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MEMORIA Y APRENDIZAJE

5.1- MEMORIA SENSORIAL

La memoria sensorial es el primer componente de la memoria y actúa como un
"almacén" temporal para la información sensorial que recibimos de nuestro entorno
a través de los sentidos (visión, audición, tacto, olfato y gusto). Aquí hay algunos
puntos clave sobre la memoria sensorial:
Breve duración: La memoria sensorial retiene información solo durante un breve
período de tiempo, generalmente fracciones de segundo a unos pocos segundos.
Esto permite que el cerebro procese y evalúe la información sensorial antes de
decidir si se almacena o se descarta.
Gran capacidad: La memoria sensorial tiene una capacidad muy grande, lo que
significa que puede retener una gran cantidad de información sensorial en un corto
período de tiempo. Esto es útil para procesar de manera efectiva el flujo constante
de información sensorial que recibimos.
Selección de información: No toda la información sensorial se transfiere
automáticamente a la memoria a corto plazo o a largo plazo. La selección y atención
desempeñan un papel crucial en determinar qué información se conserva y qué se
descarta.
Transición a la memoria a corto plazo: La información relevante o importante de la
memoria sensorial puede ser transferida a la memoria a corto plazo si se presta
atención a ella. Si no se atiende o se procesa de manera activa, la información de
la memoria sensorial se desvanece rápidamente.
La memoria sensorial es la primera etapa en el proceso de memoria, donde la
información sensorial es temporalmente almacenada antes de ser procesada y,
posiblemente, transferida a la memoria a corto plazo o a largo plazo, dependiendo
de su relevancia y de la atención que le prestemos.
5.2- MEMORIA A CORTO PLAZO
La memoria a corto plazo (también conocida como memoria de trabajo) es una fase
intermedia en el proceso de almacenamiento de información antes de que pueda
ser transferida a la memoria a largo plazo o desechada. Aquí tienes información
importante sobre la memoria a corto plazo:
Duración limitada: La memoria a corto plazo tiene una duración limitada,
generalmente de unos pocos segundos a minutos. La información almacenada aquí
es temporal y se desvanece si no se refuerza o no se utiliza de alguna manera.
Capacidad limitada: La memoria a corto plazo tiene una capacidad limitada para
retener información. La cantidad exacta de información que puede mantenerse en
la memoria a corto plazo varía de persona a persona, pero se cree que tiene una
capacidad máxima de aproximadamente 7 ± 2 elementos, según la famosa teoría
de George A. Miller.
Procesamiento activo: La información en la memoria a corto plazo se somete a un
procesamiento activo y manipulación cognitiva. Aquí, se pueden realizar
operaciones mentales como el cálculo, la organización, la toma de decisiones y la
resolución de problemas.
Interacción con la memoria sensorial: La información relevante de la memoria
sensorial puede ser transferida a la memoria a corto plazo a través del proceso de
atención y codificación. Sin atención, la información en la memoria sensorial tiende
a desvanecerse y no se almacena en la memoria a corto plazo.
Importancia para el aprendizaje: La memoria a corto plazo juega un papel crucial en
el aprendizaje. Cuando estamos aprendiendo algo nuevo, como un concepto, una
lista de números o un fragmento de información, a menudo lo retenemos en la
memoria a corto plazo mientras trabajamos con él, lo procesamos y lo relacionamos
con conocimientos previos.
Transferencia a la memoria a largo plazo: Si la información en la memoria a corto
plazo es considerada relevante o importante, y si se refuerza a través de la
repetición o la elaboración, puede ser transferida a la memoria a largo plazo, donde
tiene el potencial de ser almacenada durante períodos más largos.
La memoria a corto plazo es una etapa temporal de procesamiento cognitivo que se
utiliza para retener información de forma activa antes de que pueda ser almacenada
de manera más permanente en la memoria a largo plazo o descartada. Juega un
papel esencial en el aprendizaje y la resolución de problemas cotidianos.
5.3- MEMORIA A LARGO PLAZO
La memoria a largo plazo es una fase fundamental del proceso de almacenamiento
de información en el cerebro humano. A diferencia de la memoria a corto plazo, la
memoria a largo plazo tiene una capacidad de almacenamiento virtualmente
ilimitada y puede retener información durante períodos muy extensos, incluso a lo
largo de toda la vida. Aquí te dejo información clave sobre la memoria a largo plazo:
Almacenamiento a largo plazo: La memoria a largo plazo es donde se almacenan
los recuerdos y conocimientos a largo plazo. Puede retener información durante
días, meses, años o incluso toda la vida.
Capacidad ilimitada: A diferencia de la memoria a corto plazo, la memoria a largo
plazo tiene una capacidad prácticamente ilimitada para almacenar información. No
se sabe de límites precisos en cuanto a cuánta información puede almacenar.
Procesamiento semántico: La información en la memoria a largo plazo tiende a ser
almacenada en función de su significado y relevancia. Se basa en un procesamiento
semántico más profundo, lo que significa que la información se relaciona con
conocimientos previos y se integra en la estructura de conocimiento existente.
Tipos de memoria a largo plazo: La memoria a largo plazo se subdivide en diferentes
tipos, que incluyen:
Memoria episódica: Almacena recuerdos de eventos y experiencias personales
específicos, como una fiesta de cumpleaños o un viaje.
Memoria semántica: Almacena conocimientos generales y conceptos, como
vocabulario, hechos históricos y reglas de matemáticas.
Memoria procedural: Almacena habilidades motoras y procedimientos, como montar
en bicicleta, tocar un instrumento musical o conducir un automóvil.
Memoria implícita: Almacena información que ha sido adquirida de manera no
consciente, como hábitos y condicionamiento.
Formación de recuerdos: La formación de recuerdos a largo plazo suele requerir
una consolidación activa, que implica la repetición, la práctica y la elaboración de la
información. La repetición espaciada y el sueño también pueden desempeñar un
papel importante en la consolidación de la memoria.
Recuperación: Para acceder a la información almacenada en la memoria a largo
plazo, se requiere un proceso de recuperación. La información puede ser
recuperada de manera consciente cuando se necesita para tareas cognitivas, como
recordar nombres, fechas o conceptos.
Olvido y degradación: Aunque la memoria a largo plazo tiene una capacidad casi
ilimitada, no es perfecta. Con el tiempo, los recuerdos pueden degradarse o
perderse debido a factores como la interferencia, la falta de uso o la enfermedad.
En resumen, la memoria a largo plazo es la fase donde se almacenan los recuerdos
y conocimientos a largo plazo. Tiene una capacidad de almacenamiento muy amplia
y desempeña un papel esencial en la retención y recuperación de información que
forma la base de nuestro conocimiento y experiencias personales.
5.4- OLVIDO DE LA MEMORIA A LARGO PLAZO
El olvido en la memoria a largo plazo es un fenómeno en el cual la información
previamente almacenada en la memoria a largo plazo se vuelve menos accesible o
se pierde con el tiempo. Aunque la memoria a largo plazo tiene una capacidad
virtualmente ilimitada, no es inmune al olvido. Aquí están algunas de las razones y
mecanismos detrás del olvido en la memoria a largo plazo
Interferencia: Uno de los principales mecanismos de olvido en la memoria a largo
plazo es la interferencia. Esto ocurre cuando la información almacenada entra en
conflicto con información nueva o similar. Hay dos tipos de interferencia:
Interferencia retroactiva: Ocurre cuando la información reciente interfiere con la
recuperación de información anterior.
Interferencia proactiva: Ocurre cuando la información previamente aprendida
interfiere con la recuperación de información más reciente.
Falta de recuperación: Si no accedemos a una memoria específica durante mucho
tiempo, es posible que se vuelva menos accesible. La falta de uso o recuperación
de un recuerdo puede llevar al olvido a largo plazo
Degradación de la memoria: Con el tiempo, algunos detalles de los recuerdos
pueden degradarse o desvanecerse debido a la pérdida gradual de conexiones
neuronales o la modificación de la información almacenada. Esto es especialmente
común en detalles menos significativos.
Amnesia: En casos de lesiones cerebrales, trastornos neurológicos o traumatismos,
la amnesia puede causar la pérdida parcial o total de recuerdos almacenados en la
memoria a largo plazo.
Reorganización de la memoria: A medida que adquirimos nuevos conocimientos y
experiencias, nuestra memoria a largo plazo también se reorganiza. Algunos
recuerdos pueden fusionarse, simplificarse o modificarse con el tiempo, lo que
puede llevar a la pérdida de detalles precisos.
Motivación y relevancia: La información que se considera menos relevante o menos
motivadora para recordar puede ser más propensa al olvido. La motivación y el
significado personal pueden influir en la retención de la memoria a largo plazo.
Es importante destacar que no todos los recuerdos se borran de la memoria a largo
plazo de manera uniforme o en el mismo período de tiempo. Algunos recuerdos
pueden permanecer intactos durante toda la vida, mientras que otros pueden
desvanecerse con el tiempo. Además, algunas técnicas de recuperación, como la
práctica y la revisión, pueden ayudar a prevenir o reducir el olvido en la memoria a
largo plazo.
5.5- LA MEMORIA EN DIFERENTES CONTEXTOS
La memoria es un proceso cognitivo complejo que puede operar de manera
diferente en diversos contextos y situaciones. Aquí se describen algunos de los
principales contextos en los que la memoria juega un papel fundamental:
Memoria personal: La memoria personal se refiere a la capacidad de recordar
eventos, experiencias y detalles de la propia vida. Esto incluye recuerdos de la
infancia, eventos importantes en la vida, relaciones personales, logros y desafíos.
La memoria autobiográfica, que es un tipo de memoria episódica, es esencial para
construir nuestra identidad y comprender quiénes somos.
Memoria académica: En un contexto académico, la memoria se utiliza para aprender
y recordar información como hechos históricos, fórmulas matemáticas, vocabulario,
conceptos científicos y teorías. La memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo
desempeñan un papel crucial en la adquisición y retención de conocimientos
académicos.
Memoria laboral: La memoria es esencial en el lugar de trabajo para recordar
instrucciones, tareas, procedimientos y detalles importantes relacionados con un
trabajo o una profesión específica. La memoria de trabajo puede ser especialmente
relevante para realizar múltiples tareas y resolver problemas en entornos laborales.
Memoria social: La memoria también se aplica en contextos sociales para recordar
nombres, rostros, relaciones interpersonales, interacciones pasadas y normas
sociales. La habilidad para recordar detalles sobre otras personas es importante
para establecer y mantener relaciones significativas.
Memoria de habilidades: La memoria desempeña un papel fundamental en la
adquisición y ejecución de habilidades motoras y procedimientos, como tocar un
instrumento musical, practicar deportes, conducir un automóvil o cocinar. La
memoria procedural es esencial en estos contextos
Memoria histórica y cultural: En la sociedad, la memoria colectiva y cultural es
importante para recordar eventos históricos, tradiciones culturales, mitos y
leyendas. Esto contribuye a la identidad cultural y a la transmisión de conocimientos
de generación en generación.
La memoria es un proceso adaptable y multifacético que se aplica en una variedad
de contextos y situaciones en la vida cotidiana, la educación, el trabajo, las
relaciones interpersonales y la cultura. La comprensión de cómo funciona la
memoria en estos contextos es fundamental para mejorar nuestra capacidad de
aprender, recordar y utilizar la información de manera efectiva.