Aristóteles Poética 1-6
Aristóteles Poética 1-6
Aristóteles Poética 1-6
1
Las cifras entre paréntesis indican las líneas en que se divi-den las secciones a y b, según la numeración
asignada a las obras clásicas a partir del restablecimiento de los textos origi-nales, y aceptada como una
convención internacional.
2
El ditirambo era en su origen un himno cantado en honor de Dionisio. Su evolución en Corinto dio
nacimiento a la tragedia.
3
La palabra imitación, rnírnesis en griego, se debe entender, corno representación de la realidad.
4
Sofrón de Siracusa, autor de mimos, contemporáneo de Eurípides. Jenarco trabajó en la misma línea.
5
Trágico ateniense. Floreció hacia el 380. Quedan escasos fragmentos.
melodía y verso, por ejemplo, la poesía ditirámbica y nómica 6, la tragedia y la comedia,
con la diferencia, empero, de que las tres clases de medios son todos empleados
juntos en algunos de ellos, y en otros aparecen separados, uno después de otro. Tales
son las diferencias que yo establezco entre las artes en cuanto a los medios de realizar
la imitación.
Capítulo II
1448a II. Los objetos que los imitadores representan son acciones, efectuadas
por agentes que son buenos o malos (las diversidades del carácter humano, casi
siempre derivan de esta distinción, pues la línea entre la virtud y el vicio es la que
divide a toda la humanidad) y los imitan mejores o peores de lo que nosotros somos, o
semejantes, según proceden los pintores. (5) Así Polignoto 7 representaba a sus
personajes superiores a nosotros, Pausón8, peores, y los de Dionisio eran tales como
nosotros. Es claro que cada uno de los tipos de imitación a que me he referido admitirá
estas variaciones, y ellas diferirán entonces de acuerdo con las diferencias de los
objetos que representan. Aun en la danza, el arte de tocar la flauta y la lira, tales
diversidades son posibles, (10) y también suceden en las partes sin nombre que
emplea el lenguaje, la prosa o el verso sin armonía como sus medios; los personajes de
Homero, por ejemplo, son mejores que nosotros; los de Cleofón se hallan a nuestro
nivel, y los de Hegemón de Taso, el primer autor de parodias, y Nicocares, que escribió
la Diliada, se hallan por debajo de este modelo. Lo mismo es cierto del ditirambo y del
nomos; los personajes (15) pueden representarse en ellos con la diferencia
ejemplificada en los cíclopes de Timoteo y Filoxeno. Esta diferencia es también la que
distingue a la tragedia y la comedia; ésta pinta a los hombres peores de lo que son,
aquélla, mejores que los del presente.
Capítulo III
6
Nomos fue en sus comienzos una especie de himno primitivo. Terpandro (675) le dio forma artística.
7
Oriundo de Tasox, llegó a Atenas en la época de Cimón. Muy celebrado por la delicadeza de sus
cuadros. Pausanias de dejado un relato de sus obras.
8
Parece que su pintura ridiculizaba a los hombres.
por la cual sus obras se llamas dramas, porque en ellos los personajes representan la
trama. De aquí que tanto la tragedia como la comedia (30) sean reclamadas por los
dorios como sus descubrimientos; la comedia, por los megáricos, aquellos que
surgieron en Grecia cuando Megara se convirtió en una democracia, y por los
megáricos de Sicilia a causa de que el poeta Epicarmo 9 procedía de su país, y mucho
antes que Quiónides y Magnes; también la tragedia es reivindicada por algunos dorios
del Peloponeso. En apoyo de estos reclamos ellos se refieren a los vocablos "comedia"
y "drama". Su palabra (35) para los villorrios circundantes, dicen, es comae, mientras
que los atenienses los llaman demes, suponiendo así que los comediantes extrajeron
su nombre no de sus comoe10 o diversiones, sino de su trashumación aldea en aldea,
carentes de aprecio, y constreñidos a deambular fuera de la ciudad.
1448b También su palabra, afirman, para “actuar" es dran, en tanto los
atenienses emplean el verbo práttein.
Esto es suficiente entonces respecto al número y naturaleza de los puntos de
diferencia en la imitación de estas artes.
Capítulo IV
Es evidente que el origen general de la poesía se debió (5) a dos causas; cada una de
ellas parte de la naturaleza humana. La imitación es natural para el hombre desde la
infancia, y esta es una de sus ventajas sobre los animales inferiores, pues él es una de
las criaturas más imitadoras del mundo, y aprende desde el comienzo por imitación. Y
es asimismo natural para todos regocijarse en tareas de imitación. La verdad de este
segundo punto se muestra por (10) la experiencia; aunque los objetos mismos resulten
penosos de ver nos deleitamos en contemplar en el arte las representaciones más
realistas de ellos, las formas, por ejemplo, de los animales más repulsivos y los cuerpos
muertos. La explicación se encuentra en un hecho concreto: aprender algo es el mayor
de los placeres no sólo para el filósofo, sino también para el resto (15) de la
humanidad, por pequeña que sea su aptitud para ello; la razón del deleite que produce
observar un cuadro es que al mismo tiempo se aprende, se reúne el sentido de las
cosas, es decir, que el hombre es de este o aquel modo; pues si no hubiéramos visto el
objeto antes, el propio placer no radicaría en el cuadro como una imitación de éste,
sino que se debería a la ejecución o al colorido (20) o a alguna causa semejante. La
imitación, entonces, por sernos natural (como también el sentido de la armonía y el
ritmo, los metros que son por cierto especies de ritmos) a través de su original aptitud,
y mediante una serie de mejoramientos graduales en su mayor parte sobre sus
primeros esfuerzos, crearon la poesía a partir de sus improvisaciones.
La poesía, sin embargo, pronto se dividió en dos clases (25) según las
diferencias de carácter en los poetas individuales; pues los más elevados entre ellos
debían representar las acciones más nobles y los personajes más egregios; mientras los
de espíritu inferior representaban las acciones viles. Estos últimos producían invectivas
primero, así como otros componían himnos y panegíricos. No conocemos ningún
poema de los poetas prehoméricos, aunque sin duda hubo muchos autores entre ellos;
9
Poeta siciliano o de Cos, nacido en el 540. Diels recoge varios de sus fragmentos. Hay en él una
influencia de Heráclito.
10
Comos, composición jocosa popular. Alude a la diversión del comos o aldea.
pueden hallarse ejemplos, por cierto, desde Homero en adelante, tal su margites11 y
poemas similares de otros. En esta poesía (30) de invectiva su natural adecuación
produjo el metro yámbico que quedó en uso; de aquí nuestro presente término
"yámbico", porque era el metro de sus yambos o invectivas de unos contra otros.
Como resultado se obtuvo que los viejos poetas se convirtieron, algunos de ellos, en
autores del verso heroico y otros del yámbico. La posición de Homero, no obstante, es
peculiar: así como fue en el estilo serio el poeta de los poetas, elevado no sólo (35) por
su excelencia literaria, sino también mediante el carácter dramático de sus
imitaciones, fue asimismo el primero en bosquejar para nosotros las formas generales
de la comedia al producir no una invectiva dramática, sino un cuadro dramático de lo
ridículo; sus margites en verdad se hallan, respecto a nuestras comedias en la misma
relación que la Ilíada y la Odisea frente 1449a a nuestras tragedias. Pero tan pronto
como la tragedia y la comedia aparecieron en el ambiente, aquellos naturalmente
atraídos por cierta línea de poesía se convirtieron en autores de comedias en lugar de
yambos, y los otros (5) inclinados por su índole a una línea distinta, en creadores de
tragedias en lugar de epopeyas, porque estos nuevos modos del arte resultaban más
majestuosos y de mayor estima que los antiguos.
En cuanto a cuestionar si la tragedia es ahora todo lo que debe ser en sus
elementos formativos, considerar todo ello y decidirlo teoréticamente y en relación a
las representaciones, es un problema para otra investigación.
Esta comenzó ciertamente mediante improvisaciones, como también la
comedia; (10) la primera se originó con los autores de los ditirambos, la otra con las
canciones fálicas, que todavía perviven como instituciones en algunas de nuestras
ciudades. Y su avance desde entonces fue lento, a través de su transformación y luego
de superar etapas en cada paso. Sólo después de una larga serie de cambios el
movimiento de la tragedia se detuvo al alcanzar su forma natural (15). 1) El número de
actores fue primero aumentado a dos por Esquilo, quien disminuyó la importancia del
coro, e hizo que el diálogo, o la parte hablada, asumiera la misión decisiva en el drama.
2) Un tercer actor y la escenografía se debieron a Sófocles. 3) La tragedia adquirió
también su magnificencia. Descartó los (20) relatos breves y el lenguaje chabacano,
que debía a su origen satírico, alcanzó, aunque sólo en un momento tardío de su
progreso, un tono de dignidad; su metro cambió, pues, del trocaico al yámbico. La
razón para su uso originario del tetrámetro trocaico yacía en que su poesía era satírica
y más relacionada con la danza que lo que sucede ahora. Empero, tan pronto como se
introdujo la parte hablada, la naturaleza misma encontró el metro adecuado. El
yámbico (25), según sabemos, es el más flexible de los metros, como se muestra por el
hecho de que muy a menudo caemos en él en el diálogo, mientras que resulta raro que
hablemos en hexámetros, y esto sólo cuando nos separamos del tono hablado de la
voz. 4) Otro cambio fue la pluralidad de episodios o actos. En cuanto a los problemas
restantes, los adornos sobreagregados y el relato de su introducción, éstos deben ser
aceptados según se dijo, pues demandaría (30) una tarea muy larga revisar los detalles.
11
Margites, canción cómica primitiva. Homero habría compuesto algunas de estas piezas.
Capítulo V
Capítulo VI