Comentario de Texto - Episodio Del León
Comentario de Texto - Episodio Del León
Comentario de Texto - Episodio Del León
1.- Este fragmento corresponde al tercer y último cantar del Poema de Mio Cid -el de la
afrenta de Corpes-. De hecho, es la escena en la que los infantes de Carrión se sienten
humillados por las burlas de los hombres del Cid. Como una muestra más de su cobardía,
se vengarán sobre las hijas del Cid, a las que maltratan sin piedad en el robledal de Corpes.
2.- Los infantes de Carrión muestran su cobardía buscando un lugar para esconderse,
gritando sin disimular su miedo e incluso no falta un punto escatológico al indicar el juglar
que “el manto y el brial todos sucios los sacó”.
Por el contrario, el Cid es un ejemplo de valentía. Está dormido, por lo tanto es vulnerable al
peligro, pero no se asusta y se enfrenta con calma a la fiera seguro de su poder.
3.- Ante esta escena, cabe pensar que existe un aura de poder en el Cid reconocida hasta
por las fieras salvajes, que se humillan ante el héroe. Es presumible que los presentes
pensaran que el Cid tenía poderes sobrenaturales. Lo vemos claramente cuando dice “a
maravilla lo tienen”, es decir, como algo fantástico, sobrehumano, increíble.
4.- Resumen
Esta tirada del Cantar de Mio Cid narra el momento en el que los yernos del Campeador,
pertenecientes a la alta nobleza, muestran su cobardía cuando de forma fortuita un león se
escapa de su jaula. Su reacción provoca la burla de los hombres del Cid y ellos se sienten
humillados.
Por el contrario, el Cid, que en ese momento estaba dormido, domina a la fiera sin perder la
calma.
Parte I En los cinco primeros versos se sitúan los hechos, indicando que el Cid está
dormido y que también se encuentran en la escena sus yernos. En ese
momento un león se escapa de su jaula.
Parte III Los siete últimos versos marcan el desenlace de esta escena haciendo
hincapié en lo ofendidos que se sienten los infantes de Carrión por las burlas
recibidas tras su reacción cobarde.
● COMENTARIO CRÍTICO
7.- Los cantares de gesta castellanos y por consiguiente el de Mio Cid son más realistas y
verosímiles que otros europeos, con frecuentes alusiones a hechos históricos y menciones
geográficas muy explícitas. No obstante, el episodio del león es quizá uno de los más
ficcionados de este extenso poema narrativo. Se ensalza tanto la figura del héroe que en
esta escena el juglar le otorga unos dones casi sobrehumanos, el poder de amansar a las
fieras con su presencia, sobredimensionando la valentía del Cid.
Por el contrario, ridiculiza con un tono humorístico la cobardía de los infantes de Carrión.
● COMENTARIO LINGÜÍSTICO
8.- El lenguaje utilizado es sencillo, con escasa adjetivación. De hecho, los adjetivos que
utiliza son de una gran simpleza (mala, gran, sucios…)
Es necesario tener en cuenta el público al que está dirigido, unos receptores iletrados que
disfrutan con estos relatos de aventuras.
9.-
En el Cantar existe una gran variedad de tiempos verbales, característica que se aprecia
claramente en este fragmento.
Como el juglar narra hechos pasados abundan los tiempos pretéritos, tanto el imperfecto
que se utiliza más en los cuadros descriptivos (estaba el Cid) como el pretérito perfecto
simple, para la acción (aconteció, salió, desatose, vio, metiose…).
Cuando se reproducen los diálogos de los personajes en estilo directo el tiempo
predominante es el presente simple (qué queréis) o el futuro simple (no veré más Carrión).
También tenemos el imperativo cuando el juglar se dirige a los oyentes (sabed).
11.- El valor narrativo de este fragmento predomina sobre el descriptivo ya que está
marcado por la acción.
1.- Introducción
● Contextualización histórica, literaria y dentro de la propia obra.
● Intención del autor - Idea principal del texto
El fragmento que nos ocupa se sitúa al comienzo del tercer cantar, el de la afrenta
de Corpes. De hecho, de esta escena surge la vil justificación que utilizan los infantes de
Carrión para maltratar a sus esposas, las hijas del Cid.
En el episodio del león, una de las partes más cómicas e inverosímiles del Cantar
-como veremos más adelante- se contraponen dos ideas: la valentía del Cid frente a la
cobardía de los infantes de Carrión.
Debemos tener en cuenta que era un público iletrado, con el que se debería utilizar
un lenguaje sencillo, con escasa adjetivación. Todo ello para hacerles llegar esas historias
de aventuras de las que estaban ávidos.
Por otro lado, respecto al análisis lingüístico es preciso destacar unos recursos que
aportan gran dinamismo al relato. Esto es la ausencia del verbo introductor cuando se
reproducen diálogos en estilo directo, tal y como sucede cuando habla el Cid y le responden
sus vasallos. No siempre es así, cuando uno de los infantes de Carrión habla, más bien
grita, el autor sí hace uso de un verbo dicendi (“diciendo por su boca”).
Respecto al análisis métrico, debemos tener en cuenta que este comentario de texto
lo estamos haciendo sobre una adaptación. Aún así se aprecia claramente una métrica
irregular, con versos monorrimos (tienen la misma rima) de una gran variabilidad silábica
divididos por una marcada cesura. Los hemistiquios también son irregulares, una
característica más del carácter oral del poema.
Es el punto más personal del comentario. Se debe realizar una síntesis de los aspectos más
relevantes y aportar valoraciones personales. Busca la originalidad en tus conclusiones.
Los cantares de gesta son una evidencia de cómo, desde tiempos inmemoriales,
disfrutamos con los relatos. Nos gusta contar historias y que nos las cuenten. Y durante
muchos siglos esta transmisión ha sido oral, muchos más de los que se ha hecho utilizando
la escritura o más recientemente otros medios audiovisuales. Las narraciones nos hacen
reír, nos informan, nos conmueven… y toda esta amalgama de emociones ya se daba en el
medievo.
Los cantares de gesta castellanos y por consiguiente el de Mio Cid son más realistas
y verosímiles que otros europeos, con frecuentes alusiones a hechos históricos y
menciones geográficas muy explícitas. No obstante, el episodio del león es quizá uno de los
más ficcionados de este extenso poema narrativo. Se ensalza tanto la figura del héroe que
en esta escena el juglar le otorga unos dones casi sobrehumanos, el poder de amansar a
las fieras con su presencia, sobredimensionando la valentía del Cid. Hoy nos puede parecer
una exageración ridícula este hecho, pero no es muy diferente de la exageración que
podemos ver en muchas películas de acción actuales, en las que el protagonista vence a
numerosos enemigos casi sin inmutarse.
El juglar utiliza el humor en este episodio previo al maltrato que sufren Doña Elvira y
Doña Sol en el robledal de Corpes. Ridiculiza a esos infantes de Carrión y provocaría la risa
de los presentes antes de llegar a uno de los momentos de mayor intensidad emocional,
cuando se produce la brutal agresión contra dos mujeres. Es destacable que en la primera
obra que tenemos registrada en lengua castellana ya nos encontremos con una escena de
violencia machista tan desgarradora. Unas escenas que lamentablemente siguen de
actualidad en el siglo XXI con una sociedad que aún no ha logrado relegarlas al plano
literario.