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CONCEPTOS BÁSICOS GASTROENTERITIS.DESHIDRATACIÓN Y FLUIDOTERAPIA.

Es un síndrome clínico de inicio brusco y curso autolimitado, normalmente dura menos de dos
semanas, aunque a veces puede tener alguno de los síntomas un curso más prolongado.

Su mecanismo de trasmisión es feco-oral.

Suele cursar con vómitos, deposiciones líquidas con o sin moco o sangre, y a veces, fiebre.

Según la fisiopatología las GEA se pueden clasificar como GEA no enteroinvasivas y como
enteroinvasivas.

GEA no enteroinvasiva: en este tipo de gastroenteritis la afectación es del intestino delgado. La


patogenia consiste en destrucción de vellosidades, alteraciones enzimáticas dando lugar al
paso de agua hacia el intestino, lo que explica parte de sus manifestaciones.
Los causantes más frecuentes son algunas bacterias, rotavirus, giardia lamblia. El rotavirus es
el agente causante de diarrea más frecuente en países desarrollados.
La clínica se caracteriza por diarrea acuosa, cursan con más vómitos que otro tipo de GEA y
producen dolor abdominal generalizado.
GEA enteroinvasiva: afectación del colon de forma preferente. En esta infección se produce
inflamación y disminución de la absorción de líquidos. Los gérmenes más frecuentes son E.
coli, salmonella, campylobacter, shigella, entamoeba hystolitica. En nuestro medio lo más
frecuente es la infección por campylobacter.
Suelen cursar con diarrea con sangre y moco y con mayor frecuencia dan lugar a fiebre alta y
dolor cólico intenso.

DIAGNÓSTICO

Fundamentalmente clínico. Es básico una anamnesis correcta y exploración. A la vez nos


servirá tanto para llegar al diagnóstico de gastroenteritis y hacer diagnóstico diferencial pero
también para obtener una impresión general del niño. Las gastroenteritis pueden ser cuadros
leves (la mayoría) pero también pueden causar un grado importante de deshidratación,
trastornos hidroelectrolíticos o cursar como un cuadro séptico.

Pruebas complementarias disponibles, pero que no suelen utilizar de rutina son el examen en
fresco de las heces (sirve para visualizar leucocitos y hematíes en las heces) y la tinción de
Gram, por ejemplo el campylobacter tiene un aspecto curvado característico.
El coprocultivo tiene su indicación en pacientes a los que se les va a administrar tratamiento
antibiótico, generalmente hospitalizados y con afectación del estado general o enfermedad de
base o en menores de 3 meses, o por cuestiones epidemiológicas. Por esto último también
puede solicitarse un test de antígenos virales en heces, útiles para diagnosticar GEA víricas.
En ciertos pacientes hay que solicitar un test para la toxina de clostridium difficile.

TRATAMIENTO

El tratamiento en las GEA se basa fundamentalmente en evitar o tratar la deshidratación.


En deshidrataciones leves o leves-moderadas el objetivo es reanudar la alimentación lo más
precozmente posible y ofrecer una solución rehidratante oral frecuentemente.

Entre los antieméticos se recomienda el ondansetrón sólo en pacientes con predominio de


vómitos e intolerancia oral. No se debe usar de rutina en todas las GEA.

Otros antieméticos como la metroclopramida pueden tener efectos secundarios y actualmente


no están indicados.

Los probióticos sobre todo Lactobacillus GG y sacharomyces boulardi pueden acortar la diarrea
de forma breve, 1-2 días.

Los suplementos de zinc están indicados solo en países en vías de desarrollo.

Los antibióticos solo están indicados en diarrea grave de etiología bacteriana demostrada:
GEA por shigella, por salmonella, GEA que precise hospitalización en paciente con enfermedad
de base, y en GEA por campylobacter, solo si la sintomatología es importante cuando se recibe
el cultivo.

INGRESO HOSPITALARIO

La mayoría de pacientes pueden ser tratados de forma ambulatoria, los ingresos están
indicados en los siguientes casos:

-Deshidratación grave o moderada que no se consigue tolerancia oral

-GEA grave con aspecto tóxico o alteración analítica

-Intolerancia oral, vómitos incoercibles

-Síntomas neurológicos, convulsiones, letargia

-GEA significativa en paciente inmunodeprimido o menores de 3 meses.

DESHIDRATACIÓN. FLUIDOTERAPIA

Es un trastorno metabólico caracterizado por déficit de agua y de electrolitos en el organismo,


aunque puede deberse a un aumento de las pérdidas o a una disminución de la ingesta de
agua y electrolitos, y a veces, pueden coexistir los dos motivos, principalmente nos
ocuparemos del aumento de las pérdidas relacionada con la gastroenteritis, en este tema.

El aumento de las pérdidas se debe principalmente a diarrea, sobre todo cuando afecta
fundamentalmente a intestino delgado y suelen contribuir, la presencia de vómitos, la
anorexia debida a la propia infección y la edad del paciente.
Para calcular el grado de deshidratación, y así valorar la gravedad y el tratamiento, el mejor
método es la pérdida de peso. Es frecuente que se desconozca el peso previo por lo que
existen tablas y escalas que nos ayudan a calcularlo.

Una vez calculado el grado de deshidratación y por lo tanto el déficit, podremos calcular la
cantidad de líquido que hace falta AÑADIR a las necesidades basales.

Otro aspecto a considerar es qué líquido prescribir para el tratamiento de la deshidratación.


Para ello es importante diagnosticar el tipo de deshidratación. Para ello hay dos caminos, la
clínica, diferente según el tipo de deshidratación y el resultado de la analítica. Solo está
indicado realizar analítica en las deshidrataciones moderadas-graves.

Importante tener en cuenta que en general, las deshidrataciones hipo e iso- natrémicas cursan
con clínica de deshidratación extracelular, es decir, ojos hundidos, fontanela deprimida y en
casos graves, datos de shock hipovolémico. Las deshidrataciones hipernatrémicas manifiestan
clínica de deshidratación intracelular, ésto es, sed intensa, irritabilidad, fiebre y menor clínica
de pérdida hipovolémica. En casos graves, convulsiones.

Frecuentemente la deshidratación moderada grave se acompaña de alteraciones del equilibrio


ácido base, que también hay que tener en cuenta y corregir.
Hiponatremia Normonatremia Hipernatremia

Hipotónica Isotónica Hipertónica

(10 %) (65 %) (25 %)

Na < 130 Na 130-150 Na > 150

Osmolaridad < 280 280-310 > 310

Tipo Extracelular Extracelular Intracelular

Clínica Hipovolemia Hipovolemia Neurológica

Sed + ++ +++

Pliegue ++ + No

Shock +++ ++ +

Na corporal Disminuido Disminuido Muy disminuido

TRATAMIENTO

Al tratarse de un tema extenso y con cierta dificultad, trataremos nociones básicas y conceptos
generales.

- La rehidratación siempre que sea posible se llevará a cabo vía oral, incluso puede valorarse la
via enteral con sonda naso gástrica.

- Siempre hay que tratar rápido la situación de shock. Si el paciente está en dicha situación, la
rehidratación se hará paulatinamente.

- En general, cuanto más alta es la natremia, más lenta debe ser la corrección de la
deshidratación, es decir, el ritmo de aporte de líquidos, ésto es para evitar el edema cerebral.

Rehidratación vía oral

En todas las deshidrataciones leves y moderadas.

Se hará administrando pequeñas cantidades de solución rehidratante oral entre 5-10 ml cada
5-10 minutos, con cuchara o jeringa. En niños mayores se hará con el paciente parcialmente
tendido, pues es mejor la tolerancia.

La cantidad a administrar y el tiempo para llevarla a cabo, depende del grado de


deshidratación (teniendo en cuenta que se trata de deshidrataciones leves o moderadas), de
tal manera que para una deshidratación estimada del 3 %, serían 30 ml/kg para ingerirlo en 4 o
6 horas.

La lactancia materna debe mantenerse.


Una de las limitaciones de la rehidratación oral, son los vómitos. El tratamiento de los mismos
ya ha sido visto.

En cuanto a la composición de los sueros de rehidratación deben utilizarse los comercializados


a tal fin pues los líquidos caseros o las soluciones preparadas por la familia no cumplen las
características necesarias y pueden ser perjudiciales, igual que el agua sola.

Las soluciones recomendadas por la OMS se caracterizan por tener una osmolaridad entre 200
y 310 mOsm/L, y deben tener concentraciones similares de glucosa y sodio.

Glucosa < 20 gr/L (74-111 mMoles/L)

Sodio 60-90 meq/L

Potasio 15 y 25 meq/L

Citrato 8 y 12 meq/L

Cloruro 50 y 80 meq/L

En los países desarrollados las soluciones que se recomiendan son hiposódicas (Na alrededor
de 60 meq/L), cumpliendo las normas de la OMS.

Una vez superada la fase inicial de rehidratación, es importante reiniciar la alimentación de


forma precoz y lo más parecido a la dieta adecuada para su edad.

Rehidratación intravenosa

Se llevará a cabo siempre que:

-Deshidratación grave

-Inestabilidad hemodinámica

- Alteración del nivel de conciencia

- Ileo intestinal

- Fracaso de la rehidratación oral, por vómitos persistentes, pérdidas intensas por diarrea
persistente.

Para programar la rehidratación IV hay que conocer cantidad de líquido a reponer, tipo de
suero y ritmo.

¿Cuánto suero necesita el paciente?

Por la indicación que tiene estos pacientes de sueroterapia, normalmente están a dieta
absoluta, por lo que necesitan tanto las necesidades basales de líquidos y electrolitos como
tratar la deshidratación. En pocas ocasiones hay que reponer reponer las pérdidas (diarreas).

1. Las necesidades basales (NB) se calculan con la fórmula de Hollyday que facilita el
cálculo de líquidos que necesita un niño según su peso:
 Primeros 10 kg: 100 ml/kg
 Segundos 10 kg: 50 ml/kg
 A partir de 20 kg: 20 ml/kg

Una vez calculado, se pasará esta cantidad en 24 horas.

Por ejemplo, a un paciente de 10 kg, para calcular sus NB, 10 kg x 100 ml = 1000 ml en 24
horas para aportar lo que necesita en 1 día. Déficit. Para calcular el déficit utilizamos la
siguiente fórmula:

% de deshidratación x 10 x kg de peso

Por ejemplo, un paciente de 10 kg con una deshidratación del 5 %: 5 x 10 x 10=500 ml tenemos


que aportarle en 24 horas para reponer lo que ha perdido.

¿Cómo le administramos los líquidos?

La administración rápida de líquidos en un paciente con trastornos hidroelectrolíticos graves


puede alterar el equilibrio osmótico del medio interno y causar edema cerebral, por lo que a
mayor natremia, más lentamente hay que administrar los líquidos.

Cuando la clínica es grave la reposición de líquidos para mantener la volemia se hará rápido,
sería una expansión con suero fisiológico, igualmente si la natremia es muy baja, habrá que
aportar sueros con sodio de forma rápida hasta elevar la natremia a 120 meq/L, pero después
se debe respetar el ritmo adecuado a cada tipo de deshidratación.

 D. Hiponatrémica, la corrección se puede hacer en 12 (si son más leves) o 24 horas.


 D. isotónicas o iso natrémica, se puede corregir en 24 h o en 36 h (en casos más
graves), de tal forma que se administraría 1/3 del déficit cada 12 h.
 D. hipernatrémicas, habitualmente se realiza la corrección en 72 horas, 1/3 del déficit
cada 24 h.

¿Qué tipo de suero utilizamos?

Un dato que no se puede olvidar es NO rehidratar nunca con soluciones hipotónicas, es decir,
si el plasma tiene natremia de 140 meq/L, el suero a utilizar tiene que tener dicha natremia o
más. Recordad que en todas las deshidrataciones está disminuida la natremia.

La mayoría de las deshidrataciones se pueden corregir con suero salino fisiológico que aporta
154 meq/l de Na al que se suele añadir glucosa en pequeña cantidad.

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