2 Sin Embargo, Mueres 1
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Habilidad.
Las condiciones para despertar una habilidad varían de una persona a otra:
Pero, tu mueres
Volví a vomitar pero no salió nada excepto un sollozo. "¡Joder!"
Así que, para mejorarlo todo, yo explicaría más. "Pensé que me volvería loco por
mi envidia y mis celos. Entonces la Torre me lanzó una habilidad como si me
dijera que comiera esto y me perdiera".
¡No es como si pudiera decir eso! Como si hubiera alguna manera de contarle a
alguien sobre esto. Sólo yo me reiría y me sentiría miserable por mi
desafortunada y miserable vida.
Así que bebí hasta la saciedad y terminé tambaleándome en un callejón remoto.
"¿Podría quedarme dormido en el suelo así? Ah... Esto es triste". Qué mala
suerte. Me contuve las lágrimas.
Un débil grito se elevó en el aire de la noche. Vino del otro lado del callejón.
Esa voz era demasiado real para confundirla con una alucinación de borracho.
Aunque no podía saber quién era, comprendí que lo que estaba sucediendo era
una amenaza para la vida.
Esto fue...
"Emperador de la llama".
"No sirve de nada. Nadie está cerca ..." dijo una voz masculina.
"¿Es la Inmunidad a los Diez Mil Venenos..? ¡Imposible! No deberías tener tal
habilidad."
"Por supuesto que no." El hombre se rió, con sus altibajos resonando
suavemente.
Me quedé boquiabierto.
"¡Por favor, esperen un momento! Piénsalo. ¡Si nos unimos, podemos fácilmente
despejar hasta el piso 40! ¡Podríamos incluso llegar al piso 50 en un año! ¡Eso
es! Es el lugar al que la humanidad no ha llegado todavía, pero si somos
nosotros dos..."
Atónito, pensé: "¿No estaban esos dos... saliendo?" El Internet lo dijo. Incluso
las emisoras hablaron del amor apasionado de los dos héroes. Pero la escena
frente a mí no tenía ningún elemento de romance. Era difícil incluso bromear
sobre que era una pelea de amantes.
Intención asesina
Sólo vi a un hombre que quería asesinar y a una mujer que se aferraba a la vida.
"¿Hablar? Ah, hablar. Está bien. Es lo más cortés que se puede hacer."
El Emperador de la Llama se apoderó del pescuezo de la Santa.
"Yo haré las preguntas. Sólo respóndeme. Ah, no necesitas hablar. Simplemente
asiente con la cabeza para responder. ¿De acuerdo?"
El sonido de su lucha llegó a mis oídos, pero no pasó nada. Era imposible para
la Santa, que era bien conocida como una de las mejores curanderas, ganar
físicamente contra el Emperador de la Llama.
"A decir verdad, sólo tengo una pregunta para usted."
"Quien le ordenó que me matara. Respóndeme a eso. ¿Fue la bruja del Dragón
Negro?"
"Puede que no tenga la inmunidad de Diez Mil Venenos, pero tengo la habilidad
de detectar mentiras. Si me mientes y lo descubro, quemaré hasta tus huesos en
cenizas".
Y no se movió más.
Un héroe de la humanidad murió justo delante de mí. Fue un error decir que
simplemente murió. Así es... su muerte no fue normal.
La Santa era ahora sólo un cadáver quemado. Aún así, las llamas no se
detuvieron. El Emperador de la Llama no se detuvo allí. Quemó todo hasta que
su carne y sus huesos se derritieron. Lo hizo con una cara sin emociones de
principio a fin.
Crunch-
Tal vez era un fragmento de vidrio de una botella de soju destrozada. Tal vez fue
llevado por el viento desde otro lugar... No sabía cómo llegó allí. Más bien, no
había necesidad de saberlo.
"Creí que me había encargado de todas las ratas de la zona. Supongo que una
se resbaló." Sus ojos encontraron los míos.
Corrí.
Corrí sin mirar atrás. Esos eran los ojos de un asesino. No alguien que mató a
uno o dos, sino alguien que mató a decenas. Tal vez incluso más. Sus ojos eran
como un maldito demonio.
"P-por favor, déjame vivir! ¡Por favor!" Le supliqué. Igual que la Santa.
"¡No vi nada!"
Estaba doblando las rodillas para mirarme. "Wow. ¿Así que me dices que me
viste e incluso me reconociste? Es como si lo hubieras visto todo.
Probablemente también lo sepas todo".
"Por favor..."
"¿Sigues diciéndome que no sabes nada pero que desde allí nos vigilas a mí y a
la Santa? ¿En silencio, como una maldita rata? Oye, ahora. Hyung-ssi, tu
historia es muy fiable. Si fuera un poco más retrasado, probablemente te habría
creído."
Lo quemó todo, sin dejar nada atrás. Ni siquiera el famoso logo de la marca. Ni
siquiera los zapatos que había usado durante tanto tiempo. Ni siquiera mis
piernas, que fueron parte de mí durante más tiempo.
Todo desapareció.
Era un loco. No tenía sentido hablar con un loco. No le importaba lo que los
demás pensaran, y creía firmemente que siempre tenía razón. Era un maldito
psicópata que mataría a gente inocente sin razón.
Como alguien que representaba el rango 1. Como persona, ¿cómo pudo hacer
esto?
¿Me estás diciendo que estaba obsesionado con alguien como él?
Mucha gente, incluyéndome a mí, creía que era un héroe. Nos gustaba por ser
franco y honesto. Lo alabábamos como alguien con una personalidad
refrescante. ¿Este maldito lunático?
"Y-yo..." Me tropecé.
"¿Qué?" preguntó.
"Usted le dijo a la Santa que se puede saber cuando alguien miente. Y que ella
debería responder sinceramente."
"Así que pruébame con esa habilidad. Pónganme a prueba para ver si mis
palabras son una mentira o no. El Emperador de la Llama... Sucede que,
casualmente, paso por aquí. ¡Por favor, cree en mí!"
(NT: Hyung-ssi es un honor coreano usado por los hombres más jóvenes cuando
hablan con hombres mayores. Hyung se traduce directamente como "hermano
mayor", lo que no suena tan genial. -ssi se añade al final cuando la persona es
un extraño).