Ritmo y Pausas
Ritmo y Pausas
y pausas
Existen diferentes cuestiones a tener en cuenta a la hora de manejar el tono
y el ritmo a la hora de realizar una exposición oral en público.
Elementos importantes en un discurso oral:
La entonación
El ritmo
Las pausas
La claridad del lenguaje
Entonación.
El objetivo es no aburrir al auditorio, a las personas que nos están
escuchando:
* Subir el registro y enfatizar sólo más importante.
* No caer en el error de enfatizar todo; no todo es importante, estamos
haciendo que las ideas progresen y se complementen, por lo tanto, no hay
que resaltar todo el discurso.
Cómo enfatizar.
Podemos enfatizar de dos formas, elevando el tono pero también podemos
enfatizar bajando el tono.
* 1.- elevando el tono: podemos captar la atención de aquellos que estén
despistados
* 2.- tono de voz más bajo y exponiendo más despacio: podemos crear
un ambiente de confidencialidad y empatía. Bajando el tono,
provocamos que el auditorio preste más atención, tiene que agudizar
el oído para escuchar lo que decimos.
Ritmo.
Recomendable hablar a un ritmo lento:
* 1.- podemos pensar lo que vamos a decir
* 2.- expone una mayor claridad de ideas
* 3.- conseguimos que el auditorio comprenda mejor lo que estamos
intentando comunicar.
Hemos de tener cuidado y buscar el ritmo adecuado al discurso que estamos
haciendo. Si hablamos excesivamente despacio, el público se va a aburrir; si
hablamos excesivamente rápido, el público no nos va a comprender y
tenemos más posibilidad de cometer errores de vocalización: utilizamos
menos tiempo para decir lo mismo y, por lo tanto, no pronunciamos
correctamente los fonemas.
* Cuándo usar ritmo lento: expresar sentimientos o dar suspense
* Cuándo usar ritmo rápido: expresar disgusto o malestar o queremos explicar
tres o cuatro ideas unidas o cualquier tipo de acción o tensión
* Cómo conseguir hablar a un ritmo adecuado:
* 1.- Correcta preparación del discurso interiorizando el guion y las
ideas principales
* 2.- Seguridad en lo que se defiende
Pausas
* Al hacer la pausa generamos expectación en el auditorio.
* Intercalarlas en el discurso para conseguir estos efectos en el auditorio: que
el público asimile lo que estamos contando
* Las pausas no ayudan a marcar en qué podemos descansar, respirar y pensar
en los siguiente que tenemos que decir.
Claridad en el lenguaje
* Hacer lo más comprensible posible nuestro discurso y nuestras
intervenciones:
* Sencillez en el lenguaje
* Fácilmente comprensible
* No usar tecnicismos que sólo entendamos nosotros
* Usar frases comprensibles y de fácil asimilación; mejor frases
coordinadas que subordinadas.
Consejos
* Preparar el discurso con pausas y variando el ritmo hasta encontrar el
adecuado.
* Si existen problemas de vocalización, estos pueden desviar la atención del
auditorio, intentar mejorarlos y construir expresiones que nos beneficien y
sustituir las palabras o fonemas que nos cuenten pronunciar por otras
palabras o construcciones semánticas.
Lenguaje no verbal
Tenemos que ser conscientes de que nuestro cuerpo tiene que acompañar el
discurso verbal. Las manos han de ratificar el discurso en sus diferentes ideas
y no deben estar estáticas porque se pueden generar distorsiones en la
comprensión del discurso. El lenguaje facial también es importante y, aunque
ahora hemos de usar mascarilla, tenemos que potenciar el uso de la mirada
tanto para controlar el auditorio como para buscar puntos de referencia.
También tenemos que aprender a controlar el espacio en el que vamos a
realizar el discurso y hemos de saber cómo podemos movernos en el mismo
con el objetivo de no permanecer estáticos. Hay ocasiones en las que
limitamos las acciones naturales que quiere seguir nuestro cuerpo para
acompañar el discurso y nos agarramos las manos o los brazos; nuestro
cuerpo quiere fluir con el discurso y no se lo permitimos por miedo o
vergüenza. Si hacemos esto, el discurso termina siendo un desastre porque
existe una contradicción y el público es consciente de ello; esto supone que
dejamos de ser creíbles.