CONSERVACION Y SOCIEDAD Reporte de Lectura

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 8

REPORTE DE LECTURA: “CONSERVACION Y SOCIEDAD”.

ALUMNO: GONZALO JAVIER RODRIGUEZ DIAZ.

Los ecosistemas han sido un tema abordado principalmente por comunidades de científicos dedicados a
la biología y la ecología. Buena parte de la información derivada de los estudios de este gremio científico
ha servido de base para implementar importantes políticas y acciones ambientales, como el
establecimiento de áreas naturales protegidas,

capítulo es examinar algunos

aspectos vinculados a la forma en que la sociedad mexicana

entiende su relación con los sistemas naturales y los problemas

relacionados con la conservación de la biodiversidad. Diversas ini-

ciativas internacionales, asimismo, han insistido en la

necesidad de realizar análisis que integren los compo-

nentes social y biológico, lo que actualmente se deno-

minan sistemas socioecológicos o sistemas acoplados

humano-ambientalesLa fragmentación de lo humano y lo natural es producto del

Renacimiento, del advenimiento de la razón o el conocimiento

como forma de comprender el mundo en sustitución de las

ideas religiosas. El rasgo humano por excelencia es la capacidad

de pensamiento y reflexión, y la ciencia se establece como la

expresión más pura de la razón, como un instrumento para

alcanzar la verdad. En poco tiempo la naturaleza pasó de ser un lugar encantado

a un universo cuantificable y apropiado por los humanos. En nuestro país comienzan a tener auge los
estudios de
percepciones sociales de los habitantes del medio rural

sobre las cuestiones ambientales. La causa principal es el

reconocer a estos habitantes como los principales usua-

rios y propietarios de los ambientes naturales. Se estima

que unas 30 000 comunidades rurales manejan alrededor

de 100 millones de hectáreas, que corresponden a 60% de

las tierras agrícolas productivas, La disponibilidad de agua en el

territorio contribuyó al surgimiento de comunidades y

pueblos, ya que se ubicaron siguiendo el patrón monte-

agua, es decir, al pie de los cerros donde afloraban los

manantiales y se formaban los ríos y lagos; la

conservación y adecuado manejo del agua y los bosques

posibilitó el desarrollo de las comunidades y sociedades

hidráulicas. la importancia sociocultural del agua va más allá de

ser un elemento vital, ya que sus significados y

representaciones muestran una concepción mítica sobre el

origen del mundo y la naturaleza humana. Pri-

mero están los que expresan que la naturaleza fue creada

para su utilización por los humanos; después hay quienes


justifican su destrucción debido a las necesidades econó-

micas de los pobladores, y un tercer grupo, menor que

los anteriores, que reconoce la importancia de conservar

los sistemas naturales. las percepciones

acerca de la relación entre los seres humanos y la natura-

leza, así como sobre las preferencias por la diversidad

biofísica y social del entorno en el que viven algunos

mexicanos de zonas urbanas. Nos referimos, asimismo, a

otros tipos de percepciones ambientales que afectan la

conducta de estas personas. La comprensión que tenemos del papel que desempeñan

las sociedades humanas en el funcionamiento de la bios-

fera y la problemática ambiental modela en gran medida

nuestra relación con la naturaleza. Ante la gravedad de la

crisis ambiental en sus dimensiones local, regional y glo-

bal, desde hace más de tres décadas han cobrado fuerza

movimientos sociales encaminados a la toma de concien-

cia sobre la situación tanto de los sistemas que sustentan


el fenómeno de la vida sobre el planeta, como sobre los

problemas que enfrentamos los seres humanos, toda vez

que nuestro bienestar depende en gran medida de los bie-

nes y servicios brindados por los ecosistemas. La Ciudad de México representa un ejemplo emblemático
de

la crisis ambiental urbana de la actualidad, aunque desde su

fundación los asentamientos humanos impusieron severas

cargas al ecosistema (Ezcurra 1992, 2000). La transformación

del sistema de lagos, a lo largo de 400 años, en una mancha

urbana de una superficie similar (1 500 km2) es uno de los

cambios ambientales más radicales registrados en la historia

del país, y quizá del planeta. La educación ambiental en las áreas urbanas representó,

desde principios de la década de los años ochenta, el es-

pacio de actuación más visible en nuestro país. La educación ambiental en el medio rural

En el medio rural la situación de la educación ambiental

no formal es cualitativamente diferente a lo que ocurre en

el medio urbano. En este, como decíamos, la temática am-

biental se maneja de manera puntual e incluso indepen-

diente de otros asuntos de naturaleza social y económica.

En aquel, los proyectos de educación ambiental se en-

cuentran integrados a otros programas de mayor alcance,


no solo en los de conservación, sino también en los de

desarrollo comunitario (social, productivo, cultural, etc.).

Esta situación conlleva mayores posibilidades no solo de

dar continuidad a las acciones, sino de obtener mejores

efectos en la modificación de hábitos y costumbres cultu-

rales y patrones productivos (véase el recuadro 18.6). El papel de los medios

de comunicación masiva

No existen datos confiables sobre el papel de los medios

en las estrategias de comunicación y educación en mate-

ria de medio ambiente y biodiversidad, por no haberse

emprendido estudios completos (ni siquiera de carácter

cualitativo), deficiencia que es bastante frecuente en Amé-

rica Latina (Tréllez-Solís y Quiroz 1992). Solamente po-

demos contar con meras impresiones y con algunas ten-

dencias a partir de datos dados a conocer por los medios

impresos. Esfuerzos de la sociedad

civil organizada

La sociedad ha mantenido una participación constante


en los temas ambientales y de conservación en los últi-

mos diez años. El directorio publicado por el Cecadesu

en 2000, que lamentablemente no se continuó alimentan-

do en su versión electrónica, consigna 1 337 grupos, orga-

nizaciones e instituciones en todo el país, de los cuales

39.6% (530) afirma estar vinculado con algún tipo de ac-

tividades de educación, comunicación y capacitación (Se-

marnap 2000); se cuenta con otros directorios especiali-

zados que aportan cifras equivalentes (fmcn 2004). Esfuerzos del sector público

El sector público ha impulsado la educación ambiental

desde la creación de la Subsecretaría de Ecología en 1982.

La oficina correspondiente que durante varios sexenios

tuvo el nivel de dirección de área, en 1995 fue promovida

al nivel de dirección general al crearse el Cecadesu en el

marco de la Semarnap. Esta situación fortaleció conside-

rablemente los proyectos en esta área e impulsó el estable-

cimiento de las bases de coordinación sep-Semarnap que

fueron refrendadas en 2001 y nuevamente en 2006. Ello

ha permitido, desde el principio, recomendar e incluso

participar en la renovación de libros de texto gratuito, en

la actualización docente y en la formulación de los nuevos


programas de estudio, particularmente en la reforma de

la educación secundaria y de la educación tecnológica. La participación social

en los esfuerzos de conservación

Desde finales de los años setenta la política de conserva-

ción en México adoptó la propuesta del programa de la

unesco El Hombre y la Biosfera, que sugería que la con-

servación de los ecosistemas estuviera vinculada a los

objetivos del desarrollo regional, y para ello la poblaciónEl papel de las instituciones locales

del medio rural en la conservación ecológica

Si bien hoy se reconoce de manera oficial la necesidad de

incorporar en los esfuerzos de conservación impulsados

desde el Estado a las poblaciones que detentan los recur-

sos naturales, lo cierto es que estas no han sido ajenas a

dichas prácticas. La participación social en la protección

ambiental en el medio urbano

En esta sección comentaremos algunas experiencias de

participación social en la Ciudad de México referidas a la

protección ambiental. Sin embargo, es importante prime-

ro hacer referencia a algunos aspectos generales acerca de


la participación ciudadana y de los movimientos sociales

que han existido en el medio urbano en los últimos años. Construcción de una

responsabilidad social en torno

a la conservación: conclusiones,

criterios y recomendaciones

1] Los esfuerzos sociales para la conservación de ecosis-

temas deben estar enmarcados en la construcción de

alternativas hacia la sustentabilidad. Es decir, no deben

ser esfuerzos aislados, sino ensamblados a procesos

más amplios como, por ejemplo, los que se realizan

para incorporar la dimensión ambiental al desarrollo

nacional o para crear políticas públicas ambientales

en materia de economía, energía, consumo,

También podría gustarte