Goebbels y sus principios propagandísticos*

Leonard W. Doob
Entre los documentos recuperados por las autorida-
des norteamericanas en el Berlin del año 1945, hay cerca
de 6.800 páginas de un manuscrito sin duda dictado por
Leonard Ww. Doob es profesor de Psicologia de la Universidad Goebbels, el ministro de Propaganda, escrito en forma de
de Yale. Actuó como coordinador de Politicas de la Sección
de Ultramnar, en el Office of War Information, durante la Se-
diario que abarca, en diversOs lapsos, el período entre el
gunda Guerra Mundial. Es especialista en el estudio de los 21 de enero de 1942 y el 9 de diciembre de 1943. El texto
problemas de la propaganda política y de la persuasión. mecanograliado a triple espacio en gran tipo gótico
alemán, con amplios mårgenes y sobre grueso papel con
marca de agua, con el resultado de que cada página con-
tenia una media interior a las cien palabras. Cerca de un
30 por ciento de este manuscrito-las partes más intere-
santes y en general las más importantes- ha sido tradu.
cido minuciosamente por Louis P. Lochner (1948). El aná-
lisis en el presente artículo se basa en el cuidadosoexamen
del documento completo, que se encuentra hoy en el Hoo
ver Institute and Library on War, Peace and Revolution,
en la Universidad Stanford.
Es indudable que el texto fue dictado por Gocbbels,
pero no es, necesariamente, un relato íntimo o sincero de
Su vida como individuo o propagandista. Era hombre de-
masiado astuto para exponer su alma ante una secretaria.
Lo que dijo debió de estar motivado por sabe Dios qué
audiencia pública él imaginó que vería un día sus pala-
bras; bien-como ha señalado Speier(1948:500
o a505)
un auténtico
el documento representa tal vez partes de
señor Philip T. Mclean,
.El autor desea expresar su gratítud al microfilmación del manus
ac esta biblioteca, por haber dispuesto la el costo de los mi
t o al Yale Attitude Change Project, por pagarla Universidad de Yale, por
Publieado iginalmenie vun el tiulu Gurbtbels Principles of cFulilms, y al prolesur Carl F. Schreiber, de y frases
más
dii
Piopaganda, en Putbl: Opon Quarlerh, 1950 ayuda en la traducción de algunas de las palabras
ciles
122 123
 diario seleccionado por el mismo o por otros con alguna de noviembre, el dia-
finalidad especifica. Una sección llamada «Ayer, situación extingue la guerra de nervios». El 13
rio afirmó que los ingleses «han estado imaginando que,
militar, con la que comenzaba cada anotación diaria v este dia (11 de noviembre),
habría e n
exactamente en
que Lochner ha omitido acertadamente en su totalidad, sin embargo,
cl Reich un derrumbamiento moral que,
decididamente no fue escrita por Goebbels, ya que el texto futuro incierto». Un
era de lo más objetivo; a menudo, los mismos aconteci.
ellos han aplazado ahora hasta u n
habló por la radio
mientos mencionados en ella volvian a ser citados v co dia más tarde, un funcionario nazi
alemana: «Las fechas clave elegidas por
el enemigo han
mentados en otras partes del texto del mismo día, y alguna nuestro pueblo ha rechazado
este ataque
que otra vez aparecia una pågina en blanco bajo la misma pasado ya, y
general.. D.
rúbrica y con la anotación: «Para insertar después». En el Todo cuanto se supone, e n resumidas
cuentas, es que
manuscrito que poseemos hay pocos detalles personales. la estrategia
el manuscrito refleja, más o m e n o s fielmente,
Parece, en cambio, como si Goebbels quisiera demostrar de Goebbels, y es una orien-
y la táctica propagandisticas mate-
una inquebrantable lealtad a Hitler, exponer las inepti. tación conveniente con respecto a sus voluminosos
tudes de los estados mayores alemanes, jactarse de sus riales propagandísticos. El siempre exageró la importan-
propios logros, su respetabilidad y su devoción a la causa cia de su tarea, sin duda para indicar su propio signiti-
también
nazi, y expresar críticas contra otros nazis rivales, como cado. La verdad de lo que dictó a este respecto es
Goering y Rosenberg. irrelevante mientras los etectos de sus estuerzos no sean
La naturaleza del documento sería un problema muy examinados.
apropiado para un examen de la de Goeb- Debe recordarse en todo momento que el análisis si-
personalidad
guiente se basa en un período muy limitado de la
admi-
bels o la historia del nazismo, pero no discutimos aquí
estos temas. Sólo he centrado aquí la atención en los prin- nistración de Goebbels, un período en el que, en general,
Alemania estaba sufriendo derrotas militares y politicas
cipios que parecen existir bajo los planes y decisiones pro-
pagandisticos plasmados en el manuscrito. ILas compro- tales como las campañas de invierno en Rusia, la retirada
del norte de Africa y la capitulación de Italia. De cuando
baciones pertinentes sugieren, aunque no demuestran,
en cuando, sin embargo, ocurrían acontecimientos
tales
que las palabras del diario corresponden realmente a las
como avances militares temporales vy los triunfos japone-
actividades de la máquina propagandística de Goebbels. ses en Asia, por lo que hay también sugerencias de como
Bastará con un ejemplo típico de esta correspondencia. La
entrada en el diario, con fecha del 11 de noviembre de actuaba Goebbels en plan ganador. El autor ha verificado
no se habla en ab-
fuentes primarias y secundarias desde 1925 hasta todo el
1943, contenía esta observación: «Ya año 1941 y después de 1943, y por consiguiente confia, al
soluto,en la prensa inglesa, de la posibilidad de
un co- menos privadamente, que los principios no quedan limi-
lapso moral del Reich. Muy al contrario, se nos atribuye
un poderio militar muy superior al que disfrutamos en tados al diario.
De los estudios realizados se extraen una serie de prin-
este momento.... El mismo dia, el Berliner Ilhustrierte cipios a partir de los cuales se pretende resumir lo que
Nachtausgabe publicó un editorial que afirmaba que las
jubilosas ilusiones» de los británicos con respecto a un motivaba a Goebbels. Estos principios pueden ser consi-
colapso alemán «se han convertido de pronto en profundo derados como legado intelectual del ministro alemán. Si
el legado ha sido objeto de una deducción fiable, es una
pesimismo; las más intensas esperanzas del enemigo han
quedado aplastadas». Dos días más tarde, el título del cuestión metodológica. Si es válido, es una cuestión psi-
artículo principal en el Voelkischer Beobachter rezaba: «Se cológica. Si, o cuándo, partes del mismo deberían ser uti-
124 125
 sociedad democrática son problemas
Jizadasen una pro
fundos e inquietantes de naturaleza política y ética2 efectuado «una investigación estadistica.. al estilo del
Instituto Gallup», pero dijo que él «no valoraba tales in
vestigaciones porque siempre era emprendidas con un
propósito deliberado en la mente» (M827). Goebbels ten-
propagandistas deben tener acceso a la
1. Los dia, además, a confiar más en su propidsentidoçomun)su
información referente a los acontecimientos y a la intuiciónb suexperiencia,gue en los informes oliciales.
opinión pública ESCuchaba a su madre, decía, porque «ella conoce los sen
timientos del pueblo mejor que tantos expertos que juz-
En teoria, Goebbels sostenía que él y sus asociados gan desde la torre de marfil de la encuesta científica, ya
podian planear y ejecutar propaganda tan sólo con la que en el caso de ella es la voz del propio pueblo la que
constante referencia a la información existente. Al empeo- habla» (56).
rar la situación de Alemania, permitió que un número La SD, al igual que los funcionarios alemanes, facili-
cada vez menor de funcionarios tuviese acesso a toda in- taba información referente a los países ocupados. La in
formación relevante, y en mayo de 1943 persuadió a formación sobre naciones enemigas, aliadas y neutrales
Himmler para que sólo a él le facilitase informes sin ex- era recopilada a partir de espías, conversaciones telelóni-
purgar (373). cas interceptadas y otras fuentes clasilicadas, a partir del
La información básica durante una guerra afecta a los interrogatorio de prisioneros así como de las cartas que
acontecimientos militares|Las anotaciones de cada dia éstos recibian y enviaban, y a partir de manitestaciones
en los medios de comunicación de esas naciones o de las
comenzaban con una descripción separada de la situación deducciones que de ellas se inferían. También aqui,
militar del momento. Todo parece indicar que Gocbbels Gocb
era mantenido informado acerca de los planes militares bels confiaba a menudo en su propio juicio intuitivo, y
rara vez titubeaba en sacar remotas deducciones de un
de Alemania (162).
La información acerca de los alemanes era ubienida simple hilo de evidenciaUna réplica directa delenemigo,
por ejemplo, él la interpretaba inequivocamente Como
mayoritariamente a partir de los datos de la Sicherheits-
Dienst (SD) de la policia secreta. Además, Goebbels depen signodesu propiaelicaciayaUn violento ataque contra mi
ultimo arTICulo» por parTede la agencia de noticias sovi-
dia de sus propias Oficinas de Propaganda del Reich, de
tica «demuestra que nuestra propaganda antibolchevique
luncionarios alemanes, y de contactos escritos o persona-
está minando lentamente los nervios soviéticos» (271).
les con civiles o soldados alemanes. Como ha quedado de
otro lugar,' muy poca de esta intormacion, o
ustrado en
nguna, luc alguna vez reunida y analizada sistemaluca
menie. En una ociasion, Goebbels afirmó que la SD habia
P a l a haccr una Ieleiehea a una cita del libro de Luchner, se in- 2La propaganda debe ser
planeada y ejecutada por una
dica esta
cirunstaneia anadicndo un numero entte parentesis al final sola autoridad
de la i s n a . Si se 1iala de unarila del mamusnto de Standurd,se indica
o n u r o preedidu de la leina M. que hace ieletene ia a la pagina Este principio seguía la linca de la teoria nazi de la
ion de la Bibluotcea (N. deE) centralización autoritaria, y también la del ansia de poder
i e d States Suaegiu Bounbing Surnev, Ihe E
ftects of Bombing que sentia Gocbbels. En el diario subrayó la eficiencia y
OnCuun Alonae, vol 1, US Gorcment Punting Oftiue, VM
ashington la consistencia que podian resultar de semejante política
DC., 1947, p. 42.
126 127
 que una sola autoridad--él-debia.rea
(M383). Pensaba
lizar tres funciones: zonas ocupadas deben estar_subordinadas al mismo.»
a) Emitir todas las directrices de la propaganda. Todo Aunque supuestamente Hitler «semostróde acuerdo
con-
absolutamente y sin reservas», este alto grado de
fragmento de propaganda debia expresar un contenido migo,
unificación no fue conseguido (476). Se registraron con-
potico, Ya politica quedaba bien clara en lasdirectrices
Estas hacian referencia a
todas las 1ases de la guerra v flictos por causa de los planes y materiales de propaganda
todos los acontecimientos que sucedian dentro o fuera de con los siguientes organismos alemanes: el ministerio de
Alemania. Indicaban cuándo las campañas de propa- Asuntos Extranjeros de Ribbentrop
y sus representantes
en varios países, el ministerio de Rosenberg para las
Zo-
comenzar, cuándo debían ser in-
ganda especificas debían nas Ocupadas del Este, el ejército alemán (incluidos
ofi-
tensificadas o atenuadas, y cu£ndo debían terminar. Su-
ciales pertenecientes al Gran Cuartel General de Hitler),
gerían cómo debía ser interpretada y comentada una no- el ministerio de Justicia, y el ministerio de Econonmía re-
ticialo bien si esta debiaserignorada porcompleto.Goeb- gido por Ley. Goebbels se consideraba a sí mismo, junto
bels solocediasu autoridad en la emisión de dircctrices al
propio Hitler, cuya aprobación en asuntos muy importan-
con su ministerio, como un «desfacedor de entuertoS», ya
ir de baja-ya
que siempre que la moral alemana parecía
les siempre era buscada. A veces expresaba satisfacción
fuese entre las dotaciones de los submarinos o entre los
respecto a la manera cómo habian sido puestas en prác- ejércitos del Este-él procuraba facilitar el necesario es
tica esas directrices, pero a menudo habia quejas subrela timulo propagandístico (204).
manera cómo los hombres de Goebbels, u otros, habian El fracaso de Gocbbels en cuanto a conseguir el obje-
levado a cabo una campaña. Por consiguiente, la má- tivo de este prinCipio y sus corolarios es notorio. Al pare-
quina propagandistica nazi estaba sometida a una cons- cer,aquella competencia que él mismo proclamaba no era
lante reorganización (341). universalmente reconocida, ya que personas a las que él
h) Explicar las direcrices de la propaganda a los funcio consideraba como aficionados creían poder eiecutar la ta
narios importantes y mantener su moral. Si nosefacilitaba rea propagandistica tan efectivamente como él. Además,
unaexplicación acerca de la política propagandistica a nisiquiera un régimen totalitario podía borrar rivalida-
aquellos Juneronaios que, lormal o nlormalnmente,cum des y animosidades personales en interés de la cliciencia
plian las directrices, no cabia espera que actuaran con (M3945).
clieaen de beuena gana. Ataves de la maquinaria desu
organizacIon y a través de contactos personales, Goebbels
rataba de revelar la razon de su propaganda a estos su-
3. Las consecuencias propagandísticas de una acción
bordinados v lambién de levantar su moral al hacerles
deben ser consideradas al planificar esta acción
Ostensiblemente objeto de su conlianza. Los grupos COn
los gue se Ieunia variaban en euanto a tamaño desde una
tertulia intima en su casa hasta lo que debio de ser un Goebbels pidió que él, y no el ministro alemán de
Jus-
ticia, fuese puesto al frente de un proceso que tenía lugar
mitin de masas en la Opera Kroll de Berlin (484).
c) en Francia, para que «todo sea captado y ejecutado co-
Supenisar las
uctinidudes de otras agencias que ten- rrectamente desde un punto de vista psicológico»
Ranconsccucnetdas pTopayandisticas. « Yocfeodijo GOeD- (M1747). Persuadió a Hitler, según él escribió, para que
bels a Ftler- que,
cuanduse crca un ministerio de F r o
condujera «la guerra aérea contra Inglaterra [...] según
paganda, lodas las cucstiones afecien la
ganda,las noticias v la culura aemro der Reich vpropa
que a
más bien que militares» (313). Era
en las principios psicológicos
128 129
MORAGAS, Sociologia I
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Alemania era atacada por
PaoPsAalA
absolutoratopare
Cuando alo.que
del «silencio ahe
alegación.
daba a los judios,
la politica
a
dibilidad, inteligenciay los posibles efectos de la
Creoción determinan: si los materiales
cia
improcedente: «Es mejor
algo acerca de la crueldad inglesa en la ofensiva yeldeci
tomar la ofensi
India o en decir
Pro.
9.
comunicación
deben serrcensurados
el P gandísticos
ximo Oriente»
(M3064) y
también
«intensilicar.. estra oebbels no tenía el menor escrúpulo respecto al uso
propaganda antibolchevique» (M3225). uso
evaluar de
de «La politica de las noticias-aseveró-
Goebbels tratótambién
retutación. Si sus propios argument
antemano
la la
de arma
censura.
de guerr
es
propósito es el de hacer la guerra y
eficaciade una vigorosos, peroele as ión» (210). Su decisión se
apoyaba
del enemigo, parecian
podialos
como aparentar mejor posicion debidoa los estuerzos ale en
tres
leraciones pragmáticas (299).
Conside
para retutarle,
Goebbels se abstenía de abrir fuegle Goebbels reconoC1a, primero, que a menudo la
podía deteriorar la credibilidad v
cen.
manes
concentrarse en la difusi
go Sura (de un artíc
Siempre parecia mejor tiem
S u
los críticos extrani un Consideraba que: «en de excitación y tensión, el
discurso de Hitler que replicara eros. hambre de noticias debe ser satisfecho como sea» (40).
A menudo, sin embargo, creia que una refutación odia
Cuando e l isterio de Asuntos Extranjeros censuraba
alemanes o contribuir a inmunizara
proteger a los noticias que él
juzgaba importantes, sequequejaba
de
extranjeros contra una campana enemiga punto de Se
a
«Con esta
clase de politica empujamos al público alemán
lanzada o ya en curso. Los Ilamamientos a la paz de los noticias radiadas extranjeras y enemigas»
a escuchar las
tres aliados estaban, por tanto, previstos, y su réplica al obligado hablar,
(164). Una y otra vez, por tanto,creíase
a
comunicado de la Conferencia de Teherán fue «cáustica e A finales de
insolente; vaciamos cubos de ironía y de irrisión sobre la
aunque hubiese preterido guardarel silencio. de evacuar
1943, por ejemplo,
manifestó que problema
Conferencia» (545). a la gente de
las z o n a s bombardeadas «ha adquirido tanta
En tercer lugar, Goebbels creia necesario revisar la comentado con la claridad que me-
gravedad que debe ser
propia propaganda antes de retutar o ignorar la propa rece» (M6435).
ganda enemiga. Se abstenía de replicar cuando su res La política usual consistia en suprimir materiales
puesta podia desviar la atención respecto a temas propa- considerados como indeseables para el consumo alemán,
simultáneamente en propaganda exte-
gandisticos más importantes, o incluso contrarrestarlos. pero emplearlos
historias referen-
«Notiene objeto absorberse a diario en nuevos tema rior si eran apropiados al respecto. Las
de los soviéticos
rumoresdisamnados por el enemigo», afirmó, puesto que tes a un supuesto canibalismo por parte
del antise eran difundidas en países extranjer0s, pero
semejante ma-
eraesencial concentrarse ene dema central» no aterrori
«las terial estaba proscrito en Alemania para que
mitismo (V46UZJ, e atzo de 1943, permitióque familiares estaban luchando
contra
noticias de victorias bolcheviques... circulen sin obstácu zara a aquellos cuyos
ciertos materiales indesea
los por el mundo», pues quería que Europa « tiemble», cou
OS rusos. A veces, no obstante, fin de mantener su
Oles no eran censurados en el país,
el tin de que «lo antes a
posible se muestre sensata» y coo credibilidad en el extranjero (M2699).
perase contra los rusos (284).
cuandola
La censua rerainvocada, ensegundo lugar,
ormación concerniente a la culminación de un hecho
deseaba conser
Cra insuficiente.En tales casos, Goebbels
de más hechos antes
ara credibilidad o bien disponer militares iod
ue
tormular una directriz. Los pronósticos
139
138
 fensivas,
ofensivas,
consideraba especialmente arriesgados,
ialmenntecimientosperopoltambiticos
c o n s i d e r a c i o n e s
lan.
sobre a c o n t e c i m i e n e r O enemigo,
sino por (véase Principio
(véase
d e l enemigo
políti
comentarios
hasta que pudiera prever con cier. icos nei
taba al
replicar al en
del enemigo
cierta uera
e nlicar
ouesto que cierta.
palabras
palabras propagandís-
ciertas objetivos
del Reich alcanzar sus
(M50
036). iesto queayudarle a alemana
sus
efectos
sobre.A l e m a n i a
Finalmente, Goebbels evaluaba los
posibles efecto
exactitud 8 )p o d í a n a y u d a r l
)Dodían
Por la
manana
publicamos
mentiras

en la p r e n s a
Churchill y des-
de C h u r c h i l l y
comunicar la inlormación. La censura
cuando se creia que el conocimiento del
electos de hechera aplicada

ticos.
colección
u n a c o l e c
diez puntos;
de
esta

anteriores
r e c o p i l a ción
neutral y
d
ió
está
e m u e s t r a que

causando una
ducir unase reacción
Creld indeseable en si misma, o que. a tacamos
1acamos e n la prensa
la Incapacidad»
Incapacidad»
dia pro profunda
impresión.
realidad, el
Almirantede
el Almirante
deseable en ciertas circunstancias, nos en
tacilitaba una
base para
úa la lineaunqu Churchill es, elenenigo Goebbels,Jtal
una directriz
del momento. Goebbels temio En particular,
el miedo» de
la «fuerza por en el Principio l6. «Ese
(M202). tal
afectada a queUe lala nmorz la campañade
alemana pudiera resultar juzgar por la clase adelante
mas
o r o para
nuestra
sobre
religión, lase comose indica
en
discusiones su peso
temas que suprimia: en
realidad
pensaba que
les en país naniles
vale igualmente
taciones por parte de personajes oficiales
Vansittart escribió, e
(342), respecto a
las
Rusia con
Dey propaganda»
trales u ocupados, que fueser hostiles neu
p r o p a g a n d a »
en
Inglaterra o
Alemania, bien
de oficiales enemigos quepudieran suscitar sim
a
toda discusión
en
o a las
cuestiones de fronteras
después de la
significativamente
al
ad. reparaciones
vertencias enemigas en el sentido de que habria Alemania
«contribuye
dentro
încursio derrota de robustecimiento de la moral»
nes aéreas, antes de que empezaran los grandes y al
deos, y más tarde la extensión de los daños
bombar- mantenimiento
causados por
del Reich (M765).
los aviones enemigos; hechos peligrosos que
incluveran
asesinato de oficiales, sabotaje y deserción; las decisiones
o actos infortunados de superiores alemanes; la
disminu debe ser empleada con
ción del poderío alemán por un suceso tal como la fuga 11. La propaganda negra menos
última sea
del general Giraud desde una prisión alemana; un incre blanca cuando esta
preferencia a la indeseables
mento exagerado en la ansiedad efectos
de los alemanes, e indi creible o produzca
cios de que Alemania no apoyaba por completo a sus alia material
entiende aquel
dos del Eje (249). Por propaganda «negra» se audiencia. Goebbels dis-
cuya fuente queda ocultapara la
estaba convencido de que la
frazaba su identidad cuando
asociación de medio blanco con él o con su máquina podia
El dañar a la credibilidad de ésta. En un momento dado, por
10. material de la propaganda enemiga puede ser ejemplo, quiso inducir a los británicos en la idea de que
utilizado en operaciones cuando ayude a disminuir el
debían bombardeos sobre Berlín convencién-
cesar en sus
prestigio de ese enemigo, o preste apoyo al propio
objetivo del propagandista dolos de que estaban desperdiciando sus bombas, y ase
guró que utilizaba corredores de rumores para difundir la
nda 1dea de que la ciudad «para todo fin práctico ya n0 es
Aunque su actitud básica respecto ala propa
enemiga fuese el desprecio) Goebbels tamizabala radl capaz de sustentar vida, es decir, no existe ya» (M6654).
la prensa enemigas, asi como as declaraciones ficiales e presumía que el bulo tendría mejores probabilidades
en busca de materiales con los que operar. Enofensivo
pecto de ser creído si las autoridades alemanas no estaban re-
no
estaba de lacionadas con él. Fue elaborado un plan todavía más
motivado por el deseo, más bien uc
140 141
 r de engañar a loS
para
el que los rusos
complicado
te en alem con
con 12. La propaganda puede ser facilitada por lidere
al secto 194anes e
perihabiodisatna
su
aen elel verano de
ofensIva de 1942. Un
en Verano
do
p r e s l i g i o s o s
plancado
queprimero
ad» de o
habia sido enviadoadro Alrente
alcman,
guidamente a isboa, principio era
de csperar en un
Gocbbels, cuva
influencia deldonde
l u e r e m i t i d o
del Este,
cometer,
ostensiblemente bajo la influon alcoholdebia
delalcob
idcología nazi subrayab; la importancia de la jefatura.
TEra los alemanes se mostraran
de p a r e c e r indiscreciones,
que
habia que pero en de csperar
sumisos
ealidad
eran engaños. Ademas, se decidió colocar un «artícul
gue ante una propaganda que contuviera el nombre de un li-
der
través de internmediari en la
prennsa ca tabaprestigioso. Ostensiblemente,
con trascendentales Goebbels
resultados a partirsiempre con-
de unascon-
de-
mullado..a
bien en la portuguesa» turca
(226), y al
Frankfurter Zeitung se c l a r a c i o n e s de
Hitler, especialmente durante una crisis, y
autorizado»
que más lardele
un articulo «n0
hiz0 imprimir anotaba inariamente que la comunicación habia sido
fue «oficialmente suprimido
y denunciado en tarde
onle. recibida por los alemanes con absoluto entusiasmoo que
trató tambidn
Goebbels
rencia de prensa» (221). bién de incre ha anonadado al enemigo» (506).
de desertores soviéticos intro. simplemente,
mentar el número
mejoras en los campos
de prisioneros de guerra a i oduciendo Los jefes sólolaeran utiles cuando tenian prestigio.
este antiguo truco de la Goebbels empleó propaganda paraconvertiren heroes
serían recluidos; guerra
de que las noticias psicol a hombres como
el
mariscal Kommel. En la intimidad de
gica se basa en la esperanza de atacaba violentamente a los jefes alemanes cuva
mejoras llegasen a los soldados sOviéticos a través d tales Su diario,
ca- conducta pública no era ejemplar, ya que éstos frustraban
nales informales. Por otra parte, excepto alguna cuida. a los alemanes a realizar
la propaganda que apremiaba
dosa alusión de vez en cuando, el diario no hacia referen- a tener una fe inquebrantable en su
mayores sacriticios y
operaciones negras dentro no era abier-
cia a de países enemigos gobierno. Un funcionario nazi incompetente
(M4235). tamente privado de su cargo,
a no ser
que su incompeten-
Goebbels también empleó medidas negras para com- nacionalsocialista»; sólo se
cia se reflejara en «el régimen
batir rumores indeseables dentro del Reich. Pensaba que relevado debido
anunciaba que había sido temporalmente
un desmentido olicial a través de un medio blanco a enfermedad (224).
sólo
podia dar consistencia alos rumores, en tanto que lo que
él denominaba propaganda «de viva voz» Contra éstos po-
dia lograr los efectos
apetecidos. Este método fue em cuidadosamente
pleado para disipar los temores alemanes de 13. La propaganda debe estar
de que se
que «en caso sincronizada
produzcan incursiones más serias, el gobierno
Seria el primero en huir» de
Berlín (421). En todo mo- al problematáctico
Goebbels siempre se enfrentaba
mento los ciudadanos fieles al estado deben estar provis
a
mavor eficacia. Pen-
tos de los
argumentos necesarios para combatir el derro aesincronizarsu propaganda conla eran necesarias, y
saba que la agilidad y la Hlexibilidad
ismo durante las conversaciones en sus lugares de lraba poseer en todo
momento la
y en las calles»
(401). A veces, sin embargo, los ru que los propagandistas debían
de antemano los etectos psicologt-
eran oficialmente atacados cuando, en opinión de ude b- aeuitau de «careular tres principios:
Dels, todos los COS»204), Segun parece,
actuaban
mente de u
hechos estaban completa e inequivoe
comunicactón cebelegar a la andie1CIg anles
parte (518). a dirige la primera
la propaganda competidora«Quien
que
143
142
 Canntstins
Pno pd Gawd
palabra al
mundo siempre ene razón», afirr debe
etiquetar los ac
Ilanamente(183). Constantemente,
buscaba
emisión de noticias por parte de su organización
oebbo Goebbellsa
elerar
14.
las

La
14rsOnas
propaganda
con trases o consign
ntecimientos y
distintas
La
dida de Kiev fue reconocida con la mayor celeridad pér- otra vezGocbbels subray:
ble «para que no que
tuviéramos andar
renqueandodposi.
posi es yUna y ignas
s e sy Consig

para caracterizar hechos.

intensamente tra-
ai Aprincipios de
el anuncio del enemigo» (M6061). ras jemplo, iniciouna campaña cuya de
económica, social yfinalidad
1942,
por
b) Una campaña propagandistuca debe comer de
señalar inquietud
momento óplino. Goebbels nunca indicó, explicita en el jaRretaña. En seguida adoptó el politica
término s
plicitamente, cómo decidia que el tiempo de com o im- galopante para describir tal schleichende
situación,
Krise-crisis
una campaña o anunciar una noticia era el adecuado la empleó
«con la mayor
amplitud posible en la
cía manifestaciones tales como la de: Nos hemos abst alemana», tanto en su paisdominado
iero(M762). Su pensamiento.estaba
p r o p a g a n d . como en el
por
extran-
una
nido por muy largo tiempo» de utilizar un dirigente ind.
iero
que, como titere de los alemanes, arrastrase a S ntica caza de palabras, en
su
diari0-privada o'se
una guerra contra Gran Bretaña, «por la simple razón iprivadamenteresumia su propia propaganda o la del
e
que las cosas todavía no han avanzado lo suficiente en la enemigo con un liché verbal, incluso cuando no preten-
India» (107). En una ocasión afirmó que la contrapropa- dia emplear la frase en cuestión en su repertorio. Admitía
ganda frente a las alegaciones enemigas no debia ser de. aue la experiencia de un suceso probablemente había de
morada por mucho tiempo: «No conviene dejar que estos
ser más
que una descripción verbal del mismo,
efectiva
informes mentirosos calen demasiado hondo» (M2430). pero
también reconoCia que las alabras podian interpo
c) Un tema propagandistico debe y los acontecimienos,
yque la
ser repetido, pero
no nerse entre las personas
más allá del punto en que disminuya su efectividad. Por un reacción de la gente ante estos ultimos podia verse poten-
lado,Goebbes creía que la propaganda debia ser repetida cialmente alectada por las primeras (M1385). Paraconse-
hasta ser aprendida por compreto y que, uneriormente, guirtales electos, Irases y consignas debian poseerlas ca-
era necesaria mas repetición para consolidar el aprendi- racteristicas siguientes:
zaje. Tales repeliciones se realizabana lo largo del tiempo a) Deben suscilar las respuestas deseadas que la au-
e l mismo tema era mencionado dia tras diaasi como palabras podian provocar
las
en el plazo de un solo día.
diencia posee previamente. Si tarea de Gocbbels consistía,
Una campaña antijudia, por estas respuestas, entonces la
ejemplo, continuaba durante semanas, en cuyo tiempo Simplemente en vineular concisuces0 aquclaspAaDva
aalrededor del 70 al 80 por ciento de nuestras adquirir su especial signilicad0.
emisiones que más tarde habían de
por radio están dedicadas a ella» (366). Por otro lado, la Cuando fracasó la incursión británica de St. Nazaire en
repetición podia que habia sIdo
innecesaria e incluso marzo de 1942, Gocbbels decidió explicar habian estado
ser indeseable.
innecesariacuando el tema llegaba a ser aburrido yErd de Crectuada para apaciguar a los rusos, que
jaba de impresionar, conmo ocurrIO en relacion cOn alguna acclon
tos de ToS 10s a" Agiendo que sus aliados emprendieran
submarmnos alemanes. A veces, ademas, bomb de «Ofensiva Maisky",
y
platillos al principiar la campana, aunque a r . El ataque recibió el apodoLondres. A
Ombre del enviado soviético en veces, las hn
deseabies
cologicamente. podian hacer que la propaganda resultard cias podían hablar por sí mismas en el sentido de
Ina
demasiado «chillona» uc
uscitaban las respuestas deseadas sin adiclon u
la
credibilidad (M6343)
v, por consiguiente, mermasen su
Cuqueta verbal. Una victoria militar, por ejen deseaDa
Gocebbels
dda para los alemanes, cuando
144 45
 la
al pensar e n expresió
sintieran
isfechos. Sin
satislechos. in eemba
go, una ma- entu
s e n f u r e c í a
que uno de
que
de los nuestros tan
uno «"incursiones d
Stúpids de
que
éstos se
voria de las
noticias no se explicaban por sí sol
oeb.
las respuestas que eél desea
do
yGoeb- Baedeker
pó
durante
una
ea de Dprensa
conferenci de
conterencia idamente
extranjera
propio esfuer:
embargo, seaba a
añadirles acurñó interferia
de que erzo pDarra
bels habia es. Sin
verbales. Sin
a. para
al azar calif
ya
de s i m b o l o s las británicas de
través del
uso
más reglamentados podia
no.
no- las M2435),
incursiones
ataques contra
ticias y
comentarios
seables, e incluso.
incluso en na producir car a
las
tos
umentos c
instituciones ienestar
culturales
ultura e Contra
del
inesperadas
e indeseables,
oca- m M2301). «Hlav ciertas palabras.-añadió-an pú-
acciones
acciones
discurso de Hitle fue mal
interpretado (M4677)
). blicdeheríamos huir
como lo hace el
diablo ante eltelas
las
sión un
facilidad
b) Deben poder ser
anrenataaS_COn «Ha
de ales de re ellas
el por ejemplo, las deagua
se cuentan, por
entre

e j e m n l o e l a g u a
de
lo contrario no roe y "sa-
1utilizar el blanco y el negro,
ifestó G
manifestó
oebholesulta
Goebbels co
resulta endita,
ben
y
a s e s i n a t o " »
(93).
para la gente», botaje
criticando (M271) E.res
convincente
a un lilm que estaba
pecto a todos los medios c
lo
cipio de simplificación aplicaba
el
el fin de facilitar aprendizaje. Las masas eran lo impor. propaganda dirigida a la retaguardia debe evita
No todas las «mentiras»ene.
tante, y no los intelectuales. 15. La alsas esperanzas que puedan quedar
migas eran refutadas, y era mejor limitar el contraataaque el
suscitar
los acontecimientos futuros
La propaganda frustradas por
a un solo «ejemplo pedagogico» (M2084).
u n a voluntad de
podia ser apoyada, ademas, por apren- estaba bien claro que el anuncio de
der. El llamamiento de Cripps a
los trabajadores europeos Para Goebbels,
a lo largo de lineas
militares o politicas po-
sojuzgados por los alemanes, para que disminuyeran su éxito alemán
etectos beneficiosos inmediatos desde su
ritmo de trabajo, fue ignorado: Es ditícil aplicar una con-
« dia tener ciertos
La contianza de los alemanes y la ansiedad
tra-consigna a semejante consigna, ya que la consigna de punto de vista.
incrementadas. Tales tácticas, sin
"trabajad despacio" siempre es mucho más efectiva que del enemigo podían s e r
que si el éxito
la de "trabajad con rapidez"» (107). embargo, e r a n demasiado arriesgadas, yasentirían abru-
se convertía en tracaso,
los alemanes se
c) Deben ser utilizadas una y otra vez, pero sólo en las
mados y el enemigo se fortalecería.
Por otra parte, su cre-
siluacionesapropiadas. Aquí, Goebbels deseaba explotar
razón mostro
loaprendido en cosas ya ocurridas; la reacciones apren dibilidad quedaría muy afectada, y por esta
VIva indignación cuando, después
de la retirada del ejër-
didas por la gente frente a los simbolos verbales queria Cito alemán, el enemigo le adjudicó«noticias prematuras
translerirlas,acil y elicientemente, a nuevos acontec tales
de victorias» Salerno. En realidad, alegó,
mientos. Criticaba a la propaganda británica
porque «sus acerca en
Stogans cambian cada momento y, por tanto, les aluncios procedieron de generales alemanes (451).
a
talta parecian proceder
de
auténtica garra» (M1812). El contexto enel que se proau A menudo, las falsas esperanzas
vand
de pensamiento
Cian las reacciones de la, gente era también
impoante Spropios alemanes, en u n a forma contemplaban
la
ana
rohibo utilizar la palabra Führer en la prensa alci que daba espontáneamente cuando
se
alemanes,
cuando es aplicada a Quisling-declaró Goebbels-, pues posibilidad de ofensiva de los ejércitos
no considero justo que se aplique el término Führer a
una da oCuando
victoria aislada, Ouacon-
i recibían noticias de una
tér- derrotado por
Euna
minos
persona que no sea el propio Führer. Hay ciertos imaginaban que el enemigo podia ser
Gocbbels preve
que debemos reservarnos tan sólo para nosoulo mientos políticos. Por consiguiente,
entre ellos,
también, la palabra "Reich"'» (66). nía a impedia que
e
que
impedia
a) Deben ser a nudocontra las «falsas lusiones» ex-
ciertas victorias
estruendo
prueba de efectos bumerang o fueran pregonadas cor un
146 147
 se juzgaba aue 1
a
presentaban
especial vulne bilidad a la
estrategi
momentos, lemanes
otros
cesivo. En pretendía lanz los
propaganda pacifista. Temia, por
del enemigo a los ejér ejemplo, que la npropa-
bietivos militares0S ejer
p r o p a g a n d í s t i c a
itos alemanes
hacia unos nda americana pudiera estar
dirigida
«no... contra el
consiguieran (118). nadie eblo alemán, sino contra. el nazismos(14Contra
podía esperar que duda
pueblo.
demos congratul ratularnos de
que nuestroS
los Catorce Puntos de Wilson» (47). enemigos no
p o d e
ultaba necesario
tengan
en cuando,
De vvez ansiedad de los alemanes en lo
incrementar el
16. La propaganda en la retaguardia debe crear un nivel nivel
de referente a un
óptimo de ansiedad
acontecimiento específico. El 24 de febrero de 1942, des-
acon de la primera y desastrosa campaña invernal en Ru-
pués
sia, Goebbels «dio órdenes a la prensa alemana para que
Para Goebbels,la ansiedad era una espada de doble tase la situación en el Este de un modo favorable,
filo, ya que un exceso de ansiedad podia producirn
No deseaba suscitar falsas
desmoralizacion N Una escasez en este aspectopodia no
xcesivamente optimista»,
conducir a la complacencia y a lainactividad. Por toanto,
no
e
peranzas, pero,
lo que tal vez fuera todavía más impor-
tante, no quería que los alemanes «dejaran de preocu
seintentaba constantemente conseguir un equilibrio en. de la situación en el Este» (99).
tre ambos extremos, estrategia que puede quedar red narse por completo acerca
cida a dos principios (M6162). b) Lapronaganda debedisminuir la ansiedgd (excepto
a) La propaganda debe reforzar la ansiedad con res. las consecuencias de la derrota) que sea exce
la referente a
pecto a las consecuencias de la derrola. Los objetivos béli. sivay que no pueda ser rediucida por la propia gente.Como
bombardeoS aéreos elevaban en exceso la
cosdelenemigoeran el principal materialempreadopara es lógico, los constituían una situación
mantener la ansiedad alemana en un punto agiuo. «EI ansiedad de los alemanes, pero un control propa-
puebloalemán debeestar convencido-lal como por otra sobre la cual Goebbels no podía ejercer
situaciones que implicaban también
parte bien pregonan los hechos-de que esta guerra ame- gandistico. En otras
aza sus vidas y sus posibilidades nacionales de desarro- una dosis de
ansiedad desmoralizante, en cambio, podía
cosas desde un prisma
llo, y debe combatir con todas sus fuerzas» (147). Pero por mostrarse más activo. «Para ver las
militar en Túnez dejó de
si acaso la campaña de «la fuerza por el miedo» fallaba, realista» cuando la situación
alemanas eran descritas
no se perdia la menor oportunidad de atacar aquellos tér ofrecer esperanzas, las bajas
mismas,
como resultado de las
minos en que el enemigo planteaba la paz que como «no de tal índole que,
pudieran la victoria (tinal) hayanque
parecer benignos. Las campañas antibolcheviques no sólo nuestras posibilidades para cambio, trató de utilizar el
pretendian endurecer la resistencia alemana, sin0 que dado mermadas» (M4542). En te-
llamada «estrategia del
también irataban de conseguir la cooperación de todos l0s mismo principio al r e v é s l a
arrojando sobre
ciudades
in-
paises neulrales y ocupados. Por una parte, Goebbels ira* TOr-contra sus enemigos,
«con fotos de
los daños causados por los
taba de convencerse a sí mismo, en su diario, de que los 5Csas octavillas del
Rostock, y bajo ellas discurso
el
alemanes no volverían a dejarse engañar-como lo na gleses e n Luebeck y la inminencia
de ata"
bian sido, según su opinión, en la Primera Guerra Mun- ruhrer en el Reichstag, anunciando
aalpor las condiciones impuestas por el enemigo paia ques de represalia» (193).
dcordar la paz, pues «conocen muy a fondo a susenemig
a
y saben lo que les cabe esperar si
llegan a entreea
ellos» (M6684). Por otra parte, estaba muy seguro ae 9
149
148
17. La propaganda
disminuir el impacto de la
dirigida a la
retaguardia debe
dla
frustración la técnica principal consistió en desplazar la agresividad
alemana hacia algún grupo marginal (M6220).
Era importante evitar que los alemanes Los obietivos favoritos del odio eran los «bolchevi
se si
frustradosy para elo, por ejemplo, cabia ieran ques y los judios. Goebbels leinquietaban
A los informes
conurafalsas esperanzas. Si alguna decencióninmunizarlo segunlos cuales el temor a los bolcheviques por parte de
evitada, Goebbels procuraba no podíz er
guiendo dos principios:
isminuir s impacto si-
las grandes masas de los pueblos europeos se ha debilitado
tanto» (M4572) o los de que «ciertos grupos de alema-
nes, en especial los intelectuales, expresan la idea de que
al Las frustraciones tinevitables deben ser previstas al el bolchevismo no es tan malo como lo pintan los nazis»
Darecer, elrazonamiento de Goebbels
cons1stia enane Al
frustración podía resultar menos decepcionante si se una (335). La propaganda antisemita solia ir combinada con
el medidas activas contra los judiíos en Alemania o en los
minaba el elemento de sorpresa o choque.
Gradualment
se le dio al pueblo aleman
«alguna impresión de que el países ocupados. La agresión alemana iba dirigida tam-
final está a la vista» a medida que la lucha en Túnez to- bién contra los pilotos americanos y británicos, pero en
caba a su fin (352). Asimismo, recibía de antemano indi conjunto Estados Unidos y Gran Bretaña no excitaban la
ira de Goebbels, por lo menos en el diario (147).
caciones cada vez que se preparaba una reducción en las En los países enemigos, Goebbels manifestaba una
raciones alimenticias, aunque de todos modos el anuncio fuerte tendencia a emplear la táctica de «introducir cu-
final siempre le desazonaba (M1484).
ñas», ya que procuraba fomentar suspicacias, desconfian-
b) Las frustraciones inevitables deben ser planteadas en zas y antipatías enure sus enemigos y entre los grupos de
perspecttva. Goebbels consideraba como una desus pri idea de que los fun-
unpaís en particular. Asi, asumio la
cipales funciones la de dar a los alemanes lo que él llama damentos de la hostilidad entre naciones o dentro de una
Kriegsüberblick, es decir, una panorámica general de la nación existían ya por razones históricas, o como resul-
en di-
tado de los reveses de la guerra. Su tarea consistía
guerra. Creía que, de lo contrario, éstos perderían la con-
fianza en su régimen y en él mismo, y dejarían de com rigir la agresiónpor canales conflictivos (46).
prender por qué se les obligaba a hacer tantos sacrificios
(M4975).
19. La propaganda no debe perseguir respuestas
inmediatas; más bien debe ofrecer alguna forma de
acción o de diversión, o ambas cosas
La propaganda debe facilitar el desplazamiento de
18.
la agresión, especificando los objetivos para el odio Encasitodosu pensamiento sobre la estrategia y los
objetivos propagandisticos, Goebbelsadoptóla distinción
Goebbels tuvo pocas satisfacciones positivas que otre entre lo que era denominado Haltung (porte, conducta,
cer a los alemanes durante el período de adversidades comportamiento observable) y Stimmung (sentimiento,
abarcado por el diario. Citaba, naturalmente, las peraiu espíritu, talante)."Tras un duro bombardeo de una ciudad
cuando
enemigas, siempre que leposible y mpre y lo en
era
4. Lochner ha ignorado la distinción y, en general,
ha traducido
TOs alemanes no se mostraran confiados en exceso. ambos términos como «moral», palabra que a veces
Goebbels utilizaba
una ocasión alabó a los
alemanes por haber resistid también de manera un tanto ambigua.
enemigo durante tanto tiempo. En general, parece Se
151
150
 de la población era
que el Haltu1ng
alemana, solía asegurar
Stim7mung
su bajo. El deseabave
era menzar los grandes bombardeos aéreos y de incremen-
excelente, pero que
de la moral tan favorables co tarse las dificultades de luchar en dos frentes. Viose enton-
a estos
componentes
fuese posible. El Stimnung loconsideraba mucho más VO ces reducido, no al silencio, pero sí, ciertamente, a la de-
ser fácilmente afectado por la pron sesperación. Al finalizar los combates en Túnez, se vio
látil, ya que podía
a c o n t e c i m i e n t o s , y cabia mejorarlo simnle. obligado a llegar a la conclusión de que los siguientes te
ganda y los forma de distracción v mas propagandisticos dejaban ya de causar impresión:
mente ofreciendo al pueblo alguna
Haltung habia de ser mantenido a cuai «Nuestros soldados han escrito alli un himno de heroísmo
relajamiento. El
de lo contrario el régimen nazi per- que ha de quedar enteramente grabado en las páginas de
quier precio, ya que a rendirse. En la historia alemana; han retrasado los acontecimientos
dería su apoyo y la gente estaria dispuesta durante medio año, y con ello nos han permitido comple
resumen, los
alemanes eran obligados a conservar las apa-
tar la construcción del Muro del Atlántico y prepararnos
en el estuerzo bélico, cua-
riencias exteriores y a cooperar en Europa de tal modo que no cabe ni hablar de invasión»
sus sentimientos internos. Al aumen.
lesquiera que fuesen de bombar.
(360). Trató de desviar a los alemanes hacia otra campaña
el número de derrotas y antibolchevique, pero también esto resultó insuficiente.
a r progresivamente
c o n v e n c e r s e de que el Stimmung
deos, Goebbels llegó a Lo que los alemanes necesitaban, en realidad, era «algu-
había de ser ignorado casi por completo
(M6452). nas victorias en el Este que poder ). Ade-
difundir» (M44
Goebbels reconocía claramente la impotencia de su más, las bajas alemanas en Rusia
abrumaban a
Goebbels.
básicos del
propaganda en seis situaciones. LoS impulsos Siempre que le era posible, procuraba las no-
compensar
alectados apreciablemente por ticias de reveses en un sector con informes de victorias en
sexoy el hambre no eran
incursiones aéreas creaban problemas otros, pero en 1943 llegó el momento en que ya no tenía,
lapropaganda. Las simplemente, noticias favorables que emplear como dis- Umo
la incomodidad hasta la muerte y que no
que iban desde tracción. El Stimmung estaba sentenciado, e incluso el
no podía aumentar
podian ser soslayados. La propaganda
significativamente la producción industrial. Losimpulsos propio Haltung le preocupaba: «Por el momento, no es
mucho lo que podemos cambiar a través de la propa
religiosos de muchos alemanes no podían ser alterados,
la guerra. La onosición abierta de ganda; debemos conseguir de nuevo una gran victoria en
por lo menos durante en los países ocu-
alguna parte» (M3253). Afortunadamente, esta victoria y
algunos alemanes y de las poblaciones el triunlo delinitivo nunca llegaron.
pados requeria una acción vigorosa, no nalabrasingenio
Ale- Concucla
situación militar de
sas. Finalmente, ladeslavorable
mania se estaba convirtiendo en un hecho innegable.
Cuando la propaganda y la censura no podian ser electi-
uno de sus
vas, Gocbbels abuogaba por la acción o bien, en
él
cargos oficiales (por ejemplo, el de Gauleiter de Berlin),
mismo producía esta accion. La propaganda diversiva la
consideraba de segundo rango (M3508).
Considerese su propaganda con respecto a las derro
lasmilitares. Durante un tiempo, pudo describirlas como
alortunadas evacuaciones» (61), v por algun tiempo in-
cluso pudo ocultar sus implicaciones. pero al final resul-
laron demasiado aparenies, en especial despues de co
153
152