Consultas en Torno A Temas de Crianza y Su Relación Con El Aprendizaje de La Convivencia
Consultas en Torno A Temas de Crianza y Su Relación Con El Aprendizaje de La Convivencia
Consultas en Torno A Temas de Crianza y Su Relación Con El Aprendizaje de La Convivencia
Los contenidos de este artículo están bajo una licencia Creative Commons
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Abstract: This article systematizes the concerns around the topic of upbringing and the learning
process of cohabitation gathered by the Department of Psychology of an educational center located in
the Great Metropolitan Area, in Costa Rica, between the years 2010 and 2011. A mixed approach
consisting on a process of recollection, analysis and connection of both quantitative and qualitative data
was selected. One of the main interests was to investigate if the concerns and strategies used by the
families were compatible with the learning process of cohabitation. Regarding the main results, changes
in the structure and dynamic of the families were evidenced and these influenced directly parenting
skills and therefore the learning process to achieve a better cohabitation. The various demands, social
pressures and multiplicity of functions (that must be handed by the adults) interfere with the group
cohesion, taking away importance from the socializing function and specifically the learning process of
cohabitation.
1
Docente en la Escuela de Psicología de la Universidad de
Costa Rica, también labora en un centro educativo. Máster en
Psicología Educativa, Universidad de Costa Rica, San José,
Costa Rica.
1
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
1. Introducción
La familia es una categoría histórica, marcada por aspectos políticos, económicos y
culturales. De acuerdo con Espinosa (2009), es el campo de las relaciones afectivas más
profundas y, por lo tanto, constituye uno de los pilares de la identidad personal; todas las
dimensiones humanas más significativas se plasman y transmiten en la cotidianidad de la vida
familiar. Para la autora Arès (2009), la familia constituye un sistema de relaciones que es más
que la suma de sus miembros, donde se cumplen funciones básicas, económicas, biológicas,
espirituales, culturales y educativas.
En el seno de la familia se instaura el proceso de socialización, ya que es el primer
grupo humano que ejerce la intermediación individuo-sociedad. Al respecto, indica Rodríguez
(2006) que la familia es una institución mediadora de la realidad en el proceso de integración
del ser humano a su comunidad. Por tanto, tiene por delante el reto de encauzar a sus
integrantes, para que adquieran y desarrollen habilidades sociales que les permitan manejar
adecuadamente sus emociones, comprender su contexto y ubicarse como proactivos en la
lucha por la construcción de una cultura de paz.
Este reto al que se refiere Rodríguez, se ve empañado por los desafíos que enfrenta la
familia actual. Para Murueta (2009), la familia vigente es una compleja multiplicidad de
tipologías producto de la globalización, que atraviesa por grandes presiones sociales. Los
intereses de índole económica conducen a que padres y madres asuman muchas funciones
simultáneas, e inviertan gran parte del tiempo en tareas fuera del espacio familiar. Como
consecuencia, cuando tienen lugar las interacciones, predominan el cansancio y la culpa, que
a su vez conlleva a los abusos, el irrespeto y la violencia.
Al respecto, indica Espinosa (2009) que la familia actual está sometida a altos niveles
de estrés, debido a las demandas y presiones sociales a las que está sometida; esto genera
que progenitores se sientan confundidos, infelices, ineficaces y desorientados frente al
ejercicio de la crianza.
De lo expuesto se desprende que la función básica de la familia como instancia
formadora, ha venido en detrimento, perdiendo el protagonismo que la identificaba décadas
atrás. El Ministerio de Educación de Colombia (2005) refiere que la familia actual ha traslado
a la escuela la formación ciudadana. Afirma que en el núcleo familiar se han dejado de
promover competencias que generan prácticas proclives a la convivencia.
2
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
2. Referente teórico
2.1 Familia como instancia socializadora
El estudio de la familia ha sido abordado por distintos campos científicos, según el
interés particular de cada uno de ellos. La filosofía, la sociología, el derecho, la religión y la
psicología, por nombrar algunos, han brindado una definición del concepto con diferentes
grados de alcance social, académico y científico.
En el área psicosocial, la profesora e investigadora cubana, Arès Muzio, se refiere al
núcleo primario como
… es el grupo de intermediación entre el individuo y la sociedad. Constituye el núcleo
más primario del ser humano, en ella el hombre inscribe sus primeros sentimientos, sus
primeras vivencias, incorpora las principales pautas de comportamiento y le da sentido a
su vida. (Arès, 2002, p. 1)
3
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
4
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
de la familia, las jerarquías de sus funciones, los valores predominantes y los principios
éticos. De acuerdo con Arès (2002), “el grupo familiar ha resistido a los impactos de los
cambios sociales, sin desaparecer como grupo humano, se ha diversificado en su tipología,
cambiado las formas de hacer pareja, los estilos de autoridad, los modelos de paternidad y
maternidad” (p.06).
Para Murueta (2009) la familia actual cuenta con menos espacio para el esparcimiento, la
convivencia, la comunicación. Opina que, debido al cansancio y a las limitaciones económicas,
son pocas las familias que promueven la convivencia activa. Dadas las tensiones y los vacíos
emocionales que sufren padres e hijos, sus interacciones se van llenando de regaños,
reclamaciones, culpas, chantajes y abusos mutuos. Esta situación se traduce, en la sociedad, en
el crecimiento de abusos, irrespeto y violencia:
La disminución de la afectividad en la familia produce la falta de sensibilidad hacia el
sufrimiento de los demás, e incluso éste se ve como motivo de goce morboso, la falta de
empatía y la frustración personal genera recelos y envidias ante el bienestar ajeno.
(Murueta, 2009, p. 35)
Por su parte, Espinosa (2009) considera que la dinámica familiar actual está sometida a
presiones, demandas y estrés, tanto en el plano intrafamiliar como en los producidos en otros
subsistemas interrelacionados. Plantea que los conflictos intrafamiliares se deben a la falta de
conocimiento de adecuadas alternativas de relación, a la incapacidad de un manejo
conveniente de las emociones y a un sistema de creencias estereotipadas en cuanto al
género o la crianza. También influye la presencia de sentimientos de impotencia y
devaluación ante un contexto lleno de dificultades económicas, sociales y políticas:
En la época actual se observa poca claridad en las reglas en varios niveles. Por ejemplo,
los padres se sienten incompetentes para establecer reglas firmes con los hijos, debido
entre otras cosas, a la influencia de los medios de comunicación masiva (radio, televisión,
revistas e internet), que los confunde y los hace sentir “malos padres” si ejercen la
autoridad. Asimismo, afloran sentimientos de culpabilidad por dejar a los hijos solos
debido a las actividades laborales o por haber vivido una separación, lo que condiciona a
una jerarquía ineficaz o se produce una relación amigos/padres donde los hijos no tienen
una guía y deben ser más bien un soporte emocional de sus propios padres (Espinosa,
2009, p. 56)
5
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
El resultado para la misma autora, es que, tanto padres como hijos lucen confundidos,
desorientados, ineficaces e infelices. Señala que las familias actuales con niños y niñas en edad
preescolar y primaria, experimentan grandes demandas y presiones económicas que obligan al
padre y la madre a asumir largas jornadas laborales. Por su parte, los infantes permanecen
solos, en lugares de cuido o bajo la custodia de otras personas de la familia extensa.
De acuerdo con Arès (2002), los impactos socioeconómicos y sociopolíticos impuestos
por la globalización, han diversificado la estructura, el funcionamiento y la tipología de la
familia nuclear tradicional:
Hasta hace pocas décadas se hablaba que la familia era la unión legal entre un hombre
y una mujer que se unen, con el objetivo de procrear, educar los hijos, y satisfacer
necesidades humanas de unión y compañía. Ninguna definición de este tipo se
corresponde con los cambios actuales. La unión puede ser legal o no, puede ser para
toda la vida, pero las separaciones y los divorcios son frecuentes, los miembros de la
unión ya no siempre son heterosexuales, la unión ya no es solo para procrear. Con ello
queremos decir que actualmente estamos ante el fenómeno de la diversidad y
complejidad familiar. (Arès, 2002, p. 107)
6
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
La misma autora propone redimensionar los roles de padre y madre para los tiempos
actuales, ya que no están acordes a las exigencias de cambio y se presenta una
contradicción entre los mandatos sociales y la posibilidad real de concretar en la práctica, así
como la puesta de acuerdo entre los adultos. Por esto, propone reaprender la crianza,
aprender a decir, hacer y sentir lo pertinente y necesario bajo nuevas pautas:
Se deben aprender modelos de cooperación, colaboración, que permitan un fondo de
tiempo disponible para la crianza y que garanticen la posibilidad de reemplazo de los
adultos en la familia. Reevaluar pautas de crianza, criterios de autoridad, del papel y
lugar de los hijos, de conceptos como crecer, la comunicación, las contradicciones
básicas que se viven hoy en la tarea de educar. (Arès, 2002, p. 26)
7
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
8
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
3. Metodología
Con el objetivo de lograr una percepción más integral y completa del fenómeno de
estudio, se seleccionó un enfoque mixto, que implicó un proceso de recolección, análisis y
vinculación de datos cuantitativos y cualitativos. Esto permitió explorar distintos niveles del
problema seleccionado y obtener una mayor variedad de perspectivas.
La investigación se dividió en cuatro etapas. La primera consistió en la revisión
bibliográfica, lo que posibilitó la recopilación de información relevante y necesaria al problema
de estudio. Como segundo paso, se utilizó la estrategia metodológica de recopilar información
proveniente de formularios de consultas, efectuados al Departamento de Psicología (DP) del
centro educativo. Estas consultas las realizaron personas encargadas de la crianza de niños y
niñas entre los tres y los diez años de edad, provenientes de un centro educativo ubicado en
el área metropolitana, entre los ciclos lectivos 2010 y 2011.
Como resultado de esta revisión, se contabilizaron 226 consultas, planteadas por los
siguientes representantes familiares: 64% por madres de familia, que fueron las mayores
consultantes, seguidas por ambos progenitores con un 18%. En tercer lugar, se encontraron
figuras paternas con un 10%; y el restante 8% estuvo compuesto por otras personas encargadas
de la crianza, como abuelos, abuelas y tías.
Estas inquietudes no correspondieron necesariamente a 226 representantes familiares, ya
que en el transcurso de los ciclos lectivos 2010 y 2011, algunas personas consultaron varias
veces sobre temas distintos.
Es importante explicar que las consultas fueron en su momento expuestas a la psicóloga
escolar de manera individual, o acompañada de algunas docentes. En todos los casos se llenó un
formulario de consulta propiedad del DP, que posteriormente sirvió de insumo para esta
investigación.
En la tercera etapa, se revisaron los 226 formularios de consulta. Toda la información
proveniente de estos se sistematizó de acuerdo a los motivos de consulta de las familias, con
un total de 29 inquietudes (redactadas como preguntas) en torno a temas de crianza.
Adicionalmente, y en lo que respecta a los datos cualitativos, a partir de la indagación
de los 226 formularios se realizó un listado de frases textuales y explicaciones de algunas de
las narraciones brindadas por las personas participantes, a fin de ejemplificar los datos
cuantitativos y comprender el fenómeno de estudio a mayor profundidad.
9
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
En la cuarta fase del proceso, las 29 preguntas se subdividieron por temáticas, al igual
que la información cualitativa, constituyendo un total de cinco categorías de análisis.
Todo esto con el objetivo de indagar sobre las inquietudes y estrategias empleadas en
la crianza, y si estas fueron o no compatibles con el aprendizaje de la convivencia.
4. Análisis de resultados
Durante los años 2010 y 2011, madres, padres, y otras personas encargadas de niños y
niñas entre los tres y los diez años, realizaron 226 consultas al Departamento de Psicología
(DP), relacionadas con inquietudes en torno a la crianza.
Para efectos del análisis de los datos, el registro de las 226 inquietudes se sistematizó
en 29 preguntas, que se plantearon en referencia a la atención de niños y niñas, tal y como se
exponen en la tabla 1.
Tabla 1
Preguntas que sistematizan las 226 consultas formuladas por familias al DP.
1. ¿De qué forma poner límites?
2. ¿Cómo hacer para que sigan instrucciones de adultos?
3. ¿Cómo aplicar consecuencias de manera efectiva?
4. ¿Cómo saber si son justas las consecuencias que se aplican en el ámbito escolar?
5. ¿Cómo promover tolerancia y autocontrol?
6. ¿Cómo ejercer un rol de autoridad sin ser autoritario?
7. ¿Qué hacer ante situaciones de berrinche?
8. ¿Cómo lidiar con reacciones violentas?
9. ¿Cómo enseñar a enfrentar y solucionar conflictos con otros niños?
10. ¿Cómo hacer para que duerman en su propia cama?
11. ¿Estrategias para que adquieran mayor seguridad en sí mismos?
12. ¿Cómo ayudar a vencer temores?
13. ¿Cómo favorecer la integración social?
14. ¿Cómo promover autonomía?
15. ¿Cómo ayudar a vencer temores nocturnos?
16. ¿Cómo ayudar a fortalecer la autoestima?
17. ¿Cómo explicar conflictos familiares?
18. ¿Cómo explicar cuando un padre o madre no se involucra en la crianza?
19. ¿Cómo ayudar cuando los padres se separan?
20. ¿Cómo ayudar a enfrentar la muerte de un ser querido?
21. ¿Cómo proceder ante situaciones de angustia ante la separación?
22. ¿Cómo explicar sobre una enfermedad grave de un ser querido?
23. ¿Cómo explicar problemas económicos?
24. ¿Cómo apoyar en las dificultades académicas?
25. ¿Cómo manejar la indisposición para asistir a la escuela?
26. ¿Cómo motivar en el estudio?
27. ¿Cómo enseñar a valorar lo que se tiene?
28. ¿Qué hacer cuando no dicen la verdad?
29. ¿Cómo enseñar a compartir?
Fuente: Elaboración propia
10
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Tabla 2
Categorías en las que se agrupó la sistematización de las consultas.
Categoría
1. Inquietudes relacionadas con aspectos disciplinarios.
2. Inquietudes relacionadas con habilidades sociales.
3. Inquietudes relacionadas con cambios o conflictos en la dinámica familiar.
4. Inquietudes relacionadas con aspectos de desempeño académico.
5. Inquietudes relacionadas con valores.
11
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Tabla 3
Categoría #1: Inquietudes relacionadas con aspectos disciplinarios.
Preguntas (Todas las preguntas están referidas a los niños y las niñas.) % de consultas
¿De qué forma poner límites? 10%
¿Cómo hacer para que sigan instrucciones de adultos? 6.0%
¿Cómo aplicar consecuencias de manera efectiva? 5.0%
¿Cómo saber si son justas consecuencias que se aplican en el ámbito escolar? 4.0%
¿Cómo promover tolerancia y autocontrol? 3.5%
¿Cómo ejercer un rol de autoridad sin ser autoritario? 2.6%
¿Qué hacer ante situaciones de berrinche? 2.6%
¿Cómo lidiar con reacciones violentas? 2.2%
Porcentaje categoría #1: 36%
Fuente: Elaboración propia
Del total general de consultas, un 36% de las personas planteó inquietudes con
respecto al tema de la implementación de la disciplina en la dinámica familiar, identificando la
indisciplina como una fuente común de desacuerdos entre personas adultas e infantes.
Aunado a esto, la indisciplina fue interpretada como un inconveniente para el logro de la
convivencia familiar. En tanto que el concepto subyacente de convivir no incluye el
desacuerdo como parte de la interrelación: “...que no hagan caso (hijos) me vuelve loca, yo
quiero ser como esas familias que conviven siempre felices”. En otras palabras, para las
personas participantes, la convivencia se entiende como una situación de armonía que
excluye el desacuerdo, cuando, por el contrario, debe ser un aprendizaje del respeto a la
diversidad, en que los conflictos y su resolución alternativa a la violencia, son experiencias
valiosas.
En la revisión de los expedientes escolares del DP, se evidenció que las personas
responsables de la crianza presentan poca claridad sobre etapas del desarrollo infantil, cómo
brindar instrucciones, establecer límites, ejercer la guía adulta, y enfrentar berrinches y
situaciones violentas, plantear y cumplir consecuencias, y promover el auto control.
Sobre el conocimiento acerca de las etapas del desarrollo infantil, se determinó:
Dificultad para identificar conductas esperadas y no esperadas en diferentes etapas del
desarrollo.
Dificultad para establecer límites o consecuencias distintas entre el grupo de hermanos
o hermanas (de acuerdo a la situación y a las etapas del desarrollo).
12
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Dificultad para realizar cambios en torno a la disciplina conforme los niños y las niñas
evolucionan.
13
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
En todos los casos, las familias relacionaron las dificultades disciplinarias con un clima
de tensión, enojo, mal humor y distanciamiento afectivo entre los integrantes. Además de un
incremento en la sensación de que la crianza es una labor muy difícil de desempeñar, lo que
condujo a que buscaran orientación del personal del centro educativo. Sin embargo, cuando
la institución escolar fue la que aplicó consecuencias, las personas cuidadoras manifestaron
desconfianza e inconformidad y un deseo por justificar la conducta del infante.
Las familias del estudio no visualizaron la importancia de la adquisición de normas
sociales de convivencia como una experiencia de aprendizaje que, posteriormente, niños y
niñas puedan trasladar a otras esferas sociales. Por el contrario, modelaron inestabilidad,
incongruencia, comunicación poco clara o en base a regaños y el uso de la violencia para
solucionar desacuerdos.
14
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Con respecto a la segunda categoría, en torno a las habilidades sociales que se desean
fortalecer en los niños y niñas para que adquieran más seguridad, mayor autoestima y más
autonomía (y, por lo tanto, superen entre otros temores), se ubicó un 21.5% del total de
consultas, que se describe en la tabla 4.
Tabla 4
Categoría #2: Inquietudes relacionadas con habilidades sociales.
Preguntas (Todas las preguntas están referidas a los niños y las niñas.) % de consultas
¿Cómo enseñar a enfrentar y solucionar conflictos con otros niños? 8.0%
¿Cómo hacer para que duerman en su propia cama? 2.8%
¿Estrategias para que adquieran mayor seguridad en sí mismos? 2.6%
¿Cómo ayudar a vencer temores? 2.2%
¿Cómo favorecer la integración social? 2.2%
¿Cómo promover autonomía? 2.2%
¿Cómo ayudar a vencer temores nocturnos? 0.9%
¿Cómo ayudar a fortalecer la autoestima? 0.4%
Porcentaje categoría #2: 21.5%
Fuente: Elaboración propia
15
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Tabla 5
Categoría #3: Inquietudes relacionadas con cambios o conflictos en la dinámica familiar.
Preguntas (Todas las preguntas están referidas a los niños y las niñas.) % de consultas
¿Cómo explicar conflictos familiares? 5%
¿Cómo explicar sobre el padre o madre que no se involucra en la crianza? 4%
¿Cómo ayudar cuando los padres se separan? 2.6%
¿Cómo ayudar a enfrentar la muerte de un ser querido? 2.6%
¿Cómo proceder ante situaciones de angustia en la separación? 1.7%
¿Cómo explicar sobre una enfermedad grave de un ser querido? 1.8%
¿Cómo explicar problemas económicos? 1.3%
Entre quienes consultaron prevaleció la creencia de que la infancia debe estar excluida
de situaciones de sufrimiento, lo que explica que en muchas ocasiones se mantenga a los
menores al margen de los acontecimientos y/o solo se atiendan dudas específicas. En otros
casos, se dieron explicaciones no coincidentes con la realidad; también refirieron
entretenerlos para promover la distracción y evitar el sufrimiento.
16
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
17
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Tabla 6
Categoría #4: Inquietudes relacionadas con aspectos del desempeño académico.
Preguntas (Todas las preguntas están referidas a los niños y las niñas.) % de consultas
¿Cómo ayudar en las dificultades académicas? 12%
¿Cómo manejar la indisposición para asistir a la escuela? 3%
¿Cómo motivar en el estudio? 3%
Porcentaje categoría #3: 18%
Fuente: Elaboración propia
18
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Tabla 7
Categoría #5: Inquietudes relacionadas con valores.
Preguntas (Todas las preguntas están referidas a los niños y las niñas.) % de consultas
¿Cómo enseñar a valorar lo que se tiene? 2.2%
¿Qué hacer cuando no dicen la verdad? 2.2%
¿Cómo enseñar a compartir? 0.9%
Porcentaje categoría #5: 5.5%
Fuente: Elaboración propia
5. Conclusiones
La familia actual, entendida como una multiplicidad de tipologías familiares, producto de
la globalización, continúa siendo un eslabón clave en la promoción del convivir, una
esperanza en un mundo que aspira a hacer efectivo el derecho humano a la paz.
19
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Para el logro de esta tarea, la estructura familiar necesita estar fortalecida y ser capaz
de responder a situaciones distintas y cambiantes. Al respecto, plantea Zaitegi (2008) que el
seno familiar, a través de la socialización, debe procurar favorecer competencias y
habilidades para vivir con dignidad, destacando el autoconocimiento, la autorregulación y la
capacidad de resiliencia. Con respecto a las habilidades sociales, refiere el mismo autor
aquellas para relacionarse positivamente con otras personas, como cooperar, negociar y
trabajar en equipo, entre otras.
Los resultados de este estudio precisaron una situación muy distinta a la planteada por
Zaitegi. Se evidenciaron cambios en la estructura, dinámica e interrelación familiar, que
inciden negativamente en las competencias para la crianza y, simultáneamente, en el
deterioro del aprendizaje de la convivencia. Los padres y las madres participantes se
mostraron tensos, agotados, frustrados e incluso desbordados, al intentar cumplir con la
multiplicidad de funciones socialmente asignadas. Se presentó una contradicción y una gran
distancia entre los mandatos sociales y la posibilidad real de concretarlos en la práctica.
Entre las familias del estudio, la comunicación dirigida a niños y niñas estuvo sujeta a
espacios limitados de tiempo y regida por regaños. Los patrones comunicativos no fueron
directos ni claros. En muchos casos, se orientaron a evadir conflictos o sentimientos. Se
entorpeció el aprendizaje de la escucha, también el respeto a la opinión ajena, la resolución
del conflicto a través de la palabra y la posibilidad de pensar distinto y plantearlo. Todos
estos, elementos claves de la convivencia.
En el ejercicio de la crianza, prevaleció un sentimiento de inseguridad y culpa que
conlleva a la sobreprotección y la tolerancia excesiva, las cuales, posteriormente, impiden
realizar los desprendimientos necesarios para crecer con libertad y autonomía.
En lo que respecta a los aspectos disciplinarios, se evidenció que un gran porcentaje de
las familias del estudio establecieron límites poco claros, o rígidos y difusos, invadiendo los
espacios y fracturando los procesos de individuación. Sobre este asunto, la investigadora
Espinosa (2009) explica que las figuras parentales se sienten incompetentes en el
establecimiento firme de reglas, porque temen ser vistos como “malos padres” si ejercen la
autoridad.
Algunas personas participantes del estudio recurrieron a los castigos físicos, indicando
que después del golpe el “niño entiende” e identifica “quien manda”. Al respecto, Henao
(2005) ha encontrado evidencias que señalan una tendencia a reproducir por fuera del hogar
20
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
la violencia vivida en la familia. Refiere que todo acto de violencia constituye una vulneración
a los derechos y las libertades fundamentales de las personas y una ofensa a su dignidad.
Los niños y las niñas, contrario al aprendizaje de la convivencia, copian los modelos
violentos, que se presentan como válidos en la resolución de conflictos y los reproducen en el
contexto familiar y, posteriormente, en otras instancias sociales.
Sánchez (2009) señala que el recurso de la empatía se dificulta cuando los castigos
aplicados responden más a una reacción emocional irreflexiva y sin explicación lógica. Indica
que los castigos tienen implicaciones en la relación de apego, puesto que se produce un
aprendizaje, pero por distanciamiento. Esto debido a que se trata de un estímulo aversivo
que, como tal, produce rechazo y malestar emocional, con implicaciones negativas en el
desarrollo de la personalidad. Esta situación, según Zaldívar (2005), dificulta la cohesión
familiar en términos de los vínculos emocionales, la cual es una dimensión central en la
socialización e interacción familiar.
Además, para López (2005) las diversas demandas, presiones sociales y multiplicidad
de tareas que deben asumir las figuras adultas, interfieren en esta cohesión grupal,
menoscabando la función socializadora y, específicamente, el aprendizaje de la convivencia.
Este aprendizaje fue delegado a la escuela, tal y como lo advirtieron familias participantes.
Rodríguez (2006) recuerda que la familia, más que ningún otro eslabón social, debe ser
el lugar donde los niños y las niñas aprendan sobre el diálogo, la tolerancia, la solidaridad, el
respeto a los derechos humanos y la búsqueda de la justicia, entre otros, por lo que se hace
imprescindible dotarla de insumos para que esta labor prevalezca.
Por su parte, Arès (2009) propone revisar los mandatos sociales a los que está sujeta
la familia como primera instancia socializadora, a fin de fortalecerla. Propone reaprender las
pautas de crianza, redimensionar los roles, en especial de padre y madre, aprender modelos
de cooperación y colaboración, evaluar los criterios de autoridad del papel y lugar de los hijos,
y conceptos como crecimiento y comunicación así como las contradicciones básicas que se
viven en la tarea de educar.
En el mismo sentido, Rentería, Lledios, y Giraldo (2008) plantean la necesidad
imperiosa de contribuir a que la familia se convierta en un escenario que se pueda reconstruir
y en el que sea factible enseñar y practicar la convivencia. Un espacio donde se desarrollen
competencias para al descubrimiento del otro y de sí mismo, como fundamento para el
21
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Referencias
Arès, Patricia (2002). Psicología de Familia. Una aproximación a su estudio. La Habana,
Cuba: Editorial Félix Varela.
Espinosa, María. (2009). Panorama de las relaciones familiares en la época actual. En Marco
Murueta y Maricela Osorio (Eds.), Psicología de la familia en países latinos del siglo XXI
(pp.43-60). México D.F.: Asociación Mexicana de Alternativas en Psicología.
22
Revista Electrónica “Actualidades Investigativas en Educación”
Murueta, Marco. (2009). Familia y proyecto social en la teoría de la praxis. En Marco Murueta
y Maricela Osorio (Eds.), Psicología de la familia en países latinos del siglo XXI (pp. 23-
42). México D.F.: Asociación Mexicana de Alternativas en Psicología.
Murueta, Marco. Osorio, Maricela. (2009). Psicología de la familia en países latinos del siglo
XXI. México D.F.: Asociación Mexicana de Alternativas en Psicología.
Organización para las Naciones Unidas. (1994) Carta de las Naciones Unidas y Estatuto de la
Corte Internacional de Justicia. Recuperado de http://
www.un.org/es/documents/charter/
Rentería, Erico, Lledios, Esperanza, y Giraldo, Alba. (2008). Convivencia familiar como lectura
aproximativa desde elementos de la psicología social. Revista Psicología Social 4, 427-
44.
Rodríguez, Bertha. (2006). Los métodos alternativos de solución de conflictos: una estrategia
inteligente para facilitar la convivencia pacífica. Revista Trabajo Social, 3, 124-139.
Sánchez, Ginette. (2009). Teorías de niños y niñas sobre el castigo parental aportes para la
educación y la crianza. Revista Actualidades Investigativas en Educación, 9, 1-29.
Recuperado de http://revista.inie.ucr.ac.cr/buscar-
articulos/controlador/Article/accion/show/articulo/teorias-de-ninos-y-ninas-sobre-el-castigo-
parental-aportes-para-la-educacion-y-la-crianza.html
Tuvilla, José. (2004). Cultura de Paz. España: Editorial Descléer de Brouwer, S.A.
Zaitegi, Nélida. (2008) Competencias para una vida nueva. Santiago, Chile: Sin editorial.
23