SANTO ROSARIO las cosas que se te han dicho de parte del Señor.

(Lc 1,
39-45)
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos Ahora, niño amigo, ya habrás aprendido a manejarte.
líbranos Señor Dios Nuestro. En el nombre del —Acompaña con gozo a José y a Santa María... y
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. escucharás tradiciones de la Casa de David: Oirás
hablar de Isabel y de Zacarías, te enternecerás ante
Acto de contrición el amor purísimo de José, y latirá fuertemente tu
Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, corazón cada vez que nombren al Niño que nacerá
Creador, Padre y Redentor mío. Por ser Tú quién eres, en Belén...
Bondad infinita, y porque te amo sobre todas las cosas, Caminamos apresuradamente hacia las montañas,
me pesa de todo corazón haberte ofendido. También hasta un pueblo de la tribu de Judá. (Luc., I, 39.)
me pesa que puedes castigarme con las penas del Llegamos. —Es la casa donde va a nacer Juan, el
infierno. Ayudado de tu divina gracia propongo Bautista.
firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la —Isabel aclama, agradecida, a la Madre de su
penitencia que me fuere impuesta. Amén. Redentor: ¡Bendita tú eres entre todas las mujeres, y
bendito es el fruto de tu vientre! —¿De dónde a mí
 Padre Nuestro … tanto bien, que venga la Madre de mi Señor a
 Dios te salve María … (3 veces) visitarme? (Luc., I, 42 y 43.)
 Gloria … El Bautista nonnato se estremece... (Luc., I, 41.) —La
humildad de María se vierte en el Magníficat... —Y tú
1º MISTERIO GOZOSO: LA ANUNCIACIÓN y yo, que somos —que éramos— unos soberbios,
prometemos que seremos humildes.
Dijo María al ángel: ¿Cómo podrá ser esto, pues yo no
conozco varón?”. El ángel le contestó y dijo: “El Espíritu  Padre Nuestro …
Santo vendrá sobre ti, y la virtud del Altísimo te cubrirá  Dios te salve María … (10 veces)
con su sombra, y por esto el Hijo engendrado será  Gloria …
llamado Hijo de Dios”. (Lc 1, 34-35)
Canto: Santa María del camino
No olvides, amigo mío, que somos niños. La Señora del
dulce nombre, María, está recogida en oración. Tú 3º MISTERIO GOZOSO: EL NACIMIENTO DE JESÚS
eres, en aquella casa, lo que quieras ser: un amigo, EN BELÉN
un criado, un curioso, un vecino... —Yo ahora no me
atrevo a ser nada. Me escondo detrás de ti y, En aquellos días, se promulgó un edicto de César
pasmado, contemplo la escena: El Arcángel dice su Augusto, para que se empadronase todo el mundo. Este
embajada... —¿De qué modo se hará esto si no primer empadronamiento fue hecho cuando Quirino era
conozco varón? (Lc., I, 34.). gobernador de Siria, y todos iban a inscribirse, cada uno
La voz de nuestra Madre agolpa en mi memoria, por a su ciudad. José, como era de la casa y familia de
contraste, todas las impurezas de los hombres..., las David, subió desde Nazaret, ciudad de Galilea, a la
mías también. ciudad de David llamada Belén, en Judea, para
empadronarse con María, su esposa, que estaba en cinta.
 Padre Nuestro … Y sucedió que estando allí, le llegó la hora del parto, y
 Dios te salve María … (10 veces) dió a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y
 Gloria … lo recostó en un pesebre, porque no hubo lugar para
ellos en la posada. (Lc 2, 1-7)
Canto: La escogida
Se ha promulgado un edicto de César Augusto, y
2º MISTERIO GOZOSO: LA VISITACIÓN DE LA manda empadronar a todo el mundo. Cada cual ha
VIRGEN MARÍA A SU PRIMA SANTA ISABEL de ir, para esto, al pueblo de donde arranca su
estirpe. —Como es José de la casa y familia de
Por aquellos días, María se levantó y marchó deprisa a David, va con la Virgen María desde Nazaret a la
la montaña, a una ciudad de Judá; y entró en casa de ciudad llamada Belén, en Judea. (Luc., II, 1-5.)Y en
Zacarías y saludó a Isabel. Y cuando oyó Isabel el saludo Belén nace nuestro Dios: ¡Jesucristo! —No hay lugar
de María, el niño saltó en su seno, e Isabel quedó llena en la posada: en un establo. —Y su Madre le
del Espíritu Santo; y exclamando en voz alta, dijo: envuelve en pañales y le recuesta en el pesebre. (Luc.,
-Bendita tú entre las mujeres y bendito es el fruto de tu II, 7.)
vientre. ¿De dónde a mí tanto bien, que venga la madre Frío. —Pobreza. —Soy un esclavito de José. —¡Qué
de mi Señor a visitarme? Pues en cuanto llegó tu saludo bueno es José! —Me trata como un padre a su hijo.
a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno; y —¡Hasta me perdona, si cojo en mis brazos al Niño y
bienaventurada tú, que has creído, porque se cumplirán me quedo, horas y horas, diciéndole cosas dulces y
encendidas!...Y le beso —bésale tú—, y le bailo, y le
canto, y le llamo Rey, Amor, mi Dios, mi Unico, mi oían quedaban admirados de su sabiduría y de sus
Todo!... ¡Qué hermoso es el Niño... y qué corta la respuestas. Al verlo se maravillaron, y le dijo su madre:
decena! -Hijo, ¿por qué nos has hecho esto? Mira que tu padre y
yo, angustiados, te buscábamos.
 Padre Nuestro … Y él les dijo:
 Dios te salve María … (10 veces) -¿Por qué me buscábais? ¿No sabíais que es necesario
 Gloria … que yo esté en las cosas de mi Padre?
Pero ellos no comprendieron lo que les dijo. Lc 2, 41-50
Canto: Maria, mírame.
¿Dónde está Jesús? —Señora: ¡el Niño!... ¿dónde está?
4º MISTERIO GOZOSO: LA PURIFICACIÓN DE Llora María. —Por demás hemos corrido tú y yo de
MARÍA Y LA PRESENTACIÓN DEL NIÑO grupo en grupo, de caravana en caravana: no le han
visto. —José, tras hacer inútiles esfuerzos por no
“Y cumplidos los días de su purificación según la Ley de llorar, llora también... Y tú... Y yo. Yo, como soy un
Moisés, lo llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor, criadito basto, lloro a moco tendido y clamo al cielo
como está mandado en la Ley del Señor: Todo varón y a la tierra..., por cuando le perdí por mi culpa y no
primogénito será consagrado al Señor; y para presentar clamé.
como ofrenda un par de tórtolas o dos pichones, según Jesús: que nunca más te pierda... Y entonces la
lo mandado en la Ley del Señor”. (Lc 2, 22-24 ) desgracia y el dolor nos unen, como nos unió el
pecado, y salen de todo nuestro ser gemidos de
Cumplido el tiempo de la purificación de la Madre, profunda contrición y frases ardientes, que la pluma
según la Ley de Moisés, es preciso ir con el Niño a no puede, no debe estampar.
Jerusalén para presentarle al Señor (Lc., 2, 22). Y esta Y, al consolarnos con el gozo de encontrar a Jesús —
vez serás tú, amigo mío, quien lleve la jaula de las ¡tres días de ausencia!— disputando con los Maestros
tórtolas. —¿Te fijas? Ella —¡la Inmaculada!— se de Israel (Lc. 2, 46), quedará muy grabada en tu
somete a la Ley como si estuviera inmunda. alma y en la mía la obligación de dejar a los de
¿Aprenderás con este ejemplo, niño tonto, a cumplir, nuestra casa por servir al Padre Celestial.
a pesar de todos los sacrificios personales, la Santa
Ley de Dios? ¡Purificarse! ¡Tú y yo sí que necesitamos  Padre Nuestro …
purificación! —Expiar, y, por encima de la expiación,  Dios te salve María … (10 veces)
el Amor. —Un amor que sea cauterio, que abrase la  Gloria …
roña de nuestra alma, y fuego, que encienda con
llamas divinas la miseria de nuestro corazón. Canto: Junto a ti María
Un hombre justo y temeroso de Dios, que movido por
el Espíritu Santo ha venido al templo —le había sido ORACIÓN
revelado que no moriría antes de ver al Cristo—, Te pedimos, Señor, nos concedas a nosotros tus
toma en sus brazos al Mesías y le dice: Ahora, Señor, siervos, gozar de perpetua salud de alma y cuerpo,
ahora sí que sacas en paz de este mundo a tu siervo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada
según tu promesa... porque mis ojos han visto al siempre Virgen María, seamos librados de las
Salvador (Lc., 2, 25-30.). tristezas presentes y gocemos de la eterna alegría.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
 Padre Nuestro …
 Dios te salve María … (10 veces) Por las intenciones del Santo Padre
 Gloria …  Padre Nuestro …
 Dios te salve María …
Canto: Hoy he vuelto  Gloria …

5º MISTERIO GOZOSO: EL NIÑO PERDIDO Y Canto: Salve, Salve

Sus padres iban todos los años a Jerusalén para la fiesta En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu
de la Pascua. Y cuando tuvo doce años, subieron a la Santo. Amén.
fiesta, como era costumbre. Pasados aquellos días, al
regresar, el niño Jesús se quedó en Jersusalén sin que lo
advirtieran sus padres. Suponiendo que iba en la
caravana, hicieron un día de camino buscándolo entre
los parientes y conocidos, y al no encontrarlo, volvieron
a Jersualén en su busca. Y al cabo de tres días lo
encontraron en el Templo, sentado en medio de los
doctores, escuchándoles y preguntándoles. Cuando le