UNIVERSIDAD POLITECNICA DE HONDURAS

ABOGADA:

EMMA MONTES DE OCA

ALUMNA:

ANDREA STEFANY DIAZ SOSA

No DE CUENTA:

0419010166

ASIGNATURA:

DERECHO DE LOS BIENES DU-311

RESUMEN DE LA TRADICION

FECHA:

8 DE MAYO DEL AÑO 2023

 LA TRADICION

CONCEPTO. La tradición es un modo de adquirir el dominio de las cosas, consiste en la

entrega que el dueño hace de ellas a otro, habiendo, por una parte, la facultad e intención de
transferir el dominio; por otra, la capacidad e intención de adquirirlo. Lo que se dice del dominio
se extiende a todos los otros derechos reales (Art. 697).

CARACTERES DE LA TRADICIÓN.

1) La tradición es una convención: no es un contrato porque el contrato es el acuerdo de

voluntades que da nacimiento a obligaciones, y en la tradición no se crean obligaciones, sino
que, por el contrario, se extinguen. Ejemplo: compro un caballo; el vendedor tiene la obligación
de hacerme la tradición del caballo; cuando me lo entrega, se extingue la obligación que tenía,
nacida del contrato de compra-venta.

2) Sirve no solo para adquirir el dominio, sino también todos los derechos reales y personales,
con excepción, naturalmente, de los personalísimos.

3) Es un modo de adquirir derivativo: el domino no nace del adquirente, sino que viene de otra
persona, que es el tradente,

4) Por regla general es un modo adquirir a título singular, aunque hay una excepción: la tradición
del derecho de herencia, que es a título universal.

5) Es un modo de adquirir que puede ser a título gratuito o a título oneroso.

6) Es un modo de adquirir que opera entre vivos.

Utilidad e importancia de la tradición. Es el modo más usado en la vida jurídica, porque el

contrato más frecuente en el derecho es el de compraventa, para la adquisición del dominio, debe
seguir la tradición.

Entrega y tradición. La entrega es el traspaso material de una

cosa de manos de una persona a otra. Puede constituir una entrega propiamente tal o una
tradición. Entre ambas hay diferencias bastante marcadas:
1) En la tradición, al efectuarse la entrega, existe de parte del tradente y del adquirente la
intención de transferir el dominio. En cambio, en la entrega propiamente tal no existe esta
intención; aunque en realidad, el acto material es el mismo.

Ejemplo: si entrego un reloj porque lo he vendido hay tradición; si lo entrego porque quiero
prestarlo, hay simple entrega.

2) La persona a quien se hace la tradición pasa a ser dueño o poseedor; en cambio, en la entrega
propiamente tal, es únicamente un mero tenedor; nunca por la simple entrega dicha persona llega
a ser dueño o poseedor.

REQUISITOS DE LA TRADICIÓN. Para que la tradición se efectúe deben concurrir cuatro

requisitos:

1) La presencia de dos personas, que se denominan

tradente y adquirente.

2) Consentimiento del tradente y del adquirente.

3) Existencia de un título traslaticio de dominio.

4) Entrega de la cosa.

1) PRESENCIA DE DOS PERSONAS. Tradente y adquirente. Este requisito en una

consecuencia del carácter de convención que tiene la tradición, que es un acto jurídico bilateral
en el que intervienen dos personas: el tradente y adquirente.

CIRCUNSTANCIAS QUE DEBEN CONCURRIR EN EL TRADENTE:

1° Debe ser dueño de la cosa que entrega o del derecho que transfiere. Si no es dueño de
tradición siempre es válida y produce ciertos efectos jurídicos, como veremos más adelante (Art.
709 y 710), no obstante, no produce su efecto normal, que es el de transferir el dominio o el
derecho de que se trata, ya que nadie puede transferir más derechos de los que tiene.

2º Debe tener facultad de transferir el dominio de la cosa. La expresión empleada por el Art.
697 se refiere a la facultad de disposición (que estudiamos dentro las facultades del dominio) e
implica, entre otros supuestos, la capacidad de ejercicio, es decir, el tradente debe tener aptitud
legal para disponer por sí solo del dominio de la cosa.
2) CONSENTIMIENTO DEL TRADENTE Y DEL ADQUIRENTE. Siendo la tradición un
acto jurídico bilateral o convención, requiere la concurrencia de las voluntades de ambas partes.
Una tradición que en principio fue inválida por haberse hecho sin la voluntad del tradente o de su
representante, es valiosa retroactivamente por la ratificación del que tiene facultad de enajenar la
cosa como dueño o corno representante del dueño".

Dicha excepción es una consecuencia necesaria que, según lo expresado anteriormente, la

tradición es válida, aunque se haga por otra persona que el dueño de la cosa.

Tradición por medio de representantes. La tradición puede hacerse por medio de mandatarios
o de representantes legales, quienes pueden entregar o recibir la cosa a nombre de sus
representados; por consiguiente, para que sea válida la tradición en estos casos se requiere que el
representante esté debidamente autorizado y que obre dentro de los límites de su mandato o de su
representación legal.

Sobre qué debe versar el consentimiento en la tradición. El consentimiento en la tradición

debe versar:

a) Sobre la cosa objeto de la tradición.

b) Sobre el título que le sirve de causa.

c) Sobre la persona a quien se efectúa la tradición.

Tratándose de un acto jurídico el consentimiento que prestan adquirente y tradente, debe estar
necesariamente exento de vicios.

a) Error en la cosa objeto de la tradición. De acuerdo con el Art. 703, el error en cuanto a la
identidad de la especie que debe entregarse produce la nulidad de la tradición. Por ejemplo:
alguien me compra determinado caballo y yo en vez de entregarle ese caballo le entrego otro.

b) Error en la persona. Si el error recae en cuanto a la persona a quien debe hacerse la entrega
de la cosa, la tradición es también nula. Por ejemplo: Juan me compra un libro y yo en lugar de
entregárselo a él se lo entrego a Pedro.

c) Error en el título de la tradición. Está contemplado en el Art. 704, y puede revestir dos
aspectos; en ambos la tradición es nula.
3) EXISTENCIA DE UN TITULO TRASLATICIO DE DOMINIO. Este tercer requisito lo
señala el Art. 702 al decir: "Para que valga la tradición se requiere un título traslaticio de
dominio, como el de venta, permuta, donación, etc. Se requiere, además, que el título sea válido
respecto de la persona a quien se refiere". Son también títulos traslaticios de dominio, el aporte
en propiedad a una sociedad, el mutuo, el cuasi- usufructo, la transacción, cuando recae sobre un
objeto no disputado, la dación en pago, la novación. Título traslaticio de dominio es aquel que
por su naturaleza sirve para transferir el dominio. Si no hay título traslaticio de dominio, no hay
tradición.

4) ENTREGA DE LA COSA. Sabemos que en todo modo de adquirir hay un hecho material y
que en este caso el hecho material es la entrega de la cosa. Como veremos después, la forma de
cómo se hace la entrega es distinta, según se trate de bienes inmuebles, de bienes muebles o de
derechos personales.

EFECTOS DE LA TRADICIÓN.

Distinción. Para estudiar los efectos de la tradición, hay que distinguir según el tradente, sea
dueño de la cosa entregada, o que no lo sea.

a) Efectos de la tradición cuando el tradente es dueño de la cosa que se entrega. En este

caso, la tradición transfiere el dominio. Es el único caso en que la tradición desempeña el
verdadero papel jurídico que la ley le atribuye. Claro es que, como se trata de un modo de
adquirir derivativo; el dominio que tenía el tradente pasa al adquirente en las mismas
condiciones.

b) Efectos de la tradición cuando el tradente no es dueño de la cosa que se entrega: diversas

situaciones. En este caso la tradición es también válida y pueden presentarse tres situaciones:

1) Si el tradente es poseedor regular de la cosa entregada y el adquirente está de buena fe,

obtiene la posesión regular de la cosa; pero esto no significa que la posesión se haya transferido
del tradente al adquirente, porque, como estudiaremos en su oportunidad, la posesión no se
transfiere ni se transmite.
2) Sí el tradente es poseedor irregular y el adquirente está de buena fe, mejora el título que tenía
su tradente y tradición servirá, no de modo de adquirir, sino de justo título; pasando el adquirente
a tener la posesión regular.

3) Si el tradente es un mero tenedor de la cosa, aunque él no podría jamás adquirir por

prescripción la cosa, como la tradición sirve de justo título al adquirente; sí éste está de buena fe,
se hace también poseedor regular y puede llegar a adquirir la cosa por prescripción ordinaria,
como en los dos casos anteriores.

TRADICIÓN SUJETA A MODALIDADES. De acuerdo con el Art. 707. la tradición puede

transferir el dominio bajo condición suspensiva o resolutoria, con tal que se exprese; es decir,
que la tradición puede sujetarse a cualquiera de estas dos clases de condiciones.

a) Tradición bajo condición resolutoria. En realidad, donde se exige la condición resolutoria es

más propiamente en el título que procede a la tradición; en sí misma, la tradición no puede ser
bajo condición resolutoria. Por ejemplo: le dono una casa a Pedro para que sea suya mientras no
traslade su domicilio al extranjero.

b) Tradición bajo condición suspensiva. El caso de la condición suspensiva es más bien

teórico, porque la tradición se hace después de cumplida la condición.

¿CUÁNDO PUEDE PEDIRSE LA TRADICIÓN?

Lo normal y corriente es que la tradición se efectúe inmediatamente después de celebrado el

contrato. Por eso el Art. 708 dice que "Se puede pedir la tradición de todo aquello que se deba,
desde que no haya plazo pendiente para su pago, salvo que intervenga decreto judicial en
contrario". Hay tres casos en que no se puede pedir la tradición de lo que se debe:

a) Cuando el título es condicional. Por ejemplo: si le ofrezco a una persona regalarle un carro sí
se recibe de Ingeniero, ella o él no puede pedirme la entrega de ese carro, mientras no se reciba
de ingeniero, pues la condición suspende el nacimiento de su derecho,

b) Si hay plazo pendiente para el pago de la cosa. Por ejemplo: vendo un carro obligándome a
entregarlo al comprador el 1º de enero del próximo año. El comprador no puede exigirme la
tradición de la cosa hasta que se cumpla ese plazo.
c) Cuando ha intervenido decreto judicial en contrario. Ejemplo: Le debo a Pedro mil
lempiras de plazo vencido. Pedro también tiene un acreedor y éste le ha embargado el crédito de
mil lempiras que tiene contra mí; por lo que Pedro no puede exigirme que le entregue la cantidad
que le debo; ya que está embargada, y conforme al Art. 1567 N° 30, hay un objeto ilícito en la
enajenación de las cosas embargadas.

DIVERSAS ESPECIES DE TRADICIÓN. Hay que distinguir cuatro especies de tradición:

a) Tradición de cosas corporales muebles.

b) Tradición de los derechos reales sobre cosas corporales inmuebles.

c) Tradición del derecho de herencia.

d) Tradición de los derechos personales.

TRADICIÓN DE COSAS CORPORALES MUEBLES. Esta especie de tradición está

contemplada en el Art. 711 y puede ser real o ficta.

1° Tradición real o verdadera. Es la que se hace física o naturalmente, es decir entregando la

cosa al adquirente permitiéndole su aprehensión material y manifestando el uno la voluntad de
transferir el dominio; el otro, de adquirirlo (Art. 711 N° 1°).

2º Tradición ficta. Es la que se hace por medio de una ficción que represente la verdad. Hay
cuatro casos:

a) Tradición simbólica, que es la que se hace por medio de un símbolo que representa la cosa que
se entrega; como cuando se entrega al adquiriente las llaves del granero o almacén, cofre o lugar
cualquiera en que está guardada o cuando el tradente se encarga de poner la cosa a disposición
del adquiriente en el lugar convenido.

b) Tradición de larga mano, cuando se efectúa mostrando la cosa y poniéndola a disposición del
adquiriente (Art. 711 N° 2°).

c) Tradición por breve mano, consiste en que el mero tenedor de la cosa, como el arrendatario,
comodatario, etc., la adquiere por compra, donación u otro título de enajenación conferido a él.

TRADICIÓN DE DOMINIO Y DEMÁS DERECHOS REALES SOBRE INMUEBLES. En

la tradición del dominio y demás derechos reales sobre inmuebles; la entrega material de la cosa
se sustituye por una solemnidad especial; que es el otorgamiento de una escritura pública en que
el tradente expresa verificar la tradición y el adquiriente recibirla.

Ahora bien, esta necesidad de la inscripción del derecho en el Registro de la Propiedad tiene su
principal aplicación en el caso del Art. 1630 que dice: "Si una misma cosa se hubiese vendido a
diferentes compradores; la propiedad se transferirá a la persona que primero haya tomado
posesión de ella con buena fe, si fuere mueble. Si fuere inmueble, la propiedad pertenecerá al
adquirente (también de buena fe, se entiende) que antes la haya inscrito en el Registro.

TRADICIÓN DEL DERECHO DE HERENCIA. El traspaso del patrimonio del difunto al

heredero se opera por el modo de adquirir, llamado sucesión por causa de muerte, y no por la
tradición, que es un modo de adquirir que tiene lugar por acto entre vivos. Una vez fallecido el
causante, el heredero puede disponer, enajenar su derecho de herencia; aquí sí hay tradición de la
herencia o de una cuota de ella, esta tradición debe hacerse en escritura pública, haya o no
inmuebles entre los bienes hereditarios (Art. 1575 N° 4°), Por eso hay una impropiedad en el Art.
714 al decir: "La tradición de la herencia se verificará por ministerio de la ley, al heredero en el
momento en que es aceptada”.

TRADICIÓN DE LOS DERECHOS PERSONALES. La tradición de los derechos personales

que un individuo cede a otro, se verifica por la entrega del título hecho por el cedente al
cesionario con una nota que contenga: la fecha de ésta, el traspaso del derecho al cesionario,
designándolo por su nombre y apellido, la firma del cedente o la de su mandatario o
representante legal.