Transfusión de Sangre
Transfusión de Sangre
Transfusión de Sangre
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
«Transfusión» redirige aquí. Para el cóctel de vodka, véase Transfusión (cóctel).
Transfusión de sangre
(procedimiento médico)
Erythrozytenkonzentrat neu.jpg
Bolsa de plástico de 0,4 a 0,7 litros que contiene un concentrado de eritrocitos en
solución de citrato, fosfato, dextrosa y adenina (CPDA).
Clasificación y recursos externos
CIE-9-MC 99.0
MeSH D001803
MedlinePlus 000431
OPS-301 8-80
Wikipedia no es un consultorio médico Aviso médico
[editar datos en Wikidata]
Índice
1 Historia y desarrollo del método
2 Donación de sangre
3 Contraindicaciones y tipos de sangre
4 Transfusión e infección
5 Críticas
6 Alternativas
7 Véase también
8 Referencias
9 Enlaces externos
Historia y desarrollo del método
Luis Agote (2º desde derecha) supervisando una de las primeras transfusiones
efectivas y seguras en 1914.
Karl Landsteiner descubrió que las personas tenían diferente tipo de sangre y que
las transfusiones no eran compatibles entre personas de diferente tipo. En 1901
describió el sistema de AB0 y en 1940 el sistema Rh.
Charles Drew.
A fines de la década de 1930 e inicios de la de 1940, la investigación del médico
estadounidense Charles Drew llevó al descubrimiento de que la sangre podía ser
separada en plasma sanguíneo y células rojas, y de que el plasma podía ser
congelado separadamente. La sangre almacenada de este manera duraba más tiempo y
era menos propensa a contaminarse.
Donación de sangre
Artículo principal: Donación de sangre
Mediante la donación de sangre se pretende cubrir las necesidades de transfusión
que necesitan las personas enfermas. En los países en vías de desarrollo la
donación suele ser realizada principalmente por voluntarios o familiares de los
enfermos. Los países desarrollados cuentan con un sistema que controla las
donaciones a través de los bancos de sangre.
La sangre se extrae por medio de una punción en el brazo y se trata para impedir su
coagulación, posteriormente la sangre se separa en sus componentes principales,
plasma, plaquetas y glóbulos rojos. La sangre de los donantes es posteriormente
analizada, pasando un exhaustivo control que incluye numerosas pruebas para
detectar los principales virus que puede contener la sangre, como: pruebas para la
detección de anticuerpos irregulares, pruebas de serología infecciosa, pruebas para
medir el nivel de transaminasas y prueba del NAT.10
Transfusión e infección
Los países desarrollados someten cada unidad de sangre donada a pruebas de
laboratorio para detectar la presencia de múltiples tipos de virus y bacterias como
el VIH/sida, las hepatitis B y C o la sífilis. Así, al realizar una transfusión
sanguínea en los Estados Unidos, la American Medical Association dijo en 2004 que
la probabilidad de que una unidad de sangre sea portadora de virus o bacterias es
inferior a una entre 1,9 millones en el caso del VIH e inferior a una entre un
millón en el caso de la hepatitis C.11 En contraste, en 2008, la Organización
Mundial de la Salud reveló que en 31 países en desarrollo y con economías en
transición no se realizaban, en todas las unidades de sangre donada, pruebas para
detectar la presencia de virus o bacterias responsables de enfermedades
infecciosas.12
Críticas
En algunos países del mundo las donaciones de plasma mueven un negocio millonario
que ha generado polémica.13 En España, por ejemplo, la Cruz Roja recibe dinero de
la comunidad autónoma de Madrid por cada bolsa de sangre donada. Estas donaciones
se envían al banco de sangre que se encarga de su conservación y distribución.
Desde este banco buena parte de la sangre es enviada a Grifols para ser tratada y
comercializada en tratamientos específicos que les genera muchas ganancias. Sólo
una pequeña parte de la sangre se utiliza en Hospitales.14 Por otro lado, a pesar
de los controles en laboratorio que se hacen para garantizar que la sangre no tenga
virus ni bacterias, el periodo ventana hace imposible asegurar que toda la sangre
sea limpia.15
Alternativas
La cirugía sin sangre cada vez tiene más adeptos y muchos hospitales públicos y
privados la recomiendan mediante departamentos específicos de esta especialidad de
la medicina moderna.16 La razón es un mejor resultado durante las operaciones de
todo tipo de enfermedades, incluso de las más complejas como de cáncer y corazón, y
un mejor postoperatorio.17 Sin embargo, esto no aplica en hemorragias o pérdida de
sangre, en la incapacidad de producir suficiente sangre o en trastornos sanguíneos
existentes donde una transfusión de sangre es necesaria para la vida del paciente.
Mientras la ciencia no logre desarrollar una fuente de sangre artificial, no existe
ninguna alternativa aceptable a una transfusión de sangre en muchas situaciones.
Medicamentos conocidos como factores de crecimiento para incrementar la capacidad
del organismo de fabricar sangre estimulan la producción de glóbulos rojos y de
plaquetas. Estos en la mayoría de los casos, no reemplazan totalmente la necesidad
de una transfusión.18