Contexto Medieval

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PROYECTO 3: PEREGRINOS EN CAMINO

LA EDAD MEDIA

1. CONCEPTO Y ETAPAS

La Edad Media es un largo período de la historia


comprendida desde la caída del Imperio romano de
Occidente hasta el Renacimiento. Este nombre fue
asignado por los humanistas del Renacimiento con

una connotación negativa ya que oponían el concepto “medieval” (bárbaro


e inculto) al concepto “renacimiento” (renacer, moderno, culto). Por ello,
lo primero es desmitificar esta visión negativa de la Edad Media, pues si
es cierto que la Alta Edad Media es una época ruda en la que domina el
analfabetismo también es cierto que es un largo período en el que
suceden importantes acontecimientos y experimenta una evolución. Una
época de ricas manifestaciones artísticas en la que se inicia la literatura
en lenguas romances.

2. CLAVES EPOCALES

En la Edad Media cabe distinguir dos grandes periodos:

1. La Alta Edad Media (desde sus inicios hasta siglo XII): configuración
del feudalismo; arte románico; época fundamentalmente rural y de
generalizado analfabetismo ya que solo el estamento de la iglesia poseía
el monopolio cultural.

2. La Baja Edad Media (siglos XIII al XIV): desarrollo de las ciudades y


aparición de la burguesía; proceso de expansión cultural; surgen las
primeras universidades; arte gótico.

Durante el siglo XV aparecen una serie de nuevos signos sociales que


abren el cambio hacia la modernidad y preparan el camino del
Renacimiento. El S. XV es el siglo del Prerrenacimiento, un siglo de
transición.

La clave más característica en el plano político-social de la Edad Media


fue su peculiar estructura social: el Feudalismo.
Con este término se conoce la nueva estructura socioeconómica instalada
de Europa desde la desintegración del Imperio romano, basada en una
estructura social jerarquizada que divide la sociedad en rígidos
estamentos. El feudalismo se basa en la propiedad de la tierra y en el
pacto de vasallaje. Este era la relación establecida entre el señor feudal y
el vasallo , una relación recíproca en la que el señor daba protección y
recibía parte de las ganancias de las cosechas a modo de pago o
impuesto, mientras que el vasallo o siervo daba parte de su cosecha y
recibía ayuda, consejo y defensa en caso de conflicto o guerras.
El feudalismo se representa con una pirámide social en el que se
diferencian los estamentos privilegiados, la nobleza y el clero (propietarios
de la tierra) del estamento del pueblo, trabajadores de la tierra. Por tanto,
los tres estamentos básicos de la Edad Media fueron la nobleza, la Iglesia
y el pueblo.
Durante la Alta Edad Media cada estamento cumplía una función en la
sociedad y solo la Iglesia tenía el poder, acceso o conocimiento de la
cultura. La iglesia por ello realizó una importante labor de transmisor de la
cultura, a través de los monasterios (copistas).

Sin embargo, durante la Baja Media en las ciudades (burgos) surge una
nueva clase social, la burguesía, que engloba ciudadanos que se dedican
a la actividad comercial o las profesiones liberales. Un nuevo factor, el
dinero, va a ir rompiendo el fuerte inmovilismo del feudalismo. Con el
progresivo poder de la burguesía aparece una nueva visión del mundo,
unos nuevos valores que se reflejarán en el arte y en la literatura.

A la vez, durante la Baja Media tiene lugar un proceso de expansión


cultural ya que la nobleza y la burguesía empiezan a dedicarse también a
las letras apareciendo así la nobleza cortesana (sustitución del modelo del
héroe épico por el modelo del caballero y cortesano).

Desde el punto de vista ideológico la clave fundamental es el teocentrismo


que marca las principales manifestaciones culturales y artísticas, como
veremos en el apartado siguiente. Aunque cabe destacar que a partir de la
Baja Edad Media se abre lentamente un cambio de mentalidad que se
acercará a una visión antropocentrista, sin embargo, el factor religioso
seguirá siendo fundamental para entender el arte y la literatura.

La Edad Media fue una época profundamente religiosa. Prueba de ello es


la importancia que adquieren fenómenos como los caminos de
peregrinación, las cruzadas y a nivel cultural y artístico la finalidad
fundamentalmente didáctica o moralizante de las manifestaciones
culturales y literarias.
3. LA EDAD MEDIA EN LA PENÍNSULA IBÉRICA.

La situación sociopolítica de la Península Ibérica en esta época es


peculiar, debido a algunas circunstancias que la diferencian del resto de
Europa:

La Reconquista: después de la caída del Imperio romano se asienta en la


Península la monarquía visigoda hasta la entrada de los musulmanes a
inicios del S.VIII (año 711).

Los cristianos se concentran en el norte y la mayoría del territorio queda


bajo hegemonía de los musulmanes en Al-Ándalus. Con el tiempo los
reinos cristianos iniciarán la conquista del territorio musulmán en el
proceso que se denomina Reconquista y que finalizará en 1492 con la
conquista de Granada, último reino musulmán en España bajo el reinado
de los Reyes Católicos.

Pasamos así en la Edad Media de un territorio dividido en


diferentes reinos a un territorio unificado al final de este periodo.
En el inicio de la Edad Media la fragmentación de la antigua monarquía
cristiano-visigoda da lugar a diversos reinos: Reino de Castilla y León,
Navarra, Reino de Aragón. En el año 1143 se independiza el reino de
Portugal.

Serán en estos reinos donde nazcan las diferentes lenguas romances y


se inicie la literatura en dichas lenguas. Así, en una zona entre Burgos y
Cantabria (rodeada de castillos) nacerá el castellano y sus primeras
manifestaciones escritas no literarias (las glosas) y literarias (las jarchas
y cantares de gesta).

Como reflejo de esta situación histórica la Edad Media es una época de


mestizaje cultural, ya que convivieron diferentes razas, culturas y
religiones. Este mestizaje se verá reflejado en diversas manifestaciones
culturales como el arte mudéjar, las jarchas, la labor realizada en la
escuela de Traductores de Toledo bajo el reinado de Alfonso X, El Sabio
(S. XIII)…

Existían además los mozárabes, cristianos que permanecían fieles a su fe


en territorio árabe. A medida que avanzaba la reconquista, aumentaba el
número de mudéjares, musulmanes que conservan la religión en el
territorio recuperado por los cristianos. Si se convertían al cristianismo
recibían el nombre de moriscos. Al final de la etapa los Reyes Católicos
decretaron la expulsión de judíos y musulmanes en 1492.
En este contexto es necesario destacar la importancia cultural y religiosa
del camino de Santiago por el llamado camino francés que recorría
buena parte del norte peninsular, desde los Pirineos hasta Galicia. A lo
largo del camino se levantan algunos de los monumentos religiosos más
importantes de la España medieval. A través de este camino penetraron
en España importantes influencias culturales y artísticas de Europa,
como la influencia de la tradición del amor cortés procedente de la
Provenza (sur de Francia), el románico y el gótico.

En definitiva, la Edad Media es una larga y rica etapa de la historia, las


artes y la literatura.

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