Recursos Hídricos Superficiales de La Pcia de Cba
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LOS SISTEMAS HÍDRICOS ARGENTINOS: ASPECTOS GEOQUÍMICOS, HIDROLÓGICOS Y AMBIENTALES. SEGUNDA PARTE View project
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RESUMEN
En este capítulo se abordan distintos aspectos de los recursos hídricos superficiales de la provincia de Córdoba sobre la
base de la información disponible en instituciones públicas y académicas y en trabajos publicados. Las características
del medio físico, la dinámica atmosférica y el factor antrópico constituyen los principales condicionantes de los recursos
hídricos superficiales. Se reconocen las siguientes regiones y sistemas hídricos superficiales: sistema de la laguna Mar
Chiquita y bañados del río Dulce, sistema del río Carcarañá, sistema del río Quinto o Popopis, Región sin drenaje su-
perficial de San Luis, Córdoba, La Pampa y Buenos Aires, región hídrica de la cuenca del río Conlara y arroyos menores
del norte de San Luis y oeste de Córdoba, sistema Salinas Grandes. En relación a la regulación y manejo de los cursos
fluviales para su aprovechamiento, usos extractivos y no extractivos, la provincia fue pionera en el país en la construcción
de obras de infraestructura hídrica. En cuanto a la calidad del recurso, el agua superficial como fuente para diferentes
usos es en general de buena calidad. La principal problemática está vinculada a la eutrofización de los embalses. En los
aspectos referidos a la gestión de los recursos hídricos la provincia está en consonancia con las políticas hídricas federales
en cuanto a la integración de cuencas y a la implementación de planes para un manejo eficiente del agua superficial y la
prevención del riesgo hídrico.
Palabras clave: cuencas hídricas, hidroclimatología, calidad de aguas superficiales, legislación hídrica, embalses.
ABSTRACT
Surface water resources. The main factor controlling the water surface resources in the Córdoba Province is given by
the conjunction of geomorphical features, atmospheric dynamics and impacting anthropogenic factors. Overall the
province, the following regions and fluvial systems are recognized: Mar Chiquita Lake and wetland system; Carcarañá
River system; Popopis o Quinto River system; the areic region of San Luis, Córdoba, La Pampa and Buenos Aires, Con-
lara River catchment basin and streams of northern San Luis and western Córdoba and Salinas Grandes System. In re-
lation to water management, the province of Córdoba was a pioneer in the country. In general, surface water quality
for different uses is generally good, although the eutrophication of reservoirs is a growing concern in the area. Regulation
on water management is focused toward the planning and implementation of policies not only for doing an efficient
management but also for preventing water risks.
Keywords: water resources, fluvial catchments in Córdoba, hydroclimatology, water quality, water management.
controla el ciclo hidrológico a diferentes escalas espaciales zamiento de las masas de aire en el sentido predominante
y temporales a lo largo de esta región (Piovano et al. 2009 noreste-sudoeste de la circulación atmosférica, caracterizada
Córdoba 2012), repercutiendo sobre la cantidad y calidad del como de tipo monzónica (Garreaud et al. 2009; Piovano et
agua, como así también en la frecuencia e intensificación al. 2009). A su vez, el aumento de la deficiencia hídrica hacia
de eventos extremos. Durante los últimos 100 años, la región el oeste determina un tapiz vegetal que acompaña a dicha
central de Argentina se caracterizó por presentar escenarios deficiencia desde superficies verdes casi permanentes en el
hidrológicos contrastantes (Pasquini et al. 2006; Piovano et extremo oriental, a amarillo pajizo en las porciones central
al. 2009). Los períodos de sequía fueron dominantes hasta y occidental), excepto durante la época estival. Esta carac-
la década de los años 1970, momento en el cual un aumento terística de la superficie en el extremo oriental determina
regional en las precipitaciones medias anuales afectó no sólo una absorción mayor de la radiación recibida, una mayor
la región Pampeana argentina sino también una gran porción evaporación y una menor energía remanente para el calen-
del sudeste del continente sudamericano. En comparación tamiento del aire en comparación con la región central y
con otras regiones continentales, este aumento en las preci- occidental (Gorgas y Tassile 2006).
pitaciones ha sido registrado como uno de los mayores ocu-
rridos a escala global durante el siglo pasado (Minetti et al. Régimen térmico
2003). Desde ~2003 el registro instrumental de precipita- Las características del régimen térmico de la Provincia
ciones señala un importante reverso hacia condiciones de de Córdoba están determinadas por las temperaturas del mes
menor humedad con respecto a la iniciada durante la década más cálido (enero, Fig. 2a), del mes más frío (julio, Fig. 2b)
de los años 1970. y su amplitud térmica anual (Fig. 3a; Gorgas y Tassile 2006).
Por otra parte los factores antrópicos tienen una inciden- Los valores térmicos del mes de enero, que representa aquí
cia directa sobre la cantidad y calidad de los recursos hídri- a las temperaturas estivales, se distribuyen en un rango que
cos. Particularmente en la Provincia de Córdoba, los cam- oscila entre los 23,5° C en el sur provincial hasta valores su-
bios producidos en las últimas décadas en la distribución de- periores a los 26° C en el extremo norte. El efecto del cordón
mográfica, las actividades agrícolas y las deficiencias en las serrano sobre el patrón de isotermas es difícil de establecer
políticas de toma de decisiones, han sido factores determi- por la ausencia de registros termométricos, y por lo tanto en
nantes de muchos de los problemas que sufre la provincia la figura se omite el trazado de isolíneas en esa zona. Las
vinculados al recurso agua. En este capítulo se describen las temperaturas del mes de julio, que representan a la estación
diferentes regiones y sistemas hídricos superficiales de la invernal, evidencian un rango de valores que van desde los
Provincia de Córdoba (Fig. 1), y se abordan distintos aspec- 8° C en el sur hasta los 11,5° C en el norte. La amplitud anual
tos vinculados con las problemáticas del recurso hídrico. Los de la temperatura representa la variación de los meses ex-
sistemas hídricos y regiones hídricas descriptas correspon- tremos, presentando mayores amplitudes en el sur y oeste
den en líneas generales a lo propuesto en el Atlas Digital de del territorio. Puede apreciarse que la temperatura no al-
Cuencas y regiones hídricas superficiales de la república Ar- canza registros extremos y el rango o amplitud térmica
gentina de la Subsecretaría de Recursos Hídricos, versión anual no supera los 16° C en toda la provincia.
2011 (http://www.hidricosargentina.gov.ar).
Régimen de precipitaciones
CARACTERIZACIÓN HIDROCLIMÁTICA La mayor parte de las precipitaciones en la Provincia de
Córdoba ocurren entre octubre y abril, mientras que el se-
La Provincia de Córdoba se extiende en su totalidad en mestre frío (mayo-setiembre) acusa escasas precipitaciones.
una zona templada. Las particularidades del medio físico que Este régimen climático, principalmente debido a estas carac-
caracterizan al territorio provincial, su extensión, el predo- terísticas en la distribución de las precipitaciones, se deno-
minio de planicies o llanuras suavemente onduladas y el mina de tipo monzónico (Vera et al. 2006; Garreaud et al.
desarrollo de un cordón serrano en la dirección norte, el de 2009). Durante el verano, el Sistema Monzónico Sudameri-
las Sierras Pampeanas de Córdoba, resultan fundamentales cano se desplaza hacia el sur desde las latitudes tropicales
para analizar el comportamiento hídrico asociado a la di- hasta aproximadamente el noreste de Argentina, influen-
námica atmosférica y climática. El efecto más notable de ciando el aumento de la precipitación. Este sistema conecta
estas particularidades geográficas, es el de facilitar el despla- la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT) con la Zona
Figura 1: Sistemas hidrológicos de la Provincia de Córdoba, hidrogramas medios anuales y ubicación de las principales presas (Cuadro 1). A: sistema de la
laguna Mar Chiquita; B: sistema del río Carcarañá; C: sistema del río Popopis; D: región sin drenaje superficial de San Luis, Córdoba, La Pampa y Buenos
Aires; E: región hídrica de la cuenca del río Conlara y de arroyos menores del norte de San Luis y oeste de Córdoba; F: sistema Salinas Grandes. Los números
corresponden a los embalses listados en el cuadro 1. La intervención antrópica ha modificado notoriamente la red de drenaje natural de la provincia al sur
del río Tercero, dejando de ser arreica o endorreica para drenar vía canales hacia otras provincias (ver Figura 7).
de Convergencia del Atlántico Sur (ZCAS) a través de una Paegle y Mo 1997; Labraga et al. 2000). Este mecanismo que
circulación atmosférica de gran escala que contiene una co- da lugar al control temporal de las precipitaciones presenta
rriente en chorro. Esta corriente “Chorro de Capas Bajas de marcadas variaciones que ocurren desde escalas estaciona-
Sudamérica” se origina en el Amazonas, y es la responsable les hasta miles de años (Piovano et al. 2009) y determina en
de transportar humedad a una amplia región del sudeste gran medida el balance hidrológico en toda la extensión de
de Sudamérica incluyendo el centro de Argentina (Nogués- la provincia.
La Provincia de Córdoba (al igual que una gran porción tres décadas del siglo pasado, con un incremento mayor al
del sudeste de Sudamérica), ha mostrando un aumento im- 10 % (Castañeda y Barros 1994; Minetti et al. 2003). Además
portante de las precipitaciones medias anuales en las últimas de mayores precipitaciones medias anuales, el número de
Figura 2: Temperaturas medias en la Provincia de Córdoba. a) Temperaturas medias de enero (°C; 1961-1990); b) temperaturas medias de julio (°C; 1961-
1990; modificado de Gorgas y Tassile 2006).
Figura 3: a) Amplitud térmica anual (°C; 1961-1990) en la Provincia de Córdoba; b) precipitación media anual (mm; 1961-1990; modificado de Gorgas y
Tassile 2006).
Figura 4: a) Evapotranspiración potencial anual (mm; 1961-1990) en la Provincia de Córdoba; b) evapotranspiración real anual (mm; 1961-1990; modificado
de Gorgas y Tassile 2006).
en las Sierras Pampeanas de Córdoba dando lugar a diseños (Fig. 6a; Piovano et al. 2009). Es una laguna alcalina, con
hidrológicos típicos. Luego de atravesar las Sierras Chicas, aguas cloruradas-sulfatadas-sódicas, supersaturadas en
ambos ríos discurren por la llanura con un diseño del tipo calcita y yeso durante niveles bajos y en calcita durante ni-
meandriforme. Al cruzar la cota de 150 m s.n.m., los cauces veles altos (Martínez et al. 1994). La variación en los niveles
principales se separan en distintos brazos que, en función a de la laguna está en estrecha correspondencia con la varia-
fluctuaciones temporales del balance hídrico, pueden in- ción de las precipitaciones regionales y con el desarrollo de
filtrarse, originar bañados o desembocar en la laguna Mar anomalías (positivas o negativas) en los caudales mensuales
Chiquita (Piovano et al. 2006). El caudal medio anual del río de los ríos de la cuenca del Plata (Piovano et al. 2009). Du-
Suquía es de 9,7 m3 s-1, con derrame promedio de 305 hm3 rante el siglo XX la laguna presentó niveles bajos dominan-
y un caudal específico promedio de 7,2 L s-1 km-2 (estación tes con algunas interrupciones hasta mediados de la década
San Roque, serie 1925-1981). En la cuenca del río Xanaes de los años 1970, cuando se produjo un importante au-
los datos hidrométricos existentes se restringen a su cuenca mento de ~8 m. La superficie de la laguna entre los años
alta. El río Los Molinos en la Estación Potrero de Garay 1977 y 2003 exhibió una variación entre 1.960 y superior a
(serie 1936-1952) presentó un caudal medio anual de 6,0 los 6.000 km2 (Fig. 6b). Luego del máximo registrado du-
m3 s-1, con un derrame promedio de 188 hm3 y un caudal rante el año 2003 se desarrolló un período de disminución
específico promedio de 6,1 L s-1 km-2. de su nivel, el cual se extiende hasta la actualidad (Fig. 6c).
En el sector este de las Sierras Chicas y norte de Cór- El dominio de balances hídricos negativos ha sido también
doba se desarrolla una serie de sistemas dispersos que se in- registrado en otros sistemas lacustres de la región Pampe-
filtran en el piedemonte. Se reconocen en esta región una ana indicando la acción del Sistema Monzónico Sudameri-
serie de geoformas vinculadas a la acción de abanicos alu- cano como control hidroclimático regional. Los niveles ba-
viales y sistemas fluviales (Cioccale 1999a; Cioccale 1999b; jos se caracterizaron por presentar salinidades altas como,
Herrero 2000). Los más importantes son los ríos Ancasma- por ejemplo, 360 g L–1 en 1911, 251 g L-1 en 1951 y 270 g L-1
yo, Seco, de los Tártagos, Guayacaste, Pisco Huasi, Grande, en 1970 (Piovano et al. 2002). En el año 1982 se registran 30
Pinto, Jesús María, Carnero y Salsipuedes. g L-1. En la actualidad, la caída de ~4 m en su nivel con res-
En lo que respecta a la cuenca del río Dulce, entre sus pecto al máximo correspondiente al año 2003 (71,8 m s.n.m.)
rasgos más particulares se incluye la salina de Ambargasta se corresponde con un aumento en la salinidad a 69 g L-1.
de 4.200 km2 (Zanor et al. 2012) y un sistema de humedales
conocidos como Bañados del río Dulce. La Salina de Am- Sistema del río Carcarañá: Está integrado por los ríos Cta-
bargasta forma parte de uno de los sistemas hipersalinos lamochita o Tercero y Chocancharava o Cuarto, correspon-
más grandes del mundo (Cuenca Saliniana: 10.000 km2) in- diendo a la vertiente Atlántica de la hidrografía argentina
tegrado por planicies fangosas y lagunas efímeras del tipo por ser afluente del río Paraná. El sistema tiene sus nacien-
cloruradas-sódicas (Zanor et al. 2012; Zanor et al. 2013). El tes en la vertiente este de las sierras de Comechingones,
humedal del río Dulce, ubicado en la costa norte de la la- donde una serie de pequeños arroyos recorren una corta dis-
guna, es un sistema con una alta dinámica hidrológica con- tancia hasta formar los cauces troncales de los ríos Tercero y
trolada por la magnitud de las inundaciones que se expanden Cuarto. El río Tercero presenta un diseño dominante de un
por el valle fluvial cuando el caudal entrante supera la capa- sistema hidrológico típico mientras que el río Cuarto incluye
cidad de conducción de su cauce (Rodríguez et al. 2006). El bañados y lagunas, adquiriendo el nombre de río Saladillo
caudal medio anual del río Dulce erogado del Dique Los luego de los bañados del Saladillo. Este último, al juntarse
Quirogas, es ~100 m³ s-1 (Rodríguez et al. 2006). La serie de con el río Tercero da origen al río Carcarañá (Fig. 7). La sub-
caudales en el Sauce (Santiago del Estero; años 1925-1968) cuenca del río Tercero tiene una superficie aproximada de
arroja valores de caudal promedio de 82,2 m3 s-1, derrame 3.300 km2 y sus nacientes están reguladas por una serie de
promedio de 2.594 hm3 y un caudal específico promedio de embalses (ver sección Embalses). El caudal del río Tercero en
4, 1 L s-1 km-2. la ciudad Bell Ville (serie 1939-1981) arroja un valor medio
La laguna Mar Chiquita es uno de los sistemas lacustres anual de 20,4 m3 s-1, con un derrame anual promedio de
salinos más grande del mundo que se caracteriza por pre- 643 hm3 y un caudal específico promedio de 2,4 L s-1 km-2.
sentar marcadas fluctuaciones en su volumen como resul- La subcuenca del río Cuarto es la segunda más importante
tado de cambios temporales en las precipitaciones regionales dentro de la cuenca del Carcarañá. El caudal medio anual
Figura 6: a) Posición de la línea de costa de la laguna Mar Chiquita durante 1976 (Martínez 1991). El área limitada por las escarpas corresponde a una paleo
línea de costa de la laguna correspondiente a una fase antigua de nivel alto. Su desarrollo coincide con la superficie alcanzada durante el año 2003; b) imá-
genes satelitales mostrando la variación de superficie entre el año 1976 –inicio de la fase húmeda– y el año 2001; c) curva limnimétrica de la laguna Mar
Chiquita entre los años 2001 y 2013. El valor máximo corresponde al año 2003. En las fotos de la derecha se puede observar el efecto de la pronunciada
bajante (-4,3 m) en la localidad de Miramar entre los años 2003 y 2013 (Hotel Viena).
calculado (serie 1938-1943) corresponde a 5,9 m3 s-1 con un ocupadas por lagunas permanentes y temporarias que pue-
derrame anual promedio de 185 hm3. den estar interconectadas durante períodos lluviosos.
La región comprendida entre los ríos Tercero y Quinto
se conoce como “Cuenca de la Depresión del Saladillo” y Región hídrica de la cuenca del río Conlara y de arroyos
“Cuenca de la Depresión Oriental principal” donde se des- menores del norte de San Luis y oeste de Córdoba: Com-
arrollan una serie de arroyos arreicos que se esparcen en prende los ríos y arroyos que bajan de la sierra de San Luis
cañadas y bañados (Degiovanni y Blarasin 2005). Uno de y de las vertientes occidentales de la sierra de Comechingo-
ellos es el Arroyo Chucul, cuyo sistema de humedales in- nes. Entre ellos se destacan los ríos Mina Clavero, Pana-
cluye a la laguna La Felipa, la cual constituye una impor- holma y Los Sauces. El rio Los Sauces en el dique La Viña
tante reserva natural de fauna (Menghi 2000). En general las presenta un caudal erogado medio anual (serie 1928-1981)
depresiones están interconectadas mediante canales artifi- de 5,6 m3 s-1, con un derrame anual promedio de 175 hm3 y
ciales (por ejemplo, canal Devoto y canal La Cautiva) que un caudal específico promedio de 6,3 L s-1 km-2.
drenan hacia las depresiones mayores, minimizando el por-
centaje de áreas inundadas al drenar los excedentes princi- Sistema Salinas Grandes: Esta gran cuenca evaporítica
palmente hacia los Bañados del Saladillo (Fig. 7). Esta in- abarca un área de recarga próxima a los 5.000 km2 (Dargam
tervención antrópica ha modificado notoriamente la red de y Depetris 1995). La mayor parte de los cursos que llegan a
drenaje natural de la provincia al sur del Río Tercero, de- la salina se originan en las sierras Norte, de Ambargasta, del
jando de ser arreica o endorreica para drenar vía canales
hacia otras provincias.
Pajarillo, Capacabana y Masa y en la vertiente septentrional los problemas ocasionados por las crecidas del río Suquía,
de Cumbres de Gaspar, Sierra Grande y Pampa de Pocho. como también para la provisión de agua para consumo hu-
Integran este sistema los ríos Cruz del Eje, Soto, Pichanas, mano y riego. En abril de 1890 se inaugura la obra. Sin em-
Guasapampa y una serie de pequeños cursos entre los que bargo, todo el trabajo y esfuerzo puesto en ese gran empren-
se destacan los ríos Copacabana y Saguión. En general, estos dimiento que incluía, además, el dique derivador en Mal
cursos se infiltran. El río Cruz del Eje presenta un caudal Paso y 192 km de canales de riego, se vio rápidamente os-
medio anual (serie 1913-1944) de 3,0 m3 s-1, con un derrame curecido por una larga historia de desconfianzas sobre la
anual promedio de 94,6 hm3 y un caudal específico promedio calidad y seguridad de la obra, que culminó en 1892 con el
de 1,8 L s-1 km-2. Hacia el sudoeste, el río Pichanas presenta procesamiento y encarcelamiento de los responsables de la
un caudal medio anual (serie 1944-1980) de 2,0 m3 s-1, con obra (Cassaffousth y Bialet Massé). Luego de numerosos
un derrame anual promedio de 62,7 hm3 y un caudal espe- intentos malogrados de solución a las supuestas fallas, se
cífico promedio de 1,0 L s-1 km-2. Dentro de la cuenca alta se comienzan en el año 1940, los estudios para construir un
encuentra la laguna de Pocho, alcanzando una superficie nuevo dique, aguas abajo del viejo, que fue inaugurado en
máxima de 25 has durante períodos húmedos y una profun- 1944. El viejo paredón del dique se conserva aún hoy.
didad promedio de 17 cm (Cortés 2012). La laguna es de tipo Simultáneamente con la puesta en operación del nuevo
abierta, con el arroyo Cachimayo o Salado como efluente dique San Roque, se inauguran en la misma década cinco
tributario del río Salsacate, el cual a partir de la localidad de presas más de similar envergadura: los diques Cruz del Eje,
la Higuera, recibe el nombre de río Pichanas (Dargam 1994). La Viña y Compensador La Viña, Los Alazanes y San Jeró-
El cambio en el uso del territorio (desde los últimos 40 años), nimo. Estas presas se suman a la de Embalse Río Tercero
con la intensificación de la actividad agrícola (en mayor me- que ya había comenzado a operar y generaba energía desde
dida) y ganadera, repercute en el incremento de la erosión 1936. Entre las décadas de los años 1950 y 1960 se inician y
de los suelos, desencadenando un aumento en transporte de terminan las presas Los Molinos 1 y 2 sobre la cuenca del río
sedimentos hacia la laguna. Debido a que la Pampa de Pocho Xanaes y río Tercero 2 y 3 sobre el río Tercero.
funciona como excelente trampa de sedimentos transporta- En los años 1970 se incorporan las presas Piedras Moras,
dos fundamentalmente por acción eólica, sumado al incre- La Quebrada y La Falda. Durante la década de los años 1980,
mento del aporte por erosión hídrica (flujos mantiformes) cabe destacar la puesta en funcionamiento de los complejos
y eólica de los suelos circundantes (al perderse la cubierta hidroeléctricos Cerro Pelado y Arroyo Corto integrando el
vegetal natural), se puede estimar la colmatación y probable complejo de Río Tercero.
desaparición de la laguna en los próximos años (Cortés A partir del año 2000 y dentro del Plan de Sistematiza-
2012). Similares procesos han sido reconocidos en el sector ción de los Excedentes Hídricos del Sur de la Provincia de
sur de la Provincia de Córdoba. Córdoba (DIPAS 2006) se construyen y comienzan a operar
las presas Las Lajas (2007) El Chañar (2008) y Achiras (2009).
EMBALSES En el Cuadro 1 se presentan las características más im-
portantes de los 20 embalses principales de la provincia,
La Provincia de Córdoba fue pionera en el país en la mientras que la figura 1 muestra su ubicación y distribución
construcción de presas con la finalidad de embalsar el agua espacial, poniendo en evidencia el alto grado de regulación
de los cursos fluviales para su aprovechamiento para usos que ejercen sobre la característica torrencial que presentan
extractivos (abastecimiento de agua potable, riego y sanea- las nacientes de los principales sistemas hídricos de la pro-
miento) y no extractivos (regulación de crecidas y genera- vincia. Los extensos cuerpos de agua que generan los diques
ción de energía). constituyen, además, importantes recursos económicos de
La provincia tiene una vasta trayectoria en la operación alto impacto sobre el desarrollo regional, por la actividad
de más de veinte presas y azudes, que la ubican al presente, turística y recreativa que propician.
entre las provincias con mayor regulación de sus recursos hí-
dricos superficiales. Este camino se inicia a fines de la década CALIDAD DE AGUAS SUPERFICIALES
de los años 1880 cuando se comienza la construcción del
mayor embalse artificial en el mundo para ese momento, el Uno de los mayores desafíos que enfrenta la humanidad
dique San Roque (ORSEP 2013), con el fin de dar solución a en el futuro cercano está referido a la provisión de agua en
1 CRUZ DEL EJE Río 1840 2,7 Mixta 567,2 112,00 1093 Abastecimiento de agua, riego, generación de energía, ate-
(30°45’ S ; 64°45’ O) Cruz del Eje nuación de crecidas
2 SAN ROQUE Río 1750 10,0 Hormigón 643,3 201,00 2478 Abastecimiento de agua, riego, turismo y recreación, gene-
(31°22’ S ; 64°27’ O) Suquía ración de energía (Central San Roque)
3 SAN JERÓNIMO Río 30 0,0 Hormigón 1292 0,16 s/d Abastecimiento de agua
(31°00’ S ; 64°28’ O) San Jerónimo
4 LOS ALAZANES Arroyo 20 0,3 Hormigón 43 m(*) 0,24 3,2 Abastecimiento de agua
(30°54’ S ; 64°30’ O) Los Alazanes
5 EL CAJON Río 154 0,6 Hormigón 945,35 8,00 145 Abastecimiento de agua, regulación de crecidas, turismo y
(30°51’ S ; 64°33’ O) Dolores recreación
6 PISCO HUASI Río 298 1,0 Mixta 502 0,12 3,2 Abastecimiento de agua y riego
(30°20’ S ; 64°00’ O) Pisco Huasi
7 LA FALDA Río Grande 132 0,8 Mixta 16m(*) 0,80 15 Abastecimiento de agua y atenuación de crecidas
(31°07’ S ; 64°30’ O) de Punilla
8 LA QUEBRADA Río 42 0,2 Mixta 334 3,30 30 Abastecimiento de agua y atenuación de crecidas
(31°14’ S ; 64°20’ O) Ceballos
9 PICHANAS Río 1300 2,0 Hormigón 508 66,00 440 Riego y atenuación de crecidas
(30°50’ S ; 65°08’ O) Pichanas
10 LA VIÑA Río 878 5,8 Hormigón 840 183,00 843 Abastecimiento de agua, riego, atenuación de crecidas, ge-
(31°47’ S ; 65°01’ O) Los Sauces neración de energía (Central La Viña)
11 LA VIÑA (Compensador) Río 878 5.8 Hormigón 560.98 0.90 17 Abastecimiento de agua, riego, compensador de descargas
(31°50’ S ; 65°06’ O) Los Sauces (Dique La Viña)
12 LOS MOLINOS I Río 978 9.5 Hormigón 765 307.00 2111 Abastecimiento de agua, riego, atenuación de crecidas, ge-
(31°50’ S ; 64°30’ O) Los Molinos neración de energía (Central Los Molinos)
13 LOS MOLINOS II Río 978 9.5 Hormigón 511.3 3.70 43 Abastecimiento de agua, riego, compensador Los Molinos I,
(31°50’ S ; 64°25’ O) Los Molinos generación de energía (Central Los Molinos II)
14 RIO TERCERO Río 3300 27.6 Materiales 529 560.00 4600 Abastecimiento de agua, atenuación de crecidas, genera-
(32°14’ S ; 64°25’ O) Tercero sueltos ción de energía (Central Fitz Simon)
15 RIO TERCERO Nº 2 Río 3300 27.6 Materiales 485 10.00 86 Generación de energía (Central Ing. Cassaffousth), compen-
(32°12’ S ; 64°23’ O) Tercero Sueltos sador descargas Central Fitz Simon
16 RIO TERCERO Nº 3 Río 3300 27.6 Hormigón 438 13.00 160 Generación de energía (Central Ing. Benjamín Reolín)
(32°10’ S ; 64°20’ O) Tercero
17 PIEDRAS MORAS Río 3772 27.6 Materiales 403 47.00 589 Abastecimiento de agua, riego, atenuación de crecidas, ge-
(32°10’ S ; 64°15’ O) Tercero Sueltos neración de energía (Compensador Río Tercero)
18 EL CHAÑAR Río 8930 5.0 Materiales 367 32.90 750 Regulación de crecidas
(33°59’ S ; 65°04’ O) Popopis Sueltos
Dasso et al.: Recursos hídricos superficiales
11
Recursos Hídricos
suficiente cantidad y adecuada calidad para responder a las Características hidroquímicas de los ríos
necesidades de una población mundial en franco creci- En este apartado se presenta una sinopsis de las caracte-
miento demográfico. Por este motivo, durante las últimas rísticas físico-químicas de las aguas superficiales de la Pro-
décadas, la comunidad internacional le ha dado significa- vincia de Córdoba. Las aguas corresponden a los diferen-
tiva importancia al estudio de los sistemas hídricos. En el tes sistemas hídricos descriptos en la sección REGIONES
año 2003, la Asamblea General de las Naciones Unidas pro- HIDRICAS SUPERFICIALES y en este caso fueron subdi-
clamó al período 2005-2015 Decenio Internacional para la vididas en los siguientes grupos:
Acción «El agua, fuente de vida». El decenio comenzó ofi- 1. Sistema de la laguna Mar Chiquita:
cialmente el 22 de marzo de 2005, Día Mundial del Agua a. Cuenca del embalse Los Molinos (ríos Los Reartes, del
(http://www.un.org/spanish/waterforlifedecade/back- Medio; Pasquini et al. 2004, Lecomte et al. 2005, 2011).
ground.shtml). b. Cuenca del embalse San Roque (ríos San Antonio y
La determinación del estado de la calidad del agua estará Cosquín, y arroyos Los Chorrillo y Las Mojarras; Gaiero
referida a los diferentes usos previstos. Existen límites má- 1998).
ximos admisibles de los diversos elementos y compuestos c. Ríos de montaña: arroyos y ríos que se infiltran en el
disueltos en el agua establecidos a nivel mundial por la Or- piedemonte o se unen a otros ríos (ríos San José, La Suela,
ganización Mundial de la Salud (O.M.S.) y por numerosas La Granja, Salsipuedes, Ceballos, Agua de Oro; Gaiero 1998,
normativas regionales (por ej., la Organización Panameri- Pasquini et al. 2002; Lecomte et al. 2011; Biscarreta 2012,
cana de la Salud - O.P.S.), nacionales (por ej., el Código Ali- Dottori 2012; Kinen 2012).
mentario Argentino - C.A.A.) y locales, que serán tratadas d. Cuenca baja (Suquía y Xanaes; Gaiero 1998, Pasquini
en el apartado GESTIÓN DE LOS RECURSOS HÍDRICOS. et al. 2012).
El agua utilizada en la provincia para diferentes usos 2. Sistema del río Carcarañá (ríos Tercero, Santa Rosa, Santa
(doméstico, agrícola, industrial, estéticos y recreativos y Catalina, El Talita, de Los Sauces, Piedras Blancas; Blarasin
generación de energía), proviene de tres reservorios princi- y Cabrera 2005, Gualdoni et al. 2011).
pales: embalses, agua subterránea y cursos superficiales. La 3. Región hídrica de la cuenca del río Conlara y de arroyos
ciudad capital de la provincia y zonas aledañas (~2 millones menores del norte de San Luis y oeste de Córdoba (ríos
de habitantes), satisfacen sus requerimientos de agua a partir Mina Clavero, Panaholma y San Marcos, Pasquini et al.
de dos cuencas principales pertenecientes al sistema hídrico 2002; Lecomte et al. 2011; García et al. 2012).
de la laguna Mar Chiquita: cuenca del río Suquía (65 % de la El Cuadro 2 muestra las principales características fí-
demanda) y cuenca del río Xanaes (25 % de la demanda). sico-químicas del agua de los diferentes grupos antes men-
El 10 % restante lo hace a través de agua subterránea. cionados. En general, son aguas dulces, con concentraciones
Figura 8: Variabilidad de los sólidos totales disueltos, conductividad y sulfatos disueltos en las aguas superficiales de la Provincia de Córdoba (ver grupos
en el texto).
de sólidos totales disueltos (STD) inferiores a 1.000 mg L-1. río Carcarañá (grupo 2) evidencian gran variabilidad en sus
Los valores de pH se encuentran dentro del rango caracte- concentraciones, mientras que los ríos de la vertiente occi-
rístico de las aguas naturales (esto es, entre 6 y 8, Drever dental (grupo 3) son similares a los grupos 1a, 1b y 1c.
1997). En la figura 8 se presenta la variación de sólidos tota- La naturaleza química de las aguas puede representarse
les disueltos, conductividad y sulfatos disueltos en los gru- mediante las concentraciones relativas de sus iones mayo-
pos mencionados. Dentro del sistema de la laguna Mar ritarios disueltos (Fig. 9). Las aguas de los grupos 1a y 1b,
Chiquita, los ríos de montaña (grupos 1a, 1b y 1c) presentan son bicarbonatadas mixtas. El grupo 3 presenta una gran
menores concentraciones disueltas que aquellas correspon- variabilidad composicional, desde sódicas a cálcicas y una
dientes a la cuenca baja (grupo 1d, Cuadro 2, Fig. 8). Estas componente geoquímica relativamente más sulfatada. La
últimas exhiben elevadas concentraciones, particularmente cuenca baja del sistema de la laguna Mar Chiquita (1d) está
de aniones, como consecuencia de factores naturales y an- representada por aguas sódico-potásicas a “mixtas” (sin ca-
trópicos, entre ellos, la influencia de la ciudad de Córdoba tión dominante, Fig. 9) y una gran variación en el campo de
(Gaiero 1998, Pasquini et al. 2012). Las aguas del sistema del los aniones. Nuevamente se evidencia la influencia antró-
Figura 9: Diagrama de Piper (1944) mostrando la clasificación química de las aguas de ríos y arroyos de la Provincia de Córdoba. Las concentraciones están
expresadas en meq%.
pica sobre los ríos cuando atraviesan las grandes ciudades, Aspectos biogeoquímicos del agua superficial e impacto
generando aguas con concentraciones más elevadas de sul- antrópico
fatos. Por último, las aguas del sistema del río Carcarañá Los parámetros biogeoquímicos constituyen indicado-
(grupo 2) son bicarbonatadas cálcicas a mixtas (sin catión res importantes de la calidad de las aguas. Su análisis y mo-
dominante) en las áreas serranas o periserranas, evolucio- nitoreo resultan esenciales en la determinación de fuentes
nando a bicarbonatadas-sódicas en la cuencas medias y puntuales o difusas de contaminación.
bajas, donde gradualmente se mezclan con agua freática Algunos estudios se han llevado a cabo en la Provincia
que le aporta sulfatos y cloruros. de Córdoba acerca de la calidad de las aguas superficiales
Los elementos traza disueltos (aquellos con concentra- en relación con los parámetros biogeoquímicos (especies
ciones inferiores a 1 mg L-1), juegan un rol significativo en de nitrógeno, fósforo, contenido bacteriológico, oxígeno di-
los sistemas hídricos y constituyen sensibles indicadores suelto, etc.). Todos coinciden en señalar que las concentra-
del impacto humano a escala local, regional o global. En la ciones de nutrientes y bacterias están altamente afectadas
literatura internacional han sido crecientes los esfuerzos de- por las actividades antrópicas. Mientras los ríos y arroyos
dicados en los últimos años al estudio y determinación de de las regiones más prístinas (esto es, en la región de las ca-
metales tóxicos. Información relativa a concentraciones de beceras) evidencian una buena calidad de sus aguas, ésta se
elementos traza disueltos en las aguas superficiales de Cór- ve modificada cuando aquéllos atraviesan las áreas urbanas.
doba, puede encontrarse en trabajos realizados por el SE- Esto es consecuencia principalmente de la falta de sistemas
GEMAR (www.segema-cba.gov.ar), Pasquini et al. 2004, Le- cloacales en gran parte de las ciudades y localidades de la
comte et al. 2009, Pasquini et al. 2012. Las concentraciones provincia o del funcionamiento deficiente de las plantas de
reportadas en los trabajos mencionados, en general no exce- tratamiento de efluentes (en caso de que existan), como su-
den los límites máximos admisibles en la legislación vigente. cede con la planta de Bajo Grande de la ciudad de Córdoba.
Martínez de Fabricius et al. (2007) analizaron la variabilidad estos parámetros, como consecuencia, entre otra razones,
de nutrientes y potamoplancton en la cuenca media del río de la ausencia de sistemas cloacales y de plantas de trata-
Cuarto, señalando el impacto de los vuelcos de efluentes miento de efluentes en la región.
sobre la calidad de las aguas. O’Mill et al. (2013) señalaron
el marcado deterioro que sufre el río Tercero al atravesar las
grandes ciudades, como Villa María y Bell Ville, destacando
particularmente el aumento del contenido de fósforo total
aguas abajo de estas ciudades.
El río Suquía ha recibido especial atención en este sentido
por cuanto atraviesa la ciudad de Córdoba, cuyo impacto
sobre la calidad de las aguas ha sido analizado en diversos
trabajos (Pesce y Wunderlin 2000; Wunderlin et al. 2001;
Nimptsch et al. 2005, Valentinuzzi et al. 2006, Pasquini et al.
2012, entre otros). El impacto de la planta de tratamiento de
líquidos cloacales de la ciudad de Córdoba también ha sido
analizada (Wunderlin et al. 2001; Pasquini et al. 2012). Un
elevado aumento de amonio y de la demanda bioquímica de
oxígeno (DBO), con la consecuente disminución de nitratos
y oxígeno disuelto han sido señaladas aguas abajo de la salida
de la planta. Pesce y Wunderlin (2000) reportaron, hace más
de una década, una concentración de bacterias coliformes
de 860.000 NMP/100 mL (número más probable cada 100
mL). El decreto provincial 415/99 sobre calidad de aguas es-
tablece un valor máximo permitido de 5.000 NMP/100 mL
para descargas de efluentes a las aguas superficiales. Esta
problemática se ha incrementado aún más en los últimos
años.
Las Sierras Chicas de Córdoba constituyen una región
de la provincia que ha visto muy afectada la calidad y canti-
dad del recurso hídrico en las últimas décadas. Esta región
ha sufrido el mayor crecimiento demográfico en los últi-
mos años y además está sometida en la actualidad a una
grave crisis hídrica como consecuencia de prolongadas se-
quías y un mal manejo del recurso. Trabajos recientes han
mostrado el fuerte impacto de las áreas urbanizadas sobre
las concentraciones de nutrientes y contenido bacterioló-
gico (por ej., Bistoni et al. 2000; Formica et al. 2012; Kinen
2012). Kinen et al. (2013) determinaron elevadas concentra-
ciones de nitratos, fósforo total, bacterias coliformes totales
y fecales y demanda bioquímica de oxígeno (DQO) en los
ríos Ceballos y Salsipuedes, provenientes de fuentes difusas
de contaminación determinadas mediante programas de
modelado de calidad de aguas (Kinen 2012). La figura 10
muestra la variabilidad espacial de bacterias coliformes, ni-
trógeno (nitratos) y fósforo total en la cuenca del río Ceba- Figura 10: Variabilidad de las concentraciones de bacterias, nitrato y fósforo
total disueltos en la cuenca del río Ceballos, Sierras Chicas de Córdoba. La
llos (datos tomados de Kinen 2012) donde es evidente la in-
ubicación de los principales centros urbanos se indica en la figura (datos
cidencia de los centros urbanos sobre la concentración de tomados de Kinen 2012).
Cuadro 3: Parámetros relacionados con el estado trófico de embalses y lagos de la Provincia de Córdoba. Los valores consignados son
promedios de los años de monitoreo correspondientes.
Ledesma et al.
Río Tercero (2003-2006) 31 31,6 2,5 Eutrófico
(2013)
Mesotrófico- Bazán et al.
Los Molinos (2001-2011) 52,5 46,6 1,4 49,8
eutrófico (2013)
Rodriguez et al.
San Roque (1999-2012) 63,6 61 58,9 Eutrófico
(2013)
Pierotto y Daga
La Quebrada (2009-2010) 4,09 85 > 50 48,3 1,5 59,4 Eutrófico
(2013)
Laguna del Plata-Mar Chiquita Eutrófico- Oroná et al.
160,2 132 0,4
(2005-2007) hipereutrófico (2013)
PT: fósforo total; TSI PT: índice de Carlson para el PT; Cl-a: clorofila a media; TSI Cl-a: índice de Carlson para clorofila a; DS: profundidad
media del disco de Secchi; TSI DS: índice de Carlson para el disco de Secchi.
pH 8,6 10
GESTION DE LOS RECURSOS HIDRICOS
mitidos, y adoptar las medidas que sean necesarias para me- Plan nacional federal de los recursos hídricos
jorar o restaurar las condiciones de las aguas. El Plan Nacional Federal de los Recursos Hídricos, apro-
c) Decreto 529/94: Marco Regulador para la Prestación bado en el 2006, es una iniciativa conjunta del Consejo Hí-
de Servicios Públicos de Agua Potable y Desagües Cloaca- drico Federal y de la Subsecretaría de Recursos Hídricos.
les, cuyo objeto es establecer los lineamientos generales re- Su objetivo es promover la Gestión Integrada de los Recursos
lativos a la prestación y control de los servicios de agua po- Hídricos, mediante un proceso participativo que facilite la
table y de desagües cloacales en la provincia. coordinación y cooperación entre todos los organismos que
d) Decreto Nº 415/99: Normas para la protección de los influyen sobre la gestión hídrica. Es una herramienta que
Recursos Hídricos Superficiales y Suterráneos. Establece permite el uso del recurso hídrico, con vista al desarrollo
que todo establecimiento industrial, comercial o de servicio económico y social de las cuencas, asegurando el aprovecha-
cuyos residuos (líquidos o sólidos) son vertidos a cuerpos miento ambientalmente sostenible tanto de los recursos su-
receptores finales, superficiales o subterráneos, deberá estar perficiales y subterráneos, como de los ecosistemas acuáticos
inscriptos en el registro provincial de usuarios y categoriza- y terrestres dependientes de esos sistemas hídricos (Rodrí-
dos de acuerdo al grado de peligrosidad de los efluentes que guez 2008). El Plan apoya la formulación de planes de ges-
produzcan. Podrán utilizarse como cuerpos receptores ríos, tión y de talleres participativos entre todas aquellas entida-
embalses, arroyos, canales de desagües y colectores pluviales des cuyas competencias incluyen acciones de gestión hí-
con autorización previa y específica, de la autoridad de apli- drica. Está constituido por proyectos específicos abordados
cación. por dos o más organismos, en el marco de un proceso parti-
e) Decreto Nº 1544/04: Creación del Consejo Hídrico cipativo orientado a la solución de los problemas hídricos
Provincial en el año 2004 en concordancia con los instru- que afectan directamente a la población. Su implementa-
mentos fundacionales del Consejo Hídrico Federal. Es un ción se concreta a través de los denominados Grupos de
órgano consultivo y de coordinación, con injerencia en todos Trabajo Interorganismo (GTI).
los aspectos de carácter global, estratégico e interjurisdic- Entre los proyectos específicos que integran el P1an con
cional en materia de recursos hídricos. Lo integra el Estado la Provincia de Córdoba se destaca la implementación de la
provincial, el sector privado y la sociedad civil con la finali- red de alerta hidrológica temprana (AHT), que tiene como
dad de asesorar a los poderes públicos respecto de medidas, finalidad conocer en tiempo real los fenómenos hidrome-
actos, planes, programas, proyectos o acciones que se consi- teorológicos a fin de prevenir y tomar las medidas necesarias
deren de trascendencia para la Provincia. Actuará como ór- sobre las amenazas de crecientes repentinas en las áreas se-
gano de consulta y coordinación del Poder Ejecutivo Pro- rranas de la provincia.
vincial en materia de política hídrica tratando, entre otras
funciones, de armonizar criterios para lograr una mejor co- • Alerta Hidrológica Temprana: según las conclusiones y
ordinación de todas las actividades técnicas y/o administra- recomendaciones dadas en la Semana Temática sobre Cam-
tivas, públicas y/o privadas, relacionadas con la gestión del bio Climático y Fenómenos Extremos de la Tribuna del Agua
agua. (2008) “las regiones deberán prepararse y adaptarse a sus
características de riesgo hidrológico” y, en consecuencia,
• Autoridades de Aplicación: Las Autoridades de Apli- “deberán desarrollar sistemas de detección y alerta temprana
cación fijadas en las disposiciones contenidas en la legis- para inundaciones y sequías” que les permitan plantear las
lación provincial son, al presente, la Secretaría de Recursos estrategias de mitigación. En ese sentido el Gobierno de la
Hídricos y Coordinación y la Secretaría de Ambiente (Ley Provincia de Córdoba en convenio con el Instituto Nacional
7343), ambas dependen del actual Ministerio de Agua, Am- del Agua (INA) y su Centro de la Región Semiárida (CIRSA)
biente y Servicios del Gobierno de la Provincia de Córdoba vienen concretando acciones tendientes a la prevención del
(http://www.cba.gov.ar/reparticion/ministerio-de-agua- riesgo hídrico asociado a las crecidas repentinas y a las llu-
ambiente-y-servicios). La Secretaría de Recursos Hídricos vias que las ocasionan, mediante la instalación y puesta en
ejerce, en nombre del Estado Provincial, la titularidad de los marcha en el área serrana de la provincia de 37 Estaciones
Recursos Hídricos Provinciales, fijando tanto las políticas Hidrometeorológicas Telemétricas (Vélez 2011). Estas redes
hídricas a seguir, como las relativas al uso y saneamiento fueron ubicadas en las nacientes de los principales sistemas
del recurso. hidrológicos: a) cuenca alta (río Cosquín y valle de Punilla)
y media del río Suquía (arroyo Saldán), b) cuenca alta del río perficiales. Un rasgo destacable, sobre la región sur de Cór-
Xanaes (río Anisacate y río de la Suela), c) cuenca del río doba con alto nivel de endorreísmo, resulta ser la perma-
Mina Clavero y d) cuencas del sur de la provincia (río Cuarto nente modificación de la red de drenaje mediante canales
o Chocanchavara, arroyo el Gato, arroyo El Ají y otros me- artificiales modificando la dinámica hídrica de la región. No
nores). Junto con las 20 estaciones que opera el INA-CIRSA obstante, un aspecto negativo en la gestión está relacionado
desde finales de la década de los años 80 sobre la cuenca del con la escasa cuantificación de los recursos hídricos, como
río San Antonio (cuenca alta del Suquía), forman un sis- queda evidenciado en la limitada extensión, discontinuidad
tema telemétrico de 57 estaciones con más de un centenar o, directamente, ausencia total de series temporales de cau-
de sensores remotos de lluvia, niveles de río y meteorológicas dales de los ríos de Córdoba, incluyendo a los caudales ero-
que transmiten a tiempo real (VHF) a la central de opera- gados por las presas.
ciones del INA-CIRSA en Villa Carlos Paz (Colladon y Vélez La adopción de un enfoque estratégico y sostenible del
2011). recurso hídrico debe ocupar un lugar relevante en toda
La principal aplicación de este sistema telemétrico es la agenda de los diferentes entes gubernamentales. Ello im-
prestación de Servicios de Alerta de Crecidas (SAC) sobre plica la necesidad imperiosa de una mayor coordinación en
la cuenca del río San Antonio y el de Alerta Temprana de el desarrollo y gestión de tierras, aguas superficiales y sub-
Lluvias (ATLL) sobre el resto de las cuencas monitoreadas. terráneas, cuencas hídricas y entornos costeros adyacentes,
Ambos servicios se prestan en el período estival compren- e intereses aguas arriba y aguas abajo (Pochat 2008).
dido entre el 1 de diciembre y el 31 de marzo. El Servicio de Las sequías ocurridas durante los últimos años han ge-
Alerta de Crecidas en la cuenca del río San Antonio, permite nerado importantes pérdidas económicas en el sector agro-
anticipar la ocurrencia de una onda de crecida en el último pecuario como también graves problemas en distintos sec-
tramo del río San Antonio y pronostica el nivel máximo de tores de la población debido a la escasez de agua potable
agua (pico de la crecida) y hora de llegada a la entrada de la (Bertoni 2011). Las recurrentes crisis hídricas experimen-
ciudad de Villa Carlos Paz (Barrio El Canal), mediante un tadas en algunas poblaciones, por ejemplo de las Sierras
modelo hidrológico (Colladon et al. 2007). En el caso parti- Chicas, han hecho de la emergencia hídrica un problema
cular de la cuenca del río San Antonio, la finalidad última crónico. Esta situación, deja al descubierto que la crisis hí-
es poder declarar rápidamente la situación de emergencia drica es un fenómeno derivado de múltiples factores rela-
en las poblaciones ribereñas bajo riesgo, a fin de evacuar cionados con la falta de planificación y falencias en la toma
balnearios, campamentos y asentamientos urbanos. de decisiones al momento de efectuar el manejo del recurso
El Servicio de Alerta Temprana de Lluvias se presta en superficial sin integrarlo al subterráneo.
las cuencas implementadas por la provincia con instrumen- Un factor con incidencia negativa sobre el recurso hí-
tal telemétrico, cubriendo total o parcialmente las cabeceras drico, lo constituye la continua degradación de los ecosiste-
de los principales sistemas hídricos mencionados anterior- mas naturales de la provincia (Barchuk et al. 2010). La pér-
mente. dida de los bosques serranos, que puede llegar a una tasa
anual del 9,4 %, influye fuertemente sobre la cantidad, dis-
COMENTARIOS FINALES ponibilidad estacional y calidad del agua aprovechable para
uso humano a través del suministro brindado por los ríos.
Los recursos hídricos superficiales de la Provincia de Las Sierras de Córdoba son de importancia estratégica por-
Córdoba están fuertemente condicionados por las caracte- que proveen de agua a gran parte de los habitantes de la pro-
rísticas del medio físico, la cobertura vegetal, la dinámica vincia. Allí, la flora nativa provee de importantes bienes y
atmosférica y el factor antrópico. Como rasgos característi- servicios ecosistémicos, impactando en el almacenamiento
cos se pueden destacar, la presencia de la laguna Mar Chi- y calidad del recurso agua (Jobbágy et al. 2013). La dismi-
quita como la mayor laguna salina de Sudamérica y la sub- nución del rendimiento hídrico causado por la sostenida
cuenca del río Ctalomochita o Tercero (perteneciente al sis- pérdida del bosque nativo en las Sierras de Córdoba, consi-
tema del río Carcarañá) por presentar el caudal medio anual deradas como verdaderas “fábricas de agua”, impactará sobre
más elevado de la provincia (20,4 m3 seg-1). Es también im- una gran parte de la población de la provincia –incluyendo
portante resaltar que Córdoba es una de las provincias ar- a la ciudad de Córdoba- que depende del suministro de sus
gentinas con mayor regulación de sus recursos hídricos su- cuencas.
Es urgente que los actores involucrados, en particular Hídrica de la República Argentina. 10 años de participación y con-
senso. 1a ed. 84 p. Buenos Aires. http://www.cohife.org.ar/Conse-
políticos y funcionarios tanto de organismos relacionados
josHR.html.
con los recursos hídricos (como agricultura o energía) como Colladon, L. y Vélez, E. 2011. Sistema de Monitoreo Automático de Ríos
aquellos “aparentemente menos vinculados” (como planifi- en las Sierras de Córdoba. Memorias del 5º Simposio Regional sobre
Hidráulica de Ríos. 109–121 p. Santiago del Estero.
cación o finanzas), comprendan cabalmente el significado e
Colladon, L., Caamaño Nelli, G., Pazos, R.I. y Dasso, C. 2007. Modelos
implicancias de la Gestión Integrada de los Recursos Hídri- Estadísticos para Pronosticar Crecidas a Tiempo Real en las Sierras
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