Comentario de Texto Literario
Comentario de Texto Literario
Comentario de Texto Literario
Intelijencia, dame
el nombre esacto de las cosas!
Que mi palabra sea
la cosa misma,
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas;
que por mí vayan todos
los mismos que las aman, a las cosas...
¡Intelijencia, dame
el nombre exacto, y tuyo,
y suyo, y mío, de Las cosas!
Juan Ramon Jiménez, autor del poema que hemos leído posteriormente, fue un
escritor español, ganador de un premio Nobel por su obra lirica Platero y yo.
Abandono la Universidad de Sevilla, para dedicarse a la literatura, influenciado
por Rubén Darío y los simbolistas franceses.
Su trayectoria poética suele dividirse en tres etapas, cada una con
características específicas que nos ayudan a distinguirlas, la primera se conoce
como Etapa sensitiva (época modernista), dicha etapa de basa en la búsqueda
de la belleza; su segunda etapa: Etapa intelectual (poesía pura) se basa en la
búsqueda del conocimiento; por último, Etapa verdadera (palabra exacta),
basada en, como en sus anteriores etapas, la búsqueda, pero esta vez de la
eternidad.
El poema objeto de nuestro comentario presenta fallos ortográficos típicos de
Juan Ramon Jiménez, estos se evidencian en palabras como intelijencia (v.1 y
12) y esacto (v.2). Gracias a características presentadas en el poema leído,
tales como: la ausencia de adjetivos a lo largo del poema y la gran cantidad de
sustantivos que se pueden encontrar en el mismo, podemos deducir que estas
líneas pertenecen al la segunda etapa de Jiménez, la etapa intelectual,
recordemos que esta etapa se basa en la búsqueda del conocimiento, esto lo
podemos ver claramente cuando el autor le hace una petición a la inteligencia
para conseguir el nombre exacto de las cosas, esto de da a entender en las
líneas número uno y dos. Entre sus características hay algunas que no
concuerdan del todo con las principales de esta etapa, esto queda en evidencia
por la ausencia de símbolos y que no se alude a la belleza interior. Por otro
lado, algo que es especifico de su segunda etapa es el poco uso de las figuras
retoricas, este texto presenta dos, personificación al hacer peticiones a la
inteligencia y paralelismos, captados en las líneas seis, ocho y diez, también
hay otro caso mas evidente en las líneas siete y nueve.
Las características señaladas en los párrafos anteriores nos dan a entender
que se trata del poema Intelijencia, obra del libro Eternidades publicado en
1918. Esta obra, como ya está evidenciado en los párrafos procedentes hace
parte de la Etapa intelectual de Juan Ramon Jiménez.
Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero...
- La tarde cayendo está-.
"En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón".
Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.
La tarde más se oscurece;
y el camino que serpea
y débilmente blanquea
se enturbia y desaparece.
Mi cantar vuelve a plañir:
"Aguda espina dorada,
quién te pudiera sentir
en el corazón clavada".