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UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN

ENRIQUE GUZMÁN Y VALLE
Alma Máter del magisterio nacional

FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES

Ensayo:

"Influencia de la alimentación en la evolución de los homínidos"

Alumno:

Jeanmarcos Fidel Trujillo Palacios

SECCIÓN / PROMOCIÓN: A2- 2023

DOCENTE:

Luis Antonio Guzmán palomino

2023
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INDICE

RESUMEN ................................................................................................................................................... 3
INTRODUCCION ........................................................................................................................................ 5
DESARROLLO ............................................................................................................................................ 8
CONCLUSIÓN ........................................................................................................................................... 13
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RESUMEN

La alimentación juega un papel fundamental en la evolución de los homínidos a lo largo de la

historia. A medida que nuestros antepasados humanos evolucionaron, también lo hizo su forma

de obtener y procesar alimentos.

En sus etapas más tempranas, los homínidos se basaban en una dieta principalmente herbívora,

consumiendo frutas, hojas y raíces. Con el tiempo, fueron desarrollando características

anatómicas, como dientes especializados y mandíbulas más fuertes, que les permitieron expandir

su dieta incluyendo carne. Esto se debió en gran medida al descubrimiento y uso de herramientas

primitivas para la caza de animales.

Con la evolución del cerebro y el desarrollo de habilidades cognitivas más avanzadas, los

homínidos pudieron explotar una mayor variedad de recursos alimenticios. La capacidad de

recolectar y almacenar alimentos, así como la invención del fuego, también desempeñaron un

papel importante en la ampliación de la dieta humana.

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El consumo de carne y el posterior acceso a una fuente más concentrada de nutrientes influyeron

en el desarrollo de características físicas y mentales únicas en los seres humanos. Los homínidos

se volvieron más hábiles para obtener y procesar alimentos, lo que a su vez permitió un mayor

crecimiento cerebral y cambios en la estructura ósea.

En resumen, la alimentación ha sido un factor clave en la evolución de los homínidos. La

capacidad de adaptarse a diferentes fuentes de alimento, desde una dieta herbívora inicial hasta

una dieta omnívora más compleja, ha contribuido a la expansión y éxito de nuestra especie.
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INTRODUCCION

La alimentación ha sido un aspecto fundamental en la evolución de los homínidos a lo largo de

millones de años. Desde nuestros ancestros más primitivos hasta los seres humanos modernos, la

forma en que nos hemos alimentado ha influido en nuestro desarrollo físico, mental y social.

En las etapas más tempranas de nuestra evolución, los homínidos se basaban en una dieta

principalmente herbívora, consumiendo frutas, hojas y raíces. A medida que nuestras

capacidades cognitivas y tecnológicas se desarrollaban, comenzamos a ampliar nuestra dieta y a

incluir alimentos de origen animal.

El descubrimiento y uso de herramientas primitivas permitió a nuestros antepasados cazar y

procesar carne, lo que proporcionó una fuente de nutrientes más concentrada y beneficiosa para

el crecimiento y desarrollo del cerebro. Esta transición hacia una dieta omnívora tuvo un impacto

significativo en nuestra evolución física, incluyendo cambios en la estructura de los dientes y

mandíbulas para adaptarse a la masticación de carne.

Además de la caza, los homínidos también desarrollaron habilidades para recolectar alimentos

vegetales, aprovechando recursos disponibles en su entorno. A medida que nuestras capacidades

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cognitivas se expandían, aprendimos a reconocer y utilizar plantas comestibles, así como a

inventar métodos de almacenamiento y conservación de alimentos.

Con el tiempo, la invención del fuego permitió a los homínidos cocinar y procesar alimentos de

manera más eficiente. Esto no solo mejoró la digestibilidad de ciertos alimentos, sino que

también ayudó a eliminar bacterias y patógenos que podrían haber sido perjudiciales para nuestra

salud.

la alimentación ha sido un factor clave en la evolución de los homínidos. Nuestra capacidad de

adaptarnos a diferentes fuentes de alimentos y desarrollar técnicas de obtención y procesamiento

ha sido fundamental para nuestro éxito como especie. La evolución de nuestra dieta ha tenido

efectos significativos en nuestra fisiología, comportamiento y desarrollo cerebral a lo largo del

tiempo.

La dieta es una fuerza selectiva importante evolución humana. Los primeros homínidos

recibieron energía y proteínas de frutas, verduras, raíces y frutos secos.

Convertir la supervivencia de los árboles en las llanuras fue posible gracias a la aparición de

postura erguida, piel sin pelo, muchas glándulas sudoríparas, color oscuro. Este cambio ha

ampliado el alcance pueblos primitivos y abogó por la adopción de prácticas métodos de

búsqueda de alimento más eficientes, como la búsqueda de basura, la caza y antropológico.

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Los cromañones y otros humanos modernos dependían más de la caza de grandes mamíferos, lo

que aumentaba considerablemente la proporción de carne en su dieta desde el período Paleolítico

(~60.000 años), sobreexplotación de recursos, cambio climático y crecimiento económico.

La población condujo a una dieta más diversa, lo que contribuyó al establecimiento de la

estructura genética de los humanos modernos. La dieta paleolítica incluía pescado, mariscos y

animales pequeños, así como vegetales que estaban más disponibles debido al desarrollo

tecnología como piedra de moler y mortero. La composición de macronutrientes de esta dieta es

del 37% de energía, sin embargo, las proteínas, 41% de carbohidratos y 22% de grasas favorable

entre grasas poliinsaturadas y grasas saturadas y niveles bajos de colesterol. El surgimiento de la

agricultura y la ganadería y mucho más

recientemente, la revolución industrial cambió las dietas sin cambios paralelos en la

composición genética un fenómeno conocido como disonancia evolutiva. Los principales

cambios en la dieta son el aumento del consumo de energía Grasas saturadas, ácidos grasos

omega-6 y ácidos grasos.

Uno de los aspectos más destacados de la alimentación posrevolución industrial fue la

mecanización de la agricultura. Las máquinas agrícolas, como los tractores, reemplazaron el

trabajo manual en el campo, lo que permitió aumentar la producción de alimentos de manera más

eficiente. Esto condujo a una mayor disponibilidad de productos agrícolas y a una reducción en

los costos de producción, lo que a su vez influyó en la diversificación de nuestra dieta.

Otro cambio importante fue el desarrollo de técnicas de procesamiento de alimentos. Las fábricas
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comenzaron a producir alimentos envasados y procesados en masa, lo que facilitó su

conservación y distribución a larga distancia. Esto permitió que los alimentos estuvieran

disponibles durante todo el año, independientemente de la temporada de cultivo, y abrió la puerta

a una mayor variedad de opciones alimentarias.

DESARROLLO
"El fuego tuvo un impacto brutal. El fuego cambió para siempre las sociedades humanas.

Cambió la alimentación, cambió el modo de protegerse del frío, cambió el modo de comunicarse

entre los miembros del grupo, cambió la demografía... Lo cambió todo. Fue un progreso

fundamental porque permitió otros progresos que a su vez abrieron la vía a otros progresos. Fue

el punto de origen de una reacción en cadena que ha llevado hasta nosotros." (Eudald Carbonell,

codirector de Atapuerca).

A lo largo de la historia humana, la dieta ha sido un factor evolutivo significativo que ha

experimentado diversas transformaciones a lo largo de los últimos siete millones de años.

Inicialmente, en la vida arbórea, los homínidos se alimentaban principalmente de frutas. Sin

embargo, debido a los cambios climáticos que redujeron las selvas y los obligaron a adaptarse a

la vida en llanuras, su alimentación se diversificó, incluyendo también raíces y nueces. Estos

cambios en la dieta llevaron a modificaciones en la dentición y en la forma de masticar, lo cual

resultó beneficioso para esta etapa de sus vidas. Además, comenzaron a utilizar herramientas

como piedras para abrir nueces y producir filos afilados para cortar alimentos. Estas estrategias

culturales demuestran la capacidad de los homínidos para adaptarse a su entorno y obtener

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alimentos de manera más eficiente. En resumen, la evolución de la dieta ha tenido un papel

fundamental en el desarrollo y supervivencia de nuestros antepasados a lo largo de la historia.

La postura erecta facilitó la adaptación a la exposición a los rayos solares, lo que permitió a

los homínidos cubrir mayores distancias en horas en que los predadores duermen. Así, nuestros

antepasados descubrieron la carroñería y con ella, el acceso a las reservas de grasa y proteína

contenidas en la médula de los huesos largos de animales muertos. El consumo de estos

ingredientes de origen animal aumentó mediante la cacería, y a esta práctica se agregó la

antropofagia. El consumo de fuentes más amplias de energía se tradujo en un mayor desarrollo

del cerebro y en el acortamiento del tubo digestivo. Los antropólogos especulan que la aparición

de estas prácticas coincidió con la emergencia de conductas sociales, entre ellas, la cacería en

grupo y la adopción de estrategias para evadir predadores. Ellas aumentaron considerablemente

la eficiencia de obtención de alimentos de los homínidos.

La exploración de los registros fósiles ha brindado la oportunidad de obtener una visión

amplia de la historia evolutiva de los homínidos. En este sentido, existen varios eventos

destacados: a) Hace aproximadamente 4.5 millones de años, surgieron los primeros homínidos

bípedos conocidos como Australopithecus; b) Entre 1.6 y 2 millones de años atrás, aparecieron

las dos primeras especies del género Homo, Homo erectus y Homo habilis; c) Solo hace 400,000

años, surgió el primer Homo sapiens arcaico; d) El Homo sapiens neanderthalensis se manifestó

hace 80,000 años; y e) El Homo sapiens sapiens, considerado el primer ser humano realmente

moderno, emergió hace tan solo 40,000 años. Estos datos cronológicos se han enriquecido

gracias a los aportes de la biología molecular, que ha permitido analizar las migraciones

prehistóricas. Según estimaciones, la primera ola migratoria fuera de África tuvo lugar hace

alrededor de 1.7 a 1.8 millones de años.

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El estudio de los genomas completos de diferentes poblaciones humanas ha proporcionado

información detallada sobre las migraciones más recientes del hombre fuera de África. Al

analizar la diversidad del ADN, medida en términos de variación de nucleótidos en regiones

específicas llamadas haplotipos, se ha observado que esta diversidad disminuye a medida que

nos alejamos de Addis Ababa, Etiopía, siguiendo un patrón consistente con la cronología de las

migraciones humanas. Según esta cronología, el origen del humano moderno se sitúa en África

hace aproximadamente 60,000 años. A partir de ese momento, las migraciones que culminaron

en Tierra del Fuego siguieron un patrón que atravesó la península de Arabia hace 45,000 años,

Asia Central hace 20,000 años y el puente terrestre entre Siberia y Alaska hace 10,000 años. Este

último grupo pobló el continente americano. De esta forma, en un lapso de 50,000 años, el Homo

sapiens sapiens se extendió por todos los continentes, desplazando a especies de homínidos más

antiguas. Lo más interesante para los propósitos de esta revisión es que, antes del desarrollo de la

agricultura, hace aproximadamente 55,000 años, las presiones selectivas impuestas por un estilo

de vida de cazadores y recolectores actuaron sobre una estructura genética que se había

desarrollado millones de años antes y que se ha conservado hasta la actualidad con cambios

menores.

La evolución de la alimentación en los homínidos ha estado intrínsecamente ligada a su

desarrollo como especie. A medida que nuestros antepasados evolucionaron y se adaptaron a

diferentes entornos, también lo hicieron sus patrones de alimentación. Aquí se presenta un

vistazo general al desarrollo de la alimentación en la evolución de los homínidos:

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1. Hominización temprana: Durante el período en que los homínidos surgieron y se separaron de

otros primates, su dieta probablemente consistía principalmente de frutas, hojas, nueces e

insectos. La necesidad de encontrar alimentos llevó al desarrollo de habilidades para trepar

árboles y recolectar.

2. Uso de herramientas: Con el tiempo, nuestros antepasados aprendieron a utilizar herramientas

de piedra para abrir nueces, romper huesos y extraer la médula ósea. Este cambio permitió una

mayor variedad en su alimentación, ya que pudieron acceder a nutrientes adicionales.

3. Caza y consumo de carne: A medida que los homínidos evolucionaron y se convirtieron en

Homo erectus, comenzaron a cazar y consumir carne de animales. El consumo de carne

proporcionó una fuente más concentrada de energía y nutrientes, lo que contribuyó al

crecimiento y desarrollo del cerebro.

4. Cocina: Con la llegada de Homo habilis y Homo erectus, también se desarrolló el uso del

fuego. Esta innovación permitió el procesamiento y la cocción de alimentos. La cocina tuvo un

impacto significativo en la alimentación humana, ya que mejoró la digestibilidad de ciertos

alimentos y permitió la exploración de nuevas fuentes de alimento.

5. Agricultura y domesticación: En la transición al Neolítico, los humanos comenzaron a

practicar la agricultura y la domesticación de animales. Esto proporcionó una fuente constante de

alimentos, como granos, frutas domesticadas y carne de animales criados.

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6. Desarrollo culinario y cultural: Con el tiempo, la alimentación humana se volvió cada vez más

diversa y sofisticada. A través de la exploración, el comercio y la migración, las culturas

humanas adquirieron nuevos ingredientes y técnicas culinarias, lo que llevó a una amplia gama

de dietas y preparaciones regionales en todo el mundo.

Es importante tener en cuenta que estos cambios en la alimentación no ocurrieron de manera

lineal o uniforme. Hubo variaciones dependiendo de las condiciones climáticas, territoriales y

culturales de cada grupo de homínidos. Sin embargo, en general, el desarrollo de la alimentación

en la evolución de los homínidos fue impulsado por la necesidad de adaptarse y aprovechar los

recursos disponibles en su entorno.

La incorporación de carne en la dieta fue un punto de inflexión importante en la evolución

humana. Los homínidos comenzaron a cazar pequeños animales o alimentarse de carroña, lo que

proporcionaba una fuente rica en proteínas y grasas. Esta dieta basada en carne no solo

proporcionó una mayor cantidad de energía, sino que también fue crucial para el desarrollo de

nuestro cerebro.

La capacidad de obtener y procesar alimentos cocinados también ha sido un factor clave en

nuestra evolución. La cocción de alimentos permitió a los humanos obtener más calorías y

nutrientes de los alimentos al facilitar la digestión. Además, la cocción también ayudó a eliminar

sustancias tóxicas y reducir el riesgo de infecciones transmitidas por alimentos.

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CONCLUSIÓN

En conclusión, la alimentación ha sido un factor clave en la evolución de los homínidos a lo

largo de millones de años. Desde nuestros antepasados más primitivos hasta los humanos

modernos, nuestra dieta ha experimentado cambios significativos debido a diversos factores

como la disponibilidad de alimentos, la adaptación al entorno y el desarrollo de habilidades y

tecnologías para obtener y procesar alimentos.

Inicialmente, los homínidos eran principalmente herbívoros, basando su alimentación en frutas,

hojas y vegetación. Esta dieta rica en fibra proporcionaba una fuente de energía, pero también

requería una gran cantidad de tiempo y esfuerzo para masticar y digerir los alimentos. A medida

que nuestros cerebros comenzaron a crecer y necesitaron más energía, los homínidos buscaron

fuentes de alimentos más concentradas en nutrientes y calorías.

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La incorporación de carne en la dieta fue un punto de inflexión importante en la evolución

humana. Los homínidos comenzaron a cazar pequeños animales o alimentarse de carroña, lo que

les brindó una fuente rica en proteínas y grasas. Esta nueva fuente de alimento no solo

proporcionaba más energía, sino que también era esencial para el desarrollo y crecimiento de

nuestros cerebros. El consumo de carne se asoció con un aumento en el tamaño del cerebro y la

capacidad cognitiva de nuestros antepasados.

La capacidad de cocinar alimentos también fue crucial en nuestra evolución. La cocción de

alimentos permitió a los humanos acceder a una mayor cantidad de calorías y nutrientes, ya que

facilitaba la digestión y descomponía las sustancias tóxicas en los alimentos. Además, la cocción

también permitió que los alimentos se mantuvieran durante más tiempo, lo que probablemente

condujo a comunidades más sedentarias y estableció las bases para el desarrollo de la agricultura.

La adopción de la agricultura y la domesticación de plantas y animales marcó otro hito en la

historia de la alimentación humana. Con la agricultura, los humanos pudieron cultivar sus

propios alimentos y establecer comunidades más sedentarias. Esto proporcionó una fuente más

estable de alimentos, pero también llevó a cambios genéticos y adaptaciones físicas en nuestro

cuerpo para poder procesar y digerir ciertos alimentos. Un ejemplo notable es la capacidad de

digerir la lactosa en la leche de vaca, lo que resultó de la domesticación de animales y la cría de

ganado.
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REFERENCIAS

Arsuaga JL. Los aborígenes. La alimentación en la evolución humana. Barcelona: RBA Libros;

2003.

Eaton SB, Eaton III SB, Konner MJ. Paleolithic nutrition revisited: a twelve year retrospective

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LA ALIMENTACIÓN EN LA EVOLUCIÓN DEL HOMBRE. (2022, 15 agosto). Universidad de

Oriente Puebla. https://www.uo.edu.mx/vida-estudiantil/noticias/la-alimentaci%C3%B3n-en-la-

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Arroyo, P. (2008). La alimentación en la evolución del hombre: su relación con el riesgo de

enfermedades crónico degenerativas. https://www.medigraphic.com/cgi-

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