Aditivos en Aves
Aditivos en Aves
Aditivos en Aves
Las zonas de almacenamiento de las materias primas y los productos terminados deben
estar separadas para prevenir la contaminación cruzada. Estas instalaciones deben estar
libres de químicos, fertilizantes, plaguicidas y otros contaminantes potenciales.
Los piensos deben almacenarse de tal forma que se puedan identificar fácilmente y que
se prevenga la confusión con otros productos. Los medicamentos y las premezclas
medicadas deben almacenarse en un lugar seguro y con acceso restringido a solamente
personal autorizado.
Cualquier producto rechazado, debe identificarse claramente y mantenerse en zonas
segregadas para prevenir su uso accidental. Los piensos terminados que estén aprobados
y de acuerdo con las especificaciones, deben almacenarse en materiales de empaques
adecuados o en recipientes adecuados. Los alimentos medicados deben almacenarse en
un área separada y segura.
Las instalaciones de almacenamiento deben estar diseñadas y construidas para prevenir
la entrada de plagas. Las zonas de almacenamiento deben estar completamente limpias
y despejadas de forma rutinaria.
Las materias primas y los productos terminados deben mantenerse frescos y secos para
prevenir el crecimiento de mohos. Cuando sea necesario, deberá controlarse la
temperatura y la humedad.
Los aditivos son sustancias que se agregan intencionalmente a los alimentos y que no
necesariamente contienen un valor nutricional.
Los objetivos de incorporar aditivos en la ración de las aves son variados, entre ellos
podemos mencionar:
Los aditivos deben reunir determinadas condiciones para poder ser utilizados,
algunas de esas condiciones son:
Los aditivos se utilizan para asegurar que los nutrientes de la dieta sean ingeridos,
digeridos, protegidos de destrucción, absorbidos y transportados hacia la célula. A su
vez, pueden alterar el metabolismo de las aves para promover el crecimiento y/o
mejorar el producto final.
Se considera que los aditivos representan el 0,5% de la dieta y el 5% del costo total
de la ración.
En este primer artículo, desarrollaremos los aditivos que mejoran el color de las yemas
o de la piel de los pollos, es decir, los pigmentos.
Pigmentos
Los pigmentos se utilizan en las aves con el fin de mejorar el producto de acuerdo
con las preferencias de los consumidores, y sin alterar el normal metabolismo de los
animales.
Las aves son capaces de almacenar pigmentos en la yema, en los depósitos de grasa, en
la piel y en las patas.
Se ha comprobado que entre los consumidores el color está asociado al paladar: una
alteración del color, incluso asociada a un mejor sabor, puede provocar rechazo.