3Exorcismo de san miguel arcángel

Una de las mayores necesidades de la iglesia es la defensa contra ese mal que
llamamos Demonio, el enemigo número uno, el tentador por excelencia. Sabemos
que ser obscuro e inquietante existe realmente, y que sigue actuando con hábil
astucia, es el mayor enemigo del hombre, sembrador de errores y desventuras en
la historia humana.
Todo lo que nos defiende del pecado nos protege del enemigo invisible. La gracia,
la defensa decisiva y la inocencia adquieren el aspecto de fortaleza…
(Fragmentos de un discurso de s.s paulo VI, 15-XI-72).
El señor dijo a María Gaf- Sutter: “manda al enemigo que ceda. Reza diariamente
el exorcismo y después entrégame los pecadores a mis santas llagas…”, “afín de
luchar con la fuerza de Dios contra el enemigo de las almas”.
Di a los sacerdotes que recen el Exorcismo, sobre todo por los enemigos de la
Iglesia. Si los sacerdotes supieran qué poder les di con este conjuro, podríais
alejar al enemigo...”
PROTECCION A SAN MIGUEL ARCANGEL
El Papa León XIII, cierto día estando en oración, vio la tierra invadida de sombras
negras, las cuales eran espíritus malignos y comprendió que a San Miguel estaba
reservado hacerlos volver de nuevo a su eterno encarcelamiento.
Por esta causa, el mismo Papa compuso la primera oración que encabeza este
Exorcismo y la hizo leer en presencia de 80.000 peregrinos.
Son muchos y grandes los favores que se han alcanzado rezándolo, en forma
simple o como novena. Es práctica muy laudable cuando se reza diariamente. ¡Tal
es el poder que Dios concede a este Exorcismo, si con fe y confianza acudimos a
su poderoso Arcángel!
San Miguel reveló a una santa religiosa española el admirable poder que Dios le
entregó, diciéndole: “Manifiesta lo mucho que puedo ante el Altísimo: di que me
pidan cuanto quieran, pues grande es mi poder ante Dios”.
E insistió nuevamente: "Descubre mis Grandezas”. La santa religiosa concluye:

“Feliz la nación, población o monasterio que se esmere en su devoción”.

1
La brevedad de esta explicación no nos permite citar detalladamente los favores y
gracias obtenidos. Enumeremos algunos:
- La Superiora de una Comunidad se libra de un pleito engorroso;
- Otra se ve libre de odiosas calumnias;
- Un Arzobispo desbarata insidias y calumnias que los masones propagaban
en su Diócesis, reduciéndolo al silencio;
- En 1920, Chile se salva de un complot comunista;
- Un párroco francés invoca a San Miguel Arcángel y su región se libra de
una explosión que amenazaba reducirla a cenizas y ruinas, durante la
guerra europea de 1918.
Y así muchos favores más, sin contar las curaciones de enfermedades, etc.
Este exorcismo lo pueden rezar todos los fieles privadamente, pues no se trata de
exorcismo para liberar a un poseso, el cual debe hacerlo un sacerdote con el
permiso del Obispo.
Que el Sagrado Corazón de Jesús, haga crecer en nuestra Patria la devoción a
San Miguel Arcángel.
INVOCACIÓN A SAN MIGUEL ARCANGEL
¡Oh, Arcángel San Miguel!, defiéndenos en los combates, sé nuestro amparo
contra la maldad y asechanzas del demonio.
Mándele el Señor que no pueda dañarnos, humildemente te lo pedimos. Y tú, ¡oh,
Príncipe de la Milicia Celestial!, usando el poder que el Cielo te ha Conferido,
lanza al infierno a Satanás y demás espíritus malignos que recorren el mundo para
perder las almas. Amen.
(S.S. León XIII)

2
ORACIÓN PREPARACIÓN PARA EL EXORCISMO CONTRA SATANÁS Y LOS
ÁNGELES REBELDES.

(Publicado por orden del S.S. León XIII

+ El nombre Padre. Del hijo y Espíritu Santo. Amén.
Glorioso príncipe de los ejércitos celestiales, San Miguel Arcángel, defiéndenos en
el combate contra los jefes de estás tinieblas del mundo, contra los espíritus
malignos esparcidos por los aíres (1)-
Ven en auxilio de los hombres que Dios creó a imagen y semejanza y que rescató
a un alto precio de la tiranía del demonio (2). A ti, la Iglesia te venera como su
guardián y patrono. A ti, él Señor confió las almas redimidas: para colocarlas en; el
lugar dé la suprema felicidad.
Ruega, pues, al Dios de la paz, que aplaste al demonio bajo nuestros pies,
quitándole todo el poder para retener cautivos a los hombres y hacer daño a la
Iglesia.
pon nuestras oraciones bajo la mirada del Altísimo, a fin de que desciendan
cuanto antes sobre nosotros las misericordias Señor, y sujeta al dragón infernal,
aquella antigua Serpiente-, que es el diablo o satanás, para precipitarlo
encadenado a los abismos, de manera que nunca más pueda seducir á las
naciones (*).
(1) (Ef. 6,10-12)
(2) Sab. 2,23-24 y 1a Cor. 6,20
(*) Ap. 20,3
EXORCISMO
En el nombre de Jesucristo, Dios y Señor nuestro, mediante la intercesión de la
Inmaculada Virgen María, Madre de Dios, de San Miguel Arcángel, de los Santos
Apóstoles Pedro y Pablo y de todos los Santos y apoyados en la autoridad
Sagrada de la Santa Iglesia, con ánimo seguro rechazamos los asaltos que la
astucia del demonio mueve en contra de nosotros.

3
Salmo 67
Que Dios se levante y sean disipados sus enemigos, y huyan de su presencia los
que los aborrecen.
Desaparezcan como el humo, como se derrite la cera al calor del fuego así
perezcan los pecadores a la vista de Dios,
He aquí la cruz del Señor, ¡huyan poderes enemigos!
Solo Venció al león de la tribu de Judá, el Hijo de David.
Todos Venga a nosotros, Señor, tu misericordia.
Solo Puesto que pusimos nuestra esperanza en Ti.
Los exorcizamos, espíritus de impureza, poderes satánicos, ataques del enemigo
infernal, legiones, reuniones secretas diabólicas.
En el hombre y por virtud de Jesucristo + (1)
Nuestro Señor, los arrancamos y expulsamos de la Iglesia de Dios, de las almas
creadas a imagen de Dios, y rescatadas por la preciosa sangre del Cordero
divino+.
No te atrevas más, pérfida serpiente, a engañar al género humano, a perseguir a
la Iglesia, ni a sacudir a los elegidos de Dios.
Te manda Dios Altísimo, + a ti, que por tu gran soberbia, aún pretendes
asemejarte a Él, cuya Voluntad es que todos los hombres se salven y lleguen al
conocimiento de la Verdad (2).
+ Te manda Dios Padre;
+ Te manda Dios Hijo;
+ Te manda Dios Espíritu Santo;
+ Te manda Cristo, Verbo eterno de Dios hecho carne +, que para salvar nuestra
raza, perdida por tu envidia, se humilló y fue obediente, hasta la muerte (3)
Que ha edificado su Iglesia sobre la roca, que es Pedro, prometido que las puertas
del infierno jamás prevalecerían contra ella, y que permanecería con ella todos los
días hasta la consumación de los siglos (4).
(1) Cada vez que se encuentre este signo: + se debe hacer la señal de la Cruz.
(2) 1 Tim. 11,4
(3) Fil.,11,8

4
(4) Mt. 38,14-15
Te manda la santa señal de la Cruz + y la virtud de todos los misterios de la fe
cristiana +.
Te manda el poder de la Excelsa Madre de Dios; la Virgen María, + que desde el
primer instante de su Inmaculada Concepción aplastó tu muy orgullosa cabeza en
virtud de su humildad +.
Te manda la fe de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y de los demás
Apóstoles+.
Te manda la sangre de los Mártires, y la piadosa intercesión de los Santos y
Santas.
Así, pues, dragón maldito y toda la legión diabólica, los conjuramos: por el Dios +
vivo, por el Dios + verdadero y por el Dios + Santo, por el Dios que tanto amó al
mundo, que llegó hasta darle su Hijo Unigénito, a fin de que todos los que creen
en El no perezcan, sino que vivan la vida eterna (*)..
Cesa de engañar a las criaturas humanas, brindándoles el veneno de la
condenación eterna.
Cesa de perjudicar a la Iglesia, poniendo trabas a su libertad.
Huye de aquí, Satanás, inventor y maestro de todo engaño, enemigo de la
salvación Dé los hombres.
Retrocede delante de Cristo, en quien nada has encontrado que se asemeje a tus
obras; retrocede ante la Iglesia, que es Una, Santa, Católica, Apostólica y
Romana, que Cristo mismo compró con su Sangre.
Humíllate bajo la poderosa mano de Dios, tiembla y desaparece ante la invocación
hecha por nosotros, del santo y terrible nombre de Jesús, ante el cual se
estremecen los Infiernos; a quien están sometidas las virtudes de los Cielos, las
Potestades y las Dominaciones.
Que los Querubines y Serafines lo alaben sin cesar con sus cánticos, diciendo:
¡Santo, Santo, Santo es el Señor Dios de los ejércitos!
SOLO Señor, escucha mí plegaria.
TODOS Y mi clamor llegue hasta Ti
SOLO El Señor esté con ustedes.

5
TODOS Y con tu espíritu.
ORACION
Dios del Cielo y de la tierra, Dios de los Ángeles, Dios de los Arcángeles.
Dios de los Patriarcas, Dios de los Profetas, Dios de los Apóstoles.
Dios de los Mártires, Dios de los Confesores, Dios de las Vírgenes.
Dios, Tú que tienes el poder de dar la vida después de la muerte, el descanso
después del trabajo.
Porque no hay otro Dios delante de Ti, Señor, ni puede haber otro sino Tú mismo,
Creador de todas las cosas visibles e invisibles, cuyo reino no tendrá fin.
Humildemente suplicamos a la majestad de tu gloria, se digne librarnos
eficazmente y guardarnos sanos de todo poder, lazo, mentira y maldad de los
espíritus. Por Cristo, Nuestro Señor. Amén. (*)Jn. 3,14-15
- De las acechanzas del demonio.
LIBRANOS SEÑOR
- Dígnate conceder a tu Iglesia la seguridad y la libertad necesarias para tu
servicio.
TE ROGAMOS SEÑOR. OYENOS
- Dígnate humillar a los enemigos de la Santa Iglesia.
TE ROGAMOS SEÑOR. OYENOS
(Ser rocia agua bendita en el lugar que se está haciendo el exorcismo)

¡Ave María Purísima!

¡Sin pecado concebida!
¡Viva Jesús sacramentado!
¡Viva la Inmaculada!
TRIDUO A SAN MIGUEL ARCANGEL
Durante los 3 días se reza:
- Por la señal de la Santa Cruz...
- Acto de contrición
- ¡Glorioso Arcángel San Miguel! Oración del Día
- 3 Padrenuestros, 3 Avemarias y 3 Glorias
- Invocación a San Miguel Arcángel 

6
 DIA PRIMERO
Por la señal de la Santa Cruz sean borrados nuestros pecados.
ACATO DE CONTRADICION
Señor mío, Jesucristo, Tú que no quieres la muerte del pecador, sino que se convierta y
viva, mírame postrado a tus pies, lleno de arrepentimiento por la multitud de mis pecados:
Yo los detesto con toda mi alma, porque al cometerlos me separo de Dios y podría perder
el cielo, sino más bien, porque con ellos he ofendido a un Dios tan bueno, a un Padre tan
amable, a tu infinita Majestad. ¡Oh, Dios mío, dame un profundo dolor por haberte
ofendido; te pido perdone imploro tu misericordia.
En adelante, con la ayuda de tu divina gracia, el auxilio de la Santísima Virgen y de mi
defensor, San Miguel Arcángel, quiero no volver a ofenderte, perseverar en servicio y en
el de mis hermanos. Amén.

GLORIOSO ARCANGEL SAN MIGUEL

Glorioso Arcángel de los Cielos, milagroso San Miguel que por los méritos de tu humildad,
el Señor te concedió encadenar al espíritu del mal, que en su rebeldía dijo “¿Quién es
como yo?”, y tú, indignado por tanta soberbia, dijiste ¿Quién como Dios?”, echando con tu
espada al soberbio Luzbel a los abismos.
Bendito seas, San Miguel que nos enseñas esta gran virtud de la humildad, ayúdame para
que crezca en mi alma esta virtud tan agradable a Dios, que me permitirá entrar en el
cielo.
Alcánzame la contrición perfecta de mis- pecados, aleja de mí al enemigo, y en la hora de
mi muerte defiéndeme con tu grata y luminosa presencia.
Tú, que estás tan cerca de Dios, presenta ante la Divina Misericordia mi oración, y así, por
tus ruegos me conceda del Señor la gracia que te pido: (nombrar la gracia).
Oración del primer día
Oh, bienaventurado San Miguel Arcángel, contigo adoro al Padre, al Hijo y al Espiral
Santo. Te ruego no desoigas mi plegaria y con tus benditas alas, acorta la distancia que
existe entre el cielo y la tierra, acércate a mí y cúbreme con tu protección, concediéndome
la Divina Providencia la gracia que te pido, pues es de mucha necesidad para la paz de mi
alma; espero que antes que llegue el tercer día de esta oración, consiga lo que deseo si

7
es la voluntad del Señor, y si no, consuélame y, dame resignación y fuerza para sufrir y
poderlo ofrecer con humildad a nuestro Padre celestial. Amén. (Se rezan 3 Padrenuestros,
3 Avemarias y 3 Glorias)
INVOCACIÓN
San Miguel Arcángel, lucha a nuestro lado con tus ángeles, defiéndenos y ruega por
nosotros.
DÍA SEGUNDO
La señal de la Santa Cruz, acto de Contrición, Glorioso Arcángel San Miguel.
ORACIÓN DEL SEGUNDO.
San Miguel Arcángel, contigo adoro a la Santísima Trinidad. Te ruego para que me ilumine
y pueda ver bien a fondo mis pecados.
Dame el dolor de haber ofendido aun Dios tan bueno, preséntame ante la Majestad
soberana de Dios y como eres gran ministro en el cielo, líbrame de así de las tribulaciones
de la tierra y ampárame en la presente que estoy sufriendo. Amén.
(Se rezan 3 Padrenuestros, 3 Avemarías y 3 Glorias; invocación a San Miguel Arcángel)
DÍA TERCERO
La señal de la Santa Cruz, acto de contrición, Glorioso Arcángel San Miguel
ORACION DEL TERCER DIA
Oh, querido San Miguel, contigo adoro a la trinidad Santa, Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Atiéndeme en esta súplica, pues no puedo luchar solo contra las contrariedades de esta
vida. En este mundo tan corrompido y hostil a Dios, necesito tu poderosa ayuda.
Hoy, en el último día de este triduo, te ruego presentes al Altísimo mis peticiones, y por los
méritos de tu humildad, consígueme de Dios el favor que te pido. Creo con toda la fe de
mi alma; espero con toda confianza y amo con toda fuerza de mi corazón. Amén.
(Se rezan 3 Padrenuestros, 3 Avemarías y 3 Glorias, Invocación a San Miguel Arcángel)
SAN MIGUEL Y EL COMBATE ESPIRITUAL
Oh, glorioso Príncipe de los ejércitos celestiales, San Miguel Arcángel, defiéndenos en el
combate contra los principados y las potencias, contra los jefes de este mundo de
tinieblas, contra los espíritus dé malicia, diseminados por los aires,(Ef..6,12).
Ven en ayuda de los hombres que Dios creó a su imagen y semejanza, y que compró a
tan alto precio de la tiranía del demonio. Eres tu quien la Santa Iglesia venera como

8
su*guardián y su protector; tú a quien el Señor ha confiado las almas Rescatadas, para
introducirlas en la celeste felicidad.
Conjura al Dios de la paz que El aplaste a Satanás bajo nuestros pies, a fin de quitarle
todo el poder de retener aún a los hombres cautivos y dañara la Iglesia.
Presenta al Altísimo nuestras oraciones, a fin de qué, luego, bajen sobre nosotros las
Misericordias del Señor; y agarra tu mismo la antigua serpiente, que no es otra que el
diablo o satanás para precipitarlo encadenarlo a los abismos, de manera que nunca mas
pueda seducir a las naciones( Ap 20,2-3).
ORACION A LA RENA DE LOS ANGELES Y TERROR DEL
INVIERNO.
Gloriosa Reyna de cielo, sublime señora de los ángeles, desde el principio Dios te dio la
virtud y la misión de aplastar la cabeza de Satanás. Muy humildemente te suplicamos que
nos envíes tus legiones celestiales, para que bajo tu manto y por tu virtud, repriman a los
espíritus malignos, los combatan en todas partes, confundan su osadía y los arrojen al
infierno.
Gloriosísima Madre de Dios, envía tus ejércitos invencibles para que nos ayuden en la
lucha contra los emisarios del infierno entre los hombres; frustra los planes de los ateos y
confunde a los impíos; concédeles gracia de la luz y de la conversión, para *que con
nosotros alaben a la Santísima Anidad y te honren a Ti, nuestra Madre clemente, piadosa
y dulce.
Patrona poderosa, que tus Ángeles protejan tus Iglesias y Santuarios en todo el mundo.
Que protejan las casas de Dios, los lugares sagrados, las personas y cosas, y
especialmente la Santísima Eucaristía. Presérvalas de la profanación, del robo, de la
destrucción y desacralización. Presérvalas, Señora nuestra!
Oh Madre celestial, sé el amparo de nuestras cosas, de nuestras moradas y familias
contra la maldad y astucia de nuestros enemigos visibles e invisibles.

Que tus santos Ángeles habiten en ellas y reine la devoción, paz y gozo en el Espíritu’
Santo.
¿Quien como Dios? ¿Quién como Tú, Reina de los Ángeles y Terror del infierno? Oh,
clemente, oh dulce Madre de Dios y Madre Inmaculada del Rey de los Ángeles, “que ven
continuamente la cara del Padre que está en los cielos”, ¡Tú eres ¿¡para siempre nuestro
amor y amparo, nuestra esperanza y nuestra gloria!
¡San Miguel, santos Arcángeles, defiéndannos, protéjannos! Amén

9
 EXORCISMO PRIVADO
Cada uno puede y debería utilizarlo y recitarlo sobre sí mismo y otros-también de lejos-
usando la Señal de la Cruz y agua bendita, particularmente en tiempos de graves
tentaciones, de pruebas y tribulaciones, de confusión y ofuscación, en momentos de
abatimiento y desesperación, al tratar asuntos importantes o al tomar graves decisiones,
frente a personas hostiles y especialmente cerca- de la cama de los enfermos o
moribundos:
En el nombre de Jesús, María y José, yo les mando, espíritus malignos, dejarnos y salir
de este lugar (dejarlos y salir de aquel lugar).
No se atrevan a volver a tentamos y hacernos nuevamente daño (tentarlos y hacerles
nuevamente daño).
¡Jesús! ¡María! ¡José! (repetir tres veces). ¡San Miguel, defiéndenos! ¡Santos Ángeles dé
la Guarda, protéjannos contra la maldad del diablo!

VENDICION
La bendición del Padre, del amor del Hijo y la virtud del Espíritu Santo, la protección
maternal de la Reina del Cielo, los méritos! de San José, la ayuda de los Ángeles y la
intercesión de todos los Santos estén con nosotros (ustedes) y nos (los) acompañen
siempre y por todas partes. Amén.
LOS ÁNGELES SON NUESTRO AUXILIO
Un día se le apareció la Madre de Dios al I Padre Ludwig Eduard Cestac, fundador de las
“Siervas de María”, y lo exhortó a orar para que Ella mandara a los santos ángeles a
socorrer al mundo. A la objeción hecha por el Padre Cestac, de que Ella es
suficientemente poderosa para enviar a los ángeles sin necesidad de que los hombres se
lo pidan, la Virgen respondió:
La oración es una condición requerida por Dios. Yo misma vendré con una legión de
ángeles en ayuda de la Iglesia y la salvaré”
La misma Virgen María le dictó al Padre Ludwigla siguiente oración:
¡Oh, Augusta Reina del Cielo y Soberana de los Ángeles!
A ti, que has recibido de Dios el poder y la misión de aplastar la cabeza de Satanás, te
pedimos,, humildemente, que envíes las Legiones Celestiales, para que bajo tus órdenes

10
persigan a los demonios, los combatan por todas partes, repriman su audacia y los arrojen
al abismo.
¿Quién como Dios?
¡Oh, santos Ángeles y Arcángeles, defiéndannos y guárdennos!
Oh Buena y tierna Madre! ¡Tú serás siempre nuestro amor y nuestra esperanza!
Oh Divina Madre! ¡Envía a los santos Ángeles para defendernos y rechazar de nosotros al
cruel enemigo!
Santos Ángeles y Arcángeles, defiéndannos y guárdennos! Amén”
María Santísima expresó el deseo de que esta oración fuera repartida y rezada por todas
partes. El Papa San Pío X la enriqueció con indulgencias en 1908. Fue cosa sorprendente
que al imprimir esta oración por primera vez, la maquinaria estallara tres veces.
HI Papa Pío XII, en su última alocución, a principios de octubre de 1958, tuvo una visión
del futuro, cuando dijo: “Nubes oscuras y graves acontecimientos sobrevendrán sobre la
Iglesia y el mundo.
Si queremos vencer debemos aliamos con los santos ángeles del cielo”.

¡VIVA JESÚS!
Rosario de las santas llegadas de nuestro señor Jesucristo
Este Rosario que enseñamos a continuación, rico en gracias e indulgencias -que
podemos aplicar a las almas del Purgatorio- fue enseñado por el mismo Señor Jesús a
una humilde hermana del Monasterio de la Visitación de Santa María, en Chambery
(Francia), la hermana María Marta Chambón, muerta en olor de santidad el 21 de marzo
de 1907.
Sobre la Cruz y en las tres primeras cuentas, besando la Cruz, se dice:
I Oh Jesús, Redentor Divino, sé misericordioso con nosotros y con el mundo entero.
Amén.
II Santo Dios, Santo Fuerte, Santo inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero.
Amén.
III ¡Perdón!¡Misericordia, Jesús mío!; durante los presentes peligros cúbrenos con tu
preciosa Sangre. Amén.
IV Padre Eterno, ten misericordia por la Sangre de Jesucristo, tu Hijo único; ten
misericordia de nosotros, te lo suplicamos. Amén,
En las cuentas pequeñas:

11
Jesús mío, perdón y misericordia. Por los méritos de tus Santas Llagas. (300 días de
indulgencia)
En las cuentas grandes:
Padre Eterno, te ofrezco las Llagas de Nuestro Señor Jesucristo. Para sanarlas de
nuestras almas. (300 días de indulgencia)
Al terminar el Rosario se dice tres veces:
Padre Eterno, te ofrezco las Llagas, etc.
Estas invocaciones han sido enriquecidas con 300 días de indulgencia cada una.

ORACIÓN Y BENDICIÓN
Dios Padre nos ampare.
Dios Hijo nos guarde.
Dios Espíritu Santo nos defienda. Con el velo de la Santísima Virgen María seamos
cubiertos.
Ni heridos, ni muertos, ni presos ni cautivos.
Ni de nuestros enemigos vencidos. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros.
El Poder de Dios nos valga y la fuerza de la Fé. La pureza de la Santísima Virgen María y
la castidad de Señor San José. Amén.

12