Caso Barny. Homicidio y Robo Agravado de Vehiculo. Sentencia
Caso Barny. Homicidio y Robo Agravado de Vehiculo. Sentencia
Caso Barny. Homicidio y Robo Agravado de Vehiculo. Sentencia
Mediante decisión n.° 141 del 30 de abril de 2013, se produjo la admisión del recurso de
casación interpuesto por la defensa de los acusados antes identificados; en razón de lo
cual, el 23 de mayo de 2013, se llevó a cabo la audiencia oral prevista en el artículo 458
del Código Orgánico Procesal Penal.
En esa misma fecha, la Magistrada Doctora F.C.G. asumió la ponencia de esta causa, y
con tal carácter, suscribe la presente decisión.
El 3 de febrero de 2015, se llevó a cabo la audiencia oral prevista en el artículo 458 del
Código Orgánico Procesal Penal, con la asistencia del abogado W.A.R., Defensor
Público Primero ante la Sala Plena y la Sala de Casación Penal, y la abogada M.C.V.,
Fiscal Cuarta del Ministerio Público con competencia para actuar ante la Sala Plena, de
Casación y Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, quienes expusieron sus
alegatos; la Sala, de conformidad con lo dispuesto en el último aparte del artículo 458
del Código Orgánico Procesal Penal, se acogió al lapso establecido
DE LOS HECHOS
Que “… de los órganos de prueba evacuados ante este Tribunal acreditaron los
siguientes hechos: que los acusados N.G.P. (sic) NIETO y A.D.M.S., ut supra
identificados, entre horas de la noche del día 29.04.2004 y de la madrugada del día
30.04.2004 despojaron a J.A.A.M. (sic) y a Y.E.C.P. de un vehículo marca Jeep,
modelo Grand Cherokee, color gris, placas GBN-58DM, propiedad de la primera de la
víctimas nombradas, les quitaron sus celulares y la vida a través del uso de arma de
fuego y dejaron tirados sus cuerpos en la Hacienda Los Avisperos, vía pública del
Sector La Cipa, Tocorón Estado Aragua…”.
Que “… en cuanto a los autores del Robo del vehículo propiedad del hoy occiso
J.A.A.S., para este Tribunal quedó acreditada la responsabilidad en este hecho de
N.G.P. (sic) Nieto y A.D.M.S. con las declaraciones de la víctima indirecta J.A.A.
cuando expresó que recibió la llamada del Teléfono de su papá y le dijeron Alexis,
Alexis y cortaron y que su esposa le dijo porque dijistes que estaba equivocado si era
del teléfono de tu papá. Con la declaración del funcionario W.G. que cuando sobre éste
aspecto, además de indicar que con la información de las llamadas entrantes y salientes
de uno de los teléfonos de las víctimas y el cruce de llamada llegó a la información de
donde se encontraba el vehículo, agregó y así se desprende de su declaración que en la
planificación del robo surgen una serie de personas involucradas entre ellos los
hermanos A.M. y M.M. apodados los Colombianos, que para el momento del Robo uno
de ellos dos estaba en Colombia y a través del cruce de llamadas se enteran que uno de
ellos se comunicó a Colombia para que viniera porque tenían un vehículo para venderle,
indicando la dirección de la tía como su vivienda, la cual es posteriormente allanada…”.
II
1. Quince años a veinte años de prisión a quien cometa el homicidio por medio de
veneno o de incendio, sumersión u otro de los delitos previstos en el Título VII
de este libro, con alevosía o por motivos fútiles o innobles, o en el curso de la
ejecución de los delitos previstos en los artículos 449, 450, 451, 453, 456 y 458
de este Código.
Artículo 77. [De las Agravantes genéricas de todo delito] Son circunstancias
agravantes de todo hecho punible las siguientes: (…)
(…)
4. Cualquier otra circunstancia de igual entidad que a juicio del tribunal aminore la
gravedad del hecho”.
Artículo 424. [Complicidad Correspectiva] Cuando en la perpetración de la
muerte o las lesiones han tomado parte varias personas y no pudiere descubrirse
quien las causó, se castigará a todos con las penas respectivamente
correspondientes al delito cometido, disminuidas de una tercera parte a la mitad.
(…)
(…)
III
Que “… [q]uien aquí recurre considera que en efecto esta Corte de Apelaciones
(…) incurre en la Falta de Motivación por errónea aplicación de la Ley, pues
cuando se interpuso el recurso de apelación (…) no se pretendió que las pruebas
aportadas en el juicio oral y público fueran valoradas por esta Corte de
apelaciones, pues de hecho se establece en el escrito fundado que la Juez a quo
se había limitado a enumerar y transcribir de forma ligera las pruebas debatidas
en juicio oral y público…”.
Que “… [p]or ello en la audiencia celebrada en fecha 16 de febrero del año 2011
vale la pena señalar sobre este particular siete meses después de dictada la
decisión del tribunal de juicio esta defensa nuevamente ratifica en todas y cada
una de sus partes el escrito de apelación en contra de la misma e insiste en la
doble agravación y se solicita se corrija la pena aplicada…”.
IV
Que “… [a] tal efecto de la revisión minuciosa del presente asunto observa esta
Sala, que fue admitida acusación en contra de los acusados PIÑA NIETO N.G. y
M.S.A.D., por la presunta comisión de los delitos de HOMICIDIO
CALIFICADO EN LA EJECUCION DE UN ROBO AGRAVADO y ROBO
AGRAVADO DE VEHICULO AUTOMOTOR, en grado de autor para PIÑA
NIETO N.G. y en grado de cooperador inmediato para M.S.A.D., en perjuicio de
J.A. y Y.E.C.; y por los delitos de PORTE ILICITO DE ARMA DE FUEGO, y
USO INDEBIDO DE ARMA DE FUEGO, ordenándose en consecuencia su
enjuiciamiento por los tipos penales antes señalados…”.
Que “… [e]n ese sentido, cabe destacar que el juez de juicio en atención al
principio de inmediación como pilar esencial de los procesos orales, preceptuado
en el artículo 16 del Código Orgánico Procesal Penal, tiene un contacto directo a
través de todos los sentidos con los argumentos de las partes y la conducta
desplegada por los órganos de prueba al momento de rendir sus testimonios, a
los fines de recibir y percibir directamente el resultado de los actos procesales
que se desarrollan en su presencia y que en definitiva le permiten llegar a la
convicción de los hechos que se acreditan; en el caso sub judice se evidencia que
los acusados fueron condenados solo por los delitos de HOMICIDIO
CALIFICADO EN LA EJECUCION DE UN ROBO AGRAVADO EN
GRADO DE COMPLICIDAD CORRESPECTIVA y ROBO AGRAVADO DE
VEHICULO AUTOMOTOR, en tanto que por los delitos de PORTE ILICITO
DE ARMA DE FUEGO y USO INDEBIDO DE ARMA DE FUEGO dichos
acusados fueron absueltos…”.
Que “…[a]l respecto, es de hacer notar que los dos (2) tipos penales por los
cuales fueron condenados los acusados, son el resultado del proceso de
subsunción al cual fue sometida la conducta típica y antijurídica desplegada por
estos, entre la noche del día 29 de abril 2004 y la madrugada del día 30 de abril
2004 en la que dieron muerte a las victimas (sic) y se apoderaron del vehículo en
el que viajaban; y que constituyen el objeto del caso sub examine, quedando
acreditados los mismos, en virtud de los aportes de todos los órganos de prueba
promovidos, y evacuados durante el juicio oral y público, que fueron
debidamente valorados por el Juez a quo…”.
Ahora bien, de la revisión efectuada a las actas del expediente, se observa que el
Juzgado Segundo de Primera Instancia Itinerante en Función de Juicio del
Circuito Judicial Penal del Estado Aragua, en la parte correspondiente a los
fundamentos de hecho y de derecho, estableció lo siguiente:
Que “… [l]os delitos por los cuales fueron encontrados responsables los
ciudadanos N.G.P. (sic) Nieto y A.D.M.S., ambos suficientemente identificados
ut supra, son Homicidio Calificado en la Ejecución de un Robo Agravado en
grado de complicidad correspectiva, grado que no constituye una modificación
del tipo penal base imputado sino de la participación que resultó acreditada en el
debate, tipo penal previsto y sancionado en el artículo 408 numeral 1° en
concordancia con el artículo 77 numeral 12, 74 numeral 4 y 424 todos del
Código Penal y ROBO AGRAVADO DE VEHICULO AUTOMOTOR,
previsto y sancionado en el artículo 6 numerales 1°, 2°, 3°, 10° y 12° de la Ley
sobre Hurto y Robo de Vehículos Automotores, en perjuicio de quienes en vida
respondieran a los nombres de J.A. y Y.E. COLE…”.
En este sentido, observa la Sala que los juzgados de instancia que pronunciaron
las decisiones a que se refiere la solicitante, al momento de dictar sus fallos,
erraron en su juicio pues fue incorrecto establecer que se estaba ante el supuesto
que hace procedente aplicar el artículo 88 del Código Penal (relativo a la figura
del concurso real), debido a que tanto el Código Penal como la jurisprudencia
contemplan de forma clara y precisa que en estos hechos la figura es la de un
delito autónomo (Homicidio Calificado) que ocurre durante la ejecución de un
delito contra la propiedad, y el robo de vehículos es un delito contra la
propiedad.
. (Resaltado la Sala).
El numeral 1 del artículo 406 del Código Penal requiere que la acción de dar
muerte a otro sea una circunstancia imprevista e incidental en relación con el
delito principal, que siempre será el de robo; y ello es así, porque en nuestro
ordenamiento el delito de homicidio es más grave que el delito de robo, ya que
afecta el bien jurídico de la vida y la legislación penal busca proteger con mayor
fuerza los bienes jurídicos más preciados; por ello se impone una pena más
severa cuando tales bienes son afectados.
En este sentido, la Sala de Casación Penal ha precisado en distintas
oportunidades que si durante el curso de un robo de vehículo automotor se
produce la muerte de la víctima, no puede aplicársele al sujeto activo la pena
como si se tratare de un concurso real de delitos, toda vez que el legislador ha
considerado tal circunstancia como una calificante del delito de homicidio, tal
como en la sentencia de la cual se toma el siguiente extracto:
“El Legislador prevé en el artículo 406, ordinal 1° del Código Penal, el delito de
homicidio calificado cuando es cometido (…en el curso de la ejecución de los
delitos previstos en los artículos 449, 450, 451, 453, 456 y 458…de la Ley
Sustantiva Penal correspondiente, entre otros, el robo. Para aplicar el citado
supuesto, es necesario que el homicidio se haya cometido en el curso de la
ejecución de un delito contra la propiedad. Ha dicho la Sala en doctrina que hoy
ratifica lo siguiente: …siendo por tanto suficiente para considerar la calificativa,
que la muerte de la víctima haya surgido en cualquier etapa del iter críminis,
esto es, basta que el homicidio se cometa ‘en el curso de la ejecución’ de los
delitos indicados en la norma para que exista la relación cronológica entre ellos,
tal cual ocurrió en el presente caso…. (vid. Sentencia 386 del 6 de agosto de
2009, ponencia del Magistrado Héctor Coronado Flores).
De esta manera, en casos como el que hoy nos ocupa, donde el delito de
homicidio en grado de frustración fue cometido en la ejecución del robo de un
vehículo automotor propiedad de una de las víctimas, no puede aplicarse al
sujeto activo la pena como si se tratare de un concurso real de delitos
(Homicidio y Robo de Vehículo), dado que el Legislador ha considerado tal
circunstancia (el robo) como una calificante del delito de homicidio” (Sentencia
número. 294 de fecha 21 de julio de 2010).
Y ello es así por cuanto, a juicio de esta Sala, en el presente caso se incurrió en
el vicio de indebida de aplicación de las normas establecidas en el artículo 5, en
concordancia con el artículo 6, numerales 1, 2, 3, 10 y 12, de la Ley sobre el
Hurto y Robo de Vehículos Automotores, el cual fue aplicado en concurso con
el delito de Homicidio Calificado cometido en la ejecución de un Robo de
Vehículo Automotor, en perjuicio de los ciudadanos J.A.A. y Y.E.C.P., motivo
por el cual le asiste la razón a la recurrente en cuanto a la violación por parte de
la recurrida del principio ne bis in idem (es decir, el que prohíbe la doble
punición por la comisión de un mismo hecho), toda vez que en este caso el delito
de robo constituye la agravante que califica el homicidio y el delito de robo de
vehículo no puede ser aplicado como un delito autónomo para ser computado
como un concurso de delitos, y al haberse hecho de ese modo, produjo, como
consecuencia, una doble sanción para los acusados.
Ello se evidencia en el fallo del Juzgado de Juicio y el cual fuera ratificado por
la recurrida, en el que se expresó lo siguiente:
Al respecto, es de hacer notar que los dos (2) tipos penales por los cuales
fueron condenados los acusados, son el resultado del proceso de
subsunción al cual fue sometida la conducta típica y antijurídica
desplegada por estos, entre la noche del día 29 de abril 2004 y la
madrugada del día 30 de abril 2004 en la que dieron muerte a las
víctimas y se apoderaron del vehículo en el que viajaban; y que
constituyen el objeto del caso sub examine, quedando acreditados los
mismos, en virtud de los aportes de todos los órganos de prueba
promovidos, y evacuados durante el juicio oral y público, que fueron
debidamente valorados por el Juez a quo…
La Sala observa que la acción desplegada por los acusados para ocasionarle la
muerte a las víctimas, ocurre durante la ejecución del delito de Robo Agravado,
es decir, que en la comisión de este hecho son atacados varios bienes jurídicos:
la vida y la propiedad, acción que se encuentra descrita y cuya pena está prevista
en el Código Penal, específicamente en el numeral 1 del artículo 406, el cual se
define como Homicidio Calificado, y siendo que durante la audiencia pública
celebrada el 23 de mayo de 2013, la representante del Ministerio Público
consideró que los hechos que dieron lugar a la investigación se subsumen en el
delito de Homicidio Calificado en la Ejecución de un Robo Agravado en Grado
de Complicidad Correspectiva, la Sala declara que es este el tipo en el que los
hechos acreditados deben ser encuadrados. Así se establece.
PENALIDAD
Para concluir, es necesario indicar que el tipo penal es una figura de vital
importancia, y esta viene precedida de una muy cuidadosa confección dogmática
que se conoce como la teoría del tipo, la cual es el pilar fundamental de la
dogmática jurídico penal y el vínculo entre la parte general y la parte especial;
más aún, la condición ineludible para poder castigar a una persona por cometer
un delito, es que su conducta esté descrita como punible con anterioridad a la
conducta que se pretende castigar, pues no puede existir delito sin tipo, lo cual es
una garantía de la seguridad jurídica y la base sobre la cual se construyó la teoría
del delito.
Por todo ello, es imprescindible respetar los tipos legales bien sea para no
castigar al que no adecua su conducta a la descripción típica, o para castigar al
que sí, y ambos deberes habrán de cumplirse pese a que al juzgador le parezca
injusta una u otra decisión, pues tal falta de aplicación implicaría un desvío del
sendero de la Justicia, ya que la ley es la fuente de Derecho más importante.
VI
DECISIÓN
Por las razones antes expuestas, este Tribunal Supremo de Justicia, en Sala de
Casación Penal, administrando Justicia en nombre de la República y por
autoridad de la ley, se pronuncia del siguiente modo:
PRIMERO
TERCERO
CUARTO
El Magistrado Presidente,
MAIKEL J.M.P.
La Magistrada Vicepresidenta,
F.C.G.
Ponente
La Magistrada,
D.N.B.
El Magistrado,
H.M.C.F.
La Magistrada
E.J.G.M.
La Secretaria, (E)
A.Y.C.D.G.
Exp. 12-314
FCG.