Fobias Investigación

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 13

Facultad de Psicología

Sigmund Freud
Licenciatura en Psicología

Fobias más comunes en jóvenes estudiantes

Universidad y Conocimiento

Lic. Esteban Chávez Nájera

Presenta:

Lozen Marshenin Esparza Chacón

Ana Karla Gutiérrez Amaro

Chihuahua, Chih. Mayo del 2020


Índice

Antecedentes a la investigación………….. Pág. 1

Planteamiento del problema……………….Pág. 3

Justificación……………………………….... Pág. 3

Introducción……………………………….…Pág. 4

Marco teórico………………………………..Pág. 4

Hipótesis……………………………………..Pág. 11

Metodología………………………………....Pág. 11
Antecedentes

Las fobias son algo común, estas suelen desarrollarse durante la infancia, aunque
esto varía dependiendo de la fobia, es importante aprender a detectarlas para que
puedan ser tratadas con tiempo y así no lleguen a afectar en un futuro, ya que
pueden permanecer hasta la adultez y afectar en el desempeño de las actividades
diarias. En los niños es difícil identificarlas, ya que los miedos en los niños son algo
común y ellos no saben distinguir cuando su miedo es irracional y va más allá.

En ocasiones, algunos miedos se mantienen, aumentan su intensidad y no remiten


con el paso del tiempo, necesitando así una intervención psicológica para hacerlos
desaparecer. Además, estas sensaciones se experimentan en situaciones que no
suponen una amenaza real (p. ej., cuando la persona ve un gato), por lo tanto, el
miedo en estas situaciones pierde su valor adaptativo y funcional. En estos casos se
habla de miedos clínicos o fobias, las cuales, son respuestas aprendidas. Dado que
una fobia es una forma especial de miedo, una de las dificultades diagnósticas más
evidentes tiene que ver con el establecimiento de los límites entre el miedo adaptativo
y el miedo fóbico. En este sentido, las características indicativas de una reacción de
miedo fóbico son las siguientes:

1. Es desproporcionada con respecto a las exigencias de la situación. Se considera


que la reacción no se corresponde con la existencia de una situación particularmente
peligrosa o amenazante para la persona.

2. No puede ser explicada o razonada por parte del individuo, es decir, son
irracionales. Los argumentos lógicos suelen ser irrelevantes; el hecho de explicar a la
persona el carácter inocuo de la situación no suele ser efectivo para reducir el miedo.
3. Las respuestas de miedo no pueden ser controladas; los esfuerzos de la persona
para vencer el miedo suelen ser infructuosos.

4. El miedo conduce a la evitación de la situación temida. La persona evita la situación


amenazante o escapa si inesperadamente se encuentra ante ella. En ocasiones, se
tolera la situación pero experimentando un elevado nivel de miedo y malestar.

5. Persiste a lo largo del tiempo.

6. Es desadaptativa.

7. No es específica a una fase o edad determinada.


Las fobias pueden clasificarse de muy diversas maneras; no obstante, una de las
clasificaciones más ampliamente aceptadas es la que distingue entre tres grupos:
fobias específicas, simples o focales; fobias sociales, y agorafobia.

(Encinas, 2013 )

Existen ciertos factores de riesgo que hacen que la persona sea más propensa a
poder desarrollar alguna fobia.

Los siguientes factores pueden aumentar el riesgo de tener fobias específicas:

 Tu edad. Las fobias específicas pueden aparecer por primera vez en la infancia,
generalmente alrededor de los 10 años, pero pueden presentarse en una etapa
posterior de la vida.

 Tus parientes. Si algún miembro de tu familia tiene una fobia específica o ansiedad,
tú también tienes más probabilidades de tenerlas. Esta podría ser una tendencia
hereditaria, o bien los niños pueden adquirir las fobias específicas al observar la
reacción fóbica de un miembro de la familia ante un objeto o una situación.

 Tu temperamento. Tu riesgo puede ser mayor si eres más sensible, más cohibido o
más negativo que lo normal.

 Una experiencia negativa. Tener un episodio traumático, como quedar atrapado en


un ascensor o ser atacado por un animal, puede desencadenar el desarrollo de una
fobia específica.

 Enterarte de experiencias negativas. Recibir información negativa o enterarte sobre


experiencias negativas, como accidentes aéreos, puede producir el desarrollo de una
fobia específica.

S.A 2016 Fobias especificas-Síntomas y causas (en línea) Mayo Clinic. Fecha de
consulta 31 de Marzo de 2020. Disponible en
https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/specific-phobias/symptoms-
causes/syc-20355156

Las fobias son algo que se presenta con mucha frecuencia en los jóvenes
estudiantes, la fobia social es una de las más comunes, sobre todo en universitarios,
y suele provocar muchas veces el abandono de los estudios.

“La mayoría de las fobias sociales se inician antes de los 25 años, si hacemos caso
de los análisis publicados”
Es una realidad constatada que determinadas profesiones necesitan, unas más que
otras, disponer de un repertorio de habilidades para la interacción social. En
concreto la carrera docente requiere de estas capacidades.

Esta y demás fobias no permiten que los estudiantes se desempeñen correctamente


en sus aéreas de estudio e inclusive en su vida en general, lo cual trae consigo otros
problemas derivados del estrés que esto suele generar.

Por los datos recogidos en otros estudios, lo que más preocupa al alumno
universitario es el tema de las relaciones sociales y cuando éstas no son
satisfactorias, le provoca inseguridad y esto le impide aprovechar adecuadamente la
oferta educativa, a la que asiste como mero espectador y con poca motivación y, en
muchos casos desemboca en el abandono.

(Gomez Acuña, Sanchez Herrera, Isabel, & Castela Godoy, 2010)

Planteamiento del problema

De pequeños todos solemos tener y desarrollar ciertos miedos, pero lo preocupante


es cuando estos van más allá hasta convertirse en fobias y nos impiden llevar a
cabo nuestra vida cotidiana a como normalmente lo haríamos. Por ello, conocer las
fobias más presentes en los estudiantes es un punto clave para poder resolverlas y
que así logren desempeñarse de la mejor manera posible, ya que muchas fobias
permanecen desde pequeños hasta la adultez, y al no ser tratadas se vuelven un
impedimento para quienes las presentan.

Justificación

Las fobias son un tema muy extenso, ya que para todo hay una fobia, y la mayoría
de las personas cuenta con alguna, sin embargo, no existe mucha información sobre
las causas de las mismas, aunque se sabe que hay algunos factores de riesgo que
favorecen el posible desarrollo de la misma, pero la mayoría de las personas que
tienen alguna fobia no recuerdan o saben con certeza el posible motivo que la
desato. La mayoría de las investigaciones se centran en describir cuantas fobias
existen y las formas en las que se pueden tratar, por ello es importante conocer las
fobias que más comparten los jóvenes y lo que las pudo derivar, de esta forma se
trataran de mejor manera y serán más fáciles de enfrentar.
Introducción

La presente investigación tiene como tema las fobias más comunes en jóvenes
estudiantes, los cuales derivan de entre los 18 y los 22 años. Las fobias se
caracterizan por ser un temor intenso e irracional hacia algo que realmente no
representa ningún peligro, por ello las personas con algún tipo de fobia intentan
evitar ante todo aquello que les causa temor. Éstas pueden presentarse en síntomas
que varían desde el miedo y pánico hasta la taquicardia, falta de aire y un fuerte
deseo de huir. Generalmente las fobias comienzan desde la niñez o en la
adolescencia, aún no se sabe con exactitud las causas de las mismas, pero en
ocasiones pueden ser factores genéticos.

Esta investigación surge del interés de conocer cómo se presentan las fobias en los
jóvenes universitarios y cuáles son las más comunes entre los mismo, por ello se
emplearán encuestas a un grupo de jóvenes para lograr el fin de la investigación y
conocer cuales fobias se presentan con más frecuencia y a qué podrían deberse.

Marco Teórico

-Definición y diagnostico;

De acuerdo con el DSM-V (American Psychiatric Association) en las fobias


específicas se presenta un miedo o ansiedad intensa por un objeto o situación
específica: por ejemplo, alturas, vuelos, animales, lugares cerrados, oscuridad,
tormentas, administración de una inyección, ver sangre, intervenciones médicas,
tragar alimentos sólidos, conducir, aguas profundas, entre otras. En la fobia a la
sangre suelen aparecer nauseas y desvanecimiento y no siempre se da el miedo. El
objeto o la situación fóbica casi siempre provoca miedo o ansiedad inmediata, que
puede llegar incluso a un ataque de pánico, también se evita o resiste activamente
con miedo o ansiedad intensa. En los niños, el miedo o la ansiedad se puede
expresar con llanto, rabietas, quedarse paralizados o aferrarse. Los adultos suelen
reconocer cuando su miedo es irracional, pero en los niños esto es más difícil, ya
que ellos no saben distinguir cuando su miedo va más allá.

El miedo o la ansiedad que presenta el sujeto es desproporcionado al peligro real


que plantea el objeto o situación específica y al contexto sociocultural. Este miedo,
ansiedad o evitación son persistentes y dura típicamente seis o más meses y causa
malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas
importantes del funcionamiento. Finalmente, estas alteraciones asociadas a las
situaciones temidas, no pueden ser explicadas mejor por otros trastornos como el
trastorno obsesivo compulsivo, trastorno por estrés postraumático, trastorno de
ansiedad por separación, fobia social, trastorno de pánico con agorafobia o
agorafobia sin historia de trastorno de pánico.

Normalmente el sujeto debe poder reconocer que su miedo es irracional, sin


embargo hay casos donde la persona cumple con todos los criterios de la fobia
específica, pero tiene poca consciencia de lo excesivos de sus miedos.

La categoría diagnóstica de fobia específica incluye un gran número de fobias, las


cuales no comparten necesariamente las mismas características clínicas; de hecho
se han hecho distinciones entre diversas fobias específicas en cuanto a edad y tipo
de comienzo, predominancia por sexos, patrón de respuesta fisiológica, experiencia
emocional subjetiva, aprensión sobre los síntomas físicos o sobre aspectos externos
de la situación, presencia de ataques de pánico inesperados, antecedentes
familiares, curso y tipo de tratamiento indicado.

Se considera que la mayoría de las fobias específicas derivan de miedos básicos


propios de la evolución filogenética de la especie humana, tales como el miedo a los
animales y el miedo al daño físico. Los tipos más frecuentes de mayor a menor son;
situacional, ambiente natural, SIH, animal.

-Comienzo y curso;

La fobia específica generalmente se desarrolla en la primera infancia, la mayoría de


las veces antes de los 10 años. Suele aparecer entre los 7 y los 11 años, siendo la
edad media de unos 10 años. Aunque esto pasa por alto las diferencias entre
distintos tipos de fobias. Las fobias específicas situacionales presentan una edad de
comienzo más tardía que las fobias específicas del entorno natural, animal o a la
sangre-inyección-herida. En el estudio de Lipsitz (2002) el 90% de las fobias a
animales, el 84% de las fobias a la sangre/inyecciones y el 67% de las fobias de tipo
ambiente natural (alturas) empezaron en la infancia (menos de 12 años) en
comparación a sólo el 18% de las fobias de tipo situacional. Otros han señalado que
las fobias de tipo situacional suelen tener una edad de comienzo bimodal con una
elevación en la infancia y la otra mitad de los 20 años.

La cosa se complica si se distingue la edad de comienzo del miedo/evitación y la


edad de comienzo de la fobia (cuando el miedo/evitación empezaron a causar
malestar o deterioro significativos). Con muestras muy pequeñas, los autores Antony
Brown y Barlow (1997) descubrieron las siguientes edades de comienzo del miedo y
la fobia en las siguientes fobias: animales (11 y 20), sangre-inyecciones-herida (8 y
14.5), conducir (25.5 y 32) y alturas (20.5 y 34). En promedio, pasaron 9 años entre
el comienzo del miedo y de la fobia.

Además, las fobias específicas que se inician durante la infancia y la adolescencia


suelen sufrir altibajos durante ese período, es importante recalcar que en los
varones suele haber una importante disminución de las fobias en la adolescencia.
Sin embargo, las fobias que persisten en la edad adulta rara vez suelen remitir. En
los adultos, las fobias suelen ser trastorno crónico, a no ser que se reciba
tratamiento; en concreto, la remisión espontanea en la vida adulta se calcula en
alrededor del 20% (American Psychiatric Association, 1994/19995).

Aunque la prevalencia de fobia específica es menor en las poblaciones de mayor


edad, continúa siendo uno de los trastornos más comúnmente padecidos en edades
avanzadas. En el diagnostico de fobia especifica en las poblaciones mayores se
deberían considerar varios aspectos. En primer lugar, las personas mayores sueles
ser más propensas a presentar fobias específicas del entorno natural, así como fobia
a las caídas. En segundo lugar, la fobia específica, tiende a ocurrir conjuntamente
con otros trastornos médicos en las personas de más edad. En tercer lugar, las
personas mayores son más propensas a atribuir los síntomas de ansiedad a
afecciones médicas. En cuarto lugar, las personas mayores pueden ser más
propensas a manifestar la ansiedad de una manera atípica, manifestando síntomas
de ansiedad y depresión al mismo tiempo y, por lo tanto, es más probable justificar
un diagnóstico de trastorno de ansiedad no especificado. Además, la presencia de
una fobia especifica en los adultos mayores está asociada con una disminución de la
calidad de vida y puede ser un factor de riesgo de trastorno neurocognitivo
importante.
Aunque la mayoría de las fobias específicas se desarrollan en la infancia y la
adolescencia, se pueden desarrollar a cualquier lugar, a menudo como resultado de
experiencias traumáticas.

Cuando mayor es el número de fobias específicas o miedos específicos


acompañando a estas, menor es la probabilidad de recuperación. Es común que los
sujetos tengan múltiples fobias específicas. El individuo con fobia específica teme a
un promedio de tres objetos o situaciones, y aproximadamente el 75% de las
personas con fobia específica a más de una situación u objeto. En los casos de
fobias especificas múltiples, se deberá diagnosticar cada una con su propio código
de diagnóstico según el estímulo fóbico.

Las fobias específicas representan sólo alrededor del 15% de los trastornos fóbicos
vistos en la clínica. La mayoría de los pacientes no buscan ayuda y entre los que lo
hacen las fobias más frecuentes por las que consultan son: claustrofobia, SIH,
intervenciones dentales y animales; en niños y adolescentes, las fobias más
frecuentes por las que consultan son la oscuridad, la escuela y los perros. Los
fóbicos específicos que buscan tratamiento difieren de los que no lo hacen en que es
más probable que presenten múltiples fobias y ataques de pánico asociados a las
mismas.

Cuando se está considerando el diagnóstico de fobia específica en un niño, es


importante evaluar el grado de invalidez y la duración del temor, la ansiedad o la
evitación, y si es típico para la etapa concreta del desarrollo del niño.

-Tipos de fobias específicas;

Animal.- El miedo es causado por uno o más tipos de animales. Los animales más
temidos son las serpientes, arañas, insectos, gatos, ratas, ratones y pájaros.

Ambiente natural.- El miedo es provocado por situaciones naturales: tormentas,


viento, altura, agua, oscuridad.

Sangre-inyecciones-heridas (SIH).- El miedo es inducido por la visión de


sangre/heridas, por recibir inyecciones u otras intervenciones médicas invasoras, por
la realización de un análisis de sangre y/o ver o hablar de intervenciones quirúrgicas.
También se han incluido en este apartado el miedo a los hospitales, ambientes
médicos y dentales, instrumental médico y olores de medicinas, aunque no está
claro si constituyen una subtipología. Los fóbicos a la SIH no temen la visión de su
sangre menstrual o la manipulación de carnes rojas.
Situacional.- El miedo es inducido por situaciones específicas tales como transporte
público, túneles, puentes, ascensores, volar en avión, coches (conducir o viajar),
lugares cerrados.

Otro tipo.- El miedo hace referencia a otro tipo de estímulos. Se incluyen


situaciones que pueden conducir el atragantamiento, vómito o adquisición de una
enfermedad (cáncer, SIDA); la fobia a los espacios (miedo a caerse si no se está
cerca de paredes o de medios de sujeción); y los miedos de los niños a los ruidos
fuertes y a las personas disfrazadas.

Tener una fobia específica de un determinado tipo, aumenta la probabilidad de tener


otra fobia del mismo tipo. Además, según el estudio de Hofmann, Lehman y Barlow
(1997), tener una fobia específica del tipo que sea también aumenta la probabilidad
de tener miedos (no necesariamente fóbicos) de uno o más de los otros tipos. Sin
embargo, a diferencia de los fóbicos sociales, es raro que los fóbicos específicos
teman situaciones de todos los tipos.

-Causas;

La fobia especifica, en ocasiones, se desarrolla tras un acontecimiento traumático


(por ejemplo haber sido atacado por un animal o atrapado en un ascensor), la
observación de otros individuos que sufren traumatismos (por ejemplo presenciar
caídas), una crisis de pánico inesperada en una situación que se convertirá en
temida (por ejemplo una crisis de pánico inesperada mientras se viaja en metro) o la
transmisión de informaciones (por ejemplo reportajes en los medios de
comunicación sobre catástrofes aéreas). Sin embargo, muchas personas con fobia
específica son incapaces de recordar la razón concreta por la que aparecieron sus
fobias.

Ha sido frecuente la propuesta de tres modos, no excluyentes, en que las fobias


específicas pueden ser adquiridas: condicionamiento clásico, aprendizaje
observacional y transmisión de información. La importancia de estos modos, varía
según las fobias consideradas y la investigación empírica de calidad es escasa
hasta el momento. Una persona ha podido tener una o más experiencias negativas
directas con estímulos que tienen una alta probabilidad de convertirse en fóbicos.

No todos los estímulos tienen la misma probabilidad de adquirir propiedades fóbicas.


Esto puede explicarse por preparación biológica: se adquiere más fácilmente el
miedo a los estímulos que han representado filogenéticamente una amenaza a la
supervivencia de la especie; esta amenaza puede ser por ataque o por contagio de
enfermedad.

En contraste con la teoría de la preparación biológica, la explicación no asociativa de


Menzies y Clarke (1995) mantienen que, dados ciertos procesos madurativos y
experiencias normales de desarrollo, existen muchos estímulos evolutivamente
prepotentes que generan miedo en la mayoría de las personas al primer encuentro
sin necesidad de ningún aprendizaje asociativo, ya sea directo o indirecto. La
respuesta de miedo se debilita cuando hay exposiciones repetidas y no traumáticas
a las situaciones temidas (habituación). Por otra parte, las fobias pueden volver a
surgir (deshabituación) tras la ocurrencia de acontecimientos estresantes intensos
no específicos o ciertos trastornos fisiológicos. La explicación no asociativa no
descarta que haya miedos que puedan ser adquiridos asociativamente, tal como
ocurre, por ejemplo, con los miedos de objetos o situaciones evolutivamente
neutrales.

El segundo modo de adquisición implica que las experiencias negativas pueden ser
observadas, es decir, la persona puede haber visto a otros, en vivo o filmados, tener
experiencias negativas, o mostrar miedo en las situaciones potencialmente fóbicas.
Cuantos mayores son el miedo y/o las consecuencias aversivas observadas y más
significativos son los otros, mayor es la probabilidad de adquirir el miedo. Un tercer
modo es la transmisión de información amenazante, este es el modo menos potente
de cara a la adquisición de una fobia. Los tres modos de adquisición interactúan
entre sí y es más probable que se genere un miedo intenso o una fobia cuando se
combinan dos o más de ellos; por ejemplo, una experiencia negativa directa puede
tener más impacto si existen experiencias significativas previas de aprendizaje
observacional y/o de transmisión de información amenazante.

Los elevados niveles de estrés pueden aumentar la reacción de la persona a las


experiencias negativas directas, al aprendizaje observacional y a la transmición de
información amenazante.
-Factores de riesgo;

Temperamentales.- Los factores de riesgo temperamentales para la fobia específica,


para la afectividad negativa (neuroticismo) o la inhibición conductual, son también
factores de riesgo para otros trastornos de ansiedad.

Ambientales.- Los factores de riesgo ambientales para las fobias especificas, como
la sobreprotección de los padres, la pérdida de los padres, la separación, el maltrato
físico y los abusos sexuales, tienden a predecir también otros trastornos de
ansiedad. A veces las exposiciones negativas o traumáticas al objeto o situación
temida preceden al desarrollo de la fobia específica.

Genéticos y fisiológicos.- Puede haber una susceptibilidad genética a una


determinada categoría de fobia especifica (por ejemplo, una persona con un familiar
de primer grado con una fobia especifica a los animales es significativamente más
propensa a tener la misma fobia especifica que cualquier otra fobia de otra
categoría). Las personas con fobia a la sangre-inyección-herida muestran una
tendencia singular para el síncope vasovagal (desmayo) en presencia del estimulo
fóbico.

-Problemas asociados;

A diferencia de otras fobias y trastornos de ansiedad, los trastornos psicopatológicos


asociados con las fobias específicas, consideradas como diagnostico principal, son
menos frecuentes. Brown et al. (2001) hallaron que de 110 pacientes con fobia
especifica (principalmente de tipo situacional), solo el 34% presentaron algún
trastorno comórbido actual del Eje I. El 33%, 27%, y 10% recibieron respectivamente
al menos un diagnostico adicional actual de trastornos de ansiedad o depresivos (los
porcentajes fueron 56%, 45% y 36% para diagnósticos actuales o pasados). Los
diagnósticos actuales más frecuentes fueron otras fobias específicas (15%), fobia
social (9%), trastorno de pánico con agorafobia (5%) y trastorno de ansiedad
generalizada (5%; 7% sin tener en cuenta el criterio de que el trastorno no ocurriera
exclusivamente durante un trastorno afectivo). Sólo un 3% y un 4% de los pacientes
presentaron depresión mayor y distimia, respectivamente. Las fobias especificas
(principalmente de tipo situacional, que son las que suelen comenzar más tarde)
tendieron a preceder a otros trastornos de ansiedad y afectivos con las excepciones
de la fobia social (que tendieron a aparecer antes) y el trastorno de ansiedad
generalizada (con igual probabilidad de precederlas y seguirlas).

Es probable que la comorbilidad sea más elevada en los fóbicos específicos que
presentan fobias situacionales que en los que presentan otro tipo de fobias (animal,
SIH). Por otra parte, cuanto mayor es el numero de miedos específicos que un
fóbico especifico tiene, mayor es la probabilidad de que presente uno o más del
resto de trastornos de ansiedad. En niños, la fobia específica se asocia
frecuentemente con trastorno de ansiedad por separación y con el antiguo trastorno
de hiperansiedad.

Hipótesis

En base a la investigación anterior, podemos deducir que una de las fobias más
comunes que se puede presentar en los jóvenes estudiantes es la fobia social.

Los jóvenes con fobia social son conscientes de los signos físicos que muestra su
nerviosismo, tendiendo así a subestimar sus habilidades sociales.

Los jóvenes que sufren esta fobia llegan a sentir impedimento para la realización de
ciertas metas a nivel profesional. Esto varía dependiendo del individuo y la severidad
del cuadro.

Metodología

En esta investigación se busca recolectar y analizar datos de 20 jóvenes


estudiantes, los cuales oscilarán de entre los 18 y los 22 años de edad, para lograr
obtener información directa acerca del tema “Fobias más comunes en jóvenes
estudiantes”. Además, también se recaudara información de otras fuentes. Para así,
en base a encuestas e información recabada, lograr brindar una conclusión lo más
acertada posible.

También podría gustarte