Primeros Auxilios
Primeros Auxilios
Primeros Auxilios
la reanimación cardiopulmonar (RCP) es una técnica para salvar vidas que es útil en
muchas emergencias, como por ejemplo, un ataque cardíaco o un cuasi ahogamiento, en los
que la respiración o los latidos del corazón de una persona se han detenido. La American
Heart Association (Asociación Estadounidense del Corazón) recomienda comenzar
con RCP haciendo compresiones fuertes y rápidas en el pecho. Esta recomendación
de RCP solo con las manos se aplica tanto a espectadores como a personal de primeros
auxilios.
Si tienes miedo de hacer RCP o no estás seguro de cómo hacer RCP correctamente, debes
saber que siempre es mejor intentarlo que no hacer nada. La diferencia entre hacer algo y
no hacer nada puede ser la vida de una persona.
Maniobra de Heimlich en usted mismo
La maniobra de Heimlich es un procedimiento de primeros auxilios usado cuando una
persona se está ahogando. Si está solo y se está ahogando, puede tratar de desplazar el
objeto en su garganta o laringe realizando la maniobra de Heimlich usted mismo.
Información
Cuando se está ahogando, sus vías respiratorias se pueden bloquear, así que el oxígeno
suficiente no llega a los pulmones. Sin oxígeno, se puede producir daño cerebral en tan solo
4 a 6 minutos. Los primeros auxilios oportunos en este caso pueden salvarle la vida.
Si usted se está ahogando con algo, puede realizar la maniobra de Heimlich en usted
mismo. Siga estos pasos:
1. Empuñe la mano. Coloque el pulgar debajo de la parrilla costal y por encima del
ombligo.
2. Sujete el puño con la otra mano. Presione en la zona con un movimiento rápido hacia
arriba
Usted también se puede apoyar sobre el borde de una mesa, silla o baranda. Empuje
rápidamente la parte superior del vientre (abdomen superior) contra el borde.
Si es necesario, repita este movimiento hasta que el objeto que obstruye las vías
respiratorias salga.
Desmayo: Es una pérdida breve del conocimiento debido a una disminución del flujo
sanguíneo al cerebro. El episodio dura menos de un par de minutos y usted se recupera de
forma rápida y completa. Cuando usted se desmaya, no solamente pierde el
conocimiento sino que también pierde el tono muscular y el color en la cara. Antes de
desmayarse, puede sentirse débil, sudoroso o con náuseas. Puede tener la sensación de que
la visión se está constriñendo (visión del túnel) o que los ruidos se van desvaneciendo en el
fondo.