramientas en comparación con las personas que no poseen empleo y en el caso de uso de la
computadora, su probabilidad se duplica.
En cuanto a los años de escolaridad, se obtiene que, por cada año más de escolaridad de la persona,
la probabilidad de utilizar la computadora o Internet aumenta en al menos un 24%. Es decir, una
persona que cuente con el quinto grado de primaria tiene un 24,6% más probabilidades de utilizar la
computadora que una persona que solo tenga hasta el cuarto grado.
Cuadro 2
Costa Rica. Variables y razones de ventaja (Exp(β)) según variable dependiente
2011
Tenencia Uso
Variables dependientes
Computadora Internet Computadora Internet
Por último, también es posible rescatar que la tenencia de la computadora e Internet en el hogar,
duplica las probabilidades de que las personas utilicen estas herramientas. Sin duda, contar con estos
artefactos posibilita a los miembros del hogar para usar estas herramientas. Sin embargo, lo descrito
anteriormente y lo que se muestra a continuación, demuestra que en el uso también intervienen otras
variables, especialmente aquellas relacionadas con la preparación académica.
456
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 3
Costa Rica. Viviendas y personas con tenencia y uso de la
computadora según censo 2000 y 2011 (Valores absolutos y relativos)
También se puede rescatar, a partir de la inclusión de las preguntas sobre el uso de la computadora y la
Internet5, que existe una distinción entre la tenencia y la posibilidad real de utilizar dichas herramientas.
Los datos muestran que, en términos generales, una mayor población reportó utilizar estas herramientas
a pesar de que podrían no disponer de ellas en sus hogares (ver Cuadro 3). Esto podría demostrar
que no necesariamente el hecho de que una persona disponga de estas herramientas tecnológicas en
el hogar, implica que la persona sea usuaria; o viceversa, el hecho de no disponerlas en el hogar, no
necesariamente implica que la persona no las utilice, debido a que puede recurrir a otros puntos de
acceso como los Café Internet. Esta situación demuestra, en alguna medida, que además de la tenencia
de computadora e Internet, en el uso influyen también otros factores o condiciones circunscritas a la
persona.
Hay que señalar que el alcance de las consultas del Censo de Población imposibilita diferenciar los
distintos niveles y tipos de uso de la computadora e Internet que presenta la población: la consulta
incluida pregunta por un uso genérico y global de estas herramientas, el cual puede involucrar desde
usos para fines de ocio hasta otros de naturaleza académica o profesional y niveles de experticia que
van desde los más elementales hasta los avanzados.
5/ En la boleta censal del 2011 se incluye la pregunta 18 del Bloque IV: Características Socioeconómicas que consulta a
aquella población de 5 años y más si “en los últimos 3 meses ha usado computadora (Sí y No) e Internet (Sí y No)”.
457
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
Las puntuaciones del índice D se expresan en proporciones y se interpretan como “la proporción
de oportunidades que necesitan ser reasignadas desde los grupos más aventajados a los menos
aventajados, para alcanzar la igualdad de oportunidades” (Barros, Molinas, & Saavedra, 2008, pág. 95);
y por lo tanto, un menor puntaje indica que en la circunstancia estudiada existen mayores condiciones
de equidad en la población.
Cuadro 4
Costa Rica. Oportunidades a reasignar según circunstancia y
por tenencia y uso de la computadora e Internet 2011 (Datos en
porcentajes)
Tenencia Uso
Circunstancia
Computadora Internet Computadora Internet
Ubicación Geográfica
Provincia 8,6% 11,9% 7,2% 7,8%
Cantón 11,4% 15,9% 9,5% 10,4%
Distrito 13,2% 18,5% 11,4% 12,5%
Región 11,5% 16,0% 9,5% 10,4%
Zona 11,1% 15,4% 9,8% 10,7%
Características de la persona
Parentesco 2,9% 2,6% 11,9% 11,1%
Sexo 0,2% 0,4% 0,3% 0,3%
Grupos Edad 4,3% 5,0% 13,5% 13,1%
Etnia 2,7% 3,4% 2,3% 2,4%
Grado Académico 17,0% 22,7% 20,9% 23,3%
Ocupación 13,0% 16,1% 22,6% 22,5%
1. No incluye tenencia de computadora (portátil o escritorio) ni Internet.
Fuente: Elaboración propia a partir de la información Censal 2011
Los resultados muestran algunas condiciones diferentes para la tenencia y el uso de la computadora
y del Internet (ver Cuadro 4). En términos generales, es posible observar que aquellas circunstancias
asociadas a riqueza material o condiciones estructurales de la vivienda (tenencia de artefactos y estado
de la vivienda) y ubicación geográfica (distrito y región de planificación), alcanzan más relevancia en
las oportunidades de tenencia de la computadora y del Internet. En cuanto a oportunidades en el uso
de estas herramientas, poseen más importancia circunstancias de naturaleza individual (ocupación,
grado académico y edad).
458
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 1
Costa Rica. Probabilidad de tenencia de Internet según el número
de artefactos1 en el hogar
2011
1,0
0,8
0,6
0,4
0,2
0,0
0-1 2-3 4-5 6-7 8-9
Probabilidad 0,0093 0,0656 0,2857 0,7005 0,9313
Promedio Global 0,3471 0,3471 0,3471 0,3471 0,3471
6/ No se incluyó en esta contabilización de artefactos la tenencia de computadora (ya sea portátil o de escritorio) ni la tenencia
de Internet.
459
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
Cuadro 5
Costa Rica. Distribución poblacional y probabilidad
de tenencia de Computadora e Internet según
el número de artefactos en el hogar
2011
(Datos en porcentajes)
Cuadro 6
Costa Rica. Distribución poblacional y
probabilidad de tenencia de Computadora e
Internet, según estado de la vivienda
2011
(Datos en porcentajes)
Estado de Probabilidades
Distribución
la
poblacional
vivienda Computadora Internet
La cuarta circunstancia donde se estaría presentando una mayor desigualdad es el distrito. De los
472 distritos registrados, hay 77 cuya población de 5 años y más posee probabilidades altas (iguales o
mayores de 0,6) de disponer de una computadora en sus hogares y 19 con iguales probabilidades de
disponer Internet; destacan los distritos de Sánchez en el cantón de Curridabat, San Rafael en Escazú
y la Asunción en Belén. Por otro lado, los distritos con mayor desventaja son Chirripó, Chánguena de
Buenos Aires y Telire de Talamanca7.
7/ Por aspectos de espacio no se presentan los resultados según distrito, pero la posibilidad de consultar el número de
personas que disponen de esta información según esta variable se puede obtener en el sistema de consultas del CCP
(www.ccp.ucr.ac.cr) y del INEC (www.inec.go.cr).
460
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Como se dijo anteriormente, las circunstancias que estarían presentando mayor desigualdad se
asocian con aspectos más relacionados directamente a la persona. Por ejemplo, se observa (ver
Cuadro 4) que el factor con mayor disparidad en el uso de la computadora es la ocupación principal
de la persona; según los resultados del índice D, un 22,6% de las oportunidades deben ser distribuidas
desde los grupos más aventajados para lograr condiciones de equidad. De igual forma, es también
la ocupación principal de la persona el segundo aspecto de mayor desigualdad en el uso de Internet,
al indicar que un 22,5% de las oportunidades deben distribuirse entre la población para alcanzar las
condiciones de equidad.
Según la ocupación principal (ver Cuadro 7), se obtiene que aquellas personas que realizan labores
profesionales científicas e intelectuales, o bien los directores y gerentes de empresas, tienen mayores
probabilidades de utilizar la computadora y la Internet. No obstante, estos dos grupos ocupacionales
únicamente representan aproximadamente el 6,6% de la población de 5 años o más.
Por otro lado, aquellas personas desempleadas, con ocupaciones elementales o agricultores,
forestales y pesqueros (que representan aproximadamente el 41,6% de la población) tendrían menor
probabilidad de utilizar la computadora y la Internet.
Cuadro 7
Costa Rica. Distribución poblacional y probabilidad de uso de
Computadora e Internet según ocupación principal
2011
(Datos en porcentajes)
Distribución Probabilidades
Ocupación principal
poblacional
Computadora Internet
Total 100,0% 48,8% 45,4%
Científicos e intelectuales 6,0% 96,6% 95,0%
Directores y Gerentes 0,6% 94,4% 92,2%
Apoyo administrativo 3,3% 85,2% 82,1%
Técnicos nivel medio 4,2% 83,7% 81,0%
Estudiantes 27,1% 67,2% 60,0%
Servicios y vendedores 8,5% 50,8% 48,1%
Operadores de instalaciones 3,7% 40,1% 37,8%
Oficiales, operarios y artesanos 4,9% 39,7% 37,3%
Sin empleo 30,6% 25,9% 24,2%
Ocupaciones elementales 9,1% 19,6% 18,4%
Agricul., forest. y pesq. 1,9% 16,0% 14,4%
Fuente: Elaboración propia a partir de la información Censal 2011.
La otra variable que define condiciones de inequidad lo constituye el grado académico de la persona;
según el índice D, un 20,9% de las oportunidades deben redistribuirse para lograr condiciones de
equidad en el uso de la computadora y para el uso de Internet un 23,3% de ellas. Aquellos con grados
superiores tendrían mayor probabilidad de emplear estas herramientas, y llevar un comportamiento
contrario a la distribución de la población, debido a que las mayores concentraciones se encuentran
en los grados inferiores (ver Cuadro 8 y Gráfico 2).
Los resultados muestran que a partir de secundaria las personas alcanzan probabilidades importantes
de uso de la computadora y de Internet; lo que convierte a aquellos que no poseen estudios o solo
461
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Núñez
Cuadro 8
Costa Rica. Distribución poblacional y probabilidad de
uso de Computadora e Internet según Grado académico
2011
(Datos en porcentajes)
Distribución Probabilidades
Grado académico
poblacional Computadora Internet
Gráfico 2
Costa Rica Probabilidad de uso de Internet según grado académico
2011
1,0
0,9
0,8
0,7
0,6
0,5
0,4
0,3
0,2
0,1
0,0
Educ.
Sin Bach. Pos-
I Ciclo II Ciclo III Ciclo Diversif
educ. Univer. grado
.
Probabilidad 0,2290 0,2374 0,2513 0,4841 0,6609 0,8603 0,9305
Promedio global 0,4539 0,4539 0,4539 0,4539 0,4539 0,4539 0,4539
Por último, otra circunstancia que vale la pena mencionar es la edad de la persona; ese trata de
un factor que presenta importantes condiciones de inequidad en el uso de la computadora y de la
Internet (12,1% y 13,0% de las oportunidades deben distribuirse según los grupos de edad para lograr
condiciones de equidad). Los resultados muestran (ver Cuadro 9 y Gráfico 3) que conforme aumenta
la edad, menor probabilidad tiene la persona de acceder a estas tecnologías, y son aquellas personas
mayores de 35 años las que se encuentran en condiciones de desventaja, y más aún aquellas de 50 o
más años.
Cuadro 9
Costa Rica. Distribución poblacional y
probabilidad de uso de computadora e Internet,
según grupos de edad
2011
(Datos en porcentajes)
Gráfico 3
Costa Rica Probabilidad de uso de la computadora según
grupos de edad
2011
1,0
0,8
0,6
0,4
0,2
0,0
12 a 18 a 36 a 50 a 60 a 70 a 80 y
5 a 11
17 35 49 59 69 79 más
Probabilidad 0,5433 0,6698 0,5971 0,4337 0,3394 0,1926 0,0919 0,0408
Promedio global 0,4875 0,4875 0,4875 0,4875 0,4875 0,4875 0,4875 0,4875
IV. Conclusión
El índice de desigualdad en las oportunidades (índice D) propuesto por Barros, Molinas y Saavedra
(2008) y empleado por el Banco Mundial es un buen instrumento metodológico que permite hacer
comparaciones homogéneas y valorar cuales circunstancias podrían estar presentando más
condiciones de desventaja; no obstante, se observó que el cálculo de dicho índice se ve afectado
fuertemente por la distribución poblacional, según los diversos grupos evaluados. Por ejemplo, si en un
grupo existe una importante concentración de población y este presenta bajos niveles de tenencia o
uso de la computadora en comparación con otro en donde hay una baja concentración de población,
dicha circunstancia podría mostrar condiciones de equidad debido a que en términos generales el
grupo con ventajas no posee un gran peso relativo en la distribución poblacional.
La preparación académica es una circunstancia que brinda oportunidades; como se pudo observar,
el grado académico es una circunstancia que influye tanto en la tenencia de la computadora y la Internet
como en el uso de estas herramientas. Este resultado demuestra la importancia de la preparación
académica como mecanismo de distribución de oportunidades en la población.
464
Tecnologías de Información y Comunicación Núñez Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Se distinguen algunas poblaciones de atención prioritaria. Para lograr una mayor equidad en la
oportunidad de tenencia y uso de la computadora y de la Internet es posible definir como poblaciones
de atención prioritaria las siguientes:
V. Bibliografía
Barros, R., Ferrerira, F., Molinas Vega, J. R., & Saavedra Chanduvi, J. (2009). Measuring Inequality of
Opportunities in Latin America and the Caribbean. Washington, D.C.: The World Bank.
Barros, R., Molinas, J. R., & Saavedra, J. (2008). Measuring Inequality of Opportunities for children.
Obtenido de The World Bank: www.worldbank.org/lacopportunity.
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UCR: http://ccp.ucr.ac.cr/censos/
Centro Centroaméricano de Población. (2011). Base de Datos del Censo 2011. Recuperado de CCP/
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sus contribuciones a la equidad. San José, Costa Rica: FOD.
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Hosmer, D. W., & Lemeshow, S. (2000). Applied Logistic Regression (Segunda ed.). New York: John
Wiley & Sons, INC.
Zúñiga, M., & Brenes, M. (2009). Estándares de Desempeño de estudiantes en el aprendizaje con
Tecnologías Digitales. San José, Costa Rica: FOD.
466
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Resumen
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son medios e instrumentos que se emplean
para transmisión de voz, datos, texto e imágenes en forma digital. Estos medios se asocian a ramas
como la informática, la microelectrónica y las telecomunicaciones; las cuales, no operan de forma
aislada, más bien, lo hacen de manera interactiva e interconectada.
El presente análisis gira entorno a dos ejes centrales, el primero de ellos realiza un estudio comparativo
del acceso del sector hogares a las TIC para los años 2000 y 2011; en este se aprecia una reducción
de la brecha digital en cuanto al acceso de los hogares a las TIC. El servicio de telefonía celular ha
experimentado la mayor tasa de crecimiento en el periodo, el cual a su vez, está desplazando el uso
de teléfono fijo residencial.
Otras TIC, con tasas de crecimiento significativas, son la tenencia de computador y el acceso a
televisión por cable. En las variables analizadas, las TIC de acceso libre tienen un mayor grado de
penetración en el sector que aquellas en las cuales el acceso se da mediante una contraprestación
económica por parte del usuario.
El segundo eje caracteriza la situación de acceso en el año 2011, en las variables definidas de
interés y cómo se distribuye dicho acceso según diferentes categorías. En este punto, y a diferencia
del resultado general observado para el periodo 2000 – 2011, cuando se incluyen variables tanto
geográficas como socioeconómicas, el acceso a TIC en Costa Rica se acentúa en algunos grupos
específicos en detrimento de otros.
En términos de acceso, el servicio de Internet y Televisión por Cable son los que requieren un mayor
impulso, destaca que 20% del total de cantones concentran alrededor del 58% del total de viviendas
con acceso a televisión por cable y 60% de viviendas con acceso a internet. Desde la óptica del uso, el
nivel educativo sigue siendo uno de los principales mecanismos de profundización en las oportunidades
de apropiación e inclusión de las TIC.
I. Introducción
Las tecnologías de información y comunicación (TIC) han logrado adentrarse en todos los ámbitos
del ser humano, desde su recreación y diversión hasta la investigación y educación. Esto también
permite que mucho del conocimiento presente tenga acceso universal gracias a herramientas como
la Internet. Por todo esto, se desarrolla el presente trabajo, cuyo objetivo consiste en caracterizar el
acceso de las TIC en Costa Rica y la evolución que presentan en los últimos 11 años. Con ello se puede
apreciar el acceso real de la población y dónde pueden las autoridades y tomadores de decisiones en
dicho ámbito, ayudar a mejorar los accesos a estos medios.
Al comparar los resultados del Censo 2000 con los del 2011 se observa un mayor acceso a los bienes
y servicios como televisión por suscripción, telefonía celular, computador e Internet a lo largo de todo el
país. Sin embargo, destaca que sigue siendo la zona central del país la que tiene mayores facilidades
de acceso.
La concentración de acceso a estos bienes y servicios está en el 20% de los cantones del país.
Este porcentaje de cantones concentra el 52% de los televisores, el 58% del servicio de televisión por
suscripción, el 52% del acceso a telefonía fija y celular; además del 50% de las computadoras y 60%
del servicio de Internet.
Por último, las personas con mayor estudio y puestos más altos, realizan mayores usos del celular, la
computadora y la Internet, tanto, debido a las facilidades de acceso gracias a su preparación, como
a sus recursos económicos.
Al final se observa que el acceso a Internet es uno de los principales servicios que requiere impulso
por parte del gobierno y las autoridades nacionales públicas y privadas para lograr mayor equidad en
los hogares costarricenses.
II.Metodología
Para determinar el nivel de acceso de los hogares a las TIC se debe disponer de la información sobre
los bienes y servicios que posee el hogar. Esto es posible obtenerlo del Censo Poblacional. En este
estudio se caracteriza la población costarricense para los años 2000 y 2011 por lo que se trabajan con
los Censos de estos años.
Para generar los datos de este estudio de utilizó la estadística descriptiva por medio de la cual se
caracteriza a los hogares costarricenses sobre el acceso y uso que tienen de las TIC. Además por
medio de curvas de concentración y el indicador de Theil se analiza la profundidad que tienen las TIC
en Costa Rica.
El análisis se presenta mediante curvas de concentración, las cuales se utilizan con la finalidad de
identificar el grado en que el acceso a diferentes TIC se concentra a nivel cantonal. Estas proporcionan
concentra a nivel cantonal. Estas proporcionan una medida de la desigualdad de
468 dichas variables en términos de acceso por cantón. Teóricamente, las curvas de
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
concentración describen la correspondencia entre el porcentaje acumulado de
viviendas con acceso a determinada tecnología de la información y la
unacomunicación, y el número
medida de la desigualdad acumulado
de dichas de en
variables cantones,
términos deordenándolos en forma
acceso por cantón. Teóricamente,
lasascendente
curvas de concentración describen la correspondencia entre el porcentaje
bajo el criterio de acceso en la variable bajo estudio. acumulado de viviendas
con acceso a determinada tecnología de la información y la comunicación, y el número acumulado de
cantones, ordenándolos en forma ascendente bajo el criterio
3 de acceso en la variable bajo estudio.
Por otra parte, de acuerdo con Cortés y Rubalca el indicador de Theil, surge de la
termodinámica
Por otra parte, de yacuerdo
de la teoría de lay Rubalca
con Cortés información,
3
corresponde
el indicador por
de Theil, lo tanto
surge a una
de la termodinámica y
de la teoría de la información, corresponde por lo tanto a una medida de desigualdad que muestra el
medida de desigualdad que muestra el grado de concentración de una variable X y
grado de concentración de una variable X y está definido como:
está definido como:
Donde:
x Corresponde a cada grupo excluyente en que se divide la población total.
Donde:
Como se puede observar, dicho indicador tiene la particularidad de poder descomponerse en dos
elementos: un componente de desigualdad entre grupos y un componente de desigualdad al interior
del grupo. El índice de Theil varía entre 0 (perfecta igualdad) y Ln(N) (perfecta desigualdad).
Posteriormente, se construye una serie de tiempo desde el año 2000 hasta el 2011 para generar las
comparaciones y la evolución del acceso de las TIC en Costa Rica. Asimismo, utilizar para ello las
variables de tendencia que se derivan del módulo de acceso a TIC de la Encuesta de Hogares de
Propósitos Múltiples y la Encuesta Nacional de Hogares, ambas del INEC.
Para el análisis del uso de las TIC se toma en cuenta únicamente el Censo del año 2011, debido a
que se busca caracterizar cómo es actualmente el comportamiento de las personas en el uso de estos
bienes y servicios. Los datos utilizados fueron suministrados por el Instituto Nacional de Estadísticas y
Censos (INEC).
Finalmente, algunas de las definiciones asociadas a las TIC son las siguientes
Según Monge, R. y Hewitt, J (2004): Se habla de TIC en alusión a los medios e instrumentos que se
emplean para hacer posible la transmisión de la voz, datos, textos, videos e imágenes en forma digital.
Es decir, aquellos medios digitales que permiten comunicarnos, así como acceder, crear y procesar
todo tipo de información en tiempo real, mediante la creación de redes. Ejemplos de TIC son la radio,
los teléfonos (fijos o móviles), los localizadores de personas (beepers), el fax, las computadoras, los
programas de cómputo, la televisión y la Internet.
Para Cabero las TIC4 se definen de la siguiente manera: “En líneas generales podríamos decir que las
nuevas tecnologías de la información y comunicación son las que giran en torno a tres medios básicos:
la informática, la microelectrónica y las telecomunicaciones; pero giran, no sólo de forma aislada, sino
lo que es más significativo de manera interactiva e interconexionadas, lo que permite conseguir nuevas
realidades comunicativas”. (Cabero, 1998: 198)
Con base en los elementos proporcionados por las definiciones anteriores, se seleccionan los bienes
y servicios de interés, los cuales se presentan a continuación.
III. Resultados
En estos últimos 11 años el país ha mostrado una mejora en la tenencia del televisor dentro de las
viviendas. También, en el caso de la tenencia de radio, debido al cambio en la forma de consulta en
el censo 2011, se observa cómo se incrementa el uso de este bien. . El cambio más significativo lo ha
presentado la televisión por cable o satélite; en estos últimos años el acceso de este servicio ha tenido
una gran aceptación de las familias costarricenses. En periodos anteriores, este enfocaba a un sector
de mayor ingreso; no obstante, ha logrado evolucionar, permitiendo llegar a otros sectores con menor
poder adquisitivo. Además, se puede apreciar que, mientras en el año 2000 poco más del 10% de las
viviendas poseía este servicio, actualmente cerca de 4 de cada 10 hogares ya poseen la televisión por
cable o satélite.
Gráfico 1
Costa Rica: Porcentaje de viviendas con tenencia de
televisión, radio 5 y televisión por suscripción
2000 - 2011
100%
Gráfico 1
Costa
80% Rica: Porcentaje de viviendas con tenencia de
televisión, radio y televisión por suscripción
60%
2000 - 2011
40%
100%
20%
80%
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
60%
Servicio Cable o Satélite TV Todo Tipo Radio
40%
Fuente: Elaboración propia con datos de la Encuesta de Hogares de Propósitos
20%
múltiples (2000, 2009), la Encuesta Nacional de Hogares (2010-2011) y el
Censo
0%2011 del INEC.
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
En cuanto
Gráfico 2 al servicio telefónico, el país ha experimentado en los últimos años un cambio,, el cual
presenta Servicio
una Cableprofundización
mayor o Satélite TV Todo Tipo Radio
Costa Rica: Porcentaje de viviendasen el tenencia
con uso de lade
telefonía
teléfonocelular con respecto al uso de la telefonía
residencial.
fijo y teléfonoLo celular
anterior se explica gracias a las mayores facilidades de acceso del uso de la telefonía
Fuente: Elaboración
celular y la propiade
apertura condicho
datos demercado,
la Encuestalo
decual
Hogares
hadepermitido
Propósitos que hoy en día cerca del 90% de las
2000 - 2011
múltiples (2000, 2009), la Encuesta Nacional de Hogares (2010-2011)
viviendas cuenten con este servicio. En el caso del servicio y el de telefonía fija se ha mantenido alrededor
Censo
de un 2011
100% del INEC.
acceso al 60% de los hogares.
80%
Gráfico 2
Costa
60% Rica: Porcentaje de viviendas con tenencia de teléfono
fijo40%
y teléfono celular
2000 - 2011
20%
100%
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
80%
40%
Fuente: Elaboración propia con datos de la Encuesta de Hogares de Propósitos
múltiples
20% (2000, 2009), la Encuesta Nacional de Hogares (2010-2011) y el
Censo 2011 del INEC.
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
5/ En el censo 2000 se consulta por tenencia de radio y en el 2011 por tenencia de radio o equipo de sonido, se realiza una
ruptura en la serie por dicho cambio en la forma de consulta.
471
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar
Por su parte, otro bien que ha ganado acceso dentro de las viviendas en los últimos años, es la tenencia
de la computadora y, con ella, el uso de Internet; no obstante, aún y cuando un mayor porcentaje de
viviendas ya cuentan con el computador, no todas ellas acceden a Internet. Se aprecia; sin embargo,
que mientras en el año 2000 cerca del 15% de las viviendas tenían computadoras solo el 5% (una
tercera parte) usaban el Internet, ya para el año 2011 un 45% posee el computador en la vivienda y un
35% usa Internet (más de dos terceras partes).
Gráfico 3
Costa Rica: Porcentaje de viviendas con tenencia de
computador y acceso a Internet
2000 - 2011
50%
40%
30%
20%
10%
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
B.Gráfico
Acceso4a las TIC en el año 2011
Costa Rica: Análisis del acceso a TIC´s mediante el Índice de
Theil según provincia y cantón
Según los datos del Censo 2011 se aprecia un mejor equipamiento de las viviendas en la zona urbana,
Año 2011
en todos los equipos y servicios con respecto a la rural. Tres aspectos destacan sobre el particular: en
primer
0,14
lugar, el servicio celular en la zona urbana tiene un acceso del 90%, mientras que en la zona
12,8%
rural el acceso es del 79%; en segundo lugar, la Internet y TV por suscripción en los hogares, son las
tecnologías
0,13 que presentan11,8%menores posibilidades de acceso en ambas zonas. En la zona urbana el
porcentaje de acceso a estos servicios es de 41% y 56% respectivamente, mientras que en la zona
0,12
rural estos porcentajes son de 14% y 17% respectivamente, lo que demuestra el poco acceso de estos
servicios
0,11 para la zona rural, centrándose
9,8% el acceso en la zona urbana del país.
9,5%
9,2% 9,2%
0,1 8,8%
0,09
0,08
0,07
!"!#$ %!!"!#$ &!!"!#$ '!!"!#$ (!!"!#$ )!!"!#$ *!!"!#$ +!!"!#$ ,!!"!#$
Theil
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
472
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Cuadro 1
Porcentaje de viviendas con acceso a
TICs por zona, según equipamiento
El acceso con un mejor equipamiento de las viviendas en la Gran Área Metropolitana de Costa Rica,
respecto al resto de regiones, se observa en todos los equipos y servicios analizados. Por ejemplo, el
servicio celular cuenta con un acceso del 92%, mientras que en las demás regiones no superan el
85% del acceso. Con respecto al servicio de Internet, el cual es la variable con menor profundización
en todas las regiones, destaca que mientras 46% de las viviendas de la GAM cuentan con este, en el
resto de regiones no supera en el mayor de los casos 26% de viviendas con acceso a dicho servicio.
Cuadro 2
Porcentaje de viviendas con acceso a TICs por región de planificacón, según equipamiento
Resto
Pacífico Huetar Huetar
Región GAM Región Chorotega Brunca
Central Atlántica Norte
Central
Total de viviendas 618 761 136 730 92 584 71 690 93 978 109 316 88 905
Radio 85% 81% 69% 69% 71% 68% 66%
TV 98% 96% 90% 93% 90% 90% 89%
TV Cable 59% 35% 41% 45% 26% 24% 26%
Teléfono 67% 61% 49% 52% 41% 41% 40%
Celular 92% 85% 82% 84% 82% 80% 82%
Computador 58% 43% 32% 33% 31% 26% 29%
Internet 46% 26% 21% 22% 18% 16% 18%
Fuente: Elaboración propia con datos de la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (2000 - 2009), la Encuesta
Nacional de Hogares (2010 - 2011) y el Censo 2011 del INEC.
50%
40% 473
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar
30%
20%
10%
B.1 Índice de Theil según provincia y cantón.
0%
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011
El índice de Theil es una medida de desigualdad que muestra el grado de concentración de una variable
bajo análisis. TieneComputador Todo Tipo de poder
la particularidad Internet
descomponerse en dos elementos: un componente de
desigualdad entre grupos y un componente de desigualdad al interior del grupo. Los resultados de
Fuente: Elaboración propia con datos de la Encuesta de Hogares de
la aplicación de dicha medida de desigualdad para las variables seleccionadas de acceso a las TIC,
Propósitos múltiples (2000, 2009), la Encuesta Nacional de Hogares
según provincia y cantón se muestran a continuación.
(2010-2011) y el Censo 2011 del INEC.
Gráfico 4
Costa Rica: Análisis del acceso a TIC´s mediante el Índice de
Theil según provincia y cantón
Año 2011
0,14 12,8%
0,13 11,8%
0,12
0,11 9,8%
9,5%
9,2% 9,2%
0,1 8,8%
0,09
0,08
0,07
!"!#$ %!!"!#$ &!!"!#$ '!!"!#$ (!!"!#$ )!!"!#$ *!!"!#$ +!!"!#$ ,!!"!#$
Theil
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
474
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 5
Costa Rica: Descomposición del acceso mediante el índice de
Theil según grupos de provincia y cantón
Año 2011
8,00%
6,00%
3,0%
4,00%
2,0%
1,3% 1,5%
1,0% 1,0% 0,8%
2,00%
0,00%
!"!#$ %!!"!#$ &!!"!#$ '!!"!#$ (!!"!#$ )!!"!#$ *!!"!#$ +!!"!#$ ,!!"!#$
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico
El 6 de Theil aplicado a las variables analizadas, muestra que son las TIC asociadas al acceso
indicador
Costa Rica: Concentración
a Internet y televisión con acceso
por cable, a televisión
las cuales presentany televisión
el mayor nivel de desigualdad por provincia y
por cable o satélite
cantón. Al realizar la descomposición de dichas variables, destaca en forma general que los niveles de
desigualdad están explicados principalmente por aquellos que se presentan dentro de las provincias
% de Viviendas
(desigualdad entre cantones) que aquellos que se presentan entre las provincias (desigualdad entre
con acceso
100%
provincias). Esto se explica por las diferencias que existen en el grado de profundización y uso entre
90%
cantones pertenecientes a una misma provincia.
80%
70%
Para60%
el caso de las dos variables con mayor nivel de desigualdad en el acceso, la variable Internet,
refleja50%
un mayor nivel de desigualdad entre las provincias con respecto a las otras variables, lo cual
indica40%
que es en el acceso a Internet la variable en la cual algunas provincias están teniendo un mayor
30%
nivel de
20%
profundización con respecto a otras, más allá de las diferencias entre los cantones que las
componen.
10%
0%
- 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
B.2 Concentración de acceso a%las TIC según Censo 2011.
de cantones
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 6
Costa Rica: Concentración con acceso a televisión y televisión
por cable o satélite
% de Viviendas
con acceso
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
- 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
% de cantones
TV TV Cable
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
En relación con el la telefonía fija y celular, 80% de los cantones concentran el 48% del total de
viviendas con acceso a estos dos servicios, en tanto el restante 20% de los cantones tienen el 52% del
acceso. Sin embargo, no se observa una diferencia en el nivel de concentración en uno u otro servicio,
aunque el nivel de profundidad del servicio celular es mayor respecto al residencial.
Gráfico 7
Costa Rica: Concentración de viviendas con acceso a teléfono
fijo y servicio celular
% de Viviendas
con acceso
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
- 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
% de cantones
Gráfico 8
Costa Rica: Concentración de viviendas con acceso a computador
e internet
40%
30%
476 20%
Tecnologías
10% de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
0%
- 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
% de cantones
Gráfico 8
Costa Rica: Concentración de viviendas con acceso a computador
e internet
% de Viviendas
con acceso
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
- 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
% de cantones
Internet Computador
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 9
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado celular según sexo
2011
75,00% 73%
72% 72%
70,00%
65,00%
60,00%
55,00%
50,00%
Hombre Mujer Total
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 10
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado Internet según sexo
50,00%
46%
45%
44%
45,00%
40,00%
35,00%
30,00%
25,00%
20,00%
Hombre Mujer Total
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
478
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Se aprecia una relación directa entre el grado académico de las personas y el uso del celular y de la
Internet. Esto se refleja en que a mayor nivel educativo, mayor es el uso que se tiene del celular y de la
Internet; así por ejemplo, el 56% de las personas con primaria completa utilizaron el celular, mientras
las que presentan un grado universitario lo utilizaron en 94%; en el caso del Internet el uso fue de 24%
y 87% respectivamente.
Gráfico 11
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado celular según nivel educativo
100,00%
94%
91%
90,00% 86%
80,00%
72%
70,00%
60,00% 56%
50,00%
40,00%
ria ia sitaria
aria
ima
PPrrim ndaria ivneiv itrasritiaar r TotaTl o
tal
Secu a r a
a u
r n
a u rse Unive
P P
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 12
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado internet según nivel educativo
100,00%
87%
90,00%
77%
80,00%
70,00%
57%
60,00%
50,00% 45%
40,00%
30,00% 24%
20,00%
10,00%
Prima
ria itaria Total
nivers
Parau
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Prima
ria itaria Total
nivers
Parau
479
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 12
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado internet según nivel educativo
100,00%
87%
90,00%
77%
80,00%
70,00%
57%
60,00%
50,00% 45%
40,00%
30,00% 24%
20,00%
10,00%
PPrrim sitarsiaitaria
imaarriaia ecundaria niveriv rsitar
ia Total otal
S ParP uraun er
aa Unive T
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Cuando se analiza el uso del celular y de la Internet, según grupo de ocupación, se aprecia una
relación directa entre los grupos de ocupación más calificados y el uso de estos servicios. En este
sentido, en el caso de los niveles directivos y profesionales entre 95% y 99% de dichos grupos utilizan
estas tecnologías; conforme se analizan grupos con menor calificación en las ocupaciones su uso es
menor.
480
Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar Costa Rica a la Luz del Censo 2011
Gráfico 13
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado celular según grupos de ocupación
99% 98%
100,00% 96% 96%
95,00%
88% 88%
90,00% 86%
85,00%
80,00%
75,00% 71%
70,00%
64%
65,00%
60,00%
55,00%
50,00%
tivo t. erv. s ra
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N. D o f e sion . Técn o Adm er y S a c ione lemen y pes
N. P
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Apo
y Com cup p. e Agríc
s O Ocu
Otra
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
Gráfico 14
Costa Rica: Porcentaje de personas que en los últimos tres
meses han utilizado internet según grupos de ocupación
10,00%
0,00%
irec
tivo l o nist
. rv. tale
s uera Total
iona . Técnic Admi er y Se s
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N. D ro f e s o a c i
N. P
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Otra
Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo 2011 del INEC.
481
Costa Rica a la Luz del Censo 2011 Tecnologías de Información y Comunicación Campos & Alpízar
En conclusión, el acceso a las TIC en Costa Rica se acentúa en algunos grupos específicos en
detrimento de otros, cuando se incluyen variables de análisis y se desagregan, según las diferentes
categorías a diferencia del resultado global observado para el periodo 2000 – 2011.
Además, en términos de acceso, el servicio de Internet y televisión por cable requieren un mayor
impulso, tanto de las autoridades en esta materia, como de los operadores prestatarios.
Desde la óptica del uso, el nivel educativo sigue siendo uno de los principales mecanismos de
profundización en las oportunidades de apropiación e inclusión de las TIC.
Las autoridades y encargados de política deben enfocarse en potenciar e impulsar, los nuevos
adelantos en las TIC y todos aquellos medios de acceso que hagan posibles la profundización y
penetración de estas tecnologías al sector hogares.
Asimismo, el análisis de los indicadores asociados a los TIC debe profundizarse, tanto desde la
óptica de la oferta (operadores) como de la demanda (consumidores).
Bases de datos
VI. Bibliografía
Crespo Molera E, “Guía para el análisis del impacto de las tecnología de la información y la
comunicación en el desarrollo humano”. Universidad Pontifica de Madrid, 2008.
Rosero L., editor. (2004) “Costa Rica a la luz del censo del 2000”. Centro Centroamericano de
Población Universidad de Costa Rica.
Costa Rica
a la Luz del
Censo 2011