Civil VI Resumen Derecho de Familia Matrimonio
Civil VI Resumen Derecho de Familia Matrimonio
Civil VI Resumen Derecho de Familia Matrimonio
INTRODUCCIÓN.
1. Concepto de familia.
No existe en nuestra legislación una definición de familia, salvo el del Art. 815 CC, para
fines muy limitados (uso y habitación).
5. Derecho de Familia.
Derecho de Familia (sentido objetivo): conjunto de normas y preceptos que regulan las
relaciones personales y patrimoniales de los miembros de la familia entre sí y respecto de
terceros.
a) Contenido eminentemente ético. Por ello encontramos preceptos sin sanción o con sanción
atenuada, obligaciones incoercibles.
7. Parentesco.
Parentesco: relación de familia que existe entre dos personas. Puede ser de dos clases:
a) Por consanguinidad: Art. 28 CC. “Parentesco por consanguinidad es aquel que existe
entre dos personas que descienden una de la otra o de un mismo progenitor, en cualquiera
de sus grados.”
b) Por afinidad: Art. 31 inc. 1º CC. “Parentesco por afinidad es el que existe entre una
persona que está o ha estado casada y los consanguíneos de su marido o mujer.” Dos
reglas:
1) Los cónyuges no son parientes entre sí.
2) El parentesco por afinidad subsiste aún después de la muerte de uno de los cónyuges.
Línea: serie de parientes que descienden unos de otros (línea recta) o de un tronco común
(línea colateral) (Art. 27 inc. 2º CC).
Grado: distancia que existe entre dos parientes. En el parentesco en línea recta se cuenta
por el número de generaciones. En el parentesco colateral, se sube hasta el tronco común, y se
baja al pariente cuyo grado se quiere conocer (Art. 27 inc. 1º CC).
La línea y el grado en el parentesco por afinidad se califican por la línea y grado del
marido o mujer con su consanguíneo (Art. 31 inc. 2º CC).
1. Definición.
Art. 102 CC. “El matrimonio es un contrato solemne por el cual un hombre y una mujer
se unen actual e indisolublemente, y por toda la vida, con el fin de vivir juntos, de procrear, y de
auxiliarse mutuamente.”
Elementos:
a) El matrimonio es un contrato: hay diversas teorías para explicar la naturaleza jurídica del
matrimonio:
1) Es un contrato, pues el acuerdo de voluntades crea la relación jurídica, aunque es un
contrato sui generis. Crítica: las normas que limitan la autonomía de la voluntad
demuestran la diferencia entre el contrato y el matrimonio. Esta tesis no explica
algunas características propias del matrimonio, como su perpetuidad e indisolubilidad.
2) Es un acto del Estado, que a través del oficial civil une a las partes en matrimonio. La
voluntad de las partes sólo es un presupuesto necesario. En nuestra legislación se
aprecia que la función del oficial del Registro Civil es mucho mayor a la de un simple
ministro de fe: es él quien los une.
d) Por el cual se unen actual e indisolublemente y por toda la vida: la palabra “actual”
descarta las modalidades suspensivas; las expresiones “indisolublemente” y “por toda la
vida” no corresponden a la realidad actual del matrimonio.
e) Con el fin de vivir juntos, de procrear y auxiliarse mutuamente: esto es importante, pues
la finalidad no es sólo procrear.
Art. 103 CC. “El matrimonio podrá celebrarse por mandatario especialmente facultado
para este efecto. El mandato deberá otorgarse por escritura pública, e indicar el nombre, apellido,
profesión y domicilio de los contrayentes y del mandatario.”
1) Error:
2) Fuerza:
“3.° Si ha habido fuerza, en los términos de los artículos 1456 y 1457 del Código
Civil, ocasionada por una persona o por una circunstancia externa, que hubiere sido
determinante para contraer el vínculo.”
i) Absolutos: obstan al matrimonio con cualquier persona. Art. 5° LMC. “No podrán
contraer matrimonio:”
c. “3.° Los que se hallaren privados del uso de razón; y los que por un trastorno o
anomalía psíquica, fehacientemente diagnosticada, sean incapaces de modo
absoluto para formar la comunidad de vida que implica el matrimonio;”
De acuerdo a los Arts. 27 Ley 7.613 y 18 Ley 18.703 sobre Adopción, es nulo el
matrimonio entre el adoptante y el adoptado, o entre el adoptado y el viudo o viuda
del adoptante.
Art. 105 primera parte CC. “No podrá procederse a la celebración del matrimonio
sin el asenso o licencia de la persona o personas cuyo consentimiento sea
necesario…”
Art. 106 CC. “Los que hayan cumplido dieciocho años no estarán obligados a
obtener el consentimiento de persona alguna.”
c. Disenso.
Art. 113 CC. “Las razones que justifican el disenso no podrán ser otras que
éstas:
1.ª La existencia de cualquier impedimento legal, incluso el señalado en el
artículo 116;
2.ª El no haberse practicado alguna de las diligencias prescritas en el título
De las segundas nupcias, en su caso;
3.ª Grave peligro para la salud del menor a quien se niega la licencia, o de la
prole;
4.ª Vida licenciosa, pasión inmoderada al juego, embriaguez habitual, de la
persona con quien el menor desea casarse;
5.ª Haber sido condenada esa persona por delito que merezca pena aflictiva;
6.ª No tener ninguno de los esposos medios actuales para el competente
desempeño de las obligaciones del matrimonio.”
e. El oficial del Registro Civil que autoriza un matrimonio de un menor sin exigir
la autorización está sujeto a sanciones penales (Art. 388 CP).
Art. 116 CC. “Mientras que una persona no hubiere cumplido dieciocho años, no
será lícito al tutor o curador que haya administrado o administre sus bienes, casarse
con ella, sin que la cuenta de la administración haya sido aprobada por el juez, con
audiencia del defensor de menores.
Igual inhabilidad se extiende a los descendientes del tutor o curador para el
matrimonio con el pupilo o pupila.
El matrimonio celebrado en contravención a esta disposición, sujetará al tutor o
curador que lo haya contraído o permitido, a la pérdida de toda remuneración que
por su cargo le corresponda; sin perjuicio de las otras penas que las leyes le
impongan.
No habrá lugar a las disposiciones de este artículo, si el matrimonio es autorizado
por el ascendiente o ascendientes cuyo consentimiento fuere necesario para
contraerlo.”
Art. 124 CC. “El viudo o viuda que teniendo hijos de precedente matrimonio bajo
su patria potestad, o bajo su tutela o curaduría, quisiere volver a casarse, deberá
proceder al inventario solemne de los bienes que esté administrando y les
pertenezcan como herederos de su cónyuge difunto o con cualquiera otro título.
Para la confección de este inventario se dará a dichos hijos un curador especial.”
Art. 127 CC. “El viudo o viuda por cuya negligencia hubiere dejado de hacerse en
tiempo oportuno el inventario prevenido en el artículo 124, perderá el derecho de
suceder como legitimario o como heredero abintestato al hijo cuyos bienes ha
administrado.”
También hay sanciones penales para el que obtiene que el oficial del Registro Civil
autorice el matrimonio (Art. 384 CP) y también para el oficial que lo autorice sin
respetar el impedimento (Art. 388 CP).
Art. 128 CC. “Cuando un matrimonio haya sido disuelto o declarado nulo, la
mujer que está embarazada no podrá pasar a otras nupcias antes del parto, o (no
habiendo señales de preñez) antes de cumplirse los doscientos setenta días
subsiguientes a la disolución o declaración de nulidad.
Pero se podrán rebajar de este plazo todos los días que hayan precedido
inmediatamente a dicha disolución o declaración, y en los cuales haya sido
absolutamente imposible el acceso del marido a la mujer.”
i) Formalidades previas:
Acto en que los futuros contrayentes dan a conocer al oficial del Registro Civil
su intención de contraer matrimonio ante él. Puede ser por escrito, oralmente o
por lenguaje de señas. Puede hacerse ante cualquier oficial.
Comprobación, mediante dos testigos, del hecho que los futuros contrayentes
no tienen impedimentos ni prohibiciones para contraer matrimonio.
1
Maricruz G. de la T. le llama “comunicación”.
Transcurrido dicho plazo sin que el matrimonio se haya efectuado, habrá que
repetir las formalidades prescritas en los artículos precedentes.”
Art. 17 inc. 1º LMC. “El matrimonio se celebrará ante el Oficial del Registro
Civil que intervino en la realización de las diligencias de manifestación e
información.”
En consecuencia, todo oficial civil es competente para la celebración del
matrimonio.
b. Presencia de testigos:
Art. 17 inc. 2º LMC. “La celebración tendrá lugar ante dos testigos, parientes o
extraños,…”.
Los testigos deben ser hábiles.
Art. 19 inc. 1º LMC. “El Oficial del Registro Civil levantará acta de todo lo
obrado, la que será firmada por él, por los testigos y por los cónyuges, si supieren y
pudieren hacerlo. Luego, procederá a hacer la inscripción en los libros del Registro
Civil en la forma prescrita en el reglamento.”
Matrimonio celebrado ante entidades religiosas: para que produzca efectos civiles
debe cumplir con los siguientes requisitos (Art. 20 LMC):
a. Debe celebrarse ante una entidad religiosa que tenga personalidad jurídica de
derecho público.
b. Debe autorizarlo un ministro del culto que estatutariamente tenga facultades
para ello.
c. Debe levantarse un acta que acredite la celebración del matrimonio y el
cumplimiento de las exigencias que la ley establece para su validez.
d. El acta debe estar suscrita por el ministro del culto ante quien se haya
celebrado, y debe cumplir las exigencias del Art. 40 bis de la Ley de Registro
Civil. Ej. Señalar el decreto que concede personalidad jurídica de derecho
público a la entidad religiosa.
e. El acta debe ser presentada por los contrayentes ante cualquier oficial del
Registro Civil dentro de 8 días para su inscripción.
1. Quienes deben presentar el acta son los propios contrayentes, en forma
personal, no pudiendo hacerlo por medio de mandatarios.
2. El plazo es de 8 días corridos. Es un plazo de caducidad; si no se inscribe, el
matrimonio no produce efecto civil alguno, es inexistente.
3. El plazo es para presentar el acta y para inscribir el matrimonio.
f. Los comparecientes debe ratificar ante el oficial el consentimiento prestado
ante el ministro del culto (sólo se ratifica lo que ya existe, por lo tanto la fecha
del matrimonio es la del religioso, pues ahí se prestó el consentimiento).
i) Requisitos de forma: se rigen por la ley del país en que se celebra el matrimonio.
ii) Requisitos de fondo: también se rigen por esa ley, con 2 excepciones:
a. Deben respetarse los impedimentos dirimentes; de lo contrario, puede
declararse nulo el matrimonio en Chile.
iii) Efectos: son los mismos que si se hubiera celebrado en Chile, siempre que se trate
de un hombre y una mujer. El cónyuge domiciliado en Chile puede exigir
alimentos del otro ante los tribunales chilenos, conforme a la ley chilena, como
del mismo modo puede hacerlo el cónyuge residente en el extranjero respecto del
cónyuge domiciliado en Chile (Art. 82 LMC). Además, hay que tener presente la
regla del Art. 135 inc. 2º CC, relativa al régimen matrimonial.
a) Separación de hecho.
Art. 21 LMC. “Si los cónyuges se separaren de hecho, podrán, de común acuerdo,
regular sus relaciones mutuas, especialmente los alimentos que se deban y las
materias vinculadas al régimen de bienes del matrimonio.
En todo caso, si hubiere hijos, dicho acuerdo deberá regular también, a lo menos,
el régimen aplicable a los alimentos, al cuidado personal y a la relación directa y
regular que mantendrá con los hijos aquél de los padres que no los tuviere bajo su
cuidado.
Los acuerdos antes mencionados deberán respetar los derechos conferidos por las
leyes que tengan el carácter de irrenunciables.”
Requisitos para que el acuerdo otorgue fecha cierta al cese de la convivencia (Art.
22 LMC):
a. Debe constar por escrito en alguno de los siguientes instrumentos:
1. Escritura pública o acta extendida y protocolizada ante notario.
2. Acta extendida ante un oficial del Registro Civil.
3. Transacción aprobada judicialmente.
b. Si el cumplimiento del acuerdo requiere una inscripción o anotación en un
registro, la fecha del cese es aquella en que se cumpla tal formalidad.
2) Resumen sobre los casos que dan fecha cierta del cese de la convivencia:
i) Cuando el acuerdo de los cónyuges consta por escrito, por los instrumentos del Art.
22 LMC.
ii) Cuando a falta de acuerdo, se demanda judicialmente (notificación de la demanda).
iii) Cuando, habiendo uno de los cónyuges expresado su voluntad de poner fin a la
convivencia, se notifique al otro cónyuge.
b) Separación judicial.
i) Por uno de los cónyuges si mediare falta imputable al otro, siempre que constituya
una violación grave de los deberes y obligaciones que impone el matrimonio, o de
los deberes y obligaciones para con los hijos, que torne intolerable la vida en
común (Art. 26 LMC).
ii) Por cualquiera de los cónyuges, cuando hubiere cesado la convivencia (Art. 27
LMC). Si la solicitud es conjunta, deben acompañar un acuerdo que regule sus
relaciones mutuas y con respecto a sus hijos. El acuerdo debe ser:
a. Completo: regular todas las materias del Art. 21 LMC.
b. Suficiente: resguardar el interés superior de los hijos, procurar aminorar el
menoscabo económico que pudo causar la ruptura y establecer relaciones
equitativas, hacia el futuro, entre los cónyuges.
2) Tribunal y procedimiento:
i) Debe pronunciarse sobre cada una de las materias del Art. 21 LMC, a menos que se
encuentren reguladas o no proceda la regulación de alguna de ellas. Si las partes lo
regularon, el juez debe revisar el acuerdo y subsanar las deficiencias de oficio.
ii) Debe liquidar el régimen matrimonial existente si así se solicita y se rinda prueba
suficiente.
Produce sus efectos desde que queda ejecutoriada la sentencia. Debe subinscribirse al
margen de la inscripción matrimonial, momento a partir del cual es oponible a
terceros, y los cónyuges adquieren la calidad de separados, que no los habilita para
volver a contraer matrimonio (siguen casados, Art. 32 LMC).
ii) Cuando ya hay sentencia (Art. 39 LMC): es necesaria una nueva sentencia que, a
petición de ambos cónyuges, revoque la anterior. Debe inscribirse al margen de la
inscripción matrimonial para que sea oponible a terceros. Pero si la separación se
produjo porque uno de los cónyuges la solicitó por haber cesado la convivencia,
basta que ambos dejen constancia de la reanudación en acta extendida ante el
oficial del Registro Civil, subinscrita al margen de la inscripción matrimonial,
para que sea oponible a terceros.
La reanudación no revive el régimen matrimonial que tenían antes, pero pueden pactar
por una vez la participación en los gananciales (Art. 40 LMC). Además, no impide que
los cónyuges puedan volver a solicitar la separación si se funda en hechos posteriores
(Art. 41 LMC).
1) No hay causales genéricas. La ley señala en forma precisa los vicios que la producen.
2) No cabe distinguir entre nulidad absoluta o relativa (opinión mayoritaria).
3) En el caso del matrimonio putativo, no se produce el efecto propio de la nulidad de
volver las partes al estado anterior.
4) No rige la regla de que no puede pedir la nulidad el que contrató sabiendo o debiendo
saber del vicio que lo invalidaba (Art. 1683 CC). Sin embargo, algunas sentencias la
han aplicado en base a que nadie puede aprovecharse de su propio dolo.
5) Por regla general, la acción de nulidad no prescribe, pero debe alegarse en vida de los
cónyuges.
b) Causales de nulidad:
c) Acción de nulidad:
ii) Excepciones:
a. Matrimonio de una persona menor de 16 años: cualquiera de los cónyuges o sus
ascendientes, pero alcanzados los 16 años por ambos cónyuges, sólo puede
pedirla el o los que contrajeron matrimonio sin tener esa edad.
b. Vicios del consentimiento: cónyuge víctima del vicio.
c. Matrimonio en artículo de muerte: también los herederos del cónyuge difunto.
d. Vínculo matrimonial no disuelto: también el cónyuge anterior o sus herederos.
e. Impedimentos dirimentes relativos: cualquier persona en interés de la moral o
la ley.
ii) Excepciones:
a. Matrimonio de una persona menor de 16 años: 1 año desde que el cónyuge
inhábil adquiere la mayoría de edad.
b. Vicios del consentimiento: 3 años desde que desaparece el vicio.
c. Matrimonio en artículo de muerte: 1 año desde el fallecimiento.
d. Vínculo matrimonial no disuelto: 1 año desde el fallecimiento de uno de los
cónyuges.
e. Falta de testigos hábiles: 1 año desde la celebración.
4) Sólo puede intentarse en vida de los cónyuges, excepto en el caso del matrimonio en
artículo de muerte o de vínculo matrimonial no disuelto.
a) Requisitos:
Se presume que los cónyuges han contraído matrimonio de buena fe y con justa causa de
error.
b) Efectos:
Produce los mismos efectos civiles que el válido, respecto del cónyuge que, de buena fe y
con justa causa de error, lo contrajo. Hay que distinguir:
Son los mismos que el válido mientras se mantenga la buena fe a lo menos en uno de
los cónyuges.
La buena fe cesa, respecto del cónyuge que demanda la nulidad, por el sólo hecho de
presentar la demanda, y respecto del otro cónyuge, con la contestación de la demanda.
Todo esto sin perjuicio de probarse que la buena fe se perdió antes.
Si sólo uno de los cónyuges contrajo matrimonio de buena fe, puede optar entre
reclamar la disolución y liquidación del régimen de bienes que hubiere tenido hasta ese
momento, o someterse a las reglas de la comunidad.
El cónyuge de buena fe puede conservar las donaciones que por causa del matrimonio
le hizo o prometió hacer el otro.
1. Causales de divorcio.
a) Causales de divorcio-sanción:
Art. 54 LMC. “El divorcio podrá ser demandado por uno de los cónyuges, por falta
imputable al otro, siempre que constituya una violación grave de los deberes y
obligaciones que les impone el matrimonio, o de los deberes y obligaciones para con los
hijos, que torne intolerable la vida en común2.
Se incurre en dicha causal, entre otros casos, cuando ocurre cualquiera de los siguientes
hechos:
1.° Atentado contra la vida o malos tratamientos graves contra la integridad física o
psíquica del cónyuge o de alguno de los hijos;
2.° Trasgresión grave y reiterada de los deberes de convivencia, socorro y fidelidad
propios del matrimonio. El abandono continuo o reiterado del hogar común es una forma
de trasgresión grave de los deberes del matrimonio;
3.° Condena ejecutoriada por a comisión de alguno de los crímenes o simples delitos
contra el orden de las familias y contra la moralidad pública, o contra las personas,
previstos en el Libro II, Títulos VII y VIII, del Código Penal, que involucre una grave
ruptura de la armonía conyugal;
4.° Conducta homosexual;
5.° Alcoholismo o drogadicción que constituya un impedimento grave para la convivencia
armoniosa entre los cónyuges o entre éstos y los hijos, y
6.° Tentativa para prostituir al otro cónyuge o a los hijos.”
2) Cuando lo solicite cualquiera de los cónyuges por haberse producido un cese efectivo
de la convivencia conyugal, durante a lo menos 3 años. Requisitos:
ii) Que el cese haya durado a lo menos 3 años. Esto sólo puede probarse:
a. Por alguno de los instrumentos del Art. 22 LMC (escritura pública o acta
protocolizada ante notario, acta ante oficial del Registro Civil, transacción
aprobada judicialmente).
b. Por la notificación de la demanda de regulación de sus relaciones mutuas (Art.
25 inc. 1º LMC).
2
Causal genérica.
iii) Que el actor haya cumplido con su obligación alimenticia respecto de su cónyuge e
hijos. Esta exigencia rige sólo si la parte demandada lo solicita. El incumplimiento
reiterado e injustificado hará que la demanda sea rechazada.
a) Produce efectos entre los cónyuges desde que queda ejecutoriada la sentencia,
adquiriendo el estado civil de divorciados, que les habilita para casarse de nuevo. Para ser
oponible a terceros debe subinscribirse al margen de la inscripción matrimonial (Art. 59
LMC).
b) Pone término al matrimonio, pero no afecta la filiación ya determinada de los hijos ni los
derechos y obligaciones que emanan de ella (Art. 53 LMC).
c) Termina la sociedad conyugal (Art. 1746 N° 1 CC) o el régimen de participación de los
gananciales (Art. 1792-27 N° 3 CC).
d) Pone fin a los derechos de carácter patrimonial entre los cónyuges (alimentos, sucesorios),
sin perjuicio de que se fije una compensación (Art. 60 LMC).
e) Autoriza para revocar las donaciones que por causa de matrimonio se haya hecho al
cónyuge que dio causa al divorcio por su culpa (Art. 1790 CC).
f) Habilita al cónyuge para pedir la desafección de un bien de su propiedad que esté
declarado como bien familiar (Art. 145 inc. final CC).
1. Compensación económica3.
Es el derecho que asiste a uno de los cónyuges (normalmente la mujer) cuando por
haberse dedicado al cuidado de los hijos o a las labores propias del hogar no pudo durante el
matrimonio desarrollar una actividad remunerada o lucrativa, o lo hizo en menor medida de lo
que podía y quería, para que se le compense el menoscabo económico que, producido el divorcio
o la nulidad, sufrirá por esta causa (Art. 61 LMC).
a) Rubros a los que hay que atender para su fijación (Art. 62 LMC):
1) Fijación por las partes (Art. 63 LMC): deben ser mayores de edad, y debe hacerse
mediante escritura pública o acta de aveminiento, que se somete a la aprobación del
tribunal.
2) Fijación por el tribunal (Art. 64 LMC): si no hay acuerdo, se puede pedir en la
demanda o con posterioridad.
1) Entrega de una suma de dinero, acciones y otros bienes. Si es dinero, se pueden fijar
una o varias cuotas.
2) Constituir un derecho de usufructo, uso o habitación respecto de bienes que sean del
cónyuge deudor. Si no tiene bienes suficientes, el juez puede dividirlo en las cuotas
que sean necesarias (Art. 66 LMC).
3
Aplicable a nulidad y divorcio.
e) Cuando la compensación se fija en cuotas, éstas se asimilan a los alimentos para efectos
de su cumplimiento (a menos que se dé suficiente garantía de su efectivo y oportuno
pago): el cónyuge deudor puede ser apremiado con multas, se puede decretar orden de
arraigo, etc. (Art. 66 inc. 2º LMC)
2. Conciliación.
3. Mediación.
Se debe ordenar por el tribunal si las partes lo piden. Si las partes no la solicitan, puede
ordenarla el tribunal al término de la audiencia de conciliación, salvo que estime que no sería útil
(Art. 71 LMC).
Características de la mediación:
a) Debe hacerse por profesionales idóneos, que aparezcan en un registro elaborado por el
Ministerio de Justicia, salvo que los mediadores sean designados de común acuerdo por
las partes.
b) Es voluntaria en el sentido de que por regla general sólo procede si las partes la piden.
c) Los acuerdos que deriven de la mediación son voluntarios.
d) Tiene un plazo máximo de 60 días, prorrogable por otros 60 si las partes lo piden de
común acuerdo.
e) Puede ser gratuita o remunerada.
f) No procede en los juicios de nulidad.
Es competente el juez de letras que ejerza jurisdicción en materia civil en el domicilio del
demandado (Art. 1º transitorio, disposición 1ª LMC).
Cuando los cónyuges soliciten de común acuerdo la separación, rigen para el
procedimiento las reglas generales de los actos judiciales no contenciosos (Art. 1º
transitorio, disposición 2ª LMC).
El procedimiento en caso de separación, nulidad y divorcio es el juicio ordinario con
algunas modificaciones (Art. 1º transitorio, disposición 3ª LMC).
b) Tribunal competente y procedimiento para los juicios que se inicien a partir del 01/10/05:
Son competentes los Tribunales de Familia, y se tramitan de acuerdo a las reglas del
procedimiento ordinario de la Ley 19.968.
Reglas especiales:
1) Las acciones que tienen por objeto regular los alimentos, el cuidado personal de los
hijos, la relación directa y regular, y las cuestiones relacionadas con el régimen de
bienes del matrimonio, que no hayan sido resueltas en forma previa a la presentación
de la demanda, deben deducirse en forma conjunta con ésta o por vía reconvencional
(Art. 89 LMC).
2) El llamado a conciliación debe incluir las materias señaladas en el Art. 67 inc. 2º LMC,
aun cuando no se hubieren solicitado (Art. 90 LMC).
3) En el juicio de divorcio, si el juez advierte antecedentes que revelen que el matrimonio
podría ser nulo, se lo hará saber a los cónyuges. Si alguno de ellos reclama la nulidad,
el procedimiento comprenderá ambas acciones (Art. 91 LMC).
4) Cuando la sentencia no sea apelada, debe elevarse en consulta (Art. 92 LMC).
Si estaban terminados por sentencia ejecutoriada estos juicios, las partes no quedan
impedidas para ejercer las acciones de la LMC (Art. 5º transitorio LMC).
a) Las formalidades y las causales de nulidad se rigen por la ley vigente al tiempo de su
celebración, pero no se puede invocar la causal de incompetencia del oficial civil.
b) No rigen las limitaciones de los Arts. 22 y 25 LMC; el cese de la convivencia se puede
probar por medios distintos a los señalados, salvo la confesión.
Tienen el estado civil de separados y se rigen por lo dispuesto en la LMC para los
separados judicialmente (Art. 6º transitorio).
Art. 131 CC. “Los cónyuges están obligados a guardarse fe, a socorrerse y ayudarse
mutuamente en todas las circunstancias de la vida. El marido y la mujer se deben respeto y
protección recíprocos.”
Art. 133 CC. “Ambos cónyuges tienen el derecho y el deber de vivir en el hogar común,
salvo que a alguno de ellos le asista razones graves para no hacerlo.”
Art. 134 CC. “El marido y la mujer deben proveer a las necesidades de la familia común,
atendiendo a sus facultades económicas y al régimen de bienes que entre ellos medie.
El juez, si fuere necesario, reglará la contribución.”
1. Deber de fidelidad.
Sanciones:
2. Deber de socorro.
Se deben alimentos de acuerdo al Art. 321 N° 1 CC. Pueden darse diversas situaciones de
los cónyuges:
Sanciones:
1) La mujer puede pedir la separación judicial de bienes.
2) Si el incumplimiento es grave y reiterado, haciendo intolerable la vida en común, el
cónyuge afectado puede demandar la separación judicial o el divorcio.
En todo caso, puede llegar a constituir una causal de separación judicial y de divorcio.
La excepción al deber (“que a alguno de ellos le asistan graves razones para no hacerlo”)
debe ser apreciada por el juez en cada caso.
7. Deber de cohabitación.
Es la obligación que tienen los cónyuges de tener relaciones sexuales entre sí. El
incumplimiento grave y reiteradote este deber puede llegar a constituir una causal para demandar
la separación judicial y el divorcio.
Art. 136 CC. “Los cónyuges serán obligados a suministrarse los auxilios que necesiten
para sus acciones o defensas judiciales. El marido deberá, además, si está casado en sociedad
conyugal, proveer a la mujer de las expensas para la litis que ésta siga en su contra, si no tiene los
bienes a que se refieren los artículos 150, 166 y 167, o ellos fueren insuficientes.”
1. Definición.
Régimen matrimonial: estatuto jurídico que regla las relaciones pecuniarias de los
cónyuges entre sí y respecto de terceros.
Consecuencias:
b) Este estatuto regula los intereses económicos de los cónyuges entre sí. Las relaciones
extrañas, aunque sean laterales o concomitantes, no forman parte del régimen
matrimonial.
c) El régimen matrimonial actúa también como medida de protección de los terceros.
a) Régimen de comunidad de bienes: todos los bienes que los cónyuges aportan al
matrimonio y los que adquieren durante él constituyen una masa común que pertenece a
ambos, y que se divide una vez disuelta la comunidad.
1) Comunidad universal: todos los bienes, sin distinción alguna, forman el fondo común.
2) Comunidad restringida: sólo algunos bienes pasan a ser comunes.
i) Comunidad restringida de bienes muebles y ganancias: se excluyen los bienes
raíces aportados y los adquiridos durante el matrimonio a título gratuito.
ii) Comunidad restringida de ganancias únicamente: sólo ingresan al haber común los
bienes muebles e inmuebles adquiridos durante el matrimonio a título oneroso, y
los frutos de estos y de los bienes propios. A este régimen corresponde la
sociedad conyugal chilena.
c) Régimen sin comunidad: cada cónyuge conserva sus bienes, pero todos son administrados
por el marido, salvo los reservados, que administra la mujer.
d) Régimen dotal: hay dos clases de bienes: los dotales, que la mujer aporta al matrimonio, y
los parafernales, que la mujer conserva en su poder y administra.
A. SOCIEDAD CONYUGAL.
1. Concepto.
Sociedad conyugal: sociedad de bienes que se forma entre los cónyuges por el hecho del
matrimonio (Art. 135 inc. 1º CC).
La sociedad conyugal comienza con el matrimonio y cualquier estipulación en contra es
nula. Excepción: personas casadas en el extranjero se miran en Chile como separadas de bienes,
salvo que inscriban su matrimonio y pacten la sociedad conyugal (Art. 135 inc. 2º CC).
2. Naturaleza jurídica.
c) Es una persona jurídica. Pero esto no es cierto, porque frente a los terceros sólo existe el
marido.
d) Se trata de una institución sui generis con características propias. Tal vez a lo que más se
parece es a un patrimonio de afectación.
3. Capitulaciones matrimoniales.
a) Concepto.
b) Características.
c) Consentimiento y capacidad.
La capacidad es la misma que se requiere para casarse, pero si es menor de edad, requiere
la autorización de las personas que deben consentir en el matrimonio (Art. 1721 CC), y si
tiene por objeto renunciar a los gananciales, enajenar bienes raíces, o gravarlos con
hipoteca, censo o servidumbre, se requiere autorización judicial.
e) Modificación. Inmutabilidad.
Sólo pueden modificarse antes de celebrarse el matrimonio, con las mismas solemnidades
con que se otorgaron (Art. 1722 CC). La excepción está en el Art. 1723 CC, que permite
modificar el régimen matrimonial bajo el cual se casaron:
1) Si se casaron en sociedad conyugal, pueden sustituirlo por cualquiera de los otros 2.
2) Si se casaron con separación de bienes, pueden sustituirlo por participación en los
gananciales.
3) Si se casaron en participación en los gananciales, pueden sustituirlo por separación de
bienes.
Está expresamente prohibido volver a la sociedad conyugal.
f) Objeto.
1) Capitulaciones celebradas en el acto del matrimonio: sólo pueden tener por objeto
pactar la separación total de bienes o el régimen de participación en los gananciales.
2) Capitulaciones celebradas antes del matrimonio: pueden tener variados objetos. Ej.
Acordar separación total o parcial de bienes, renuncia de los gananciales, etc. El límite
es que no pueden contener estipulaciones contrarias a las buenas costumbres ni a las
leyes, ni ir en detrimento de los derechos y obligaciones legales de los cónyuges entre
ellos y respecto de los hijos (Art. 1717 CC).
a) Haber absoluto.
Lo forman todos aquellos bienes que ingresan a la sociedad conyugal en forma definitiva,
sin derecho a recompensa.
Está compuesto por:
2) Todos los frutos, réditos, pensiones, intereses y lucros de cualquier naturaleza, que
provengan, sea de los bienes sociales, sea de los bienes propios de cada uno de los
cónyuges, y que se devenguen durante el matrimonio (Art. 1725 N° 2 CC).
Usufructo del marido sobre los bienes de la mujer (Art. 810 CC): la doctrina
sostiene que no se trata realmente de un derecho de usufructo. Si así fuera, cuando
el marido enajena los bienes de la mujer, estaría enajenando la nuda propiedad, lo
que no es cierto.
En cuanto a la inembargabilidad de este usufructo, lo que es inembargable es el
usufructo en sí mismo (Art. 2466 CC), pero los terceros pueden embargar los frutos
(que han ingresado al haber absoluto), con la limitación de que no pueden privar al
marido de lo que necesite para atender las cargas de familia.
3) Todos los bienes que cualquiera de los cónyuges adquiera durante el matrimonio a
título oneroso (Art. 1725 N° 5 CC).
Aplicaciones especiales:
i) Cuando se adquiere durante la vigencia de la sociedad conyugal, a título
oneroso, un inmueble contiguo al inmueble propio de uno de los cónyuges, el
bien adquirido ingresa a la sociedad conyugal, a menos que con el propio forme
una heredad o edificio de que el terreno adquirido no pueda desmembrarse sin
daño (pierden su individualidad). En este caso, la sociedad y el dueño del
inmueble propio pasan a ser copropietarios del todo, a prorrata de los valores al
tiempo de la incorporación (Art. 1728 CC).
ii) Si el cónyuge es comunero con otras personas de un bien propio, y vigente la
sociedad conyugal adquiere las demás cuotas a título oneroso, se mantiene la
indivisión entre ese cónyuge y la sociedad conyugal, a prorrata del valor de la
cuota que pertenecía al cónyuge y lo que le haya costado la adquisición del
resto (Art. 1729 CC).
4) Las minas denunciadas por uno o ambos cónyuges durante la vigencia de la sociedad
conyugal (Art. 1730 CC), a menos que sea aplicable el Art. 150 CC.
5) La parte del tesoro que corresponde al dueño del sitio en que se encuentra, cuando el
tesoro es hallado en un terreno social.
b) Haber relativo.
1) Dinero aportado o adquirido por uno de los cónyuges a título gratuito durante la
vigencia de la sociedad conyugal (Art. 1725 N° 3 CC).
Pese a que el Art. 1725 N° 3 CC no dice que la adquisición deba hacerse a título
gratuito, esto es lógico porque, de lo contrario, ingresaría al haber absoluto.
2) Bienes muebles aportados o adquiridos a título gratuito por cualquier cónyuge durante
la vigencia de la sociedad conyugal (Art. 1725 N° 4 CC).
Aquí tampoco dice que deba ser a título gratuito, pero ello está establecido en los
Arts. 1726 inc. 2º y 1732 inc. 2º CC.
Los cónyuges pueden eximir de este ingreso al haber relativo una parte de sus
bienes muebles, designándolos en las capitulaciones matrimoniales.
La parte del tesoro que corresponde al descubridor (50%) ingresa al haber relativo.
La parte del tesoro que corresponde al dueño del terreno (50%):
i) Ingresa al haber relativo si el terreno era propio de un cónyuge.
ii) Ingresa al haber absoluto si el terreno era social, como veíamos antes.
4) Donación remuneratoria mueble que se hace a uno de los cónyuges, cuando el servicio
prestado no daba acción en contra de la persona servida (Art. 1738 inc. 2º CC).
1) Las especies que uno de los cónyuges poseía a título de señor antes de ella, aunque la
prescripción o transacción con que las haya hecho verdaderamente suyas se complete o
verifique en ella (Art. 1736 N° 1 CC).
2) Los bienes (raíces) que los cónyuges poseían antes de ella por un título vicioso, pero
cuyo vicio se ha purgado durante ella por la ratificación o por otro medio legal (Art.
1736 N° 2 CC).
3) Los bienes que vuelven a uno de los cónyuges por nulidad o resolución de un contrato,
o por haberse revocado una donación (Art. 1736 N° 3 CC).
4) Los bienes litigiosos y de que durante la sociedad ha adquirido uno de los cónyuges la
posesión pacífica (Art. 1736 N° 4 CC).
5) El derecho de usufructo (sobre un bien raíz) que se consolida con la propiedad que
pertenece al mismo cónyuge (Art. 1736 N° 5 CC).
b) Inmueble adquirido a título gratuito por uno de los cónyuges durante la vigencia de la
sociedad conyugal (Arts. 1726 y 1732 CC).
d) Aumentos que experimenten los bienes propios de los cónyuges (Art. 1727 N° 3 CC).
e) Créditos o recompensas que los cónyuges adquieren contra la sociedad y que pueden
hacer valer al momento de la disolución.
Diferencias que se producen en toda subrogación cuando los valores del bien
subrogado y subrogante son diferentes. Puede producirse:
i) Que no haya subrogación porque el saldo a favor o en contra de la sociedad excede
a la mitad del precio del inmueble que se recibe: el bien que se recibe ingresa al
haber absoluto, y la sociedad queda obligada a recompensar al cónyuge por el
precio del inmueble o valores enajenados, conservando éste el derecho a subrogar
comprando otro inmueble (Art. 1733 inc. 6º CC).
ii) Que habiendo subrogación, el bien adquirido sea de menor valor que el inmueble o
valores enajenados: el cónyuge dueño adquiere una recompensa en contra de la
sociedad conyugal.
iii) Que habiendo subrogación, el bien adquirido sea de mayor valor que el inmueble o
valores enajenados: el cónyuge debe pagar una recompensa a la sociedad.
Lo forman aquellas deudas que la sociedad conyugal debe pagar sin derecho a
recompensa. La deuda es social tanto desde el punto de vista de la obligación a la deuda
como de la contribución a la deuda.
Está constituido por:
1) Pensiones e intereses que corran, sea contra la sociedad, sea contra cualquiera de los
cónyuges y que se devenguen durante la sociedad (Art. 1740 N° 1 CC).
ii) Deuda contraída por la mujer con autorización del marido: hoy en día, no tiene
sentido a menos de entender que se trata de un mandato.
iii) Deuda contraída por la mujer con autorización judicial: se relaciona con el Art. 138
CC, que autoriza a la mujer para actuar respecto de los bienes del marido, sociales
y de los suyos que administre el marido, con autorización del juez, cuando al
marido le afecta un impedimento que no es de larga o indefinida duración. En este
caso, la mujer obliga al marido respecto de sus bienes y de los sociales como si el
acto fuera del marido, y se obliga ella en sus bienes propios hasta concurrencia del
beneficio que le reporte el acto.
iv) Deudas contraídas por la mujer con mandato general o especial del marido (Art.
1751 CC): esta deuda es, respecto de terceros, deuda del marido y por
consiguiente, de la sociedad. Pero si la mujer contrata a nombre propio, la deuda
sólo puede hacerse efectiva en su patrimonio reservado (Art. 2151 CC).
vi) Deudas provenientes de compras al fiado, que haga la mujer, de bienes muebles
destinados al consumo ordinario de la familia (Art. 137 inc. 2º CC).
ii) El marido garantiza con prenda, hipoteca o fianza una obligación ajena: requiere de
autorización de la mujer. Si no la obtiene, obliga sus bienes propios; si la obtiene,
la deuda es de la sociedad conyugal, sin derecho a recompensa.
iii) El marido garantiza con prenda, hipoteca o fianza una obligación personal de uno
de los cónyuges: la sociedad está obligada al pago, con derecho a recompensa
(pasivo relativo).
Debe aplicarse las normas del usufructo: corresponden a la sociedad conyugal las
expensas ordinarias de conservación y cultivo (Art. 795 CC), y las cargas periódicas
(Art. 796 CC). En cuanto a las reparaciones mayores, corresponden a la sociedad si se
trata de un bien social; si el bien es propio de un cónyuge, también corresponden a
ella, pero con derecho a recompensa.
Lo forman aquellas deudas que la sociedad conyugal debe pagar, pero no soportar,
adquiriendo una recompensa en contra del cónyuge deudor. La deuda es social desde el
punto de vista de la obligación a la deuda, pero es personal del cónyuge desde el punto de
vista de la contribución a la deuda.
Esta integrado por las deudas personales de los cónyuges (Art. 1740 N° 3 CC). Ej.
7. Recompensas.
a) Concepto:
b) Objetivos:
c) Clasificación:
3) Recompensas debidas por los cónyuges entre sí: cuando se han beneficiado
indebidamente a costa del otro, o cuando con dolo o culpa se han causado perjuicios.
d) Prueba:
El que alega una recompensa debe probar los hecho en que se funda (Art. 1698 CC).
Sirven todos los medios de prueba, salvo la confesión, que se mirará, no obstante, como
una donación revocable (Art. 1739 CC).
Limitaciones:
ii) Gravamen voluntario de bienes raíces sociales (Art. 1749 inc. 3º CC).
iii) Promesa de enajenación o gravamen de un bien raíz social (Art. 1749 inc. 3º CC).
v) Disposición gratuita, por acto entre vivos, de bienes sociales (Art. 1749 inc. 4º
CC): el marido no puede hacer donaciones de bienes sociales sin autorización de
la mujer, salvo que fueren de poca monta (Art. 1735 CC).
vi) Arrendamiento o cesión de tenencia de bienes raíces sociales por más de 5 años si
se trata de predios urbanos, o más de 8 años si se trata de predios rústicos (Art.
1749 inc. 4º CC): deben computarse las prórrogas para el cálculo.
i) Si era socia al momento de casarse: sus derechos en la sociedad son muebles, por
lo que ingresan al haber relativo y los administra el marido. Pero esto puede no
convenir a los socios, por lo que se puede pactar, al celebrar la sociedad, que si la
mujer se casa, la sociedad se extinga. Si nada se dice, el marido ejerce los
derechos. Si la mujer era administradora de la sociedad, ella continúa
administrando.
ii) Si lo celebra casada:
a. Puede actuar dentro de su patrimonio reservado, caso en que se rige por el Art.
150 CC.
b. Si no tiene este patrimonio, no va a poder cumplir con su obligación de hacer
los aportes (porque no tiene bienes bajo su administración), a menos que el
marido consienta. Si no acepta, los demás pueden pedir la disolución de la
sociedad.
c. Si tiene algunos de los patrimonios especiales de los Arts. 166 o 167 CC, puede
celebrar el contrato obligando esos bienes.
Art. 1754 inc. final CC. “La mujer, por su parte, no podrá enajenar o gravar ni dar en
arrendamiento o ceder la tenencia de los bienes de su propiedad que administre el marido,
sino en los casos de los artículos 138 y 138 bis.”
3) Facultades del marido: son más limitadas, porque administra bienes ajenos.
Art. 138 bis incs. 1º y 2º CC. “Si el marido se negare injustificadamente a ejecutar un
acto o celebrar un contrato respecto de un bien propio de la mujer, el juez, previa
citación del marido, podrá autorizarla para actuar por sí misma.
En tal caso, la mujer sólo obligará sus bienes propios y los activos de sus patrimonios
reservados o especiales de los artículos 150, 166 y 167, mas no obligará al haber social
ni a los bienes propios del marido, sino hasta la concurrencia del beneficio que la
sociedad o el marido hubieran reportado del acto.”
Ahora, si el marido está impedido para dar la autorización, la mujer puede pedir
autorización al juez, de acuerdo al Art. 138 CC.
Art. 138 inc. 1º CC. “Si por impedimento de larga o indefinida duración, como el de
interdicción, el de prolongada ausencia, o desaparecimiento, se suspende la administración del
marido, se observará lo dispuesto en el párrafo 4.º del título De la sociedad conyugal.”
Art. 1758 CC. “La mujer que en el caso de interdicción del marido, o por larga ausencia
de éste sin comunicación con su familia, hubiere sido nombrada curadora del marido, o curadora
de sus bienes, tendrá por el mismo hecho la administración de la sociedad conyugal.
Si por incapacidad o excusa de la mujer se encargaren estas curadurías a otra persona,
dirigirá el curador la administración de la sociedad conyugal.”
1) A la mujer: cuando sea nombrada curadora, lo que ocurre cuando el marido es:
i) Demente.
ii) Sordo o sordomudo que no puede darse a entender claramente.
iii) Menor de edad.
2) A un tercero: cuando sea nombrado curador, lo que ocurre por las siguientes razones:
i) Incapacidad o excusa de la mujer para ser ella curadora. En este caso, puede pedir
la separación judicial de bienes, siempre que ambos cónyuges sean mayores de
edad (Art. 1762 CC).
ii) Marido declarado en interdicción por disipación.
2. Disponer entre vivos a título gratuito de los bienes sociales (Art. 1759 inc.
3º CC), pero no para donaciones de poca monta.
3. Otorgar cauciones respecto de terceros (Art. 1759 inc. 6º CC).
4. Dar en arriendo o ceder la tenencia de bienes raíces sociales, por más de 5
u 8 años según se trate de predios urbanos o rústicos (Art. 1761 CC).
La sanción a los 2 primeros es la nulidad relativa. En el tercero, sólo obliga sus
bienes de los Arts. 150, 166 y 167 CC. Para el último, es la inoponibilidad al
marido o sus herederos.
Los actos realizados sin infracción, obligan a la sociedad y al marido, salvo
que se hagan en negocio personal de la mujer.
ii) Administración de los bienes propios del marido: los administra de acuerdo a las
reglas de los curadores, por lo que debe rendir cuentas.
a) Causales:
2) Decreto que concede la posesión provisoria o definitiva de los bienes del cónyuge
desaparecido (Art. 1764 N° 2 CC):
La sociedad se reputa disuelta en el día presuntivo de la muerte, y hay que estarse a esa
fecha para efectos de proceder a la liquidación.
Esto ocurre sólo cuando el matrimonio fue putativo, pues en caso contrario, no hubo
sociedad conyugal.
De acuerdo al Art. 1792-1 inc. 1º CC, los cónyuges pueden, con sujeción a lo dispuesto
en el Art. 1723, sustituir el régimen de sociedad conyugal por el de participación en los
gananciales.
8) Pacto de separación total de bienes celebrado de acuerdo al Art. 1723 CC (Art. 1764
N° 5 CC):
De acuerdo al Art. 1723 CC, los cónyuges mayores de edad pueden sustituir el
régimen de sociedad conyugal por el de separación total. Características del pacto:
i) Es solemne:
a. Debe otorgarse por escritura pública.
b. Debe subinscribirse al margen de la inscripción matrimonial (solemnidad, no
requisito de publicidad).
c. La subinscripción debe practicarse dentro del plazo fatal de 30 días desde la
escritura.
iii) Es irrevocable: no puede dejarse sin efecto por el mutuo consentimiento de los
cónyuges. Pero no resulta claro si lo que se quiere es sólo evitar la vuelta a la
sociedad conyugal, o obsta también a que los cónyuges que se separaron de bienes
puedan sustituir este nuevo régimen por el de participación en los gananciales.
En la misma escritura del pacto puede liquidarse la sociedad conyugal y acordar otros
actos. Pero hay que tener presente que se están celebrando actos distintos, pues si bien
la subinscripción es solemnidad del pacto, no lo es de la liquidación.
b) Efectos de la disolución:
Es una comunidad a título universal. El activo está formado por los bienes que eran
sociales, incluidos los bienes reservados y los frutos de los que administraba la mujer.
El pasivo lo conforman las deudas sociales, incluidas las contraídas por la mujer en su
patrimonio reservado. Pero si la mujer renuncia a los gananciales, el activo y pasivo
de su patrimonio reservado no ingresan a la comunidad.
El marido ya no sigue administrando los bienes sociales; si los grava o enajena, tales
actos son inoponibles a la mujer.
4) Cesa el derecho de goce que la sociedad tenía sobre los bienes de los cónyuges.
ii) Operaciones:
4
Falta resumir esta parte.
Art. 1781 CC. “Disuelta la sociedad, la mujer mayor o sus herederos mayores tendrán
la facultad de renunciar los gananciales a que tuvieren derecho. No se permite esta
renuncia a la mujer menor, ni a sus herederos menores, sino con aprobación judicial.”
iii) Forma de renunciar: la ley no da norma especial, así que puede ser en forma
expresa o tácita.
v) Aceptación de los gananciales: la ley no da norma especial, así que puede ser en
forma expresa o tácita.
a) Concepto: son los que la mujer adquiere con su trabajo separado del marido, los que
adquiere con ellos y los frutos de unos y otros. Se rigen por el Art. 150 CC.
b) Características:
1) Forman un patrimonio especial con activo y pasivo propios.
2) Constituyen un régimen especial de administrar un conjunto de bienes sociales. El
hecho de que los administre la mujer no les quita el carácter de sociales.
3) Constituyen una protección que la ley otorga a la mujer que trabaja. Son privativos de
la mujer.
4) Opera de pleno derecho.
5) Es una institución de orden público; la mujer no puede renunciar a tener un patrimonio
reservado en las capitulaciones matrimoniales (Art. 1717 CC).
c) Requisitos:
1) Trabajo de la mujer: los bienes que adquiera por otro medio no ingresan a este
patrimonio.
2) Trabajo remunerado.
3) Trabajo desarrollado durante la vigencia de la sociedad conyugal: si la mujer trabajaba
antes, los bienes que adquirió no forman parte del patrimonio reservado. Para
determinar si un bien es reservado hay que atender al momento en que se presta el
servicio. Si la mujer se retira o jubila, el patrimonio no desaparece.
4) Trabajo separado de su marido: que no haya entre ellos una relación directa, personal
y privada de colaboración y ayuda, aunque reciban una remuneración común.
d) Activo:
1) Bienes provenientes del trabajo de la mujer: todas las remuneraciones obtenidas por la
mujer en su trabajo.
2) Bienes que adquiere con el trabajo: esto es así aunque en la escritura de compra no se
haga referencia a su trabajo (esa referencia tiene fines probatorios).
3) Frutos del producto del trabajo o de los bienes adquiridos con ese producto.
g) Administración de los bienes reservados: la ejerce la mujer con amplias facultades; la ley
la considera para estos efectos como separada de bienes. Limitación: si es menor de edad,
requiere autorización judicial con conocimiento de causa para gravar y enajenar bienes
raíces.
i) Prueba de los bienes reservados: por tratarse de una institución excepcional, quien alegue
la existencia de ese patrimonio y que se actuó dentro de él o que un determinado bien es
reservado, deberá probarlo. Entonces, la prueba puede referirse a 2 aspectos:
1) Prueba de la existencia del patrimonio reservado y de que se actuó dentro del mismo:
en este caso existe una presunción: si la mujer acreditó que ejerce o ha ejercido un
trabajo separado de su marido, los terceros que contraten con ella quedan cubiertos de
toda reclamación que puedan interponer los cónyuges, sus herederos o cesionarios,
fundada en la circunstancia de haber obrado la mujer fuera de su patrimonio reservado
(Art. 150 inc. 4º CC).
i) Características de la presunción:
a. Es una presunción de derecho.
b. Está establecida en favor de terceros.
c. Está destinada sólo a probar la existencia del patrimonio reservado y que la
mujer actuó dentro de él.
ii) Requisitos para que opere:
a. Que el acto no se refiera a bienes propios de la mujer.
b. Que la mujer acredite, mediante instrumentos públicos o privados, que ejerce o
ha ejercido un trabajo separado del marido.
c. Que el acto conste por escrito.
d. Que en el acto se haga referencia al instrumento que demuestre que la mujer
ejerce o ha ejercido ese trabajo.
2) Prueba de que un determinado bien es parte del patrimonio reservado: incumbe a la
mujer acreditar el origen y dominio de los bienes (Art. 150 inc. 3º CC). Puede valerse
de todos los medios de prueba, menos de la confesión.
Vigente el régimen, cada cónyuge tiene su propio patrimonio, que administra con libertad.
A su extinción, se forma una comunidad respecto de los bienes que cada uno adquirió
durante el matrimonio a título oneroso, que se divide por partes iguales.
Vigente el régimen, cada cónyuge tiene su propio patrimonio, que administra con libertad.
A su extinción, el cónyuge que ha adquirido bienes a título oneroso por menos valor, tiene
un crédito de participación en contra del otro cónyuge. Nunca se produce comunidad.
Este es el sistema adoptado en Chile (Art. 1792-19 inc. 3º CC).
Cada cónyuge es dueño de sus bienes, que administra con libertad. Limitaciones:
a) Gananciales:
b) Patrimonio originario:
Es el patrimonio existente al momento de optar por el régimen (Art. 1792-6 inc. 2º CC).
1) Determinación:
i) Se deducen del activo de los bienes que el cónyuge tiene al inicio del régimen, las
obligaciones de que sea deudor en esa misma fecha (Art. 1792-7 CC).
ii) Se agregan las adquisiciones a título gratuito efectuadas durante la vigencia del
régimen (Art. 1792-7 inc. 2º CC).
iii) Se agregan las adquisiciones a título oneroso hechas durante la vigencia del
régimen, si la causa o título de la adquisición es anterior al inicio del régimen (Art.
1792-8 CC, que contiene una enumeración no taxativa de casos, que reproduce con
leves modificaciones la del Art. 1736 CC).
iv) No integran el patrimonio originario los frutos de los bienes originarios, las minas
denunciadas por uno de los cónyuges ni las donaciones remuneratorias por
servicios que dan acción (Art. 1792-9 CC).
v) Las adquisiciones hechas en común por ambos cónyuges, a título oneroso, generan
una comunidad entre ellos. Si es a título gratuito, los derechos se agregan a los
respectivos patrimonios originarios en la proporción que establezca el título
respectivo (Art. 1792-10 CC).
2) Obligación de practicar inventario (Art. 1792-11 CC): deben realizar inventario simple
de los bienes que componen el patrimonio originario, al momento de pactar el
régimen. A falta de inventario, el patrimonio originario puede probarse por otros
instrumentos, o en último caso, otros medios de prueba.
c) Patrimonio final:
1) Determinación:
i) Se deduce del valor total de los bienes que el cónyuge sea dueño al término del
régimen, el valor total de las obligaciones que tenga en esa misma fecha (Art.
1792-14 CC).
ii) Se agregan imaginariamente los montos de las disminuciones del activo que sean
consecuencia de los siguientes actos ejecutados, durante la vigencia del régimen,
sin autorización del otro cónyuge (Art. 1792-15 CC):
a. Donaciones irrevocables que no corresponden al cumplimiento proporcionado
de deberes morales o usos sociales.
b. Cualquier especie de actos fraudulentos o de dilapidación en perjuicio del otro
cónyuge.
c. Pago de precios de rentas vitalicias u otros gastos que persigan asegurar una
renta futura al cónyuge que ha incurrido en ellos.
2) Inventario valorado de los bienes que integran el patrimonio final (Art. 1792-16 CC):
cada cónyuge debe proporcionárselo al otro, dentro de los 3 meses siguientes al
término del régimen. El inventario será normalmente simple.
3) Avaluación del activo y pasivo del patrimonio final (Art. 1792-17 CC):
4) Sanción al cónyuge que oculta o distrae bienes o simula obligaciones con el fin de
disminuir los gananciales (Art. 1792-18 CC): se suma a su patrimonio final el doble
del valor de lo ocultado o simulado.
a) Concepto:
b) Características:
1) Se origina al término del régimen (Art. 1792-20 CC). Su determinación resulta una
vez que se liquidan los gananciales, lo que se debe demandar en juicio sumario.
2) Durante la vigencia del régimen, es eventual. Por ello es incomerciable e irrenunciable
(Art. 1792-20 inc. 2º CC).
3) Es puro y simple (Art. 1792-21 CC): determinado el crédito, el cónyuge beneficiado
puede pedir el pago de inmediato. Excepción: si ello causa grave perjuicio al cónyuge
deudor o a los hijos comunes, el juez puede conceder plazo de hasta 1 año para el
pago.
4) Se paga en dinero, pero nada obsta a que los cónyuges acuerden lo contrario (Art.
1792-22 CC).
5) Goza de preferencia de cuarta clase (Art. 2481 N° 3 CC).
6) No constituye renta.
c) Prescripción de la acción para demandar el pago del crédito de participación: el Art. 1792-
26 CC establece que la acción para pedir la liquidación prescribe en 5 años contados
desde la extinción del régimen, pero no da normas sobre el plazo de la acción para cobrar
el crédito. En consecuencia, se aplican las reglas generales.
d) Bienes sobre los cuales se puede hacer efectivo el crédito (Art. 1792-24 CC): el cónyuge
acreedor debe perseguir primero el dinero del deudor. Si es insuficiente, los muebles, y en
subsidio los inmuebles.
e) Insuficiencia del cónyuge deudor (Art. 1792-24 inc. 2º CC): el acreedor puede perseguir
su crédito en los bienes donados entre vivos sin su consentimiento (acción de inoficiosa
donación) o enajenados en fraude de sus derechos (acción pauliana).
g) Relación entre el régimen de participación en los gananciales y los bienes familiares (Art.
1792-23 CC): para determinar los créditos, las atribuciones de derechos sobre bienes
familiares efectuadas a uno de los cónyuges deben ser valoradas prudencialmente por el
juez.
C. SEPARACIÓN DE BIENES.
1. Concepto.
Art. 152 CC. “Separación de bienes es la que se efectúa sin separación judicial, en virtud
de decreto de tribunal competente, por disposición de la ley o por convención de las partes.”
Este régimen se caracteriza porque cada cónyuge tiene su propio patrimonio, que
administra con absoluta libertad (Art. 159 CC).
a) Legal:
1) Total5:
Es un caso de separación legal porque, aunque hay una sentencia judicial, los
cónyuges han litigado sobre otra materia. Como el matrimonio subsiste, debe
existir un régimen matrimonial, que no puede ser otro que el de separación de
bienes (Art. 173 CC).
En este caso, aunque la ley no lo diga, se aplican los Arts. 161, 162 y 163 CC:
a. Los acreedores de la mujer sólo puede dirigirse sobre sus bienes. El marido
responde sólo cuando:
1. Se obliga como codeudor conjunto, solidario o subsidiario de la mujer.
2. Las obligaciones de la mujer ceden en su beneficio o de la familia común.
b. Los acreedores del marido sólo pueden dirigirse sobre los bienes de éste, con
las mismas excepciones.
c. Si la mujer confiere poder a su marido para que administre parte de sus bienes,
el marido es obligado como simple mandatario.
d. A los cónyuges se les da un curador para la administración de sus bienes en
todos los casos en que siendo solteros necesitarían de un curador, pero por
tratarse de separación total, no pueden ser curadores el uno del otro.
5
Además de estos dos casos, hay separación legal total en el caso del decreto de posesión provisoria.
2) Parcial6:
Se refiere a los bienes que adquiere la mujer por haber aceptado una donación,
herencia o legado que se le hizo con la condición precisa de que no los administre
el marido. Respecto de ellos, la mujer se considera separada de bienes:
a. Tiene las mismas facultades que la separada judicialmente: administra con
independencia del marido.
b. Ambos cónyuges debe proveer a las necesidades de la familia común en
proporción a sus facultades.
c. Los actos que la mujer celebre sólo dan acción sobre los bienes que componen
este patrimonio, sin que tenga responsabilidad el marido, a menos que:
1. Se haya obligado conjunta, solidaria o subsidiariamente con la mujer.
2. Se haya beneficiado la familia común.
d. Los acreedores del marido no pueden dirigirse en contra de estos bienes, a
menos que prueben que el contrato cedió en utilidad de la mujer o de la familia.
e. Estos bienes responden en caso de que la mujer realice un acto respecto de un
bien propio, autorizada por la justicia.
f. Si la mujer confiere al marido la administración de una parte de estos bienes,
responde como simple administrador.
g. Si la mujer es incapaz, se le da un curador para que administre, que puede ser el
marido.
h. Los frutos producidos por estos bienes y todo lo que con ellos adquiera
pertenece a la mujer, pero disuelta la sociedad conyugal, ingresan a los
gananciales, a menos que la mujer renuncie a los gananciales.
b) Judicial:
6
Además de estos dos casos, hay separación legal parcial en el caso de que la mujer ejerza el usufructo legal sobre
los bienes del hijo.
1) Características:
2) Capacidad: si la mujer es menor de edad, requiere un curador especial (Art. 154 CC).
3) Causales:
5) Efectos:
c) Convencional:
2) Efectos: los mismos que en la judicial, pero el marido puede ser curador de la mujer.
Además, en este caso los cónyuges pueden pactar la participación en los gananciales,
lo que no se puede hacer en la separación judicial.
1. Fundamento de la institución.
Persigue asegurar a la familia un hogar físico estable donde sus integrantes puedan
desarrollar la vida con normalidad, aun después de disuelto el matrimonio.
2. Ámbito de aplicación.
Los bienes familiares tienen cabida cualquiera sea el régimen matrimonial (Art. 141 inc.
1º CC). Sus normas son de orden público, por lo que la voluntad de los cónyuges no las puede
modificar o derogar (Art. 149 CC).
La ley no prevé el caso de que la declaración recaiga sólo sobre estos muebles. Se
concluye que debe hacerse igual que en el caso anterior, pero atendida la naturaleza de
estos bienes, no procede inscripción alguna.
Se requiere la voluntad de ambos cónyuges para realizar cualquier acto como socio o
accionista, que tenga relación con el bien familiar (Art. 146 inc. 2º CC). Además, no
puede disponer de los derechos o acciones en la sociedad sino con autorización del otro
cónyuge.
Debe ser específica y otorgada por escrito, o por escritura pública si el acto requiere esa
solemnidad, o interviniendo expresa y directamente de cualquier modo en el mismo.
Puede prestarse por mandato especial y solemne (Art. 142 inc. 2º CC).
La voluntad del cónyuge puede ser suplida por el juez en caso de imposibilidad o negativa
que no se funde en el interés de la familia (Art. 144 CC). Esta disposición se refiere sólo
al Art. 142 CC (bienes inmuebles y muebles), no al Art. 146 CC (derechos y acciones).
8. Sanción para el caso de que se realicen estos actos sin la autorización del cónyuge.
En cuanto a los terceros adquirentes del bien familiar, se los considera de mala fe para
efectos de las obligaciones restitutorias que la declaración de nulidad origine (Art. 143 inc. 2º
CC). Esta es una presunción de derecho que rige sólo para los inmuebles, porque respecto de los
muebles no hay inscripción.
Durante el matrimonio, el juez puede constituir estos derechos a favor del cónyuge no
propietario, teniendo en cuenta en su constitución y duración, el interés de los hijos y las fuerzas
patrimoniales de los cónyuges (Art. 147 CC).
a) El título de estos derechos reales lo constituye la resolución judicial, que debe inscribirse
en el registro de Hipotecas y Gravámenes.
b) La sentencia debe determinar plazo de término.
c) La sentencia puede establecer otras obligaciones y modalidades si así parece equitativo.
d) Estos gravámenes no pueden afectar los derechos de los acreedores que el cónyuge
propietario tenía a la fecha de su constitución.
e) No aprovechan a los acreedores del cónyuge en cuyo favor se constituyen estos derechos,
es decir, son inembargables y los acreedores no pueden subrogarse en su ejercicio.
Estos gravámenes no son propiamente una obligación alimenticia, pero tienen una
naturaleza alimenticia, porque el juez debe considerar las fuerzas patrimoniales al determinarlo, y
los acreedores del cónyuge beneficiado no los puede embargar.
10. Beneficio de excusión en favor del cónyuge beneficiado con la declaración de bien
familiar.
Este cónyuge puede exigir que antes de proceder contra los bienes familiares, se persiga el
crédito en otros bienes del deudor (Art. 148 CC). Para que pueda plantear este beneficio, se le
debe notificar el mandamiento de ejecución.
a) Acuerdo de los cónyuges (Art. 145 inc. 1º CC): Si se trata de un inmueble, debe constar
por escritura pública y anotarse al margen de la inscripción respectiva. No se dice nada
respecto de las acciones y derechos.
b) Resolución judicial recaída en juicio seguido por el cónyuge propietario en contra del no
propietario, fundado en que el bien no está destinado a los fines que indica el Art. 141 CC
(Art. 145 inc. 2º CC).