Los Bosques de Ecuador
Los Bosques de Ecuador
Los Bosques de Ecuador
BOSQUES
DE
ECUADOR
U N I V E R S I D A D E S T A T A L A M A Z Ó N I C A
I N G E N I E R Í A A M B I E N T A L
N O V E N O S E M E S T R E
No hay que conquistar la naturaleza, no es suficiente visitar o explorar. Hay que entender, hay que amar,
hay que proteger; y hoy en día es mucho más importante este mensaje.
1
1.2. Índice de contenidos
2
CAPITULO XIV ....................................................................................................................................... 146
Experiencias .............................................................................................................................................. 146
CAPITULO XV ........................................................................................................................................ 148
Glosario ..................................................................................................................................................... 148
CAPITULO XVI....................................................................................................................................... 153
BIBLIOGRAFÍA ...................................................................................................................................... 153
CAPITULO XVII ..................................................................................................................................... 162
Biografía de los autores ............................................................................................................................ 162
CAPITULO XVIII .................................................................................................................................... 165
Anexos ...................................................................................................................................................... 165
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1.3. Prologo
"El bosque en el Ecuador: una visión transformada para el desarrollo y la conservación", es un revisión
bibliográfica que tiene por objeto Interpretar relación estructura-propiedad de las sustancias y procesos
químicos en su relación con el medio ambiente, (el suelo, las aguas y el medio ambiente en general) de
interés para la Ingeniería Ambiental mediante métodos investigativos de búsqueda, el resumen de la
información científica actualizada empleando las técnicas de búsqueda del información científico- técnica
sobre los bosques del Ecuador.
Los estudiantes de 9B de la carrera de ingeniería ambiental de la UEA, presenta los bosques de Ecuador
con un amplio rango altitudinal con múltiples unidades geomorfológicas, pisos climáticos, suelos y
formaciones vegetales, que han generado una heterogeneidad de ecosistemas con funciones únicas. Desde
una óptica de conservación de este valioso recurso forestal hay información valiosa para los estudios de los
ecosistemas forestales y su importancia en la conservación y restauración.
En la mayor parte de los ecosistemas encontramos una gran cantidad de especies de flora y fauna. Ecuador
es un país con un alto nivel de cobertura forestal y una diversidad biológica muy alta. Sin embargo, los
bosques ecuatorianos se encuentran bajo presión por la deforestación y la explotación de los recursos. Se
caracteriza cada ecosistema en base de criterios de diferentes autores, se enlistan y muestran algunas
especies de flora y fauna que están en peligro de extinción.
Los bosques constituyen uno de los ecosistemas más valiosos del mundo, al contener un alto porcentaje de
la biodiversidad del planeta. Lamentablemente, ellos se encuentran muy vulnerables frente a la acción del
hombre, y en muchas partes del mundo incluso han desaparecido (Vinueza, 2020).
El amor, respeto, cuidado, protección, desarrollo son valores que tenemos hacia los bosques al momento de
realizar este libro debido a que somos un grupo de autores ambientales que entendemos la importancia de
los bosques por lo tanto tratamos de trasmitirlo hacia los lectores para poco a poco ir sembrando los mismos
valores que nos rigen y que nos han inculcado a lo largo de una carrera.
Pero cuando hablamos de una carrera no solo de estudio sino de un estilo de vida un estilo de vivir en
equidad y armonía con el medio manteniendo una supervivencia mutua porque sabemos que los bosques
sin nosotros viven mejor, pero nosotros sin ellos no (Naranjo, 2020).
Una pandemia, la cuarentena, una materia (protección de bosques), un maestro y cinco estudiantes de un
grupo. Este libro empezó siendo como una tarea más para una nota final, con el propósito de la
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autoeducación, de ¡busquen y aprendan! Pero todo esto cambio en cada capítulo donde se aprende a
escuchar a aquellos que piden auxilio y no se les escucha, a los que nos dan tanto y reciben poco, los que
nunca han juzgado a la humanidad aunque nosotros seamos quien los están matando “LOS BOSQUES”,
que al principio se cree que están limitados a los árboles, ¡pero no! estos son ecosistemas donde se relaciona
la fauna, la flora, el suelo, el agua, la luz, las montañas, el viento; es decir, aquí es donde la vida tiene su
origen. Y es tiempo de dejar de decir que amamos la naturaleza sin conocer. Ya que el conocimiento es
poder, el poder de aceptar el mal que hacemos, transformando nuestra mente para dar el verdadero cambio
que el mundo necesita, para seguir disfrutando de lo que se dice amar. Espero que lo leas y disfrutes cada
capítulo donde conocerás un poco más de los Bosques del Ecuador, su historia, su diversidad, los beneficios,
las amenazas, su conservación entre otras cosas (Paladines, 2020).
Los bosques son de mucha importancia para todos nosotros ya que de ellos dependemos para un sin fin de
actividades, pero lamentablemente hoy en día, estamos perdiéndolos. Las causas son muchas, es por ello
que con un grupo de compañeros de la Universidad Estatal Amazónica de la materia de protección de
bosques hemos elaborado un libro en el cual queremos expresarle algunos temas que serán interesantes
como la historia de nuestros bosques, la deforestación, actividades de conservación, además las
plantaciones que se realizan con un fin comercial y muchos otros temas. Esperando que este libro sea de su
agrado, ¡hagamos conciencia y entendamos que tan necesario y el por qué debemos cuidar nuestros
bosques! ( Tagle, 2020).
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1. Introducción
Desde el inicio vivimos ocupando una determinada área, sin saber la riqueza que poseemos en nuestro
alrededor sin darnos cuenta de la gran variedad de recursos y servicios naturales nos rodean.
A simple vista logramos ver un paisaje un bosque muy atractivo, pero si miramos más determinadamente
lograremos observar formas de vida dentro de ellos, comunidades muy complejas de seres vivos que han
generado un equilibrio entre ellos. Pero como siempre aparece un depredador y este es el peor de todo el
ser humano nosotros no encargamos de destruir sin importar animales plantas habitas con el fin de llegar a
grandezas de riqueza.
Sin saber que estamos destruyendo nuestra mayor riqueza, nuestro tesoro más grande y es un tesoro que
poco a poco se está reduciendo y que claro cómo puede importar si solo de este depende el sustento de
nuestra vida.
Los bosques albergan la mayor parte de la biodiversidad terrestre de nuestro planeta) y proporcionan
hábitats para el 80% de las especies de anfibios, el 75% de las especies de aves y el 68% de las especies de
mamíferos. En la base de datos GlobalTreeSearch hay más de 60 000 especies de árboles registradas, de las
cuales más de 20 000 figuran en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la
Naturaleza y más de 8 000 se consideran amenazadas a nivel mundial. Alrededor del 60% de las plantas
vasculares se encuentran en bosques tropicales.
A lo largo de las costas tropicales, los manglares proporcionan lugares de reproducción y criaderos para
numerosas especies de peces y crustáceos y contribuyen a atrapar los sedimentos que, de otro modo, podrían
afectar negativamente a las praderas submarinas y los arrecifes de corales, hábitats de muchas más especies
marinas.
Tanto en países de ingresos bajos como altos y en todas las zonas climáticas, las comunidades que habitan
en los bosques son las que dependen más directamente de la biodiversidad forestal para sus vidas y medios
de subsistencia. Sin embargo, hoy en día casi todas las personas tienen al menos algún contacto con los
bosques o los productos de su biodiversidad y todos nos beneficiamos de las funciones que los componentes
de esta biodiversidad ofrecen en los ciclos del carbono, el agua y los nutrientes y a través de los vínculos
con la producción de alimentos.
En el ecuador sin importar lo pequeño que es su área de terreno tiene una gran variedad de recursos naturales
una gran diversidad de flora y fauna por lo tanto es considerado con un patrimonio natural y foco de estudio
para muchos científicos esta gran variedad se da por muchos factores como su clima su ubicación geográfica
son factores favorecen a su gran variedad.
En el Ecuador existen grandes áreas de bosque nativo ubicadas especialmente en la Región Amazónica, en
las estribaciones externas de las dos cordilleras de la región andina y en zonas secas y húmedas de la Costa.
Estos bosques son los suministradores de productos forestales como: maderas, leña, frutos, resinas,
cortezas, bejucos, carnes, pieles y más elementos de la flora y fauna silvestres. Así mismo, proporciona el
espacio vital en el que se asientan numerosas poblaciones de indígenas y colonos para quienes estos recursos
constituyen importantes fuentes de subsistencia y de ingresos.
De los esfuerzos que se realicen para la conservación de los bosques dependerá en gran medida el futuro
del ambiente y el uso sostenible de los recursos naturales del país.
6
CAPITULO I
Historia de los bosques de Ecuador
7
Breve historia de los bosques de Ecuador
8
Una de las características que el Ecuador posee es que cuenta con una extensa biodiversidad rico en
ecosistemas boscosos con aproximadamente 5,5 millones de hectáreas que representan el 42% del área total
del país, de los cuales el 80% se encuentra en la región Amazónica, 13% en la región Litoral y el 7% en la
región Sierra. La región Amazónica con aproximadamente 9260000 hectáreas representa el 30% del
territorio nacional, pero en el contexto regional solo el 2% de la cuenca Amazónica. Esta región abarca un
rango que varía entre la región norte y sur que en promedio va de 180-190 msnm en la parte más baja de la
llanura amazónica y 2900 en las cumbres de las cordilleras amazónicas. Incluye tanto las planicies de
inundación de los ríos de origen andino y origen amazónico (Guevara, 2012).
9
CAPITULO II
La problemática de los bosques de Ecuador, la deforestación
10
La problemática de los bosques de Ecuador
La deforestación
La deforestación es uno
de los temas que más
preocupa a los expertos
ecuatorianos consultados
por Mongabay Latam.
Según cifras del
Ministerio del Ambiente,
en 2016 el país contaba
Figura 6. Imagen de madera decomisada la madrugada de
este jueves 9 de julio 2020, la Brigada de Selva Nº 19 con 12 631 197 hectáreas
“NAPO”,
Figura en el anual
5. Variación sectorneta
de de
Puerto Providencia
la superficie delmundial,
forestal cantón por decenios y por región del de bosque nativo y en
Shushufindi
mundo, 1990-2020, Según el desglose regional utilizado en FRA 2020, Europa incluye a la 2018 ya tenía 116 857
Federación de Rusia.
11
hectáreas menos. En 18 años entre 1990 y 2018 se han perdido poco más de 2 millones de hectáreas de
bosque en Ecuador (Paz, 2020).
“La tala del follaje primario no se ha detenido. En 2018 Ecuador registró 12,5 millones de hectáreas (ha)
de bosque nativo, lo que demuestra una disminución constante desde la década del 90 cuando había 14,5
millones de hectáreas” (El Universo, 2019).
Ecuador es el país con la mayor tasa de deforestación de Latinoamérica en comparación con su tamaño,
incluso más que Brasil. La expansión agrícola es uno de los mayores problemas actualmente, ya que los
lugares que antes tenían bosques nativos son deforestados
para ser reemplazados por plantaciones para fines
productivos de especies como la palma africana, teca y
melina (El Universo, 2019).
12
La región más afectada por la
deforestación es la Sierra,
donde subsisten pocos bosques
primarios. Desde los años 50, la
Costa sufrió una intensa
conversión de los bosques en
tierras para fines agrícolas y
ganaderos. La región
amazónica ha sufrido los
problemas de una colonización
poco planificada, que surgió
debido a la construcción de la
infraestructura vial para la
explotación petrolera (Suárez,
1995).
También resalta la amenaza de la minería a gran escala en el sur de la Amazonía, y cita el proyecto Cóndor-
Mirador, una mina de cobre a cielo abierto, con la contaminación que conlleva este hecho y el alto riesgo
13
de ruptura de un dique minero, De acuerdo con
Mazabanda, los principales impactos ambientales en
Mirador están relacionados con la deforestación pues
hay más de 1300 hectáreas deforestadas relacionadas
con la apertura de las vías y con las escombreras,
depósitos donde ponen los desechos que salen al
construir el cráter de la mina. “Al deforestar esta área
en una zona de alta pluviosidad como es la Cordillera
del Cóndor, este suelo desprovisto de protección es
arrastrado hasta las fuentes hídricas como el wawaime
que lleva las aguas al río Quimi (CARDONA, 2018).
Figura 11. Labores de construcción de la empresa
china ECSA. Foto: Comunidad Amazónica de
Acción Social Cordillera del Cóndor Mirador
(Cascomi).
14
CAPITULO III
15
La sociedad como actores principales para su conservación
on el crecimiento demográfico
cuadriplicado a lo largo siglo XX y los
hábitos consumistas en la cual el 40%
de la producción fotosintética primaria de los
ecosistemas terrestres es usado por la especie
humana cada año para, fundamentalmente,
comer, obtener madera y leña, etc. Es decir, la
especie humana está próxima a consumir tanto
como el conjunto de las otras especies (Vilches,
et al., 2009).
16
Ecuador establecio
Plan del Buen
Vivir, Objetivo 7,
que contiene,
Garantizar los
derechos de la
naturaleza y
promover la
Figura 14. Bosques regenerados de forma natural con respecto a los bosques plantados, 2020 (% de
la superficie forestal mundial) elaborado por la Organización de las Naciones Unidas, 2020. sostenibilidad
ambiental
territorial y global, involucrando a lasintituciones y a la sociedad para la conservacion de los bosques.
Basado en esto el estado Ecuatoriano ha presentado programasy proyectos en los cuales se promueve
actividades de consrvacion de distintas formas, que se presentaran a continuacion:
17
emanadas de los organismos Estatales que tienen relación con la protección y valoración de los Recursos
Naturales y de la biodiversidad (MAE, 2009).
18
Las mujeres waorani y su trabajo para proteger el bosque amazónico
Los pueblos nativos son un componente Figura 20. Vista aérea de la comunidad Tepapare.
importante para la conservación de los
bosques amazónicos, pues dentro de sus territorios la deforestación es menor que en zonas fuera de los
mismos y de las Áreas Naturales Protegidas. Así lo indica el Informe y Análisis de deforestación 2000-
2015 de la Región Amazónica Ecuatoriana, ejecutado en el 2017 por la Fundación EcoCiencia en el marco
de RAISG (Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada, 2009 ).
19
Al proteger los árboles, los pueblos nativos
contribuyen también en la lucha contra el cambio
climático. “Entendiendo que el área que ocupan los
territorios indígenas en la Amazonía es el 56 % y el
conjunto de bosques que hay en la Amazonía
ecuatoriana más o menos captan el 100 % de las
emisiones del país, podríamos concluir que los
territorios indígenas permiten la captación de la mitad
o algo más del CO2 que emite Ecuador”,
dice Carmen Josse en base a resultados de un estudio
publicado por la Universidad de Leeds (Inglaterra), en
Figura 21. Guime cosecha el cacao en su chacra. febrero de este año.
Figura 22. Area de reforestación en le CIPCA, Santa En base a ese objetivo la universidad se ha encaminado
Clara – Pastaza.
en proyectos
de
investigación
científica
desarrollados
por los
docentes de la
UEA y el
CIPCA
(Centro de
Investigación,
Figura 23. Vista aéreas del CIPCA (Centro de Investigación, Posgrado y Conservación Amazónica).
Posgrado y
Conservación
Amazónica) en coordinación con aliados externos, nacionales y extranjeros, como universidades, centros
de investigación, ministerios, asociaciones de productores y gobiernos locales.
20
Tabla 1.- Proyectos de investigación y conservación desarrollados en la UEA.
Proyecto Descripción
La Universidad Estatal Amazónica (UEA) de Ecuador y el Instituto
Johann Heinrich von Thünen (Thünen) de Alemania, el 27 de Junio de
2016 suscribieron un convenio específico que rige el periodo desde el
27 de Junio de 2016 hasta el 30 de Junio del 2019 para la realización
del proyecto: “Lands capeforestry in thetropics (LaForeT)”. El
Paisajes tropicales en
proyecto busca complementar esfuerzos entre las dos instituciones con
los trópicos (LaForeT)
el objeto de evaluar la influencia de las herramientas políticas
internacionales y nacionales sobre los procesos de deforestación y
reforestación y medios de vida, así como la silvicultura sostenible y uso
del suelo, a través de la implementación y ejecución del proyecto
LaForeT en Ecuador.
Ganadería sostenible y Colaboración mutua con Rainforest Alliance, Inc. RA-USA para
reconversión contribuir al diseño e implementación de modelos para la
productiva en la intensificación sustentable de la ganadería y la reconversión productiva
Amazonía ecuatoriana, de la Amazonía ecuatoriana con el fin de facilitar el cumplimiento de
bajo un modelo de los objetivos de los programas de reconversión sustentable de Ecuador
buenas prácticas y REDD+.
reducción de emisiones
Teledetección y La UEA-Ecuador y la MU-USA, ejecutan el proyecto: “Teledetección
evaluación de campo y evaluación de campo de bosques bajo pagos por conservación en la
de bosques bajo pagos Provincia de Napo, Ecuador”. Para cumplir con el objetivo de evaluar
por conservación en la un programa de pagos por servicios ambientales (Programa Socio
Provincia de Napo, bosque) y el estado de conservación de bosques en parcelas
Ecuador individuales en zonas de estudio en la provincia de Napo
Políticas y opciones La UEA-Ecuador y CIFOR-Indonesia, ejecutaron el proyecto:
regulatorias para “Políticas y opciones regulatorias para reconocer e integrar en una
reconocer e integrar en mejor forma el sector maderero doméstico en países tropicales” en los
una mejor forma el cantones Tena y Arosemena Tola, provincia de Napo, trabajo que se
sector maderero ejecutó desde Marzo del 2012.
doméstico en países
tropicales
En el período de vinculación con esta Red se ha logrado que la UEA se
convierta en la Sede de la Coordinación General de la Red
Iberoamericana de Medio Ambiente (REIMA, A.C. – México) y desde
sus instalaciones se articulan las acciones con sus más de 2000
miembros en 30 países de América Latina, el Caribe, Europa, Estados
Unidos, Canadá, Australia y Angola. Esta Red se trabaja con enfoque
Iberoamericana De
en la sostenibilidad ambiental en Iberoamérica; contribuir a la
Medio Ambiente
formación ambiental de líderes comunitarios para la gestión de
proyectos de desarrollo endógeno, favoreciendo la participación de
grupos vulnerables y población joven en general y difundir eventos
(cursos, seminarios, congresos, talleres, jornadas, conferencias)
relacionados con la sostenibilidad ambiental en Iberoamérica y la
discusión de temas de interés común para los asociados.
Fuente: Dirección de Investigación Universidad Estatal Amazónica, Plan estratégico de investigación 2017
– 2021, 2017.
21
Jardines botánicos establecidos en el país.
Fuente: Universidad Técnica de Manabí, RED de jardines botánicos del Ecuador , 2010.
22
De estos Centros, tan solo tres han sido reconocidos
como jardines botánicos: OMAERE (en el Puyo), el
Jardín Botánico Tropical de la Universidad Luis
Vargas Torres (en Esmeraldas) y el Jardín Botánico
de Cerro Blanco (en Guayaquil). De éstos, dos
realizan investigación, dos tienen un programa de
conservación, dos reciben turismo y todos tienen
programas educativos (MAE et al., 2001).
Otros
jardines
botánicos
no
La Red de Jardines Botánicos del Ecuador requiere ser fortalecida para cumplir con sus objetivos, que
agrupe de manera efectiva todos los jardines botánicos que la forman y congregue a los que aún están fuera,
solamente así pueden ser parte de una estrategia efectiva de conservación ex situ de los recursos genéticos
vegetales.
Agro-biotecnología Ecuador (ABT-Ecuador) es una plataforma creada con el propósito de vincular al sector
académico, público y privado. Busca ser un medio para compartir y difundir información para el público
en general, generar mapas de actores, recursos y servicios disponibles, prevenir la duplicación de esfuerzos
y explorar sinergias entre actores. En la Tabla 3 se describen las instituciones que trabajan con especies
forestales utilizando agro-biotecnología.
23
Tabla 3. Instituciones que trabajan con especies forestales utilizando agro-biotecnología.
24
Universidad Central del Ecuador Rescate de embriones en arupo (Chionanthus pubescens),
- Laboratorio de Biotecnología propagación in vitro de especies forestales nativas:
Vegetal – CADET algarrobo (Acacia macrantha), arrayán (Myrcianthes hallii)
y yagual (Polylepis incana).
En la siguiente Tabla 4, se indican algunas instituciones que trabajan en materia de conservación de los
recursos genéticos forestales.
Institución Actividad
25
Investigaciones de Forestería, 2006). Igualmente, el DENAREF en el ámbito de
Agropecuarias (INIAP) conservación in vitro de germoplasma (Tapia et al. 2008).
26
Defensa de la Naturaleza conservación de la naturaleza, la protección del ambiente y la
y el Medio Ambiente promoción y consecución del desarrollo sustentable. Cuenta con el
(CEDENMA) Grupo de Trabajo – Bosques (GT – B). (CEDENMA, 2011).
Redes internacionales
En la siguiente Tabla 5, se indican algunas instituciones internacionales encargadas de indicar las bases de
datos regionales, subregionales o redes temáticas sobre RGF que han participado el país en los últimos 10
años.
27
Naturales en la Amazonía en la región (Consorcio Internacional Iniciativa Amazónica,
(IA). 2009).
28
CAPITULO IV
29
Dinámica y estructura de los bosques en Ecuador
Os bosques a nivel mundial se caracterizan por tener una alta riqueza y diversidad de especies.
Existen diversos ecosistemas sobre factores que determinan el origen y mantenimiento de esta
riqueza, las cuales han sido estudiadas a través del tiempo, con la finalidad de mantener la
estructura y dinámica de un bosque. Donde sus condiciones ambientales varían el espacio y dinámica,
generando regiones con una gran variedad de biodiversidad, como los bosques montanos de los Andes
presentan una dinámica de poblaciones muy alta y tasas de crecimiento bajas comparadas con bosques
tropicales.
Figura 27: Ministerio de Ambiente del Ecuador (2013). Sistema de Clasificación de los Ecosistemas del Ecuador Continental.
Quito, Ecuador, Subsecretaría de Patrimonio Natural.
Fig. 27. Regiones naturales del Ecuador. Izquierda: mapa mostrando las regiones naturales del Ecuador.
Derecha: mapa de hábitat remanente mostrando en color gris las áreas dónde la vegetación natural ha sido
eliminada por actividades humanas (Ecuador, 2013).
En Ecuador las condiciones ambientales varían mucho en el espacio y esto ha generado regiones naturales
con propiedades muy divergentes. Estas diferencias son obvias para cualquiera que haya cruzado los Andes
viajando desde la Amazonía baja hasta el litoral. La variedad de regiones naturales es uno de los factores
que ha hecho que el Ecuador sea un país megadiverso y uno de los mayores centros de concentración de
especies a nivel mundial. A continuación, hacemos un recuento de las regiones naturales del Ecuador
incluyendo una descripción de sus condiciones ambientales, elevación y características generales de sus
ecosistemas (Fig. 27). La clasificación de regiones naturales usada aquí es una simplificación del sistema
de tipos de vegetación de Sierra (R. Sierra, 1999a). Además de la fisionomía de la vegetación, el sistema
también considera el aislamiento histórico entre las vertientes oriental y occidental de los Andes y las tierras
30
bajas de la Amazonía y de la Región Costa. La Tabla 6 muestra el área, temperatura media anual y
precipitación media anual de cada región. La figura 28 caracteriza el clima de cada región en dos
dimensiones: precipitación media anual y temperatura media anual.
Figura 28. Precipitación anual y temperatura media anual en las regiones naturales del Ecuador (de acuerdo con lo mostrado en
la Fig. 6). Los valores fueron medidos a partir de puntos distribuidos al azar en mapas climáticos digitales (Fick & Hijmans,
2017).
Tabla 6. Área y clima en las regiones naturales del Ecuador. Los promedios de temperatura y de
precipitación anual fueron obtenidos de mapas digitales de clima (Fick & Hijmans, 2017) a partir de 1197
puntos ubicados al azar. La desviación estándar se muestra entre paréntesis.
31
1. Matorral Seco de la Costa
Se caracteriza por una combinación de condiciones cálidas y
extremadamente secas (Fig.28). El promedio de precipitación
anual puede no sobrepasar los 60 mm (en la localidad más
occidental, Salinas, Provincia del Guayas). El Matorral Seco de
la Costa cubre un área de 8033 km2 y está restringido al margen
de la costa en el centro de Ecuador. En algunas áreas, hierbas
Figura 29. Localidad más occidental,
Provincia d Manabí. introducidas para la crianza de ganado han reemplazado a las
plantas nativas (Ríos, Betancuort, & Eduarte, 2016). En los
hábitats más secos, son dominantes los cactus y otras plantas espinosas.
32
actividades humanas (Fig. 27; Tabla 6). Está ausente en las tierras bajas del suroccidente de Ecuador debido
a la predominancia de condiciones secas.
33
6. Páramo
7. Matorral Interandino
34
8. Bosque Montano Oriental
35
várzea (bosque inundado con aguas blancas), igapó (bosque inundado con aguas negras), bosque rivereño,
matorral de islas rivereñas, y pantanos de la palma Mauritia flexuosa (Palacios et al., 1999)
36
CAPÍTULO V
37
Bosques húmedos tropicales
Importancia de los bosques húmedos tropicales en Ecuador
nivel mundial, el bosque húmedo tropical se distribuye entre el Trópico de Capricornio y el
Trópico de Cáncer, en la zona de convergencia intertropical. Se presenta bajo condiciones
climáticas cálidas durante todo el año, con altas temperaturas (22 y 34 ºC) y precipitaciones
abundantes de hasta 4.000 mm al año, con una estación seca muy corta de dos o tres meses de duración.
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incrementarlo rápidamente si se abre un claro por donde penetre la luz y, arbustos/hierbas conformado por
hierbas, arbustos y árboles jóvenes (Calvo-Alvarado1, 2012)
Debido a las condiciones especiales de clima, topografía y geología en esta zona se encuentran especies
amazónicas, andinas y otras, características de las cordilleras del Kutukú y del Cóndor. Varios científicos
consideran que la Amazonía alta del sur de Ecuador, contiene la mayor riqueza florística que cualquier área
de tamaño similar en el Neotrópico (Schulenberg y Aybrey, 1997) y casi con certeza, una de las
concentraciones más altas de especies de plantas vasculares aún por descubrir (Neill, 2004).
Actualmente presentan un deterioro debido a diversos factores como la deforestación, la tala ilegal, las
presiones económicas y el crecimiento de la población que están intensificando el uso de la tierra que,
anteriormente, era sustentable, pero ahora alcanza niveles no sostenibles y destructivos, motivando la
explotación forestal desmedida e impulsando la conversión en gran escala, de las tierras forestales a la
agricultura y la ganadería. Esto produce daños permanentes en el ecosistema forestal.
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Los bosques tropicales son el sustento y hogar de individuos, comunidades, poblaciones y especies
(animales, vegetales, hongos, bacterias e incluso genes) y sus interacciones; al entorno de estos ecosistemas
se agregan los ecosistemas lóticos (ríos) y lénticos (lagos y lagunas), con sus aguas superficiales y
subterráneas (Protegidas, 2017).
Son una parte esencial para los seres vivos ya que posibilitan el desarrollo de los procesos evolutivos
naturales.
Su conservación
En Ecuador, los bosques tropicales se encuentran en las provincias de Esmeraldas, Santo Domingo de los
Tsáchilas y en toda la región amazónica. Estas especies alcanzan entre los 30 a 40 m y pueden llegar hasta
los 50 m. Asimismo, ofrecen múltiples beneficios como la regulación del ciclo de agua y el clima, producen
oxígeno y absorben dióxido de carbono, controlan inundaciones, evitan la erosión, proveen de alimentos y
promueven la conservación de la biodiversidad, entre otros bienes y servicios.
Entre las principales amenazas que se producen en este tipo de ecosistemas, constan la deforestación, la
transformación del uso de suelo, la expansión de la frontera agrícola y áreas pobladas.
En respuesta a esta problemática, el MAE a través del Programa Socio Bosque conserva alrededor de 888
mil hectáreas de bosques húmedos tropicales beneficiando a cerca de 5 mil ciudadanos con el incentivo
económico que entrega esta Cartera de Estado por su mantenimiento.
Por otro lado, el nuevo modelo de reforestación del MAE tiene planificado sembrar 4 341, 33 hectáreas de
bosques tropicales en las provincias de Esmeraldas, Morona Santiago, Orellana y Santo Domingo de los
Tsáchilas, entre el año 2013 y 2014.
Igualmente, el Ministerio trabaja en políticas incluyentes y participativas que permitan al país recuperar de
manera responsable los bosques tropicales.
40
CAPÍTULO VI
41
Bosques secos tropicales
Importancia de los bosques secos tropicales en Ecuador
l término “bosques tropicales estacionalmente secos” (BTES) fue acuñado por Murphy y Lugo
(1995). Los BTES comprenden bosques caducifolios y semicaducifolios que crecen en áreas
tropicales sujetas a una severa estacionalidad climática. Estos bosques reciben alrededor de 80%
de la precipitación durante cuatro meses, a lo largo de los cuales la media de precipitación puede sobrepasar
con creces 200 mm por mes (Maass y Burgos 2011).
En el otro extremo, el periodo de sequía se prolonga entre 5 a 6 meses al año. Durante este periodo la
precipitación raramente supera 10 mm mensuales (Maass y Burgos 2011) creando un déficit hídrico (Gotsch
et al. 2010; Lima y Rodal 2010) que determina una de las características más conspicuas de los BTES: la
fenología distintiva de la mayoría de plantas, ligada a la pérdida estacional de las hojas y del bosque en
general, con una época sin hojas durante la estación seca y una fisionomía de bosque siempreverde a lo
largo de la estación lluviosa. La estacionalidad de meses lluviosos versus meses secos es una constante en
los BTES, sin embargo, existe una elevada variación interanual en cuanto a la cantidad y temporalidad de
las lluvias ocasionadas, entre otros, por la acción de los fenómenos ENSO (El-Niño Southern Oscillation)
y la Oscilación Decadal del Pacífico en Mesoamérica (Best y Kessler 1995) (Espinosa, 2012).
42
A nivel mundial, los BTES ocupan 42% de la superficie de los bosques tropicales (Miles et al. 2006).
Sorprendentemente, a pesar de esta considerable extensión y del hecho de que estos ecosistemas mantengan
una importante población humana, los bosques secos del Neotrópico han recibido poca atención científica
en comparación con los bosques lluviosos tropicales de la región (Bullock et al. 1995; Sanchez-Azofeifa et
al. 2005). Según Gentry (1995), el bajo interés que han despertado los BTES se debe a su baja diversidad,
entre 50 y 70 especies de árboles de diámetro mayor de 2.5 cm por hectárea, en comparación con los
bosques húmedos, que llegan a alcanzar valores entre 200 y 250 especies en condiciones similares. Sin
embargo, esta tendencia ha cambiado durante los últimos años gracias al reconocimiento de que los BTES
son uno de los ecosistemas tropicales más amenazados y menos conocidos del mundo, al tiempo que dan
cobijo a poblaciones humanas que dependen directamente de los servicios ecosistémicos que estos ofrecen
(Janzen 1988; Dinerstein et al. 1995; Balvanera 2012).
43
Magdalena” (Mittermeier et al. 2005). Además, esta zona comprende la denominada “Región Tumbesina”,
que es una de las Áreas de Endemismo de Aves (EBAs) más importantes y amenazadas a nivel global (Best
y Kessler 1995; Leal-Pinedo y Linares-Palomino 2005).
En Ecuador, las zonas de bosque seco están incluidas en las formaciones de la costa, en las subregiones
Centro y Sur (Sierra 1999), que se extienden desde la Provincia de Esmeraldas y los Ríos al Norte hasta
Lambayeque y Libertad al Sur del Perú (Aguirre et al. 2006b). En la provincia de Loja se encuentra la
mayor superficie de este ecosistema, que incluyen las tierras bajas, estribaciones occidentales bajas de la
cordillera de los andes y los valles secos interandinos del sur (Aguirre y Kvist 2005). Los boques secos del
Sur del Ecuador y Norte del Perú están caracterizados por poseer, en el contexto de los BTES, una alta
diversidad y una extraordinaria cantidad de especies endémicas de diferentes grupos taxonómicos (Best y
Kessler 1995; Linares-Palomino et al. 2010; 2011).
A pesar de la importancia de estos bosques en el contexto global, son poco conocidos y la mayoría de las
investigaciones no han sido publicadas y, lamentablemente, se encuentra como literatura gris de difícil
acceso (Aguirre et al. 2006b). Afortunadamente, se han hecho importantes avances en el conocimiento
florístico del componente arbóreo de esta zona gracias a estudios llevados a cabo recientemente tanto en
Ecuador como en Perú (Aguirre y Kvist 2005; Aguirre et al. 2006a; 2006b; Linares-Palomino et al. 2010).
La región Pacífico Ecuatorial puede ser dividida en tres subregiones de acuerdo con su afinidad florística.
Con toda probabilidad las fuertes diferencias florísticas están relacionadas con el grado de disponibilidad
de agua (Aguirre et al. 2006).
44
Un primer territorio está conformado por las formaciones que aparecen en las provincias ecuatorianas de
Esmeraldas y Los Ríos, próximas a la zona del Chocó, y en donde existe una mayor disponibilidad de agua.
Un segundo grupo lo integran las provincias peruanas de Piura, Cajamarca, Lambayeque y La Libertad, en
la zona de influencia de la corriente fría de Humbolt, que genera una disminución en las precipitaciones. El
tercer grupo lo conforman las provincias ecuatorianas de Manabí, Guayas, El Oro, Loja y Tumbes, a caballo
entre los dos grupos anteriores y, por tanto, en una zona intermedia de humedad.
45
CAPITULO VII
Los Bosques Andinos del Ecuador
46
Los Bosques Andinos
4. Los andes tropicales (norte y centro) son considerados Figura 53. Mapa de división de loa Andes, norte
centro y sur.
la región que alberga la mayor riqueza y diversidad
biológica en la Tierra: centenares de aves, árboles, mamíferos, flores, anfibios e insectos sólo habitan en
esta región del planeta gracias a sus características únicas que brindaron oportunidades para importantes
procesos de especiación y adaptación biológica.
47
Figura 54. De izquierda a derecha, Huayhuash, Lima . Catamarca y Fiambalá, Argentina. Ilinizas, Ecuador.
En cuanto a flora, se estima que alrededor del 25% de la diversidad de plantas a nivel mundial se encuentra
en la región andina tropical.
5. Los Andes, hogar de los Bosques de Nubes: En los andes tropicales, las nubes se forman entre los
2.000 y los 3.000 msnm, en una franja de condensación donde las copas de los árboles actúan como represas
de agua.
A este ecosistema de árboles que atrapan y destilan neblina se les llama Bosques de Nubes, y son uno de
los mayores productores de agua dulce de la región andina. Esta capacidad para captar el agua de las nubes
y producir abundante agua dulce es una de las características más importantes de los páramos y los bosques
de neblina (Andean Forests, 2020).
Los bosques montanos de los Andes son vistos comúnmente como el hermano menor de las grandes
extensiones de bosques
amazónicos: cubren 11% (o 31
millones de hectáreas) del área total
de bosques de los siete países que
comparten los Andes. Pero nuestra
dependencia de ellos es realmente
significativa: 40 millones de
personas (21% de la población total
de estos países) dependen de
manera directa del agua y de otros
servicios ecosistémicos que
proveen estos bosques (Programa
Bosques Andinos, 2014, Cuesta et
Figura 55. Programa de bosques Andinos portada del video de introducción.
al., 2009).
Las funciones que tienen los bosques andinos para la provisión de agua y la estabilidad de suelo, en un
contexto de presiones humanas conocidas y de cambio climático, para reflexionar sobre cuánto (re)
conocemos el valor de este ecosistema. Si tan solo nos enfocamos en agua y suelo, dejando de lado la
biodiversidad, el carbono, los productos maderables y no maderables o los intangibles, tales como su
belleza; una serie de funciones de regulación y soporte se evidencian: la regulación hídrica, el rendimiento
hídrico y la protección del suelo contra el impacto de la lluvia, reduciendo la erosión y los peligros de
48
deslizamientos, y manteniendo así la calidad del agua. (Programa Bosques Andinos, 2014, Cuesta et al.,
2009).
De manera cualitativa, se
conoce que los bosques y
sus suelos ricos en materia
orgánica regulan los
caudales en el tiempo
porque almacenan agua en
el (sub)suelo en periodos
de lluvia, para soltarla en
épocas secas hacia los
cauces de agua,
constituyendo el caudal de
Figura 56. Flujos de balance hídrico en bosques de montaña (Wohl et al, 2012) base y reduciendo caudales
máximos. Los bosques andinos tienen un mayor rendimiento hídrico (porción de la precipitación que
escurre) que los bosques más secos de menor altitud, porque a mayor altitud, mayor precipitación, frente a
una menor evapotranspiración por las bajas temperaturas y la nubosidad. Otra función clave es la protección
del suelo en laderas con fuertes pendientes y suelos pocos profundos, encima de las rocas. Las raíces de los
árboles estabilizan el suelo mientras que su follaje, pero también la vegetación del sotobosques, la hojarasca
y la materia orgánica acumulada, protegen el suelo contra el impacto directo de las gotas de lluvia y el
viento (Herzog et al.,2011c)
Figura 57. Dependencia de los bosques Con esta premisa el Ministerio del Ambiente Ecuatoriano en el
andinos, Programa de bosques Andinos, 2017. Artículo 1 de Normas para el Manejo de Sustentabilidad de los
Bosques Andinos define a los mismo como:
49
“Para los fines de esta norma se entiende como bosque
andino a la vegetación que se desarrolla arriba de la
cota de los 900 metros sobre el nivel del mar en las
estribaciones de la Cordillera Occidental y, arriba de
la cota de los 1.300 metros sobre el nivel del mar, en
las estribaciones de la Cordillera Oriental. Se incluyen
también los bosques nativos ubicados dentro de los
callejones interandinos” (Acuerdo Ministerial #128,
2006).
50
El Programa Bosques Andinos es una iniciativa
regional que contribuye a que la población
andina que vive en y alrededor de los Bosques
Andinos reduzca su vulnerabilidad al cambio
climático y reciba beneficios sociales,
económicos y ambientales de la conservación
de Bosques Andinos. Para lo cual se genera y
difunde información mediante la investigación
aplicada en los bosques andinos, para detectar,
validar y compartir las buenas prácticas
existentes, que finalmente, serán elevadas a un Figura 60. Ilustración del Osos de Anteojos (Tremarctos ornatus)
ámbito político (Medina, et al. 2020).
51
Otra perspectiva toma los patrones de diversidad de los bosques Andinos varían con la elevación,
como gradiente estructurante principal. La estructura y composición de los bosques andinos en montañas
tropicales grandes alejadas del litoral bajo los 1200-1500 m de elevación es similar a la de los ecosistemas
de bosques de tierras bajas. Sobre esa elevación, tanto la diversidad como la altura del dosel disminuye y
las comunidades de epífitas y musgos aumentan en diversidad y biomasa (Scatena et al. 2010).
Los ecosistemas de bosques Andinos juegan papeles clave en estos paisajes en procesos que mantienen la
biodiversidad, capturan y conservan carbono, regulan y aseguran la provisión hídrica entre otros (Medina,
et al., 2020).
Constituyen el ecosistema más extenso en los Andes Tropicales, con más de 372 000 km2 ,
equivalente al 25% de la extensión de los Andes Tropicales y cerca del 40% del área remanente
de los ecosistemas de la región (Josse et al. 2009), (Cuesta et al. 2009).
52
Las reservas de carbono en los ecosistemas de los Andes son comparables con las de los bosques
tropicales de tierras bajas, sobre todo cuando se considera las reservas de biomasa y carbono
orgánico en los suelos (Sevink, 2009); (Spracklen & Righelato, 2013).
Los bosques andinos tienen un rol fundamental de regulación hídrica, asociada, entre otros
procesos, a la presencia de musgos y plantas epítas, que pueden capturar agua de la niebla o
lluvia transportada por el viento por una cantidad que puede representar entre el 5% y 35% de
la precipitación total anual (Tobón, 2009).
Se ha estimado que al año 2050 el cambio climático podría generar impactos signicativos sobre
áreas estimadas entre 9% y 15% de la distribución remanente de los bosques andinos (Cuesta
et al, 2009).
Uno de los impactos esperados del cambio climático es el movimiento altitudinal de especies,
lo que puede generar cambios importantes en la estructura y composición de las comunidades
bióticas de los bosques andinos y en el flujo de beneficios que generan para las poblaciones
andinas (Young, 2006).
La elevada pluralidad y endemismo de los Bosques Andinos tiene puertas en procesos históricos a distintas
escalas que se manifiestan en gradientes de latitud,
ascensión y estacionalidad hídrica (Kessler et al.
2011). Los procesos principales que han generado
esta pluralidad incluyen la petrografía compleja de la
cordillera, el intercambio de biotas con América del
Norte a través del istmo de Panamá y la
fragmentación de poblaciones y subsecuentes
procesos recientes de radiación y especiación
Figura 65. Fotografia del Colibrí Zamarrito pechinegro
asociados a los cambios climáticos del Pleistoceno
(Eriocnemis nigrivestis) (Tejedor et al. 2012; Cuesta et al. 2009). Los
persistentes vacíos de principiossobre la ecología
pulvínulo y biogeografía de estos bosques
resaltan su cumbre para el sondeo y
conservación de filogenias, procesos evolutivos
únicos, posibles bosques maderables y no
maderables y posibles genéticos que pueden ser
busilis para especies de flora cultivadas (Young,
2006).
. Uno de los procesos ecosistémicos clave en cuanto a la provisión de beneficios para las poblaciones que
viven en la cercanía de paisajes de bosques Andinos es la provisión y regulación de agua para distintos
usos.
54
CAPÍTULO VIII
Bosques Con Características Xerofíticas En Ecuador
55
Bosques Con Características Xerofíticas En Ecuador
os bosques secos en general están ubicados en zonas relativamente pobladas, muchas veces en
suelos aptos para cultivos y por tal razón han sido muy intervenidos y destruidos mucho más que los
bosques húmedos (Janzen, 1988). La situación no es diferente en Ecuador; sus bosques secos son
poco conocidos, muy amenazados y mantienen una importancia económica para grandes segmentos de
la población rural, suministrando productos maderables y no maderables para subsistencia y a veces para
la venta. Para conocer y documentar la importancia de los bosques secos, en el año 2004 se inició un estudio
sobre la diversidad y usos en particular de los árboles y arbustos de los bosques secos en el sur- occidental de
Ecuador. Este documento presenta resultados etnobotánicos de este estudio y la presente contribución se
enfoca a dar datos referentes a las formaciones de bosques secos y a la diversidad y distribución de las especies
leñosas. Específicamente en este estudio se presenta una lista de árboles y arbustos actualmente conocidos
de los bosques secos de Ecuador (menos Galápagos), que incluyen las formaciones de las partes bajas,
bosques secos montanos bajos y los valles secos interandinos del sur, norte e incluso de la parte oriental. Se
analiza la diversidad de especies y familias a nivel de formaciones de bosques secos y nivel geográfico, así
como se discute sobre las familias y géneros más importantes. Finalmente, se analiza los vacíos de
conocimiento existentes para la vegetación seca de Ecuador, tanto en lo referente a zonas poco estudiadas y a
géneros donde las especies presentes en los bosques secos todavía son poco conocidas (Aguirre, Kvist, &
Sánchez, 2006).
56
el segundo, al sur en Brasil, Paraguay y Bolivia. Más cerca de la línea ecuatorial, los bosques secos están
limitados en manchas aisladas en la parte occidental del continente, más precisamente en la margen de
extensos bosques húmedos de la cuenca amazónica. Aquí se pueden distinguir cuatro áreas principales de
bosques secos: 1) La costa caribeña de Venezuela y Colombia, 2) La costa (suroccidental) de Ecuador y
(norte- occidental) de Perú, 3) Valles interandinos aislados en Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia y 4) Al
oriente de la cordillera andina en un área relativamente pequeña en el departamento de San Martín de
Perú. Investigadores como Sarmiento (1975), Prado & Gibbs (1993), A. H. Gentry (1995), Prado (2000),
Toby Pennington et al. (2000), Linares-Palomino, Pennington, and Bridgewater (2003), Linares-
Palomino (2004b) han analizado la distribución de las especies leñosas en bosques secos a nivel continental.
Los bosques secos del Ecuador
En el país, los bosques secos se encuentran continuos en la costa y aislados en los valles secos en el callejón
interandino (Figura 70).
Figura 70: Ubicación de los bosques secos de Ecuador. A lo largo de la costa los bosques son continuos, pero en el callejón
interandino se ubican en valles dispersos, desde Imbabura hasta Cañar (bosque seco interandino del N), en Azuay y Loja (bosque
seco interandino del S) y en Zamora a Chinchipe (bosque seco interandino oriental).
Los bosques de la costa forman parte de la región tumbesina, que aproximadamente abarca 135.000 km2,
compartidos entre Ecuador y Perú, desde la provincia de Esmeraldas en el norte del Ecuador hasta el
departamento de La Libertad en el NW de Perú (en áreas entre 0-2.000 m y a veces hasta 3.000 m, que
incluyen bosques secos, bosques húmedos, matorrales, desiertos, manglares y páramos). Es un área
conocida por su alto nivel de endemismo de especies de flora (Madsen, Mix, & Balslev, 2001), pero
también de fauna: 55 aves y ocho mamíferos endémicos (Stattersfield, Crosby, Long, & Wege, 1998). En
el Ecuador los bosques secos tumbesinos originalmente cubrieron el 35% de la costa, pero
actualmente la mayor parte ha desaparecido o se encuentran muy degradados. Algunos autores
(Bookbinder et al., 1995; López, 2002) separan a los bosques secos tumbesinos en dos áreas florísticas
principales, básicamente divididos por el Golfo de Guayaquil. Al NW del mencionado Golfo se encuentra
aproximadamente 22.771 km2 en las provincias ecuatorianas de Guayas, Manabí y Esmeraldas (abarcando
una estrecha faja a lo largo de la costa sur) y al SE más de 64.588 km2 en las provincias ecuatorianas de El
Oro y Loja, así como en los departamentos peruanos de Tumbes, Piura, Lambayeque y La Libertad. Esto
corresponde con las subregiones central y sur de la vegetación costeña del Ecuador reconocido por Carlos
57
Cerón (2001). Por otro lado, en el callejón interandino del Ecuador se encuentran bosques secos desde las
provincias de Imbabura y Pichincha en el norte hasta Zamora-Chinchipe y Loja en el sur. Ejemplos de estos
bosques son el Chota y Guayllabamba, entre las provincias de Imbabura y Pichincha, Girón-Paute entre
las provincias de Azuay y Loja y Catamayo, Malacatos y Vilcabamba en Loja. Valencia et al. (1999) distinguen
entre los valles interandinos del centro-norte y el sur (Loja). Al norte, los valles son más altos y en general
se encuentran bosques secos entre 1.800 y 2.600 m de altitud. También son más aislados debido a que ambas
faldas orientales y occidentales están cubiertas con bosques montanos muy húmedos. Al contrario, en el
sur las faldas occidentales son relativamente más secas y las montañas más bajas, en que los bosques secos
interandinos se encuentran desde los 1.300 m hacia arriba, lo que probablemente facilita un mayor
intercambio entre bosques de la costa y los bosques interandinos. Entre Zamora y Chinchipe se
encuentra una pequeña área (aproximadamente de 2.000 ha) de bosque seco en el extremo suroriental de
Ecuador, al norte de Zumba. Esta área que tiene su drenaje hacia el río Mayo (afluente del río Marañón en
Perú) es muy interesante florísticamente. El valle seco del río Marañón está caracterizado por la presencia
de un bosque seco con especies endémicas (Linares-Palomino, 2004b; Linares-Palomino et al., 2003)
y algunas de éstas aparentemente crecen en el bosque seco de Zumba.
Formaciones de bosques secos de Ecuador
Los factores climáticos y topográficos determinan la distribución de los bosques secos en Ecuador.
Munday and Munday (1992) plantean una buena introducción al clima en el SW de Ecuador. Varios
autores han definido y descrito a las formaciones de vegetación de Ecuador; algunos para todo el país
(Cañadas, 1983; Harling, 1979; R. Sierra, 1999a) y otras para el sur del país (Balslev & Øllgaard, 2002;
Kessler, 1992). Lozano (2002) compara los trabajos anteriores y describe a la vegetación en las provincias
del sur de Ecuador.
Las formaciones de bosques secos planteadas en el presente trabajo están basadas en el trabajo de Lozano
(2002) con algunas modificaciones y extendiendo el análisis a todo el país. Se reconocen las siguientes
siete unidades de bosques secos con sus abreviaciones aplicadas en tablas y mapas (se agrega en paréntesis
la nomenclatura aplicada por Lozano (2002).
A continuación, se presentan los nombres de unidades mencionadas en este trabajo y relacionadas con las
propuestas por Lozano (2002), entre paréntesis:
58
intervenido y degradado. Se puede considerar a la presente sistematización de las formaciones de bosques
secos de Ecuador como muy generalizada, ya que dentro de las formaciones principales existen
subformaciones o comunidades vegetales. Sin embargo, para levantar la distribución de las especies es
conveniente basarse en formaciones amplias.
A continuación, se presenta una breve descripción de las mencionadas siete formaciones de
bosques secos. No se incluyen muchos nombres de especies, considerando que éstas pueden consultarse
en las listas de especies representativas/dominantes dadas por Lozano (2002).
1. Matorral seco espinoso (ms)
59
Esta formación se presenta entre 200 y 1.100 m en zonas de
colinas, donde existe mayor humedad (por la existencia de
pendientes) que los bosques deciduos. Se estima que en la
temporada seca, entre 25-75% de los elementos florísticos pierde
sus hojas. En Loja este tipo de vegetación se desarrolla mejor
entre 400 y 600 m, pero llega hasta 1.100 m. También existe en
terrenos de colinas de El Oro y en las cordilleras de Churute y
Chongón-Colonche, ubicados en Guayas y Manabí. El estrato
superior alcanza aproximadamente hasta los 20 m de altura y
Figura 73. Ubicada en la Cordillera Costera del algunos elementos importantes y característicos son:
Pacífico del Ecuador Centrolobium ochroxylum, Phytolacca dioca, Triplaris
cumingiana, Cochlospermum vitifolium y Gallesia integrifolia. Debido a la mayor humedad, la
intervención antrópica ha sido mayor que en la formación anterior. Estos bosques han sido reemplazados
con cultivos o pastos y lo que queda varía entre intervenido a muy intervenido.
4. Bosque seco montano bajo (sm)
Se ubica y desarrolla en lugares escarpados y con colinas
entre 900 hasta 1.600 m. A estas altitudes la neblina
provoca precipitaciones horizontales incluso durante la
estación seca, por ello más del 50% de los elementos
florísticos puede mantener su follaje y se encuentra una
mezcla de elementos tropicales secos y elementos
florísticos pedemontanos. Estos bosques se localizan en
las estribaciones occidentales de los Andes,
inmediatamente por encima de la formación anterior; en
Figura 74. Ubicada en la Cordillera Costera del Chocó particular en las provincias de Loja y El Oro. La cordillera
del Ecuador costeña en Manabí y Guayas puede ser demasiado baja
para contener esta vegetación (y demasiado húmeda en sus partes altas). Algunas especies características
son: Fulcaldea laurifolia, Chionanthus pubescens, Annona cherimolia, Tecoma stans, Jacaranda
sparrei y Cordia alliodora. Todavía existen algunos remanentes relativamente bien conservados de estas
formaciones, en particular en los bosques secos montanos bajos.
5. Bosque seco interandino del S (i-s)
60
se localiza en los valles de Loja (Catamayo, Vilcabamba, Malacatos, Quinara) hasta el sur de la provincia
del Azuay (Susudel-río León, valle Yunguilla-Jubones).
6. Bosque seco interandino oriental (i-o)
Ubicado en el valle del río Mayo en la cabecera norte del río
Marañón, estos bosques secos están limitados a un rango
entre aproximadamente 800 y 1.200 m y solo constituyen
unas 2.000 ha. Aunque la fuerte intervención antrópica es
reciente, la vegetación nativa ha sido convertida casi
totalmente a cultivos y pastos, solo dejando algunos
matorrales y bosques abiertos en pendientes y a lo largo de
ríos. Sin embargo, se puede comprobar que el valle tiene
una vegetación distinta, donde sobresalen especies como:
Anadenanthera colubrina, Cybistax antisyphilitica,
Tabebuia chrysantha y Hura crepitans. También se
Figura 76. Localidad en el río Pastaza a su paso por encuentran varias especies normalmente restringidas a
el Manto de la Novia (Baños, Ecuador) bosques más húmedos y dada la deforestación casi completa,
será difícil comprobar cuál de estos elementos florísticos realmente estaban o están adaptados a condiciones
secas y cuáles son restringidas a vegetación ribereña más húmeda.
7. Bosque seco interandino del N (i-n)
61
CAPITULO IX
Plantaciones con fines comerciales en Ecuador
62
Las plantaciones representan aproximadamente el 3 por ciento de los bosques del mundo
as plantaciones forestales
abarcan alrededor de 131
millones de hectáreas, lo
que representa el 3 por ciento de la
superficie forestal mundial y el 45
por ciento de la superficie total de
bosques plantados. Las plantaciones
forestales se manejan de manera
intensiva, están compuestas por una
o dos especies, de edad uniforme,
plantadas con un espaciamiento
regular y establecidas
principalmente para fines
Figura 78. Industria de explotación de plantaciones forestales con fin comercial
en Colombia.
productivos. Otros bosques
plantados, que comprenden el 55
por ciento de todos los bosques plantados, no se manejan de manera intensiva y pueden parecerse a los
bosques naturales en la madurez de los rodales. Los propósitos de otros bosques plantados pueden incluir
la restauración del ecosistema y la protección de los valores del suelo y el agua (FAO, 2020).
La proporción más alta de plantación forestal se encuentra en América del Sur, donde este tipo de bosque
representa el 99 por ciento de la superficie total de bosque plantado y el 2 por ciento de la superficie forestal
total. La menor proporción de plantación forestal se encuentra en Europa, donde representa el 6 por ciento
de la superficie forestal plantada y el 0,4 por ciento de la superficie forestal total. A nivel mundial, el 44
por ciento de las plantaciones forestales está compuesto principalmente por especies introducidas. Existen
grandes diferencias
entre las regiones:
por ejemplo, las
plantaciones
forestales en América
del Norte y América
Central están
compuestas
principalmente por
especies nativas y las
de América del Sur
consisten casi en su
totalidad en especies
introducidas (FAO,
Figura 79. Porcentaje de especies introducidas y nativas en plantaciones forestales, por región del 2020).
mundo, 2020
63
Plantaciones con fines comerciales en Ecuador
La biomasa acumulada en un bosque o plantación es un indicador del crecimiento vegetal y del C fijado
(Návar, 2009). Esta información es necesaria para valorar la contribución de las cubiertas vegetales en la
reducción de gases con efecto invernadero (Fonseca et al., 2009) y en la planeación regional del manejo
forestal sustentable (Kauffman et al., 2009; Cutini et al., 2013), ambos enfocados a reducir los impactos del
cambio climático en el planeta (Malhi y Grace, 2000; Snowdon et al., 2001) planteados en el Protocolo de
Kyoto (Naciones Unidas, 1998).
64
Figura 82. Mapa conceptual de competencias en la regulación, coordinación y ejecución del Plan Nacional de Forestación y
Reforestación.
Para fomentar la economía forestal del país en el año 2014 el MAE en Acuerdo Ministerial 035 subscrito
2014-02-27, reforma y codifica el Instructivo Económico Para La Reforestación Y Forestación Con Fines
Comerciales, que plantea la subvención del 75% para los productores individuales y el 100% para las
asociaciones legalmente constituidas y que trabajen junto a esta Cartera de Estado, con el fin aprovechar
las tierras que no son productivas para generar materia prima y abastecer a la industria maderera; a la vez
65
reducir las importaciones de productos forestales y fomentar el desarrollo de las exportaciones con valor
agregado (Acuerdo Ministerial 035, 2014).
Del estudio realizado por COMAFORS en el año 2000, se desprende que en el Ecuador, el bosque, es uno
de los recursos naturales más importantes para su desarrollo; éste es una unidad ecosistémica conformada
por árboles, arbustos y demás especies vegetales y animales, resultado de un proceso ecológico espontáneo
que interrelaciona otros recursos como el agua, la biodiversidad, el suelo, el aire, el paisaje, etc19. Los
bosques naturales con una superficie superior a 6,0 millones de hectáreas, de los cuales, según el Plan
Nacional de Forestación y Reforestación – PNFR, el 50% de ésta superficie, alrededor de 3 millones de
hectáreas son bosques con potencial productivo, incluyendo tanto bosques primarios como secundarios
(MAE, 2006). Adicional a los recursos forestales provenientes del bosque nativo, se debe sumar las
plantaciones forestales existentes en el país de aproximadamente 160.000 hectáreas (PNFR-MAE 2006).
Sobre la base de estos datos, la oferta de madera para abastecer a la industria ecuatoriana es de 3,53 millones
de metros cúbicos, siendo insuficiente para cubrir la demanda de madera de la industria nacional. En la se
muestra lo señalado:
Figura 85. Imagen de tabla de origen de los productos derivados de las maderas, 2000.
Para el año 2000 según el estudio del Bosque en el Ecuador (COMAFORS 2000) de acuerdo a las
estadísticas del Banco Central del Ecuador, cuantifican el PIB del sector forestal en 1,9%, del cual 1,1%
corresponde a la producción bruta anual de madera (silvicultura y tala) y el 0,8% a la producción maderera
industrial, que se puede interpretar en que el año 2.000 el aporte fue de $146,47 millones y $106,53 millones
respectivamente, sumando un total de $253 millones (Barrantes et al., 2000).
66
Para el período 2003 – 2007 en el estudio realizado por ECOBONA (2010) se produce un incremento, los
sectores silvícolas y de producción de madera y productos de madera en el Ecuador registran un aporte
promedio al PIB en el período de estudio
de 2,3%. Un 1% corresponde a productos
de la silvicultura y un 1,3% a producción
de madera y productos de madera. Los dos
sectores en conjunto presentan valores
cercanos al promedio de aporte que
registran otras actividades como el cultivo
de banano, café y cacao, que aportan con
un 2,6% al PIB (Barrantes et al., 2000).
En cuanto a la generación de empleo, las plantaciones forestales como fuente de empleo aporta
aproximadamente con 235.000
empleos (directos e indirectos) que
representan más del 8% de la
población económicamente activa,
este valor no contabiliza los empleos
generados en otros sectores debido al
encadenamiento productivo que
proporciona la industria forestal. Esto
evidencia la importancia del bosque
como fuente de creación de empleo,
así como el riesgo asociado que
implica la progresiva disminución de Figura 87. Subsecretaría de Producción Forestal recibe certificación ISO
la cobertura forestal (MAGAP. 2013). 9001-2015, con 64 mil hectáreas dentro del Programa de cultivo de especies
forestales.
El Ecuador como se manifestó en
líneas anteriores es apto para un sin número de especies forestales comerciales, presentando ventajas
competitivas y comparativas superiores a otras 38 latitudes, por sus condiciones de clima y suelo
significativamente favorables. Sin embargo, la Subsecretaría de Producción Forestal del MAGAP, mediante
Resolución N° 002 del 14 de enero del 2013, definió 17 especies como prioritarias para la reforestación en
el Ecuador (MAGAP. 2013).
67
Listado de especies forestales nativas y exóticas incentivadas en el Programa de incentivos del
MAGAP
Figura 88. Imagen de tabla del listado de especies forestales nativas y exóticas incentivadas.
68
Ecuador ubicado geográficamente en la mitad del mundo, le hace beneficiaria de condiciones muy
favorables, por su clima y suelos y luminosidad (horas luz), lo que favorece de manera significativa para el
desarrollo de todo tipo de cultivo agrícola y forestal, generando ventajas comparativas y competitivas que
proyectan al sector forestal productivo con gran potencial de crecimiento (Espinoza, 2014).
69
Capítulo X
Cambio de uso de suelo en Ecuador
70
Cambio de uso de suelo en Ecuador.
nivel mundial, regional y local existen diversos factores que influyen en el cambio del uso del
suelo, como los ambientales, demográficos, económicos y socioculturales, que en su conjunto
llegan a provocar un deterioro ambiental y pérdida de la diversidad biológica. Las investigaciones
de los procesos de cambio de uso del suelo (identificación y análisis de los factores e impactos en los
ecosistemas), incluyen además de la caracterización y diagnóstico de las diversas cubiertas (naturales y
artificiales), usos del suelo que comprenden un determinado territorio. En la actualidad para este tipo de
estudios se ha propuesto el uso de metodologías y procedimientos estadísticos innovadores, que se
complementan con técnicas de trabajo de campo, así como el uso y aplicación de herramientas de los
denominados sistemas de información geográfica y de cartografía automatizada (López, 2014).
71
actual, llega a la futura. Los procesos de Ordenamiento Territorial utilizan conceptos y metodologías en la
construcción de la prospectiva como visiones alternativas de futuros deseados, como escenarios alternativos
de futuros posibles y como métodos para transformar los deseos y conocimientos objetivos que sirvan para
guiar las actuaciones; requiere de capacidad creativa, concertación y un profundo conocimiento de los
resultados del diagnóstico y las diferentes variables que influyen en él. La prospectiva o construcción de
escenarios es el simulacro de un determinado momento y el camino que lleva a un estado final; de allí, la
importancia en los planes de Ordenamiento Territorial. Existen varios planteamientos metodológicos para
la construcción de escenarios. Este estudio se centra en analizar los cambios en el uso de suelo, componente
elemental y básico para la planificación, pues es allí donde se realizan todas las actividades humanas sujetas
a la dinámica natural e inducida que sufre el territorio y donde se realiza el ordenamiento como tal. El
cantón Cuenca es un territorio que está experimentando acelerados cambios de usos de suelo –de una
manera intensa y extensa– en su espacio territorial. Se puede apreciar el crecimiento de zonas destinadas
para vivienda, apertura de vías y el crecimiento de áreas productivas en las zonas de las laderas de montaña,
disminuyendo las zonas de páramo y bosques naturales e incrementándose áreas de riesgo por
deslizamientos o hundimientos. Por esta razón, es necesario generar posibles escenarios que ayuden a
establecer directrices para la toma de decisiones, en una adecuada planificación territorial. En esta
investigación se realiza un estudio sobre el cambio del uso de suelo, visto como un sistema complejo. Su
objeto es determinar relaciones dinámicas y modelar procesos de toma de decisiones, con el fin de
representar la dinámica territorial y, de esta manera, contribuir al entendimiento del sistema y al posible
planteamiento de políticas y soluciones que contrarresten los efectos negativos de la dinámica del cambio
del uso. El uso y cambio del suelo tiene una gran influencia sobre el desarrollo sostenible urbano. El
desarrollo de la ciudad viene acompañado por innumerables cambios morfológicos y funcionales del uso
de suelo y por dinámicas complejas de ocupación y competitividad (Pinos, 2016).
72
ANÁLISIS USO DE SUELO
Al analizar las superficies más importantes en relación al uso del suelo en el país, a partir de la serie
estadística de la ESPAC 2005 al 2012 se observa que la superficie dedicada a cultivos permanentes en estos
años presenta una tasa media de crecimiento positiva del 1,35%, siendo el 2009 el año de mayor crecimiento
con 6,73%. Durante el 2012 se observa un incremento del 0,25% respecto al año anterior, porcentaje mayor
al -0,86% del 2011.
La categoría cultivos transitorios entre el 2005 y 2012 presentan una tasa media de variación del -0,57%.
La variación más significativa se presentó en el 2006 con un decremento de 5,01%, hasta el 2008 se observa
un decrecimiento continuo, siendo este de -0,71%. En el 2012 registra un crecimiento de 3,93%, porcentaje
mayor al -1.01% del 2011.
Respecto a las categorías de pastos cultivados entre el 2005 y 2012 presentan una tasa media de variación
del -0,05%, en el 2012 se registra un incremento de 3,72% en referencia con el 2011; en el caso de pastos
naturales entre el 2005 y 2012 presentan una tasa media de variación del 0,25%, en el 2012 se observa un
incremento del 2,71% en relación al 2011.
La superficie ocupada por montes y bosques registró una tasa media anual del 0,19%, entre 2005 y 2012; y
en el último año se observa un incremento de 1,32% en relación al 2011.
Análisis estructural
A nivel nacional la mayor superficie de tierra cultivable está destinada a pastos cultivados con un 29,85%,
seguido por pastos naturales 11,96%, los cultivos permanentes representan un 11,62% y cultivos
transitorios y barbecho con el 8,58%. Además, podemos observar que un alto porcentaje del suelo está
dedicado a montes y bosques con 30,10%, tendencia porcentual presente en todas las regiones con más del
20% cada una.
Al analizar la estructura del suelo por regiones, se determina que, en la Región Costa, el 34,88% de las
tierras están dedicadas a pastos cultivados, el 20,99% a cultivos permanentes y el 13,57% a cultivos
transitorios y barbecho. Esta región se destaca en la producción de los cultivos de banano, café, cacao y
arroz, mismos que predominan por las condiciones del clima y suelo.
En la Región Sierra, se observa que el 22,75% y el 22,56% del suelo cultivable está dedicada a pastos
naturales y cultivados respectivamente; seguidos por un 7,43% de cultivos transitorios y 6,12% de
73
permanentes. A pesar de que los agricultores de esta zona se dedican a la siembra de gran variedad de
cultivos de ciclo corto, el amplio terreno ocupado por pastos cultivados y naturales que muestran que la
actividad ganadera es predominante en la región.
En la Región Oriental, por la naturaleza misma de la zona, se observa que montes y bosques representan el
52,77% del suelo total, seguido por el 34,25% de pastos cultivados y un 4,88% de superficie dedicada a
cultivos permanentes, al igual que en la Región Sierra, predomina la actividad ganadera (Chaves, 2012).
Figura 94. Superficie por categorías del uso del suelo 2012
Figura 95. Participación por categorías del uso del suelo 2012
Figura 96. Participación por categorías del uso del suelo 2012
74
Capítulo XI
Especies de flora en peligro de extinción
75
Especies de flora en peligro de extinción
La pérdida de las especies de plantas del planeta es dos veces mayor que el de otros seres vivos. Las
actividades antropogénicas como el aumento de la deforestación y la expansión de los cultivos ponen en
riesgo su conservación. En Ecuador, el 78% de las plantas endémicas están en algún grado de amenaza. Un
estudio publicado en la revista Nature Ecology & Evolution revela que en los últimos 250 años han
desaparecido 571 especies de plantas. Este número representa el doble del total de aves, anfibios y
mamíferos que se han extinguido en ese período.
Viéndose afectado no solo la flora, ya que ahí se albergan a una gran cantidad de organismos y son el
alimento de otros. La reducción de plantas significa también la disminución de animales, ya que todo
funciona como una cadena. La extinción de las plantas representa una pérdida para campos como el de la
medicina, ya que muchas contienen principios activos para tratar diferentes enfermedades. Incluso se cree
que estas especies podrían desaparecer sin ser descubiertas (Romoleroux, 2019).
Drymaria montícola
Familia: Caryophyllaceae
Hierba terrestre
Zona en Galápagos: Húmeda: 480–870 m
Provincias: Galápagos
Estado de conservación
Libro Rojo de las plantas endémicas del
Ecuador: Peligro crítico (CR)
Figura 97. Fotografía Drymaria montícola (Flor de la mañana de
piedra) y su distribución en el mapa de Ecuador .
Restringida a la Isla Santa Cruz, donde es común en la parte alta. No hay evidencia concreta de disminución
de la población, pero su área de distribución está siendo rápidamente invadida por árboles, arbustos y
gramíneas introducidos (Leon et al, 2019).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 1
Especímenes en museo: 5
Especímenes tropicos: 0
76
Maytenus jamesonii
Familia: Celastraceae
MAITEN
Arbusto
Bosque andino alto: 2500–3500 m
Provincias: Azuay, Pichincha
Estado de conservación Figura 98. Fotografía Maytenus jamesonii (Maiten) y su distribución en el
mapa de Ecuador .
Libro Rojo de las plantas endémicas del
Ecuador: En peligro (EN)
Originalmente descrita en base a una colección de W. Jameson del siglo XIX, cerca de Quito. Una segunda
colección se realizó en Azuay en 1945 y desde entonces no existe ningún registro adicional. Hasta ahora
no está confirmada su presencia en ningún área protegida del país (Santiana et al, 20017).
Hirtella pauciflora
Familia: Chrysobalanaceae
POCAS FLORES
Árbol
Estado de conservación
Especie con dos poblaciones conocidas, separadas por 40 km, y localizadas en la zona de transición entre
el bosque litoral húmedo y semideciduo. El hábitat original de esta especie se encuentra mayormente
destruido. E. Little la colectó por primera vez en 1943 en el pueblo de Pichilingue, 7,5 km al suroeste de
Quevedo, y C. Dodson, A. Gentry y F. Valverde la redescubrieron hace 25 años en su inventario del bosque
77
de Jauneche. Desde esa época no se ha vuelto a colectar. No está protegida por el SNAP y su supervivencia
en el tiempo es cuestionable (Santiana et al, 20017).
Clusia plurivalvis
Familia: Clusiaceae
Árbol
Provincias: Chimborazo
Figura 100. Fotografía Clusia plurivalvis y su distribución en el mapa de
Estado de conservación Ecuador .
Otra de las muchas especies endémicas conocidas sólo por colecciones hechas en los alrededores de Huigra
en la década de los cuarenta. No está claro si las dos colecciones provienen de la misma población o no. No
existen registros de la especie dentro del SNAP (Pipoly, 2017).
Connarus ecuadorensis
Familia: Connaraceae
PEPA DE PAVA
Arbusto o arbolito
Estado de conservación
Libro Rojo de las plantas endémicas del Ecuador: Peligro crítico (CR)
Connarus ecuadorensis era conocida a partir de un solo espécimen con flores, colectado por Eggers en 1892,
en los bosques de Balao, prov. del Guayas, los cuales ya no existen. Juzgando por los especimenes que
reposan en los herbarios, desde la década de los 80 hasta la actualidad cuatro poblaciones adicionales de
78
esta especie han sido encontradas. Dentro del SNAP, Connarus ecuadorensis ocurre en la Reserva Ecológica
Manglares Churute. Una segunda población existe en la Estación Biológica Bilsa. Fuera del SNAP, esta
especie se encuentra amenazada por la deforestación. Connarus ecuadorensis ha sido colectada con frutos
entre diciembre y marzo. Por sus semillas de arilo carnoso, se presume que es dispersada por aves (Cornejo,
2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 3
Especímenes en museo: 4
Ipomoea chrysocalyx
Familia: Convolvulaceae
CAMPANITA
Bejuco
Estado de conservación
Especie restringida al suroeste del país, donde existen dos poblaciones, una entre Zaruma y Salatí, de donde
proviene la colección tipo de Asplund realizada en 1955 y posteriormente la colección de Harling &
Andersson en 1974, la otra localidad se encuentra al este de El Limón en Loja. Aunque los bejucos
proliferan en zonas alteradas, no existen nuevos registros y el área de ocupación es reducida, por lo que
consideramos que la categoría de amenaza asignada por la UICN en 1994, En Peligro, es la adecuada
(Santiana et al, 20017).
79
Weinmannia costulata
Familia: Cunoniaceae
Arbusto o arbolito
Estado de conservación
Se conoce por dos poblaciones restringidas a las estribaciones surorientales. La primera fue reportada en
1943 entre Campanas y Arenillas, a lo largo del río Tintas, aproximadamente 50 km al sureste de El Pan; y
la segunda en el km 65 de la vía Bella Unión-Cuenca. Ninguna de las poblaciones fue registrada dentro del
SNAP. La especie está restringida a un área pequeña actualmente sometida a la deforestación. Localmente
conocida como “sarrar“(Santiana et al, 20017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 4
Cuscuta prismatica
Familia: Cuscutaceae
CABELLO DE ÁNGEL
Bejuco parásito
Provincias: Guayas
Estado de conservación
80
Especie conocida solamente de dos poblaciones: una en las cercanías de Guayaquil (colecciones de hace
más de 100 años) y otra en la Isla Puná (colecciones de 1987). También fue colectada por J. Rémy, L. Mille
y A. Hitchcock a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, pero los sitios de colección exactos son
desconocidos. La población encontrada en la Isla Puná sugiere que la especie debe persistir aún en hábitats
continentales poco degradados, tal vez no en Guayaquil mismo pero sí en el Parque Nacional Machalilla o
en los bosques semideciduos de la Reserva Ecológica Manglares-Churute. De hecho, por su peculiar forma
de vida (parásita), pudo haber sido pasada por alto por muchos colectores. Su amenaza potencial sería la
falta de huéspedes si ocurriera una intensa deforestación del bosque seco (Santiana et al, 20017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 1
Asplundia domingensis
Familia: Cyclanthaceae
COLA DE CABALLO
Bejuco
Registrada en dos localidades del occidente de la provincia de Pichincha: en la Hacienda Zaracay, en Santo
Domingo de los Tsáchilas, en la reserva privada ENDESA y en áreas cercanas a Pedro Vicente Maldonado.
Potencialmente en la Reserva Ecológica Cotacachi-Cayapas. La expansión del límite de las tierras agrícolas
en la zona constituye su mayor amenaza (Santiana et al, 20017).
81
Thelypteris macra
Familia: Thelypteridaceae
HELECHO
Helecho terrestre
Provincias: Azuay
Esta especie se ha encontrado solamente en la región de El Pan, en la provincia de Azuay. Esta zona está
muy afectada por las actividades ganaderas y agrícolas, con las consiguientes quemas. No está dentro del
SNAP, pero posiblemente se extienda su distribución hacia el Parque Nacional Sangay (Navarrete, 2017).
Huperzia hastata
Familia: Lycopodiaceae
Helecho terrestre
Páramo: 3000–3500 m
Se conoce en dos localidades cerca de Amaluza en la provincia de Loja. Esta especie parece estar restringida
a estos páramos. El pastoreo y consiguientes quemas son frecuentes en esta zona (Navarrete, 2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 2
82
Phoradendron canzacotoi
Familia: Viscaceae
Arbusto parásito
Se ha registrado tres poblaciones. Una al norte en el Cerro Las Golondrinas, otra a lo largo de los caminos
nuevo y viejo Quito-Santo Domingo de los Tsáchilas y finalmente en los alrededores del Río Baba, en Los
Ríos. Esta especie fue reportada como parásita creciendo en Citrus (Rutaceae) y Meliaceae. Potencialmente
en las reservas ecológicas Cotacachi-Cayapas o Los Ilinizas. Su mayor amenaza es la deforestación que ha
transformado su hábitat reduciéndolo a pequeños fragmentos de bosque especialmente en quebradas;
además la población del río Baba está amenzada por la construcción de la presa que lleva el nombre de esta
localidad. Consideramos que la especie actualmente está En Peligro (Santiana et al, 20017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 4
Serjania brevipes
Familia: Sapindaceae
BEJUCO DE CORRALES
Bejuco
Estado de conservación
83
Libro Rojo de las plantas endémicas del Ecuador: En peligro (EN)
Para esta especie se han registrado seis poblaciones en bosque litoral seco. En la provincia de Guayas se la
ha colectado en la Isla Puná, entre las localidades de Bellavista y Campo Alegre y los alrededores de Puná
Nueva. También se tienen registros en la carretera Salinas-Guayaquil, en los alrededores de El Progreso y
en el bosque de Capeira. En Manabí se encuentra al pie del cerro Montecristi. No se encuentra registrada
en el SNAP, pero potencialmente podría estar en el Bosque Protector Cerro Blanco y otros remanentes de
bosque seco. Se desconocen los detalles de la población reportada para Imbabura. Sus principales amenazas
son la destrucción del bosque para extracción de madera y la apertura de carreteras (Santiana et al, 20017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 4
Anthopterus gentryi
Familia: Ericaceae
Estado de conservación
Esta especie tiene una extensión de presencia de ca. 500 km2, con poblaciones en las cordilleras del Cóndor
y Cutucú. La cordillera de Cutucú y la del Cóndor tienen bosques nativos relativamente abundantes y poco
explorados que corren riesgo de ser deforestados por colonos. Si se ejecuta la reserva de El Cóndor, ésta
especie podría ser beneficiada (Pedraza, 2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 1
84
Erythrina smithiana
Familia: Fabaceae
PEPITA COLORADO
Árbol
Estado de conservación
Este árbol es abundante en la región húmeda de la costa ecuatoriana, donde se cultiva como "cerca viva" a
lo largo de las carreteras. Por ejemplo, está junto a la carretera entre Santo Domingo de los Tsáchilas y El
Carmen. Evidentemente, esta especie fue un componente del bosque original en esa región; pero son muy
pocos los remanentes de bosque que aún existen, y muy pocas colecciones de esta especie fueron realizadas
en bosque natural, casi todos los especímenes fueron colectados de cercas vivas. (En América Central, hay
muchas otras especies de Erythrina que son utilizadas en cercas vivas, y en situaciones similares a E.
smithiana, casi no existen en poblaciones naturales). Está presente dentro del Parque Nacional Machalilla.
Aunque la especie sea común en cercas vivas, consideramos que las pocas poblaciones naturales se
encuentran aisladas en pequeños remanentes resultantes de la deforestación. Existen varias colecciones
realizadas en Perú que deben ser confirmadas. Nombre común: "porotillo" (Neill, D. 2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 15
Aphelandra guayasii
Acanthaceae
Arbusto
Bosque litoral seco: 0–500 m
Es localmente frecuente en el sendero Canoa del Bosque Protector Cerro Blanco, también se encuentra en
el bosque adyacente de Cerro Azul. A pesar de su abundancia local, es considerada En Peligro por la total
alteración de su hábitat, especialmente durante las últimas cinco décadas. Entre sus principales amenazas
están la deforestación, ampliación de la frontera agrícola, los asentamientos humanos y la minería.
Potencialmente ornamental (Cornejo et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 1
Especímenes en museo: 1
Bomarea graminifolia
Sodiro
Alstroemeriaceae
con hojas de gramíneas
Bejuco
Bosque andino alto: 2500–3000 m
Provincias: Chimborazo, Morona
Santiago, Napo, Pichincha
Estado de conservación
Figura 113. Fotografía de Bomarea graminifolia y su distribución en
Libro Rojo de las plantas endémicas del el mapa de Ecuador .
Ecuador: En peligro (EN)
Hasta el año 2000 era conocida únicamente por la colección tipo. realizada por L. Sodiro en los años
anteriores a 1908, en el Volcán Atacazo. Harling y Neuendorf reportan en el 2003 colecciones en los límites
de Chimborazo y Morona Santiago, en los alrededores de Cuspipaccha y Huamboya, así como en la
provincia del Napo en la Cordillera de los Llanganates. Es posible que se la encuentre en la Reserva de
Producción de Fauna Chimborazo. Sus amenazas principales son la transformación de la vegetación nativa
para pastos y el manejo de pino y eucalipto. Por los nuevos registros ya no es considerada una especie En
Peligro Crítico (Mogollón et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 4
86
Especímenes en museo: 5
Especímenes trópicos: 0
Annona ecuadorensis
R.E. Fr.
Annonaceae
Árbol
Bosque litoral húmedo: 200 m
Provincias: Guayas
Estado de conservación
Figura 114. Fotografía de Annona ecuadorensis y su distribución en el
Libro Rojo de las plantas endémicas del mapa de Ecuador .
Se conoce únicamente por una colección de E. Asplund en Cerro Azul efectuada en 1955. No ha sido
registrada dentro del SNAP y dado que gran parte ha sido transformado en canteras es probable que la
especie se encuentre en grave riesgo de extinción o haya desaparecido definitivamente del lugar original de
colección. En 1998 esta especie fue clasificada como Vulnerable (Oldfield et al. 1998), una categoría
totalmente equivocada a juzgar por la destrucción casi total de su hábitat durante los últimos siglos. Esta
especie no ha vuelto a ser registrada desde su colección en 1955, por lo que se asume que las poblaciones
de esta especie, si existen, estarían muy fragmentadas y reducidas, por lo cual se considera severamente
amenazada en la actualidad (Muriel et al,2017).
Phaedranassa tunguraguae
Ravenna
Amaryllidaceae
Hierba terrestre
Estado de conservación
87
Libro Rojo de las plantas endémicas del Ecuador: En peligro (EN)
A pesar de buscar intensivamente a esta especie durante 1997-2000, todavía está restringida a la cuenca del
río Pastaza. Las poblaciones d se localizan desde el cerro Pondoa en las faldas del volcán Tungurahua, hasta
la localidad de río Negro en la carretera Baños-Puyo. Habitan zonas alteradas como bordes de caminos,
pastizales y taludes, formando agrupaciones de al menos 100 individuos. Basado en marcadores
moleculares, cinco poblaciones fueron identificadas (Oleas 2004), reduciendo en la mitad al número de
poblaciones descritas en la versión anterior de este libro (Oleas 2000). Potencialmente podrían encontrarse
poblaciones en la parte alta del Parque Nacional Sangay. Sus poblaciones se han visto afectadas por la
ampliación de la carretera Baños-Puyo. Otra amenaza potencial es la explotación comercial de la planta en
el exterior. Se desconoce si los bulbos comercializados son silvestres o cultivados (Oleas et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 4
Especímenes en museo: 11
Tapirira
rubrinervis
Barfod
Anacardiaceae
Árbol
Bosque litoral húmedo hasta andino
bajo: 250–3200m
Provincias: Carchi, Esmeraldas Figura 116. Fotografía de Tapirira rubrinervis y su distribución en el mapa de
Ecuador .
Estado de conservación
Árbol siempreverde registrado en cinco poblaciones que crece desde el bosque litoral húmedo hasta el
bosque montano alto. Ha sido colectada dentro de la Reserva Étnica Awa en bosque primario, en donde
crece en suelo pantanoso. Las colecciones se han realizado principalmente en la parte nor-oriental de la
reserva. Esta especie es usada como leña por las comunidades locales. Su área de distribución potencial
incluye la Reserva Ecológica Cotacachi-Cayapas. Su hábitat está amenazado principalmente por la
colonización y el avance de las empresas de extracción de madera. Potencialmente se encuentra en
88
Colombia. Conocida como “sajo de arriba” en Esmeraldas y “cuilde” en Carchi. Se mantiene la categoría
de amenaza porque consideramos que su hábitat está severamente fragmentado y el único registro nuevo es
en Chical, Sector Gualpi a 3200 m, con la colección de Galo Tipaz et al. 1031 (QCNE) (Santiana et
al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 6
Especímenes en museo: 10
Anthurium bimarginatum
Sodiro
Araceae
Hierba hemiepífita
Estado de conservación
Libro Rojo de las plantas endémicas del Ecuador: Peligro crítico (CR)
Especie conocida por una sola población, con dos colecciones realizadas en 1903 por Sodiro en el volcán
Pululahua-Yanahurco (ahora parte de la Reserva Geobotánica Pululahua). La cercanía de la reserva a la
ciudad de Quito puede presumirse como la principal amenaza a la especie (Croat et al, 2017).
Descripción de poblaciones
Especímenes trópicos: 1
89
Matelea orthoneura
Morillo
Asclepiadaceae
Bejuco
Bosque litoral húmedo: 0–200 m
Provincias: Manabí
Estado de conservación
Figura 118. Fotografía de Matelea orthoneura y su distribución en el
mapa de Ecuador .
Libro Rojo de las plantas endémicas del
Ecuador: Peligro crítico (CR)
Colectada por primera vez en 1893 pero descrita por taxónomos un siglo después. La colección antigua se
realizó en una finca al norte de San Vicente. Otro registro es del año 1985, en la carretera Portoviejo-
Pichincha, tres kilómetros al este de San Plácido, en bosque secundario semideciduo. No existen registros
dentro del SNAP. Considerada En Peligro Crítico por la reducción drástica de su hábitat durante los últimos
50 años (Pitman et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 1
Especímenes en museo: 1
Aiphanes grandis
Arecaceae
Árbol
Bosque andino bajo hasta bosque andino
alto: 1000–3000 m
Provincias: Bolívar, El
Oro, Loja, Pichincha Figura 119. Fotografía de Aiphanes grandis y su distribución en el
mapa de Ecuador .
Estado de conservación
90
Esta especie es conocida de cuatro localidades aisladas, ubicadas en las estribaciones andinas occidentales.
Poblaciones de esta palmera son reportadas en la antigua vía Quito-Santo Domingo de los Tsáchilas, en la
localidad de Sambotambo y Orianga, y en las cercanías de Guaranda en la provincia de Bolívar. Ninguna
de sus poblaciones conocidas en la actualidad está protegida dentro del SNAP, pero potencialmente podrían
registrarse nuevas poblaciones dentro de la Reserva Ecológica Los Ilinizas. El hábitat de está especie se
encuentra seriamente afectado por la deforestación. Recientemente ha sido propuesta como una de las 50
palmas más amenazadas en el mundo por el Grupo especialista de Palmas de la UICN (Montúfar et
al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 5
Especímenes en museo: 5
Buddleja ibarrensis
Buddlejaceae
Arbusto
Bosque andino alto: 2200 m
Figura 120. Fotografía del ejemplar en herbario de Buddleja
Provincias: Imbabura ibarrensis y su distribución en el mapa de Ecuador .
Estado de conservación
Se conoce de dos localidades cercanas: la colección tipo, de Rivet, se realizó en el camino de Aluburo a
Ibarra y la otra colección, de Misael Acosta Solís, en El Olivo, Imbabura. Es necesario buscar a esta especie
para evaluar sus poblaciones. La deforestación podría acabar con ella si su distribución es tan limitada como
parece en base a las colecciones existentes (Norman et al,2017).
91
Styloceras
kunthianum
Buxaceae
Árbol
Provincias: Chimborazo,
Imbabura, Tungurahua
Figura 121. Ilustración de Styloceras kunthianum y su distribución en el mapa
Estado de conservación
de Ecuador .
Esta especie ha sido encontrada en cinco localidades difrentes; tres de ellas incluído el tipo, recolectado por
Humboldt y Bonpland en la base del volcán Tungurahua en junio de 1802, otra colectada cerca de Penipe,
otra en los alreddores de Pelileo y un cuarto espécimen proveniente de las faldas del monte Altar podrían
corresponder a una sola población ahora dividida por la destrucción de los bosques. Otra población está
representada por dos especimenes provenientes de Imbabura, aparentemente dentro de la Reserva Ecológica
Cayambe-Coca. El aréa de distribución de esta especie parece ser relativamente amplia, sin embargo los
árboles se han encontrado solamente en bosque primario por lo cual la deforestación es una amenaza
importante (León et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 2
Especímenes en museo: 2
92
Opuntia megasperma
Familia:
Cactaceae
Arbusto o árbol
Zona en Galápagos: Seca. Vegetación
abierta, arbustiva, bosque seco: 0–500
m
Provincias: Galápagos
Especie conocida de tres variedades (megasperma, mesophytica, orientalis) de las islas Española (y cuatro
islotes), Floreana (y cinco islotes) y San Cristóbal. Ha disminuido mucho en las tres islas grandes debido a
animales ferales y la conversión de su hábitat a la agricultura. Desde la erradicación de las cabras de
Española, no se han re-establecido sus poblaciones reducidas y extintas. Las variedades megasperma y
orientalis crecen en suelos delgados sobre rocas y hendiduras de los flujos de lava; mesophytica se
desarrolla en áreas de mayor altitud (250 m) de la Isla San Cristóbal (Madsen et al,2017).
Vasconcellea
omnilingua
Caricaceae
Arbusto
Bosque andino alto: 2000–2500 m
Provincias: El Oro
Estado de conservación
93
La única población conocida es la del tipo, colectado en 1943 por J. Steyermark en las quebradas boscosas
que llegan al río Palma, afluente del río Amarillo, al noreste de Zaruma. En esta zona del país, donde no
existe ningún área oficialmente protegida, la deforestación es la amenaza más importante, junto a la
ampliación de la frontera agrícola. Es probable que existan otras poblaciones en los bosques remanentes de
la cordillera de Tioloma. Localmente se conoce como “col de monte” (Hernández et al,2017).
Eucrosia mirabilis
Amaryllidaceae
Hierba terrestre
Estado de conservación
El basiónimo de esta especie fue descrito en 1869 como endémica del Perú y catalogada como Extinta a
nivel mundial por el Libro Rojo de la UICN de 1997 (Walter & Gillett 1998). Hasta la fecha, no han sido
encontrados especimenes en Perú; sin embargo, en el Ecuador ha sido localizada en tres poblaciones, dos
en la provincia de Loja, cerca a Catamayo y una en El Oro. Dichas poblaciones no se encuentran en el
SNAP. Las amenazas para esta especie son la agricultura y la minería (Oleas et al,2017).
Descripción de poblaciones
Número de poblaciones: 3
Especímenes en museo: 3
94
Draba violacea
Brassicaceae
Subarbusto
Superpáramo: 4000–>4500 m
Estado de conservación
Anteriormente se conocía por nueve colecciones, la del tipo y otra más de A. Humboldt y A. Bonpland “en
Ecuador” y siete de W. Jameson, quien dice en su 1ynopsis Plantarum Aequatorienisium (1865) “Hab.
Azuai, en los lugares pedregosos a 14509 pies de altura.” Se asume que estas representan una sola
población, tal vez dentro del Parque Nacional Cajas donde se realizó otra colección más en la época de los
80. Además existe otra colección en Cañar, realizada por Kohn y depositada en el MO que dice estar en los
alrededores de Ingapirca pero cuyas coordenadas corresponden a los alrededores de la Laguna Culebrillas.
Por su escasez y limitada distribución se consiera En Peligro. Antes de 1991 se incluía a D. steyermarkii
dentro de este taxón, con el nombre de D. violacea var. lehmanniana. Es probable que la colección en el
Herbario QCNE corresponda a D. steyermarkii (Al-Shehbaz et al,2017).
Descripción de poblaciones
Especímenes trópicos: 3
95
Capítulo XII
Especies de fauna en peligro de extinción
96
Especies de fauna en peligro de extinción
El comercio de la vida silvestre es la venta o intercambio de recursos de la flora o fauna silvestre e involucra
plantas o animales vivos y demás productos y derivados de estos. Este comercio se realiza a nivel nacional
e internacional en todo el mundo, de forma legal e ilegal.
• el aprovechamiento,
• el transporte,
• el comercio ilegal,
• el contrabando,
• la caza furtiva y
• la captura o la recolección de las especies de la fauna o de sus productos o derivados,
en contravención con las normas legales y aplicables para dichas actividades según el marco
legal vigente en cada país.
La fauna silvestre es objeto de comercio por múltiples razones. La
principal es para alimento humano. Se estima que al menos la
quinta parte de la proteína animal proviene de la vida silvestre en
más de 60 países y que la “carne de monte” aún continúa siendo
la primera fuente de proteína animal para los pueblos de los
bosques tropicales. Otras razones incluyen la obtención de materia
prima para vestimenta, ornamentos y medicina tradicional.
Grafico 126: Captura de animales.
Finalmente, existen usos religiosos y espirituales, tenencia de
mascotas y colecciones, además de la obtención de recursos económicos.
El tráfico de la vida silvestre es más intenso en países tropicales por
la existencia de una mayor biodiversidad, más endemismo y una
menor aplicación de la ley. En general, el tráfico ilegal de la fauna
está articulado con otras formas de tráfico ilegal y lavado de dinero.
Actualmente hay una demanda creciente de la vida silvestre desde
el Asia, Europa y los Estados Unidos. Para poner en contexto el
significado real de este tipo de tráfico ilegal se puede mencionar que Gráfico 127: Trafico de animales.
97
más rigurosas que las aplicadas en el tráfico de drogas o de armas. A medida que crece la población humana
en todo el mundo, crece también la demanda por la vida silvestre.
Según la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA, s.f.) y WCS, los animales más
afectados son primates, pericos, tucanes, tortugas, serpientes y cocodrilos. De esta misma región, las
especies más cotizadas como carne de monte son ungulados, primates grandes, mamíferos marinos, grandes
roedores, armadillos, pavas y tortugas de río.
TRAFFIC (2015) reportó que el comercio ilegal de la vida silvestre es la tercera actividad ilegal a nivel
mundial, después del tráfico de armas y de drogas. Por ser una actividad ilegal, no se conocen cifras exactas
del valor económico derivado de esta actividad. Cifras referenciales obtenidas para el año 2010 indican que
al menos un total comprendido entre 10.000 millones a 20.000 millones de dólares genera este tipo de
actividad (Jácome, 2017).
98
El Ecuador es un país con una alta biodiversidad, que incluye 938 especies de peces marinos, 951 peces de
agua dulce, 566 especies de anfibios, 454 especies de reptiles, 1673 especies de aves, 430 especies de
mamíferos y 17.748 plantas nativas.
El ser humano, milenariamente, ha valorado y utilizado la vida silvestre por su importancia fundamental
para su subsistencia. Inicialmente el uso de la fauna estaba destinado exclusivamente para satisfacer las
necesidades básicas familiares. A medida que se desarrollaba el comercio entre comunidades y pueblos, la
fauna también fue objeto de mayor intercambio y venta. Posteriormente con la colonización y el desarrollo
de los sistemas productivos actuales, las plantas y los animales son considerados como una fuente muy
importante de recursos monetarios en la economía familiar, regional y mundial.
A escala mundial, uno de los principales factores para la pérdida de biodiversidad faunística es el tráfico
ilegal y el comercio de animales extraídos de su hábitat. Este comercio genera un importante rubro
económico, que alcanza el tercer lugar de rentabilidad de los negocios ilícitos, a la par de la trata de
personas, después del narcotráfico y el tráfico de armas.
A pesar de su gravedad, el tráfico de vida silvestre se invisibiliza en nuestro país por la ausencia de
estadísticas confiables, hecho que beneficia principalmente a los intermediarios, traficantes y comerciantes
nacionales e internacionales. El comercio ilegal de la fauna o de sus partes constitutivas y el uso de la misma
con fines de auto- consumo han colocado a múltiples especies en peligro de extinguirse localmente, al
reducir alarmantemente el tamaño de sus poblaciones.
La legislación ecuatoriana prohíbe la comercialización de la vida silvestre, y el Art. 247 del Código
Orgánico Integral Penal protege a todas las especies de vida silvestre de su comercialización ilegal, con una
pena de uno a tres años de privación de la libertad a quien realice este tipo de actividades.
A pesar de la vigencia de las leyes y de los controles efectuados a nivel nacional, el tráfico de la vida
silvestre, en especial el de la fauna, perdura en el tiempo, originado principalmente por la demanda de
99
animales silvestres y/o sus elementos constitutivos por parte de los sectores urbanos nacionales e
internacionales.
En las provincias de la región amazónica se realiza el mayor tráfico de carne de monte de todo el país,
principalmente en Orellana y Sucumbíos, que juntas abarcan el 69% del tráfico de carne de monte a nivel
nacional. Uno de los casos más evidentes de este tráfico era el del mercado de Pompeya, ubicado a las
orillas del río Napo en la provincia de Orellana. En este sitio, durante un estudio realizado entre los años
2005 al 2007, se registraron 1644 transacciones comerciales de carne de monte correspondientes a 11.717
kg de carne de mamíferos y de pescado.
100
La cacería comercial trae consigo graves problemas que afectan no solamente a las poblaciones de los
grandes ungulados, monos, roedores, crácidos y reptiles, sino también a la dinámica ecológica del bosque
y la seguridad alimenticia de las comunidades originarias, que requieren de la carne de animales silvestres
como base proteica de su dieta alimenticia, produciéndose un gran cambio cultural y el consecuente
desequilibrio ecosistémico (Jácome, 2017).
Los reptiles son los primeros vertebrados que pudieron vivir en ambientes secos, al tener su piel cubierta
de escamas o placas óseas dérmicas que protegen su cuerpo y evitan la deshidratación. Son también los
101
primeros vertebrados que ponen huevos protegidos de una cubierta calcárea en ambientes secos. Además,
son ectotérmicos, es decir, pueden regular su temperatura en función de la temperatura ambiente.
En el Ecuador, existen 454 especies de reptiles, constituidas por tres culebras ciegas, cinco caimanes y
cocodrilos, 190 saurios (lagartijas, salamanquesas, geckos, iguanas enanas y grandes, lagartijas arborícolas,
lagartijas de lava y guacsas), 224 serpientes no venenosas y venenosas y 32 tortugas marinas, dulceacuícolas
y terrestres. Esta cifra está en constante crecimiento en la medida de que se intensifican los estudios y se
exploran nuevos sitios dentro de la geografía del país, lo cual permite descubrir nuevas especies. Los reptiles
son más abundantes en ambientes cálidos. A medida que aumenta la altura y se reduce la temperatura, el
número de especies decrece.
El 25,1 % de las especies de reptiles actualmente registradas son endémicas, con una mayor concentración
de endemismos en tortugas, serpientes y lagartijas. El endemismo entre los reptiles es mayor a nivel de la
cordillera de los Andes y en las zonas del páramo.
En la medicina, los venenos producidos por las serpientes son de alta importancia. Otras especies, sobre
todo de saurios, tortugas y cocodrilos ancestralmente han sido fuente de alimento para las comunidades
locales, y últimamente son también parte del biocomercio como mascotas en el mercado internacional.
De acuerdo con Carrillo et al., (2005), del 100% de especies de reptiles del Ecuador, un 19,95% de las
especies están en la categoría de Casi Amenazada, un 14,21% se clasifica como Vulnerable, un 10,47% se
cataloga como En Peligro y un 2,24% está en la categoría de Peligro Crítico. Además, una especie se
cataloga como Extinta en Vida Silvestre, un 0,25%. Las especies que registran categorías de mayor amenaza
son las boas, tortugas y caimanes, posiblemente por ser animales más grandes que han sido sometidos a una
intensa presión de caza desde hace siglos.
En la presente guía se incluyen como especies sujetas a mayor tráfico cuatro serpientes constrictoras no
venenosas, tres caimanes, un cocodrilo, ocho tortugas dulceacuícolas, una tortuga terrestre y una iguana.
102
Figura 132: Esquema corporal de caimanes, cocodrilos e iguanas
103
COCODRILO DE LA COSTA O LAGARTO (Crocodylus acutus)
Figura 135: Cocodrilo en su habitad Figura 136: Cocodrilo camuflado para cazar. Figura 137: Apareamiento de los cocodrilos.
Descripción
Actividad:
Generalmente nocturnos.
104
ANACONDA (Eunectes murinus)
Figura 140: Anaconda cazando Figura 141: Anaconda después de cazar. Figura 142: Apareamiento de las anacondas.
Descripción:
Actividad:
Principalmente nocturnas.
105
CHARAPA GRANDE O JATUN CHARAPA (Podocnemis expansa)
Figura 145: Charapa grande en su habitad Figura 146: Charapa apareándose. Figura 147: Charapa reproducidas.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
106
TORTUGA PINTADILLA O TORTUGA DE CABEZA PINTADA (Rhinoclemmys melanosterna)
Figura 151: Tortuga pintadilla en su habitad Figura 152: Tortuga pintadilla apareándose. Figura 153: Tortuga pintadilla
comiendo.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
107
TORTUGA PINTADILLA O TORTUGA BLANCA (Rhinoclemmys nasuta)
Figura 156: Tortuga pintadilla en su habitad Figura 157: Tortuga pintadilla apareándose. Figura 158: Tortuga pintadilla
comiendo.
Descripción:
Actividad:
Principalmente nocturnos.
108
TORTUGA TAPARRABO O TAPACULO (Kinosternon leucostomum)
Figura 161: Tortuga taparrabo en su habitad Figura 162: Tortuga taparrabo comiendo. Figura 163: Tortuga taparrabo
apareándose.
Descripción:
Actividad:
Principalmente nocturnos.
109
AVES
Las aves son animales vertebrados cuyas características que las diferencian de otros grupos son el presentar
un cuerpo cubierto de plumas, tener mandíbulas modificadas en un pico córneo sin dientes; poseer alas
adaptadas para el vuelo; tener un esqueleto de huesos neumáticos, además de poner huevos con abundante
vitelo, cubiertos por cáscaras calcáreas duras.
En el Ecuador se han registrado 1673 especies de aves. Existe un predominio de los pájaros cantores del
orden Passeriformes. En cuanto a su patrón de abundancia, las aves, al igual que los reptiles, son más
110
abundantes en los bosques tropicales del país. El Ecuador se reportan catorce especies de aves endémicas,
todas de distribución muy restringida.
Las aves cumplen funciones ecológicas claves en los ecosistemas donde habitan al ser parte de las cadenas
alimenticias, ya sea como presas o depredadores. Además, se encargan de polinizar la flora local y son
extraordinarias controladoras de insectos u otros invertebrados que podrían ser plagas. Así mismo, desde la
antigüedad han sido un grupo importante, luego de los mamíferos, como fuente de proteína para la
subsistencia familiar.
En el Libro Rojo de las Aves del Ecuador se reportan cinco especies de aves como Extintas en el País y
otras 245 especies en diferentes categorías de amenaza: 16 especies En Peligro Crítico, 47 especies
catalogadas En Peligro, 98 Vulnerables, 70 Casi Amenazadas y 14 con Datos Insuficientes, incluyendo un
total aproximado de un 10% de toda la avifauna del país. Según esta obra, los órdenes Galliformes (pavones
y pavas) y Psittaciformes (guacamayos, loros y pericos) contienen más especies incluidas en mayores
categorías de amenaza, por la caza, la pérdida del hábitat y el tráfico ilícito.
En la presente guía se incluye un total de 49 especies de aves sujetas a mayor tráfico a escala nacional. De
esta cifra, 10 especies son pavas y pavones, 21 son guacamayos, loros y pericos; 15 son tucanes, además
del trompetero, el quilico y el yumbo.
111
Figura 166: Silueta corporal de la pava silvosa común (Pipile cumanensis)
112
GUACAMAYO VERDE O GUACAMAYO MILITAR (Ara militaris)
Figura 168: Guacamayo verde en su habitad 169: Guacamayo verde comiendo. Figura 170: Guacamayo verde
apareándose.
Descripción:
Diurnos.
De 600 a 1500 m.
113
GUACAMAYO DE GUAYAQUIL O GUACAMAYO VERDE MAYOR (Ara ambiguus)
Figura 173: Guacamayo verde mayor en su habitad 174: Guacamayo verde mayor apareándose. Figura 175: Guacamayo
verde mayor comiendo.
Descripción:
Figura 176: guacamayo de guayaquil o Se trafican ejemplares vivos y también sus plumas.
guacamayo verde mayor (Ara ambiguus)
Actividad:
Diurnos.
114
LORA FRENTIRROJA (Amazona autumnalis)
Figura 178: Lora Frentirroja en su habitad 179: Lora Frentirroja comiendo Figura 180: Lora Frentirroja apareándose.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
115
MAMÍFEROS
Los mamíferos son un grupo de vertebrados vivíparos cuyas características externas más notables son la
presencia de pelo cubriendo su cuerpo y de glándulas sudoríparas, odoríferas, sebáceas y mamarias en la
116
piel. Sus glándulas mamarias producen leche para alimentar a sus crías, a las que proporcionan cuidados
especiales luego del nacimiento.
Un total de 427 especies de mamíferos, de 51 familias zoológicas representadas con 205 géneros,
conforman la diversidad del Ecuador. Predominan los murciélagos (39,8% del total de especies) y los
roedores (27,2%). El mayor número de especies de mamíferos habita en los Pisos Subtropicales y
Tropicales de Oriente y Occidente.
De acuerdo a MammaliaWeb de Ecuador, un total de 41 especies (9,6% del total de especies) son
endémicas, incluyendo a roedores, murciélagos y, en menor cantidad, carnívoros, ratones marsupiales y
musarañas.
Los mamíferos están distribuidos ampliamente y son muy diversos en todo el país, con notables diferencias
en cuanto a su morfología, biología, ecología y comportamiento. Además de su importancia ecológica,
clave para el funcionamiento de los distintos ecosistemas, son la mayor fuente de proteína de las
comunidades locales, la que se obtiene mediante la caza y su crianza. Inclusive, algunas especies locales de
camélidos, han sido sometidas desde la antigüedad a procesos de domesticación en los Andes para la
obtención de carne y lana. Los mamíferos también son parte del comercio de mascotas a nivel nacional e
internacional. En la actualidad, por factores tales como la explotación intensiva, la pérdida del hábitat y la
contaminación, muchas especies en el mundo y en el país están al borde de la extinción.
101 especies (una de cada cuatro especies de mamíferos locales o el 25% del total registrado) están
amenazadas y han sido incluidas en las categorías de En Peligro Crítico, En Peligro y Vulnerable. Estas
cifras posicionan al Ecuador en el primer lugar en Latinoamérica y segundo a escala mundial, por el número
de especies bajo amenaza. De los 14 órdenes de mamíferos registrados, 12 incluyen especies amenazadas
o extintas, siendo los roedores, murciélagos y carnívoros los grupos con mayor número de especies bajo
amenaza, por la destrucción y conversión de los hábitats, la caza, la contaminación y el comercio ilícito de
especies.
En la presente guía se incluye un total de 41 especies de mamíferos sujetas a mayor tráfico a escala nacional.
De esta cifra, 13 especies son primates, 11 carnívoros (con predominio de felinos), siete roedores, tres
perezosos, dos pecaríes, dos venados, un oso hormiguero, un armadillo y el tapir amazónico.
117
Figura 183: Silueta corporal lateral del tapir amazónico ( Tapirus terrestris)
118
CAPUCHINO DE LA COSTA (Cebus aequatorialis)
Figura 184: Capuchino de la costa e n su habitad 185: Capuchino de la costa comiendo Figura 186: Capuchino de la
costa apareándose.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
119
MONO CAPUCHINO O MICO (Cebus capucinus)
Figura 189: Mono Capuchino en su habitad 190: Mono Capuchino comiendo Figura 191: Mono Capuchino
apareándose.
Descripción:
Diurnos.
120
MONO ARAÑA DE LA COSTA O BRAZILARGO (Ateles fusciceps)
Figura 194: Mono araña en su habitad 195: Mono araña comiendo Figura 196: Mono araña apareándose.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
121
CHORONGO, MONO LANUDO O BARRIGÓN (Lagothrix lagothricha)
Figura 199: Mono chorongo en su habitad 200: Mono chorongo comiendo Figura 201: Mono chorongo apareándose.
Descripción:
Actividad:
Diurnos.
122
JAGUAR, TIGRE O PANTERA (Pantera onca)
Figura 204: Jaguar en su habitad 205: Jaguar comiendo Figura 206: Jaguar apareándose.
Descripción:
visibles.
Actividad:
Nocturnos y diurnos.
123
OSO DE ANTEOJOS U OSO ANDINO (Tremarctos ornatus)
Figura 209: Oso de ante ojos en su habitad 210: Oso de ante ojos comiendo Figura 211: Oso de ante ojos
apareándose.
Descripción:
Actividad:
Diurnos y nocturnos.
124
TAPIR AMAZÓNICO O DANTA (Tapirus terrestris)
Figura 214: Tapir amazónico en su habitad 215: Tapir amazónico comiendo Figura 216: Tapir amazónico apareándose.
Descripción:
Actividad: Principalmente
nocturnos, parcialmente Figura 218: grasa del tapir amazónico
125
HUANGANA, PUERCO DE MONTE O PECARÍ DE LABIO BLANCO (Tayassu pecari)
Figura 220: Huangana en su habitad 221: Huangana comiendo Figura 222: Huangana apareándose.
Descripción:
Figura 223: huangana, puerco de monte (Tayassu Se trafica su carne y ocasionalmente ejemplares vivos
pecari). (crías). Las crías son de color gris o marrón rojizo.
Actividad:
Diurnos.
126
VENADO DE COLA BLANCA O VENADO DE PÁRAMO (Odocoileus virginianus)
Figura 225: Venado de cola blanca en su habitad 226: Venado de cola blanca comiendo Figura 227: Venado de cola
blanca apareándose.
Descripción:
La población de la Sierra habita entre los 3000 y 4500 m, y la de la Costa bajo los 1000 m.
127
Capítulo XIII
Endemismo en Ecuador
128
Endemismo en Ecuador
Generalidades Del Estado De Conservación De Las Especies De Plantas Endémicas Del Ecuador
El estado de conservación de las especies de plantas endémicas del Ecuador sigue el mismo patrón
alarmante observado en la edición anterior (Valencia, 2000). La mayoría de especies endémicas del
Ecuador (78% - 3508 especies), están amenazadas en algún grado; de estas 2080 (46%) se consideran
Vulnerables (VU), 1071 (24%) En Peligro (EN) y 353 (8%) En Peligro Crítico (CR).
Al cabo de 10 años desde la primera evaluación integral de las especies endémicas de plantas del Ecuador,
y al considerar los esfuerzos que se hacen para la supervivencia de las especies, se esperaría que la presión
de las amenazas hubiera disminuido. Según los datos expuestos en la Tabla 7, se puede observar que en
general la situación no ha mejorado, esto no sorprende si se considera que la destrucción del hábitat es la
principal amenaza para la supervivencia de las plantas endémicas y la deforestación en el Ecuador continúa
y es la más alta en Sudamérica (FAO, 2009).
Tabla 7. Comparación del estado de conservación de las especies de plantas endémicas del Ecuador según
las categorías de la UICN entre los años 2000 y 2010. Se indica el número de especies por categoría y por
porcentaje respectivo.
Aunque se piensa que unas 60 especies podrían estar extintas, solamente se ha podido comprobar la
extinción de tres especies de Galápagos y una en el continente. Sin embargo, hemos documentado
innumerables casos de extinciones locales. Las tres especies extintas de Galápagos son: Blutaparon rigidum,
una amarantácea colectada por primera vez en 1895 y registrada por última vez en 1906, llevada a la
extinción probablemente debido a las cabras introducidas en las islas; Delilia inelegans, una asterácea que
se conoce por una colección de Charles Darwin y que no se ha vuelto a registrar desde 1835, al igual que
la cucurbitácea Sicyos villosus, a la cual Darwin mencionó como muy común. La única especie que se
documenta como Extinta en la Naturaleza (EW) en el Ecuador continental es Passiflora popenovii, de esta
especie solo se conocen colecciones de plantas cultivadas realizadas después del año 1900. De las 60
especies del continente que podrían estar extintas, la mayoría no se han encontrado en mucho tiempo a
pesar de la exploración científica en las zonas donde fueron reportadas originalmente, muchas de ellas se
registraron por última vez en bosques del litoral que ahora ya no existen, por ejemplo: Annona histricoides,
la única liana de Annonaceae en América tropical, sólo conocida en Jauneche, la localidad del tipo, no se
ha vuelto a encontrar, por lo cual se presume que podría estar extinta; Gasteranthus extinctus
(Gesneriaceae), una herbácea colectada en el área de Centinela, sector biológicamente destruido, al parecer
129
está extinta y debido a su condición de extrema rareza fue nombrada como extinctus por el botánico que la
describió; Pouteria gigantea (Sapotaceae), el “guapapango”, especie arbórea que hasta la década de los
setenta era común al interior del bosque en Río Palenque, con solamente un individuo estéril visto en el
2004. En algunos casos solamente quedan las antiguas colecciones tipo (depositadas en herbarios en el
extranjero) como evidencia de las especies que se encontraban en la región occidental y que ahora podrían
estar extintas, e.g. entre las realizadas en el área de Guayaquil hace 150 años o más: Eugenia guayaquilensis
(Myrtaceae), publicada como Myrtus guayaquilensis en 1823 y conocida únicamente por la colección de
A. Bonpland que reposa en el Herbario de París, o Christiana eburnea (Tiliaceae), publicada como
Asterophorum eburneum en 1908 y colectada por R. Spruce que reposa en el Herbario Kew. Otras especies
probablemente extintas se registraron donde hoy se asienta la ciudad de Quito o en bosques cercanos,
algunos ejemplos son: Miconia benoistii, colectada en 1930 en la base del volcán Pichincha, el hecho de no
habersevuelto a encontrar en 70 años y la cercanía de la localidad histórica al área metropolitana de Quito
hace sospechar que la especie pueda haber desaparecido; o Baccharis mollis, conocida únicamente por la
colección tipo realizada por Humboldt y Bonpland en Quito; otro ejemplo es Viola ecuadorensis, conocida
únicamente por los especímenes tipo colectados por Sodiro en 1871 en lo que actualmente es la zona urbana
de Quito, en 1998 el especialista en Viola, H. Ballard, la buscó infructuosamente por lo cual se presume
que podría estar extinta (León-Yánez et al., 2019).
En la categoría de Casi Amenazadas (NT) están 362 especies, el 8% de las plantas endémicas, son especies
qué aunque no cumplen los requisitos para incluirse en una de las categorías de amenaza de la UICN, están
cerca de considerarse amenazadas o probablemente estarán amenazadas en un futuro cercano. Son pocas
las especies de plantas endémicas que de acuerdo con nuestros análisis no se hallan amenazadas: 257
especies se clasificaron como de Preocupación Menor (LC) y en general las especies que caen en esta
categoría son de amplia distribución y por lo tanto sus poblaciones poseen altas probabilidades de
sobrevivir. Cincuenta y seis especies de plantas endémicas no fueron evaluadas (NE), por presentar
problemas nomenclaturales (posiblemente son sinónimos de otras especies, es decir que su estado
taxonómico no está claro por el momento) y otras porque no se ha podido acceder a la información necesaria
para realizar la evaluación. La falta de datos también impidió la evaluación de 317 especies que se clasifican
como DD (Datos Insuficientes) (León-Yánez et al., 2019).
Principales amenazas para las plantas endémicas del Ecuador
130
La principal amenaza que enfrentan las plantas endémicas en el Ecuador es la pérdida del hábitat,
ocasionada por actividades humanas. El mayor impacto proviene de la deforestación a pequeña o gran
escala, ya sea para extracción de madera o leña, o para el cambio de uso del suelo para agricultura,
ganadería, urbanización o minería. En el Ecuador la tasa de disminución anual de la superficie forestal es
del 1.7% (FAO, 2009). Si las tendencias de destrucción del hábitat se mantienen como hasta hoy, la mayoría
de especies incluidas en este libro estarían en vías de extinción.
Figura 232: Principales amenazas como: deforestación, cambio de uso de suelo, urbanización & minería “Cantón Portovelo”
Otro factor, que cada día se vuelve más evidente es el cambio climático. Aparte del estrés que el cambio
climático podría ocasionar sobre las poblaciones existentes en determinada localidad, en Los Andes
ecuatorianos, la cobertura vegetal está constituida de fragmentos separados por barreras formadas por
grandes extensiones de campos cultivados; esto forma un escenario propicio para que ocurran extinciones
masivas debidas a los cambios de temperatura, ya que las barreras sean naturales u ocasionadas por el
hombre pueden impedir la migración de las plantas, limitando sus posibilidades de supervivencia frente al
cambio climático y facilitando la propagación de especies invasoras (Castro-Díez, Valladares, & Alonso,
2004; Daehler, 2005; Dietz, 2005; Pauchard & Alaback, 2004), muchas introducidas de otros continentes,
que pueden llegar a desplazar a las especies nativas (Arévalo et al., 2005; Pauchard et al., 2009; Stadler,
Trefflich, Klotz, & Brandl, 2000). La mayoría de endémicas son especialistas en ambientes de poca
extensión, con un microclima muy particular, en las cuáles un cambio acelerado de los patrones climáticos
puede tener un gran impacto. También, sucesos naturales como las erupciones volcánicas podrían poner en
peligro a numerosas poblaciones de plantas endémicas, pero al ser eventos más localizados no tendrían el
impacto devastador de las actividades humanas.
PATRONES TAXONÓMICOS DE LAS PLANTAS ENDÉMICAS DEL ECUADOR
Las 4500 especies de plantas endémicas del Ecuador se agrupan en 184 familias y 842 géneros. En el grupo
de las briofitas están 63 especies que representan el 1,4% del total de endémicas, los helechos incluyen 181
especies que representan el 4%, hay una sola gimnosperma endémica, que representa el 0,02%; y las
angiospermas con 4256 especies representan el 94% de las especies de plantas endémicas del Ecuador.
La familia de las orquídeas es la más numerosa con el 37,9 % del total de especies endémicas, la segunda
familia más diversa es Asteraceae que alcanza el 8%; otras familias importantes en cantidad de endémicas
se presentan en la Tabla 8. No existen familias restringidas exclusivamente al Ecuador (León-Yánez et al.,
2019).
131
Figura 233: Familia más numerosa las orquídeas
Tabla 8. Lista de las familias de plantas con los mayores números de especies endémicas del Ecuador (más
de 50 especies endémicas).
En cuanto a géneros endémicos, la flora ecuatoriana incluye 24 géneros (Tabla 9) restringidos al Ecuador.
De estos, siete pertenecen a la familia Asteraceae, cinco a la familia Orchidaceae y dos a la familia
Cactaceae, los demás están distribuidos en familias diferentes. La mayoría de los géneros endémicos están
concentrados en la zona andina. Trece de los 24 géneros endémicos son andinos, siete son de Galápagos,
tres están restringidos al Litoral y solamente uno se halla restringido a la Amazonía. Además 13 de estos
24 géneros no se han registrado en el SNAP (León-Yánez et al., 2019).
132
Tabla 9. Lista de los 24 géneros endémicos del Ecuador con su número de especies, región donde se
encuentran, categoría de amenaza y presencia en el SNAP.
133
Figura 234. Proporción de especies endémicas según su forma de vida.
En cuanto a la distribución altitudinal las especies endémicas de plantas vasculares tienen un patrón que
difiere del de la flora ecuatoriana en general, es decir incluyendo endémicas y no endémicas (Jørgensen &
León-Yánez, 1999). Las plantas endémicas no presentan su mayor diversidad en las zonas bajas, como toda
la flora en general, sino que forman una curva con las mayores cantidades de endémicas entre los 500 y
3000 m; el número baja abruptamente desde esa altura hasta el final de su distribución por encima de los
4500 m (Figura 235). Se piensa que esta curva estaría influenciada especialmente por la gran cantidad de
especies de orquídeas que se puede encontrar en este rango de altitud; los patrones en otras familias están
siendo estudiados.
134
Figura 235. Número total de especies de plantas y número de especies endémicas del Ecuador por rango altitudinal. (Datos
tomados de Jørgensen and León-Yánez (1999)).
Para explorar los patrones espaciales de distribución de las especies endémicas primeramente se realizó una
regresión linear del número de especies endémicas versus área utilizando la información de la superficie en
cada rango altitudinal del Ecuador continental (rangos de 500m de elevación) propuestos en Jørgensen and
León-Yánez (1999). Los resultados se presentan en las figuras 149 (a y b), y sugieren que hay una relación
positiva entre el área y la diversidad de endémicas; la relación positiva es estadísticamente significativa
(Fig. 149b) si se elimina el área bajo los 500m, en donde se encuentra la mayor parte de la superficie del
país (150.000km2) y un número relativamente bajo de especies endémicas (León-Yánez et al., 2019).
135
Figura 236. Según León-Yánez et al. (2019) Regresión linear del número de especies endémicas vs área (en Km2), a. Análisis
que incluye las especies que ocurren en los territorios bajo los 500m de altitud y b. Análisis que excluye las especies y los
territorios bajo los 500m (no. spp. endémicas = 19.945148 + 0.0700791*área. Regresión linear F 1,7=22.5, P=0.002, R2=0.76).
Figura 237. Regresión (polinimial de tercer grado) del residuo de especies endémicas vs el rango altitudinal. (Residuales no. spp.
endémicas = 2236.1467 - 330.00658*rango alt 1 - 34.36618*(rango alt 1-6)^2 + 11.08563*(rango alt 1-6)^3. Regresión linear F
3,5=70.1, P=0.002, R2=0.97)
136
empobreciéndose. Los estudios de impacto ambiental, en general, han sido solo un requisito legal más para
aprobar la ejecución de determinados proyectos, con escasos o nulos resultados a favor de las áreas naturales
y de las especies que albergan. Los programas de reforestación usualmente no incluyen a las especies
endémicas. Más aún, por desconocimiento, en ocasiones, las pocas especies nativas y endémicas que
quedan en los parques y áreas verdes de las ciudades han sido sustituidas por introducidas; e.g. en
Guayaquil, aproximadamente el 95 % de las especies sembradas como ornamentales son introducidas (obs.
pers.), algo paradójico en el Ecuador, uno de los países megadiversos en el mundo. Detrás de la idea del
desarrollo, las reales causas de la deforestación y extinción biológica parecen ser la pobreza, ignorancia,
corrupción y desinterés (León-Yánez et al., 2019).
En algunos casos solamente quedan las antiguas colecciones tipo (depositadas en herbarios en el
extranjero), como evidencia de las especies que se encontraban en la región occidental y que hoy podrían
estar extintas, e.g. entre las realizadas en el área de Guayaquil hace 150 años o más: Eugenia guayaquilensis
(Myrtaceae, publicada como Myrtus guayaquilensis en 1823) conocida por la colección de A. Bonpland
que reposa en el Herbario de París, o Christiana eburnea (Tiliaceae, publicada como Asterophorum
eburneum en 1908) colectada por R. Spruce que reposa en el Herbario Kew.
Además, en los remanentes de bosques secundarios de la provincia del Guayas aún se descubren nuevas
especies endémicas: e.g. Croton churutensis (en el 2007) de uso medicinal, Inga colonchensis (en el 2005)
de frutos comestibles, y hasta nuevos registros genéricos para el país, con representantes endémicos, e.g.
Croizatia cimalonia (en el 2002) y Forestiera ecuadorensis, una especie dióica (en el 2006). Llama la
atención que aún en áreas relativamente bien exploradas desde el punto de vista botánico, ocasionalmente
se pueden encontrar nuevas especies endémicas, e.g. Pseudolmedia manabiensis (colectada en el cerro
Montecristi, provincia de Manabí). Una de las causas por las cuales varias especies endémicas del occidente
de Ecuador no se habían podido colectar previamente ni documentar, se debe a su floración anual rápida y
muy corta (explosiva)(Cornejo, 2005a, 2006).
Los Ríos, una de las provincias más alteradas en el occidente de Ecuador, principalmente por la ampliación
de la frontera agrícola, es a la vez, la provincia relativamente más estudiada del país, con dos floras a su
haber: la flora de Río Palenque (Calaway H Dodson & Gentry, 1978) y la flora de Jauneche (Calaway H
Dodson, Gentry, & de María Valverde, 1985). Estas publicaciones cubren la flora de dos áreas pequeñas
de la provincia, pero es necesario recalcar que aún se descubren nuevas especies endémicas en esta
provincia, provenientes de áreas alteradas y pequeños remanentes, e.g. Capparis bonifaziana (Capparaceae),
un arbolito de frutos comestibles, cuya colección tipo proviene de un tecal, donde era inusualmente
frecuente (Cornejo & Iltis, 2005); otro ejemplo es, Gasteranthus extinctus (Gesneriaceae), una herbácea
con potencial ornamental, colectada por C. Dodson en el área de Centinela, sector biológicamente destruido
y lamentablemente esta especie al parecer está Extinta, a lo cual debe su nombre (Skog & Kvist, 2000). Es
notorio que, al ser Los Ríos la provincia florísticamente más estudiada, sin embargo poco es lo que se ha
hecho en cuanto a la protección y conservación de su flora endémica y/o amenazada (León-Yánez et al.,
2019).
Aún las áreas protegidas del SNAP son afectadas por la tala y ampliación de la frontera agrícola. Al parecer,
la iniciativa privada sería la única manera efectiva de conservar los bosques en la región occidental del
Ecuador. Los bosques privados han sido y son una de las mayores contribuciones a la conservación de estos
remanentes. Sin embargo, hay que considerar que el deteriorado estado actual de pequeñas áreas protegidas
como Jauneche y Río Palenque, claramente indican que los pequeños remanentes boscosos son más
vulnerables, y que para lograr una conservación más efectiva, como mínimo es indispensable proteger
varios miles de hectáreas de bosques y establecer leyes que prohíban la creación de vías de acceso en y aún
cerca de las áreas boscosas. De no existir una adecuada regulación de las vías de acceso en relación con las
137
áreas boscosas a nivel nacional, la destructiva experiencia de la deforestación, extinción biológica y el
deteriorado estado actual de los bosques y la flora en la región occidental, podrían ser el espejo en el cual
se mire el futuro de la región amazónica (León-Yánez et al., 2019).
138
Los bosques húmedos s.l. contienen el mayor número de especies endémicas de la región litoral,
principalmente pertenecientes a las familias Orchidaceae y Araceae; pero allí también se encuentran otras
como Ecuadendron acosta-solisianum (Fabaceae) (D. A. Neill, 1998). La mayoría de las endémicas se
encuentran restringidas al bosque muy húmedo, sensu stricto. Es necesario indicar que muchas especies
previamente conocidas como endémicas del bosque muy húmedo en esta región del Ecuador, se han
encontrado en la región adyacente del Chocó colombiano, y son endémicas de la bioregión del Chocó, e.g.
Exarata chocoensis (Bignoniaceae), Caryodaphnosis theobromifolia (Lauraceae, conocida como Caoba, sus
poblaciones nativas han sido devastadas en el área del río Baba, la localidad Tipo) (León-Yánez et al.,
2019).
El bosque húmedo sensu stricto es un hábitat intermedio entre el bosque seco y el bosque muy húmedo. En
la región occidental del Ecuador el bosque húmedo generalmente se extiende como una franja angosta y
altitudinalmente irregular, localizada entre los bosques secos y muy húmedos. El número de especies
endémicas restringidas a este hábitat es relativamente bajo en comparación con las restringidas al bosque
muy húmedo. En algunos casos, esta restricción también podría haber sido causada por la fragmentación,
e.g. Annona histricoides, Duguetia peruviana (Annonaceae, ambas de Jauneche, Los Ríos). Algunas de las
endémicas de este bosque -intermedio y angosto-, también se encuentran en las zonas de vida adyacentes,
con una mayor tendencia hacia el bosque muy húmedo.
Ocasionalmente algunas endémicas, propias del bosque muy húmedo y húmedo, también se encuentran en
el bosque seco, en ciertos microhábitats húmedos condicionados por aportes hídricos adicioadicionales,
como precipitación horizontal (garúa) y/o restringidas a quebradas o márgenes de ríos con dosel arbóreo
desarrollado, e.g. Sorocea sarcocarpa (Moraceae), Randia carlosiana (Rubiaceae), Annona conica
(Annonaceae) (León-Yánez et al., 2019).
Escasas endémicas presentan amplia tolerancia en sentido ecológico, estas poseen una inusual distribución,
que va desde el bosque seco hasta el bosque muy húmedo (entre 800-3200 mm de pluviosidad/año), tal es
el caso de Capparis bonifaziana (también Capparis ecuadorica, especie no endémica). Un caso
relativamente extremo es Steriphoma urbani, de la cual recientemente se han redescubierto unas pocas
poblaciones aisladas, localizadas en el bosque muy seco y en el bosque muy húmedo (León-Yánez et al.,
2019).
139
Según A. H. Gentry (1995), todos los bosques secos en el Ecuador se encuentran muy alterados. Sin
embargo, al interior de la isla Puná (Prov. Guayas), entre 50-300 m de altitud, existen áreas inaccesibles y
conservadas de monte espinoso, bosque muy seco y bosque seco tropical, mayormente deciduos (llamados
respectivamente: matorral seco, bosque deciduo y bosque semideciduo (C Cerón, Palacios, Valencia, &
Sierra, 1999); las particulares causas de su buen estado de conservación están detalladas y explicadas en
Madsen et al. (2001). Otras áreas con bosques secos conservados existen al suroccidente del Ecuador, e.g.:
La Reserva Militar de Arenillas (provincia de El Oro), y Zapotillo (suroccidente de la provincia de Loja)
(Cabrera et al., 2002; Lozano, 2002).
Estos ecosistemas secos poseen una menor diversidad alfa en comparación con la de los bosques húmedos
y muy húmedos (A. H. Gentry & Dodson, 1987; Madsen et al., 2001). Pero desde la perspectiva de la
conservación, las áreas de concentración de taxa endémicos, merecen también preocupación para
desarrollar esfuerzos de conservación, a veces más urgentes que en localidades o áreas con altas
diversidades, pero compuestas por especies de amplia distribución (A. H. Gentry, 1995).
Aunque la diversidad de las endémicas es menor en el bosque muy seco tropical (con regímenes menores
a 500 mm de precipitación anual), también aquí, se continúan encontrando nuevas especies para la ciencia
(e.g. Capparis sclerophylla, Wigandia ecuadorensis (Cornejo & Iltis, 2005). Es probable que varias especies
endémicas que nunca fueron colectadas se hayan extinguido ya en este tipo de bosque. Sin embargo, algunas
endémicas aún sobreviven al interior de los remanentes mejor conservados, e.g. Ditaxis macrantha
(Euphorbiaceae). Otras están adaptadas a las áreas abiertas, más alteradas y generalmente también se
encuentran en los hábitats adyacentes, éstas presentan una gran tolerancia a la fuerte irradiación lumínica,
e.g. la trepadora Cucurbita ecuadorensis (Cucurbitaceae), localmente conocida como Chía, Chís o
Jalamama, especie de un crecimiento longitudinal particularmente rápido, durante la estación lluviosa, que
llega a ser dominante por sectores y expande sus poblaciones a manera de densas redes, las cuales cubren
como una verdadera malla el matorral y los arbolitos bajos, por lo cual comúnmente los habitantes de las
áreas rurales la consideran una maleza (Bonifaz & Cornejo 1994).
En algunas áreas de la provincia de Manabí es frecuente observar las colinas de monte espinoso y bosque
muy seco con las cumbres nubladas, por efecto de la condensación de los vientos marinos (e.g. en el Parque
Nacional Machalilla). Este fenómeno climático crea peculiares microclimas, los cuales ocasionalmente
producen combinaciones florísticas inusuales, como la presencia de epífitas (principalmente orquídeas y
bromelias) normalmente comunes en los bosques húmedos y muy húmedos; sin embargo, en estas cumbres
estos microhábitats han sido muy poco estudiados y podrían albergar otras endémicas (locales),
principalmente Orchidaceae (León-Yánez et al., 2019).
Los bosques húmedos
Esmeraldas es la provincia que contiene la mayor extensión de bosques húmedos y muy húmedos en la
región occidental de Ecuador. La aislada Reserva Ecológica Cotacachi Cayapas, contiene bosques bien
conservados en sus más de 200 000 ha de superficie; la Reserva Awá, la Reserva Ecológica Manglares
Cayapas Mataje, y Mache Chindul (incluída la Estación Biológica Bilsa), así como sus innumerables
bosques no protegidos, albergan muchas endémicas y con seguridad especies nuevas, algunas de las cuales
están por ser publicadas, e.g. Araceae (Croat, com. pers.) y muchas otras aguardan por ser descubiertas.
Estos constituyen un real tesoro biológico, los cuales, por no estar exentos de presiones y riesgos, como los
ocasionados por la explotación maderera y la minería, deben ser rigurosamente protegidos.
Los bosques húmedos en sentido amplio, concentran la mayoría de las endémicas en la región occidental.
En este hábitat, las familias más representativas son Orchidaceae y Araceae. En el caso particular de las
orquídeas, los cacaotales constituyen una alternativa para la conservación de algunas endémicas (y muchas
140
no endémicas), e.g. Dimerandra rimbachii, Gongora grossa. En cuanto a las familias restantes, algunas
endémicas son persistentes en áreas alteradas, e.g. Podandrogyne jamesonii (Capparaceae s.l.), Cobaea
campanulata (Polemoniaceae). Otras, desafortunadamente son muy sensibles a la intervención y/o
fragmentación, e.g. el “guapapango” Pouteria gigantea (Sapotaceae), especie arbórea que hasta la década
de los setenta era común al interior del bosque en Río Palenque (Calaway H Dodson & Gentry, 1978); sin
embargo solamente un individuo estéril fue visto durante dos días en campo en la mencionada estación
biológica. En el caso de Annona histricoides, la única liana de Annonaceae en América tropical, sólo
conocida en Jauneche, la localidad del tipo (A. H. Gentry & Dodson, 1987), no se la ha vuelto a encontrar,
por lo cual se presume que podría estar extinta.
Muchas endémicas, principalmente de las familias: Orchidaceae, Araceae, Gesneriaceae, Bromeliaceae y
Ericaceae, por su gran potencial ornamental, constituyen especies carismáticas que podrían ser parte de
programas exitosos de conservación, si se desarrollan técnicas de propagación adecuadas, antes que
explotar las generalmente ya diezmadas poblaciones nativas (León-Yánez et al., 2019).
141
En general las familias con mayor diversidad tienen altas tasas de endemismo, pero hay excepciones; por
ejemplo, mientras la tasa promedio de endemismo para la flora de los bosques andinos orientales es del
29%, la tasa de endemismo de la familia Poaceae en estos bosques es del 5%; un indicador de que el bosque
andino no ha sido un centro activo de evolución para esta familia, diversa en los páramos (León-Yánez et
al., 2019).
Tabla 11. Las 10 familias más diversas (número de especies) en el bosque andino (Jørgensen & León-
Yánez, 1999).
Tabla 12. Las 10 familias del bosque andino con el mayor número de especies endémicas. Se indica la
tasa de endemismo de la familia (Jørgensen & León-Yánez, 1999).
Los géneros más diversos también poseen altas tasas de endemismo (tablas 13 y 14). A nivel de género al
igual que al nivel de familia, las orquídeas dominan el escenario, con los cinco géneros más diversos. El
género con más especies endémicas en el bosque andino es Lepanthes, un género altamente especializado
a microclimas particulares, con muchas especies de distribuciones reducidas o conocido solo por el
espécimen Tipo (León-Yánez et al., 2019).
142
Tabla 13. Los 10 géneros más diversos del bosque andino. Pleurothalllis es un género altamente polifilético
el cual será recircunscrito y perderá su estatus. Masdevallia, tradicionalmente un género monofilético,
actualmente ha sido divido en varios géneros; sin embargo, este cambio no tiene suficiente sustento
estadístico.
Tabla 14. Los 10 géneros del bosque andino con el mayor porcentaje de especies endémicas. Se indica la
tasa de endemismo del género.
Pero, ¿Dónde se encuentra el endemismo más alto en los bosques andinos? Si se observa la distribución
altitudinal de las especies endémicas del Ecuador, se puede observar un pico entre las alturas de 1000 a
2500 m, causado principalmente por la abundancia de la familia Orchidaceae en este rango de elevación.
Llama mucho la atención que este pico en la distribución de especies endémicas no esté relacionado con el
área correspondiente a cada banda altitudinal; la superficie de la porción del país comprendida entre los 0
a 500 m es mucho más grande que la superficie de la zona entre los 2000 a 2500 m; sin embargo hay muchas
más especies endémicas en esta última franja (León-Yánez et al., 2019).
Los bosques andinos orientales y los bosques andinos occidentales tienen historias geológicas diferentes y
climas distintos, por lo cual no es sorprendente que compartan menos de una cuarta parte de sus especies
143
endémicas. Si se comparan las familias con mayor endemismo en ambos lados de Los Andes (Tabla 15),
se observa que la dominancia de las orquídeas es mayor en el lado oriental, pero en el lado occidental hay
más endemismo en otras familias y como resultado el lado occidental tiene más especies endémicas que el
lado oriental. Sin embargo, hay que reconocer que el lado occidental posee buenas vías de acceso y ha sido
más explorado. Es probable que en el futuro se demuestre que el lado oriental alberga más especies
endémicas que el lado occidental; de hecho, desde la publicación de la primera edición del Libro Rojo, el
incremento en el número de especies endémicas en el lado oriental (alrededor de 400 especies nuevas) ha
sido considerablemente mayor que el incremento de endémicas en el lado occidental (150 especies nuevas)
(León-Yánez et al., 2019).
Tabla 15. Número de especies por familia en cada lado de la cordillera (las 10 familias más diversas).
Además de las diferencias entre el lado occidental y oriental de la cordillera, también hay diferencias muy
grandes entre el norte y el sur con respecto a la distribución de especies endémicas. Curiosamente los
patrones son opuestos en los dos lados. En el lado occidental, el número de especies endémicas es mucho
más alto al noroccidente que al suroccidente (Tabla 16). Esto podría ser debido a la pluviosidad mucho más
alta en el noroccidente. El patrón existente al lado oriental es más difícil de entender pero el endemismo es
mayor al sureste que al noreste. La geología más complicada y variada en el sureste (i.e. presencia de las
cordilleras del Cóndor y Cutucú) con una historia geológica diferente puede ser parte de la explicación,
pero no es todo, porque el número de especies endémicas de la familia Orchidaceae (mayormente epifítica)
en el sureste es mucho más grande que el de las otras familias (León-Yánez et al., 2019).
Tabla 16. Número de especies endémicas en los bosques andinos de las cordilleras oriental y occidental
al norte y sur del país.
Occidente Oriente
Norte 1455 978
Sur 861 1215
Estos patrones son básicos para la conservación; el bosque andino noroccidental es la zona más importante
del país en términos de especies endémicas pero lastimosamente es también una zona con una tasa alta de
deforestación. El sureste ocuparía el segundo lugar en prioridad para la conservación de plantas endémicas
(León-Yánez et al., 2019).
144
Causas del alto endemismo en el bosque andino oriental
La explicación más frecuente del alto grado de endemismo en Los Andes ha sido el aislamiento por barreras
geográficas como valles y cerros altos. Si fuera así, las familias con más especies endémicas deberían ser
familias que incluyan especies con semillas grandes, de difícil dispersión. Pero por el contrario, la familia
con más especies endémicas es curiosamente la familia con mayor capacidad para superar tales barreras.
Las orquídeas tienen las semillas más pequeñas entre las angiospermas y son fácilmente dispersadas a larga
distancia por el viento (por ejemplo, 12 de las 15 especies de orquídeas nativas de Galápagos viven también
en el continente a 600 km de distancia). Para muchas especies de orquídeas, su distribución en Los Andes
es muy reducida pero los límites no coinciden con barreras geográficas; es frecuente encontrar
distribuciones discontinuas que cruzan barreras grandes y profundas como el valle del río Pastaza, una de
las barreras más pronunciadas al lado oriental. La distribución de las orquídeas parece estar delimitada por
gradientes climática e historia evolutiva más que por barreras geográficas (Jost, 2004). Las orquídeas son
muy específicas en sus requerimientos climáticos, como lo demuestran sus rangos altitudinales muy
estrechos; sin embargo, por sus habilidades de dispersión, pueden encontrar áreas desconectadas adecuadas
a sus especializaciones. Las orquídeas son un caso extremo, pero la mayoría de las familias importantes de
plantas endémicas en los bosques andinos orientales tienen buenas facilidades de dispersión. En conclusión,
es más probable que las distribuciones restringidas observadas entre las especies endémicas de la región
andina se deban a especializaciones a los microclimas en los bosques que ocupan, que a la falta de potencial
para dispersión entre diferentes áreas. Sin embargo, es cierto que hay especies, géneros o familias que
muestran un endemismo “clásico”, caracterizado por poblaciones delimitadas por barreras geográficas
(León-Yánez et al., 2019).
Si los microclimas son más importantes que el aislamiento geográfico, debemos prestar más atención a
zonas donde hay fuertes interacciones entre la topografía y vientos húmedos, que forman gradientes
climáticas fuertes y que producen microclimas locales. Estos pocos lugares aislados pueden tener alto grado
de endemismo. Las zonas de alto endemismo en las montañas junto al río Pastaza, son ejemplos de este
fenómeno; hay que sospechar que muchos centros de endemismo desconocidos, con sus propias floras
endémicas, existen aún en los bosques andinos (León-Yánez et al., 2019).
Nota sobre los porcentajes: el número total de especies en el bosque andino está tomado del Catálogo de
plantas vasculares del Ecuador (1999), aumentado por el número aproximado de nuevas especies descritas
desde 1999. Los números totales por familia y por género fueron obtenidos de la misma forma. Los números
no son exactos y los porcentajes deben ser tomados como aproximaciones (León-Yánez et al., 2019).
145
CAPITULO XIV
Experiencias
Bueno en el transcurso de la creación de este libro con la colaboración de varios colegas profesionales es
una gran experiencia emocional, de compartir y de crear un nuevo vinculo social, con la finalidad de reunir
nuestras habilidades de aprendizaje a lo largo de nuestra vida de formación, sin embargo, esto nos ayudado
para poder ampliar y agrupar una variedad de conocimientos que a lo mejor no se puede encontrar en otro
libro, si en este. Por otra parte, esto tiene con el propósito de aportar conocimientos para mi país y el mundo
entero; como bien sabemos, hoy en día estamos en el pico de rescatar y conservar la biodiversidad que se
encuentra amenazada por los diferentes factores antropogénicos, dando con resultado a la formación de
enfermedades peligrosas que día a día van brotando, pues esto me ha motivado de manera especial en
contribuir en la creación de este libro (Stalin S, 2020).
Al momento de elaborar el libro cruzan muchas experiencias que no es fácil describir todas, pero si puedo
comentar que es una de las experiencias mas bonitas que ayudo a interactuar entre compañeros de trabajo
de una manera distante por la situación actual que estamos pasando. Conforme el libro iba tomando forma
logramos apreciar mas nuestra tierra natal nuestro Ecuador el cual es un país megadiverso en cuanto a flora
y fauna un paraíso ambiental que se esta descubriendo pero que lastimosamente también se está destruyendo
(Naranjo M, 2020).
Mi experiencia en la elaboración del libro junto a mis compañeros en general ha sido enriquecedora. Hemos
pasado largas horas por medio del zoom ya que la situación actual no nos permite vernos personalmente,
pero nuestra perseverancia, el compañerismo, y la dedicación nos han ayudado a alcanzar el objetivo
propuesto. Es una grata experiencia el aprender de los demás y que los demás aprendan de ti, que cada uno
ponga su granito de arena para alcanzar el éxito. Tal vez me he encontrado con obstáculos a lo largo de la
experiencia del libro, pero han sido los pilares para yo proseguir el camino hacia la meta final. Muchas
veces no está en nuestras manos, pero poniendo en práctica todas las características que un buen equipo de
trabajo debe tener y unirse como uno solo equipo no habrá obstáculo que impida llegar a alcanzar lo
planteado (Vinueza L, 2020).
Al momento de elaborar este libro se cursa por un sinfín de experiencias, momentos buenos y
malos pero quedan gratos recuerdos como es compartir con los compañeros de trabajo,
adaptándonos a esta nueva modalidad de trabajo a pesar de todas las circunstancias se sacó adelante
el proyecto de realizar este libro, al principio fue complicado pero poco a poco iba tomando forma
con el aporte de cada uno de nosotros, aquí les damos a conocer lo más relevante en los bosques
de nuestro Ecuador como nos podemos dar cuenta hoy, por hoy estamos terminando con ellos ya
sea por el aumento del sector agropecuario o por la tala indiscriminada, la minería etc. Estos temas
tratados nos llenan de ilusión al saber cuántos recursos, animales y plantas en peligro podemos
salvar si ayudamos a conservar nuestros bosques (Tagle A, 2020).
La elaboración de este libro ha sido un reto, al estar inmersos dentro de una crisis por motivo de
la pandemia del Covid 19 esto no cambio mucho la mentalidad, viendo la fragilidad de la
humanidad y el gran valor en la naturaleza y los recursos que nos proveen; haciendo más visible
todo el daño que causamos al planeta. Mientras se fue desarrollando este libro en cada capítulo
vimos actos que destruyen y otros que recuperan nuestros bosques, dando a notar que “buenos
146
somos más” lo que pasa es que estamos hipnotizados por la globalización y la forma moderna de
vivir. Por eso el ir compilando este libro me ayudo a entender que el cambio empieza cuando uno
decide conocer y aprender sobre lo que quiere salvar. Porque es muy fácil levantarse y decir
¡quiero salvar el mundo!, siendo algo bueno pero un poco irreal; junto a mis compañeros que
elaboramos este libro entendimos que el cambio empieza en nuestros hogares, barrios y escuelas.
Hay una frase cuando alguien bota una botella, “Es una sola botella, dicho por un millón de
personas” demostrando el daño a causar. Y al terminar de leer el libro espero que nazca la frase
“El cambio empieza en mi hogar, dicho por todo el mundo” (Galo Paladines, 2020).
147
CAPITULO XV
Glosario
Acuífero: Es una noción que se utiliza en los ámbitos de la geología y de la biología. En el primer caso, un
acuífero es una estructura subterránea que alberga agua.
Amazonia: Se denomina a la zona de Sudamérica ubicada en la parte septentrional central del continente.
Comprende parte de Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guayana, Perú, Bolivia, Surinam y Venezuela.
Por su extensión está considerada la "Reserva Forestal del Mundo". La superficie aproximada es de 6
millones de Km2.
Bosque: Cubierta de copas mínima del 30%; con un valor de superficie mínima única de 1 hectáreas; y un
valor mínimo de altura de los árboles única de 5 metros.
Bosques estatales de producción permanente: Son aquellas formaciones naturales o cultivadas que se
ubican en áreas del Patrimonio Forestal del Estado, destinadas al aprovechamiento eficiente y continuo del
recurso existente.
Bosques especiales: Son aquellas formaciones vegetales, naturales o cultivadas que se caracterizan por sus
valores científicos, estratégicos, estéticos o culturales o que por encontrarse en peligro de extinción se
considere necesaria su preservación.
Bosque nativo: ecosistema arbóreo, primario o secundario regenerado por sucesión natural, que se
caracteriza por la presencia de árboles de diferentes especies nativas, edades y portes variados, con uno o
más estratos. Para fines del presente no se considera bosque nativo aquellas formaciones boscosas
constituidas por especies pioneras que de manera natural forman poblaciones coetáneas, y aquellas
formaciones boscosas cuya área basal a la altura de 1.30 m. es inferior al 40% del área basal de la formación
boscosa nativa primaria correspondiente.
Bosques privados de producción permanente: Son aquellas formaciones naturales o cultivadas situadas
en áreas de propiedad privada y destinadas al aprovechamiento eficiente y continuo del recurso existente
Bosques Protectores: Son bosques y vegetación protectores las formaciones vegetales, naturales o
cultivadas, arbóreas, arbustivas o herbáceas, de dominio público o privado, declarados como tales por
encontrarse en áreas de topografía accidentada, cabeceras de cuencas hidrográficas o zonas que por
148
sus condiciones climáticas, edáficas e hídricas deben ser conservadas, así como los bosques de importancia
ritual, ceremonial, cultural o histórica.
Bosque tropical: También llamado selva húmeda. El bioma más complejo de la Tierra, caracterizado por
una gran diversidad de especies, alta precipitación durante el año y temperaturas cálidas. Las
precipitaciones pluviales pueden llegar a 100 mm en cuestión de minutos. El bosque de hoja ancha se
mantiene verde durante todo el año.
Caducifolio: Hace referencia a los árboles o arbustos que pierden su hoja durante una parte del año, la cual
coincide en la mayoría de los casos con la llegada de la época desfavorable, la estación más fría (invierno)
en los climas templados. Sin embargo, algunos pierden el follaje durante la época seca del año en los climas
cálidos y áridos.
Conspicuo: Especialmente entre comediantes y toreros, persona destinada a suplir la falta oausencia de
otra.
Cartografía automatizada: es un tipo de cartografía que incluye un conjunto de técnicas para el diseño y
elaboración de mapas utilizando recursos digitales.
Conservación: es una ética del uso de los recursos, así como su asignación y protección. Su principal
objetivo es mantener la salud del Medio ambiente, las pesquerías, los hábitats y la biodiversidad.
Deforestación: es un proceso provocado por la acción de los humanos, en el que se destruye o agota la
superficie forestal, generalmente con el objetivo de destinar el suelo a otra actividad.
Dinámica de los bosques: se describen las fuerzas físicas y biológicas subyacentes que cambian de forma
y un bosque ecosistema. El estado continuo de cambio en los bosques se puede resumir con dos elementos
básicos: perturbación y sucesión.
Dosel arbóreo: dosel forestal, techo o también llamado en ocasiones canopia o canopeo (del
inglés canopy y este del latín Canopus, famosa ciudad egipcia conocida por sus grandes lujos) da nombre
al hábitat que comprende la región de las copas y regiones superiores de los árboles de un bosque.
Ecosistemas: es un sistema biológico constituido por una comunidad de organismos vivos y el medio físico
donde se relacionan. Se trata de una unidad compuesta de organismos interdependientes que comparten el
mismo hábitat.
149
Endemismo: es un término utilizado en biología para indicar que la distribución de un taxón está limitada
a un ámbito geográfico reducido y que no se encuentra de forma natural en ninguna otra parte del mundo.
Estructura de los bosques: son las diferencias que puedan existir entre los distintos tipos de bosques, por
lo general se pueden reconocer tres capas de altura: una, a partir del estrato de musgos y hojas; otra con un
estrato de arbustos, conocida como sotobosque, y finalmente una capa superior formado por árboles y
copas.
Etnobotánicos: estudia las relaciones entre los grupos humanos y su entorno vegetal, es decir el uso y
aprovechamiento de las plantas en los diferentes espacios culturales y en el tiempo.
Fitogeografía: es la "ciencia de la vegetación" que estudia la relación entre la vida vegetal y el medio
terrestre, o, en otros términos, "la ciencia que estudia el hábitat de las plantas en la superficie terrestre".
Guía de circulación: Documento expedido por la Autoridad Forestal competente, que ampara la
movilización de productos forestales y de la vida silvestre.
Hot spots: Un punto caliente de biodiversidad o "hot-spot " es un área del territorio donde hay una especial
concentración de biodiversidad.
Impacto ambiental: también conocido como impacto antrópico o impacto antropogénico, es la alteración
o modificación que causa una acción humana sobre el medio ambiente.
Megadiverso: es un término que está relacionado con el concepto de biodiversidad y que se refiere a la a
la gran variedad de formas de vida que existen en la Tierra.
Ordenamiento Territorial: es el conjunto de acciones transversales del Estado que tienen como cometido
implementar una ocupación ordenada y un uso sostenible del territorio.
Patrimonio Forestal del Estado: Tierras forestales y bosques que por una disposición legal han sido
declaradas propiedad del Estado para su administración.
Plan de manejo integral: instrumento que justifica y regula el uso del suelo y el manejo sustentable para
aprovechamiento de los recursos naturales de una determinada área y que cumple con los requisitos del
presente Libro III Del Régimen Forestal y con la normativa especial que el Ministerio del Ambiente
establezca para el efecto.
150
Programa de aprovechamiento forestal sustentable: Instrumento que determina en detalle las
actividades a ser ejecutadas y el nivel de intervención, para el aprovechamiento de los productos forestales
maderables y la ejecución de tratamientos silvo culturales en bosques nativos, y que cumple con los
requisitos del presente Libro III Del Régimen Forestal y con la normativa especial que el Ministerio del
Ambiente establezca para el efecto.
Programa de corta: instrumento que determina los criterios técnicos bajo los cuales se realizarán las
actividades de corta de una determinada plantación forestal.
Pulpa: Madera sometida a la desintegración mecánica o a tratamientos químicos, usada para la fabricación
de papel y artículos similares.
Rebrote: Retoño a las plantas que aparecen después de haber sido cortadas.
Región tumbesina: Bosque seco ecuatorial también llamado Región Tumbesina, es una región natural de
Perú y Ecuador constituida por ecosistemas de bosque seco tropical, y que está situado en la región costera
del Pacífico al sur de la línea ecuatorial. Posee un clima tropical seco con alternancia de estaciones secas
con lluvias.
Servicios Ambientales: Beneficios que las poblaciones humanas obtienen directa indirectamente de las
funciones de la biodiversidad (ecosistemas, especies y genes), especialmente ecosistemas y bosques nativos
y de plantaciones forestales y agroforestales. Los servicios ambientales se caracterizan porque no se gastan
ni transforman en el proceso, pero generan utilidad al consumidor de tales servicios; y, se diferencian de
los bienes ambientales, por cuanto estos últimos son recursos tangibles que son utilizados por el ser humano
como insumo de la producción o en el consumo final, y que se gastan o transforman en el proceso.
Sistema ecológico: son los seres vivos, su ambiente y las relaciones que se establecen entre unos y otros.
Sotobosque: Sotobosque es el área de un bosque que crece más cerca del suelo por debajo del dosel vegetal.
La vegetación del sotobosque consiste en una mezcla de plántulas y árboles jóvenes, así como arbustos de
sotobosque y hierbas.
151
Suelo: superficie de la corteza terrestre.
Trópico de cáncer: Es uno de los paralelos del planeta que están ubicados en el hemisferio norte. Es uno
de los paralelos situado a una latitud de 23º 26′ 14″1 al norte del ecuador.
Trópico de Capricornio: Es un paralelo del hemisferio sur. Está situado a una latitud de 23º 26'
17"1 al sur del ecuador. Esta línea imaginaria delimita los puntos más meridionales en los que el Sol puede
ocupar el cenit al mediodía.
Xerofíticos: Los adjetivos xerófilo y xérico, y el sustantivo xerófito se aplican en botánica a la vegetación
y asociaciones vegetales específicamente adaptadas para la vida en un medio seco. Es decir, plantas
adaptadas a la escasez de agua en la zona en la que habitan, como la estepa o el desierto.
152
CAPITULO XVI
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161
CAPITULO XVII
Biografía de los autores
SALAZAR SHAGUI SERGIO STALIN, hijo de Edwin Salazar y Doris Shagui. Nació en Zaruma,
provincia de El Oro, un 28 de febrero de 1995, posterior que a temprana edad su familia se trasladó al
cantón Taisha, Provincia de Morona Santiago, en el que ingreso al jardín a los cuatro años. En el año
2000 se trasladó a vivir a la ciudad de Macas donde ingreso a la “Escuela Fiscal Eloy Alfaro” y
quedándose a cargo de sus tíos por motivos económicos sus padres tuvieron que emigrar al exterior
con la finalidad de poder brindar una mejor calidad de vida.
A los 10 años de edad, ingreso a la Escuela de Fútbol en la Federa
ción deportiva de Morona Santiago “FDMS”, siendo su principal deporte.
En el año 2007, ingreso al “Colegio Nacional Técnico Macas” cursando hasta primero de bachillerato,
posterior se trasladó de institución a la “Unidad Educativa Particular Emanuel” dónde culmino sus
estudios y obtuvo el título de Bachiller en Ciencias Generales.
En el año 2013 paso a vivir a la ciudad de cuenca donde ingreso a la “Universidad Católica de Cuenca”
en la carrera de ingeniería Civil, terminando el primer semestre, pero se retiró por motivos económicos
y personales. En la cual realizo un curso de preparación para rendir las pruebas de ingreso a las
universidades del estado.
En marzo del 2015, realizo un curso para la obtención de la Licencia Profesional en el Sindicato
Domingo Álava Cadena en la ciudad de Macas y en ese mismo año ingreso a la Universidad Estatal
Amazónica en la carrera de ingeniería Ambiental, para la cual se pasó a vivir en la ciudad del puyo,
cede de dicha Universidad.
En el 2016, continúo practicando y jugando Fútbol en el equipo “Deportivo Quijos” por cincos
temporadas, del cantón Baeza, perteneciente a la provincia del Tena, logrando varios títulos, en la cual
hizo su segunda familia y se encuentra agradecido con dicho equipo.
A lo largo de sus estudios universitarios participo en el primer evento científico estudiantil UEA2018,
con el tema: “Usos del Programa SAFA (FAO) a Escala Planetaria a Favor de la Sostenibilidad”.
Enfocado mis estudios por una carrera en ciencias postule para la universidad estatal amazónica en la
carrera de ingeniería ambiental lugar donde fue creciendo constantemente mi pasión y cuidado hacia el
medio ambiente.
162
Ahora estoy cruzando el noveno semestre de ingeniería ambiental si dios lo permite próximo ingeniero
ambiental.
Me considero una persona creativa, apasionada y comprometida una de las características principales
es que soy leal a las personas que me brindan su confianza.
Mi nombre es LUIS MARIO VINUEZA GARRIDO, hijo de Mario Vinueza y Wilma Garrido
quienes se encuentran feliz mente casados 25 años fruto de su gran amor procrearon dos hijos mi
hermano mayor Bryan Vinueza y yo. Nací en el catón Quijos-Baeza, provincia de Napo el 3 de
diciembre de 1996, mis primeros estudios fueron en la escuela Fermín Inca donde fui abanderado del
pabellón del cantón, posterior mente ingresé al colegio de mi ciudad que actualmente se llama Unidad
Educadita “Baeza”, fui designado como abanderado del porta estandarte del plantel, me gradué en el
año 2014 con el título de bachiller técnico agropecuarios producción agropecuaria.
Mi pasatiempo favorito es hacer deporte, pero lo que más me gusta es el Fútbol gracias a ello he
conocido muchos lugares, fui seleccionado de mi cantón y de mi provincia ganando muchos trofeos,
actualmente estoy jugando en el mejor equipo de mi cantón en el club deportivo Quijos el equipo que
me vio crecer futbolísticamente en donde han jugado mis abuelitos, mi padre y gran parte de mi
familia.
Me considero una persona humilde de gran corazón que ayuda a las demás personas sin recibir nada
a cambio, me gusta divertirme, pero a lo sano, le bailo a la vida porque es una sola.
Soy Flavio Andrés Tagle Tenemaza nací el 8 de marzo de 1994 en la ciudad de Guayaquil mis padres
son Susana Tenemaza oriunda de la Cantón Logroño y Flavio Tagle oriundo de Guayaquil mis estudios
los realice en el jardín de infantes Caminito de Jesús en la parroquia Pascuales la primaria la realice
en la escuela Miguel Cordero Dávila del Cantón Logroño mis estudios secundarios los realice, de
octavo a primero de bachillerato en el Colegio Rio Upano ubicado en la cuidad de Sucúa Y finalmente
me gradué en el Instituto Técnico Superior Sucúa en el año 2012 con el título de bachiller en
Electromecánica Automotriz.
Nació el 28 de mayo de 1994 en Quito, Ecuador. Hijo de Alicia Elizalde y Galo Paladines, es el cuarto
de 7 hijos, además de ser el único hijo varón. Sus primeros años de educación primaria los estudio en
varias escuelas de la ciudad de Quito, de ahí migraron a la ciudad de Loja de donde es originaria su
familia, donde estudio la secundaria y bachillerato en la Unidad Educativa Experimental Bernardo
Valdivieso obteniendo el título de bachiller con especialidad en químico- biológico en el año 2012.
163
Durante 4 años tuvo varios empleos entre estos: ayudándote de topografía (RIDRENSUR), mesero
(Hornero Pizzeria), Asistente (Laboratorio Ecuamerican), Ventas (Licorera Grandita). Para año 2016
se mudó a la ciudad del Puyo para estudiar en la Universidad Estatal Amazónica la carrera de
Ingeniería Ambiental, y para el año 2020 se encuentra en el noveno semestre de la carrera, durante este
proceso de educación trabajo en el Restaurante Wijao de la misma ciudad. Un dato importante es que
el último año de carrera se da durante la crisis mundial de la pandemia Covid 19.
164
CAPITULO XVIII
Anexos
165
Anexo A. Conformación de grupos por afinidad para la elaboración del libro.
166
Anexo C. Grupo de WhatsApp de trabajo para elaboración del libro.
167
Anexo E. Archivo de Word descargado para la revisión.
168
Anexo G. Búsqueda de información para desarrollo de los capítulos
169
Anexo J. Elaboración de los capítulos del libro
170
Anexo k. Bosque húmedo tropical situado en Puerto Napo.
Anexo L. Los servicios que nos presta los bosques ante el turismo.
Anexo M. Búsqueda bibliográfica del libro flora del ecuador de Edwin Patzelt.
171
Anexo N. Acopio de madera en la selva de Morona Santiago.
172
TODOS SOMOS
UNO
UNO SOMOS TODOS