Casada A Mi Corta Edad - Mariana Meran Familia
Casada A Mi Corta Edad - Mariana Meran Familia
Casada A Mi Corta Edad - Mariana Meran Familia
[Danielson 1]
1
Copyright Information
2
Table of Contents
Cover
Title Page
Copyright Information
Table of Contents
Summary
Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
3
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Epílogo
Agradecimientos
Segunda Parte
4
Summary
Description:
¿Qué pasaría si un día llega tu padre a casa con un chico bastante
guapo y te dice que es tu esposo?
Cameron Danielson mayor por 10 años que Melanie Walker.
¿Las diferencias de edades afectarán?
¿Ella lo amará?
¿El amor sera muy fuerte para soportar?
Portada hecha por @Ilustradoraofficial ♥
5
NO COPIAR. ES DE MI AUTORÍA.
6
Prólogo
7
padres murieron cuando era muy joven, desde luego
se volvió frío, demandante, autoritario. Posesivo.
Ellos tienen algo en común; el dolor.
8
tomar medidas legales en contra de la persona que
lo haga.
Respetar, para que te respeten.
Bellezas. 😍
9
Capítulo 1
10
Eran aquellos días cuando salía con Kathy, otra
más en su larga lista de conquistas, no puede negar
que es hermosa, tiene lo suyo, buenos pechos,
curvas en los lugares adecuados, un buen trasero,
también sabe satisfacer a un hombre, no se le puede
negar, sin embargo el sexo en su vida pasó de ser
placer a solo algo que hace por necesidad y nada
más, cree no, está seguro que como único eso
cambiará en el, es cuando tenga a su pequeña con él.
Estaban en unos de los dichosos spas donde le
gustaba meterse a Kathy, ya ni siquiera sabe si lo
hace, tanto tiempo desde que se aburrió de ella, las
cosas debieron pasar así, su anatomía ya en ese
tiempo no reaccionaba a su cercanía y decidió que
era tiempo de acabar con cualquier relación que lo
atase a ella, desde entonces no ha vuelto a saber más
de su persona.
—Oh, amor, vamos a darnos unos masajes —dijo
Kathy con aquella voz tan chillona que le molestaba.
—Kathy, sabes que no me gustan esas cosas —ya
se estaba empezando a cabrear, se las habían pasado
toda la dichosa tarde de aquí para allá y de allá para
acá, de tienda en tienda y salón, algo que sumamente
detesta, para Cameron las mujeres tardan demasiado
hasta para elegir un peine.
11
—Anda no te cuesta nada, además… —sugirió
esto tomando de la corbata y jugando con ella —,
me haré una depilación especial para ti.
No estaba mal la idea de ella bien depilada para
follarla sin molestia, si algo que le agrada en el sexo,
es tener a la mujer que va a compartir la cama con
él, totalmente depilada está lejos de considerar
aquello como un estorbo, pero cada ser humano
tiene sus preferencias, al menos de que tenga alguna
fantasía sexual y duda mucho que esa tenga que ver
con algo parecido a vellos por todos lados.
Tomó un gran suspiro, ella ya sabía que había
ganado, vio el brillo en sus ojos y supo de inmediato
porque, de seguro vio en su mirada el aura de lujuria
que sus ojos debieron transmitir al momento de que
su cabeza reproducía ciertas imágenes.
—Está bien, pero solo miraré.
Solo hizo falta eso para que le brincara encima,
dándole besos por toda la cara, eso estaría al día
siguiente en la prensa y más hablando de que él no
devolvió el gesto cariñoso, porque ciertamente odia
que lo toquen más de lo debido. Entraron al dichoso
spa e inmediatamente fueron recibidos por
recepcionistas, que no dudaron en brindarles una
atención demasiada efusiva al ver de quien se
12
trataba, sabían quién era y lo que significaba tenerlo
en su negocio, buen dinero, promoción por los
jodidos paparazzis que lo acechan en todas partes.
A Kathy le empezaron hacer cosas de las cuales
Cameron no entendía nada, puesto que no le estaba
prestando atención , para al final dejarla en una
simple camilla, solo cubriendo su trasero con una
toalla blanca y algo verde en su cara. Tomó una
revista y empezó a leerla, esas dichosas revistas
nada más viven publicando lo que no les importa,
viven detrás de personas como él que siempre están
en el ojo de la sociedad, siguiéndoles los pasos.
A veces hasta quieren saber será de que tamaño
lo tengo _ Pensó Cameron en ese momento.
— ¡Oh! mira nada más —el tono de voz de Kathy
denotaba cuanto no le estaba gustando lo que vio en
la dichosa revista, no le prestaba atención, sus ojos
ciertamente encontraban más interesante ver lo que
en la pantalla de su móvil había y su cerebro por
igual —. Ahora la sensación es nada más y nada
menos que la princesita Walker.
Ni puta idea de quién diablos hablaba, hay
muchos Walker en el mundo y nunca había
escuchado “Princesita Walker”.
13
La verdad es que no le interesaba lo que decía,
seguro era otra chica estirada niña de Papi y Mami.
Se preparó mentalmente para escuchar a Kathy
leer el bendito artículo, lo cual no dudo en hacer,
ignorando su bufido de aburrimiento y
desaprobación.
—Con tan solo trece años tiene a la mayoría de
los chicos de florida tras ella, la verdad es que la
chica tiene el cuerpo mejor que una súper modelo,
ayer fue captada en una piscina de unos de los más
importantes hoteles de florida con su peculiar grupo
de amigas, dejando ver sus atributos en un bello
traje de baño rosa, de una pieza donde se puede
apreciar su escultural cuerpo, así como de bella
tiene su carácter, trataremos de hablar con ella para
que nos diga su rutina diaria.
Por fin Kathy dejó de leer, ya lo aturdía con su
voz chillona, aunque la publicación al final y al cabo
le sonó interesante, es imposible no escuchar cuando
estás en una misma habitación con otra persona y
esta habla.
—Oh amor, mira —se gira sobre su eje, dejando
sus pechos al descubierto delante de él, la imagen lo
desconcentró del móvil, Kathy era hermosa y lo
sabía —. Esta niñata, dizque con un cuerpo de una
14
súper modelo, ja, si solo es una mocosa, anda mira y
dime si no es cierto que soy más guapa que Melanie
Walker, mira amor, ¿Dime si no soy más hermosa
que la mocosa? —siguió insistiendo.
La publicación le resultó interesante, estaba
aburrido y no le costaba el ir a ver la dichosa
publicación, pero también no quería darle el gusto a
Kathy, siempre lo mismo. Ella siempre se creyó la
más hermosa de todas.
—Kathy, sabes que eso no me importa, esas
revistas siempre hablan tonterías —se estaba
haciendo el difícil al resistirse, aunque la curiosidad
lo mataba. Sentía esa picazón en las manos y pies,
algo que lo incitaba a levantarme y ver qué había
detrás de la portada, un sentimiento extraño se había
instalado en su pecho.
—Anda mira y luego te sientas de nuevo.
Rodó lo ojos, asintió, fue a ver, con cada paso
que daba su corazón empezó a latir sin control y
todo su mundo se detuvo cuando la vio, sus ojos se
quedaron clavados, sentí el vuelco en su pecho.
Resistió el impulso de llevar su mano ahí, donde su
corazón no dejaba de golpear violentamente la caja
torácica. Realmente la chica es hermosa, preciosa…
no halló término que pudiese describir su belleza y
15
más en ese bikini dejaba poco a la imaginación, sus
piernas, trasero, labios, pechos… todo un manjar, la
boca se le hizo agua, sentía las palmas de sus manos
sudadas, se sentía un adolescente de nuevo, cuando
era un hombre de 23 años en ese entonces. Su vista
volvió a su rostro, donde sus ojos se veían brillantes,
pero en ellos logró ver la misma tristeza que él,
aunque sus labios estuviesen despegados en una
radiante sonrisa, carnosos, brillante…
— Cameron, Cameron, mi amor, ¿Me oyes? —
tenía que ser Kathy que lo distrajera de que sus ojos
siguieran fijos en su figura, aquella chica robó su
atención y todo de él.
—Eh… si… este, ¿Qué pasó? —se vio
gagueando en primer instante, sí que la chica es la
más hermosa que había visto y desde ese momento
supo que nunca más habría para él alguien más
hermosa que ella.
—Dime, ¿Es más linda que yo? ¿Verdad que no
mi amor? —pero claro que es más linda, más linda
que todas las chicas que me puede imaginar, conoce,
visto y ha tenido, la más preciosa sobre la faz de la
tierra y quien se atreviera a decir lo contrario en su
presencia, tendría serios problemas con Cameron.
16
—En… si… no… tú eres más hermosa Kathy —
le dijo con la sonrisa más fingida, pero en el fondo
de su pecho y corazón, quería gritarle que si era
ciega que estaba para no darse cuenta que su belleza,
nunca se igualará a la de Melanie Walker, que bien
se sintió desde entonces pronunciar su nombre.
Desde ese tiempo en pocas semanas después, lo
sur con Kathy acabó, era una tortura estar con ella
no sentir nada y sabía bien porque, Melanie Walker
estaba en su cabeza todo el tiempo, se me había
obsesionado. La empezó a querer sin ella siquiera
saber.
Actualidad.
Desde entonces supo que sería suya, para él. El
nombre de Melanie Walker no sale de su cabeza, día
y noche está en sus pensamientos, ha soñado y sueña
con ella un sin fin de veces, haciéndola suya, su
mujer, ella debajo de él, temblando y gimiendo en su
oído, se ha masturbado mil veces por ella; y si, sigue
encontrándose una que otras veces con mujeres, lo
puede confesar, nada más bueno que un buen polvo,
pero ninguna le satisface solo lo hace porque es una
necesidad como ya había mencionado, desde que vio
a su Mel en esa revista no puede tener a otra que no
17
sea a ella en su mente y corazón, todas las demás
son solo de paso.
Ha pasado estos últimos tres años detrás de ella,
se ha convertido un total acosador.
Luego de aquel día que salió del spa, llegó a su
pent-house buscó su nombre en internet , en cuanto
cargo el buscador apareció su diosa, junto a su
padre, Richard Walker; importante empresario, tiene
algunos negocios en común con los suyos por lo que
se decidió a estar al pendiente de sus negocios
buscando la oportunidad de atacar y poder tener a
Mel, nunca supo cómo haría para tenerla, también
supo que su madre murió en un accidente de tránsito
y su pequeña iba con ella, gracias a Dios que salió
viva, sino su vida no habría encontrado sentido
alguno, solo se dio algunos golpes y unas fracturas,
se puedo imaginar su dolor porque Cameron sabe lo
que es perder a tu madre y padre.
Y desde luego sabe cada paso que da, contrató
personal para ello, tal vez le digan demente y más
porque en tres años gastas una fortuna vigilando o
cuidando a alguien, mas poco le importa, solo
trabaja para el mismo, tiene millones en el banco
que no sabe qué hacer con ellos, mas los millones
que diariamente le entran a la cuenta bancaria
18
independiente de la cuenta que cubre los gastos de
personal y producción de las empresas.
La ha visto en persona, pero ella no se ha dado
cuenta de eso, ha estado en sus cumpleaños desde
ese día, la ha seguido y la ha protegido día y noche,
sabe que como es amable también es una fiera, su
fiera, la que domara.
Ha visto como anda con sus amigas a centros
comerciales, como muchos chicos se le acercan y la
verdad es que más furioso no puede estar en su vida
como cuando esos malditos niños de Papi y Mami se
les acercan o le toman aunque sea la mano, cuando
se pone sus trajes de baños y va a piscina con sus
amigos, la rabia le invade por completo viendo
como los hombre la miran con su maldita lujuria,
días como esos es que se desesperaba por tenerla
solo para él, días así es cuando sus empleados le
temen más.
Es que sus ojos azules eléctricos, sus cejas
curvadas, su nariz fina, sus mejillas con un ligero
color rosa, su pelo por la cintura color castaño, su
sonrisa que hipnotiza, sus labios carnosos y rojos
rellenos, esos por los que está desesperado por
probar, su delicado cuello y ¿Qué hay de sus
pechos? Redondos y firmes, medianos, su plano
19
abdomen, su pequeña cintura, su trasero firme y
redondo, sus espectaculares piernas, toda ella es
perfecta con su piel blanca, de solo pensarla desnuda
inevitablemente se pone duro.
Es una diosa. Lo sabe, sabe que lo es aunque no
la haya tocado, no la haya probado, aunque no la ha
tenido en ninguno de los sentidos, su ser se lo dice.
Sin embargo ya todo está listo, el sábado su
pequeña estará con el.
Así es, hace un año el padre de Melanie hizo una
mala inversión, por lo que su empresa perdió una
muy grande cantidad de dinero, las bolsas de valores
disminuyeron en gran manera y ha quedado a punto
de caer en la quiebra.
Ahí es donde entra Cameron Danielson; su futuro
suegro estaba buscando socios para ayudar a
fortalecer nuevamente su empresa, nadie se arriesgó,
algo que es sumamente comprensible, no todo el
mundo y más empresarios que se viven la vida
compitiendo uno con otro para ser el número uno,
buscando con esmeros que sus fortunas crecen, el
dinero cuesta mucho ganárselo a pesar de que nazcas
o no rico, si no lo trabajas este se acaba, no obstante
Cameron aprovechó su oportunidad e inyectó el
20
capital que se necesitaba para que la empresa subiera
y se recupere del bajón que tuvo.
La verdad detrás de todo aquello es que no le
importa perder esos millones con tal de tener a
Melanie, ella sin saberlo le dio sentido a su vida
desde que la vio y perder unos que otros millones, lo
que no ha sucedido, cuando tienes en el banco una
fortuna que bien no sabes que hacer y que a diario te
entran millones, carece de importancia si es por tu
felicidad.
Jugó sus cartas, puso contra la espada y la pared a
Richard Walker, pero finalmente terminó aceptando,
suena mezquino, pero él bien sabe que si en algún
momento de su vida, los negocios y el riesgo que ha
tomado para levantar la empresa nuevamente, en
caso de que no funcione, Melanie estará segura y no
le faltará nada, a él por igual, es su suegro, nunca lo
dejaría a su suerte.
Es así como finalmente en tres días, Melanie
estará viviendo con él.
21
Besotes. 😘😘😘😍😍
22
Capítulo 2
23
hombros ante su cara de muerte, es la misma que
trae cada mañana al despertar.
Ingresa a la ducha luego de despojarse de toda la
ropa de dormir quedando desnuda, para
posteriormente abrir el grifo y empezar a tomar un
baño de lo más relajante y calmado con agua tibia,
tiene el tiempo justo para hacerlo sin llegar tarde al
instituto.
—Como si quedara al otro lado de la ciudad
Melanie —murmura para ella misma.
Suele hablar sola de vez en cuando, para no decir
que lo hace muy seguido.
Entre pensamientos termina su baño. Sale para
dirigirse a su gran armario, mientras seca su cuerpo.
Va hacia los cajones, elige la ropa interior,
lencería negra, su favorita.
Si, lencería negra, desde los trece le gusta usar
esas ropas íntimas que ve muchas veces en los
catálogos y revistas, además se siente sexy aunque
no se la muestre a nadie.
En ropa interior se dirige al otro extremo a por la
ropa, eligiendo unos vaqueros ajustados negros, sus
botines negros favoritos y una blusa rosa fucsia de
24
manga corta, cadena, aretes y pulsera con su inicial
junto al reloj, fue un regalo de su padre cuando
cumplió quince años.
Ya vestida deja su cabello suelto con pequeñas
ondas, se maquilla muy suave; rimel, polvo,
sombras de cejas para resaltar sus curvilíneas cejas y
labial nude en un tono buscando a pastel, eso
compone su maquillaje, así me paso el día.
Toma su mochila, lista para dirigirse a tomar el
desayuno, recorriendo los mismos pasillos que desde
pequeña ha recorrido, fotos de su padre, madre y
ella, adornan el corredor de la casa.
Le gustaría tanto tener a su mamá con ella,
muchas veces ha llegado a pensar que ella también
debió morir en aquel accidente. Fueron días grises y
turbios para una de 8 años.
Al bajar las escaleras lo primero que la recibe son
las voces de una conversación muy animada que
provienen de la sala del comedor. Camina hacia allá,
entrando inmediatamente, ahí está su querido ya
amado padre leyendo el periódico mientras toma el
delicioso café que prepara Amalia, su nana, tan
bella, se mueve con seguridad mientras sirve el
desayuno y le sigue la plática a su padre.
25
—Buen día —saluda llegando a ellos, que es de
la única forma que se dan cuenta de su presencia.
Niego con su cabeza. Da un beso a su padre en la
mejilla, quien gustoso y con una sonrisa besa la
suya.
Advierte una tensión al ella acercarse, ignora el
porqué.
—Buen día hija —le devuelve el saludo.
Extiende un brazo y un tanto melancólico toca su
mejilla.
Frunce un poco el ceño, eso le resulta bien
extraño.
Se vuelve a su nana aun confundida, quien le
hace sonreír al ver su cálida sonrisa y la sola calidez
que desprende en ese lado maternal que solo ha
tenido con ella, le hace olvidar de que su padre está
bien extraño.
—Buenos días mi niña —la saluda su nana
dándome un beso en la mi mejilla izquierda,
Melanie por igual le devuelvo el saludo al tiempo de
que toma asiento en el lugar habitual de la mesa.
—Estás muy hermosa mi princesa —halaga
Richard Walker, su padre, Melanie le sonríe.
26
Nota su mirada todo el tiempo en ella y no es que
su padre es de esos que no se fijan en sus hijos, al
contrario él siempre está atento a Melanie y todo lo
que necesita, pero su padre anda bien extraño el dia
de hoy, aunque realmente si lo piensa bien, en las
últimas semanas ha estado igual, también más al
pendiente, procurando estar el mayor tiempo que se
le he posible a su lado.
—Gracias Papi y tú muy guapo —responde de
manera cariñosa a su halago, presencia como sus
mejillas pálidas se tornan color rosa.
—Oh, hija lo dices de cortesía, ya estoy viejo
para verme guapo —esconde la cabeza con el
periódico nuevamente, de reojo ve a la nana
sonrojarse un poco, carraspea, achina la mirada,
mientras piensa algo se está cocinando ahí.
Decide probar algo, lo pone en marcha. Traviesa
como es.
—¿Oh nana! —exclama llamando su atención —.
Dime tú si no está guapo —lanza a lo que Melanie
llama fuego.
Que arda el infierno joder, si definitivamente
estoy loca __ se guarda sus pensamientos.
27
—Mi niña, ¿Cómo me preguntas eso? —inquiere
en modo de regaño la nana, su cara parece color
carmesí, esta sonrojada hasta las hebras de su
cabeza, agacha la cabeza en una expresión de pura
vergüenza.
—Vamos papá, estás joven todavía, si yo tuviese
la edad de mi nana y no fuera tú hija, te echaría el
ojo créeme —la cara de Richard pasa de rosa a
carmesí por el comentario de Melanie, la nana no
sabe dónde meter su cabeza y Melanie, ella solo
disfruta en ponerlos nerviosos. Al final terminan
comiendo los tres riendo.
La verdad es que no le desagrada la idea de ellos
dos juntos. Su madre murió hace mucho ya,
recordarla abre una herida en su pecho que siempre
trata de guardar y por más que le duela admitirlo, su
madre está muerta y nunca volverá y su padre aún
está joven para rehacer su vida, ella no es quien para
oponerme.
Feliz Melanie si decide rehacer su vida más con
una mujer como lo es Amalia.
—Mel, ¿Dónde has aprendido esas cosas? —
pregunta su padre sacándola de sus tristes
pensamientos.
28
Parpadea un momento, aleja todo pensamiento
triste de ese fatídico día en el que su vida cambio
por completo y que a tan temprana edad aprendió
que ni aun teniendo todo el dinero del mundo,
puedes comprar la vida, cuando esta, está destinada
a irse.
Sonrie como siempre, mira a su padre como si
tuviera dos cabezas.
— ¡Por Dios pa! Estamos en pleno siglo XXI, ¿y
me preguntas eso? Sé cosas que ni imaginas padre
—contesta de lo más relajada.
—Melanie Walker Swant —uys, que cambio tan
radical ha tomado la conversación. Problemas
Melanie, problemas por su culpa y la de su bocaza,
Richard está totalmente serio —, no me digas que
ya… —antes de que termine lo interrumpe, parece a
punto de que le dé un infarto. Melanie no hablara de
eso con el.
—Ya sea por dónde vas, pero no todavía no,
aunque no se que pase en estos meses —se encoge
de hombros siendo sincera. De reojo observa a su
padre aflojar la corbata —. ¿Estás bien? —inquiere
preocupada.
29
Asiente con su cabeza, toma un trago de agua, su
cara está llena de melancolía y preocupación, esto
no deja tranquila a Melanie.
—Mel mi niña ten cuidado, la mayoría de los
jóvenes solo quieren pasar un buen rato y luego de
que lo consiguen y se aburren botan a las jóvenes —
sermonea la nana. Sus ojos azules pasa de su padre a
ella para prestarle atención.
—Pero ni modo que me quede virgen para toda la
vida, seré monja —nótese el sarcasmo.
—Hija júrame que no, que no lo has hecho —
demanda Richard casi suplicando.
—Papá, estás muy interesado en el tema, ¿Por
qué? ¿Qué te sucede? —de pronto su insistencia e
interés por el tema le deja mucho que pensar, algo
debe ocultar.
—Eh… es… que eres mi princesa y… — con
que eso es, supone. Lo escrutinia a la cara, en sus
ojos no hay más que pura verdad, mezclado con ese
algo extraño que lo acompaña desde hace unos días.
—Tranquilo Papi, no lo he hecho, aún —dice,
recalcando lo último, su cara se relaja en total alivio.
30
Después de esa conversación los tres disfrutan
del desayuno tranquilos.
Al terminar el desayuno se despide de su padre y
la nana Amalia quienes continúan conversando en lo
que Richard termina su zumo de naranja.
Toma nuevamente la mochila caminando a la
cochera para buscar su auto para irse al instituto, su
amado bebé como lo llama, lo ama más que es
descapotable, un regalo que muy en contra de sus
miedos a un accidente Richard le regalo el dia de su
cumpleaños número 16, hace poco.
Melanie sabe conducir desde los 12 años, otra
súplica que tuvo que hacerle a su padre, como único
aceptó fue porque él mismo la enseñó.
Se toma menos de quince minutos en llegar al
instituto.
Aparca el auto e inmediatamente en su campo de
visión aparecen sus amigas, Laura, Victoria “Vicky”
y Morgan.
—Hola zorras —habla lo suficientemente alto
para que la escuchen. Ese es su saludo
personificado.
31
—Hola perra —Laura le devuelve el saludo,
haciéndole una mueca extraña.
— ¿Qué tal puta? —Vicky restriega en su cara la
palabra, Melanie muy madura como es le saca el
dedo de enmedio.
—Oh maldita zorra te ves buenísima con esa ropa
—la espectacular característica que es Morgan de
halagarle, a ella le saca la lengua.
Termino de bajar del auto para fijarse en las
vestimenta de sus fieles amigas y jura joder, que si
no fuese heterosexual, fuesen las tres sus novias.
Que perro sonó eso, Melanie.
—Ustedes también perras —las señalo a las tres.
A su espalda escucha unos pasos y
posteriormente una voz muy conocida.
— Que guapa amaneció hoy la chica más linda
de florida y el mundo —Ese es Nick. Tan adulador
como siempre.
Se gira para poder verlo.
—Gracias Nick —se sonroja. Las últimas
semanas Nick la ha estado cortejando, la verdad es
que es muy guapo, azules, cejas no muy gruesas,
32
pelo castaño, es un poco más alto que Melanie, tiene
buen cuerpo atlético, de piel bronceada. Además
tiene solo un año mayor que ella. Nada mal.
Le guiña un ojo antes de hablarles a todas.
Melanie parece tomate.
—Chicas, hoy haremos una fiesta en el club que
está a dos cuadras de mi casa para celebrar a Logan
su cumpleaños, será sorpresa, así que ustedes están
invitadas claro y ayúdenme a correr la voz, ¿De
acuerdo? —mientras habla Melanie se queda tiesa
mirando sus labios carnosos, el deprimente recuerdo
de que hace exactamente tres míseros años tuvo
lugar el último beso que le dio a un compañero de
clases.
“Controla tus hormonas adolescentes, Melanie”
Evita poner los ojos en blanco ante su estúpido
subconsciente.
Soy una adolescente, idiota.
Eso es sumamente patético, el ella estar
discutiendo con su subconsciente, si son la misma
persona. Un día de estos terminara más que loca de
lo que está.
33
—De acuerdo —dicen sus amigas y ella al
unísono. Algo chistoso.
—Bueno chicas es hora de entrar a clases —dice
Nick con fastidio y es cierto acaban de sonar el
timbre indicando que tienen que entrar a clases.
Nick se acerca a Melanie —. Te espero en el club
Mel —no la deja contestar, le da un beso cerca de la
comisura de los labios, para posteriormente
marcharse acomodando la mochila en su hombro.
Me volteo para ver como las chicas tienen caras
bastante exageradas de sorpresa y picardía, ya sabe
lo que viene por lo que comienza a caminar.
—Nick sí que está loco por ti —afirma Vicky
muy convencida de lo que dice y las demás la
secundan. Tratan las tres de seguirle el paso.
—Ya vamos, vale — Ignora sus comentarios, no
espera que contesten y sigue caminando a su clase
de matemática que le toca compartir con las amigas,
que no dejan de molestarle. Tiene el rostro
encendido, probablemente del color de la blusa.
Ama matemáticas, nótese el sarcasmo.
Las clases pasan como lo que son, un gran estrés,
tanto Morgan, laura y Vicky aprovecharon para
recalcarle y agregarle más características a Nick ante
34
Melanie, mas por ellas son tan largas, escucharlas
parlotear de Nick todo el tiempo, como si Melanie
no sabe sus virtudes, simplemente que le avergüenza
admitirlo, puede ser la chica más expresiva en
muchas cosas, pero cuando se trata de esto, es un
asco.
Pasa el día de clases, al salir todas pasan por la
casa de cada una a buscar lo que se van a poner y
suplicarle a los padres de las chicas para que las
dejen salir, el problema no es que amanecerán en la
casa de Melanie, el problema es que van a un club y
eso significa bebida. Toda una lucha y casi una hora
tardan en rogarles prácticamente, el peso decae de
sus hombros al obtener una respuesta afirmativa.
Cuando finalmente llegan a la casa de Melanie ya
es pasada las doce del mediodía, entran, se queda en
una pieza, ahí está Richard.
Su padre no almuerza en la casa.
— ¿Papá? —la sorpresa es más que evidente en
su rostro y voz.
—Hola hija, chicas —saluda en general, de lo
más normal.
—Hola señor Richard —saludan al unísono, esa
costumbre que si no fuera una rubia, otra pelirroja y
35
una pelinegra, dirían que son trillizas.
—Hola Papi, es muy raro verte tan temprano en
casa —comenta acercándome, besando su mejilla.
—Solo quería llegar temprano a casa y ver a mi
princesa para pasar tiempo contigo y en la empresa
no había mucho que hacer, pero ya veo que tienen
planes —dice mirando el equipaje de sus amigas, ya
las conoce a las cuatro.
Richard pocas veces se opone a las salidas de
Melanie, por no decir que nunca, es una ventaja en
eso de que es su consentida y única hija.
—Oh si Papi, lo siento, hoy es el cumpleaños de
Logan y estamos invitadas, te prometo que lo
haremos todo eso. ¿Puedes el viernes? —coloca cara
de cachorrito, hablando rápido, mencionando al hijo
de los buenos amigos de su padre. Estrategia le
llaman a eso, así no le dice un rotundo no, aunque
eso sucede cuando los burros vuelen.
—Como decir que no a esa hermosa carita —
responde mirándole a los ojos los que no tienen ese
brillo que suelen tener.
—Papi te veo triste. ¿Estás bien? —interroga
poniéndole una mano en la mejilla, indagando en
36
esos ojos azules iguales a los suyos, un que y porque
de la razón por la cual esta asi.
—Claro princesa, es que ya estás tan grande que
ya no eres esa pequeñita que cargaba a diario cuando
llegaba del trabajo, lo intento y me quiebro la
espalda —todas ríen ante su comentario. Sin
embargo Melanie es incapaz de olvidar esa
melancolía que proyecta.
La idea de que su padre está ocultando algo, cada
vez toma más fuerzas.
—Te amo mucho Papi.
Ante esas palabras los ojos de Richard Walker se
cristalizan.
Traga el nudo que se forma en la garganta,
procede a responder:
—Y yo a ti mi princesa —se funde en un abrazo
único, donde las emociones sobran y los
sentimientos están a flor de piel.
Melanie tiene deseos de llorar.
—Oh no, yo también quiero un abrazo así —esa
es Vicky, su energía contagia.
—Y yo —Laura.
37
—Y yo —Morgan.
—Vengan todas saben que las quiero como mis
hijas —se abrazan todas a Richard quien sonríe de
manera sincera, besa el pelo de Melanie una y otra
vez, el abrazo dura por un largo rato hasta que se
escucha un carraspeo.
—Eso es muy lindo, lamento interrumpirlos, pero
el almuerzo ya está listo, anden a comer mis niñas,
señor Richard vamos —la nana los incita con
emoción, su aura alegre.
—Oh chicas yo corro, esas comidas de la nana
son únicas aunque tenga que pasar diez horas en el
gimnasio quemando calorías hoy como, como loca
—estallan a carcajadas por el comentario de
Morgan.
—Oye cuidado es mi nana —Melanie finge
enfado, golpea su brazo levemente.
—Querrás decir, nuestra —le pica la rubia Laura.
—Es solo mía —hace un puchero Mel.
—Niñas ya —reprende Amalia —, las amo a
todas por igual, vamos a comer —dice la nana.
Pasan la hora del almuerzo, entre bromas,
Richard ríe bastante con sus locuras hasta ponerse
38
rojo, Melanie tenía tiempo que no lo veía así.
Su atención recae sobre su única hija, la tristeza y
la conciencia pesan, sin saberlo le transmite todas
esas emociones a Melanie.
Luego del almuerzo reposan, para posteriormente
disponerme a hacer sus tareas en la biblioteca de la
casa. Cuando terminan ya son las cinco, hora de
empezar a arreglarse.
Laura se pondrá unos shorts negros a medio
muslo, una blusa corta dejando su ombligo al
descubierto, unos tacones negros y su bolso negro.
Dejando su hermosa cabellera rubia suelta, cayendo
en cascada sobre su espalda.
Vicky un jean ajustado azul marino alto rasgado,
unas botas negras de tacón fuerte, una blusa de
manga larga ajustada y ombligo afuera.
Morgan usará un vestido negro de lentejuelas con
unos tacones y bolso a juego.
Y Melanie un bonito vestidos de brillo rojo con
tirantes, dos dedos encima de sus rodillas, unos
tacones de color negro de diez centímetros con un
bolso a juego.
39
Se disponen a bañarse, cada una en un baño
diferente, para cambiarse juntas y estar las tres listas
al mismo tiempo. A las ocho están listas, dejan sus
cabelleras igual que siempre.
Bajan a la sala despidiéndose de Richard y
Amalia, quienes no dejan de recordarles, que cero
pasarnos de alcohol, que no acepten bebidas de
extraños y si van al baño no dejen sus bebidas o las
desechen.
Luego de escuchar el sermón, se montan en el
coche de Melanie, hoy se disfruta. A mitad de
semana, pero no hay día para disfrutar de una
agradable y relajante fiesta.
40
Capítulo 3
41
Acaban de aterrizar, la verdad ya quería llegar,
además de que su querida azafata no deja de
insinuarse, haciendo caso omiso de su rechazo hacia
ella, porque la ha ignorado lo suficiente.
Cameron solo está pensando en su pequeña Mel,
ya se la folló tiempo atrás y al parecer quiere otra
dosis Danielson, lamentablemente no tiene ninguna
intención y mucho menos interés en dársela.
La cabeza solo la tiene en un lugar a unos cuantos
kilómetros de distancia de donde se encuentra en
estos momentos, pensando que en menos de setenta
y dos horas tendrá a Melanie oficialmente.
Al bajar del jet lo está esperando su chofer y
guardaespaldas en Miami, en un Audi negro tiene
precisamente para moverse con facilidad por la
ciudad. Su guardaespaldas personal lo dejó junto a
su familia, absorbe mucho de su tiempo.
Apenas ingresa dentro de la comodidad del auto,
recuesta la espalda contra los mullidos asientos de
cuero negro. Saca el móvil del interior de la
chaqueta, marca el número fijo, necesita que le dé
información de su pequeña.
— ¿Qué noticias me tienes? —interroga apenas
descuelgan la llamada al otro lado de la línea.
42
—Buenas noches señor, la señorita hizo lo mismo
al levantarse, en el instituto se encontró con sus
amigas como siempre, luego llegó un chico y…—lo
interrumpe, no puede más.
¿Chico? ¿Hablando con su mujer? Es demasiado
posesivo, las venas se marcan en sus manos
inmediatamente al apretarlas, la ira centella a través
de ella.
La palabra chico retumba en su cabeza como un
eco que no se acalla.
— ¡¿Quién es ese chico?! ¿Por qué estaba cerca
de ella? —la sangre le bulle, está temblando de ira
absoluta.
—Su nombre es Nick, es un chico de familia es
un años más grande que ella, se despidió de ella muy
cariñoso, al parecer son muy amigos —informa en
seguida. El temperamento de Cameron es algo con
lo que ha lidiado los últimos tres años.
Toma las cosas con calma, al principio se
exaltaba apenas lo escuchaba gritar mil maldiciones,
ahora solo espera que termine de hablar y
despotricar a diestra y siniestra para seguir
informándole. Se le llama costumbre.
43
—Maldición, ¿Cómo no me llamaste? ¡Debiste
de impedirlo! —grita frustrado, descargando la ira
que se ha apoderado de él, en contra del
investigador.
—Señor si lo hacía sospecharía…—articula el
investigador, recordándole sobre las razones que le
impiden realizar tales actos —. En este momento la
estoy siguiendo va en su coche con música a todo
volumen con sus tres amigas, irán a una fiesta —
escucha el ruido de los autos al otro lado.
Una maldita fiesta. Otra más.
Cameron, debes calmarte.
¡A la mierda con todo!
— ¡¿Qué fiesta y cómo va vestida?! —grita sin
medirse. Ella tiene tanto poder sobre él, puede besar
el piso por dónde camina si lo desea.
—Una fiesta de cumpleaños de un amigo, Logan
Collins y lo de cómo anda vestida le enviaré una
foto —contesta con eficiencia como siempre. Este
hombre se gana su dinero haciendo un buen trabajo,
él lo sabe, pero ahora mismo le vale mierda todo a
Cameron.
44
—Bien y la dirección también adjunta a la foto,
¿Entendido? —pellizca el puente de su nariz, baja el
tono de voz, deja caer la cabeza contra el respaldo
del asiento, tratando de que cada exhalación que
lleva aire a sus pulmones relaje la tensión de su
cuerpo.
Esta jodido por esa chiquilla.
Quita la corbata azul como sus ojos, los ojos de
Melanie, la deja de un lado, necesita respirar sin
sentir nada en el cuello.
—Entendido señor. —acata antes de Cameron
colgar la llamada.
A los poco segundos llega la imagen de su mujer
como la llama, si, porque es suyo, lo dice el papel
que tiene justo al lado en el maletín.
¡No puede ser! Ese vestido…
Se le traba todo.
Todos los pervertidos la desnudaran con la
mirada no es que él no lo sea, porque dada la
situación en la que se encuentra, las personas si se
enteran lo jugarían como tal, con la excepción de
que él tiene todo el puto derecho del mundo y esos
45
hijos de perra no. Nadie puede decirle que no mire y
codicie lo que es suyo.
Aprieta tanto el móvil y el puño libre hasta que
los nudillos se ponen blancos y siente que en
cualquier momento romperá el móvil en cientos de
pedazos.
No aguanta un segundo más sin hacer nada. Le da
la dirección a su chofer del club donde está Melanie,
ordenándole de inmediato que acelere lo más que le
sea posible.
Necesita llegar cuanto antes.
46
izquierda con sus amigas tomando de unas
margaritas que llevan en las manos.
Se sitúa en un lugar donde ella no pueda verlo,
pero él sí perfectamente a ella. Observa cada unos de
sus movimientos, las palabras no son suficientes
para describir a su mujer, rápidamente sus ojos
viajan a sus pechos y la mente empieza a
traicionarlo en público, se imagina como todo un
acosador, quitándole ese vestido mientras reparte
besos por su boca, barbilla, cuello, hasta llegar a
ellos y masajearlos, tomarlos en su boca, chuparlos y
lamerlos, hasta que sus pezones se pongan duros,
luego bajo a sus piernas, imaginando como quitarle
el vestido, besar la cara interna de sus muslos y
luego bajarles sus bragas, para tomar su parte íntima
entre su dedos y su boca lamerla, morderla,
succionarla, hasta hacer que se venga para él y…
¡Maldición! ¡¿Quién demonios es ese que se está
acercando a su mujer?!
Ve como la toma de la mano, se dirige a la pista
de baile con ella.
Hijo de perra.
Ella se voltea empezando a contornear las
caderas, el muy imbécil la toma de la cintura
pegando a su mujer contra su cuerpo.
47
Lo mataré.
No puede más se levanta de repente, para su mala
suerte tiene una muy notable erección apretando sus
pantalones. ¿Qué hace? Cuando levanta la mirada el
mocoso ese esta apunto de besarla, pero se lo lleva
el demonio, no sabe cómo pasa por su lado, el
momento exacto en el que se interpone pasando por
el medio de los dos , derramando la bebida que lleva
en manos en el precioso vestido de su mujer, casi
cae al piso por suerte había un chico atrás y la
sostiene de sus brazos.
Le pide perdón para sus adentros. Lo mejor que
pudo hacer el chico que la sostuvo, fue sostenerla de
los brazos y no en algún otro lugar, porque de lo
contrario Cameron no aguantaría mas esa noche y
terminaría presentándose ante ella, rompiendo el
acuerdo que hizo con su padre, que hasta el domingo
Melanie no sabrá de lo que ambos hicieron.
Ella se queda atónita mirando su vestimenta
aunque Cameron se está alejando sin mirar atrás, por
encima de la música puede escuchar su cabreada voz
que aún así es hermosa.
— ¡Oye! ¡Tú serás imbécil! ¡Fíjate por donde
caminas idiota! — Espeta molesta, provocando que
48
una sonrisa se forme en los carnosos labios de
Cameron.
Espera afuera con el chofer, a ver si se va o no,
sucede tal y como se lo esperaba, Melanie saliendo
del club con la cara tristona.
Lo siento mi amor por haberte arruinado la
fiesta, pero solo yo puedo tocarte.
49
bebida en la ropa de Melanie, casi mandándola al
piso.
Lo peor de todo, es que el muy imbécil no se dio
vuelta ni siquiera para ver cómo estaba e intentar
arreglar su desastre, siguió su camino. Le gritó al
muy estúpido y tampoco se dio la vuelta.
Ante el panorama no le quedó más que hablar
con sus amigas, les pidió que llamaran a un taxi para
que las lleve a su casa, le respondieron que no se
preocupara. Melanie les aseguró antes de salir que
las estaría esperando, despidiéndose de ellas, a la
vez que les pidió por favor que la despidieran de los
demás.
En cuanto estuvo fuera subió a su auto,
encendiendo el motor, arrancando de inmediato.
50
—Princesa, ¿Por qué viniste tan temprano a casa?
Pensé que llegarías más tarde, ¿Y las chicas dónde
están? —pregunta Richard escaneándola de arriba
hacia abajo. Mira sobre su hombro sin hallar a las
chicas, su entrecejo se frunce aún más.
—Hola pa —saluda sin ánimos, está de muy mal
humor al rato, deprimida, quería seguir en la fiesta.
Richard le toca el rostro al verla desgana, se da
cuenta de su ropa mojada, le lanza una mirada
interrogativa. Se apresura a responder —. Un
grandísimo idiota me tiró su bebida arriba y el muy
imbécil no hizo nada, sino que siguió su camino sin
reponer lo que hizo. No pidió ni disculpas papá —
contesta cabreada, realmente lo está.
Por unos segundos parece ver a su padre cambiar
el semblante a uno pálido y nervioso, lo repone
hablándole con autoridad como siempre.
—Mel, ese vocabulario —ahí va sus padres con
las reprimendas —. Seguro fue un accidente, el
sujeto debió de tener prisa.
— ¿Y qué culpa tiene uno de sus malos humores?
Que dejen sus problemas en sus casas, ahora no
podre disfrutar de la fiesta de Logan —dice
haciendo un puchero.
51
—Tienes razón con que las personas tenemos que
dejar nuestros problemas en casa, pero las cosas
suelen salirse de control —acepta su padre
acariciándole la mejilla.
—Está bien, esperaré a mis amigas, buenas
noches Papi —informa despidiéndose con un abrazo
y dos besos.
—Buenas noches mi princesa, ten dulces sueños.
—Tu igual Papi —contesta disponiéndose a subir
las escaleras sin nada de ánimos.
Se despoja de la ropa, toma una ducha de agua
caliente, luego de limpiar perfectamente su cuerpo
decide que ya es suficiente y sale, busca su pijama
rojo pasión, apaga las luces, disponiéndose a mirar
sus redes sociales, para matar el tiempo y esperar a
que sus locas lleguen, pasa el tiempo entre algunos
like, conversaciones…
Después le viene a la mente el inconveniente del
bar, que tipo más extraño seguramente vio cuando
Nick y ella estaban a punto de besarse… Pero ¿Por
qué se metió en medio de ambos? La verdad es que
es un imbécil, estaba a punto de probar los labios de
Nick y saber que por su culpa no los probó y no
estoy en la fiesta…
52
—Dios, me siento cabreada por no poder besar a
Nick por culpa del idiota ese que ni siquiera sé quién
es y espero no volverlo a encontrar nunca más…
Por otro lado siente una extraña sensación de que
fue lo mejor, entre pensamientos se le pasa el tiempo
de nuevo. Su móvil empieza a vibrar; es un mensaje
de Vicky que ya están a fuera.
Se coloca las pantuflas de Mickey Mouse,
bajando a buscarlas, luego suben juntas.
Melanie dormirá con Laura y Vicky con Morgan,
pero antes le contaron todo lo que sucedió en la
fiesta luego de que se fuera.
Vicky estuvo toda la noche bailando y bebiendo
con un chico muy guapo llamado Rony, Laura con
uno llamado Steve y Morgan tuvo más
comunicación con el festejado, sabe que a su amiga
le encanta Logan.
Después de su larga charla se fueron a dormir a
las tres y treinta de la mañana, eso que tienen clases
en unas pocas horas.
53
resaca de Melanie es de sueño. La noche entera
estuvo divagando en tonterías en la cabeza.
—Si no se apuran llegaremos tarde.
Se gana una mala mirada de Laura, son cuatro
amigas, pero con la cual tiene mayor conexión es
con ella, con esa rubia cascarrabias.
Toman una ducha, al cambiarse y estar listas
bajan todas a desayunar.
En el comedor ya estaba Richard, le dieron los
buenos días, luego apareció la nana y empezó a
servir el desayuno.
Tanto Richard como Amalia se les quedaron
mirando para posteriormente explotar el carcajadas,
empezar a burlarse de sus caras que seguro son un
espanto, Melanie hace nota mental de tratar de
dormir de en cuanto llegue del instituto, espera y no
les dé por dejar tanta tarea, realmente se pasan.
Al terminar se van al instituto, en el mismo las
cosas transcurren tan normal como si no tiene un
sueño que se va de boca y se come las butacas sin
darse cuenta.
La semana transcurre tan ocupada, entre clases
allí y aquí, trabajos y manualidades para entregar
54
que no se da cuenta de cómo termina dormida hasta
en el piso, no ha tenido ningún espacio para revisar
siquiera sus redes sociales.
Se ha topado pocas veces con Nick y esas pocas
veces ha tratado de besarla, pero siempre ocurre
algo, cuando no son las chicas, son los chicos,
además de que se ha sentido bastante paranoica,
siente que a cada momento la están vigilando, mira
atrás y nunca hay nadie, no obstante esa sensación
no la abandona a ningún instante.
Agradece que al fin sea fin de semana y no tengo
nada que hacer más que dos o tres tareas que por las
tardes o noche puede hacer. Quiere dormir y dormir.
Richard la mayor parte del tiempo no ha estado
en casa, pocas veces lo ha visto y esas pocas veces
ha estado muy extraño, piensa que le oculta algo o
de manera tonta que la está evitando.
No, solo son suposiciones suyas, su padre nunca
haría eso, él la adora.
No haría nada que pueda dañarle.
55
Mariana Familia.
Grupo de facebook: Las Bellezas de Mariana.
56
Por fin hoy es el gran día para Cameron, después
de tanto esperar hoy por fin la tendrá a su lado y
podrá dirigirle la palabra formalmente.
Se levanta, son las 9 de la mañana le da tiempo a
bañarse, desayunar, cambiarse y luego ir en
búsqueda de su esposa.
Está muy ansioso, se siente incluso nervioso. Las
palmas de las manos le sudan, parece un adolescente
que por primera vez se acercara a una chica.
No será fácil, pero, ¿Quien dijo que lo sería?
Desde un principio ha sabido en lo que se estaba
metiendo, es un adulto y responsable de sus actos, lo
verán como acosador, no lo niega, si la ha seguido
durante tres años consecutivos a nadie le interesa,
aun así sabe lo que hace.
No hay edad para el amor, las personas de este
nuevo siglo no entendemos bien eso, aun vivimos
retrógrados. Hay que actualizar la mente, el solo le
lleva diez años de diferencia, ni que fuera su padre o
hermano, es solo un hombre hechizado, enamorado
a primera vista de una chica.
Suena cursi, tal parece que aun existen esos
flechazos a primera vista.
57
Con el ánimo al cien por ciento y los nervios a un
doscientos por ciento, toma asiento en la isla de la
cocina del departamento, el desayuno lo espera a el.
Dispuesto a desayunar, toma el primer bocado, el
estómago no le permite ingerir más, tiene un nudo
de nervios y tensión que pueden más que su apetito.
—Joder Cameron, no eres un adolescente —
farfulla dejando caer el tenedor, este se resbala por sí
solo con el sudor.
Deja el desayuno casi intacto, lo guarda en la
nevera, el hambre se ha alejado de su cuerpo,
considera mejor tomar un baño que solo quedarse
ahí, intentando comer lo que probablemente su
estómago devuelva.
Decidido ingresa a la ducha, quedándose por más
tiempo bajo el agua, lavando su cabello largo.
Quince minutos después se atavia en uno de sus
trajes caros. A continuación abandona la propiedad,
su chofer y guardaespaldas lo espera con la puerta
del auto abierto en cuando lo ve.
—Buen día señor.
Cameron le da un asentimiento.
58
—Buen día, por favor llévame a la mansión
Walker —ordena en cuando está sentado dentro del
auto, el inseparable maletín no se mueve de su lado.
Lo palma.
Dentro está o que cambiara su vida por completo.
Pierde la mirada en las calles, de vez en cuando
revisa algún correo, respondiendo, aun él y varias
personas de su círculo de amistades prefieren
chatear por los gmail, vaya a saber porque son así.
En lo que menos piensa, el auto se detiene frente
a la gran casa de dos pisos.
La noche anterior habló con Richard Walker, este
no había tenido el valor para decirle la verdad a
Melanie, por lo que ella aún permanece ajena a su
nueva situación, más bien desde hace año y unos
cuantos meses, porque a pesar del tiempo que lleva
tras de ella, no fue muy fácil convencer a su padre,
tuvo que valerse no de cosas muy buenas para
lograrlo.
Richard Walker adora a su hija en toda la
extensión de la palabra.
El chofer abre la puerta para él.
59
Empuña el maletín, de momento el tiempo ha
sido muy corto del transporte, ansiaba llegar, sin
embargo llegar, ver la casa, saber lo que pasará en
cuanto cruce esas puertas, lo hace sudar hasta el
punto de abanicarse con algún documento y aflojar
la corbata.
Un tanto dubitativo baja, sus pasos vacilantes al
ingresar en lo que conforma un gran jardín. Al lado
la cochera donde solo hay tres autos estacionados,
entre ellos el de su Mel, negro, su color favorito.
Lleno de valor toca el timbre de la casa, dentro
escucha un ya voy.
Una señora ya de edad, quizás ronde la edad de
Richard Walker, abre la puerta para él, mirándolo
extrañada.
Amalia lo reconoce, ese hombre ha salido en la
televisión más veces de las contadas.
—Buen día señora, soy Cameron Danielson y
tengo una reunión con el señor Walker —saluda.
¿Reunión? Carajo, que no sabe cual otro término
usar.
Amalia se hace a un lado.
60
—Pase por favor, el señor Walker está en la sala,
acompáñeme —pide con educación.
Cameron la sigue, en recorrido le echa un ojo a
su entorno, fotos de Melanie abundan, hermosa, ella
brilla por sí sola.
Se permite tocar con las yemas de sus dedos una
de ellas.
—Cameron —susurra Richard terminando su
cuarta taza de café en la mañana —. Se me pasó el
tiempo, disculpa.
Amalia con sospecha se aleja, dejándolo solos.
¿Qué estará pasando que Richard está tan nervioso?
—Acordamos esta hora, pero no se preocupe —
musita —. Es algo difícil para usted, confieso que
para mí también.
Richard se sirve otro café.
¿Difícil? Siente que manda a su hija al matadero.
—No me vas a entender jamás —afirma —.
Melanie es lo único que tengo en la vida-.
—Lo sé. —asegura Cameron.
61
Richard deja la taza en la bandeja, la ropa le
asfixia.
—Dejemos esto Cameron —propone —. Quédate
con todo si quieres, olvídate de mi hija, búscate a
alguien más, te doy todo.
El repentino cambio no pilla con la guardia baja a
Cameron, puesto que se esperaba algo similar, lo
que le extraña es porque ha tardado tanto.
—Es demasiado tarde Richard —asevera —.
Aquí dentro tengo el papel que me acredita todo, yo
decido sobre Melanie, no usted.
Por el rabillo del ojo, es espectador de cómo
lagrimas desesperadas resbalan por las mejillas de
Richard.
—Te estoy ofreciendo mínimo una empresa de
seiscientos millones Cameron —argumenta —. Es
mil veces más de lo que invertiste.
Cameron toma asiento cruzando las piernas.
—No me interesa —se mantiene firme —. Solo
Melanie, resígnese.
La culpa arrolla a Richard Walker lentamente.
62
Melanie está soñando muy bonito, solo que el
sonar de su móvil retumba en la mesita de noche y
no precisamente por la alarma, sino que algunos sus
tontos amigos idiotas se le ha ocurrido llamarla
cuando saben que los fines de semanas sagrados y
amados por ella. Jura que matará a quien sea que se
le haya ocurrido interrumpir su sagrado sueño.
Con pereza rueda hasta su mesita de noche de la
derecha, toma el descolgando sin fijarse en quién es.
— ¡¿A quién se le ocurre llamarme a esta hora
sabiendo que los fines de semanas para mí son
sagrados?! —exclama con voz adormilada, pero
claro para que la entienda quien quiera que sea.
—Uy, ese humor, pues quien te llama soy yo y si
no te acuerdas, te haces o no quieres recordar soy tu
futuro novio Nick —se sonroja.
Es que es un idiota.
—Eso ya lo veremos, ahora, ¿Por qué me llamas
a éstas horas? ¿Sabes que te mataré? —interroga
fingiendo aún molestia.
—Lo de matarme espero que sea a besos —dice
engreído —. Y te llamo para decirte que tienes que
pararte de esa cama y venir a casa de Logan porque
nos vamos de picnic.
63
— ¿Qué? ¿Por qué no me dijeron ayer? ¿Y por
qué no lo hacen más tarde? —se sienta de golpe
Melanie sobre la cama.
—Lo planeamos hace más o menos una hora y lo
otro pues porque no disfrutaremos nada del lago,
tienes media hora para estar aquí princesa. —
resume.
— ¡Media hora! No me da tiempo ni para
desayunar. —se queja.
—Pues desayunas aquí, así que mueve tu
precioso trasero y te espero aquí en media hora,
besos guapa —cuelga la llama Nick.
—Y así sin más cuelgas idiota —Pero guapo —.
Siempre mi conciencia.
Se levanta lo más rápido posible de la cama,
dirigiéndose a su baño hace sus necesidades lo más
rápido que puede, se da una ducha rápida, sale, se
seca lo más rápido que puede.
Busca un bañador de dos piezas, de color fucsia
con negro, coloca bloqueador solar, como van para
un lago no se quiere quemar, además en florida el
calor es tremendo.
64
Deja su rostro al natural, ata su gran cabellera en
una coleta alta, busca unos shorts altos que le llegan
a mitad de los mulos ajustados, jean, oscuro, un top
corto negro y unas zapatillas negras, toma su bolsa
de playa negra también.
En realidad sabe que está medio loca con tanto
negro, pero es su color favorito, toma lo necesario y
baja a decirle a su padre, para saludarles a la nana, a
él e irse.
Cuando llega a la primera, encuentra a su padre
conversando muy a gusto con un hombre, un joven
de más o menos 24 o 26 años, lo sabe, aunque le da
la espalda en estos momentos.
Richard al percatarse de su presencia, levanta la
vista, alzándose del mueble caminando hacia a ella.
—Oh Mel, ya iba a despertarte pero veo que me
ganaste y tiene planes.
Solo asiente.
En el momento el joven como de un metro 1’91
de alto se levanta y girando sobre sus talones, le deja
verlo ¡Madre mia! Es alto, de ojos verdes como
esmeraldas, cejas gruesas, pelo negro muy oscuro,
atado en moño bajo, perfectamente peinado, unos
labios definidos, por encima de su traje se le nota
65
que tiene un cuerpo de infarto, piel blanca… es…
Cameron Danielson, el joven magnate incluido en la
revista Forbes por tener un patrimonio de cinco mil
millones de dólares en su cuenta corriente.
Ella es muy pequeña a comparación con él.
Apenas le llega un poco más para debajo de los
hombros como a 8 cm.
Sale de su trance cuando escucho su voz, una voz
jodidamente roca y sexy voz. Sus hormonas
adolescentes la mantienen como boba mirándolo.
—Buen día Melanie —wow, con el ceño fruncido
le sostiene la mirada, ¿Cómo sabe mi nombre si
apenas lo he visto hoy y no lo conozco?
—Eh… este… hola…—deja la frase a media
esperando su nombre. Por más que lo sepa debe
mantener una compostura, hacerse más importante
de lo que es.
Quizás cosas de chicas de su edad.
—Cameron Danielson —completa.
Aún está en trance, jamás pensó que el chico con
el que casi medio instituto fantasea este frente a ella
y en su casa.
66
Ha llegado a ver revistas en las que sale como
portadas, lo describen guapo atractivo, pero no le
hacen justicia, es muy guapo, jodidamente guapo.
Melanie esta sonrojada de los pies a la cabeza.
—Un gusto Cameron, veo que sabe mi nombre
por eso no me presento —Argumenta. Él solo
camina hacia ella, toma su mano para dejar un casto
beso en el dorso de esta.
Siente como la sangre sube a sus mejillas, una
corriente eléctrica le recorre todo el cuerpo.
—Hija tenemos que hablar, siéntate por favor —
interviene su padre.
A Richard le ha costado tener el valor que
necesita para dirigirse a su hija, hablarle de frente
sin querer morirse.
Esa hija tenemos que hablar le provoca un
escalofrío, la guía hasta el sofá para sentarla, su
padre se coloca frente a ella y Cameron a su lado,
muy cerca para su gusto y hormonas, confianzudo,
pero no puede negar que no le desagrada su
contacto.
—Primero dime, ¿A dónde ibas Mel? —pregunta
su padre.
67
—Nick —en cuanto menciona su nombre puede
sentir cómo el cuerpo de Cameron se tensa por
completo, ¿Qué le pasa? —. Me llamó hace un poco
más de 20 minutos y me invitó para el picnic que
tendrán los chicos con las chicas en el lago, venía a
pedirte permiso y a darte los buenos días pa.
—Lo siento Melanie —oh, cuando la llama por
su nombre es que algo no anda bien —. Pero no se
va a poder.
—Tranquilo ya veo, pero antes de que
empecemos a conversar, permiso para enviarle un
texto a Nick avisando que no iré —informa.
—Adelante —menciona esta vez Cameron con su
voz fuerte y varonil, un poco irritada.
—Gracias —saca su móvil, empezando a redactar
el mensaje.
Mel: Nick lo siento pero no podre ir. Discúlpame.
Nick: ¿Por qué? ¿Qué pasó? ¿Estás bien?
Estoy preocupado.
Mel: Tranquilo no es nada malo es simplemente
que al parecer mi padre tiene algo muy interesante
que contarme.
68
Lo siento Discúlpame con los chicos y las chicas
por favor. Besos y abrazos los quiero.
Nick: Está bien no te preocupes Mel, cuídate por
favor y cualquier cosa no dejes de avisarme estoy
para lo que necesites.
Te quiero
Mel: Igual, adiós.
—Bueno listo, ¿De qué se trata papá?
Ve que toma un gran suspiro y por fin decide
hablar.
—Hace dos años decidí hacer una inversión para
ampliar la empresa, todo iba viento en popa e
invertí, resulta que dicha empresa estaba
prácticamente en la quiebra y los nuevos socios
nunca me dieron los reales informes por lo que
nunca me enteré de la situación de ella, hasta que vi
que mi inversión no daba resultados y los encare y
ahí fue cuando me enteré de la verdad y ellos me
explicaron yo no pude hacer nada mi empresa
invirtió mucho dinero en eso y fue perdiendo las
bolsas fueron bajan y quedamos prácticamente en la
quiebra.
69
— ¡Oh por Dios! ¡Eso es gravísimo papá! —
exclama, ignorando la penetrante mirada sobre ella
—. ¿Qué has hecho para mejorar la situación? ¿Qué
hay que hacer? Puedo imaginar lo triste que estás, es
la empresa por la que mamá y tú trabajaron tanto.
—Si hija, pero ya el asunto se está solucionando
—responde triste.
— ¿Cómo? no estoy entendiendo, ¿Qué quieres
decir? —inquiere Melanie confundida aun.
—Al principio nadie quiso asociarse conmigo y
es entendible todos veían a mi empresa como una
piedra en el zapato era seguro que cualquiera que
invirtiera en mi empresa perdería su dinero. Luego
de una ardua búsqueda ya estaba resignando a
perderla, pero alguien apareció y se arriesgó —
cuenta resumiendo todo lo más que puede y su
consciencia lo deja.
— ¿Y quién es esa persona? —pregunta con
curiosidad.
—Esa persona es Cameron —responde.
Se ha quedado sin palabras, el mundo da muchas
vueltas.
70
—A ver si entiendo, ¿Éste joven es tu socio?
¿Cómo? —el mundo de esos negocios aún no es
para ella, prefiere la moda.
—Oh Mel no me trates de usted, llámame
Cameron o como tú desees, tutéame —musita
Cameron. Nervioso.
Para Melanie es extraño, el se ha tomado mucha
confianza que no le ha dado.
—Está bien, Cameron —repite un poco forzada.
—Si hija, pero todo tiene un precio —comenta
Richard con pesar.
—La vida es así, Mel —dice Cameron. La están
asustando
—Vamos digan, directo al grano, ¿Qué me
quieren decir? —indaga con mayor seriedad.
—Cameron invirtió y se arriesgo a perder
millones a cambio de algo muy importante,
perdóname hija —los ojos de su padre se cristalizan.
— ¿Qué está pasando? ¿Qué pediste a cambio
Cameron? —pregunta con los nervios a flor de piel.
—A ti —contesta clavando sus esmeraldas en sus
azules.
71
—Ja —deja escapar una sonrisa de burla y
nervios —. ¿Cómo qué a mí? ¿Yo qué tengo que ver
con esto?
—Perdóname hija, de verdad eres la única salida,
además te aseguré un futuro, donde nada te va a
faltar espero que seas feliz —habla Richard mientras
una lágrima se desliza por una de sus mejillas.
— ¿De qué estás hablando?—pregunta asustada.
—De que eres mi esposa Mel, desde hoy te
vienes conmigo —dice Cameron.
Esas palabras son como un balde frío de agua
para Melanie.
Se levanta en shock, ya siente como las lágrimas
empiezan a brotar mojando sus mejillas.
—No, esto no puede ser —balbucea temblorosa
—. Papá dime que es mentira por favor, dime —casi
le suplica.
La esperanza que todavía le queda se va cuando
su padre pronuncia tres palabras:
—No, es verdad.
Se desploma en un llanto incontrolable.
72
—No, esto no puede ser verdad, apenas tengo 16
años ¿Cómo puede estar Casada? como si ni siquiera
conozco a quien dice llamarse mi esposo, ¡no es
cierto! —grita, tratando de convencerse.
—Era la única solución. Cameron a cambio de
ayudarme pidió que tú fueras su esposa, además si la
empresa se va a la quiebra tendrás un buen futuro,
un marido poderoso que te dará lo que desees —dice
su padre levantándose.
—Eso es cierto Mel lo que pidas te daré todo lo
que desees.
— ¡¿Y creen que los lujos me importan?! ¡Han
jodido mi vida, yo tengo amigos aquí y supongo que
me obligaran a irme y lo que no entiendo cómo me
case si yo nunca firme nada! ¡¿Porqué a mi?! —mis
gritos inundan toda la estancia y mi nana aparece a
mi lado sosteniéndome.
—Como eres menor de edad yo tengo o tenía el
derecho de firmar por ti y lo hice firme el acta de
matrimonio y demás papeles, ahora tú esposo, tiene
tú custodia y él velará por ti y es responsable de ti —
en ese momento se desploma su padre en llanto, sin
embargo no le importa.
73
—No esto no puede ser… aquí tengo una vida,
siempre he vivido aquí, no pensaba ni en casarme,
me vendiste al mejor postor papá, como si fuera una
mercancía —le duele que mi padre haya hecho eso.
—No digas eso Mel, yo solo te quiero para mi
hace tres años te vi en una revista y me enamoré de
ti, desde entonces he buscado la oportunidad para
tener, te he seguido desde aquel día y cuando me
enteré lo de tu padre fue mi oportunidad —articula
Cameron tratando de acercarse, se aleja.
— ¡Eres un maldito psicópata acosador! —sus
lágrimas no paran —. ¿Por qué? ¿Papá porqué? ¡Me
intercambiaste! ¿Más importante es tú empresa que
tu hija, para intercambiarme, venderme a un
desconocido?! ¡Esto nunca te lo voy a perdonar! —
dicho esto corre por las escalera escuchando el llanto
de su padre mientras la llama.
No le importa, se quiere morir.
Lo prefiere antes de que tener que vivir y dormir
con un extraño.
74
A Cameron le duele ver llorar desconsoladamente
a su mujer, le estruja el corazón, siente que lo
detesta, es consciente de ello, racional a la vez, sin
embargo a la misma vez lo enoja del lado irracional,
el solo quiere que lo ame del mismo modo en el que
lo hace con ella, para Cameron no es mercancía
como Melanie se catalogó, es lo más preciado de su
vida, la persona que llena todos los vacios de su
existencia.
—No es fácil para mi hija todo esto apenas —
espeta Richard—. Ayer estaba planeando como sería
su fin de semana con sus amigos y amigas y decirle
de la noche a la mañana que es una adolescente
casada es demasiado para ella, además de que tendrá
que abandonar la ciudad para vivir en new york
donde no conoce a nadie, una ciudad que ha visitado
solamente —Prosigue el padre de su Mel.
Su expresión solo le comunica a Cameron el
dolor que está sintiendo el padre de su esposa. Lo
entiende, tal vez este siendo egoísta, no obstante ella
es suya y por lo tanto la quiere a su lado.
—Lo sé, aunque no lo crea Richard, pero Mel se
ha convertido en mi vida todo este tiempo desde
hace tres años la sueño, la pienso, es todo para mí y
75
juro que haré que me ame como yo a ella. —
determina con seguridad.
—Aún no entiendo tu amor por mi hija, nunca le
hablaste tan siquiera —argumenta.
—Aunque no le hablé solo con escucharla y verla
de lejos me bastaba, pero ya que la he podido ver, he
sentido su tacto, ya no puedo tenerla lejos de mí —
decreta con intensidad —. Mi amor es único e
incondicional.
—Es algo increíble, desde ese tiempo, desde hace
tres años la has seguido, seguro has gastado una
fortuna —alega, a pesar del tiempo se le hace
imposible entenderlo.
—Sí es mi vida, ¿Cómo no hacerlo? —responde
con otra pregunta —. Ella no tiene precio para mí,
doy todo lo que tengo si con eso tengo a mi lado a
Melanie —zanja —. Ahora, ¿Me podría decir dónde
queda la habitación de mi esposa?
—Claro…—da un largo suspiro —. Subiendo las
escaleras, a la derecha puerta tres.
—Bien, muchas gracias suegro —se levanta con
elegancia.
76
Sin esperar más sube, por el camino a la recámara
de su esposa, deleitándose con la decoración, las
fotos colgadas en los pasillos, la imagen de una
mujer muy parecida a Melanie y una niña de unos
preciosos ojos azules electrizantes, junto al señor
Richard unos años más joven, eran una familia
hermosa.
En más de una ocasión se detiene a observar más
detenidamente, Melanie siempre ha sido tan
hermosa, incluso hay una foto de ella en pañales.
Entretanto estar distraído, cuando se viene a dar
cuenta ya está frente a la habitación de Melanie, es
cuando escucha que Melanie tiene una amena
conversación con la señora que lo recibió al llegar.
Es sobre él.
—No princesa, pero sospechaba que las cosas no
estaban bien y que te iba a involucrar en eso —dice
la voz de la señora al otro lado de la puerta.
— ¿Y por qué no me dijiste tus sospecha?
Hubiera investigado y esto no estaría pasando —
inquiere Melanie enojada, con su voz ronca debido
al llanto.
Realmente tiene el corazón destrozado por verla
llorar y a la vez la rabia por saber que ella no le da la
77
oportunidad de conocerlo, su actitud solo le da la
impresión de desprecio hacia su persona, solo por
que el matrimonio ocurrió de esta forma.
Desde un principio supo que no sería fácil, pero
afrontarlo como es, no se asemeja a lo que imaginó.
— ¿Y qué hubieses hecho Mel? Ese hombre tiene
mucho poder —cuestiona la mujer.
—Hubiera escapado —responde Melanie.
Esa es la gota que derramó el vaso, está muy
equivocada si piensa que hubiera podido huir de
Cameron, él jamás lo hubiera permitido y no lo
permitirá. En caso de que llegara a ocurrir la
buscaría, la encontraría y ella volvería a su lado
donde le corresponde estar toda su vida.
Melanie es solo suya, con él debe estar para
siempre.
—Eso nunca pasará mí amor, tú nunca podrás
escapar de mi, ahora empaca tus cosas que el jet ya
está listo para marcharnos, mi amor —entra de
impacto, la puerta suena tras de su espalda, Melanie
salta en su lugar.
Reconoció su voz.
78
—Vete al infierno yo no iré contigo a ningún
lado, ¡¿Me escuchaste?! —se alza Melanie, con
carácter, dándole el frente sin miedo.
Sí que mi esposita tiene carácter.
Eso le gusta, es una fiera que debe domar.
Lo enfrenta cuerpo a cuerpo, alza la cabeza para
mirar a la cara debido a que es más alto, su mirada
destila dolor y rabia, fuerza de querer taladrarle con
la mirada.
Ojos chispeantes de rabia.
—Claro que vendrás conmigo, no solo soy tu
esposo, sino que también soy tú tutor princesa —
argumenta tocándole la mejilla con la mano una que
ella prontamente aparta de un manotazo.
— ¡Eres detestable! —ruge Melanie.
Eso le duele a Cameron, lo juzga sin conocerlo,
sin siquiera darme la oportunidad de demostrarle
que la ama, que su vida gira entorno a ella.
No puede evitar mirarla con furia, rabia
contenida, por más que la ame, esas dos emociones
se abren paso por él.
79
—Si eso crees no te sacaré de tus ideas ni de lo
que piensas —musita entre dientes apretandoa.
Logra notar cómo se tensa ante su mirada. Toma un
largo suspiro para controlarse. Dirigiéndose a la
puerta, pronuncia con letalidad:—. Tienes 20
minutos para que empaques aunque no es necesario
te puedo comprar lo que desees.
—No gracias no quiero nada de ti —la furia le
invade nuevamente, sale de ahí, azotando la puerta
con fuerza por segunda vez.
Choca la cabeza con la pared.
Tiene graves problemas con la ira.
A Melanie su actitud le ha dado miedo, esos ojos
esmeraldas se oscurecieron de algo peligroso, se
sintió estremecer.
Que se vaya al demonio si quiere, puede meterse
sus millones por donde no le da la luz, ella tiene sus
propias cosas y su propio dinero, no lo necesita.
—Mi niña es mejor que empieces a empacar —
aconseja su nana, las lágrimas se desborda por sus
mejillas.
Amalia ha criado a Melanie.
80
—No nana, yo no me quiero ir y menos con él,
viste su mirada, me dio miedo. —se abraza a si
misma.
—Mi niña, lo juzgas sin conocerlo —habla sin
darse cuenta.
— ¿Lo estás justificando? —interroga Melanie
molesta.
—No princesa, disculpame —estrecha a Melanie
entre sus brazos —, pero no creo que tu padre te
haya entregado a un violador o algo similar —
Melanie deja salir un grito de rabia —. Estas así por
todo esto no es fácil, te entiendo y estoy triste, a la
vez enojada por lo que el señor Richard hizo, pero
todo tiene un porque, tú no sabes cual es tu destino
solo lo sabe Dios y tampoco sabes si él es el hombre
que te va a hacer feliz.
Amalia busca con todas sus fuerzas una
justificación. Que Melanie se aleje de su lado es
quitarle a una hija.
Derrama más lágrimas, eso tiene lógica pero
¿cómo va a ser feliz con un hombre que
prácticamente la compró como un mueble viejo? No
eso no puede ser, cree que nunca podrá amarlo, no
niega que una corriente eléctrica recorre su cuerpo
81
cuando está cerca o las pocas veces que ha sentido
su tacto, pero en este instante lo detesta, ¿Odio? No
puede asegurarlo.
—Mel te has quedado callada, no me digas nada
solo medita las cosas que te he dicho y con el tiempo
me darás la razón —al menos eso espera Amalia —.
Ahora empaquemos tus cosas antes de que tú marido
suba y se enoje más de cómo salió.
Así empieza su nueva vida con un hombre que
conoce apenas una a dos horas, un hombre que lo
único que se ha ganado es prácticamente odio de su
parte. Una vida donde no tendrá a los chicos y las
chicas, una vida sin su padre, ese al que no sabe si
le permita entrar en ella, no lo puede perdonar y no
sabe si algún día lo hará, una vida donde su nana no
estará muy presente.
No tiene una idea de a qué se tendrá que afrontar,
es consciente de que vendrán muchos obstáculos lo
presiente, pero ya no puede huir es demasiado tarde
para eso.
Empacando sus cosas, entre recuerdos, cada
objeto tiene un valor sentimental en su vida, un
pedazo de ella se queda en cada parte de Miami, con
cada persona especial que ha visto en su vida.
82
Es Melanie Walker Swant, tiene 16 años y desde
hoy está oficialmente casada con Cameron
Danielson Mendez de algunos años más mayores
que ella, el sueño de todas las chicas del instituto,
más no es su sueño, es su nueva pesadilla.
Termina de hacer sus maletas no con todas sus
cosas, pero si con lo necesario. Sin poder evitar
sentir nostalgia, en esa habitación su madre venía
todas las noches a darmele el beso que por años
tanta falta le ha hecho, aquí están sus mejores
recuerdo, aquí lloraba cuando se caía en la escuela y
se lastimaba, cuando su madre murió se pasó días
encerrada llorando, ahí empezó de nuevo luego de
esa gran nostalgia y ese vacío que nadie nunca
llenará, ahí le contó a las chicas el primer beso que
dio, tantas cosas ha pasado en ese cuarto y ahora el
destino le juega una jugada sucia para la que no está
preparada.
Quiere quedarse en esa habitación para siempre.
Si tuviera el poder de devolver el tiempos,
regresar a dos años más con la misma edad que
tiene, todo diferente y feliz.
Sale de la habitación acompañada de su nana,
cada paso que da es un recuerdo más las fotos de su
madre y suyas junta a las de su padre, recuerda los
83
cumpleaños que le celebraron desde que tiene
memoria, pero desde que su madre falleció ninguno
desde entonces ha sido igual, es triste no tenerla a su
lado, está segura que si su madre estuviera viva,
nada de eso estaría pasando.
Sus ojos arden por tantas lágrimas que ha
derramado, pero no las puede controlar.
Sin darse cuenta ya ha llegado a las escaleras,
Amalia, su hermosa nana la ayuda con sus maletas.
Pocas maletas.
La esperanza de que sea un sueño, persiste.
Al llegar abajo está su padre con los ojos rojos,
llenos de lágrimas.
El resentimiento se hace presente, él la vendió, la
usó como mercancía, no va a perdonarlo, que llore,
se lo merece.
84
Melanie.
A veces decimos que la vida no es justa, pero
¿qué podemos decidir o hacer nosotros? Nuestro
destino está escrito desde que antes de que
naciéramos. Dios no nos da carga que no podamos
soportar. Es cierto, hay momentos en el que
sufrimos, lloramos, pataleamos y queremos armar
una guerra con el mundo, momentos en el que no
medimos cómo les hablamos a las personas y es algo
que debemos tener pendiente pues nadie excepto
quien te mete en problemas tiene la culpa. Hay otros
momentos en el que eres feliz, ríes, bailas, cantas, en
ese momento todos suelen acompañarte y estar a tú
lado, pero en los momentos de crisis todos
desaparecen.
Y en este momento me siento triste y sola. Mi
padre tomó una decisión, que lo hace culpable de mi
estado de humor y de mi tristeza, pero también como
dije en momentos de risas todo te acompaña y sé que
si mi padre no hubiese firmado ese acuerdo con
Cameron, hoy no tuviéramos a todas las bolas de
hipócritas que nos rodean. Pero eso no lo justifica,
aunque si hubiera perdido la empresa, ahí
hubiéramos conocidos a los verdaderos amigos.
85
Esa decisión es que me tiene aquí, saliendo por
las puertas de la casa donde nací, donde crecí, donde
he tenido los momentos más felices de mi vida, así
como lo más tristes, saliendo para irme con mi
esposo, una persona que no conozco, una persona
que no amo, una persona de la cual no sé nada, no se
sus gustos, tampoco sé que me hará, si me golpeara,
me tratara bien, mal, con respecto o si realmente me
amará. Pero la pregunta del millón es, ¿si yo lo
llegaré a amar algún día? y esa ni yo se la respuesta.
Salgo de mis pensamientos cuando escucho el
baúl del Audi negro que está parado frente a mí,
cerrar. Volteo mi rostro lleno de lágrimas hacia la
casa que me vio crecer, la recorro con la mirada y
luego veo a mi padre, me duele el pecho por
contener los sollozos, tal vez las lágrimas corran por
mis mejillas pero son de rabia y no les pienso
demostrar que soy tan débil como para
derrumbarme, amo a mi padre pero me ha lastimado
mucho. Mi nana ella está llorando y me parte el
alma pero me volteo y me dispongo a subirme al
auto de Cameron Danielson, mi esposo, se que a
partir de aquí me espera una vida fuerte diferente en
la mayoría de los sentidos de la que estoy
acostumbrada.
86
La puerta de atrás me espera abierta por el que
supongo es el chofer y al otro lado está, él, mi
marido. Subo al auto sin mirar atrás y ni siquiera
miro a Cameron, al subir me acomodo pegada de la
ventanilla del auto y a los pocos segundo siento su
presencia muy cerca de mí, tanto que su perfume se
cuela por mis fosas nasales y me encanta, me odio
por eso. Me retiro y me acerco más a la ventanilla.
—Mel, pequeña, ¿Por qué huyes de mí? Soy tu
esposo —su voz suena calmada
—Solo no te me acerques y no me toques —mi
voz sale dura, seca.
—No creo que eso sea posible. Eres mi mujer y
por lo tanto me voy acercar y te voy a tocar en
lugares que ni te imaginas —su voz es más seca que
la mía haciendo que los vellos de mi nuca se
erizaran, pero no se lo demuestro, pero cuando me
volteo a ver, sus ojos me dan miedo, cualquier
persona en mi lugar sentiría lo mismo que yo.
Cameron Danielson da miedo. Yo solo retiro mi
mirada y me dispongo a mirar por la ventana y
silenciosas lágrimas salen de mis ojos, mientras nos
dirigimos al aeropuerto, solo me dedico a mirar el
paisaje que pasa tan rápido delante de mis ojos, las
87
mansiones, los edificios, centros comerciales,
boutique y demás, dejando atrás a Miami.
88
respetaba mi presencia. Lo que me conforta en cierta
forma es que Cameron no le presta atención.
El ambiente está en una tensión palpable, pero
¿cómo no? somos dos desconocidos, aunque él me
haya investigado no es lo mismo, seguimos siendo
desconocido.
El jet es muy bonito, blanco hueso, con los pocos
asientos de cuero negros, un mueble en forma de L
grande en las ventanillas derecha, una mesa de
cuatro sillas de cristal y los soportes de acero
inoxidable, los bordes de las sillas son de oro y los
del comedor, a mi mano izquierda solo hay asientos
unos enfrente de otros, un pasillo ubicado a la
izquierda conduce a una puerta lo que parece ser un
baño y justo en el mismo lado otra puerta, parece ser
la habitación.
—Pequeña—esa voz está justo en mi nuca, su
aliento hace que los vellos se me ericen —. Ese es el
baño —justo donde lo suponía —. Y esa es la
habitación —sólo asiento, pero suelto un gemido
inconscientemente cuando siento que pasa su lengua
en mi cuello luego sopla y después sus labios chocan
con la piel de mi nuca.
—Ca… Cameron, ¡No! —mi mente me dice que
me aleje, pero mi cuerpo no obedece.
89
— ¿Qué? pequeña —sus besos siguen
repartiéndose por mi cuello, él se pega más a mí y
puedo sentir algo duro en mi espalda baja que me
hace gemir, algo que hago desde hace rato sin
conocimiento. —. ¿Sientes pequeña? así me tienes,
deseo tanto tomarte, quiero lamer tu vagina, darte un
órganos sólo con mi boca, otro con mis dedos y el
que te dará múltiples será mi pene, me tienes
caliente, te follaré la vagina, tendré sexo contigo,
pero sobre todo te haré el amor —cada palabra
provoca escalofríos en todo mi cuerpo y siento como
un líquido caliente y placentero sale de mi parte
intima. No soy consciente. No sé cuando Cameron
me gira. Sólo sé que su mirada ya no es verde si no
oscura. Y me besa. No tengo tanta experiencia. Solo
siento unos labios cálidos y dulces y sin pensar
respondo como puedo a su beso, mi mente está en
blanco, siento su lengua reclamando la mía y se la
doy, envuelvo mis brazos en su cuello y él me agarra
el culo y me pega a él, está inclinado y yo de puntas,
al momento del choque de nuestros cuerpos
gemimos los dos, ya sé que es eso duro que en este
momento presiona mi vientre, su erección y luego
siento su mano tocando mi seno y haciendo círculos
en mi pezón una corriente me recorre y es ahí donde
reacciono.
90
Me separo con las piernas como gelatinas y los
labio hinchado, Cameron respiraba agitado, el bulto
en sus pantalones es muy notable y sus labios igual
que los míos, sus ojos casi negros y sé que está
excitado y deseoso de mí, eso me hace sentir bien
solo un poco. Me siento mal por dejarme llevar y le
pego una sonora cachetada.
— ¡No me vuelvas a tocar! —mi voz es fría y
temblorosa pero baja.
El solo se toca la mejilla y una sonrisa sale de sus
labios dulces.
—Me respondiste y tus labios son dulces.
— ¡Eres un idiota! —lo empujo.
—Oh, si lo que digas amor —borra la sonrisa y
me mira —. Si no te toco yo. ¿Quién lo va a hacer?
Porque si no soy yo no será nadie —me señala —.
Tú Melanie Walker eres mi mujer, eres mía, solo
mía, hoy, mañana y siempre.
Su voz no es de relajo, es muy segura e
intimidante yo solo me doy la vuelta y me encierro
en la habitación.
Cameron.
91
Estoy en el cielo. Por fin pude besar esos
carnosos con los cuales e fantaseado por años. Los
labios de mí pequeña son cálidos, suaves, gruesos,
carnosos y su aliento y sabor son únicos, podría
besarlos, toda una vida, su trasero es firme como una
roca y sus senos son redondos y firmes.
Aún tengo una erección que no se qué hacer con
ella. Es que quien no teniendo una mujer hermosa
como lo es Melanie y esos shorts que le quedan
estupendos le hace mejor culo del el que tiene.
El viaje tarda dos horas hace 15 minutos que
despegamos y mi pequeña está encerrada en la
habitación desde hace unos minutos. Me pongo a
tomarme una copa de whisky para calmar la
hacienda de entrar y poseerla.
Sé que no he hecho las cosas bien ¿Pero qué
hago? No piensas cuando te enamoras y eso es lo
que me pasa estoy colado por mi pequeña, la amo. Y
voy a hacer que me ame.
Me levanto y camino hacia la habitación del el
jet, me detengo al escuchar varios sollozos.
Me duele.
Me lastima.
92
¿Pero qué puedo hacer?
Joder ¡La Amo! el amo como un loco desde hace
años.
No me contengo entro a la habitación y ahí está
sentada en el sillón que está pegado a la ventanilla
del jet.
Con pasos sigilosos me acerco y acaricio su
cabello aún en una cola, los suelto lentamente y me
gusta aún más cerca.
—Ya pequeña, no llores más, no me gusta verte
llorar —susurro con todo el amor que siento —.
Tienes que comer, no lo has hecho.
Y es cuando se voltea y me mira sus ojos tienen
un brillo de extrañeza, dolor, ira, pero hay uno
especial.
Me mira a los ojos y se levanta aún así es
pequeña delante de mí, yo también me levanto. Me
empieza a golpear el pecho, no hago nada.
— ¡¿Por qué yo?! ¡¿Porqué a mi?! —no digo
nada sólo dejo que se desahogue. —. ¡Anda dime!
¡Joder! ¡Dime algo! ¡Dime! ¡¿Por qué me elegiste?!
¡Yo tengo amigos, una vida en Miami, aunque mejor
93
dicho tenía! —su voz es ronca y gritando como lo
hace, se va a lastimar la garganta.
Continúa golpeando y solo tengo una opción.
La beso, con pasión, con ansias, esas que llevé
reprimidas por tres años. Se resiste, me golpea, me
muerde el labio, pero no me detengo, la continuo
besando, hasta que siento que va cediendo y se deja
llevar, la tomo del cabello sin hacerle daño, nos
besamos hasta que nos quedamos sin aire.
Me mira, pero no se aleja.
—Pequeña, solo dame una oportunidad, solo una
—le suplico. Se me hace raro cuando nunca le he
suplicado a nadie pero ella es mi mujer, es mía, ella
me hace diferente.
—Yo no puedo, Cameron no estoy aquí por mí
propia voluntad, yo…—intenta alejarse pero no se lo
permito la atraigo hacia mí.
—Mira, no me gusta dar explicaciones, pero solo
te lo pido.
—Es que esto no es un matrimonio de verdad.
— ¡Claro que es de verdad! —Estoy gritando,
trato de controlarme —. Lo siento —desordeno mi
94
cabello —. Pero este matrimonio es de verdad
durará toda la vida, cariño.
—Cameron yo no te conozco y aunque me hayas
investigado y hayas estado al pendiente de mí,
somos dos completos desconocidos —Las lágrimas
siguen bajando por sus hermosas mejillas.
—Nena tienes razón, pero mira vamos a
intentarlo, prometo no hacer nada que no te guste.
—Lo pensaré —eso es lo que necesito y me
acerco a ella, con mis pulgares limpio sus lágrimas y
deposito besos en cada una de sus mejillas y en sus
hermosos ojos.
—Eso para mí ya es un avance, princesa —pido
algo para que coma, traen la comida y come. La
tomo de la mano y empiezo a levantar las sabanas de
la cama —. Vamos a acostarnos para que descanses.
— ¿Jun… juntos? —sus pequeños ojos me miran
extraños.
—Solo vamos a dormir, no haremos nada —su
cara se relaja.
Se sienta en la cama, me quito mi chaqueta y
luego la corbata y me coloco de cuclillas para
ayudarla a quitarse las zapatillas.
95
—Ga… Gracias —Susurra.
—No hay porqué mí pequeña. Ven vamos a
descansar quedan algunos minutos para que
lleguemos a nuestra casa —me hace caso y se
acuesta a la izquierda y yo a la derecha, al lado de la
puerta.
La atraigo a mi coloco su delicada cabeza en mi
pecho y la beso en la coronilla.
—Yo… este…
—Ssh, pequeña, soy tu marido y ya te dije vamos
intentarlo.
—Está bien —se relaja y cierro los ojos. Sé que
será difícil.
96
Melanie.
Luego del beso que nos dimos y me dijo esas
palabras posesivas, me retiré a la habitación y no me
importó que sea su jet sólo quería estar sola, en ese
tiempo a solas recordé muchas cosas, la primera vez
que fui a la escuela, cada cumpleaños desde que
tengo uso de razón, los principales con mi madre.
Mi madre era una mujer muy parecida a mí.
Recuerdo cuando jugaba a las casitas de princesa
conmigo. Recuerdo las noches cuando dormía con
ella, todos esos bellos momentos en ellos casi en la
mayoría estuvo presente mi padre.
Aunque los dos trabajaban mucho, siempre
sacaban tiempo para estar conmigo. Pero luego
recordé la muerte de mamá en aquel accidente en el
que ella murió y en el que yo casi también me voy
con ella.
Recordé todo lo que pasó y ha pasado desde ese
mal momento que ha marcado mi vida hasta ahora y
han sido mucha cosas. Pero todo se resume a que mi
padre me vendió y las lágrimas salieron nuevamente,
haciendo una cascada desde mis ojos hasta mis
mejillas descansando en mi camiseta de tirantes.
97
Escuché la puerta abrirse y supe que era él, me
soltó la coleta que traía. Me dijo que no me quería
ver llorar que no le gusta, lo mire con un revoloteo
de sentimientos en ni. Y le pegue con fuerzas, pero
era y es obvio que yo salí más lastimada que él, pues
tiene una torre de músculos fuerte y definidos a
pesar de mis golpes los pude sentir, me molestaban
los golpe que les daba pero no repare en eso sólo
quería liberar la furia de mi interior e hizo lo que
menos pensé que haría, me volvió a besar, luche
para que me liberara pero me vencieron las mismas
sensaciones que había sentido minutos atrás.
Si lo confieso el primer beso movió algo en mí
interior y me dio rabia porque fue placentero y moje
las bragas. El beso continuó, hasta que nos
quedamos sin aire, conversamos y me pidió una
oportunidad. No sé qué hacer, él es mi esposo y me
lo dejó claro es un matrimonio de verdad. Y yo
tengo que pensar, por algo el destino permitió que
esto suceda, le dije que lo pensaría y en su rostro se
reflejó esperanza.
Y aquí estoy acostada sobre el pecho de Cameron
Danielson unos de los hombres más ricos del
mundo, el magnate de new york, mi esposo en su jet
privado, el sueño comenzó a vencerme y lo último
que sé es que esta es mi nueva vida.
98
Unos molestos golpes en la puerta me hacen
despertarme de mi cómoda siesta y sí que es cómoda
porque sentía que está durmiendo en un paraíso.
Cuando abro los ojos, mi cabeza sigue en el
pecho de Cameron y nuestras piernas están
entrelazadas, él con sus manos en mi cintura y yo
con las mías en su pecho, parecemos una pareja que
de conoce desde hace mucho.
Los mismos golpes pero más fuertes, hacen que
salga de mi examinación hacia la posición en la que
me encuentro con mi esposo. Mi esposo. Quién lo
iba a pesar. Se oye bien.
La puerta se abre y por ella entra la azafata que
nos acompaña aún no olvido como mira a Cameron.
La miro mientras salgo de la prisión en la que me
encuentro por los brazos y el cuerpo de mi esposo.
— ¿Por qué entras así?—pregunto estirándome.
—Disculpa —se coloca las manos en la cintura y
sonríe burlona —vine a despertar a Cameron y como
él no se molesta cuando entro, pues lo hice.
Ahh, Con que está tenemos. Al parecer Cameron
le dio unas dosis y se cree la reina del mundo, ¿Qué
99
pensará? ¿Qué estoy pintada en la pared? ja, pues no
chiquita.
—En primer lugar, señor Danielson para ti —
respondo burlona —. En segundo se espera la
autorización para entrar a lugares privados y más
cuando están ocupados, ¿Estamos?
No puede creer que le haya dicho eso, Chúpate
esa chica.
—Mira niña, yo solo voy a despertar a Cameron
—mira la cama y se muerde el labio —. Pues ya
vamos a aterrizar y a mí no me vengas a enseñar
modales que esos lo aprendí mucho antes que tú y
no eres nadie para darme autorización.
Piensa que me va a intimidar, no señorita.
—Señora Danielson para ti y ya te dije señor
Danielson cuando te refieras a mí esposo, otra cosa,
soy quien para darte autorización y orden como te
pudiste dar cuenta, ¿Señorita…?
—Banks —la voz ronca y gruesa de Cameron nos
sobresalta a las dos.
—Cameron y… —él la calla con un movimiento
de manos.
100
—Ssh, Banks, señor Danielson —buu, una para
Miami y cero para new york —. Cuando te dirijas a
mí mujer hazlo con respeto por favor, luego tú y yo
hablamos.
—No esto es un error. ¿Esposa, mujer? Eso
quiere decir que te… ¿Se casó? —Parece un pez,
abriendo y cerrando la boca, me río internamente —.
No veo anillos —habla mirando nuestras manos.
—No necesitamos anillos que demuestren nuestra
alianza —me está gustando mucho este lado de
Cameron.
—Ahora señorita por favor me deja a solas con
Mí esposo —si resalto la palabra, me molesta como
lo ve, como le habla.
Se va a regaña dientes, y yo me quedo mirando la
puerta pues ahora si el color rojo sube a mis
mejillas, no sé si Cameron escuchó todo y es lo que
parece.
—Pequeña —siento en su voz una calma y
felicidad que me confunde.
Lentamente me giro.
— ¿Cuánto tiempo llevas despierto? —pregunto
mirando mis manos como si fuera lo de mayor
101
atracción que haya en el mundo.
—Lo suficiente como para saber qué me llamaste
esposo y que te defendiste en pocas palabras
nuestro matrimonio —susurra tomando su chaqueta
y caminando a estar al frente de mi.
—Yo solo… —no sé realmente qué decir. Sólo
sentí en aquel momento cuando ella lo miraba como
para devorarlo sentí unas punzadas en el estómago.
—No tienes que justificarse pequeña todo está
bien, ahora vamos a sentarnos y abrochar nuestros
cinturones estamos a punto de aterrizar.
Toma mi mano y salimos juntos de la habitación,
en los sillones nos acomodamos uno al lado del otro.
Luego de cinco minutos la turbulencia del avión nos
indica que estamos en tierra.
Nos desabrochamos nuestros cinturones de
seguridad empezamos a bajar las escalerillas que ya
estaban abiertas, desde que me puse en pie para salir
del avión Cameron en ningún momento ha soltado
mi mano, es extraño no estoy acostumbrada.
Al final de las escalera está la señorita Banks
fulminándome con la mirada. No me importa.
102
Frente al avión nos esperan dos camionetas
negras con los vidrios polarizados y al parecer
blindados.
Camino junto a Cameron y los demás hombres
que están alrededor se me quedan miran y pues se
me olvidaba que muchos saben quién soy y además
las ropas que llevo puesta es muy ajustada. Siento el
cuerpo de Cameron tensarse, me hala hasta tenerme
muy pegada a él. Trato de no tener tanto contacto
con él pero al parecer es algo que le molesta porque
lo escucho gruñir, sin darme cuenta estamos
entrando a una de las camionetas a la de adelante,
los que supongo que son guardaespaldas ni siquiera
me miran.
Miro a Cameron y este tiene la mandíbula
cuadrada y les da una mirada a todos los hombres de
los quiero encerrar a todos y quemarlos en una
hoguera.
Las camionetas aceleran y pronto nos
encontramos en las calles de new york. En el camino
todo es silencio. Y lo agradezco tengo muchas cosas
que pensar. No entiendo porque Cameron tiene ese
comportamiento, también tengo que pensar en esa
oportunidad pero no se la pondré fácil, se que
Cameron es un hombre que no es precisamente un
103
santo, tengo que conocerlo antes de intentar que esto
funcione.
Nos adentramos en la parte más exclusiva de la
ciudad, donde todo es mansiones, más grandes que
mi casa en Miami. Eso me pone triste, allá en donde
nací, crecí, dejé a mi padre porque a pesar de todo es
mi padre, mi nana que siempre estuvo ahí para mi,
deje a mis amigos, Nick, Logan, las chicas Vicky,
Laura, Morgan y deje algo muy importante mi
madre… si mi madre, se que está muerta pero
siempre que podía iba y visitaba su tumba.
Salgo de mis pensamientos cuando las
camionetas dan un giro a la derecha adentrándonos
en un camino de piedras al principio y luego todo de
cemento hasta llegar frente a un gran portón negro
donde hay dos gorilas, más guardaespaldas, estos
abren la puerta al introducir un código y en mi
campo de vista aparece una mansión que una
mansión esto parece un castillo, es blanca, en el
centro hay una gran fuente con un ángel por las alas
vota agua y esta reposa en el circulo saliendo por
una especie de río pequeño que da a los jardines
pero no vota el agua en ellos sino que hay como un
hueco de cemento por debajo de los pastos donde
desaparece luego descubriré eso.
104
Los jardines tienen unos pastos preciosos verdes
y bien cuidados, pero no tienen la suficientes rosas
que mal. Cuando menos me doy cuenta estamos
enfrente de las puertas de la casa, es cuando me
percato de que Cameron no ha hablo y que apagan
las camionetas. Me giro hacia mí esposo y para mi
sorpresa él está mirándome.
—Es hora de bajar pequeña —su voz es muy
ronca.
—Claro —es lo único que puedo decir. Me giro y
veo que uno de los gorilas que nos acompañaban
tiene la puerta abierta.
Me bajo y ahora si tengo una gran vista de esta
casa es gigante de una altura inmensa, no me
imagino como será por dentro. Siento la presencia
de Cameron a mi lado él toma mi mano y sin darme
tiempo empieza a caminar a grandes zancadas a la
casa.
Abre la puerta y ahora sí que estoy impresionada.
—Bienvenida a casa mi pequeña —escucho la
voz de mi esposo y es como salgo de mi trance.
— ¿Aquí viviremos? —digo en un susurro.
105
—Si amor —escucho y veo como toma un gran
suspiro —. Luego te contaré la historia de esta casa,
primero te la muestro.
—Está bien —vuelve a tomar mi mano y esto se
me está haciendo costumbre en pocas horas.
—Cameron —lo llamo y él se da la vuelta.
—Sabes que mi nombre se escucha jodidamente
bien en tu preciosa boca —eso me hace sonrojar y él
me da una sonrisa seductora.
— ¿Por qué estabas tan serio en el aeropuerto? —
pregunto.
Toma aire y se decide a hablar.
—Te voy enseñando la casa y te voy explicando,
¿Vale?— asiento y nos dirigimos hacia una cocina
que es gigante, tiene una estufa de última
generación. Con el gabinete y el comedor de esta
como las demás cosas diseñadas a la antigua pero
con un toque de modernidad —. Estaba así por las
miradas de los hombres hacia tu cuerpo, se que
puede sonar estúpido pero no lo es nena, eres
hermosa y tú cuerpo es increíble, lo se, se que uno
puede mirar lo que quiera, pero no me gusta que
miren lo que es mío y más hombres que miren a mí
mujer como si fuera un pedazo de carne al que se
106
puede comer, tal vez no me entiendas, pero cada vez
que en estos tres años desde que supe que eras la
indicada la sangre me hierve cada vez que un
hombre te mira y en el aeropuerto no fue la
diferencia, esa ropa que traes te hace un culo más
perfecto del que tienes y tus piernas, tus pechos tu
cara… Dios es que eres perfecta y solo quiero ser yo
el que te pueda apreciar.
—Estoy en shock —lo miro —. Tres años
Cameron, siguiéndome, ¿Sabes que eso te convierte
en un acosador verdad?
—Lo sé.
—Y sabes que cualquier persona que sepa esto
dirá que unos de los empresarios más ricos y el
magnate más poderoso de new york, ¿Está loco? —
esto es increíble.
—Sabes pequeña me importa muy poco lo que
diga la gente. Lo único que me preocupa ahora es
que muy poco en menos de lo que esperas todo
mundo sabrá que la hija de Richard Walker es mi
esposa, es algo que me preocupa.
— ¿Por qué? ¿Acaso no quieres que sepan que te
casaste? —no sé porque actúo así.
107
—No pequeña, por un lado tiene sus ventajas
pues todo el mundo sabrá que eres mía —dice con
una gran Sonrisa — pero ahora terminemos de
enseñarte la casa.
Y así es la casa es preciosa en todos los sentidos,
tiene una gran piscina en la parte trasera, un
hermoso comedor de cristal, tiene una piscina
techada, un patio muy amplio estilo bosque, una
pequeña cabaña de madera de caoba, que consta de
cocina, baño, sala, habitación. Volvemos adentro la
sala de estar es súper grande, unos muebles blancos
gris y negros con una perfectas cortinas a juego y los
cuadros de renacimiento combinados con
modernidad. La sala de comer es gigante también
tiene un comedor negro pero es de acero donde se
pueden sentar doce personas. Una sala de cine con
una gran pantalla plata equipa con altavoces este no
se escucha nada afuera, los sillones tienen una
perfecta combinación de rojo y negro. Olvide
mencionar que la casa tiene cancha de juego. Una
biblioteca preciosa con todo tipo de libros todo esto
en la planta de abajo junto con las habitaciones de
empleados que son enormes y muy bonitas en total
seis. La escalera es de forma de caracol, nos llevan a
la segunda planta donde hay muchas habitaciones
me las muestra una por una, que son trece y luego
108
me lleva a la principal que con ella son catorce
cuando abre las puertas no tengo palabras.
Es… Es gigante, tiene una sala con pequeño
comedor de dos sillas, unos sofás gris en forma de L,
el que está pegado junto a una ventana que permite
observar todo, y los demás son hermosos con cojines
negros y blancos, la cama es enorme, con un
respaldo gris lo mismo de los lados y sábanas
blancas, con dos mesas de noche a cada lado de
color negro ambas con dos gavetas y dos pequeñas
puertas, tienen dos lámpara de color beige con
decoración de perlas, a la izquierda un inmenso
balcón con dos hermosos sofás en forma de media
luna negros y una mesa de cristal pequeña en centro.
A mi derecha están dos puertas blancas, pero unas
de ellas son dobles, Cameron toma mi mano y me
guía justamente hacia esa, cuando la abre.
Oh por Dios.
Una especie de cuarto, pero closet, de un lado
muchos trajes, pero muchos, zapatos de hombre de
todo tipo y ropa también y del otro lado muchos
vestidos de gala y ropa de toda marca, cabe destacar
que del lado femenino, hay un buen espacio libre,
tocó uno de los vestidos y veo que son de mí talla,
miro a Cameron y él me sonríe. Chequeo las gavetas
109
y hay ropa interior de encajes muchas lencería, pero
que vergüenza, todas son de mi talla. El lado de los
zapatos hay muchos tacos botas… de mí talla, el
centro de la habitación es una vitrina grande con
aretes, collares, relojes, pulseras, anillos, accesorios
que valen un dineral, perfumes de hombres muy
caros y de mujer también, pero hay espacio libre.
Me percato de una puerta blanca que hay en el
centro de una pared que esa puerta la que divide el
lado femenino del masculino.
—Este es nuestro armario cariño, ¿Te gusta? —
pregunta.
—Wao, esto, es, es, increíble.
—Ven —toma mi mano y me dirige hacia la
puerta la abre y otra vez quedo anonadada esto es
grandioso, un baño con jacuzzi, tina y regadera,
unos preciosos lavamanos blanco el piso y las
paredes de mármol negro todo pulcramente limpio,
unos cajones con muchas batas y toallas. Un
gabinete enorme con shampoos, acondicionador,
crema de afeitar esto es de hombre.
—Este es el baño, pequeña, esa —señala otra
puerta —. Es la que va directo a la habitación.
110
Sin más nos retiramos de baño y nos adentramos
a la habitación.
—Ahora si ya puedes descansar y mandaré a
acomodar tus cosas, esta nuestro cuarto será testigo
de muchos momentos.
¡Nuestro cuarto! ¡Madre mía!
111
Melanie.
— ¿Nuestra habitación? —lo digo más para mí
que para él, bajo la cabeza y empiezo a jugar con
mis manos.
—Nuestra, pero, hey —con sus dedos levanta mi
barbilla y se inclina —no pasará nada que tú no
desees, me ganaré tu corazón precioso.
—Gracias por entender, no es fácil nada de esto,
trato de afrontarlo lo más maduro que puedo a pesar
de mí edad —susurro mirándolo a los ojos. Ahora
que me detengo a observarlo son muy hermosos.
—Lo sé y, ¿Sabes? a pesar de que por fin estás
conmigo, me hubiese gustado que antes yo te
conquistara.
—Las cosas suceden por algo.
—Tienes razón preciosa.
Luego de eso una señora llamada Cristine de
media edad, al parecer la nana de Cameron, muy
amable, es la ama de llaves, sube a mi nueva
habitación con dos chicas las cuales me miraron
mal, lo que me toca por ser la esposa de Cameron,
arreglan las cosas que traje pero los perfumes y mis
112
cremas, mi ropa interior y mis más preciadas
propiedades las acomodo yo.
Mi laptop, tablet y mi celular por suerte están en
unas de las maletas, amo a mi nana.
La noche llega y decido que voy a comer en el
barcón y eso sucede, Cameron se porta muy amable
y atento. A la hora de irnos a dormir, me pongo muy
nerviosa, nunca he dormido con un hombre que no
sea mi padre. Pensar en él me pone muy triste, es
muy pronto para saber que va a pasar, pero llegará
un momento en el que tendré que hablar de esto con
mi padre. Cameron se da cuenta de mi tristeza.
—Cariño, por favor no estés triste, trataré de ser
el esposo que te mereces —lo miro y es cuando me
doy cuenta que solo tiene un pantalón azul marino
de pijama, que cae libre por sus caderas y es cuando
me permito detallar al espécimen que tengo enfrente,
ya ni sé lo que estoy diciendo.
Tiene unos brazos fuertes pero no exagerados
bien marcados, un pecho que por lo que puedo
apreciar es muy duro además cuando me dormí en el
avión en su pecho lo pude apreciar, tiene un
abdomen bien marcado parecen tablas de chocolate
y esa perfecta V es increíble me quedo mirando y
noto que puede que tiene un pene muy grande.
113
¿Melanie qué estás pensando? Sus piernas son muy
largas y atléticas, este hombre es un dios griego.
—Una foto te durará más pequeña —salgo
abruptamente de mi escaneo.
— ¿De qué hablas? —me rasco la nuca nerviosa.
—Sabes muy bien de qué. Pero esposa mía
déjame decirte que tú eres una diosa tanto que con
solo mirar el nacimiento de tus senos mi amigo se
está levantando.
— ¡Cameron! —Más roja no puedo estar y
¿Cómo no? si tengo una pijama de tirantes con unos
shorts ajustados cortos hasta mi medio muslo y unas
pantuflas de Mickey mouse.
—Mejor vamos a dormir, mañana vamos a la
empresa —dice Cameron entrando a la cama.
— ¿Cómo? ¿Por qué tengo que ir?
—Porque eres mi esposa y quiero que conozcas
la sede principal, luego con el tiempo las irás
conociendo todas —me explica.
— ¿No es muy precipitado? Las personas muchas
me conocen y saben mí edad y yo no sé cuál es la
tuya pero sí sé que eres mayor que yo.
114
—Lo sé pequeña y sé que la prensa y todos los
medios nos atacaran, habrá mucho ajetreo, tengo 26
años.
—Wao —es lo único que puedo decir, me meto
en la cama y él rápidamente me atrae a él,
recostando mi cabeza sobre su pecho —me llevas
diez años.
—Si, ¿Eres de esas personas que les importa la
edad? —pregunta, pero siento su angustia en su voz.
—No. Eso jamás.
—Me quitas un peso, mañana cuando
Regresemos de la empresa tengo algo que darte, es
sorpresa.
—Está bien, buenas noches —susurro y trato de
bajarme de su pecho pero me lo impide.
— ¿Así le das las buenas noches a tú marido? —
¿Qué?
—Este… yo —le doy un beso en la mejilla, pero
es muy rápido y toma mi nuca para luego plantar sus
labios en los míos.
—Eso sí es dar las buenas noches, que duermas
bien, amor —Apaga la lámpara de su mesita de
noche y yo la mía.
115
Luego de intentar alejarme lo más posible de él,
cosa que no resultó pues me encarcela en una
muralla de músculos, caímos en los brazos de
Morfeo.
116
bolso que se cuelga, para guarda su celular y cosas.
Tendría que prender su celular y dar muchas
explicaciones, suspira y en eso entra su esposo solo
con una toalla.
— ¡Joder! ¿Tengo que preocuparme? Estás muy
hermosa —esas palabras hacen que los ya rojos
cachetes de Melanie parezcan como si se hubiese
colocado rubor.
— ¡Gracias! Y no seas payaso, no tienes porque
preocuparte —contesta.
—Es que eres tan hermosa, tú cuerpo es perfecto
y estoy seguro de que todos los hombres se quedaran
mirando lo que es mío —su expresión ahora es seria,
demasiada seria.
—Cameron, eres muy posesivo, ¿Lo sabías?
—Contigo soy todo, pequeña —toca unas de sus
mejillas y le da una pequeña caricia, provocando esa
electricidad característica de cada vez que se tocan
— ¿Me ayudas a elegir mí traje?
—Este… claro —’es lo que le corresponde a una
esposa’ _es lo que piensa.
Cameron se da la vuelta y va y elige unos bóxer
negros muy ajustados y Melanie va a la parte
117
masculina donde elige un traje negro, pantalón,
camisa y chaqueta negra, con una corbata roja, unos
zapatos negros y sus respectivas medias. Al darse la
vuelta se encuentra con un cuerpo de Dios griego,
provocando un nerviosismo y sonrojo en la joven
—Y… yo elegí esto —traga saliva muy
ruidosamente confirmando las sospechas de
Cameron.
—Pequeña, no solo me verás, si no que llegará el
día en que me tocaras y espero que muy pronto —lo
último lo susurra más para él que para ella.
Cameron se coloca su traje, se agrega su peculiar
perfume que destila seguridad y poder como lo es él.
Toma su abrigo de lana y se dirige a su esposa
robándole un beso y tomándola de la mano, juntos
bajan a desayunar y de acomodan cada uno en las
cabeceras del gran comedor. Los empleados se
encarga de servirles, unos panqueques con sirope y
un plato de frutas con yogur, jugo de naranja recién
hecho y café, más el período que no puede faltar. El
desayuno empieza tranquilo, al Cameron abrir el
periódico se percata de que su mujer y el son la
portada principal:
“¿Romance en puerta? Danielson y Walker.
118
La tarde de ayer fue captado el multimillonario
magnate de new york y el soltero más codiciado
unos de los hombres más guapos del mundo y más
ricos, en el aeropuerto de new york aérea privada,
bajando de su jet privado tomado de la mano de
nada más y nada menos de la princesita Walker,
Melanie Walker.
¿Hay romance en puerta?
¿Son pareja?
¿Lo mantuvieron a escondida?
¿Adónde iban?
¿Se mudarán juntos? “
Son unas de las tantas preguntas que hay en el
reportaje, él decide no mostrárselo a Melanie, no
quiere preocuparla por algo que él resolverá.
El desayuna termina ambos se dirigencia la
entrada de la mansión, pero antes Cameron toma la
mano de su esposa. Para Melanie es algo nuevo pero
es algo en lo que en menos de 24 horas se ha ido
acostumbrando.
Afuera se encuentran las mismas camionetas del
día anterior y los mismos guardaespaldas.
119
Fuera de la mansión justo enfrente en un carro,
hay un equipo de periodistas sacando fotos como
siempre hacen con personas del círculo social de los
nuevos esposos Danielson.
La cara de Cameron cambia cuando no está a
solas con su esposa. Ahora en estos momentos
destila seguridad, poder, frialdad, autoridad.
120
Muchos socios y clientes se sorprenden de ver a
la hija de Richard Walker en la empresa Danielson,
otros no ocultan la lujuria que sienten por Melanie
ganándose la frialdad de Cameron que no pasa por
alto las miradas hacia su esposa.
121
armónica que se escucha de fondo más el viento del
tiempo soplando sobre ellos, provocando la
admiración de Cameron antes su mujer, pues el
viento se encarga de soplarle el pelo.
Terminada la cena Cameron procede a la parte
más importante de la velada. La nana de Cameron
acompañada por el servicio de las chicas empleadas
retira los platos dejando únicamente el champán y
las velas acompañada de la música y las hermosas
flores.
Cameron toma un largo suspiro.
—Sé que esto no ha iniciado bien, nuestro
matrimonio, tal vez sigas pensando que soy un
psicópata y no te culpo, confieso que me dolió
cuando me llamaste así en tu casa, sin darme la
oportunidad de explicarte y de que me conocieras.
—Cameron, yo… —es interrumpida por él.
—No te culpo cariño. Yo no he hecho las cosas
correctas en mi vida. He tenido muchas mujeres y no
quiero que por esta confesión pienses que te voy a
ser infiel, no eso jamás. Como sabes y yo se los
hombres tenemos necesidades pero yo esperaré el
tiempo que sea necesario hasta que decidas estar
conmigo.
122
—Gracias.
—No tienes porque, pequeña, es lo mínimo que
puedo hacer después de lo que tú padre y yo
hicimos, pero ese no es el punto de esto.
Él se pone de pie bajo la atenta observación de
ella. De su bolsillo saca una cajita de terciopelo
negra. Colocándose al lado de su esposa y colocando
unas de sus rodillas en el piso la abre y descubre los
hermosos anillos que es lo que contiene dentro.
El anillo de compromiso es algo de antigüedad
pero precioso, una piedra preciosa roja adorna el
centro de esta acompañada a su alrededor por
piedras pequeñas azules y negras dándole apariencia
de ser sencillo, delicado y elegante.
—Son hermosos —para Melanie no solo son los
preciosos anillos los que la mantienen en una gran
sorpresa, si no el cambio tan radical de su esposo.
En la oficina es un hombre totalmente diferente.
Frío, calculador hasta arrogante, pero con ella es
algo diferente es dulce comprensivo, cosa que a ella
le quitó todo lo que su mente maquinaba mientras
salía de su casa el día anterior.
—Estos anillos eran las alianzas de matrimonio
de mis padres, tiempo antes de morir me hicieron
123
prometer que el día que tuviera una esposa y que la
amase que estos serían nuestras alianza. Papá dijo
que estas alianzas las mandó a hacer desde que vio a
mamá por primera vez —los ojos de Cameron se
cristalizan, nunca había hablado de la muerte de sus
padres con nadie y ahora lo está haciendo —. Al
parecer él sabía que mamá iba a ser su esposa, como
yo que supe desde el primer momento que te vi, que
tú lo serías —tema la delicada y pequeña mano de
Melanie y desliza el precioso anillo de compromiso
por el dedo anular de su mano izquierda—. Para mí
es suficiente saber que eres, serás toda la vida, mía.
Te enamoré cada día. Pero es una promesa que les
hice a mis padres y tú eres el indicado amor.
Luego toma el otro anillo y lo desliza por la mano
de ella este es el de matrimonio. Toma la mano
derecha de ella y coloca el anillo que es para él en la
palma de la mano de Melanie.
Melanie con manos temblorosas los de desliza
por el dedo de él.
Y sin más palabras que decir Cameron la besa y
Melanie sin más responde. El beso demuestra
promesas.
Pero la que sí se promete es Melanie, darse la
oportunidad de que su matrimonio funcione, de amar
124
y de ser amada, pues por algo la vida permitió ese
matrimonio.
Cameron él se promete hacer que lo ame como él
la ama a ella.
125
Melanie.
Los días pasan y lo que yo creía que sería un
infierno es algo muy hermoso.
Mi esposo Cameron, ya me he acostumbrado a
llamarlo mi esposo y cada vez que lo mencionó
siento una sensación única.
Él es un marido atento y complaciente, un
hombre dulce cuando está conmigo, pero en su
empresa es uno frío y mandón.
Cada mañana lo ayudo a arreglarse para ir a
trabajar, algunas veces lo acompaño pero otras me
quedo en casa viendo algunas películas o plantando
plantas que es lo que he estado haciendo
últimamente. Y la verdad el jardín me está quedando
hermoso y a Cameron le gusta que es lo que más me
agrada, cuando tiene tiempo también se pone a
plantar conmigo y pasamos momentos muy
agradables, entres besos y muy buenas ensuciadas de
tierra. Otras veces me ayuda la señora Cristine, es
una mujer muy amable le tengo mucho cariño, pero
extraño mucho a mí nana, mi padre, mis amigos a
todo lo que dejé en Miami, pero aquí ya tengo una
vida.
126
He descubierto adonde va el agua que sale de la
fuente y que se adentra en los jardines y es increíble
el agua vuelve a la misma fuente.
También en estos días me Comuniqué con mis
amigos en Miami y como era de esperarse me
abordaron con preguntas y les conté la verdad a las
chicas pero a los demás solo les dije que me casé
con Cameron Danielson quedándose en una pieza.
Nick está muy enojado conmigo pero sé que se le
pasará se que lo deje que se hiciera ilusiones y
estuvo mal, ¿Pero quién se iba a imaginar que yo me
casaría? Por otro lado las chicas se sorprendieron de
lo que hizo papá y ¿Quién no? Ya luego me dijeron
que no había de otra que lo intentará y eso es lo que
estoy haciendo aunque no todo es color de rosa, pues
a Cameron no le gusta que hable con hombres, ni
modo que se aguante son mis amigos y yo no le
impido a él que hable con mujeres.
He llamado a mí casa y según mí nana papá no
estuvo comiendo bien y decidí hablarle donde los
dos en esa llamada lloramos como no hacíamos
desde la muerte de mamá, prometí intentar olvidar lo
que ha pasado y perdonarlo.
Mi flamante esposo me lleva a salir casi todos los
días a esta altura ya casi conozco todas sus cosas
127
favoritas como en las mías. Dado algunos momentos
en los besos las manos escurridizas de Cameron han
tocado mucho, provocando esto mucho calor en mí,
pero siempre retoma la cordura y dice que hasta que
no esté preparada él no hará nada y es algo que
agradezco un montón, aunque me da pena del pobre,
pues su erección siempre sale a relucir.
El colegio. Cameron ha contratado profesores
particulares para mí, así, solo tengo que ir a final de
cada semestre a tomar mis exámenes en el instituto
más popular de new york, no es lo mismo, extraño
cada mañana ir al instituto, pero no puedo volver a
una escuela, es entendible a mi esposo aún lo siguen
acosando sobre porque se ha casado con una menor
y se vería raro que la esposa de uno de los hombre
más ricos del mundo asistiera a un instituto. Por lo
que tres días a la semana tomo clases en la biblioteca
de aquí de la casa por las tardes, lunes, miércoles y
viernes. Además Cameron dice que los fines de
semanas son exclusivos para nosotros. ¡Es una
ternura!
128
Hace dos meses que estoy casada y no es tan
malo como pensaba. Escucho el sonido de un auto y
sé que ha llegado, salgo de la biblioteca
arreglándome el jean que llevo puesto y tomo el
libro que estaba leyendo. Como todos los días de la
semana, bueno en realidad los primeros días no lo
hacía, pero ahórralas cosas han cambiado, mi esposo
y yo tenemos más confianza y es como un deja vu,
durante lo que viví con mamá antes de aquel
horrendo accidente, siempre veía a mamá bajar a
recibir al papá cuando llegaba de la empresa. No soy
copiosa, me gusta ser original, pero esto es parte de
ser una buena esposa y yo quiero serlo.
Mientras me dirijo con pasos agigantados para
llegar antes al recibidor que Cameron, observo mi
aspecto, converse negros, jean rasgado, camiseta de
tirantes roja y una camisa abierta negra, mi peinado
una coleta de caballo alta, unos simples aretes y mis
alianzas matrimoniales, que desde que mi esposo las
colocó en mi dedo nunca más me las he vuelto a
quitar.
Llego al recibidor segundos antes de que la
puerta principal sea abierta y por el entra un hombre
muy alto, fuerte, de traje azul impecable, cabellos
perfectamente peinados y un rostro sobrio dándole la
apariencia de un hombre de negocios y de ser un
129
hombre ingenioso en cuanto al ámbito de estos, sus
pasos firmes seguros, en una combinación que
destila seguridad y poder con una mirada fría que al
verme cambia a una con un brillo especial, haciendo
que una revolución se forme en mi estomago, cosa
que se su significado pero que no me atrevo a
revelar.
—Pequeña —una voz gruesa en combinación con
un tono de suavidad, haciendo de ésta un perfecto
resultado de sensualidad y cariño dirigido sólo a mí.
—Cariño, bienvenido —sin apartar la mirada de
sus ojos, camino hacia él y ya se lo que viene a
continuación y es mi parte favorita de su llegada a
casa.
—Te extrañe, no sabes cómo me pone que me
digas así —en manojo de segundos tengo sus labios
sobre los míos, yo también lo extrañe, sus labios con
su sabor particular, moviéndose al compás de los
míos. Penetra mi boca con su lengua sin piedad, con
pasión, amor, necesidad.
Cameron.
Este es el jodido mundo, sus labios son mi manjar
favorito hasta ahora, solo estoy esperando que esté
lista para así poder explorar los lugares más
130
profundos de su cuerpo, convirtiéndose éste en mi
manjar preferido por sobre todo.
A regañadientes me separó de sus labios, pero
necesitamos llenar nuestros pulmones de oxígeno,
sin embargo no alejo mis manos de su pequeña
cintura. La observo desde mi altura y su ropa.
—Me gusta, pero… —mi mano se dirige a su
cabellera y la suelto, cayendo esta en forma de
cascada por su espalda, llegando a sus caderas, tomo
un mechón y lo huelo, me encanta el olor que
desprenden, una combinación de fresas con el olor
natural de su cabello —. Me encanta el olor que
desprenden. Toda tú me encanta.
—A mí también me encanta tu olor —susurra
bajito, pero audible, sus mejillas se sonrojan.
—Pequeña no tienes porque sonrojarte —levanto
con mis dedos su barbilla y deposito un beso en sus
perfectos labios, lo más bonito es que ella me
corresponde —. Pequeña hoy en la noche en el
central park, hay un evento de beneficencia para
recaudar fondos que serán dirigidos a fundaciones
de cáncer y para las fundaciones de mujeres
maltratadas, en la misma va haber una exposición de
pinturas, estamos invitados —Veo que aclara esos
ojazos azules que me matan.
131
— ¿Es hoy? ¿A qué hora? —pregunta rápido.
Miro mi reloj.
—La función inicia a las 20:30 horas, tendríamos
que salir de casa a las 20:00 horas —pone los ojos
como plato y mira a la pared a su derecha donde hay
un reloj.
—Son 18:15 horas, ¡¿Cómo se te ocurre decirme
eso ahora?! Estoy retrasada de tiempo —se suelta de
mi agarre y rápidamente avanza a las escaleras
conmigo siguiendo sus pasos.
—Tranquila amor.
— ¡¿Tranquila?!A esas galas siempre van
personas que creen que viven en Júpiter, bien
arreglados y arregladas. Y tú eres uno de los
empresarios más importante del mundo. Tu esposa
no puede ir en fachas, con cualquier cosa —está
nerviosa lo noto. Llegamos a nuestra habitación y
rápidamente entra al cuarto del baño.
—Pequeña, con cualquier cosa que te pongas te
verás perfecta. Eres perfecta —y no miento.
— ¡Como digas! —dice con sarcasmo.
Mejor dejo que se arregle. Yo mientras me baño
en unas de las habitaciones de al lado.
132
Luego de bañarme. Regreso a nuestra habitación,
entro a nuestro closet y decido ponerme un traje azul
eléctrico, con camisa blanca, corbata esmeralda y
zapatos negros.
Me visto, coloco mis lociones y peino mi cabello
hacia atrás. Salgo del cuarto y toco la puerta del
baño y se escucha el secador.
—Pequeña te espero abajo —le aviso.
Rápidamente escuchó su voz.
—Está bien cariño, me falta poco.
Sin más bajo aún quedan 45 minutos para la gala.
Cameron decide tomar una copa de caña,
mientras espera a su pequeña.
En la habitación matrimonial, una muy apurada
Melanie, anda a las carreras. Entra al closet y por
suerte que Cameron había comprado ropas y
vestidos de gala de su talla, a pesar de haber sido un
acosador en ese momento se lo agradece.
Elige un vestido largo, que quedaría perfecto con
su peinado, unos pendientes sencillos pero elegantes,
un anillo para el dedo índice y unos tacos perfectos
para eso.
133
Ya cambiada se mira en el espejo y sonríe todo le
salió bien, toma su pequeño bolso y camina hacia las
escaleras.
134
dejando ver la hermosura de su piel, sus labios
pintados de un rojo carmesí, unos accesorios del
mismo diseño negros con plateado y un bolso de
mano negro.
—Es… es, estás maravillosa —lo ha dejado sin
palabras.
Él no se queda atrás. Melanie está embobada
mirándolo, ese traje le queda a la perfección.
—Tú también estás hermoso —retorna el caminar
de sus pasos, así terminando de bajar las escaleras
por completo.
Cameron con pasos firmes se dirige a ella
tomándola por la cintura.
—Serás la mujer más hermosa de la fiesta
pequeña —Su semblante se pone frío de un
momento a otro —. Todos los hombres estarán
mirando lo que es mío —respira profundo —. Eso,
eso me da mucha rabia, ¿Qué tal si no vamos? Si
eso, hacemos otra cosa —sugiere.
—Cariño —le toca el rostro con su suave mano y
lo hace mirarla —. Vamos a ir, porque te
comprometiste. Además yo no me apartaré de tu
lado.
135
—Podemos mandar un cheque con unos de los
guardias de seguridad.
—No señor, no solo es el dinero que cuenta, si no
el apoyo que se les pueda dar en lo más posible a
esas personas que batallan día tras día por sus vidas
—le habla con seriedad y sabiduría.
—Eres una gran mujer, mi pequeña —suspira
derrotado —. Esta bien —su voz con el pasar de los
minutos es más tosca y su mirada más oscura.
—Vamos —para Melanie no pasa desapercibida
el cambio en la mirada y en la voz de su esposo.
Está más que lista para todo lo que le depare la
noche.
Tomados de la mano salen de la imponente
mansión y se dirigen a donde en la entrada de su
casa se encuentra aparcada una elegante limosina de
color negro, resguardada por un escuadrón de
seguridad, que cuida de ellos y el perímetro de la
casa.
Suben al vehículo y se encaminan a la gala de
fundación en el central park de new york.
136
Minutos más tarde están deteniendo el vehículo
en la entrada de un prestigioso hotel. Entrada que
está repleta de camarógrafo, reporteros esperando a
cada magnate y famoso que llega a la gala. De la
limusina, bajan primero los guardas de seguridad,
para luego un imponente hombre de traje azul a la
medida, muy alto, baja del vehículo acaparando la
atención de todo el equipo de prensa que se
encuentra en el lugar. Luego se hace a un lado y
extiende la mano hacia el interior de la limusina.
Ésta mano es tomada, por una de piel blanca
izquierda, dejando al descubierto las preciosas
alianzas de matrimonio, para luego salir una
reluciente y hermosa Melanie Walker de Danielson.
Los reporteros y las cámaras se ponen eufóricos
tratando de por lo menos escuchar algunas palabras
de la pareja más codiciada del momento. Cameron
de manera posesiva coloca su mano en la pequeña
cintura se su esposa, siendo estos rodeados por su
escuadrón de seguridad abriéndole paso entre la
eufórica prensa.
“¿Cameron Cómo es la vida de casado?
¿No crees que seas muy mayor para ella?
¿Melanie estás enamorada del magnate?
¿Te has acostumbrado a new york?
137
Eres un hombre muy codiciado entre las mujeres.
Y se te vio varias veces con amantes. ¿Cómo lo
tomaron ellas?
¿Cómo de la noche a la mañana están casados?
Además ella es menor de edad.
¿Es por acuerdo?
¿Por alianza entre el imperio Danielson y las
empresas Walker?
¿Mantenían su romance en secreto?
Cameron por favor… Melanie di algo. “
Son unas de las tantas preguntas que atacan a la
pareja. Luego de una lucha entre la seguridad y la
prensa, la pareja logra entrar al interior del gran
salón de fiesta del hotel.
Dando inicio a un sin fin de presentaciones por
parte de Cameron a sus colegas con su esposa, pero
fusilando a todos aquellos que le miran de manera
descarada el cuerpo a Melanie. Cosa que le hace
hervir la sangre.
138
La noche transcurre tranquila. Muchas personas
admirando la belleza de los cuadros, pero uno en sí
llama la atención de Melanie. Una pintura de una
hermosa cascada en medio de unos hermosos pastos
donde hay crecientes y coloridas flores, en el agua se
encuentra una pareja amándose. La ternura destilada
por Melanie es tanta que con la llena de sus dedos
acaricia la pintura captando esto la atención del
enamorado hombre que no deja de mirar la belleza
de su esposa.
— ¿Te gusta pequeña? —susurra en el oído de
ella, haciéndola estremecer, pues no lo sintió
acercarte estaba muy absorta en sus divagaciones.
—Es simplemente preciosa, expresa mucho
sentimientos y sobre todo naturaleza, pasión, amor
—lanza un largo suspiro.
Cameron posa su mano en la cintura de ella y le
da un beso debajo de la oreja haciéndola estremecer
no se sabe por número cuanto la ha hecho sentir así
desde que salieron de la Casa.
—Cameron Danielson —una voz masculina,
ronca y pacífica, pero no imponente como la de el
magnate neoyorquino.
Cameron gira su cabeza y sorprendido dice:
139
—Noa Spencer —le reconoce.
—El mismo. Años sin saber de ti —se acerca
estrechándole la mano, su mirada rápidamente
repara en Melanie y se pasea por el cuerpo de la
joven esposa, provocando furia y fuego nuevamente
en Cameron que toda la noche se la ha pasado
ahuyentando a los hombres de su pequeña —. No
nos presenta.
Melanie que se encontraba mirando sus manos
levanta la cabeza y nota el gran parecido que el
recién aparecido tiene con Nick.
Cameron de manera posesiva aprieta más su
agarre en la cintura de ella para luego presentarla
con posesividad.
—Mi amor —remarca las palabras y para Noa no
pasa desapercibida la advertencia en el tono de voz
utilizado por el magnate —. El es Noa Spencer un
viejo conocido —no aparta la mirada de el joven
muchacho que le ha quedado más que claro que no
tiene vía libre al parecer, pero Cameron es muy
mujeriego aunque él se haya marchado del otro lado
del mundo y se haya mantenido lejos de leer y saber
chismes de farándula él lo conoce y todas las
mujeres las disfruta hasta que se aburre y ya luego
140
no las busca _esos son los pensamientos del joven
Noa.
—Noa, ella es mi esposa Melanie Walker de
Danielson, mi mujer —la copa que lleva dirección
hacia los labios del joven se queda a mitad de
camino y este abre los ojos muy grandes.
—Perdón, ¿Escuche bien? —la incredulidad en el
rostro de Noa es notable.
—Escuchaste muy bien —responde Cameron con
voz firme.
—Cameron Danielson, el mujeriego de todos los
tiempos, ¡¿casado?! —el asombro es muy grande,
Cameron no aparta su mirada de él, pero si se
percata como el cuerpo de Melanie se tensiona al
escuchar las últimas palabras pronunciadas por Noa.
—La vida da muchas vueltas, Spencer.
—Mucha sabiduría en tus palabras. Pero que mal
educado es un placer, señorita ¿o debo llamarla
Señora? —dice Noa.
Melanie extiende su mano, Noa la estrecha y se
lleva el dorso de esta a los labios para depositar un
beso.
141
De manera instintiva Cameron toma la mano de
su esposa y la aparta de la mano de Noa.
—Señora Danielson —brama Cameron.
Melanie levanta la mirada.
—Spencer, Ummm… ¿Conoces a la familia
Spencer? ¿Nick Spencer?
—Que si la conozco, es mi familia, por lo tanto
Nick es mi hermano, ¿Lo conoce? —pregunta Noa.
— Si. Es mi amigo, aunque estamos un poco
distanciados.
A Cameron no le pasa desapercibido el nombre
de Nick, el chico que casi besa a su mujer en aquella
fiesta, eso le da rabia.
—Con que eres familia de ese chico —ironiza
Cameron.
Noa va a contestar pero una voz se escucha por
los altavoces del salón, avisando que se dará inició a
la recaudación y ventas de cuadro. Antes de dirigirse
la pareja a su respectiva mesa se despiden de Noa no
sin que el esposo le dé una advertencia a Noa, para
luego llamar a unos de sus hombres de seguridad
para susurrarle algo al oído.
142
La velada pasa tranquila se recolecta una gran
cantidad de dinero y los cuadros se venden todos.
Melanie se pone triste cuando ve que descuelgan
el maravilloso cuadro que le gusta tanto.
La pareja se retira en total silencio.
143
casi te besas con él hace tres meses atrás! —su voz
es amenazante, baja, fría, intimidante.
—Ca… Cameron… ¿t… tú fuiste quién provocó
que la bebida me cayera encima? —él ha intimidado
a Melanie, pero ella realmente no le demuestra
miedo.
— ¡Sí! ¡Fui yo! —brama.
—Yo… solo tranquilízate —no va a pelear por
algo que ella sabe que pasaba, Cameron la seguía a
todas partes.
— ¡Calmarme! ¡Como me calmo si ahora te
tengo en frente con ese vestido que me tiene
alucinando! ¡Avivando el deseo más y más de
hacerte mía, de tomarte ahora! —su voz se
transforma en una ronca y baja dándole aspecto de
un felino.
Con pasos lentos Melanie se acerca hasta quedar
un espacio casi invisible entre ellos.
—Cariño…—sus palabras son interrumpidas por
la boca hambrienta de Cameron, que la devora sin
piedad. A ella se le dificulta seguirle el beso, pero
con el pase de los segundos, le devuelve el beso con
la misma intensidad.
144
Él la toma por las caderas y la acerca más
eliminando todo pase de oxígeno entre sus cuerpo,
haciendo que de la garganta de ella brote un gemido,
al sentir en lo bajo de su vientre su erección.
—Siente pequeña —susurra con voz muy ronca.
—Ah —ese gemido lo toma como respuesta.
—Pequeña te necesito, mucho, te necesito mucho
—los besos ahora toman posesión del cuello de la ya
excitada esposa.
Un líquido brota del interior de Melanie, mojando
su tanga y es la señal de que ella también lo necesita.
En segundo las manos de Melanie viajan al nudo
de la corbata de su esposo y empieza a quitarla.
Unas de las manos de Cameron viajan al muslo
descubierto del vestido y va subiendo y subiendo
hasta llegar al borde de la braga, con su dedo pulgar
juega con este y luego con este acaricia el clítoris
palpitante de ella, trazando círculos con el pulgar.
De la garganta de Melanie solo fluyen gemidos y en
su expresión se demuestra un placer nunca
experimentado, haciendo esto la aviación del deseo
más de lo que ya estaba en él.
La camisa de Cameron desaparece, pues ella
quitó uno por uno con destreza y nerviosismo los
145
botones, teniendo ahora la perfecta vista del bien
formado torso del magnate neoyorquino, que esta
noche la hará mujer. Su mujer.
—Si no te detienes ahora no va haber marcha
atrás —le advierte.
Mientras dijo esas palabras su pulgar dejó de
trabajar sobre el clítoris de ella, pero al terminar de
susurrarle retoma su trabajo, haciendo perder a
Melanie cualquier rastro de cordura.
—Ah… qui… quiero… ah… te… necesito —
dice a duras penas.
No más palabras. Cameron toma el cuerpo de su
esposa en sus brazos y con pasmosa lentitud la
acomoda en el borde de la cama matrimonial.
Aprovecha y se deshace de sus zapatos. Toma el pie
de Melanie para quitar sus tacones, reparte besos
desde sus dedos hasta el tobillo, desabrochando el
cierre de este y lo quita, la misma acción la realiza
con el otro pie. Retoma el camino de besos desde
sus tobillos hasta su vientre bajo, donde aspira, la
hace recostar en la cama y con sumo cuidado va
subiendo y subiendo combinando la respiración
tibia, con una más fría soplando, erizando los vellos
del cuerpo de la excitada mujer. Llega a su boca y la
devora, una de sus manos se dirige a su espalda
146
subiendo hasta el cierre del vestido, donde Melanie
arquea la espalda para facilitarle el trabajo, poco a
poco su mano baja el cierre, su boca besa con mucho
amor, pasión y deseo la boca de su amada. Retira sus
labios de los labios de Melanie, se incorpora y
empieza a bajar las mangas del vestido, descubierto
el sostén de encaje, color piel dejando a la vista el
valle de unos senos redondos.
Otras veces ella hubiese estado en trajes de baños
de piezas, pero la situación en este momento es
diferente, se encuentra siendo desnudada por su
esposo, que esa noche reafirmará que son marido y
mujer.
Observa como él termina de quitar el vestido y su
mirada la penetra causando un fuego profundo en su
interior.
—Eres hermosa — ¡qué voz! Le provoca tantos
sentimientos.
Él se da a la tarea de quitarse su pantalón,
desapareciendo este en un pestañeo, al ponerse
recto, ella recorre con la mirada el tonificado cuerpo
de él, deteniéndose en la gran erección marcada en
los bóxer negros, que ahora le queda más ajustado
de la cuenta. Se sonroja causando ternura en él. El
cuerpo del excitado hombre trepa en la cama
147
colocándose entre las piernas de Melanie que por
instinto las abre, esto crea fricción en ambos sexos
separados únicamente por unas finas telas de bóxer y
bragas. Gimen.
Fuerte, claro, Provocando calor, fuego interior los
labios del ferviente marido atrapan nuevamente los
de la ferviente mujer, quien los recibe con ansias.
Esos labios escurridizos no se quedan tranquilos,
poseen el cuello de ella, con posesión absoluta,
besan, mordisquean, soplan, erizando todo, bajan al
nacimiento de los senos, besándolos.
En segundos el sostén desaparece y la boca de él
los besa, pasando su lengua por la areola,
provocando que Melanie se arquee a él, uniendo los
sexos ardiente provocando gemidos. La mano de ella
viaja a la espalda tonifica, fuerte de él, arañando y
apretando el cuerpo de él hacia ella. Otra de sus
manos viaja a la cabellera azabache, entierra sus
manos en ella jalando acto que excita más a él,
dándole dureza que nunca una mujer logró en él. Los
labios de Cameron maman de los senos de Melanie
como un bebé hambriento, fuerte, dando un poco de
dolor pero que se convierte en placer. Mordisquea
los pezones erectos, probando el sabor de estos.
Simplemente deliciosos. Los estruja. Hace la misma
acción con cada seno.
148
La traviesa boca baja al vientre colmando de
besos y mordiscos, ella por la acción levanta las
caderas.
El borde de la braga hace acto de presencia. Él
toma el borde entre sus dedos y la mira a los ojos,
pupila con pupilas dilatadas de otro color más
oscuro que el natural de sus ojos. Con sus miradas
conectadas baja él, la fina braga de encaje y se la
lleva a la nariz, acto morboso e impactante para ella,
nunca pensó que un hombre hiciese eso.
—Hueles muy bien, tú olor me encanta —
sensualidad, ronquera es de lo que está cargada su
voz —. Pequeña, ven —le llama.
Obediente se arrodilla en la cama en todo su
esplendor de desnudez. La admira. Una diosa, la
diosa de todas sus fantasías que espera algún día
cumplir las todas cada una.
—Mía —posesividad.
Él se coloca de rodillas también en la cama verde
y azul oscuros mirados tan profundo, mas manos de
ella son guiadas al borde del bóxer de él, él retira sus
manos a ver si ella se retracta, cual es su sorpresa,
que ella misma continúa la tarea de desnudarlo por
149
completo, ya no hay marcha atrás, ya no hay ropa de
por medio.
Los ojos de ella miran con interés el miembro,
erecto, duro, viril, largo, gordo y de un rosa muy
oscuro.
Traga saliva.
—Es muy grande. Creo que no cabera en mí —se
sorprende por la ronques de su voz.
—Yo te voy a lubricar bien, todo estará bien mi
vida —sus dulces palabras le dan tranquilidad.
Caen con movimientos lentos en la cama él inicia
movimientos de arriba, abajo, dando fricción y calor
en los palpitantes y ardientes sexos. Provocando
jadeo y mucho gemidos en ambos, ella por instinto
se sostiene de los brazos firmes de él, clavando sus
uñas en ellos, es mucho placer. De un momento a
otro detiene sus movimientos, provocando protesta
en ella, sacándole una sonrisa arrogante. Retoma el
camino de besos desde sus labios hasta el vientre.
Cuando ella siente la respiración de Cameron en su
sexo, se espanta.
—Ah… amor… ahí no —no puede hablar con
coherencia. Sus palabras llenan de amor y ternura al
orgulloso macho, que tiene su cara en su entrepierna,
150
no solo por llamarlo amor, si no por ver ese fluido
brillante en el centro de ella, esta lista, pero aún así
la quiere probar y lubricarla más, la lengua de
Cameron da su primera lamida en el clítoris de ella,
acto por el cual Melanie toma entre sus manos la
sábana, su lengua lame cada parte de la vagina
virginal, muerde los labios vaginales de esta, los
succiona, su clítoris lo muerde, lame, succiona hasta
hincharlo. Su deleite es saborearla y escuchar sus
gemidos. Una mano de la de Mel, toma su cabello y
hace que su cabeza se entierre más en su vagina, con
el pulgar da círculos en el botón íntimo, mientras su
lengua se adentra en la pequeña cavidad e inicia una
penetración.
En el vientre bajo de Mel se forma un remolino,
placentero, pero esto lo siente Cameron y detiene la
acción.
—Cam —protesta.
Sonríe.
—Te daré uno mejor, amor.
Se posiciona entre las piernas de su amada,
sosteniéndose de sus antebrazos, toma la punta de su
miembro y lo frota en el centro del deseo.
—Ah —gimen los dos.
151
—Ah —gime fuerte Mel.
Nunca él se esperó que su pequeña haga esto,
toma el miembro erecto y lo acaricia con sus manos,
arriba, abajo.
—Ah nena, me vas a matar —gime extasiado,
devorándole la boca.
Cuando ya no puede más retira las manos de ella
y ella las colocas en su espalda.
—Rodea mi cintura con tus piernas —ordena.
—Sí, mi amor —obedece.
Se coloca en la entrada del placer.
—Mírame —ordena y ella obedece —, no dejes
de mirarme —asiente con la cabeza.
Va presionando poco a poco.
—Sólo yo te beso, sólo yo te toco.
—Sólo tú —confirma, él presiona hasta que logra
entrar la punta —. Duele —dice ella y una lágrima
resbala por su mejilla.
—Ssh, Ya pasará cariño, solo un poco más —es
de él. Solo él. Besa sus párpados y bebe sus
lágrimas.
152
Presiona dos veces más y el himen se rompe. Un
grito lo demuestra por completo ella ha sido
desvirgada.
—Y solo yo te poseo, te penetro. Eres mía, solo
mía. Mía. Joder mía.
—Tuya, mi amor —sus lágrimas continúan
bajando.
—Me moveré —le informa, se mueve —. Me
encantas, apretadita.
Sus movimientos empiezan, lento, afuera, dentro
haciéndole el amor como nunca a ninguna otra, se
mueve con maestría y conocimiento, haciendo que el
dolor desaparezca en ella y se haga presente el
placer en Melanie, cuando ya no molesta ella
comienza a moverse al son de sus embestidas,
suaves.
Pasando los minutos estas aumentan a unas más
rápidas, Mel le agarra las nalgas y clava su uñas, lo
besa, en los labios el cuello, le muerde su hombro y
él satisfecho recibe cada unas de sus caricias. Ya son
muchas las embestidas, siendo testigo solo la
habitación, esa cama y ellos, solo se escucha
respiraciones agitadas, jadeos, gemido de puro amor
y placer y el sonido de los cuerpos chocantes.
153
Se acerca la liberación y van por el clímax, los
senos de ella son tomados por él caliente marido y
las penetraciones son más rápidas e urgentes, con
necesidad y ella moviéndose al son de estas.
El remolino en el bajo vientre de Mel se hace
presente teniendo ella nuevamente esa sensación
deliciosa. Para él no es indiferente esa sensación,
pues ella lo aprieta con sus carnes vaginales.
Aumenta el ritmo, si es que es posible. Suben,
suben, suben y Mel explota.
—Ah, came, Cameron —termina en un fuerte
orgasmo.
Segundos después.
—Melanie —el marido se deja ir en su interior,
vaciándose en ella por completo y llenándola de su
esencia.
Él la colma de besos a los que ella responde.
Están sudorosos.
— ¿Estás bien? —Pregunta él.
—Mejor que nunca —le besa.
Con lentitud se sale del interior de ella, se
acomoda a su lado, la atrae a su pecho, besa sus
154
labios y su coronilla.
—Te amo, pequeña.
—Te amo, mi amor —siente alivio en poder
decírselo él la enamoró en estos dos meses que han
pasado.
Eso es un júbilo para él, tanta es su felicidad que
besa repetidamente su coronilla, susurrándole
muchas palabras bonitas y así duermen uno en los
brazos del otro.
155
Capítulo 11
Cameron.
Despierto por sentir un cosquilleo en mi cuello.
Al abrir los ojos inmediatamente sonrío, los
recuerdos de anoche golpean mi memoria, aunque
no están necesario pues dormí como un pequeño
bebé. La tuve y la tengo en mis brazos, ahora sí
puedo decir con total derecho que es mi mujer. Mía.
Sí, sé que soy muy posesivo, eso no lo niego,
nunca ninguna mujer se clavó en mí corazón como
mi pequeña. Ni siquiera ella. Tal vez para el mundo
soy frío, pero así es. Fuera de una estancia donde no
esté mí mujer así soy, la muerte de mis padres tuvo
mucho que ver con eso y lo que esa mujer hizo
también, ya no vale la pena pensar en eso.
Dirijo nuevamente mi mirada a mí pequeña, se ve
sexy y tierna, su cabello alborotado y regado en la
almohada, su mano en mi pecho, sus piernas
entrelazadas con las mías sus ojos cerrados y la boca
entreabierta, me da tanta ternura.
Te amo mi amor. Su voz un tanto adormilada
llega a mi mente y sonrío feliz, el pecho se me
156
hincha de tanta felicidad ella me ama, como yo a
ella. Le demostraremos al mundo que el amor no
tiene edad, que el amor no solo es esperar que llegue
por sí solo, el amor se busca, el amor se lucha, se
conquista, se corteja, se protege. El amor es más que
decir te amo, es demostrar día a día que esas simples
y cortas cinco letras tienen significado. Que el
matrimonio no solo es decir estamos casado. El
matrimonio es apoyo mutuo entre los involucrados,
el matrimonio es felicidad, tristeza, enfermedad,
salud. Es lo que estoy dispuesto a demostrar cada día
en mí matrimonio y demostrar día tras día que yo
doy mi vida por Melanie, que es mí luz y es esa luz
que también me puede llevar a la oscuridad.
Observo su rostro se ve relajada, su cuerpo está
cubierto por la sábana blanca, sus pechos tocan mí
pecho y deseo chuparlos con solo sentir su fricción.
Con cuidado de no despertarla salgo de la cama.
—Cameron —protesta adormilada, pero
inmediatamente vuelve a su siesta. Mi sonrisa se
ensancha debo de parecer idiota sonriendo pero ¿qué
puedo hacer si no es esto? Mi pequeña piensa en mí
hasta dormida y es algo que me llena de felicidad.
Coloco mi pantalón de pijama mis pantuflas y
bajo a pasos rápido las escalera de la casa, estoy
157
feliz y quien no después de haber tenido la más
exquisita de su vida y no será la única.
—Jack —llamo a mi hombre de confianza.
En cuestión de segundos aparece en mi campo de
vista.
—Diga señor.
—Buen día.
—Buen día señor —Jack lleva años trabajando
para mí, trabajaba para mí padre también.
— ¿Lo tienes? —a mí pequeña le va a encantar.
—Si señor, deme unos minutos —veo que habla
por una radio y un minuto después aparece uno de
los chicos por la puerta con ello.
—Buen día señor Danielson, señor Jack —
respondemos al saludo y me lo entrega. El chico se
retira.
—Gracias Jack.
—A sus órdenes señor.
—Jack, puedes ir con tu familia no vemos
mañana en la tarde, te estaré esperando para que me
recojas. Me saludas a tu esposa, hijas e hijo —en la
158
cara de mi guardaespaldas personal se forma una
gran Sonrisa.
—Muchas gracias señor. Me encargaré de dejar el
escuadrón bien armado para que lo protejan a usted
y a su señora.
—Te he dicho no se por vez número cuanto, que
me llames por mí nombre cuando estamos solos —
es testarudo.
—Lo siento se… Cameron, es la costumbre —se
disculpa.
—Me conoces desde niño, deberías de
acostumbrarte y dile a tu esposa que el próximo fin
de semana desde el viernes está invitada con sus
hijos a casa, se que a Mel eso la hará muy feliz.
—Se lo diré señor, perdón Cameron. Ah,
muchacho usa camisa si no quieres que el personal
se dé cuenta de la noche tan activa que tuviste —sin
más me da una palmada en el hombro y se va.
Miro mi hombro y mis brazos en la parte superior
y mí pequeña es una fiera, estoy seguro que no soy
el único con huellas de guerra.
Voy a la cocina y pienso que hacer de desayunar,
mi nana tiene el día libre al igual que el servicio de
159
la semana, solo está el escuadrón de seguridad y
para ellos se les piden comida. A mí no me apetece
llamar a la agencia de servicio.
Vamos Cameron se creativo.
Huevos, tostadas con mermelada, zumo de
naranja, café y frutas. Me parece bien. Manos a la
obra.
160
—Tal vez de ésta manera puede ser que te libres
de tú castigo por despertarme —no puedo evitar
sonreír.
Me he acostumbrado a esta vida, casi tres meses
compartiendo mi casa, cama, comida, comedor, cada
detalle de mi vida con la mujer que amo. Por más
cosas que pasen todo pasa por algo. Salgo del hueco
de su cuello y la observo.
— ¿Cómo te sientes? ¿Te hice daño? —
inmediatamente se ruboriza. Hermosa.
—Eh. No. Estoy bien. Solo…
— ¿Qué sucede pequeña? —baja la barbilla —.
Mírame —con mis dedos hago que me mire —.
Cariño, Confía en mí.
—Solo… molesta algo, es un poquito —me
pierdo en sus ojos tiene un brillo especial, ellos
siempre brilla, pero está ese brillo que dice que ha
pasado de niña a mujer. No evito sonreír, pues me
hace feliz ser el causante de aquel brillo. Me juro a
mi mismo que nunca nadie, solo yo tocaré su
cuerpo.
Beso sus labios y doy una mordidita en el
inferior.
161
—El dolor pasará, de acuerdo a los días y
también hay un método que lo emplearemos para
que eso pase rápido, señora Danielson —le digo con
picardía.
— ¡Eres un pervertido! —me pega con la
almohada.
— ¡Y cómo te gusta este pervertido y lo que te
hace! —suelto una sonora carcajada.
Su cara es un poema, está completamente
ruborizada.
—Hay que lavarle la boca con jabón a mi querido
esposo —dice, envolviendo la sabana alrededor de
su cuerpo, tratando de que yo no vea.
—Pequeña, no tienes porque esconderte de mí,
conozco perfectamente tu cuerpo, me he grabado
cada detalle por más insignificante que sea y tú no
tienes nada de insignificante.
Con timidez se levanta de la cama y toma la
camisa de él que se encuentra al lado de los pies de
la cama. Siente un pequeño tirón en su centro,
causándole un poco de dolor.
’No solo duele por la pérdida de mi virginidad,
sino por el miembro enorme de mi esposo’ _piensa
162
ella.
Bajo la atenta mirada de su marido, Melanie deja
caer al suelo la sabana.
Los ojos del hombre se dilatan de inmediato
como puede ser tan hermosa aún levantándose y que
sin hacer el más mínimo gesto de insinuarse a él,
hace que él la desee como un loco. Los segundos
que Melanie dura colocando la camisa que le queda
enorme para él es una tortura.
—Pequeña, termina de cubrirte pronto —su voz
sale tan ronca que cada palabra sale de su boca con
gravedad.
Ella puede percibir que su mirada ha cambiado
despertando en ella deseos por él.
—Cam, ¿puedes dejarme de mirarme así? Mis
ojos están aquí arriba —señala su cara con su dedo
—. No en mis pechos, y no creas que no me he dado
cuenta que estoy marcada.
—Como dejar de mirarte si eres irresistible —
Sonríe como todo macho posesivo —. Esas marcas
solo demuestran que eres mía — acerca y la toma
por las caderas la pega a su creciente erección y
susurra —. Está la bajamos al rato, ahora te tengo
una sorpresa —. Besa sus labios con frenesí,
163
penetrando sus labios sin permiso. No es incómodo
para ella, sino puro placer.
Cameron le hace prácticamente el amor a su boca
con su lengua.
Se aleja de ella antes de que eche al carajo la
sorpresa y la tome justo ahí.
—Vamos —le toma la mano.
—Espera —se agacha hasta tomar la sábana entre
sus manos y se gira a dejarla sobre la cama,
percatándose de la gran mancha roja, su pudor en
esa sabana.
—Vamos nena se enfriara el desayuno y ya
quiero que veas tu sorpresa.
La cara de Melanie es rojo carmesí, al Cameron
percatarse de que ella no le responde, se gira y sigue
con la mirada lo que Melanie mita con la cabeza
gacha.
—Oh, pequeña no es nada eso se quita —besa su
coronilla.
—Lo se… p… pero… lo… pueden ver
— ¿Y? Lo más seguro es que piensen que te llegó
el periodo.
164
— ¿Y que justo haya manchado el centro de la
cama? Eres bobo.
— ¿Qué? ¿Te avergüenza de haber estado
conmigo? —el rostro de Cameron se contrae por los
malos pensamientos que su mente origina.
— ¡Eres idiota Cameron! ¡Claro que no! ¿Cuál es
la puta inseguridad? ¡Te he dicho que te amo y no
miento y tú me vienes y me sales con eso! —le grita
bajo, pero gritando su indigno.
Él respira.
—Perdón, es solo que no quiero que te alejes de
mí. Que no te sea suficiente —toma su mano aunque
ella trata de alejarse pero no se lo permite.
— ¡Me eres suficiente! ¡Nunca ningún hombre
me ha tocado solo tú! ¡¿Cómo voy a decir que no me
eres suficiente?! ¡Lo eres, te amo, eres mi esposo, un
hombre maravilloso deja tus inseguridades por Dios!
—Respira —. Sé que tienes un pasado que no
conozco. Pero quiero que sepas que mi corazón es
tuyo y que yo no te dañaría por voluntad, nunca.
Rápidamente la envuelve en sus brazos y
deposita un casto beso en sus labios.
165
—Yo también te amo, te amo con todas mis
fuerzas pequeña, perdón.
—Está bien —saca su cabeza de su pecho y lo
mira a los ojos acariciando el definido rostro de él
—. Ahora muéstrame mi sorpresa.
Se sonríen.
Se dirige con ella al frente de su cama, se coloca
delante de ella tapando su vista y de un momento a
otro descubre aquello. A pasos firmes y lentos se
aparta.
— ¡Wao! —exclama Melanie. Sus ojos se llenan
de lágrimas es un detalle tan hermoso —. ¡Es la
pintura!
— ¡Sí! ¿Pensaste que iba a dejar que se la
llevaran sabiendo que te gusta?
—Pero es muy cara —dice ella sin salir de su
asombro.
—Nada, tiene porque importar y no me importa
el precio con tal de verte sonreír, ese es mi pago —le
acaricia la mejilla.
—Muchas gracias mi amor —le besa.
166
—Ahora a desayunar para darnos un baño e
iniciar nuestro nuevo día. Luego ves donde lo
colocas —sin más se dirigen a desayunar.
167
Capítulo 12
Londres, Inglaterra.
En las afueras de la ciudad de Londres se
encuentra una gran casa de campo. Aquí vive un
hombre arrepentido de todo el mal que causó y del
propio mal que se causó a sí mismo.
— ¡Maldición! ¡Ya deja la maldita obsesión que
tienes por ese hombre!
— ¡Tú, ni nadie me dirán lo que tengo que hacer!
¡Mi vida es mía! —lo señala con el dedo.
Es una mujer muy hermosa, rubia alta 1’70
metro, de piel muy suave, unos ojos negros grandes
y hermosos, cejas definida, perfil afilado, su cuerpo
es el de una súper modelo lo que realmente fue, a
pesar de todo lo que ha pasado sigue igual, es una
mujer muy astuta y educada, pero su mirada no
transmite nada, solo vacío, maldad.
— ¡¿Para qué volver ahora?! ¡Déjalo en paz! ¡Si
dices que lo amas, no le hubieses hecho lo que le
hiciste! —le grita el hombre que trata de razonar con
ella.
168
—Le hicimos —corrige mirando sus uñas como
sin ese momento lo más interesante fuesen ellas,
siempre es así.
—Y no sabes cuánto me arrepiento. Fuiste tan
mezquina de matar a un ser inocente —contraataca
con desprecio, empañando sus verdaderos
sentimientos.
— ¡Ay! ¡Ya! Me estás estresando, pasa la página
querido —como toda una modelo camina hasta él y
le toma los cachetes como si de un bebé se tratará,
con lentitud y sensualidad se acerca y tomándolo
fuerte de la nuca lo besa, sin cerrar sus ojos —. Todo
estará bien.
—Sabes qué tú actitud no me tranquiliza. ¡Llevas
años lejos de Estados Unidos y ahora decides
aparecer! ¡¿Qué pasa si él está casado, tiene hijos?!
La carcajada llena de maldad y frialdad capaz de
enfriarles los huesos a cualquiera inunda la sala de
estar de la espaciosa casa.
De un momento a otro su risa para y sus ojos se
vuelven brillosos y maliciosos, poniéndose estos de
un negro muy oscuro.
—Es simple, salen del medio —habla con
lentitud —. Sabes que poco me importa.
169
—Por favor, ¡Basta! Suficiente con lo que le
hiciste a esas pobres enfermeras ¡casi las matas! —
Le reprocha.
— ¿Qué? No me digas, ¿te gusta una? Sabes que
puedes cogerte con quien quieras, yo no te voy a
detener, además llevas mucho tiempo de abstinencia
—se da la vuelta y toma sus maletas.
— ¡No me hables mierdas! ¡No te tiene porque
importar a quien me coja o no! ¡Es mi vida! ¡¿Es
que no entiendes?! ¡Estoy tratando de que no te
hundas!
—Ya me estas hartando Will, lo mejor es que
cierres esa preciosa boca si no quieres que te corte la
lengua —le amenaza.
Él se ríe.
—Por favor conmigo no querida, el único que
miedo no te tiene soy yo, no se te olvide que somos
de la misma calaña.
—Deberías —en eso suena el claxon de un auto
—. ¡Oh! ¡Que seas muy feliz guapo! Pues mí amor
me está esperando aunque no lo sepa, cuídate—se da
la vuelta y empieza a caminar sin mirar atrás.
170
—Allison! ¡Ven aquí! —ya es tarde ella ya está
subida en el taxi, no presta atención a sus llamados.
—Al aeropuerto —su voz es de orden y es muy
fría, intimidando al pobre taxista —muy pronto mi
amor, cara a cara —. Suspira y se recuesta del
espaldar del asiento trasero del taxi.
New york, Estados Unidos.
Los esposos han terminado de desayunar,
Melanie se levanta de la silla y va y se sienta en el
regazo de su esposo, toma su cara entre sus manos y
le da un casto, alargado y dulce beso.
—Gracias —susurra aún con los ojos cerrados y
su frente reposando en la frente de su amado.
— ¿Por? —pregunta acariciando su pelo y su
cara, pasando su brazo por la cintura de ella,
atrayéndola a su cuerpo.
—Por todo, por éste delicioso desayuno, por la
pintura, pero sobre todo por enseñarme a amar —
ahora sus manos acarician el pecho de él.
—En todo caso sería yo el que tendría que
agradecer y muchas cosas —besa la coronilla de
Melanie.
171
Melanie se acomoda a horcajadas sobre él, la
camisa sube hasta dejar por completo sus muslos al
descubierto, sus simples movimientos excitan al
atento hombre, que sin control suelta un jadeo.
—Te amo —le dice ella para luego apoderarse de
los labios de su marido.
Los labios de la pareja encajan a la perfección. Él
tira del labio inferior de ella y luego pasa su lengua
por el superior, quedando claro en ella su pedido y
sin objeción alguna se lo permite, las lenguas bailan
una danza lenta, luego rápido y por último una
guerra que ninguna de las dos quieren rendirse.
Jadeantes se separan del intenso beso.
—Vamos a tomar un baño pequeña —le dice
Cameron con voz intensa.
Si esperar respuesta, toma entre sus manos las
nalgas de Melanie y se levanta con ella, Melanie
enrosca sus piernas en la cintura de él, mientras
camina el hombre, los dos sexos hacen fricción
siendo esto una tortura placentera, sacando desde lo
más profundo de sus gargantas los jadeos y gemimos
más deseosos y lleno de amor.
Al adentrarse al lujoso baño Cameron con sumo
cuidado deposita encima de la cama de masajes que
172
tienen para ellos, a Melanie y se dirige a preparar la
tina.
Abre la llave de agua tibia y agrega sales
relajantes, aromatizantes y jabón de mentas y flores.
Deja la llave abierta y se voltea a ver a su esposa,
quien desde hace rato lo estaba observando.
Para Melanie no pasa desapercibido sus
movimientos, la concentración con la que ejecuta las
cosas, lo demandante y frío que es en los negocios,
pero también lo tierno, justo y cariñoso que es, ella
sabe que Cameron tiene un pasado uno que cuando
el desee le contará esperando ella que ese pasado no
afecte su preciado matrimonio y que no rompa los
lazos entre ella y su amado esposo.
Tan absorta está en sus pensamientos que no se
percató de cuando Cameron llego a estar enfrente de
la tina a estar en este momento frente a ella.
—Te amo —susurra Cameron con dulzura
acomodando un mechón de cabello de su esposa
detrás de la oreja de ella.
Sus palabras destellan un montón de emociones
en el vientre y el corazón de Melanie.
173
Él deposita un tierno y sensual beso en los labios
de ella, su escurridiza mano se dirige a los botones
de la camisa que ella tiene, camisa de él, camisa que
le queda muy sexy.
Botón por botón es desabotonado, hasta abrir la
camisa por completo. La camisa empieza a ser
retirada por los hombros y luego cae tras la espalda
de ella dejando ver el curvilíneo cuerpo.
—Eres tan hermosa —halaga el esposo.
Él, con destreza retira su ropa dejando el
tonificado cuerpo a la vista fuerte y definido, el
miembro erecto hace presencia entre ellos.
La toma de la mano y la ayuda a bajar con pasos
lentos llegan a la tina, cerrando él la llave, primero
se introduce él, luego ella, quedando entre las
piernas de su esposo y sintiendo el pene de su
marido clavado en su espalda.
La esponja Cameron la toma y aplica un poco de
jabón, empieza a bañar a su esposa, primero los
hombros, cuello, espalda, sus senos, su tórax
deteniéndose más de lo normal en estas partes,
apretujando y frotando los pezones de su esposa
estremeciendo la de placer, se estira para lavar las
174
musculosas piernas y luego su mano si pudor se
dirige al centro de ella su vagina.
Melanie tímida, pero se repite una y otra vez, es
su esposo, el hombre que ella ama.
El matrimonio no es unos papeles ni una alianzas,
es confianza, respeto, apoyo, es brindarse fortaleza
entre los cónyuges, es experimental, reír, llorar, pero
más que todo es amor.
Meditando esas palabras Melanie abre sus piernas
y permite que él la lave.
Él, cada día se enamora más, la sencillez de ella,
su inocencia carga de picardía y la forma de tratar a
las personas que no pertenecen a su misma clase
social es una forma impresionante lo que lo hace
amarla más.
Lava su vagina con sumo cuidado y picardía,
dándole a la vez placer, abandona la esponja y con
esa mano empieza a trabar círculos en el centro del
deseo de ella, provocando que lo que era jadeo ahora
sea gemido.
Con su otra mano toma los senos de ella los
acaricia, masajearlos, aprieta, pellizca los pezones y
los frota, Melanie se arquea y su garganta deja saber
175
a través de sus gemidos el placer que le provoca su
marido.
Con cuidado de no lastimar su sensible centro
introduce su dedo mayor y el pulgar lo deja sobre el
clítoris de su pequeña.
Empieza a frotar y bombear a la vez. Su otra
mano trabaja con los senos de su mujer, su placer es
verla, pedirle más con solo gemidos.
—Ah… Cam… M-mi amor… No te detengas —
logra concluir.
Él deja salir un gruñido.
— ¿Quieres más? —ella asiente —. ¿Te gusta?
Dime cuánto, pequeña —sus labios no coordinan
palabras, su mente empieza a descender y sus
caderas toman vida propia, pues empiezan a
moverse al son del bombeo de el dedo en su interior
de su esposo, es simplemente maravilloso.
Cameron intensifica los movimientos ahora
rápidos, certeros pero con delicadeza no desea
lastimarla eso jamás, primero se corta una mano
antes de que hacerle daño, cada gemido que sale de
la profundidad de la garganta de Melanie envía un
tirón de placer al pene de él, dándole más rigidez y
176
dureza de la que en ese momento tiene, dándole
dolor por contenerse.
Las paredes vaginales de Melanie empiezan a
apretar el dedo de Cameron, por lo que ahora le da
más rápido la mente de Melanie sube y sube a un
mal de sensación es deliciosas y el conocido calor,
hormigueo y nube de emociones empiezan a hacer
acto de presencia. Desesperada toma la nuca de su
esposo como puede aún estando de espalda y le besa
con deseo y amor, ahora es ella quien adentra su
lengua en la cavidad bucal de él saboreándolo.
Se despega de los labios de él y con un hilo de
voz pide:
— ¡Más!
Él no se hace de rogar y le da más de eso,
llevándolo a ver las estrellas y haciéndola
convulsionar en intenso orgasmo.
— ¡Cameron! —grita al culminar, su cuerpo
tiembla y sus fluidos desaparecen entre los dedos de
Cameron y el agua.
Con sumo cuidado retira el del interior de ella su
dedo y le colma la cabeza de besos.
Ya más recuperada lograr articular:
177
—Eso fue intenso.
—Hace unos meses te lo prometí pequeña —dice
él recordando ese momento en el avión.
Decidida Melanie da vuelta y se sube horcajadas
sobre él, sin darle tiempo a pesar a Cameron las
intenciones que tiene empieza a mover sus caderas
provocando una fricción deliciosa.
El asombro en Cameron es obvio, pero
rápidamente se va al sentir los deliciosos
movimientos de su mujer.
Con el pasar de los minutos Melanie intensifica
esos movimientos, toma el cabello de él en un puño
tira de él hasta acercar el rostro y la sensual boca de
su marido a su cara.
‘Es hora de poner en práctica todo lo que he
leído’ _piensa para sí misma.
Besa los labios de él con ímpetu, da mordisco en
el labio inferior de él, sus labios besan el varonil
cuello de Cameron.
— ¡Oh! Si, así pequeña —gime excitado.
Esas pocas palabras alejan aquellas inseguridades
que muy en el fondo siente de no poder complacer a
su esposo.
178
El ritmo de sus caderas es más rápido. Con sus
pulgares ella los lleva a las tetillas de Cameron, sus
pezones y empieza a trabar círculos.
La erección de Cameron crece y crece ya no
aguanta.
— ¡No aguanto! —brama como un león.
La toma de las caderas parando sus movimientos,
lleva la punta a la húmeda entrada.
— ¡Mírame! —Le mira —. Vas a bajar con
cuidado, ¡Te puedo lastimar! —asiente.
Con cuidado ella baja y se empalaga poco a poco
en la gran erección de su marido, provoca algo de
ardor es muy grande y está caliente y su centro está
muy sensible.
Cameron la inmoviliza hasta que su interior lo
empieza a absorbe.
— ¡Siempre mírame mí vida! —ella dirige sus
ojos a los de él.
Conde su miradas fijas Cameron empieza mover
las caderas de él y Melanie le sigue, esos
movimientos primeros son lentos y luego más rápido
y luego más y más rápidos.
179
La habitación del baño es puros gemidos y el
agua de la tina empieza a mojar todo el piso.
Él levanta la cadera para hacer las embestidas
más profunda y Melanie las recibe gustosa.
La pareja empieza subir y subir en esa nube, el
cosquilleo y el calor en el vientre de Melanie por
tercera vez se hace presente, sus paredes les avisan a
Cameron lo que está por llegar en Melanie, está
cerca, igual que él.
— ¡Vamos pequeña! ¡Lleguemos juntos!
Los movimientos placenteros los llevan a ver las
estrellas y explotan en un maravilloso lugar de
placer, Cameron eyacula con violencia en el interior
de Melanie y los fluidos de ella se mezclan con el de
él.
Él cae recostado en el espaldar de la tina y
Melanie en su pecho pero no antes de darse un beso.
Luego de unos minutos él se retira del interior de
ella y dice:
—Ahora si vamos a bañarnos, ha sido una
mañana muy intensa y caliente pequeña, necesitas
descansar.
180
’Claro y como no. Dos intensos orgasmos ’_
piensa.
La pareja se da a la tarea de bañarse mutuamente.
181
—Gracias —la toma y gira su cabeza —.
Estúpidos viejos —roda los ojos con fastidio.
Lee la pagina a donde la manda la portada y cada
palabra escrita la enfurece, haciendo que entierre sus
uñas en la revista y apriete los dientes y la
mandíbula.
—Yo debería de ser la que está de portada con él,
no ella —susurra muy bajito pero aterrador —.
¡Prepárate Melanie Walker para lo que te espera, ese
hombre es mío! —grita para ella muy bajito, pero
unos cuantos de sus acompañantes la escuchan y ven
la expresión mirándola asustados y como si
estuviera loca, cosa de la que no se percata.
Es una promesa, hará todo por destruir a Melanie
Walker.
Siento la demora.
¡Feliz día de la mujer!
Besos.
Mariana
182
El día para la feliz pareja pasa entre besos,
abrazos, películas y dulces palabras de amor.
Mientras ellos están en una burbuja de felicidad,
al país de Estados Unidos, new york acaba de
aterrizar Allison Stile, aquella mujer que marcó el
pasado de Cameron.
Una mujer con un objetivo en sí.
Destruir todo lo que haya a su paso que se
interponga entre ella y su objetivo. Él.
La noche ha llegado y por tercera vez en el día el
matrimonio Danielson se vuelve uno, entregándose
amándose.
Ellos se están amando.
Ella está pensando su primer paso.
183
Sonríe.
Se acerca a la cama y con besos y caricias
empieza a despertarla.
—Despierta pequeña, anda —susurra muy bajito
en su cuello, aspirando su olor.
Con pereza estira los brazos y de a poco va
abriendo los ojos.
Sonríe.
—Buen día mi amor —susurra en voz baja —.
¿Ya te vas? —pregunta haciendo un puchero
adorable.
—No aún cariño, me queda un poco de tiempo,
por eso he venido a despertarte para que
desayunemos juntos y porque antes de irme quería
ver tus preciosos ojos.
—Pues vamos que esperamos —se incorpora en
la cama —. ¿Me pasas por favor mi camisón?
Cameron toma el camisón que siempre reposa
junto a la cama, se le queda observando.
—Usaras otra cosa encima de esto, es muy
revelador y…
184
—Sí, sí, sí —le interrumpe —. Usaré algo encima
¡Eres muy celoso!
—Solo cuido lo que es mío —frunce el ceño —.
Y tú eres mía pequeña.
A pesar de sus cambios constantes de humor y de
sus palabras firmes que para otros serían
advertencia, a ella le causa sonrojo y amor, esa
actitud le demuestra que ella realmente le importa y
le demuestra su amor hacia ella.
Juntos bajan a desayunar.
Pasado el desayuno es hora de que Cameron se
marche a su trabajo, se despiden uno del otro no sin
antes decirse cuanto se aman.
Melanie se queda observando por donde se
marcha Cameron y en su corazón hay un
presentimiento de que a partir de ese día las cosas
cambiarán.
185
hotel —Dice Allison sin una pizca de remordimiento
por sus crueles palabras, corta la conexión sin darle
tiempo a la chica de procesar lo que dijo esa mujer.
Allison se viste con un vestido rojo de una sola
manga y es larga, unos zapatos del mismo color y un
maquillaje muy bien elaborado, toma un bolso,
donde coloca sus pertenencias y las llaves y tarjetas
de la suite.
Se mira en el espejo y sonríe, mostrando su
perfecta hilera de impecables dientes blancos
formando una maquiavélica sonrisa.
—Vestida de rojo como ¡la sangre! —una
carcajada igual que de la bruja del cuento de
blancanieves sale de su garganta —. Mi color
favorito —sin más da la vuelta y sale de la suite
caminando con elegancia y porte digna de una
señorita de familia y una sonrisa capaz de conquista
a cualquier hombre.
186
para ella una segunda madre desde que su madre
murió en ese desgarrador accidente. Tristeza porque
la persona que la engendró la vendió como si de una
mercancía se tratase. Todo tiene causas y
consecuencias, contras y pros, pues sin ese trato
nunca hubiese conocido el maravilloso hombre que
es el magnate neoyorquino que tiene por esposo, lo
maravilloso que es vivir, compartir, estar casada con
él, ser su mujer. Sin ese trato jamás hubiese
conocido al amor de su vida.
Desde su celular el cual llevaba tiempo sin usar
marca aquellos números, suena y suena y nadie
contesta ya resignada a que no contestaran suena la
voz de aquel hombre.
—Melanie —la voz de Richard Walker suena
cargada de alegría, felicidad y tristeza con ápices de
melancolía.
Un silencio se forma en las dos líneas ningunos
de ellos habla sólo se escuchan las constantes
respiraciones y los dos fuertes nudos formados en la
garganta de las dos personas.
— ¡Papá! —habla bajito al tiempo de que las
lágrimas retenidas resbalan por las mejillas de
ambos.
187
—Mí niña —el sollozo sale de las profundidad de
la garganta de Richard.
La garganta de Melanie no retiene más los
sollozos y esto salen a relucir.
—Si papá soy yo. ¿Co… Cómo estás?
—Oh mi niña hermosa, ahora que te escucho
estoy bien —su llanto se escucha muy claro.
—Yo… siento no haberte llamado desde la última
vez, es que aún… yo no asimilo… —es
interrumpida por su padre.
— ¡Ssh! Lo sé mi niña —Richard llora aún más
fuerte. Deja caer su cabeza en el respaldar de su silla
ejecutiva —. Y no me cansaré de pedirte perdón, te
extraño hija.
—S… se me hace difícil, pero estoy segura que
algún día te perdonaré, yo también te extraño Papi
—dice —. Pero no todo es malo, amo a Cameron.
— ¡¿Cómo?! Pensé que lo odiabas.
—¡Sí! Es difícil de explicar —sorbe la nariz —
nunca sentí odio hacia él.
— ¿Te trata bien? —Richard deja salir de sus
labios la pregunta que se repite una y otra vez en su
188
memoria.
— ¡Excelente! Es un buen esposo —su corazón
palpita al hablar de él magnate.
— ¿Eso quiere decir que son un matrimonio en el
sentido de la palabra en general? —curiosea
Richard.
— ¡Papá! —Reprende Melanie —. No voy hablar
contigo de ese asunto.
—Está bien, descuida hija.
— ¿Cómo está mi nana? —pregunta Melanie.
—Está Extrañándote, la casa no es lo mismo sin
ti, las chicas van de vez en cuando pero se les nota
que te extrañan y Nick él está new york —hace un
resumen de cómo está la situación en Miami desde
su partida.
— ¡En New york! ¡¿Eso quiere decir que está
aquí?! —se sorprende.
—Sí, Noa, el hijo mayor de los Spencer ha
regresado y él siempre ha vivido en new york —
explica.
—El fin de semana lo conocí, en una gala
benéfica a la que mi esposo y yo asistimos.
189
—Ya no eres una niña. Solo hay que escucharte
como te refiere a Cameron ¡Tú esposo! ¿Sabes hija?
— toma un suspiro y gira en su ejecutiva
observando la ciudad desde el piso de presidencia de
su empresa —. Nunca imaginé escucharte hablar de
esposo y yo mismo te lleve aquello, aunque estés
feliz y enamorada eso no me quita por completo el
saber que yo prácticamente te vendí, ¿Qué hubiese
pasado si no hubiese sido Cameron quien hace el
trato conmigo? Si hubiese sido un…
—Tienes razón papá, pero ya lo hecho, hecho
está y no hay marcha atrás.
—Hija, ¿Qué ha pasado con tus estudios? —otra
cosa que preocupa a Richard, Melanie siempre tuvo
grandes metas y después de haberla casado eso lo
torturaba día a día el no saber si su niña continuaría
estudiando.
—Cam, contrató profesores particulares, he hizo
los arreglos para que al final solo asista al instituto a
tomar exámenes —su cara tiene una emocionante
sonrisa al recordar lo protector y celoso que es su
marido.
Richard suelta un suspiro de alivio.
190
—Era algo que me tenía muy preocupado, soy un
egoísta —sus ojos vuelven a llenarse de esa agua
salada.
—Ya Papi, tratemos de olvidar, aunque será
difícil pero nada es imposible —dice Melanie con
sabiduría.
No importa la edad para tener conocimiento y
saber que las cosas no siempre salen como las
personas la planean, que hay ocasiones que por más
joven que seas se debe actuar con madurez y es algo
que Melanie aprendió y pone en práctica.
En la oficina de Richard tocan la puerta.
—Adelante —la puerta se abre y por ella entra su
secretaria.
—Señor, es solo para avisarle que en cinco
minutos empieza su reunión —informa.
—Gracias, puede retirarse —la secretaria se
retira.
—Papi ve a tú reunión —le dice Melanie.
— ¿Me llamarás? ¿Puedo llamarte cuando desee
mí niña? —su desaparición es clara no quería volver
a pasar tiempo tan largo sin poder escuchar y saber
cómo está su hija.
191
—Claro pa, yo lo haré muy seguido —Suelta una
risita.
—Gracias, te quiero mucho hija, saludos a tu
marido —Se pone de pie.
—Yo también te quiero pa, de tu parte, adiós.
La llamada finaliza, y de la cocina sale Cristine.
—Señora —le llama y Melanie le mira mal.
—Cristine, te he dicho que no me llames señora,
mi nombre es Melanie —le regaña, la mujer mayor
se le sale un sonrojo.
—Se… Mel —Melanie sonríe —. Tus profesores
particulares llamaron para decir que no podrán darte
clases, porque hay reunión de maestros.
— ¡Oh! Bien. Entonces iré a visitar a mi Cam,
¿No es mala la idea cierto? —pregunta.
—No, claro que no, a mí niño le va a encantar —
le anima.
Melanie salta en su lugar y se encamina a las
escaleras no sin antes darle un beso a Cristine.
—Por favor Cristine, dile a los chicos que
prepare la camioneta, solo voy por mi bolso —Sin
192
más corre escaleras arriba.
193
—Mi amor —dice ella con una sonrisa como el
gato de Alicia en el país de las maravillas.
Cameron, se queda sin palabras, un dedo no lo
mueve, la pluma rueda de sus manos y poco a poco
va levantando la cabeza.
— ¡¿Qué diablos haces aquí?! —brama su voz es
tan fuerte que su secretaria quien estaba mirando la
situación brinda en su lugar y Allison se sorprende
pues hasta ella la asusta, pero no lo deja mostrar, ya
ese no es él mismo Cameron.
— ¿Cómo que hago? Vine a verte mi amor, te
extrañe, anda, se que tú igual —con pasos tranquilos
se acerca hasta el borde del escritorio de Cameron,
se encorva dejando a la vista sus senos.
—Retírate —ésta vez le habla a la secretaria, a
cual no duda en retirarse al ver la mirada de su jefe.
Al estar a solas Cameron se pone de pie.
—Vuelvo y te pregunto Allison, ¿Qué haces
aquí? —se dirige al mini bar que tiene en su oficina
y se sirve un trago de coñac, el cual bebe de golpe.
—Vine a recuperarte —la voz de Allison cambia
una de que no está jugando —. Sé que estás casado y
194
de verdad me hierve la sangre al saber que una perra
ocupa mí lugar —habla entre dientes.
Cameron gira de improvisto sobre su lugar
sobresaltando a Allison.
—No te permito que te refieras a mí mujer de esa
manera —Le grita en su cara —. Y ese lugar lo
perdiste, además estoy seguro que nunca fue para ti.
Una carcajada seca sale de la garganta de Allison.
—Cariño, yo soy tú mujer, se que nuestro amor
sigue vivo como hace unos años atrás y que es tan
fuerte que puede derribar las murallas del pasado y
del presente —se acerca con la intención de tocarle
el rostro y besarlo. Él la aparta.
— ¡¿Amor?! —ahora es Cameron quien ríe de
una manera seca —. Tú —la señala con odio —. No
sabes lo que es eso, estás loca, eso es estás loca,
lárgate de aquí.
La puerta se abre y por ella entra una sonriente
Melanie.
—Mi amor —su sonrisa se borra al ver la
expresión de Cameron y a la despampanante rubia
quien está al frente de su esposo.
Los dos pares de ojos voltean a verla.
195
— ¿Qué haces aquí Melanie? —la llama por su
nombre, lo que le indica que hay problemas.
—Solo vine para que comamos juntos —Le
explica.
—Vaya, vaya, aparte de zorra es sumisa —ironiza
Allison.
—Allison cállate—le ordena Cameron.
— ¿Se puede saber quién diablos eres tú? ¿Y qué
haces en la oficina de mí marido? —Melanie se le
acerca y la mira a los ojos no le da miedo y sus celos
son más al verla tan cerca de su esposo.
— ¡¿Tú marido?! —Se carcajea Allison —. Mi
amor, ¿Le dices tú o yo? —ésta vez su mira está en
Cameron, le toca la cara y eso le da una punzada de
celos y de dolor al corazón de Melanie al ver tanta
familiaridad.
— ¿Qué tiene que decirme ella, Cameron? —le
pregunta Melanie a su marido el cual no la mira
igual que en la mañana, lo que le confirma que se
acerca una gran tormenta para su matrimonio.
—Nada Melanie —se sirve otra copa.
—Mira zorrita yo soy…—empieza Allison.
196
— ¡Que te calles maldita sea! —Grita el hombre
entre de las dos mujeres tirando el vaso de cristal a
la pared haciendo que las mujeres salten en su lugar.
— ¿Por qué no dejas que termine Cameron? —
Melanie toma valor y se le para enfrente.
— ¡Porque no te importa Melanie! ¡No te metas
donde no te llaman! —Le grita a su esposa cegado
por la furia de recordar.
El corazón de Melanie lo acaba de lastimar su
esposo, no dándole su lugar delante de esa mujer que
la llama zorra.
—Bien —retrocede —. Yo me voy —la tristeza
es clara en sus ojos quiere llorar de rabia e
impotencia, pero no les dará el gusto a ninguno y
mucho menos a esa mujer que se ve que fue o es
importante para Cameron que de seguro es a causar
problemas por lo que está ahí en ese momento.
— Si, mejor vete que ¡Mi Amor! y yo tenemos
cosas que hablar y hacer —recalca la palabra mi
amor.
—Pero recuerda —Melanie no se deja vencer así
por así —. Él —señala al hombre que ama, pero con
él cual está muy enojada —. Es ¡Mi Marido! —le
muestra las alianzas.
197
—No por mucho querida —le amenaza.
—Eso ya lo veremos —Sale por la puerta.
Mientras va caminando muchos empleados la
saludan y ella les da una cálida sonrisa la cual no
llega a sus ojos el nudo que siente en su pecho es
enorme que siente que la ahoga.
Por otro lado en la oficina de Cameron el solo
mira a Allison. Maldita mujer es lo que piensa, por
su culpa él le ha gritado a su mujer.
Sin previo aviso la toma del brazo.
— ¡Loca del infierno! ¡Quiero que te largues de
mi vida y la de mi mujer y no vuelvas más! ¡Sólo
has venido a causar problemas!
Toma el pequeño bolso de mano de ella y la
arrastra fuera de su oficina ejerciendo fuerza en el
brazo de ella.
— ¡Jamás! ¡Me oyes! ¡Tú Cameron Danielson,
fuiste, eres y siempre serás mío! —sus palabras les
traen preocupación, todos en el pasillo los miran y se
dan cuenta porque la esposa del jefe salió tan deprisa
de esa oficina.
— ¡Lárgate! —le suelta el brazo gritándole.
198
La mayoría de los empleados saben quién es esa
mujer.
Cameron mira a su alrededor y se da cuenta de
las miradas.
— ¡A trabajar! —ordena y se da la vuelta
entrando en su oficina, batiendo la puerta.
—Solo viniste a causar problemas —masculla
entre dientes —. Mi pequeña —ahora si se acuerda
de Melanie.
199
Capítulo 14
200
Ahora decide llamar al escuadrón de seguridad.
—Soy Danielson —dice apenas se descuelga la
llamada.
—A sus órdenes señor —responde el chico al
cual Jack dejó a cargo de su seguridad.
—Necesito que me comunique con los hombres
que trajeron a mi señora a la empresa —ordena.
—En seguida —luego del hombre marcar unos
números le comunica con el guardaespaldas chofer
—. Señor.
— ¿Dónde están con la señora? —pregunta.
—Estamos frente a su empresa señor, estamos
esperando que la señora salga, para esperar sus
próximas órdenes.
Qué lío. Entonces Melanie no ha salido de las
instalaciones Danielson, es a la conclusión que llega.
—Necesito que la busquen en toda la empresa sin
hacer alboroto y por los alrededores, no está
conmigo.
—Como ordene —Es lo que responde el hombre.
201
Con zancadas agigantadas sale de su oficina y se
dirige a al ascensor privado, coloca el código y con
rapidez marca la planta de cámaras.
Al llegar al piso donde se encuentra están todos
los empleados, les dan un bienvenido señor, a pesar
del carácter tosco y rudo que Cameron tiene para los
negocios no es un jefe injusto y despiadado, solo le
gustan que lo respeten y hagan bien el trabajo.
—Necesito que me muestren las cámaras de
resección en la primera planta, las escaleras y los
ascensores, retrocediendo quince minutos —dice
observando su reloj.
—Enseguida señor —Rápidamente dos chicos
del departamento de cámaras se ponen a trabajar.
Cameron está desesperado por saber dónde está,
no se perdona no haberle dado su lugar y haberle
hablado de ese modo. Necesita pedirle perdón y
tenerla entre sus brazos para así poder estar tranquilo
y calmar sus demonios, solo ella puede lograr eso.
Pasado trece minutos mediante la cámara logra
ver una silueta igual que la de su esposa. Se queda
observando todos los movimientos que ella hace.
Sale del ascensor, se queda parada al pie de éste,
mira a resección y luego a la puerta de salida de
202
emergencias, cuando la recepcionista se distrae con
pasos acelerados se dirige a la puerta de atrás y
desaparece.
— ¡Las cámaras de atrás! ¡Ahora! —ordena el
desesperado hombre.
Los chicos que trabajan en los vídeos, muestran
rápidamente los vídeos de la parte de atrás de la
empresa.
Una apresurada mujer es mostrada saliendo de las
instalaciones y tomando un taxi.
— ¡Enfoquen al taxi! ¡Quiero las placas! —
ordena nuevamente.
Las teclas del teclado son tecleadas con
urgencias, pero aún así no se logra enfocar las placas
del taxi tomado por Melanie.
—Señor no se puede enfocar las placas.
—Apártate —le pide a uno de los chicos,
Cameron toma el lugar de este y él mismo trabaja en
la computadora con una mano, con la otra, le marca
a su esposa y nada —. ¡Maldita sea el ángulo no da!
—gruñe atemorizando a todo el personal que se
encuentra en la sala de cámaras.
203
De manera ruda se levanta de la silla giratoria,
toma su celular y marca una y otra vez el celular de
su esposa pero no suena, lo manda directo al buzón.
Maldice entre dientes y a grandes zancadas se dirige
al elevador que lo lleva a su oficina, dentro del
aparato mecánico les hace saber al equipo de
seguridad que apuren sus pasos para que estén de
manera inmediata en su oficina. A las puertas del
ascensor abrirse, Cameron sale rápidamente
dirigiéndose a su oficina si inmutarse en cómo los
empleados los miran, dándose cuenta de que el
magnate está más que enojado, furioso y les
confirma cuando al entrar estampa la puerta para que
se cierre.
En lo que el equipo de seguridad llega se encarga
de hacer una llama a un especialista en tecnología
amigo de este.
Después de unos minutos el equipo llega.
— ¿Venían matando hormigas o qué? Ya veo
porque mi esposa se les escapó —les dice con
rudeza, uno de los hombres vestidos de negro va a
protestar, pero un simple gesto de Cameron hace que
cierre la boca —. Quiero que recorran si es posible
la cuidad entera pero quiero a mi mujer devuelta
aquí conmigo, ¡Sin ella no vuelvan! —Sentencia —.
204
Yo intentaré rastrearla —Se les queda mirando —.
¡¿Qué demonios esperan para empezar?! ¡Ustedes
mismo dividanse en grupos! ¡Quiero resultados
pronto!
Todos y cada uno de los chicos se retiran de la
oficina e iniciaron a buscar a la Señora Danielson.
205
—Nick —su voz sale ronca.
El joven gira sobre su talones su expresión es de
asombro y tristeza al recordar que cuando estaba a
punto de que ella fuera su novia ella ya estaba
comprometida.
—Melanie —dice en un susurro.
La susodicha va acercándose hasta estar frente
aquel chico, que aunque ambos tenían planes
diferentes más que una simple amistad lo considera
su mejor amigo.
Nick se percata de lo rastros de lágrima que hay
en la hermosa cara de Melanie.
—Estuviste llorando —no es una pregunta, la
preocupación es notable.
—Señora Danielson —la voz de Noa Spencer
hace que los ojos de ella miren a otro lado hacia la
cara de quien acaba de romper una tensión —.
¿Cómo está?
—Noa —le regala una sonrisa débil —. Estoy
bien, ¿Usted?
—Todo bien, ¿Su esposo? —la expresión de
Melanie cambia al mencionarlo y sus ojos se
206
cristalizan al recordar la manera en la que su amado
esposo la trató.
—Eh —se aclara la garganta —Está muy bien —
le sonríe de manera débil.
Nick traga sonoramente saliva.
Melanie le voltea a ver.
—Nick —los ojos de Melanie, ahora miran a un
incomodo Nick —. ¿Podemos hablar? Por favor.
—Yo… Melanie no creo que…
—Por favor —le vuelve a pedir.
—Este… yo los dejo —habla Noa —. Men, te
veo en casa, ¿Está bien?
—Está bien hermano —dice Nick.
Noa se despide de manera caballerosa de
Melanie, depositando un beso en el dorso de su
mano, las compras que estaban haciendo Noa se
encarga de llevársela.
Nick y Melanie se dirigen al área de heladería,
toman haciendo después de pedir un delicioso
helado con los aperitivos deseados.
207
—Yo… solo…—Melanie inicia la conversación
—. Al punto, quiero volver a tener, a recuperar a mi
mejor amigo.
—Ahí está el problema Mel, que yo casi nunca te
vi como mi mejor amiga —Le mira a los ojos —.
Para mí, eras esa chica a la que quería para mi novia,
llegue a planear una vida contigo.
Una lágrima solitaria roda por la mejilla de
Melanie, con sumo cuidado y delicadeza Nick con
su pulgar la retira.
—Hey, no tienes porque llorar —ella baja la
cabeza pero Nick se la levanta.
—Me siento tan culpable, se que yo tuve culpa,
pues nunca puse un stop a nuestra forma de darnos
afecto —solloza. Nick baja la cabeza y ella toca su
mano —. Llegué a creer que tú y yo podíamos tener
un noviazgo, me sentía atraída por ti, pero llegó
ca…
—Llegó tu esposo, un esposo que aunque me
haga mil ideas en la cabeza no entiendo como lo
tienes, Mel, nunca vi en tu dedo hasta ahora un
anillo de compromiso, no me explicó como esto
nunca lo supo la prensa amarilla —toma un respiro y
se recuesta en el espaldar de la silla —. ¡Por Dios!
208
Cameron Danielson es el magnate neoyorquino más
poderoso del mundo, está entre los hombres más
ricos del mundo.
Una risilla sale da la garganta de Melanie.
—Veo que lo investigaste bien.
—Mel no estoy relajando — la seriedad del
rostro de Nick, hace que la actitud de Melanie
cambie —. ¿Me vas a decir la verdad?
— ¿Q… qué verdad? —las palabras salen
trabadas de su garganta.
—Está bien —suspira resignado, pues sabe que
Melanie no le dirá nada —. Dime algo, ¿Eres feliz?
Una expresión de felicidad y tristeza se forma en
el rostro de Melanie.
—Soy feliz, muy feliz —sonríe con sinceridad al
recordar los maravillosos momentos que ha vivido
con su esposo —. Pero como todo matrimonio
tenemos problemas.
—Me alegra que seas feliz Mel —dice Nick con
sinceridad —. Promete que me buscarás si necesitas
cualquier cosa, te dejaré mi número y dirección.
Pero hoy te veo muy triste, ¿Qué sucede?
209
—Solo son problemas matrimoniales —le resta
importancia.
—Mel te conozco tanto y estoy seguro que va
más allá, pero está bien no insistiré más.
—Gracias Nick —Suspira —. ¿Sabes? Siento
como si a mí matrimonio se avecina una gran
tormenta, una la cual si es que sucede y no son
paranoias mías lucharé, porque lo amo —dice
Melanie confesando parte de su preocupación.
—Si lo amas lucha, yo te apoyaré, sabes en un
principio me sentí mal al enterarme de tu
matrimonio, pero ahora que sé que eres feliz, yo
también lo soy y aquí —se señala a sí mismo —.
Está tu amigo de nuevo.
Con rapidez impresionante Melanie se para de la
mesa y corre a abrazar a Nick.
—Gracias, gracias, te extrañé mucho.
—Yo también.
La pareja de amigos siguen conversando y el
tiempo pasando, tanto que sin percatarse empieza a
oscurecer.
—Mel, me tengo que ir, vamos primero a llevarte
a casa —dice Nick levantándose de la silla y
210
revisando su reloj.
—No Nick, yo me iré sola.
—De ninguna manera.
—Nick por favor, estaré bien —la principal razón
por la cual Melanie no desea aceptar que la lleva es
porque Cameron se pondrá celoso.
—Mel segura, mira mi número de celular es el
mismo no dudes en llamarme si lo necesitas o deseas
—también le da su dirección.
—Está bien, cuídate —le da un beso en las
mejillas y un abrazo el cual es respondido.
—Cuídate tú.
Primero se retira Nick después de haber pagado
la cuenta y luego Melanie, la cual no encuentra un
taxi vacío por lo cual decide caminar esta una
estación de taxi que hay unas pocas cuadras.
Mientras camina piensa que desde que salió de las
instalaciones del corporation Danielson no ha vuelto
a encender su celular, cosa que como resultado
tendrá un sin número de llamadas de su esposo y
también está segura que intento rastrearla, suspira,
furioso está.
211
Cuando se viene a percatar casi ha llegado a la
estación de taxis, solo le queda cruzar ese callejón y
listo, un callejón bastante deteriorado.
—Miren nada más, una pequeña princesa.
Un grupo de hombres rodean a Melanie y la van
adentrando intimidándola poco a poco al mugriento
callejón.
— ¿Q… qué qu… ieren? —un temblor se
apodera de todo el cuerpo de Melanie al fijarse en
los 4 individuos con un olor desagradable a alcohol
y cigarrillo vestidos de negro que la observan como
si fuese un pedazo de carne.
Una desagradable carcajada brota de las
gargantas de los individuos.
—Pequeña princesa hermosa —él que al parecer
es el líder de la pandilla se acerca a ella y del
cigarrillo que lleva fumando le sopla el humo en su
cara provocando una tos en ella otro toma su pelo y
lo huele y los otros dos les tocan sus brazos —.
Queremos mucha cosas como puedes ver.
—P… por favor… no me… ha… hagan daño.
—No te vamos a hacer daño —habla de nuevo él
mismo hombre —. Te prometo que lo vas a disfrutar.
212
— ¿Q… qué…qui… eren? ¿Di… ne… ro?…yo
se los doy… Pe… ro por fa… vor no me ha… gan…
daño— el miedo es que tan grande que no le permite
hablar con coherencia.
—Ssh, no será daño y por lo visto —él hombre
toca sus argollas matrimoniales —. No solo nos
divertiremos, sino que sacaremos mucho de esto.
Los 4 se ríen y es cuando Melanie empieza a
patalear y a pedir ayuda.
— ¡Ayuda! ¡Ayuda! —sus lágrimas salen sin
control.
— ¡Maldita perra, vas a aprender a respetar! —
dos hombres la sujetan y otro la toma por el cuero
cabelludo, el líder levanta su mano y con la otra le
aprieta uno de los senos a Melanie hasta provocarle
dolor.
Cuando el delincuente líder de la pandilla está a
punto de golpearla, una voz cargada de enojo, ira,
impotencia lo detiene.
—Un movimiento más y estás muerto tú y los
perros que te acompañan, hijo de perra —dice
Cameron con fuerza y ronques por la ira.
213
Los cuatros bandidos, aflojan su maltrato a
Melanie y ponen toda su atención al intimidante
hombre frente a ellos rodeado por un grupo de
guardaespaldas de cuatro hombres.
—Oigan, ésta chica es nuestra así que vayan y
busquen otra, nosotros nos divertiremos.
Tres de los bandidos se dirigen había Melanie y
él que hasta ahora ha hablado cuando pretendía
voltear es frenado por un fuerte pero muy fuerte
derechazo del magnate neoyorquino.
—Te divertirás pero en el infierno hijo de perra
—patada tras puñetazo es dado al cuerpo del
desgraciado.
Los guardaespaldas atrapan a los otros tres
quienes pretendían tocar a Melanie.
La susodicha se deja caer al mugriento suelo en
un mar de lágrimas. Voltea a observar a su hombre
él cual está irreconocible, una vena resalta en su
frente, sus músculos tensos y su rostro contraído por
la ira.
—Cam, Cameron por favor —pide entre llanto
—. Para, no te ensucies las manos con él.
214
El poderoso magnate se detiene de la golpiza que
le propina al bandido. Lo observa, su rostros esta
desfigurado y se retuerce del dolor, observa a su
alrededor y los otros tienen unos golpes pero no
tanto con él que parece ser el líder, sonríe pero es
una cruel, pues no están como le gustaría que estén
por haber intentado maltratar a su mujer, por
simplemente mirarla. Finalmente su mirada recae en
el cuerpo temblorosa que se encuentra acogido en el
piso llorando. Eso le da más ira y a zancadas se
dirige a este y lo toma en sus brazos.
Con su mujer en brazos empieza a salir del
callejón y se dirige a su auto.
—Quiero que llamen a la policía, el peso de la
ley debe caer sobre ellos, para que jamás se les
vuelva ni siquiera volver a mirar mal a una mujer
entendido —ordena.
Sigue su caminar e ingresa a la jipeta.
A los pocos minutos dos patrullas de policía
llegan y apresan a los bandidos, la prensa estaba ahí
pero todo se maneja con discreción, los vidrios
polarizados no permiten identificar a la pareja que
está dentro de la camioneta aparcada delante.
215
La furia de Cameron aún no se aplaca pero en ese
momento sólo se dedica a consolar a su temblorosa
esposa. Más tarde hablaran.
Besos.
Mariana
216
Capítulo 15
Melanie.
Aún tiemblo. Tengo miedo. Esos hombres iban a
abusar de mí, si Cameron no llegaba o alguien más.
Pero aquí está, él, mi amado esposo, no olvido lo
que pasó hace unas horas en su oficina, me duelen
sus palabras., pero ahora lo que necesito son sus
brazos protectores.
Me duelen mis brazos, creo que esos malditos
dejaron marcas en mis brazos y aquel desgraciado
líder en mi seno, me duele.
Mis lágrimas aún salen.
Siento los brazos de mi esposo tensos alrededor
de mi cuerpo, pero suaves a la vez, no habla y
respira agitado, se que está muy enojado.
Observo por los vidrios polarizados como los
guardaespaldas dan declaraciones y hablan con el
policía a cargo de la investigación, supongo que
todo se hará tranquilo sin que los medios se enteren.
De un momento a otro la yipeta donde nos
encontramos se encuentra rodeada de reporteros
217
queriendo sacar información de quienes son las
personas dentro. Escucho a mi marido gruñir. Veo
como los chicos de seguridad alejan y protegen las
placas de ambas jeepetas.
En pocos segundos siento como el vehículo se
mueve en la parte delantera, indicando que nuevas
persona están en el.
Mis lágrimas se calman un poco al momento de
que enciende el vehículo y éste se empieza a alejar
de ese horrendo callejón donde hasta ahora pasé el
susto más grande de mi vida.
218
chicos de seguridad abre la puerta principal de la
casa, al adentrarnos veo muchos aparatos
electrónicos en la sala de estar he de suponer que por
medios de estos fue que Cameron dio con mi
paradero.
Una muy angustiada Cristine sale por las puertas
que conducen a la cocina y rápidamente se lleva las
manos al pecho intenta acercarse pero un
movimiento de la mano de mi esposo le impide
continuar, por lo que parece comprender que él no
está en condiciones de hablar y mucho menos yo.
El cuerpo de Cameron se gira, empieza el camino
hacia las escaleras la cual la sube de manera natural
sin ser lento pero tampoco rápido, en pocos minutos
estamos en nuestra habitación.
Cameron puede ser un hombre frío, distante,
despiadado, pero conmigo es diferente aún estando
enojado me trata con sumo cuidado.
Me deja de pie delante de la cama.
Lo veo ir al baño mientras se despoja de su saco
y arremanga su camisa dejando ver lo fuerte de sus
antebrazos, al poco tiempo desaparece de mi campo
de vista y escucho el agua de la llave sonar. Escucho
sus pasos y en un pestañear aparece nuevamente en
219
mi campo de visión. Se acerca a mí con su
semblante frío, lo observo pero él no a mí, sé que
está enojado pero yo también.
Dejo de pensar cuando siento que quita mi
chaqueta, luego mis zapatos, mis jean, mi camiseta
de tirantes, retiran mi sostén, reprimió un quejido de
dolor al sentir el dolor en mi seno y nuevamente mis
ojos se llenan de esa agua salada. Veo los puños de
mi marido apretados hasta el punto de que sus
nudillos pierden el color, sus ojos se dirigen a mis
brazos donde ya se empiezan a marcar los dedos de
esos hombres y mis lágrimas no se guardan solo
bajan y un sollozo sale de las profundidades de mi
garganta, los ojos de mi esposo están oscuro no digo
que es por el deseo estando yo solo con mis bragas
enfrente de él, pero no esa oscuridad es de ira lo
puedo notar aunque no niego que puede haber deseo.
Siento sus brazos rodearme y acariciar mi espalda
la cual queda tapada por mi larga cabellera castaña.
Poco a poco me voy calmando. Cameron es mi
calma.
Cuando siente que mi cuerpo está más relajado
sus dedos se dirigen al borde de mis bragas donde
termina de quitarlas y está caen al suelo. No siento
pudor tal vez si fuese delante de otra persona sí, pero
220
él es el amor de mi vida, él hombre de mi vida, el
hombre que conoce cada rincón de mi cuerpo.
Como si de una muñeca se tratará, me vuelve a
tomar en sus brazos y nos dirige al baño me deposita
en la tina la cual tiene mi jabón favorito pero es algo
en lo cual en éste momento no me interesa. Cierra la
llave. Empieza a desvestirse quedando desnudo ante
mí, debo de admitir que aún estando en mi condición
tenerlo desnudo sin un pedazo de tela provoca que
mi corazón lata y más cuando tan solo hace un día
me hizo suya en esta misma tina, me sonrojo de solo
verlo y recordar. Él parece saber lo que ha pasado
por mi mente pues veo un astibo de sonrisa y un
brillo en sus ojos relajando el semblante que tiene
desde que lo vio esta tarde.
Entra a la tina colocándose atrás de mi espalda,
toma la esponja y le coloca gel, empieza a lavar mi
cuerpo como si de porcelana se tratase. Cuando toca
mi seno lastimado un quejido sale desde lo más
profundo de mi garganta, duele mucho.
Detrás de mí siento el cuerpo de Cameron tensar
cada uno de sus músculos.
—Tenemos que hablar —Es la primera vez que
habla después de lo sucedido en aquel callejón.
221
—Lo sé —me limito a decir.
—Primero vamos a cambiarnos y ponerte una
pomada en los moretones que esos ¡hijos de perra te
hicieron! ¡Pero juro que les haré sus vidas una…! —
cada palabra salida de los labios de él, provocan
escalofríos.
— ¡Ssh! Ya pasó —trato de tranquilizarlo, pero
más bien trato de tranquilizarme yo, diento su
pesada respiración en mi nuca.
— ¡¿Y si no hubiera pasado?! —habla bajito,
pero es un susurro escalofriante, su respiración es
aún más pesada y me hago esa pregunta misma
pregunta si él no hubiera llegado… yo… yo
estuviera siendo violada, golpeada, el solo hecho de
pensarlo me da mucho miedo tanto que no me
percato de que me hago un ovillo—. Maldición —lo
escucho maldecir —. Ssh ya, estoy aquí, estás
conmigo, yo te protejo —me dice mientras me
acurruca entre sus fuertes brazos, mi lugar favorito.
Con cuidado me saca de la tina, guiándonos a
nuestra cama donde me deposita como si de un
cristal se trata, en la cama me hace sentar y empieza
a secar mi cuerpo con cuidado, delicadeza.
222
Camina y se adentra en el closet y de éste regresa
con unas de mis pijamas de algodón, la coloca sobre
el buró de la cama y se adentra nuevamente al baño,
a los pocos minutos sale de éste con un tipo de pote
blanco y redondo y unas pastillas en la mano. Se
acerca a mí, destapa el pote y empieza a colocar la
crema sobre mi seno y sobre mis brazos. A terminar
me da las pastillas a beber y coloca sobre mi cuerpo
la pijama.
Me recuesto sobre la cama y lo observo
cambiarse, su silencio y su pasmosa lentitud me
desespera, puedo escuchar prácticamente su cerebro
trabajar, pensando que cosa me dirá si gritarme.
Terminado de ponerse su pantalón de pijama y su
franela justo antes de que toquen a la puerta.
—Adelante —permite el paso y lo ronco de su
voz resuena por toda la estancia.
Con una charola con alimentos por la puerta de
nuestra habitación ingresa Cristine, la cual no dice
tampoco ninguna palabra solo me sonríe
cálidamente, da la vuelta y solo dice un audible
permiso al cual mi esposo solo responde con
asentimiento de cabeza, debo de confesar que
agradezco que todos mantengan el silencio y no
preguntar el porqué Cameron me traía en sus brazos
223
y porque yo estaba llorosa, pero también me molesta
y me pone nerviosa éste sepulcral silencio.
Gira sobre sus talones y mi mirada se concentra
en la suya la cual me mira con enojo y con amor y
preocupación en su rostro, una mezcla extraña lo sé.
Mis nervios no ayudan en nada, siento su mirada
penetrante y es algo que me pone sumamente
nerviosa, juego con mis dedos para tratar de calmar
la hacienda que me produce el momento.
—Vamos a cenar primero antes de que
entablemos nuestra conversación —Solo asiento.
Toma entre sus grandes manos la charola y se
dirige al borde de la cama, la coloca sobre mis
piernas y es cuando me percato de que han
preparado una sopa de pollo que huele muy bien con
porciones de víveres, dos platos.
Empezamos a cenar, lo único que se escucha es el
chocar de los platos con los cubiertos.
224
— ¿Qué estabas pensando? —Inicia.
Me quedo callada analizando, realmente sólo
pensaba en que mi esposo me ha ofendido delante de
una mujer que al parecer tuvo que ser o sigue siendo
alguien muy importante para él, pero a la vez
tampoco pensaba solo quería desahogarme.
—Realmente no lo sé, pensaba y no pensaba a la
vez —es lo que le puedo decir, no miento.
— ¿Estás consciente de lo que te pudo haber
pasado, Melanie? Y tú dices que pensabas y no
pensabas a la vez. Eso no concuerda, es estúpido —
sé que es estúpido, no tiene porque recordármelo.
Trago sonoramente.
—Sí, pero como te dije no pensaba, tampoco sé
lo que hacía.
—Eso no es respuesta Melanie, las cosas se
piensan no se puede andar por la vida haciendo las
cosas ¡A lo loco! —a esta altura su voz va subiendo.
— ¿Crees qué me desaparecí por esas horas
porque hago las cosas a lo loco como dices? ¡Yo me
fui de tu empresa porque en pocas palabras a mí no
me importaba lo que ocurría! —mi tono de voz
sobrepasa el de él.
225
— ¡No me grites! Esa no es la manera, debiste
esperar y no hablar cuando no se te pidió —otra vez
me habla mal y grita cuando me dice que no le grite.
— ¡¿Y cuál era la manera?! ¡Dime Cameron
Danielson! ¡¿Cuál?! ¡Esperar a que a esa como se le
llame, se le pegara la gana de dejar de insultarme y
seguir sin escuchar a mí esposo, el hombre él cual
me decía te amo horas, antes si defenderme y sin
darme mi lugar y aparte decir que no debo meterme
en lo que no me importa! —le grito.
— ¡Maldición! ¡Tal vez mi comportamiento no
fue el correcto! ¡Pero fuiste una total irresponsable,
eres mi esposa! ¡¿Cómo se te ocurre salir si
escoltas?! ¡A veces actúas como una niña!
— ¡Pues es lo que soy Danielson! ¡Sólo tengo 16
años, te casaste con esta niña! —Dos lágrimas
solitarias bajan por mi mejilla.
— ¡No llores! Perdón. Pero entiende Melanie
¡Pusiste tú vida en riesgo! —baja su tono de voz.
—Con simples palabras las cosas no se resuelven,
me duele que me trates así, que me digas niña
cuando he pasado por tantas cosas y he tenido que
afrontarlo y madurar antes de tiempo.
226
—Lo sé —Replica —. Sé que has pasado muchas
cosas al igual que yo, pero no debiste, ¿Sabes la
rabia que sentí al ver a esos cerdos como te
maltrataban? ¿Lo sabes? —interroga.
—No, no lo sé —Sollozo, ahora que hemos
dejado de gritar me armo de valor para preguntar.
— ¿Quién es ella? Alli… Allison, ¿Quién es? —
su rostro se desfigura.
—No es de tú incumbencia —Responde.
— ¿Te estás escuchado? otra vez me estas
insultando, ¿Porque no me quieres decir quién es
ella? ¿Qué es en tu vida? —siento que ésta mujer
será un gran problema.
— ¡No te lo voy a decir, pues no te importa! —
grita en colorido.
—Pues no me digas y déjame sola.
—Es mi habitación, aquí está mi mujer y no
pienso dormir en otra cama que no se en esa con mi
esposa —contraataca.
—Dices que soy tú mujer, tú esposa, pero no
cumples con los requisitos que se dan los esposos —
paso las sábanas por encima de mi cuerpo le doy la
espalda y cierro los ojos.
227
—Tú ropa olía a perfume de hombre, ¿Con quién
estabas? Y no es un perfume cualquiera tampoco es
el mío, ni de esos cerdos —puedo sentir la cólera
con la que están cargadas sus palabras.
—No te importa —respondo seca e igual.
A los pocos minutos escucho como el reloj de la
mesita de noche es lanzado con fuerza a la pared.
Cierro los ojos y le pido a Dios que me ayude a
llevar esto, poder manejarlo. Sé que vienen tiempos
difíciles.
228
Cameron.
Mi sangre arde, de solo imaginar que otro la
abrazó, la besó y… No maldición. Lo peor es que no
me quiere contestar a mi pregunta, simplemente me
da la espalda.
Veo los pedazos de vidrios de la rota lámpara
esparcidos por el piso y me vale.
La miro una vez más y salgo azotando la puerta
de la habitación. Rápidamente bajo las escaleras por
el camino me topo con Cristine quien me mira
interrogante le dedico una mira de que no debe
preguntar, no ahora.
Abro aquel par de puertas cafés y me adentro en
la habitación, un escritorio café gran tamaño no tan
en el centro, un gran ventanal que da al hermoso
jardín trasero de la casa, cabe destacar que los
cristales son blindados, una ejecutiva de cuero negra
del otro lado y al frente de esta dos butacas de
madera color café al igual que el escritorio, sus
asientos de cuero negro. A mi izquierda un
archivador personal que tengo y a mi derecha un
mini bar donde están las mejores bebidas, a mi
espalda una gigante pantalla la cual utilizo para
hacer conferencias desde aquí. Y éste es mi
229
despacho con un buen aire acondicionador el cual no
es tan necesario en estos tiempos.
Camino hasta el mini bar donde tomo una botella
de whisky y un vaso de cristal, con ambos en una
mano camino y me dirijo a mi ejecutiva en la cual
me siento y me sirvo el primer trago, lo bebo de
golpe dejando que ese líquido queme mi garganta,
dándome una sensación de ardor la cual se me hace
simplemente deliciosa.
Tomo otro y luego otro y así pasan hasta que me
percato de que la botella ya está más de la mitad
acabada, pero ni con todo el alcohol que hay en mi
sistema logro olvidar todo lo que ha pasado el día de
hoy, tengo suficiente resistencia al alcohol como
para no estar noqueado.
Primero esa maldita mujer, la cual tanto daño me
hizo, esa de la cual me enamoré como un bobo, pero
comprendo todo ahora era solo un adolescente, la
cual demostró comprensión cuando a tan corta edad
perdí a mis padres, la chica que se convirtió en mi
todo y al mismo tiempo me destruyó, esa mujer que
me convirtió en el ser frío que era con las mujeres…
la misma que provocó que tratara mal a la única
mujer que logró que mi atención hacia ella fuese
más allá de lo carnal, que mí corazón se acelerase
230
solo con verla, que con su sonrisa mi mundo tomara
color, a esa mujer que realmente logró entrar en lo
más profundo de mi ser, la mujer que ha logrado que
yo realmente, la ame, la amo y que tenga esta
certeza de que siempre será la dueña de mí ser, de
mí alma, de mí corazón. Allison me destruyo pero su
veneno también fue capaz de lograr que mis cenizas
resurjan de la tierra y ahora quiere volverlo a hacer,
está muy equivocada si piensa que se lo permitiré.
Luego mi pequeña desaparece y la encuentro en
aquel callejón de mala muerte, con el miedo
plantado en sus preciosos ojos, con aquellos hijos de
puta a punto de hacer más daño del cual le estaban
haciendo, pero si sus vidas eran tan miserables lo
que les queda será el mismísimo infierno y de eso
me encargaré yo, nadie le hace daño a lo más
importante de mi vida sin salir ileso, nadie le hace
daño a las personas de mi alrededor. Tampoco nadie
debería de agredir a una mujer.
Y para terminar de llevarme al colapso de mis
emociones aquel perfume, caro y varonil
impregnado en la ropa de mi mujer, aquello que está
haciendo que mi cabeza casi reviente, no quiero
pensar mal, pero mi cabeza me traiciona… Mel no
es así, me repito una y otra vez.
231
Mis pensamientos me han llevado tan lejos que
no me he percatado de que la botella a mi alrededor
está vacía, no sé qué hora es pero sé que es tarde no
se escucha ningún ruido símbolo de que los
empleados se han retirado a dormir la mayoría y que
solo están aquellos guardaespaldas que vigilan de
noche, aquellos que también son silenciosos, lo que
me hace pensar que ya son más de las doce de la
madrugada.
Me levanto estirando mis músculos y salgo del
despacho para caminar e ir apagando las luces
encendida, Cristine… esa mujer es una mujer a la
que considero una madre aunque nunca llegará a
penetrar tanto en mi corazón como esa señora con
ojos avellana que tanta falta me hacen.
Abro la puerta de la recámara que comparto con
mi esposa de manera sigilosa. Veo su pequeño
cuerpo tapado hasta debajo de sus pechos con los
brazos afuera donde aquellas malditas marcas de
esos hijos de puta ya son notables, aprieto mis puños
y tengo ganas de descargar toda mi furia contra ellos
y molerlos a golpes.
Alejo mis pensamientos asesinos y me quito mis
pantuflas, me introduzco en las sabanas y
rápidamente el delicado cuerpo de mí mujer busca
232
mi calor y yo no lo dudo en brindárselo, porque
también necesito su calor, con mis brazos atraigo su
cuerpo a mí, su cabeza se recuesta en mi pecho, su
pierna sube hasta estar encima de la mía, mi mano es
dirigida a su pequeña cintura y con la otra tomo su
mano y la beso, para a continuación buscar sus
labios los cuales le deposito un beso suave.
—Te amo pequeña —susurro besando su cabeza.
—Cam —murmura adormilada y pegándose más
a mi torso si es que es posible.
Sonrió como bobo porque hasta adormilada me
llama y eso mejora y calma mi tormenta interior.
Suspiro y el ajetreo de el día de hoy me pasa
factura llevándome a un profundo sueño, al lado de
por lo cual sin pensarlo daba, doy y daría mi vida.
Mí pequeña. Mi mujer.
233
camiseta blanca, donde ya me espera el desayuno
listo.
—Buen Día nana —saludo a Cristine la cual con
tan solo pisar la sala de comedor aparece en mi
campo de vista.
—Buen día mi niño, ¿Cómo están? —no duda en
preguntar, se que se refiere a la situación tan
estresante de ayer.
—Más o menos, Mel está descansando aún —
susurro sin querer alargar más la conversación sobre
ese tema.
— ¿Qué fue lo que ocurrió justamente? —
pregunta.
No quiero dar respuestas, pero Cristine es como
mi madre y confió plenamente en ella.
—Ya sabes lo que pasó en la principal de la
empresa —digo y asiente —. Me volví loco
buscándola, viste todo el desastre y el corre que
hubo aquí, al final todo valió la pena, la encontré —
aprieto mis puños —. La encontré en un mugriento
callejón, donde cuatro bastardo la iban a violar,
estaban lastimando a mi esposa, nana y yo juro que
los haré pedazos, sus vidas serán tan miserables que
desearán morir y no podrán porque yo… —callo,
234
cuando siento los brazos de mi nana a mi alrededor.
Al dejar de hablar es cuando me doy cuenta de que
mi voz era más elevada, mis manos ejercían y
ejercen fuerza sobre la tela del mantel y una de las
venas de mi frente late constantemente.
—Ya, ya pasó mi niño, ya todo está bien, la tienes
aquí —Es lo que necesitaba para calmarme —.
Ahora desayuna mí niño y luego cuando tú esposa
despierte le llevaré el desayuno.
Asiento cono niño pequeño. Empiezo a
desayunar escuchando los pasos de Cristine alejarse
de la estancia en la que me encuentro. Avanzo en mi
delicioso desayuno hoy llegaré tarde a la empresa y
puede que tal vez no valla, soy el dueño y me lo
puedo permitir.
El periódico se encuentra en mi costado
izquierdo, lo tomo y empiezo a hojearlo, mientras
que me tomo mi café. Después de un rato llego al
área de los espectáculos la cual no me interesa pero
al llegar rápidamente un collage de imágenes captan
mi atención. Mi mandíbula se tensa, mis músculos y
cada parte de mi cuerpo también, la tasa en mis
manos recibe y soporta la fuerza ejercida en ella,
mientras leo el titular del periódico.
235
“Melanie Walker de Danielson, se reencuentra
con su amigo el hijo menor de los dueños de las
empresas Spencer, Nick Spencer.
En fotos se le ve muy unidos y cariñosos en el
café ubicado justo al gran hotel que hay en central
park.
Abrazos, besos… “
Un sin número de estupideces más que solo
logran enfurecerme más de lo que estoy.
De un rápido movimiento y violento me retiro de
la silla provocando un fuerte sonido en la sala de
comedor, con la rabia a mil subo de tres en tres las
escaleras que me llevan al último piso.
Al llegar a nuestra habitación la abro y vuelvo a
cerrar de un fuerte portazo sin importarme en lo más
mínimo que Melanie se despierte. Me paro justo
enfrente de nuestra cama, cuando justamente ella
abre los ojos, lo lanzo sobre su cuerpo el estúpido
periódico.
—Página veinte y seis, ahora —me mira
asombrada intimidada, la entiendo en estos
momentos debo de intimidar a cualquiera, la cólera
recorre cada uno de mis sentidos.
236
—Cameron…—traga saliva de manera sonora la
puedo escuchar —. Yo puedo explicarlo
— ¡¿Qué diablos me vas a explicar?! ¡¿Eh?¡, que
mientras yo me desesperaba buscándote como loco,
mientras mis sentidos estaban dislocado, mientras no
pensaba con ellos y todos los de mi alrededor
soportaron ¡Mi mal humor!… Tú Melanie Walker,
estabas con ese maldito moco, muy tranquila en el
central park, tomados de la mano, dándose abrazos,
besos, caricias…
—Cameron…
— ¡No! ¡¿Qué más hicieron?! ¡¿Qué planearon?!
¡Irse a un hotel y…! —no término pues la mano de
ella se estampa contra mi rostro con fuerza.
— ¡¿A qué Cameron?! ¡Dime! —exige y es
cuando me doy cuenta que iba a decir algo que
realmente nos hubiera afectado a ambos —. ¡¿A
qué?! ¡¿A follar?! Eso ibas a decir verdad —está
frente a mí con postura amenazante.
—Yo… ¡Los malditos celos me matan Melanie!
¡Ese niño está enamorado de ti! ¡Te mira como yo
solo puedo mirarte, el quiere tenerte pero solo yo
puedo tenerte! —Con brusquedad la tomo de la
cintura y la pego a mí —. ¡Tu eres mi mujer y de
237
ninguno otro! ¡No te quiero cerca de él! —elevo mi
voz.
—Cam… me… —sus ojos me miran con miedo,
maldigo, pero no me detengo.
Estampó mis labios con fuerza sobre los de ella,
intenta apartarme, no se lo permito, adentro mi
lengua en su cavidad bucal y con firmes y violentas
lengüetazos reclamo la suya, está tensa, pero aún así
me la da y armamos una guerra de lengua por quien
se queda con el poder ninguno cedemos. Un gemido
de su parte, un gruñido de mi parte.
Con mis manos subo su pequeña franela de
pijama y el saco por encima de su cabeza
bruscamente, con mis dedos desaparezco el
estorboso mini pantalón de pijama y este cae al
suelo. La observo solo con su pequeña braga, su
cabello alborotado, sus labios hinchados y sus
pupilas ahora dilatadas le dan un aspecto salvaje el
cual amo.
Me quito mi camiseta, bajo mi pantalón y todo
con su escudriñisa mirada sobre mí. Ahora estamos
iguales.
La tumbo sobre la cama, con su cuerpo debajo
del mío con cuidado de no lastimarla con mi peso el
238
cual sostengo de mis codos.
Beso de nuevo sus adictivos labios, su sabor me
hace perder la cordura, sus gemidos y su voz son mi
música favorita, su piel es la suavidad que más amo,
su vagina y sus pechos son mi manjar favorito. Toda
ella es y será siempre mi postre, mi manjar favorito.
Bajo mis besos a su cuello. Por unos minutos
hago un patrón desde el valle de sus senos hasta su
clavícula, presiono mi erección aún cubierta por el
bóxer sobre la fina capa de tela de su braga, justo en
su botón. Gime. Me deleito.
Bajo a sus pechos y reparto besos por el
lastimado, verlo así por unos segundo me lleno de
ira, pero salgo de esta cuando la mano temblorosa de
mí mujer toma mi cabello entre sus manos y hace
que eleve mi vista a si cara.
—Con… Cuidado —dice agitada.
Solo asiento y devuelvo mi vista a su pecho,
reparto besos cuidadosos en él y siento como la
tensión de su cuerpo desaparece y su pezón se pone
duro y es cuando paso mi lengua en su aureola y
luego en la punta de su pezón. Se arquea. Gime
sonoramente. Y yo la torturo. Me colocó en una
posición cómoda para no dejar que mi peso caiga
239
por completo por su cuerpo y con mi mano libre con
las llemas de mis dedos torturo su otro erguido seno
y pezón, chupo, lamo, mordisco y beso sus senos,
con más cuidado en uno que en el otro.
Mis besos se concentran en su estómago ahora, y
luego bajo mi cara a su sexo y paso mi nariz por su
hendidura y aspiro su aroma, el cual es único, beso
su botón por encima de la tela de su braga, y mi
preciosa sólo puede gemir con mi tortura y sin
previo aviso, rompo su tanga y un grito de sorpresa
escapa de su garganta.
Con ella desnuda sobre mi cama, sus gemidos
llenando mis oídos en combinación con mi
respiración agitada, se siente cada vez más y más
nuestra tensión sexual.
La miro a los ojos y su boca está entreabierta, sus
manos empuñan con fuerza las sabanas y sus pechos
suben y bajan al compás de su respiración.
Mi pene está por explorar en la tela de mi bóxer,
está latente y loco porque lo hunda en la vagina de
mi mujer.
Subo y beso sus labios entreabiertos,
colocándome en medio de sus piernas las cuales las
abre más para mí, adentro mi lengua nuevamente en
240
su boca y con mi mano derecha, tomo su clítoris
entre mis dedos y sus gemidos se ahogan en mi
boca. Joder el amo.
De manera rápida mi cara está entre sus piernas,
paso mi lengua perezosa, deleitándome con sus
fluidos y el sabor de estos que sinceramente es el
más rico que he probado nunca, chupo sus labios
mayores, los muerdo, lamo su clítoris, lo chupo con
fuerza dándole pequeñas mordida y apretándolo
entre mis labios, Mel se arquea, dándome más
acceso a su vagina, hago un camino desde su
hendidura hasta el hueso pélvico.
—Cam… por favor —ruega.
— ¿Por favor qué, nena? —me divierto.
—Idiota —esa boca, el chupo fuerte, y grita.
A esta altura los empleados deben de saber que
estoy cogiendo o a punto de coger con mi mujer.
Cuando veo que es suficiente, bajo mi bóxer y
libero a mí amigo.
Empiezo a pasar el grosor de mi pene por su
humedad y la observó retorcerse y morder sus labios
y es cuando empieza a mover sus cadera al son de
los círculos que trazo con mi pene.
241
Cuando empiezo a acelerar mis movimientos, ella
empuja sus caderas buscando más y es cuando de un
empellón la penetro hasta el fondo, haciendo que
grite de la sorpresa.
—Eres un bruto —dice mientras me quedo
quieto.
— ¿Bruto? Te demostraré lo bruto que soy nena
—y empiezo a moverme, saliendo lento hasta dejar
solo la punta adentro y enterrándose de golpe en su
interior, sus gemidos son puros aullidos, su rostro se
descompone de placer y mis gruñidos son más
graves al sentir su estrechez, su calidez, como sus
músculos vaginales se adhiere a mí, solo a mí.
Aumento el ritmo de mis caderas y
sorprendentemente, me sigue con sus caderas, ladeó
la cabeza y veo el maldito periodo y mi furia vuelve.
La penetro de forma violenta y es cuando se queja.
—Me estás… las… timando —bajo un poco.
La dejaré como coladera, cada vez que se siente
sentirá ese dolorcito le recordara que yo soy su
dueño, su marido, el hombre que la ama.
Salgo de su interior, por completo, la tomo del
brazo y la hago ponerse en cuatro patas, se tensa.
242
—Cameron no…
—Tranquila pequeña, aún no te cogeré por el
culo, pero juro que lo haré —sin más azoto sus
nalgas y da gritos, los cuales aprovechó y la
embisto.
—Eres mía, ¿Lo sabes? —preguntó y ordeno.
Tomo un puñado de cabello entre mis manos y la
halo poniéndola en posición de cobra —. Dime —la
penetro fuerte, haciendo que su cuerpo rebote y
maldición nunca me había sentido tan pleno con una
mujer que como con ella.
—Sí —chilla.
—Tócate —tomo su mano y la guio a su clítoris
—hazlo.
Me obedece y empieza a tocarse, mi excitación
aumenta y mi macho Alfa se enorgullece al saber
que soy solo yo.
Sigo penetrándola con fuerza, sin hacer daño pero
siendo rudo.
Sus gemidos son aullidos y mis gruñidos son
guturales.
—Te amo —digo y siento sus paredes apretarme,
está casi al estallar y yo también, acelero el ritmo de
243
mis caderas.
—Yo te amo —me dice agitada y su cuerpo
empieza a temblar.
Le doy la vuelta sin salirme de su interior y
continúo penetrándola con mis ojos fijos en los de
ella.
La beso y siendo sus fluidos derramarse en mi y
sus paredes apretarme hasta el punto de hacer que
me venga en ella, en su interior llenándola de mi
esencia, y quedado demostrado que es mía una vez
más.
Me dejo caer en su pecho y me siento nuevo, este
es mi lugar, con el amor de mi vida.
244
Capítulo 17
Melanie.
Soy una idiota, ¿cómo pude dejarme llevar y caer
tan fácil en sus brazos? Es que es difícil, cuando se
ama como lo amo, se pierde la razón con solo
tenerlo cerca, con solo sus besos que hacen que
pierda la cordura, con sus caricias veo el cielo y la
forma en la que me hace suya, me hace sentir de una
manera inexplicable, me hace ver las estrellas, me
sube al cielo y a la misma vez me baja al infierno.
Aún está entre mis piernas con su miembro en mi
interior, su cabeza recostada en mi pecho, sin
lastimarme y sus brazos a cada lado de mi cuerpo.
Lo observo y es un gigante en comparación
conmigo, su respiración es regular. Acaricio su
cabello negro como la noche y decido explicar la
situación.
—Lo encontré por casualidad en el supermercado
—siento como todos los músculos de su cuerpo se
contraen, hace el intento de levantar la cabeza para
mirarme, pero no se lo permito —. No, no vayas a
protestar, déjame hablar —termina obedeciéndome a
regañadientes —. Quería arreglar las cosas con él.
245
Me lastimaba estar así con mi mejor amigo desde
pequeña, hablamos, y no te niego que tenía
sentimientos por mí, él a mí me atraía, pero eso ya
pasó, está diferente, creo que está enamorado,
arreglamos nuestras diferencias, aunque algunas
cosas de nuestro matrimonio no les quedan claras,
como a todas las personas que conocen nuestra
situación.
—No tiene porque quedarle claro nada, ni a él, ni
a nadie —la gravedad de su voz y la vibración de su
pecho, manda electricidad a todo mi ser.
—Sabes que eso no es respuesta para los
cuestionarios de preguntas que tienen nuestras
amistades —digo y paso mi mano por su ancha
espalda —. Y aún así, esas malditas fotos sin son
reales, pero los estúpidos comentarios son una
exageración por completo.
—Tal vez exageren, ¿Pero por qué tuviste que
abrazarlo? —levanta el rostro y se acomoda sobre
mi cuerpo de manera que nuestros rostro quedan
frente a frente. Reprimo un gemido cuando vuelve a
moverse, muerdo mi labio con fuerza.
—Cameron —susurro con mi respiración agitada
—. No se te olvide que aún estás dentro de mí.
246
—Perdón —su cara se destensa y una pícara
sonrisa aparece en ella —. Te tomaría de nuevo,
pero no has desayunado y tienes que reponer
fuerzas.
Con lentitud y tortura sale de mí y es cuando
siento un dolorcito en mi vagina.
—Eres un bruto —me mira y sonríe —. ¡No te
rías! por tú culpa no podré sentarme bien.
—Pasará, solo me dejé llevar por las ganas, el
deseo y la furia que sentía.
—No puedes actuar así, Cameron —lo miro seria
y él también a mí, ya no hay esa pizca de diversión y
perversidad —. Yo tengo derecho a tener amigos,
como tu amigas, en no siendo como la tal Allison,
todo estará bien
Su cuerpo se tensa.
— ¡¿Eso quiere decir, que tengo que aceptar que
él amigo de mi mujer me la quiera quitar?! Y lo de
Allison es otro asunto —se baja de encima de mí y
se sienta en el borde de la cama con todo su
esplendor de desnudes frente a mis ojos.
—Te dije que esos sentimientos que Nick tenía ya
no existen, y Allison es el mismo asunto. Esa mujer
247
está loca por ti, tú me puedes reclamar pero yo a ti
no —me levanto y me molesta más mi vagina, es un
animal.
Dejo la sábana en la cama, no me cubro, vamos a
ver. Me agacho para tomar mi pijama, siento su
mirada quemarme.
—El tema de Allison es algo que me incumbe
solo a mí —me levanto con la pijama en manos y
bajo su atenta mirada comienzo a colocarla en mi
cuerpo, de la manera más sensual y provocativa que
pueda hacerlo sin que sepa que esa es mi intensión.
— ¿Solo asunto tuyo? —río sin gracia y continuo
en mi labor —. Ella no parece pensar lo mismo —
término y lo miro de arriba hacia abajo y sonrío
internamente al notar que mi plan funcionó, su
erección está potente —. Me lo dejó muy claro el día
de ayer, ella te quiere para ella y tú y yo somos un
matrimonio —nos señalo a ambos —. Por lo tanto
los problemas de cada uno afectan al otro.
—No tienen porque afectarte —su voz es más
ronca, está excitado —. Es algo que resolveré.
— ¿Mientras tanto qué? ¿Me quedo observando
como ella destruye mí matrimonio e intenta
quitarme a mí marido? —me acerco.
248
—No va a destruir nada, ni me va alejar de ti —
intenta besarme pero lo rechazo.
—Eso lo dices ahora, pero vi tu expresión ayer en
esa oficina, esa mujer te afecta más de lo que tú
crees y yo puedo ver —un nudo se forma en mi
garganta y quiero llorar, temo que ella me lo quite.
— ¡Que no me afecta! —me grita y doy un
respingo, su altura, porte y voz me intimidan, no se
lo demuestro debo ser fuerte —. Pero en cambio ese
niño si te afecta a ti si no, no hubieras hecho el
intento de hablar con él.
—Sabes que no es cierto, sólo estás buscando la
manera de desviar las cosas, ¡¿Pero sabes qué?!
¡Piensa lo quieras! —aprieto los dientes.
— ¡No te quiero cerca de él! —me dice en tono
de advertencia.
—No eres quien para prohibirme nada en estos
momentos —contraataco.
—Soy tu marido y puedo hacerlo.
—Oh —me acerco y empiezo a tocarlo, su rostro,
su cuello todo con sensualidad, su pecho, sus tetillas,
pectorales, torso, abdomen hasta llegar a mí objetivo
su gran erección, la tomo en mis manos, está
249
caliente y palpitante, dura, me muerdo el labio con
picardía y empiezo a acariciarlo de arriba abajo
moviendo su piel, disfruto ver su rostro de placer y
los sonidos que emite de su garganta, confieso que
me humedezco de solo escucharlo y tocarlo —. Pues
quiero que me digas, ¿Quién es esa mujer? —exijo y
no dejo de masturbarlo, su miembro es muy grande
en comparación con mis manos.
—No —ruge para luego dejar escapar un gruñido
de placer.
—Pues entonces —toco sus testículos —. No me
exijas nada, y ten la certeza de que no dejaré de
hablar con Nick —me pongo de puntitas y rozo sus
labios con los míos, los busca ansioso, le permito
besarme, pues se inclina y no tengo que estar de
puntas, dejo de besarlo y llevo mis labios al lóbulo
de su oreja tiro de este para luego susurrar —.
Nunca —suelto su erección de golpe —. Ahora —le
señalo el pene —. Resuélvetelo solo.
Sin más me alejó de él, lo miro y veo la
frustración en su mirada por no acabar, me río y me
doy la vuelta caminando hacia la puerta.
—Melanie, ven acá.
250
Lo escucho llamarme y me río, sigo mi camino y
al llegar a la puerta me detengo y es cuando le tiro
un beso y maldice.
—Yo también te amo cariño.
Bajo las escaleras rápidamente, me dirijo a la
cocina, donde me encuentro con Cristine dándoles
órdenes a las chicas de servicios.
—Buen día —saludo, caminando justo al centro
de ésta.
—Buen día señora —responde las chicas y
Cristine me saluda con un buen día, para después
depositar un beso en mi mejilla.
—Ven —toma mi mano y me dirige al comedor
de la cocina —. ¿Cómo te sientes? —pregunta
después de que nos hemos sentado.
—Estoy bien, gracias por preocuparte —le
tranquilo con una sonrisa, aunque mi mayor
preocupación es esa mujer.
—Me alegra mucho —me observa atentamente
—. Sé que no me estás diciendo todo, pero
comprendo que hay asuntos matrimoniales que uno
no divulga.
Suspiro sonoramente y digo:
251
—Gracias por comprender.
—No es nada —le resta importancia, lo mismo
quisiera hacer —. Te serviré un sustancioso
desayuno, tienes que comer bien y no quiero ver a
mí niño con preocupación por tú alimentación.
Miro mis brazos y suerte que antes de bajar logre
colocarme una bata por encima de mi pijama de
shorts.
Cristine aparece delante de mí con un rico
desayuno, tanto de apariencia como de vitaminas.
—Muchas gracias —agradezco tomando los
cubiertos y empezando a ingerir —Ummm—gimo
de la delicia y placer de lo que como —. Está muy
rico.
—Me alegra que te haya gustado —me da una
sonrisa cálida, la cual me recuerda a mí nana,
rápidamente la recuerdo y mi cara se pone triste.
— ¿Qué sucede, Melanie? —interroga Cristine
preocupada.
—No es nada, solo que me recuerdas tanto a mí
nana —suspiro de manera triste.
—Oh, querida no te pongas así, puede que mi
niño te lleve a verla pronto o que ella venga aquí —
252
me trata de consolar y realmente lo logra sus
palabras calman un poco la opresión en mi pecho —.
¿Cómo es ella? Pero no dejes de Alimentarte.
—Ella es —Ingiero un nuevo bocado de mi
desayuno y pienso Amalia tiene tantas cualidades
—. Es muy linda, amable, cariñosa, muy buena
compañía, es… es realmente, Cristine no se cómo
describirla son tantas sus cualidades que desarman
de amor a las personas a su alrededor.
—Oh ya entiendo —me mira —. Confieso que
hasta siento celos.
—No tienes porque. Tú te has ganado un lugar
muy especial en mi corazón, es solo que la extraño y
a mi padre —bajo la cabeza triste.
—Hey, no hagas eso, las cosas se solucionaran y
podrás verles de acuerdo —asiento ——. Ahora
desayuna, no quiero ver nada en ese plato.
Le dedico una sonrisa sincera y continuo
desayunando.
253
oscuro y su cabello perfectamente peinado, como me
pone.
Muerdo mi labio y recuerdo que aún estamos
enojados, cruzada de brazos digo:
—Pensé que no irías hoy a trabajar.
—También creía lo mismo —dice parándose
enfrente de mí —. Pero cierta mujer me hizo perder
la paciencia —me manda una indirecta.
—Ah, pues mira, yo conozco esa mujer —arqueo
una ceja —. Y según ella solo quiso aclarar y saber,
pero el marido es un total imbécil, no entiende.
Su rostro se pone rojo y reprimo la carcajada que
quiere salir de lo más profundo de mi garganta.
— ¿Me estás llamando imbécil? —Se acerca más
—. Dígale a esa mujer que controle ese lenguaje,
sino su marido puede que le enseñe unos cuantos
modales de forma dura, muy dura.
¡Oh Dios! siento que me acaloro, hace calor.
—Este, yo… le diré.
—Eso me parece muy bien —toma mi cintura y
me pega a su cuerpo —. Ya me tengo que ir —
acaricia mi nariz con la suya —. Pórtate bien y no
254
salgas sin guardaespaldas —roza mis labios con los
suyo y ya voy olvidando que no hace más de una
hora estábamos discutiendo —. Deje las cremas y
unos ibuprofenos para el dolor de tu seno —se
acerca a mi oreja —. Y también para que puedas
sentarte bien.
Mis mejillas sí que deben de estar rojas. Golpeo
su pecho y solo se ríe.
—Idiota —espeto.
—Esa boca Melanie, tendré que corregirla
pronto.
—Ya veremos, quiero ver como lo haces —le
sigo el juego.
—Oh sí, y vas a pedir por más —siento mis
pupilas pesadas y es que su lenguaje me calienta.
Besa mis labios con pasión y me desarma, él sabe
cómo tenerme rendida a él.
—Ya me voy, te amo —susurra sobre mis labios.
—Yo a ti —le doy un pico y se retira.
Veo como desaparece y siento angustia, esa mujer
no sale de mí cabeza y sus palabras resuenan una y
otra vez en mi memoria.
255
Cameron es parte de mí, siento horrible cuando
pienso que puedo perderlo. Lo amo tanto.
Subo hasta nuestra habitación y la veo organizada
perfectamente, la cama que cuando baje a desayunar
era un completo desastre ahora está pulcramente
tendida.
Voy a nuestro baño y en el estante donde se
encuentran las cremas puedo ver lo que me dijo.
¡Ay! es un amor gruñón, mí amorcito gruñón.
Sonrió como boba.
Vuelvo a la habitación y me siento pensando que
haré.
Un sonido me saca de mis pensamientos, es mi
celular, que raro.
Lo desbloqueo y veo que es un mensaje de un
número no registrado. La curiosidad me mata y
decido abrirla.
Unas letras en rojo como si estuvieran
chorreando sangre aparecen en la pantalla.
Número desconocido, 10:20 am.
“Él es mío y lo voy a recuperar, cueste lo que
cueste”
256
Se pone buena.
Espero que les guste.
Besos.
Mariana
257
Capítulo 18
258
Tantas cosas en tan pocos días y todo girado a su
alrededor, provocándole ansiedad, dolor de cabeza
y… miedo, tanto que su visión se le pone borrosa, la
cabeza le da vueltas y sin percatarse sus mejillas
están húmedas por las lágrimas que sin saber
empezaron a acumularse en sus ojos y pronto corren
por sus mejillas.
Su pecho se oprime y se obliga a sí misma a
respirar y a mantener el control, a raya esos
pensamientos, es sólo eso, pensamientos.
Con eso y ya más calmada se dirige al baño para
tomar una ducha.
259
un número desconocido. Al abrirlo junto al mensaje
hay una foto adjunto.
Es una niña de cabello y unos profundos ojos
verdes que brillan como dos esmeraldas, de piel
blanca, una niña de aproximadamente 8 años.
Número desconocido, 11:15 am.
“¿Quieres saber quién es?
Solo tienes que buscarme amor, ya sabes estoy
donde siempre, Mi tigre “
Mi tigre, solo una persona lo llamaba así.
Esa niña, esos ojos tan parecidos a los de él, la
diferencia es que esos ojos son más oscuros que los
de él, solo eso. La niña es igual a Allison.
¡Demonios! tenía que ser ella metida en todo eso.
¿Ahora qué diablos pretende? ¿Quién es la niña?
¿Qué tiene que ver con él? Pero sobre todo, ¿Por qué
le manda esa foto?; son tantas preguntas que un
profundo dolor de cabeza le azota.
Tiene que saber quién es y qué significa.
260
Durante el pasar de las horas tanto Cameron
como Melanie permanecen en un constante estrés,
los nervios disparados por un lado y el temor por el
otro, pero el suspenso en ambos lados.
Rumbo a sólo faltar quince minutos para la 7:00
horas de la noche, Cameron prepara su maletín con
lo que nunca debe faltar en éste. A pasos suaves y
tranquilo y un semblante que dice no tener ningún
tipo de problemas, sale por la puerta café de aquella
oficina ubicada en el piso número treinta de la torre
Danielson, caminando por el corredor de la última
planta, donde el personal que labora en aquella área,
están sumidos en sus asuntos de empezar a arreglar
su área de trabajo y preparar sus pertenencias para
marcharse.
Cada empleado da las buenas noches a su
poderoso jefe él cual le devuelve el saludo con un
simple y rígido Buena Noche y un asentimiento de
cabeza.
Llega al pie de su elevador personal, introduce la
clave y las puertas de éste se abren para permitirle la
entrada al magnate.
La pequeña barra en la parte superior del
elevador marca cada piso que este va ascendiendo.
261
Y en otra parte un reloj marca los segundos para
que estos se conviertan en minutos y que por fin
llegue a casa su flamante esposo y pueda calmar su
ansiedad, nervios, miedo.
El típico sonido del ascensor ’tic’ indica que él
magnate a llegado al destino deseado, la primera
planta.
En la resección de la empresa ya todos empiezan
a retirarse y quedan pocos empleados.
Al pisar un pie fuera del aparato metálico dos
guardaespaldas lo escoltan hasta la salida donde dos
camionetas negras lo esperan, al llegar a ellas se
adentra en la de atrás, cuestión de seguridad.
Ser él magnate de new york no es cualquier cosa
y el hecho de que sus empresas estén en todo el
mundo tampoco lo es, esto trae consigo muchos
enemigos.
—Buenas tardes Jack —saluda a su
guardaespaldas personal.
—Buenas tardes señor, ¿Nos vamos a su casa?
—No —niega y le pasa la dirección del hotel al
cual se va a dirigir.
262
Jack lo mira raro, pues esa dirección se le hace
conocida, no comenta nada pues comprende que no
es el momento de hablar sobre dicho asunto.
A pesar de que Jack trabaja para él, no solo por
eso y porque lo pueda despedir es que se guarda las
cosas, no señor. Él difunto padre y la difunta madre
de Cameron fueron personas a las que Jack
agradecía y aún agradece, lo ayudaron en los
momentos más difíciles que pasó en su vida y
recuerda perfectamente que el padre de Cameron
que también era llamado como él, le pidió que nunca
se apartará de su hijo, que lo cuidará y eso es lo que
hace y hará.
Durante el trayecto de viaje hacia el prestigioso
hotel, Cameron se la pasa en sus pensamientos, en
conclusiones que solo logran aturdirlo más, en
revuelta del pasado que lo enredan en una maraña de
emociones indescifrable, pues su rostro no expresa
nada.
Se encuentra tan sumido en sus pensamientos,
que el tiempo se le va volando y cuando viene a
mirar más allá de lo que para sus ojos no tenía ni
color ni sentido pues estaba sumido en sus
pensamientos, se encuentra frente al dichoso hotel.
263
Todos los guardaespaldas descienden de los
asientos de los respectivos vehículos y uno de ellos
abre la puerta de su jefe, pero él jefe está tan dentro
de sus pensamientos que se queda mirando al frente.
—Jefe, hemos llegado —habla el chico que
permanece con la puerta abierta para que el jefe,
como él le llama, pueda salir.
La voz del chico lo trae devuelta a la realidad,
toma una gran respiración, inhala por la nariz y
exhala por la boca, de un momento a otro se
encuentra de pie delante de él chico.
Obliga a sus pies a moverse. Es tan chistoso,
cualquier persona que lo ve en esta situación se
sorprendería y reiría que él gran Cameron Danielson
este aturdido, nervioso y con miedo de no saber qué
pasará dentro de aquella habitación en la cual se
encuentra aquella persona.
Al pasar por resección ni se molesta en decirle a
la recepcionista que lo avise y tampoco decirle que
viene a visitar a Allison Style.
Dentro del edificio sólo lo acompaña dos
guardaespaldas, Jack obviamente y otro chico él cual
eligió su jefe de seguridad.
264
Los tres hombres suben al aparato metálico que
lo llevará a su destino. Cameron como es él que va a
visitar por así decirlo marca la planta en la que esa
mujer siempre se hospeda.
Cada número que va ascendiendo es una
completa tortura, ahora es peor que cuando se
adentró en el elevador de su empresa, la tensión de
su cuerpo es cada vez más palpable, pues como no,
hace minutos venía en camino pero no es lo mismo
que estar en el lugar, es como el dicho; Es muy fácil
llamar, pero no ver llegar.
El pitido del ascensor da a conocer que él
magnate y sus guardaespaldas han llegado a la
última planta en la que se encuentra la suite-
presidencial. Como era de esperarse ella y sus
pomposos lujos.
Con pasos firme escondiendo cualquier emoción
que su cuerpo esté experimentado, camina en
dirección a aquella puerta donde está Allison Style,
ese infierno de mujer.
—Jack —detiene sus pasos —. Espera aquí —
unos centímetros lejos de la puerta se encuentran en
este momento.
265
—Sí señor —él leal hombre, le da una mirada de
seguridad como siempre que nota a su jefe en el
estado que él trata de esconder.
Junto al acompañante con el que anda Jack se
quedan donde Cameron les ubicó.
Cameron se dirige a la puerta, tomando una larga
respiración y borrando unas arrugas del pulcro traje
que porta su fornido cuerpo, golpea la puerta.
Y es como si lo estuviera esperando casi justo en
la puerta, no pasaron de 10 segundos cuando frente a
él se encuentra una Allison en un diminuto y casi
totalmente traslúcido camisón de seda y una
diabólica sonrisa.
—Bienvenido amor —dice con una sonrisa
socarrona apartándose de la puerta para que él pueda
pasar.
Él, se adentra pero sin prestar la más mínima
atención a nada de lo que haya en esa estancia, no es
necesario pues conoce todo y cada cosa de lo que
hay y hasta podría jurar que a pesar del tiempo nada
ha cambiado.
—Vamos al grano Allison y dime de una vez,
¿Qué demonios pretendes con esa foto?
266
—Pero que descortés soy —trata de alarga toda la
conversación —. Mi amor, toma asiento por favor
—le índica un sillón de cuero negro a la derecha de
Cameron.
Para no hacer más complicado el asunto, toma
asiento.
Allison desaparece al camino que lleva justo al
minibar de esa suite y regresa con un vaso que
contiene un líquido ámbar y se lo entrega
inclinándose de una manera en la cual deja
perfectamente a la vista los senos de la ex modelo en
la cara del magnate.
—No quiero nada —le dice él magnate entre
dientes —. Y aléjate de mí por favor, no quiero
olvidar que eres una mujer y tener que utilizar mi
fuerza para alejarte por mis propios medios —cada
palabra salida de la boca de él neoyorquino es
cargada de rencor, obligándose a sí mismo a apretar
los dientes y mandíbula para no perder el control.
—Uy —traga saliva sin darse a notar. No pensó,
que él fuese algún día a intimidar a alguien, solía ser
un joven tan tranquilo, paciente, amable… nada
parecido al hombre frente a ella.
267
—Relájate amor —sin dejar de persistir volvió
acercarse, ganando que Cameron casi pierda los
estribos, y tomándola por los hombros la aleja de él.
No se fía de Allison, las experiencias que tuvo en
el pasado con esa mujer le dejó de experiencia que
es capaz de valerse de cualquier artimaña para
conseguir lo que ambiciona, desea, quiere… y lo que
ella quiere, ambiciona y desea es destruir su
matrimonio.
Como la víbora que es en algún lugar de la
estancia puede tener algún tipo de micrófonos,
cámaras, grabadoras, lo que sea que le ayude a
destruir su matrimonio.
—Bien —resignada a saber que más que reacio a
ella se encuentra el magnate, levanta ambos brazos
al aire, en su supuesto son de paz y con una sonrisa
lobuna de maldad empieza la segunda parte del plan
del día —. Supongo que estas aquí porque la
curiosidad te pudo más.
—Supones bien, pero dejemos el rodeo y tanta
palabrería y vamos directo al grano, ¿Quién es la
niña de la foto? y más importante, ¿Qué tiene que
ver conmigo?
268
—Sabes —el líquido ámbar que le ofrecía hace
rato al magnate de un solo trago hace que se
desplace por su garganta —. Como bien dijiste es
una niña —ríe como loca, como lo que es, al ver la
poca paciencia reflejada en el rostro de él magnate
—. Según tengo entendido, ella tiene o pueda que
tenga alguna relación contigo —continua —.
Realmente no sé.
De un rápido movimiento se acerca a él,
restregándole, su caro perfume en el traje del
neoyorquino.
—Escúchame bien loca —tomándola de los
hombros hace que lo mire directo a los ojos —.
Cuando realmente tengas algo que decirme me
avisas.
—Oye me ofendes, amor —hace un falso
puchero.
—Tú cara y máscara de carita angelical, hace
mucho que tú corazón, cara y máscara de diablo, la
cual es tu verdadera personalidad, me abrió los ojos.
La suelta tan de repente que hace que pierda el
equilibrio.
Sale por la puerta de la suite, aún peor de lo que
llegó, esa mujer solo logró que su cabeza quisiera
269
explotar aún más de lo rápido que estaba trabajando
y ella con tan pocas palabras y en los pocos minutos
que estuvo en esa estancia de cuatro paredes lo
enmarañó aún más.
En la suite, se encuentra la diabla de mujer
festejando pues logró lo que quería, aturdirlo más y
que eso no le permitiera tener coherencia ni siquiera
con la estúpida de la mocosa como le llama ella que
tiene por esposa y eso poco a poco irá ayudándola
más y más, dándole tiempo de calcular cada paso.
270
Capítulo 19
271
En la mansión Danielson, una muy preocupada
Melanie, no deja de dar vueltas en torno al comer, el
cual se encuentra organizado desde ya hace una hora
para que ella y su marido pudieran degustar de una
exquisita cena. Pero él no llega.
Sus dedos están de color rojos de tanto
retorcerlos. Varias veces estuvo a punto de llamarle,
pero retrocedía, no quiere verse como muchas
esposas, que llaman y llaman al marido hasta
cazarlo, pero pasó una media hora y ya la preocupó
lo llamó varias veces pero no contestó, no decidió
llamar a Jack pues ya sería demasiado, y en ese
entonces hace unos minutos a trata hasta ahora trata
ella de pensar que solo se le ha complicado algo en
la empresa y que por eso está tardando tanto.
Unos 15 minutos después escucha la cerradura de
la puerta principal y como si su vida dependiera de
eso corre a ella y por ella entra un frío Cameron él
cual no dosifica su mirada ni aún viéndola frente a él
como siempre lo hace cada vez que regresa de la
empresa y entra por esa puerta.
La angustia crece en Melanie un nudo para nada
placentero se le forma en la boca del estómago y un
272
mal sabor se presenta en su boca, todo se está
volviendo un caos.
Llenándose Melanie de valor, temblorosa se
acerca a él.
—Bienvenido, amor —traga saliva y espera a que
él note su presencia para continuar —. Me tenías
preocupada —dice muy bajito, pues está tanteando
el terreno, no quiere que ambos se peleen por un
simple comentario y conociendo ya el temperamento
de Cameron es mejor así.
Los ojos de él magnate se posan en la pequeña
figura de su mujer, pero ni viéndola su mira cambia.
Él, con pasos seguros y el mismo semblante se
acerca a ella y tomando su barbilla hace que levante
la cabeza, quedando de esa manera ella mirándolo
fijamente.
Mirándola a un a los ojos acerca sus labios a los
de Melanie y deposita un beso, que para los ojos de
muchos es casto, pero para Melanie ese gesto le
provoca ganas de llorar de tristeza, ese beso lo siente
tan frío, no es un beso cargado de amor, deseo, no es
un beso de un esposo que haya extrañado el día
completo a su esposa.
273
—Tenía cosas que hacer en la empresa —
argumenta mintiendo, sobre el breve reclamo de
Melanie al decirle que llegó tarde.
—Está bien, pero por lo menos la próxima vez
avísame, por favor.
—Como digas.
Que respuesta más fría. Los ojos de la joven
mujer se llenan de aquella agua salada y se obliga a
retenerla.
Su respuesta no la convence, pero no quiere
pelear, mejor se muerde la lengua, pero su instinto le
dice que hay algo muy grande detrás de aquel
temperamento.
—Este… vamos a cenar, ayude a Cristine a
preparar la cena… aunque debe de estar un poco fría
ya —aprieta las manos para poder calmar un poco el
temblor en ellas.
—No quiero cenar, no tengo hambre —con esas
seis palabras, que para muchos son simples, se dirige
a las escaleras y sube éstas sin mirar atrás por lo
tanto no se da cuenta de que una lágrima solitaria se
derrama por la mejilla de su mujer.
274
Sin ganas de nada, sin apetito, se dirige a la
cocina, donde Cristine ya está reunida con el
personal para servir la cena.
Todos al ver que la esposa de Cameron llega a la
cocina se apresuran a tratar de levantarse para recibir
a la señora pero todos también ven el apagado de los
ojos de ésta.
—No por favor quédense sentados —dice al ver
que todos pretendía levantarse —Cristine.
—Diga, señora.
—Ven por favor.
Las dos mujeres se colocan un tanto lejos de los
demás para poder conversar.
— ¿Qué pasa querida? Te veo triste.
—Ahora no deseo hablar de eso —respira —. Por
favor retira la cena del comedor y júntala con la otra
cena, puede que hayan, algunos de los chicos que
quiera repetir y si no es así, dale a alguien que sepa
donde hayan personas que las necesiten.
— ¿Pero qué sucedió? Esa cena me pediste ayuda
y estabas tan entusiasmada por qué Cameron la
probará.
275
—Cristine por favor.
Viendo la señora mayor que la joven mujer quiere
hasta llorar, asiente entendiendo.
—Está bien, haré lo que pides.
—Gracias —Melanie deposita un beso en la
mejilla de Cristine y procede a despedirse del
personal —. Buenas noches, que disfruten su cena
—eleva un poco la voz para que todos la escuchen y
le da una sonrisa sincera pero que no llega a sus
ojos.
—Buena noche señora, gracias —se escucha a
coro.
La susodicha sale de la cocina y tristemente va
subiendo uno por uno las escaleras que la llevan al
segundo piso de la casa.
Cuando llega a la puerta de su habitación, toma
un respiro y gira el picaporte de la puerta se adentra
en ella y escucha el agua de la ducha sonar.
Espera y espera, pero ésta no deja de sonar, por lo
que se dirige al balcón de su habitación, en el cual
una luna resplandeciente y una gran cantidad de
estrellas brillan con mucha luz en el cielo.
276
Hace unos días ella brillaba de aquella forma, se
sentía como estrella, pero esa estrella poco a poco ha
empezado a descender, sumergiéndose en un oscuro
túnel, que poco a poco está empezando a apagar su
luz.
No se sabe cuánto tiempo pasó, desde que salió al
balcón, pero cuando ella ingresa nuevamente a la
habitación, ya su marido está acostado con las
sábanas arropándolo hasta su cintura, como siempre
duerme. Tiene un brazo por debajo de su cabeza y
los ojos fijos en el techo, parece no darse cuenta de
su presencia, pues ni se digna a mirarla a los ojos.
Otra duda, cosa que siente como si fueran dagas que
se le incrustan en el pecho.
Con el semblante triste camina a la habitación-
closet y toma un pijama la cual coloca sobre su
cuerpo como si su alma no estuviera en éste. Al salir
del closet, sube a la cama y se queda en la misma
posición que su esposo, en la silenciosa habitación
solo se escuchan las respiraciones de ambos.
— ¿Qué está pasando? —luego de un sepulcral
silencio pregunta Melanie.
—No está pasando nada en lo que te debas meter
y tampoco está pasando nada que yo no pueda
solucionar —responde de manera seca Cameron.
277
— ¡¿Sabes?! ¡Ya me cansé de que cada vez que te
sucede algún problema lo quieras pagar conmigo!
¡Yo no tengo la culpa de nada!—las primeras
lágrimas hacen su aparición en las mejillas ya rojas
del coraje de Melanie.
De repente ambos giran sus cabezas y sus
miradas se encuentran.
— ¡Pues no preguntes y punto! ¡Así te ahorras
tus energías y me dejas en paz! —masculla entre
dientes él magnate.
— ¡¿Pues sabes qué?! —grita y sus lágrimas
siguen bajando pero del enojo y se las limpia con
fuerzas —. ¡Vete al diablo! ¡Solo soy una estúpida
por preocuparme por ti maldito imbécil!
— ¡A mí no me insultas! ¡Cuida ese maldito
lenguaje que tienes, Walker! —grita este en
repuesta.
— ¡¿Ya no soy Danielson?! ¡¿Dónde quedó aquel
hombre que a todos les decía que yo era o soy la
señora Danielson?!
— ¡Me sacas de mi malditas casillas, con tus
malditos estúpidos reclamos! ¡Me largo de esta
maldita habitación! —se pone él, en sus pies y se
dirige a la puerta de la habitación.
278
— ¡Lárgate como el cobarde que eres! ¡Fuera de
aquí!
A Cameron no parece importarle las lágrimas y
los gritos de Melanie, pues abre la puerta de la
habitación de impacto y cómo mismo la abre así la
cierra, con los músculos tensos, se pasa las manos
por el pelo.
— ¡Maldita sea! ¡Las mujeres son tan
complicadas! —se dirige a una de las habitaciones
que no se ocupa en esa casa.
En la habitación una sufrida mujer se lleva las
manos al pecho de coraje y dolor y por su mente
pasan miles y miles de ideas.
’¿Será que ya se aburrió de mi? consiguió lo que
quería y puede ser que solo me decía amarme para
tener en su cama’ ’¿habrá otra mujer?’ ’¿o solo son
problemas de la empresa lo que lo tiene en ese
estado?’ _piensa Melanie con angustia.
Se la pasa llorando ella ni cuenta se da, horas en
la misma posición sin poder dormir y un terrible
dolor de cabeza le azota, pero ni aún así su mente
deja de trabajar.
Al rato llega un mensaje a su celular lo que la
hace moverse de la posición en la que se encuentra
279
por horas para ver de qué se trata.
Extiende su mano a la mesita de su mano derecha
que es donde se encuentra su móvil, desbloquear
éste y en la pantalla reluce un número desconocido
con un mensaje entrante.
Número desconocido, 1:39 am.
¿Sabes dónde estuvo tu marido hoy?
¿Con quién estuvo?
Esas simples dos preguntas le hacen pensar más
cosas y la más lógica es que Cameron se encontró
con alguna mujer.
Deja el móvil encima de la mesita de noche
nuevamente, quita las sábanas de su cuerpo y
aturdida se sienta en el borde del colchón de la
cama, no procura ponerse las pantuflas, su cabeza
trabaja a una velocidad impresionante, por lo, que ni
se inmuta cuando el frío piso hace contacto con sus
pies.
Con las piernas temblando como gelatina,
empieza a caminar en dirección al baño, abre la
puerta de éste y atentando la pared a su mano
izquierda da con el interruptor de la luz y lo
enciende.
280
Pestañea un par de veces para tratar de que sus
ojos se acostumbren a la luz, cuando ya no le
molesta, camina y se topa con un espejo, sus ojos
están rojos e hinchados de tanto llorar y por no
dormir unas grandes sombras negras empiezan a ser
notables debajo de sus ojos.
Deja de mirarse al espejo y camina a una esquina
de la habitación del baño donde hay un cesto donde
es que se deposita la ropa sucia.
Su corazón va a una gran velocidad tanta es que
puede sentir y escuchar los rápidos y agitados latidos
de éste, tal parece que quisiera romper la caja
torácica para salir de su cuerpo, las piernas se le
entumecen pero a la misma vez las rodillas se les
aflojan, con la determinación de saber si su marido
estuvo hoy con alguna mujer, obliga a sus piernas a
moverse y estás llegan al lado del asestó.
Con manos temblorosas toma la camisa y
chaqueta del traje de su marido utilizo en el día de
hoy. Temblando sus manos aún más de lleva ambas
prendas a la nariz y absorbe el perfume de estás.
Las espesas lágrimas vuelven y se forman en sus
hermosos ojos azules y no tardan en volver a caer
sobre sus mejillas.
281
Ambas prendas tienen una mezcla del varonil
perfume de él, pero también un perfume costoso de
mujer.
Realmente él estuvo con alguna mujer, por eso
me trata de aquella manera_ son los pensamientos
que llegan a su mente en este momento.
Con ambas prendas en manos se desliza por la
fría pared del baño y los sollozos retenidos salen
sacudiendo el cuerpo de la joven mujer.
Mientras que en la habitación de al lado, un
hombre no puede dormir por muchas razones. Le
habló mal a ella a su mujer sin ella tener culpa de
nada, ella tenía razón al preguntar pues su
comportamiento no es el correcto él mismo lo sabe,
pero de orgulloso solo piensa que ya se le pasará,
realmente Cameron anda en las nubes últimamente.
Sabe también que su visita a aquella mujer traerá
muchos problemas a su familia, algo que lo
mantiene constantemente en insomnio, algo más de
lo que debe encargarse. Y el asunto de la discordia,
aquella niña.
Tan feliz que estaba y desde que esa mujer
apareció todo ha cambiado.
282
En el hotel donde se hospeda la víbora de
Allison, está con una brillante sonrisa cargada de
maldad absoluta, pues ya jugó la última carta que le
faltaba para acabar con el juego del día e irse a
dormir y es lo que hace se acuesta en la cama, apaga
las luces y se arropa con las colchas, cierra sus ojos
y se dispone a dormir sin importarle en lo más
mínimo que un matrimonio se está cayendo a
pedazos por su culpa.
283
Capítulo 20
284
cuerpo está bien limpio, pues sale de la ducha y
envuelve una toalla en su cabello y otra alrededor de
su cuerpo.
Sale de la habitación del baño y se encuentra con
un Cameron que no luce mejor que ella.
La tensión se puede cortar con un cuchillo,
ninguno de los dos se mira a los ojos y tampoco
mencionan palabra alguna, pero si siente uno a otro
la presencia de cada cual.
Pasando ambos al lado del otro, uno se dirige al
baño y la otra se dirige al closet.
Melanie, opta por ponerse algo sencillo, piensa
que un pantalón de algodón color gris claro, una
franela, un suéter de mangas largas rojo y unas
converse negras con blanco es suficiente más su
conjunto de ropa interior.
Al Cameron adentrarse al baño, se dirige a sacar
sus productos de limpieza personal y a tomar una
toalla y acomodarla cerca de la ducha para cuando
salga, se da la vuelta y es cuando cae en cuenta en
algo.
La ropa.
285
Recuerda cuando de manera rápida e imprevista
Allison se le lanzó encima, ese movimiento hizo que
su ropa estuviera en contacto con su traje, cosa que
da como resultado que el perfume de ella se quedara
impregnado en su ropa.
¡Demonios!
Se apresura a tomar las dos piezas que se
encuentran en el frío piso del baño, ropa que
Melanie olvidó poner en su lugar al levantarse del
piso.
Con ambas prendas en las manos, sale como un
rayo de la habitación, encuentra a Melanie vestida y
secándose el cabello con una toalla. La cual deja a
un lado al sentir la presencia de Cameron. Ni
siquiera le mira de reojo.
Sin importarle en lo más mínimo que él se
encuentre de pie observándola, pasa por su lado, y él
se queda igual, sin saber cómo explicar el porqué su
ropa tiene impregnada perfume de mujer, mujer que
no es ella y tampoco con las agallas de decirle
realmente porque estuvo en aquel hotel, porque
visitó Allison.
Melanie toma una pequeña cartera tejida y
adentra su celular y dinero, es lo que necesita.
286
—Mel… —se aclara la garganta —, tenemos que
hablar, no es lo que estás pensando.
Al tenerla frente a él, se da cuenta del daño que le
ha causado su actitud y acciones, sus preciosos ojos
azules, el océano para él, lucen tristes, apagados, no
cargan esa luz que tanto lo cautiva, debajo de estos
unas grandes sombras negras, el color rojo se hace
notar en todo el contorno de sus párpados, símbolo
esto de que no durmió y se la pasó llorando, lo que
lo hace sentir peor, una basura, una completa
mierda.
Ella lo mira sin poder creer que ahora es que se
digna hablar, después que ella tuvo que enterarse de
lo que realmente estaba haciendo el día anterior,
porque le enviaran un mensaje, mensaje que sabe de
dónde proviene, de su mentira.
—Ahora, soy Mel, cuando anoche era Walker —
una sarcástica sonrisa brota de sus labios —. Como
todo cobarde me vienes a decir que no es lo que
pienso, ja, es lo típico que suelen decir los hombres
cuando miente —se le acerca hasta quedar de cara
contra el pecho de él —. Pues te informo que esas
palabras no van conmigo, jodido mentiroso.
— ¡¿Cómo demonios sabes que estoy mintiendo
si no me escuchas?!
287
—Ese es el problema, que no entiendes que ni
quiero escucharte, ¡Que no me interesa escucharte!
Y a mí no me grites, ¡Que si alguien tiene derecho a
gritar soy yo!
— ¡¿Y por qué la señora cree que es la única que
puede gritar?!
— ¡Porque yo no soy la que miento, idiota! —las
gotas de agua salada se forman nuevamente en los
ojos de ella —. Porque yo no soy la que descarga mi
rabia y frustración con mi esposo, porque yo no soy
la que está mintiendo, porque yo soy a la que la
hacen sentir que no tiene palabra en cuanto a éste
matrimonio… —las lágrimas ya corren nuevamente
por su mejilla.
Esas palabras hacen sentir a Cameron como una
mierda.
—Ven acá, amor —trata de abrazarla, pero ella
renuente se aleja de él, poniendo distancia de por
medio.
—Ni me toques, no quieras venir arreglar tu
desastre con palabras y abrazos.
—No te fui infiel, eso nunca, pero… —trata de
explicar pero ella lo frena.
288
—No me duele el hecho de pensar que me fuiste
infiel, sino que alguien que no soy yo, por supuesto,
te hace cabrear y conmigo es con quien vienes a
descargar tu rabia sin yo tener culpa alguna —le
reclama dolida.
Gira sobre sus talones y se dirige hacia la puerta,
antes de girar el picaporte de la puerta su voz la
detiene.
— ¿A dónde vas, Melanie?
—Voy a buscar paz, lejos de todo lo relacionado
contigo —dice —., No quiero que me detengas ni
que le ordenes a tus hombres que no me lleven,
porque si lo haces te vas a enterar.
Así como termina esas palabras sale como un
resorte de la habitación sin darle tiempo a Cameron
de que diga ni una sola palabra.
En la habitación se queda un Cameron pensando
que de nuevo Allison Style se está saliendo con la
suya de volver su vida nuevamente una completa
mierda.
Melanie baja las escaleras de la mansión a todo lo
que más rápido puede, sin importar que es un peligro
y podría caer, pero lo único que quiere y necesita es
salir de aquella casa en la que ha estado viviendo los
289
últimos meses, casa en la que ha vivido momentos
tan lindos, felices y alegre, quien podría decir que
ahora solo quiere escapar de ella, siente que poco a
poco la está dejando sin aire, la asfixia.
Al terminar de bajar las escaleras, abre las
grandes puertas de la entrada de la mansión y en su
campo de visión lo primero que ve es aún joven
como de la edad de…él… mejor ni acordarse.
Rápidamente se acerca al chico y le dice:
—Prepara algún vehículo, necesito salir.
Los buenos modales en éste momento sobran.
Apenado el chico dice:
—Señora, no podemos salir con usted sin la
orden del señor Danielson, él…
Ya suficiente por esa mañana, cabreada responde:
—Pues yo soy la señora, y yo te estoy ordenando
que prepares un vehículo, tú decides ¡¿lo haces tú o
lo hago yo?!
Sin más opciones él chico se dispone a hacer lo
que su señora le ordenó, pues en todo caso si se
complicaron las cosas si ella sale sola, sin algún
guardaespaldas, ahí sí que serían todos hombres
290
muertos, para nadie es secreto que el carácter de
Cameron Danielson, es de temer.
Preparado el vehículo, ella sube en éste sin mirar
atrás por lo que no se percata que desde el balcón de
su habitación su marido la observa, pero él chico si
se da cuenta y pone cara de espanto la cual relaja
cuando su jefe le da un asentimiento de cabeza y
hace un ademán con la mano, él chico sube al auto
con otro guardaespaldas de copiloto.
El lunes que Melanie y Nick se vieron en aquel
centro comercial intercambiaron número de móvil y
dirección.
Ella necesita un buen abrazo y sabe donde lo
puede encontrar, le pasa la dirección al
guardaespaldas que va conduciendo y se dirigen
hacia allá.
291
Cuando logra llegar a la puerta y abrirla en
manojo de segundo tiene un cuerpo colgado de su
cuello abrazándolo fuertemente, como si necesitara
consuelo, rápidamente reconoce de quién se trata.
—Mel ¿Qué pasa?
Las innumerables ganas que aguantó en todo el
transcurso de la mansión hasta el departamento que
comparte Nick con su hermano, no logra
mantenerlas más ocultar y se desborda en llanto.
—Ssh, tranquila —le acaricia el cabello —.
Entremos, que los vecinos no tardan en aparecer
para curiosear.
Cerrada la puerta del departamento él chico con
ella aún prácticamente colgada de él, la dirige a los
elegantes muebles de cuero negro que adornan la
sala de estar, la hace sentar, tomando el rostro de ella
entre sus manos, la mira directo a los ojos.
— ¿Qué sucede?
—Todo va de mal en peor Nick —su llanto es tan
lastimero que es capaz de hacer llorar al más fuerte.
— ¿Porqué estas así? El imbécil de tu marido
tiene que ver con todo ¿Verdad? Desde que te
292
casaste las dos veces que te he visto estas llorando,
¡¿Qué demonios hace ese imbécil?!
Continúa llorando.
—Alguien de su pasado regresó y lo tiene
atormentado, no me quiere contar, se cierra en sí
mismo, esa persona lo hace enojar y descarga su
frustración hablándome mal.
—Será imbécil, ¿Quién es esa persona que está
causando que ustedes estén así?
—Le llaman Allison, no se su apellido, pero
ahora que lo pienso —seca sus lágrimas con la
manga de su suéter —. Cameron es un hombre muy
importante, por lo que su familia también lo fue, eso
ha sido desde siempre —se queda pensativa.
— ¿Qué estás pensando? —inquiere Nick
intrigado.
—Que el internet puede tener información sobre
esa mujer. Ella me declaró la guerra, quiere acabar
con mi matrimonio y mi amor con Cameron, tal vez
el internet me ayude a no estar tan desprotegida en
ésta guerra.
—Wao, si que pones tú cerebro a trabajar, muy
buena idea, Mel —le alborota el cabello —. Pero
293
antes de eso —se huele las axilas —. Tengo que
bañarme, aunque un bombo como yo nunca huele
mal.
—Presumido —le manda un cojín a la cabeza, él
se protege con sus brazos —. Pero si apestas, eses es
el mal olor que me da desde hace rato —hace gesto
de que está oliendo algo que huele mal, haciéndolo
reír a ambos.
294
—Aún me pregunto —adentra las manos en los
bolsillos del fino pantalón. Si ella puede jugar él
también.
— ¿Qué te preguntas amor? ¿Qué anda pensando
esa cabecita? —se inclina sobre el escritorio y con el
índice toca la frente de él o lo intenta.
—Me pregunto, ¿Cómo es que no estás en un
manicomio? —Cameron frunce el ceño, para tomar
la postura de que él asunto es serio, pero realmente
si lo es.
La cara de Allison la cual anda vestida totalmente
de negro, con una blusa mostrando escote más de lo
normal, pierde la sonrisa que cargaba.
—Esto no es ningún juego, tigre —sus ojos
brillan maliciosos.
—No me llames así —brama —. Sé que no es un
juego, ¿Cómo entraste?
—Amor, no me subestimes, siempre me las
arreglo —se sienta sobre la silla, recuesta su espalda
y cruza las piernas —. Además la metiche de tu
secretaria no está en su puesto, deberías de
despedirla, eso no es correcto amor.
295
—No me vengas a decir como tengo que manejar
a mi empresa y que normas debo usar con mis
empleados —unos papeles esparcidos en el
escritorio él empieza a arreglarlos, como si enfrente
de él no hubiese nadie.
Su secretaria, él la mandó a hacer unas llamadas
y coordinar unas cosas con diferentes ejecutivos
encargados de varias cosas en su empresa.
Pasan como cinco minutos y la actitud de
Cameron no cambia y continúa en lo suyo si siquiera
mirar a Allison la cual empieza a cabrearse.
—Cameron —llama entre dientes.
Él ni se inmuta. Continúa y de repente un
puñetazo en el escritorio le hace levantar la cabeza y
observar a Allison la cual su puño necesitará
cuidados por la forma en la que lo estrelló contra la
madera, éste está más que rojo y lastimando los
nudillos ella no parece sentirlo, pues sus ojos negros
están fijos en los verdes de Cameron.
—Pensé que ya te habías largado, no sé qué haces
aquí —no presta el menor interés por la mano de
ella.
—Deja de tratarme así —habla entre dientes —.
O te puedes arrepentir.
296
—Sabes de qué me arrepiento —se pone de pie
dejando ver su imponente altura —. De alguna vez
haberte conocido, has sido mi peor error.
Ella se ríe malvadamente.
—Pues el mío no —lo mira con seducción —.
¿No quieres saber quién es la niña?
—Quien sabe si esa niña realmente existe, mejor
vete no voy a caer en tú juego, ya bastante tengo por
tú culpa —se encamina a la puerta y se detiene al
escuchar lo que dice.
— ¿Qué pasa si esa niña es algo tuyo y por
casualidad de la vida algo le ocurre? —Esas palabras
las dice con calma —. Bueno, digo yo, los
accidentes ocurren.
297
Capítulo 21
298
pase algo, vas a hacer todo lo que yo te diga,
absolutamente todo.
—Eres tan mezquina —dice entre dientes y tono
bajo, la mira con odio —. ¡Por más que hagas y
juegues tus sucias cartas no lograrás que yo deje de
amar a mi mujer!
— ¡Cállate! —Con desesperación toma sus
propios cabellos en puños y tira de ellos —. ¡Eso es
mentira! ¡Tú me amas a mí! —Con la voz lejana
agrega —. Siempre fue así.
Un tanto Cameron asustados pues ahora
comprende que ésta mujer no solo es peligrosa si no
una demente obsesionada que es capaz de dañar a lo
que él más ama.
—Calma Allison, te estás haciendo daño —habla
con ella pero parece no escucharlo.
Los ojos de ella están idos y solo dice
incoherencias, por lo que decide hablarle de manera
pacífica, pues en un arranque de ira puede salir
como un resorte y lastimar a personas inocentes.
—Sabes, nos vamos a casar y vamos a ser felices
por siempre —empieza a sonreír, pero esa sonrisa no
llega a sus ojos.
299
—Allison, ¿Quién es la bebé de la foto? —
tratando de evitar el tema de ellos dos juntos para
que no se desquicie más, pregunta esto.
—Solo te voy a decir —vuelve a ser la misma —,
que esa mocosa es mi hija.
Con esto último se va y deja a Cameron aún más
confundido.
¿Cómo siendo su hija juega con ella? Un
inocente.
Y recolectando todos los hechos cree que ya sabe
por dónde va todo esto, llegando a una sola
conclusión por la que Allison esté jugando a aquél
juego, el cual será realmente no eso, sino una guerra.
—No puede ser —se pasa las manos por el rostro
y aturdido se sienta en su ejecutiva.
300
tiempo que no hablo con ellas y seguro estarán
pensando que me he olvidado de ellas.
—Pero claro, deja y traigo mi laptop, Noa no
despierta ahora, dice que tiene que dormir mucho
para cuando papá lo ponga a trabajar, no tendrá
tiempo para eso —dice jocoso.
Después de eso una sonrisa un poco vivas sale de
los labios de Melanie algo es algo, más sin embargo
sus problemas aún así no dejan de atormentarla y
rondarle en la cabeza.
Nick fue por la portátil y luego de conectarla y
encenderla procedieron ambos hacer la vídeo
llamada a Miami, Melanie hoy tenía clase pero las
dejo pasar ya él viernes lo hará, además la próxima
semana empezarán los exámenes y lo que le están
dando pues son los repasos, por lo que ella imagina
es que las chicas también están tomando exámenes o
empezarán la próxima semana.
—Nick —le llama y este inmediatamente le mira
—, ¿Cómo es que estás aquí, si estás próximo a
exámenes?
—Mis padres, los convencí para que hablaran con
la directora y yo pudiera hacer las últimas clases
301
online, además son repasos, el domingo viajo a
Miami para tomar los exámenes a partir del lunes.
—Oh entiendo…—iba a continuar hablando,
pero una voz proveniente de la portátil no le permite.
—Oye, Nick hasta que te dignas a comuni…—las
palabras de Laura se queda en el aire y junto a ella
están Morgan y Vicky ambas igual al ver la persona
que está al lado de Nick.
—Mel —Vicky es la primera en hablar y
rápidamente tapa su boca para reprimir un sollozo.
—Morgan, Laura, Vicky, ¡mis zorras! Cuanto las
he extrañado —rápidamente la Magdalena que
Melanie siempre guarda con ella, vuelve a hacer
aparición y en poco tiempo ya las lágrimas están
siendo derramadas.
—Y nosotras a ti —dice Morgan que también ya
está derramando lágrimas —, pero estamos muy
enojadas contigo, no tienes abandonada.
—Después que te casaste con aquel dios griego
—por fin Laura logra digerir el nudo formado en la
garganta y boca del estómago —, te olvidaste por
completo de nosotras, entiendo que estés feliz y que
vivas en una burbuja, pero nosotras estábamos
primero que él.
302
—Perdón chicas —suspira hondamente —, sé
que mi actitud no tiene justificación alguna —baja la
cabeza y vuelve a levantarla —, pero nah, no vivo en
una burbuja, al contrario las cosas están mal y creo,
no, estoy segura que se pondrán peor.
— ¿Cómo así? Explícate —exige saber Vicky.
—Cameron y yo estamos mal —dice con pesar la
joven esposa.
—No me digas que tenemos que irle a patear las
bolas, al sexy de los sexy neoyorquinos del mundo
—dice Morgan, haciéndola reír de manera sincera.
—Oye, cuidado, es mi esposo —finge estar
celosa.
—Uy, con que celosa y todo —Laura mira a los
lados y poniéndose seria dice —. Ya dinos, ¿Qué
está pasando? Antes de que llegue el panza de
literatura.
Melanie y Nick, el cual se había mantenido al
margen hasta ahora para darle su espacio a las chicas
estallaron en carcajadas, dejando de reír Melanie se
acomoda más en su lugar.
—No les puedo contar por esta portátil, pero si
cuando estemos cara a cara mis amigas —retuerce
303
sus dedos los cuales están colocados en su regazo
—. Sé que seré un tanto egoísta al pedirle lo que les
diré a continuación, pero, ¿Podrían después de los
exámenes quedarse conmigo? Papá tiene una
propiedad aquí y estoy seguro que no se negará a
prestármela para que ustedes se queden. Por favor
—les suplica.
—En una semana y media terminamos los
exámenes —dice Morgan.
—Por lo que hay más que tiempo suficiente para
decirles a nuestros padres —secunda Vicky.
—Y yo estoy segura que me darán el permiso,
bueno nos darán —Completa Laura.
Siempre las tres han actuado de aquella manera,
una empieza la conversación y otra la termina,
siempre y cuando que estén todas juntas.
—Si es necesario yo hablo con sus padres y se
quedaran en mi casa, conmigo, nada de otro lugar ya
lo decidí —sugiere Melanie.
—Yo también puedo ayudar en eso —agrega
Nick.
—Está bien, ustedes serán nuestra segunda
opción, y tú señorito Nick Spencer, no olvides que el
304
lunes hay examen, vale —le apunta a través de la
pantalla, Vicky.
—Está bien —levanta ambos brazos.
—Gracias de verdad chicas, créanme que si
realmente no las necesitará no les haría venir, aún yo
podría viajar hasta ya, pero no me puedo rendir y
dejarle el camino libre al demonio para que acabe
con mí matrimonio —argumenta.
—Mel, cada vez más me estás asustando más —
dice Laura.
—No tienes, ni tienen porque, aunque yo lo esté.
Después de un emotiva despedida, Nick y
Melanie, se sumergen en una investigación por
medios de diferentes páginas de internet lo cual le da
una cuantiosa información que en si no son más que
pistas o conclusiones sacada de la vida de Cameron
desde la muerte de sus padres hasta que termina el
noviazgo con Allison, luego de esas noticias han
pasado 8 años casi 9 y el resto de información son
de sus logros como empresario y como ha sido
impresionante la manera en la que ha expandido su
empresa por todo el mundo y por supuesto noticias
sobre sus diferentes romances con modelos, actrices,
periodistas… hasta llegar a Melanie.
305
Terminando de la exhaustiva investigación piden
desayuno a domicilio el cual Nick obliga a Melanie
a comer pues se rehúsa.
—La cosa es así, al parecer mí marido estuvo en
una grave depresión cuando murieron sus padres y
apareció el demonio encarnado en esa bruja y fue
como su soporte, luego de un tiempo se rumoró que
habían acabado su relación por supuesta infidelidad
de ella y luego de él, pero aparecen conclusiones de
que puede que ella haya estado embarazada y lo
pierde… ahg esta situación me exaspera, no sé qué
hacer —sus ojos nuevamente se cristalizan —, no
quiero perderlo y parece que ella fue o es muy
importante para mi Cam.
—Ssh Mel, si Cameron realmente te ama, él no
va a dejar que nada pase.
El muchacho trata de reconfortarla, pero ambos
saben que se avecina una gran tormenta que arrasará
con muchas cosas.
Hay información que ambos pudieron percibir en
aquellas páginas que se abstienen de comentar para
no hacer el momento más incómodo y doloroso para
ella.
306
Al rato de que los chicos terminaran de desayunar
se levanta un amable Noa, el cual se sorprende en
ver a Melanie en su departamento, ya que él marido
de esta es un tanto posesivo, pero lo pasa por alto y
decide platicar con ellos y dejar las cosas así.
Las horas del día pasan como nada, todas las
personas sumidas en sus propios problemas y sus
ocupaciones, los gritos, murmullos y bocinas de los
coches adornan las carreteras de new york a medida
que las horas pasan.
307
cuando menos, pero cuando mucho son capaces de
asesinar.
Recordando de su historia de cuando era más
joven la ve a ella dados algunos momentos se
comportaba obsesiva e histérica, al punto de que
solía darle cachetadas a él, simplemente por unos
celos un tanto estúpidos, los cuales justificaba como
que eran actos que hacía por amor, porque no quería
perderlo y él como puberto le creía, vivía embobado
de aquella mujer, pero eso se fue perdiendo poco a
poco cuando ella empezó con sus salidas un tanto
extrañas, solían salir juntos casi para todos lados
tanto era su unión que ella hasta dormía en aquel
pent-house que tiene al lado del central park, la
familia de ella, la familia Stile no ponía objeción,
Allison siempre ha tenido un carácter irreversible,
tanto parece que era ella la matriarca de la familia.
Las cosas cambiaron los días que se la pasaban
juntos se fueron dejando de ver, el sexo disminuía
cada vez más, era sólo sexo, pues a ella siempre le
gusto salvaje, él sufría pues creó dependencia de
ella, sentía que era la única persona que le podría
brindar cariño y Cristine siempre repitiéndole que
aquella muchacha no le convenía y él muchas veces
llego a hacer llorar a aquella fiel mujer que siempre
estuvo y está para él con palabras hirientes, Jack lo
308
aconsejaba pero las malas influencias de aquella
mujer hacían que esos consejos que su fiel
guardaespaldas le daba le entraran por un oído y le
salieran por otro.
Hasta que él también empezaba a alejarse y a
tratar a chicas sanas, duraba semanas sin ver a
Allison, pero ella siempre volvía y cada vez estaba
más histérica, llego en una ocasión hasta golpear
brutalmente a una chica muy seria y estudiosa por
solo mirar a Cameron, ya que éste había
implementado una amistad con ella, los medios de
comunicación siempre lo tenían en la mira y cada
escándalo relacionado con él era demasiado fuerte
que no podía salir sin ser escoltado.
No se preocupaba en lo absoluto por la empresa,
ésta estaba a cargo del abogado de su padre y Jack
que la alguna ocasión tenía que ayudar ha dicho
abogado.
Siempre por más enojados que estuvieran
terminaban teniendo sexo brutal ambos pero era sólo
eso, lo cual empezó a no llenar por completo como
hombre a Cameron y fue poco a poco dejado de ser
algo para convertirse en una monotonía.
El tiempo pasaba y ellos estaban peor hasta que
sucedió aquello… Ella hizo algo tan cruel… Y luego
309
lo otro.
Unos golpes en la puerta de Jack avisándole que
el auto está listo, lo sacan de sus recuerdos, suspira y
se gira ya que estaba de espalda a la puerta
concentrado en el gran ventanal de su oficina y ni
aún así se dio cuenta de que habían pasado las horas
y ya estaba casi por completo oscuro.
¡Hi!
Aquí otro capítulo, un breve resumen de lo
que fue la vida de Cameron cuando murieron sus
padres y aquel amor que más bien parece algo
obsesivo y enfermizo de aquellos dos, Allison y
Cameron una locura.
Bueno, pero ¿qué será aquello que ella hizo
tan malo para que él y ella se dejarán?
Chic@s Besitos desde R.D.
Mariana
310
Capítulo 22
311
—Muchas gracias Jack, tus palabras me
reconfortan mucho —sin Jack esperárselo Cameron
se acerca a él y le da un emotivo abrazo.
—Vaya muchacho, ¿Hace cuánto no me dabas un
abrazo? —dice con alegría.
Separándose del abrazo Cameron dice:
—Sé que soy muy frío en las mayorías de las
ocasiones, pero tú eres mi mejor amigo y te quiero
mucho viejo Jack.
—Yo también muchacho —cambiando esa cara
en tono burlón dice —, pero eso de viejo, creo que
aún puedo contigo y dos más.
—De eso no me cabe la menor duda —y una
sonrisa sincera brota de los labios de Cameron.
312
La casa no se siente lo mismo sin su presencia, su
sonrisa ilumina cada rincón de aquella mansión que
lo que realmente parece es un palacio, aquel rostro
angelical hace que quien sea se rinda ante ella.
Como le duele que las cosas sean así, la culpa la
tiene él sin duda, no debió de ocultarle nada con
respecto a su pasado, pero la mayor de las culpa la
tiene aquella arpía de Allison que solo regresó para
poner su mundo de cabeza, ¿Qué pretende? ¿Qué
olvide todo y corra a sus brazos como si nada? ¿Qué
deje de amar a su bella mujer? ¿Para qué juega con
su hija? y lo que más que le atormenta es si esa niña
es realmente algo suyo, ¿Será?
Muriendo por dentro camina hasta el comedor y
tomando asiento en la cabecera, apoya sus codos en
la mesa y en sus manos su barbilla, cierra los ojos y
suspira hastiado de tantas cosas, hastiado de su
pasado, de cansancio, hastiado de no poder ser feliz
con la mujer que ama. Dos meses casi tres puros,
llenos de felicidad, durmiendo abrazado a su cuerpo,
aspirando su aroma natural, sintiendo la suavidad de
su piel, aquellos besos, aquellas caricias que se
robaban, las tardes en el jardín, plantando plantas,
una película, caminar de la mano… tantas cosas que
poco a poco por su cobardía, por Allison se han ido
desbaratando como castillo de arena.
313
Entre pensamientos se le pasa el tiempo y es
cuando no se da cuenta que Cristine está a su lado.
—Mi niño —le llama tocándole el hombro.
Se mueve de manera rápida, espantado, pues en
ningún momento sintió presencia alguna a su lado.
—Tranquilo, llevas mucho rato ahí y he venido a
preguntarte que si quieres la cena, ¿Te la sirvo?
—No gracias, nana, no tengo hambre —mirando
las agujetas de su reloj agrega —ha pasado más de
media hora desde que estoy aquí y Mel aún no
regresa.
Comprendiendo Cristine, más claramente la
situación, el porqué del distanciamiento entre ellos,
los gritos, la actitud y la ausencia de Melanie, ella
misma hace su conjetura, algo grave está pasando en
aquel matrimonio.
—Hijo, no sé lo que está pasando, per… —las
palabras llena de maternidad de Cristine se ven
interrumpidas por el sonido de una yipeta.
Rápidamente Cameron se pone sobre sus pies y
se dirige a la sala de estar con Cristine siguiendo sus
pasos al llegar a dicha sala tiene en su mente una
batalla interna, ir o no ir hasta ella, de manera
314
ansiosa y desesperada camina de un lugar a otro por
la estancia pasando sobre su negro cabello su mano
una y otra vez, alborotando su pelo.
De un momento a otro la puerta principal se abre
y él se detiene abruptamente, por ella entra Melanie.
Se quedan mirando fijamente, ninguno de los dos
sueltan palabras algunas, solo se observan.
—Melanie querida, que bueno verte, ¿Deseas que
te sirva la cena? —corta Cristine la horrible tensión,
que hasta se puede sentir por los aires.
—No —se aclara la garganta —, gracias Cristine,
pero no deseo comer, ya cené algo.
Su mirada en ningún momento se aparta de la de
su marido, el cual luce cansado, abatido, su corazón
se estruja al verlo así, pero se obliga ella misma a
recordar que él, puede que le esté siendo infiel,
como puede que no y también le miente, no confía
en ella como para contarle esas cosas de su pasado
que tanto problemas están trayendo a su matrimonio.
—En aproximadamente dos semanas, mis amigas
Laura, Morgan y Vicky, vendrán a visitarme y puede
que se queden aquí como que no, solo te informo
para que no te lo tomes de sorpresa.
315
—La casa es nuestra, puedes hacer con ella lo
que quieras —mirándola a los ojos agrega —Mel
yo…
Ninguno los dos se dieron cuenta en el momento
en el cual Cristine abandonó la estancia.
—Tú nada Cameron, solo te informaba.
Sin decir más sube a toda prisa las escaleras de la
mansión que la guían al segundo piso donde se
encuentran las habitaciones de la casa.
Sin mirar atrás Cameron sube detrás de ella e
inmediatamente llega arriba entra a la habitación
como un torbellino.
— ¿Porqué me huyes? —pregunta apenas ingresa
a la estancia.
—No te huyo, sólo no te quiero cerca, me has
lastimado tanto en tan poco tiempo.
— ¡¿Y crees que no lo sé?! Me estoy lastimando
yo mismo con esta situación, pero no puedo hacer
nada.
— ¡No haces nada porque no quieres! ¡Eres un
cobarde! ¡¿Por qué no me cuentas que está
pasando?! ¡No, pero el señor perfecto, prefiere que
316
éste matrimonio se vaya a la mierda antes de
contarme!
— ¡No soy perfecto! ¡Si lo fuera evitaría todo
esto! ¡No sabrías entender esta situación!
’Y probablemente te aleje cuando sepa lo que
estoy pensando y que puede ser verdad’ _ agrega
Cameron en su mente.
— ¡¿Y cómo sabes que no voy a entender si no
me cuentas nada?!
—Este… yo…
— ¿Sabes qué? Déjemelo ahí —alejándose de él,
pasa rápidamente por su lado y se encierra en la
habitación del baño.
Cameron derrotado deja caer su trasero en el
colchón de la cama y piensa y piensa cómo podría
salir de aquello, pero no encuentra ninguna salida,
todo está puesto en su contra, su ex pareja, el
pasado, la ropa con olor a perfume de mujer, sus
celos por Nick y la niña.
Al rato se dispone Melanie a salir con una pijama
ya lista para acostarse y se debate en dormir en
aquella cama o no, se decide por ir a dormir a otra
habitación y tomando una almohada se encamina a
317
la puerta para irse, pero Cameron lo evita pasando
por su lado con otra almohada.
Al él ver que ella tomaba una almohada en
seguida supo sus intenciones, por lo que él tomó otra
y en pocas palabras, según lo que él piensa le deja
dicho al pasar por su lado, que ella no tiene porque
irse de su habitación que más bien es él, que le da su
espacio aunque su indiferencia lo mate, pero ¿Qué
esperaba? ¿Qué lo recibiera con abrazos y besos?
¿Qué le permitiera hacerla suya? Claro que no,
después de sus actitudes el muy bien es consciente
que no merece tal trato.
Saliendo de la habitación suelta un gran suspiro,
otra noche en la que dormirá sin su calor, otra de
seguro de unas cuantas más.
En la habitación, Melanie tiene sus ojos clavados
en puerta por donde salió su hombre, cuanto le duele
que todo esté de aquella forma, dormir sin él ya es
una tortura, se acostumbro a tener su calor corporal
mientras dormía, sus brazos rodeándola y su
respiración cerca bien cerca de ella, ahora aquella
habitación para ella se siente tan vacía y sola, algo
que solo hace aumentar su tristeza y dolor.
Sus pasos reciben orden solos y se dirige a la
cama que se encuentra en el centro, una que está
318
impregnada de su olor y fragancia, tan solo ayer,
estaban ambos disfrutando de el placer de que sus
cuerpos fueran unos solos, sus gruñidos, jadeos y
gemidos de placer, lo puede escuchar como si lo
estuviese viviendo, la pasión con la que la tomaba
no la fingía, demostraba cuánto la ama, la ama, eso
ella lo sabe, pero sus miedos y dudas las hacen
pensar a veces que eso no es así.
¿Pero cómo actual de otra manera y pensar de
otra si todo apunta a que él le fue infiel?
Si darse cuenta su cuerpo yace sobre la cama
acariciando la tela de esta, mientras sus lágrimas
vuelven a salir.
En la habitación de al lado, no es que Cameron se
encuentre de otra manera, su conciencia lo trastorna,
por mentirle, pero no se va arriesgar a perderla,
aunque poco a poco la esté perdiendo, por no decirle
algo de lo que él no está seguro. Mejor es mantener
su boca callada, hasta que resuelva todo ese
embrollo, pero también esa actitud puede ser peor.
De algo si está seguro y es que no puede permitir
que Allison dañe a su amada mujer, por encima de
su cadáver, si es necesario él da hasta lo que no
pueda para que un pelo no se lo toquen, pero aún así
Allison ya con sus juegos y las acciones que ella
319
hace y que lo arrastra a él y a su matrimonio en estos
juegos, la está dañando psicológica y
sentimentalmente. Acostado en la cama analiza.
Pasada unas horas el cansancio y el tanto llorar a
Melanie le cobra factura, pues la vence y queda
dormida abrazando la almohada de su esposo.
Cameron no logrando dormir sale de la
habitación y se dirige a la de él y la de su mujer y se
queda en la puerta pensando en si estará dormida,
entra o no entra, toda el pomo de la puerta pero se
retrata y lo suelta al final se decide por entrar y de
manera sigilosa se adentra a la habitación,
caminando con pasos lentos y sencillos se dirige a
donde está la cama y la ve.
Tan hermosa, sin nada de maquillaje, sus labios
carnosos entreabiertos, su pelo cubriéndole la
mejilla izquierda casi por completo, abrazada a su
almohada lo hace sonreír de ternura.
Se acerca y quitando la sabana sin despertarla la
arropa y se queda observándola, sus ojos lucen
hinchado signo de que estuvo llorando y grandes
ojeras adornan sus ojos debajo. Todo su culpa.
Ubicándose a su lado de frente a ella él la observa
y le aparta el pelo de la cara pasando las yemas de
320
sus dedos por el contorno de sus labios y mejillas se
aproxima y le besa sus labios, sintiendo la suavidad
de estos, separándose se acerca a su oreja y le
susurra un te amo.
Ella aún en sueño sonríe, pues creyéndose ella
misma el cuento de que está durmiendo y que es que
está soñando que él le dice que la ama pues lo hace
sin darse cuenta.
Cameron se retira más tranquilo.
321
llegan cargadas de amenaza, no lo comenta con
nadie, pues al principio, se le hicieron qué es
casualidad con la primera, coincidencia con la
segunda, pero ya con la tercera empieza a asustarse
y cada vez llegaban más, Nick se había marchado ya
y ella rara vez sale de la casa, solo a tomar los
exámenes, por lo que lo extraño es que con un
escuadrón de seguridad como el que hay en la
mansión es muy difícil de hacer llegar esas notas
allí.
Por otro lado Allison no da señales de vida, algo
preocupante para Cameron que no deja de pensar
que algo muy bien lleno de veneno está planeando.
Un sobre es encontrando por Melanie en su
cartera, pretende salir y cuando va a revisar que nada
le falta justo ahí lo ve.
Tomándolo con manos temblorosas lo abre y se
espanta por lo que dice, tanto que empieza a sudar y
el color de su cara le abandona y sus manos y todo
su cuerpo tiemblan.
“Aléjate de él es mío. Aléjate o te mataré, haré
de tu vida un infierno y la de tus seres queridos
también, cuídate perra”
322
¡Hola!
Otro capitulo más espero de corazón que sea de
su agrado.
Besos y abrazos desde R.D.
Mariana
323
Capítulo 23
324
— ¡Dios! —un gemido lastimero desde lo más
profundo de su ser brota de su pecho.
¿Qué va a hacer? Son tantas cosas tantas personas
a las que conocen y que ama.
Allison no le basta con ver como sus intrigas y
trucos destruyen día con día su matrimonio.
Decidida a ir por sus amigas al aeropuerto se
levanta de el colchón de la cama y con las rodillas
totalmente temblorosas camina a la puerta no sin
antes tomar el sobre en manos llegando a la
conclusión de que lo mejor es no decirle a nadie o
las personas a las que se les diga, podrían estar en un
gran peligro.
Ya había pasado dos semanas desde que Nick se
marchó y casi tres desde que ella y Cameron casi ni
se hablan, cada vez que intercambian una palabra
terminan discutiendo, no duermen juntos, no
almuerzan juntos… no hacen nada juntos, desde que
esa mujer llegó a sus vidas.
325
empeora más su matrimonio. De repente unos gritos
provenientes del pasillo se escuchan y esto le llama
la atención, por lo que se levanta de su ejecutiva y se
dirige a pasos firmes a la puerta abriendo esta y
caminando fuera para enfrentarse a la imagen de un
Jack casi perdiendo la paciencia y una Allison
tratando de pasar por encima de él.
— ¡¿Pero qué significa esto?!
— ¡Amor! —Sonríe como demente —, es solo
que aquí —se zafa del agarre del fiel guardaespaldas
y le señala con la mano —, el viejo Jacki, no me
deja pasar —y para darle más drama al asunto hace
un falso puchero.
—Jack, señorita —murmura el hombre
malhumorado, haciendo énfasis a la palabra
“señorita” pues no cree que lo sea, muy bien
recuerda el pasado y esa mujer para nada le cae bien.
—Jackson, Jacki, Jerry…—vira los ojos hacia
arriba y hace un ademán para restarle importancia y
luego agregar —, como sea.
—Allison, no te permito que le faltes al respeto a
Jack —defiende Cameron, que con sólo fijarse en
aquella mujer y que ella esté ahí presente, es señal
de problemas y que la situación solo empeorará.
326
—Cam…—el escucharla llamarlo así, como solo
Melanie, su mujer le llama, le enfurece más.
— ¡No me llames así! —brama. Observa a su
alrededor y todos los empleados se le quedan
mirándolo él y no se había percatado que todos
observaban desde el comienzo dicha situación —.
Pasemos a mi oficina y se breve, no pienso perder
mi tiempo —le dedica una mirada severa —. ¡Y
todos vuelvan a sus asuntos!
El sonido de tacones, suela de zapatos, papeles,
teclas… le confirma que todos volvieron a sus
asuntos, además de que sus ojos viajan por toda la
estancia, confirmado todo.
Girando sobre sus talones se encamina a su
oficina con Allison detrás, después de que esta le
dedicara una furiosa mirada a Jack, él cual le
devolvió la misma, como detesta a esa mujer.
Cameron abre la puerta de su oficina y sin reparar
en la mujer que tiene detrás camina y toma asiento
en su ejecutiva, haciendo a un lado su portátil y unos
papeles, para luego apoyar sus manos sobre el
escritorio de cristal negro y mirarla indiferente.
—Habla —la sola presencia de Allison lo pone
furioso.
327
—Primero dime una cosa —camina de manera
muy sensual hacia los asientos que se encuentran al
frente del pulido escritorio —, ¿Ya te aburriste de tu
mujercita?
— ¡Mi mujer! —aquel diminutivo lo enfurece
más, se está refiriendo a su amada esposa como si
ella no fuera nada, algo que le prende la sangre —.
Nunca, óyeme bien, jamás me aburriré de ella, ¡La
amo!.
— ¡Bien! —los ojos de Allison se oscurecen de
tanto odio y maldad que posee —. Como el señor
aquí presente, no decidió y dejó por las buenas
aquella mujercita, después de todos los ultimátum
que le di, ¡Tomaré medidas más drásticas!
— ¡Hasta que por fin te quitas esa máscara! —Se
para de golpe Cameron de la ejecutiva —. Planeaste
todo, ¡Por tú culpa está pasando toda esta situación!
— ¡Si fui yo! —Se levanta Allison también de su
asiento —. Cada cosa, cada detalle y no es nada
comparado con lo que viene —una sonrisa maliciosa
surca sus labios —, pero tú —le señala con su dedo
índice —, ¡Eres el único culpable!
— ¡Eres una loca, eso es lo que eres! —grita ya
fuera de sus cabales.
328
— ¡Puede que sí! —Ríe como demente —.
¡Debiste esperarme! ¡Nunca! Entiendes Cameron!
—Se torna melancólica —, yo siempre te he amado,
¡debes amarme por eso, porque estamos hecho el
uno para el otro! ¡Tú eres mío y yo soy tuya! —se
abalanza sobre Cameron intentando besarlo
desesperadamente.
— ¡¿Qué diablos te pasa?! ¡Suéltame loca! —
forcejea con ella, pues no se le olvida que es una
mujer.
— ¡Pues ésta loca te va a decir todo lo que tienes
que hacer! —los ojos negros se clavan en los verdes
—. ¡O tú hija se muere!
¿Hija? ¿Pero de qué está hablando?
— ¿De qué estás hablando? —interroga con
nerviosismo.
—De nuestra hija mi amor —la mira atónito,
puede que todo lo que él estuvo pensando durante
todos esos días sea cierto, la edad que aparenta tener
la niña de la foto es la misma que concuerda desde
aquella vez que pasó aquella situación.
— ¡No hables tonterías! —grita nervioso sin
saber qué hacer, qué decir más bien, todo aquello
solo complica más la situación en su matrimonio,
329
pero tampoco es capaz de dejar que una desquiciada
como Allison le haga daño a ese inocente siendo o
no siendo su hija.
—Si mi amor, es nuestra —el interior de Allison
no deja de carcajearse, pues todo está saliendo como
ella quiere y desea —. ¿No te has fijado que Carla
tiene tus mismos ojos? Un tanto más oscuros que los
tuyos, pues lo de nuestra pequeña niña son así,
porque mis ojos son negros, ¡Que ternura! ¿No te
parece? Mi tigre.
—Deja de llamarme así.
Atormentando empieza a pasearse por toda la
estancia de la oficina pasando su mano por su pelo.
Todo lo que ella dice tiene sentido.
—Carla —dice Cameron en un susurro.
—Sí —esta vez es Allison la que habla de
manera risueña —, ¿Te acuerdas que te dije que
cuando tuviéramos una hija se le llamaría así, pues
para que combine con tu nombre?
Todo aquello le remueve el pasado, es cierto,
acababan de tener una fuerte sección de sexo duro y
Allison se le ocurrió eso, mientras volvía a subirse
sobre él y empezar a moverse sin penetrarse sobre su
pene.
330
Tiempo atrás.
—Amor —dice de manera sensual —, algún día
vamos a tener hijos —dice ella si preguntar, pues así
era, es y siempre será, Allison no le gustaba y no le
gusta un no por respuesta, para ella siempre las
cosas se tenía y se tienen que hacer a su manera,
como ella diga.
—Para que hablas de eso Allison —un jadeo
estruendoso sale de la garganta de él, al Allison
bajarse más para abajo y pasar la lengua por la punta
de su glande de la prominente erección que se
empezó a formar en su entrepierna.
— ¿Cómo que porque? Amor, tú eres mío y yo
soy tuya, por lo tanto llegaremos a viejitos juntos y
se supone que uno tiene hijos.
Aunque el tema la fastidiaba en gran manera,
Allison no ve su vida siendo madre, cambiar, el
alcohol, las drogas, sexo del fuerte y rudo, las
noches de fiestas por pañales, biberones, noches de
vela y amamantar, claro que no, sus pechos se
caerían, contrataría a unas niñeras, suficientes como
para no tener que hacer nada con el mocoso,
Cameron había heredado una fuerte y muy grande
herencia de parte y parte.
331
—Claro y le contratamos niñeras para que los
cuiden, los no, la cuiden ¡sí! será niña y le
pondremos Carla —agrega la mujer que continúa
repartiendo lamidas y mamadas, besos a toda la
erección del muchacho, Cameron siempre fue y ha
sido bien dotado.
Cuando él susodicho iba a hablar, Allison se llevó
todo lo que le cabía de la prominente erección de
Cameron a lo profundo de su garganta, arrancando
de él, gemidos de placer y lujuria impidiéndole
hablar, Allison era toda una experta en eso.
A si se basaba su relación, fiestas, alcohol y sexo
y una que otra vez Cameron llego a probar drogas,
cosa de la que siempre se ha arrepentido.
Actualidad.
¿Cómo no tener miedo a que su mujer lo
rechace? cuando se entere de su pasado, ¿Cómo no
temer por la vida de un inocente?, cuando quien está
amenazando a esa pequeña vida es una desquiciada,
¿Y que sobre todo se hace llamar su madre? Además
él es su ¿padre? ¡Dios que estresante! puede que él
sea su padre como puede que no, no puede olvidar
que ella le fue infiel con aquel hombre… su
nombre… es… es… ahg no logra recordarlo, pero sí
recuerda un tanto su rostro, ni modo que lo recordara
332
al detalle, han pasado 8 años de aquello
seguramente, no, es seguro que el hombre ha
cambiado y quién sabe, sólo la cacho de infiel con
él, pero quien sabe con quién más.
—Esos momentos tan deliciosos, podríamos
rememorarlos —la voz de Allison le trae devuelta,
para así observar como ella camina sensualmente
hasta él, mordiéndose el labio inferior —, siempre
tuve una fantasía, ¿Quieres saber cuál es?
Allison, es tan perversa y pervertida que tan solo
con tener a Cameron enfrente ella ahí, guapo, si saco
y sin importarle que ella no despierta nada en el,
solo lastima y enojo, se excita, hasta el punto de
mojar sus bragas.
— ¡No me interesan tus fantasías! —indiferente
Cameron le dice.
— ¡A mí sí! —ríe —. Siempre quise que me
tomaras, duro, fuerte, desde atrás, imagina en este
momento cómo sería tu erección grande y vigorosa,
caliente entrando por mi culo, dándome duro, contra
ese escritorio —Allison empieza a tocar sus pechos
y su cuerpo —, estoy húmeda, muy húmeda, ¡por ti!
—No me interesa y ¡basta ya! ¡Deja de hacer eso!
¿Es que no vez que te estás rebajando?, no
333
despiertas nada en mi, podrías ahora mismo, abrirte
de piernas y empezar a masturbarte pero ni aún así,
me despertarás nada —habla de manera tajante.
Llenándose de más odio y ganas de venganza
Allison deja de tocarse y sus ojos se oscurecen, si
está excitada como ninfómana, prometiéndose a sí
misma que más tarde buscaría con quien bajarse la
calentura y tener un orgasmo, pero ahora seguir
concentrada en lo que estaba.
—Sabes, lo primero que quiero que hagas es que
todos los días, almorzarás conmigo, no me importa
lo que tengas que hacer para estar todos los días a la
misma hora en el restaurante de siempre, sin falta.
— ¡Maldita víbora! ¡Tengo mujer en casa,
manejo una empresa que bien sabes qué pequeña no
es!
—Poco me importa —hace un gesto para parar
las palabras que Cameron pretendía decir —. Nada,
o tú hija esa mocosa la paga.
— ¡¿Cómo puedes asegurar que es mi hija?!
Puede ser también de ese hombre, del cual no
recuerdo su nombre o tal vez de algún fulano.
— ¡¿Y mientras tanto qué?! ¡¿Prefieres que haga
que la escuincla sufra poco a poco hasta morirse,
334
mientras averigua?! —se ríe con maldad.
—Eres tan despreciable Allison, tan poca cosa —
le habla con desprecio Cameron.
—Sí, sí, lo que digas —se muestra fuerte, pero en
el fondo de su corazón negro, su amor enfermizo por
el magnate, se retuerce de dolor y odio, dándole
ganas de acabar con todos a su alrededor —quiero
que a tu mujercita la trates indiferente, que no le
pongas atención, que no la busques, pero sobre todo,
no me quiero enterar que dormiste tan siquiera con
ella.
— ¡Es lógico que duerma con ella, es mi mujer!
— ¿y? ¡¿Prefieres acaso que aparezca, violada,
descuartizada, estrangulada, golpeada o mejor con
un tiro en cada miembro de su cuerpo?!
Cada parte del cuerpo de Cameron se pone rígida,
el imaginarse a su pequeña en aquella situación, le
da un miedo que nunca pensó sentir.
— ¡No! —de manera refleja dice.
—Muy bien —aplaude —, no faltes a nada, tengo
ojos en todos lados, te amo, amor —tomando su
bolso se retira dejando a Cameron más atormentado
que siempre.
335
Tendría que tomar medidas drásticas, empezando
por el personal de seguridad, no puede permitir, que
nada le pase a su Mel, aunque la nueva altitud que le
toca tomar la lastimara y mucho eso lo sabe.
336
biblioteca, me haría muy feliz, se le llama Eres
mía.
Besos y abrazos desde R.D.
Mariana
337
Capítulo 24
338
Melanie a pesar de la situación en la que se
encuentra, buscó un poco de paz en los estudios,
logrando pasar los exámenes con un buen promedio,
no decepcionándose y pasar a si al último año.
—Mel —Vicky
—Perra —Laura.
—Zorra —Morgan.
—Preciosa —saluda Nick.
Los guardaespaldas intentan acercarse, pues ellos
no reconocen a los jóvenes, que se acercan a la
mujer de su jefe.
—Tranquilos muchachos, ellos son mis amigos
—les detiene y luego le señala al grupo de jóvenes.
—Disculpe señora, no teníamos conocimiento de
los rostros de los de los jóvenes —se disculpa él que
está a cargo del escuadrón de seguridad de Melanie.
—Descuida —le resta importancia y les da una
cálida sonrisa a los 4 chicos.
Luego se voltea y con emoción corre a abrazarse
a sus amigos y uno a uno con lágrimas en los ojos.
— ¡Los extrañe! ¡No saben cuánto!
339
— ¡Y nosotros a ti! —dicen los cuatro al unísono.
—Ahora —dice separándose del cálido abrazo
—. Vamos todos a las camionetas, nos están
esperando.
—Claro —dice Nick.
Todos toman sus maletas y rápidamente los
hombres de seguridad se acerca para ayudarles.
—Vaya, pareces la primera dama —se burla
Nick.
—Idiota —le golpea suavemente el hombro
Melanie juguetona.
Al llegar todos a la salida del aeropuerto, se
montan en las camionetas luego de que el equipaje
de Laura, Vicky, Morgan y Nick fuesen guardados
en ambas cajuelas de las camionetas.
Ya en marcha inician una agradable
conversación.
—Como soy el único chico y por supuesto el más
guapo que conocen, prefiero que me dejen en el
edificio que vive mi hermano, no está tan lejos de la
casa de la señora primera dama, me pueden dejar a
una calle…—no termina porque la temblorosa y
miedosa voz de Melanie le interrumpe.
340
— ¡No! —grita sorprendiendo a todos inclusive a
los guardaespaldas que son dos, los cuales se
encuentran con ellos.
— ¿Señora todo está bien? —rápidamente se
pone en alerta el chico que conduce.
—Sí, todo está bien.
—Mel, no todo está bien, mira nada más estás
hecha un manojo de nervios, hasta estás temblando
—dice Vicky y empieza a tomar las manos de
Melanie. Todos se ponen en alerta.
Y cómo explicarle ella, que tiene tanto miedo de
que ellos salgan solos sin protección y que esa
desgraciada de Allison los esté esperando para
atacarlos en cualquier momento.
Se tranquiliza ella mentalmente y se dice a sí
misma que nada pasará, que solo está siendo
paranoica y es algo que no debe, debe mantener la
calma y no alterar a nadie.
—No, no es nada, solo es que creo conveniente
que te llevemos a casa, a… si pasamos más tiempo
juntos, si es eso —se retuerce los dedos nerviosa.
—Entiendo, Claro —entre Nick quien es el que
habla y las chicas y él se dedican una mirada de no
341
estar de acuerdo con lo que Melanie les dijo.
Después de que le pasaran la dirección del
edificio en el cual vive el hermano de Nick, Noa,
llegan al lugar se despiden de su amigo y se
encaminan, a la mansión Danielson.
342
personal que se encuentra en esta en especial a
Cristine.
—Chicas, ella es Cristine, la nana de Cameron y
mayordomo y ama de llaves de la casa —les dice
después de que ella llamara a la señora mayor y ésta
esté enfrente de ellas.
—Cristine, ellas son Morgan, Laura y Vicky,
vienen a estar conmigo unos días, mis amigas.
—Bienvenidas señoritas.
—Oh, muchas gracias señora, pero eso de
señorita, conmigo, no va —Vicky.
—Conmigo tampoco —Laura.
—Y mucho menos conmigo —Morgan.
—Bueno Cristine, ya ves nada de señoritas para
estás mosqueteras —Se burla Melanie.
Cristine sonríe, pues hace ya muchos días que a
Melanie una sonrisa no se le veía en ese hermoso
rostro.
—Niñas, chicas para ustedes soy Cristine.
Después de las presentaciones todas son
conducidas a la segunda planta de la casa por
343
Melanie y quedan más impresionadas al ver tantas
habitaciones a cada una se le asigna una, pero
continuas, después se ayudan mutuamente entre las
recién llegadas y la anfitriona para arreglar todas las
cosas, de cada cual.
Los segundos se convierten en minutos, los
minutos en hora, así pasa el almuerzo en un
agradable ambiente, la tarde llega en una plática en
la que Melanie logra desahogarse y poder contar lo
que le atormenta, pero no contando lo de las
amenazas, al final de contarles todo, las chicas
tienen unas inmensas ganas de matar y estrangular a
la víbora de Allison y al estúpido de Cameron, por
idiota.
344
Cuando terminan de cenar, pasan a la sala y
pasada media hora se escuchan las llantas de unos
autos estacionarse, entre las mujeres se miran.
El corazón de Melanie empieza a latir como loco,
cuantas ansia tiene retenida de que todo fuese como
antes y de que ella se parará a recibirlo y él le diera
esos besos de los cuales hace días no disfruta y uno
de esos abrazos que la hacen sentir protegida, pero
ya nada es así, le da pique que Cameron prefiera él
resolver las cosas sólo, cuando se supone que son un
matrimonio, y deben de estar uno para el otro y
resolver cualquier cosa juntos.
También es entendible que hay cosas de su
pasado que tal vez le atormenten y sean tan
dolorosas como vergonzosas, que él aún no quiera
desenterrar.
¿Cómo tomaría él las visitas? Bueno ya que, una
noche le dijo pero terminaron discutiendo y ya ni
sabe si él se acuerde.
Cameron Danielson tan imponente y guapo como
siempre ingresa por las puertas de color caoba de la
mansión y por un momento la tristeza de que otro
día más su pequeña no está para recibirlo, se obliga
a que todo rastro desaparezca y camina por el
recibidor y es cuando se da cuenta que en la sala hay
345
tres pares de ojos que lo observan fijamente y un par
de ojos que no lo miran, esos azules tan hermosos no
lo miran y le parten el corazón.
Las dueñas de aquellos tres pares de ojos, las vio
en diferentes informes de cuando él mantenía
vigilada a Melanie y la última vez que vio aquellas
chicas en persona pues en sus visitas y estrategias
misteriosas para poder ver a su mujer, las llegó a ver,
la última vez fue en la discoteca donde él derramó la
bebida en el vestido de su mujer.
Recuerda perfectamente que unos días atrás su
mujer le había comunicado que sus amigas venían a
pasar una temporada con ella, pero aquella
conversación solo término en una discusión que
cada vez pone más distancia entre él y su mujer.
—Buenas noches —después de haberse quedado
en trance, observando a las chicas mientras
rememoraba los momentos de donde se habían visto
o él las había visto a ella decide saludar y hacer acto
de sus buenos modales.
—Buenas noches —responden las tres voces.
Mientras Melanie y Cameron sólo se dedican a
mirarse por el rabillo del ojo y por debajo de sus
espesas pestañas.
346
—Sean bienvenidas, están en su casa.
¡Vaya! Ahora la sorprendida es Melanie, cuando
llegó no pareció que se acordara del asunto de sus
visitas, demostró lo contrario.
—Éste —Melanie se aclara la garganta —Laura,
Vicky y Morgan —presenta a cada una señalándoles
mientras menciona sus nombres —Chicas, él es
Cameron, eso ya lo saben.
Una punzada de dolor atraviesa el pecho de
Cameron al escucharla presentarlo sin decir que él es
su esposo. Pero rápidamente recuerda que no debe
de demostrarse débil delante de ella, tiene que crear
una coraza para ella, aunque eso la lastimará, pero
mientras tanto es lo mejor, no olvida que Allison le
dijo que tiene ojos en todas partes, eso fue lo que
quiso decir, un asunto que le preocupa bastante,
debe de hablar con Jack, arreglar rápidamente aquel
asunto, solo hombres de confianza pueden estar
cerca de Melanie.
Recobrando la compostura le da una mirada que
brinda calidez a las chicas, pero estás no olvidan que
ese estúpido hombre endemoniadamente guapo está
haciendo sufrir a su amiga, por lo que aprovechan y
como siempre parece que sus mentes están
conectadas les dedican una mira fulminadora.
347
Cameron rápidamente capta la indirecta y se da
cuenta que en estos momentos él no es del todo del
agrado de las tres jóvenes de la misma edad de su
mujer.
Por primera vez en día las miradas de los esposos
Danielson se encuentran, pero la gélida mirada de
Cameron a su mujer, hace que algo más se rompa en
lo más profundo de su ser.
Para él no pasa desapercibido, la tristeza que
surca en esa mira tan eléctrica y rápidamente sin
despedirse ni tan siquiera dirigir una mira a las
invitadas, camina a zancadas a las escaleras y sus
ojos se llenan de lágrimas que no permite derramar,
pues se niega hacerlo, desde aquel doloroso
momento de su vida en el cual tuvo que enterrar a
sus padres jamás ha vuelto a derramar lágrimas.
Ahora reconoce que la cobardía de no tener el
valor suficiente para decirle a Melanie lo que estaba
pasando y lo de su pasado le costará mucho.
Pero sin embargo la Magdalena de Melanie no se
contiene y sus ojos rápidamente se llenan de
lágrimas y permite derramarlas sus amigas
rápidamente se acerca a ella y le abrazan.
348
—Ssh, Mel, calma, esta situación puede que se
arregle —trata de tranquilizarla Laura, mientras las
otras dos sólo le abrazan y acarician su pelo.
—Yo… no… Sé —habla entrecortada por el
llanto —, puede que nunca vuelva a tener paz —un
sollozo más grande sale de sus entrañas —Hasta…
que… esa… mujer… no… nos deje… en paz.
Trata de calmarse y lográndolo un poco dice:
—Me mira tan distinto, que me parte el corazón,
está más delgado y ¿Cómo no?, no come bien, nada.
Después de calmar a su amiga la convencen de
tomar una siesta y así se retiran a dormir todos.
349
Capítulo 25
350
Las tarjetas de amenazas cesaron un poco, pero
una cada tres o dos días suele aparecer por donde
quiera que Melanie suele moverse, le llena esto de
un mayor temor al tener a sus amigas ahora a su
alrededor y pensar que les pueda pasar algo por su
culpa le mantiene en un constante nervio, tanto que
por las mañanas suele vomitar todos los días, come
el doble, pero algunos alimentos le provocan
náuseas y vómitos, unos constantes mareos les
atacan, pero todo ella se lo achaca a que es por el
estrés.
Luego de que hace unos días recibiera un
mensaje con una foto de su padre ingresando a su
empresa se puso temblorosa y le atacaron los
nervios, haciendo de esto que Melanie llame a su
padre cada día, hasta tres veces al día, despertando
esto un tanto de curiosidad tanto en las chicas como
en Richard Walker, él feliz porque más a menudo su
hija le busca más, pero un tanto pensativo porque no
es normal escucharla tan nerviosa al hablar y que le
pregunte constantemente que si él ha escuchado algo
o visto algo extraño.
También Melanie llama constantemente a su
nana, para saber lo mismo, despertando también la
inquietud en la mujer.
351
En días anteriores Cameron, hizo una reunión
muy seria con Jack, en el cual trataron el asunto de
la seguridad de su esposa y de la casa, no puede
permitir que su mujer, su nana y las amigas de su
mujer corran algún riesgo. Luego de la extensa
conversación y de plantear la reorganización y
distribución de los hombres de seguridad, los
hombres de mayor confianza de Jack él lo pondría
en el puesto de algunos que reubicaron y lo pusieron
en nuevos puestos, los más nuevos, dejarlos bajo
observación, para conocerlo, todo esto lejos de las
mentes de los hombres de las amenazas que recibe la
mujer del jefe.
El padre de Cameron, el cual tenía el mismo
nombre que él, tenía muchos negocios y él y Jack se
conocían desde muy jóvenes, a pesar de que Jack no
tenía el mismo nivel de vida que él, nunca tuvo
diferencia alguna con él.
El padre de Cameron, siempre estuvo preparado
para cualquier cosa al igual que su mujer, cuando
ambos murieron en un aparatoso accidente aéreo,
poco tiempo después se leyó el testamento de ambos
en el cual a Jack la pareja de casados, en ese tiempo
recientemente muertos, les dejaron una agencia de
seguridad de cinco pisos, una casa bastante amplias
y una gran suma de dinero en el banco, por lo que
352
Jack con el tiempo supo invertir ese dinero y hoy en
día tiene suficiente dinero para vivir él y su familia.
Planteado el plan procedieron a ejecutarlo.
Cameron cada día con la maldita tortura de
escuchar a Allison, hablar y hablar y verla y tener
que soportarla, su humor no es el mejor.
Pero utilizando sus influencias, contrata a unas de
las agencias de investigación más importante de
todo EE.UU, para investigar acerca de la niña y
acerca de ese hombre con el cual él encontró a
Allison en el acto de la infidelidad, harto de todo,
solo quiere aclarar ese asunto y poder respirar en paz
y tal vez así poder abrirse con su mujer y poder
contarle todo, esperando él que no sea demasiado
tarde.
353
—Estoy, haciendo unos tacos, al estilo mexicano,
con sus salsas, para acompañarlos de un jugo de
naranja, ahora estoy preparando las carnes con
vegetales y las salsas —le explica Cristine, quien no
evita mirarla y sonreír, ¿Será posible que aún no se
haya dado cuenta?
—Oye, ¿Por qué te ríes? Apura, por favor, tengo
hambre —gimotea ansiosa, sentándose en un
taburete de la isla de la cocina.
—Oh querida, sólo me divierte verte tan ansiosa.
—La comida es uno de los mayores placeres de
mi vida —ríe un poco para luego llamar a gritos a
las chicas.
Cristine luego de negar con la cabeza procede a
seguir cocinando junto a las demás chicas del
servicio.
354
después de darse entre las cuatro las buenas noches,
Mel decide darse un baño.
Lava todo su cuerpo y cuando siente que está
totalmente limpio sale de la ducha y se envuelve en
una bata de baño, para ir a cepillar sus dientes, es
cuando siente que todo se le devuelve y empieza a
expulsar todo lo que ha comido.
Cameron quien entraba justamente en ese
momento y iba directo al closet a buscar algo que
ponerse, pues la pijama que usaba días anteriores
esta sucia ya, en ese instante escucha las arcadas de
Melanie y preocupado se acerca abriendo la puerta
del baño de golpe y encontrando a Melanie
vomitando sin control.
Rápidamente le toma el cabello que se le había
zafado del moño improvisado y lo toma en sus
manos acariciando la espalda de ella.
Cuando Melanie de terminar de expulsar todo,
Cameron le pasa una toalla para que limpie sus boca
y ayudándola a levantarse, ve su lindo rostro pálido
y llenó de lágrimas por estar vomitando.
—Mel, ¿Qué tienes? —después de días Cameron
parece tener algo de humanidad con ella y
demostrarle algo de cariño.
355
—Cam, no me siento bien —logra articular antes
de desmayarse en los brazos de Cameron.
El cual desesperado al ver a su mujer
desvanecerse en sus brazos empieza a llamar a gritos
a Cristine y los chicos de seguridad, mientras sale de
su habitación y baja las escaleras lo más rápido que
su cuerpo le permite con ella en brazos.
—Ah, ¿Pero qué le sucede? —pregunta Cristine
apenas llega y ve a Cameron con su mujer en brazos,
ella en una bata de baño y el con el pantalón, zapatos
y camisa del traje que llevaba en la mañana.
—No sé nana —murmura con angustia —, sólo
se desmayó.
En ese instante bajan las chicas en pijama y al ver
a su amiga en aquel estado se desesperan y
empiezan a decir que algo le pasa y a hacer
preguntas por los nervios.
Cameron le ordena a Cristine que prepare algo de
ropa bien cómoda para Mel y que ella vaya al
hospital central en unas de las camionetas, que él se
adelantara con ella en otras dos que allá se ven.
Mientras a las chicas les pide que guarden la
calma y que en las mantendrá informadas.
356
A gritos Cameron pide que se apuren a los chicos
de seguridad y al llegar al hospital, ¿Quién no sabe
quién es él? Pide rápido que atiendan a su mujer y
luego de dar detalles del tiempo que ella lleva
inconsciente que son aproximadamente 25 minutos y
decirle al doctor de guardia que sólo sabe que ella se
desmayó y ya, pasan a Melanie a una habitación, al
principio quieren que él se quede afuera pero nada ni
nadie lo hace apartar de su mujer e ingresa a la
habitación con ella, ja, no la dejará sola y menos ella
no teniendo nada de ropa abajo.
Al poco tiempo llega Cristine y cambia a Melanie
de ropa la enfermera, para luego ponerle un catéter y
ponerle un suero por éste, para después extraer
sangre de uno de los brazos de la chica, la mandan
de urgencia a analizar al laboratorio.
Cristine muerta de los nervios espera en la sala de
estar y Cameron en el cuarto no deja de caminar de
un lado a otro y pasar su mano por el cabello y tirar
de este.
357
por la puerta en el preciso momento en el cual él
magnate neoyorquino pensaba salir a buscarlo.
—Lamento la tardanza señor Danielson, ya tengo
los resultados de los análisis realizados a su esposa
—dice el médico observando a la paciente, el
imponente hombre y la plantilla donde tiene los
resultados de los análisis.
— ¡Vaya! Confieso que pensé que yo mismo
tenía que ir a hacer el trabajo de los bioanalistas —
Cameron tan duro como siempre —. ¡Y dígame!
¡¿Qué tiene mi mujer?! ¡¿Por qué se desmayó?!
—Felicidades ¡Van a ser padres! Por eso su
esposa se desmayó.
—Padres —murmura Cameron para sí mismo,
padre, puede que por segunda vez, como puede que
no.
Pero “bebé” ¡Sí! le llamaría así hasta saber que
es. Bebé es fruto del amor de él y su mujer, es muy
diferente.
—Por su reacción sé que no lo sabía y al parecer
su esposa menos —la voz del médico le saca de sus
pensamientos.
358
—No, no lo sabíamos, ¿Y cómo están? ¿Qué
tengo que hacer para que estén bien? ¿Por qué ella
no despierta? ¿Acaso hay algo malo? ¡Dígame! —
nervioso pregunta.
—Calma señor, según los análisis ella está muy
bien, puede que haya sido porque no tiene nada en el
estómago que se haya debilitado tanto.
—Sí, vomitó mucho —concuerda el magnate.
—Puede que despierte luego de unos minutos, el
suero que le pusimos es muy rico en vitaminas, eso
le ayudará a recuperar fuerzas. Ahora me retiro,
tengo otros pacientes que atender.
—Claro, que tenga buenas noches, por favor al
salir hay una señora que se encuentra esperando con
unos hombre de seguridad, dígale que por favor, que
pase, gracias por todo.
El doctor con un asentimiento se retira e
inmediatamente casi entra Cristine y cuando
pretenden preguntar la voz de Cameron le
interrumpe.
— ¡Está embaraza! ¡Estamos embarazados! ¡Voy
a ser padre nana! —la felicidad es notable en el
rostro de Cameron.
359
—Lo sabía, ella y ese apetito, ese brillo en su
mirada, no sé qué raro no se dio cuenta.
Cameron corre abrazarla feliz.
Después de un rato le pide que vaya a casa, puede
que él y Melanie se tengan que quedar hasta mañana
y le pide que no diga nada del embarazo todavía,
ella se retira no sin antes besar a Melanie en la frente
y a Cameron y felicitarlo.
360
El susodicho reacciona ante el fuerte llamado y
moviéndose para estar a su lado rápidamente la mira
preocupado.
—Despertaste, ¿Qué pasa? ¿Estás bien?
—Si lo estoy, es sólo que tengo hambre y quiero
saber porque estoy aquí.
—Lo de la comida lo resolvermos pronto, estás
aquí porque te desmayaste.
— ¿Por qué me desmayé?—pregunta
preocupada.
—Porque aquí —Cameron pone una de sus
grandes manos en el vientre que ya no es tan plano
de Melanie, ahora que lo toca se da cuenta —, está
creciendo, bebé, ¡Estamos embarazados!
Bebé, Melanie se queda en trance, todos aquellos
síntomas es por su bebé, tan descuidada, el sólo
pensar que lo pudo haber lastimado por despistada
se enoja con ella misma, su periodo… Dios ese tiene
uff, mucho que no lo ve.
Una sonrisa se dibuja en el rostro de Melanie.
— ¡Vamos a ser papás! —exclama feliz y toca su
vientre junto con la mano de Cameron.
361
Los dos se miran y ella derramando lágrimas de
felicidad, ambos en un impulso se besan, tanto
tiempo anhelando aquel beso, un beso cargado de
amor, de pasión, de felicidad.
Sonrojados se separan y ninguno quita su mano
de la nuca del otro y tampoco del vientre dónde está,
bebé.
Ambos se prometen proteger a ese bebé de todo,
así les cueste la vida, Allison y sus maldades no le
tocaran ni un pelo.
Una nueva vida, una nueva luz y una nueva
esperanza, fuerza y lazo los une.
Tatatatan.
¡Hello!
Bebé, oh mi Dios.
¿Qué creen que pasará?
En el próximo capitulo si odian a Allison, la
odiaran más.
No olviden su opinión es importante para mí y
su apoyo también.
362
Les quiere desde R.D.
Mariana
363
Capítulo 26
364
—Haré todo por ti, bebé, acabo de enterarme de
tu existencia y ya te amo, mamá te ama, Bebé —le
habla tiernamente a su vientre mientras lo acaricia.
Cameron mira y escucha embobado aquella
escena, todas las madres deberían de ser así, amar a
sus hijos más que a su vida desde el primer
momento en el que se enteran de su existencia, pero
no, existen otras mujeres tan mezquinas como
Allison, que juega con la vida de esa inocente, por la
cual él está prácticamente entre la espada y la pared,
amarrado de brazos, pero ese asunto pronto llegará a
su fin.
Sin poder evitar, estar emocionado y conmovido
con las palabras de su mujer a bebé y sintiendo culpa
por no decirle que bebé puede que tenga una
hermanita mayor, rápidamente coloca su mano sobre
la de ella y busca su mirada.
—Papá te ama también, bebé.
Una punzada de decepción abarca a Melanie al
saber que él al parecer no siente nada ya por ella,
Cameron nota la tristeza en la mirada de su mujer y
por cabezota le gustaría a él mismo darse unos
buenos golpes.
—También amo a tú Mami.
365
Un brillo más intenso se forma en los azules de
Melanie y sin poder evitarlo dice:
—Yo también te amo Cameron, pero no sé si ese
amor es suficiente para poder soportar todo lo que
está pasando, menos ahora que seré madre, tú amor
me lastima y mucho.
Cameron va a replicar pero justamente el doctor
entra por la puerta y se fija en las dos manos
inmediatamente que se encuentran en el vientre de la
chica.
—Ya veo que se enteró señora Danielson,
felicidades.
Emocionada Melanie murmura un gracias y el
doctor procede a tomarle la presión y decirle unas
cuantas cosas sobre su salud.
—Su estado de salud está muy bien, debe de
ahora en adelante comer saludable, pero ya eso se lo
dirá el ginecólogo, mañana temprano vendrá para
hacerle una ecografía y así poder saber el tiempo de
gestación que tiene y si hay algún cuidado especial
para su embarazo.
—Entiendo —dice Melanie.
366
— ¿Alguna cosa que necesite? —pregunta el
doctor.
—Sí. Tengo hambre y quiero comer.
—Oh, ya entiendo, señor Danielson estos
cambios son normales en el organismo de su esposa.
—Dígame usted doctor, ¿Puede mi esposa comer
algo cierto? —pregunta Cameron.
—La hora de comida ya pasó, son casi la
medianoche, pero en caso de que usted pueda
comprarle algunas cosas a estas hora, yo dejaré que
entre la comida.
—Entiendo, mandaré a uno de los guardaespaldas
a ese encargo o iré yo mismo.
—Siendo así me retiro pasen buenas noches —el
médico camina de manera rápida hasta la puerta y
abrir ésta para luego perderse del campo de visión
de ellos.
— ¿Qué quieres comer, qué quieren comer? —
pregunta el futuro padre refiriéndose a bebé y su
madre.
—Nosotros queremos… —sonríe —, una
hamburguesa grande con papas fritas y un batido
de… Ummm… Fresa, si fresa y para ya.
367
—Como digas, mandona —trata de aligerar el
ambiente Cameron, pues ahora que están solos, él no
puede simular que ella no le había dicho nada antes
de que el doctor entrada por esa puerta.
Girando sobre sus talones, camina con elegancia
como siempre y se pierde por la puerta para ir a
darle la orden de lo que la señora necesita a un chico
de los de seguridad.
Pasa casi una hora desde que Cameron le había
dado la orden al hombre cuando justamente pensaba
salir a preguntarle a uno de sus compañeros, tocan la
puerta del cuarto y él rápidamente se para de la
camilla para apresurarse por dicho pedido, Melanie
no deja de hablar de su hambre.
Es el hombre el cual le entrega la bolsa con
comida para luego de disculparse por la tardanza
retirarse a su puesto.
Cuando Melanie, ve aquella bolsa, rápidamente
como puede sin lastimarse el jodido catéter, se sienta
sobre la cama y apenas Cameron llega a su lado le
quita la bolsa y sacando su gran hamburguesa
empieza a ingerir, dentro de dicha bolsa también hay
una hamburguesa para Cameron al éste extraerla ella
se le queda mirando.
368
—También tengo antojo —ambos ríen.
369
—Cameron —la voz de Melanie hace que
Cameron aparte la mirada de su cuerpo y la mire con
las pupilas bien dilatadas de deseo.
—Yo —traga saliva, en su voz se puede notar su
excitación —vamos a bañarte —inútilmente trata de
ocultar su excitación en los pantalones.
Melanie ríe por lo bajo, no ha hecho nada y su
esposo anda todo urgido, eso le llena de una
satisfacción al saber que ella despierta a su marido
en mucho sentidos.
Luego del intenso baño, pues Cameron tuvo que
hacer el mayor esfuerzo para no usar sus manos en
un simple baño, ganas no le faltaban, tanto tiempo si
tocarla y ahora cuando le tocó tocarla solo era para
bañarla y no para darle placer y dárselo él.
Después de cambiarla y que Melanie refunfuñara
por alimentos y calmarla un poco, un médico que
debe rondar los cincuenta años, entra por la puerta
del cuarto, con unos enfermeros que traen detrás de
él una máquina y que ellos dieran un cordial buen
día, proceden hacerle la ecografía, primero vaginal,
donde Melanie llena de temor y vergüenza pudo
dejar que le hicieran, ese aparato algo incómodo,
luego, un gel frío en el vientre de Melanie y con un
pequeño aparato lo empiezan a esparcir y
370
rápidamente la pantalla se pone en blanco y negro, el
doctor les explica dónde está el embrión que es
bebé, una pequeña semillita es lo que ellos aprecian
en la pantalla el doctor continúa haciéndole
preguntas de rutina y luego lo ponen a escuchar el
latir del corazón de bebé y ambos se emocionan
tanto que Melanie no tarda en derramar lágrimas de
felicidad. El doctor les felicita y les dice que está
ella de 6 semanas y le pone la cita del próximo
control, se despide y se marcha, para que luego a
ella le den de alta y se pueda marchar.
371
El día del alta de Melanie del hospital no pudo
asistir a comer, como si la comida le pasará por la
garganta, con Allison lo cual la tiene bastante
insatisfecha y no deja de amenazar con hacerle daño
a la niña y a Melanie. Cameron se controla con saber
que ese infierno pronto acabará.
La noticia de manera precavida llegó a Nick y
otro que se puso feliz.
Mientras tanto tratan de mantener por ahora la
noticia de bebé Danielson en secreto lo más posible,
muchos no entienden y ambos padres sin saber se
congenian para inventar que la presa y que esto.
Días después.
Caminando Melanie por el parque de central
park, una chaqueta larga de cuero blanco y un
vestido negro un poco floreado con unos zapatos con
poco tacón de suelo marrón, camina distraída, una
parte del equipo de seguridad que ahora la acompaña
de manera extra se fueron con sus amigas a comprar
un helado, Ummm, helado, de solo pensarlo su
vientre suena y contiene las ganas de pasar su mano
sobre él, recordándose que puede estar esa mujer
372
cerca o algún miembro de la prensa acechando,
mejor no.
Pensando en que ella y Cameron no han discutido
más, pero que él aún guardando distancia aunque no
tanta, pues una que otra noche se ha quedado en su
habitación, se pregunta, ¿Por qué él actúa así? ¿Qué
le estará pasando?
Sumergida en sus pensamientos no se da cuenta
que una mujer rubia y un tanto más alta que ella está
a su lado caminando junto a ella.
—Veo que no tomaste en serio mis amenazas —
la voz fina, pero malvada de Allison le congela los
huesos, pero se obliga a ser fuerte.
—Siempre he sabido que eres tú. Aunque los
últimos días tus notas han parado de llegar, como los
mensajes.
—Eso no quiere decir que te haya dejado en paz
—sonríe malvada y angelical al ver pasar a unas
personas que la miran —. No dejes de caminar,
tengo a tus amigas ubicadas y créeme las puedo
matar y tus guardaespaldas no harán nada, pues ya
que el tiro estará en sus frentes o corazones —
murmura entre dientes sin una pizca de
373
remordimiento mientras no pierde esa sonrisa de
ángel.
Un miedo tan fuerte le recorre a Melanie que la
obliga a caminar sólo porque sabe que en cualquier
momento la vida de sus amigas puede dejar de
existir.
— ¿Qué quieres? ¿Por qué haces esto? —habla al
borde de las lágrimas.
—Sabes muy bien la respuesta a ambas preguntas
—ahora la que se detiene es ella y tal parece que
estudio todos los movimientos de Melanie pues
busca un ángulo en el cual los guardaespaldas de
Melanie no la identifiquen —. Cameron, esa es la
respuesta.
Melanie pretende hablar pero una mano de
Allison la detiene.
—Óyeme bien porque no lo vuelvo a repetir,
además tengo cosas que hacer —ríe —. Ya que no
captas mis advertencias y el idiota de Cameron no
quiere ceder tampoco, además tiene miedo es algo
que luego te diré, ¿Qué cosa no? ninguno quiere
dejar al otro, pero, ¿Qué pasaría si de la noche a la
mañana, Richard Walker o Nick, Laura, Morgan,
374
Vicky, tú nana, unos de ellos aparece muerto,
descuartizado? Dime.
Melanie no evita temblar de miedo y de angustia,
sus ojos se llenan del agua salada y siente la
necesidad de proteger su vientre, pero aquello no
sería lo correcto ella se enteraría y entonces le haría
daño a bebé.
— ¿Qué quieres? Por favor no les hagas daño —
solloza llena de impotencia por estarle rogando a esa
mujer.
—Ya deja el drama —sonríe al saber que su
objetivo lo logró —, quiero que te vayas lejos que te
marches, que te alejes de mí hombre que no vuelvas
jamás —toca un brazo de la petrificada Melanie y
clava sus uñas por encima de la piel de la chaqueta
de Melanie y aprieta su brazo hasta provocarle dolor
—. Aléjate o empiezo a acabar a tu gente, ¿Tú Papi
o tus amigos o tú nana primero? Decídete.
—Estás loca suéltame —forcejea hasta lograr
zafarse —. Cameron no es tú hombre, es mío, ¿Se te
olvida que él es mi marido y yo soy su mujer? y él
no tiene miedo —aún muriendo de temor no le deja
demostrar que sus amenazas no le afectan tanto, se
hace la fuerte.
375
—Aún tienes los ovarios para enfrentarme —se
ríe llena de maldad —, mí Cameron, es mío, siempre
lo fue y siempre lo será, te preguntas porque su
actitud, lo hace porque yo se lo pedí, porque él sabe
que puedo matar a esa niña y no me importaría, aún
siendo nuestra hija.
La cara de Melanie está plasmada en terror y
sorpresa, dolor por saber que Cameron no tiene los
pantalones para decirle aquella verdad.
—Oh, vaya, ya veo que no te había dicho nada,
pues ya lo sabes en cuanto te marches formáremos
una familia y tú solo serás un recuerdo el cual
borraré con el tiempo, estás advertida, vete o acabaré
con todos los que amas.
Gira y se marcha sobre sus talones dejando a
Melanie petrificada en su lugar, temblando de
miedo, enojo, terror y dolor, pues tiene que hacerlo o
muchos sufrirán.
Maldita Allison.
Otro capítulo, espero que lo disfruten así como
yo lo disfruté escribiéndolo.
Besos y abrazos desde R. D.
376
Mariana
377
Capítulo 27
378
—Pero si acabamos de llegar —dice Morgan —,
además, mira tú helado.
Con tanto miedo y nervios se le quitaron hace
rato las ansias y ganas de comer helado.
—Lo sé, pero no estoy cómoda aquí, tampoco
pretendo irme y que ustedes se queden, así que nos
vamos, el helado se lo pueden comer, ya no quiero.
Todo eso de no dejarlas es simplemente un
pretexto, bien podría dejar a las chicas ahí con lo
seguridad y nada pasaría, pero eso fuera en otros
tiempos cuando una psicópata mujer obsesionada
con su marido el cual le ha mentido, no estuviera
amenazando sus vidas por culpa de ella.
Las chicas sorprendida por el repentino cambio
de humor de la futura madre les hacen caso, pero
todo le parece extraño, cuando salieron de la
mansión ella estaba muy bien hasta feliz, los últimos
días estaba así de feliz, la noticia de bebé fue
magnífica, porque dado que los primeros días
cuando ellas habían llegado estaba muy tensa y
nerviosa, tan maravillosa ha sido la noticia de bebé,
que hasta el padre que tenía un carácter del demonio
los primeros días, está más pasable, aunque nunca ha
sido grosero con ninguna de ellas, si notaban como
trataba a su mujer.
379
En el vehículo Melanie no deja de retorcer sus
dedos en su regado y mirar para atrás como si
alguien la estuviera persiguiendo, a todos.
—Mel, estás muy tensa, eso no es bueno y lo
sabes —habla con cautela Vicky, pues Melanie
sabiendo que cualquier información que circule
sobre su estado podría llegar a los oídos de la víbora
de Allison y está segura de que a esa mujer no le
temblaría el pulso para dañar a bebé.
—Vicky tiene razón, Mel, debes calmarte —
secunda Laura.
—Estoy de acuerdo con las chicas, relajante,
cualquier cosa que esté pasando aquí estamos para
apoyarte.
Mirándolas a las tres con un inmenso amor de
hermandad, sus ojos se llenan de aquel líquido
salado, ¿Cómo decirles que sus vidas están siendo
amenazadas por una psicópata? Que por su culpa
pueden morir.
Enternecidas con Melanie, las chicas se acercan
para abrazarla y preguntarle que porque está así, que
si pueden hacer algo y muchas preguntas más, ella
solo responde bajito que son las hormonas.
380
Cameron una vez más logra zafarse de la comida
con la víbora de Allison y rápidamente desaparece
de la empresa ahí no hay ningún trabajo que hacer y
ese sería el primer lugar en el que Allison lo
buscaría.
Decide cambiar de vehículo y en el
estacionamiento de la empresa siempre tiene uno
que otro, se dirige ahí y toma un auto rojo deportivo
y se dirige a la empresa de seguridad de Jack, ahí
tiene una reunión pautada sobre el asunto del
hombre que posiblemente al igual que él podría ser
el padre de Carla, si es que realmente la niña le
llaman así.
Antes de salir dio la orden de que los
guardaespaldas que lo escoltan siempre a él se
fueran a descansar o a su casa con la mentira de que
Jack lo buscaría en la empresa, pero solo es por ser
precavido, puede que Allison tenga algún infiltrado
en su personal, por eso ocultan él y su mujer a bebé,
pocas personas tienen conocimiento del estado de
Melanie.
Al llegar a edificio el cual Jack con el tiempo ha
expandido para hacerla más grande estaciona el auto
y se queda mirándola, tenía años de no ir por esos
rumbos.
381
Entrando por las puertas nadie le frena todos lo
conocen, muchos de los empleados de ahí están
desde cuando su padre vivía y los otros saben que
Cameron es como un hijo más para el jefe Jack.
Cuando las puertas que lo llevan al segundo piso
se cierran suspira pidiéndole a Dios que haya buenos
resultados sobre la búsqueda de ese hombre.
Al llegar al último piso debe de introducir una
clave y luego éstas se abren dando paso a la vista de
un escritorio de madera pulida y con portátil, lápiz y
demás a lo que no le presta atención, se encamina al
despacho de Jack el cual es insonorizado hace nota
mental de que debe de poner el suyo así también.
Entra si tocar Jack lo está esperando, sentado en
la ejecutiva negra, la decoración de la estancia es
como todo el lugar, neutra. En una de las sillas que
está enfrente del escritorio de Jack, está sentado un
hombre que ronda los 45 años, de cabello castaño
con una que otra cana y de una barba de candado
que le da más seriedad que de la que por sí ya porta.
—Buenas tardes, espero que me tenga buenas
noticias, estoy harto de la situación en la que estoy
viviendo —dice apenas entra fijando su verde
mirada en el hombre desconocido y luego en su fiel
mano derecha Jack.
382
Estira su mano en un apretón de brazos, para
luego con más familiaridad, por encima del
escritorio darse un abrazo con Jack.
—Efectivamente señor Danielson, el señor Jack y
yo lo estábamos esperando, para informarle que he
obtenido información importante.
—No quise entrometerme en tus asuntos, por eso
quise que esperáramos a que tú llegaras —le informa
Jack.
—Gracias Jack —le da un asentimiento y luego
dirige su mirada a el detective —, infórmenos —
dice sentándose en unas de las butacas al frente del
escritorio.
—No pudimos encontrar nada aquí, por lo que
traslade mis investigaciones a otros horizontes, por
medio de mis contacto y el breve detalle de las
características físicas que usted nos proveyó,
investigue moviendo influencias los lugares en los
que solía acudir la señorita Steele y dimos con
diferentes grabaciones en las cuales aparece él chico
que hoy en día es un hombre y por medio de las
fotos que pudimos obtener mi equipo de seguridad y
yo iniciamos un proceso con un sistema lo bastante
avanzado, dio mucha lucha pero finalmente aquí está
—concluye entregándole un folder negro de cuero
383
con el historial de vida de Will Film, definitivamente
igual que Allison Style o tal vez peor, el tipo no está
del todo limpio, pero según el informe exactamente
hace 8 años que cambió su vida.
—Necesito al señor Film aquí, cuanto antes —
dice Cameron cerrando la carpeta y mirando al
detective fijamente.
—Como diga señor Danielson, como sabrá el
señor Film querrá saber el motivo del porque se le
requiere en este país, ¿Qué debo decirle?
—Dígale que es departe de mi persona y que se
trata de Allison Style.
—Muy bien, me retiro entonces —el investigador
se pone en pie.
—Como guste, sus honorarios serán depositados
en cuanto esté el señor Film en éste territorio y
créame que será muy bien recompensado, en caso de
no contactar conmigo para cualquier cosa
relacionado con la investigación se puede contactar
con Jack, a él le puede decir las cosas como si me la
estuviera diciendo a mí.
—De acuerdo, pasen buenas tardes.
384
El investigador se retira a penas éste sale por la
puerta perdiéndose del campo de vista de Jack y
Cameron, éste último se desploma en la silla,
estresado, agotado, enojado, triste y feliz.
—Hay algo más, ¿Cierto? —le pregunta Jack.
—Sí —levanta su rostro y lo observa —. Voy a
ser padre Jack, puede que ya lo sea, Mel está
embarazada.
—Oh, muchacho —Jack da la vuelta y abraza a
Cameron —, esa es una muy buena noticia.
—Lo sé Jack, no sabes lo feliz que me sentí
cuando el doctor no los dijo, se que te enteraste que
tuve que llevar a Mel al médico, perdóname por no
decírtelo, pero ya te he dicho mis sospechas.
—Descuida.
—Me preocupa que Allison se entere e intente
dañar a bebé sin aún haber nacido, por eso estamos
manejando la situación con cautela.
—No le va a hacer nada, estaremos para
protegerlos —se refiere a Melanie y a bebé.
—Gracias.
385
Durante un tiempo más continua conversando,
sobre lo que será hecho en cuanto Will Film, pise
territorio americano.
386
—Mel —le llama tan fuerte y poderoso con esa
voz aterciopelada que le caracteriza, que hace que
cada médula de su ser tiemble y se erice.
Un sentimiento de tristeza y dolor le invade, pero
se niega a dejarlo fluir, esa será la última noche y
tiene que disfrutarla.
Sin cerrarse la bata camina descalzo fuera del
closet y cuando sale ambos se mira.
Sin mediar palabras la que da el primer paso y se
detiene para observarlo es ella, las palabras de
Allison llegan a su mente, tiene una hija, con esa
mujer y no le dijo nada, ¿Cuántas cosas más le
ocultará? Esa mentira le llena el corazón de enojo y
dolor, quiere gritarle y exigirle una explicación, por
eso su distancia hacia ella, ahora lo entiende todo, su
parte razonable le dice que no se fíe de Allison, pero
la otra sólo quiere que él le explique todo y gritarle,
sacar todo de su corazón.
Aleja todos esos pensamientos y continúa
acercándose, no permitirá que nada ni nadie se
interponga entre ellos esa noche.
La mirada de Cameron en el momento en el cual
ella había salido por esa puerta y se le puso enfrente
con aquellas prendas, se oscureció y el deseo que no
387
ha sido consumido nunca por ella y que lleva meses
obstinado se presenta, se ve tan sexy, con esas
prendas y su pequeño vientre abultado.
Acercándose Melanie por completo, se pone de
puntillas y pasa sus brazos por el cuello de su
marido, haciendo que él se incline.
—Hazme el amor, hazme tuya una vez más — ’y
por última vez “_ piensa y pide rozando sus labios
con los de él.
Perdiendo Cameron su auto control, se apodera
de los carnosos labios de su mujer y devorándola,
esa boca, con aquel sabor que lo embriaga, la aúpa y
sin apretar su vientre y caminando con ella a la cama
unas de sus manos quita la bata de seda y la arroja al
suelo, con cuidado la acuesta sobre la cama y se
separa de sus labios, e yergue sobre toda su estatura
la contempla, sofocada por el ferviente beso.
Apresura sus manos a desabotonar los botones de
su camisa y quitarse toda la ropa menos el bóxer
negro que en ese momento le aprieta tanto por su
prominente erección.
Mel lo observa con tanto amor y dolor, por tener
que dejarlo, porque él le ha mentido, porque nunca
388
conocerá a bebé, que dolor, ahuyentando las
lágrimas lo mira con profundo deseo.
Cameron desde las pantorrillas de Melanie va
dando besos a la piel de ella, besa sus muslo y besa
justo por encima de la tela traslúcida del encaje rojo
de las bragas de Melanie su clítoris y en sus labios
siente la húmeda de está.
Al Melanie sentir aquel beso, un gemido se le
escapa y moja más su centro.
Cameron continúa en la tarea de sus besos y
pasando justo por su vientre se detiene más ahí y lo
colma de besos mientras susurra “los amo”.
Ella siente ganas de llorar, lo difícil que será
alejarse de él.
Subiendo él por los sedosos senos de Melanie ella
sale de sus pensamientos y toma el rostro de él y lo
colma de besos hasta llegar a sus labios,
devorándolos como si hubiese estado en el desierto
días sin beber.
—Te deseo y te amo tanto, mi pequeña.
—Yo también Cam.
No importan otros solo ellos y su amor.
389
Cameron besa su cuello atrapa el lóbulo de la
oreja de ella tirando con sus dientes suavemente de
éste. Ella muerde su hombro, le besa el lóbulo de la
oreja, acaricia su espalda. Él lleva su mano a la
espalda de ella y le quita el sostén, dejando al
descubierto unos redondos senos que están más
grandes, pasa su lengua por la areola de estos, en
cada uno y luego se lleva uno de los duro pezones a
la boca, chupando y lamiendo, tirando suavemente
con sus dientes y Melanie a según sus pezones están
tan sensibles por el embarazo, está que ve las estrella
y solo gime y gime. Cameron le brinda la misma
atención al otro y cuando va a bajar las bragas de
Melanie ella lo detiene y lo hace girar quedando ella
ahora sobre él.
—Ahora me toca a mí —murmura con la voz
cargada de excitación.
Besa los labios de Cameron y luego su cuello, su
pecho se detiene en sus tetillas y chupando cada una,
se deleita escuchándolo gemir y gruñendo. Baja por
sus pectorales y besa cada cuadro del abdomen de él.
Toma entre sus manos el borde del elástico del bóxer
y sintiéndose atrevida lo baja y se los quita,
observando como la erección de Cameron apunta
hacia el techo, lo toma en sus manos y siente como
palpita y está caliente, las venas sobresalen tensas
390
por lo erecto que está. Empieza a mover sus manos
de arriba abajo y mira la cara de Cameron que se
mueve de un lado a otro mientras gruñe y jadea.
Cuando sus ojos se encuentran, ella mirándolo a los
ojos, baja sus labios y le besa la punta brillante y
rosa de su miembro y él no hace más que gemir. Ella
continúa besando todo el contorno desde la base de
su miembro hasta la punta y su cara roja por la
vergüenza pero esa noche es para disfrutar, se lleva
lo que le cabe a la boca de la erección y empieza a
dar mamadas suaves y luego rápidas y dura y
Cameron solo hace gozar de placer, entre sus manos
Mel tiene sus testículos y los toca suave mientras
continúa en su otro labor.
Cuando Cameron siente que no puede y que se
puede venirse en cualquier momento, la detiene por
un brazo y la acuesta, desgarra las bragas y se lleva
rápidamente el centro de ella a la boca, ahora la que
gime como loca es ella, mientras él, le da lamidas y
la chupa, muerde su clítoris y la lubrica más,
mientras Melanie, toma entre sus manos la almohada
y la muerde para no gritar de placer, recordando que
hay visitas. Cuando siente que también se va a venir,
toma a Cameron por los brazos y hace que el cuerpo
de él se suspensa sobre ella, besando sus labios,
ambos sabores de ellos se mezclan y gime ambos.
391
Cameron guía su erección al centro de Melanie y
busca su mirada, entonces poco a poco cuando sus
pupilas no se apartan se va abriendo paso entre las
paredes vaginales de ella.
A ella le molesta un poco, pues habían estado
juntos pocas veces y había pasado mucho tiempo de
aquello.
Esperando Cameron que Melanie se acostumbre
hasta nuevamente tenerlo dentro, se queda tranquilo
besándola y acariciándola, es la gloria después de
tanto tiempo, tenerla. Lleno de placer empieza a
moverse y luego más rápido, hasta que ambos se
pierden en la neblina del placer.
La habitación es puros gemidos y gruñidos
combinados con jadeos.
Cambian de posiciones varias, veces, ella arriba,
moviéndose lento y luego rápido, dándole riendas
sueltas a sus caderas y él con sus manos en su
cintura ayudándola a montarlo, mientras él eleva las
caderas para hacer más profunda la embestida, de
lado, ella de espalda a él y él embistiéndola con su
gran mano en su vientre de manera protectora… es
como si sus cuerpos supieran que esa sería la última
vez que se sintieran.
392
Así perdidos en el placer, ella nuevamente debajo
de él y el embistiéndola lento, haciendo más lenta la
llegada del clímax, ninguno desea que ese momento
tan íntimo, cargado de amor y pasión acabe, llegan
al clímax y luego al orgasmo.
Permanecen abrazados, sin querer soltarse, sólo
se susurran uno al otro, te amo, te amo.
Recobrando la postura él sale ella y la recuesta en
su pecho, se quedan abrazados y cuando ella siente
que él se ha dormido, se permite derramar lágrimas,
sabiendo que sólo él poseería su cuerpo, su alma, su
amor y que nunca más compartirán su pasión, deseo
y amor, pues esa noche sería la última vez que la
tendría y la vería, ella besa sus labios y le dice
cuánto lo ama.
Acostándose, en la cama y muy junto a él se
permite dormir y descansar, pues muy pronto
iniciará a amanecer y sería el momento de partir.
393
¿Odian a Allison cierto?
Les quiere desde R. D.
Mariana
394
Capítulo 28
Melanie.
No he podido dormir nada, me he pasado la
mayor parte del tiempo observándolo y
contemplándolo, cierro los ojos y a mi mente llegan
todos los recuerdos de los momentos que he vivido
junto al amor de mi vida, también llegan las palabras
de esa mujer, me atormentan, sí no hubiese
amenazado a los que amo, a mi padre a mis amigos,
mi nana, me quedaría y lucharía, pero otra parte de
mí no está segura si ganaría, Cameron me oculta
cosas y muchas, puede que la niña sea o no sea su
hija, según como aquella vez en que Indagué en
diferentes medios en la casa de Noa el hermano de
Nick, se rumoró durante mucho tiempo que Allison
le ponía el cuerno a Cameron. Todo esto es
asfixiante, pero ya no puedo hacer nada, tengo que
sacrificar a mí bebé y sacrificarme yo, para que los
demás no salgan perjudicados.
Levantándome de la cama, me quedo frente a
ésta, desnuda, contemplándolo, me busca entre
sueños y termina aferrándose a la almohada donde
hace rato tenía yo mi cabeza, no dudo de su amor,
395
me lo ha demostrado, se que en algún momento
llegué a dudar, pero sí de algo no debo hacer es
dudar de su amor.
Me duele pensar que estuvo con ella, que así
como se entregó anoche a la pasión por mí, aquella
vez en la que encontré la ropa con el perfume de
ella, me deja qué pensar.
Pero ¿ya que? Me iré, él será de ella lo más
seguro, puede que con el tiempo yo solo sea un
recuerdo más en su vida, que me recuerde, como la
chiquilla con la que se casó por un negocio, pero que
esa chiquilla terminó amándolo con toda su alma.
Sin darme cuenta mis mejillas están bañadas en
lágrimas, suspiro pesadamente y moviendo mis pies
me encamino hacia el baño, tomo una pequeña
linterna que la noche anterior había puesto sobre la
mesita de noche, tengo todo planeado.
Entro al cuarto del baño y sin hacer ruido, luego
de encender la linterna, tomo una de las mangueras
de la ducha y la abro muy poco para no despertarlo y
así yo pueda irme, cuando pongo el agua a una
temperatura ambiental, me adentro, me duele tener
que limpiar mi cuerpo, se irá su esencia, su aroma,
sus besos, sus caricias de mi piel. Tapo con mi mano
396
mi boca para acallar el sollozo que sale adolorido
como lo está mi corazón.
Al terminar de bañarme, en silencio y con una
toalla cubriendo mi cuerpo, luego de lavarme los
dientes, salgo del baño y entro al closet, usando la
pequeña linterna, agarro la ropa que había preparado
con anterioridad, unos jean no tan ajustado en la
parte de arriba, no es bueno para bebé por lo que
dejo el botón sin abotonar, un suéter rojo, unos tenis
negro, guantes, gorro y una cazadora negra, estamos
a una semana para entrar en agosto, las chicas se
irán pronto y a cuatro meses de diciembre y el frío
se está empezando a notar y más aquí en new york.
Diciembre. La pasaré sin él, estoy a una semana
de cumplir tres meses de embarazo y calculando que
para diciembre tendré casi siete meses y pico y mi
panza será más notable, por lo que bebé
seguramente sabré el sexo a esas altura Dios
mediante, él no estará con nosotros, la idea me
entristece pero debo de ir aceptando que nuestra vida
juntos y junto a mis seres queridos acabó.
Lista salgo del closet, no llevó nada, a empezar
de no hacerlo, será difícil, pero Dios no nos da carga
que no podremos soportar.
397
Lo contemplo, no puedo evitar derramar lágrimas
estoy imaginando su reacción cuando sepa que no
estoy por ningún lado de la ciudad, que he
desaparecido.
Seco mis lágrimas y lo miro una vez más sin
poder contenerme me acerco a la cama y busco
besar sus labios con un suave rose, se remueve un
poco y me asusta que se despierte, por lo que me
alejo rápidamente quedando en mis labios un
hormiguero, no se despierta y suspiro aliviada.
Me alejo a pasos lentos y sin mirar atrás salgo de
aquella habitación donde viví tantos momentos,
triste, dolorosos, felices, maravillosos, dónde bebé
fue concebido, donde conocí el placer de lo que estar
entre los brazos del hombre al que uno ama.
Con tristeza y sigilo camino por los pasillos de la
casa, en la cual Cameron y yo hace unos meses
soñábamos que criaríamos a nuestros hijos en ella,
más sin embargo solo hemos concebido uno y ese
uno no crecerá aquí, si no que crecerá lejos de donde
lo concebí, lejos de su padre, lejos de ésta casa, de
personas que con toda seguridad se que lo aman más
sin embargo no podrán darle todo aquel amor.
La luz tenues de la pequeña linterna, se hace más
opaca por la neblina que las lágrimas acumuladas en
398
mis ojos crean y la vista se me hace dificultosa, más
las retengo, no me puedo permitir ser débil ahora,
puede que sí dejó que mis sentimientos me dominen,
me devuelva y me encierre en aquella habitación y
aún por encima de todos los secretos que él amor de
mi vida me ha escondido, me abrace y me aferre a él
y no me pueda ir, eso sería un terrible error, pondría
en peligro la vida de muchas personas inocente y
entre ellas la vida de mí bebé.
Dios es perfecto, él nos crea, cuando nosotros
pensamos hacer algo hace mucho que ya él lo sabe,
pero él nos da la voluntad al ser humano de elegir de
actual, cuando pasa algo muchas veces decimos,
¿Dios porque? Pero Dios no tiene que ver en eso,
nosotros tomamos la decisión él es consciente de
que lo íbamos hacer, más sin embargo fue decisión
nuestro, eso pasa con Allison, ella por sí sola decidió
arruinar mi matrimonio, separarme del hombre que
amo y aún así sin saber aleja a bebé de su padre y de
las personas que aman a bebé.
Cameron, mí Cameron, él decidió no contarme
nada absolutamente nada de su pasado, de quien era
esa mujer en su vida y que había vivido con ella, no
él prefirió guardarse las cosas, decisión que nos
llevó en casi todos los sentidos a estar en ésta
situación, pienso que si él hubiese tenido el
399
suficiente coraje para decirme la mayoría de las
cosas que están pasando no estuviesen pasando y yo
no estuviese huyendo por así decirlo cuando la
verdad es que esa mujer me está obligando a irme,
Cameron tiene mucha culpa de lo que está pasando.
Doy gracias por aquel abrigo largo y ancho en el
parque sino mi bebé estaría en peligro también,
gracias a él pude ocultar mi embarazo.
Mis pensamiento me llevaron a otro lugar tanto
que no me di cuenta que mis pies me trajeron justo a
la puerta de salida de mi casa, que ya no será mi
casa, dando un último suspiro me preparo para la
adrenalina, calculé todo, el perímetro de la parte
trasera de la casa se le pasa ronda cada media hora,
por lo que son las 5:10 am, eso quiere decir que hace
diez minutos hicieron la roda, calculando que ellos
hacen la primera a las 12:00 am, entonces a las 5:30
am, volverán a verificar el perímetro tiempo
suficiente antes de que ellos vuelcan aquí atrás, me
da tiempo para llegar a la parte delantera siendo
sigilosa sin hacer ruido, si me sobra tiempo al llegar
a la parte de adelante de la mansión espero hasta que
vuelvan atrás y solo queden dos guardaespaldas
adelante, son ocho en total que vigilan de noche,
sinceramente Cameron ha exagerado en la
seguridad.
400
Hago las cosas como lo planee, aquí estoy,
después de abrir la puerta de la cocina sin hacer
ruido cosa que se me dificulto mucho, voy ahora
caminando lento y aluzando con la pequeña linterna
por donde camino, al llegar al jardín me escondo
detrás de los arbustos y espero ahí hasta que dan las
5:30 am, como dije van seis y quedan 2, ahora
piensa, Melanie, piensa, perfecto ya se, tomo una
pequeña piedra no tan pequeña y espero hacer uso
de mí fuerza y de la poca puntería que tengo lo
mejor que puedo hacer, sin darme cuenta sigo
derramando lágrimas y a esta altura no sé cómo no
se me ha escapado unos sollozos. Tiro la piedra y
justo cae en unos de los moldes de las planta que
con tanto amor y cariño sembré junto a mí amor.
Pensar en eso hace que las lágrimas se desborden
más rápido.
Al los dos guardaespaldas escuchar el
movimiento y el ruido causado por las piedras sacan
sus armas y se encaminan allí.
Yo aprovecho y me escabullo entre los arbustos
con el latir de mi corazón sonando en mis oídos.
Apago la linterna pues el frente de la casa está todo
despejado e iluminado, sin querer choco con una
piedra y aprieto los dientes para no soltar una banda
de improperios, ellos voltean sus miradas pero justo
401
a tiempo logro llegar a la puerta y esconderme, ellos
permanecen buscando que causó el ruido y yo
aprovechó para abrir la puerta y salir por el pequeño
orificio.
Ya fuera camino lo más rápido posible a una
cabina de teléfonos y marco a la estación de taxis y
pido uno.
A los pocos minutos llega y rápidamente me subo
en él.
—Al aeropuerto —es lo único que digo, olvido
mis modales y la cordialidad.
Mientras el taxi avanza, pienso en cómo hice
todo sin que nadie se percatara de eso.
Ayer por la tarde cuando llegamos del parque, me
quede pensativa pero yo muy bien sabía que no
tendría otra opción que marcharme para no poner a
todos en una cuerda floja en las que sus vidas
dependieran de un hilo.
Primero pensé en que las tarjetas de crédito que
Cameron sacó para mí no podrían viajar con ellas
pues me localizarían y es algo en que yo no quiero
aunque muera por estar con él.
402
Antes de mi madre morir, ella había dejado una
cuenta para mí con suficiente dinero, pero en mi
estado tengo que asegurar que bebé tenga una buena
vida, por lo que aparte de esa, tenía una cuenta de
ahorros, mi padre con conocimiento de la primera,
Cameron lo primero que hará es llamarlo y
preguntar si sabe de mi paradero, pues muevo ambas
cuenta a una sola, otra distinta del que nadie sabrá,
uso el nombre de mamá en paz descanse y espero
que me perdone por aquello y ahí junto todo el
dinero, nadie sabrá así donde estoy.
Lo siguiente fue que por internet compré el
pasaje de vuelo y luego reservé un poco de dinero
para trasportarme al aeropuerto.
El tiempo de la tarde me dio el tiempo justo para
calcular los movimientos de los guardias y poder
escapar.
Lo que sucedió después fue la despedida con mi
amor y ya el resto es historia.
—Señorita hemos llegado —él taxista me saca de
mis pensamientos y observó que ya el sol se notan
los rayos de que está saliendo.
Pido la tarifa y luego de pagarla le deseo suerte y
un buen día al taxista él me agradece y entro por las
403
puertas grandes y de vidrio del aeropuerto, tomo
asiento esperando a que mi vuelo sea llamado y ahí
estoy unos minutos, tomé el vuelo de las seis y
media tiempo justo para seguir adelante cuando mis
pies y mi corazón laten y piden porque abandoné
todo esto y vuelva a casa con mi marido.
Todo es tan confuso, nunca en ningún reportaje,
ni en el colegio escuche que Cameron tuviese un
hijo, nunca se habló de eso, entonces no entiendo
nada, seguro es un asunto que se aclarara, pero yo ya
no estaré ahí.
Escuchó que piden que los pasajeros de mi vuelo
ingresen por la puerta Diez. Me quedo en mí lugar y
mi corazón quiere salir por esas puertas corriendo y
devolverme a casa, pero las palabras de esa mujer
regresan a mí mente y me obligo a pararme de ese
asiento y caminar como zombi a la puerta diez.
Miro atrás con la esperanza de que todo esto sea
un suelo y que Cameron corra a mí me diga que
nada de esto es real, pero a quien engaño, es la
maldita realidad.
Suspirando subo el primer escalón del vuelo y
mirando por última vez atrás continuo hasta tomar
asiento en donde me corresponde.
404
Una señora de unos cuarenta años toma asiento a
mi lado y me queda mirando, pues aún continuo
llorando creo que me quedaré seca de tanto hacerlo.
—Todo mal que te aflija, siempre piensa que
Dios no le da carga a sus hijos que no podamos
soportar.
Miro a la señora y es muy bonita y elegante.
—Buen día —digo después de sorber mí nariz
—, gracias por sus palabras señora.
Y pensando en ellas más lágrimas salen por mis
ojos los cuales me duelen ya y deben de estar color
tomate.
—Llora todo lo que puedas —me dice ella
acariciando mi hombro, ésta señora transmite un
cariño y un aura maternal —. Las lágrimas liberan
todo lo que no podemos liberal con palabras.
Agradezco a Dios que la allá puesto en mí
camino, sus palabras sabias son un poco
tranquilizadora y me permite liberar en silencio
todo.
—Mi nombre es Damaris.
—Mel, Mel Swant —esa soy yo de ahora en
adelante.
405
—Me alegra de que vayas allá, es un pueblo muy
bonito y tranquilo.
Después de un rato en el que sólo asentí a las
palabras de la señora una azafata pide que
abrochemos nuestros cinturones y dos minutos
después la turbulencia del avión me hace saber que
ya estamos despegando y observo por la ventanilla
como dejo atrás new york, a mí padre, mis amigos,
dejo a mamá, dejo mi casa, mis estudios, dejo todo,
le dejo a mi marido a mí amor a esa maldita.
Los sollozos sacuden mi cuerpo y siento como
soy envuelta entre los cálidos brazos de la mujer a
mí lado, dejó todo para irme a Londres, London un
pequeño pueblo de allí. Solo llevo conmigo a mí
bebé, la ropa puesta y mis alianzas de matrimonio no
pretendo quitármelas nunca y con ellas mis
sentimientos.
406
Su opinión y apoyo es importante para mi.
Les quiere desde R.D.
Mariana
407
Capítulo 29
Cameron.
La mejor noche después de tanto tiempo, tenía
exactamente casi tres meses de abstinencia y ya eso
era un nuevo récord para mí. Era del tipo de hombre
que cada semana estaba con una mujer diferente y
como mucho dos meses duraba con ellas, pero eso
dos meses no solo estaba con una sola, me aburría el
hecho de la misma piel, besos, pechos, trasero,
vagina, la misma mujer.
Todo aquello porque nunca realmente conocí lo
que es estar entre los brazos de la persona que amas,
lo que es estar deseando llegar a casa y tener frente a
ti a una mujer por lo que darías todo, eso lo
comprendí después, cuando la vi, a ella, mí Mel, mí
mujer.
Me muevo entre el colchón y la cama, solo estoy
cubierto de la cintura para abajo. Busco y busco pero
no la encuentro, con los ojos cerrados aún, lanzo uno
de mis brazos sobre su lado de la cama, pero me
topo con el colchón y el espacio lo bastante frío, hoy
es sábado, por lo que no debo ir a trabajar, es tan
extraño que su lado esté frío, como si hubiese
408
pasado horas desde que ella se levantó, una suave
luz del sol entra por la pesada cortina. Abro los ojos
y miro, ella no está en la cama, miro a mi mesita de
noche y tomo entre mis manos el reloj que despejé
de mis manos luego de hacer el amor con mi mujer y
me doy cuenta que son las 8 de la mañana ¡Dios! Si
que dormí, tiempo sin hacerlo.
Mel debe de estar abajo, comiendo algo o
charlando con sus amigas. Decido levantarme y
tomar un baño antes de bajar hacerle compañía a ella
y los demás.
Después de lavar mi cuerpo y ponerme una ropa
cómoda, me miro en espejo de cuerpo completo,
hago nota mental de que debo cortar mi pelo y
rasurar mi barba, salgo caminando relajado, no
permitiré que Allison arruine mi vida, mi
matrimonio, mucho menos ahora que bebé está en
camino, si Carla realmente es hija mía, me haré
cargo de ella le daré mi amor de padre, pero nunca
caeré ante Allison, no dejaré que siga dañando todo
lo que amo, no dejaré que manipule mi vida a su
antojo.
Con energía bajo las escaleras y un rico olor de
comida se cuela por mi nariz, llevo días, meses sin
comer bien, noto que estoy más delgado, pero mis
409
ejercicios no paran por lo que mis músculos están
más firme, mi frustración y rabia la descargo en un
saco de boxeo, en el gimnasio que tengo en casa.
Al adentrarme en la estancia del comer no
vislumbro a Mel y esto me está empezando a oler
mal, tengo un mal presentimiento.
—Buen día —apenas hablo las amigas de mí Mel
me miran y sé que no soy tan santo de su devoción,
pero son chicas inteligentes y educadas.
—Buen día —responden a coro y las tres miran a
mis espaldas como buscando algo.
—Espero que se encuentren bien, ¿Dónde está
Mel? —mi nana entra a la estancia me acerco a ella
y beso su frente ella me responde con una sonrisa.
—Pensábamos que estaba contigo —responde
Morgan la de pelo azabache, con un pequeño
cuchillo con mantequilla en manos y observando a
las demás.
—Buen día mi niño, estábamos esperando que tú
y tú mujer bajaran para oficialmente iniciar el
desayuno.
La explicación de Cristine sólo me deja más
preocupado.
410
—Mel, no está conmigo, apenas me levanté vine
a buscarla aquí, el lado de la cama en el cual ella
duerme está bastante frío, hace mucho tiempo que
ella despertó y todo está intacto.
Un temor se instala en mí pecho y justo entra
Jack por las puertas vestido informar.
—Qué bueno que llegas Jack —apenas lo veo, le
abordo.
— ¿Qué sucede? —preocupado me mira a los
ojos.
—Lo mejor es tranquilizarnos, primero
busquemos por toda la propiedad y ya luego sí no
está aquí llamamos a Nick —interviene la rubia
Laura.
—Y si no es así, puede que haya salido sin avisar
con los guardaespaldas —ahora es la de pelo cobrizo
Vicky, tal parece que las tres se combinan.
—Cristine por favor, tapa los alimentos en lo que
buscamos a Mel —dice Morgan.
Aún en mí trance miro a las dos personas que me
vieron nacer con todo el temor y miedo que tengo
dentro de mí cuerpo, ambos parecen entender con
sólo la mirada que les dedico, ellos saben que estoy
411
imaginando todo. Pero aún así no hablo y decido
empezar a buscar por la planta alta son demasiadas
habitación por lo que las chicas me acompañan,
mientras Jack investiga haber si salió con
guardaespaldas y Cristine moviliza al servicio para
buscar en los alrededores más cercanos de casa.
Subo a todo lo que dan mis pies a la segunda
planta con los pasos de las chicas detrás de mí, abro
la primera puerta que tengo enfrente pasando
nuestro cuarto por ahí está. Busco y busco y en
ningún cuarto al que he entrado se encuentra, salgo
de la última y me encuentro con las tres chicas les
lanzó una mirada interrogativa y ellas solo mueven
sus cabezas en señal de negación.
Bajo lo más rápido que puedo y Jack parece estar
esperándome.
—Dime que tienes noticias —suplico.
—Lamento decirte que no son buenas —hace una
pausa que solo hace que mi ansiedad aumente —,
ningún guardaespaldas ha visto a Melanie desde
ayer.
Empieza a dolerme la cabeza y todo mí cuerpo se
pone en alerta. Cristine aparece en mí campo de
visión y con semblante triste niega.
412
—Calma Cameron —me digo a mi mismo, inhala
y exhala —, divide a grupos de dos y que busquen
por todo el perímetro Jack, ¡Mí mujer tiene que
aparecer!
Sin decir una sola palabra más Jack hace lo que le
digo y mi mirada se dirige al grupo de tres chicas
que están al borde del llanto, la pelinegra fija sus
ojos en mi y parece espantarse, mí mirada no debe
de ser la más linda.
—Unas de ustedes llame al niño ese y pregunten
por mí mujer —mi voz sale severa en este momento
no estoy para lidiar con nadie.
La chica solo asiente y con la rubia y la pelirroja
se alejan de mí a otro lugar de la estancia.
Miro a Cristine y conociéndome sabe que estoy
hirviendo, temblando y muerto de miedo, pero sabe
que no lo demostraré. Mi mente está maquinando lo
peor imaginando muchas escena y por primera vez
deseo que realmente esté con ese niño y que todo
esto haya sido una irresponsabilidad de su parte,
seguro de que cuando la tenga enfrente de mí la
regañaré por insensata, sabe que no se puede
exponer y más aún en su estado y luego la besaré y
le diré cuanto la amo. Eso es. Trato de aferrarme a
esa idea pero en el fondo mí corazón me dice que
413
solo estoy engañándome que no volveré a ver a mi
mujer en mucho tiempo o tal vez nunca.
—Este… —alguien se aclara la garganta delante
de mí llamando mi atención y levantó la mirada
Encontrándome con la pelinegra de frente a mí —,
ella no está con Nick, él se despertó al nosotras
llamarlo y viene para acá.
Me levanto de golpe del cómodo sofá en el que ni
siquiera supe en qué momento me senté en el.
Cada extremidad de mí cuerpo se pone en alerta a
si como en mi cabeza se prende otra alerta, camino
como desquiciado tirando de mi cabello ya largo y
maldiciendo, mi paciencia se descontrola, mis fosas
nasales se abren y empiezo a respirar agitado una y
otra vez, parece que pasan minutos y el descontrol se
siente en cada poro de mí cuerpo, mi cabeza grita
muchas cosas y quiero tirarlo todo.
La puerta principal se abre y en breve estoy
delante de Jack quien viene con unos chicos detrás
de él, no reparo en ellos, no me importa.
— ¡¿La encontraron?! —mí voz argumenta una
pregunta pero mí corazón y alma una súplica, una
esperanza.
414
Jack me mira con profundo cariño y con tristeza
y odio que sentimientos tan opuestos sean unidos
juntos.
—No.
¿No? Mi corazón late como loco dentro de mí
caja torácica, ciento que esas dos pequeñas letras
destruyen, mi día, mi felicidad, destruyen todo
destello de esperanza.
—Las cámaras.
No espero que nadie me siga que nadie sienta el
dolor que estoy sintiendo, ¿Me abandonó? ¿Se fue?
¿La secuestraron? Preguntas semejantes a esa se
forman y mi mente pero no reparo en ellas las
cámaras deben de mostrar algo, claro que sí.
Camino apresurado fuera de la casa y llego al
lado de la casa de empleados que usan los
guardaespaldas para dormir los que se quedan aquí,
al lado de ésta hay un pequeño cuarto equipado por
múltiples monitores de todos los tamaños y equipos
que no tiene interés mencionarlos en éste instante.
Apenas entro tomo una silla giratoria y con mis
manos temblando deslizo mis dedos sobre el teclado
que monitorea a todas y el mouse. Llevo las
grabaciones a las 4:30 am y me quedo mirando
415
atentamente todo. La presencia de Jack a mi espalda
indica que está ahí, aunque en silencio pero me está
apoyando y es lo que agradezco siempre de él y de
Cristine, siempre están para mí y saben respetar mi
espacio.
El tiempo avanza y nada, sigue avanzando y
empiezo a impacientarme hasta que un movimiento
en la puerta de la cocina, llama mi atención, abren la
puerta de madera quedando de este modo la de
hierro aún cerrada, claramente se nota que alguien
está detrás de ella, parece calcular, entonces la
puerta de hierro es abierta y reconozco la figura de
mí mujer, las pocas luces que deslumbra el pequeño
bombillo encima de su cabeza no me da su ángulo
de rostro, pero la pequeña linterna que lleva en su
pequeña manos me ayuda un poco, claramente ella
sabe de todas las cámaras en casa.
Con cuidado de no ser escuchada se esconde
detrás de los arbustos cuando logra llegar a ellos y
todo pasa tan calculadamente, pasan en cámara lenta
todo.
Espera el cambio de vigilancia y luego como
nada distrae a los guardaespaldas y escapa por una
pequeña reja de la puerta, las grabaciones me hacen
saber que todo el transcurso de su escape lo hizo
416
llorando, las cámaras me dan un ángulo hasta el
perímetro de mi propiedad pero no más.
Muriendo de furia tiro lo primero a mi paso y
siento como Jack me toma con fuerza y me saca de
ese lugar.
— ¡¿Por qué?! —grito tan alto que siento como
la garganta se me lastima.
Forcejeo con Jack hasta el punto de que tiene que
ejercer más fuerza en mí, pero eso no me detiene mi
fuerza parece no tener límites y me logró zafar, tomo
en mis manos lo primero que encuentro y es una
planta el tiro, rompiendo la maceta de ésta.
— ¡Se fue Jack! —Continuo gritando —. ¡Me
abandonó!
Entro a la casa y me topo con el niño ese, sin
pensarlo lo tomo del cuello de la camisa.
— ¡Tú sabes dónde está! ¡¿Dime dónde está?! —
tiro con fuerza de el chico y parece que el aire se le
empieza a cortar.
Siento como soy separado de él y Jack aparece en
mi campo de vista, miro a mis costados y dos
musculosos hombres me sostienen.
417
—Yo… no… Sé…donde está —el niño ese, sólo
hace toser mientras habla —, estoy… igual… de…
sorprendido.
No presto atención a las palabras de él, no me
disculpo por mis actos, miro a mi lado y exijo:
— ¡Suéltenme! ¡Yo soy su jefe y se los ordeno si
no quieren ser despidos! ¡¿Cómo fueron tan
incompetentes para no evitar que mí mujer
escapara?!
Nadie me responde todos bajan la cabeza.
Escuchó a Jack hablar y es como un transe en el que
estoy. Camino a las escaleras y subo de dos en dos.
Entro al cuarto y en cuanto llego me adentro en el
closet, sus ropas, prendas, bolsos, carteras,
zapatos… Todo está intacto, voy abro las gavetas de
su lado y en la segunda que abro me encuentro sus
tarjetas de crédito, su móvil, todo.
Hay un bolso blanco y lo abro me encuentro 6
sobres en ellos y parecen abiertos.
¿Pero qué es esto? No llevo nada absolutamente
nada, ¿Qué pretende? ¿Cómo sobrevivirá? Tenía la
breve esperanza de que sólo fuese esto una broma.
Saco uno de los sobres y abro el contenido de
éste…
418
Su opinión y apoyo es importante para mi,
recuerden.
Les quiere desde R.D.
Mariana
419
Capítulo 30
420
que lo ayude a poder tranquilizar su mente y sus
sentimientos antes los pensamientos de que su
amada mujer lo abandonó.
Pero al él hacer como un patrón el estrujarse y
parpadear y ver lo mismo se da cuenta que es la más
cruel realidad. Melanie, su mujer, su Mel, la mujer
de su vida fue empujada, amenaza hasta que no tuvo
otra opción que marcharse.
Bien su cuerpo la noche del día de ayer le
alertaba de que algo estaba pasando, tanta entrega no
era normal, después de los desplantes y los malos
tratos y momentos incómodos, dolorosos y mentiras
que ella sufrió por su culpa los meses anteriores a
estos, no era normal, ella no lo había perdonado por
aquello, ella estaba furiosa con él y que de la noche
a la mañana se entregara a él y se repitieran tantas
veces que se aman, aquello no era normal, eso fue
una despedida, pero su amor y el deseo al tenerla
frente a él con ese conjunto diminuto, translúcido,
sexy, rojo… le segaron todos los sentidos y por
cegarse de deseo por ella, no se dio cuenta de lo que
realmente estaba pasando.
Abre todos los sobres y a medida que avanza se
encuentra con cosas espantosas, amenazas terribles.
421
Muerto de cólera, se levanta y reprimiendo las
ganas de tirar todo y romper aquellas malditas
amenazas, toma el móvil de Melanie, con sus
pensamientos en una sola persona, una sola, sólo
necesita pruebas.
Baja las escaleras a todo lo que más puede si
importarle en lo más mínimo romperse un hueso,
llega a la sala donde todos están un manojo de
nervios.
—Jack, acompáñame —su voz llena de ronques,
solo se dirige al hombre más mayor de todos.
Dirige una mirada al salón y se percata de todos
hechos un manojo de nervios y otros lloriqueando
por la tristeza.
Tristeza, él también está triste, ¿De qué le sirve
echarse a llorar y arrojarse a la tristeza, cuando tiene
que traer sanos y salvos a su mujer y a su bebé? De
nada.
Voltea la mirada y camina a la puerta, ve las
intenciones de los demás guardaespaldas y se
detienen.
—Solo dije Jack —su voz parece calmada, pero
su expresión demuestra otra cosa —. Quédense aquí
422
y espero que si sepan hacer su trabajo esta vez y
sepan proteger a los demás.
Sale sin ver más atrás.
—Más tarde hablaré yo con ustedes —dice Jack
—, el jefe solo está preocupado, no quiso hablarles
así —trata de arreglar un poco lo que Cameron dijo
y sale detrás de él.
Lo busca y lo divisa en la marquesina donde
guardan todos los autos.
Hasta allá lo sigue y lo encuentra tomando la
llave de un Ferrari azul marino deportivo y capta
justo a tiempo cuando se dirige a la puerta del
conductor. Usando Jack sus habilidades deportistas,
se acerca y le arrebata las llaves.
— ¡Éstas loco si piensas que te dejaré conducir
en ese estado!
—Jack, ¡Maldita sea, no estoy para ir matando
hormigas! ¡Necesito llegar al juzgado rápido! ¡No
hay tiempo que perder!
Sorprendido Jack dice:
— ¿Juzgado? ¿De qué estás hablando hijo?
423
— ¡Estoy hablando de esto! —explota y tomando
la mano de Jack deposita en sus manos todas las
amenazas que pudo encontrar en el bolso de su
mujer —, encontré esto —baja el tono de voz —, en
el closet, cuando subí vi todo intacto y me desespere
quería saber si no se había llevado nada y así tener
esperanzas de que solo esté dando una vuelta sin
embargo a pesar de no llevar nada mis esperanzas se
fueron a bajo cuando encontré sus tarjetas de
crédito, su seguro, móvil y eso, esas malditas
amenazas Jack, mí mujer fue prácticamente obligada
a dejarme Jack y tú sabes muy bien en quien estoy
pensando.
—Esto es aterrador —dice Jack en trance —, solo
una persona pudo haber hecho esto.
—Allison. Vamos al juzgado, con la ley de por
medio podremos actual Jack y tener la confirmación.
—Sube al auto y en el camino me cuentas, pero
yo conduzco.
Suben al auto, Jack enciende el auto, haciendo
rugir el motor de éste, con un botón automático la
gran puerta de la marquesina se abre y salen por
esta, al llegar delante de la gran reja ésta es abierta
automáticamente también por un botón presionado
por un guarda espalda y es cuando Jack y Cameron
424
se introducen en las calles de las residencias más
prestigiosas de new york, saliendo de éstas más
rápido de lo que Cameron creía.
Al introducirse el auto en las calles de new york
éste es acelerado por Jack y pasando y rebasando
autos a dos mano.
—Vaya, Jack, tú tan correcto siempre con las
reglas de tránsito —se mofa sorprendido Cameron.
—Las reglas se hicieron para romperse hijo —
dice Jack divertido y con su vista concentrada en la
carretera —, ahora dime para que nos dirigimos al
juzgado.
—Mi plan es buscar al juez Washington, un viejo
amigo de la universidad, él sabrá mover más rápido
las cartas y en menos de una hora con estas pruebas
podré obtener una orden para extraer todo tipo de
mensaje de éste móvil y confirmar todo, por lo
menos, sé que no será suficiente sólo espero tener a
Allison unos cómodos días en una cárcel.
—Entiendo. Siendo así ajusta tu cinturón
muchacho.
425
En la habitación de un hotel prestigioso, una
cama se mueve al son de los constantes movimientos
de unos fervientes amantes.
— ¡Sí! ¡Oh joder más fuerte! —pide una
desenfrenada rubia.
Horas antes bien temprano sabiendo ésta que
Melanie no aguantaría un día más poniendo la vida
de sus seres queridos en jaque, Allison salió bien
temprano a un bar a celebrar su victoria, en éste bar,
pocas mujeres estaban y las mayorías de ahí viven
una vida muy loca y otras brindan placer a cambio
de dinero, eso contando con que en el lugar apenas y
habían mujeres, es un prestigioso bar y pocas
personas iban a saber quién es ella, se había sentado
en una esquina, tomando un fuerte ron que minutos
antes había pedido a la barra. Desde el lugar en el
que se encontraba podía observar todo el ambiente y
sus ojos se clavaron en un fuerte moreno más alto
que ella y pensando de manera lasciva que ese iba a
ser el juego sexual de ese día y que así mataba su
apetito sexual un poco porque sólo uno podría
acabar con él, aunque nunca se saciará de él,
Cameron. Poco tardó en buscar su mirada y al
encontrarla le lanzo una que más clara ni el agua, él
tipo envuelto por la sensualidad y belleza de ésta se
acercó y sentándose a su lado él iba a preguntar pero
426
un dedo de ella en los carnosos labios del moreno le
freno diciéndole ella que se guardará las labias.
Lo tomó por las manos y lo guio fuera del lugar,
llevándolo en el costoso auto hasta el hotel en el cual
no tardaron en ingresar y al llegar a la habitación lo
lanzó a la cama y se le subió encima y ya el resto es
historia terminando en esto, ya lo había hecho dos
veces ya.
— ¡¿Así preciosa?! —inquiere él fuerte hombre
sobre ella, moviendo sus caderas de manera tan
violenta, que una mujer normal ya hubiese
protestado para que se saliera de ella.
— ¡Si así! —dice segada por la lujuria del
momento.
El apetito sexual de Allison siempre ha sido
enfermizo disfruta del sexo violento y las practicas
sudistas.
Por eso en este momento disfruta de las violentas
penetraciones del fuerte moreno, que hasta asustado
se encuentra pues nunca le había dado tan fuerte a
una mujer.
Girando sobre la cama y dejando al cansado
hombre debajo de ella, empieza a cabalgarlo de
forma frenética y violenta, saca el miembro de éste
427
hasta solo dejar un poco la puntita y bajar de golpe.
Disfrutando de su violencia y llevando las manos del
moreno hasta sus pecho, para que los chupe fuerte y
los muerda, tira de su cabeza para eso de él hombre
y ella lleva su mano a su centro para estimular su
clítoris, disfruta, pero sin saber que todo lo que ha
hecho se devolverá para ella.
Su plan le dará terrible dolores de cabeza.
428
—Buen día, el juez Washington, dígale por favor
que Cameron Danielson está aquí y desea hablar con
él.
— ¿Tiene… cita? —tartamuda responde, pues la
postura y voz de Cameron destilan poder y no
réplicas.
— ¡Que cita ni que nada! ¡Acaso no entiende que
si no fuera una emergencia no estuviera aquí! —se
altera.
—Cameron por favor, guarda la postura, aquí está
la prensa y eso te puede traer problemas éstas
alterando el orden público y además en un juzgado
—Jack le habla concienzudamente al oído, dándole
un fuerte apretón en el hombro.
—Es que parece que tengo que llamar al
mismísimo presidente para que esa señorita me
comunique con Washington —murmura entre
dientes.
Un juez joven detrás de una puerta, segundos
antes había escuchado su apellido ser mencionado
por una voz reconocida para él.
Justamente en el momento en el que Cameron
recupera su compostura la puerta del despacho de él
juez Washington, un hombre de tez bronceada y
429
cabello castaño muy claro, aparece en el campo de
visión de Cameron.
—Danielson, no esperaba verte por aquí —dice
sorprendido el juez.
—Washington —dice a modo de saludo —, yo
tampoco esperaba verte de éste modo, pero la
situación lo amerita.
Acercándose con Jack como siempre detrás de él
se dan un suave apretón de manos.
—Como veo estás tú bien, no sé si en otros
ámbitos lo estés, pero por lo que visualizó lo estás
—agrega Cameron.
—Lo estoy en todos los ámbitos Danielson, ¿Qué
te trae por acá?
—Sabes por eso me caes bien, directo al grano,
entremos a tu oficina porque aquí te aseguro que
está infectado de prestan, mañana esto será noticia
en primera plana.
Los dos asienten, ambos provenientes de familias
pudientes además de que a lo largo de sus
trayectorias construyeron y siguen forjando sus
carreras y sus vidas son del dominio público.
430
Jack pretende quedarse fuera por si las moscas,
pero Cameron lo evita, haciéndole una señal para
que lo acompañe.
Apenas entran todos y él joven juez se pone
detrás de su escritorio, Cameron suelta frente a él los
papeles de la amenazas que su mujer estuvo
recibiendo.
El juez sin pregunta alguna, los mira y lee y su
cara va cambiando de expresión a medida que lee.
—Esto es gravísimo —murmura perplejo.
—Antes de que preguntes, te resumiré la
situación, las cosas están así; mi mujer estuvo
recibiendo todo esto, se que sabes que me he casado,
hemos tenido diversas discusiones, sé que es un
tanto muy personal pero te lo diré, he llegado a
dormir en otra habitación y no nos hemos hablado
por días, no me gusta hacer acusaciones sin pruebas,
pero yo estoy seguro que nuestros problemas
iniciaron desde que Allison Style regresó, nuestra
vida ha sido un infierno, está obsesionada conmigo y
como entenderás no le simpatiza que esté casado,
amo a mi esposa, está mañana después dormir juntos
despierto y no la encuentro, la buscamos en toda la
casa y en los lugares que frecuenta hasta que mire
las cámaras y me di cuenta que ella huyó, encontré
431
esto en nuestra habitación y según el contenido de
todos los sobre mí mujer fue prácticamente obligada
a que me dejara y dejara a sus seres queridos —calla
esperando que él juez lo asimile.
—Esto es muy peligroso, si se llega a saber quien
fue, le caben muchos años de condena —concluye
— ¿Qué quieres?
—Quiero una orden para poder obtener todos los
mensajes, llamadas, grabaciones, todo del móvil de
mi esposa, ella lo ha dejado y no sabes cómo me
estoy muriendo de miedo de que algo les pase —
dice angustiado.
— ¿Les? —pregunta el juez.
—Te voy a decir, pero tienes que guardarlo, esto
no es de dominio público, sólo pocas personas lo
saben y con las cosas estando así puede ser el doble
de peligroso —respira —, mi esposa está
embarazada, voy a ser padre.
—Wao —exclama asombrado y comprendiendo
más la gravedad del asunto —, Felicidades —le
sonríe —, tendrás la orden en menos de una hora.
—Gracias—le agradece con alivio.
432
Solo espera tener conocimiento y pronto volver a
tenerla entre sus brazos y pedirle perdón por todo,
por ser tan estúpido.
433
Capítulo 31
434
con letras.
Jack quien se había puesto sobre sus pies para
colocarse al lado de Cameron observa todo callado y
solo se limita decir:
— ¿Ya podemos proceder?
—Solo falta mi firma —responde el juez.
— ¿Qué estás esperando? —apresura Cameron.
—Calma —dice el joven juez antes de tomar en
sus manos una fina pluma y poner su firma en el
único espacio libre en la hoja —, aquí está —dice
entregándole la hoja a Cameron él cual no tarda en
tomarla.
Cameron camina a la puerta pero se gira y dice:
—Gracias Washington, cualquier cosa en la que
te pueda ayudar no dudes en buscarme, sabes donde
vivo.
—Lo tomaré en cuenta Danielson, pero para eso
estamos para ayudarnos mutuamente, espero que
encuentres pronto a tú mujer.
Con un asentimiento de cabeza Jack y Cameron
abandonan la oficina del joven juez y más adelante
435
el juzgado ya en el auto Cameron y Jack va en
completo silencio.
Se dirigen a la empresa de Jack la cual tiene una
área solo para tecnología, desde donde todo se le
facilitará mucho mejor, dado el caso de que desde
ahí podrán comunicarse con la compañía de
teléfonos a la que pertenece el móvil y SIM de
Melanie y todo será más fácil.
Al llegar a dicha empresa no dicen nada, bueno
por parte de Cameron, que al parecer con la
situación ha olvidado los modales, pues Jack como
siempre a pesar de ser el jefe les dedica una buena
cara acompañada de un buen día a los pocos
empleados que hay en la empresa el día de hoy, pues
es sábado, algunos descansan y otros graban en
servicios con personas de la alta sociedad,
protegiéndolos.
Apenas llegan al área de tecnología un equipo
preparado para todo les espera, Jack se encarga de
comunicarles la situación, pues Cameron está en un
estrés y un humor que puede que ofenda a medio
mundo sin tener culpa alguna.
Con la orden dada por el juez Washington, todo
se facilita, pues llaman a la compañía de el SIM del
436
móvil de Melanie y ésta da la autorización para que
el servicio de inteligencia extraer todo del aparato.
437
Como un león que acaba de ser soltado de su
jaula, sale casi corriendo de esa oficina y se dirige
escaleras abajo, los ascensores tardarían mucho en
llevarlo abajo.
Jack llega justo a tiempo cuando ese hombre que
ahora no parece Cameron Danielson arrancaba el
motor del auto.
438
— ¡No hagas una locura! —le grita el hombre
mayor que él, tratando por todos los medios en
lograr que la suelte, pero tal parece que la fuerza de
ese hombre se ha triplicado.
— ¡Escucha, víbora no lo volveré a repetir! —sus
respiración sale entre cortada por la ira contenida —.
¡Si a mí mujer y a mi…! —Se calla pensando
claramente lo que iba a decir —. ¡Si le pasa algo y
ella no regresa, no tendré piedad de ti y te destrozaré
sin pensar que eres una mujer!
Aún Allison sintiendo que su respiración cada
vez es más dificultosa, ríe con demencia.
—Esa zorrita… no… Aguantó…nada —se burla
y su cara poco a poco se va tornando rojiza por la
sangre sin fluir.
— ¡Cameron suéltala, no vez que el que
terminará mal eres tú!
Vuelve en si fuera de su furia bulléndole en todo
el cuerpo.
— ¡¿No aguantó nada?! —Se carcajea él de
manera atemorizante —. ¡¿Lo dice alguien como
tú?! ¡Que ataca a las personas de espaldas! ¡Que
todo el tiempo juega su sucio! ¡Mi mujer no es
zorra! ¡Si de zorras hablamos tú eres la primera!
439
Todos se quedan estupefactos nunca antes habían
escuchado a Cameron insultar a una mujer ni cuando
la descubrió en aquello.
— ¡Estás celoso! —Ironiza con ilusión Allison
—. Amor no tienes porque estarlo, él solo fue por
hoy, considerando que tú llevas tiempo revolcándote
con esa mujercita.
Lleno de furia porque ésta es, ni se sabe el
número cuánto le ha advertido que no le ponga
diminutivos a su mujer, se lanza sobre ella pero un
cuerpo lo detiene.
— ¡Te he dicho que a mí mujer no le pongas
diminutivos! ¡Todos los que les pone solo te sirven a
ti! ¡Te levantas el ego y te hartas de decir que eres
valiente, pero te usas de artimañas para llamar la
atención y tratar de sobresalir, pero oye que no lo
vuelvo a repetir, nunca, nunca dejaré a mí mujer y
vendré a tu lado, nunca la dejaré de amar, así se haya
hizo al fin del mundo!
Allison muerta de la rabia y encolerizada grita:
— ¡Ese estúpido amor que dice sentir no evitó
que yo pudiese hacer que se largue! —La demencia
vuelve a su cabeza —. Ahora podremos ser feliz y
440
amarnos para toda la vida como siempre debió de
ser, con nuestra hija Carla.
El amante viendo que él no tiene vela en ese
entierro, sale y desaparece topándose en el pasillo
con las personas que se empiezan a aglomerar en la
puerta de la suite de Allison, debido a los gritos.
— ¡¿No me digas que creíste que haciendo que
Mel se fuese yo iba a venir corriendo a tú lado o que
esperaría y luego nos amaríamos?! —Ríe sarcástico
—. ¡Nunca! ¡Para tu información ese cuento de que
esa pobre inocente es mi hija, yo no me lo trago!
Sorprendida, nerviosa y llena de ira viendo el
resultado que ni aunque Melanie se fue sus planes se
vienen abajo grita y tira de su pelo, se lastima con
sus uñas y las personas sorprendidos abren sus ojos
mirando la demencia de Allison.
— ¡Que es tú hija! ¡Tú y yo nos casaremos, ella
nunca va a volver! ¡Nunca!
— ¡Me puede costar la vida entera, pero la
encontraré! ¡Jack!
—Ya vienen Cameron, está más que comprobado
que está mujer está fuera de sí —dice Jack apenas
Cameron lo llama.
441
Allison se da cuenta de la situación y mira hacia
la puerta donde están las personas mirándola con
odio, lastima algo que odia, prefiere el odio antes
que la lástima. Intenta controlarse y transmitir paz.
Dibuja una sonrisa de ángel en su rostro y mira a
Jack.
— ¡Jacki! Sabes siempre te he odiado, por
metiche, prometo que cuando sea tú patrona me case
con tú jefe te despediré y te destruiré —murmura las
últimas palabras más bajito que las otras sin perder
su sonrisa de loca.
—Allison, sabes que soy un hueso duro de roer,
yo nunca te he soportado, no siento odio por ti
porque eso es un sentimiento y yo por ti no siento
nada niña, tal vez lastima, pero escucha ¡Como que
mi nombre es Jack Johnson no voy a permitir que de
nuevo destruyas a mi muchacho!
Justo cuando Allison pretendía sortear todo su
veneno, dos policías uniformados irrumpen en la
suite y parándose al costado de Cameron lo miran,
luego a Jack por último a Allison que tiene la cara
toda arañada y se dirige uno de ellos a Cameron.
—Señor Danielson, señor Johnson —un
asentimiento de cabeza a cada uno —. Hemos
recibido una denuncia de parte de usted señor
442
Danielson, por amenazas en contra de su esposa, la
señora Melanie Walker Swant de Danielson.
—Exactamente oficial, las pruebas no son tan
contundentes debido a que todas las amenazas no
tienen remitente y la que tienen fueron enviadas
desde un móvil con número desconocido, pero el
señor Johnson es testigo de que la señorita en pocas
palabras a confesado sus amenazas y las personas de
el pasillo vieron como ella tiraba de su pelo y se
lastimaba a sí misma.
—Bien, procederemos a arrestarla ya luego el
juez encargado del caso verificará la validez de los
testigos y de las pruebas.
—Perfecto.
— ¡¿Pero qué es esto?! —Grita Allison al darse
cuenta de la situación —. ¡Yo soy Allison Stile, una
súper modelo y proveniente de una familia pudiente!
¡Los refundiré a todos en el infierno!
—Guarde silencio —murmura un oficial
rodeándola y llevando las manos de ella a las
espalda a la fuerza para ponerles las esposas
—.Tiene derecho a guardar silencio todo lo que diga
puede ser usado en su contra, tiene derecho a un
443
abogado si no puede pagar uno el estado le asignará
uno.
— ¡Me la vas a pagar Cameron, Jack tú también,
maldito perro faldero…!
Sigue gritando improperios y maldiciendo y
mirando mal a todo el que se pase por su lado,
Cameron, Jack, los policías, las personas, la
recepcionista a todos.
En el fondo del corazón de Cameron se
disminuye un 5% su preocupación al presencial tal
acto, pero él y Jack están seguros de que ese
encarcelamiento no durará mucho, pues las pruebas
no son tan contundentes.
La prensa como siempre se entera de todo y la
detención de Allison es grabada en primera plana, la
salida de hotel en el camisón que deja poco a la
imaginación y la demencia enmarcada en su rostro.
Mira Cameron la hora y ya son pasadas la una de
la tarde.
Pide a Jack que por favor ponga en movimiento a
todos los detectives influyentes y prestigiosos en la
búsqueda de su mujer, lo más pronto posible.
444
Jack solo le dice que así será y que ahí siempre
estará para él.
Luego de eso y que los policías toman las
declaraciones de los testigos de la discusión,
obviamente ellos no vieron el momento en el que
Cameron la tomo del cuello, cuando esto termina se
dirigen todos y cuando todos es Jack, Cameron,
Allison y los policías a la estación de policía.
Pero si de algo seguro está Cameron, es que lo
peor está por venir.
445
Capítulo 32
446
La belleza de Londres es increíble las calles, esa
ciudad tiene tantas historia, el sol se ve a través de la
ventanilla del avión, pintando el cielo de anaranjado
y eso que el sol no está en todo su esplendor.
Ya fuera del avión se encuentra en la sala de
aterrizaje y se dirige a algún cajero para cambiar
unos dólares por libras.
— ¡Hey! Mel —Damaris le llama y ante su
llamado ella voltea a ver.
—Dígame señora Damaris.
—Nada de señora —le sonríe —. ¿A dónde te
diriges?
—A… a London —antes de responderle pensó en
la posibilidad de que ella la reconociese de algún
lugar, pero que tonta si durante todo el vuelo no le
había dicho nada, imagina ahora, boba.
— ¡Oh, pero que maravilla! —Exclama
emocionada Damaris —. Yo soy de London, vivo
allá, tengo un negocio, no tengo hijos Dios no me lo
permitió, pero si he criado uno como si lo fuese.
—Lo siento —se refiere a lo de su infertilidad,
lleva su mano a su vientre y lo acaricia con una
sonrisa formada en sus labios —. Dios sabe lo que
447
hace, a unos no le da la dicha, a otros si y no saben
aprovecharla y amar a ese ser tan divino, pequeño y
adorable y sobre todo que sale de nuestro cuerpo es
parte nuestro, mitad nuestro y nos las da a otros, los
amamos desde el primer instante en el que lo
sabemos pero por cosas que solo Dios sabe no
podemos disfrutarla completamente, mí bebé crecerá
sin su padre, no hay felicidad completa —solloza y
Damaris de acerca para consolarla.
—Ya querida —le levanta el rostro —, no sé por
lo que estés pasando, pero se nota que eres una
buena muchacha además de joven, no te veo con
equipaje —dice observando a los lados —, y se te
hará difícil encontrar donde dormir, comer algo
saludable y una ducha caliente como facilitarte algo
de ropa, tengo una casa no tan grande, ni tan
pequeña, pero si con suficiente habitaciones, te
puedes quedar allá, sin preocuparte por pago de
alquiler, bueno si tú quieres.
Desconfiada Melanie se torna pensativa, no la
conoce, nunca la había visto en su vida hasta hace
apenas unas doce horas, pero en ese poco tiempo a
demostrado ser una buena persona, cualquier
persona en su lugar ni siquiera la hubiese mirado
mucho menos prestado atención a su llanto sin saber
el motivo alentarla sin conocerla y sin saber si es
448
alguna delincuente que huye y es lo que cualquier
persona pensaría, no tiene nada con ella con tan solo
lo que tiene puesto. Hay más cualidades buenas que
las opciones sobre las desconfianzas.
—Está bien —termina aceptando —, solo cambio
unos dólares por libras y listo, muchas gracias por
todo.
—No tienes porque, anda, detrás de ti hay un
cajero, yo iré mientras tanto a comprar algo para
comer, tú y tú bebé necesitan alimentarse —al ver el
intento de protesta de Melanie la interrumpe
rápidamente —, nada de nada jovencita, piensa en tú
bebé.
Con esas simples palabras la desarma, su bebé es
su debilidad y eso es lo que la mantiene en pie
luchando, esa criatura merece lo mejor y ella como
su madre hará todo porque así sea.
449
Un joven guapo del otro lado, recostado sobre el
capo de una doble cabina, al ver éste a la mujer que
lo ha criado toda la vida como su hijo y a la cual
llama madre, sonríe ampliamente y su mirada destila
confianza, se apresura a ayudar a su madre con el
equipaje y llegando a ella la envuelve en sus fuertes
y calurosos brazos.
— ¡Madre, te he extrañado! —dice emocionado.
—Y yo a ti —separa sus cuerpos y deposita un
beso en la frente de él —. Hijo, déjame presentarte
—gira su cuerpo a la izquierda que es el lado donde
se encuentra Melanie —, ella es Mel Swant, una
amiga, Mel él es Asthon mi hijo.
El joven totalmente embobado ante la preciosidad
de mujer que tiene enfrente, la observa y como
siempre lo que más cautiva a los hombres de
Melanie y a todos lo que la conocen son sus
preciosos ojos azules.
Acercándose Asthon a ella toma su mano y
deposita un suave beso, que le sube todos los colores
al rostro a Melanie.
—Un gusto señorita Swant.
Melanie le da una calidad sonrisa y le
corresponde al saludo.
450
—El gusto es mío Asthon, puedes llamarme Mel
y no señorita.
La incomodidad empieza a llegar a Melanie al
reparar en que Asthon la llamó señorita y no señora.
Que la llamaran señora en Estados Unidos le
gustaba, le gustaba sentirse la señora de Cameron, le
daba aquel tipo de pronombre una seguridad cada
vez que alguien lo decía, sentía que ella le pertenecía
a él y él a ella, pero ya nada es así.
Asthon percibe la incomodidad en el rostro de
Melanie por lo que se apresura a preguntarle sin aún
haber soltado la mano de ella.
— ¿Hice o dije alguna cosa mala?
Incapaz de pronunciar palabras por los
sentimientos que se encuentran por dentro de ella
como un huracán, sólo niega con la cabeza.
Asthon no se ha dado cuenta de las alianzas que
lleva la chica que lo tiene embobado desde que la
vio, pero si es notable la tristeza en sus ojos, los
cuales están ojerosos, rojos e hinchados por el
innegable llanto.
— ¿Tú equipaje? —Asthon rompe el silencio
formado al ver que la chica enfrente de él no lleva
más que lo que tiene puesto.
451
Incómoda Melanie por el agarre en su mano que
ha sido más extenso que un simple saludo, de
manera sutil retira su mano y da un paso atrás, pues
su pregunta la ha tomado por sorpresa y la ha puesto
incomoda.
—Asthon, hijo, mejor marchemos se está
haciendo tarde y estamos muy lejos, luego, luego se
conversa sobre el equipaje de Mel.
Nerviosa Damaris intenta desviar el tema,
Melanie voltea a verla y le dedica una mira de
agradecimiento por salvarla de una situación tan
incómoda, además de que si hubiese abierto la boca
todo sería un desastre. Damaris parece comprender
la mirada de su nueva amiga y disimuladamente
mientras su hijo toma sus maletas le dedica un
asentimiento en forma de entendimiento.
Después de Asthon subir al vehículo las maletas
de su madre, las dos mujeres le siguen y montándose
Melanie en el asiento de atrás y la mujer más adulta
al copiloto con su hijo, proceden a abrocharse los
cinturones de seguridad y emprenden viaje a
London.
Comiendo Melanie de los aperitivos que Damaris
adquirió en el aeropuerto, piensa que cada rodaje de
452
aquel vehículo la aleja más y más a ella y su bebé de
su marido y padre de su bebé.
453
aparcar y que bajaran, observa mejor con
detenimiento, un maravilloso jardín con flores
diferentes.
Se adentran en la casa y la calidez de ésta los
recibe, un pequeño recibidor no tan pequeño, pero si
lo suficiente amplio para una casa de aquél tamaño.
—Este es nuestro hogar —dice Damaris
emocionada.
—Solo he visto la estructura y me encanta, se
nota lo acogedora que es —murmura con amabilidad
Mel.
—Supongo están muy cansadas, deberían de ir a
tomar un baño yo ya había adelantado la cena, suban
y acomódense ya cuando regresen podrán cenar
tranquilas —sugiere Asthon, clavando sus ojos
mieles en Melanie.
—Oh, muchas gracias hijo.
Damaris agradece y toma de la mano a Melanie y
la guía a la segunda planta de la casa, donde los
decorativos son una especie de antigüedad con un
toque sólo un poco de modernidad.
Los pasos de la anfitriona de la casa no le permite
detenerse mucho tiempo a observarlo pues la lleva
454
rápidamente a una habitación, cuando abre su puerta
delante de ella se encuentra una habitación con una
cama normal cubierta por sábanas de color crema de
algodón, dos almohadas y unos cojines, dos mesitas
de noche, un pequeño armario y un escritorio, más
un mueble pegado a la ventana.
—Éste será tú cuarto —Mel gira su cabeza a
Damaris y esta prosigue —tal vez no es muy gran
y…
—Es perfecta —le interrumpe Mel —, muchas
gracias por todo.
—No hay porque —Damaris la mira de arriba
hacia abajo —, no tienes ropa, por lo que iré a mi
recamara a buscarte algo de ropa, la que está al
inicio del pasillo es la mía y la de mí hijo es la que
está, entre medio de éstas dos.
—Entiendo.
—Ya vengo, veré que encuentro para ti.
Damaris se retira y Melanie se adentra más en su
nueva habitación, no es grande como la de su casa
en Miami o como la de su casa… en new york.
¿Será que esa sería su casa todavía?
455
Damaris vuelve con un poco de ropa la cual le
extiende y se retira para tomar un baño. Melanie
hace lo mismo y se ducha, tantas horas sin bañarse
el agua le sienta muy bien.
Luego de ducharse, Mel se cambia con un vestido
largo hasta un poco debajo de la rodillas ajustado en
el busto y suelto de ahí para abajo y se coloca el
suéter que Damaris le había llevado con sus tenis, no
le queda mal, por lo menos Damaris le había llevado
un conjunto de ropa interior de su talla nuevo, ya
mañana debía de ir a comprar ropa materna pues su
bebé se notaba ya y en unos meses su panza sería
enorme.
Cuando llega a la primera planta se guía por los
murmullos y llega a un comedor de seis sillas,
encontrándose con sus dos nuevos amigos
preparando el comedor.
Camina hacia ellos y carraspea para hacer notar
su presencia.
La vista de Asthon la recorre y se detiene en su
pequeño vientre abultado y sus ojos se abren tanto,
que da la impresión de que en cualquier momento se
le saldrán de las órbitas.
—Estás, estás embarazada —murmura apenas.
456
La chaqueta que Melanie llevaba puesta en el día
era ancha y escondía a bebé pero el vestido, a pesar
de ser ancho da a demostrarlo pues la tela es de
algodón y con el caminar se adhiere al cuerpo.
457
Capítulo 33
458
parece como si sus pilas se han agotado, el personal
también y qué decir de él.
Horas antes del anochecer, el investigador que
contrató para poder investigar y tratar el asunto de
Will Film, lo había llamado para informarle que
había dado con el paradero de el nombrado y que se
había puesto inmediatamente en contacto con éste
contándole la situación y mencionando la petición
de Cameron, lo que al principio le pareció extraño a
el señor Film, pero que luego de explicarle en
resumen todo, éste mismo no necesitó más
explicaciones que el breve resumen y darse cuenta
de todo, cosa que dio como resultado que al día
siguiente Will Film estará pisando territorio
americano.
Cameron tiene a un departamento entero de la
empresa de Jack el cual en segundo nombrado le
había facilitado en conjunto con otras oficinas de
detectives movilizados para que encuentren a su
mujer, así tengan que mover cielo, mal y tierra, hay
que encontrarlos.
Sumergido en un vaso con caña, en el silencio de
su habitación, piensa y piensa, se arrepiente de la
manera en que la trató las últimas semanas antes de
que se enteraran de la existencia de su bebé, con su
459
indiferencia pensaba él que la estaba protegiendo,
pero no, fue estúpido al no imaginar que de todos
modos Allison iba atacar, por todos lados y que
hiciera lo que él hiciera así fuese acceder a acostarse
con ella como tantas veces se lo había propuesto no
la hubiese dejado en paz y más daño todavía le
hubiese causado, siempre Allison buscaría la manera
de alejarla de él y lo logró.
460
—Buen día Cameron, imaginé que estarías hecho
el desastre que presentas ahora —dice observándolo
fijamente.
Cameron frunce el ceño y es cuando él se huele,
apesta, alcohol y más que no se baña desde ayer por
la mañana. Camina al espejo de cuerpo entero y se
observa. Quién lo diría. Barba, pelo más largo del
que lo usa, más delgado pero sus músculos más
firmes en el gym es donde descarga toda su
frustración y problemas, unas bolsas grandes y
negras debajo de sus ojos esmeralda. Es un desastre.
—Entra al cuarto del baño, te bañas y vienes aquí
a desayunar —no le está sugiriendo, Jack le está
ordenando.
—Jack, yo no tengo hambre, lle…—se le
dificulta a Cameron hablar, la garganta se le ha
lastimado por tanto alcohol y qué decir del
estómago, sin comer nada desde hace más de treinta
y seis horas, no termina de hablar porque es
interrumpido por Jack.
—Es que no te estoy preguntando, te estoy
ordenando.
Cameron tratando de mantener la calma ya que su
temperamento anda por las nubes mira al techo y
461
suspira virando los ojos para no decirle una grosería
Jack.
Rendido se introduce en el cuarto del baño y
empieza a desvestirse, pues hasta ahora se fija que
trae la misma ropa del día anterior.
Mientras en la habitación Jack, recoge botellas,
vasos, quita las sábanas y coloca unas nuevas.
Lavando Cameron su cuerpo a su mente llegan
las veces que bañó a su mujer, su piel tan suave, tan
delicada, su sonrisa, todo de ella… sin darse cuenta
una lágrima sale de su lagrimal la cual se mezcla con
el agua de la lluvia artificial.
¿Cuántos años tenía él que una lágrima no la
derramaba por nadie? Diez años. Diez años desde el
aparatoso supuesto accidente en el que sus padres
perdieron la vida. Ni aun cuando descubrió la
traición de Allison, lloró, ni le dolió, sólo se sintió
destruido y solo por eso pensó que dolía, Allison se
había convertido en la persona de la cual dependía
para todo, para salir, eso fue, que su mente y su
cuerpo al sentirse solos y vacíos sin la presencia de
sus padres, ella entonces llega y le da lo que él
pensaba que añoraba y necesitaba, cuando la
realidad es que todo acto que realizaba con ella lo
destruía cada vez más.
462
Termina de limpiar su cuerpo, sale de la ducha y
se envuelve una toalla alrededor de la cintura para a
continuación lavar sus dientes, luego de eso sale del
baño y se encuentra a Jack sentado en la pequeña
mesa que hay en la habitación.
Pretende irse al closet y cambiarse pero la voz de
Jack lo detiene.
— ¿A dónde crees que vas? Ven aquí muchacho,
ven a desayunar.
—Es que no tengo hambre —articula como un
crío.
—Eso no me interesa, es que acaso piensas
debilitarse y que te tengamos que internar,
¿Pretendes de éste modo tener fuerzas para
encontrarlos? —Cameron pensando en las palabras
de Jack baja su cabeza —. Si sigues así, vas a
terminar más delgado de lo que estás, te ves fuerte,
pero te conozco te estás muriendo por dentro,
destrozado, ese no es tu peso, éste no es el chico que
conozco desde que nació, ¿Sabes? Si sigues como
vas, ellos van aparecer, ¿Pero quieres saber cuándo?
Cuando estés en un ataúd.
—Tengo un nudo en la garganta y en la boca del
estómago que no me deja tragar, no me deja tener
463
apetito, ¡Sólo quiero encontrarlos! —grita ya fuera
de sí.
— ¡Baja la voz! Acuérdate de que estamos detrás
de un posible sospechoso de traición que trabaje
para ese cascabel y nadie de los que realmente tú y
tú familia nos importe, queremos que llegue a los
oídos de ese demonio el estado de Melanie —le
habla de manera concienzuda, lo que parece que
Cameron capta.
—Tienes razón.
—La tengo, ahora pon tu culo en esa silla y
come.
Refunfuñando toma asiento y Jack quien se había
parado de su asiento frente a él.
—Primero come ésta sopa de pollo con vegetales,
te hará bien, abrirá tú estómago y no te hará daño,
demasiadas horas sin comer llevas, comer algo
pesado ahora sería muy dañino para tu intestino —
explica al tiempo que le destapa la sopa.
Rápidamente el delicioso aroma de la sopa se le
cuela por las fosas nasales a Cameron despertando
su estómago el cual gruñe.
464
—Ya ves —le señala Jack —, luego te tomarás el
café que está aquí bien cargado, pero antes éste
analgésico para el dolor de cabeza.
Por encima de la mesa Cameron le palmea el
hombro dándole un apretoncito, mirándolo con todo
el agradecimiento el cariño que le pueda demostrar.
Jack capta en mensaje y solo asiente, tomando el
café que había llevado para él.
La vida de Cameron sería un completo desastre si
Jack no estuviese con ella.
465
permitido visitará la empresa, si algo malo hubiese
pasado o lo necesitaran ya lo habrían llamado.
Aunque es domingo siempre hay uno que otro
empleado ahí, el trabajo lo ayuda a distraerse.
En conjunto con Jack habían acordado mantener
el asunto de la desaparición de su mujer lejos de la
prensa, por tal motivo los detectives encargados de
buscarlos, a ella y a bebé, están siendo sigilosos pero
precisos y si es de escándalo público, en caso de que
se llegará a filtrar, sería una catástrofe, no por cuidar
su imagen eso es lo que menos le importa, sino
porque estarían ella y bebé en el ojo del huracán y
seguramente donde esté, no podría salir ni a la
esquina, puesto que la estarían persiguiendo eso
sería una ventaja para saber su paradero, pero no,
estaría expuesta a una constante tensión y eso no es
bueno para su estado pues podría tener algún
colapso o aborto espontáneo y eso si que no, él
mismo se encargaría de destrozar a todos si a su
mujer y su bebé le pasase algo, además de que si el
tema llega a ser de conocimiento público Allison
sería enterada de inmediato y es otro peligro,
demasiado peligro.
Si es de conocimiento público el arresto de
Allison, puesto que el hotel es un lugar concurrido
por famosos y la prensa amarillista siempre está al
466
acecho en esos lugares, fue lo primero que salió en
las noticias y no dejaron de hablar de eso en todo el
día, Allison proviene de una familia pudiente y en
sus mejores tiempo fue una súper modelo.
Sale Cameron enfundado en su traje gris plata,
con camisa, corbata y zapatos negros, su pelo
peinado hacia atrás y encuentra a Jack con el móvil
en manos, parado en el medio de la estancia.
—Estoy listo, ¿Sucede algo? —pregunta al verlo
pensativo mirando el móvil.
Jack lo mira y sonriendo le dice:
—Éste es el Cameron que conozco —se torna
serio —. Will Film, está en mi empresa, nos está
esperando.
— ¿Qué esperamos entonces? Tenemos que irnos
para allá, éste es un asunto que deseo cerrar de
inmediato.
Se dirige a la salida de la habitación, baja las
escaleras rápidamente, se encuentra a Cristine
conversando con las chicas y Nick, ese niño, por lo
menos ya no siente tantos celos, ve una rara
conexión entre él y Vicky, les saluda rápidamente y
les promete al ver su tristeza que la encontrará, les
sugiere que usen la cancha donde pueden jugar todo
467
tipo de juego que deseen, el cine de la casa, la
piscina, vídeos juegos, películas… lo que deseen
utilizar ya sea el ajedrez, ellos dan gracias y se
permiten pensarlo, saluda a Cristine y ésta le da la
bendición para a continuación salir como un resorte
con Jack pisándole los talones.
468
Cameron murmura eso y observa a la pequeña en
brazos del que algún día fue su rival, pero eso le va
y le viene, eso es pasado. La niña parece estar a
gusto con él y realmente es hermosa, los ojos de la
niña son preciosos y verdes esmeralda con destello
de negro esa es la mayor confusión, pues él es de
ojos verdes y Will de ojos verdes también, pero más
claro un poquito nada más y la madre es de ojos
negros…
469
Mariana
470
Capítulo 34
471
puesto en el camino. Al salir de su casa ella bien
predijo que la vida no sería fácil, que muchas cosas
se opondrían en su camino, pero que ella bien sabe
que debe sacar fuerzas y coraje para salir adelante,
porque no es solo ella, hay otra personita que crece
dentro de ella y ésta situación es un obstáculo más.
Un obstáculo que debe sobrellevar para poder salir
adelante, de hoy en adelante.
Se levanta de la cama y rápido se introduce en el
pequeño cuarto de baño de la habitación, donde hace
todas sus necesidades y termina dándose una rica
ducha, para ponerse la misma ropa que Damaris le
había prestado.
Una de las tantas cosas que debe de hacer en éste
nuevo día es comprar ropa.
Después de ordenar el cuarto sale de éste y a
medida que va bajando las escaleras con cuidado va
pensando que explicación debe de dar, sobre su
estado, sabe muy bien que tiene la opción de no
decir nada y agarrar y marcharse, pero ¿Qué gana
ella con eso? La respuesta es nada, ellos la acogieron
siendo una completa extraña, le han abierto la puerta
de su casa y la han sentado en su mesa, sin tan
siquiera dudar y preguntar.
472
Pérdida en sus pensamientos, no se había dado
cuenta que ya había bajado el último escalón y que
sus pies por si solos la guían al salón donde está el
comedor.
Tomando valor aparece en el campo de visión de
Damaris y Asthon, los cuales hacen silencio
interrumpiendo la tan amena plática que llevaban.
Los dos pares de ojos se clavan en ella y por un
momento tiene la idea de correr y alejarse de todos
no involucrar a nadie, no arrastrar a nadie con sus
problemas.
A pesar de que en las miradas de Damaris y
Asthon, puede percibir que les intriga su estado y les
intriga ella, también observa que al momento que
tuvo el pensamiento de huida, ellos les brindan una
cálida sonrisa y sus ojos muestran ternura ante ella y
en especial los ojos del hombre.
—Buen día —logra articular para cortar el
silencio que se formó y del cual habían pasado unos
minutos.
—Buen día —responden a coro con cordialidad
Damaris y Asthon.
—Toma asiento por favor —dice Asthon
levantándose de su silla para correr hacia atrás la
473
silla en la que hay un plato al lado izquierda del
nombrado.
—Gracias —murmura apenas y se sienta.
— ¿Cómo amaneciste querida? —habla Damaris,
para tratar de que la tensión del cuerpo de Melanie
salga.
—Bien, gracias a Dios mi bebé no le dio por estar
de revoltoso o revoltosa ésta mañana, está muy
tranquilo o tranquila —la ternura y el brillo que
adornan su voz y sus ojos al hablar de su bebé,
enamora a las dos personas.
—Tu pancita ya se nota, no tuve hijos propios,
pero sé que esos malestares matutinos van cambiado
a medida de que avanzan —sonríe un tanto
nostálgica Damaris pero rápidamente lo cambia al
sentir la mano de su hijo Asthon en la suya —. Tal
vez no tuve de mí vientre, pero Dios es maravilloso
y me dio este precioso regalo, te amo tanto hijo —
dice acariciando la mejilla de Asthon.
—Yo a ti madre —le regala una encantadora
sonrisa que es capaz de derretir a cualquier, hasta a
Melanie, que si no estuviese pensando las 24 horas
del días en su marido —. Tú pancita Mel, además de
que se nota es preciosa Dios bendiga, estoy seguro
474
que ese o esa bebé será tan hermoso o hermosa
como tú.
Las palabras de Asthon hacen que todos los
colores suban al rostro de Melanie, la cual se sonroja
y no hace más que apartar la mira y fijarla en su
plato murmurando un gracias.
Para apaciguar el ambiente Damaris sirve el
desayuno y bebé parece feliz pues el estómago de su
madre gruñe y todos ríen procediendo a desayunar.
Aún en el de, Melanie levanta el rostro y los
observa a los dos hasta que empieza hablar.
—Yo…—se aclara la garganta —, sé que ustedes
están intrigados de cómo es que una chica joven,
está embarazada y casada.
—No tienes que decirnos si no te sientes a gusto
—se apresura a decir Asthon y su madre le apoya
—, fue imprudente de mi parte el haber exclamado
tanto sobre tus argollas y tú embarazo.
—Yo quiero hacerlo, no porque estén ustedes
intrigados o por la forma en la que anoche te
dirigiste a mi embarazo y argollas —toma aire —, si
no porque ustedes en tan poco tiempo me han
demostrado tanto y me han dado tanto que estoy
475
segura que ninguna otra persona en años haría, son
ustedes personas encantadoras.
Ambas personas sonríen y dan las gracias.
Melanie toma valor y empieza a contarle que se
casó por amor a su esposo, si decirle como
realmente fue su casamiento, les cuenta que él es
mayor que ella por 10 años, que viven, se corrige,
vivían en new york en una mansión de él, le cuenta
que su padre es un importante hombre de negocios
en estados unidos y que su marido es un empresario
multimillonario a nivel mundial, les cuenta el
motivo por el que tuvo que salir de su territorio y
dejar a su marido en casa mientras dormía y sus
amigas.
Ambas personas quedan aterradas ante lo que
Melanie les cuenta. Durante el relato cuando
Melanie se refería su marido la cara de Asthon
cambiaba, este no disimula mucho la atracción que
siente por la joven Madre, lo más alegre es cuando
les cuenta cómo supo de la existencia de bebé y
finalmente dice lo que esconde.
—Hay algo más —dice y los ojos se fijan en ella
esperando que continúe
476
—Les mentí en cuanto a mí nombre —espera
alguna reacción pero ninguna va a su encuentro por
lo que prosigue —, realmente no fue mentira, pero
es una forma de que no me encuentren —respira —,
mi nombre real es, Melanie Walker Swant de
Danielson, me dicen Mel mis amistades y todo el
que me conoce, por lo que realmente no mentí.
—Wao —Damaris se para de su silla rodea el
comedor y se sienta al lado de Melanie —, es tanto
que has vivido tan joven —dice con ternura tomando
las manos de la joven madre —, te admiro mucho.
Esas simples palabras hacen que las hormonas de
Melanie se alboroten y sus lágrimas salgan a flote.
—Yo también te admiro Mel —le dice Asthon,
siguiendo llamándola por su diminutivo del nombre
de ella —. Espera —se torna serio —, ¿Dijiste
Danielson? Y en new york sólo hay un empresario
multimillonario a nivel mundial, neoyorquino y que
se apellida Danielson —agranda los ojos —, ¡Dios
mío! ¡Eres la mujer de…!
—Sí, él es mi esposo, Cameron Danielson es mi
marido.
Damaris la mira asombrada.
477
— ¡Dios mío! La prensa amarillista siempre tiene
el ojo encima de él, hablan y hablan de sus logros a
nivel mundial y de como ha hecho crecer su fortuna,
como ha unido las dos empresas que heredó de sus
padres convirtiéndolas en una sola y siendo una de
las mejores del mundo dedicándose esta a todo tipo
de negocios —más sorprendida está Melanie al
escuchar todo lo que acaba de salir de los labios de
Damaris y la mira con los ojos bien amplios.
— ¡Por Dios! Prácticamente te sabes la vida de
mí marido, Damaris —le habla Melanie aún
sorprendida.
—La vida de tu marido —se aclara la garganta
Asthon —, la sabe casi todo mundo —encoge su
rostro —, se me hace extraño de que aquí a London
no hayamos sabido que se había casado.
—Las personas no se esperaban nuestro
matrimonio —Melanie lleva su mano a su vientre y
lo acaricia mientras observa sus alianzas.
—Déjame decirte querida, que tú marido, con
todo respeto, ¡Está hecho un bombón! —exclama
Damaris.
Melanie la mira como si no lo pudiera creer.
478
—Mi madre siempre ha tenido ese amor
platónico por él, aunque siendo de mi edad, estoy
cansado de decirle que podría ser su madre —
Murmura entre dientes Asthon.
—Ay, pero hijo eso no tiene que ver, la verdad es
que ese hombre está para comérselo —Melanie finje
una tos y Damaris repara en ella —, lo siento
querida —murmura avergonzada.
—No pasa nada —aligera el ambiente Melanie,
su rostro se torna serio —, por favor, se los suplico,
que no se corra la voz de que estoy aquí, síganme
llamando Mel, puede que algunas personas me
hayan visto en alguna revista, pero con mi vientre,
los cambios de todo, no se darán cuenta quien soy
—se torna triste —, no quiero que me encuentren, si
lo hace Cameron me llevará con él, la vida de
muchas personas que amo están en jaque y no quiero
que nadie salga lastimado.
—Descuida, nosotros guardamos el secreto y
claro te cuidamos a ti y a ese bebé, ¿Cierto hijo?
—Claro, madre.
— ¿Aún después de que les mentí, me dejaran
quedarme? —pregunta sorprendida Melanie.
479
—No mentiste porque quisiste —Damaris le
acaricia el cabello mientras habla —, lo hiciste para
proteger a los que amas.
—Muchas gracias —dice al borde del llanto la
joven madre.
—No tienes porque, aquí no te faltará nada, ni a ti
ni a ese bebé —sostiene Asthon más las palabras de
su madre.
—Bebé —corrige Melanie —, aún no sé el sexo,
por eso le llamo bebé, su padre fue el primero en
decirle así —agrega con una sonrisa triste.
—Yo creo que será niño —dice Asthon
emocionado.
—Yo estoy indecisa puede que es niño o niña —
dice pensativa Damaris.
—Niño o niña, es y será la luz de mis ojos, de mi
vida —dice con alegría la embaraza.
El negocio de Damaris y Asthon está por abrirse
por lo que se dirigen al local al lado de la casa, en la
cual no sólo está ese local sino que también hay una
pequeña casita.
Mientras plática y Melanie observa a su mente
llegan muchas cosas y no duda en conversarlo con
480
sus nuevos amigos, mientras los ojos de su nuevo
amigo no disimulan lo fascinado que está por ella.
Les plática que ella tiene una buena cantidad de
dinero y que necesita un empleo a pesar del dinero,
pues éste no durará para siempre y ella tiene un bebé
al que mantener y ella.
Damaris y Asthon le cuenta de una propuesta que
ellos quieren salir a flote que es una pequeña tienda
de ropa al lado del mismo negocio y a Melanie le
emociona esto, pues su sueño siempre ha sido ser
diseñadora.
Les cuenta que lo primero es irse de compras
dado que no tiene ropa y quedan eso por lo tanto
Mel se ofrece a ayudar con el negocio que al final
resultó ser dos en uno, el local es lo bastante amplio,
un lado es comer o cafetería y el otro es una especie
de ferretería, donde brindan servicios de plomero y
cosas así, Mel se ofrece a ayudar en el restaurante
dado que una empleada, la de caja faltó por algún
problema y no había quien la sustituyera, Mel había
hecho un curso de cajera y ahora lo pondría en
práctica.
Hasta que llegó la hora del almuerzo y luego de
eso cierran hasta la noche, que abren para la cena.
481
Toman un auto conduce por supuesto Damaris y
se dirigen a comprar ropa, para la futura joven
madre.
482
Capítulo 35
483
Jack le hace una señal de que se retirara y él lo
entiende de inmediato.
—Pensé lo mismo.
Will toma asiento enfrente de él con la pequeña
en brazo, que como todo niño de su edad observa
todo con curiosidad, en principal al hombre que es
tan alto como su padre o quizás más.
—Papá —le llama bajo a su padre.
— ¿Qué sucede cielo? —le pregunta con tanta
ternura, que Cameron no evita pensar como la
llamaría él si fuese su hija y pronto le llegó la
imagen de él cargando a bebé, lo que cambia de
expresión, pues que cabe la posibilidad de que nunca
más los vea.
— ¿Quién es él? ¿Por qué estamos aquí y no en
casa? —su voz angelical se oye muy bajito, pero
Cameron logra escuchar y una sonrisa surca sus
labios.
—Él es… —que le dirá, ¿Qué son amigos? Ja, él
y Cameron jamás fueron amigos y lo más seguro
nunca lo serán.
—Somos conocido, como amigos —la voz de
Cameron le sorprende, ese no es el hombre con el
484
que se partió la cara años atrás, lo ve y realmente ha
cambiado.
—Ah bueno, ya entiendo, nunca lo había visto
señor —la timidez de la niña empieza a irse y ella
empieza a soltarse un poco.
—Es… que…—ante tan inteligentes palabras, los
dos adultos se quedan sin respuesta alguna.
—Cariño, lo que pasa es que como ves él vive
muy lejos de nosotros y tiene su familia, a si como
yo te tengo a ti —las palabras de Will parecen
aclarar la mente de la pequeña.
Cameron los observa y realmente tienen rasgos
en común, pero esos rasgos se parecen a él también,
algunos.
—Entiendo —susurra la pequeña.
—Pequeña…—las palabras de Cameron se
quedan en el aire, la iba a llamar por el nombre de
Carla, pero pensándolo mejor y ni siquiera tiene idea
de si ese es el verdadero nombre de ella.
—Carla Film, mucho gusto ¿Señor…? —la
pequeña Carla, que si realmente ese es su nombre y
por lo menos su madre no mintió en aquello, se
485
había bajado de los brazos de Will y ahora está
frente a Cameron con su pequeña manito extendida.
Asombrado por el acto Cameron toma su manito
y le da un ligero apretón.
—Mucho gusto señorita Film, soy Cameron
Danielson —le sonríe y la pequeña de vuelta —. Te
veo muy curiosa en cuanto a saber que es éste
edificio, ¿Quieres conocerlo? —es la mejor forma de
alejar a la pequeña y que ella no se dé cuenta de la
situación, para así los dos adultos tener mayor
libertad y conversar sobre el tema.
— ¡Sí! —Chilla emocionada la niña, mira a su
padre y acercándose a él después de soltar la mano
del magnate pregunta —, ¿Padre puedo?
Will mira a Cameron quien le da un asentimiento
diciéndole sin palabras que estará bien.
—Puedes, pero ten cuidado.
Al Cameron tener la afirmación marca el número
del despacho de Jack, quien no tarda en responder,
Cameron le pide que mande a la guardaespaldas más
fiel y amable de la empresa, le explica que es para
darle un tour a Carla por la empresa, claro está con
su consentimiento, Jack no tarde en afirmar y
486
permitir y es así como la pequeña niña empieza
recorrer los pasillos y todo de aquel lugar.
Sí esa niña resulta ser su hija, debe de empezar a
protegerla y no simplemente eso amarla, pero
primero lo primero, los resultados.
Quedando solos Cameron gira y toma asiento
nuevamente, desde su asiento observa como Will
aún mira la puerta por la que su hija salió.
—Está bien —le dice Cameron para calmarlo.
De Will Film no parece quedar nada, de lo que
fue en el pasado, tan cambiado, antes vestía como el
chico malo y ahora lo ve tan distinto, vestido de
manera seria y preocupado por el bienestar de una
pequeña.
—Eso espero —el comentario de Will no sólo es
porque la niña está en unas instalaciones que no
conoce y sobre todo con una reconocida, si no que
todo ese asunto podría afectar emocionalmente a su
pequeña niña y eso si que no está dispuesto a
permitir, darlo todo si es posible por su pequeña
bebé.
—Como adultos debemos de buscar la forma de
que la situación no se salga de control y que esa
pequeña que puede ser tuya como mía, esté bien,
487
que no le afecte nada, se que esa es tú mayor
preocupación y aunque no lo creas es la mía —habla
Cameron y luego coloca su tobillo izquierdo sobre
su rodilla derecha.
—Créeme que es lo quiero —imitando la misma
posición de Cameron agrega Will —, pero escucha,
esa pequeña es mí bebé, yo estuve ahí las veces que
la loca que tiene por madre la quiso abortar, estuve
ahí para impedirlo, estuve para obligar a esa víbora a
comer, para que dejara de drogarse, para que vaya a
un médico —toma aire —, pero todo el esfuerzo que
hice valió la pena, cuando hace ocho años, en una
sala de parto, luego de escuchar, todo los
improperios que he podido escuchar a lo largo de mi
vida, de Allison hacia mí y los doctores, valió la
pena, cuando el sonido del llanto de una pequeña
niña, miniatura, mejillas sonrojadas, de piel blanca,
tan suave que cuando me la dieron a sostener en
brazos temía porque se me resbalará, su poco pelito
rubio tan hermosa.
A esas alturas de contar dos hombres rudos como
ellos estaban envuelto en los recuerdos e
imaginaciones, uno recordando el día de la llegada
de Carla al mundo y el otro como sería, imaginando
todo, una Allison sudada y alterada, de piernas
abiertas pujando un bebé y mal diciendo, mientras
488
un Will la escuchaba casi al coger la loma pero
aguantando para luego ser recompensado con ese
angelito que es hoy una linda niña, se imagino él en
ese momento y sintió tristeza dado que si él fuese su
padre biológico se había perdido el nacimiento de su
hija, pero imaginando también, a su mujer en la
misma situación, solo que ella no le echaría pestes ,
solo esperaría y pujaría para que bebé naciera pronto
y así poderlo tenerlo en brazos. Una cosa si se
promete encontrarlos, porque no pretende perderse
momentos tan importante como esos en la vida de su
bebé y mujer. Aunque la idea de un doctor viendo
nuevamente ahí, donde solo se siente con derecho a
ver él.
—Imaginó lo difícil que fue todo —agrega
Cameron después de un largo silencio.
—Lo fue y más difícil aún, cuando ella la rechazó
no quiso alimentarla, tampoco quiso ni verla, las
veces que la ha visto se pueden contar con los dedos,
ofrecí dinero para que me la alimentarán y nadie
quiso hasta que una buena mujer, que daba mucha
leche y estaba recién parida, aceptó, sin recibir mi
dinero, no quiso, no sabes cuánto se lo agradezco.
Así fue hasta que Carla dejó el pecho, ella la cuidaba
como su hija, en compensación le regalé una casa y
también negó pero al final terminó aceptando.
489
Se imaginó Cameron todo aquello y quiso tener a
Allison enfrente y estrangular, esa mujer no tiene
corazón, a su propia hija la rechazó.
—Una pregunta —la duda surca la cabeza de
Cameron —, ¿Cómo es que le pusieron Carla?
—Fue la única forma de que esa demente no me
la quitara y me dejara en paz con mí bebé —escupe
Will con odio las palabras.
—Realmente está loca —Cameron se pone sobre
sus pies y camina por la estancia a su mente llegan
los recuerdos de la vez en la que ella se le ocurrió la
idea de llamar Carla a un hijo que tuvieran.
Todo está confuso, que solo se podrá aclarar con
el resultado de la prueba. Ese nombre era para un
hijo de Allison y Cameron, ¿Pero por qué entonces
le puso Carla, si la dejó con Will? ¿Por qué si la niña
es hija de Cameron ella no lo contacto? ¿Tanta es su
obsesión con Cameron que chantajeó a Will con eso
tan vil?
Esas y muchas preguntas más azotan las cabezas
de los dos hombres.
—Ese nombre era para un hijo de ambos —dice
Cameron y mira a Will —, todo están confuso y tan
vil por parte de ella.
490
—Lo es —Will también se pone en pie —, pero
escucha, a mí o me importa lo que digan esas
pruebas, Carla es mi hija le pese a quien le pese, por
encima de quien sea y si tengo que luchar por ella lo
haré.
—Yo también lucharé por ella si es mi hija —
argumenta Cameron —, pero no tengo el corazón de
hierro, en caso de que sea mi hija, yo no te alejaré
jamás de ella, sabes que un juez no me lo concedería
tampoco.
—Eso lo sé —estira los brazos en un intento de
relajarse, Will está muy tenso —, solo te lo decía.
—Tengo contactos y movilizando todo con ellos
saldrán las pruebas más rápido —diciendo esas
palabras Cameron se dirige a un mini bar y toma una
copa le ofrece una a Will y éste niega.
—Así las cosas saldrán más rápido, yo le diré a
Carla que sólo son análisis de rutina para que no se
extrañe y le de miedo.
—Bien —Cameron bebe su copa hasta el fondo
—. Tenemos hasta el jueves para esto, como sabes
Allison está detenida, por algo que mejor me
reservo, pero no durará mucho allí, debemos
491
movernos rápido antes de que salga puede ella meter
sus narices y arreglar las cosas a su favor.
—Concuerdo contigo, Danielson.
—Me da tranquilidad saber eso —toma otra copa
—, esto no puede salir de aquí, haremos todo con
cautela, esta misma tarde tomaremos la muestra de
sangre, me pondré en eso cuanto antes desde ahora a
darle prioridad al asunto.
—Me parece bien —Will mete las manos dentro
de sus jean —, como ya todo está aclarado, me retiro
este viaje ha sido muy estropeado, mi hija y yo
necesitamos descansar, aunque a ella parece que las
pilas no se le acaban.
Ambos ríen por el comentario.
Cameron se comunica con la chica que tiene a
Carla bajo su cuidado y le pide a ésta traerla.
—Danielson —la voz de Will lo saca de sus
pensamientos —. Gracias por comprender.
—Gracias a ti Film, las cosas se han hecho un
poco mejor para mí al tú colaborar.
—Para ambos —argumenta Will.
492
De un momento a otro la mano de Will es
extendida hacia Cameron y éste no duda en darle un
apretón.
—Sin rencores —Will.
—Sin rencores y sin pasado —Cameron.
Como si fuesen dos viejos amigos, lo que era lo
contrario pues ninguno se soportaban se dan el típico
abrazo de hombres, justo cuando la puerta se abre y
una muy emocionada Carla entra con unos guantes
pequeños de boxeo y Jack detrás de ella que se
sorprende, pero luego asiente en conformidad y
acuerdo al ver las manos de Will y Cameron
estrechadas.
Carla empieza a parlotear, sobre que el señor Jack
es muy amable, que le regaló esos guantes y más, al
final se despiden y se marchan a un apartamento de
lo de Cameron que él dispuso para ellos y con las
comodidades que una pequeña necesita.
—Me alegra que las cosas entre ustedes se
solucionaran y llegaran a un acuerdo, aquí la única
que debe pagar es esa cascabel —dice Jack
refiriéndose a Allison.
—Lo sé —mueve su cuello Cameron haciéndolo
sonar —, ahora viene una de las partes más difíciles
493
—suspira hondo —, hablar con mi suegro.
Dejen su opinión.
Les quiere.
Mariana
494
Capítulo 36
495
Se arma de valor y presiona en la pantalla táctil
de su móvil el botón de llamar. Mira él aparato en su
mano y como en cámara lenta lo guía a su oreja.
Uno, dos, tres toques y taran, la llamada es
descolgada.
— ¿Cameron? —la sorpresa en la voz de Richard
Walker se escucha clara y firme.
—Eh, si, buenas tardes —carraspea —, espero
que esté usted bien.
—Eh, si, lo estoy, espero que estés tú también
bien.
—Si lo estoy —de momento Cameron siente que
se asfixia, por lo que afloja el nudo de su corbata un
gesto de nerviosismo.
—Es extraño que me llames —un mal
presentimiento se instala en el pecho de Richard —,
¿Le pasó algo a mi hija?
—Tiene que venir.
Es lo único que Cameron logra decir, pues cuelga
la llamada, es la mejor opción, con su suegro allí
estando presente todo será mejor, podrá explicarle
todo y con su ayuda sería más fácil encontrarlos.
496
La hora de reunirse en la clínica para realizar la
prueba de ADN, llegó, Cameron, Will y Carla sin
darse cuenta salen a la misma hora para la clínica
uno llega más rápido que el otro dado que vive uno
de ellos más cerca.
Todo ocurre como estaba premeditado, la doctora
los estaba esperando y tal como dijo Will horas
antes, la pequeña Carla tenía en su mente que eso
solo eran análisis de rutina para ver lo fuerte que
está y que el señor Cameron los acompañaría porque
él también necesitaba saber si estaba fuerte también.
La prueba estaría lista para la tarde del jueves,
tiempo justo para que Allison no metiera sus narices.
El tiempo se le había pasado y cuando llegó
Cameron a su casa ya eran las nueve de la noche,
después de haber salido de la clínica se había nudo
caminar por los lugares en lo que solía caminar de la
mano con su mujer y se le había pasado el tiempo.
Algo extraño ocurre, frente a la entrada de la
puerta principal de su casa hay más vehículos de lo
que acostumbran a estar ahí. Extrañado ingresa y
escucha voces muy diferentes a la que acostumbrado
a escuchar esta pero que en algún lugar había
escuchado.
497
Al entrar a la sala de estar de su casa, se
encuentra con los ojos azules igual a los de su mujer
pero estos están en el cuerpo de un hombre, su
suegro.
Había pensado que lo primero que Richard
Walker haría, era lanzarse encima de él pero ocurre
lo contrario.
Las chicas les habían contado todo, les, porque
no solo estaba Richard sino también la nana de su
mujer.
Su suegro al comprender la situación se llenó de
ira encontrar de Allison y le reclamó a Cameron el
hecho de ser tan estúpido y no darse cuenta.
Los días empieza a pasar, los investigadores
buscan y buscan y nada que encuentran, marido,
padre, nana, amigos y amigas desesperados por
saber de su paradero y ella en London dando inicio a
su nueva vida, había decido colaborar en el nuevo
negocio que estaban planeando Damaris y Asthon
que no es más que una boutique y ella dispuesta se
hizo socia, también había alquilado la casita y
empezó a acondicionarla para ella y su bebé. Al
principio Damaris y Asthon se había negado a que
ella pagara alquiler pero testaruda como es no sé los
permitió.
498
Asthon, este hombre no se rinde, cada día más
Mel lo cautiva más y más y se vuelve detallista y
persistente, atento y como idiota que las mujeres no
son Melanie empieza a darse cuenta de por dónde
van las cosas.
Los resultados de la prueba ya listo, todos
expectables al asunto, los conocidos más cercanos
como lo son Richard, Amalia, Cristine, Vicky,
Laura, Morgan, Jack y hasta el propio Nick el cual
se empieza a llevar mejor con Cameron al ver este
que al parecer a dejado de tener sentimientos
amorosos por su mujer y que estos parecen dirigidos
a Vicky, le trata mejor y no con antipatía, pero no
deja de llamarlo niño. Aunque el niño como él lo
llama no deja de preocuparse por su amiga.
Reunidos en el despacho de Jack, el cual es el
encargado de leer los resultados de la prueba.
Cameron parece querer arrancarse los dedos de tanto
estrujarlos y Will parece querer atracar el pelo de su
cabeza por tanto tirar de él.
Al ver Jack tanta tensión decide abrir el sobre y
desdoblar las hojas lee y lee, hasta llegar la parte
importante de los resultados.
—En un 99.99% de compatibilidad, Carla Film
es hija de…—lo mira a ambos —, felicidades, Will,
499
Cameron, Carla Film es tu hija Will Film, esa
pequeña sigue siendo tú bebé, tanto paternal como
biológicamente.
Un suspiro de alivio sale de lo más profundo de
Will y por lo tanto los músculos de Cameron se
relajan en el donde de su ser sabía el que ese era el
resultado, aunque tenía esa pequeña esperanza de
que la niña fuera de él, es una pequeña muy dulce y
amable, tan tierna.
Cameron y Will se dan su típico apretón de
manos y ambos quedan de acuerda en que lo mejor
es que Will se cambie de residencia al tener
Cameron ahora la confirmación de Carla no es su
hija, cuando Allison se entere de que él sabe la
verdad no tendrá nada con que chantajearlo, pero
buscará la manera de atacar a Will por haber
participado en eso y la manera de lastimar a Will en
lo más profundo de su corazón es con su pequeña
niña. Ambos de acuerdo Will dice que tiene
propiedades de las cuales Allison no tiene
conocimiento por lo tanto eligiera una de las más
segura.
Después de ese día poco supo de ellos, no se
mantienen ambos sin contacto, puede que se ayuden
mutuamente con el asunto de Allison, Will conoce a
500
la perfección a Allison, simplemente por el hecho de
que él era peor o igual que ella.
Al día siguiente de la lectura de los resultados de
la prueba como era de esperarse por falta de pruebas
Allison Stile fue liberada y es algo que de buen
humor no tenía a nadie, la susodicha había
desaparecido pero como todos saben bien eso no iba
a ser por mucho tiempo solo está esperando que las
aguas se calmen pero ella al durar casi una semana
en prisión la obsesión por Cameron se le había
convertido también en odio y ahora no se conforma
con verlo sin ella, si no quiere verlo completamente
destruido, a sus pies y entonces si su venganza sería
saciada y luego le daría paso al amor que ella
supuestamente le tiene.
Todos comprendían ahora el juego de Allison,
por esos están todos alerta desde hace mucho.
Las chicas a los días tuvieron que irse menos
Nick este iniciaría ya la universidad, había
terminado ya la secundaria por lo tanto era hora de
independizarse, por ahora viviría con su hermano y
trabajaría con él en la empresa familiar pero dado un
tiempo buscaría la forma de vivir solo y porque no
puede que con el tiempo no viviera totalmente solo.
501
Los días pasan y el vientre de Melanie cada vez
es más grande, consiguió días antes un ginecólogo
obstetra que le atendiera en el embarazo ya había
asistido y emocionada Damaris la había
acompañado, el médico le realizó los análisis
correspondientes y le había dicho que todo está bien.
La boutique cada día más va mejor y las personas
visten a la moda y elegantes con la misma ropa de
famosos pero a un buen precio y principalmente las
mujeres.
Asthon cada día es más abierto, dejando en claro
los sentimientos que alberga sobre Melanie en más
de una ocasión ya se la había declarado pero Mel le
había dejado claro que sus sentimientos no son
correspondido y aunque ella esté a distancia de miles
de kilómetros de su marido no le sería infiel, eso no
le gusto mucho a Asthon pero este prometió no
rendirse aunque Melanie claramente le había dicho
que sería en vano.
Para Melanie ella guardaba esa esperanza que no
salía de su pecho, puesto que ella claramente no se
quitaba sus argollas de matrimonio, ya que eso la
hacía sentir más cerca de su marido, cada noche y en
cuanto tenía oportunidad de hablarle a su hijo le
502
hablaba de su padre y de su abuelo, también le
hablaba de las locas de las tías que tendrá.
Como el médico le había explicado y claramente
ella había podido observar, bebé se va formando y
ya tiene pequeñas parte de su cuerpo formado, como
su cabecita, el médico le había dicho que
probablemente empiece a sentir como unos leves
muy leves movimientos por parte debe y que eso es
normal, que no se asuste y así ha ido pasando lo que
la tiene muy feliz y muy triste, está segura que si
Cameron supiera, viera y sintiera esos leves
movimientos sería tan feliz como ella, se pregunta si
la estaría buscando o ya se canso de hacerlo como
dijo esa loca de Allison.
Allison. Ella todavía no había dado señales de
vida, pero alerta todos a eso.
Los día continuaban pasando y el mal humor de
Cameron va en aumento, tanto que ni siquiera se ha
cortado el pelo y mucho menos la barba, se ve
diferente pero no menos guapo.
1 mes y 3 semanas después.
Ya había pasado todo ese tiempo desde que
Melanie tuvo que huir y nada, nadie daba con ella,
los mejores investigando y ya Cameron estaba al
503
borde del colapso pero jamás de tirar la toalla, eso sí
que no eso jamás, lo encontraría a si le costará la
vida y para joder más la prensa empezaba a
especular, nunca encontraron a nadie que pudiese
estar soltando información pero eso no lo descartan
en total. Día antes Amalia y Richard, los cuales de
llevan muy bien con Cristine y Jack, los dos
primeros habían estado recordando y hablando de
Mel pequeña. Ellos no se habían movido y no
pretendían hacerlo hasta que su nula apareciera con
el nieto del segundo.
Entre sus recuerdos habían recordado que junto
con clara madre de Melanie le gustaba leer cuentos e
historia antiguas y empezaron a enumerar lugares,
Cameron iba entrando y los escucho, tomó nota y se
dirigió a la biblioteca en la cual su mujer pasaba
horas muertas leyendo y buscando entre los libros
encontró los que leía, en varios da la casualidad de
el pueblo de London se repite y otros pueblos más,
si perder tiempo le dio esos datos a los
investigadores, pero esta es la fecha en la que no
saben nada y él ya no sabe qué hacer.
Un desesperado Jack entra agitado.
—Cameron
— ¡¿Qué?! —está claro su mal humor.
504
Respira Jack una y otra vez hasta que se llena de
valor y dice:
— ¡La encontramos!
¡Hola!
Nos leemos luego.
Dejen su opinión.
Les quiere.
Mariana
505
Capítulo 37
506
da pataditas o que simplemente hace un movimiento,
la primera vez que lo sintió moverse así, lloró de
emoción y de tristeza, la emoción por sentirlo y la
tristeza porque su padre no estaba ahí para sentirlo,
segura de que él hubiese estado igual de feliz que
ella.
Su embarazo es hermoso, como toda mujer
embarazada experimenta cambios, pero esos
cambios no son más que felicidad y que cada día le
confirma que su bebé sigue con ella. Su vientre
crecido no le impide disfrutar de una vida laboral,
social, el embarazo no es un obstáculo como piensan
algunas personas, al contrario a ella la ha llenado de
dicha, de demostrar que si se puede, que a diferencia
de que se piensa que estando embarazada tienes las
cosas limitadas, mucha mentirá, dado que ella ha
demostrado que la vida es difícil, que te puedes
casar a corta edad, que puedes estar embaraza a
corta edad, pero eso no es situación ni motivo para
rendirse.
Los empleados del negocio, restaurante, cafetería
y ferretería de Damaris y Asthon, se han hecho muy
amigos de ella y todos llevan una vida amena
calmada y en paz. Muchos de ellos tienen familia e
hijos, pero hasta ahora ella es la única embarazada.
El negocio de la boutique lograron montarlo rápido
507
y como socia le da muchos beneficios, la pequeña
casa la tiene bien adornada a su gusto es pequeña
pero acogedora. Todos están enamorados de bebé sin
conocerlo, han tejido mantitas y ropitas ónice de
colores suaves y que se puedan usar en ambos sexos,
porque bebé no quiere verse.
Damaris y Asthon son los más emocionados y
estos han comprado ropitas de todo para bebés, se
puede decir que tiene casi todo preparado. Pero él
último mencionado, ha llegado a un extremo de que
la hace sentir asfixiada, ya Asthon, no procura
ocultar sus sentimientos e intenciones hacia
Melanie, le pide oportunidades en contadas
ocasiones pero ella se niega, no pretende ser le infiel
a su marido y padre de bebé, lo ama y eso queda
más que demostrado pues nunca se ha quitado sus
argollas de matrimonio. Las cosas con Asthon han
sido tan extrema que han discutido y han dejado de
hablar hasta por días, pero luego él va y arregla las
cosas prometiendo que no va a suceder cosa que no
pasa, pues solo deja que las aguas se calmen para
volver a lo mismo, abrazándola de manera
indecorosa e intentado hasta robarle besos, no lo
quiere lastimar pero ha pensado en pedirle que se
aleje de ella y dejarle claro que sólo pueden tener
508
sólo una relación estrictamente laboral, debido a que
son socios.
En éste momento acaban de salir de la casa de
Damaris y se dirigen a la casita donde ella vive, son
casi las diez de la noche quiso negarse a quedarse
cenar, pero Damaris la manipulo con esa deliciosa
lasaña que su bebé no pudo resistir y terminó
aceptando. Como era de esperarse Asthon insistió en
acompañarla a casa a pesar de lo cerca que queda,
pero inventó un y mil pretextos y a pesar de que
Melanie no le aceptó que la acompañara, éste se
invitó sólo.
Ahora frente a la casita de una sola planta en la
puerta Melanie con su bolso decide ya despedirse.
—Bueno, hasta aquí llegamos, buenas noches
Asthon —da la vuelta sacando de su bolso la llave
de la cerradura.
— ¿Buenas noches así nada más? ¿Ni un beso de
despedida? —Cuestiona con enojo —. Porque mejor
no me invitas a pasar.
Se gira indignada.
—Asthon ya hemos hablado de esto, sa…
No la deja terminar y con enojo replica:
509
— ¡Si ya se! ¡Pero siempre lo mismo! ¡Te vives
guardando como si tú esposito fuera a volver y
seguro debe de estar follando con la primera que se
encuentre…! —no continúa hablando porque la
mano de Melanie impacta con fuerza en su mejilla.
— ¡Basta! ¡No te permito que me hables así y
mucho menos que me grites! ¡Mi bebé siente y
escucha todo esto! ¡Tus palabras me lastiman! —
después de tiempo sin derramar lágrimas amargas,
estás bajan por su mejillas, no prestan atención al
bullicio que se escucha cerca.
— ¡Es que no entiendes lo que siento por ti! —
Murmura con los dientes apretados mientras se
acerca —. ¡Me gustas, quiero que seas mi mujer y
ese bebé mío, mi hijo!
Ya estaba muy cerca y el terror empieza
apoderarse de las facciones de Melanie, la puerta
que había abierto con anterioridad está abierta y
Melanie entra trata de cerrarla pero él no se lo
permite su fuerza es más que la de ella y forcejear
no le hace bien.
—Me… estas… asus… tando —tartamudea
poniendo sus manos al frente Melanie.
510
— ¡No te asustes, amor! —continúa acercándose
hasta acorralarla en una pared.
— ¡Aléjate entiende no puede haber nada entre tú
y yo, yo amo a mi marido y no le voy a hacer infiel,
así esté en otro planeta! —le grita al borde del terror
y los nervios y eso descontrola al hombre que está
totalmente ajeno a todo lo que ocurre.
De lejos se escuchan unos bullicios, pero él no
deja que nada que no sea su obsesión sea atendida.
—Quiero que seas mía —toma a Melanie con
brutalidad de la nuca y cintura y ella intenta zafarse
pero no puede.
Cuando Melanie la cual está bañada en lágrimas
decide gritar porque ya la actitud de Asthon no es
normal es acallada por un beso brutal y violento que
callan sus palabras.
Patalea, mueve su rostro y le pide que la suelte
pero él no cede, si no que agudiza su rudeza y los
dedos de él se le clavan en la piel a Melanie lo cual
dejará marcas.
— ¡Por favor! ¡Suéltame, déjame! —llora y se
desesperada.
511
En la puerta alguien con furia observa todo y sin
esperarlo se abalanza sobre Asthon.
— ¡Te dijo que la soltaras! ¡¿Es qué no
escuchas?! ¡Hijo de perra!
El cuerpo de Asthon había sido lanzado al piso
cuando se le abalanzaron. Los puños del enfurecido
hombre impactan con fuerza sobre el rostro de
Asthon. Uno, dos, tres, cuatro, cinco y es separado
de Asthon por sus hombres, pues si no lo hacen
saben al ver la furia que brota el enfurecido hombre
sería capaz de matarlo.
Esa voz, ese cuerpo, ese perfume, le paralizó el
cuerpo a Melanie, no necesita levantar el rostro para
saber quién es, es él. Y no solo ella parece saberlo,
pues bebé patea fuerte, nunca lo había hecho de
aquella forma, el movimiento la lleva poner su mano
en el lugar del movimiento, todo bajo la atenta
mirada de él. Todo se queda estático para ella, tanto
que no nota la presencia de Damaris, con miedo,
pero en su rostro brilla la decepción por el acto de su
hijo.
— ¡Llévense a este hombre de aquí! ¡Y
dejémoslo solos! —brama una segunda voz que
Melanie logra identificar y rápidamente se da cuenta
512
que no está Soñando —. señora, por favor
acompáñenos.
Damaris sin replicar lo hace.
La puerta es cerrada para darles mejor privacidad.
Melanie se lleva al rostro sus manos temblorosas
y sus sollozos se agudizan.
— ¡Cameron! —dice con voz temblorosa y
asombrada.
Enfundado en un atuendo de jean, camisa blanca,
saco gris y zapatos italianos, más su barba de meses
y su cabello ya largo, se acerca.
Ese perfume la envuelve más el aura que destila,
¡Se ve guapo! Es lo que piensa Melanie. A pesar de
su descuido.
Como un cazador a su presa Cameron se acerca,
paso por paso, solo se escuchan los suaves sollozos
de Melanie, la respiración de ambos y los pasos de
Cameron. Al llegar a ella se queda mirándola de
arriba hacia abajo, hermosa para él, la contempla y
finalmente sube su mano toca su rostro donde se
deslizan lágrimas por éste. Las manos de Melanie
dejan su rostro y se relaja ante su tacto, cierra los
ojos y suspira de paz. El otro brazo de Cameron
513
sube a su otra mejilla y la ahueca, su cuerpo se pega
más al de ella, sus nariz, absorben el perfume de
ambos, sus cuerpos se estremecen al estar tan cerca
después de tanto tiempo aún sea por encima de la
ropa.
Cameron con devoción y amor desbordado, besa
sus párpados dejando a Melanie sorprendida, la cual
pensó que estaría enojado por haberse ido. Él besa
sus mejillas, todo su rostro y finalmente se apoderan
de sus labios, besando con amor y cuando estos se
encuentran un profundo sonido de satisfacción
emerge de las gargantas de ambos. Ella no tarda en
envolver la cintura de él con sus manos, es claro que
al ser Cameron tan alto tiene que inclinarse pero eso
no dificulta que ambos se besen con pasión y todo
ese amor que estuvo separado por tanto tiempo. La
manera de Cameron besarla es como si él tratara de
borrar el momento vivido por ella hace minutos.
Sus sabores lo seducen a ambos y gimen de
satisfacción. Continúan besándose y es cuando
Melanie se percata que algo mojado y no son sus
lágrimas cae sobre su rostro, él está llorando.
Alguien parece sufrir celos, pues patea el vientre de
su madre con fuerza más de lo acostumbrado
haciéndola quejarse un tanto y dándole señal a su
padre que debe de prestarle atención también. La
514
patadita fuerte llegó justo a la ingle del padre cuando
estiró la piel de su madre, lo que hace sonreír a
Cameron sobre el beso, que se ve interrumpido por
el quejido de Melanie y la sonrisa.
Abriendo ambos los ojos es cuando ella se da
cuenta que no es un sueño que es real por segunda
vez se da cuenta de eso. Y también se da cuenta de
que es tan real que por primera vez lo está viendo
llorar frente a ella y no busca la forma de secar sus
lágrimas.
Las manos que estaban en la mejilla de Melanie,
rodan por su cuello, hombros y antebrazos de ahí se
dirigen al redondo vientre, donde lo acaricia, se pone
de rodillas y alguien está más que inquieto o
inquieta bajo las caricias de su padre, no deja de
moverse y más cuando las manos de Cameron
recaen en el centro de el vientre, ambos padres ríen
ante tal acto por parte de su bebé y una madre llora
por todo por ver el rostro lleno de alegría de su
marido al tocar su vientre.
Cameron toma aire y decide hablarle a su bebé.
—Hola bebé —su voz es tan suave como una
melodía —. Yo, yo soy tu padre, soy papá, estoy
aquí, no me voy a ir, no volveré a dejar que nada ni
nadie nos separe, te amo bebé, los amo, a ti y a tu
515
madre, son mi vida —y rompe Cameron Danielson
en llanto mientras, su mujer hace lo mismo y lleva
sus manos a la espalda y cabeza de él, acariciándolo
y llorando con él. Y Cameron apoya su cabeza sobre
el vientre. Bebé parece tan feliz que no deja de
moverse bajo el tacto de su padre y al parecer las
palabras de su padre le hacen feliz.
516
Capítulo 38
517
un resorte y se dirigió a la casita, ella en el
nerviosismo porque según Melanie le había contado
él es muy posesivo y su hijo la había acompañado
tenia por la reacción de él magnate hacia su hijo
pero lo que no imaginó jamás es haber visto lo que
su hijo hacía, forzando a Melanie a besarlo.
La carne es débil, pero ella le enseñó desde
pequeño valores y respeto, le enseñó que a nadie y
nada se le obliga y mucho menos a una mujer más si
está embarazada.
— ¡¿Qué estabas pensando?!
Apenas tiene a Asthon en frente le reclama a
gritos.
— ¡Ese es el problema madre! ¡No pensaba! —
hace una mueca de dolor cuando se sienta en unos
de los muebles de casa —. ¡Yo… solo… quería…!
Su tono de voz desciende, no sabe que
argumentar, pues no tiene nada que decir, en su
momento quería que ella le correspondiera, que lo
besara como él lo deseaba desde hace muchas
semanas, tanto era su deseo que no midió las
consecuencias. Ahora reflexionando en ellas se da
cuenta del error que cometió, Melanie ya no lo verá
518
de igual forma miedo y pavor debe de tener hacia su
persona y con todo derecho y razón.
Más sin embargo los golpes de el marido de
Melanie, porque sí, lo reconoció a pesar de la barba
y del cabello, bien supo que era el magnate
neoyorquino quien está ahorita en propiedad de él y
de su madre, esto no hace que su obsesión por ella
disminuya, si no que aumente, ese intruso vino a
llevarse lo que es suyo, su cabeza solo piensa que
ella y bebé son de él y que por más lejos que se
vayan lo serán siempre y algún día ella será por
completo suya.
—No me gusta esa mirada, Asthon.
Damaris estuvo observando a su hijo desde que
se quedó a medio de la oración no coordinada y
tampoco terminada. Sus ojos no son los ojos de la
persona que ella crió con tanto amor, valores, son los
ojos de alguien que empieza a enfermarse de una
manera aterradora.
— ¿Qué dices madre? No es nada de eso —trata
de disimular sus pensamientos con una sonrisa
torcida bastante falsa —, es solo lo dolores de los
golpes, ese gigante pega duro.
519
No muy convencida Damaris lo mira y soltando
un suspiro se dirige a buscar un botiquín para curar
las heridas de Asthon, dejando a este pensando, que
si no será para él, no lo será para nadie.
520
Cameron se pone confundido, pero rápidamente
capta lo que pasa, durante el tiempo que Melanie
estuvo lejos imagino como seria su encuentro, claro
está que predijo esta reacción, todo iba muy bien
para ser real.
—Tienes que irte —Espeta Melanie lo más fría
posible, aunque por dentro su corazón se esté
destrozando a pesados.
Las palabras fueron tan frías que Cameron sintió
todo su cuerpo estremecerse bajo el efecto de estas.
Recuperando el su compostura, se endereza y serio
réplica
—No pienso, ni está en mis planes irme de aquí
sin ti y sin bebé.
— ¡¿Es qué acaso no entiendes?! —explota ella,
pero, ¿será realmente que él no entiende?
Cameron la mira con una sonrisa ladeada, cuanto
ama a esa mujer, intenta protegerlos a todos
sacrificando a ella y a su bebé.
—Me fui porque ya no te amo —cada palabra
que sale de sus labios la hiere —, no quiero estar
contigo, quiero una vida lejos de ti, soy joven y
puedo tener a cualquier hombre que quiera.
521
Las últimas palabras la hacen estremecer de
miedo cuando ve el rostro de Cameron lleno de ira.
— ¡Basta ya! ¡Basta de intentar proteger a los
demás a costa de ti y de bebé!
— ¡No estoy haciendo nada de eso! ¡Lo que pasa
es que no quieres entender que no te amo! —Se
muerde la lengua, aprieta los labios para no
derrumbarse, ama tanto a ese hombre—. ¡Además
eres un mentiroso, que me oculta cosas, como tu hija
con esa arpía de Allison! —continúa echándole sal a
la herida, más sin embargo estas palabras son más
que ciertas en la mitad de estas.
— ¡¿Es eso no?! —Lleno de frustración tira de su
ya largo cabello —. ¡Date cuenta, todo esto lo
planeó ella para separarnos y lo logró, me perdí casi
dos meses de la vida de ustedes, pero ya no más no
pienso perderme más por esa desgraciada!
La sinceridad en las palabras de Cameron la
desarman porque sabe que él tiene razón, pero mejor
es sacrificar su amor para que otros no mueran por
ellos estar juntos, ella lo dijo, mataría a sus seres
queridos si ella no se alejaba de Cameron, no solo la
amenazó en una ocasión sin descaro alguno por una
de sus tantas notas de hacerle daño a Cameron, no
522
puede volver, aunque se esté muriendo, aunque lo
ame tanto, no puede.
— ¡No me importa! —Sigue con su actitud fría
—. Vete Cameron y no vuelvas más.
— ¡Que no me voy a ir! —harto ya se acerca y
tomándola de la cintura con delicadeza y de la
mejilla la pega a su cuerpo —ustedes son míos, son
mi vida, no los pienso dejar por nada, ni por nadie,
sé todo.
¿Qué sabe? Rápidamente Melanie piensa y cae en
cuenta que solo salió de su casa con la ropa que
llevaba puesta aquel día, sus argollas, su pasaporte y
nada más, todo se quedó allá.
— ¡¿Que sabes?! —tiembla y trata de alejarse,
pero él con su fuerza no se lo permite—ja, ya no
hayas que inventar, grábatelo Cameron ¡Yo ya no te
amo!
—Si no me amaras, no temblaras como lo haces
cuando me acerco y cuando te toco —la muralla
levanta por Melanie empieza a desmoronarse —, no
me habías respondido al beso que nos dimos cuando
llegue aquí, si no me amaras no habías buscado mis
labios hace un rato, si no me amaras, no llevadas tus
argollas aún y si no me amaras, tus ojos no mirarían
523
mis labios como lo haces cada vez que puedes, tus
ojos no brillarían de amor por mi y dirás que soy
arrogante y te preguntas, ¿cómo lo sé? Fácil, porque
yo te miro igual.
Bastó eso y Melanie se desmorona en llanto, el,
la socorre en un abrazo.
—Es que no lo entiendes —solloza fuertemente
—. Te amo con mi vida, pero no podemos estar
juntos, todos están en peligro por mi culpa.
Cameron se tensa, ¿Todos están en peligro por su
culpa?
— ¿De qué hablas pequeña?
—No puedo —llora más fuerte —, no puedo
decirte.
—Claro que puedes y me lo dirás en este
momento —ya no se gritan, saben ambos que ese
asunto es muy delicado además de que las
alteraciones no les hacen bien a Melanie.
—Ella…—decidida empieza hablar le indica que
se sienten en un pequeño sofá que hay en la estancia,
le relata todo desde el parque en adelante sin
contarle las demás amenazas.
524
Cuando termina de contar Cameron arremete
contra una silla la cual hace pedazos haciendo a
Melanie saltar en su lugar.
— ¡Son unos inútiles! —Se refiere a los
guardaespaldas —. ¡Los despediré a todos!
— ¡Por favor Cameron para, me estas asustando
y a bebé también! —su mano toca su vientre donde
bebé se mueve inquieto.
Tal acto lo calma un poco, toma asiento de nuevo
y coloca la mano sobre la de su esposa y sienten
ambos a su bebé moverse por los gritos de su padre.
—Perdónenme —besa a su mujer y luego su
vientre inclinándose sobre este —. Todo está bien,
bebé —clava sus esmeralda sobre los ojos de
Melanie y con la seriedad que lo caracteriza la mira
a la cara y sin gritar serio le cuestiona —, ¿Y se
puede saber porque no me dices de los mensajes y
de las notas y cartas de amenaza que esa maldita
loca te mandaba?
Intimidada por su mirada reprobatoria baja la
cabeza y con voz baja dice:
—Yo no quería decirte más, ves lo que hiciste, te
conozco y solo te conté lo del parque, además esa
fue la amenaza más fuerte que ella me dio.
525
—Aún así amor, ustedes son mi responsabilidad,
tengo derecho a saber.
Baja la cabeza como niña regañada y luego la
sube y con ese carácter que la caracteriza lo mira y
seria argumenta:
—No pienses que me voy a disculpar, no señor,
cualquier persona en mi lugar habría hecho lo
mismo, ¿Y tú qué me dices? Eres un mentiroso que
no tiene los pantalones y los huevos de decirme que
tienes una hija.
Con indigno se para del lugar donde estaba
sentada y le da la espalda con la frente en alto.
A diferencia de ella Cameron sonríe y se relame
los labios al ver el redondo trasero de su mujer, está
más grande, pero no menos hermoso, sin descaro
alguno se levanta y la abraza por la espalda,
clavando su creciente erección en su espalda.
Y ella como descarada también y mujer necesita
se pega a él, hecha su cuello a un lado y gime, sus
pezones están tan sensibles y se endurecen debajo de
la tela del sujetador hasta doler.
—Esa es otra mentira de Allison —trata de
apaciguar el ambiente porque haya o no haya sido
una mentira el fue un cobarde por no contarle nada
526
—. Sé que te oculte las cosas —murmura besándole
el cuello e inmediatamente la piel de Melanie
responde poniéndosele los pelos de punta, sonríe
—,no tengo justificación, eres mi mujer, mi amiga,
mi amante —clava más su abultado miembro en la
espalda de ella —, mi confidente, eres todo para mí,
pero tenía miedo de perderte, sospechaba que era
una mentira pero confieso que también tenía la duda,
cabía la posibilidad de que fuese cierto.
— ¿Y que ibas a hacer? Según me has dicho era
una mentira por lo que supongo la niña no es tu hija
y si lo hubiese sido, ¿Me lo habrías seguido
ocultando?
Se separa, porque si sigue cerca y él con sus
insinuaciones terminará lanzándolo al sofá,
desnudándose a ambos devorándose y montándolo
hasta que ella se venga y luego a él le toque seguir
hasta que le de otro orgasmo y él se venga.
Sonríe un poco por sus pensamientos lujuriosos y
por los efectos que estos tienen en ella está toda
acalorada.
—Claro que no, pienso contarte desde ahora
todo. Quiero que me perdones
527
—Te costara eso señor Danielson y debes de
empezar pronto, no quiero más mentiras —
puntualiza Melanie seria.
—Lo sé y no lo habrá más te lo prometo, haré
todo por ganarme ese perdón.
—No prometas aún, y lo de todo lo tendré en
cuenta.
528
Capítulo 39
529
—Eso —se aclara la garganta Cameron —, suena
bien, debes de descansar, mejor vamos a tú
habitación.
— ¿Vamos? Suena a manada y sólo voy yo —se
divierte al ver el rostro de Cameron.
—Pequeña —dice a modo de advertencia —,
llevo…Ummm… ya perdí la cuenta del tiempo que
llevo sin dormir más de dos horas y como mucho
tres.
Aquello desarma a Melanie, quien por estar de
juguetona y reclamando no lo había observando
mejor.
Este más flaco pero sus músculos más tonificados
y fuertes, con barba pero se le ve sexy, con cabello
largo por la nuca y con grandes sombras y bolsas
debajo de aquellas esmeralda que tanto ama.
—Está bien, ven conmigo —dice rendida —,
¿Jack…?
— ¿Seguro sabes del hotel que hay cerca? Jack y
los muchachos están allá, tengo una muy seria
conversación con ellos, temo que algunos serán
despedidos.
530
—Ya deja de decir eso, no voy hablar de ese tema
contigo, pero ten claro que no permitiré que
despidas a gente inocente —Cameron va a replicar
pero ella añade —, eso está dentro de lo que tienes
que hacer, para que te perdone, ahora vamos y sin
pretextos.
Cameron ríe por lo bajo, se ha puesto mandona y
eso le divierte. Tal parece que su diversión no logró
ocultarla tanto pues Melanie se voltea a mirarlo con
una ceja arqueada.
— ¿Hice o dije un chiste Cameron?
—No —frunce los labios para controlar su risa
—, no hiciste ninguno de las dos cosas nena, solo
es… es —no logra contener la risa al ver el rostro en
total seriedad de su mujer.
— ¿Te parezco graciosa no? —se acerca
amenazante Melanie.
— ¡No! —controla la risa pero sus ojos lo
delatan, tienen un brillo de diversión —solo es que
estas un poco mandona.
— ¿Te parezco mandona? Eh, ¿Quieres saber
realmente quién es el mando de los dos? —las
palabras a continuación Melanie no las piensa —.
Por si no estás enterado aquí el mando eres tú, tú por
531
estar de mandón y por creer que tienes el control de
todo pasó todo esto, no me dijiste nada por ser un
mandón, no me dijiste quien era Allison en su vida,
no me dijiste que podrías tener una hija, me gritabas
por cosas de las cuales yo ni conocimiento tenía, en
unos de esos gritos me fui de donde estabas, ¿Y qué
pasó? Pasó que por eso casi me violan, que esa
mujer se sintió con poder sobre nuestro matrimonio
y empezó a destruirme por dentro, estaba acorralada
no sabía qué hacer, todos inclusive tú, estaban en
peligro si decía algo, por su culpa y tú culpa yo
llegué a dudar de ti, de tu fidelidad hacia a mí, y
sabes que por estar de mandón te perdiste casi dos
meses de mi vida y la de bebé. No me diste mi lugar.
La diversión se esfumó hace rato del ambiente,
ahora solo hay un hombre tremendamente dolido y
arrepentido, dolido porque ahora si sabe
completamente en un breve resumen lo que su mujer
y madre de su bebé ha sufrido, teniendo él culpa de
todo, por estar de mandón, por no escuchar a su
corazón, por ser cobarde y dejarse llevar por su
cabeza que le gritaba que si le contaba de su pasado
ella huiría de él, arrepentido por ser un completo
idiota, por no darle su lugar delante de una arpía mal
nacida como Allison, por no protegerla, por no
demostrarle todo aquel amor que su corazón solo
532
guarda para ella como se lo merece, por culpa de sus
errores se perdió casi dos meses de las vidas de los
dos seres que más ama en su vida, su mujer y su
bebé.
Ahora que tiene frente a él, a su mujer que se
muestra tal cual se siente, lágrimas que recorren
aquellas bellas mejillas sin maquillaje alguno, sobre
ellas y sobre toda su cara, una mujer que tiene una
mirada de reclamo, reproche, dolor, amor y un tanto
de decepción.
Ganando valor luego de unos minutos habla
—Sabes, se que tienes toda la razón pequeña,
aunque me cueste admitirlo, la tienes, en tus ojos
veo tanto pero tan poco, me conformo al ver que
todavía me miras con la misma mira que antes de
que pasarán todas éstas cosas. Más sin embargo sé
que mi lista de errores no es corta, que los seres
humanos cometemos errores, unos más que otros
pero eso es lo que nos caracteriza de ser humanos
nuestros errores. Tal vez yo esté en la lista de los que
cometemos muchos errores, la noche es corta y
tengo muchas cosas que decirte de mí vida que no
conoces y que muchos medios sólo dicen conjeturas
más sin embargo sólo yo puedo decir si es mentira o
no, pero para eso tenemos toda una vida por delante,
533
si, porque no te dejaré ir a pesar de lo idiota que soy,
a pesar de cometer error tras error, tú eres la mitad
de mi corazón, de mí alma, de mí cuerpo, eres mi
media naranja, mi alma gemela y sin ti yo no soy
nada. Si algún día llegas a dejar de amarme te
secuestro y no estoy jugando, te secuestro hasta que
logre robar tú corazón, digo esto porque tengo la
certeza de que nunca te dejare de amar, aunque me
cueste la vida y aún después de morir seguirás
siendo mi amor eterno. Pedirte perdón no es la
solución en este caso, sólo sé que te lo pido, pero no
es suficiente quiero ganarme tu confianza
nuevamente, quiero estar a tu lado cada día de mi
vida, quiero que tengamos muchos hijos, algunos
seis y sobre todo quiero amarte siempre, porque yo
te amo, te amo, te amo y eso nunca va a cambiar.
Ambos están bañados en lágrimas y se miran
fijamente sin apartar la mirada.
—No pensé que llegáramos a éste punto nunca —
agrega Melanie solloza.
—Tampoco yo.
—Vamos a descansar, estás tan ojeroso.
Melanie sorbe su nariz y luego seca sus lágrimas
para después acercar y estirando sus brazos seca las
534
lágrimas de su hombre, le toma de la mano y lo guía
hasta la pequeña habitación.
—Es pequeña pero muy acogedora, no es la
misma que tienes en new york, ni la misma cama
pero es cómoda —dice Melanie apenas entran en la
pequeña habitación.
—Tenemos Mel —se refiere a la forma en la que
se expresó Melanie sobre la casa en new york —,
todo lo mío es tuyo y ahora de bebé. En cualquier
lugar donde estés tú es cómodo para mí, siempre y
cuando estés tú, porque eres mí mundo.
—Alguien no está de acuerdo con eso —ríe y
lleva su mano a su vientre dónde bebé se mueve —.
Pensé que dormía.
Con suavidad acaricia su vientre y levanta la
mirada a Cameron quien está muy al pendiente de
cada movimiento de ella y sus ojos brillan. Melanie
toma su mano y hace que el también la ponga en su
vientre sintiendo como su bebé, de ambos se mueve.
—Es muy fuerte —murmura Cameron anonado.
—De eso no queda duda, nunca había pateado tan
fuerte que como cuando sintió tú presencia.
535
Ambos se quedan así un tiempo hasta que bebé
parece dormirse y Melanie se adentra al baño a
tomar una ducha y Cameron aprovecha para quitarse
la ropa y quedar en bóxer, se sienta en el borde de la
cama, espera hasta que Melanie sale y justamente
vestida como le dijo que dormiría.
¡Esas piernas! Lo tienen alucinando, tanto que se
obliga a mirarla a los ojos para no perder el control.
Y Melanie toda hormonas empieza a mirarlo sin
descaro, ja, total es su marido, su hombre y a pesar
de que no la están llevando bien, ese hombre la
calienta y como la calienta. Mueve su cabeza de lado
a lado y camina al lado de él.
— ¿Cómo dormiremos? Bueno digo, ¿De qué
lado dormirás?
—Del lado de siempre, amor.
Ya ambos saben cómo duermen, se acomodan en
la cama ambos apagan la luz de las lámparas de
noche.
En un principio Melanie no deja de estar
nerviosa, ha pasado mucho tiempo desde la última
vez que durmieron justos y esa noche precisamente
no es que durmieran mucho, más ella y ahora lo
tiene medio desnudo al lado suyo.
536
De un momento a otro su boca se ve asaltada por
los labios gruesos y suaves de su esposo. Le devoran
la boca y se la saquean con esa experta lengua, ella
muy bien sabe lo que esa lengua hace. Ambos se ven
azotado por un ferviente beso que poco a poco lo va
dejando sin aire alguno.
—Buenas noches mí amor —murmura Cameron
con voz ronca.
Esa ronques de esa voz le envía corriente
eléctrica por todo el cuerpo a Melanie, está excitado
y ella también.
—Buenas noches.
Melanie se voltea en posición fetal dándole la
espalda y sonriendo toca su vientre y le susurra:
—Tú también duerme bien mi amorcito, ten
buena noche mi pedazo de cielo.
Cameron enternecido gira y la abraza por la
espalda, estando ella en posición fetal siente la
erección de Cameron en su trasero y un gemido se le
escapa.
— ¡Ah!
Cameron satisfecho se restriega más y coloca su
mano en el abultado vientre de Melanie.
537
—Buenas noches, bebé, los amo —se refiere a la
madre y a bebé.
Besa el cuello de Melanie y está ya es un mal de
sensaciones.
— ¡Cameron!
—Ssh, no haremos nada.
Se sonroja Melanie porque se imaginó que él la
estaba excitando para eso.
—Yo no dije que haríamos algo.
—Te confieso que muero por hacerte mía y
escuchar como gimes y me pides más, pero sé que
no pasará porque estás dolida, además de que te
quiero tener pero en nuestra casa, en nuestra cama.
—Gracias por comprenderme.
Ambos abrazados se durmieron sintiendo el calor
emanado del cuerpo de cada otro. La sensación tan
placentera, la tranquilidad que emana el estar
durmiendo junto a la persona que amas. Así se
sienten ambos, tan bien se sienten que
inmediatamente se quedan durmiendo juntos.
538
A la mañana siguiente la primera en despertarse
es Melanie y siente ese perfume natural que emana
ese fornido cuerpo y lo que no falta en un hombre
casi todas las mañanas, su erección matutina.
Sonríe por lo bajo y como su vientre le permite se
gira y lo mira.
Está tan sereno, su ceño desfruncido, sus labios
entre abiertos y sus ojos cerrados adornando las
pestañas largas, negras, tupidas la parte superior de
sus pómulos, su cuerpo parece tan relajado como si
después de tanto tiempo pudiera estar en paz y esté
aún durmiendo lo demostrara.
Suspira, todo está demasiado tranquilo, la víbora
de Allison anda suelta y es un motivo muy serio de
cuidado para los que son acechados por ella.
Se levanta de la cama sin despertarlo, es hora de
hacer lo que tiene que hacer.
Saludos y besos.
Les quiere.
539
Mariana
540
Capítulo 40
541
desnudo. Llama constantemente el nombre de su
mujer y no le responde, es desesperante en la casa
no se escucha nada, cuando llega a la sala no hay
nada ni nadie y lo desespera más.
—No por favor, que no te hayas ido de nuevo.
Suplica en voz alta y es que la desesperación de
pensar que otra vez pierde a lo que más ama, su
mujer y su bebé, es completamente desesperante.
Por más imposible que parezca, él, todo un hombre
de negocios frío y calculador, al borde del llanto de
tanta desesperación e impotencia y su mente no le
ayuda porque máquina mil escenarios en los que
Melanie le deja de nuevo.
Dando largas zancadas se dirige a la cocina y
apenas entra ve a su mujer de espalda bailando con
su pijama todavía. No ve lo graciosa que lo hace,
sólo se abalanza hacia ella y la abraza haciendo que
se sobresalte ella al instante y nerviosa se renueva
hasta que conoce su piel.
— ¡Mi amor, mi cielo, mi reina, mi mujer, mi
estrella, mi pequeña, no te fuiste de nuevo, no me
abandonaste de nuevo!
Sus palabras son sobrenombres cariñosos, estas
son más que suplica es algo en lo que a ambos le
542
costará superar.
Melanie quien al Cameron entrar a la cocina
portaba en sus oídos unos auriculares con el susto
dado por su marido se los había sacado y al hacerlo
escuchó todo.
Nada es fácil en la vida, los matrimonios tienen
altas y bajas, infidelidades, malos entendidos,
peleas, mentiras, éstas cualidades son las más
comunes que las personas mencionamos, pero
sucede que no sólo son esas cualidades que existen,
más como lo es una persona que quiere dañar un
matrimonio, que aún él o ella de los que conforman
el matrimonio haya tenido algún problema con esa
persona que sólo quiere el mal para ese matrimonio,
un pasado relacionado con éste o ésta o simplemente
el acosador en este caso tenga algún tipo de amor
enfermizo no correspondido.
Sucede que sucesos como lo ocurrido con
Melanie y Cameron son sucesos que no son fáciles
de superar, ambos como pareja pasaron por un
proceso muy complicado, la intriga de esa mujer
hizo que Cameron se perdiese casi dos meses de la
vida de su familia mujer e hijo o hija, él no es el
único que pasó por cosas en consecuencia a la
maldad de Allison, las noches en vela de Melanie,
543
sufriendo constantemente, porque como toda mujer
deseaba tener al hombre que ama a su lado, que en
cada ecografía realizada él estuviese ahí tomando su
mano, que compartiera con ella los primeros
movimientos de su bebé, sus antojos… pero no
siempre las cosas son como las planeamos.
Cameron tiene culpa de las cosas que pasaron,
más sin embargo una mente podrida está causando
estragos… está, porque sucede que después de ser
liberada ella se ha mantenido en silencio pero todos
están atentos porque saben bien que en cualquier
momento atacara cuando menos se lo esperen.
— ¿Qué sucede, Cam?
Después de un profundo silencio Melanie habla y
Cameron se convence más de que es todo real que la
persona entre sus brazos no lo abandonó.
—Pensé que te habías ido de nuevo, que tendría
que empezar nuevamente con tu búsqueda, con la
angustia de saber si están bien, si tienen frío,
hambre, sueño, si alguien los maltrata.
El corazón de Melanie se llena de ternura, su
marido realmente la extrañaba y se preocupa por
ellos.
—No me voy a ir, al menos que tú me lo pidas.
544
—Jamás te pediré eso —deja de abrazarla de
espalda y la gira para que lo mire a los ojos,
tomando su rostro entre sus manos grandes,
Cameron le dice —, entiende algo, eres mi vida y en
el momento que supe que tendríamos a bebé, los dos
se han convertido en lo más importante que tengo.
Llorando casi de pura ternura y amor confiesa
Melanie:
—Todas las palabras de Allison aún se repiten en
mi mente, con sus palabras logró que pensara que
realmente tú después de un tiempo me dejarías de
buscar y hasta dude de que me buscaras, nos
buscaras, tantas cosas logró esa mujer que pensara
sólo con decirme todas esas palabras inyectadas de
veneno.
— ¡Maldita! ¡Si pudiera la estrangularía con mis
propias manos! ¡Nunca óyeme bien, yo jamás
dejaría de buscarte así te vayas al fin del mundo!
Se unen en un fuerte abrazo.
—Vamos a desayunar —dice Melanie con su cara
en el pecho de su marido —prepare el desayuno.
— ¿Lo preparaste? Tengo mucho que no como
bien y no pruebo tu sazón.
545
Tiempo atrás cuando las cosas entre ellos no
habían llegado a éste punto en el que se encuentran,
Melanie solía ayudar a Cristine a preparar el
desayuno o la cena para su marido.
—Ven entonces, debes de comer bien, estás muy
flaco —baja la cabeza —, en parte me siento
culpable.
—Hey —Cameron pone su dedo índice debajo de
la barbilla de Melanie y con éste hace que eleve su
rostro —, no tienes culpa de nada, ¿De acuerdo?
Asiente con la cabeza no muy convencida.
Después de desayunar y que ambos mientras
disfrutaban de dicho desayuno, rieran por la forma
en la que bebé se movía al comer, algo simplemente
maravilloso. Se bañaron, claro ambos por separados
y luego de aquello se vistieron siendo la hora de
enfrentar todo.
Cameron fue muy directo en decirle a Melanie,
que se iba con él, ni loco que fuese al dejarla en ese
lugar en donde estaba ese demente de Asthon. A ella
no le tocó más que aceptar después de patalear y
hacerle rabietas se ha encariñado mucho con las
amables personas de London.
546
Asthon. Este se mantuvo al margen de todo, pero
su cabeza no dejaba de maquinar estupideces y mil
cosas, en ningún momento salió de su habitación
sólo observaba desde lo alto de su ventana con
creciente odio todo.
Damaris fue la más afectada, lloró y pidió tanto
perdón por la actitud descortés y tan mal vista,
desagradable de su hijo. No quería que Melanie
marchase, pero entendió bien que la vida de la joven
madre y esposa no pertenecía aquel lugar.
Las cosas de Melanie, ninguna quiso dejarlas,
fueron subidas a las camionetas.
Finalmente después de que todos se despidieran y
que Melanie dijese que pronto le enviaría los papeles
que acreditan a Damaris como dueña total al estar
Asthon, de la boutique, se marchó junto a su esposo
él cual antes de irse miró a la ventana y ahí vio a
Asthon al cual le dedicó una mira de advertencia.
Luego se giró y emprendieron viaje al aeropuerto, el
avión los esperaba listo, el cual despegó en eso de
las 11 de la mañana, sería un largo viaje.
547
jet privado tomados de las manos y ambos cansados.
En la misma pista, que es el área de abordaje
privado, los esperan ya camionetas preparadas, que
el día antes Cameron y su equipo de seguridad,
habían dejado cuando partieron a London. Suben en
ésta parten camino a su casa.
548
tomó en el pasado, su más grande tesoro y su mayor
orgullo es su única hija.
Despegándose Richard observa a su pequeña hija,
su única hija.
—Estás tan cambiada, pero igual a la vez —le
acaricia el pelo.
—Lo sé padre —le sonríe con ternura y justo se
lleva la mano a su vientre y la mirada de su padre
recae en éste —. Aún no se duerme y parece saber
que su abuelo está muy cerca suyo.
La sonrisa de Richard se ensancha y rápidamente
lleva su mano al abultado vientre de su hija, dónde
bebé no se hace rogar y patea a su abuelo en la
mano, el señor mayor ríe alto y a todos se les forma
una sonrisa boba en el rostro.
—No te rías Cameron—la voz de Richard hace
que el mencionado deje de reír —, aún no creas que
se me olvida que tú embarazaste a mi niña —la
seriedad en su rostro todos la perciben —, pero…—
coloca un dedo debajo de su barbilla para darle más
seriedad a su rostro y adoptando una pose pensativa
—, si no lo hubieses hecho, mi nieto o nieta no me
haría tan feliz como lo estoy ahora, así que te la dejo
pasar muchacho.
549
El aludido de Cameron respira aliviado y todos al
ver su expresión vuelven a reír.
Después de que todos saludarán a la desaparecida
por casi dos meses ambos esposos se retiran a
dormir y todos hacen lo mismo, con exención de
Jack quien no duda en ir con su familia.
550
embargo no todo le sale siempre como ella lo desea
más bien siempre hay un impedimento, tan así es
que ahora no sabe en dónde está Will con esa niña.
Una llamada la saca de sus mezquinos
pensamientos. El número no está registrado pero
bien se lo sabe de memoria, con una sonrisa
descuelga.
— ¿Quieres saber información sobre el jefe y su
mujer? ¿Cuánto estás dispuesta a pagar?
Una voz ya conocida para ella le habla sin rodeos
apenas descuelga la llamada, un traidor, un
infiltrado.
—Lo que quieras.
Tanto es su obsesión por destruir a Melanie y por
tener y hacer sufrir a Cameron que no le importa
gastar su fortuna y la de su familia quienes saben en
problema de su hija más sin embargo la mantienen
alejada de ellos, cuando Allison está cerca sólo
causa problemas y daños a sus parientes.
—Bien, tienes que regresar
Es lo único que dice el hombre a través de dicha
línea y rápidamente cuelga la llamada no vaya a ser
descubierto por sus superiores.
551
Bien sabe Allison, que Cameron y los demás
saben que no se estará tranquila y que en cualquier
momento jugará sus fichas, más sin embargo ellos
no saben ni el día, ni la hora en el cual regresa y es
hora de volver al juego.
552
Capítulo 41
553
—Pretendía lo mismo, pero aquí bebé, decidió
levantarse temprano y despertar a Mami.
Justo entran Cristine y Amalia, quienes se llevan
muy bien, conversando.
—Mí niña —Amalia es la primera en abalanzarse
a abrazar a Melanie y aprovechar y tocar el vientre
de la chica —, estás hermosa.
—Gracias nana —le sonríe tan dulce que derrite.
—Mel, querida, buen día —Cristine se acerca y
le besa la mejilla otra que no controla y toca el
vientre.
— ¿Qué haces despierta? —interroga Amalia.
—Tienen hambre —responde Richard por
Melanie.
— ¡Maravilloso! —exclama Cristine —. Amalia
y yo preparamos tu desayuno favorito, espero que
tus gustos no hayan cambiado.
—No han cambiado nada, descuiden, a mi bebé y
a mí nos gusta todo —aclara Melanie.
—Pues querida, vaya a despertar a su marido, que
ese lleva tiempo sin comer alguna cosa bien.
554
Así lo hace Melanie como le dijo Cristine, sube
las escaleras y se adentra en su cuarto, se acerca a su
cama y despierta a su marido, el cual perezoso se
levantan, con cara de pocos amigos, la cual a ver a
su mujer se espanta y se va.
—Buen día, es hora de levantarse —saluda
Melanie mientras le arrebata la sabanas
encontrándose con el bulto que los hombres casi
siempre llevan al despertarse.
—Buen día —dice divertido al ver el rostro
sonrojado de su mujer, al observar su anatomía y
morderse el labio —, ¿Te gusta lo qué vez?
Levanta el rostro apenada al sentirse descubierta.
—Mueve tu culo, Cameron —trata de sonar seria
—, tenemos hambre y solo se espera por ti.
Una sonrisa dulce y paternal surca los carnosos
labios de Cameron para luego levantarse y besar a su
esposa, luego acariciar el vientre de ella y darle el
buen día a su bebé que no duda en responderle con
un movimiento, a propósito Cameron dura más de lo
normal haciéndole cariños a su bebé todo para irritar
a Melanie, eso lo divierte.
—Si no te pones algo en este momento y vas a
lavarte los dientes, te cortaré las pelotas.
555
Suena tan pero tan seria que logra que Cameron
ponga cara de espanto y haga lo que le dice no sin
antes Cameron mirar su entrepierna e imaginar una
escena en donde su propia mujer le corta las bolas.
Al Cameron hacer lo que Melanie le dijo, ambos
bajan a desayunar, después de dar el buen día,
Cameron pide que Cristine también se siente con
ellos, Amalia por igual. Richard se sienta en la
cabecera donde Melanie solía sentarse, dado que
Cameron la colocó en su lado izquierdo de la mesa
muy cerca de él.
El desayuno inicia y apenas el plato de Melanie
le echa los alimentos, olvida sus modales y empieza
a ingerirlos con avidez, todos la miran entre
sorprendido y divertidos.
— ¡¿Qué?! Estoy embarazada —dice cuando se
percata de las miradas de todos sobre ella.
Así transcurre el desayuno entre risas y
comentarios sobre Melanie y sus cosas.
556
omitiendo obviamente en conjunto con Cameron el
incidente vivido el día antes de que regresara a su
casa.
Y entre desempacar y que Cameron andará todo
el tiempo pegado al culo de Melanie, llegó la noche
y todos cenaron para luego ver una película y
retirarse todos a sus habitaciones.
Cameron sale de la ducha y encuentra a Melanie
leyendo un libro de maternidad, la aludida está tan
concentrada que no se da cuenta de la presencia de
su esposo hasta que este pone su mano al frente de
sus ojos y esta le da un gruñido en respuesta.
—Estás muy gruñona —dice él a modo divertido.
— ¡No soy gruñona!
Tornándose serio Cameron dice:
—Tenemos que hablar.
Es el momento. Con calma Melanie cierra el
libro, lo coloca en su mesita de noche, se acomoda
arriba de la cama lo mira.
—Lo sé —coloca su mano encima de la de su
esposo —, quiero que sepas que no me voy alejar de
ti, que voy a luchar por nosotros, porque no solo
somos nosotros dos ahora, está la personita dentro
557
de mí que nos necesita unidos, por más doloroso o
vergonzoso que sea tu pasado yo no me voy a alejar.
—Tengo miedo, hice cosas de las que no estoy
orgulloso mi amor —baja su cabeza.
—Mírame —demanda y él la mira —. No sólo
soy tú mujer en la cama o en un papel, soy tu amiga
y no te voy a dejar mi amor.
Desesperado la besa y hace que se acomode
encima de su cuerpo con la cabeza de ella en el
pecho de él.
—No me dejes —súplica.
—No lo haré.
Respira y toma valor para comenzar.
—Mi infancia siempre fue feliz, tenía a los
mejores padres del mundo, sabía que no siempre
sería hijo único, mi madre quería tener más hijos —
recuerda con melancolía —, pero al parecer tenía
serios problemas para tener hijos, el tiempo pasaba y
pasaba, ¿pero sabes algo? No todo siempre fue
felicidad, llegó un tiempo en el cual ya era
adolescente y veía a mis padres muy nerviosos,
como adolescente al caso, no le prestaba tanta
atención, pero me preocupaba, no quería que saliera
558
a ningún lado sin Jack. Jack, él siempre ha estado
desde antes de que yo naciera, es como mi segundo
padre. El tiempo pasaba y mis padre igual, tanto que
se olvidaron de tener otro hijo. Cuando cumplí diez
y seis años; era un adolescente amable y divertido
como todo joven a su edad, tenía amigos verdaderos
y otros que solo me buscaban por la posición social
a la cual pertenezco. Al instituto había llegado en
aquellos día la chica más linda que había ahí, aún
recuerdo esa rubia de ojos negros que tenía a todos
encantados, hasta a mí —una punzada cruza el
pecho de Melanie y Cameron la besa, susurrándole
un te amo que la tranquiliza —. Era linda eso no se
le negaba y conseguía lo que siempre quería, su
actitud daba mucho que pensar, pues en ocasiones
actuaba como si problemas psicológico tuviese. El
tiempo pasó y de aquella llegada ya habían pasado
tres meses y me interesaba la chica y a ella parecía
que yo le interesaba. Un día en una reunión después
de clases estaba muy feliz y bailando con esa chica
Allison. Cuando de repente siento que un escalofrío
me recorre y justo suena el celular, era Jack, Jack se
había ido arreglar un asunto que papá, le había
mandado a hacer, Cameron, le llamaban igual que
yo. Mi padre decidió ir a new yérsey donde debía
arreglar un asunto y mi madre, Clara, decidió
acompañarlo. Descolgué la llamada y me alarmé al
559
escuchar a Jack tan triste y lloroso, Jack no lloraba.
Apenas alcancé a escuchar cuando Jack me dijo; tus
padres murieron —solloza fuerte y Melanie se sube
a horcajadas sobre él y lo abraza.
—No es necesario —al Melanie ver el rostro
descompuesto en dolor de su marido, al recordar
trata de retratarse en querer saber y que él pare de
contar, es evidente que le afecta en gran manera.
—No, quiero sacarlo todo, no quiero que entre
nosotros haya secreto alguno —seca sus lágrimas y
continúa su relato —. Mi mundo se vino abajo,
todos y todo en la fiesta continuó igual, nadie se dio
cuenta de mi cambio, mis pies se dieron orden ellos
mismos y me encaminaron a mi auto, apenas llegué
a este, le arrebate las llaves al guardaespaldas que
andaba conmigo y subí al auto cerrando la puerta en
la cara del guardaespaldas, encendí el auto y
emprendí marcha, no sé cuánto tiempo pasó antes de
que llegara a mi casa, a esta casa, no sabía a qué otro
lugar ir, no dejé a Jack que me dijera nada más. Vine
aquí y ya todos estaban enterados. Todo se veía tan
triste, esta ya no era la casa llena de alegría cuando
mis padres estaban. Grite, estalle en llanto, rompí lo
que había a mi paso, me cause daño yo mismo, pero
nada se comparaba, ningún dolor con el que yo
estaba sintiendo, era demasiado. Las horas pasaban,
560
me aislé yo sólo, en un lugar en el que nadie me
molestara, solo me dedique a llorar y preguntarme,
¿Porqué la vida es tan injusta? No obtenía respuesta
no la tuve nunca. Jack con el dolor que se veía en su
rostro, identificó los cadáveres, pero a pesar de estar
llevando sobre sus hombros la organización del
velatorio, entierro y reconocimiento de los cadáveres
de los que fueron sus mejores amigos por años, se
mantuvo fuerte e incluso con todo eso Jack estaba
ahí para mí al igual que su familia. Yo no comía, no
formulaba alguna palabra, yo no sabía qué hacer con
mi vida. El velatorio y el entierro lo pasé ausente,
mis compañeros del instituto todos vinieron a mi
casa, unos de buena fe y otros por hipocresía, a mi
no me importaba, estaba sólo, para mí lo estaba,
porque siempre he tenido a Jack y Cristine a mi lado
para apoyarme en todo. Las muertes de mis padres
no fue del todo limpia, había sospechas de que el
accidente fue provocado, pero no hubo conjetura
alguna que nos llevara a mantener el caso abierto.
Siempre he sabido, es un presentimiento de que mis
padres fueron asesinados, Jack puso todo su empeño
en obtener tan siquiera una pista, él y yo
sospechamos todo el tiempo de un tío, hermano de
mi padre que siempre le tuvo enviada, pero resultó
que en verdad está limpio incluso vino y lloró a mí
padre y a mí madre, también se sospechó de un viejo
561
conocido de mis padres que ese si tiene sus cosas
turbias, es un secreto a voces de que anda en malos
pasos, nunca he sabido su nombre, desde aquella vez
nunca más he sabido de él o de su familia. No me
interesa, si algún día llego a saber que algo tiene que
ver en la muerte de mis padres, no sé de lo que soy
capaz.
—No pienses cosas malas mi amor.
—Mis padres al parecer siempre supieron que sus
vidas estaban en peligro, ambos dejaron testamentos,
todo arreglado, a Jack le dejaron la empresa de
seguridad, una cuenta en el banco y una casa grande
que es donde vive con su familia, además de unos
carros, Cristine a ella le dejaron una casa y una
cuenta en el banco además del negocio de repostería
y después toda la fortuna cayó en mis manos, de
lado y lado. Yo no tenía preparación alguna en los
negocios, no me interesaba tampoco en esa fecha,
cerré esta casa y me fui al pent-house, no quería a
nadie a mi lado, le gritaba a Cristine y Jack para que
me dejaran en paz y se largaran, pero ninguno quiso,
aguantaron todos mis berrinches y desplantes. —
hace una pausa antes de proseguir, recordar le está
rompiendo el corazón —. El alcohol empezó a ser
tan importante en mi vida, quería joderme, pero
también joder a los demás. Allison empezó a
562
visitarme constante, siempre estaba ahí, pero no de
una forma inocente y sana, me incitaba a hacer lo
que quería, a irme de fiesta, tanto fue su influencia
en mí que me hice dependiente de ella. Llegue a
irme lejos por semanas dejando todo sin importar
que Jack se volviera loco, ya que a él le dejaron mi
patria potestad. Llegue a consumir drogas con
Allison, asistía al instituto cuando se me daba la
gana. Éramos dos locos, me cogía a Allison como
perro en celo. Así pasó el tiempo, Jack y Cristine al
pendiente de mí y yo haciéndole desplantes, a Jack
le tocó hacerse cargo de las empresas —su rostro
está cubierto de emociones —. Dos años después ya
Allison y yo no éramos los mismo, cuando Jack se
enteró de que consumía drogas me interno por unos
meses y me limpie, a Allison esto no le parecía
porque ella quería que siguiera con la misma vida.
— ¡Maldita!
—Lo sé. Nuestra relación se venía abajo cada vez
más, nunca estuvo en alto, los te amo eran vacíos,
nosotros teníamos algo que nos enfermaba. Ella
desaparecía por días y no me importaba, su
comportamiento era de la loca, no podía mirar a
ningún lado ni hablar con ninguna chica porque ya
decía ella que le estaba coqueteando y la agredía. El
sexo era eso solo sexo, brutal siempre, hasta
563
llegamos a practicar sado. Es donde entra Will, al
parecer ella llevaba mucho viéndose con él y yo la
seguí un día, la encontré en un motel follando con
este y la muy descarada quería que yo me les uniera,
la dejé, después de gritarle lo puta que era y de
partirme la cara con Will. Ella empezó a acosarme y
buscarme desesperada, hasta que un día me drogó y
no supe de mi hasta que desperté desnudo con ella
encima, sudada, introduciendo mi pene en su vagina,
estaba amarrado en la cama donde estaba y veía todo
borroso, ella me cabalgaba y decía cosas
incoherentes yo solo sentía repulsión, hasta que
termino y me soltó, la abandone ahí mismo, no sin
antes decirle el desprecio que sentía por ella.
Desapareció de mi vida después de eso hasta esta
fecha, no sé qué fue de su vida y no me interesa. Me
puse a estudiar, obedecía a Jack en todo y a Cristine,
no volvimos aquí, nos quedamos en el pent-house, el
tiempo pasó y ya todo lo debes de saber la prensa
siempre encima de mí, por mis salidas con diferentes
mujeres al año, la unión que hice entre las dos
empresas, hasta que llegaste tu a mi vida y me volví
un acosador. Hoy estoy aquí contigo esperando a
bebé, ansioso, amándote más, eres la mujer más
bella del mundo. Dime, ¿seguirás a mi lado?
564
Suspirando e impactada por todo lo contado le
toma el rostro entre sus manos y le mira a los ojos.
—Seguiré a tu lado.
La besa sin restricciones alguna y muerto de
miedo.
— ¿Por qué el lío sobre la paternidad de la niña?
—Porque lo del hotel y lo de que Allison me
drogó, fueron muy recientes, casi juntas. Además de
que ella seguía con Will, que era igual o peor que
ella, por eso, hasta yo tenía mis dudas.
—Entiendo. Vamos a dormir, ya es tarde y fuiste
un bobo al pensar en que yo te dejaría, quiero saber,
¿Por qué tengo estas argollas y porque vivimos
aquí? Pero ya eso será mañana, tengo sueño o
cuando estés listo.
—Claro mi amor.
La pareja se va a dormir.
565
De: Allison
Para: número desconocido
“Mañana en el parque te veo”
23:00 pm.
¿Qué pasará?
Besitos.
Mariana
566
Capítulo 42
567
El primer paso que debe de dar es hablar con los
padres de Nick, Morgan, Vicky, Laura, eso será lo
primero en su agenda el día de hoy.
Al subir a su habitación encuentra a su esposa
despertando, es una imagen tan maravillosa.
—Buen día pequeña —con usa sonrisa y todo
sudado sube sobre la cama y besa sus labios.
—Buen día amor mío —hace un gesto de asco
cuando Cameron pega su cuerpo sudado a ella.
Es algo digno de ver, él sudado y con el torso
afuera, son cosas que llevan hasta la mente más sana
a pensar morbosidades.
Suspira y le da una de esas sonrisas enamorada
que solo guarda para él. Después de que él le contara
todo lo que fue su vida la noche anterior comprendió
su proceder, pero eso no quita lo bobo y estúpido
que fue, además de que no le pondrá las cosas tan
fáciles, verá hasta donde es capaz Cameron de llegar
por ella.
—Por lo visto te estás ejercitando —le observa de
arriba abajo.
—Vez bien amor —clava su cabeza en el huevo
de su cuello aspirando el aroma de su mujer —,
568
quiero estar siempre fornido para mi mujer, no
quiero competencia —dice divertido.
—Ah, sí —le sigue el juego —, creo señor, que
su mujer ha visto torsos muchos más apetecibles.
Se separa y arquea una ceja dándole más seriedad
al asunto.
— ¡¿Cómo?! Tendré que cortar penes y encerrar
a esos hombres.
—Entonces serían muchos señor Danielson.
—Sí, muchos, no solo porque mí mujer anda
viendo torsos por ahí, sino porque estoy más que
seguro de que esos hombres tienen su mirada
clavada en ella más de lo que ella los mira, tendré
que sacar ojos también.
Hormonal Melanie dice:
— ¿Enserio crees que ellos me van a mirar?
Mírame mi amor, estoy gorda, redonda y se me
hinchan los pies, me duele la espalda.
De momento se torna sentimental y empieza a
llorar, preocupando a Cameron que no duda en
rodearlas con sus brazos.
— ¿Qué sucede pequeña? Estás preciosa.
569
—Eso lo dices por lástima, ahorita andas
buscando a otras, porque ya no te parezco atractiva.
—Mi vida, me pareces atractiva en todos los
sentidos, ¿Acaso no has visto tu trasero? Ese me
tiene alucinando y a mi amigo de ahí abajo también,
está tan frustrado.
— ¿De veras?
—De veras mi reina.
Se sube encima de él y le habla sería.
—Óyeme bien, tu eres mío y de ninguna otra, soy
capaz de dejar calva y si dientes a la que se atreva a
intentar acercarse a ti.
—Soy tuyo —besa los labios de su mujer y seca
sus lágrimas —. Me gusta que seas posesiva.
570
En la empresa Danielson, se designó una oficina
para Richard, ya que el señor decidió pasarse unos
días más con su hija y estar presente cuando sepan
cual es el sexo de bebé, ya que ésta próximo, es la
semana próxima según conversaban con Melanie en
el desayuno ella misma en conjunto con Cristine y
Amalia, arreglarían la cita con una ginecóloga
obstetra.
Además de los días que él desea pasar con su hija
y porque no su familia, son una sola familia ahora
los Danielson y los Walker, el contrato por el cual se
dio el matrimonio de Melanie aún continúa vigente,
eso quiere decir que Cameron es socio de Richard
por lo que tienen negocios juntos, además de que
una empresa no se maneja sola y debe él de
mantener el timón en sus manos.
Ellos atienden sus asuntos de negocios y arreglan
una que otras cosas.
Las mujeres en la mansión arreglan la cita con el
obstetra, no solo eso la semana que viene se cumple
cinco meses del embarazo de Melanie.
Un tema a tratar entre Melanie y Cameron es el
asunto de sus estudios. Algo pendiente.
571
Las personas están tan lejos de la maldad que la
cabeza de Allison máquina.
Horas antes había recibido el mensaje de
confirmación de que su informante la vería esta
noche, además de pedirle una jugosa cantidad por la
información que le dará. Aceptando ella, pero
amenazándolo de que si ese dineral no vale lo que le
dará por información se las vería con ella.
572
desde hace semana y media he sido más riguroso y
he descubierto que tanto Smith como Blunter, han
estado demasiado sospechosos.
—Explícate.
—Según las cámaras que tenemos instaladas en
la empresa de seguridad y las de tu casa junto con
las de aquí arrojan que ellos han estado usando
mucho el celular, llamando y no sólo eso, cuando
realizan estos actos miran hacia los lados como
percatandose de que nadie los vea, ¿Entiendes?
—Entiendo perfecto.
Ambos se dedican una mirada que lo dice todo.
— ¿Estás pensando lo mismo Cameron?
—Estoy pensando lo mismo, Jack.
—Puede que uno de ellos sea el informante de
Allison.
—O puede que los dos.
—Lo más sensato que debemos hacer, es seguir
igual como si no sospecharamos nada.
—Dejar que solos se enrollen en su propia cuerda
y entonces los atrapamos.
573
— ¡Exacto!
—Algo no debemos dejar de tener en vista la
seguridad de mi mujer, Allison se volverá loca
cuando se entere de la existencia de bebé.
—Lo sé, debemos de poner a los mejores a cuidar
de ella.
—Ya hablé con los padres de los amigos de mi
mujer, se pusieron reacios y algo agresivos con el
asunto, no es fácil y lo entiendo, pero explicándoles
las cosas al final ellos me terminaron de entender y
decidieron aceptar que les ponga protección, el resto
se encargan ellos.
574
que no es una trampa por lo que revisa el lugar antes
de que la persona X como ella lo ha decidido llamar
pueda llegar.
Es una muy buena estrategia él no mencionar en
ninguna conversación el nombre de su informante,
puede que si lo haga las paredes escuchen y todo se
le vaya a la mierda, no puede olvidar que está en el
ojo de la policía y no le conviene ser más el centro
de atención y atraer más la atención de ellos.
A la hora acordada justo a las 9 de la noche
persona X llega, camina al encuentro que es un lugar
lo más profundo del parque para que nadie los vea.
Ninguno de los dos son estúpidos ambos tienen
grabadoras en sus cuerpos para grabar la
conversación si uno decide hundir a otro el otro se
va con él.
—Veo que eres puntual.
Persona X se había parado justo en el punto de
encuentro pero por ningún lado había divisado la
figura de Allison.
—Lo soy. No pondría en juego una cantidad tan
jugosa de dinero por mi impuntualidad.
575
—Lo mejor es tomar asiento detrás del árbol por
si las moscas —dice observando Allison a su
alrededor.
—Estoy de acuerdo, tuve la sensación de que
cuando venía hacia acá estaba siendo seguido.
— ¡¿Qué dices?! ¡Espero que hayas tomado otra
ruta y los hayas perdido!
—Deja de gritar que te pueden escuchar, ¿A caso
piensas que somos los únicos locos en estar en este
parque a ésta hora siendo éste lugar peligroso? No,
no lo somos y escucha primero, era solo una
sospecha, pero tome otra ruta por precaución, loca.
—A mi no me digas loca, si no quieres que te
corte en pedazos.
—Jajaja, mira como tiemblo —se burla persona
X de ella, poniendo sus manos al frente y haciendo
de temblor.
—Que chistosito, te puede salir caro… vamos
detrás del árbol.
Allison en ningún momento camina delante de
persona X, no se fía de nadie, podría matarla e ir a
su auto y sacar el dinero y ya, claro que no, primero
lo mata ella a él.
576
Al llegar al árbol ambos toman asientos y no hace
falta señal para que persona X hable.
—El sábado por la noche, el jefe regresó con su
mujer.
El arranque de furia de Allison lo deja un tanto
atónito y ahora si no duda de lo loca que está.
— ¡¿Cómo que la maldita mujercita volvió?!
¡Claramente le dije a esa perra que no volviera!
Como siempre sufre un ataque de histeria, donde
ella misma se agrede y dice cosas incoherentes.
Algunas personas se acercaron a ver, pero las pocas
luces les impidió saber quiénes eran las personas ahí
y porque gritaban, pero la poca luz no fue tan poca
pues les permitió ver como Allison actúa como loca
y se fueron del lugar.
— ¡Cállate, deja de gritar, que te van a oír!
—Es que no lo entiendes —empieza a caminar de
lado a lado y a morderse las uñas —, ella solo vino a
quitarme a Cameron, él y yo habíamos hablado hace
unas horas y dijimos que nos vamos a ir lejos y
formaremos una familia.
Persona X se queda con el ojo cuadrado, esa sí
que está loca, su jefe la desprecia ni la quiere ver
577
cerca y lo menos que haría es hablar con ella, pero a
él no le importa eso, solo le importa ese millón de
dólares que pronto tendrá en sus manos.
—Sí, sí, sí, lo que digas —dice con fastidio —.
Hay algo más, pero te costará un poco más de
dinero.
— ¿Qué más hay? —Se le abalanza encima y lo
toma del cuello —. Medio millón más, lo tengo en el
auto, pero habla.
—Muy bien entonces. El jefe y su mujer tendrán
un hijo o una hija, no se sabe, no le han hecho la
ecografía del sexo o no sé, no me importa.
Allison le da un empujón que lo hace
tambalearse.
— ¡Maldita perra! —todo le encaja, por eso la
ropa ancha cuando la vio en ese mismo parque
meses atrás, por eso el nerviosismo.
Empieza a reír como loca para luego decir con
voz cambiada por la furia y la ira, el odio y el
rencor:
—Acabaré con los dos, con ella y con su bastado
o bastarda.
578
¡Oh Dios mio!
¡¿Qué hará esta demente?
Besos.
Mariana
579
Capítulo 43
580
bolas, la madre de bebé solo le quedaba rodar los
ojos.
Temprano se habían levantado la pareja de
esposos y habían marchado al médico, Cameron
emocionado decidió conducir él.
Unos tres días antes se había hecho la noticia
publica de que pronto nacería el heredero o la
heredera de la fortuna Danielson y Walker, los
medios habían capturado las imágenes cuando
Cameron había llevado a Melanie a cenar a un
restauran y ellos estaban ahí. Siempre ellos supieron
que el momento llegaría, pero ya que llegó todos
andan con cuidado Allison debe de saber eso ya y es
un peligro, la seguridad a aumentado pero saben
bien que cuando una mente diabólica está
maquinando algo lo logra porque lo logra.
Aunque la situación es de tener cuidado este día
no lo empaña nadie, su bebé ya tiene cinco meses y
hoy sabrán si es niño o niña, nada va a empañar eso.
Al llegar al consultorio médico hay unos cuantos
pacientes delante de ellos, por lo que les toca
esperar.
Pasado el último paciente que va delante de ellos
y que este salga, la doctora llama a Melanie.
581
—Melanie Danielson.
Tomados de la mano se levantan los dos y su
sonrisa no se las borra nadie, sus caras destilan una
felicidad contagiosa.
Ingresan al consultorio y la doctora les dice que
tomen asiento después de darles la bienvenida y el
buen día.
— ¿Cómo te sientes querida?
—Muy bien, comiendo mucho.
Ríen.
—Es normal. Según estuve leyendo tu
expediente, tu embarazo ha sido muy normal a pesar
de tu edad y no has tenido ninguna complicación,
solo que su bebé, no ha querido verse.
—Está en lo correcto.
—Doctora, ¿Es normal que sea tan gruñona? —
pregunta Cameron, pero al momento se arrepiente al
ver la mirada fusiladora de su mujer.
La doctora ríe al ver la cara de Melanie y como
aprieta los labios para no mandarlo al demonio.
582
—Disculpe a mi marido doctora —articula entre
dientes la embarazada.
—Tranquila, es normal. Señor Danielson, es
normal que su esposa experimente cambios
hormonales durante su embarazo, que incluyen el
temperamento, la autoestima y su apetito.
—Comprendo.
Después de ese momento la doctora manda a
Melanie a ponerse una bata, para que luego suba
sobre una camilla y se levante ésta, con una sábana
le cubre los muslos y procede a echar el conocido
gel frío sobre su vientre, empieza a esparcirlo en
todo el vientre hasta que encuentran a bebé.
—Aquí está.
La voz de la doctora, hace que ambos la miren
para después seguir la dirección del dedo de ella,
donde una personita desnudita, a color donde se
puede ver la mata de cabello negro que adorna su
cabecita, está al parecer despierto.
—Les pondré la imagen en más dimensión, pero
por lo que veo se parecerá mucho a su padre.
Ellos solo asienten embobado y más Cameron.
Solo lo había visto cuando era una semillita y ahora
583
está formado completo, la imagen frente a él lo tiene
tan embobado que sus ojos brillan de puro amor por
esa personita.
Buscando y buscando la doctora encuentra, pues
bebé no deja de moverse y para Cameron es lo mejor
que ha visto, ver como se estira, como da pataditas
es maravilloso.
—Aquí está. Felicidades padres, tendrá un niño
hermoso y fuerte.
La habitación se llena de risas y la pareja no tarda
en abrazarse y besarse para después Cameron girarse
a la doctora.
— ¿Está todo bien con mi hijo y mi mujer
doctora?
—Está todo perfecto, ella está muy saludable y él
también, tiene la medida y el peso justo para su
tiempo de gestación, ¿Quieren una imagen del bebé?
584
Después de que Cameron tomara las fotos de su
hijo y que Melanie fuese a cambiarse se acerca a la
doctora, pero no sabe que su mujer está detrás.
—Doctora, ¿Mi esposa y yo podemos hacer el
amor?
— ¡Cameron! ¡Qué vergüenza! —Melanie se
pone roja de la vergüenza.
—Es una pregunta normal, si pueden, es
recomendable el sexo para las embarazadas, la
ayudará a que el parto sea más ligero.
—Oíste amor, te puedo dar duro contra el muro.
Melanie no encuentra en donde meter la cara y
promete vengarse.
Terminada la consulta ambos salen de clínica y
Melanie al salir se estremece.
— ¿Estás bien mí amor?
—Me siento observada.
Cameron mira a todos lados no ve nada, pero no
está de más ser precavido.
—Mejor vamos a casa, todos están ansiosos por
saber de nuestro bebé, no los hagamos esperar —
585
Cameron trata de aligerar el ambiente.
Melanie asiente y se dirigen al vehículo,
Cameron abre la puerta para ella y la ayuda a subir,
le coloca el cinturón de seguridad y besa sus labios,
cierra la puerta y se dirige al encargado de la
seguridad para decirle que este al pendiente de todo.
Emprende viaje de regreso a casa, pero todo el
camino con el presentimiento de que si lo están
siguiendo.
586
Cameron y Melanie se miran entre sí.
Y ambos a la vez dicen:
— ¡Es un niño!
Todos celebran porque a pesar de que unos
apostaron que sería niña, se sienten felices porque
toman lo que Dios le ha dado y ese bebé será muy
amado.
Todos celebraron y las chicas y Nick a través de
la pantalla, hasta estaban planeando lo que le
comprarían y preguntando cual sería el nombre.
El tiempo empieza a pasar, Melanie y Cameron
cada vez más enamorados, ella lo ha castigado con
el sexo aunque muere por estar con él, lo está
haciendo sufrir. Pero él no se rinde y vive
provocándola.
Su padre se había tenido que ir, pero prometió
volver para navidad junto con Amalia, y para eso
solo quedan mes y medio.
Las cosas para el bebé son por montones,
Cameron y su mujer eligieron que la habitación más
cercana a la de ellos sería para el bebé, incluso a la
puerta se le tallaría el nombre cuando lo eligieran de
su bebé. La cuna y los muebles de la habitación ya
587
lo han comprado y están en proceso de instalarlos
todo va muy bien, cuna negra y muebles azules con
blancos, hasta álbum tiene ya el bebé, su padre y su
madre las constantes fotos que le han sacado desde
el vientre la han plasmado en un álbum y una de
ellas en un marco de fotos que la han colgado a
mano derecha.
Un estante lleno de peluches, un closet con
gavetas parecido al de sus padres, donde su abuelo,
Amalia, Cristine, Jack, las chicas, Nick y el padre,
además le las cosas ónice que trajo Melanie de
London a new york, lo tienen lleno, la familia de
Jack los visito y también llevo muchos obsequios
para el niño.
De bañeritas de bebés tiene dos, de pañoleras
varias, pampers por montones y todo listo para él,
además de que cada día llega algo nuevo para el
bebé.
Cristine enseñado a Melanie a tejer aunque le
falta mucho y la señora está más que entusiasmada.
En Francia en una de las empresas de Cameron se
ha presentado un problema solicitando la presencia
del dueño y jefe, teniendo éste que viajar de
inmediato y llevándose a su mujer con él.
588
Cada movimiento que se da en la mansión
Danielson es informado a Allison la cual tiene un
nuevo aliado obsesionado con Melanie, Asthon.
Estos dos son un peligro.
En su obsesión por Melanie, Asthon viajó a new
york, para espiar a Melanie, con la mentira que le
dijo a su madre de que se iría a donde un familiar
cercano para superar su enamoramiento no
correspondido, pero mentira, en uno de esos días
espiando a Melanie, se topó con Allison y ambos se
complementaron, al parecer fueron ambos que los
dos están más que desquiciados y hoy son aliados.
El viaje a Francia fue muy largo pero tranquilo,
siempre desde salir de su casa tuvieron ambos la
sensación de ser seguidos, pero está vez Jack los
escoltó personalmente. Cameron pidió a Jack que
llevara a su esposa y se tomarán unos días como él
lo haría con Melanie una pequeña luna de miel para
ambas parejas, pero claro todo sin bajar la guardia.
El problema en la empresa sólo requería de dos
días para arreglarlo y así fue tomándose las dos
parejas los otros cinco días para ellos.
Llegando Cameron al departamento encuentra
una cena lista y servida y a su esposa con poca ropa,
589
su cuerpo festeja al parecer al fin se acabará, los días
de abstinencia.
Ambos se dan las buenas noches con un beso más
apasionado de lo que se han dado en los últimos días
y empieza a cenar. Cuando la cena termina, de
manera sensual Melanie recoge los platos y los lleva
a la cocina de allá para acá viene comiendo fresas
dándole mordiscos suaves y sensuales, atrayendo la
mirada de su esposo a sus labios.
Toma asiento en el sofá y observa la ventana con
espesas cortinas. Su marido se encuentra al frente de
ella y la observa detenidamente su pantalón está a
punto de reventar lo está provocando y lo está
logrando.
De momento Cameron tiene mucho calor y se
despoja de corbata, camisa, saco y zapatos quedando
sólo en pantalón que le queda muy ajustado en la
parte de arriba. El silencio adorna la habitación, la
tensión sexual se siente, el olor a deseo se huele.
Melanie de momento tiene calor también y se
saca su diminuto vestido quedando en bragas y
sujetador de algodón azul. Provocativa sube un pie
al posa brazos del mueble como su vientre se lo
permite y deja el otro debajo, dejando el centro
590
mojado de su braga al aire libre y a la vista de las
pupilas dilatadas de Cameron.
Este lanza una maldición.
—Ya basta de juegos pequeña —ronronea
sensualmente. Y se acerca.
Melanie deja escapar una risita y muerde su labio
cuando siente los de su marido cerca.
— ¡Vamos a la habitación! —sugiere Cameron.
— ¡No! —dice Melanie sensual y se para dejar
las fresas a un lado y luego lanzar a su esposo donde
ella estaba sentada — ¡Lo quiero aquí y ahora!
—Debería de dejarte así, excitada, pero me
muero por ti.
Ella sonríe y saca el pantalón de su esposo de su
cuerpo y luego saca el bóxer. El quiere desnudarla,
pero ella no lo deja y empieza ella misma a quitarse
el sostén y luego las bragas lanzándola a un lugar de
la estancia.
Se sube a horcajadas sobre la dureza de su esposo
y empieza a frotarse, arriba, abajo, lento, suave,
rápido, empalando de sus fluidos que salen más. Le
ofrece sus pechos duros y turgentes por el embarazo
591
para que él los succione y juega con ellos como se
les antoje.
Melanie besa su cuello, chupa y muerde las
tetillas de su marido y él no deja de jugar con sus
pezones, los dos gimen altos. En la posición en que
están es complicada, pero Cameron se las arregla
para llevar su grande mano a la vagina de Melanie y
estimular su clítoris y luego ingresar un dedo y
luego dos observando el rostro descompuesto de su
esposa en placer.
592
para después besarla y ella saborear sus propios
fluidos.
Melanie entre sus pequeñas manos toma el
miembro erecto y lo frota sobre su centro una y otra
vez. Se alza un poco y empieza a empalagarse en la
anatomía de su marido con lentitud, para no
lastimarse, hace tres meses y pico que no están
juntos. Con cuidado y delicadeza Cameron la toma
de la cintura y la ayuda. Cuando está completamente
dentro de ella, le permite relajarse y que se
acostumbre hasta que sus paredes vaginales lo
absorban por completo.
Luego de un raro sus cuerpos se amoldan y
empieza el movimiento más erótico de la
humanidad.
Melanie con suavidad sube y baja, grasa círculos
que vuelven loco a su marido, que no deja de jugar
con sus senos y de besarla. Es deliciosamente lento
sus movimientos pero a medida de que los minutos
pasan sus cuerpos reclaman más y ambos se mueven
buscando el placer del otro. Un movimiento lo lleva
a otro y a otro más rápido que el primero y de
momento se encuentran moviéndose como locos y
gimiendo. La posición cambia ahora es Melanie
quien se encuentra acostada en el sofá con una
593
pierna encima del respaldar y la otra en el antebrazo
izquierdo de su esposo. Traviesa, lleva su mano a su
clítoris y empieza a tocarlo como él lo hace y la otra
a su seno para tocarse como él también lo hace.
Cameron intensifica sus embestidas, ambos gimen
como si la vida les dependiera de eso. Continúan y
continúan y suben a un precipicio que los lleva a las
estrellas donde ambos alcanzan su liberación,
cayendo Cameron encima de Melanie sin lastimarla.
—Sí que tenías mucho guardado —murmura
divertidas Melanie al sentir un río entre sus piernas.
—Es solo un poco de lo que me has hecho
guardar.
—Te prometo que no guardarás más si es por mí.
Espero que estés preparado para el segundo round.
—Déjame recobrar fuerzas mujer.
—Pues apúrate.
Ambos ríen.
2 meses después.
594
Melanie ya está de siete meses de embarazo y
anda más redonda, mandona, gruñona y golosa que
nunca. Después de ese encuentro en Francia que fue
el mes pasado, regresaron a su casa y ella hablaba
muy en serio cuando dijo que no lo dejaría guardar
nada. A partir de entonces, lo ha cumplido, es una
total golosa, es raro el día en el que no tenga sexo y
además de eso que sea uno o dos veces por noche
hasta tres veces.
En la mañana del día de hoy, nueve de diciembre,
obligó a su esposo a quitarse la ropa después de que
ella misma lo había ayudado a cambiarse y a tomarla
en el mismo closet.
Hace algunos diez minutos lo había despedido
para que se fuese al trabajo, Jack hoy no podía
asistir a casa, porque su hija menor está algo
enferma y debía llevarla al médico.
Después de Cameron marcharse se había quedado
en el jardín y ahora se dirige a dentro de la casa, se
le hace extraño que no haya seguridad en la puerta
de entrada, un mal presentimiento la recorre. Lo
ignora y entra, todo está tan silencioso que produce
escalofríos, la casa parece desierta.
— ¡Cristine!
595
Nada, nadie responde.
Se encamina a las escaleras y va subiendo poco a
poco, su vientre no le permite caminar tan rápido.
Aleja sus pensamientos y piensa que ya mañana es
el cumpleaños número veinte y siete de Cameron y
aún no sabe qué hacer.
Sin darse cuenta está a mitad de las escaleras y se
topa con Cristine desmayada y tirada en un pequeño
piso que hay en medio de las escaleras con la cabeza
golpeada y sangrando.
— ¡Cristine! —un grito de horror sale de su
garganta —. ¡por Dios, Cristine despierta!
Se acerca tan rápido como sus pies se lo permiten
— ¡Ayuda!
Justo cuando pretende arrodillarse Allison
aparece bajando las escaleras encaminándose hacia
ella.
—Nadie te va ayudar, todos están dormidos.
— ¡¿Qué haces aquí?! ¡Fuera de mí casa!
Sonríe macabra y llena de felicidad al ver el
rostro de Melanie descompuesto por el llanto.
596
— ¿Sabes? Llevo días planeando esto, vigile cada
paso que dabas —se torna seria y se acerca más.
— ¡No te me acerques! —instintivamente protege
Melanie su vientre y la mirada de Allison recae en
el.
—Tú amiguito Asthon te manda saludos, no lo
dejo entrar porque tenemos que irnos pronto.
Despídete tú y tú bastardo de esta casa y de este
mundo, ¡Perra!
— ¡¿Qué…?!
No logra terminar porque Allison la empuja
escaleras abajo.
Roda y roda y cada vez el dolor es más grande, se
golpea en varias partes de su cuerpo quedando casi
inconsciente.
Allison ríe como si le estuviesen contando el
chiste más divertido del mundo. Termina de bajar las
escaleras y llega a Melanie, le patea el vientre y con
las pocas fuerzas que le quedan Melanie se lo cubre.
Un charco de líquido y sangre se forma entre las
piernas de la agonizante Melanie.
— ¡Nos vemos en el infierno perra! —se marcha
dejando a Melanie a medio morir.
597
—Por favor Dios mío, salva a mi bebé, te lo pido.
La sangre que baja de su cabeza y las lágrimas le
nublan la vista y poco a poco todo se le va poniendo
negro hasta que cae en un profundo vacío, donde no
hay dolor ni nada, solo paz.
598
Capítulo 44
599
desquiciado entra abriendo la puerta de par en par,
nada ni nadie está, corre hasta llegar a la escalera
llamando el nombre de Melanie y Cristine nada,
nada hasta que sus ojos ven la escena más horrible
que ha presenciado, su mujer envuelta en líquido y
sangre.
— ¡No, no, no es cierto! ¡Melanie!
Corre a ella y no sabe cómo tocarla, lo primero
que hace es tomarle el pulso el cual lo tiene muy
débil, toca el vientre y no siente a su hijo moverse.
— ¡Llamen a emergencias!
Aún en su desesperación y llanto sabe que lo más
correcto es no moverla puede tener algún hueso
fracturado.
Al los guardias escuchar el agudo grito de su jefe,
ingresaron inmediatamente y al ver la escena todos
se pusieron pálidos y tristes, esa pareja nunca sale de
una. Como profesionales revisan todo y encuentra a
Cristine, deciden no decirle al jefe que está
destrozado.
—Mi amor despierta por favor, no me dejes, no
me dejen, anda hijo muévete, ¿sí?
600
Súplica entre llanto y no se despega de su lado
tan concentrado está en su familia que no ve cuando
pasan con Cristine en brazos hacia la puerta.
Emergencias llega y con ellos profesionales para
socorrerlos.
Rápido se acercan y con cuidado suben a Melanie
en una camilla, tomándole el pulso y poniéndole
oxígeno de inmediato, Cameron no se separa de ella
en ningún momento.
El trayecto de la mansión al hospital le parece a
Cameron el trayecto más largo de su vida. Durante
el camino está en shock, se siente tanta impotencia
cuando no puedes hacer nada por la persona a la que
amas, que solo te queda mirar como otros si saben
que hacer más sin embargo tú no sabes ni donde
tocar.
Apenas llegan al hospital central un equipo los
esperaba. Por los golpes visualizados en el cuerpo de
Melanie, los profesionales alegaron de inmediato
que fue una caída de escaleras.
Entran con ella a urgencias y de ahí la llevan a la
unidad de cuidados intensivos, no dejan pasar a
Cameron y éste quiere reventar a lo primero que se
le cruce.
601
Su equipo de seguridad se encargó de que
atendieran a Cristine, también encontraron a los
guardaespaldas unos golpeados y los otros
aparentemente drogados, ya empezaban a despertar.
También avisaron a Jack y ahora se encuentran al
lado de su jefe.
— ¿Dónde está Cristine? —la voz de Cameron
sale áspera, le cuesta hablar el nudo formado en su
pecho no lo deja.
—Señor, la señora Cristine la están suturando —
responde uno de ellos.
— ¿Cómo…?
—Lo de ella no fue grave, solo fue un golpe que
necesita de algunos puntos y tal vez le de algunos
dolores de cabeza.
—Quiero saber cómo diablo ocurrió todo esto…
— ¡Cameron! —la voz de Jack hace que
Cameron interrumpa sus palabras.
— ¡Jack, se me mueren, Jack, voy a perderlos!
Como niño pequeño se lanza a los brazos de Jack
y llora, este no hace más que recibirlo y consolarlo.
— ¡No se van a morir!
602
Trata de darle ánimos, pero verlo llorar como lo
hace le parte el alma, Cameron ha pasado por
muchas cosas en su vida, la pérdida de sus padres
fue lo más doloroso hasta ahora, y que de nuevo esté
a punto de perder lo que más ama es desbastador.
—Tú no estabas con tú hija… —trata de hablar
entre llanto pero Jack no lo deja.
—Ssh, no hables, no te agobies más —lo lleva a
sentarse —. Ya llamé a tú suegro, en unas horas
estará acá.
603
Al área entra una mujer la cual es la ginecóloga
obstetra de Melanie.
—Buen día, no tan buenos, soy la ginecóloga
obstetra, doctora William y La señora Danielson es
mi paciente, conozco el embarazo de la joven y ha
sido un embarazo muy sano para su edad.
—Entendemos doctora, pero la situación no es
nada favorable, los golpes de su vientre llegaron al
feto, además de la perdida de liquido y la pérdida de
sangre que logramos detener, complica más el caso.
—Entiendo perfecto —se queda pensativa —.
¿Sus signos vitales?
—Está respirando muy forzadamente, solo lo
hace un poco mejor gracias al oxígeno y su pulso es
cada vez menos, gracias a Dios no ha entrado en
paro cardíaco, sino al intentar reanimarla el bebé
podría morir dado la descarga —explica un
especialista.
Mientras ellos conversan y conversan sobre lo
que es más sensato hacer dado que la vida de los dos
de la madre y de su hijo están en riesgo y pueden
ambos morir en cualquier momento, un doctor busca
a través de una ecografía el estado del bebé.
604
De pronto en la habitación se escucha un latir de
un corazón muy acelerado y todos los médicos
proceden a mirar al aparato.
—El latir del corazón del pequeño es muy rápido,
está sufriendo ataque cardíaco —murmura una
doctora.
—No solo, eso el cordón umbilical está enredado
en el cuello del bebé, es un riesgo, sino se procede a
una cirugía inmediata ambos pueden morir, hay que
interrumpir el embarazo —quien habla es el doctor
sonografista.
—Hay que proceder, yo me encargo de hablar
con su esposo para que autorice —dice la doctora
William.
605
—Ya estoy bien solo fue un golpe —sus ojos se
llenan de lágrimas —. Me dijeron lo de Mel, no
sabes cómo lo siento, todo fue tan rápido que…
—Familiares, de Melanie Danielson —la doctora
William que estaba concentrada en sus papeles no
los había visto.
Con pasos veloz Cameron se acerca.
— ¿Cómo están?
—Lamento decirle, que las noticias no son muy
alentadoras —lo mira a los ojos —. El bebé se
enredó en el cordón umbilical, además de que
recibió golpes, no solo eso, el golpe de su esposa en
la cabeza la tiene peor, puede que le traiga
consecuencias que aún no se pueden determinar… el
punto es que si no intervenimos a su esposa ambos
pueden morir, el pequeño presenta ataque cardíaco.
Las lágrimas de Cameron no se hacen esperar
nuevamente, a su lado se posiciona Jack y Cristine,
apoyándolo.
—Entonces procedan, quiero a mi mujer y a mi
hijo conmigo.
—Siendo así un enfermero vendrá con unos
papeles para que autorice el procedimiento. No le
606
puedo decir que con esta intervención ambos se
salvarán, pero tengan fe de que todo saldrá bien, ya
es opcional de usted de estar presente o no en el
nacimiento de el pequeño.
Sin pensarlo agrega:
—Quiero estar presente, ambos me necesitan —
voltea a ver a sus dos fieles compañeros —. Por
favor oren a Dios por ellos, sé que no soy muy
religioso, pero por favor. Si Richard llega antes de
que salga del quirófano infórmenle sobre todo.
Ambos asienten y abrazan al chico que ambos
vieron crecer.
Se gira y con un asentimiento le hace saber que
está listo para entrar, pero no para ver lo que detrás
de esas puertas le esperan.
Jack avisó a su familia y todos dieron su apoyo a
Cameron, la señora Anna quien es muy cariñosa con
Cameron, dijo que más tarde estaría con él, dejaría a
su hijo mayor en casa cuidando de los demás.
Firmados los papeles de autorización, Cameron
es llevado a un cuarto para ser vestido
adecuadamente para un quirófano.
607
Mientras preparan y trasladan a Melanie al
quirófano ella no da signos de querer despertar, está
conectada a tubos, oxígenos, medidor de la presión,
ritmo cardiaco. Al llegar a quirófano los médicos
solo esperan por el marido para proceder.
Cuando Cameron está listo, es conducido por un
enfermero al quirófano cinco, donde es que está su
familia.
Apenas entra tiene que tener fuerza y sujetarse de
la puerta para no desmayarse al ver la imagen ante
sus ojos, su amada mujer tan inofensiva, golpeada y
con tantas cosas conectadas a ella, desearía él estar
en su lugar.
—Bien, ya el marido está aquí, procedamos
entonces.
Habla la doctora William quién es la que está a
cargo de la operación en conjunto con su equipo y
profesionales.
A Cameron lo ubican del lado izquierdo de
Melanie justo en su Cabeza. Poniéndose de cuclillas
le susurra palabras de amor, de fuerza,
tranquilizadoras y le pide que por favor no lo deje,
sus lágrimas mojan su cubre bocas al bajar por sus
mejillas.
608
Todo pasa como en las películas, cortan el bajo
vientre de Melanie de extremo a extremo, se
presentan algunas complicaciones, desesperando a
Cameron. Se escuchan las voces lejanas de los
doctores, ellos hablando en sus palabras claves y
más palabras claves cosas que él no entiende pues
estudió administración de empresas. Él solo está
pendiente a todo lo que le hacen al cuerpo de su
amada y a tomarle la mano.
Dado un momento ve como el vientre de Melanie
baja y sacan un bultito con algo que lo cubre, los
doctores lo cortan y al momento se escucha un llanto
ahogado.
Su hijo nació, su pequeño nació.
Ve que un cuanto médico lo revisa y le ponen
oxígeno a su pequeño.
—Papá, ¿Quieres cortar el cordón?
Aún en shock se acerca y corta donde la doctora
William le indica, luego por instinto se acerca al
grupo de doctores y estos le abren paso dejándole
ver a un pedazo de su corazón, a un pedazo de su
ser, un pequeño bebé, que respira agitado, pero aún
así su llanto no sede, inquieto sabiendo él y su
cuerpecito lo incómodo que es no respirar bien y con
609
ayuda de algún aparato. Su cuerpecito envuelto en
una sabanita blanca.
Los médicos con cuidado le extienden a su hijo y
nervioso porque nunca había cargado a un bebé
recién nacido, lo toma con la delicadeza más grande
que él pueda dar. El llanto del bebé sede. Un
enfermero se queda cerca para poder sostener el
tanque del oxigeno que el bebé lleva puesto.
Se permite observarlo, para nacer antes de tiempo
es un bebé, fuerte, gordito y con sus mejillas
regordetas y rosadas, su cabello es igual al de él, con
sus pequeños ojitos cerrados. Se llena de ternura
cuando su pequeño le toma un dedo a través del
guante de látex y su otra manita empuña la bata que
su padre tiene puesta.
Sus lágrimas en ningún momento dejan de
adornar el rostro de Cameron.
Lleno de amor le dice en un bajo susurro:
—Te amo mucho hijo mucho, tienes que luchar y
vivir, te necesito, tu mami te necesita. Eres hermoso.
Con pasos lentos se acerca a su mujer que parece
dormida, los médicos se encargan de limpiarla y
suturar la herida.
610
Se pone justo en la cabeza de Melanie y con el
bebé a la altura de esta.
—Anda amor despierta, tienes que ver lo
hermoso que es.
El pequeño no deja de mover sus bracitos y
piernitas logrando tocar a su madre.
Las máquinas empiezan sonar y Cameron se
desespera, con el sonar hacen que el bebé empiece a
llorar de nuevo, los médicos se lo quitan y empieza a
sacar a Cameron de la habitación unos enfermeros
empujándolo porque él se niega, preguntando una y
otra vez, ¿Qué es lo que pasa? Nadie le da razones
sólo escucha que se mueven de arriba hacia abajo.
—La perdemos.
Besos.
Mariana
611
Capítulo 45
612
—Ese es el problema —Jack también se deja caer
al piso y continúa hablando —esto no fue cosa del
destino.
Eso llama a la atención de todos, la puerta que da
a la sala de quirófanos se abre interrumpiendo la
interrogación de Richard.
Cameron se levanta tan rápido que logra
marearse pero no le pone importancia a eso.
Los ojos de los tres hombres formulan y dicen
ellos las palabras que de la boca de ninguno logra
salir.
—Logramos estabilizarla, pero no les puedo
mentir —la doctora con pesar y sabiendo el dolor
que esta familia está pasando, dado que durante toda
su carrera se ha enfrentado a casos como estos —, su
estado es muy delicado, no estaba lista para dar a luz
y el golpe en la cabeza tuvo secuelas, es decir que
acaba de entrar en un estado de coma, puede que
despierte en unas horas, mañana, al siguiente día, al
mes, al año o…
—Nunca —Cameron se llena de frustración y
golpea la pared siendo detenido por Jack y su
suegro.
613
— ¡Cálmate! ¡Si dio a luz, es porque tú hijo está
vivo, mi nieto está vivo y él te necesita, ella te
necesita!
Las palabras de su suegro parecen hacer efecto.
—Las próximas veinte y cuatro horas son más
que vitales, puede que pase o no pase la noche, dado
a su estado, además de que perdió mucha sangre y
fue requerido hacerle una transfusión de sangre —le
explica la doctora William.
— ¿Mi hijo? —pregunta Cameron limpiando la
sangre de sus nudillos que al golpear la pared, se
rompió la tela del guante.
—El pequeño Danielson nació muy bien de peso
para ser sietemesino, tiene el peso de un bebé que
nació completo y su tamaño es muy bueno, el único
problema es su respiración, este problema se debe a
los golpes que su madre recibió al caerse y que le
llegaron al bebé de alguna manera, al rodar el
pequeño se envolvió en el cordón umbilical y esto lo
sofocó provocando este problema, no solo eso al
parecer su esposa recibió golpe a propósito en el
vientre.
— ¡Solo pudo ser ella!
614
Viendo Jack que tanto el padre como el marido
no están en condiciones de seguir preguntando
decide hacerlo él.
— ¿El bebé estará bien?
—Si, en unos dos o tres días según mi
experiencia el pequeño podrá respirar por sí sólo.
Por ahora se mantendrá en cuidados intensivos por
cualquier cosa y se alimentará con leche de formula
hasta que su madre pueda hacerlo, ¿Qué nombre le
pondrán?
—Ella lo elegirá, espere a que mí mujer
despierte, verá que será pronto ella elegirá el nombre
de nuestro hijo —expresa Cameron decidido.
— ¿Doctora podremos ver a mí nieto? —a pesar
del momento ese bebé llegó para iluminar a todos.
—En unas horas, por ahora solo se le permitirá al
padre, la señora Danielson será pasada a una
habitación equipada en estos momentos, si no hay
alguna otra pregunta me retiro.
—Puede.
La doctora se retira y continúa con su labor
Cameron se queda pensativo. Nunca pensó odiar a
alguien como odia a Allison, pagará por todo.
615
—Tienes que ser fuerte, por ti, por él, por ella,
por nosotros y por el señor Walker que está tan
destrozado como tú, ve el lado bueno, Melanie se
que estaría feliz al saber que su hijo va a estar bien,
ella es una chica fuerte y valiente sabrá levantarse,
se va a levantar de esa cama —las palabras
alentadoras de Jack le hacen ver un poco mejor las
cosas —. Mandé a Cristine, por la maleta del bebé,
por ropa para ti y para ella, también cosas para
Melanie, en un rato vendrá.
Cristine volvió con todo lo mencionado por Jack
y cambiada, Cameron tomó una ducha para quitarse
toda la sangre y líquido de la ropa llevaba puesta y
se cambió, como paciente que es el bebé Danielson,
sus cosas fueron puesta en una habitación y el fue
vestido, Cameron estaba presente cuando cambiaron
a su hijo con una ropita amarilla con azul y tan
pequeño abrió sus ojitos y dejo ver ese verde igual al
de su padre, no queda duda de que es un mini
Cameron, al bebé le tiró fotos y apenas tenía como
alguna hora de nacido. El abuelo con felicidad y
tristeza pudo ver a su nieto y eso aumentó su fuerza
para mantenerse en pie. Así también lo vieron
Cristine, Jack y su esposa Anna.
Las horas pasan y nadie les dice nada, no le han
permitido pasar a verla y eso lo desespera.
616
Sentado con los ojos cerrados en un asiento de la
sala de espera en la cual lleva horas desde la
mañana, su celular suena y el número es
desconocido.
Descuelga la llamada y se lleva el aparato a la
oreja.
—Buenas noches amor —se escucha la voz de la
persona que este momento odia la que más ha
odiado en su vida —, espero que te haya gustado el
regalo que te deje hoy en la mañana.
— ¡Maldita desgraciada, te juro que donde te
encuentre te haré pedazos con mis propias manos!
—Uy, amor, los buenos modales, ¿Dónde están?
—se burla y a su lado se escucha otra risa.
— ¡No sabes cuánto te odio Allison!
—Del odio al amor y viceversa, ¿Cómo está tu
esposita y tú bastardito?
— ¡La única bastarda eres tú! ¡Te quiero lejos de
mí familia y si mi mujer no sobrevive a esto, tú
misma ve cavando tu tumba!
617
Llena de ira porque Melanie sobrevivió lanza un
grito y con el, el móvil.
— ¡La muy perra sobrevivió!
— ¡Te dije que si no es mía no es de nadie!
¡Fallaste estúpida! —otro furioso porque todo le
salió mal, Asthon.
— ¡A mí no me grites! —Más tranquila dice —.
Hay que buscar una forma de acabarla, pero no
ahora todos los ojos están puestos sobre mí, él dijo
que si ella no sobrevivía… espera puede que el
bastardo éste vivo, muerto o éste agonizante como
su madre.
—Debemos de saber todo —agrega Asthon.
618
El bebé va muy bien, pero en Melanie ningún
cambio, todo igual, por lo menos pasaron las horas
de mayor peligro que eran las primeras veinte y
cuatro horas.
Los días empiezan a pasar y nada de que Melanie
reacciona, los golpes se ponen más morado y otros
disminuyen su color, cada día el mismo la peina la
limpia y le cuenta cosas, le lee libros, le pone su
música favorita y armoniosa, el padre de ella hace lo
mismo no se ha despegado de ella, como son fiestas
navideñas todos están en new york para verla y ver
al pequeño bebé, hasta los padres de sus amistades,
al bebé justo a los dos día lo estabilizaron y lograron
quitarle el oxigeno, ahora respira parel solito y
parece extrañarla, suele llorar en la noche y en la
mañana y en algunas horas. Su padre no se despega
de él y aunque hay una enfermera especialmente
para que lo cuide a él, su padre cada mañana está
con él, viendo cuando lo cambian y lo limpian, pero
todas las mañanas él le da su biberón y lo observa
cómo se alimenta y cada movimiento que hace, lo
derretí, aún el bebé no ríe obviamente, pero su padre
le sonríe y le cuenta cosas y le hace caras raras.
Cada día se le toma una foto al bebé.
619
A Melanie la han revisado muchos especialista y
todos dicen lo mismo que hay que esperar.
Cameron habló con la doctora y ésta permitió que
ingresaran al bebé a la habitación de su madre para
que sienta su calor y de alguna manera ella sienta a
su bebé. A Melanie le retiraron el tubo de la boca y
solo tiene el oxigeno y no en mascarilla.
La seguridad de Melanie y el bebé fueron
aumentadas, dado que en algunas ocasiones
personas sospechosas andaban merodeando por los
cuneros y la habitación de Melanie ella fue pasada a
una privada y normal, en las noches Cameron y
Richard suelen turnarse y dormir uno cerca del área
de bebés y el otro con Melanie. En ocasiones hasta
Jack se queda al pendiente de todo.
Los vídeos de seguridad, la cámara, relataron
todo lo sucedido ese día y solo esperan que Melanie
despierte para poder proceder correctamente,
mientras tanto la cara de Allison está en todas partes.
Cristine cocina y lleva comida al hospital del cual
Cameron en ningún día a abandonado, lo obliga a
comer a la mala pero lo logra y cambia las ropas de
todos, Richard algunas veces va a la casa y duerme
algo, Amalia ayuda a Cristine con todos y los
620
amigos de Melanie incluso Noa que no es muy
cercano a demostrado su apoyo.
621
La enfermera se retira y Cameron no duda en
acercarse a la cuna, está despierto muy tranquilo,
mueve sus bracitos y piernitas, el gorrito de lana
cubre su cabecita pero algunos mechones rebeldes
de su cabello negro salen de él.
—Buen día mi príncipe, ven con papá —lo toma
en brazos, haciéndole cara raras y besando
repetidamente sus mejillas regordetas, su cabecita,
naricita, todo a su paso que sea de su bebé. Su olor a
bebé están embriagante.
—Ven, vamos a felicitar a Mami.
Se acerca a la cama donde Melanie lleva día
postrada y coloca con cuidado al bebé en un costado
de su madre cerca de los senos de ella, que son más
grande debido a que le explicaron que el cuerpo de
ella cambiaría debido al parto y sus senos
empezarían a tener leche.
—Feliz cumpleaños Mami, te amo mamá —
Cameron adopta un tono de voz muy infantil —. Mi
reina en un rato vendrá tu padre, Amalia, Cristine,
Jack, la esposa de él a visitarte, abre los ojos amor, a
si podrás ver como todos festejamos por ti, lo más
importante abre los ojos para que vea cuan hermoso
es nuestro hijo.
622
Como si Melanie lo estuviese escuchando, mueve
un dedo y él emocionado pide que lo haga de nuevo.
Lo vuelve a hacer y salta de alegría.
Con cuidado toma a su hijo y lo deposita en la
cuna él se queda tranquilito.
Vuelve al lado de su mujer
—Mi amor anda abre los ojos pequeña,
enamórame una vez más con ellos.
Poco a poco mueve ambas manos de su cuerpo y
Melanie empieza abrir los ojos, la claridad le
molesta y la marea le cuesta acostumbrarse por lo
que cierra los ojos.
— ¡Despertaste mi amor! —con emoción besa
sus labios.
La voz de su marido la reconoce de inmediato.
—Cam.
Su voz sale rasposa y gruesa, le cuesta hablar
tiene la garganta muy seca.
—No te esfuerce amor.
Presiona el botón de emergencias y a los pocos
minutos la doctora William entra.
623
— ¿Qué sucede?
—Despertó —Cameron sólo logra decirle eso, su
felicidad es tan grande.
La habitación se llena de médicos y Cameron de
mala gana tiene que apartarse, se hace a un lado
junto a su hijo y llama a Richard avisando de lo
sucedido este dice que rápidamente va para allá con
los demás.
Le hacen tantas pruebas a Melanie y todas
parecen ir muy bien. Le retiran el oxigeno, puede
respirar por sí sola.
—Melanie, ¿Recuerda porque está acá? —
pregunta la doctora William.
Ve a Melanie quedarse pensativa y tratar de
esforzarse por recordar pero nada.
—Tranquila con los días lo recordará, esto es
consecuencia del golpe de la cabeza.
—Vendremos más tarde para verla, realizar los
últimos estudios, usted parece estar muy bien
señora, es un milagro que haya despertado y
sobrevivido, puede que presente dolor pero es
normal, ya no será tanto, será soportable.
624
Los médicos se retiran y ella no duda en llamar a
su marido.
—Cam, mi amor.
Dejando al bebé tranquilo se acerca.
—Aquí estoy amor.
—Tengo sed.
Tomando un vaso, vierte agua en este, la ayuda a
levantarse un poco y le da a beber. Algo a Melanie le
duele en el bajo vientre, se alarma, pero trata de no
entrar en pánico.
Ella desesperada quiere beber más.
—Calma despacio, te puedes ahogar y hacer
daño.
Suspira y hace como él le ha indicado, tan
cuidadoso.
Cuando termina de beber se recuesta y lleva su
mano al vientre, lo siente plano.
— ¡Cameron! ¡¿Dónde está?!
Cameron la mira y trata de tranquilizarla.
—Mi amor, calma.
625
— ¡No me voy a calmar! ¡¿Dónde está nuestro
bebé!?
Llora.
—Él está bien amor.
Para no hacerla desesperar, corre a la cunita al
lado y toma al bebé, que empieza hacer pucheritos
por la bulla. Lo acerca a la cama y Melanie quien
llora se queda mirándolo y sus ojos se iluminan al
entender.
—Hola Mami, conóceme, ya yo te conozco a ti.
El cuerpo de Melanie deja de estar en tensión y
ríe por la voz tan graciosa de su marido.
Se lo da a sostener en brazos y ella con emoción
lo toma.
—Es nuestro hijo amor, nació sietemesino, tuvo
algunas complicaciones que luego te contaré, pero
ya está bien, es un bebé fuerte como tú.
—Y es precioso, tiene todo de ti —sonríe y no
tarda en tocar todo de su pequeño y besarlo. El bebé
ya conoce el calor de su madre y se pega más a ella.
—Oh mira, tiene mamitis —ríe Cameron.
626
— ¿Cuántos días no estuve consciente?
—Diez días amor. Feliz cumpleaños.
Se queda atónita
—Es… es veinte de diciembre —se confirma ella
misma —, tu cumpleaños ya pasó, feliz cumpleaños
a ti también amor, ¿Qué día nació?
Los dos sonríen.
—El día nueve de diciembre, tú padre Amalia,
tus amigos, vienen a verte ya vienen en camino.
627
Capítulo 46
628
Ella misma ríe de pura emoción, Cameron se
queda sorprendido y lleno de orgullo a la vez.
La doctora ríe con ternura al ver tan hermosa
familia y por tanto que han pasado.
—Perfecto, así será registrado, ahora ya lo
puedes amamantar mamá.
La doctora le explica cómo amamantar y luego de
explicarle se retira.
Cameron se levanta de su silla y camina hacia
Melanie poniéndose justo en el costado donde está la
cabecita del bebé.
— ¿Porqué mi nombre para él, amor?
—Porque además de que es igual a ti, desde que
me enteré de que es un niño, siempre dije que
llevaría tu nombre.
—Confieso que me siento asombrado y orgulloso
de que nuestro hijo lleve mi nombre, pero, ¿Sí a él
no le gusta cuando crezca?
— ¡Ay ya deja decir estupideces! ¡Que le va a
gustar! Mejor anda ayúdame con la bata debo
amamantarlo.
629
Ayudando a su mujer con la bata descubre uno de
los duros y turgentes senos de su mujer.
Con cuidado Melanie se acomoda y acerca la
cabeza del tranquilo bebé en sus brazos al pezón, el
bebé abre su boquita y lo recibe. Es una sensación
extraña, duele un poco, pero es hermoso como ese
angelito se alimenta de su madre.
Feliz Melanie derrama una lágrima y Cameron
junto a ella.
—Confieso que tengo en estos momentos envidia
de nuestro hijo —bromea Cameron con la vista fija
en la hermosa imagen que enfrente suyo hay.
— ¡Cameron! ¡Es un bebé! —le reprende
Melanie al captar el sentido de sus palabras, no
puede creer que ese hombre no tenga pelos en la
lengua, debería de tener eso claro desde hace mucho
ya.
Continúan en silencio hasta que Melanie termina
de amamantar a su bebé y con cuidado lo coloca en
su hombro y empieza a darle palmaditas en la
espaldita hasta sacarle los gases y el pequeño bebé
empieza a dormirse.
Más tarde Melanie disfrutaba de un delicioso
plato de frutas con un jugo de naranja que Cameron
630
compro para ambos e ingreso al hospital, más bien el
magnate mando a comprar.
Tiempo más tarde la habitación en donde Melanie
se encuentra fue totalmente invadida por sus amigos,
su nana, su padre que emocionado derramó lágrimas
al ver a su hija despierta después de sufrir tanto
pensando que no podría despertar nunca, Cristine, la
familia de Jack.
La habitación fue llenada de más globos, regalos
que mayormente consisten en ropas más cómodas
para la maternidad y lograron ingresar un bizcocho,
festejando entre ellos en cumpleaños no festejado de
Cameron.
El pequeño Cameron Junior, se la pasó
durmiendo y comiendo del pecho de su madre,
cuando estaba despierto parecía una bolita de billar
todos queriendo cargarlo.
Tan llena estaba la habitación que hasta los
médicos se sorprendieron.
En la tarde casi a oscurecer todos se fueron
quedando nada más la familia Danielson.
Después de la cena y el bebé despertó y a su
madre le toca atenderlo. Le hablan cosas intangibles
palabras en balleto que solo los hace reír. Ahora
631
Cameron se encuentra acomodándolo en su cunita y
Melanie observando fascinada todo es tan
cuidadoso.
—Amor ven —lo llama —, estás muy ojeroso y
ha adelgazado.
Tomando el sofá cama y empujándolo al lado de
la cama en donde está su mujer se acuesta en este y
se coloca de lado.
—Todo esto ha sido tan difícil, cuando te vi así
tirada yo pensé que te perdía, mí pequeña —solo
expresa lo que siente, pero sin ir más lejos en el
tema.
— ¿Qué fue lo que me pasó? —pregunta con
frustración.
—Tranquila amor —le acaricia la mejilla —, no
te esfuerce al tiempo lo recordarás.
—Te amo mucho, ¿Sabes? —le toma la mano que
acariciaba su mejilla y le besa la palma.
—Yo te amo a ti mi pequeña.
Se funden en un beso que solo demuestra cuánto
se aman estos dos.
632
A la mañana siguiente llaman a la enfermera para
que se quede con el bebé y después de que a
Melanie la desconectaran hasta del suero pues no
necesita más líquidos en su cuerpo, Cameron la
ayuda a bañarse y el mismo con cuidado le limpia la
cesaría que es lo que no la deja moverse bien y le
duele. La ayuda a vestirse y ella sale encontrándose
con el pequeño ya despierto no duda en darle mimos
al igual que su padre.
La enfermera se retira y Melanie procede a
quitarle la ropa al bebé, buscando una bañerita de él
que viene equipada con una esponja en forma de
carita donde lo acuestan desnudito y con una esponja
empieza a limpiarlo con agua tibia, Cameron al
pendiente porque al Melanie durar tantos días sin
pararse y con una herida puede que pierda el
equilibrio. Embobado viendo con la ternura y la
dedicación con la que Melanie limpia al pequeño.
Después de limpiarlo, lo cambia y lo amamanta y
luego de Cameron acomodarla de forma que no se
lastime con el bebé en brazos, él se adentra a
bañarse.
Al tiempo de que Cameron sale ya el bebé se
encuentra dormidito él lo acomoda en su cuna y
633
proceden a desayunar el sustancioso desayuno que
Cameron pidió que trajeran.
A más tardar a las once de la mañana la doctora
pasó por esa habitación y al ver a Melanie tan bien
decidió darle el alta.
Cameron pagó toda la cuenta y a la enfermera y
sin más toman camino a casa después de empacar
todo lo suyo como una familia, avisando antes que
ya iban de camino a casa.
634
anécdotas, comidas hasta que la noche llega y todos
se quedaran a dormir en la mansión.
Durante el día fueron claras las miradas entre
Jake hijo de Jack el mayor de sus hermanos y Laura,
eran unas miradas tan claras, que los demás se
dieron cuenta y terminaron dándose cuenta que esos
dos se gustan.
Jake estudia administración de empresas, y esta
casi terminando, sucede que necesita el apoyo de
una gran empresa para su proyecto final y no sabía
cómo pedirle a Cameron, en fin es que entre vueltas
y vueltas logró explicárselo y Cameron para darle
más nervios al asunto tardó en responder pero al
final la respuesta fue muy positiva.
635
El bebé ya había cumplido su primer mes y está
de lindo llenando de amor y ternura a sus padres y a
todo aquel que lo ve.
Para el primer año de aniversario de Cameron y
Melanie solo hicieron una pequeña reunión debido a
que el peligro no había pasado por nada ya luego lo
festejarian en grande.
Pero las cosas no quedan ahí, Cameron descubrió
quién es el traidor y ahora está en la empresa de Jack
donde primero escuchan la versión de quien ellos
sospechaban pero no es el traidor, Blunter.
Él les explica que primero debía proteger a su
familia y que luego debía de contarles, entendiendo
ellos.
Les cuenta que el día que sucedió todo, él estaba
haciendo ronda y de repente siente que faltan
guardaespaldas y era así empezó a encontrar a los
guardias dormidos y cuando entendió la magnitud
del asunto que pretendía ir a cuidar a Melanie justo
le golpean la cabeza y siente ese paño en su nariz lo
último que escuchó fue la voz de Smith. El llevaba
días siguiéndolo y sospechando de él, pero el muy
maldito se cubría muy bien las espaldas.
636
—Muchas gracias Blunter por siempre ser leal a
nosotros, disculpa por haber sospechado de ti —
Cameron le pide disculpa y Jack hace lo mismo.
—Nunca olvidaré cuando ustedes me ayudaron
cuando mi madre tenía cáncer y ni para comer
teníamos.
Con ira controlada Cameron ingresa al otro
cuarto donde ya habían llevado a Smith y lo
encuentra temblando del miedo preguntando que
pasa hasta que él le pone enfrente todas las pruebas,
niega y eso enfurece a Cameron que estrella su puño
en la cara.
Tiempo más tarde, pero corto Smith es llevado
preso. Solo pensó en el dinero no pensó en su mujer
y dos hijos que los ha dejado solo. Tampoco pensó
en Cameron y su mujer e hijo.
Una rata menos libre pero con la diferencia de
que quedan los más fuertes libres las escorias.
Allison es la principal.
637
Capítulo 47
638
y no sabe cómo pedir perdón y esconder su rostro.
Melanie en ocasiones la llama y la alienta a seguir
adelante.
Allison, ésta mujer está acusada de muchas cosas,
por drogadicta, por venta ilegal de sustancias tóxicas
para la salud es decir drogas, maltrato psicológico a
las personas de su entorno, agresión física a dos
enfermeras en Londres, agresión físicas hasta
compañeras de cuando estudiaba en la preparatoria,
por portal armas ilegales, por homicidio a un
hombre que la rechazó y no quiso tener sexo con
ella, acoso sexual y de espionaje a Cameron
Danielson, maltrato psicológico a Melanie
Danielson, intento de homicidio y amenazas en
contra de la misma.
La mayorías de las personas anda muy al
pendiente porque al ver en todos los noticieros,
revistas, periódicos a diario el porqué se les busca a
esas dos ratas, andan atemorizados de que si se lo
encuentran le pueden hacer daño.
Como método de precaución toda las personas
cercanos a los Danielson portan un pequeño GPS
instalados por Cameron y Jack para mantenerlos
bajo vigilancia hasta el menor de ellos que es el
639
pequeño Cameron que cada día crece y crece más, lo
tiene.
Aún estando ellos en el ojo del huracán, Cameron
y su mujer no dejan de amarse.
Pasada los cuarenta y un día que una mujer debe
de guardar si tener relación alguna sexual, al día
siguiente ambos se mataron ese deseo y esas hacías
que llevan por dentro desde hace mes y pico, pero
ésta vez Melanie usando como anticonceptivos la
pastilla que le recetó su ginecóloga cuando fue a
retirar sus puntos, sin miedo a las consecuencias de
entrega al placer de amarse y adorarse mutuamente
durante toda la noche de manera lenta y acallando
sus gemidos y gruñidos con sus labios o soltándolos
bajitos para no despertar al pequeño que duerme
plácidamente muy lejos de lo que sus padres están
haciendo.
2 Meses después.
El pequeño Cameron ya tiene tres meses y esta
grande y su risa llena toda la casa cuando ríe y su
padre y su madre no pueden estar más enamorados
ellos y enamorados de él.
640
Su abuelo se había ido, ya hacía un mes junto con
Amalia, pero todos se mantienen en contacto muy
seguido, principalmente Richard que llama muy
seguido para saber de su nieto.
Al pequeño le toca vacuna y eso a nadie le gusta,
le duele mucho la piernita y le da fiebre pero hay
que ponérsela.
Cristine los acompañará, en las otras ocasiones lo
hizo Cameron pero hoy tuvo una urgencia y tuvo
que ir a resolverlo.
Algo en su pecho le dice que no salga, pero lo
toma Melanie como paranoia está muy tensa porque
no encuentran a los dementes de Asthon y Allison.
—Mel, querida, ya está todo listo —Cristine
entra a la habitación del pequeño.
—Pues vamos, por favor ayúdame con la
pañalera.
Cristine la toma y ella baja con el pequeño detrás
de Cristine después de cerrar la puerta de la
habitación del pequeño que dice “Cameron Junior
Danielson Walker” toda una lindura.
Al llegar a bajo Blunter los espera y los guía a las
yipetas donde una silla para bebés ya está instalada
641
para que el pequeño vaya ahí.
Después de que todos estén acomodados, parten
en las dos yipetas al médico el pediatra del pequeño.
Durante el camino la angustia de Melanie no
disminuye y más cuando siente la jipeta aumentar de
velocidad.
— ¡¿Qué está pasando?!
— ¡Nos están siguiendo señora!
La persecución empieza y todas las personas se
dan cuenta, también los periodistas que andan por
ahí y empiezan a transmitir en vivo, llegando esta
información a toda parte del país incluso a Cameron
que reconoce las yipetas de su casa, pero la
transmisión falla dado a que los periodistas no
logran seguir la persecución.
En un momento dado son interceptados tanto
adelante como atrás y aún siendo las yipetas
blindadas le disparan a las llantas y estas se pinchan.
Un hombre encapuchado se coloca justo en el
cristal de dónde está Melanie y otro donde esta
Cristine.
El móvil de Melanie suena y suena.
642
— ¡Bajen del auto, ahora! —grita uno de los
hombres encapuchados.
— ¡No hagan nada tonto!
Todos bajan, pero al intentar los guardaespaldas
de Cameron dispararles estos toman a Melanie y la
ponen como escudo.
— ¡Si disparan tú jefecita se muere!
Blunter quien es él que está a la cabeza de la
seguridad de Melanie se encuentra acorralado,
¡Demonios! Es la mujer de su jefe, no puede
permitir que le pase nada, Cameron ha sido tan
bueno con él.
Con todo el escándalo el bebé empieza a llorar.
— ¡Solo la queremos a ella!
— ¡Llévenme a mi si quieren, déjenla! —intenta
negociar Blunter.
El que sostiene a Melanie y le apunta a la cabeza
ríe malévolo.
— ¡La jefa la quiere a ella y a ella le llevaremos,
si no dejan de joder también el mocoso que no deja
de llorar vendrá y tal vez no corra con tanta suerte!
643
— ¡No por favor! —Solloza Melanie —. ¡Mi hijo
no, llévenme a mí!
— ¡Señora…! —Blunter la mira con pesar.
— ¡Nada, Cristine cuida de él y Blunter tú
cuídalos!
Antes de ser arrastrada por ese hombre por así
decirlo se dan una mira y ya él sabe, pronto la
encontraran.
Los ojos de Blunter están fijos en los hombres de
Allison hasta que estos sueltan a Cristine que no
duda en subir a la jipeta y tomar al pequeño que
tiene todo su rostro rojo de tanto llorar, para
calmarlo y Blunter pendiente, hasta que
desaparecen, frustrado golpea la llanta vacía con sus
pies y los demás hombres apenados y frustrados
porque esa malnacida logró lo que quería
nuevamente maldicen.
— ¡Hay que volver, avisarle al jefe todo esto y
encontrar a la señora!
Todos asienten y van a sus respectivos lugares
dando la vuelta y regresando a casa. Con las llantas
de los vehículos de la parte de adelante
descompuestas.
644
En las yipetas que entraron a Melania en el
camino, está avanza muy lejos y ella solo ruega que
ese bendito aparato funcione.
Allison aparece en su campo de visión.
—Hasta que nos volvemos a ver perra.
Antes de que pueda decir algo un pañuelo con
alguna sustancia es puesto en su nariz y antes de
perder la conciencia ruega en silencio que pronto eso
termine y pueda volver a casa con su hijo y su
marido.
645
—Entiendo, ¿Dónde está mi hijo y Cristine?
—Fue a dormir al pequeño, está muy inquieto.
—Pobre de mí pequeño, tantas cosas vividas y
apenas tiene tres meses de nacido, ¡Hasta hoy
Allison y Asthon están haciendo de las suyas!
Unas camionetas rechinan las llantas y pronto la
sala de la mansión Danielson se ve llena de hombres
armados y vestidos de negro a la cabeza Jack listo
para todo. Pareciera como si van a la guerra.
— ¡Tenemos ubicado todo, el GPS funciona
perfecto! —informa Jack.
— ¡Perfecto! ¡Blunter! —le llama Cameron.
— ¡Señor!
— ¿Cuántos hombres eran?
—10 en total.
—Bien —habla Jack —; esta gente son
peligrosas, además de que ese no es exactamente el
total de gente que pueda tener Allison y Asthon, hay
más, se los puedo asegurar.
— ¿Tienes un plan? —más bien asegura
Cameron que Jack tiene un plan.
646
—Lo tengo y creo que es hora de que pongas en
práctica todo lo que te he enseñado —enmarca una
ceja —. El plan es este, pondré equipos de cinco,
entre ellos habrá un cabecilla yo dirijo el primero
Cameron viene conmigo —señala tres hombres más
—, tu Blunter liderarás a…—señala a cuatro hombre
y así sucesivamente hasta formar cuatro grupos de
cinco integrantes —, el resto cuidará de la casa —
con seriedad procede a decir el plan —, ellos se
encuentran en la zona norte del estado, en ésta zona
solo hay un viejo edificio abandonado de diez pisos,
estaba siendo construido para hacer un centro
comercial, pero no funcionó y fue abandonado por
causas que a ninguno nos importa. Blunter tú
entraras por atrás y todo a tu paso tienes luz verde
para disparar, ¿Entendido?
—Entendido, señor.
Sigue explicando, otro grupo entrara a la derecha
y otro a la izquierda y él con el ansioso y furioso
Cameron entraran de frente.
—Todos a mi señal, dejaremos los vehículos un
poco retirado para que no se pongan alerta,
llegaremos corriendo y acabaremos con esa peste.
Terminado de explicar el plan todos corren a
prepararse.
647
Cameron sube al cuarto y encuentra a Cristine
cantándole la misma canción de cuna que escucho
por última vez cuando tenía siete años.
—Hola nana.
—Mi niño —lo mira y ve determinación en esos
ojos esmeralda.
—Me lo prestas —se refiere a su hijo.
Cristine lo toma en brazos y lo acerca a su padre
el cual lo recibe y lo llena de mimos.
— ¿Cómo están?
—Estamos bien, Blunter nos trajo sanos y salvos,
muestra preocupación es Mel, el pequeño sabe al
parecer que su madre está en peligro.
—Ella volverá, sana y salva, así sea lo último que
haga en mi vida, la traeré de vuelta aunque yo no
vuelva —dice con determinación y observa a su
bebé mientras se queda dormido.
—No digas tonterías —solloza bajo —, van a
volver ya verás.
—Prométeme algo, si no vuelvo cuida de mí
familia por favor, como lo hiciste conmigo cuando
mis padres murieron, promételo.
648
— ¡Que vas a volver! —se tapa la boca al ver al
pequeño removerse en los brazos de su padre.
—Nana…
—Lo prometo, pero vas a volver.
Acostando a su hijo en la cuna lo observa y le da
un beso en su pequeña frente, puede que sea la
última vez que lo vea, se despide de ambos y va a
prepararse, algo en su pecho le dice que su vida está
en jaque aunque lleve aquel chaleco antibalas.
649
Un golpe le voltea la cara a Melanie y siente el
escozor en su mejilla.
—Allison querida, esa no es manera de tratar a
nuestra invitada —una voz tan conocida y que al
principio cuando lo conoció pensó que era de un
buen hombre.
Asthon camina hacia ella, está ojeroso, el cabello
largo, barba despeinado luce como lo que es, un
demente.
—Mi amor, cuánto tiempo sin verte —se acerca y
pega su asquerosa boca a la de Melanie.
Ella trata de mover el rostro pero él le aprieta
tanto el rostro que le hace daño.
Cuando se despega se lame los labios y Melanie,
hace un gesto de asco, ganándose una cachetada por
parte de él.
— ¡Eso no se hace amor!
Observa a su alrededor y hay un lado que no tiene
pared, que peligro.
A Melanie solo le queda apretar los labios y más
cuando ese enfermo le toca los muslos por encima
de la tela de su jean y los senos por encima de la
ropa.
650
—Sé que me deseas amor, pronto consumaremos
todo no te desespere.
Melanie ruega en silencio que pronto lleguen por
ella antes de que ese infierno haga alguna locura con
ella.
Se acerca el final.
Nos leemos luego mi amores.
Mariana
651
Capítulo 48
652
— ¡Sabes que lo haré, pero no hables
estupideces, saldrás de aquí vivo e iras con tú
familia a casa!
Durante el resto del trayecto que los lleva a la
última planta, tienen que pelear con uñas y dientes
para poder llegar, cuando logran llegar a la última
planta era de esperarse que los disparos habían
llegado a los oídos de los secuestradores.
Junto a Cameron y Jack llega Blunter y cinco
chicos más.
Tiran la puerta y se encuentra con lo más
aterrante.
Los ojos de Cameron se llenan de furia y miedo,
el demente de Asthon tiene una pistola justo en la
frente de Melanie y está con ella de pie, Allison está
en un rincón viendo todo con emoción como si
estuviera en el cine.
— ¡Ni un paso más o la mato aquí mismo! —
mientras Asthon habla aprieta más el agarre en
Melanie y el arma en su cien haciéndole daño.
— ¡Tranquilo! —trata de negociar mientras Jack
le apunta a Allison y los demás a los hombres de
ésta, todos se están apuntando y la vida de Melanie
en jaque —. ¡¿Qué quieres?!
653
— ¡Es muy tarde para preguntarlo, siempre la he
querido a ella, debiste de quedarte aquí y no
buscarla, ella y yo habíamos podido ser felices y yo
habría aceptado al bastardito!
Los dos padres del pequeño aprietan los dientes
para no decirles de todo.
— ¡Me haces daño Asthon! ¡Tratemos de arreglar
las cosas!—Melanie trata de negociar mientras le
lanza miradas a Cameron que no baja su arma y la
mantiene al frente —. ¡Yo me voy contigo! ¡¿Vale?!
—continúa ella.
— ¡¿De verdad amor?! ¡Seremos felices! —
empieza a distraerse.
— ¡Cameron viene conmigo entonces, seremos
felices también amor! —la demente de Allison
alucina también.
En un descuido de Asthon Melanie golpea su
rodilla y entrepierna logrando zafarse del fuerte
agarre y corre a los brazos de Cameron pero antes de
llegar Asthon logra levantarse y apunta a ella con su
arma, cuando Cameron ve esto pone su cuerpo
delante del de Melanie y dispara a la vez que Asthon
lo hace, la bala del arma de Cameron da justo en el
estómago de Asthon y la de Asthon perfora la piel
654
de Cameron en un lugar muy peligroso entre el
hombro donde el chaleco antibalas no cubre, pero
muy cerca del corazón cayendo ambos a la vez de
rodillas.
— ¡No! —el grito desgarrador de Melanie le
lastima la garganta, pero no le importa —. ¡Mi amor
no!
Se arrodilla junto a él y lo pega a su cuerpo
besándolo y llorando con desesperación.
Un hilo de sangre sale de la boca de Asthon y
este aún así ríe por lo que ve estando sin fuerzas.
Llena de ira Allison se abalanza a tiros sobre
Aston arrebatándole de por sí los pocos minutos de
vida que le quedaban al hombre.
Jack, con un nudo en el pecho reacciona a tiempo
cuando Allison dice:
— ¡Por tu culpa perra se murió mí Cameron,
ahora muere!
No, no, no, señorita Stile muera usted, una bala
del arma de Jack da justo en la frente de Allison
acabando con su vida.
Blunter y su equipo hieren a unos cuantos. No
hay mejor castigo que ellos pasen el resto de sus
655
vidas en la cárcel.
— ¡Cameron hijo no cierres los ojos, la
ambulancia ya viene! —Se arrodilla Jack con él —.
¡Blunter la ambulancia!
— ¡Ya viene señor!
Sonríe tenue Cameron y con pocas fuerzas habla.
—Recuerda lo que me prometiste Jack —arrastra
las palabras.
—Lo recuerdo, pero te vas a levantar de ahí
muchacho, eres fuerte —a Jack se le salen las
lágrimas.
—Por favor mi cielo no hables, guarda tus
energías —llora desconsoladamente Melanie.
—Te amo tanto, siempre te voy amar en esta y en
otra vida, cuida de nuestro hijo y se feliz mí amor —
con las pocas fuerzas que se van agotando más y
más levanta la mano y le acaricia el rostro.
—Ssh, los dos lo cuidaremos y seré feliz contigo
a mí lado, te amo mí amor —le toma la mano y se
las besa en repetidas veces.
Con una sonrisa cierra los ojos.
656
— ¡No! ¡No! ¡Te lo prohíbo, abre los ojos mí
vida, anda abre los ojos! —Melanie llora su llanto es
desgarrador —. ¡No, no puedes dejarnos solos,
nuestro bebé te está esperando en casa!
— ¡Cameron! —Jack le quita el chaleco y
empieza a darle reanimación.
La ambulancia llega y rápidamente, le toman el
pulso.
— ¡Está vivo, su pulso es débil, pero está vivo,
oxigeno y suero rápido, una gasa para detener la
sangre! —grita el chico que atiende a Cameron.
Otros tapan los cadáveres.
Cuando equipan a Cameron y lo sujetan de la
plancha donde está acostado, lo levantan y bajan con
él, detrás de él Melanie.
Lo suben a la ambulancia al llegar al primer piso,
Melanie va directo a subirse, quieren impedírselo y a
gritos los aparta.
Toma la mano de su esposo cuando está arriba y
rápidamente la ambulancia se pone en marcha. Por
el pequeño cristal de la ambulancia logra ver como
Jack se queda con la policía y le hace señas de que
más tarde estará con ellos.
657
Durante todo el trayecto sólo se escucha la radio
y los paramédicos hablando a través de estos con lo
que parecen ser especialistas.
Al llegar al hospital donde ella estuvo internada y
donde su hijo llegó al mundo, un grupo de doctores
los espera listos para ingresar y operar a al paciente.
Rápidamente lo bajan y Melanie hecha un mar de
lágrimas detrás. Lo guían por un pasillo y cuando
llegan a la unidad de cuidados intensivos detienen a
Melanie y no la dejan pasar, sólo se queda mirando
la puerta por donde al amor de su vida lo llevan más
muerto que vivo.
Una enfermera se acerca y le empieza preguntar
los datos de Cameron, ella ida ni siquiera sabe cómo
responde, parte de su alma está del otro lado de esas
puertas y siente cómo poco a poco se va
desprendiendo de la vida.
658
Hace minutos antes Blunter había llevado y le
había dicho todo a Cristine, quien se encuentra ahora
toda nerviosa y llorosa, está más serena porque sabe
que no puede dejar al pequeño solo.
Cristine le llama a Miami y le avisa a Richard de
todo lo que ha sucedido el día de hoy. Richard
suspira que ya por fin esas personas no estarán
peligrando la vida de sus seres queridos aunque
tampoco se alegra de la muerte de nadie, le dice que
tomara su avión privado y que pronto estará con
Amalia apoyando a su hija.
659
La esposa, Melanie, esa no le quedaran lágrimas
de tantas que ha derramado ese día. Su padre llegó
poco después y ella se aferró a las tres personas que
están ahí con ella.
Cada minuto es desesperante para ellos.
De momento, las máquinas empiezan a sonar, la
vida de Cameron Danielson se esta hiendo y fuera
de ese quirófano está su mujer la cual siente un
vuelco en el corazón que no la deja respirar con
tranquilidad.
Melanie se levanta sobre sus pies y pasando por
el guardia de seguridad que la intentó detener, corre
con todas sus fuerzas, no siente el dolor que sus
senos le producen debido a que no ha amamantado a
su hijo desde la mañana.
Mientras más corre su corazón más se acelera
avisándole que cada vez más está más cerca de su
esposo.
Descarga tras descarga y nada, sus signos vitales
cada vez son más débiles hasta que el monitor marca
una fina línea.
—El paciente ha fallecido.
660
Melanie corre y siente ese dolor tan grande en el
pecho que le corta el aire.
— ¿Hora de muerte? —pregunta el cirujano.
—18:25 de la tarde, del día once de marzo.
Lo desconectan de las máquinas y con una sábana
blanca lo cubren, Melanie llega justo en ese
momento.
— ¡No!
Un médico la ve y le pregunta:
— ¿Qué hace aquí? No puede estar aquí, señora.
La intenta detener cuando se echa a correr para
llegar al cuerpo inerte del difunto Cameron.
— ¡Es mi marido el que está ahí, muerto en esa
cama, él tiene que volver, tenemos un bebé de
apenas tres meses que lo necesita tanto como yo, así
que quítese!
La miran como si estuviera loca, por lo que dice,
ese paciente está muerto.
La dejan y ella no tarda en lanzarse sobre su
marido muerto, antes de morir le habían suturado la
herida.
661
— ¡Cameron Danielson Méndez despierta, ahora!
—Llora a mares y continuó gritándole —. ¡¿Piensas
dejarnos a mí y a tú hijo?! ¡¿Dónde está ese hombre
terco del que me enamore?! ¡Tienes que enseñarle a
nuestro hijo cómo dar sus primeros pasos, como
conquistar una chica, tienes que volver y hacerme el
amor como estoy segura que nadie me lo hará igual
que tú! ¡Porque has sido el único, eres el único y
serás el único siempre!
Grita como loca sin importar que la están
escuchando y que unos se conmuevan y otros la
vean como loca.
El alma de Cameron asciende y asciende muy
pero muy lejos, todo es blanco y tranquilo donde
está, de lejos ve a un hombre que es igual a él pero
más viejo, ese es él sí llegaba a cumplir la edad de
su padre.
— ¡Papá!
Tenía tanto tiempo sin ver a su padre y ahora
después de once años lo ve enfrente de él tan alto
como él e igual a él.
—Soy yo hijo, no debes estar aquí.
— ¿Cómo que no debo? Aquí me siento en paz,
¿Dónde está mamá?
662
— ¡Aquí estoy hijo! —una mujer con el pelo
negro y con ojos avellana camina hacia ellos —. Tu
padre tiene razón, no debes estar aquí.
— ¿Porque?
Se acerca y los abraza a ambos.
—Porque todavía el peligro no ha acabado, para
tú familia, debes de ayudar a Jack a protegerte a ti y
a tu, familia.
De pronto escucha un llanto.
— ¿Escuchas ese llanto? —le pregunta su madre.
—Sí, es un llanto muy desgarrador —agudiza el
oído —, es mi mujer, mi Melanie.
—Ella te necesita al igual que tú hijo, nuestro
nieto —agrega su padre, y su madre y él empiezan a
caminar lejos de él.
— ¡Oigan! ¡No se vayan, no me dejen de nuevo!
—les grita.
—Aún no es tiempo de que estemos de nuevo
juntos, nosotros no te dejamos porque quisimos —
dice su padre.
663
—Te amamos hijo —gritan los padres se
Cameron a la vez mientras desaparecen de su vista
—tienes que volver.
Melanie no deja de golpear el pecho de su marido
con los puños y llorar sobre éste, gritándole que es
cobarde, que tiene que volver.
Mientras el alma de Cameron no deja de repetirse
que debe protegerlos, hay que volver entonces.
Justo cuando Melanie deja caer sus dos puños
sobre el pecho de él sus ojos se abren de nuevo
volviendo a la vida.
Capítulo intenso.
¿Pensaron qué se había muerto?
Jaja, quería darle más drama al asunto,
lamento si cause algún desenfrenado ritmo
cardiaco debido al melodrama de la muerte de
Cameron.
Nos leemos mis amores luego.
Mariana
664
Capítulo 49
665
El mismo médico que no la quería dejar pasar la
mira con algo de pena y sutilmente le dice:
—Señora, lo lamento pero debemos de quedarnos
a solas con el paciente, para poder terminar la
cirugía y todo eso.
—Claro —lo mira y seca sus lágrimas —, solo le
doy un beso y ya.
Se acerca y besa los labios de un Cameron muy
atontado.
Se retira de la habitación con una sonrisa, ella
misma no se puede creer todavía que haya vuelto a
la vida después de morir, él es un guerrero.
Al llegar a la sala de espera todos la esperan para
que cuente el porqué de que salió a la carrera y que
sucedió.
Relatándole todo y mirando como
constantemente los rostros de todos cambian de
expresiones hasta terminar.
El primero en saltar de alegría es Jack gritando y
llamando la atención de personas que lo mandan
hacer silencio, no deja de decir que ese muchacho es
fuerte.
666
Melanie a la mala y a regañadientes aceptó irse
porque si fuera por ella se quedará hasta que le diera
él alta, pero no puede porque su bebé la necesita. A
Cameron los médicos lo tienen como nuevo
descubrimiento de la ciencia no dejan de hacerle
estudios y lo tienen bajo observación por lo que
Melanie no pudo volver a verlo y se fue a casa toda
enojada. Le consuela saber que Jack se quedaría con
él.
Al llegar a casa con su padre y Amalia, Cristine
los abordó con preguntas que Melanie prometió
responder pero después que se dé un baño y se
quitara toda esa ropa sucia de sangre, de todo un
poco y alimentara y estuviera un rato con su
pequeño.
Luego del baño fue por el pequeño que al parecer
la estaba esperando porque solo le sonríe y él como
una ternurita que es le sonríe de vuelta y estira sus
bracitos para que su madre lo cargue desde su
cunita. Tomándolo en brazos lo llena de mimos y se
sienta en la mecedora, descubre un seno y acerca la
boquita del bebé al pezón y no duda en chupar, al
parecer extraño mucho en el día esos senos, la leche
materna de su madre y a ella.
667
—Eles tan parecido a tu Papi, no tienes nada de
Mami —le habla con voz infantil, haciendo que ría y
ella con él.
Cuando termina de amamantarlo le saca los gases
y este señorito no quiere dormirse y Melanie sabe
porque, él bebé está acostumbrado a tener a su padre
en casa a esas horas.
Se va con él a su habitación y ahí está Cristine
con una charola con alimentos.
—Ya es hora de que ese pequeño duerma.
—Lo sé Cristine, pero no quiere dormirse, él sabe
que su padre está a estas horas en casa y debe de ser
eso, lo extraña.
—Tienes razón Mel, ven cena que no has comido
desde la mañana y eso no es bueno estas
amamantando, yo agarro al señorito Cameron aquí,
ya me contaron lo que sucedió.
—Gracias Cristine. Sentí como el alma se me
desprendía del cuerpo el día de hoy más de las veces
contadas.
Después de cenar Melanie, se despidió de su
padre y su nana, esos dos se andan dando miradas
668
extrañas, ellos piensan que nadie se da cuenta pero
Melanie sí que se da cuenta.
Al llegar a su habitación la espera Cristine con él
bebé aún despierto ambas se despiden y Melanie lo
toma en brazos.
—Ya no cabes en el Moisés, y tú cunita está en tú
habitación, duelmes con mami hoy —roza su nariz
con la de él y su risa es una dulce melodía —Te amo
mucho hijo mucho. Mami yo tanben te amo muto.
Acuesta a su bebé en el lado que duerme su padre
tiene su olor y el muy fresco sabe, se acurruca ahí,
con un piecito lo sube arriba de su Mami, mientras
ella le canta poco a poco se va quedando dormido
con sus manitas juntas.
Melanie suspira y piensa que ya todo ha pasado
pero todavía no ha pasado todo.
669
Para desayunarse le hace mil y una rabietas a
Jack quien es que todavía está con él, no le gusta la
comida del hospital.
Como al pequeño Cameron no se le puso la
vacuna el día anterior, Melanie aprovecha que su
pediatra está en el hospital y lo lleva a ponérsela, a
ella le duele más que a él, al ver a su peluchito
llorando por esa estúpida aguja.
Como Cameron está en una habitación a solas
ella lleva al bebé con ella para que vea a su padre y
se anime un poco está muy ñoñito por esa vacuna.
—Buen día, Papi —Melanie abre la puerta de la
habitación donde está su marido.
El susodicho estaba con su brazo bueno sobre su
cabeza y los ojos cerrados señal de total
aburrimiento.
Abre los ojos y su rostro se ilumina.
— ¡Mis dos amores!
Se acercan al hombre que quisiera salir corriendo
de esa cama y Melanie lo besa, pero Cameron lo
profundiza y su mano buena agarra su trasero.
— ¡Cameron! —Lo regaña —. Estamos en un
hospital y estás convaleciente.
670
La manita del pequeño, busca a su Papi y este
inmediatamente le presta atención.
—Hola, el príncipe de papá, ven aquí.
—No lo puedes cargar amor.
—Acomódalo aquí, no me lastimara, ya los
extrañaba.
Melanie lo acomoda en el lado bueno de su
esposo y él pequeño parece alegrarse un poco
aunque le duele su piernita y Cameron solo dice que
como desearía que fuese él al que le pusieran esa
jodida jeringa.
671
Blunter por su buena reputación y por ser un leal
guardaespaldas, Cameron lo premio con una casa
para él y su familia y el hombre casi llora de
felicidad, Jack por su parte lo ascendió en el trabajo
convirtiéndolo en su mano derecha.
El hijo de Jack, Jake logró conquistar el corazón
de Laura y ahora andan de novios. Jake unos años
mayores pero para el amor no hay edad. El mismo
chico ahora está haciendo sus pasantía de
administración de empresas en la empresa de
Cameron, pero con vergüenza logro pedírselo que si
podía dejarlo y Cameron le dijo que sí.
La relación de Vicky y Nick como toda relación
tienen sus problemas, pero los arreglan cuando Nick
viaja a Miami o él la trae a new york.
Morgan y Logan Collins después de tanto tiempo
parece que se darán una oportunidad y el último
mencionado visitó a Melanie y al bebé, pasándose
unos días con Nick y Noa en su departamento.
Cameron se recuperó increíblemente de su
cirugía y eso que se creía lo contrario porque no
pudo mantener sus manos lejos de su mujer y ya
saben que pasó.
672
El tiempo pasa como el agua en los ríos, a los 4
meses él bebé dijo papá y le empezó a salir su
primer diente, poniéndose muy ñoño porque le dolía
y le picaba la encía.
Melanie se reinscribió en la escuela y matándose
estudiando, dividiendo su tiempo entre, esposa,
madre y estudiante logró graduarse junto con sus
amigas, ingresando de inmediato a la universidad.
A los seis meses Cameron hijo, es todo igual a su
padre, ya dice papá y mamá y cada vez más dice
más palabritas, se sienta solo, se para sólo y gatea,
come de todo y a todo le quiere poner la mano.
El matrimonio de sus padres es un matrimonio
normal, las peleas se dan como en cada matrimonio,
pero la resuelven como personas civilizadas y
cuando no se puede con palabras para eso está la
cama.
El primer cumpleaños del pequeño Cameron que
caminó a los nueve meses, se realiza en el patio
trasero de la casa, un lugar muy natural y
acondicionado para niños, su padre le había puesto
hasta columpios, la decoración de los paw patrors,
unos famosos muñequitos que cada vez que ese
pequeño lo escucha quiere abalanzarse sobre la
televisión, invitaron a los vecinos y a sus niños al
673
cumpleaños y ese pequeño Danielson es demasiado
consentido por las amigas de su madre, su abuelo,
las nanas de sus padre y la familia de Jack, Nick,
Noa todos encantado con él pequeño pelinegro de
ojos verdes. Con un año y Melanie no deja de
amamantarlo siente que todavía es muy pequeño y
que aún la necesita, sus senos que no dejan de tener
leche, aunque el pequeño le tumba un brazo a quien
lo carga es muy amado por todos y en especial por
sus padres.
Richard y Amalia estos dos se traían los suyos y
es lógico que terminarán juntos, más viviendo solos
en la casa del primero en Miami, en una visita de
Melanie con su marido e hijos a Miami, llegaron de
sorpresa y los encontraron con las manos en la masa,
dándose unos besos y camino a la habitación de
Amalia, avergonzados no sabían dónde esconder la
cara y más cuando Cameron hijo miraba todo atento
y formuló lo siguiente ’Abelo, ¿te gusta la abela
Amala?‘ y es que los niños de hoy en día nacen
sabiendo. Pensaron que Melanie se enoja, pero no
fue así ella se sintió muy bien porque estuvieran
juntos, pero no porque se los escondieron.
Ese mismo año una boda oficial fue celebrada en
la mansión Danielson donde Melanie usó un
precioso vestido y su marido tan sexy con un
674
esmoquin negro y el pelo revuelto al igual que su
pequeño hijo que al año y medio le quitó el seno.
Tiempo después Richard y Amalia se casaron.
Cristine seguía soltera pero algunas tarde solía
salir y eso era algo sospechoso, es mujer, y las
mujeres necesitan.
Jake se graduó de la universidad dándole orgullo
a su padre Jack y a su madre Ana, también a sus
hermanos y el mismo día pidió la mano de Laura en
matrimonio a sus padres, al principio estuvieron
renuentes porque Laura solo tenía diez y nueve años
buscaron pretexto y al final aceptaron, hiendo Jake y
Laura a celebrar a un departamento que Jack le
regaló a su hijo. Y que celebraron en grande.
Morgan es tan liberal y Logan un mujeriego
empedernido que en diversas ocasiones le faltó a
Morgan, pero ella como chica fuerte lo mandó a la
basura y se mudó a new york, y por lo visto todas lo
terminarían haciéndolo, resulta ser que Morgan
decidió hacer su vida. En un antro en la noche justo
cuando pretendía hacerlo se estaba besando con un
tipo y este fue separado abruptamente de ella siendo
golpeado por Logan que le reclamaba que ella es
suya. Indignada Morgan le reclamaba que ella no era
suya pero su discusión le valió, cuando Logan la
675
hizo suya después de la última vez que habían
estado juntos en el departamento de Logan, la hizo
suya de nuevo en el capo del auto en una carretera
solitaria, la había sacado del antro en su hombro. A
partir de entonces Logan dejó todo porque no quería
perder a su chica de nuevo.
Vicky y Nick, eso son explosivos y siempre
andan peleando pero lo arreglan cuando ambos se
cogen como conejos.
Todos viven felices pero la familia Danielson
siempre está en la mira del huracán.
676
Epílogo
6 años después.
Han pasado 6 años desde el nacimiento de
Cameron Danielson Walker una copia exacta de su
padre, ese pequeño ha cambiado la vida de sus
padres.
Melanie se graduó de la universidad a los veinte
años, dando que su carrera es diseño de modas y esa
solo dura dos años y algo. Pero hoy tiene veinte y
dos años y su esposo treinta y dos.
Con sus ahorros y utilizando parte de la herencia
que su madre le dejó con sus veinte años creo su
empresa de ropa que hasta hoy tiene más de cinco
tiendas a nivel nacional y está pensando en
expandirla. No utilizando las influencias de su
marido y de su padre para poder hacer crecer su
negocio.
Y ahora aquí está en el baño de la habitación
donde seis años atrás perdió su virginidad con él que
no pensó que sería él amor de su vida, con quien
tiene ya el mismo tiempo de casada y con quien
tiene lo más maravilloso de su vida, su peluchito.
677
Que puede que deje de ser el hijo único.
Muerta de los nervios agrega las tres gotas de
pipí en donde le indica las instrucciones que lo haga.
—Bien ahora solo cuesta esperar.
A lo largo del tiempo ha cambiado pero no tanto,
su cuerpo es más de mujer y su semblante también,
su pelo hasta ahora está del mismo color y no se lo
corta siempre largo.
Su esposo sigue siendo arrebatadoramente guapo,
sigue teniendo esa mira moja bragas que la vuelve
loca y por la que han tenido sus peleas porque hay
mujeres que no saben respetar y ella es mujer,
carajo, le coquetean a su esposo en su cara y
pretenden que no haga nada.
Su hijo, ese es igual a su padre, lo mismo nada de
ella y ya anda de picaflor por ahí.
—Es hora.
Toma la bendita cosa que parece un palito de
paleta y se queda mirando, al baño entra Cameron y
su hijo todo sudados y el pequeño lleno de lodo.
— ¡Hijo pero, ¿Qué te pasó?! —se arrodilla
frente al niño soltando el test de embarazo que
estaba en su mano al piso para revisar al niño.
678
— ¡Nada! Estaba entrenando con mi Papi y el
abuelo Jack.
Melanie respira y pone los ojos en blanco, ese
niño solo vive pegado a Jack mirando todo lo que
hace cuando entrena a Cameron en la casa y otras
veces cuando Jack ésta en la casa y sabe que Jack va
a la empresa de seguridad, se pega como garrapata
de él hasta que tiene que llevárselo.
— ¿Qué voy a hacer con ustedes?—les pregunta.
—Conmigo —se apunta el niño con su dedo a él
mismo —, ayudarme a bañarme Mami.
—Está bien, ve a tu cuarto y sácate la ropa, pero
nada de ensuciar nada, mi peluchito.
— ¡Mami!
—Anda y ya deja de ser refunfuñón como tú
padre.
El niño hace lo que su madre le dice y se da la
vuelta saliendo del baño.
Ella se gira a su marido y lo encuentra mirando el
aparato ese. La mira a ella y mira el test y así
viceversa.
679
Una sonrisa y un brillo se instalan en su bello
rostro.
— ¡Estás embarazada!
Las primeras lágrimas salen y ya está llorando
como Magdalena.
680
Cuando les tocó decirle al pequeño Cameron que
tendría dos hermanitos o hermanitas el niño les
pregunto donde están y su madre le dijo que en su
barriga y el pequeño exclamó:
— ¡Te los comiste! —pone cara de horror.
Sus padres ríen y después de durar un buen rato
explicándoles tuvo que tomar como ejemplo a sus
tías porque todas están embarazadas de seis, cinco y
cuatro meses.
Morgan es la de seis y espera un niño, Vicky de
cinco y esa espera a dos, mellizos, niña y niño y
Laura esta de cuatro y espera una niña.
Los maridos de ellas están muy monos, porque
todos se casaron y Jack no ha dejado aún que sus
hijas tengan novios, les toca tenerlos escondido es
un hombre muy celoso con sus hijas y él menor de
sus hijos varones ese tiene una novia en cada
esquina.
Le dieron la noticia a los que no lo sabían y todos
se pusieron más que felices, estarían llenos de bebés
A los cinco meses por ser gemelos descubrieron
el sexo y esperan a dos niñas.
681
Cameron no se la da por nadie y ya anda diciendo
que tendría una doce lista para todo aquel que
intentará acercar a sus pequeñas y eso mismo le
decía a él niño, que no puede permitir que niños se
acerquen a sus hermanas.
Como el primer embarazo de Melanie este fue
igual de consentido.
Cuando descubrieron el sexo de las gemelas a los
dos días el bebé de Morgan nació y Logan andaba en
las nubes enamorado de su pequeño hijo. Al mes
siguiente nacieron los dos de Vicky y a Nick se le
metió lo mismo que Cameron con su pequeña hija y
al siguiente mes nació la niña de Laura y Jake celoso
por igual, poniendo a las mujeres a morirse de las
risas con sus ocurrencias. Todos ellos, los mayores
eso quiere decir que Richard el padre de Melanie,
los padres de su amigos no viven new york, después
todos los demás sí.
Cameron hijo, quería estar siempre pegado a la
hija de Laura cuando la llevaban a su casa el niño se
volvía completamente loco y después no quería que
se la llevaran despertando esto curiosidad en sus
padres.
A los dos meses de que naciera la hija de Laura y
Jake, quien trabaja con Cameron padre, nacieron con
682
parto natural las dos gemelas Danielson, una
llamada Clara como la madre de Cameron y la otra
Maritza como la madre de Melanie, Clara y Maritza
Danielson Walker, iguales a su padre, pelo, ojos, son
una copia de Cameron Danielson padre en género
femenino, nada de la madre.
Era complicado atender a dos bebés pequeñas y
más otro de seis años, casi siete pero siempre
aparecían brazos para ayudar.
El tiempo pasa muy rápido y las pequeñas niñas
crecen muy rápido.
Todos los niños crecen muy rápido y siendo el
mayor Cameron hijo, cuida de todos en el colegio.
Noa, se encontró a una rubia muy hermosa que lo
trae loco y hasta anillo ya le puso en el dedo, cuando
ese cada día amanecía con una diferente.
De Will y su hija Carla siempre tenían noticias,
éste se casó y también formó su familia con una niña
más y un niño, Carla una señorita muy hermosa
parecida físicamente a su madre biológica pero muy
diferente sentimentalmente y en carácter.
Y sin darse cuenta pasaron casi cinco años más,
donde el peluchito ya de casi once años no le quitaba
los ojos a Jadasha hija de Laura y Jake, tan
683
refunfuñón como su padre, no le gusta que su madre
le llame peluchito, dice que está grande ya, y es
cierto él chico sale tan alto como su padre, como no,
si es igual a él en todos los aspectos. A sus hermanas
la cuida igual y las otras niñas del grupo que es
Natasha y Jadasha.
Los varones Samuelle, hijo de Morgan y Logan,
y Nicolás el hermano mellizo de Natasha cuidan de
las niñas al igual que Cameron hijo.
Tanto tiempo ha pasado que el cumpleaños de las
gemelas Danielson se acerca y su madre está de
piernas abiertas pujando a su nuevo hermanito el
cual si es igual a su madre, el pelo los ojos y todo,
llamado Richard Danielson Walker.
Celebrando el cumpleaños número cinco de las
gemelas, ahora sí han pasado cinco años más, con él
bebé Richard que ya tiene tres meses en brazos, su
abuelo se puso muy feliz al saber que ese pequeño
tiene su nombre por cierto abuelo Richard y Amalia
viven en una eterna luna de miel y Cristine ella vive
su vida.
Los niños felices en el patio de la casa de
Melanie y ella muerta de felicidad al ver a toda la
familia reunida, los padres de todos sus amigos, los
hijos de estos y los suyos y su marido igual de guapo
684
a pesar de que le falta poco para los cuarenta, a su
lado.
—Te amo Cameron Danielson Méndez. Me casé
a mi corta edad, tuve nuestro primer hijo a mi Corta
edad, pasamos por tanto y aún así estamos aquí, y te
amo hoy más que ayer, le agradezco a mi padre el
haber hecho aquel acuerdo hace once años, hoy soy
la mujer más feliz de la tierra.
—Yo te amo a ti Melanie Walker Swant de
Danielson, gracias por esta maravillosa familia. Te
amo cada minuto más.
Se besan y justo un mensaje llega al celular de
Cameron.
Número desconocido
“La familia crece, cuídala, esto no empieza aún
pero tampoco termina”
15:36 pm.
Siempre la familia Danielson se siente observada
y es observada.
Continuará…
685
Mi gente llegamos al final de esta primera parte.
Les quiere desde R. D
Mariana
686
Agradecimientos
687
Confieso que no pensé que esta historia la
llegaran a leer, pero aquí estamos gracias a ustedes
al final de ella y esperando por subir la segunda
parte. Todo se lo debo primero a Dios y luego a
ustedes que me han apoyado con sus lecturas,
votos y comentarios.
Gracias a mi madre y a mis amigos, algunos
familiares que saben que escribo que me apoyaron
en esta aventura y me siguen apoyando, mil
gracias.
La historia no esta aun editada, la editaré
cuando tenga tiempo, para corregir las faltas
ortográficas que tiene.
Avisaré por aquí cuando haya a publicar la
segunda parte.
Dejenme sus comentarios ¿Qué piensan?
Sin mas me despido.
Les mando besos, abrazos desde R. D.
Mariana
Mis redes sociales:
Me encuentran como Mariana Familia.
688
Segunda Parte
¡Damas y caballeros!
Mis bellezas.
Lo prometido es deuda y ya ¿qué creen?,
oficialmente, la segunda parte de mi primera bebé,
casada
a mi corta edad, está, oficialmente publicada
La pueden encontrar, bajo el nombre de “Todo
por la familia” y claro está, es más fácil, entrar a
mi perfil y la encontrarán.
Gracias por tanto apoyo, los amo bellezas 😍
689
Table of Contents
Title Page 1
Copyright Information 2
Table of Contents 3
Summary 5
Prólogo 7
Capítulo 1 10
Capítulo 2 23
Capítulo 3 41
Capítulo 11 156
Capítulo 12 168
Capítulo 14 200
Capítulo 15 217
Capítulo 17 245
Capítulo 18 258
Capítulo 19 271
Capítulo 20 284
Capítulo 21 298
690
Capítulo 22 311
Capítulo 23 324
Capítulo 24 338
Capítulo 25 350
Capítulo 26 364
Capítulo 27 378
Capítulo 28 395
Capítulo 29 408
Capítulo 30 420
Capítulo 31 434
Capítulo 32 446
Capítulo 33 458
Capítulo 34 471
Capítulo 35 483
Capítulo 36 495
Capítulo 37 506
Capítulo 38 517
Capítulo 39 529
Capítulo 40 541
Capítulo 41 553
691
Capítulo 42 567
Capítulo 43 580
Capítulo 44 599
Capítulo 45 612
Capítulo 46 628
Capítulo 47 638
Capítulo 48 652
Capítulo 49 665
Epílogo 677
Agradecimientos 687
Segunda Parte 689
692