Estrategias en El Aula para Niños Con TDAH
Estrategias en El Aula para Niños Con TDAH
Estrategias en El Aula para Niños Con TDAH
Entre mayor sea la claridad de las reglas y las expectativas, mayor será la
posibilidad de que un niño o niña con TDAH las comprenda.
El conjunto de lineamientos debería estar expuesto en un lugar en donde se
puedan leer fácilmente.
Del mismo modo, los maestros deben asegurarse de que los niños las
entiendan.
Para que sea aún más fácil tenerlas a la mano, un niño con TDAH puede tener las
reglas impresas y pegadas en su escritorio.
Si el adulto a cargo o profesor nota que al niño le cuesta gestionar los tiempos, es
conveniente que establezca señales verbales, corporales o que haya un
cronómetro para indicar cuántos minutos quedan para una actividad.
Si hay un niño del aula que se va a distraer, ese es el niño con TDAH.
Entre las estrategias de aprendizaje para niños con déficit de atención, una que
parece obvia, pero no lo es, consiste en evitar y, de ser posible, eliminar las
distracciones.
Esto no es sencillo de lograr porque los niños ya tienen tendencia de por sí a las
distracciones.
Sin embargo, al niño con TDAH conviene sentarlo lejos de las ventanas, puertas y
cualquier otro estímulo similar.
Las distracciones en los niños con TDAH son muy comunes y se expresan de
distintas formas. La dificultad para pasar mucho tiempo sentado es una de
ellas.
Para un niño con TDAH es difícil mantener el foco, pero también lo es tener un
enfoque.
Trabajando juntos frente a los nuevos retos,
DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA tras las huellas de San Francisco.
Cuando él o ella hagan algo según lo que esperas que suceda, díselo y
reconóceselo.
Esta es una forma de aumentar las posibilidades de que el comportamiento se
repita en un futuro.
Por el contrario, cuando sea necesario, ten preparadas las consecuencias que
deben seguir posterior a un comportamiento no deseado.
De esta forma podrás actuar más rápido y evitar que escale a mayores.
Visto que a los niños con TDAH les cuesta permanecer sentados durante mucho
tiempo, pequeñas pausas pueden tener un efecto positivo en su
concentración.
Por decirlo de algún modo, es como permitirles que liberen las grandes cantidades
de energía que tienen contenida.
Pedirles que borren la pizarra, beban agua o que den algunas vueltas alrededor
del espacio del aula es una buena forma de lograrlo.
Entre las estrategias en el aula para niños con TDAH, algo sencillo es administrar
las asignaciones que se le encargan, bien sea para el hogar o en el mismo salón.
Los niños con TDAH tienen problemas para cumplir con muchas
asignaciones y para pasar de una a la otra.
Exigirles que cumplan con todos puede hacerles sentir culpa, por lo que es
conveniente evaluarlos partiendo de otras variables.
Con estrategias claras que tanto los padres como los profesores estén
dispuestos a poner en práctica, un niño con TDAH puede ver incrementado su
gusto por el aprendizaje y su facilidad para lograr sus objetivos académicos.