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08 - Liahona Agosto 1988

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LIAHONA ÍNDICE

2 MENSAJE DE LA PRIMERA PRESIDENCIA:

AGOSTO DE 1988, Año 34, Número 8 EN POS DE LA VIDA PLENA, presidente Thomas S. Monson

Publicación oficial de La Iglesia de 8 EL DOLOR Y EL GOZO: ¿QUE PODEMOS APRENDER DE LEHI? Kcith K. Hill
Jesucristo de ios Santos de los Últimos Días,
en el idioma español, que contiene artículos 13 MANUAL PARA FAMILIAS:
extraídos de las revistas ENS/GN, NEW
ERA y FR/END. LA PREPARACIÓN PARA ENTRAR EN EL TEMPLO
La Primera Presidencia: Ezra Taft Benson, 18 MENSAJE DE LAS MAESTRAS VISITANTES:
Gordon B. Hinckley, Tbomas S. Monson
Quorum de los Doce: "LA CARIDAD NO SE IRRITA FÁCILMENTE"
Marión G. Romney, Howard W. Hunter,
Boyd K. Packer, MarvinJ. Ashton, 19 UNA EXQUISITA COSECHA VISUAL
L. Tom Perry, David B. Haight,
James E. Faust, Neal A. Maxwell, 23 "CON CARIÑO, TUS MAESTRAS VISITANTES" Melinda Suttner
Russell M. Nelson, Dallin H. Oaks,
M. Russell Ballard, Joseph B. Wirthlin 25 EN SU PROPIO IDIOMA Sandra Williams
Asesores: Hugh W. Pinnock, Gene R. Cook, 29 JAMIE Sandra C. Brinley
William R. Bradford, Kcith W. Wilcox
Editor: Hugh W. Pinnock 34 LA COMPAÑÍA DEL ESPÍRITU SANTO élder Carlos E. Asay
Director de Revistas de la Iglesia:
Ronald L. Knighton 39 EL PRESIDENTE BENSON ESTUVO EN MI CASA George D. Durrant
Revista Internacional;
Editor ejecutivo: Larry A. Hiller
Editor asistente: David Mitchell
Editora auxiliar: Ann Laemmlen
Editora auxiliar/Sección para los niños:
Diane Brinkman SECCIÓN PARA LOS JÓVENES
Diseño y arte: 40 EL MENSAJE DE MI PADRE Jay L. Packard
N. Kay Stevenson, Sharri Cook
Producción gráfica: 42 "LOS PADRES QUE NO HAS CONOCIDO" Julee Dunnaway
ReginaldJ. Christensen, Sydney N. McDonald
Promoción de ventas: Thomas L. Peterson 48 LA LECCIÓN QUE APRENDÍ EN UNA TORMENTA Ronald J. Dunn
Coordinación de traducción: Alba Trujillo
Derechos reservados © 1988 por la
Corporación del Presidente de La Iglesia de
Jesucristo de los Santos de los Últimos Días,
50 East Nortb Temple Street, Salt Lake City,
Utah, 84150, EE.UU.
SECCIÓN PARA LOS NIÑOS
Las colaboraciones y los manuscritos deben 2 GRACIAS, HERMANITO Nina Lewis
enviarse a las oficinas de la revista Liahona, a
la dirección arriba, mencionada. 5 PARA TU DIVERSIÓN Robcrta Fairall

Publishcd monthly by the Corporation of 6 LA CAJITA PARA EL DÍA DOMINGO Virginia H. Pearce y Kathleen H. Bamcs
the President of The Church of Jesús Christ
of Latter-day Saints. Application to mail at RELATO DE LAS ESCRITURAS: LOS PILARES DE FUEGO Mabel Jones Gabbot
second class postage rates is pending at Salt
Lake City, Utah. Subscription price $9.00
a year. $1.00 per single copy. Tbirty days'
notice required for change of address.
When ordering a change, inctude address
label from a recent issue; changes cannot be
made unless both the oíd address and the
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queries to Church Magazines, 50 East
Ñorth Temple Street, Salt Lake City, Utah
84150, United States of America.
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801-531.-2947.
POSTMASTER: Send form 3579 to
LIAHONA at 50 East North Temple
Street, Salt Lake City, Utah 84150, United
States of America.

En la portada: "El Señor cumple con su


palabra", pintura al óleo de Clark Kelley Price
que representa a Noé haciendo entrar a los
animales en el arca, es una de las muchas obras
de arte del concurso internacional de bellas
artes auspiciado por el Museo de historia y arte de
la ígíesia. Véase "Una exquisita cosecha visual",
en este ejemplar.

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El espíritu de exploración, ya sea de la superficie voz que partió del monte Sinaí, habiéndonos a noso-
de la tierra, de la inmensidad del tros hoy:
espacio, o de los principios de una No tendrás dioses ajenos delante de mí.
vida recta, requiere que desarrolle- No te harás imagen.
mos la capacidad de hacer frente No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano.
a los problemas con valor, a las Acuérdate del día de reposo para santificarlo.
desilusiones con buen ánimo, al Honra a tu padre y a tu madre.
triunfo con humildad. No matarás.
Al crear el mundo, el Señor no No cometerás adulterio.
lo hizo todo absolutamente, sino No hurtarás.
que dejó muchas puertas abiertas No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.
para que el hombre empleara su No codiciarás. {Véase Éxodo 20:3-4, 7-8, 12-17.)
ingenio; dejó la electricidad en la Años después de haber recibido Moisés la ley, lle-
nube, el petróleo en la tierra; no gó el meridiano de los tiempos, en el cual emergió
tendió puentes sobre los ríos, no taló los bosques, ni "una magna investidura" [D. y C. 105:12], un poder
nos edificó ciudades. Dios le da al hombre la mate' mayor que el de las armas, una riqueza más perdura-
ria prima en vez del producto acabado; nos deja los ble que las monedas del César; pues el Rey de reyes y
cuadros sin pintar, la música sin componer y los pro- el Señor de señores añadió a los principios de la ley
blemas sin resolver, a fin de que nosotros mismos el concepto del amor.
descubramos la dicha y la gloria de crear. ¿Recordáis la punzante pregunta formulada por el
Sin embargo, durante el último medio siglo, se ha intérprete de la ley? "Maestro, ¿cuál es el gran man-
percibido un retroceso gradual aunque continuo en damiento de la ley?"
las normas que conducen a la excelencia en muchos Lo que es más importante aún, ¿recordáis la res-
aspectos de nuestra vida. puesta divina? "Amarás al Señor tu Dios con todo tu
Nos encontramos con ejemplos de empresas sin corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
moral, ciencia sin humanitarismo, conocimiento sin "Este es el primero y grande mandamiento.
integridad, veneración sin sacrificio, placer sin con- "Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo
ciencia, política sin principios y riqueza sin obras. como a ti mismo" (Mateo 22:36-39).
Tal vez sin saberlo, hace dos siglos el renombrado Estas son las leyes de Dios. Violémoslas y padece-
autor inglés Carlos Dickens describió nuestra época remos consecuencias interminables; obedezcamos las y
cuando se refería a otra. Su obra clásica Cuento de dos segaremos gozo eterno.
ciudades comienza así: No pasemos por alto la importancia de obedecer
"Era el mejor de los tiempos, y el peor de los tiem- las leyes del país. Estas no fueron creadas tanto para
pos; era la etapa de la sabiduría y del aturdimiento, restringir nuestra conducta sino para garantizarnos la
de la fe, era la época de la incredulidad, era el libertad, proporcionarnos protección y salvaguardar
período de la Luz y de las Tinieblas, la primavera de todo lo que es de valor para nosotros.
la vida y el invierno de la desesperación. Teníamos En esta época, en que personas generalmente hon-
todas las perspectivas y ninguna." (Tres obras de Car- radas hacen trampas a la ley, la tuercen y pasan por
los Dickens, Editorial Porrúa, S. A., pág. 125.) alto violaciones de la ley; en que no se penalizan
El medir las bondades de la vida según sus deleites, crímenes cometidos; en que no se demanda el cum-
sus placeres y la seguridad que ella nos ofrece es pres- plimiento de sentencias legalmente impuestas y en
tarse al engaño. La vida plena no consiste en lujos que las formas de proceder ilegales e irresponsables
imperecederos, ni se satisface con los placeres mate- sobrepasan todo lo que se ha visto hasta ahora, existe
riales, a los que a menudo se confunde con el gozo y una enorme necesidad de volver a la justicia básica
la felicidad. que provee la ley cuando las personas honradas la
Por el contrario, son la obediencia a la ley, el respeto sostienen.
al prójimo, el autodominio y el servicio sincero lo que Basándome en mi experiencia en el mundo de los
compone la vida plena. negocios, debo agregar la obediencia a las leyes de la
Tal vez lleguemos a entender mejor esos principios economía. Ni las personas ni las compañías pueden,
esenciales si los tratamos uno por uno. en forma continua, gastar más de lo que ganan y per-
manecer solventes. Esta ley se aplica tanto a las na-
A OBEDIENCIA A LA LEY ciones como a los hombres, y cuando las decisiones
Vayamos de inmediato a ese código de con- tocantes a la economía están basadas más en la teoría
'ducta revelado que ha guiado a la humanidad que en la ley, se desemboca indefectiblemente en el
a través de todos los disturbios que se puedan conce- caos.
bir. Al hacerlo, casi podemos escuchar el eco de la Alguien de muy sano juicio declaró: "Las leyes son

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L L SERVICIO SINCERO
La historia está repleta de ejemplos de perso- Nadie apienderá el significado de la vida hast;
'nas impedidas físicamente que alcanzaron 'tanto no se pierda en el servicio a su prójimo.
logros encomiables. .. el gtan compositot alemán
Ludwig van Beethoven siguió componiendo música
aun después de haber quedado totalmente sordo.

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realidad, las leyes son mucho más que eso, puesto nuestra búsqueda de la vida plena.

E
que la obediencia a la ley constituye un requisito
esencial para que tengamos éxito en nuestra búsque- L AUTODOMINIO
da de la vida plena. Tal vez la prueba más terminante de la integri-
dad de una persona sea el hecho de que rehuse

E L RESPETO AL PRÓJIMO
Un paso fundamental en nuestro camino hacia
'una vida plena es sentir respeto por otras per-
sonas. El hombre, por naturaleza, se ve tentado a
buscar más su propia gloria que la de su prójimo o la
gloria de su Dios. Nadie es una isla, no lo somos en
hacer o decir algo que ponga a riesgo el respeto que
siente por sí misma.
Uno de los requisitos de la vida es la capacidad pa-
ra tomar decisiones. Para poder hacerlo, debemos sa-
ber cómo apreciar lo que nos rodea y cómo hacer in-
trospección. También debemos aprender que en la
nuestra comunidad, en nuestro país ni en el mundo; ni vida nos es menester sortear dificultades, puesto que
hay una línea divisoria entre nuestra prosperidad y la los problemas son una parte normal de ella, y por so-
pobreza de nuestro vecino. bre todas las cosas debemos evitar que nos venzan.
Hay una ley constante que demuestra que cuanto La batalla en pos del autodominio es posible que
más uno da de sí, más recibe. Uno se gana la vida deje a la persona un tanto magullada y herida, pero
merced a lo que recibe, mas la enriquece en propor- como resultado de ella será sin duda mejor de lo que
ción a lo que da. era antes. Aunque muchos de nosotros quisiéramos
Como lo dijo el apóstol Pablo en sus palabras a los que el logro del autodominio no requiriera esfuerzo y
ancianos de la Iglesia: "[Recordad] las palabras del no nos causara dolor, en el mejor de los casos ése es
Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que siempre un proceso riguroso.
recibir" (Hechos 20:35). Se trata de una verdad mu- Algunas personas, en lugar de realizar un esfuerzo,
cho más profunda de lo que la mayoría de nosotros dan excusas por no hacer lo que están en condiciones
supone. Lo que es más, se trata de una verdad suma- de hacer, y es así que escuchamos decir: "A mí no se
mente práctica. me dieron las ventajas que otros tienen en su juven-
En la parábola del rico insensato, el Señor nos ha- tud". Otros argumentan: "Soy inválido". Pero lo
bló en forma por demás específica: cierto es que la historia está repleta de ejemplos de
"Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida personas impedidas físicamente que alcanzaron logros
del hombre no consiste en la abundancia de los bie- encomiables. El poeta griego de la antigüedad, Ho-
nes que posee. mero; el poeta inglés del siglo diecinueve, John Mil-
"También les refirió una parábola, diciendo: La ton; y el escritor argentino contemporáneo, Jorge
heredad de un hombre rico había producido mucho. Luis Borges, llegaron a la cumbre de las letras o con-
"Y éí pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, tinuaron sus contribuciones a la literatura pese a te-
porque no tengo dónde guardar mis frutos? ner una buena excusa para no hacerlo: la ceguera. El
"Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los ateniense Demóstenes, el más célebre de todos los
edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y oradores, tenía también un excelente pretexto: sufría
mis bienes; y diré a mi alma: Alma, muchos bienes de un marcado impedimento en el habla. El gran
tienes guardados para muchos años; repósate, come, compositor alemán Ludwin van Beethoven siguió
bebe, regocíjate. componiendo música aun después de haber quedado
totalmente sordo. Todos ellos tenían muy buenas ex-
"Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pe- cusas para darse por vencidos, pero nunca se valieron
dirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? de ellas.
"Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para
Dios." (Lucas 12:15-21.) El mundo actual se desplaza a un ritmo cada vez
Nuestras vidas se ven bendecidas con felicidad más acelerado. Los logros en el campo de la ciencia
cuando tenemos un respeto genuino hacia los demás. son fantásticos, los avances de la medicina son ex-
Particularmente a las personas que son solteras, les traordinarios y los descubrimientos efectuados en
aconsejo: Quienes se casan con la esperanza de for- cuanto a los secretos de la tierra y del espacio nos
mar una unión permanente deben adquirir ciertas ap- dejan a todos sin habla y llenos de asombro.
titudes y ciertas actitudes. Tienen que aprender a En esta era de tan enorme desarrollo tecnológico,
adaptarse el uno al otro; tienen que desarrollar la ca- conquistamos el espacio pero no podemos conquistar-
pacidad de resolver problemas mutuos; necesitan nos a nosotros mismos, y así renunciamos a nuestra
aprender a ser flexibles al procurar establecer armonía paz interior.
en su relación; y deben poseer el más alto grado de Gracias a ios adelantos científicos, el hombre pue-
abnegación para ver que las necesidades del cónyuge de surcar el espacio a enorme velocidad, y en forma
se satisfagan siempre antes que los deseos propios. En silenciosa y sin mayor esfuerzo desplazarse en las pro-
esto consiste el respeto y es parte integral de fundidades del mar en submarinos atómicos. Ahora

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que el hombre puede volar como un ave y nadar co- personas es prácticamente un deber, y su cristalización
mo un pez, quisiera que pudiera aprender a caminar nos proporciona gozo verdadero..
en la tierra como un hombre. Tal vez nuestro servicio esté dirigido a los jóvenes.
Si bien las conquistas espaciales han sido asombro- De ser así, os hago la siguiente advertencia: "La ju-
sas, los logros en la tierra no son menos extraordina- ventud necesita menos críticos y más ejemplos bue-
rios. Por ejemplo, en un artículo publicado en la re- nos". Dentro de cien años no tendrá ninguna impor-
vista estadounidense Time, dice que las computadoras tancia el tipo de casa en la que hayamos vivido,
"están cambiando el mundo de los negocios, ofre- cuánto dinero hayamos tenido en la cuenta de aho-
ciendo nuevas oportunidades a los distintos campos rros ni la apariencia de nuestra ropa. Pero el mundo
de la ciencia, modificando técnicas en la educación y quizás sea un poco mejor por la influencia que haya-
mejorando el grado de eficacia de procedimientos gu- mos tenido en la vida de un niño.
bernamentales". Alguien opinó atinadamente: "Ni la riqueza, ni la
¿Es acaso posible suponer que estas máquinas, que fuerza, ni ningún otro instrumento de poder podrá ja-
son capaces de sumar, multiplicar, dividir, procesar, más ser más confiable para el logro de nuestra seguri-
eliminar y recordar, puedan algún día también pen- dad y paz interior que el saber que somos motivo de
sar? Definitivamente la respuesta es no. Si bien la gratitud para muchas personas" (Dr. Hans Selye, The
computadora supone un adelanto en los procesos Stress of Life, Nueva York, McGraw-Hill, 1956,
mentales del hombre, no es el símbolo del Milenio ni pág. 287).
tampoco un substituto válido del cerebro humano. El Tal es el gozo que deriva del servicio.
hombre puede crear las máquinas más complejas, mas Nuestro aprendizaje, nuestra experiencia y nuestro
no puede darles vida ni dotarlas de los poderes de ra- conocimiento son todos elementos que debemos usar
zonamiento y juicio. diestramente; los tres los hemos adquirido por medio
¿Por qué? Porque esos son dones divinos, conferí- del esfuerzo personal. Nuestra conciencia, nuestro
dos únicamente conforme a la voluntad de Dios. amor y nuestra fe son instrumentos delicados y valio-
Dios fabricó una computadora una vez, lo cual hizo sos que sirven para guiar nuestro destino; los
con un cuidado y una precisión mucho mayores que tres los recibimos de Dios.
los esfuerzos combinados de todos los hombres de Es mi oración que todos podamos tener una buena
ciencia. Usó el mismo polvo de la tierra para su es- medida de éxito en nuestra búsqueda individual de
tructura e instaló dentro de ella un sistema capaz de una vida plena por medio de la obediencia a la ley, el
recabar continuamente información de todo tipo por respeto al prójimo, el autodominio y el servicio sinero. Y
medio de la vista, el oído y el tacto; un sistema circu- al hacerlo, ruego que la paz que concede Jesucristo,
latorio que permita mantener todos sus canales el Autor mismo de la vida plena, nos acompañe
constantemente limpios y en buen funcionamiento; siempre. •
un sistema digestivo para preservar su fuerza y vigor;
y un sistema nervioso para mantener a todos los com-
ponentes en comunicación y coordinación conti- IDEAS PARA LOS MAESTROS
nuas. Inerte sobre la tierra del Jardín de Edén, supe- ORIENTADORES
raba claramente la más moderna y avanzada de las Quizá desee recalcar estos puntos en su visita de orienta'
computadoras, aunque estaba del mismo modo muer- ción familiar:
ta. Estaba equipada para memorizar, calcular y resol- 1. Hay quienes equivocadamente miden la vida
ver la ecuación más complicada, pero le faltaba algo. plena basándose en sus deleites, placeres y lujos.
Entonces Dios se le acercó y "sopló en su nariz 2. El gozo y la felicidad que derivan de una vida
aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente" verdaderamente plena se encuentran en la obedien-
(Génesis 2:7). cia a la ley, el respeto al prójimo, el autodominio y el
Esta es la razón por la que el hombre tiene poderes servicio sincero.
que ninguna computadora moderna posee, que Dios 3. El vivir los principios analizados en este artículo
le dio vida, y con ella el poder de pensar, de razonar, nos concede la paz prometida por el Señor.
de decidir y de amar. Con todos esos poderes que nos Sugerencias para desarrollar el tema:
han sido dados a todos, nos es imprescindible ejercer 1. Exprese su parecer en cuanto a la forma de en-
el autodominio si es que deseamos una vida plena. contrar el verdadero gozo y felicidad en la vida.
2. ¿Existen pasajes de las Escrituras o hay citas en

E L SERVICIO SINCERO
Para hallar felicidad verdadera, debemos bus-
'carla fuera de nosotros mismos. Nadie aprenderá
el significado de la vida hasta tanto no se pierda en el
servicio a su prójimo. El servicio que prestamos a otras
este artículo que la familia podría leer en voz alta y
analizar?
3. ¿Sería mejor este análisis si hablara con el jefe
de la familia antes de la visita? ¿Hay algún mensaje
del obispo ó del líder del quorum sobre este tema?
7

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por Keith K. HUÍ

H
ace ya varios años, mientras visitaba a un que muy bien podemos llamar el "desierto de la aflic-
querido amigo, lo noté muy desalentado. ción". Se encuentran aislados de aquellos que aman
Eí es maestro de escuela, su esposa se debido a circunstancias totalmente ajenas a su volun-
. dedica a ías labores del hogar, y con los tad; desean paz, pero sólo sienten desesperación.
nueve hijos que tienen, sus recursos económicos se Y sin embargo, este tipo de experiencias puede
veían bastante limitados. ayudarnos a progresar. El élder Marvin J. Ashton ex-
Al preguntarle cómo estaba, trató de evadir la res- plica que la grandeza de una persona se mide por la
puesta demostrando no tener deseos de hablar sobre maneja en que ésta reacciona ante los sucesos que
sus problemas; pero finalmente, con lágrimas en los parecen ser totalmente injustos, desmedidos ejnme-
ojos, me contó sus preocupaciones familiares. Uno de recidos" (Liahona, enero de 1985, pág. 18).
sus hijos había abandonado los estudios en la escuela
secundaria y se había ido a vivir a otra casa; se pasaba Al igual que Lehi, nosotros también debemos
la mayor parte del tiempo bebiendo, mascando taba- empezar bien
co y en fiestas con sus amigos. La hija de dieciocho
años había transgredido y planeaba casarse, pero no Lehi había logrado tener un hogar confortable en
en el templo. El hijo de dieciséis años tenía serios Jerusalén para su familia, pero cuando escuchó la voz
problemas de alcohol y drogas. El hijo mayor de mi del Señor, su corazón y su alma se llenaron de paz y
amigo servía en una misión, pero con los gastos del gozo. Sus pertenencias materiales pasaron a ser me-
tratamiento para ayudar al que tomaba drogas, peli- nos importantes que el gozo y la esperanza que sintió
graban los fondos misionales y la estabilidad econó- ante la idea del amor que se le ofrecía por intermedio
mica de la familia- de la expiación de Jesucristo. Ese amor fue para su
Mi amigo me dijo que se sentía culpable e indigno, alma como un fruto delicioso.
dado que por toda la tensión que experimentaba la Si el hombre empieza su vida en forma recta y
familia, él y su esposa se culpaban mutuamente de los siempre procede igual, lo más probable es que termi-
problemas de los hijos, lo que hacía que el matrimonio ne bien. Igual les sucede a aquellos que empiezan mal
viviera bajo mayor presión. Era notorio que se debatía y persisten en seguir así: terminarán mal. Lehi empe-
ante una pregunta: ¿Por qué le sucedían esas cosas a zó bien; mantuvo su fe en el Señor Jesucristo y se
su familia cuando él trataba de vivir el evangelio? arrepintió sinceramente de sus pecados, actuando sin
Muchos Santos de los Últimos Días entran al sen-- hipocresía; el arrepentimiento le trajo como recom-
dero del evangelio con ahínco, disfrutando anticipa' pensa el perdón y la compañía del Espíritu Santo. Y
damente de la felicidad en que esperan vivir; sin em- luego de haber vivido rectamente, Lehi estaba prepa-
bargo, por el contrario, se encuentran afligidos ante rado para "el desierto de sus aflicciones".
dificultades y desafíos inesperados. Algunas de las
personas que enfrentan esos problemas se vuelven Lehi tuvo fe y estaba agradecido
amargadas, poniendo en duda el amor de Dios y olvi-
dándose de los compromisos que han hecho; otros El viaje de Lehi fue una prueba de fe en el Señor.
llegan a perder la fe totalmente y buscan alivio a sus Leemos que "salió para el desierto; y abandonó su
dolores en el pecado. casa, la tierra de su herencia, y su oro, su plata y
Aquellos que sufren este tipo de dolores pueden objetos preciosos, y no llevó nada consigo, salvo a su
aprender de la experiencia que Lehi tuvo en el de- familia, y provisiones y tiendas, y se dirigió al desier-
sierto. Lehi emprendió con ahínco la aventura que le to" (1 Nefi 2:4).
asignó el Señor, pero años más tarde reveló el dolor y Cuando ía familia hubo viajado tres días por pa-
sufrimiento que había experimentado en la jornada, rajes deshabitados, se detuvo y levantó sus tiendas en
cuando dijo: "Te hablo a ti, José, mi postrer hijo. Tú un valle a orillas de un río. Aquí leemos que Lehi
naciste en el desierto de mis aflicciones; sí, tu madre "erigió un altar de piedras y ofreció un sacrificio al
te dio a luz en la época de mis mayores angustias" Señor, y dio gracias al Señor nuestro Dios" {1 Nefi
(2Nefi3:l). 2:6-7). Durante el transcurso de su viaje siempre re-
Al igual que Lehi, mucha gente se encuentra en lo cordó al Señor y guardó Sus mandamientos. En cual-
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guierjuggr o situación en que se encontrara, era hu- Con tales sufrimientos, Lehi pudo haberse alejado
milde, adoraba a Dios y agradecía al Sefmr su_miseri- fácilmente de Dios; no obstante, por el contrario, se
cordia y bendiciones. Aun cuando algunos penaban acercó a El con fe y confianza. Más tarde recibió lo
que era un anciano extraviado, él siempre confió en que llamamos ahora el "sueño de Lehi"; en esa visión
nuestro Padre Celestial, reconociendo que "a los que se le mostró que sus hijos tenían el libre albedrío y
aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien" que se podían rebelar contra él y Dios y perder el
(Romanos 8:28). Espíritu del Señor, o podían confiar en Dios y gustar
los mismos deliciosos frutos del evangelio que él dis-
La visión de Lehi del plan de Dios para su familia frutaba. Ellos tenían la libertad de decidir.
El hecho de que Lehi comprendiera este problema
Aun cuando Lehi empezó bien, ejercitando su fe probablemente no mitigara el dolor que sentía, pero
en Dios con un espíritu de gratitud, no se vio libre de seguramente eliminó cualquier sentimiento de culpa-
dolores. Aun cuando ofreció un sacrificio de agrade- bilidad y a la vez le reafirmó la bondad de Dios y el
cimiento, Laman y Lemuel reclamaban contra él lla- interés personal que El tiene en la vida de todos Sus
mándolo un "hombre visionario" que "los había saca- hijos.
do de Jerusalén, abandonando la tierra de su heren- La experiencia de Lehi nos recuerda que las.prue-
cia, y su oro, y su plata y objetos preciosos, para pe- bas y sufrimientos pueden ser instrumentos en las ma-
recer en el desierto. Y decían que había hecho esto nos de un Dios misericordioso con los cuales forja a
por motivo de las locas imaginaciones de su corazón" sus hios para que se ajusten a los reguisjtos de la
(1 Nefi 2:11). Al igual que los judíos en jerusalén, exaltación. John Taylor, quien vio su propia fe pues-
Laman y Lemuel rechazaron tas palabras de su padre. ta a prueba, mencionó que el profeta José Smith dijo
Lehi no era de piedra, sino que tenía sentimientos en una oportunidad: "Dios os cuidará, y tomará vues-
como cualquier hombre y necesitaba el amor y apoyo tro corazón y lo retorcerá hasta sus mismas fibras; y si
de su familia. Se había enfrentado solo a la gente de no podéis resistir estas pruebas, no tendréis parte en la
su época, pero la rebelión de sus dos hijos mayores herencia del Reino Celestial de Dios" (Liahona, agos-
seguramente tiene que haberle causado un dolor muy to de 1973, pág. 37).
profundo. En la actualidad, el élder Marvin J. Ashton ha he-
Con un esfuerzo extraordinario, disipó las dudas de cho notar que la mano de Dios está en todas partes,
sus hijos mayores y los persuadió a que regresaran con diciendo: "Cuando tenemos que enfrentar el dolor, la
Nefi y Sam hasta Jerusalén para llevarse las planchas tragedia y las tribulaciones, sería un gran consuelo .si
de bronce. Al demorar el regreso de éstos, Saríah, al oír a Dios preguntarnos: '¿Sabes por qué pasa esto?',
pensando que sus hijos habían muerto, también se pudiéramos contestarle llenos de paz: 'Yo no, pero tú
quejó contra Lehi acusándolo de ser un viejo visiona- sabes'.
rio: "Tú nos has sacado de la tierra de nuestra heren- "La paz es lo opuesto al temor. Es una bendición
cia, y mis hijos ya no existen y nosotros pereceremos que reciben' aquellos que confían en Dios, y que se
en el desierto' 1 (1 Nefi 5:2). establece por la rectitud individual". {Liahona, enero
Existen pocas cosas que sean más dolorosas que cuan- de 1986, pág. 53.)
do nuestro cónyuge, la persona de quien siempre espe-
ramos apoyo, se aleja de nosotros por medio de la con- Lehi perseveró
tención y la falta de comprensión. Lehi amaba a su es-
posa y a sus hijos y deseaba que entendieran las vías de Así como el acero fino se debe calentar y enfriar,
Dios como él las entendía. El hecho de ver que sus hi- para luego volver a calentarlo, así también los hijos
jos se rebelaban debe de haber sido muy doloroso, pero de Dios que llegarán a la exaltación deben ser mu-
el que su esposa haya expresado las mismas acusaciones chas veces templados en el fuego y probados en las
y temores probablemente le debe de haber causado un aguas de la adversidad. A Lehi se le había dicho que
dolor mayor aún. Circunstancias como éstas pueden heredaría una tierra prometida; sin embargo, parecía
crear el temor y la duda, y hacer que una persona no que en cambio había recibido aflicción, pena y dolor.
esté segura de sí misma, o quizás ni siquiera de Dios. Cuando a Nefi se le rompió el arco y su familia se

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UANDO A NEFI SE LE ROMPIÓ EL ARCO Y SU FAMILIA SE
ENFRENTÓ A LA AMENAZA DEL HAMBRE, AUN LEHI EMPEZÓ A QUEJARSE
DEL SEÑOR. LUEGO DE HABER SIDO REPRENDIDO POR EL SEÑOR,
LEHI SE ARREPINTIÓ Y AGRADECIÓ A DIOS.

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enfrentó a la amenaza del hambre por varios días, su vida sufriendo persecuciones y pruebas, exclamó:
tanto Laman y Lemueí como los hijos de Ismael se "¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribu-
enfurecieron. Aun Lehi empezó a quejarse del Señor; laciones, o angustia, o persecución, o hambre, o des-
las murmuraciones de sus hijos, la fatiga, su edad nudez, o peligro, o espada?. . .
avanzada, los interminables días de andar errantes y "Antes, en todas estas cosas somos más que vence-
la amenaza del hambre deben de haber afligido su dores por medio de aquel que nos amó.
alma. "Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la
El Señor respondió a las quejas de Lehi; leemos vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo
que "la voz del Señor habló a [Lehi]; y verdadera- presente, ni lo por venir,
mente fue reprendido por haber murmurado en con- "ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa
tra del Señor, a tal grado que sintió una intensa aflic- creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en
ción" (1 Nefi 16:25). Luego de haber sido reprendido Cristo Jesús Señor nuestro." (Romanos 8:35, 37-39.)
por el Señor, Lehi se arrepintió y agradeció a Dios. También Lehi descubrió la paz. Luego de vagar en
Después se repuso, se fortaleció y continuó adelante medio de las tribulaciones en el desierto y llegar a la
con fe. tierra prometida, poco antes de su muerte, escribió:
Luego de una corta permanencia en la tierra de "El Señor ha redimido a mi alma del infierno; he
Abundancia, él y su familia abordaron el barco que visto su gloria, y estoy para siempre envuelto entre
los llevaría a través de los mares. Una vez en el bar- los brazos de su amor" (2 Nefi 1:15).
co, Lehi padeció nuevamente por las acciones de al- . El "desierto de la aflicción" había hecho su obra,
gunos de sus hijos. Laman, Lemuel y los hijos de Is- como lo hace con aquellos que empiezan bien y con-
mael, junto con sus esposas, "empezaron a holgarse" tinúan de la misma forma. El alma de Lehi se había
y "se entregaron a una rudeza desmedida". Cuando purificado, había resistido las pruebas y ya estaba pre-
Nefi trató de hablar con ellos, Laman y Lemuel lo parado para recibir la recompensa que el Señor le
amarraron, tras lo cual se desencadenó una gran tor- había prometido.
menta que amenazó con hundir la embarcación. Al igual que Lehi, mi amigo también llegó al final
Leemos que Lehi y Saríah, "siendo de una edad de su "desierto" personal. Sus hijos han regresado a
muy avanzada, y habiendo padecido mucha aflicción la fe de los padres y están tratando de ceñir sus vidas
a causa de sus hijos, cayeron enfermos, sí, aun tuvie- al ejemplo que dejó Cristo. No fue fácil enfrentar los
ron que guardar cama. problemas, pero todos los han soportado bien.
"Y a causa de su dolor y mucha pena, y la iniqui- Por supuesto que no todas'las historias terminan
dad de [Laman y Lemuel], llegaron casi al punto de como nos gustaría. Es digno de considerar el serio
ser llevados de esta vida para volver a su Dios; sí, sus hecho de que los dos hijos de Lehi jamás reconocie-
cabellos blancos estaban a punto de ser depositados ron la virtud de su padre; sin embargo, eso no fue
en el polvo; sí, por poco fueron sepultados con dolor una razón para que Lehi, Saríah, Nefi, Sam, Jacob o
en las aguas" (véase 1 Nefi 18:8-18). José se apartaran del amor de Dios.
Muchos de nosotros esperamos con anhelo el mo- Después de todo, la exaltación nos llega en forma
mento de poder vivir tranquilos y descansados, y individual cuando "nos ocupamos de nuestra salva-
pensamos que el Señor "nos debe un final feliz". Sin ción con temor y temblor" (véase Filipenses 2:12).
embargo, puede que para muchos de nosotros ese fi-
nal feliz no llegue en esta vida. El desafío que enfren- Quizás, en medio de nuestro "desierto de aflicciones",
tamos entonces es resistir en medio de nuestras aflic- nos ayude el recordar estas palabras:
ciones hasta que éstas terminen. Y cuando torrentes tengáis que pasar,
Mientras tanto, el refinamiento de nuestras almas los ríos del mal no os pueden turbar;
continúa llevándonos aexperimentar el perdón de pues yo las tormentas podré aplacar,
Dios y recibir el consuelo que viene del Espíritu. Es salvando mis santos, salvando mis santos,
interesante notar que las mismas cosas que tratan de salvando mis santos de todo pesar.
separarnos de Dios son las que a menudo nos acercan
más a El. Después que el Apóstol Pablo pasó casi toda ("¡Qué firmes cimientos!", Himnos de Sión, 144.) •

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as ordenanzas que se efectúan en el templo son A. Widtsoe, Salt Lake City, Deseret Book Co.,
sagradas; por lo tanto, solamente se habla de 1941, pág. 416).
'ellas dentro del templo mismo. Esta es la razón Por medio de esta ordenanza, los miembros de la
por la que a veces sus maestros o amigos dudan sobre Iglesia que son dignos reciben poder de los cielos para
lo que pueden decirle si se está preparando para reci- soportar las maldades del mundo. Como parte de
bir las ordenanzas del templo. ella, se les da instrucciones sobre la crea-
Como parte de esa preparación, es ción de la tierra, la transgresión de Adán
necesario que tenga presente que va a y Eva y su expulsión del Jardín de Edén.
necesitar mucha fe para beneficiarse con Se les enseña el plan de redención,
esta experiencia de entrar en el templo, la apostasía y la restauración del
sabiendo que la primera vez que vaya no evangelio. Tanto el método de enseñan-
comprenderá todas las ordenanzas ni todo za como lo que se enseña en sí son muy
lo que se enseña allí. La primera visita es particulares y merecen toda una vida
sólo el comienzo de una educación de estudio y asistencia al templo.
espiritual que lleva toda una vida. "Las ceremonias del templo han sido
El élder John A. Widtsoe, del Consejo instituidas por un Padre Celestial sabio,
de los Doce [1921-1952], escribió que quien nos las ha revelado en estos
como parte de la obra que se realiza en el últimos días para que sean una guía y
templo, se efectúan "bautismos, orde- una protección a través de nuestras
naciones en el sacerdocio, matrimonios y vidas, a fin de que vosotros y yo no
sellamientos por esta vida y por la eterni- [perdamos ía oportunidad de recibir]
dad, tanto por los vivos como por los la exaltación en el reino celestial, que
muertos, la investidura para los es el lugar en que viven Dios y Cristo"
vivos y los muertos, instrucción sobre el (Harold B. Lee, Decisions for Successful
evangelio, consejos para la obra del ministerio. . . " Living, Salt Lake City, Deseret Book, 1973, pág. 141)-
Dijo que el templo es "un sitio donde el sacerdocio Al igual que el bautismo es una ordenanza esencial
instruye, un sitio de paz, de convenio, de bendicio- para nuestra salvación, la investidura es esencial para
nes y revelación. . . De hecho, se invita y se insta a nuestra exaltación. Además, es una ordenanza indivi-
todos los fieles miembros de la Iglesia a que hagan dual que debemos "recibir antes de poder sellarnos en
uso de los templos y disfruten de sus privilegios" un matrimonio eterno.
(Liahona, marzo de 1968, pág. 17).
Ser dignos de recibir la investidura
El significado de la investidura
Podemos participar en las ordenanzas del evangelio
La investidura es una serie de convenios que hace- solamente si somos dignos de hacerlo. Y esto se apli-
mos con nuestro Padre Celestial de que viviremos ca aún más a las ordenanzas del templo. "Si no somos
una vida casta y virtuosa, y de que nos sacrificaremos dignos y no estamos preparados mental y emocional-
en bien de nuestros semejantes para edificar su reino; mente para recibir las bendiciones de la investidura,
y El, a su vez, nos promete que nos protegerá y ben- es' mejor que no vayamos a la Casa del Señor, pues
decirá en esta vida y que, en ía venidera, nos dará allí la luz de la verdad brilla en esplendor, y esta luz,
gloria y bendiciones aún mayores. además de bendecir, puede condenar" (John K. Ed-
El presidente Brigham Young dijo: "Permitidme munds, Through Temple Doors, Salt Lake City, Book-
daros una breve definición. Vuestra investidura signi- craft, 1978, pág. 77).
fica recibir en la Casa del Señor todas aquellas orde- Los requisitos que debemos cumplir para ser dignos
nanzas que, después que hayáis partido de esta vida, de entrar en el templo son los siguientes:
os permitan volver a ía presencia del Padre pasando • Obedecer la ley de castidad y ser moralmente puros.
frente a los ángeles que actúan como centinelas" • Sostener al profeta actual por ser la única persona
{Discourses of Brigham Young, seleccionados por John sobre la tierra que tiene la autoridad para administrar

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todas las llaves del sacerdocio. La primera vez que se va al templo
• Vivir de acuerdo con las normas de la Iglesia.
• No tener ningún pecado pendiente (del que deba- Cuando se va por primera vez, es muy importante
mos arrepentimos). llegar al templo con bastante anticipación y procurar
• Ser honrados. que esta experiencia sea lo más agradable y memorable
• Ser miembros activos de la Iglesia. posible, ya que la primera es la única vez
• Pagar un diezmo íntegro. que recibirá su propia investidura. Llegar
• Tener una relación apropiada con todos temprano no sólo le dará tiempo para
los miembros de nuestra familia. asegurarse de que su ropa y su recomen-
• Sostener a los líderes locales y generales dación están en orden, sino también para
de la Iglesia. permanecer un rato en silencio,
• Cumplir con ía Palabra de Sabiduría. meditando, a fin de que el Espíritu Santo
• No estar afiliados a grupos apóstatas. tenga la oportunidad de ayudarle a
En entrevistas con nuestro obispo o apreciar lo que va a experimentar.
presidente de rama, y luego con un También es bueno que sepa que cuando
miembro de la presidencia de la estaca o entre en el templo por primera vez, tendrá
de la misión, se nos pregunta si vivimos constantemente a su lado a uno de
de acuerdo con los requisitos menciona- los obreros del templo para ayudarle.
dos. Cuando los líderes que nos entre-
vistan están convencidos de nuestra Los símbolos sagrados que se utilizan
dignidad, nos otorgan una recomendación en el templo
para el templo, la que debemos presentar
allí antes de que se nos permita entrar. La humanidad en todas las épocas se
Al firmar nosotros también la recomenda- ha valido de símbolos para representar
ción, certificamos que nos consideramos dignos de las verdades que aprende. Para comprender la
entrar en el templo. investidura del templo es necesario interpretar el
Existen, además, otras reglas sobre la entrada en el simbolismo con que se representa. La expresión por
templo; su obispo o presidente de rama pueden con- medio de símbolos es relativamente sencilla; sin
testar todas sus preguntas al respecto. Las reglas men- embargo, se necesitan años de asistencia al templo
cionadas incluyen las que se dan a continuación: para darse cuenta del significado total de los símbolos
Los jóvenes reciben ía investidura antes de servir con los que allí se enseña. Sin entrar en detalles
en una misión o de casarse en el templo. específicos sobre la ceremonia en sí, podemos
Los hombres deben tener el Sacerdocio de Melqui- examinar algunos de los símbolos que se ven allí. Por
sedec antes de entrar en el templo por primera vez. ejemplo, el élder Boyd K. Packer, del Consejo de los
Una mujer soltera un poco mayor, además de po- Doce, dice:
der recibir la investidura antes de casarse en el tem- "Cuando en el templo realizamos la obra de las
plo, puede entrar en él cuando su obispo piense que ordenanzas, nos vestimos con ropa blanca, la cual es
está bien preparada espiritualmente. símbolo de pureza, dignidad y limpieza. . .
Una persona casada con otra que no sea miembro "Desde el momento en que los miembros de la
de la Iglesia o que nunca haya entrado en el templo Iglesia reciben sus ordenanzas del templo, comienzan
puede pedir una recomendación si su cónyuge lo a usar permanentemente el gárment o ropa interior
aprueba. especial...
Un converso a la Iglesia debe esperar un año des- "El gárment representa convenios sagrados; conso-
pués de bautizarse para poder entrar en el templo. lida la modestia y llega a ser una protección para
Las parejas que se hayan casado fuera del templo quien lo usa. . .
también deben esperar un año antes de poder recibir "El edificio en sí es un símbolo. Si usted ha visto
la investidura o sellarse en el templo, a menos que uno de nuestros templos de noche, todo iluminado,
reciban un permiso especial. sabe lo hermoso que es. La Casa del Señor resalta en

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la oscuridad y llega a simbolizar la autoridad y la ins- importante de nuestra misión aquí en la tierra y tam-
piración del Evangelio de Jesucristo, que sirve de guía bién de la misión de la Iglesia, que es: perfeccionar a
a un mundo que se pierde cada vez más en las tinie- los santos, proclamar el evangelio y redimir a los
blas espirituales. muertos. •
"Esa luz también simboliza la luz espiritual... y
depende de nosotros cuánta luz espiritual
absorbamos como parte del proceso de LA ENSEÑANZA DE LOS N I Ñ O S
aprendizaje." (Élder Boyd K. Packer, ACERCA DEL TEMPLO
The Holy Temple, Satt Lake City, Book-
craft, 1980, págs. 42, 44, 71, 75; véase El buen sentimiento que usted demues-
también Eí Santo Templo, PBFS0157SP, tre hacia el templo puede ser un medio
págs. 17, 20.) eficaz para preparar a sus hijos para el día
Esta breve introducción habla sólo de en que ellos tengan la oportunidad de
una pequeña parte de los símbolos eternos entrar en el templo. A medida que los
que el Señor y sus siervos han utilizado hijos se den cuenta de la gratitud y el
para comunicarnos los misterios del aprecio que sienten los padres por las
reino y la esencia de la eternidad. A bendiciones de la investidura del templo,
medida que usted reflexione en el templo ellos también querrán obtenerlas.
sobre lo que se le enseñe y pida a Dios, El Hay muchas formas en que puede
le ayudará a entender por medio del hater saber a sus hijos la importancia del
Espíritu Santo las verdades eternas templo: puede colocar cuadros de templos
simbolizadas allí. en las paredes de la casa; enseñarles
Sin embargo, se debe tener en cuenta en las noches de hogar a comprender,
que a pesar de que debemos esforzarnos aunque sea superficialmente, las
por comprender los símbolos, no es eso lo único que ordenanzas del templo; mencionar la importancia
encierra la adoración en el templo; también debemos del templo en las oraciones familiares y las bendi-
cumplir con las sagradas promesas que hacemos allí en ciones de padre, etc.
todos los aspectos de la vida. Al hablar de lo que se requiere para entrar en el
Es un privilegio tener autorización para entrar en templo, tendrá la oportunidad de enseñar a sus hijos
la Casa del Señor. Cuando entendemos la necesidad pequeños y, sobre todo, a los que estén por bautizar-
de recibir la investidura, nuestra vida mortal cobra se, sobre el orden que reina allí, la decencia en el
significado. vestir y la familia eterna.
Una vez que usted reciba su propia investidura, Cuando los niños se crían con esas enseñanzas,
puede volver al templo muchas veces para hacer la aprenden a sentir mucho respeto por el templo, espe-
obra por otras personas que han muerto sin recibir las cialmente si también ven a los padres ir a la Casa del
ordenanzas eternas del bautismo, la confirmación, la Señor con regularidad y encontrar allí fortaleza
investidura y el sellamiento. Gustar el dulce gozo de espiritual.
actuar en nombre de alguien es en parte lo que quiere Cuando uno de sus hijos se esté preparando para ir
decir acercarse "a la medida de la estatura de la ple- al templo por primera vez, sería apropiado que estu-
nitud de Cristo" (Efesios 4:13). O acaso, como pre- diaran juntos lo que dice este artículo y hablaran con
guntó el élder Boyd K. Packer en la Conferencia Ge- la actitud adecuada de estos asuntos sagrados. Una
neral de abril de 1987, "¿No seguimos el ejemplo de vez que hayan ido al templo, es mejor hablar de estas
Cristo al realizar las ordenanzas en los templos por los cosas en el templo mismo.
que no pueden hacerlas por sí mismos?" Al enseñar a los hijos a entender las bendiciones
Ir ai templo para recibir nuestra propia investidura de recibir la investidura y de asistir con regularidad al
y luego pasar el resto de la vida yendo al templo para templo, la relación de padres e hijos se fortalece y se
hacer la obra a favor de otras personas fallecidas y profundiza. Como el padre de Enoc, estará enseñando
aprender a la vez lecciones espirituales es una parte a sus hijos "en todas las vías de Dios"(Moisés 6:21). •

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MENSAJE DE LAS MAESTRAS VISITANTES

LACARIDAD
NO SE IRRITA
FÁCILMENTE
Objetivo: Aprender a evitar el enojo y las disputas.

1 esposo de Marta había lo acosaron de todas formas (véa- en esa situación. Si nos arrepen-
ido a una reunión del se 1 Nefi 19:9) y, aun así, pidió a timos y oramos, nuestro espíritu
sacerdocio temprano esa nuestro Padre que perdonara a los se purificará y nuestro corazón se
mañana y ella había que lo crucificaron (véase Lucas llenará de amor.
quedado sola para alistar a los 23:34). Aunque nosotras no ten- Cuando controlamos nuestro
niños y llevarlos a la Iglesia. dremos que sufrir ío mismo que enojo y evitamos las disputas,
La bebita lloraba, su híjita El, hay muchas cosas que nos mo- también evitamos que la influen-
de tres años, Rebeca, había lestan y nos hacen perder la pa- cia del mal se transmita a otras
perdido uno de sus zapatos y Da- ciencia, especialmente si estamos personas. Al hacerlo, llegamos a
vid, el hijo de cuatro años, se cansadas, enfermas o con prisa: parecemos más a Jesucristo, cuyo
había ensuciado a último mo- las actitudes groseras, la desobe- sacrificio pone la vida eterna al
mento la camisa de ir a la Iglesia. diencia, las esperas largas, los de- alcance de todos los que se acer-
Marta se sentía impotente y con sacuerdos, las desilusiones, etc. quen a El y sigan su ejemplo. •
ganas de quedarse en casa. Ter- En momentos como ésos quizás
minó llegando tarde a la capilla y nuestra primera reacción sea SUGERENCIAS PARA LAS
todavía estaba enojada con sus enojarnos, pero con fuerza de vo- MAESTRAS VISITANTES
hijos, por lo que le costó sentir el luntad podemos lograr tener cari- 1. Lean Mateo 18:15, 21-22 y
espíritu de reverencia. dad y no "irritarnos fácilmente" hablen sobre lo que Jesucristo nos
La mayoría de nosotras a veces (véase Moroni 7:45). Podemos enseñó que hiciéramos si alguien
nos sentimos impacientes o dis- tener paciencia, y con bondad nos ofende.
gustadas, pero si hablamos con "volver la otra mejilla" (véase 2. Pregunten a las hermanas
enojo a los que nos rodean, el Mateo 5:38-39). cuáles son algunas de las cosas
Espíritu Santo se ofende. Al tra- Hay formas de aprender a ac- que irrita a la gente, y hablen de
tar de acercarnos a Cristo y per- tuar con caridad. Podemos con- la forma en que se puede reaccio-
feccionarnos, debemos preguntar- trolar la impaciencia o el enojo si nar con caridad cuando eso
nos: "¿Qué le gustaría a Jesucristo- respiramos hondo, pensamos an- sucede. D
que yo hiciera?" tes de actuar y nos preguntamos (Véase Manual de sugerencias para ¡<i nuche de hogar,
pá¡;s. 35-40, 55-58, 90, 112-115, 120-123, 154-
Jesucristo pasó grandes penas y qué quisiera Jesús que hiciéramos 156, 184, 191-192, 216-217, 259-272, 277-279.)

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UNA EXQUISITA COSECHA VISUAL
Página previa El lamento del Señor, "¡Jemsalén, Jmiialen'" {Mateo
23.37), inspiró a Ro\ L. Stewart, de Rcxhurjí, Idaho, a hacei esta
escultura en mármol, de una gallina v un pollito; "loseph Smith I" en
bario, por Lyuba Prmak, de Pasadena, California, "Leyendo la Biblia",
en madera, de John Tayt, de Boi»e, Idaho

20

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El Director del museo, Glen Primer Quorum de los Setenta y denses) entre los ganadores.
M. Leonard, dijo: director ejecutivo del Departa- Se otorgó el primer lugar a
"Experimentamos una exquisi- mento Histórico de la Iglesia, Steven L. Neal, un pintor autodi-
ta cosecha visual. De una varie- dijo: dacto de la ciudad de Pendleton,
dad de estilos artísticos, vimos "El concurso alentó a los artis- estado de Oregón, por su obra ti-
emerger una constante veta de tas Santos de los Últimos Días a tulada "El sueño de Lehi". El se-
testimonios del evangelio restau- expresar su fe religiosa por medio gundo lugar fue otorgado a Pino
rado. Los artistas que enviaron del arte. Esta exhibición nos per- Drago, de la ciudad de Francfort,
sus obras crearon imágenes me- mitió reconocer sus aportaciones. de la República Federal de Ale-
morables inspiradas en las Escri- Es nuestro deseo que continúen mania, por su pintura "Lunes 24
turas y en la historia, y en las acti- inspirando a los demás por medio de junio de 1844, 4:15 a.m.: Más
vidades actuales de la Iglesia. del arte religioso que crean." allá de los acontecimientos", en
"Las piezas de arte de la exhi- El élder Larsen dio comienzo la cual se muestra un momento
bición representan un conjunto oficialmente a la exhibición y decisivo horas antes del martirio
de creencias comunes expresadas presentó los premios a los gana- del Profeta. Shauna Clinger, de
por medio de diversas tradiciones dores. Por medio de la contribu- Salt Lake City, Utah, ganó el
artísticas", el hermano Leonard ción generosa de un donante tercer lugar con su pintura doble
explicó y luego añadió: "Mas sea anónimo, se repartieron más de titulada "Para que los que no
cual sea el idioma visual que ha- US$40.000 (dólares estadouni- ven, vean".
blan o las tradiciones artísticas Además, se dieron seis premios
que representan, algunas de las de reconocimiento por méritos y
imágenes religiosas portan un se adquirieron algunas de las obras
mensaje universal para los Santos de arte para formar parte de la co-
de los Últimos Días. lección permanente del museo.
"Por ejemplo, el mensaje de la En las siguientes páginas, apa-
expiación del Salvador tiene mu- recen algunas de las piezas de arte
cho significado, ya sea que esté de la exhibición. •
pintado en un estilo directo por
un retratista de los Estados Uni- De izquierda a derecha: "Andrés", en
dos, en un estilo abstracto por un bronce, por James R. Avati, Je Salt Lake
artista europeo o representado en City, Utah; mención especial "La
vivos colores por un pintor de La- reverencia", en bronce, Je Laura Lee Stay,
Je Provo, Utah; "Calla, enmudece"
tinoamérica." (Marcos 4:39), en bronce, de Mark
El élder Dean L. Larsen, Hopkíns, Je Emerson, Georgia.
miembro de la Presidencia del

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Durante este proceso, yo estaba
embarazada por segunda vez. Dos semanas
p
ántes de la fecha en que debiera haber nacido el
bebé, barnizamos los pisos y pintamos las paredes
de los cuartos nuevos. Pero esa noche, el bebé se
adelantó y comenzaron los dolores de parto. Mi
esposo me llevó en seguida al hospital, y allí quedó la
casa a medio terminar: sin calefacción, sin ventanas
en la sala ni un lugar preparado para que el bebé
durmiera.
Mis padres llegaron a la tarde siguiente en automó-
vil; habían manejado unos noventa kilómetn
desde su granja. La venida de mamá
fue agradable para mí, ya que no noj

CON CARINO habíamos llevado bien desde que


yo me había hecho miembro de /
la Iglesia en 1976, pero ella
TUS MAESTRAS sabía que necesitaría ayuda
con el bebito y con la casa
VISITANTES por Melinda Suttner en el estado en que estaba.
Fue a verme al hospital y
en camino de vuelta a su
Íace unos cuatro años, mi esposo David y yo
compramos una casa antigua en Clarksville, casa se detuvo a ver la
.Tennessee. Como decidimos remodelarla, le- construcción. Al ver el
vantamos los pisos, cambiamos las cañerías del agua caos que todavía existía
corriente y la instalación eléctrica, y agregamos cuar- allí y las condiciones de
tos. La obra, está demás decirlo, fue una gran tarea, y la vivienda en que se recibiría ^
lo peor es que permanecimos en la casa mientras se a su nueva nieta, se entristeció
llevaba a cabo. y decidió volver al día siguiente para
Como estábamos viviendo literalmente en una limpiar la casa y alistarla para cuando ye
obra de construcción, antes de acostarnos, tenía que regresara del hospital.
sacar de encima de la cama todo lo que había caído Mamá llegó como había planeado,
sobre ella durante el día y, en lugar de una escoba, vestida con ropa de trabajo y con una pala,
usaba una pala para juntar todo lo que había en el un rastrillo y un balde en la mano. Al
piso. En la sala se encontraban todos los materiales entrar le fue difícil creer lo que veía.
íf, de construcción más grandes y por toda la Todo estaba impecablemente limpio y
' casa había clavos, pintura, escaleras, etc. arreglado: todos los materiales ordenados en

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hmong, que es el que hablan muchas de las tribus mundo, llevan a cabo su silenciosa labor para que las
que habitan las colinas de Laos, reino del sudeste de bendiciones del evangelio estén a la disposición de
Asia. También lo hablan el hermano Kua Lo y sus cada vez más personas. Esto se logra mediante la ta-
hermanos, Yia Lo y Chong Lee Lo, quienes se habían rea de producir el Libro de Mormón y otros materia-
sellado a sus respectivas familias ese día en el templo. les de estudio, incluso revistas, en cerca de
Ese fue uno de los días más felices de su vida. 150 idiomas.
La conversión de los miembros de la familia Lo, así Las Autoridades Generales dispusieron la organiza-
como el himno que cantaban, son sólo parte de una ción de la división en una época en que la tecnología
historia, muy amplia y llena de milagros, de lo que ha moderna en el campo de la informática (computado-
hecho la Iglesia por predicar el evangelio a "toda na- ras u ordenadores) facilitaría y agilizaría el arte de la
ción, y tribu, y lengua, y pueblo" (D. y C. 133:37). traducción, aun en idiomas que emplean símbolos o
Las familias Lo empezaron a asistir a la Iglesia en letras diferentes de los de nuestro alfabeto.
un barrio de Salt Lake City, donde conocieron a Pero como las máquinas carecen de la inspiración
Scott Jenkins, el presidente de la misión de estaca. del ser humano, el Señor preparó a muchos traducto-
Fue él que, con la ayuda de Brian Walker, ex misio- res para esta obra. Por ejemplo, en 1980 uno de los
nero que hablaba thai, tomó la iniciativa para ense- supervisores recibió materiales que debían traducirse
ñar eí evangelio a estas familias. El hermano Walker al bengalí, lengua que se habla en India y en Bangla-
presentaba el mensaje en thai y Kua Lo lo traducía al desh. Debido a que en ese momento le fue imposible
hmong para sus parientes y amigos. encontrar miembros de la Iglesia que dominaran el
A pesar de las dificultades para comunicarse, todas idioma y fueran capaces de traducir, tuvo que recurrir
estas personas recibieron con entusiasmo el mensaje a dos maestros que no eran miembros.
del evangelio, continuaron asistiendo a la Iglesia y Cuando los traductores terminaron su trabajo, el
formaron lo que fue luego el núcleo de una rama supervisor trató de encontrar a un miembro que pu-
hmong. La División de Traducciones de la Iglesia pu- diera revisar la traducción y asegurarse de que fuera
do al fin proporcionar las oraciones sacramentales, fiel en el aspecto doctrinal. Como en respuesta a su
partes de Principios del evangelio y algunos himnos en problema, un día leyó un artículo sobre Towhid-ul
hmong, y los miembros de la rama pudieron llevar a Alam, un converso reciente de Bangladesh que esta-
cabo las reuniones en su lengua natal. Más adelante, ba estudiando en el anexo de la Universidad Brigham
recibieron ejemplares completos de Principios del Young en Hawai. Gracias a la ayuda del hermano
evangelio y de Relatos del Libro de Mormón. Alam, en 1985 se imprimió Selecciones del Libro de
El hermano Kua Lo recibió el llamamiento de pre- Mormón en bengalí, en Nueva Delhi, India.
sidente de la primera Rama Asiática en Salt Lake A veces, el Señor obra de otras maneras para con-
City, y actualmente vive en Bakersfield, estado de seguir sus fines. La hermana Sampson-Davis, de
California, donde también es presidente de la Rama Ghana, país de África, recibió la inspiración de tra-
Asiática del lugar. Por su deseo de dar a conocer el ducir el Libro de Mormón a su lengua natal, el fante,
evangelio a los de su pueblo y su constancia, por lo aun antes de que se asignara esta tarea a la División
menos noventa personas se han bautizado en la de Traducciones. Durante su niñez y adolescencia, a
Iglesia. la hermana Sampson-Davis le gustaba relacionarse
El hermano Lo tiene un testimonio de la influen- con cristianos. Siendo muy joven todavía, le impre-
cia que el Espíritu Santo ejerció en su conversión y sionó de tal forma el sacrificio de Cristo por nosotros
que se hizo sentir a pesar de las dificultades idiomáti- y sintió tanta gratitud hacia el Señor que tuvo el pro-
cas. Pero si su familia y las de sus hermanos no hu- fundo deseo de hacer algo por El. Pasaron casi cua-
bieran podido aprender otros conceptos del evangelio renta años y, después de haber vivido en Holanda y
con materiales traducidos a su propio idioma, quizás haber aprendido allí el idioma inglés, regresó a Gha-
habrían tenido que esperar mucho más tiempo para na, donde se convirtió a la Iglesia y encontró la opor-
poder recibir las bendiciones del templo. Más aún, tunidad de ver cumplido el sueño que había tenido
podrían no haberlas recibido nunca. desde la juventud.
Como parte de la preparación para que se cumplie- Un atardecer, al salir de la reunión sacramental,
ra la promesa del Señor de que un día "todo hombre cayó en la cuenta de que algunas personas de la con-
oirá la plenitud del evangelio en su propia lengua y gregación no habían cantado porque no sabían in-
en su propio idioma" (D. y C. 90:11), la Primera glés, idioma en que estaban impresos los himnarios, y
Presidencia y el Consejo de los Doce dirigieron el sintió la impresión de que debía traducir materiales
establecimiento de la División de Traducciones de la del evangelio para el bien de su gente. Esa misma
Iglesia en 1965. Los empleados de la división, tanto noche tradujo "Soy un hijo de Dios"; a ésta siguió la
en las Oficinas Generales de Salt Lake City como en traducción de otros himnos.
las oficinas auxiliares que hay en diversas partes del Alentada por esos trabajos de traducción, la her-

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mana Sampson-Davis se vio guiada hacia la enorme ocupados en la operación de su propia compañía y en
tarea para la cual se le había estado preparando du- sus labores de misioneros de estaca, todavía encuen-
rante tantos años: la traducción del Libro de Mor- tran tiempo para hacer excelentes traducciones de
món al fante. Cuando se revisó'su trabajo en la Divi- publicaciones de la Iglesia al lingala.
sión de Traducciones, causó gran asombro el hecho Aunque la lengua natal de Ambrose y Louise Mas-
de que esta maestra, sin ninguna experiencia profe- sala es el luba, en la época en que asistían a la uni-
sional de traductora, hubiera producido una traduc- versidad vivían en una parte de Zaire donde se habla
ción de redacción excelente y de tanta exactitud. swahili, por lo que empezaron a hablar en este idio-
Esta hermana es un ejemplo del calibre y la dedica- ma todos los días. Poco tiempo después de haberse
ción de los traductores que el Señor ha preparado y casado, el hermano Massala le dijo a su esposa que
está preparando para Su obra. Actualmente, la divi- debían empezar a hablar en luba otra vez el uno con
sión está en la labor de traducir materiales de doctri- el otro; a ella le extrañó la sugerencia, pues hacía ya
na por lo menos en uno de los idiomas importantes varios años que hablaban en swahili, pero comenza-
de cada nación del mundo. El resultado de esta obra, ron a emplear de nuevo su idioma nativo y sus hijos
aprobada por la Primera Presidencia en 1986 y deno-
minada Programa para toda nación, será que se produ-
cirán materiales de lectura en varios idiomas nuevos
durante los próximos años.
El nombre de este programa se sacó de un discurso
del presidente Spencer W. Kimball, en el cual dijo: .
"Si pudiéramos aunque fuera comenzar la obra en
toda nación de la Tierra, pronto los conversos de to-
do pueblo y lengua podrían ser una luz entre su pro-
pia gente, y así el evangelio sería predicado en todas
las naciones antes de la venida del Señor" (seminario
para Representantes Regionales, octubre de 1978).
Eb Davis, director de la División de Traducciones,
hace el siguiente comentario:
"Las Autoridades Generales dirigen esta obra por
inspiración. Al principio pensamos que, debido a que
muchos de los idiomas del Programa para toda nación
son más bien desconocidos en el resto del mundo,
tendríamos dificultad para encontrar traductores; pe-
ro hemos descubierto que el camino estaba preparado
para nosotros. Por ejemplo, encontramos veinte
miembros de la Iglesia originarios de las Islas Seyche-
lles (que se encuentran al este de África) que estaban
dispuestos a ayudarnos; además, hay cuarenta miem-
bros de Uganda a quienes podemos recurrir y hemos
encontrado también cuatro personas en el Valle del
Lago Salado que hablan uno de los idiomas de
Etiopía".
Lowell Bishop, que supervisa el trabajo de traduc-
ción de los idiomas africanos, dice que la mayoría de
los traductores de esas lenguas son miembros de la
Iglesia relativamente nuevos, más o menos del mismo
tiempo en que ha estado organizado el programa, y
que, en casi todos los casos de los idiomas con que ha
trabajado la división hasta ahora, inesperadamente
ha surgido algún miembro que estaba dispuesto a ha-
cer la traducción.
El hermano Bishop cita el ejemplo de los traducto-
res que se han encontrado para traducir en dos de
las lenguas que se hablan en Zaire [antiguo
Congo], el lingala y el luba. Alfonse y
Maguy Muanda, a pesar de estar muy

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crecieron hahlándolo en el hogar. Fue una sorpresa
para ambos que se les pidiera que tradujeran materia-
les de la Iglesia al luha, y fue entonces cuando la
hermana Massala se dio cuenta de la razón por la que
su esposo había sido inspirado a volver a emplear un
idioma del que casi se habían olvidado.
Ya sea que se trate del juba, el hmong, o cuales-
quiera de los otros muchos idiomas con que se trabaja
en la División de Traducciones, el mensaje debe
"traducirse" [aplicarse] a la vida diaria de los Sancos
de los Últimos Días. Una vez que lo hemos recibido,
al igual que el hermano Kua Lo, debemos darlo a
conocer a familiares, vecinos y amigos, a fin de que
todos podamos hablar el mismo idioma eterno del
evangelio.
El presidente Ezra Taft Benson ha hecho hincapié
a menudo en la importancia de hacer conocer el
evangelio. En una ocasión, dijo:
"Se requiere de nosotros que llevemos el Evangelio
de Jesucristo a todas las naciones del mundo. . . Esta
responsabilidad. . . de llevar el evangelio a roda na-
ción, tribu, lengua y pueblo es una de las señales por
medio de las cuales los creyentes reconocerán que es-
tá cercano el retorno de nuestro Salvador" (véase
"Nuestra responsabilidad de llevar el evangelio a to-
do el mundo", Liahtma,
julio de 1984, pág. 77). •

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ta un asiento. Era el primer día que yo enseñaba en Le llevé hacia un lado para que la niña no oyera, y
la Primaria en mi nuevo barrio, pero a pesar de que le dije:
tenía mucho en que pensar —mi matrimonio recien- —Jamie dice que viene sola a la Iglesia. ¿Cómo
te, la gente que acababa de conocer y ese llamamien- llega? ¿"Va a buscarla alguien del obispado?
to—, Jamie tenía algo especial que atrajo mi atención. Con un gesto de desconcierto, se sonrió y me
Cuando nos separamos para ir a las clases, me con- contestó:
centré en la lección de Valientes A y me olvidé por —No, aparece todos los domingos en la puerta de
un momento de la niña. Sin embargo, a los cinco la capilla antes de empezar las reuniones. Y no exage-
minutos de empezar ía lección, golpearon con suavi- ro: todos los domingos.
dad a la puerta y la hermana Jones hizo sentar a Ja- Cuando él se fue, me senté a mirarla conversar con
mie en el semicírculo que habíamos formado. La chi- David y me pregunté qué impulsaba a una niña de
ca permaneció con los ojos fijos en el piso, aunque a esa edad a asistir a la Iglesia con tanta dedicación;
veces levantaba la cabeza brevemente, y así logré ver ¿cómo era posible que una niña de nueve años tuvie-
su hermosa carita, la que expresaba inocencia y gran ra esa madurez espiritual? Decidí que quería conocer-
inteligencia. Después su interés se sumió en la clase y la mejor.
participó en todo lo que hicimos, sonriendo y contes- La semana pasó muy rápidamente entre el trabajo
tando a las preguntas que les hacía sobre los profetas y las tareas domésticas. Pronto llegó el domingo y me
que estábamos estudiando. Escuchaba con atención, encontré sentada esperando que llegaran los niños de
con los brazos cruzados, y hablaba sólo cuando era mi clase a la Primaria. Unos cinco minutos después
necesario. de empezar la reunión, vi llegar a Jamie muy aprisa y
Cuando los otros niños se marcharon a la reunión sentarse en el banco de atrás. Después de la clase, fue
sacramental, me puse a borrar el pizarrón, y cuando a hablarme otra vez, y, al ver la expresión seria de su
terminé, la vi todavía sentada pacientemente como si carita, no resistí la tentación de decirle medio en
hubiera estado esperándome. broma:
—¿No vas a la reunión sacramental? —le pregun- —¡Esta debe de ser la primera vez que vienes tarde
té, sentándome a su lado. a la Iglesia! Cuando llegaste, parecía que habías co-
Jamie se arregló las tablas de su vestido bien plan- rrido desde tu casa hasta acá.
chado y me miró vacilante. Su mirada me indicó que tomaba mi comentario
—Sí; pero, ¿puedo ir con usted? con la mayor seriedad.
Su voz denotaba que temía disgustarme con su —Siento mucho haber llegado tarde. Anoche mi
petición. amiga me invitó a dormir en su casa y no me acordé
-—Por cierto que sí —le respondí—; te ayudaré a de que'hoy era domingo hasta muy de noche. Enton-
buscar a tus padres. Es mejor que nos apresuremos ces sí que volví a casa corriendo. Pero hoy debo de
porque la reunión ya comienza. . haberme quedado dormida.
—Mi mamá no viene a la Iglesia. Su respuesta me sorprendió y le pregunté:
—Entonces seguramente vienes con tu abuelita. —¿Te fuiste para tu casa sólita a esas horas de la
¿Dónde está? noche ?
Sus pequeñas manos se inmovilizaron y dijo: Asintió con la cabeza lentamente, como sí se hu-
—Nadie viene conmigo; vengo sola. biera estado confesando. El amor y la admiración
—¿Sola? Debes de tener amigos o parientes que pronto reemplazaron mi actitud bromista. Otra vez
te traigan. me dije que quería saber más sobre ella. ,
Me dijo que no con un gesto y me tomó de la ma- Esa tarde fui a la casa de Jamie a llevarle algo que
no para marcharnos, tras lo cual me preguntó:. habíamos hecho en clase. Me acerqué a la puerta y
—¿Puedo sentarme con usted? golpeé. Cuando ésta se abrió, el espeso humo de ci-
—Claro que sí —le dije, sonriendo ante su carita garrillos casi me hizo dar un paso atrás. El fétido olor
preocupada. del tabaco mezclado con el de la cerveza me hizo la-
Me sonrió expresando el sincero amor que los ni- grimear los ojos. Me recibió un hombre grande vesti-
ños pueden dar espontáneamente, y me llevó de la do con jeans y camiseta. Su cara era.ancha y barbu-
mano hacia la capilla. da, y me miró fríamente, directamente a los ojos,
Después de la reunión se me acercó el presidente después de haber mirado primero al manual. Me miró
de la Escuela Dominical mientras Jamie hablaba con sin pestañear con los ojos enrojecidos mientras yo
mi esposo, David. trataba de decir algo: cualquier cosa.
—Veo que ya conoce a Jamie. Tenía esperanzas de —¿Está Jamie? Tengo algo para ella de nuestra clase.
que la pusieran en su clase. Pensé que decirle de qué clase se trataba no sería
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eme en el contraste que había
entre la oscuridad del cuarto y la luz qut
irradiaba la niña.

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prudente. Sin embargo, me sorprendió cuando se ¡Por supuesto! ¡A todo hombre, a toda mujer, a toda
suavizó la expresión de su rostro. Al parecer, había niña, no importa donde viva! La luz que irradiaba Ja-
sacado en conclusión que yo no quería venderle na- mie parecía aún más brillante en contraste con la os-
da, y me indicó que pasara. Así que llené los pulmo- curidad de lo que la rodeaba. Decidí que le ayudaría a
nes de aire puro y entré. mantener el brillo de su pequeña luz hasta que crecie-
El humo parecía colgar del techo y me hacía picar ra más y brillara por sí sola.
la garganta. A través de esa neblina, vi un sofá des- Desde ese entonces, todos los días después de las
tartalado de color marrón y un sillón que hacía juego reuniones de la Iglesia, llevaba a Jamie a nuestra casa
con éste. Sentados, jugando a las cartas en una mesa, a comer, a jugar o simplemente a conversar. Con el
entre una pila de botellas de cerveza, estaban otros paso del tiempo, aprendimos a admirar cada vez más
dos hombres y una mujer. Cortinas gruesas cubrían la su fortaleza. Todos los que la rodeaban sentían la paz
ventana y no dejaban pasar el sol. Una lamparilla y la serenidad que irradiaba.
colgada del techo era la única luz que iluminaba el Una vez, cuando íbamos caminando a casa, me
cuarto. dijo de pronto:
La mujer me miró sorprendida. Aunque tenía el —-Sandy, quiero bautizarme. Tengo nueve años y
cabello aclarado y mucha pintura en los labios y en es hora de que lo haga, pero no tengo a quién pedirle
los ojos, me di cuenta de que jamie se parecía a ella. que me bautice.
Los hombres, vestidos más o menos como el primero, Me miró intensamente con sus grandes ojos oscu-
siguieron jugando como si no me hubieran visto. ros y sentí un gran amor por ella. Le di un fuerte
Volví a preguntar lo mismo, esta vez dirigiéndome a abrazo y nos fuimos saltando de la mano.
la mujer: Uno de los misioneros asignados a nuestro sector la
—¿Está jamie? Tengo algo que darle de nuestra bautizó unos meses después. El y su compañero tuvie-
clase. ron las charlas con ella y su madre le dio permiso pa-
Ella hizo un gesto y salió del cuarto arrastrando los ra que se bautizara. El día del bautismo, David y yo
pies. Volvió casi en seguida y dijo: nos sentamos en la cuarta fila, atrás de la mamá y de
—No está. Creo que está jugando por ahí con una la hermana de Jamie. La madre parecía estar un poco
amiga. más contenta que cuando yo la había conocido. Al
—Bueno, ¿podría entregarle estas cosas? Son de principio parecía sentirse un poco incómoda, pero
una actividad que hicimos hoy en clase. noté que, a medida que transcurría la reunión, se
La mujer tomó los dibujos y el libro y los colocó sentía más a gusto.
sobre una silla. El hombre que había quedado al lado Cuando Jamie entró vestida de blanco, pura y her-
de la puerta me la abrió y salí otra vez a la luz del sol mosa, me sentí muy orgullosa de ella. Nos sonrió al
y al aroma agradable de aquella tarde de otoño. pasar por nuestro lado con la sonrisa feliz de una niña
En el camino a casa, no hice más que pensar y re- de nueve años y la belleza de una hija de Dios:
cordar lo que había visto. ¿Cómo podía Jamie tener Mientras los misioneros dieron discursos sobre la fe
tanta devoción y madurez espiritual? Una y otra vez y la obediencia, yo la observaba mientras ella escu-
pensé en el contraste que había entre la oscuridad del chaba con la misma atención de siempre. Yo sentí
cuarto y la luz que irradiaba la niña. ¿Podría seguir que el Espíritu Santo verdaderamente estaba ense-
yendo a la Iglesia? ¿Cómo aprendería el evangelio ñándole lo que ellos decían. Cuando llegó el momen-
fuera de la Iglesia? ¿Qué la motivaría a seguir esfor- to de entrar en la pila bautismal, Jamie no vaciló.
zándose, con el paso de los años? De pronto, un pa- Me emocioné al vería, y las palabras de Cristo:
saje de las Escrituras vino a mi mente, interrumpien- "Dejad a los niños venir a mí" (Lucas 18:16), cobra-
do mis pensamientos: ron más significado para mí. Luego la confirmaron, y
"Pues he aquí, a todo hombre se da el Espíritu de me sentí agradecida, pues el poseedor del sacerdocio
Cristo para'que pueda distinguir el bien del mal" que lo. hizo pidió a nuestro Padre Celestial que ben-
(Moroni 7:16). dijera a su familia para que la apoyara como miembro
de la Iglesia. Dije "amén" a la bendición con entu-
siasmo porque sabía que Jamie ya tenía un Compañe-
ro constante que la guiaría toda su vida. Con la ayu-
uando Jamie entró vestida da del Espíritu Santo, su luz crecería y encontraría
de blanco, pura y hermosa, me sentí mucho gozo en el reino de Dios. •
muy orgullosa de ella. Tenía \a belleza
Sandra C. Brinley es profesora de inglés y David R. Brinley es asesor de
de una hija de Dios. la enseñanza del inglés en japón. Son miembros de la Rama Toyooka de la
Misión ¡apon Kobe.

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por el élder Carlos E. Asay
del Primer Quorum de los Setenta

P ara muchos Santos de los Últimos Días solte-


ros, particularmente para algunas de las
hermanas que no se han casado, el cortejo y
el compañerismo eterno son sueños que aún
no se hacen realidad. Es algo que anhelan, saben
que tal compañerismo eterno es una parte clave del
evangelio y, sin embargo, se sienten frustrados por
"Oraron por lo que más deseaban"
Es importante observar que mientras Cristo ense-
ñaba a los nefitas y oraba con ellos, "oraron por lo
que más deseaban; y su deseo era que les fuese dado
el Espíritu Santo" (3 Nefi 19:9). Los miembros de la
Iglesia hemos completado los pasos necesarios de fe,
motivo de no encontrar un compañero digno. arrepentimiento y bautismo y hemos tenido manos
Es una tentación muy grande para mí desear poder autorizadas puestas en nuestra cabeza para otorgarnos
juntaros al instante con compañeros perfectos y en- el don del Espíritu Santo. Pero, así como el amor
viaros unidos en matrimonio a las eternidades. Pero entre amigos o compañeros se debe cultivar y nutrir
tal solución sería satánica. Como recordaréis, Sata- como una tierna planta, de la misma manera debe-
nás deseaba dirigir el curso de nuestra vida, abolien- mos cultivar nuestro compañerismo con el Espíritu
do nuestras pruebas y elecciones, y de esta manera Santo.
frustrando el plan de nuestro Padre Celestial y dete- Cuando muchacho me enamoré de una hermosa
niendo nuestro progreso. joven. Más que cualquier otra cosa en el mundo aspi-
El cortejar a un compañero mortal no es algo que raba a tener su amor y compañerismo eternos. Por lo
podáis dirigir o planear solos; mas existe un tipo de tanto, me esforzaba por que mi comportamiento fuera
compañerismo de gran importancia eterna sobre el el mejor, mi hablar superior y trataba en lo posible de
cual vosotros tenéis pleno y completo control; es un dar lo mejor de mí cuando estaba con ella a fin de
compañerismo que todos podemos obtener y gozar, que gustara de mí. Incluso, después de estar compro-
sean cual sean la edad o el sexo; es un compañerismo metidos, reconocí la necesidad de continuar cor-
que sana la soledad, nos motiva a alcanzar la exce- tejándola. Mi deseo era, y aún es, complacerla y evi-
lencia y da significado a la vida. Se trata del compa- tar ofenderla en lo más mínimo. Ella es mi fuente de
ñerismo de uno de los miembros de la Trinidad: el inspiración, mi motivación para vivir en un nivel
Espíritu Santo, el Consolador, el Revelador, el San- más alto y más noble.
tificador, el Espíritu del Señor. Es un compañerismo El compañerismo del Espíritu Santo se cultiva en
que os asegura que no estáis solos, y que nunca lo forma muy similar. Para obtener su influencia y
estaréis. compañía constante, debemos tratar de ser lo mejor,
El compañerismo de mortales —el de una persona debemos ser dignos de su presencia. Veo cinco cosas
con otra— es importante y esencial, y si se mantiene que debemos hacer para atraer y retener al Espíritu
unido con amor y respeto mutuo, puede convertirse Santo:
en una camaradería celestial y brindar un gozo indes-
criptible. Sin embargo, este tipo de relación se vuel- 1. Debemos mantener nuestro cuerpo limpio.
ve vacía y sin significado si no tiene la influencia del
Espíritu Santo. Ningún compañerismo de personas No debemos contaminar nuestro tabernáculo mor-
mortales sobrepasará en importancia a la unión de tal de ninguna manera. Debemos obedecer la Palabra
una persona con el Espíritu del Señor. de Sabiduría; no debemos usar mal nuestros poderes
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f
s un compañerismo
que sana la soledad, nos motiva a alcanzar la
excelencia y da significado a la vida. Es un compañerismo
que os asegura que no estáis solos,
y que nunca lo estaréis.

de procreación; debemos hacer todo lo posible por (Moroni 7:32). ¿Cómo podemos ser aceptables ante
evitar las enfermedades y otros enemigos de nuestro el Espíritu Santo si no reconocemos ni admitimos a
cuerpo físico. "¿No sabéis que sois templo de Dios, y aquellos a quienes El representa, de quienes El testifi-
que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno ca? La verdadera adoración se demuestra por medio
destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; de nuestro amor y por llevar una vida como la de
porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo Cristo; es el tipo de adoración que abre nuestra vida
es" (1 Corintios 3:16-17). al poder del Espíritu Santo.

2. Debemos mantener nuestra mente limpia. 4. Debemos evitar toda iniquidad, toda forma de
maldad.
Debemos defendernos de toda idea indecente y
sensual y de otras influencias satánicas. Del libro Como se explicó previamente, los dones del Señor
Doctrina y Convenios recibimos este consejo y pro- cesan cuando la fe no está presente. Lo mismo se
mesa: "Deja que la virtud engalane tus pensamientos aplica, y el problema se acrecienta, cuando la iniqui-
incesantemente; entonces tu confianza se hará fuerte dad se halla presente.
en la presencia de Dios; y la doctrina del sacerdocio Alma dijo: "Ninguna cosa impura puede heredar el
destilará sobre tu alma como rocío del cielo. El reino del cielo" (Alma 11:37). De la misma forma,
Espíritu Santo será tu compañero constante" (D. y ninguna persona impura puede desarrollar una rela-
C. 121:45-46). ción duradera con el Espíritu
Hay muy pocas cosas que son más repulsivas que de Dios.
una mente maligna, generadora de inmundicia. ¿Pue-
de alguien aspirar a gozar de la compañía del Espíritu 5. Debemos orar, deleitarnos en las palabras dé
Santo si es de doble ánimo, si su mente divide su Cristo y andar rectamente ante Dios.
tiempo entre el Espíritu Santo y el Maligno? Yo creo
que no. El Espíritu del Señor enseña e insta aí hombre a
orar. (Véase 2 Nefi 32:8-9.) Las palabras de Cristo
3. Debemos ejercer la fe y reservar un lugar en nos ayudan a comprender quién es el Espíritu Santo y
nuestro corazón para el Espíritu Santo. cómo podemos invitarlo a nuestra presencia. (Véase
vers. 1-3.) El Espíritu de Dios persuade a los hom-
Se nos ha dicho que cuando no tenemos fe, perde- bres a hacer el bien y a creer en Cristo. (Véase Éter
mos el derecho a recibir manifestaciones del Espíritu 4:11-12; Moroni 7:16-17.) De manera que la ora-
de Dios. Moroni habló abiertamente con respecto a ción, el estudio de las Escrituras y el llevar una vida
los dones del Espíritu, incluso el de sanidades y el de recta son imperativos.
lenguas, y luego advirtió: "Y. . . todos estos dones de El escéptico y la persona novata en el evangelio
que he hablado, que son espirituales, jamás serán su- podrían preguntar: "¿Para qué procurar la compañía
primidos, mientras permanezca el mundo, sino por la del Espíritu Santo? ¿Para qué esforzarse por obtener
incredulidad de los hijos de los hombres" (Moroni su compañía? ¿Cuál es el beneficio?" Las respuestas
10:19). son abundantes si somos receptivos a los testimonios
Es sumamente importante que comprendamos que de quienes saben y tienen una asociación con el
"a fin de que el Espíritu Santo pueda tener cabida en Espíritu del Señor. Algunos de estos testimonios ayu-
[nuestros] corazones" debemos tener fe en Cristo dan a responder a preguntas acerca del valor de la
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eseanais poseer
una perfecta presciencia? ¿Desearíais tener
el poder de discernimiento? Desearíais tener el poder
para escuchar, sentir y conocer personalmente
las revelaciones de Dios?

relación con el Espíritu Santo. obedecería estrictamente las reglas misionales y que
¿Desearíais poseer una perfecta presciencia, el po- trabajaría diligentemente. Le aseguro que he trabaja-
der perfecto para anticipar lo que se debe hacer bajo do duramente y he obedecido todas las reglas". Luego
ciertas circunstancias? Si es así, debéis hacer lo que dijo algo muy importante: "Siento que mis pecados
Nefi aconsejó: "Si entráis por la senda y recibís al me han sido perdonados. Me siento perfectamente lim-
Espíritu Santo, él os mostrará todas las cosas que de- pio". El había sido limpiado por medio del servicio
béis hacer" (2 Nefi 32:5). dedicado y el desarrollo de su relación con el Espíritu
Santo. Había pasado por el fuego purificador, que
¿Desearíais tener el poder de discernimiento? había quemado sus impurezas.

¿Desearíais tener el poder de discernimiento, el ¿Desearíais recibir revelaciones de Dios?


poder para distinguir la verdad? Si es así, debéis leer
la palabra de Dios, reconocer la bondad de Dios, me- ¿Desearíais tener el poder para escuchar, sentir y
ditar y pedir a Dios. Si hacéis eso, Moroni testifica conocer personalmente las revelaciones de Dios? Por
que "por el poder del Espíritu Santo podréis conocer medio del profeta José Smith, el Señor prometió:
la verdad de todas las cosas" (Moroni 10:5). "Hablaré a tu mente y a tu corazón por medio del
Cuando servía como presidente de misión en Te- Espíritu Santo. . . éste es el espíritu de revelación"
xas, se me informó que cierto misionero había perdi- (D. y C . 8:2-3).
do su testimonio y que deseaba irse a casa. Por medio En una reunión en el templo escuché al presidente
de consultas me enteré de que un investigador había Marión G. Romney decir al final de su testimonio:
plantado dudas en la mente del joven misionero con "Es posible que ustedes no tengan necesidad de escu-
respecto a la divinidad de su llamamiento. En una char lo que he dicho hoy y es probable que no hayan
entrevista con el seudoinvestigador, experimenté la aprendido nada nuevo. Sin embargo, yo aprendí algo
manifestación especial del poder de discernimiento mientras hablaba y necesitaba escuchar estas pala-.
que me permitió saber que aquel hombre era un mi- bras". Este es un hermoso y sincero reconocimiento
nistro de otra fe, que se hacía pasar por estudiante de la influencia del Espíritu Santo.
universitario y sincero investigador del mormonísmo. ¿Desearíais gozar de dones espirituales, por ejem-
Confrontado con el conocimiento que se me había plo, del poder para sanar o para ser sanado, o de ha-
revelado, se confundió y admitió su mentira. Con el blar en lenguas? De ser así, obedeced lo que dice el
engañador fuera del escenario y con un conocimiento profeta Moroni: "Y todos estos dones vienen por el
de la verdad, el misionero permaneció y completó Espíritu de Cristo; y vienen a todo hombre, respecti-
una honorable misión. vamente, de acuerdo con su voluntad" (Moroni
En una ocasión se me acercó un misionero que es- 10:17).
taba en la última semana de su misión y me recordó ¿Desearíais tener el poder de la palabra convincen-
que hacía dos años yo le había dado el visto bueno te, el poder para hablar como un ángel? Si es así, dad
para servir en una misión. Le había otorgado el per- oídos a la pregunta de Nefi: "¿No os acordáis que os
miso con algo de reserva por motivo de que con ante- dije que después que hubieseis recibido el Espíritu
rioridad a su misión había cometido una cantidad de Santo, podríais hablar con lengua de ángeles?" (2
transgresiones. El me dijo: "Élder Asay, usted me dio Nefi 32:2).
permiso para cumplir una misión después del debido Treinta años atrás, mientras servía como misione-
arrepentimiento y de haberle prometido que ro en el Cercano Oriente, mi compañero y yo recibí-
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E
'/ compañerismo
de mortales —el de una persona con otra— es
importante y esencial. Sin embargo, ningún compañerismo
de personas mortales sobrepasará en importancia a la
unión de una persona con el Espíritu del Señor.

mos la asignación de visitar una rama dividida por Los mortales hemos sido investidos con maravillo-
diferencias y apostasía entre los miembros. Acepta- sas habilidades y un gran potencial. Pero, por más
mos nuestra asignación con mucha humildad y maravillosos que estos poderes mortales sean, son tan
espíritu de oración. Se llevó a cabo una reunión con sólo una sombra de aquellos poderes que pueden reci-
las personas descontentas y mi compañero dio un ser- birse por medio de nuestra relación con el Espíritu
món del cual dependía que pudiésemos unir nueva- Santo.
mente a todos. Después de haber ayunado y orado Ruego que no os engañéis diciendo que estas pala-
fervientemente los dos, él se levantó con confianza y bras acerca del compañerismo con el Espíritu son pa-
efectuó el milagro. Habló con lengua de ángel. Las ra otras personas y no para vosotros. Dios no hace
palabras de ese joven élder sin mucha experiencia sa- acepción de personas. Sus bendiciones y dones no
naron heridas enconadas en el corazón de hombres están reservados para unos pocos. No importa si se
mucho mayores que él, incitaron confesiones y lite- trata de un apóstol o de un diácono, de una hermana
ralmente salvaron una rama de la Iglesia. líder de la Sociedad de Socorro o de una maestra de
la Primaria; a todos se nos da la promesa de obtener
¿Desearíais tener el poder para resistir las los dones del Espíritu si nos colocamos en la posición
tentaciones? de recibirlos.
Si vuestra introducción a este compañerismo divi-
¿Desearíais tener el poder para defenderos de las no parece incompleta, repasad vuestro bautismo y
tentaciones y resistirlas? De ser así, haced lo que Al- confirmación y determinad si verdaderamente lo ha-
ma y Pablo sugirieron: Orad "incesantemente.. . y béis recibido como se os mandó. Prestad atención a
así [sed] guiados por el Espíritu Santo" (Alma 13:28). la limpieza física, a la pureza de vuestros pensamien-
¿Desearíais obtener paz y seguridad perfectas en to- tos, a vuestra fe en Cristo, al deseo de evitar todo
do lo que hacéis? De ser así, haced del Espíritu Santo tipo de pecado y a los hábitos de oración y estudio.
vuestro compañero y recibiréis el tipo de confianza De vez en cuando es prudente meditar y determi-
que Nefi y Lehí tuvieron: "¡Paz, paz a vosotros por nar si realmente conocéis al Espíritu Santo. Deteneos
motivo de vuestra fe en mi Bien Amado, que ha lo suficiente para poder ver cuan bien conocéis los
existido desde la fundación del mundo!" (Helamán dones y poderes espirituales. Observad si son eviden-
5:47). tes en vuestra vida los dones y poderes como la previ-
Y por último, ¿desearíais tener el poder para reali- sión, el discernimiento, la santificación, la revela-
zar cosas que vayan más allá de vuestras habilidades ción, los dones espirituales, el hablar como con len-
naturales? ¿Desearíais tener la ayuda de poderes invi- gua de ángeles y la paz interior. Determinad si las
sibles en todo lo que hacéis? Me refiero al poder de experiencias espirituales son parte regular de vuestra
hablar con autoridad convincente, incluso el poder vida diaria. Y si encontráis que estáis faltando en al-
de recibir revelaciones que os permitan decir cosas gún aspecto, tened la firmeza de carácter para cam-
que no teníais planeadas decir. Hablo del poder de biar y poner en orden vuestra vida.
recibir impresiones, las cuales, si se les presta aten- Si hacéis estas cosas, nunca estaréis solos, porque
ción, brindarán bendiciones a vosotros y a las demás tendréis el compañero más importante de todos: el
personas. Espíritu Santo.

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1 llegar a casa después de uno de los puntos del artículo, le-
un arduo día de trabajo,
me encontré con una
EL PRESIDENTE vantaba la vista, me miraba a los
ojos y me decía:
nota de mi esposa en la Esto suena como algo que tú
que me decía que había mismo hubieras escrito, George.
ido de visita a casa de uno de En todo momento me hizo sen-
nuestros hijos, y que no regresaría tir bien hacia mí mismo con hala-
sino hasta más tarde. gos y comentarios positivos since-
Me preparé algo para comer y ros. Al llegar al décimo punto,
no bien me había sentado, vi por me di cuenta de que ya no estaba
la ventana que venían los maes- tan interesado en que terminara;
tros orientadores, el hermano POR MEDIO DE MIS se sentía en la sala de mi hogar un
Sven Jensen y el hermano MAESTROS ORIENTADORES espíritu sumamente reconfortante.
Meyers. Me levanté y, a decir Cuando Sven llegó al punto
por George D. Durrant
verdad, fui a recibirlos sin mucho doce, cerró la revista y, sonrien-
entusiasmo. Les expliqué que do, me preguntó:
acababa de sentarme a comer al- ¿Qué piensas, George?
go y les pregunté si no podrían re- Casi no podía ni hablar. Lo
gresar un poco más tarde, a lo que pensaba era que aquello había
cual uno de ellos respondió: sido como si el mismo presidente
—Llamamos por teléfono para Ezra Taft Benson hubiera estado
ver si estaba bien que viniéramos, de visita en mi hogar. Mejor di-
George, pero no había nadie. Así cho, era como si por no haber po-
que pasamos de todas maneras, dido ir él en persona, hubiera en-
por las dudas, en caso de que ya viado a un mensajero especial
hubiera alguien en casa. Iremos a que lo representara. No me cabía
visitar a otra de nuestras familias duda de que había escuchado las pa-
y volvemos más tarde. labras del Profeta pronunciadas
A la media hora, regresaron, y por boca de mi maestro orienta-
tras una breve y cordial conversa- dor, y sabía que el mensaje me
ción, el hermano jensen me dijo: había llegado al corazón.
—-George, quisiéramos leerte Poco después, cuando llegó el
un artículo escrito por el presi- momento de marcharse, Sven
dente Benson. Sabiendo que me haría esa pre- percibió que algo muy particular
Sonaba interesante, pero esta- gunta, me paraba tan derecho co- había acontecido durante su visi-
ba bastante cansado, y el interés mo podía y le respondía con la ta, y en su rostro se denotaba la
se me desvaneció por completo mayor dignidad posible: emoción cuando nos despedimos
cuando agregó: —Sí, Sven, sé con todo el con un apretón de manos. Enton-
—Haremos un repaso de los corazón que el evangelio es ces, mis maestros orientadores se
doce puntos que menciona en el verdadero. fueron, pero su mensaje permane-
artículo, tendientes a vencer la Entonces sonreía, como si pu- ció conmigo. Cuando llegaron,
depresión. diera mirarme al alma, y decía: me sentía un poco deprimido, pe-
De pronto me di cuenta de que —¡Qué bien, George! ro ya no lo estaba más, pues
la visita no sería tan breve. Al comenzar a referirse al primer había sido renovado espiritual-
—Número uno —dijo el her- punto del artículo sobre cómo mente y estaba pronto para regre-
mano Jensen, tras lo cual hizo vencer la depresión, me explicó: sar a mis deberes.
una pausa y me miró a los ojos, y —Ante todo, George, si uno Más tarde esa misma noche,
allí se produjo una comunicación está deprimido, debe arrepentir- comprendí que en realidad había
maravillosa sin palabras. Me vi- se. ¿Por qué crees que sea necesa- una manera más de combatir la
nieron a la memoria las muchas rio arrepentirse en tal caso? —me depresión: una visita amorosa,
veces que me había encontrado preguntó, a lo cual respondí: instructiva y edificante de los
con este buen hombre en la capi- —Bueno, recuerdo que en el, maestros orientadores. •
lla cuando me estrechaba la ma- Libro de Mormón dice que "la
no y me decía: desesperación viene por causa de George Durrant, presidente del Centro de Ca-
pacitación Misional de Provo, Utah, es miem-
—George, ¿todavía sabes que la iniquidad" (Moroni 10:22). bro del Barrio Park, de la Estaca Provo Utah
el evangelio es verdadero? A medida que Sven leía cada Central.
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c a b a b a de terminar mí trabajo en la pensar que ésa era la razón por la q u e mi p a d r e
g r a n j a d o n d e vivíamos, cuando sólo podía estar con nosotros durante las noches y
escuché el llamado de mi madre. Para los fines de semana. A ello se debía q u e mi m a d r e
entonces yo ya había llevado las vacas fuera quien nos e n s e ñ a r a cómo ordeñar v a c a s y
a pastar, y h a b í a d a d o de comer a los apilar el heno y los granos, regar las cosechas, en-
conejos, los pollos, los cerdos y los ca- ganchar los caballos a las carretas, hacer cercas,
ballos. Y tenía en el camión los tres construir gallineros y todas las otras tareas q u e se
recipientes con leche listos p a r a hacen en una granja. Esa era la razón por la cual
llevar a la lechería. m a m á nos e n s e ñ a b a tanto el evangelio y nos con-
En e s a época yo tenía quince años, y ese año, taba historias de la Biblia y del Libro de Mormón
1936, h a b í a sido uno de los m á s difíciles p a r a nues- mientras le a y u d á b a m o s en el trabajo, porque mi
tra familia, constituida de trece personas. Mientras p a d r e estaba en ese otro lugar, y su trabajo era
uno de mis h e r m a n o s servía en una misión, ocho importante y difícil.
de nosotros todavía asistíamos a la escuela y los Al acercarme a la entrada, p u d e divisar g r a n d e s
m á s pequeños se q u e d a b a n en casa dando q u é edificios a ambos lados de las vías del ferrocarril.
hacer a mí madre. El rechinar de los vagones al e n g a n c h a r s e unos
Un día, m a m á me dijo: "Jay, hoy no vas a ir a la con otros era escandaloso; también se e s c u c h a b a
escuela porque necesito q u e vayas a los talleres el ruido del vapor de las locomotoras, los pitos de
donde trabaja tu padre; tendrás que conseguir a señales, los silbatos y los martillazos de los hom-
alguien q u e te lleve. Me urge q u e le entregues una bres q u e trabajaban con diferentes equipos
carta muy importante; de lo contrario, no te pediría ferroviarios.
que faltaras a la escuela". Los talleres menciona- Repentinamente, se escuchó u n a a g u d a sirena y
dos e r a n estaciones de reparación de locomotoras todos los otros ruidos cesaron. Ya era la hora de
y v a g o n e s de ferrocarril. Mi p a d r e trabajaba en almorzar, y pronto empezaron a a p a r e c e r hombres
ese lugar p a r a sostener a la familia. por un lado y por otro, dejándose escuchar cientos
C u a n d o mí m a d r e me entregó la carta, la cual de voces desde todas direcciones. ¿Y cómo voy a
d e b e de h a b e r sido muy importante p a r a que yo encontrar a mi padre entre tantísima gente?, me
tuviera q u e faltar a la escuela todo un día, me re- pregunté en aquel momento.
pitió: "Disculpa q u e te h a g a esto, Jay, pero no hay Pasé por el portón de entrada y me dirigí al sitio
otra forma de hacerle llegar esta carta.a tu papá". de trabajo m á s cercano q u e p u d e ver, confiando
Ni siquiera podía llamarlo por teléfono, porque en en q u e podría pedirle a alguien a l g u n a informa-
la granja no teníamos uno. ción. A un lado del camino se veían pilas de mate-
El lugar d o n d e trabajaba mi p a d r e q u e d a b a riales y equipo expuestos al aire libre. Al recorrer
aproximadamente a veinticuatro kilómetros de dis- la vista por aquel sitio, divisé a p a p á inmediata-
tancia de casa. Primero, tuve q u e caminar tres ki- mente. Me detuve permaneciendo inmóvil por al-
lómetros p a r a llegar a la carretera; mas el día era gunos minutos y tuve la impresión de q u e no h a b í a
hermoso y el aire veraniego muy a g r a d a b l e . Des- nadie más en las inmediaciones; como si hubiéra-
pués, alguien me levantó y me llevó al próximo mos estado en un mundo propio, sentí q u e sólo
pueblo y, luego de atravesarlo, otra persona me existíamos él y yo, y el corazón se me hinchó de
llevó hasta un camino de tierra q u e me conduciría gratitud por lo que entonces vi. Allí, senta-
a la entrada de los talleres de la compañía donde do en el suelo, con las piernas estira-
estaba empleado mi p a p á . Al bajarme del coche, das y la espalda recostada contra un
le agradecí al conductor y emprendí la caminata montón de materiales, estaba mi
de veinte minutos hacía la entrada. Al ir caminan- padre; su sombrero se hallaba
do, observé aquel lugar del cual mi p a d r e tanto en el suelo, junto a él; con la
nos h a b í a hablado, en donde él se ensuciaba tanto bolsa de comida entre las
la ropa y terminaba exhausto sus días, el sitio de rodillas y. las manos reco-
trabajo q u e mi m a d r e decía ser tan importante pa- gidas sobre las
ra nuestra numerosa familia. piernas, los ojos
Con u n a comprensión más amplía, me detuve a cerrados y la

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cabeza inclinada, sus labios proferían palabras de hijo mío".
agradecimiento hacia Dios por todas las cosas que Hasta la fecha,
le d a b a , y por m u c h a s otras más (estoy seguro de desconozco el men-
que así era, por el tiempo q u e ocupó en hacerlo y el saje que llevaba aquella
sentimiento q u e tuve mientras lo veía orar). Al carta que le entregué,
permanecer yo en silencio y observarlo atentamente, pero jamás he olvidado el
penetró en mi corazón un profundo mensaje: No hay que él mismo me transmitió
nadie a ¡a vista a quien él tenga que demostrarle su a mí con su actitud.
fe. Es evidente que papá es un verdadero creyente.
C u a n d o terminó y levantó la vista, se dio cuenta de
q u e yo estaba allí. Se dibujó en su rostro una
humilde sonrisa, y a medida q u e me acercaba a él,
se le llenaron los ojos de
lágrimas. Entonces
me dijo: "Hola,
Jay. ¡Qué guste
me da verte
aquí! Acércate
y siéntate,

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] a obra genealógica y la o- ción patriarcal y en q u e la única
b r a misional son paralelas, m a n e r a que tenía de poder hacer
pues a m b a s llevan el evan- investigación genealógica era pre-
gelio y las ordenanzas de salvación a cisamente ir de misionera a Corea.
los hijos de Dios: u n a a los muertos y Después de llegar a la c a s a de la
la otra a los vivos. La misión me dio misión, u n a de las primeras pre-
la posibilidad de trabajar en las dos. guntas q u e me hizo el presidente
Nací en Weonju, Corea del Sur, fue: "¿Ha p e n s a d o en hacer algo de
en el a ñ o 1958, y m á s tarde fui obra genealógica mientras esté en
a d o p t a d a por u n a familia de los la misión?" Su pregunta me causó
Estados Unidos. C u a n d o tenía catorce años, me sorpresa, pero también me hizo sentir más a n i m a d a ,
convertí a la Iglesia. Un a ñ o después, p r e o c u p a d a y le contesté que sí.
porque no sabía qué hacer al terminar la escuela Pasaron tres meses, durante los cuales me con-
secundaria, decidí pedir mi bendición patriarcal. centré en aprender el idioma de los coreanos y no
Antes de dármela, el patriarca habló conmigo y me trabajé n a d a en la genealogía. Un día les pedí a
aconsejó que a y u n a r a y orara sobre lo q u e quería mi compañera coreana y a otra misionera q u e
saber por medio de la bendición. Así lo hice, y al también era de allí q u e me a y u d a r a n en la bús-
recibirla sentí emoción y satisfacción por las prom- q u e d a que estaba por comenzar, y a m b a s asintie-
esas que contenía. Pero había u n a parte que me ron. El día de preparación nos fuimos las tres a la
descon certaba, y era la q u e decía; agencia que se había e n c a r g a d o del trámite de
"Tendrás el g r a n privilegio de hacer la obra por adopción. C u a n d o los empleados supieron q u e el
tu familia, por ¡os padres que no has conocido. Si propósito de mis averiguaciones era buscar mi
te esfuerzas por buscar registros de tu familia, reci- genealogía, se pusieron a revisar los registros has-
birás a y u d a de lo alto; los cíelos responderán a tus ta q u e encontraron el mío.
oraciones si a y u n a s y oras y si eres fiel en dedicar
tu tiempo y tu talento." ¿Otra niña?
Ya sabía q u e debía buscar mi genealogía, pero
no podía entender aquello de "los padres que no Junto con mí expediente había otro q u e tenía la
has conocido". No tenía la menor idea de quiénes fotografía de u n a niñita q u e se parecía mucho a mí
e r a n mis p a d r e s de s a n g r e ni de cómo averiguarlo. cuando yo tenía la misma edad; p e n s é si se
Todo lo q u e sabía es q u e era huérfana cuando mis habrían confundido los papeles, pero los emplea-
padres me h a b í a n adoptado. dos me explicaron q u e las p a l a b r a s hyungje im,
Casi al finalizar el curso universitario, después escritas junto a nuestros respectivos nombres en
de oración e introspección sinceras, sentí la impre- ambos expedientes, querían decir "hermanas".
sión muy fuerte de q u e debía salir en una misión. ¡Eso significaba q u e tenía u n a h e r m a n a !
Hablé con el obispo, llené la solicitud y la envié; Debido a q u e en los papeles de adopción figura-
luego empezó a preocuparme la idea de que pu- ban los nombres y las direcciones de las dos en los
dieran m a n d a r m e a Corea, pues no tenía ningún Estados Unidos, le escribí a la h e r m a n a q u e aca-
deseo de ser misionera en mi tierra natal. Pasaron b a b a de descubrir, y que vivía en el estado de
unas s e m a n a s y por fin recibí el llamamiento ¡a la Oklahoma, explicándole por q u é estaba en Corea
Misión de Corea—Seúl Oeste! y el motivo por el q u e b u s c a b a los registros. Como
A u n q u e tuve q u e hacer un esfuerzo por aceptar yo no tenía la misma dirección q u e en la época de
mí llamamiento a aquella misión, al acercarse el la adopción, supuse que la de ella también podía
momento de partir, e m p e c é a pensar en mi bendi- ser diferente y q u e quizás la carta no le llegara; y

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puesto q u e ella h a b í a cambiado de vida y tenía un tanto decepcionados, a u n q u e no estábamos
otra familia, me p r e p a r é por si no tenía ningún in- dispuestos a darnos por vencíaos. El presidente
terés en mí ni en mi investigación familiar. Ch'oi y yo tuvimos la impresión de q u e debíamos
Pasó un mes y medio sin q u e recibiera respues- volver a la agencia y revisar otra vez los expedien-
ta. A u n q u e p e n s a b a q u e quizás no me contestara, tes. Al hacerlo, encontramos el nombre "O'Con-
nunca perdí la esperanza. Mi familia también esta- nor", escrito en coreano, en la esquina de u n a de
ba ansiosa por saber de ella, y mi p a d r e estaba las hojas. Supimos q u e donde estaba el asilo h a b í a
dispuesto a tratar de buscarla si no contestaba mi habido u n a vez un orfanato, y q u e en realidad era
carta. Pero el 14 de febrero recibí u n a carta firma- el lugar donde mi h e r m a n a y yo h a b í a m o s vivido
da por Lila Lew Miller, mi hermana; la mía le hasta ser adoptadas. Con eso, ya teníamos un
había llegado porque sus padres todavía vivían en punto de partida.
la misma casa; me enviaba a d e m á s una foto en la El presidente Ch'oi me aconsejó entonces q u e
q u e estaba con su marido y su hijito, y me decía publicáramos un artículo en uno de los periódicos
q u e ella también estaba ansiosa por conocerme. de Seúl, porque después de la G u e r r a de C o r e a
muchas personas h a b í a n hecho eso tratando de
¿Orfanato o asilo para ancianos? encontrar familiares con los q u e h a b í a n perdido
contacto. Nos reunimos con un reportero y él escri-
En nuestros registros también había encontrado bió un breve artículo b a s a d o en lo q u e le dijimos
el nombre del orfanato de Weonju en el q u e sobre mi h e r m a n a y yo, haciendo u n a descripción
habíamos vivido; se llamaba Weonju Yangnyoe de nosotras. El artículo se publicó el 2 de junio de
Weonjang, p a l a b r a s cuya definición exacta no pu- 1984, e inmediatamente empezamos a recibir lla-
de encontrar en el diccionario coreano, pero q u e m a d a s telefónicas d e personas q u e p e n s a b a n q u e
tanto podían querer decir hija adoptada como podríamos ser de su familia.
asilo para ancianos.
Les pedí a varios misioneros de Weonju que tra- Una llamada diferente
taran de averiguar q u é orfanatos h a b í a n trabajado
con aquella agencia de adopción a fines de la dé- Una de esas llamadas fue de un h o m b r e a quien
c a d a de 1950 y principios de la de 1960. Pero, des- no le podía entender bien todo lo q u e me decía;
pués de unos meses de averiguaciones, no pudie- pero, con la a y u d a de mi compañera, supe q u e su
ron encontrar n a d a . nombre era Ko In Soo y q u e me llamaba d e s d e
En esos días yo trabajaba en las afueras de Seúl Shillim, un pueblito q u e estaba en las afueras de
y me hice a m i g a del presidente Ch oí Dong Wan, Weonju. El me dijo q u e su familia h a b í a d a d o en
que integraba la presidencia de la Estaca Seúl adopción dos gemelas a fines de la d é c a d a de
Oeste. Una vez en q u e estábamos de visita en su 1950. Pero yo d u d a b a de q u e nosotras fuéramos
casa, mencioné mí bendición patriarcal y la pro- gemelas porque, a u n q u e por las fotos se veía q u e
mesa q u e contenía, y él se ofreció a ayudarme. Po- éramos muy parecidas, nuestras fechas de naci-
cas s e m a n a s después, el día de preparación, él, miento eran diferentes.
mí c o m p a ñ e r a y yo nos dirigimos a Weonju p a r a De todos modos, Ko In Soo nos invitó a q u e fué-
ver si podíamos encontrar allí algún dato. ramos a visitarlo; pero nos preguntó si sería posible
En uno de los orfanatos, nos dijeron que una mi- que primero nos reuniéramos con su hijo, Ko Hun
sionera cristiana de C a n a d á , la h e r m a n a O'Con- Kyu, q u e vivía en Seúl, puesto q u e él y su m a d r e
nor, llevaba registros de los huérfanos, pero q u e habían sido los q u e h a b í a n puesto a las g e m e l a s
había regresado a su país hacía varios años. Nos en el orfanato. Así q u e llamamos a éste y arregla-
q u e d a b a otro lugar por visitar, el q u e menciona- mos p a r a encontrarnos con él.
b a n los registros; pero descubrimos q u e no era un Si lo q u e nos decía a q u e l hombre e r a verdad,
orfanato sino un asilo p a r a ancianos. Sin embargo, ¡entonces ellos serían parientes nuestros! Todavía
yo tuve u n a sensación muy extraña, algo como sí tenía ciertas vacilaciones en cuanto a conocer a
hubiera estado antes en aquel lugar. Eso me con- mis familiares. C u a n d o nos encontramos con el se-
fundió a ú n más. ñor Ko y su esposa, a p e n a s me vio me dijo q u e yo
Después de aquellas averiguaciones que pare- era igual a su tía, y con lágrimas en los ojos empe-
cieron completamente infructuosas, nos quedamos zó a hablarme del pasado, expresando profundo
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de inscripción. Allí no había ningún dato de mi dre dijo que lo llamaría por teléfono p a r a q u e se
hermano, pero encontramos a una persona que encontrara con nosotros. Mientras él fue a hacer la
conocía a mis familiares y nos dijo q u e allí usaban llamada, les pregunté a las otras p e r s o n a s de la
otros nombres (lo cual no es raro entre los corea- familia si tenían algún registro familiar, y me lleva-
nos). Volvimos a revisar los registros y esa vez en- ron un enorme libro impreso de nuestro linaje.
contramos q u e se hacía referencia a una escuela
en Taegu, otra ciudad del sur de Corea. El evangelio para la familia
Después de regresar a Seúl, el presidente Ch'oi
consultó con otros líderes de la Iglesia en Taegu, y Mi padre hizo arreglos p a r a q u e nos encontrára-
ellos encontraron dos direcciones en los registros mos con mi hermano en un restaurante de P o h a n g
de matrícula escolar: u n a en Young Duk, donde aquella misma noche. Al verlo experimenté u n a
Kim Chin Ku había vivido antes de casarse con mi dulce sensación de paz y la seguridad de q u e
madre, y otra en Taegu mismo. Decidimos averi- aquella era de verdad mi familia, la familia corea-
guar en ambos lados, pero el hijo del presidente na de la que procedía. El estaba muy nervioso y
Ch'oi, q u e iba con nosotros, opinaba q u e temblaba de emoción mientras le c o n t á b a m o s lo
debíamos ir primero a Young Duk, y eso hicimos. que habíamos hecho y le mostrábamos los docu-
Al llegar al pueblo, fuimos directamente a la esta- mentos que teníamos. Hasta aquel momento no
ción de policía; los oficíales de servicio conocían a había tenido la menor idea de q u e la mujer q u e
la familia y se ofrecieron a acompañarnos, pues no había sido madre p a r a él era, en realidad, su ma-
vivían en ese pueblo. drastra. Pero después de p a s a d o el primer momen-
En un taxi, nos dirigimos a otra parte aislada del to de asombro, demostró estar contento de saber
país, atravesando campos de arroz y montañas, que yo era su h e r m a n a menor.
hasta llegar a otra p e q u e ñ a aldea. Bajamos del Sentí que había recibido la respuesta a mis ora-
auto y el h e r m a n o Ch'oi habló con uno de los luga- ciones. Todas las veces en q u e h a b í a m o s encontra-
reños; él nos dijo q u e Kim Chin Ku vivía en el pue- do un nuevo dato o conocido a un familiar, h a b í a
blo, pero q u e en ese momento se hallaba trabajan- sentido una gran paz; y los sentimientos q u e tenia
do en el campo. Al oír eso, el taximetrista se ofreció hacía los de las familias Ko y Kim e r a n muy dife-
p a r a ir a buscarlo. Mientras esperábamos, me in- rentes de lo que había sentido al conocer a otras
vadió u n a sensación de temor. ¿Qué haría sí aquel familias que afirmaban ser la mía. Después del pri-
hombre era realmente mi padre? mer viaje infructuoso a Weonju, había orado fer-
Al acercarse el taxi, vi en el asiento de atrás a vientemente pidiéndole al Señor q u e me hiciera
dos personas: un niño y un hombre de edad. Se saber sin dudas cuando encontrara a la q u e de
bajaron y nos saludamos. El hombre tenía la piel verdad era mí familia, y El lo había hecho.
a r r u g a d a y envejecida por el sol, pero en su Al pensar en aquella búsqueda, me doy cuenta
fisonomía había un aire de dulzura y sinceridad, y de que sólo fui un instrumento en las m a n o s del
q u e d é convencida de q u e era mi padre. Señor p a r a hacer Su obra, y q u e h a b í a u n a fuerza
Su nombre original era Kim Hong Suk, pero lo muy real y potente q u e me impulsaba continua-
conocían también por el de Kim Chin Ku. Nos invi- mente. Al principio no entendí lo q u e eso significa-
tó a ir con él a su casa, y nos dirigimos allí por un ba, pero ahora le estoy s u m a m e n t e a g r a d e c i d a de
camino de tierra. Luego llegamos a un patio donde haber podido encontrar a mi familia. Como resul-
había un buey atado a un árbol. Del otro lado de tado de ello, mis primos están estudiando el evan-
la c a s a h a b í a un granero. Dentro h a b í a u n a estera gelio con los misioneros, y yo se lo estoy e n s e ñ a n -
de paja sobre el piso, a la m a n e r a de alfombra. do al hermano q u e a c a b o de descubrir. También
Nos sentamos y mí p a d r e se sentó a mí lado; nos estoy ansiosa por conocer a mí h e r m a n a gemela.
contemplamos el uno al otro con interés. Todos los Además, he tenido la oportunidad de encontrar los
de la a l d e a fueron a vernos, uno por uno. nombres de cientos de mis a n t e p a s a d o s q u e h a n
Le h a b l a m o s a mi p a d r e de nuestra búsqueda y estado esperando hasta a h o r a q u e yo les abriera
él confirmó lo q u e el señor Ko nos había contado. la puerta a las bendiciones del evangelio. •
Luego le preguntamos por su hijo, mi hermano, y /uíee Dunnaway estudia ciencias políticas en la Universidad
nos dijo q u e se llamaba Kim Do Yun y que vivía en Brígham Young, y ella y su esposo, Kelly Dunnaway, viven en
Taegu, donde asistía a u n a escuela técnica. Mí pa- Pravo, estado de Vtah.

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por Ronald J. Dunn
a era invierno y estábamos casi ai ímai dei
campeonato de basquetbol (baloncesto) de
la Iglesia. El equipo de jóvenes de nuestro
barrio iba en primer lugar; durante el último parti-
do estábamos jugando muy bion y les llevábamos
bastante ventaja. Yo había jugado ol mejor primor
tiempo de toda mi "carrera" de jugador de bas-
quetbol de la Iglesia: había hecho veinte puntos.
Al mismo tiempo había cometido cuatro íaltas; una
más y quedaría íuera del juego.
Me sentía bastante orgulloso de mi habilidad y
estaba a c t u a n d o con cierta arrogancia. Hice saber
a todos q u e p e n s a b a que uno de los arbitros, el
q u e me h a b í a cobrado las faltas, estaba tratando
deliberadamente de s a c a r m e del juego. Varias ve-
ces durante el torneo, y demostrando poca ética
deportiva, yo lo h a b í a a c u s a d o éntrente de todos
de no ser buen arbitro.
Apenas empezado el segundo tiempo, decidí
que si me iban a expulsar del partido por una falta
más, mejor la cometía con u n a jugada que llama-
ra la atención. Intercepté un p a s e del otro equipo y
corrí con la pelota hacia un extremo de la cancha
p a r a hacer un punto fácil. Lo único que se
interponía entre el cesto y yo era un jugador con-
trario, el más bajo de todos. Al acercarme al table-
ro, y mientras hacía rebotar la pelota con la mano
derecha, le tiré un codazo de izquierda al jugador
q u e me m a r c a b a , q u e le pegó en el mentón, tirán-
dolo fuera de la cancha. Con el campo abierto, hi-
ce un doble. Al entrar la pelota al cesto, los silba-
tos de los arbitros se oían por sobre el griterío de
la multitud.
Me expulsaron del juego por mi conducta antide-
portiva, y la rabia q u e tenía acumulada desde el
principio del campeonato salió a relucir con insul-

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tos y b a r b a r i d a d e s dirigidas al arbitro q u e yo con- q u e ñ a casa y golpeé en la puerta. No h a b í a nadie.
sideraba tan injusto. Arrojé una toalla al piso y vo- Tiritaba y tenía los pies, los dedos de las m a n o s
ciferé hasta llegar a los vestuarios, donde inmedia- y las orejas casi congelados e insensibles. Me di
tamente me puse la ropa de calle sobre la empapa- vuelta y comencé a correr hacia la c a s a m á s cer-
da ropa deportiva. Después, gritándole una vez cana, la única de las inmediaciones. No estaba
más al "injusto" arbitro, me interné en la helada muy lejos y, al acercarme, me di cuenta de q u e
noche, subí a la camioneta de mi p a d r e y me marché. pertenecía al arbitro q u e yo había insultado e s a
C u a n d o a r r a n q u é el motor, me di cuenta de que misma noche. El frío era tan desesperante q u e no
había nevado, pero el calor del ejercicio sumado a tuve más remedio q u e olvidarme de mi amor pro-
la ebullición de mis emociones no me permitieron pio y llamar a la puerta. Al abrirse, me recibió el
percatarme de q u e no tenía puesto un abrigo. rostro severo de aquel hermano.
En lugar de ir derecho a casa, decidí visitar a un Me las arreglé p a r a explicar la situación, d u d a n -
amigo. No sé por q u é tomé otro camino que me do de q u e su reacción fuera muy positiva. Sin em-
parecía m á s directo, pero pronto me encontré lejos bargo, el buen hombre tomó dos abrigos, uno de
de la carretera principal en u n a zona despoblada ellos p a r a mí, y mientras yo e s p e r a b a en la acoge-
q u e no me era familiar. La nieve caía incansable y dora casa, él fue a buscar su tractor, u n a c a d e n a y
el viento empezó a soplar apilando la nieve por una lata de gasolina. Nos dirigimos en tractor, afron-
uno y otro lugar. Como la nieve cubría el camino, tando la tormenta, hacía mi camioneta a b a n d o n a -
me era imposible distinguir por dónde iba, y pron- da, empujando los montones de nieve q u e encon-
to me encontré atascado en un montón de nieve. trábamos a nuestro paso con la p a l a especial q u e
Traté d e s e s p e r a d a m e n t e de sacar de allí la camio- llevaba la máquina. Le llevó sólo un momento re-
neta, pero fue inútil. Por fin se a p a g ó el motor; se molcar la camioneta hasta la carretera, ponerle gaso-
me había a c a b a d o la gasolina. lina y ver que me m a r c h a r a a c a s a sin problemas.
Permanecí un momento al oscuro, pensando en Durante los días,siguientes a m e n u d o reflexioné
q u é podría hacer, hasta q u e el frío me volvió a la sobre la ironía de los acontecimientos q u e de pron-
realidad. Empecé a temblar; tenía la ropa húmeda to y sorpresivamente me pusieron en mi lugar. Un
de transpiración al igual q u e los zapatos, y no lle- gran hombre me enseñó u n a g r a n lección esa no-
v a b a abrigo. Miré los campos blancos y fríos a mi che helada de invierno. No d e b e de h a b e r l e resul-
alrededor, y a la distancia distinguí una luz débil. tado fácil salir de su c a s a calentita p a r a internarse
La luz debía de estar por lo menos a un kilómetro en una tormenta de nieve, especialmente p a r a
de distancia y sabía q u e me iba a resultar muy ayudar a alguien grosero y mal e d u c a d o como yo.
difícil llegar estando tan desabrigado, pues corría Sin embargo, lo hizo de b u e n a voluntad. Su influ-
peligro de congelarme, pero no tenía alternativa, encia y la de otros grandes líderes del sacerdocio
así q u e salté del vehículo y empecé a c o r r e r hacia lograron que cambiara mí forma de vivir y tomara
la luz con toda la energía q u e me q u e d a b a . Des- un camino que me llevó a la misión y a c a s a r m e
pués de lo q u e me pareció horas, llegué a una pe- en el templo. Siempre les estaré agradecido. G
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jníre los lamanitas de la tierra de De repente tembló la tierra y u n a g r a n n u b e
Neíí se extendió rápidamente la te- de obscuridad cubrió a los q u e se encontra-
rrible noticia de q u e había un incen- b a n congregados, dejándolos inmóviles de te-
dio en la prisión, y muchos se mor. Entonces se oyó u n a voz por encima de
apresuraron a ver q u é había sido la nube, que decía: "Arrepentios, arrepentios,
de Lehi y Neñ, hijos de Helamán, y no intentéis más destruir a mis siervos, a
q u e ese día iban a ser ejecutados. quienes os he enviado p a r a declarar b u e n a s
Después de h a b e r convertido a ocho mil lamani- nuevas".
tas a la Iglesia de Dios, los dos habían sido Y aquella voz se escuchó tres veces en me-
encarcelados y por muchos días habían estado dio de la obscuridad. A u n q u e era suave, casi
sin probar alimento. Aquél era el día en que los como si fuera un susurro, sacudió la tierra e
soldados iban a matar a sus prisioneros nefítas. hizo temblar las paredes de la prisión.
Amínadab, un nefita de nacimiento que Amínadab se volvió y vio los semblantes de
h a b í a pertenecido a la Iglesia, también se Nefi y Lehi, q u e brillaban a través de la n u b e
a g r e g ó a los soldados y curiosos del lugar. de obscuridad, y gritó a los de la multitud q u e
C u a n d o llegaron a la prisión, todos se queda- miraran, que creyeran lo q u e decían Nefi y
ron admirados de ver que Lehi y Nefí estaban Lehi, y que se arrepintieran y creyeran en
cercados por un pilar.de fuego. El calor era Cristo. Los lamanitas clamaron humildemente
tan intenso q u e los lamanitas no podían acer- al Señor con gran fe. Entonces desapareció, la
carse a los prisioneros. Y cuando vieron que nube y ellos se dieron cuenta de q u e también
Neñ y Lehi se hallaban en medio de las llamas estaban rodeados de pilares de fuego. El San-
sin quemarse, se quedaron mudos de asombro. to Espíritu de Dios descendió del cielo y entró
A pesar de q u e Nefí y Lehi se habían debili- en sus corazones.
tado por el hambre, sabían que era a causa "Y sucedió que llegó a ellos u n a voz; sí, u n a
de su fidelidad q u e recibían protección. Sin voz agradable, cual si fuera un susurro,
miedo alguno les hablaron a los lamanitas, di- diciendo:
ciéndoles: "No temáis, porque he aquí, es Dios "¡Paz, paz a vosotros por motivo de vuestra
quien os ha manifestado esta maravilla. . . fe en mi Bien A m a d o . . . ! " •
q u e no podéis. . . matarnos". (Este relato se encuentra en Helamán 5.)

RELATO DE LAS ESCRITURAS

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p a p á colocó unos cuantos ejemplares pegaremos una fotografía de c a d a uno y
del Libro de Mormón sobre la mesa y m a ñ a n a le daré los libros al obispo p a r a q u e
anunció: los done a los misioneros.
—Para la noche de hogar vamos a —¡Qué b u e n a idea! —dijo la mamá—. Tal
escribir nuestro testimonio en estos libros. vez lo que escribamos h a g a interesar a al-
Primero h a g a n un borrador y luego, procuran- guien en la Iglesia y le a y u d e a convertirse.
do hacer la mejor letra posible, cópienlo en la Pongamos también nuestra dirección; quizás
primera p á g i n a en blanco y fírmenlo. Abajo alguien nos escriba.
Tomás y Cristina en seguida se pusieron
a escribir.
ubre el sacerdocio y mi

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ordenación de diácono —dijo Tomás. rando el papel y pensando.
—Yo voy a escribir sobre nuestra íamília y a ¿Qué podría decir que ayudara a alguien?
decir q u e podemos estar juntos p a r a siempre ¿Quién va a prestar atención a lo que diga un
—agregó Cristina. niño de siete años como yo?
Carlitos miraba pensativo la hoja de papel; Carlitos recordó que dentro de cuatro meses
todos escribían, menos él. sería su cumpleaños y que se bautizaría. Se le
Un momento después, la m a m á se detuvo y ocurrió una idea y empezó a escribir. Varias
le preguntó: veces borró lo q u e h a b í a escrito, pero no se
—¿Qué pasa, Carlitos? desanimó.
—Nada —murmuró éste. Todos los d e m á s ya h a b í a n terminado y es-
—¿No sabes qué decir? —le preguntó el p a p á . taban comiendo un postre c u a n d o él por fin
Carlitos asintió con la cabeza. comenzó a copiar en el libro lo q u e h a b í a es-
—Por q u é no cuentas q u e la Iglesia tiene un crito. Cuando finalizó, lo releyó.
proíeta —le sugirió la mamá—, o q u e leemos Satisfecho, pegó su foto debajo, escribió su
el Libro de Mormón todos los días y q u e eso te dirección y agregó su libro a los otros q u e es-
ayuda a portarte bien. taban apilados.
—Sí, tal vez h a g a eso —dijo, pero siguió mi- —¿Terminaste? —preguntó el p a p á .
—Sí. Fue muy difícil.
—A veces es difícil expresar lo q u e uno sien-
te —agregó el padre—. Pero no sólo sirve pa-
Me llamo Carlos Romero y tengo siete años ra que otra persona a p r e n d a m á s sobre la
Cuando cumpla ocho, voy a bautizarme por in- Iglesia, sino que fortalece tu propio testimonio.
mersión como lo hizo Jesucristo. Mí padre me —¿Es por eso q u e me siento bien a h o r a ?
bautizará y me confirmará miembro de La Iale- —preguntó Carlitos.
sia de Jesucristo de los Santos de los Últimos —Claro. Y cuando alguien lea lo q u e escri-
Días. Yo creo que ésta es la verdadera Iglesia
de Cristo Si usted lee este libro y ora, nuestro biste en el libro, es posible q u e se sienta tan
Padre Celestial le dirá que lo que dice es ver bien como tú.
dad. Entonces usted también podrá bautizarse Todos los días después de la escuela Carli-
Escnbarne y cuénteme lo que sienta cuando ' tos esperaba ansioso al cartero con la espe-
lea este libro. ranza de que la persona q u e hubiera recibido
el Libro de Mormón le contestara.
Pero fue Cristina la q u e gritó un día:
—¡Me contestaron, me contestaron!
Y tres días después, su p a p á y Tomás reci-
bieron carta.
—Mi carta vino de México —se jactó Tomás.
A Carlitos se le llenaron los ojos de lágrimas
y fue a e c h a r s e en la c a m a .

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La m a m á se sentó a su lado en silencio por
un momento, y después dijo:
—Pareces estar muy desilusionado porque "Estimado Carlos Romero:
"Discúlpame que no te haya contestado antes. Me
nadie te ha escrito. llamo Ramón Cortez y vivo con mí familia en Barca-
Carlitos permaneció inmóvil un momento, lona, España.
pero después se sentó en la c a m a y se secó los "Un día los misioneros fueron a mi panadería y
ojos con las manos. me llevaron el Libro de Mormón que tú donaste. Y
—Quizás la persona q u e reciba mi libro se estaba muy ocupado, pero mí esposa lo aceptó y la
ría de lo q u e escribí. ¿Y si piensa q u e soy un leyó.
tonto? A lo mejor piensa q u e un niño no sabe "Casi en seguida tuvimos una mala racha. Se
lo q u e dice y no quiere leer mí libro. quemó la panadería. María Isabel, nuestra-hijita
La m a m á lo abrazó y le dijo: menor, se enfermó y, a pesar del cuidado de los
—Nadie va a reírse. Sabrán q u e eres since- doctores, empeoró y falleció al poco tiempo.
ro y q u e les regalas el libro de corazón. Ade- "Mi esposa me dijo que Dios nos ama a todos y
más, m u c h a s veces los niños tienen más in- que también ama a María Isabel. Pero yo le grité
fluencia q u e los adultos. con rencor: '¿Entonces, por qué se quemó la
. —¿Por q u é no me h a n contestado entonces? panadería y se murió la nina?'
—No sé. Pero d e b e de h a b e r una b u e n a ra- "Una noche me sentía muy mal. El rencor en co
tra de Dios me tenía enfermo. No podía dormir y r
zón. Tal vez los misioneros no h a y a n encontra- senté a oscuras. Al lado de la silla estaba tu libro.
do todavía u n a familia a la que quieran darle * Tenía ganas de quemarlo, pero lo abrí y vi tu foto
tu Libro de Mormón. Además, a u n q u e no nos Leí io que habías escrito, y luego seguí leyendo el
guste, a veces la gente no cree en lo que le libra en sí. Leí toda la noche; al llegar la madrugc
decimos y rechaza nuestro testimonio. Nadie da, volví a leer lo que escribiste, y el Espíritu me
me ha escrito a mí tampoco, así que tendre- confirmó que todo lo que había leído era verdad.
mos q u e tener paciencia, q u e a lo mejor Desperté a mi esposa y las dos lloramos y oramos
todavía nos contestan. Le rogué a Dios que me perdonara por estar enoj
C u a n d o Carlitos se fue a la c a m a esa no- do con El y sentí paz.
che, oró: "Padre Celestial, a y u d a a los misio- "El 30 de agosto nos bautizaremos todos. Nos s<
neros a encontrar a u n a persona q u e aprecie timos muy felices. Te agradezco de corazón que i
mí Libro de Mormón. Bendícelo p a r a que no hayas obsequiado el Libro de Mormón. Me despi
se ría de lo q u e escribí. Bendícelo p a r a que de tí afectuosamente.
lea el Libro de Mormón y crea que es verdad. "Gracias, hermanito.
En el n o m b r e de Jesucristo. Amén".
Pasaron los meses y llegó el día del bautis-
mo de Carlitos. Justo antes del almuerzo, Cris-
tina entró corriendo a buscarlo y le entregó
u n a carta q u e h a b í a traído el cartero.
Apresurado, Carlitos abrió el sobre y leyó:

Esa tarde, 30 de agosto, c u a n d o Carlitos sa-


lió de las a g u a s bautismales, murmuró: "Que
el Señor te bendiga, Ramón". •

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Decora u n a cajita con lana,
papel o género, o píntala con lápices de
colores. Luego corta en tiras separadas la lista
de las cosas que podrías hacer durante el día
domingo y ponías en tu cajita para el día
domingo.
Cada domingo saca una de las tiras de la
cajita y sabrás qué hacer para pasar un
domingo reverente y feliz.

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