Tarea Cuento de Sebas.2

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El carnerito de la lana brillante Así fue como se concretó la apuesta solemnemente.

Cuando el hombre
llegó a su casa, su mujer le preguntó - ¿Dónde está nuestro carnerito?
Esta era una pareja joven. Vivían en una chacra de Casma. El hombre tenía
- ¿Dónde estará?
una oveja. La alimentaban dándole pasto verde. La criaban en la puerta
del corral. Nunca la llevaron fuera de la casa y no se cruzó con ningún Sólo entonces el dueño se dio cuenta que el carnerito no había vuelto con
macho alguno. Sin embargo, de repente, apareció preñada y parió un él. Salió de la casa a buscarlo por el camino del canal. Lo encontró en el
carnerito de color marfil, de lanas brillantes apenas cayó al suelo se cerro. Venía llorando de instante en instante.
levantó enérgicamente. El carnero aprendió a seguir a su dueño; como un
perro iba tras él por todas partes y ninguno solía caminar solos, el carnero - ¿Qué fue lo que hiciste?¡Tu dueña me ha reprendido por tu culpa!
olvidaba a su madre solo iba donde ella para mamar. Debiste regresar inmediatamente - le dijo el hombre muy enojado.

Cierto día el hombre fue a la chacra a recoger leña, el carnero lo El carnerito respondió:
acompañó; el hombre se puso a juntar leña, hizo una carga se la echo al ¡Ay! ¿Por qué me llevaste, dueño mío?¡No sé qué ha de suceder!
hombro y luego se dirigió a su casa, no se acordó de llamar al carnerito
este se quedó en la orilla del canal de la chacra comiendo granadilla, - ¿Qué es lo que ha ocurrido? ¿Qué puede sucederme? – Preguntó el
cuando estaba comiendo salió un enorme carnero negro, viejo y gordo del hombre.
fondo del canal, estaba encantado, era el demonio que tomaba esa figura. -Hasta hoy hemos caminado juntos dueño mío. Nuestro camino común se
Entre ambos concertaron una pelea. El carnero negro le dijo al carnerito. ha de acabar.
_Ahora mismo tienes que luchar conmigo, tenemos que sabes quién de - ¿Por qué? ¿Por qué causa? - Volvió a preguntar el hombre.
los dos tiene más poder; si tú me vences te salvarás, pero si te venzo yo, te
arrastraré al fondo del canal. -Me he encontrado con el poderoso, con mi gran señor. Mañana tengo
que ir a luchar con él. Mis fuerzas no pueden alcanzar a sus fuerzas. Hoy él
_Hoy mismo no - contesto el carnerito. Espera que pida permiso a mi tiene un gran alimento. ¡Ya no volveré! Me ha de hundir en el canal - dijo
dueño, que me despida de él. Mañana lucharemos. Vendré al amanecer. el carnerito.
_Bien - dijo el carnero viejo. Saldré al mediodía. Si no te encuentro a esa Al oír esto, el hombre lloró. Y cuando llegaron a casa, lloraron ambos, el
hora, iré a buscarte en una litera de fuego, y te arrastraré a ti y a tu dueño. hombre y su mujer.
_Está bien. A la salida del sol apareceré por estos montes – ¡Ay mi carnerito! ¡Ay criatura! ¿Con qué vida, con qué alma nos has de
contesto el carnerito. dejar?
Y de tanto llorar se quedaron dormidos. -Entonces no hay nada más qué hacer - dijo el hombre - y se quedó en el
camino. El carnerito se marchó. El dueño subió el cerro y llego a la
Ya casi, muy al amanecer, cuando aún quedaban sombras cuando aún no
cumbre. Allí se tendió; oculto en la paja miró al canal. El carnerito llego al
había luz de aurora, se levantó el carnerito, y se dirigió hacia la puerta de
canal y comenzó a gritar poderosamente; escarbaba el suelo y echaba el
la casa de sus dueños
polvo al aire. A si estuvo un rato solo muy blanco en la gran chacra.
y les habla así:
Y el agua del canal comenzó a moverse; se agitaba de un extremo a otro;
-Ya me voy. Que daos, pues, juntos. hasta que salió del fondo del agua un carnero negro grande y fuerte como
las rocas. Escarbando la tierra aventando polvo se acercó hasta el
- ¡No, no! ¡No te vayas - le contestaron llorando - aunque venga tu señor, carnerito blanco. Se encontraron y empezó la lucha.
tu encanto, nosotros le destrozaremos los cuernos!
Era mediodía y seguían peleando. Ya arriba, ya abajo, ya hacia el cerro, ya
-No podréis contesta el carnerito. hacia el canal, el carnerito luchaba su cuerpo blanco se agitaba en la
-Si, hemos de poder. ¡Espera! chacra. Pero el carnero negro empujaba, poco a poco. Lo empujaba hacia
el agua. Y al final, le hizo llegar hasta el borde del canal, y de un gran
-Pero el carnerito salió hacia la montaña. empujón lo arrojó al fondo; entonces el carnero negro, el poderoso, dio un
'El hombre corrió, el dio alcance y se colgó de su cuello, lo abrazó salto y se hundió junto a tras sí adversario. Ambos se perdieron en el
fuertemente. agua. El hombre lloro a gritos; llegando a su cada cayo desvanecido. Y la
mujer también lloraba sin consuelo.
- ¡No puedo, no puedo quedarme! - le decía el carnerito.
Hombre y mujer criaron a la oveja, a la madre del carnerito blanco con
- ¡Iremos juntos! grandes cuidados, amándola mucho, con la esperanza de que apareciera
un carnerito igual al que perdieron. Pero transcurriendo los años y la oveja
-No, mi dueño serio peor, ¡me vencería! Quizás yo solo de algún modo me
permanecía estéril. Y así, los dueños pasaron el resto de su vida en la
salvaría.
tristeza y el llanto.
- ¿Y cómo de hacer mi vida si tú no estás! - Decía llorando el dueño. En ese
instante el sol salía, ascendía en el cielo. FIN
-Juntos viviréis, juntos os ayudaréis, mi dueño. No me atajes más, mira
que el sol ya está subiendo. Anda al cerrito, y mírame desde allí. Nada más
- rogó el carnerito.

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