El Uso de La Ley en El Evangelismo
El Uso de La Ley en El Evangelismo
El Uso de La Ley en El Evangelismo
La ley se ha definido como “un conjunto de reglas de acción o conducta prescritas por una
autoridad controladora, y que tienen fuerza legal vinculante. Aquello que debe ser obedecido
y seguido por ciudadanos sujetos a sanciones o consecuencias legales es una ley”.
¿Por qué fue entregada la ley escrita? Ya hemos sugerido dos respuestas a
esta pregunta; convencernos del pecado y señalarnos al Señor Jesucristo como
el Salvador. Otro de los propósitos de la Ley es limitar el mal. Como dice
Calvino, una "función de la ley es... que el temor al castigo modere a ciertos
hombres que permanecen indiferentes a cualquier cuidado sobre lo que es
justo y correcto si no son coaccionados por las amenazas de la ley", y añade
que "esta rectitud coaccionada y limitada es necesaria para la comunidad
pública de los hombres, para la tranquilidad de los cuales el Señor a así
provisto cuando se preocupó de que todo no fuera tumultuosamente
confundido".
(1) Revelar el carácter sagrado del Dios eterno a la nación de Israel (Levítico
19:2; 20:7-8).
(2) Apartar a la nación de Israel para que fuera diferente de todas las demás
naciones (Éxodo 19:5).
(3) Revelar la pecaminosidad del hombre (cf. Gálatas 3:19). Aunque la ley era
buena y santa (Romanos 7:12), no proporcionaba la salvación para la nación de
Israel. "Ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado
delante de Él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado"
(Romanos 3:20; Hechos 13:38-39).
(4) Proporcionar perdón a través del sacrificio u ofrendas (Levítico 1-7) para
aquellos que tenían fe en el Señor, en la nación de Israel.
(7) Después de que Cristo viniera, hacer que las personas vieran que no podían
guardar la ley, sino que necesitaban aceptar a Cristo como Salvador personal,
porque Él había cumplido la ley en Su vida y pagó el castigo por culpa nuestra
en Su muerte, sepultura y resurrección corporal (Gálatas 3:24; Romanos 10:4).
El creyente en Cristo tiene la misma justicia de la ley cumplida en él cuando
obedece al Espíritu Santo que vive dentro de él (Romanos 8:4).
El propósito de la ley es encerrarlo todo bajo pecado para que podamos ver
que somos pecadores. (Gálatas 3:19-23) La ley es un profesor que te enseña
y te dice: Eres culpable y necesitas hacer algo al respecto (Gal. 3:24). La ley
te persigue y te condena hasta llevarte a la cruz, donde esta Cristo crucificado,
pagando en tu lugar por tus pecados y justificándote por la fe (Gal. 3:25), de
ahí en adelante solo puedes amarla y obedecerla porque ya termino su
propósito de hacerte ver que eras un pecador.
Ilustración:
Para ilustrar la función de la ley de Dios, miremos por un momento la ley civil.
Sin embargo, si te digo algo así puede que tenga más sentido: En la esquina de
la 67 Avenida y la Calle 8 hay una cámara que registra cuando tú no haces un
pare en firme ante la luz roja. Esta cámara te toma un video y te manda la
multa a la casa y te pone el video en la Internet para que puedas comprobar lo
que has hecho. Hace unos días pasaste por esa esquina y la cámara registró
que no paraste. Allí había una señal indicando que había una cámara, pero
seguiste y pasaste la calle con la luz roja. Lo que hiciste fue extremadamente
peligroso, la multa era de $150.00 dólares. Te iban a suspender la licencia
cuando alguien que ni siquiera conoces pagó la multa. Mira el video y la multa
pagada para que veas que es verdad lo que te digo. Eres muy afortunado.”
Aplicación:
Si no se da una clara instrucción de que has violado la ley (el video), la buena
noticia (la multa pagada) parece una locura y suena ofensivo. Pero una vez que
has entendido que has quebrantado la ley, la buena noticia (el evangelio) llega
a ser muy real. (Hubo un tiempo en que, sin la ley, yo tenía vida; pero cuando
vino el mandamiento, cobró vida el pecado. Romanos 7:9 DHH)
Frases célebres:
"Satanás, el dios de toda disensión, incita a diario nuevas sectas, pero hay una,
la última de todas, la cual de todas las demás nunca preví o sospeche que
viniera a existir, él ha levantado una secta para enseñar... que los hombres no
deben ser aterrorizados por la Ley, sino que con cuidado, deben ser
exhortados por la predicación de la gracia de Cristo." MARTÍN LUTERO
Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los
que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados; porque no son los
oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán
justificados. Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza
lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su
conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos, en el día en que
Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi
evangelio. (Romanos 2:12-16 RV)
Además ¿Por qué te preocupas tanto por los que nunca han oído de la ley de
Dios? Preocúpate tú que los conoces y sabes que los has violado y
arrepiéntete y conviértete hoy para que sean perdonados tus
pecados. (Hechos 3:19)